“No puedo ni quiero retractarme de nada, puesto que no es prudente ni correcto

obrar contra la conciencia”

Martín Lutero

La reforma protestante, llevada a cabo durante el papado de León X, en 1517, fue

uno de los grandes acontecimientos del modernismo. Las puertas de la Iglesia del
Castillo de Wittemberg fueron testigos del contenido de 95 tesis que iniciarían un
ataque a la iglesia católica y posterior separación de ésta. En ellas, se trataban
asuntos importantes como la iglesia y su relación con la economía, la salvación y lo
que la gente debía hacer para salvarse.
La posición de Lutero de rechazar todos estos abusos, puso a la iglesia en una
dificultad que lo afianzaba cada vez más en su idea reformarla. Sin la imprenta,
hubiera sido muy difícil que sus ideas se hubieran difundido y, gracias a ésta, fue
adquiriendo audiencia en Alemania. La buena vida del papa y los miles de
secretarios que están a su servicio sugerían que el dinero recaudado por él, se
usaba en gastos innecesarios y lujos. Así mismo, la venta de indulgencias y el
recaudo de impuestos para la construcción de la Basílica de San Pedro, eran clara
evidencia de una gran corrupción que venía desde arriba. Por esta razón, insta a
los poderes alemanes a alzarse contra el papa usando la espada. La idea de que
toda la gente corriente tomara un papel activo en la iglesia fue algo que fijó la
atención de muchas personas. Antes de esta reforma, habían síntomas que
indicaban un descontento social hacia la relación laico-eclesiástica y la necesidad
de cambiarlo. Los esfuerzos que conducían hacia este objetivo no tuvieron la
suficiente fuerza y solo quedaron en un deseo sin cumplir: “(…) personalidades
individuales, tanto laicas como eclesiásticas; comunidades monásticas; la
agrupación de monasterios con movimientos de laicos (…) la acción, en último
término, de los mismos poderes seculares. Pero todas estas acciones individuales
no encontraron en Romas sostén alguno, sino a menudo solo desaliento o
resistencia.” 1

Sin embargo, como en todo movimiento, hubo sectores de clases y grupos (nuevas
y viejas élites, comercio y producción manufacturera entre otros) que profesaron un
desacuerdo contra la reforma que se estaba llevando a cabo. Estos chocaban entre
sí y se contradecían. Finalmente, la falta de consenso hizo que sus detractores
perdieran fuerza y se impusiera la reforma: “Los éxitos de las clases altas urbanas
en el comercio y la producción manufacturera han conducido aparentemente en el
siglo XVI, en muchos lugares, a una agudización de las contradicciones (…) estas
confrontaciones y procesos se unieron de muy diferentes formas con la lucha por y
con la resistencia contra la reforma”. 2

Los reproches al papa y a la iglesia por parte de Lutero fueron constantes. En cierta
ocasión escribió: " el Papa debería mostrarse como el infecto pecador que es; si
Roma no es el mayor burdel que uno puede imaginar, entonces no sé qué es un
burdel". 3 Inclusive, sus escritos en contra el Papa se representaba también en
imágenes para que aquellos que no sabían leer, entendieran su mensaje. Lutero se
tomó esta lucha contra el Papa, como una apocalíptica batalla del bien contra el
mal. A través de su escrito, un nuevo sistema de fe, " La cautividad babilónica de
la iglesia" plantea que para construir hay que destruir. En éste, también hablaba
de la cautividad de la iglesia por Babilonia y la necesidad de liberarla. Aquí ataca el
sistema sacramental y cuestiona que haya siete sacramentos: “Comenzaré por
negar la existencia de siete sacramentos, y, por el momento, propondré sólo tres:
el bautismo, la penitencia y el pan. Todos ellos se han reducido por obra y gracia
de la curia romana a una mísera cautividad, y la iglesia ha sido totalmente
despojada de su libertad” 4.

Durante su audiencia en la Dieta de Warms, en donde participaban Carlos V,

Federico el sabio (quien siempre aceptó sus tesis) y un nuncio papal, Lutero se negó

1
LUTZ, Heinrich. Reforma y contrarreforma. Madrid: Alianza, 1994, p. 40.
2
LUTZ, Heinrich. Reforma y contrarreforma. Madrid: Alianza, 1994, p. 31.

