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ESCUELA POLITÉCNICA NACIONAL

LENGUAJE Y COMUNICACIÓN
SEMESTRE 2019A
COMPRENSIÓN LECTORA
Lectura
La lectura es un proceso dinámico en el que un sujeto obtiene información de un texto. Por
tanto, leer es un proceso de interacción entre el lector y el texto, proceso mediante el cual el
primero intenta satisfacer los objetivos que guían su lectura (Solé,1987). Esta afirmación
implica la presencia de un lector activo que procesa y examina el texto.
A su vez se puede considerar a la lectura como un proceso mediante el cual se comprende el
lenguaje escrito. En esta comprensión interviene tanto el texto, su forma y su contenido, como
el lector, sus expectativas y sus conocimientos previos.
Comprensión lectora
Es importante señalar que el proceso de lectura se vuelve efectivo cuando el mismo sirve para
comprender. De tal manera que leer es comprender, y comprender es ante todo un proceso de
construcción de significados acerca del texto que se pretende comprender. Es un proceso que
implica la participación del lector, en la medida en que la comprensión que realiza no es un
derivado de la recitación del contenido.

PROCESO DE LECTURA
El modelo interactivo de lectura plantea que el proceso de lectura es la relación que mantiene el
lector con el texto. Para ejecutarlo el lector se sitúa ante el texto, de esta manera los elementos
que lo componen generan en él expectativas a distintos niveles (el de las letras, las palabras…)
la información que se procesa en cada uno de ellos funciona como un input para el nivel
siguiente; así, a través de un proceso ascendente, la información se propaga hacia niveles más
elevados.
Prelectura son todas las actividades que realiza el lector previo a realizar la lectura como tal.
Esta etapa le permite al mismo tener una primera aproximación, y vínculo con el texto. Brinda
la posibilidad de: familiarizarse con el texto, tener una visión general del texto, activar
conocimientos previos, activar contextos, valorar experiencias y creencias, relacionar los
elementos que componen el texto para comprender el sentido de este en su totalidad, construir
nuevos conocimientos.
Lectura es un proceso delicado en el que intervienen algunos elementos relacionados con: tipo
de texto, función del lenguaje, nivel de lenguaje, propósito comunicativo, tono del autor, etc. En
esta etapa el lector extrae información esencial que le permitirá concretar el objetivo de la
lectura.
Pos lectura, momento en el que el lector asimila, procesa, organiza y propone los frutos de la
lectura. Esta nueva información que se ha asimilado se puede proyectar de diferentes formas,
siendo los esquemas el recurso más útil dicho propósito. En este punto el lector puede realizar
una evaluación del texto y una autoevaluación de su proceso de lectura como tal.

ESTRATEGIAS DE LECTURA
Una estrategia está definida como un conjunto de acciones ordenadas y programadas dirigidas a
la consecución de una meta. La aplicación de cada una de ellas garantiza el cumplimiento de
los objetivos de la lectura.

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Estrategias de prelectura
a) Los objetivos de la lectura

El tema de los objetivos que el lector se propone lograr con la lectura es crucial, porque
determina tanto las estrategias responsables de la comprensión como el control que de forma
inconsciente va ejerciendo sobre ella, a medida que lee.

 Leer para obtener una información precisa


Se puede afirmar que este tipo de lectura se caracteriza por ser muy selectiva por su
rapidez, cuando “se pasa la mirada” por la información no pertinente y, a la vez,
minuciosa, cuando se encuentra lo que se busca

 Leer para seguir instrucciones


En este tipo de tarea, la lectura es un medio que debe permitir hacer algo concreto,
para lo cual es necesario: leer las instrucciones que regulan un examen, las reglas de
uso de un espacio, recetas, las consignas que rigen una participación.

 Leer para obtener una información de carácter general


Es la lectura que tiene lugar cuando se quiere saber “de qué se trata” un texto, “saber
qué pasa”, ver si interesa seguir leyendo…

 Leer para aprender


En este caso la lectura adquiere unas características distintas a las formas de leer
precedidas por otros objetivos. Suele ser una lectura lenta, y, sobre todo, repetida.

b) Activar el conocimiento

Este proceso se remite al bagaje con el que el lector se enfrenta al texto. Este condiciona
enormemente la interpretación que se construye, y no es asimilable únicamente a los conceptos
y sistemas conceptuales del lector, sino que está constituido también por las expectativas,
intereses, vivencia, por todos los aspectos más relacionados con el ámbito afectivo, y que
intervienen en la atribución de sentido a lo que se lee.
c) Establecer predicciones sobre el texto

Es importante que un lector tome un papel activo frente al texto y en este aspecto juega un papel
importante las predicciones. Estas permiten que el lector pueda posicionarse y genere
aportaciones al mismo texto que recaerán en su propia comprensión de este. Así, formular una
predicción consiste en generar hipótesis que no necesariamente tienen que ser exactas con el
contenido del texto, pero que siempre tienen un marco referencial ya que parte de la
aproximación inicial del lector al texto y vienen sustentadas por la información disponible –
título e ilustraciones.
d) Preguntas acerca del texto

Cuando los lectores plantean preguntas pertinentes sobre el texto, no sólo están haciendo uso de
su conocimiento previo sobre el tema, sino que, tal vez sin proponérselo, se hacen conscientes

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de lo que saben y lo que no saben acerca de ese tema. Además, así se dotan de objetivos
propios, para los cuales tiene sentido el acto de leer.

