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el 2012, año en que, por ejemplo, los cooperación”. Por supuesto, cuidan-
países europeos en su conjunto no do que ninguna otra potencia hicie-
revestían una importancia gravi- ra sombra a este diseño, y entendien-
tante. El fracaso de la unión política do cooperación en los términos defi-
y económica de Europa restó impor- nidos por los Estados Unidos. Frente
tancia al viejo continente como ac- a un continente tan densamente po-
tor político. El único factor de uni- blado, tan diverso culturalmente, y
dad de los países europeos es la compuesto por estados que tienen sus
OTAN, y esto solo representa una propios planes de proyección geopo-
unidad subordinada por su depen- lítica como los que integran Eurasia,
dencia del Pentágono. Incluso Gran hace falta “un despliegue cuidadoso
Bretaña es caracterizada, no sin utilizando maniobras, diplomacia,
crueldad, como un “actor geoestra- coaliciones, cooptación y otros recur-
tégico jubilado que descansa en sus sos políticos”. Y dentro de esa estra-
espléndidos laureles”.7 tegia nos interesa subrayar lo que
En ese contexto de 1997, como Brzezinski plantea como “flexibilidad
anticipamos, Brzezinski descartaba ideológica y dinamismo económico”,
la posibilidad de un debilitamiento de pero sobre todo como “atractivo cul-
EE.UU., que se presentaba, luego de tural”. Y eso lo destacamos no por-
la caída de la Unión Soviética, como que el autor lo resalte como estrate-
“la única e, indudablemente, como gia principal, sino porque es algo que
la primera potencia realmente glo- se desprende de la lectura de la to-
bal”. Partiendo de esa base, el objeti- talidad del libro, e incluso de Visión
vo de El gran tablero era formular Estratégica, pero que también se
una geoestrategia global e integra- vincula al concepto de “poder blan-
da, para preservar el papel central de do” propuesto por otro teórico del
Estados Unidos como “arbitro polí- imperio, Joseph Nye, al que nos re-
tico” en todo el mundo, pero prestan- feriremos más adelante.
do especial atención a Eurasia que, Dentro de ese continente estraté-
como exponía el autor, “es el tablero gico, Eurasia, Brzezinski alertaba
en el que la lucha por la primacía sobre potenciales “contingencias re-
global sigue jugándose”. Un conti- lacionadas con los futuros alinea-
nente fundamental que contaba, mientos políticos (…) que intenten
para 1997, con el 75% de la pobla- empujarlos [a los Estados Unidos]
ción mundial, el 60% del PNB mun- fuera de Eurasia”. Entre esas contin-
dial y las ¾ partes de los recursos gencias, continuaba, “el escenario
estratégicos conocidos. Dicha estra- potencialmente más peligroso (pero,
tegia global debía apoyarse en la también el menos probable) sería el
construcción de “una comunidad de una gran coalición entre China,
global basada en las relaciones de Rusia y quizás Irán, una coalición
7
Zbigniew Brzezinski: El gran tablero mundial. La supremacía estadounidense y sus imperativos geoestratégicos,
Ob. cit., p. 52.
Pensamiento estratégico estadounidense 43
10
Zbigniew Brzezinski: Strategic Vision, . Ob cit., p. 70. La traducción nos pertenece.
46 Atilio A. Boron y Alexia Massholder
tipo de los Estados Unidos según televisión. Eso dificulta una discu-
lo informa la oficina del censo de sión racional sobre qué es lo me-
los EE.UU. jor para los EE.UU. en materia de
4) Una infraestructura decadente. Y política exterior, que queda libra-
hay un dato llamativo. EE.UU. tie- da a lo que decidan unos pocos. Y
ne una superficie similar a la de Brzezinski es muy crítico de lo que
China, casi 10 millones de km². pasó en años de Bush, de aquel
Para el 2015, China va a tener una delirio de hablar del “nuevo siglo
red de trenes de alta velocidad con americano”. Podíamos ser, y se-
una extensión de 15 mil km. Y guimos siendo, la potencia domi-
quieren hacer uno de alta veloci- nante, pero aquella ensoñación no
dad —de carga, no de pasajeros— tenía ningún fundamento.
desde Beijing hasta Lisboa. ¿Cuán- 6) La parálisis política. EE.UU. tie-
tos km de alta velocidad tiene ne un sistema partidario anquilo-
EE.UU.? Cero. Este es uno de los sado que le impide tomar decisio-
muchos indicadores. Esto implica nes políticas racionales, no solo en
algo que señalan muchos econo- la política doméstica, sino también
mistas: la pérdida de competitivi- en la política internacional. Pero
dad económica de los EE.UU., por nada dice Brzezinski del lobby del
el uso de camiones para mover sus complejo militar industrial, ni del
mercancías hasta los puertos y el de Israel, que también son facto-
enorme derroche de gasolina que res de debilidad sistémica.
