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¿Quiénes eran los 12 apóstoles que siguieron a Jesús?

Mientras Jesús anduvo por esta tierra se hizo acompañar de unos hombres que
apoyaron su misión y realizaron un intenso y largo recorrido junto a él luego de iniciar
su vida pública a los 33 años. El hecho de que los apóstoles fueran doce tiene un
significado bíblico basado en las Doce Tribus de Israel.

Los apóstoles compartieron muchas cosas con Jesús y uno de los aspectos afines fue
la forma de morir, todos, a excepción de Juan, murieron martirizados.
Estos discípulos de Jesús eran hombres comunes y corrientes, pero habían recibido
un llamado especial, razón por la que tuvieron que enfrentar ciertas vicisitudes, y en
ocasiones hacer morir a su “yo” para que se cumpliera la voluntad del padre.
Mientras acompañaban a Jesús, en muchas ocasiones sintieron miedo; de hecho, la
plenitud de su ministerio se concretó después de la resurrección de Cristo y su
ascensión a los cielos, al recibir el Espíritu Santo el día de Pentecostés. Fue a partir
de ese momento que empezaron a misionar con más vehemencia, aunque Jesús ya
no les acompañaba físicamente.

Cada uno fue escogido para una misión, hasta el famoso Judas Iscariote, que
traicionó a Jesús, jugó un papel fundamental.

PERO, ¿QUIÉNES ERAN LOS 12 APÓSTOLES?

Pedro

Originalmente era Shimón bar Ioná (Simón), pero Jesús le cambió el nombre por
Cefas, que llevado al latín es Petrus y significa “Piedra”. Nació en Betsaida a finales
del siglo I antes de Cristo y aunque no se tiene mucha referencia de su estado civil se
cree que tuvo mujer, partiendo del texto del evangelio que menciona la curación de su
suegra.

El apóstol Pedro era hijo de Jonás y hermano de Andrés. Pedro es considerado el


príncipe de los Apóstoles y primer papa de la iglesia Católica. Era pescador, sus días
estaban dedicados al trabajo de la pesca en el mar de Galilea junto a su padre y a su
hermano Andrés, hasta que Jesús lo llamó a ser pescador de hombres, éste lo dejó
todo y se adhirió al Gran Maestro. Fuerte, impulsivo, arriesgado. En ocasiones
temeroso. Fue crucificado con la cabeza hacia abajo, porque no se consideraba digno
de morir igual que Cristo.
Andrés

Nació en Betsaida. Fue hijo de Jonás y hermano de Pedro, fue el primer apóstol de
Jesús; recibió la invitación para ser apóstol de Cristo luego de ser bautizado por Juan
el Bautista. Andrés fundó muchas iglesias en Acaya, logrando que muchas personas
conocieran a Dios y se convirtieran.

Era pescador. Andrés murió en Acaya, Grecia, el 30 de noviembre del año 60 después
de Cristo, atado a un madero en forma de cruz tras ser acusado de predicar el
evangelio y negarse a adorar ídolos paganos. Para hacerlo sufrir más, antes de
matarlo lo azotaron unos 21 hombres y luego le ataron las manos y los pies; Andrés
tardó dos días en morir y desde el madero se la pasó predicando a todos los que
acudían a verle, en ningún momento se quejó, más bien elevó una oración a su padre
celestial en la que expresaba que ya era hora de que su cuerpo fuera entregado a la
tierra.

Santiago El Mayor

Hombre valiente que hasta su último aliento se dejó utilizar como un instrumento del
Señor. Nació en el siglo V antes de Cristo en Betsaida. Era hijo de Zebedeo y Salomé,
y hermano del apóstol Juan. Se dice que pertenecía a una familia adinerada. Su padre
pescaba en el Mar de Tiberíades y su madre fue una de las mujeres piadosas que
servían al ministerio del Señor con el ofrecimiento de sus bienes. Santiago el Mayor
tenía un carácter efusivo e impetuoso, dinámico y decidido.

Fue un líder destacado de las comunidades judeo cristianas. Santiago recibió una
penosa muerte al ser decapitado por orden del rey de Judea, Herodes Agripa, I. 44
después de Cristo. Antes de morir oró por un paralítico y al llegar al lugar donde sería
degollado pidió un recipiente con agua para bautizar a Josías, quien también fue
decapitado.

Juan
El conocido “discípulo amado” nació en Betsaida hacia el año 6 d.C. Fue hijo de
Zebedeo y Salomé, y hermano del apóstol Santiago. El dilecto apóstol de Jesús era el
más joven y fue el último en morir. Tuvo la oportunidad, junto a Pedro y a Santiago, de
presenciar la transfiguración de Jesús en el monte Tabor, en la Baja Galilea. Se cree
que Juan fue un hombre acomodado que se hizo cargo de la virgen María luego de la
muerte de Jesús. Antes de ser llamado por Jesús se dedicaba a la pesca junto a su
hermano y su padre.

