Santiago, 09 mayo 2019

Señor
Presidente de la República de Chile
Dr. Sebastián Piñera Echeñique
Palacio de la Moneda

Cc: Sra. Isabel Plá, Ministra de la Mujer y la Equidad de Género

Cc: Sra. Marcela Cubillos, Ministra de Educación

Cc: Dr. Sr. Andrés Couve, Ministro de Ciencia, Tecnología, Conocimiento e Innovación

Cc: Dra. Carolina Torrealba, Subsecretaria Ministerio de Ciencia, Tecnología, Conocimiento e

Innovación

De nuestra consideración:

A nombre de Redes Chilenas (ReCh), agrupación global que representa a diversas asociaciones
de investigadores chilenos en Chile y en el extranjero, queríamos llamar vuestra atención respecto al
grave caso que en noviembre de 2018 afectó a dos reconocidas neurocientíficas chilenas, miembros
de ReCh y lideresas del movimiento feminista, Dra. Karina Bravo y Dra. Vania Figueroa.

Como será de vuestro conocimiento, los hechos ocurrieron en la recientemente creada

Universidad de O’Higgins e involucra el cese de las actividades académicas de las afectadas, como
consecuencia de una denuncia por acoso laboral interpuesta por la Dra. Bravo, la cual fue apoyada por
la Dra. Figueroa. Dicho caso ha adquirido connotación nacional y, a nuestro juicio, podría representar
un importante y grave precedente en torno al trato que las investigadoras nacionales reciben al
reinstalarse en el país, proceso que no siempre es fácil. En el caso de estas investigadoras, esta
inserción ha sido abruptamente coartada, terminando en la desvinculación de las científicas de la
Universidad en condiciones que no han sido aún del todo investigadas ni esclarecidas. Lo que es peor,
un promisorio proyecto del Programa de Atracción e Inserción de Capital Humano de CONICYT (PAI)
ha sido cancelado, castigando severamente a la Dra. Figueroa, quien no podrá acceder a futuros
fondos de investigación chilenos a perpetuidad. Esta cancelación – a nuestro juicio discrecional – del
PAI, el cual precisamente tiene como misión el facilitar la inserción exitosa de quienes por años se han
perfeccionado en investigación y desarrollo, exige de una revisión que permita a los futuros
beneficiarios del programa un pleno entendimiento de las normativas que lo rigen. Más aún, ambas
investigadoras fueron excluidas, del proyecto de investigación IES 1785 del Ministerio de Educación,
el cual se encuentra en curso y del cual ambas son autoras. Esto constituye, nuevamente a nuestro
parecer, una arbitrariedad.

Es importante agregar que el recurso de protección interpuesto por la doctora Bravo, debido
a su despido arbitrario, se encuentra siendo procesado por la Corte Suprema, tras ser rechazado en la
Corte de Apelaciones de Rancagua. El proceso llevado a cabo en la Corte de Apelaciones merece
algunos reparos debido a que su otrora presidente, el juez Marcelo Vásquez, fue suspendido y es ahora
investigado por eventual tráfico de influencias, situación irregular que esperamos sea debidamente
enmendada en la Corte Suprema.

Considerando que ReCh es una entidad que agrupa a personas con un alto nivel de formación,
conocimiento y experiencia para el desarrollo de Chile, nos preocupan las condiciones actuales de los
investigadores e investigadoras que la componen, así como su futuro en el desarrollo de nuestro país.
Por ello expresamos nuestro rechazo y descontento con el lento avance de la investigación del caso
que afecta a nuestras colegas. ReCh considera como base de sus acciones el principio de solidaridad y
creencia en el buen actuar de sus miembros, incluidas las investigadoras concernientes. Ellas, como
muchas otras personas que forman parte de ReCh, tienen el más alto compromiso y pasión por aportar
a nuestro país creando conocimiento avanzado.

Ante esta grave situación, ReCh se permite solicitar a usted la ejecución de las siguientes
medidas:

1) Que se solicite expeditar la investigación del caso y se clarifique, mediante un exhaustivo y

objetivo proceso, las responsabilidades y el rol de las autoridades académicas relevantes en este caso.
En el caso de resultar responsables, dichas personas habrán de ser sujetas a sanciones
correspondientes según la legislación actual y a sanciones académicas según los estatutos
Universitarios que correspondan, incluyendo la remoción de sus cargos;

2) Que el Ministerio de la Mujer y de Equidad de Género patrocine el caso judicial de las

doctoras Bravo y Figueroa, debido a la importancia que representa reforzar el rol de la mujer en
investigación avanzada, así como muchos otros temas de género, para la labor en su gobierno, y por
la importante señal de resguardar los derechos de las mujeres investigadoras para las actuales
investigadoras y futuras generaciones de mujeres científicas;

3) Que se solicite a la Universidad de O’Higgins revocar la resolución que dispone la no

renovación de contrato de ambas académicas, al menos mientras dure la investigación del caso y, al
finalizar dicha investigación y de acuerdo con los resultados que de ella emanen, ofrezca a ambas
profesionales disculpas públicas por los perjuicios académicos y la violencia de género institucional
que ambas han sufrido en su contra;

4) Que el Ministerio de Ciencia, Tecnología, Conocimiento e Innovación reforme los programas

e instrumentos destinados a promover, fomentar y desarrollar la investigación en todas las áreas del
conocimiento de la futura Agencia Nacional de Investigación y Desarrollo (que reemplazará a
CONICYT), de modo que incluya cláusulas de protección a las y los investigadores en caso de
incumplimiento de las obligaciones institucionales de salvaguardar el desarrollo y bienestar
académico. ReCh ofrece desde ya su colaboración para esta tarea y su compromiso con la búsqueda
honesta de políticas que ofrezcan garantías a todos los sectores involucrados en la generación de
conocimiento en Chile.

Es nuestra más sentida convicción que una toma de decisión firme y ágil de su parte podría
dar una importante señal a la comunidad de investigadores chilenos en pro de la investigación y
desarrollo científico, además de velar por el rol de las mujeres investigadoras en nuestra sociedad.

Agradeciéndole su interés y su tiempo en leer esta carta, solicitamos amablemente acuse

recibo de ésta y nos pudiera informar a la brevedad cuál sería su respuesta ante nuestros
requerimientos.

Atentamente,

Redes Chilenas