Beruflich Dokumente
Kultur Dokumente
Yo Yoan Valentín Pérez Rodríguez declaro ser el único autor de este trabajo, y
autorizo al Departamento de Tecnología de Construcción de Maquinaria de la
Facultad de Ingeniería Mecánica para que hagan el uso que estimen pertinente con
los resultados de esta investigación.
Para que así conste, firmo la presente a los ____ días del mes ________ del año
_________.
-------------------------------------------
Firma del autor
-----------------------------------------
Firma del Tutor
Opinión del Tutor
Hay que señalar además que Yoan es un estudiante excelente, con gran dedicación
a sus estudios; que ha trabajado con elevada independencia, logrando interpretar
adecuadamente las tareas que se le han encomendado y cumpliendo con ellas. Ha
incorporar también conocimientos distantes a su carrera como son los aspectos
relacionados al funcionamiento de la articulación de la cadera y al procesamiento
de imágenes médicas.
Por todo lo antes expuesto, considero que el estudiante Yoan Valentín Pérez
Rodríguez está apto para que le sea otorgado su título de Ingeniero Mecánico y le
propongo al tribunal le otorgue la máxima calificación.
___________________________
Profesor Instructor Osmel Pérez Acosta
17 de junio del 2016
Dedicatoria
Objeto de investigación:....................................................................................... 2
Hipótesis: ............................................................................................................. 3
Conclusiones ......................................................................................................... 64
Recomendaciones................................................................................................. 65
En los años 60 Charnley demostró que era posible colocar implantes metálicos
fijados con polímeros acrílicos para reconstruir la articulación fémur-cadera. Este
concepto de fijación rígida fue un paso esencial para mejorar las endoprótesis
intramedulares. La popularidad de la técnica de Charnley se debe al gran éxito de
su aplicación en pacientes de avanzada edad; sin embargo entre pacientes jóvenes
no es aconsejable aplicar esta técnica ya que la actividad física es mucho mayor y
tiende a perder la fijación rápidamente. Existen otros factores como la calidad del
hueso, el peso, y el nivel de actividad que también afectan el éxito a largo plazo de
las articulaciones artificiales.[2]
1
a las cargas fisiológicas a las que es sometido a través de los años. Un balance
adecuado entre la resistencia y la estabilidad tiene que ser encontrado para una
similar correspondencia con el comportamiento del hueso.[3-5]
Problema científico:
Se necesita determinar la influencia del grado de porosidad del vástago de la
prótesis de cadera en el proceso de osteointegración.
Objeto de investigación:
Modelado biomecánico de prótesis de cadera y su interacción con el tejido óseo.
2
Campo de acción:
Simulación de prótesis de cadera con variaciones del grado de porosidad.
Objetivo de la investigación:
Determinar la influencia del grado de porosidad del vástago de las prótesis de
cadera en el proceso de osteointegración, a partir de la modelación por el método
de los elementos finitos del sistema prótesis-fémur.
Hipótesis:
La utilización de un modelo de elementos finitos del sistema prótesis-fémur permitirá
determinar la influencia del porciento de porosidad del vástago de la prótesis de
cadera en el proceso de osteointegración.
Tareas de investigación:
Análisis bibliográfico.
Estudio de la anatomía de la cadera y de las prótesis desarrolladas
actualmente.
Obtención de un modelo CAD del hueso fémur a partir de imágenes médicas.
Obtención del modelo geométrico de la prótesis y el sistema prótesis-fémur.
Análisis de las cargas del sistema prótesis-fémur.
Elaboración de un modelo de elementos finitos que permita estudiar el
comportamiento del sistema prótesis-fémur.
Análisis de la influencia del grado de porosidad de la prótesis para el proceso
de osteointegración.
Valoración de los resultados mediante comparación con casos expuestos en
la literatura.
3
Capítulo 1. Anatomía y Biomecánica de la Articulación
de la Cadera. Prótesis de Cadera
1.1.- Introducción
En este capítulo se explican las principales estructuras que conforman la cadera, se
mencionan algunas de las afecciones que esta puede sufrir, así como los tipos de
fracturas femorales más frecuentes, además se expone que la artroplastia de
cadera es una vía de solución para algunas de esas afecciones y se realiza un
estudio detallado de los principales músculos que circundan la articulación de la
cadera. Además se define el concepto de prótesis y se describen las características
fundamentales de las prótesis femorales, como sus composiciones, materiales más
empleados para la manufactura de éstas, analizando sus propiedades mecánicas y
biomecánicas con el objetivo de seleccionar el material más adecuado.
La articulación de la cadera la forman, por una parte, la cabeza del fémur y, por otra,
una oquedad en el hueso de la pelvis llamado acetábulo. Las dos superficies óseas
están tapizadas por el cartílago articular. Alrededor de estos huesos está la
membrana sinovial, los ligamentos y una potente musculatura (ver Figura 1.1).
4
1.2.1.- Huesos. Fémur y coxal
Los huesos de la cadera lo conforman el fémur y la pelvis. El fémur es un hueso
largo que forma por sí solo el esqueleto del muslo (ver Figura 1.2), se articula arriba
con el hueso coxal y abajo con la tibia. En posición vertical, el fémur se dirige
oblicuamente de arriba a abajo y de afuera hacia adentro. Presenta también una
curvatura, de concavidad posterior, y una torsión sobre su eje longitudinal (ver
Figura 1.3).[11]
Figura 1.2 Anatomía del fémur. (Izquierda) vista anterior, (derecha) vista posterior.[15]
5
Figura 1.3 Vista en planta donde se aprecia el ángulo de anteversión.[16]
El ángulo de inclinación que forma el eje longitudinal del cuello del fémur con el
cuerpo femoral depende de la edad, sexo y el desarrollo del fémur. También puede
variar con cualquier proceso patológico que debilite el cuello del fémur (ver Figura
1.4). Cuando disminuye el ángulo de inclinación, la enfermedad se denomina coxa
vara (ver Figura 1.4 B), y cuando aumenta, coxa valga (ver Figura 1.4 C). La coxa
vara determina un ligero acortamiento del miembro inferior y limita la separación
pasiva de la cadera.[17]
Figura 1.4 Ángulo del cuello del fémur con la diáfisis. A 125°(normal), B 120° o menos (coxa vara),
C 135° o más (coxa valga).[17]
El hueso coxal maduro es un hueso grande y plano creado por la fusión del ilion,
isquion, y pubis al final de la adolescencia. El hueso coxal forma la comunicación
ósea entre el tronco (sacro) y el miembro inferior (fémur). Cada una de las tres
porciones óseas del hueso coxal inmaduro se forma a partir de su propio centro
primario de osificación, al llegar a la pubertad los tres huesos primarios siguen
todavía separados por un cartílago en forma de Y, centrado en el acetábulo. En las
6
personas adultas, de cierta edad, apenas quedan restos de las líneas de fusión de
los huesos primarios (ver Figura 1.5).[17]
7
Músculos extensores que incluyen los glúteos mayores (ver Figura 1.7 A) y
ligamentos.
El grupo rotador lateral que incluye los músculos pelvitrocantéreos, ya que
se originan en la pelvis y se insertan en el trocánter mayor y cresta
intertrocantérea. Siendo estos los músculos piriforme, obturador interno,
gemelos, cuadrado femoral y obturador externo.
Músculos aductores que incluye el musculo pectíneo, el aductor corto y el
aductor largo.
Músculos flexores que incluyen el iliopsoas, el recto femoral, él tensor de la
Fascia Lata y el musculo sartorio.
Músculos abductores que incluyen los glúteos medio (ver Figura 1.7 B) y
menor (ver Figura 1.7 C).
Figura 1.7 (A) Glúteo mayor, (B) Glúteo medio, (C)Glúteo menor (Abductor).[18]
8
Estos músculos permiten realizar los movimientos de flexión, extensión, rotación
lateral, rotación media, abducción y aducción, lo que evidencia la alta funcionalidad
de los mismos (ver Figura 1.8).
