Patricia Gonzalez Escobar

GONZALEZ ESCOBAR, CLARA PATRICIA
Vs.
ABEL ESCARPULLI GARCÍA
CONTROVERSIA DEL ORDEN FAMILIA
Controversia del Orden Familiar:
Alimentos y Régimen de Visitas,
Guarda y custodia de menor
ESCRITO INICIAL
C. JUEZ DE LO FAMILIAR, EN TURNO EN EL DISTRITO FEDERAL.
CLARA PATRICIA GONZALEZ ESCOBAR, de nacionalidad Colombiana, por mi propio derecho y

en ejercicio de la patria potestad de mi menor hijo de nombre MAURICIO ESCARPULLI GONZÁLEZ, de
nacionalidad Mexicana, y señalando como domicilio para recibir toda clase de notificaciones, el despacho
marcado con el número 102 del edificio marcado con el número 1650 de la Avenida Insurgentes Sur, en la
colonia Florida de la delegación Álvaro Obregón Distrito Federal, c.p. 01030 autorizando como mis abogados
patronos, en términos de lo dispuesto por el cuarto párrafo del artículo 112 del Código de Procedimientos
Civiles, a los señores Licenciados LUIS NAZARIO COLIN RIVERO, titular de la cédula profesional número
1636628, LUIS ROBERTO CANTÓN SALINAS quien es titular de la Cedula Profesional 470820, así como
para recibir toda clase de notificaciones, documentos y valores a los pasantes en derecho señores, Jorge
Campderá Gutiérrez, Ariadna Daniela Sinta Rojas y Ana Cristina Medina Magaña, comparezco
respetuosamente para exponer:
Con este escrito vengo a demandar, en vía de controversia del orden familiar, del señor ABEL
ESCARPULLI GARCÍA, quien tiene como domicilio laboral el ubicado en “MEDIA INNOVATIONS, S.A.”,
con domicilio ubicado en la Av. Nuevo León #40 Colonia Hipódromo Condesa, Delegación Cuauhtemoc, Distrito
Federal, C.P. 06170, de quien reclamo las siguientes prestaciones:
A) El pago de una pensión alimenticia provisional suficiente para cubrir las necesidades de mi
menor hijo de nombre MAURICIO ESCARPULLI GONZÁLEZ.
B) El pago de una pensión alimenticia definitiva suficiente para cubrir las necesidades de mi
menor hijo de nombre MAURICIO ESCARPULLI GONZÁLEZ.
C) El aseguramiento de las pensiones alimenticias, tanto provisional como definitiva de la

fuente de trabajo.
De su señoría, solicito:
D) Decretar, en favor de la suscrita, el otorgamiento de la guarda y custodia provisional de mi

menor hijo MAURICIO ESCARPULLI GONZÁLEZ, y en su momento la definitiva, ya
que existe temor fundado de que secuestre al menor o le infrinja actos violentos en contra
del menor, señalando como domicilio para que reside el menor en el domicilio de la
suscrita, el cual esta ubicado en el departamento número 64 del edificio marcado #
223 de la calle de Londres de la Colonia Juárez, delegación Cuahutemoc, México
D.F. C.P. 06600
E) Decretar un régimen de visitas Supervisadas a favor de el menor MAURICIO

ESCARPULLI GONZÁLEZ, con relación al padre del menor señor ABEL ESCARPULLI
GARCÍA, de nacionalidad mexicana, ya que existe temor fundado de que
secuestre al menor o le infrinja actos violentos en contra del menor. Señalando
como lugar de visitas provisional y en su caso definitivo el ubicado en el Centro de
Convivencia Paterno Filial, institución dependiente del Tribunal Superior de Justicia del
Distrito Federal y ubicada en la casa marcada con el No. 54 de la calle de Río de la Plata,
Col. Cuauhtemoc, Delegación Cuauhtemoc, México Distrito Federal, C.P. 06500. ya que
existe temor fundado de que secuestre al menor o le infrinja actos violentos en
contra de el menor.
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F) Decretar orden de restricción para el padre de el menor, el señor ABEL ESCARPULLI

GARCÍA, de nacionalidad Mexicana. Para que no pueda recoger al menor o le sea
entregada por parte de personal de la escuela, al menor MAURICIO ESCARPULLI
GONZÁLEZ de la guarderia “Baby Bee, S.C.” con domicilio Emersón #515, Colonia
Polanco, Delegación Miguel Hidalgo D.,F., lo anterior en virtud de que existe temor
fundado de que “secuestre” al menor o le infrinja actos violentos en contra de el
menor.
G) El pago de los gastos y costas que origine el presente procedimiento hasta su total
solución.
Fundo mi instancia en los siguientes hechos y consideraciones de derecho:
HECHOS
1. El ahora demandado y la suscrita contrajimos matrimonio civil el día 15 de junio de 2002, bajo el régimen
de Sociedad Conyugal ante el C. Oficial Mayor 01del Registro Civil del Estado de México, Lic. Jorge
González Méndez como se acredita con el acta de matrimonio que se acompañó a la demanda como
anexo 1. donde consta la autorización por parte de la Secretaría de Gobernación de la autorización para la
celebración de matrimonio No. DRDF No.3- 10681 de fecha 3 de junio de 2002.
2. Del matrimonio, procreamos un menor de nombre MAURICIO ESCARPULLI GONZÁLEZ, de 25 de abril

de 2003, de 11 meses de edad como se acredita con el acta de nacimiento que se acompaña a la
demanda como anexo 2.
3. Establecimos como nuestro domicilio conyugal en la casa marcada con el numero 54-A de la calle Presa
Rodríguez, Colonia Irrigación, Delegación Miguel Hidalgo, México D.F. C.P., lugar el cual debido a la falta
de ministración de alimentos me vi en la necesidad de dejar de rentar el domcilio toda vez que no me
alcanzaban los recurso económicos para sufragar los gastos de habitación.
4. Posteriormente, en fecha 15 de octubre de 2003, el Demandado y la que suscribe, establecimos nuestro

domicilio conyugal en compañía de nuestro menor hijo en el departamento No. 64 del edificio marcado #
223 de la calle de Londres de la Colonia Juárez, delegación Cuauhtemoc, México D.F. C.P. 06600, lugar
donde a la fecha cohabito en compañía de mi menor hijo.
5. Desde la fecha en que nació mi hijo; el señor ABEL ESCARPULLI GARCÍA, quién tiene la obligación de
ministrar alimentos a su menor hijo, quien a la fecha ha abandonado, desde hace más de un año en sus
obligaciones alimentarias, del pago de los mismos, dicha obligación, y dejó de proporcionar cantidad
alguna para cubrir con las necesidades tanto de alimentos y todo lo que con ello lleva, de lo cual son
testigos los señores Gabriel García Aguilar y la señora Maria Lilia Bermejo Quiroz , quienes viven en
el edificio ubicado en el edificio marcado # 223 de la calle de Londres de la Colonia Juárez, delegación
Cuauhtemoc, México D.F. C.P. 06600.
6. Con fecha 28 de Octubre de 2003, el señor ABEL ESCARPULLI GARCÍA decidió abandonar el domicilio
conyugal, hecho de lo cual le consta a los señores Gabriel García Aguilar y la señora Maria Lilia
Bermejo Quiroz ya que se percataron de la salida del domicilio conyugal del demandado.
7. Así mismo los señores Gabriel García Aguilar y la señora Maria Lilia Bermejo Quiroz fueron testigos
de que el día 28 de octubre de 2003 el señor ABEL ESCARPULLI GARCÍA profiriera amenazas que dijo
de la siguiente manera “Te vas a arrepentir te voy a secuestrar a tu hijo y no vas a saber donde esta”, “Te
voy sacar del País”, “saliendo de la guardería te lo voy a arrebatar y no lo vas a ver jamás, para que
aprendas a respetarme”.
8. Desde que el señor ABEL ESCARPULLI GARCIA dejó de ministrar alimentos, por lo que es el caso que
he venido realizando pagos relativos a la colegiatura de la guardería “Baby Bee, S.C.” con domicilio
Emersón #515, Colonia Polanco, Delegación Miguel Hidalgo D.,F., hechos los cuales los pruebo con los
recibos de pago que a continuación se exhiben como prueba, así como del informe que se servirá entregar
a esta H. Autoridad el representante legal de la guardería.
9. Respecto de la obligación alimentaria que tiene el señor ABEL ESCARPULLI GARCÍA a favor de
nuestro menor hijo MAURICIO de apellidos ESCARPULLI GONZÁLEZ y la suscrita, éste no la ha
cumplido desde la fecha en que abandonó el domicilio conyugal, no obstante saber de antemano el lugar
en donde nos encontramos y la necesidad de su hijo, amen de su notoria posibilidad económica, el deudor
Patiicia González Escobar.doc