Se estima que falleció tranquilamente a los 98 años, en Éfeso, hacia el tercer año del
reinado de Trajano, 100 después de Cristo. Aunque la muerte de Juan no fue de
forma violenta como ocurrió con los demás Apóstoles, éste padeció bastante por la
causa de Cristo, relatan que en una ocasión mientras se encontraba de misión en
Roma lo entraron en un caldero con aceite hirviendo, pero sobrevivió.

Felipe
Procedente de Betsaida, no fue la excepción y al igual que sus compañeros apóstoles
sufrió constantemente de persecución por mostrar su fe. Se dice que tuvo dos hijas y
se consideraba un hombre íntegro que dio su vida por la predicación del evangelio.
Felipe es quien le anuncia a Natanael que habían encontrado al Mesías.

Permaneció en la región de Escytia por 20 años, llevando el mensaje y siendo testigo


de las maravillas de Dios con su pueblo. Se cree que Felipe fue apedreado por su fe
en Hierápolis, ciudad de la provincia de Frigia, donde posteriormente falleció
crucificado a los 87 años, y que sus restos fueron trasladados a Constantinopla.
Bartolomé
Conocido también como Natanael, nació en Caná de Galilea y se hizo apóstol de
Jesús gracias a la intervención de su amigo Felipe, quien le presentó al Mesías. Se
distinguió por su desapego a las cosas térreas y su amor por lo celestial. Hay datos
que ratifican que el Apóstol Bartolomé estuvo de misión en Asia.

y fue un hombre honrado que se entregó en cuerpo y alma a la misión que le fue
encomendada.

En la india él solía expulsar demonios; cuentan que por su predicación los miembros
de muchas familias llegaron a convertirse. Hay varias versiones sobre su muerte, unos
dicen que fue crucificado con la cabeza hacia abajo, otros sostienen que fue
decapitado y torturado por causa de su predicación en Armenia.

Tomás

Judas Tomás Dídimo, apodado el Mellizo, se presume que era judío y nació en
Galilea. Suele ser recordado por su incredulidad (Juan 20,24). Éste afirmó que no
creería en la resurrección de Jesús hasta que pudiera ver la señal de los clavos en
sus manos e introdujera su mano en el costado de Cristo, esta forma de actuar nos
puede llevar a pensar que era un rebelde, pero no, luego que Jesús se le manifestara
en persona asumió su misión con más vigor que antes.

Se presume que el último período de su vida lo pasó predicando en la India, donde fue
martirizado. Le atravesaron el corazón con una espada en la India. Se encontraba
misionando en esas tierras y el rey se opuso a que Tomás siguiera hablando de su
Dios, pero él no lo hizo, por el contrario, llamó al rey idólatra y éste enfurecido le quitó
la vida.
Mateo
El nombre Mateo proviene del griego “mathhaios” que significa “regalo de Yahvé”, éste
también era conocido como Leví y se cree que nació en Cafarnaúm. Al momento de
su llamado era publicano y trabajaba como recaudador de impuestos para los
romanos, pero ante la invitación de Jesús no pudo resistirse, renunció a su labor y
decidió seguir los pasos del Salvador.

Mateo era un hombre adinerado, vivía cómodamente, y era conocido como un hombre
listo, de sobrados conocimientos, sabio y juicioso. El apóstol Mateo recorrió el Oriente
llevando la palabra. Mateo evangelizó a los judíos durante 15 años, incluyendo
posiblemente a los judíos de Etiopía. Se dice murió en Etiopía luego que le propinaran
una herida de espada.

Santiago El Menor

Le solían decir Santiago, hijo de Alfeo, y Jacobo El menor. No se tienen datos


precisos de la fecha de su nacimiento. Es conocido por desempeñar una ardua labor
evangelizadora, un hombre que estuvo listo a tiempo para la batalla de la fe y la
expansión del mensaje de Cristo. Santiago El Menor fue reconocido como el primer
obispo de Jerusalén. Escribió las epístolas que llevan su nombre y aparecen en el
nuevo Testamento. Se ha comentado que Santiago El Menor y Judas Tadeo eran
hermanos.