Por otra parte, la morfología del hueso está compuesta por un material rígido y ligero
al mismo tiempo. La rigidez la confiere la capa exterior, formada de material
compacto, mientras que en el interior adopta una forma esponjosa que le permite
minimizar el peso. El hueso compacto o cortical es un hueso denso que no presenta
cavidades visibles. Su rigidez se debe al componente mineral, mientras que la
9
viscoelasticidad se la confiere el componente orgánico de la matriz ósea. Mientras
que el hueso esponjoso o trabecular, está formado por una red tridimensional de
trabéculas óseas, que delimitan un laberinto de espacios intercomunicados,
ocupados por médula ósea [20]. Este último es menos duro y más dúctil que el
hueso cortical y tiene una gran capacidad para distribuir presiones y amortiguar
cargas (ver Figura 1.9).[19]
10
1.3.1.- La remodelación ósea
Muchos investigadores han estudiado la relación existente entre la estructura del
hueso y las cargas a las que se encuentra sometido. En el siglo XIX, varios autores
describieron la relación entre la forma y la función del hueso con gran detalle, siendo
Julius Wolff quien hizo la observación de que no sólo existe una clara relación entre
la estructura ósea y la carga, sino que el hueso como tejido vivo es capaz de
adaptarse a las alteraciones de cargas que sufre de acuerdo con leyes matemáticas.
Este fenómeno mediante el cual la densidad aparente y la direccionalidad de las
trabéculas se adaptan al entorno mecánico se conoce con el nombre de
remodelación ósea. Estudios experimentales han verificado la existencia de la ley
de Wolff, según esta teoría, el hueso se remodela aumentando su densidad cuando
las cargas mecánicas aumentan y se remodela absorbiendo hueso cuando las
cargas disminuyen.[21]
Como se ha visto, los huesos no son piezas inertes que se mantienen inalteradas
con el paso del tiempo, sino que están cambiando durante toda la vida del individuo.
11
El tejido óseo está constantemente renovándose a sí mismo. Su arquitectura interna
está adaptada a las cargas mecánicas que actúan sobre él, de forma que si estas
cambian, la distribución del tejido óseo se ve alterada.[16]
Toda fractura provoca una lesión compleja que afecta tanto al hueso como a las
partes blandas circundantes. Inmediatamente después de producirse la fractura y
durante la fase de reparación, se pueden observar trastornos circulatorios locales y
manifestaciones de inflamación local, así como dolor e inmovilidad. Estos tres
factores que surgen como resultado de la alteración funcional de articulaciones y
músculos, conducen a lo que se llama fractura. La fractura tiene su origen en dos
factores patogénicos principales: el dolor y la falta de estímulo fisiológico que
producen en el complejo osteomuscular el movimiento y los cambios de
solicitaciones mecánicas. En la extremidad inferior esto significa la supresión del
12
apoyo o lo que es lo mismo ausencia de carga, y en la superior la ausencia de la
actividad muscular normal.[21]
Una posible clasificación de las fracturas de la extremidad proximal del fémur puede
ser según el nivel de la línea de fractura (ver Figura 1.11). De manera esquemática
se puede establecer:
Figura 1.11 Clasificación de las fracturas de la extremidad proximal según el nivel de la línea de
Fractura.[11]
13
positivo. La artroplastia de cadera fue uno de los mayores adelantos de la cirugía
ortopédica del siglo XX y contribuye a mejorar la calidad de vida de los pacientes
(ver Figura 1.12).[16]
14
La utilización de endoprótesis femorales para reemplazar la articulación de la cadera
dañada por diversas causas tales como traumas, defectos congénitos, infecciones,
tumores, desgaste degenerativo, fractura, etc., se encuentra muy extendida a nivel
mundial. Las estadísticas señalan un crecimiento de pacientes y una alta demanda
de implantes. En las dos últimas décadas, se han hecho los mayores esfuerzos para
mejorar el diseño de las prótesis femorales, tanto desde el punto de vista del
comportamiento mecánico como de los materiales. Por ejemplo, a finales de los
años ochenta las prótesis no cementadas prometían buenos resultados en el
tratamiento de la degeneración de artritis de cadera; sin embargo se apreciaron
problemas en términos de tendencia a fisuras y fracturas, aflojamiento temprano de
la fijación de la prótesis, osteólisis femoral e incremento del dolor. La mayoría de
estos problemas estaban relacionados con la falta de concordancia entre la
geometría de la prótesis y la cavidad intramedular, debido a la complejidad y
variedad de dimensiones y formas de la parte superior del fémur. Se formaron
muchos grupos de investigación orientados a mejorar el diseño de prótesis y
optimizar el ajuste con las paredes intramedulares; y los estudios para utilizar
hidroxiapatita como elemento bioactivo que facilita la osteointegración en
implantes.[16]
15
spray, grit-blasting o chorro de arena o de partículas, mallas, micro esferas o
hidroxiapatita).Los tipos de prótesis se clasifican según el tipo de material que se
emplea para su unión con el hueso y actualmente se dividen en tres grupos:
La rigidez del vástago depende del módulo de elasticidad del material y del diámetro
del mismo. Para introducir los vástagos no cementados en el canal femoral estos
suelen ser de gran diámetro, lo que aumenta su rigidez y puede facilitar el efecto
del “apantallamiento de tensiones” (stress shielding). La utilización del Titanio, con
16
un módulo de elasticidad un 50% menor que el Cromo-Cobalto y modificaciones del
diseño permiten reducir esta rigidez.
Polímeros
Cerámicas
Materiales derivados de procesos biológicos
Metales
Compuestos (combinación de polímeros, cerámicos y metales)
Los metales puros no tienen la resistencia, elasticidad y ductilidad que requieren los
distintos tipos de implantes actualmente utilizados en traumatología y ortopedia. Por
esa razón se recurre a las aleaciones de algunos metales (titanio y cobalto) para
modificar su estructura cristalina y por lo tanto aumentar sus propiedades
mecánicas.
Cada estructura cristalina se denomina fase; las aleaciones que tienen más de una
fase se llama alotrópicas o polimorfas. El número de fases de una aleación depende
del número y cantidad de elementos de que consta, así como el tratamiento a que
ha sido sometido.
17
Aleaciones de Cobalto-Cromo-Molibdeno (CoCrMo)
Titanio-Aluminio-Vanadio (Ti6Al4V)
Aceros inoxidables tipo AISI 316L (en base a Fe-Cr-Ni-Mo)
% en peso 65 27 5
18
1.7.3.- Aleación de Titanio grado 5 (Ti6Al4V)
El titanio y sus aleaciones han sido extensamente usados en ortopedia y en
aplicaciones biomédicas por su excelente biocompatibilidad [28, 30].
El titanio es un metal compatible con los tejidos del organismo humano que toleran
su presencia sin reacciones alérgicas del sistema inmunitario. Esta propiedad de
biocompatibilidad del titanio unido a sus cualidades mecánicas de dureza, ligereza
y resistencia lo ha convertido en líder indiscutible en una gran cantidad de
aplicaciones en el campo biomédico [3, 8], como ejemplo de estas aplicaciones se
encuentran: las prótesis de cadera, de rodillas e implantes dentales.