esto significa. Sobre las fortalezas, sus argumen-
5) La fenomenal ignorancia del pú- tos resultan más endebles. El más
blico norteamericano sobre cues- sólido es la afirmación de que Esta-
tiones internacionales, que impi- dos Unidos es la potencia que tiene
de un proceso racional de elabo- fronteras más seguras y vecinos me-
ración de políticas públicas sobre nos amenazantes. China y Rusia, en
esos asuntos y desafíos. En 2006, cambio, tienen problemas y cuentas
una encuesta mostró que el 63% pendientes con casi todos sus veci-
de los jóvenes adultos no podían nos. EE.UU., a su vez, tiene una sa-
señalar a Irak en el mapa, el 75% lida segura a los dos grandes océa-
no podían encontrar Irán, y el 88% nos del mundo, y se ha anexado de
no localizaban Afganistán. Salvo facto a sus países de frontera. El
los cinco periódicos principales, la ASPAN, Acuerdo de Seguridad y
prensa local y la TV muestran Prosperidad de América del Norte
poco de los asuntos mundiales, (un simple acuerdo entre jefes de
excepto las catástrofes o noticias gobierno que no pasó por ningún le-
sensacionalistas. 11 Y no más. Y gislativo ni de México ni de Canadá
por supuesto un par de canales de ni de EE.UU.) está funcionando y
Zbigniew Brzezinski: Strategic Vision, Ob cit p. 52. Los cinco periódicos principales son New York Times,
11
Washington Post, Los Angeles Times, el San Francisco Chronicle y el Chicago Tribune.
48 Atilio A. Boron y Alexia Massholder
12
Ibíd., p.81. La traducción nos pertenece.
Pensamiento estratégico estadounidense 49
vínculos con los gobiernos del Este. los demás, nuestro poder blando se
Y en este punto, la batalla cultural realza. América ha tenido durante
se nos presenta como central. Ter- tiempo mucho poder blando. Pien-
minemos entonces con algunas re- sen en el impacto de las Cuatro Li-
ferencias a otro de los pensadores bertades de Franklin Delano
que ha tratado este tema con parti- Roosevelt en Europa a finales de la
cular detenimiento desarrollando la II Guerra Mundial; en gente joven
idea del “smart power” (“poder in- tras el Telón de Acero escuchando
teligente”): Joseph Nye. música americana y noticias en la
En el año 2004, este otro influ- Radio Europa Libre; en los estudian-
yente pensador en lo que respecta a tes chinos simbolizando sus protes-
las relaciones internacionales, publi- tas en la plaza de Tiananmen con una
có Soft power and American foreign réplica de la Estatua de la Libertad;
policy, un trabajo en el que desarro- en los recientemente liberados
lla lo central de sus reflexiones sobre afganos pidiendo en 2001 una copia
el llamado “poder blando”, definido de la Carta de Derechos; en los jóve-
como “la habilidad de obtener lo que nes iraníes de hoy viendo subrepti-
quieres a través de la atracción an- ciamente vídeos americanos prohi-
tes que a través de la coerción o de bidos y programas de la televisión por
las recompensas”.13 Este poder “blan- satélite en la intimidad de sus casas.
do” debe ser utilizado en combina- Todos estos son ejemplos de poder
ción con el “poder duro” tradicional, blando. Cuando puedes conseguir
para obtener como resultante un que otros admiren tus ideales y que
“poder inteligente”, que garantice la quieran lo que tú quieres, no tienes
efectividad de la política exterior de que gastar mucho en palos y zana-
los Estados Unidos. horias para moverlos en tu dirección.
Uno de los argumentos centra- La seducción es siempre más efecti-
les de Nye es que luego del 9/11, lo va que la coerción, y muchos valo-
decisivo en la política internacional res como la democracia, los derechos
no es “cuántos enemigos mato”, sino humanos y las oportunidades indi-
“cuántos aliados sumo”. Porque el viduales son profundamente seduc-
poder tiene varias dimensiones, y la tores”.14
fortaleza militar es importante, pero O Parafraseando a Brzezinski,
es solo una de estas dimensiones. más allá de lo que piense acerca de
El “poder blando”, dice Nye: “Sur- sus valores estéticos, la cultura de
ge del atractivo de la cultura de un masas estadounidense ejerce un
país, de sus ideales políticos y de sus atractivo magnético especialmente
políticas. Cuando nuestras políticas sobre la juventud del planeta. El au-
son vistas como legítimas a ojos de tor afirma que si bien puede que esa
Nye desarrolló el concepto de poder blando por primera vez en 1990, en el libro Bound to Lead.
13
14
Joseph Nye: “El poder blando y la política exterior americana”, en Relaciones Internacionales, núm. 14, junio
de 2010, GERI–UAM, p. 119.
50 Atilio A. Boron y Alexia Massholder
jor preparado para echar la puerta Ponemos así fin a esta breve pre-
abajo, derrocar a un dictador, y luego sentación, con la esperanza de que
irse a casa que para hacer el trabajo la misma pueda servir como estí-
duro imperial de construir un régimen mulo para examinar la obra y los
democrático.”19 argumentos de los grandes pensa-
Esto indudablemente limita la ca- dores del imperio. Como hizo en su
pacidad de los Estados Unidos para tiempo Martí, que al habitar en las
mantener sus planes de dominación, entrañas del monstruo llegó a co-
porque no hay dudas de cuán costoso nocerlo mejor que nadie. Hoy debe-
es sostener la ocupación militar de un mos reeditar la labor martiana in-
país y, bajo esas condiciones, mante- ternándonos en las entrañas del pen-
ner a una población dispuesta a acep- samiento de los grandes intelectua-
tar la primacía norteamericana.20 les del imperio.
19
Ibíd., p. 132.
20
Los datos disponbles revelan que un soldado norteamericano cuesta cerca de un millón de dólares al año. El gasto
militar de los EE.UU. representa el 50% del gasto militar mundial, alrededor de 1 500 millones de dólares al año.
Y según Chalmers Johnson, en Empire of basis, entre las reconocidas y las no oficiales, EE.UU. cuenta con poco
más de 1000 bases militares en todo el mundo.