Se cree que perdió la vida en el año 62 después de Cristo, luego de ser arrojado
desde lo alto de un templo por compartir con los hombres del pueblo en que vivía lo
que pensaba del hijo de Dios; al caer al suelo no se lesionó, pero luego le propinaron
varias pedradas y, por último, un golpe le destruyó el cráneo. Santiago El Menor fue
enterrado en el mismo lugar que falleció.
Judas Tadeo

Se dice que fue hermano de Santiago El Menor. Aparece tildado con el nombre de
“Lebbaeus” en Mateo. El nombre “Judas” es de origen hebreo y significa: “alabanzas
sean dadas a Dios”, mientras que Tadeo quiere decir: “valiente para proclamar su fe”.

Los apóstoles Simón y Judas misionaron juntos en Babilonia, convirtieron a gran


cantidad de gente, incluyendo el rey y personas adineradas. Cuentan que Simón y
Judas fueron martirizados y cuando un rey tuvo noticia del hecho recogió sus
cadáveres, los trasladó a la capital del reino y les dio sepultura en una magnífica y
suntuosa iglesia que mandó a construir en su honor.

Judas Iscariote

Conocido como el traidor. Iscariote se traduce del idioma hebreo y significa: “el
hombre de Queriyyot o Keriot”, una ciudad de Judá. Judas manejaba las finanzas del
grupo y utilizaba el dinero reservado para los pobres para otros fines.

Los evangelios narran cómo Judas guió a los guardias hasta el lugar donde estaba
Jesús, Judas le dio un beso en la mejilla para que los miembros del sanedrín lo
identificaran y luego lo pudieran atrapar; traicionó a su maestro por 30 monedas de
plata. Judas representa la traición, la avaricia, la envidia y la maldad que hay en el
mundo, pero que al final será vencida. Se plantean diversas versiones en torno a su
muerte; unos dicen que compró un campo con el dinero que le habían pagado por la
traición de Jesús y que allí cayó de cabeza y todo su cuerpo reventó, por lo que el
lugar se dio a conocer como “aceldama” que quiere decir campo de sangre.

Matías, el apóstol 13
Fue escogido como apóstol luego que Judas Iscariote vendiera a Jesús por 30
monedas de plata y posteriormente a su traición se ahorcara. Matías fue elegido
después de la muerte de Cristo y predicó en Judea.

Era un hombre serio, prudente, con mucho cocimiento de la ley, dotado del don de la
palabra. Producto de su testimonio de vida, predicación de la palabra y realización
milagros, una gran cantidad de personas conoció al Señor, pero así como despertó la
fe de muchos en Judea, por la misma causa otros que no compartían sus creencias
buscaron la forma de acabar con su vida terrenal.

Los judíos le dieron muerte de una forma brutal, primero le lanzaron piedras y
después le cortaron la cabeza, su cadáver fue trasladado a Roma y posteriormente a
Tréveris.

Cabe destacar que en el momento de su agonía no renegó, abrió sus brazos y


encomendó su espíritu al Señor.

¿Quiénes fueron los doce discípulos?


Los discípulos, o apóstoles, de Cristo fueron las piedras fundamentales de su iglesia.
En Apocalipsis 21:14 se nos dice que los doce cimientos del muro de la Nueva
Jerusalén tendrán inscriptos sobre ellos los nombres de los doce discípulos (o
apóstoles). Es evidente, de esta forma, que nuestro Señor le atribuye gran importancia
a estos hombres.

Según estudiamos estas vidas valerosas del primer siglo, y lo que el discipulado
significó en la época de Cristo, podemos esperar recibir ayuda para desarrollar un
discipulado del siglo XX dirigido por el Espíritu como Cristo debe haber querido decir
que sería.

La siguiente información se basa en lo que se cuenta de estos 12 hombres en el


Nuevo Testamento, junto con las más respetadas leyendas y tradiciones. Nosotros no
queremos decir que la leyenda y la tradición constituyen afirmaciones históricas. Pero
sentimos que tienen valor en el estudio de las vidas de estos hombres que “…
cambiaron el sentido del mundo…”

Lista de los Doce Apóstoles:

Pdro

Santiago, el Anciano

1. Juan
2. Andrés
3. Bartolomé
4. Santiago, el Menor
5. Judas Iscariote
6. Judas Tadeo
7. Mateo
8. Felipe
9. Simón
10. Tomá

Andrés

Andrés era el hermano de Pedro, e hijo de Jonás. Vivió en Betsaida y Capernaúm y


era pescador antes de que Jesús lo llamara. Originalmente fue un discípulo de Juan el
Bautista (Marcos 1:16-18). Andrés trajo a su hermano Pedro a Jesús (Juan 1:40). Él
es el primero en tener el título de Misionero en Casa y en el Extranjero. Es reclamado
por tres países como su Santo Patrono –Rusia, Escocia y Grecia. Varios estudiosos
dicen que predicó en Sitia, Grecia y Asia Menor.
Andrés trajo a otros a Jesús también. Aunque las circunstancias lo colocaron en una
posición donde podría haber sido fácil para él llegar a ser celoso y resentido, fue
optimista y estuvo contento en el segundo plano. Su principal propósito en la vida fue
traer a otros al Maestro.