Elementos % en peso
Aluminio 6
Vanadio 4
Nitrógeno 0.05
Carbón 0.08
Hidrógeno 0.0125
Hierro 0.25
Oxígeno 0.13
Titanio Balance
19
1.7.4.- Titanio poroso
El propósito del uso de los materiales porosos se debe al valor de la propiedad de
baja rigidez que presentan los mismos. Una gran diferencia entre la rigidez del
hueso y del implante metálico, tiene como consecuencia una distribución de
tensiones no uniforme, este fenómeno se conoce como: “apantallamiento de
tensiones” (stress shielding), lo cual genera una pérdida de masa ósea en el hueso
circundante que suele acabar en fractura. Este problema se puede evitar usando
implantes con una menor rigidez, o sea, más parecida a la del hueso. Los materiales
porosos resultan unos candidatos ideales ya que su rigidez es menor que la de los
materiales densos. Como valor añadido, con la superficie rugosa de los implantes
porosos se facilita la osteointegración, aportando una mayor superficie de fijación y
una mejor transmisión de esfuerzos entre el implante y el hueso, lo que resulta en
una unión biológica entre el implante y el tejido vivo.[3, 8, 31]
𝐸𝑝 = 𝐶1 𝐸𝑠 (𝜌∗ )2 (2)
3⁄
𝜎𝑓𝑝 = 𝐶2 𝜎𝑓𝑠 (𝜌∗ ) 2 (3)
20
Donde 𝐸𝑝 es el módulo de elasticidad poroso y 𝐸𝑠 es el módulo de elasticidad del
titanio sólido. Por otra parte 𝜎𝑓𝑝 es el esfuerzo de fluencia para el grado de porosidad
de la aleación de titanio analizada, mientras que 𝜎𝑓𝑠 es el esfuerzo de fluencia del
titanio sólido. Las constantes 𝐶1 y 𝐶2 fueron tomadas de [33] con valores de 1 y 0.3
respectivamente.
Figura 1.14 Representación esquemática del proceso de sinterización para la obtención de Ti6Al4V
poroso con un núcleo sólido en este caso. [34]
21
selectivamente en las áreas deseadas de acuerdo al archivo de un modelo CAD
que se le introduzca a la máquina (ver Figura 1.15).[30, 35]
Figura 1.15 Representación del proceso de Fusión Selectiva Laser para la fabricación de implantes
porosos. (A) Modelo CAD en formato STL. (B) Impresora 3D pulvimetalúrgica SLM. (C) Pieza de
TI6Al4V porosa.
22
Capítulo 2. Modelación del Complejo Prótesis-Fémur y
Análisis por el Método de Elementos Finitos (MEF)
2.1.- Introducción
El contenido de este capítulo aborda sobre los diferentes métodos y procedimientos
a utilizar para obtener en 3D el modelo del complejo prótesis-fémur. Se abordan
además los requisitos necesarios para su posterior análisis por el MEF.
23
Basic segmentation tools.
3. Reconstrucción 3D.
24
Figura 2.2 Segmentación por cortes en la vista axial. (A) Selección de la región a eliminar. (B)
Fémur limpio.
Figura 2.3 Secuencia de edición para limpiar la cabeza femoral. (A) representación en 3D de todas
las estructuras óseas, (B) muestra en 3D de la articulación de la cadera, (C) representacion en 3D
del fémur.
25
Figura 2.4 Secuencia de pasos realizados para una posible simulación quirúrgica. (A) Plano de
corte para retirar la parte dañada. (B) Parte del fémur dañada nótese el color violeta. (C) Parte del
fémur que espera por la inserción de la prótesis. (D) Reposición de la prótesis en el fémur. (E)
Posición adecuada de la prótesis en la anatomía del paciente.
26
las curvas interiores (ver figura 3.5 C), dejando las exteriores para la construcción
del hueso cortical.
Figura 2.5 Secuencia utilizada para la modelación del hueso trabecular. (A) Curvas adaptadas a la
geometría del fémur. (B) Curvas desfasadas al interior de acuerdo a los espesores del hueso
cortical. (C) Hueso trabecular.
27
Figura 2.6 Pasos para obtener el hueso cortical. (A) Fémur sólido. (B) Hueso trabecular. (C) Hueso
cortical.
28
Figura 2.7 Prótesis de cadera modelada en este estudio. (A) Croquis a partir del cual se modela la
prótesis. (B) Modelo tridimensional del implante femoral.
29
Figura 2.8 Comparación para comprobar la posición de la prótesis. (A) Posición de la prótesis en la
simulación quirúrgica (Mimics). (B) Posición de la prótesis en el ensamble realizado en Inventor.
Nótese la coincidencia del posicionamiento del implante femoral.
30
Si la geometría del cuerpo es muy complicada, los elementos son formados
generalmente como tetraedros; cada elemento incluye un número de vértices
llamados nodos y al conjunto de elementos y nodos se conoce como malla de
Elementos Finitos [39].
Los nodos del elemento se numeran de forma tal que cuando son vistos desde el
último nodo (nodo 4), los primeros tres nodos son numerados en sentido contrario
a las agujas del reloj, como 1, 2, 3, 4 𝑜 2, 3, 1, 4. Este ordenamiento de los nodos
evita el cálculo de volumen negativo.[41, 42]
31
Figura 2.9 Elemento tetraedro sólido.
Serán seis grados de libertad por nodos para un total de 24 grados de libertad por
elementos.
𝑢(𝑥, 𝑦, 𝑧) = 𝑎1 + 𝑎2 𝑥 + 𝑎3 𝑦 + 𝑎4 𝑧
𝑢(𝑥, 𝑦, 𝑧) = 𝑎5 + 𝑎6 𝑥 + 𝑎7 𝑦 + 𝑎8 𝑧 (5)
32
Los coeficientes (a) se expresan en función de las coordenadas nodales conocidas
(𝑥1 , 𝑦1 , 𝑧1 , . . . , 𝑧4 ).y los desplazamientos nodales desconocidos (𝑢1 , 𝑣1 , 𝑤1 , . . . , 𝑤4 ) del
elemento.
De donde se obtiene:
1 𝑥1 𝑦1 𝑧1
𝑥2 𝑦2 𝑧2
6𝑉 = [1 𝑥3 𝑦3 𝑧3 ] (7)
1
1 𝑥4 𝑦4 𝑧4
𝑥2 𝑦2 𝑧2 1 𝑦2 𝑧2 1 𝑥2 𝑧2 1 𝑥2 𝑦2
𝛼1 = [𝑥3 𝑦3 𝑧3 ] ⋯ 𝛽1 = − [1 𝑦3 𝑧3 ] ⋯ 𝜆1 = [1 𝑥3 𝑧3 ] ⋯ 𝛿1 = − [1 𝑥3 𝑦3 ] (8)
𝑥4 𝑦4 𝑧4 1 𝑦4 𝑧4 1 𝑥4 𝑧4 1 𝑥4 𝑦4
𝑥1 𝑦1 𝑧1 1 𝑦1 𝑧2 1 𝑥1 𝑧1 1 𝑥1 𝑦1
𝑥
𝛼2 = − [ 3 𝑦3 𝑧3 ] ⋯ 𝛽2 = [1 𝑦3 𝑧3 ] ⋯ 𝜆2 = − [1 𝑥3 𝑧3 ] ⋯ 𝛿2 = [1 𝑥3 𝑦3 ] (9)
𝑥4 𝑦4 𝑧4 1 𝑦4 𝑧4 1 𝑥4 𝑧4 1 𝑥4 𝑦4
𝑥1 𝑦1 𝑧1 1 𝑦1 𝑧2 1 𝑥1 𝑧1 1 𝑥1 𝑦1
𝑥
𝛼3 = [ 2 𝑦2 𝑧2 ] ⋯ 𝛽3 = − [1 𝑦2 𝑧2 ] ⋯ 𝜆3 = [1 𝑥2 𝑧2 ] ⋯ 𝛿3 = − [1 𝑥2 𝑦2 ] (10)
𝑥4 𝑦4 𝑧4 1 𝑦4 𝑧4 1 𝑥4 𝑧4 1 𝑥4 𝑦4
𝑥1 𝑦1 𝑧1 1 𝑦1 𝑧2 1 𝑥1 𝑧1 1 𝑥1 𝑦1
𝑥
𝛼4 = − [ 2 𝑦2 𝑧2 ] ⋯ 𝛽4 = [1 𝑦2 𝑧2 ] ⋯ 𝜆4 = − [1 𝑥2 𝑧2 ] ⋯ 𝛿4 = [1 𝑥2 𝑦2 ] (11)
𝑥3 𝑦3 𝑧3 1 𝑦3 𝑧3 1 𝑥3 𝑧3 1 𝑥3 𝑦3
33
La expresión de los desplazamientos para 𝑢 dada por la ecuación (6) con similares
expresiones para 𝑣 𝑦 𝑤 pueden ser escritas en forma expandida en términos de las
funciones de forma y los desplazamientos nodales.