Estrategias durante la lectura


Es importante señalar que, si bien el proceso previo a la lectura es importante para que el lector
tenga una guía clara de su proceder, el grueso de la actividad comprensiva – y el grueso del
esfuerzo del lector – tiene lugar durante la lectura misma. Por tal razón el uso de estrategias que
tienen lugar durante dicho proceso se vuelve fundamental ya sea para ir construyendo una
interpretación plausible del texto, ya sea para ir resolviendo los problemas que aparecen en el
curso de la actividad.
a) Los errores y lagunas de comprensión

Dentro del proceso de lectura es muy probable que en su ejecución se presenten errores (falsas
interpretaciones) y las lagunas en la comprensión (la sensación de no comprender). Frente a
estos problemas pueden aparecer distintas soluciones. Tal es el caso de la interrupción drástica
de la lectura (por ejemplo, ante una palabra desconocida, consultar en el diccionario o
preguntar) solo se justifica si la palabra en cuestión es crítica, es decir, absolutamente
imprescindible, para comprender el texto. Cuando una frase, palabra o fragmento no parece
esencial para la comprensión del texto, la acción más inteligente que los lectores pueden optar
es ignorarla y continuar leyendo. Hay que considerar que si esta palabra, frase o fragmento es
constante y repetitivo en el texto es necesario releer el mismo.
b) El subrayado

Esta actividad es importante enseñarla de forma adecuada para evitar que dicha técnica se
convierta en un distractor de la comprensión. Para realizarla de manera adecuada, hay que
aclarar a los lectores que lo que se ha de subrayar tiene que constituir un parte esencial del texto.
Esta discriminación parte de la comprensión particular del texto y de la habilidad del lector de
diferenciar y jerarquizar ideas presentes en el mismo.
c) Las inferencias

Se entiende por inferencia a un proceso en el que el lector extrae información del texto que parte
de las relaciones entre sus elementos. Andrade (2013) indica que para inferir es necesario
elaborar una deducción inteligente a partir de las evidencias que se dispone. Hacer inferencias
siempre supone activar cierto conocimiento previo para relacionar información.

Estrategias después de la lectura


Al hablar de un lector activo es muy difícil establecer el límite en el uso de las distintas
estrategias que se han ido mencionando. Las estrategias que se pueden usar en este momento del
proceso son más de carácter evaluativo y reductor acerca de la información y la calidad de esta,
que fue asimilada durante la ejecución del proceso de lectura como tal.
a) La idea principal

Para definir una idea principal existen varias referencias en la literatura especializada, sin
embargo, para los fines prácticos de esta unidad se hará uso de una. La idea principal informa de
un enunciado (o enunciados) más importante que el escritor utiliza para explicar el tema. Puede

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estar explícita en el texto, y aparecer en cualquier lugar de él, o bien puede encontrarse
implícita. Se expresa mediante una frase o dos o más frases coordinadas, y proporciona mayor
información, y distinta, de la que incluye el tema.

b) Identificar la idea principal

Hay que considerar que la idea principal resulta de la combinación de los objetivos de lectura
que guían al lector, de sus conocimientos previos y de la información que el autor quería
transmitir mediante sus escritos. Para poder extraer la idea principal de un texto es necesario
aclarar que no resulta de la sucesión estricta de pasos establecidos, menos aún de una receta.
Esta habilidad es el resultado de un proceso de asimilación y comprensión del texto sobre el que
recae la tarea de leer. Es importante que el estudiante extraiga la información que mueve el
texto, sobre la cual se asienta, eliminando redundancias y datos que pueden secundar la
información principal.

c) Los organizadores gráficos

Se define a los organizadores gráficos como la representación esquemática que presenta las
relaciones jerárquicas y paralelas entre los conceptos amplios e inclusivos, y los detalles
específicos. Así mismo menciona que los organizadores gráficos vienen a ser, representaciones
visuales del conocimiento estableciendo relaciones entre las unidades de información o
contenido.

 Cuadro sinóptico. Los cuadros sinópticos son organizadores gráficos, que han sido
ampliamente utilizados como recursos instruccionales y se definen como
representaciones visuales que comunican la estructura lógica del material educativo.

 Mapas conceptuales. Los mapas conceptuales son organizadores gráficos que


mediante ciertos símbolos representan información. Constituyen una estrategia
pedagógica en la construcción del conocimiento. Mediante esta herramienta se
caracteriza, jerarquiza y relaciona información a nivel general o global y se forman
proposiciones por medio del sistema de enlaces con conectores.

 Esquemas. Un esquema es una forma de representar gráficaente y de forma ordenada


las ideas principales y secundarias de un texto. Este recurso permite comprender y
organizar información

 Mentefacto. Un mentefacto es un diagrama jerárquico cognitivo que organiza y


preserva el conocimiento, en él se plasman las ideas fundamentales y se desechan las
secundarias.

Bibliografía
ALONSO, J. (1990). Comprensión lectora: modelos, entrenamiento y evaluación.

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AULLS, M. (1997). Enseñanza activa de las habilidades de comprensión de las ideas
principales. Madrid.
BAUMANN, J. (2001). La comprensión lectora (cómo trabajar la idea principal en el aula).
COLL, C. (1991). Psicología y curriculum. Una aproximación psicopedagógica a la elaboración
del curriculum escolar. Barcelona.
SOLÉ, I. (2002). Estrategias de lectura. Barcelona.

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