De acuerdo con la tradición, Andrés murió como mártir en Acaya, Grecia, en el pueblo
de Patra. Cuando la esposa del Gobernador Aepeas fue sanada y convertida a la fe
cristiana, y poco después de que el hermano del Gobernador se volviera cristiano,
Aepeas se enojó mucho. Él arrestó a Andrés y lo condenó a morir en la cruz. Andrés,
sintiéndose indigno de ser crucificado en una cruz en la misma forma que su Maestro,
suplicó que la suya sea diferente. Así que fue crucificado en una cruz con forma de X,
la cual hasta el día de hoy es llamada la cruz de San Andrés y es uno de sus símbolos
apostólicos. También se usa un símbolo de dos peces cruzados para referirse a
Andrés, ya que él era pescador originalmente.

Bartolomé

Bartolomé Natanael, hijo de Talmai, vivió en Caná de Galilea.

La tradición dice que fue misionero en Armenia. Un número de estudiosos cree que
fue el único discípulo que provino de sangre real, o de una familia noble. Su nombre
significa Hijo de Tolmai o Talmai (2º Samuel 3:3). Talmai fue rey de Gesur cuya hija,
Maaca, fue esposa de David, madre de Absalón.

El nombre de Bartolomé aparece en cada lista de los discípulos (Mateo 10:3; Marcos
3:18; Lucas 6:14; Hechos 1:13). Este no era el primer nombre, no obstante, fue su
segundo nombre. Su primer nombre probablemente era Natanael, a quién Jesús llamó
“un verdadero Israelita, en quien no hay engaño.” (Juan 1:47)
El Nuevo Testamento nos da muy poca información sobre él. La tradición indica que
fue un gran investigador de la Escritura y un estudioso de la ley y los profetas. Se
transformó en un hombre de rendición completa al Carpintero de Nazaret, y uno de los
misioneros más aventureros de la Iglesia. Se dice de él que predicó con Felipe en
Phrygia y Hierápolis; también en Armenia. La Iglesia de Armenia lo reclama como su
fundador y mártir. Sin embargo, la tradición dice que él predicó en India, y su muerte
parece haber tenido lugar ahí. Murió como un mártir por su Señor. Fue despellejado
vivo con cuchillos.

Su símbolo apostólico es tres cuchillos paralelos.

Santiago, el Anciano

Santiago, el Anciano, Boanerges, hijo de Zebedeo y Salomé, hermano de Juan el


Apóstol; un pescador que vivió en Betsaida, Capernaúm y Jerusalén. Predicó en
Jerusalén y Judea y fue decapitado por Herodes, en el año 44 DC (Hechos 12:1,2).
Fue un miembro del Círculo Interno, llamado así porque estaba formado por los que
recibieron privilegios especiales. El Nuevo Testamento nos cuenta muy poco sobre
Santiago. Su nombre nunca aparece separado del de su hermano Juan. Ellos eran un
dúo inseparable (Marcos 1:19-20; Mateo 4:21; Lucas 5:1-11).

Fue un hombre de coraje y espíritu de perdón – un hombre sin envidia, viviendo a la


sombra de Juan, un hombre de extraordinaria fe. Fue el primero de los doce en
convertirse en mártir.

Su símbolo es tres caparazones de crustáceo, en señal de su peregrinación por el


mar.
Santiago, el Menor (o Más Joven)

Santiago, el menor o más joven, hijo de Alfeo, o Cleofás y María, vivió en Galilea. Fue
el hermano del Apóstol Judas.

De acuerdo a la tradición él escribió la Epístola de Santiago, predicó en Palestina y


Egipto y fue crucificado en Egipto. Santiago fue uno de los discípulos menos conocido.
Algunos estudiosos creen que fue el hermano de Mateo, el recaudador de impuestos.
Santiago fue un hombre de carácter fuerte y un tipo de los más ardientes. La tradición
nos cuenta que él también murió como un mártir y su cuerpo fue cortado en pedazos.
La sierra se convirtió en su símbolo apostólico.