𝑢1
𝑣1
𝑢 𝑁1 0 0 𝑁2 0 0 𝑁3 0 0 𝑁4 0 0 𝑤1
{𝑣} = [ 0 𝑁1 0 0 𝑁2 0 0 𝑁3 0 0 𝑁4 0] ⋮ (12)
𝑤 0 0 𝑁1 0 0 𝑁2 0 0 𝑁3 0 0 𝑁4 𝑢4
𝑣4
{𝑤4 }
𝜕𝑢
𝜕𝑥
𝜕𝑣
𝜀𝑥 𝜕𝑦
𝜀𝑦 𝜕𝑤
𝜀 𝜕𝑧
{𝜀} = 𝛾 𝑧 = (14)
𝑥𝑦 𝜕𝑢 𝜕𝑣
𝛾𝑦𝑧 +
𝜕𝑦 𝜕𝑥
{ 𝛾𝑧𝑥 } 𝜕𝑣 𝜕𝑤
+
𝜕𝑧 𝜕𝑦
𝜕𝑤 𝜕𝑢
{ 𝜕𝑥 + 𝜕𝑧 }
34
[𝐵] = [𝐵1 𝐵2 𝐵3 𝐵4 ] (16)
𝑁1,𝑥 0 0
0 𝑁1,𝑦 0
0 0 𝑁1,𝑧
𝐵1 = 𝑁 0 (17)
1,𝑦 𝑁1,𝑥
0 𝑁1,𝑧 𝑁1,𝑦
[𝑁1,𝑧 0 𝑁1,𝑥 ]
𝛽1 0 0
0 𝜆1 0
1 0 0 𝛿1
𝐵1 = (18)
6𝑉 𝜆1 𝛽1 0
0 𝛿1 𝜆1
[𝛿1 0 𝛽1 ]
1−𝜐 𝜐 𝜐 0 0 0
𝜎𝑥 𝜐 1−𝜐 𝜐 0 0 0 𝜀𝑥
𝜎𝑦 𝜐 𝜐 1−𝜐 0 0 0 𝜀𝑦
1 − 2𝜐
𝜎𝑧 𝐸 0 0 0 0 0 𝜀𝑧
𝜏𝑥𝑦 = 2 𝛾𝑥𝑦 (20)
(1 + 𝜐)(1 − 2𝜐) 1 − 2𝜐
𝜏𝑦𝑧 0 0 0 0 0 𝛾𝑦𝑧
{ 𝜏𝑧𝑥 } 2 { 𝛾𝑧𝑥 }
1 − 2𝜐
[ 0 0 0 0 0
2 ]
35
Paso 4: Derivación de la matriz de rigidez.
36
5. Definir las condiciones de frontera: Las condiciones de apoyo deben ser
dadas, por ejemplo, si el desplazamiento de ciertos nodos es conocido. Usando los
elementos de la frontera se pueden determinar las reacciones en los mismos.
6. Solucionar el sistema de ecuaciones: En este paso se ensamblan y
resuelven los sistemas de ecuaciones y va a depender del tipo de análisis que se
desee realizar.
7. Visualización y análisis de los resultados: Una vez efectuados los cálculos,
los resultados (esfuerzos, deformaciones, desplazamientos) se presentan de forma
numérica y gráfica para su análisis.
37
del programa de diseño Autodesk Inventor Professional 2015. La geometría
obtenida se exportó en formato SAT para su posterior importación en el software
Abaqus/CAE. Este formato permite importar el ensamble del sistema analizado en
partes independientes para su posterior análisis.
La prótesis de cadera está compuesta por dos partes: una porosa y otra sólida. La
parte porosa de la prótesis es aportada por el vástago, puesto que es la porción del
implante femoral que se encuentra dentro del hueso, y es de interés que sea menos
rígida para así tratar de disminuir el fenómeno de apantallamiento de tensiones. Por
otro lado la parte sólida de la prótesis se encuentra del collar hacia la cabeza, no es
necesaria su porosidad ya que no está en contacto con el tejido óseo y además se
debilitaría de forma innecesaria.
38
(E) y el coeficiente de Poisson (ʋ). Los módulos de elasticidad del Ti6Al4V con
diferentes porcientos de porosidad se calcularon a partir de las ecuaciones (1) y (2)
planteadas en el epígrafe 1.7.4.
Puesto que el fémur se modeló en dos partes, hueso trabecular y hueso cortical es
necesario definir un tipo de interacción para el contacto entre ambos. Teniendo en
cuenta la unión física real que existe entre ambos huesos es posible asignar a los
modelos desarrollados una interacción del tipo Tie cuyo comportamiento simula una
unión inseparable capaz de trasmitir las cargas de un hueso al otro. Este tipo de
unión, por su naturaleza, no brinda variables de salida relacionadas con el contacto.
Por otra parte para establecer la interacción entre el vástago del implante femoral y
el hueso trabecular se emplearon los tipos de interacciones: Tangential behavior y
Normal behavior que establecen el comportamiento tangencial y normal
39
respectivamente. Para el caso del comportamiento tangencial es necesario declarar
un coeficiente de fricción cuyo valor se tomó como 0.3 de acuerdo a [48, 49]. Por
otra parte, el comportamiento normal se declaró de forma tal que permita la
separación de las partes o superficies en contacto.
2.6.4.- Mallado
Según trabajos referidos en la literatura, los elementos empleados con mayor
frecuencia para este tipo de análisis, teniendo en cuenta que el modelo es
tridimensional, son el cubo de 8 y 20 nodos (C3D8 y C3D20 respectivamente) y el
tetraedro de 4 y 10 nodos (C3D4 y C3D10 respectivamente) [41, 50-52]. A causa de
la complejidad que presenta la geometría del modelo desarrollado el tipo de
elemento sólido empleado es el tetraédrico de 4 nodos (C3D4).
40
El análisis de convergencia realizado mediante la disminución del tamaño de los
elementos adyacentes a las superficies de contacto entre el hueso y el implante
femoral se muestra en la Tabla 2.2.
Tabla 2.2 Números de refinamientos realizados y variables que intervienen en el mallado óptimo.
Con el cálculo del error relativo se determinó que solo son necesarios tres
refinamientos. El cuarto refinamiento no es necesario ya que al no hacerlo solo se
incurre en un error menor que 2% (error igual a 1.1%).
En la Figura 2.10 se puede apreciar como a partir del tercer refinamiento se alcanza
la convergencia de los esfuerzos de contacto. De manera similar se puede observar
en el gráfico de la Figura 2.11 como al aumentar el número de elementos disminuye
el valor del error.
40
Esfuerzos de Contacto (MPa)
35
30
25
20
15
10
5
0
300000 400000 500000 600000 700000 800000
# de elementos
41
50
40
Error (%)
30
20
10
0
400000 450000 500000 550000 600000
# de elementos
Figura 2.11 Relación entre el número de elementos y el error de los resultados de la simulación.
42
Al definir el sistema de cargas actuantes, es necesario analizar que las cargas en el
fémur se aplican por los músculos y las fuerzas de contacto en las articulaciones.
La magnitud de la carga y la dirección de cada músculo dependen de la actividad
que se realice. Por tanto, es muy difícil conocer los valores de dichas cargas para
cada músculo y durante cada actividad. Generalmente, en los estudios numéricos
de la mecánica del fémur, se hacen simplificaciones para considerar las principales
fuerzas musculares bajo situaciones críticas [32]. En este trabajo fue adoptado el
sistema de cargas empleado por Goncalves Coelho y colaboradores [55] en su
estudio. En este último, los autores definen además un ciclo típico de marcha
humana (ver Figura 2.13 y Tabla 2.3)
Fx de la unión
Fy de la unión
1000 Fz de la unión
Fx del trocánter
500 Fy del trocánter
Fz del trocánter
0
Fuerzas (N)
-500
-1000
-1500
-2000
1 2 3 4 5
Casos de carga
Tabla 2.3 Componentes de las fuerzas que intervienen en el sistema Prótesis-Fémur. (Tomado de
[55]).