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alimentario tiene ingresos suficientes como para cubrir los gastos de Alimentos, gastos de habitación,
gastos médicos para nuestro menor hijo y una servidora.
10. Es el caso que, desde nuestra hasta la fecha y como resultado de la falta de ministración de los alimentos
por parte del señor ABEL ESCARPULLI GARCÍA para con su hijo y una servidora, me he visto en la
necesidad de erogar diferentes cantidades, mismas que no cubren las necesidades alimenticias de nuestro
menor hijo, de las que hasta el momento, no ha dado cumplimiento el señor ABEL ESCARPULLI
GARCÍA, dicha cantidad que percibo no es suficiente para cubrir los gastos en que he incurrido en virtud
de la falta de ministración de alimentos por parte del señor ABEL ESCARPULLI GARCÍA.
11. Nuestro menor hijo han sufrido de enfermedades de las vías respiratorias, así como de otro tipo,
enfermedades propias del menor de edad; los gastos de médicos y de medicinas en que se han incurrido,
los gastos de transporte del menor y de una servidora, han sido liquidadas mediante de prestamos en
efectivo que nos ha realizado mi tío el señor ALBERTO GONZÁLEZ CÁRDENAS, Dichas cantidades
que no son suficientes para poder sostener del menor y a una servidora, así como de ninguna manera son
obligatorias o substitutivas por parte de ellos de las obligaciones alimenticias propias del señor ABEL
ESCARPULLI GARCÍA.
12. De tal suerte que hemos asistido ante el DR. ALFONSO HERRERA GUTIÉRREZ a efecto de que
atienda a nuestro menor hijo de las diferentes enfermedades, de las cuales en este acto enumero:
gastroenteritis infecciosa, gripes y principios de bronquitis.
13. Como consecuencia de la falta de ministración de alimentos y recursos por parte del señor ABEL
ESCARPULLI GARCÍA, situación por la que me he visto en la necesidad de recurrir en busca de ayuda
económica de mi tío el señor ALBERTO GONZÁLEZ CARDENAS quienes a la fecha me han cubierto la
cantidad de $50,000.00 (CINCUENTA MIL PESOS 00/100 M.N.), y de esta manera poder sufragar los
gastos, médicos principalmente, gastos de transporte y alimentación de nuestro menor hijo MAURICIO de
apellidos ESCARPULLI GONZÁLEZ, así como para poder efectuar el pago de las deudas que he
contraído a la fecha, como consecuencia de la falta de ministración de pensión alimenticia de la que somos
acreedores, tanto sus menores hijos y una servidora. Es de hacer notar que, debido a la situación
económica del deudor alimentario, de ninguna forma se ve afectada su estabilidad económica debido a su
cumplimiento, ya que actualmente desempeña el cargo ejecutivo dentro de la empresa denominada
“MEDIA INNOVATIONS, S.A.”;
14. De tal suerte que el señor ABEL ESCARPULLI GARCÍA no ha dado cumplimiento a su obligación de
ministrar los alimentos, no obstante que tiene la obligación y posibilidades económicas para ello, dejando
en el abandono, razón por la cual, me veo en la urgente necesidad de acudir a esta vía para reclamar las
prestaciones que se señalan.
15. El señor ABEL ESCARPULLI GARCÍA tiene el hábito del consumo de alcohol y al parecer drogas,
aunado al desequilibrio psicológico del mismo, lo que ha sido motivo de permanentes desavenencias
familiares y ha generado violencia intra familiar, abuso psicológico y un ambiente de incertidumbre y
zozobra a mi menor hijo y la suscrita, teniendo temor fundado de que el demandado pretenda inferirnos
daños físicos.
16. Asimismo, el hoy demandado, desde nuestro matrimonio, ha tenido como costumbre y medio de ejercicio
de poder, tanto sobre la suscrita como posteriormente sobre nuestro menor hijo MAURICIO
ESCARPULLI GONZÁLEZ, el maltrato psicológicos y la sevicia, con lo que pone en riesgo la salud,
seguridad y estabilidad emocional de los miembros de la familia.
17. Es el caso que desde que el señor ABEL ESCARPULLI GARCÍA abandonó el domicilio conyugal hemos
sido victimas de diversas situaciones de agresión tales como:
MEDIDAS PROVISIONALES
Con fundamento en lo dispuesto en los artículos 940, 941, 942, 943, 944, 945, 946, 947 y demás
relativos del Código de Procedimientos Civiles Vigente para el Distrito Federal y 389 del Código Federal de
Procedimiento Civiles, solicito se dicten las siguientes medidas provisionales en protección de el menor y de la
suscrita:

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1. Se fije al demandado una pensión alimenticia provisional, sin su audiencia, de conformidad con los
elementos ministrados en este escrito, mandándose asegurar dicha pensión.
2. Toda vez que el demandado es empleado y trabaja en la empresa de nombre “MEDIA

INNOVATIONS, S.A.” ubicada en Av. Nuevo León #40 Colonia Hipódromo Condesa,
Delegación Cuauhtemoc, Distrito Federal, C.P. 06170 , para lo cual solicito se gire atento oficio al
efecto de que informe el salario y demás percepciones y puesto que ocupa ABEL ESCARPULLI
GARCÍA.
3. Se decrete la custodia provisional de mi menor hijo MAURICIO de apellidos ESCARPULLI

GONZÁLEZ, en favor de la suscrita y señalando como domicilio para su residencia el ubicado en el
departamento número 64 del edificio marcado # 223 de la calle de Londres de la Colonia Juárez,
delegación Cuauhtemoc, México D.F. C.P. 06600.
4. Decretar a favor de el menor un régimen de visitas Supervisadas, respecto del padre señor ABEL
ESCARPULLI GARCÍA;
5. Decretar como lugar para llevarse a cabo las visitas de forma provisional y en su caso definitiva, el
ubicado en el Centro de Convivencia Paterno Filial, institución dependiente del Tribunal Superior de
Justicia del Distrito Federal y ubicada en la casa marcada con el No. 54 de la calle de Río de la Plata,
Col. Cuauhtemoc, Delegación Cuauhtemoc, México Distrito Federal, C.P. 06500, a efecto de
resguardar la integridad física y en su caso psicológica del menor y solo los días sábados por el
termino de dos horas ya que el menor tiene un año de edad.
6. Se gire oficio dirigido a la Secretaría de Relaciones Exteriores con domicilio ubicado en plaza de las
Tres Culturas, domicilio conocido, a efecto de que se sirva bloquear o prohibir que el señor ABEL
ESCARPULLI GARCÍA, de nacionalidad mexicana, tramite y obtenga un nuevo pasaporte, ya sea
provisional o definitivo en favor de mi menor hijo MAURICIO de apellidos ESCARPULLI
GONZÁLEZ, toda vez que existe temor fundado de que secuestre o la lleve al extranjero a el menor
en virtud de que es su padre y retire a ésta de la guardia y custodia.
Así mismo se le requiera informe a este H. Juzgado de la recepción del presente y de las medias
implementadas en protección del menor MAURICIO de apellidos ESCARPULLI GONZÁLEZ, toda
vez que existe temor fundado de que sea llevado al extranjero el menor en virtud de que es su padre
que el señor ABEL ESCARPULLI GARCÍA, pueda tramitar y obtenga un duplicado o nuevo
pasaporte, ya sea provisional o definitivo del menor.
7. Se gire oficio dirigido al Instituto Nacional de Migración, dependiente de la Secretaria de Gobernación

domicilio conocido en esta Ciudad de México, a efecto de que se sirva tomar conocimiento de la
presente demanda y en su caso se sirva bloquear o prohibir que el señor ABEL ESCARPULLI
GARCÍA, de nacionalidad Mexicana, para que se sirva instrumentar lo necesario en las diversas
Aduanas y puertos del país, para que de cumplimiento del Arraigo Judicial que su señoría se sirva
ordenar a efecto de que mi menor hijo MAURICIO de apellidos ESCARPULLI GONZÁLEZ no
pueda salir del país.
Así mismo se le requiera informe a este H. Juzgado de la recepción del presente y de las medias
implementadas en protección del menor MAURICIO de apellidos ESCARPULLI GONZÁLEZ, toda
vez que existe temor fundado de que sea llevado al extranjero al menor en virtud de que es su padre
que el señor ABEL ESCARPULLI GARCÍA, de nacionalidad Mexicana, pueda sacar del país de
forma temporal o definitiva a el menor.
8. Así mismo se le requiera informe a este H. Juzgado de la recepción del presente y de las medias
implementadas en protección de el menor MAURICIO de apellidos ESCARPULLI GONZÁLEZ, toda
vez que existe temor fundado de que sea llevado al extranjero el menor en virtud de que es su padre
que el señor MAURICIO ESCARPULLI GARCÍA, de nacionalidad Mexicana, tiene la intención de
sacar del país de forma temporal o definitiva a el menor.
9. Se sirva girar oficio al Representante legal de la Guarderia “Baby Bee, S.C.” con domicilio Emersón
#515, Colonia Polanco, Delegación Miguel Hidalgo D.,F. Al efecto de que se sirva informar a este H.
Juzgado de la situación del menor MAURICIO de apellidos ESCARPULLI GONZÁLEZ. , a efecto
de en cumplimiento de sus determinaciones Judiciales se sirva bloquear o prohibir que se le entregue
o recoja de sus instalaciones al menor MAURICIO de apellidos ESCARPULLI GONZÁLEZ y le sea
entregada al señor ABEL ESCARPULLI GARCÍA, de nacionalidad Mexicana, siendo únicamente
autorizada para ello la madre del menor, o quien para ese caso autorice, lo anterior en virtud de que

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existe temor fundado de que secuestre al menor o le infrinja actos violentos en contra del
menor. Apercibiendo lo en caso de desobediencia a una determinación Judicial.
10. Se me otorgue copia certificada del auto admisorio y del que resuelve las medidas cautelares respecto
del menor.
DERECHO
I.- En cuanto al fondo son de aplicarse los artículos 416, 417, 418, 419, 420, 421, 422 423, 424 y
demás relativos del Código Civil Vigente del Distrito Federal.
II.- En cuanto al Procedimiento son de aplicarse las disposiciones contenidas en los artículos 940, 941
942, 943 y demás relativos y aplicables del Código de Procedimientos Civiles en vigor del Distrito Federal.
III.- En cuanto a la protección de el menor relacionada con la Violencia Familiar son aplicables los
artículos 323, 323-Bis, 323-Ter, 323-Cuater, 323-Quintus y 323-Sextus, del Código Civil.
IV. – En cuanto a la prevención para la posible comisión de un delito en perjuicio de la integridad física
o psicológica de el menor, así como para dictar las medidas conducentes en prevención de los mismo, son
aplicables, en lo conducente lo descrito por los artículos 343-Bis, 343-Ter, 343-Cuater del Código Penal del
Distrito Federal.
V. - En cuanto a la prevención del delito, relacionada con la Convención Internacional
VI.- En lo relativo a la protección internacional de el menor, es aplicable lo conducente a la Convención

Interamericana sobre Tráfico Internacional de Menores, en la cual es aplicable lo descrito por el artículo 16,
donde se establece...“Las Autoridades competentes de un Estado parte que conozcan en el territorio, sometido
a su jurisdicción la presencia de una víctima de tráfico internacional de menores deberán adoptar las medidas
inmediatas que sean necesarias para su protección, incluso aquellas de carácter preventivo que impidan el
traslado indebido de un menor otro Estado.
Estas medidas serán comunicadas por medio de las autoridades centrales a las autoridades
competentes del Estado de la anterior residencia habitual del menor.
VII. – En lo relativo a la Legislación Mexicana es aplicable lo conducente de la “LEY PARA LA

PROTECCION DE LOS DERECHOS DE NIÑAS, NIÑOS Y ADOLESCENTES” . Ley publicada en la
Primera Sección del Diario Oficial de la Federación, el lunes 29 de mayo de 2000.
“Artículo 1. La presente ley se fundamenta en el párrafo sexto del artículo 4o. de la

Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, sus disposiciones son de orden
público, interés social y de observancia general en toda la República Mexicana y tiene por
objeto garantizar a niñas, niños y adolescentes la tutela y el respeto de los derechos
fundamentales reconocidos en la Constitución.
Artículo 3. La protección de los derechos de niñas, niños y adolescentes, tiene como objetivo
asegurarles un desarrollo pleno e integral, lo que implica la oportunidad de formarse física,
mental, emocional, social y moralmente en condiciones de igualdad.
Son principios rectores de la protección de los derechos de niñas, niños y adolescentes:
A. El del interés superior de la infancia.