Juan

Juan Boanerges, hijo de Zebedeo y Salomé, hermano de Santiago, el apóstol. Fue


conocido como el discípulo amado. Un pescador que vivió en Betsaida, Capernaúm y
Jerusalén y fue miembro del Círculo Interno. Él escribió el Evangelio según San Juan,
1º de Juan, 2º de Juan, 3º de Juan y Apocalipsis. Predicó entre las iglesias de Asia
Menor. Desterrado en la Isla de Patmos, fue más tarde liberado y murió de muerte
natural. Juan fue uno los apóstoles prominentes. Es mencionado en varios lugares en
el Nuevo Testamento. Fue un hombre de acción; era muy ambicioso; y un hombre con
un temperamento explosivo y un corazón intolerante. Su segundo nombre fue
Boanerges, el cual significa Hijo del Trueno. Él y su hermano Santiago vinieron de una
familia de mejor posición que el resto de los apóstoles. Siendo que su padre
contrataba sirvientes en su negocio pesquero (Marcos 1:20) él pudo haberse sentido
por sobre el resto. Estuvo muy cerca de Pedro. Actuaron juntos en el ministerio.
Pedro, sin embargo, era siempre el vocero del grupo.
Juan maduró con el tiempo. En la etapa posterior de su vida, se había olvidado de
todo, incluso de su ambición y temperamento explosivo, excepto de su compromiso de
amor para con el Señor.

Se dice que un atentado fue realizado contra su vida mediante un cáliz de veneno del
cual Dios lo salvó. Murió de causas naturales. Un cáliz con una serpiente en el mismo
es su símbolo.

Judas Iscariote

Judas Iscariote, el traidor, fue el hijo de Simón quien vivió en Kerioth de Judá. Él
traicionó a Jesús por treinta piezas de plata y luego se ahorcó (Mateo 26: 14,16).

Judas, el hombre que llegó a ser el traidor, es el enigma supremo del Nuevo
Testamento porque es muy duro ver como alguien que estuvo tan cerca de Jesús, que
vio tantos milagros y oyó muchas de las enseñanzas del Maestro pudo entregarlo en
mano de sus enemigos.

Su nombre aparece in tres listas de los 12 Apóstoles (Mateo 10:4; Marcos 3:19; Lucas
6:19). Se dice que Judas vino de Judá, cerca de Jericó. El era un judío y el resto de
los discípulos eran Galileos. Era el tesorero del grupo y estaba entre los que lideraban
conversaciones.

Se dice que Judas era un judío nacionalista violento que siguió a Jesús con la
esperanza de que a través de Él sus sueños y su llama nacionalistas pudieran ser
realizados. Nadie puede negar que Judas fuera un hombre codicioso y a veces usó su
posición como tesorero del grupo para tomar dinero del monedero común.

No hay una razón cierta de por qué Judas traicionó a su maestro, pero no fue su
traición lo que colocó a Jesús en la cruz, sino nuestros pecados.
Su símbolo apostólico es el lazo corredizo de una horca, o una bolsita de dinero con
piezas de plata cayéndose de él.

Judas Tadeo

Judas Tadeo, o Lebeo, hijo de Alfeo o Cleofás y María. Fue hermano de Santiago el
más joven. Fue uno de los apóstoles de los que se sabe poco y vivió en Galilea. La
tradición dice que predicó en Asiria y Persia y murió como mártir en Persia.

Jerónimo lo llamó “Trinomios” lo cual significa “un hombre con tres nombres”. En
Marcos 3:18 es llamado Tadeo. En Mateo 10:3 es llamado Lebeo. Su apellido era
Tadeo. En Lucas 6:16 y Hechos 1:13 es llamado Judas el hermano de Santiago.
Judas Tadeo también fue llamado Judas el Zelote.

Por su carácter fue un intenso y violento nacionalista con el sueño de poder mundial y
dominio del pueblo escogido. Según los registros del Nuevo Testamento (Juan 14:22)
él le preguntó a Jesús en la Última Cena, “¿cómo es que te manifestarás a nosotros, y
no al mundo?” Judas Tadeo estaba interesado en dar a conocer a Cristo al mundo. No
como un Salvador sufriente, sino más bien, como un Rey gobernante. Nosotros
podemos ver claramente por la respuesta que Jesús le dio, que el camino del poder
nunca se puede reemplazar por el camino del amor.

Se ha dicho que Judas fue a predicar el Evangelio en Edesa cerca del Río Éufrates.
Allí sanó a varios y muchos creyeron en el nombre del Maestro. Judas fue desde allí a
predicar el Evangelio en otros lugares. Fue asesinado con flechas en el Ararat. El
símbolo elegido para él es el barco porque fue un misionero enseñado a ser pescador
de hombres.
Mateo

Mateo, o Leví, hijo de Alfeo, vivió en Capernaúm. Fue un publicano o cobrador de


impuestos. Él escribió el evangelio que lleva su nombre. Murió como mártir en Etiopía.

