Chiclayo,25 febrero de 2019

Dennys:

Han pasado casi dos años y meses desde nuestra última comunicación que
tuvimos por Facebook Messenger, quizás la recuerdas, ese día te envié fotos
de la hija recién nacida de Dennysin. Según pude observar, que las miraste
…mas nunca obtuvimos una respuesta de tu parte; fue muy doloroso para mi
hijo y para mí. Tu indiferencia, tu silencio, podrían indicar muchas cosas, y
preferimos callar y aceptar esta situación, gracias a Dios, el tiempo te ayuda
a resignarte y asumir que esta es la dura realidad. Lo que único que nos quedó
a ambos era seguir adelante, como siempre los dos solos.

Desde ese momento, no recuerdo que mi hijo me haya comentado que tuviera
algún tipo de conversación contigo, y más aún después de que ocho meses
antes, te pedía como padre que acompañaras a hablar a tu hijo sobre la
situación que tendría que afrontar con la familia de la chica que estaba
embarazada. Supongo recuerdas que no llamaste por la tarde como indicaste
que lo harías, yo hablé contigo ese día por la mañana y me dijiste que me
responderías; sin embargo, nunca recibimos ninguna llamada tuya.

Hago este planteamiento inicial, porque creo que es necesario saber desde
cuándo tu familia se distanció de mi hijo, previo a esto había una separación,
pero con esto se consolidó por casi tres años.

La vida y sus obstáculos a veces nos hacen detenernos y pensar en todo

aquello que hemos vivido, y por más que intenté en infinitas oportunidades que
Dennysin se acercara a ustedes, no lo logré: lo aconsejé, le hablé varias veces
sobre la importancia del perdón en nuestras vidas, quizás intentando
comprenderlo, pero solo puedo decirte que lo sentí muy lastimado en cada
cumpleaños, que no recibió un saludo de su papá Raúl o un saludo tuyo que aun
teniéndote en el Facebook, jamás intentaste hablar con él.

Aquí va la razón por la hoy te escribo, y es porque como sabrás estoy pasando
por el momento más difícil y doloroso de mi vida. Creo que, en estas últimas
semanas, he tenido que ponerme a derecho con Dios y no porque haya estado
lejos de ÉL, porque en ningún momento lo estuve, sino porque soy un ser
humano que lucha con sus emociones y que sufre con las angustias de su hijo
en todos los aspectos de vida. Es por eso, que hoy quiero pedirte perdón, por
si alguna vez mi corazón albergó hacia tu persona, algún tipo de rencor por tu
indiferencia con respecto a la crianza y amor hacia mi hijo, tus razones habrás
tenido, y yo no seré quien te juzgue más, quiero ser desde hoy una persona
libre de ataduras y sumergirme y enfocarme en luchar por mi vida. Aun no sé
qué me espera o a que me voy a enfrentar; sin embargo, tengo que estar en
condiciones óptimas tanto espiritual como emocionalmente. Ya me encomendé
a Dios y le prometí a mi hijo que voy a luchar hasta el último momento de mi
vida. Así que espero me perdones, por favor, para poder lograr mi objetivo.

Me gustaría comentarte que en estos últimos años he visto evolucionar

Dennys hijo, a asumir en su juventud plena un rol de padre que él jamás
conoció y que anheló con todo su corazón. No sé si lo recuerdas que esto te
lo hizo saber en la fiesta del primer añito del hijo Christian. Al día siguiente
de aquella conversación, vi emocionada cómo madre a Dennysin, sus ojos
brillantes, mientras me comentaba con detalles todo lo acontecido aquella
noche. Él sintió que tenía un padre de ahora en adelante. Sinceramente pensé
que ese sería el inicio de una relación: padre e hijo. No obstante, nuevamente
me equivoqué.

Con respecto a mi hijo, yo siempre he mirado y he callado… solo hablé cuando

debí hacerlo para darle algún consejo sabio que pudiera orientarlo, y creo que,
con el tiempo, voy recogiendo una parte de esa cosecha. Fue maravilloso verlo
derramar lágrimas de emoción el día del nacimiento de Zoe Abigail Dávila
Bernal. Su primer comentario fue: “Yo voy a ser un buen padre”. Y creo que
es una lucha diaria, en estos dos años y cinco meses que tiene nuestra nieta,
(suena raro, ¿verdad?) pero la realidad esa esa. Él ha trabajado duro por esa
niña, porque no le falte nada y eso siempre me ha hecho sentirme muy
orgullosa de él.
Gracias por haber leído estas líneas, tiempo para hablar con tu hijo, lo
tendrás, solo te pido que lo hagas muy feliz de ahora en adelante.
Bendiciones…
Atte.
Kariny Sandoval