E. El de tener una vida libre de violencia.
Artículo 4. De conformidad con el principio del interés superior de la infancia, las normas
aplicables a niñas, niños y adolescentes, se entenderán dirigidas a procurarles,
primordialmente, los cuidados y la asistencia que requieren para lograr un crecimiento y un
desarrollo plenos dentro de un ambiente de bienestar familiar y social.
La aplicación de esta ley atenderá al respeto de este principio, así como al de las garantías y
los derechos fundamentales reconocidos en la Constitución Política de los Estados Unidos
Mexicanos.

6
Artículo 6. A falta de disposición expresa en la Constitución, en esta ley o en los tratados

internacionales en los términos del artículo 133 de la Constitución, se estará a los principios
generales que deriven de dichos ordenamientos y a falta de éstos, a los principios generales
del derecho.
Artículo 7. Corresponde a las autoridades o instancias federales, del Distrito Federal,

estatales y municipales en el ámbito de sus atribuciones, la de asegurar a niñas, niños y
adolescentes la protección y el ejercicio de sus derechos y la toma de medidas necesarias
para su bienestar tomando en cuenta los derechos y deberes de sus madres, padres, y demás
ascendientes, tutores y custodios, u otras personas que sean responsables de los mismos. De
igual manera y sin prejuicio de lo anterior, es deber y obligación de la comunidad a la que
pertenecen y, en general de todos los integrantes de la sociedad, el respeto y el auxilio en el
ejercicio de sus derechos.
Artículo 9. Niñas, niños y adolescentes tienen los deberes que exige el respeto de todas las
personas, el cuidado de los bienes propios, de la familia y de la comunidad, y el
aprovechamiento de los recursos que se dispongan para su desarrollo.
Ningún abuso, ni violación de sus derechos podrá considerarse válida ni justificarse por la
exigencia del cumplimiento de sus deberes.”
PRUEBAS
Desde ahora y sin perjuicio de lo dispuesto por el artículo 606 del Código de Procedimientos Civiles,
ofrezco de mi parte las siguientes pruebas, con reserva expresa de ofrecer mas adelante aquellas que se
refieran a las eventuales excepciones y defensas que hiciera valer el demandado y sin perjuicio de la
ratificación que de las aquí ofrecidas se haga:
1. - LA CONFESIONAL a cargo del demandado ABEL ESCARPULLI GARCÍA,

que deberá absolver de manera personal, sin intervención de apoderado y bajo protesta de decir verdad, al
tenor del interrogatorio que oportunamente se le formulará.
En preparación de la prueba solicito se mande citar personalmente al demandado,

para que comparezca el día y hora que señale este H. Juzgado para el desahogo de la prueba, apercibiéndole
de que en caso de no comparecer, sin justa causa, será declarado confeso de las posiciones que previamente
hubieran sido calificadas de legales y quien tiene su domicilio profesional donde puede ser emplazado el y
quien tiene su domicilio profesional el ubicado en empresa “MEDIA INNOVATIONS, S.A.” con domicilio
ubicado en Av. Nuevo León #40 Colonia Hipódromo Condesa, Delegación Cuauhtemoc, Distrito
Federal, C.P. 06170.
Esta prueba se relaciona con todos y cada uno de los hechos de la demanda.
Con esta prueba se acreditarán los extremos de la acción, especialmente en cuanto al

incumplimiento de las obligaciones alimentarias del demandado para con la suscrita y mi menor hijo de
matrimonio, así como la necesidad de decretar la custodia definitiva de mi menor hijo a favor de la suscrita.
2. - LA DOCUMENTAL PÚBLICA consistente en la copia certificada del acta de

matrimonio celebrado por el demandado y la suscrita, la cual se acompaña a este escrito.
Esta prueba se relaciona con los hechos marcados con los números 1, 3, 4, 5, 6 y 7
de la demanda.
Con esta prueba se acredita la existencia del vínculo matrimonial y de las

obligaciones derivadas del mismo.
3. - LA DOCUMENTAL PÚBLICA consistente en la copia certificada del acta de

nacimiento de mi menor hijo de nombre MAURICIO DE APELLIDOS ESCARPULLI GONZÁLEZ, la cual
acompaño a este escrito.
Estas pruebas se relacionan con los hechos marcados con los números 2, 3, 4, 5, 6. 7
y 8 de la demanda.

7
Con esta prueba se acredita la relación paterno filial de mi menor hijo MAURICIO
DE APELLIDOS ESCARPULLI GONZÁLEZ y el señor ABEL ESCARPULLI GARCÍA, relación de
parentesco con el demandado.
4. - LA DOCUMENTAL PÚBLICA consistente en el informe que se sirva rendir la

Dirección General de Migración, para acreditar mi legal estancia y calidad migratoria en el país, respecto de la
forma migratoria FM-3 No. 1135171, de calidad migratoria Visitante con actividad lucrativa.
5. – LA DOCUMENTAL PÚBLICA consistente en el informe que se sirvan rendir el

Secretario de Relaciones Exteriores, informando a ese Juzgado las medias implementadas para que el señor
ABEL ESCARPULLI GARCÍA no obtenga un duplicado del pasaporte de el menor MAURICIO DE
APELLIDOS ESCARPULLI GONZÁLEZ, así como de las implementadas para que el menor no abandone el
territorio de la República Mexicana en compañía del demandado.
Esta prueba la relaciono con todos y cada uno de los hechos de la demanda.
6. – LA DOCUMENTAL PRIVADA consistente en el informe que se sirva rendir la

empresa “MEDIA INNOVATIONS, S.A.” con domicilio ubicado en Av. Nuevo León #40 Colonia
Hipódromo Condesa, Delegación Cuauhtemoc, Distrito Federal, C.P. 06170 , respecto del sueldo,
bonos, compensaciones y demás prestaciones que perciba el demandado ABEL ESCARPULLI GARCÍA, así
como de los que se realicen en el extranjero, a efecto de que rinda informe en relación con las siguientes
cuestiones:
a) ¿Si el señor ABEL ESCARPULLI GARCÍA labora con esa institución y desde
cuando?
b) ¿Que tipo de puesto desempeña?
c) ¿Que proporcionen copia de los últimos doce cheques o recibos de pago del señor
ABEL ESCARPULLI GARCÍA?
d) ¿Que indique el salario que percibe por el puesto que ocupa?
e) ¿Que indique las prestaciones y bonos que percibe anualmente?
f) ¿Que indique los honorarios, sueldos o ingresos que se le paguen al señor ABEL
ESCARPULLI GARCÍA, indicando en que banco del extranjero o dentro de la
República Mexicana lo hace y las cuentas en que se le depositan dichas cantidades?
Relaciono esta prueba con todos y cada uno de los hechos de nuestra demanda y de la contestación
que se haga de la mismas por parte del demandado.
7. - LA TESTIMONIAL a cargo de los señores Gabriel García Aguilar y la

señora Maria Lilia Bermejo Quiroz, personas a las que me comprometo a presentar el día y la hora que su
señoría designe para el desahogo de la testimonial a su cargo, con esta prueba se pretende probar el grado de
violencia física y psicológica de la que hemos sido víctimas por parte del señor ABEL ESCARPULLI
GARCÍA, así como del abandono del domicilio conyugal y de las amenazas que ha proferido en contra mía.
Relaciono esta prueba con todos y cada uno de los hechos de nuestra demanda y de
la contestación que se haga de la mismas por parte del demandado.
8. – LA TESTIMONIAL a cargo del señor ALBERTO GONZÁLEZ CÁRDENAS,

personas a las que me comprometo a presentar el día y la hora que su señoría designe para el desahogo de la
testimonial a su cargo, con esta prueba se pretende probar el grado de violencia física y psicológica de la que
hemos sido víctimas por parte del señor ABEL ESCARPULLI GARCÍA, así como del abandono del domicilio
conyugal y de las amenazas que ha proferido en contra mía Y DE LA FALTA DE MINISTRACIÓN DE
ALIMENTOS Y LOS PRESTAMOS QUE ME HAN REALIZADO PARA LA SUBSITENCIA ECONÓMICA DEL
MENOR Y DE LA SUSCRITA.
la contestación que se haga de la mismas por parte del demandado.