El llamamiento de Mateo al grupo apostólico es mencionado en Marcos 2:14, Mateo


9:9 y Lucas 5:27-28. De estos pasajes aprendemos que Mateo también fue llamado
Leví. Era una costumbre común en el Medio Este en la época de Cristo que los
hombres tuvieran dos nombres. El nombre de Mateo significa “un regalo de Dios”. El
nombre Leví le pudo haber sido dado por Jesús. Es interesante que Santiago el
menor, quien fue uno de los doce apóstoles, fue hermano de Mateo, también el hijo de
Alfeo. Aunque sabemos poco sobre Mateo personalmente, el hecho sobresaliente
sobre él es que fue un recaudador de impuestos. La versión Reina-Valera lo llama
publicano, lo que en latín es Publicanus, enfatizando compromiso en el servicio
público, un hombre que manejaba dinero público, o un cobrador de impuestos.

De todas las naciones en el mundo, los judíos fueron los que más odiaron a los
cobradores de impuestos. Para el judío devoto, Dios era el único a quien era correcto
pagar tributos e impuestos. Pagarlo a cualquier otra persona era infringir los derechos
de Dios. El cobrador de impuestos era odiado no sólo sobre el terreno religioso sino
también porque la mayoría eran notablemente injustos.

En las mentes de varios hombres Judíos honestos, estos cobradores de impuestos


eran considerados como criminales. En los tiempos del Nuevo Testamento eran
clasificados junto con las prostitutas, los gentiles y los pecadores (Mateo 18:17; Mateo
21.31, 33; Mateo 9:10; Marcos 2:15, 16; Lucas 5:30). Los cobradores de impuestos
han sido conocidos porque determinaban el monto debido en sumas imposibles y a
menudo ofrecían dinero en préstamo a los viajeros a tasas de interés muy elevadas.
Así era Mateo. Aún así, Jesús eligió un hombre a quien todos los hombres odiaban y
lo hizo uno de los suyos. Jesucristo pudo ver el potencial en el cobrador de impuestos
de Capernaúm.

Mateo fue diferente a los otros apóstoles, quienes fueron todos pescadores. Él pudo
usar una pluma de escribir, y por su pluma llegó a ser el primer hombre en presentar
al mundo, en el idioma hebreo, un relato de las enseñanzas de Jesús. Es claramente
imposible estimar la deuda que la cristiandad tiene para con este despreciado
cobrador de impuestos. El hombre promedio habría pensado que era imposible
reformar a Mateo, pero para Dios todas las cosas son posibles. Mateo llegó a ser el
primer hombre que escribió las enseñanzas de Jesús. Fue un misionero del evangelio,
que cambió su vida por la fe de su Maestro.

El símbolo apostólico de Mateo es tres bolsas de dinero las cuales nos recuerdan que
él fue un cobrador de impuestos antes de que Jesús lo llamara.

Pedro

Simón Pedro, hijo de Jonás, era un pescador que vivió en Betsaida y Capernaúm.
Hizo trabajo evangelístico y misionero entre los judíos, yendo tan lejos como a
Babilonia. Fue un miembro del Círculo Interno y escribió las dos epístolas del Nuevo
Testamento que llevan su nombre. La tradición dice que fue crucificado en Roma con
la cabeza hacia abajo.

En cada lista apostólica, el nombre Pedro es mencionado en primer lugar. Sin


embargo, Pedro tuvo otros nombres. En el tiempo de Cristo, el idioma común era el
griego y el idioma familiar era el hebreo. Así su nombre griego fue Simón (Marcos
1:16; Juan 1:40, 41). Su nombre hebreo fue Cefas (1º Corintios 1: 12; 3:22; 9:5 y
Gálatas 2:9). El significado griego de Simón es roca. El significado árabe de Cefas
también es roca.
Por su actividad comercial, Pedro fue un pescador. Fue un hombre casado (1º
Corintios 9:5) y su era Capernaúm. Jesús probablemente estableció su centro de
dirección ahí cuanto visitó Capernaúm. Pedro era galileo también como lo fueron
varios de los otros discípulos. Josefo describió a los galileos de esta manera: “Eran
siempre aficionados a la innovación y por naturaleza dispuestos al cambio y
deleitados en sedición. Estaban siempre listos para seguir al líder y para comenzar
una insurrección. Eran rápidos en soltar el genio y dados a la pelea y eran hombres
muy caballeros.” El Talmud dice esto de los galileos: “Eran más ansiosos por el honor
que por ganar, de genio fuerte, impulsivo, emocional, despertado fácilmente por la
idea de una aventura, leal hasta el fin.” Pedro fue un galileo típico. Entre los doce,
Pedro fue el líder. Él sobresale como el vocero de los apóstoles. Es él quien preguntó
el significado de la parábola en Mateo 15:15. Es él quien preguntó cuán seguido
debemos perdonar. Es él quien indagó acerca de la recompensa para todos aquellos
que siguen a Jesús. Es él el que primero confesó a Jesús y lo declaró como el Hijo del
Dios Viviente. Es él quien estuvo en el monte de la Transfiguración. Es él quien vio a
la hija de Jairo resucitar de los muertos. Y todavía, es él quien negó a Cristo ante un
criado. Él fue un apóstol y un misionero que dio su vida por su Señor. Es verdad,
Pedro cometió muchos errores, pero tuvo siempre la gracia salvadora del corazón
amante. No importa cuántas veces se hubo caído y fallado, siempre recuperó su
coraje e integridad.