3
https://www.youtube.com/watch?v=PKg2M40sb1o
4
LUTERO, Martín. La cautividad babilónica de la Iglesia. 1520.
a retractarse de sus tesis y se mantuvo en su rechazo hacia el Papa y los
contradictorios concilios manteniendo una conciencia sólo temerosa de Dios.
Gracias a la falta de unanimidad en cuanto a una pena de muerte para él, éste pudo
regresar a Wittenberg no sin antes haber sido raptado por Federico el Sabio para
su protección. En la primera en 1522 Lutero regresó a Wittenberg. Cuando llegó
allí, se horrorizó del desemboque que habían tenido sus palabras. Éstas
trascendieron las fronteras alemanas afectando a países como Ginebra, Países
Bajos, Francia, Bélgica, Inglaterra y nuevos territorios conquistados en América
donde sus ideas se practicaron con distintas formas

Sin duda alguna, Lutero dio los primeros pasos que darían finalmente un inicio a
una nueva iglesia: la protestante. Aunque él acepta a Jesucristo como Hijo de Dios
y a la Santísima Trinidad, éste discrepa con el apóstol Santiago en el asunto de la
Salvación. Lutero afirma que el hombre se salva mediante la fe o la Gracia de Dios
mientras que el apóstol Santiago afirma en el capítulo 2, versículo 14 al 26 que la fe
sin obras es una fe muerta “De qué sirve, hermanos míos, que alguien diga: “¿Tengo
fe”, si no tiene obras? ¿Acaso podrá salvarle la fe? (…) Abrahán nuestro padre ¿no
alcanzó la justificación por las obras cuando ofreció a su hijo Isaac sobre el altar?
(…) ya veis cómo el hombre es justificado por las obras y no por la fe solamente”. 5

En sus tesis también se evidencia el rechazo a toda autoridad religiosa como el

Papa, las decisiones tomadas en los Concilios y las intercesiones de los Santos y
la Virgen María. Esta decisión provocó también una enorme brecha entre la Iglesia
Católica y el protestantismo ya que en el catolicismo los santos son ejemplos de
vida que los cristianos toman como modelos de servicio a Dios. Así mismo, el
rechazo a la virginidad de la Virgen María separa aún más estas dos iglesias, al ser
la Virgen María un ejemplo a seguir por los cristianos debido a la aceptación y
sumisión que le profesó siempre a Dios.

Por otra parte, Lutero preparó los Catecismos Menor y Mayor en donde se
consignan los Diez Mandamientos, el Credo, el Padre Nuestro, los dos únicos
sacramentos que extrae de la biblia: el Bautismo y la Comunión, el oficio de las

5
Biblia de Jerusalén. Bilbao: Desclée De Brouwer, S.A., 2013, p. 2685
llaves o enseñanza a las personas para confesarse, cómo el jefe de la familia debe
enseñar a orar a los suyos mañana y noche y cómo el jefe de la familia debe enseñar
a los suyos la bendición y la acción de gracias. En el caso del Catecismo Mayor,
ésta es una obra dirigida a los pastores en donde se explica cómo debe ser
impartida la pedagogía de la fe.

El impacto que las tesis luteranas tienen en el mundo actual es muy determinante
pues éstas, aparte de haber sido el detonante para el nacimiento de una nueva
iglesia, causaron también divisiones entre el Estado y el Clero; además, también
fueron determinantes en las diferentes doctrinas económicas que permitieron el
avance del capitalismo y condujeron a la modernidad. Luego de su promulgación y
puesta en práctica, se impuso una perspectiva distinta que, aunque acompañada
de guerras religiosas, abrió una nueva era a la comprensión de Dios. En este
contexto, la iglesia tuvo que reafirmar sus enseñanzas, reconocer sus errores y
fortalecer la predicación. El resultado fue que la iglesia católica se renovó a partir
de su reestructuración reduciendo así el impacto del luteranismo.

A manera de conclusión, se puede decir que antes de las 95 tesis de Lutero, la

iglesia era el cetro de la vida de las personas y la organización social, luego de éstas
se hicieron importantes cambios sociales en los cuales, donde comúnmente
administraba la iglesia, ya lo harían otros sectores de la sociedad. Ahora las
comunidades de Alemania y el resto de Europa comenzaron a administrar la
disciplina social, la ayuda a los pobres, y la educación pública a través del
establecimiento de reglas locales.

Pese a que Lutero solo quería vivir una vida dedicada a la enseñanza y la
promulgación de la palabra de Dios, exhortando a los miembros de su comunidad a
preocuparse solo por sus almas y Dios y pedir a éstos abandonar la revolución
social cuando ésta estalló, su mensaje llegó tarde. Algunas de sus tesis fueron
interpretadas no con el sentido que Lutero quiso decir, sino con el sentido de quien
las leía y adaptaba según su necesidad. De ahí que hayan nacido el anglicanismo
y el calvinismo, por ejemplo.
Finalmente, una pregunta interesante sería: ¿Qué hubiera pasado si la iglesia
católica hubiera aceptado en su interior la reforma que planteaba Lutero sin haber
conformado otra iglesia aparte?.

Bibliografía

 Biblia de Jerusalén. Bilbao: Desclée De Brouwer, S.A., 2013, p. 2685

 LUTERO, Martín. La cautividad babilónica de la Iglesia. 1520.
 LUTZ, Heinrich. Reforma y contrarreforma. Madrid: Alianza, 1994.