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9.- LA PERICIAL EN PSICOLOGÍA que se practique al hoy demandado señor

ABEL ESCARPULLI GARCÍA, cuyo peritaje deberá rendirlo al tenor de las siguientes directrices de acuerdo
al siguiente:
Que del análisis que practique al demandado, las baterías y exámenes necesarios
para determinar si el mismo padece de algún trastorno psicológico, conductual y de emotividad que de cómo
resultado las agresiones para con la suscrita y el menor, a efecto de que tenga verificativo el desahogo de esta
prueba, designo como perito de mi parte al personal que se sirva designar el Director del Hospital Psiquiátrico
“FRAY BERNARDINO ÁLVAREZ” dependiente de la Secretaria de Salud del Gobierno del Distrito Federal, con
domicilio ubicado en Enoch #2 Colonia Barrio Niño de Jesús, Delegación Tlalpan, México D.F.,. a quien solicito
se le gire oficio de estilo y se sirva comparecer el personal por el designado y aceptar el cargo en términos de
Ley. Así como para que rinda su dictamen se le requiera que determine lugar, día y hora para que se lleve a
cabo la practica de la prueba pericial sobre el Demandado; dicho dictamen deberá practicarse en los siguientes
términos:
Que diga el Perito si:
a) Que dictamine si del estado psíquico del demandado, resultan conductas

agresivas para con la suscrita y nuestra menor hijo MAURICIO DE APELLIDOS ESCARPULLI
GONZÁLEZ, precisando de que tipo de conductas se trata.
b) Que dictamine si la suscrita y mí menor hijo MAURICIO DE APELLIDOS

ESCARPULLI GONZÁLEZ corremos algún riesgo en la convivencia con el demandado.
c) Que dictamine si el demandado se encuentra en aptitud del cuidado de nuestra

menor hijo MAURICIO DE APELLIDOS ESCARPULLI GONZÁLEZ.
d) Que dictamine si el demandado presenta conductas agresivas derivadas del

consumo de alguna droga.
e) Que dictamine el tratamiento que requiere el demandado.
f) Que dictamine las medidas cautelares necesarias y sugeridas para el

Demandado y el tiempo de terapias en su caso, que permita rehabilitar al
demandado.
g) Que el perito determine si del análisis que practique al demandado se desprende la

existencia de conductas agresivas y de control psicológico sobre la suscrita y sobre mi menor hijo MAURICIO
DE APELLIDOS ESCARPULLI GONZÁLEZ.
h) Que el perito exponga las razones técnicas de su dictamen y las pruebas

realizadas para determinar su apreciación.
A efecto de que tenga verificativo el desahogo de esta prueba, designo como perito de
mi parte al personal que se sirva designar el hospital “Fray Bernardino Álvarez”, dependiente de la Secretaria
de Salud del Gobierno del Distrito Federal, y quien tiene su domicilio ubicado en Enoch #2 Colonia Barrio Niño
de Jesús, Delegación Tlalpan, México D.F., a quien solicito se le gire oficio de estilo y se sirva comparecer y
aceptar el cargo en términos de Ley.
Con esta prueba se acreditarán los extremos de la acción, especialmente en cuanto

al desequilibrio psicológico y maltrato psicológico llevado por parte del demandado para con la suscrita y mi
menor hijo de matrimonio, así como la necesidad de decretar la guarda y custodia Provisional y en su caso
definitivo de mi menor hijo a favor de la suscrita; así como para probar la necesidad de un régimen provisional y
definitivo en su caso, de las visitas Paterno Filial del señor ABEL ESCARPULLI GARCÍA y su menor hijo
MAURICIO DE APELLIDOS ESCARPULLI GONZÁLEZ.
10. - LA PUEBA PERICIAL EN QUÍMICA FARMACÉUTICA, que deberá

practicarse en la Orina, sangre y pelo del Demandado ABEL ESCARPULLI GARCÍA, por parte del personal
Químico Fármaco Biólogo que se sirva designar la Procuraduría General de la República, la cual tiene su
domicilio ubicado en Reforma No. ___________, Col. Cuauhtemoc, Delegación Cuauhtemoc, C.P. 06300,
México D.F.. para dictaminar lo siguiente:
a) Si de las muestras de sangre que se tome al demandado, se encuentran rastros

derivados del consumo de alguna droga.

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b) Que de las muestras de sangre que se tome al demandado se dictamine si se

encuentran rastros por el consumo de Psicotrópicos o de sustancias prohibidas por la Ley de Salud.
c) Que de las muestras que se tome al demandado, se determine si existen rastros

del consumo de otras drogas o enervantes y con que frecuencia.
d) Que el perito exponga las razones técnicas y métodos de su dictamen.
Para el perfeccionamiento de la prueba, señalo como perito de mi parte al personal

Químico Fármaco biólogo que se sirva designar el C. Procurador General de la República, la cual tiene su
domicilio ubicado en Avenida Reforma No. ______, Col. Guerrero, Delegación Cuauhtemoc, C.P. 06300,
México D.F.

uso de bebidas alcohólicas y drogas por parte del señor ABEL ESCARPULLI GARCÍA lo que se traduce en
violencia intra familiar en contra de la suscrita y mi menor hijo, y con ello la necesidad de decretar la custodia
definitiva de mi menor a favor de la suscrita y el régimen especial de visitas Paterno Filial del señor MAURICIO
ESCARPULLI GARCÍA y su menor hijo MAURICIO DE APELLIDOS ESCARPULLI GONZÁLEZ. .
Con esta prueba se acreditarán los extremos de la acción, en cuanto a la violencia

intra familiar ejercida en contra de mi menor hijo y la que suscribe incumplimiento de las obligaciones
alimentarias del demandado para con la suscrita y mi menor hijo de matrimonio, así como la necesidad de
decretar la custodia definitiva de mi menor hijo a favor de la suscrita por virtud de que con esta prueba se
acreditarán los extremos de la acción, especialmente en cuanto al uso de bebidas alcohólicas y drogas por
parte del señor ABEL ESCARPULLI GARCÍA lo que se traduce en violencia intra familiar en contra de la
suscrita y mi menor hijo, y con ello la necesidad de decretar la custodia definitiva de mi menor hijo a favor de la
suscrita y el régimen especial de visitas Paterno Filial del señor ABEL ESCARPULLI GARCÍA y su menor
hijo MAURICIO DE APELLIDOS ESCARPULLI GONZÁLEZ..
la contestación que se haga de las mismas por parte del demandado.
11. – LA DOCUMENTAL PRIVADA consistente en el informe que se sirva remitir a

este H. Juzgado la institución bancaria BITAL (ANTES BANCO INTERNACIONAL, S.A.), quien tiene su
domicilio ubicado en Avenida Reforma, # 156, Col. Juárez, Delegación Cuauhtemoc en esta Ciudad de México,
C.P.06606; a efecto de que se sirva informar a este H. Juzgado las siguientes cuestiones:
a) Nombre del Titular de la cuenta No. 5290010194134588

b) Domicilio de titular.
c) Nombre y dirección del titular.
d) Que indique la fecha de apertura de la cuenta.
e) Las fechas de los depósitos y las cantidades de los mismos que se han realizado a la cuenta.
f) Las fecha de los retiros y las cantidades que a la fecha se han realizado.
g) Que exhiba copia de los estados de cuenta de la cuenta No. 5290010194134588, a efecto
de determinar el estado que guardan los depósitos que se han realizado a favor del menor
MAURICIO ESCARPULLI GONZÁLEZ.
h) Que exhiba copia de los estados de cuenta de la cuenta No. 5290010194134588, a efecto
de determinar el estado que guardan los depósitos que he realizado.
i) Que indique el nombre de la persona que firmó de recibido de la tarjeta número cuenta
de la cuenta No. 5290010194134588
j) En caso de que se encuentre cancelada, que indique la fecha de cancelación y el motivo por
el cual se canceló la cuenta No. 5290010194134588.
Relaciono esta prueba con todos y cada uno de los hechos de nuestra demanda. Con la presente
prueba se pretende acreditar que el señor nunca realizó los depósitos correspondientes a la
ministración de alimentos en las fechas descritas y que relacionadas más adelante con las demás
pruebas; con la presente prueba se pretende acreditar que me encuentro nunca ha estado al corriente
en el pago de las pensiones alimenticias en favor de nuestro menor hijo; toda vez que nunca ha
realizado depósitos, y que por consecuencia me he hecho cargo de ministrar los alimentos. Relaciono
la presente prueba con todos y cada uno de los hechos de mi demanda.
12. - LA INSTRUMENTAL DE ACTUACIONES en todo lo que favorezca los

intereses de la suscrita y mi menor hijo.

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Esta prueba la relaciono con todos y cada uno de los hechos de la demanda.

incumplimiento de las visitas que debe realizar el demandado para con la suscrita y mi menor hijo de
matrimonio, así como la necesidad de decretar la custodia definitiva de mi menor hijo a favor de la suscrita.
13. - LA PRESUNCIONAL, en su doble aspecto, legal y humana, en igual sentido

que la anterior.
Esta prueba se relaciona con todos y cada uno de los hechos de la demanda.
Con esta prueba se acreditarán los extremos de la acción, en cuanto al

incumplimiento de las obligaciones alimentarias del demandado para con la suscrita y mi menor hijo de
matrimonio, así como la necesidad de decretar la custodia definitiva de mi menor hijo a favor de la suscrita por
virtud de que con esta prueba se acreditarán los extremos de la acción, especialmente en cuanto al uso de
bebidas alcohólicas y drogas por parte del señor MAURICIO ESCARPULLI GARCÍA lo que se traduce en
violencia intra familiar en contra de la suscrita y mi menor hijo, y con ello la necesidad de decretar la custodia
definitiva de mi menor hijo a favor de la suscrita y el régimen especial de visitas Paterno Filial del señor
MAURICIO ESCARPULLI GARCÍA y su menor hijo MAURICIO DE APELLIDOS ESCARPULLI
GONZÁLEZ..
DOCUMENTOS
Anexo al presente escrito los siguientes documentos:
I.- Copia certificada del acta de matrimonio entre el demandado y la actora.
II.- Copia certificada del acta de nacimiento de mi menor hijo de nombre MAURICIO DE
APELLIDOS ESCARPULLI GONZÁLEZ.
III.- Copia simple del documento migratorio denominado FM3 folio 1135171, solicitando la
regularización de estatus migratorio, tramitado ante el Instituto Nacional de Migración, Delegación
Metropolitana dependiente de la Secretaría de Gobernación.
Por lo expuesto; A USTED C. JUEZ , pido atentamente:
PRIMERO.- Tenerme por presentada en los términos de este escrito, demandando del señor ABEL
ESCARPULLI GARCÍA, las prestaciones que se indica, solicitando se admita la demanda a trámite y se
mande emplazar al demandado corriéndole traslado de la demanda con la copia que al efecto se acompaña.
SEGUNDO.- Acordar de conformidad las medidas provisionales solicitadas, decretando la custodia de mi