43
En los modelos desarrollados se aplican las fuerzas concentradas en: la cabeza de
la prótesis producto a las fuerzas que intervienen en la articulación (Fuerza de la
unión) y en el trocánter mayor (Fuerza del trocánter) producto a las fuerzas
musculares que intervienen en el fémur (ver Figura 2.14). Solo se analizan las
cargas que provienen del músculo que incide en el trocánter mayor por tener la
magnitud de fuerza más crítica en comparación al resto. Para la colocación de las
cargas en el ABAQUS/CAE luego de la generación de la malla se seleccionan un
conjuntos de nodos en los que actuarán las fuerzas concentradas (ver Figura 2.14
A). Esta estrategia fue adoptada con el fin de distribuir las fuerzas concentradas
para evitar posibles puntos críticos en los resultados, producto a la aplicación de
cargas puntuales. Una vez creados los conjuntos de nodos se ingresan los datos de
las fuerzas al programa percibiendo claramente en la interfaz gráfica las direcciones
de los vectores de las fuerzas (ver Figura 2.14 B).
Figura 2.14 Sistema de cargas aplicado en el modelo. (A) Conjunto de nodos donde se colocan las
fuerzas concentradas. (B) Representación vectorial de las fuerzas actuantes en el sistema
Prótesis-Fémur (Caso 1).
44
Capítulo 3. Análisis de Resultados y Discusión
3.1.- Introducción
Este capítulo está dirigido a la interpretación de los resultados obtenidos en el
análisis del modelo del complejo prótesis-fémur una vez realizada la metodología
descrita en el epígrafe 2.6. De las simulaciones realizadas se extrajeron las
variables que son de interés para esta investigación, como son los esfuerzos de
contacto (permite evaluar el grado de esfuerzos que favorecen la osteointegración)
y los esfuerzos máximos de Von Mises (permite evaluar las regiones más críticas).
Porosidad del
Modelo
vástago (%)
1 0
2 20
3 30
4 40
5 50
6 60
45
Figura 3.1 Gráfico de esfuerzo vs densidad para evaluar áreas de sobrecarga, crecimiento y baja
carga en el tejido óseo. [50]
46
Ti6Al4V sólido
40 Ti6Al4V 20%
Ti6Al4V 30%
Ti6Al4V 40%
Esfuerzos de contacto (MPa) 35 Ti6Al4V 50%
Ti6Al4V 60%
30
25
20
15
1 2 3 4 5
Casos de cargas
Figura 3.2 Gráfico del comportamiento de máximos esfuerzos de contacto vs casos de carga, de
acuerdo al grado de porosidad del vástago.
De la Figura 3.2 se puede deducir que los mayores esfuerzos de contacto son
provocados por los casos de carga dos y cuatro perteneciente al ciclo de marcha
estudiado. También percibe que para un mismo caso de carga disminuyen los
máximos esfuerzos producto al grado de porosidad que presenta el vástago del
implante. Es válido destacar que para los casos de cargas tres y cuatro con
porosidad de 50% y 60% no se aprecian diferencias significativas en cuanto a los
valores máximos del esfuerzo de contacto.
En la Figura 3.3 se muestran las zonas donde el hueso hace contacto con el
implante femoral. Esta imagen es el resultado de un corte vertical realizado al hueso
trabecular para mostrar la distribución de los esfuerzos en la cavidad donde se aloja
la prótesis. La escala de colores fue ajustada de forma tal que se muestran las zonas
que favorecen la osteointegración (esfuerzos entre 0.1 MPa y 5.8MPa). Nótese que
las zonas oscuras corresponden a esfuerzos menores de 0.1MPa, por lo cual son
zonas que provocan reabsorción del tejido óseo por baja carga. Los casos de carga
mostrados en la mencionada imagen son el caso 2 y el caso 1 ya que son los casos
47
donde se obtienen las mayores y las menores áreas donde se favorece la
osteointegración respectivamente.
48
Tabla 3.2 Porcentaje de área que favorece la osteointegración.
A partir de los datos mostrados en la Tabla 3.2 y para facilitar el análisis se construyó
el grafico de la Figura 3.4. En el mismo se aprecia el efecto del porciento de la
porosidad del vástago de la prótesis sobre el proceso de crecimiento del tejido óseo.
Al aumentar el grado de porosidad del vástago protésico se observa un aumento
del área que propicia el crecimiento óseo, siendo evidente que los mayores
porcentajes de área corresponden a los vástagos de 40, 50 y 60% de porosidad.
75 Ti6Al4V sólido
20% de porosidad
Área que favorece osteointegración (%)
30% de porosidad
70 40% de porosidad
50% de porosidad
60% de porosidad
65
60
55
50
1 2 3 4 5
Casos de cargas
Figura 3.4 Porciento de área que favorece osteointegración vs los casos de cargas para cada uno
de los grados de porosidad.
49
Al analizar el ciclo de marcha completo se observan zonas en las cuales se alcanza
la osteointegración durante todo el ciclo. Sin embargo, para cada caso de carga en
particular se aprecian zonas que favorecen la osteointegración y que no se
encuentran en el resto de los casos. Teniendo estos aspectos en cuenta, se analizó
la cantidad de área total que favorece la osteointegración durante el ciclo completo
de marcha. Es decir, se tuvieron en cuenta todas las áreas que favorezcan la
osteointegración aunque algunas de ellas solo aparezcan en uno de los casos de
carga. De esta manera se puede realizar un análisis con mayor claridad de la
influencia del porciento de porosidad del vástago del implante femoral en el
porciento de áreas en las que se favorece la osteointegración. En la Figura 3.5 se
aprecia dicho comportamiento, observándose, de forma general, que a medida que
aumenta el porciento de porosidad aumenta el porciento de áreas de
osteointegración. Nótese también que los porcientos de áreas que favorecen la
osteointegración durante el ciclo completo de marcha son ligeramente superiores a
los obtenidos para el caso dos de carga. Esto último ratifica que dicho caso de carga
es el de mayor influencia en la osteointegración.
74
Área que favorece crecimiento óseo (%)
73
72
71
70
69
68
67
0 10 20 30 40 50 60
Porosidad del vástago (%)
Figura 3.5 Relación entre el área que favorece el crecimiento óseo y la porosidad del vástago de la
prótesis para el ciclo de marcha completo.
50
En la Figura 3.6 se muestra de acuerdo a la escala de colores de Abaqus/CAE la
distribución de los esfuerzos de contacto que corresponden al favorecimiento del
crecimiento del tejido óseo. En la misma se comparan los resultados obtenidos para
un mismo sistema de cargas (cuarto caso) pero con diferentes porcientos de
porosidades del vástago (casos extremos: vástago sólido y vástago con 60% de
porosidad). En esta imagen se evidencia lo planteado anteriormente; es decir que
para el caso del vástago con 60% de porosidad, hay una mayor área en el hueso
donde están presentes los esfuerzos que propician la osteointegración. También se
perciben las zonas de reabsorción ósea (zonas oscuras); abarcando mayor área en
el caso del vástago sólido.
La diferencia entre los porcientos del área que propicia crecimiento del hueso para
los casos de porosidad extremos (0% y 60%) se puede explicar a partir de la
diferencia que existe en el módulo elástico para ambos casos (E0% porosidad – E60%
porosidad = 92400 MPa). Como se explicó anteriormente, la reabsorción ósea es
51
principalmente causada por los esfuerzos de apantallamiento (stress shielding).
Reducir la diferencia entre el módulo elástico de la prótesis y el del hueso,
teóricamente, debería atenuar el fenómeno de stress shielding, por consiguiente,
tiende a reducir las áreas de reabsorción ósea.
74
Área que favorece osteointegración (%)
73
72
71
70
69
68
67
20 40 60 80 100 120
Módulo de elasticidad del vástago (GPa)
Figura 3.7 Gráfico de área de crecimiento vs módulo de elasticidad equivalente del vástago
protésico, de acuerdo al grado de porosidad.