Pedro fue martirizado sobre una cruz. Pedro solicitó que lo crucificaran cabeza abajo
porque no era digno de morir como su Señor había muerto. Su símbolo apostólico es
una cruz invertida con llaves cruzadas.

Felipe

La tradición dice que Felipe predicó en Phrygia y murió como mártir en Hierapolis.
Felipe vino de Betsaida, el pueblo del cual Pedro y Andrés vinieron (Juan 1:44). El
parecido es que él, también, fue un pescador. Aunque los primeros tres Evangelios
registran su nombre (Mateo 10:3; Marcos 3:18; Lucas 6:14; Hechos 1:13), es en el
Evangelio de Juan que Felipe se vuelve una personalidad viviente.

Los estudiosos no están de acuerdo sobre Felipe. En Hechos 6:5 tenemos a Felipe
como uno de los siete diáconos ordenados. Algunos dicen que éste es otro Felipe.
Algunos creen que realmente éste es el apóstol. Si es el mismo Felipe, entonces su
personalidad tomó más vida porque tuvo una exitosa campaña en Samaria. El dirigió
al eunuco etíope a Cristo (Hechos 8:26). También se quedó con Pablo en Cesarea
(Hechos 21:8) y fue una de las figuras importantes en los emprendimientos misioneros
de la iglesia primitiva.

El Evangelio de Juan muestra a Felipe como uno de los primeros entre tantos a
quienes Jesús les dirigió la palabra “Sígueme.” Cuando Felipe conoció a Cristo,
inmediatamente encontró a Natanael y le dijo “lo hemos encontrado, de quien
Moisés... y los profetas, escribieron.” Natanael era desconfiado. Pero Felipe no
argumentó con él; simplemente le contestó: “Ven y ve.” Esta historia nos dice dos
cosas importantes sobre Felipe. Primero, muestra su correcto acercamiento al que
desconfía y su simple fe en Cristo. Segundo, muestra que tenía un instinto misionero.

Felipe fue un hombre de corazón caliente y una cabeza pesimista. Fue uno a quien le
hubiera gustado mucho hacer algo por otros, pero que no vio cómo esto podría ser
hecho. Aún así, este simple galileo dio todo lo que tenía. Por eso Dios lo usó. Se dice
que murió colgado. Mientras estaba muriendo, pidió que su cuerpo sea envuelto no en
lino sino en papiro porque no era digno de que incluso su cuerpo sea tratado como el
cuerpo de Jesús. El símbolo de Felipe es una canasta, por su participación en la
alimentación de los cinco mil. Es él quien marcó la cruz como un signo de cristiandad
y victoria.
Simón

Simón, el Zelote, uno de los apenas conocidos seguidores llamado Cananista o


Zelote, vivió en Galilea. La tradición dice que fue crucificado.

En dos lugares en la Versión Reina-Valera 1960 es llamado Cananista (Mateo 10:4;


Marcos 3:18). Sin embargo en otros dos lugares es llamado Simón Zelote (Lucas 6:15;
Hechos 1:13).

El Nuevo Testamento nos dice prácticamente nada sobre él personalmente excepto


que dice que era un Zelote. Los zelotes eran nacionalistas judíos fanáticos quienes
tuvieron desatención heroica por el sufrimiento envuelto y la lucha por lo que ellos
consideraron como la pureza de su fe. Los zelotes fueron enloquecidos con el odio por
los romanos. Fue este odio por Roma lo que destruyó la ciudad de Jerusalén. Josefo
dice que los zelotes fueron personas imprudentes, celosos en buenas prácticas y
extravagantes e imprudentes en las peores clases de acciones.