menor hijo en favor de la suscrita.
TERCERO.- Girar oficios a los representantes legales de Banco Bital, S.A.(hoy Banco Internacional, S.A.) a fin
de que informen a ese Juzgado respecto de las cuentas del demandado y los saldos promedio del último año
de las mismas y demás cuestiones.
CUARTO.- Tener por ofrecidas, desde ahora, las pruebas que se indica, reservando su admisión para el
momento procesal oportuno, en que se admitan y ordene la práctica de su desahogo.
QUINTO.- Tener por señalado domicilio para oír y recibir notificaciones en el que se indica.
SEXTO.- Tener por autorizados para los fines indicados a los profesionistas que se menciona y por señalado
domicilio para recibir notificaciones.
SÉPTIMO.- Seguir el Juicio en todas sus partes y, en su oportunidad, dictar sentencia definitiva condenando al
demandado al pago de las prestaciones reclamadas.
OCTAVO.- Tener por hechas las anteriores manifestaciones para los efectos legales a que haya lugar. Y por
solicitada la copia certificada del auto admisorio y del auto donde se decretan las medidas precautoria a favor
del menor.
México, Distrito Federal, a 4 de junio de 2019.

11
PROTESTO LO NECESARIO

12

Vs.
Expediente: 427/04
C. JUEZ VIGÉSIMO SÉPTIMO DE LO FAMILIAR, EN EL DISTRITO FEDERAL.
LIC. LUIS NAZARIO COLIN RIVERO, titular de la cédula profesional número 1636628, abogado
patrono de la señora CLARA PATRICIA GONZALEZ ESCOBAR, de nacionalidad Colombiana, y de su hijo
de nombre MAURICIO ESCARPULLI GONZÁLEZ, de nacionalidad Mexicana, y señalando como domicilio
para recibir toda clase de notificaciones, el despacho marcado con el número 102 del edificio marcado con el
número 1650 de la Avenida Insurgentes Sur, en la colonia Florida de la delegación Álvaro Obregón Distrito
Federal, c.p. 01030 autorizando para recibir toda clase de notificaciones, documentos y valores a los pasantes
en derecho señores, Jorge Campderá Gutiérrez, Ariadna Daniela Sinta Rojas y Ana Cristina Medina Magaña,
comparecemos respetuosamente para exponer:
Por medio del presente escrito vengo, en tiempo y forma, con fundamento en lo dispuesto por los
artículos 691 y 692 del Código de Procedimientos Civiles, vengo a interponer recurso de apelación en contra
del auto de fecha 7 de abril del año en curso, por considerar que ocasiona agravio a los intereses de mí
representada y de su menor hijo y publicado mediante boletín No. 68 de fecha 12 de abril del año en curso,
Surtiendo sus efectos desde el día 13 de abril del año en curso; causando perjuicio lo dictado en dicha auto, y
en especial lo descrito de la siguiente manera:
“México D.F. a 7 de abril de 2004.
Con el escrito de cuenta y anexos que se acompañan fórmese expediente y regístrese. Se

tiene por presentada a Clara Patricia González Escobar, demandando en la Vía de
Controversia del Oren Familiar a Abel Escarpulli García.
Con fundamento en lo descrito por los artículos 940 y 941 del Código de Procedimientos
Civiles del Distrito Federal, se ordena dar tramite a la demanda y al efecto, con las copias
simples exhibidas, córrasele traslado y emplácese al demandado para que produzca
contestación en el término de nueve días, debiendo señalar domicilio para que oír y recibir
notificaciones en esta ciudad, apercibido que en caso de no hacerlo así se seguirá el juicio en
su rebeldía y las subsecuentes notificaciones, aún las de carácter personal le surtirán efectos
por boletín judicial. Se tiene por ofrecidas y admitidas las pruebas que se mencionan a
excepción de la documental marcada con el número cuatro toda vez que no indica en que
consiste el informe a solicitar, de la documental marcada con el apartado cinco, toda vez que
al c. secretario de relaciones exteriores no se le ha solicitado implementar medida alguna para
que el demandado obtenga duplicado del pasaporte del menor antes mencionado y de las
periciales en materia psicología y en química farmacéutica, toda vez que la ocursante no esta
asesorada a través de la defensoría de oficio atento a lo dispuesto por el artículo 353 del
Código de procedimientos civiles en cita En preparación de la prueba confesional a cargo de
la demandada, cítesele personalmente para que comparezca de forma personal día y hora de
la audiencia de ley a absolver posiciones que se le articularán, apercibido de ser declarado
confeso de las que sean previamente calificadas de legales con fundamento en lo descrito por
los artículos 322 y 323 de la Ley adjetiva. Prevéngase al ocursante para que en el término de
tres días reduzca a 2 el numero de testigos por cada hecho, apercibida que de no hacerlo así,
el suscrito juez lo reducirá en su rebeldía con fundamento en el artículo 298 del Código en
cita, hecho que sea, deberá presentarlos el día y hora de la audiencia de ley a rendir su
declaración, apercibida que de no hacerlo así se declarará desierta dicha probanza por causa
imputable al oferente, de conformidad con lo dispuesto en el artículo 357 del código de la ley
adjetiva. En preparación a las pruebas documentales marcadas con apartados 6. - y 11. -
gírese oficios solicitados, para los fines que indica. Con la petición que formula la actora en el

13
sentido de que se le conceda la custodia provisional de su menor hijo, dése vista al

demandado, para que en el término concedido para su contestación de demanda, manifieste
lo que a su derecho corresponda. Se decreta como pensión provisional a favor del menor hijo
de las partes el 25% por ciento del sueldo y demás prestaciones que obtiene el demandado y
al efecto gírese atento oficio al C. representante legal de la empresa Media Innovations S.A.
para que se sirva efectuar la devolución ordenada y resulte se le entregue a la propia actora,
debiendo informar al suscrito en el término de 15 días, el cumplimiento que se de a la orden o
en su caso, las causas que existan para no cumplirla, así como sueldo y demás prestaciones
que obtiene el demandad, apercibido que de no rendir informe que se solicita, se le impondrá
una como mediada de apremio una multa por el monto que sumen 30 días de salario mínimo
general en la zona del distrito federal. sin lugar a acordar las medidas provisionales marcadas
con los apartados 6. -, 7. -, 8. -, y 9. - toda vez que no las contempla el artículo 282 del Código
Civil del Distrito Federal. Expídanse copia certificada que solicita y entréguese por conducto
de personas autorizadas, previa toma de razón y recibo que se otorgue en autos. Para que
tenga verificativo la audiencia, se señalan las doce horas del dieciocho de mayo del año en
curso. Con la finalidad de respetar el derecho que tiene la ocursante a su intimidad deberá
expresar si es su deseo que una vez que se emita sentencia, este acuerdo en que se publique
nombre y datos personales, en la inteligencia que se omitirán en caso de que se manifieste su
oposición de manera expresa según lo estipulado por el artículo 1 de la Ley de Transparencia
y acceso a la información... ”
Lo anterior transcrito en sus términos, consideramos que ocasiona agravio a los intereses de mi
representada y de su menor hijo;
Señalo como constancias que deberán integrar el testimonio de apelación

correspondiente, todo lo actuado en el presente juicio, mismo que tendrá que remitirse a la superioridad a la
brevedad posible en términos de lo descrito por los artículos .
AGRAVIOS
PRIMERO.- Ocasiona serio perjuicio el contenido del auto dictado por su Señoría en
Audiencia de fecha 7 de abril del año en curso y publicado mediante boletín No. 68 de fecha 12 abril del año en
curso, causando perjuicio lo dictado en dicha audiencia, y en especial lo descrito de la siguiente manera:

al C. Secretario de relaciones exteriores no se le ha solicitado implementar medida alguna
para que el demandado obtenga duplicado del pasaporte del menor antes mencionado y de
las periciales en materia psicología y en química farmacéutica, toda vez que la ocursante no
esta asesorada a través de la defensoría de oficio atento a lo dispuesto por el artículo 353 del
adjetiva. En preparación a las pruebas documentales marcadas con apartados 6.- y 11.- gírese