52
misma se puede observar que no existen cambios significativos a medida que varía
el grado de porosidad. Esto se debe a que el vástago de la prótesis no se encuentra
en contacto con este hueso, por lo que las cargas son distribuidas desde la prótesis
al hueso cortical a través del hueso trabecular. También se puede apreciar que el
segundo caso de carga es el causante de los mayores esfuerzos, con valores
máximos entre 110.38MPa y 110.44MPa para el vástago con 60% de porosidad y
el vástago sólido respectivamente. Sin embargo todos los esfuerzos obtenidos son
menores que el esfuerzo al cual falla el hueso cortical (150 MPa), por lo tanto dicho
hueso no presenta riesgos de falla bajo el sistema de cargas utilizado en este
estudio.
Tabla 3.3 Resultados de los esfuerzos de Von Mises para el hueso cortical.
Casos de carga
% de porosidad 1 2 3 4 5
Esfuerzos (MPa)
0 31,86 110,44 80,16 62,58 49,83
20 31,85 110,42 80,15 62,57 49,83
30 31,84 110,41 80,15 62,56 49,83
40 31,83 110,40 80,14 62,55 49,83
50 31,82 110,38 80,13 62,54 49,83
60 31,81 110,38 80,13 62,53 49,83
53
Figura 3.8 Resultados de los esfuerzos de Von Mises en el hueso cortical, para el segundo caso de
cargas y vástago sólido. (A) Esfuerzos en el trocánter mayor. (B) Distribución de esfuerzos en la
zona distal.
54
Tabla 3.4 Resultados de los esfuerzos obtenidos en el hueso trabecular.
Casos de cargas
% de porosidad 1 2 3 4 5
Esfuerzos (MPa)
0 10,66 24,37 23,66 23,99 21,26
20 10,41 22,45 21,88 22,18 15,54
30 10,17 21,28 20,77 21,05 14,83
40 9,79 19,92 19,47 19,71 13,95
50 9,18 14,71 17,87 14,51 12,82
60 8,18 12,75 13,81 16,76 11,14
Figura 3.9 Zonas de máximos esfuerzos en el hueso trabecular durante el segundo sistema de
cargas. (A) Corresponde a los esfuerzos obtenidos para el vástago sólido. (B) Resultados de los
esfuerzos para un vástago protésico con 60% de porosidad.
55
3.3.3.- Comportamiento de los esfuerzos en la prótesis de cadera
En este estudio se simuló una prótesis de cadera híbrida (una parte sólida y otra
porosa). Como se conoce, los criterios de fallas para cada parte son completamente
diferentes. Con el fin de realizar un análisis de resistencia más detallado se procede
a examinar cada parte por independiente.
Casos de cargas
% de porosidad 1 2 3 4 5
Esfuerzos (MPa)
0 55,80 113,29 108,81 126,14 51,78
20 59,14 95,95 105,48 132,14 46,97
30 61,28 93,68 108,19 135,64 48,40
40 63,86 125,88 112,58 141,38 49,83
50 67,03 132,48 118,68 149,23 51,16
60 70,89 141,77 126,13 157,91 56,98
Como se conoce, la resistencia del vástago del implante disminuye a medida que
aumenta el grado de porosidad del mismo. En la Tabla 3.6 se muestran los máximos
esfuerzos de Von Mises correspondientes al vástago de la prótesis. Se distingue
que los máximos valores se presentan para el caso de carga cuatro. Además se
percibe que para el 50 y 60% de porosidad, los valores de esfuerzos sobrepasan
los límites elásticos respectivos. Siendo evidente que el vástago de la prótesis para
los porcientos mencionados no cumple con la condición de resistencia establecida
de acuerdo al sistema de cargas actuantes en esta investigación.
56
Tabla 3.6 Distribución de esfuerzos de Von Mises en el vástago poroso de la prótesis.
En la Figura 3.10 se puede apreciar la distribución de los esfuerzos para las prótesis
con vástago con 50 y 60% de porosidad bajo el caso de carga cuatro. Nótese que
en la parte sólida (por encima del collar de la prótesis), los esfuerzos son inferiores
a los del titanio sólido, sin embargo por debajo del mismo (parte porosa) se alcanzan
esfuerzos mayores a los admitidos por el material poroso.
Figura 3.10 Zonas de esfuerzos críticos en el vástago poroso para el cuarto caso de carga. (A)
Corresponde a un 50% de porosidad y (B) para uno de 60%. (En la ampliación se puede observar
la localización de los máximos esfuerzos en el vástago poroso).
57
Al analizar la distribución de los esfuerzos en el vástago de la prótesis con 40% de
porosidad y bajo el caso de carga cuatro se observa que los esfuerzos se
encuentran cercanos al límite elástico del material pero no llegan a alcanzar dicho
valor (ver Figura 3.11 A). Es posible observar también que los mayores valores de
esfuerzos en el vástago, se encuentran en la zona cercana al cuello de la prótesis,
para todos los casos de carga. En la Figura 3.11 se pueden apreciar los casos de
carga en los que se alcanzan los mayores y los menores valores de los esfuerzos
máximos; caso de carga cuarto y quinto respectivamente.
Figura 3.11 Distribución de esfuerzos en el vástago con 40% de porosidad. En las ampliaciones se
aprecian dónde están los máximos esfuerzos: (A) bajo el sistema de cargas mayor (cuarto) y (B)
bajo el menos cargado (quinto).
0,7
Bone volume percentage with density loss (%)
0,6
0,5
0,4
0,3
0,2
0,1
0,0
m
%
iu
20
30
40
50
60
n
ta
m
Ti
iu
iu
iu
iu
iu
n
n
lid
ta
ta
ta
ta
ta
Ti
Ti
Ti
Ti
Ti
So
us
us
us
us
us
ro
ro
ro
ro
ro
Po
Po
Po
Po
Po
Figura 3.12 Relación del porcentaje de volumen del hueso trabecular con pérdida de densidad vs
grado de porosidad del material de la prótesis.[32]
59
El aumento del grado de porosidad disminuye el módulo elástico del material y por
ende el esfuerzo de fluencia como se ha explicado anteriormente. Por tal motivo en
el artículo de comparación utilizan los esfuerzos equivalentes de Von Mises para
determinar el comportamiento de la prótesis en respuesta al estímulo provocado por
las cargas actuantes. En la Tabla 3.7 se muestran los valores de los máximos
esfuerzos equivalentes en la prótesis para cada grado de porosidad del material y
los esfuerzos de fluencia estimados en el propio artículo.
Tabla 3.7 Esfuerzos máximos de Von Mises y esfuerzos de fluencias estimados para las espumas
de titanio con diferentes porosidades.[32]
60
Capítulo 4. Análisis Económico
Para determinar el costo total requerido para la realización del presente trabajo de
diploma fue necesario analizar los diferentes elementos involucrados, desde la
etapa inicial hasta su culminación, considerando tanto el salario del personal técnico
involucrado, como los gastos relacionados con la tecnología e insumos empleados
para el proceso de simulación.
El costo total del trabajo de diploma desarrollado (CT), se puede estimar sumando
las componentes del costo directo (CD) y del costo indirecto (CI):
𝐶𝑇 = 𝐶𝐷 + 𝐶𝐼 (22)
El CD encierra todos los costos que influyen de forma directa en el trabajo a realizar.
Está dado por el siguiente conjunto de factores combinados en la ecuación 23.
𝐶𝐷 = 𝑆𝐵 + 𝑆𝐶 + 𝑆𝑆 + 𝑀𝐷 + 𝑂𝐺 (23)
𝑆𝐵 = ∑ 𝐴𝑖 ∗ 𝐵𝑖 (24)
𝑖=1
61
En la Tabla 4.1 se muestran los datos de los salarios de cada participante en el
proyecto además de los días dedicados por cada uno a la investigación.