Desde su entorno, vemos que Simón fue un nacionalista fanático, un hombre devoto a
la Ley, un hombre con un odio amargo por cualquier persona que se atreviera a
comprometerse con Roma. Aún así, Simón claramente sobresalió como un hombre de
fe. Abandonó todos sus odios por la fe que mostró hacia su Maestro y el amor que
estuvo dispuesto a compartir con el resto de los discípulos y especialmente con
Mateo, el cobrador de impuestos romano.

Simón el Zelote, el hombre que una vez pudo haber matado por lealtad a Israel, llegó
a ser el hombre que vio que la voluntad de Dios no tiene servicio forzado. La tradición
dice que murió como un mártir. Su símbolo apostólico es un pez sobre una Biblia, lo
cual indica que fue un pescador que llegó a ser un pescador de hombres mediante la
predicación.
Tomás

Tomás Dídimos vivió en Galilea. La tradición dice que trabajó en Parthia, Persia e
India, sufriendo martirio cerca de Madras, en el Monte Santo Tomás, India.

Tomás fue su nombre hebreo y Dídimos su nombre griego. Algunas veces fue llamado
Judas. Mateo, Marco y Lucas no nos cuentan nada sobre Tomás excepto su nombre.
Sin embargo, Juan lo define más claramente en su Evangelio. Tomás apareció en la
resurrección de Lázaro (Juan 11:2-16), en el Aposento Alto (Juan 14:1-6) donde quiso
saber cómo conocer el camino a donde Jesús estaba yendo. En Juan 20:25 lo vemos
diciendo que a menos que vea las marcas en las manos de Jesús y en su costado, él
no iba a creer. Por esto Tomás llegó a ser conocido como Tomás el incrédulo.

Tomás llegó a creer mediante la duda. Por naturaleza, él era pesimista. Era un
hombre desconcertado. Aún así, fue un hombre de valor. Fue un hombre que no podía
creer hasta no haber visto. Era un hombre de devoción y fe. Cuando Jesús resucitó,
volvió e invitó a Tomás a poner su dedo en las marcas que dejaron los clavos en sus
manos y en su costado. Y es aquí donde vemos a Tomás haciendo la confesión de fe
más grande: “Mi Señor y mi Dios.” Las dudas de Tomás fueron transformadas en fe.
Tomás fue siempre como un niño pequeño. Su primera reacción fue no hacer lo que le
dijeron que hiciera y no creer lo que le dijeron que creyera. Las buenas nuevas para él
fueron siempre demasiado buenas para ser verdad. Mediante este hecho la fe de
Tomás se volvió más grande, intensa y convincente. Se dice que él fue encargado
para construir un palacio para el rey de India, y fue muerto con una lanza como mártir
por su Señor. Su símbolo es un grupo de lanzas, piedras y flechas.
Conoce el verdadero nombre de los 12 apóstoles y sus
significados

Por Editor de ChurchPOP - noviembre 12, 2018

Wikipedia / Dominio público.

Muchos podrían conocer el nombre de la mayoría de los apóstoles de Jesús, o al


menos el nombre de los más conocidos: Pedro, Juan, Judas, etc.

Sin embargo, muchos olvidan que estos nombres son solo traducciones al español.
Según sus raíces arameas y traducciones al griego, estos podrían sonar distintos.

En este artículo te compartimos los nombres de los 12 apóstoles, sus raíces y sus
significados:
Pedro: Griego: Petros (πέτρος), Arameo: Kephas, Significado: Piedra.

Andrés: Griego: Andreas (Ανδρεας), Arameo: Anes, Significado: Hombre fuerte,


viril.

Santiago el mayor y Santiago el menor: Griego: Gyánkos (Γιάγκος),


Arameo: Ya’akov, Significado: Sostenido por el talón.

Juan: Griego: Ioannes (Ιωαννης), Arameo: Yohanan, Significado: El Señor es


misericordioso.

Felipe: Griego: Philippos (Φιλιππος), Arameo: ‫פליפה‬, Significado: Amigo de los


caballos.

Bartolomé: Griego: Bartholomaios (Βαρθολομαιος), Arameo: bar-Tôlmay,


Significado: Hijo de Ptolomeo.

Mateo: Griego: Matthaios (Ματθαιος), Arameo: Mattityahu, Significado: Regalo de


Dios.

Tomás: Griego: Thomás (Θωμάς), Arameo: Tau’ma, Significado: Gemelo.

Judas Tadeo y Judas Iscariote: Griego: Ioudas (Ιουδας), Arameo:


Yehudah. Significado: Alabado.

Simón el Zelote: Griego: Simón (Σιμων), Arameo: Shim’on, Significado: El que


ha escuchado a Dios.

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