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oficios solicitados, para los fines que indica. Con la petición que formula la actora en el sentido
de que se le conceda la custodia provisional de su menor hijo, dése vista al demandado, para
que en el término concedido para su contestación de demanda, manifieste lo que a su derecho
corresponda. Se decreta como pensión provisional a favor del menor hijo de las partes el 25%
por ciento del sueldo y demás prestaciones que obtiene el demandado y al efecto gírese
atento oficio al C. representante legal de la empresa Media Innovations S.A. para que se sirva
efectuar la devolución ordenada y resulte se le entregue a la propia actora, debiendo informar
al suscrito en el término de 15 días, el cumplimiento que se de a la orden o en su caso, las
causas que existan para no cumplirla, así como sueldo y demás prestaciones que obtiene el
demandad, apercibido que de no rendir informe que se solicita, se le impondrá una como
mediada de apremio una multa por el monto que sumen 30 días de salario mínimo general en
la zona del distrito federal. sin lugar a acordar las medidas provisionales marcadas con los
apartados 6.-, 7.-, 8.-, y 9.- toda vez que no las contempla el artículo 282 del Código Civil del
Distrito Federal. Expídanse copia certificada que solicita y entréguese por conducto de
personas autorizadas, previa toma de razón y recibo que se otorgue en autos. Para que tenga
verificativo la audiencia, se señalan las doce horas del dieciocho de mayo del año en curso.
Con la finalidad de respetar el derecho que tiene la ocursante a su intimidad deberá expresar
si es su deseo que una vez que se emita sentencia, este acuerdo en que se publique nombre
y datos personales, en la inteligencia que se omitirán en caso de que se manifieste su
y acceso a la información....”
Así que el auto reclamado es contrario a los designios de seguridad y estabilidad de el menor
y de quien detenta la Guarda y Custodia de el menor, en razón a que el mismo no provee respecto de la
situación en que vive el menor es decir vive en compañía de su madre dentro del Distrito Federal, poniendo en
peligro a el menor en cada traslado de lo cual hacemos responsable a su Señoría, además de que en dicho
menor tiene apenas un año de edad, situación de la cual es omisa el Juez que conoce de la causa.
De igual forma, Su señoría no establece que el menor deberá pasar la visita con su
padre sin establecer el domicilio en donde habitará el señor MAURICIO ESCARPULLI GARCÍA con el menor,
sin cerciorarse de que la casa que habita reúne las características necesarias para que el menor habite el
inmueble, violando con su resolución combatida lo descrito por la Convención sobre los derechos de Niño,
dejando en estado de indefensión a el menor, más aún, la C. Agente del Ministerio Público simplemente se
concreta de decir que y atendiendo a su superior interés la suscrita es de la opinión que se debe tomar en
cuenta lo manifestado por esta en atención a que los menores tienen derecho a estar en un lugar apropiado
para su estancia, situación de la cual en padre no tiene, evitando alteraciones que pudieran afectar tomando su
edad y madurez emocional..”, razón por la cual, su Señoría y la C. Agente del Ministerio Público en ningún
momento se le requiere para que emita su aprobación a lo decretado, y solamente se le da vista al Padre que
manifieste lo que a su derecho convenga. Por lo que es prudente modificar el régimen provisional. Ya que en
caso de que el menor habite con el señor MAURICIO ESCARPULLI GARCÍA su señoría deberá cerciorarse de
las condiciones en que realizará las visitas, pudiendo solicitar una inspección que se realice por parte de
personal de DESARROLLO INTEGRAL DE LA FAMILIA (DIF) de la casa donde habita el señor MAURICIO
ESCARPULLI GARCÍA, para que en auxilio de este H Juzgado y de la Representación social y sobre todo del
menor, se practique un estudio socio económico y habitación del domicilio donde habita el señor MAURICIO
ESCARPULLI GARCÍA , el cual deberá de practicarse en el domicilio que señala como lugar donde habita,
mismo y que sirva de base para determinar si la situación en que vive el Padre de el menor y si es la más
adecuada para su desarrollo Psicológico y educativo el tiempo en que se encuentra realizando la visita.
En efecto, el auto apelado deja de proveer respecto de la Situación en que habita el

demandado MAURICIO ESCARPULLI GARCÍA y algo muy importante la causa planteada por la parte Actora,
quién en cumplimiento a lo que dispone el artículo 255 fracción V del Código Procesal Civil hizo valer ante
dicha autoridad, así como de lo descrito por 941, 492 y 943 en relación con lo descrito por 945 del código de
Procedimientos Civiles, ya que de ninguna manera solicita se practiquen diligencias por los especialistas para
que o instituciones especializadas en la materia, y en cuyo caso deberá emitir su resolución con base a lo
descrito, expresando los fundamentos de la valoración jurídica realizada y de su decisión; la resolución
combatida, es contraria a lo que dispone el artículo 402 del mismo ordenamiento que determina que los
acuerdos deberán valorar por todos los medios de prueba aportados y admitidos, y serán valorados en su
conjunto por el juzgador, atendiendo a las reglas de la lógica y de la experiencia. En todo caso el tribunal
deberá exponer cuidadosamente los fundamentos de la valoración jurídica realizada y de su decisión, lo que en
la especie no sucedió.

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Así, al momento en que su Señoría dicta las mediadas provisionales combatidas,

dictadas en el acuerdo de fecha 7 de abril del año en curso, debió valorar todas las circunstancias que rodean
a la demandada y las que rodean a el menor.
Al omitir el A Quo determinar sobre dicha falta de elementos de valoración de las

circunstancias antes descritas, y su determinación de procedencia de las medidas provisionales, se esta
atentando contra los derechos de defensa y acción de la actora y de el menor, así como al orden público y el
interés social, cuestión que el juez familiar debe tomar siempre en cuenta.
“...Artículo 282. Desde que se presenta la demanda de divorcio, y sólo mientras dure
el juicio, se dictarán las medidas provisionales pertinentes conforme a las
disposiciones siguientes:
I. La separación de los cónyuges. El Juez de lo Familiar determinará con

audiencia de parte, y teniendo en cuenta el interés familiar y lo que más convenga a
los hijos, cuál de los cónyuges continuará en el uso de la vivienda familiar y asimismo,
previo inventario, los bienes y enseres que continúen en ésta y los que se ha de llevar
el otro cónyuge, incluyendo los necesarios para el ejercicio de la profesión, arte u
oficio a que esté dedicado, debiendo informar éste el lugar de su residencia.
La separación conyugal decretada por el Juez interrumpe los términos a que

se refieren las fracciones VIII y IX del artículo 267 de este código;
II. Señalar y asegurar las cantidades que a título de alimentos deben dar el
deudor alimentario al cónyuge acreedor y a los hijos que corresponda;
III. Las que se estimen convenientes para que los cónyuges no se puedan
causar perjuicios en sus respectivos bienes ni en los de la sociedad conyugal en su
caso. Asimismo, ordenar, cuando existan bienes que puedan pertenecer a ambos
cónyuges, la anotación preventiva de la demanda en el Registro Público de la
Propiedad del Distrito Federal y de aquellos lugares en que se conozca que tienen
bienes;
IV. Dictar, en su caso, las medidas precautorias que la ley establece respecto
a la mujer que quede embarazada;
V. Poner a los hijos al cuidado de la persona que de común acuerdo hubieren

designado los cónyuges, pudiendo ser uno de éstos. En defecto de ese acuerdo, el
cónyuge que pida el divorcio propondrá la persona en cuyo poder deben quedar
provisionalmente los hijos. El Juez de lo Familiar, previo el procedimiento que fije el
código respectivo y tomando en cuenta la opinión del menor, resolverá lo conducente.
Salvo peligro grave para el normal desarrollo de los hijos, los menores de doce
años deberán quedar al cuidado de la madre;
VI. El Juez de lo Familiar resolverá teniendo presente el interés superior de los

hijos, quienes serán escuchados, las modalidades del derecho de visita o convivencia
con sus padres;
VII. En los casos en que el Juez de lo Familiar lo considere pertinente, de

conformidad con los hechos expuestos y las causales invocadas en la demanda,
tomará las siguientes medidas, con el fin de salvaguardar la integridad y seguridad de
los interesados, que tratándose de violencia familiar deberá siempre decretar:
a) Ordenar la salida del cónyuge demandado de la vivienda donde habita el

grupo familiar.
b) Prohibición al cónyuge demandado de ir a lugar determinado, tal como el

domicilio o el lugar donde trabajan o estudian los agraviados.
c) Prohibir que el cónyuge demandado se acerque a los agraviados a la

distancia que el propio Juez considere pertinente.

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VIII. Revocar o suspender los mandatos que entre los cónyuges se hubieran
otorgado, con las excepciones que marca el artículo 2596 de este código;
IX. Requerirá a ambos cónyuges para que le exhiban, bajo protesta de decir
verdad, un inventario de sus bienes y derechos, así como, de los que se encuentren
bajo el régimen de sociedad conyugal, en su caso, especificando además el titulo bajo
el cual se adquirieron o poseen, el valor que estime que tienen, las capitulaciones
matrimoniales y un proyecto de partición. Durante el procedimiento, recabará la
información complementaria y comprobación de datos que en su caso precise; y
X. Las demás que considere necesarias.”
En consecuencia, esta Sala deberá revocar el auto apelado y dictar otro en su lugar
que decrete y ordene la practica de diversas diligencias para que sean valoradas y en su momento se dicten
las medidas provisionales, además de que se encuentran pendientes de realizar pruebas tales como la Prueba
Pericial Psicológica decretada en autos, y en la misma se emita nueva ordenando la reposición del
procedimiento y la nulidad de las posibles actuaciones y medidas provisionales que se hayan decretado y
efectuado durante el tiempo en que se tramite la presente apelación.
Así mismo, es procedente la presente interposición del Recuso de Apelación, por