𝑀𝐷 ≈ $ 2000 𝐶𝑈𝑃
Una vez realizado todos los cálculos necesarios para obtener los datos que
intervienen en el CD se sustituyen en la ecuación 23, dando como resultado:
𝐶𝐷 = $ 3835.63
62
CI: Costo Indirecto. En éste se agrupan todos aquellos costos que intervienen de
forma indirecta en el trabajo a realizar. Se refiere a la electricidad consumida,
administración, instalaciones en el proceso de investigación. El coeficiente de
gastos para una unidad docente es de 0.84 y para una unidad de ciencias y técnica
(UCT) es de 1.4063.[2]
𝐶𝐼 = $ 948.95
𝐶𝑇 = $ 3835.63 + $ 948.95
𝐶𝑇 = $ 4784.58
63
Conclusiones
Con las simulaciones de los modelos del sistema prótesis-fémur desarrollados en
esta investigación se pudo apreciar que:
64
Recomendaciones
Evaluar, a partir del estudio desarrollado, la ganancia y pérdida de densidad
ósea.
Incluir otros criterios de análisis como las deformaciones y los
micromovimientos por su influencia en la remodelación ósea.
Realizar estudios donde se utilice un mayor número de grados de porosidad,
principalmente a partir de 30% de porosidad.
Simular el fémur con propiedades mecánicas anisotrópicas.
Simular prótesis de cadera porosas con variaciones en la geometría del
diseño.
65
Referencias Bibliográficas
1. Henández Morales, M.J. Análisis de la distribución de esfuerzos, mediante
elementos finitos, de una prótesis total de cadera AML Depuy no cementada
reemplazada por falla.: Universidad de Oriente ¨Núcleo de Anzóategui¨.
2009, Tutores: C. Gomes and G. Lopez.
2. Vaillant Sánchez, S. Análisis de endoprotesis de cadera utilizando el Método
de Elementos Finitos: Instituto Superior Politécnico José Antonio Echeverría;
2012, Tutor: M. Rodríguez Madrigal.
3. Tojal, C., V. Amigó, and J.A. Calero, Fabricación y caracterización de
aleaciones porosas de Ti y Ti6Al4V producidas mediante sinterización con
espaciador. Revista de Metalurgia, 2013. 49(1), ISSN: 0034-8570, DOI:
10.3989/revmetalm.1206.
4. Ryan, G., A. Pandit, and D. Panagiotis Apatsidis, Fabrication methods of
porous metals for use in orthopaedic applications. Biomaterials, 2006. 27,
ISSN: 0142-9612, DOI: 10.1016/j.biomaterials.2005.12.002.
5. Joshi, M.G., S.G. Advani, F. Miller, and M.H. Santare, Analysis of a femoral
hip prosthesis designed to reduce stress shielding. JOURNAL OF
BIOMECHANICS, 2000. 33, ISSN: 0021-9290, DOI: 10.1016/S0021-
9290(00)00110-X.
6. Torres, Y., S. Lascano, J. Bris, J. Pavón, and J.A. Rodriguez, Development
of porous titanium for biomedical applications: A comparison between loose
sintering and space-holder techniques. Journal Materials Science and
Engineering C, 2014. 37, ISSN: 0928-4931, DOI:
10.1016/j.msec.2013.11.036.
7. Torres, Y., J.J. Pavón, and J.A. Rodríguez, Processing and characterization
of porous titanium for implants by using NaCl as space holder. Journal of
Materials Processing Technology, 2012. 212: p. 1061-1069, ISSN: 0924-
0136, DOI: 10.1016/j.jmatprotec.2011.12.015.
8. Torres, Y., J.A. Rodríguez, S. Arias, M. Echeverry, S. Robledo, V. Amigo, and
J.J. Pavón, Processing, characterization and biological testing of porous
titanium obtained by space-holder technique. Journal of Materials Science,
2012. 47: p. 6565-6576, ISSN: 0022-2461, DOI: 10.1007/s10853-012-6586-
9.
9. Takemotoa, M., S. Fujibayashia, M. Neoa, J. Suzukib, T. Kokuboc, and T.
Nakamura, Mechanical properties and osteoconductivity of porous bioactive
titanium. Biomaterials, 2005. 26, ISSN: 0142-9612, DOI:
10.1016/j.biomaterials.2005.03.019.
10. Pérez Pozo, L., F. Briones Picheira, S. Lascano Farak, and C. Aguilar
Ramírez, Análisis de esfuerzos mediante el método de elementos finitos de
implantes dentales de titanio poroso. Revista Ingeniería y Desarrollo, 2015.
33(1), ISSN: 0122-3461, DOI: 10.14482/inde.33.1.6153.
66
11. Fresquet Garrastazu, J.C. Análisis del comportamiento material de una
prótesis de cadera Furlong.: Instituto Superior Politécnico José Antonio
Echeverría; 2012, Tutor: M. Rodríguez Madrigal.
12. Oosterwyck, H.V., J. Duyck, J.V. Sloten, G. Van der Perre, M. De Cooman,
S. Lievens, R. Puers, and I. Naert, The influence of bone mechanical
propierties an implants fixations upon bone loading around oral implants.
Journal Clinical Oral implants research, 1998. 9, ISSN: 0905-7161.
13. Geng, J.-P., K.B.C. Tan, and G.-R. Liu, Application of finite element analysis
in implant dentistry: A review of the literature. The Journal of Prosthetic
Dentistry, 2001. 85(6): p. 585-598, ISSN: 0022-3913, DOI:
10.1067/mpr.2001.115251.
14. ALVAREZ VERA, M. DISEÑO Y DESARROLLO DE UNA PRÓTESIS DE
ALTO DESEMPEÑO FUNCIONAL Y TRIBOLÓGICO: UNIVERSIDAD
AUTÓNOMA DE NUEVO LEÓN; 2012, Tutores: A. Juárez Hernández and A.
Pérez Unzueta.
15. Netter, F.H., Atlas de anatomía humana, ed. T. edición. 2006.
16. Ojeda Díaz, C.J. Estudio de la influencia de estabilidad primaria en el diseño
de vástagos de protesis femorales personalizadas: aplicación a paciente
específico [Tesis de Doctorado]: ESCUELA TECNICA SUPERIOR DE
INGENIEROS INDUSTRIALES; 2009.
17. Moore, K.L. and A.F. Dalley, Anatomía con orientación clínica. ISBN: 950-06-
1574-684-7903-534-X.
18. Michael, L., M.D. Richardson, C. Carol, and M.D. Teitz, Lower extremity
muscle atlas.
19. Rincón Rincón, E., A. Ros Felip, R. Claramunt Alonso, and F. Arranz Merino,
CARACTERIZACIÓN MECÁNICA DEL MATERIAL ÓSEO. Revista de
Ciencia, Tecnología y Medio Ambiente, 2004. 2, ISSN: 1696-8085.
20. Lopez, R.R. Aplicación de la ingeniería inversa para el diseño y desarrollo de
una hemi-artroplastia de articulación coxofemoral: ESCUELA SUPERIOR DE
INGENIERÍA MECÁNICA Y ELÉCTRICA UNIDAD AZCAPOTZALCO; 2012,
Tutores: E.E. Galindo Carreño and R. Centeno Gutierrez.
21. García Aznar, J.M. Modelos de remodelación ósea: análisis numérico y
aplicaciones al diseño de fijaciones del fémur proximal. 1999, Tutor: M.
Doblare Castellano.
22. Contreras, G. and M. Cerrolaza, Herramientas numéricas utilizadas para el
desarrollo de dispositivos biomédicos en el tratamiento de lesiones humanas
2002.
23. Pérez Pino, D. Análisis de la Interacción entre el Hueso Femoral y una
Prótesis de Cadera utilizando el Método de Elementos Finitos: Instituto
Superior Politécnico José Antonio Echeverría; 2014, Tutor: M. Rodríguez
Madrigal.
67
24. Ríos Luna, A. Prótesis total de cadera. 2016; Available from:
www.protesiscaderarodilla.com.
25. Albornoz, J.C., Prótesis de Cadera. Respuesta a sus preguntas más
frecuentes. 2008.