virtud de que su Señoría no le da vista la C. Agente del Ministerio Público, simplemente se constriñe a señalar:
“....Con la petición que formula la actora en el sentido de que se le conceda la custodia provisional de su menor
hijo, dése vista al demandado, para que en el término concedido para su contestación de demanda, manifieste
lo que a su derecho corresponda....”, y atendiendo a su superior interés la suscrita es de la opinión que se debe
tomar en cuenta lo manifestado por esta en atención a que los menores tienen derecho a expresar su opinión
respecto de los actos que pudieran afectar tomando su edad y madurez emocional, por lo que manifiesto mi
inconformidad con el régimen provisional decretado por su señoría, razón por la cual, su Señoría en ningún
momento le da vista al C. Agente del Ministerio Público, y en ningún momento se le requiere para que
manifieste lo que a su representación competa con las mediadas provisionales solicitadas. Por lo que es
prudente revocar el régimen provisional. Ya que en caso de que el menor habite con el señor MAURICIO
ESCARPULLI GARCÍA su señoría no se cerciora y no sabe el lugar y las condiciones, pudiendo solicitar una
inspección que se realice por parte de personal de DESARROLLO INTEGRAL DE LA FAMILIA (DIF) de la casa
donde habita el señor MAURICIO ESCARPULLI GARCÍA, para que en auxilio de este H Juzgado y de la
Representación social y sobre todo del menor, se practique un estudio socio económico y habitación del
domicilio donde habita el señor MAURICIO ESCARPULLI GARCÍA , el cual deberá de practicarse en el
domicilio que señala como lugar donde habita, mismo y que sirva de base para determinar si la situación en
que vive el Padre de el menor y si es la más adecuada para su desarrollo Psicológico y educativo el tiempo en
que se encuentra realizando la visita.
Tal situación se deberá valorar todas las circunstancias que rodean a el menor, sin que su
Señoría debió ordenar diversas diligencias que derivara de la Inspección Ocular realizada por parte de personal
que el C. Juez ordenara o comisionara, lo cual no fue llevado a cabo por la Secretaria de Acuerdos de ese
Juzgado, de dicha diligencia no se advierten elementos que determinen que existen circunstancias viables
para el menor, para que fuera procedente dichas mediadas Provisionales dictadas y combatidas, ya que como
hemos venido refiriendo en el acuerdo de fecha 7 de abril del presente año, el A Quo deberá únicamente
valorar las cuestiones planteadas en la demanda y en la Vía Determinada, y al dar contestación a la demanda
la parte demandada, ésta debió dar contestación a los hechos planteados de acuerdo a lo señalado por los
artículos 260, fracción I y V de lo cual se desprende que de la misma, su Señoría debió valorar todas las
circunstancias que rodean al menor y a la misma y más aún cuando la litis se concentra el Temor fundado de
que el padre separe de la Madre a el menor, por ello se solicita un régimen de Guarda y Custodia, pero
apegado alas circunstancias reales y con apoyo de la valoración de las mismas de las partes y con respeto de
el menor., así se transcribe la siguiente:
Octava Época
Instancia: SEGUNDO TRIBUNAL COLEGIADO DEL SEXTO CIRCUITO.
Fuente: Semanario Judicial de la Federación
Tomo: VIII, Septiembre de 1991
Página: 178
PRUEBAS PARA MEJOR PROVEER EN CUESTIONES FAMILIARES.

FACULTAD DEL JUEZ. (LEGISLACION DEL ESTADO DE PUEBLA). Si bien es
cierto que los artículos 1102 y 1105 del Código de Procedimientos Civiles del Estado
de Puebla, respectivamente establecen, que los procedimientos sobre cuestiones
familiares son de orden público y que el juez en esos procedimientos tiene amplias
facultades para investigar la verdad real y podrá ordenar la recepción de cualquier

17
prueba aunque no la ofrezcan las partes, también es cierto que el hecho de recabar
pruebas, aunque no se hayan ofrecido por las partes, es una facultad del juzgador, lo
cual significa que discrecionalmente puede o no hacer uso de tal atribución.
SEGUNDO TRIBUNAL COLEGIADO DEL SEXTO CIRCUITO.
Amparo directo 109/90. Jorge Raúl Sampieri. 11 de mayo de 1990. Unanimidad de

votos. Ponente: José Galván Rojas. Secretario: Vicente Martínez Sánchez.
De lo anterior, se infiere que su Señoría no realizó todas las valoraciones y de las

circunstancias que rodeaban a el menor y de las que se dan durante el proceso.
Novena Época
Instancia: SEGUNDO TRIBUNAL COLEGIADO EN MATERIA CIVIL DEL SEXTO
CIRCUITO.
Fuente: Semanario Judicial de la Federación y su Gaceta
Tomo: XV, Abril de 2002
Tesis: VI.2o.C.224 C
Página: 1290
MENORES DE SIETE AÑOS. EL JUEZ DEBE DECIDIR SOBRE SU

CUSTODIA DE OFICIO, SIN ESPERAR A LA EJECUCIÓN DE SENTENCIA,
CUÁL DE LOS CÓNYUGES DEBE EJERCERLA, PREVALECIENDO EL
INTERÉS DE AQUÉLLOS (LEGISLACIÓN DEL ESTADO DE PUEBLA). Los
artículos 293 y 635, fracciones I y II, incisos a) y c), del Código Civil para el Estado de
Puebla disponen: "Artículo 293. Los negocios familiares se resolverán atendiendo
preferentemente al interés de los menores o mayores incapaces o discapacitados, si
los hubiere en la familia de que se trate; en caso contrario se atenderá al interés de la
familia misma y por último al de los mayores de edad capaces que formen parte de
ella." y "Artículo 635. ... I. El padre y la madre convendrán quién de ellos se hará
cargo de la guarda del menor y con éste habitará el hijo; II. Si los padres no llegaren a
ningún acuerdo: a) Los menores de siete años quedarán al cuidado de la madre. ... c)
Los mayores de doce años elegirán cuál de ambos padres deberá hacerse cargo de
ellos y si éstos no eligen; el Juez decidirá quién deba hacerse cargo de ellos ...".
Ahora bien, si la autoridad responsable sostiene que el Juez de primera instancia
incumplió con el artículo 463 del Código Civil en comento, porque no oyó a los
cónyuges, al menor de siete años y al Ministerio Público y que, por ello, la custodia de
dicho menor debe ser decidida en ejecución de sentencia, este criterio es incorrecto,
ya que dicho artículo debe interpretarse armónicamente con el contenido de los
artículos 293 y 635, fracción II, incisos a) y c), del citado código, que sólo permiten a
los hijos mayores de doce años decidir cuál de sus padres debe hacerse cargo de
ellos, y es para estos casos en que, tratándose de divorcio, debe oírse a los
cónyuges, menores y Ministerio Público, pues de otro modo se estimaría que los
menores de siete años pueden decidir en ese aspecto, resultando innecesaria la
disposición contenida en el inciso a) de la mencionada fracción II del artículo 635, que
imperativamente señala que los menores de siete años quedarán al cuidado de la
madre. En consecuencia, ambos padres no pueden tener la custodia del menor, ni
tampoco esperar a la ejecución de sentencia para decidir cuál de ellos debe ejercerla,
ya que el Juez debe analizar las circunstancias del caso y resolver a cuál de sus
padres corresponde su custodia, atendiendo al interés de los menores.
SEGUNDO TRIBUNAL COLEGIADO EN MATERIA CIVIL DEL SEXTO CIRCUITO.
Amparo directo 298/2001. Noemí Márquez Ávila. 10 de agosto de 2001. Unanimidad

de votos. Ponente: Gustavo Calvillo Rangel. Secretaria: Martha Gabriela Sánchez
Alonso.
De lo anterior también es necesario que se revoque la resolución combatida en virtud de que

su Señoría deja de valorar las circunstancias que rodean a el menor, de acuerdo con los artículos 323 Bis, 323
Ter, 323 Cuater, 323 Quintus y 323 Sextus del Código Civil del Distrito Federal, los hijos e hijos menores de
cinco años se mantendrán al cuidado de la madre; así como conforme lo descrito por la Convención sobre los
Derechos del Menor, deben quedar al cuidado de la madre los hijos menores de siete años; de lo que se
deduce que el legislador tuvo como voluntad que, tanto durante el trámite de los juicios respectivos como al
decidirse éstos, si los cónyuges tuvieren hijos menores de cinco o siete años, deberían pasar a la guarda y
custodia de su madre y en su caso de que convivan con su padre será necesario que lo realicen en las mismas

18
condiciones que lo hacen con la madre. Lo anterior es así, si se parte de la base, que es de explorado
conocimiento jurídico, que los legisladores no producen disposiciones redundantes ni contradictorias y que si lo
hacen es principio de hermenéutica jurídica que las disposiciones de la ley deben interpretarse armónicamente,
de tal manera que las mismas valgan sin excluirse en lo individual y se complemente con las restantes. Luego,
si de los preceptos citados anteriormente se deduce claramente que, tratándose de menores y tratándose del
trámite provisional como acto prejudicial en un juicio o de controversia familiar o en la decisión provisional o
final que se tome en un procedimiento de tal naturaleza, la ley impuso al Juzgador la obligación "siempre" y "en
todo caso", que los menores aludidos se a quien se entreguen en guarda y custodia, ya sea la madre o el
padre, los mismos, obviamente, deberán tener un lugar apropiado para la convivencia con el menor, sin mediar
el trámite incidental, porque fue precisamente esa la voluntad del legislador, lo que se presenta como una
situación razonable y de fácil explicación, si se toma en consideración que el ser humano en esa edad,
necesita de extremos cuidados, enorme protección y cariño que sólo le podrán ser proporcionados por la
madre, pues por más que se le pudieran proporcionar por cualquier otra persona, incluso el padre, nunca,
cuando menos en situaciones normales, tendrán estas personas la posibilidad de sustituir la calificada atención
que le otorga la naturaleza a la madre de los pequeños.
Así transcribo la siguiente, para reafirmar nuestro agravio:
Novena Época
Instancia: TRIBUNAL COLEGIADO DEL VIGESIMO CIRCUITO.
Tomo: IV, Julio de 1996
Tesis: XX.97 C
Página: 397
GUARDA Y CUSTODIA DEL MENOR. AUN CUANDO EL PADRE POSEA UNA