26. Cabrera Peralta, R.R. Metodología para la ingeniería concurrente de una
prótesis de cadera.: Instituto Superior Politécnico José Antonio Echeverría.;
2014, Tutor: M. Rodríguez Madrigal.
27. Rico Martinez, G., V. Dominguez H., and J.A. Muller, Diseño de una prótesis
no convencional bloqueada para cadera (RIMAG) a partir de mediciones de
fémures mexicanos. 2008. 22(2).
28. MANI, G., M.D. FELDMAN, D. PATEL, and C.M. AGRAWAL, Coronary
stents: A materials perspective. Biomaterials, 2007. 28: p. 1689-1710, ISSN:
0142-9612, DOI: 10.1016/j.biomaterials.2006.11.042.
29. Bronzino, J.D., Biomedical Engineering Fundamentals. 2000.
30. Van Bael, S., G. Kerckhofs, M. Moesen, G. Pyka, J. Schrooten, and J.P.
Kruth, Micro-CT-based improvement of geometrical and mechanical
controllability of selective laser melted Ti6Al4V porous structures. Materials
Science and Engineering A, 2011. 528, ISSN: 0921-5093, DOI:
10.1016/j.msea.2011.06.045.
31. Parthasarathya, J., B. Starlya, S. Ramana, and A. Christensen, Mechanical
evaluation of porous titanium (Ti6Al4V) structures with electron beam melting
(EBM). Journal of the Mechanical Behavior of Biomedical Materials, 2010. 3,
ISSN: 1751-6161, DOI: 10.1016/j.jmbbm.2009.10.006.
32. Yan, W., J. Berthe, and C. Wen, Numerical investigation of the effect of
porous titanium femoral prosthesis on bone remodeling. Materials and
Design, 2011. 32, ISSN: 0261-3069, DOI: 10.1016/j.matdes.2010.12.042.
33. Kashef, S., W. Yan, J. Lin, and P. Hodgson, Mechanical properties of titanium
form for biomedical applications. 2008. 22(31n32): p. 6155-6160, ISSN: 0217-
9792.
34. Dewidar, M.M. and J.K. Lim, Properties of solid core and porous surface Ti –
6Al – 4V implants manufactured by powder metallurgy. Journal of Alloys and
Compounds, 2008. 454: p. 442-446, ISSN: 0925-8388, DOI:
10.1016/j.jallcom.2006.12.143.
35. Sallica-Leva, E., A.L. Jardini, and J.B. Fogagnolo, Microstructure and
mechanical behavior of porous Ti–6Al–4V parts obtained by selective laser
melting. Journal of the Mechanical Behavior of Biomedical Materials 2013.
26, ISSN: 1751-6161, DOI: 10.1016/j.jmbbm.2013.05.011.
36. Materialise, Mimics Student Edition Course Book.
37. Linares González, L.L. Metodología computacional para la obtención de un
modelo geométrico vectorizado a partir de imágenes médicas: Instituto
68
Superior Politécnico José Antonio Echeverría 2014, Tutor: M. Rodríguez
Madrigal.
38. García de la Figal, J., Simulación por el Método de los Elementos Finitos La
Habana. 285.
39. Boccaccio, A., A. Ballini, C. Pappalettere, D. Tullo, CantoreS, and A. Desiate,
Finite Element Method (FEM), Mechanobiology and Biomimetic Scaffolds in
Bone Tissue Engineering. International Journal of Biological Sciences, 2011.
7(1): p. 112-132.
40. Gozález Sánchez, D.R. Modelación de Implantes Dentales en Maxilares con
Calidad Ósea Tipo IV [Tesis de diploma]. La Habana, Cuba: Instituto Superior
Politécnico José Antonio Echeverría; 2013, Tutores: P. Sarria Popowski and
J.E. González Ruíz.
41. Alberich-Bayarri, Á., D. Moratal, L. Martí-Bonmatí, M. Salmerón-Sánchez, A.
Vallés-Lluch, L. Nieto-Charques, and J.J. Rieta, Volume Mesh Generation
and Finite Element Analysis of Trabecular Bone Magnetic Resonance
Images. 29th Annual International Conference of the IEEE EMBS, 2007,
ISSN: 1-4244-0788-5.
42. Rodriguez Madrigal, M., Elementos Finitos en EstadoTridimencional de
Tensiones., in Elementos 3D. 2010.
43. Turner, A.W.L., R.M. Gillies, R. Sekel, P. Morris, W. Bruce, and W.R. Walsh,
Computational bone remodelling simulations and comparisons with DEXA
results. Journal of Orthopaedic Research, 2005. 23: p. 705-712, ISSN: 0736-
0266, DOI: 10.101 6/j.orthres.2005.02.002.
44. Rohlmann, A., U. Mossner, G. Bergmann, and R. Kolbel, FINITE-ELEMENT-
ANALYSIS AND EXPERIMENTAL INVESTIGATION OF STRESSES IN A
FEMUR. Biomedical Engeeniering, 1982. 4, ISSN: 0141-5426, DOI: 0141-
5426/82/080241-06.
45. GIL, F.J. and J.A. PLANELL, Aplicaciones biomédicas del titanio y sus
aleaciones. Biomecánica.
46. Ridzwan, M.I.Z., S. Shuib, A.Y. Hassan, A.A. Shokri, and M.N. Mohamad
Ibrahim, Problem of Stress Shielding and Improvement to the Hip Implant
Designs. Journal of Medical Science, 2007. 7(3), ISSN: 1682-4472.
47. Black, J. and G. Hastings, Handbook of Biomaterial Properties, ed.
I.o.M.R.a.E.N.U.o. Singapore. 1998, London: Chapman & Hall, ISBN: 0 412
603306.
48. Fan, N., G.X. Chen, and L.M. Qian, Analysis of squeaking on ceramic hip
endoprosthesis using the complex eigenvalue method. Journal Wear, 2011.
271, ISSN: 0043-1648, DOI: 10.1016/j.wear.2010.12.024.
49. Fan, N. and G.X. Chen, Numerical study of squeaking suppresses for
ceramic-on-ceramic hip endoprosthesis. Journal Tribology International,
2012. 48, ISSN: 0301-679X, DOI: 10.1016/j.triboint.2011.11.023.
69
50. Li, J., H. Li, S. Li, A.S.L. Fok, C. Ucer, H. Devlin, K. Horner, and N. Silikas, A
mathematical model for simulating the bone remodeling process under
mechanical stimulus. Dental Materials, 2007. 23, ISSN: 1073–1078, DOI:
10.1016/j.dental.2006.10.004.
51. Dickinson, A.S., Activity and Loading Influence the Predicted Bone
Remodeling Around Cemented Hip Replacement. Biomechanical
Engineering, 2014. 136, ISSN: 041008-1.
52. Duda, G.N., M. Heller, J. Albinger, O. Schulz, E. Schneider, and L. Claes,
Influence of muscle forces on femoral strain distribution. Journal of
Biomechanics, 1998, ISSN: 0021-9290, DOI: S0021-9290(98)00080-3.
53. Rogríguez Madrigal, M., Introducción al Método de Elementos Finitos, in
Desarrollo histórico del método de elementos finitos. 2014.
54. Gervaso, F., C. Capelli, L. Petrini, S. Lattanzio, L. Di Virgilio, and F.
Migliavacca, On the effects of different strategies in modelling balloon-
expandable stenting by means of finite element method. Journal of
Biomechanics, 2008. 41, ISSN: 0021-9290, DOI:
10.1016/j.jbiomech.2008.01.027.
55. Goncalves Coelho, P., P. Rui Fernandes, and H. Carrico Rodrigues,
Multiscale modeling of bone tissue with surface and permeability control.
Journal of Biomechanics, 2011. 44: p. 321-329, ISSN: 0021-9290, DOI:
10.1016/j.jbiomech.2010.10.007.
56. Buroni, F., P. Commisso, A. Cisilino, and M. Sammartino, Determinación de
las constantes elásticas anisótropas del tejido óseo utilizando tomografías
computadas. Aplicación a la construcción de modelos de elementos finitos.
Mecánica Computacional, 2004. 23.
70