SITUACION ECONOMICA MAS ELEVADA QUE LA DE LA MADRE ES
INSUFICIENTE PARA OTORGARLE LA. (LEGISLACION DEL ESTADO DE
CHIAPAS). De conformidad con el artículo 216 del Código de Procedimientos
Civiles, los hijos menores de siete años deben permanecer bajo el cuidado de la
madre, ya que se ha estimado que, dada su condición física y natural, es quien puede
proporcionar los mayores cuidados y atención con la eficacia y esmero necesarios
para su normal desarrollo, y sólo en los casos de excepción que el Código Civil prevé
en el artículo 439, puede privársele a la madre de la custodia o, en su caso, la patria
potestad, según proceda; por tanto, la circunstancia de que el quejoso, en el carácter
de progenitor del menor, goce de una situación económica más holgada en relación
con la madre de éste, cuya custodia se controvierte, es insuficiente para separar a
dicho menor de su citada progenitora.
TRIBUNAL COLEGIADO DEL VIGESIMO CIRCUITO.
Amparo directo 1016/95. Cándido Girón Garay. 3 de mayo de 1996. Unanimidad de

votos. Ponente: Francisco A. Velasco Santiago. Secretario: José Gabriel Clemente
Rodríguez.
De igual forma, su Señoría de ninguna manera valora las circunstancias que rodean al caso,
ya que simplemente resuelve que el menor conviva con el demandado, sin cerciorarse de que el mismo es una
persona apta para la convivencia, ya que esta pendiente para realizarse una prueba que sería la mas idónea
para determinar la sanidad mental del Padre del el menor, lo que en la especie no sucede, sino que
simplemente se concreta a determinar la resolución combatida sin hacer análisis de la circunstancias que
rodean al caso, así que su Señoría simplemente viola el Principio de Seguridad Jurídica, y dicta el auto
combatido otorgándole la convivencia de el menor en casa del Padre, en contravención de lo manifestado por
el Código Civil, Código de Procedimientos Civiles y de la Convención sobre los Derechos del Menor, dejando
en franco estado de indefensión, para lo cual me pregunto si estamos demandado un régimen de gurda y
custodia, por existir el temor fundado de que el menor sea sustraída de la gurda de la Madre, y le concede al
padre un régimen provisional al padre sin estar supervisada el menor, que o quien nos garantiza que el menor
no será llevada a otro estado, o a otro país, a pesar de lo decretado, toda vez que no existe garantía, con la
resolución combatida que el padre de el menor prive a su madre de la guarda y custodia, ya decretada en
autos, raspón por la cual solicitamos se decrete nula y en su lugar se emita una que permita la convivencia los
Sábados de 10:00 A.M. a 12:00 P.M. y domingos de 10:00 A.M a 12:00 P.M.. en la Casa de Visitas dependiente
del Tribunal Superior de Justicia; lo anterior por virtud de que el menor habita en compañía de su madre;
domicilio que ha quedado indicado en autos mediante escrito de fecha 1°. de abril del año en curso. La anterior

19
determinación se deberá considerar que el menor necesita llegar a una hora apropiada para que pueda cenar y
bañarse para el día siguiente.
Novena Época
Instancia: SEGUNDO TRIBUNAL COLEGIADO EN MATERIAS CIVIL Y
DE TRABAJO DEL SEGUNDO CIRCUITO.
Tomo: III, Enero de 1996
Tesis: II.2o.C.T.15 C
Página: 293
GUARDA Y CUSTODIA. Si bien es cierto que de conformidad con el

artículo 267 del Código Civil del Estado de México, tratándose de divorcio,
corresponde al cónyuge inocente la guarda y custodia de los hijos habidos en
el matrimonio; también lo es que esto no significa que tal disposición se
aplique indiscriminadamente a todos los casos, porque el mismo precepto
legal establece una excepción cuando dispone que el juez puede
discrecionalmente, acordar de oficio cualquier providencia que considere
benéfica para los hijos, lo que implica que el juzgador debe cuidar que la
resolución que emita en este sentido, sea acorde a los intereses de los
menores.
SEGUNDO TRIBUNAL COLEGIADO EN MATERIAS CIVIL Y DE TRABAJO

DEL SEGUNDO CIRCUITO.
Amparo directo 884/95. Rafael Martínez Procel. 13 de septiembre de 1995.

Unanimidad de votos. Ponente: Raúl Solís Solís. Secretaria: E. Laura Rojas
Vargas.
Octava Época
Instancia: QUINTO TRIBUNAL COLEGIADO EN MATERIA CIVIL DEL
PRIMER CIRCUITO.
Tomo: VII, Junio de 1991
Página: 388
PRUEBAS PARA MEJOR PROVEER. CONSTITUYE FACULTAD

DISCRECIONAL DEL JUEZ DECRETAR SU DESAHOGO. Es cierto
que de conformidad con el artículo 278 del Código de Procedimientos Civiles
para el Distrito Federal, el juzgador puede valerse de cualquier medio, no
prohibido por la ley ni contrario a la moral, para conocer la verdad de los
puntos controvertidos, pero también lo es que esa norma no tiene el alcance
consistente en que por el solo hecho de que en un juicio se afirme una
situación, el juez esté legalmente obligado a allegarse los medios de
convicción conducentes para determinar si es verdadera o falsa, pues de
acuerdo con el numeral 281 del citado ordenamiento, las partes deben asumir
la carga de la prueba de los hechos constitutivos de sus pretensiones.
QUINTO TRIBUNAL COLEGIADO EN MATERIA CIVIL DEL PRIMER

CIRCUITO.
Amparo directo 1391/91. Rodolfo Molina Sánchez. 2 de mayo de 1991.

Unanimidad de votos. Ponente: José Luis Caballero Cárdenas. Secretario:
Alejandro Javier Pizaña Nila.
Novena Época
Instancia: SEGUNDO TRIBUNAL COLEGIADO EN MATERIA CIVIL
DEL SEPTIMO CIRCUITO.
Tomo: XIV, Octubre de 2001
Tesis: VII.2o.C.70 C
Página: 1117
DIVORCIO. SOLICITUD DE CONVIVENCIA DE LOS PADRES CON

SUS MENORES HIJOS, DURANTE EL TRÁMITE DEL JUICIO.

20
INTERPRETACIÓN CONJUNTA Y SISTEMATIZADA DEL ORDINAL

156, FRACCIÓN VI, CON LOS DIVERSOS 157, 345 Y 346 DEL
CÓDIGO CIVIL (LEGISLACIÓN DEL ESTADO DE VERACRUZ). Es de
explorado derecho que en la relación matrimonial existen prerrogativas y
obligaciones legalmente reconocidos en principio al padre y a la madre, lo
que válidamente se puede traducir en el concepto de patria potestad. Tales
derechos sólo pueden verse mermados por resolución judicial, como lo
establece el dispositivo 157 del Código Civil local, el cual refiere que en una
sentencia de divorcio se fijará en definitiva la situación de los hijos,
resolviéndose lo relativo a los derechos y obligaciones inherentes a la patria
potestad, su pérdida, suspensión o limitación y, en especial, a la custodia y al
cuidado de los hijos; por lo cual, y dada precisamente la importancia del caso,
el legislador local previó la posibilidad de emitir medidas provisionales, en
tratándose de la custodia de los hijos, durante el desarrollo del procedimiento
de disolución, reflejada tal idea en el ordinal 156, fracción VI, de la
normatividad en cita; ello teniendo como finalidad el evitar afectación a la
salud física y mental de los menores; empero, tal precepto no puede ser
captado en el sentido de que si las partes no realizan planteamiento al
respecto en la demanda o reconvención, precluya su derecho y, como
consecuencia, tengan que esperar hasta el pronunciamiento del fallo
definitivo, pues como se viene diciendo, los afectados serían los hijos. Por
todo ello, indudablemente, el artículo 156, fracción VI, debe ser interpretado
de manera conjunta y armónica con los diversos 157, 345 y 346, todos de la
legislación sustantiva civil, para sostener que en caso de divorcio, quienes
ejercen la patria potestad, deben continuar con el cumplimiento de sus
deberes y derechos, mientras no exista determinación judicial en contrario
que decida provisionalmente a quién corresponderá el cuidado y atenciones
de ellos durante la secuela del procedimiento; y en caso de plantearse
solicitud sobre la convivencia de los padres con sus menores hijos en
cualquier etapa del juicio, deberá ser atendida ipso facto, en pro de los hijos,
efectuando el trámite respectivo.
SEGUNDO TRIBUNAL COLEGIADO EN MATERIA CIVIL DEL SÉPTIMO

CIRCUITO.
Amparo en revisión 634/2000. Armando Silvestre Zavalza Santillán. 16 de

noviembre de 2000. Unanimidad de votos. Ponente: Roberto Alejo Rebolledo
Viveros. Secretario: Omar Liévanos Ruiz.
Sí mismo, es necesario citar la siguiente tesis, ya que su Señoría no valoró las circunsancias que
rodean a el menor y los hechos y las causas que se dieron para interponer la presente controversia de Guarda
y custodia de el menor MAURICIO ESCARPULLI GONZÁLEZ, RESPECTO DE EL TEMOR FUNDADO
DE LAS ACCIONES QUE REALIZARÍA SU PADRE, por lo que:
Novena Época
Instancia: SEGUNDO TRIBUNAL COLEGIADO EN MATERIA CIVIL DEL
SEXTO CIRCUITO.
Página: 1290
MENORES DE SIETE AÑOS. EL JUEZ DEBE DECIDIR SOBRE SU

CUSTODIA DE OFICIO, SIN ESPERAR A LA EJECUCIÓN DE
SENTENCIA, CUÁL DE LOS CÓNYUGES DEBE EJERCERLA,
PREVALECIENDO EL INTERÉS DE AQUÉLLOS (LEGISLACIÓN DEL
ESTADO DE PUEBLA). Los artículos 293 y 635, fracciones I y II, incisos a)
y c), del Código Civil para el Estado de Puebla disponen: "Artículo 293. Los
negocios familiares se resolverán atendiendo preferentemente al interés de
los menores o mayores incapaces o discapacitados, si los hubiere en la
familia de que se trate; en caso contrario se atenderá al interés de la familia
misma y por último al de los mayores de edad capaces que formen parte de
ella." y "Artículo 635. ... I. El padre y la madre convendrán quién de ellos se
hará cargo de la guarda del menor y con éste habitará el hijo; II. Si los padres
no llegaren a ningún acuerdo: a) Los menores de siete años quedarán al

21
cuidado de la madre. ... c) Los mayores de doce años elegirán cuál de ambos
padres deberá hacerse cargo de ellos y si éstos no eligen; el Juez decidirá
quién deba hacerse cargo de ellos ...". Ahora bien, si la autoridad responsable
sostiene que el Juez de primera instancia incumplió con el artículo 463 del
Código Civil en comento, porque no oyó a los cónyuges, al menor de siete
años y al Ministerio Público y que, por ello, la custodia de dicho menor debe
ser decidida en ejecución de sentencia, este criterio es incorrecto, ya que
dicho artículo debe interpretarse armónicamente con el contenido de los
artículos 293 y 635, fracción II, incisos a) y c), del citado código, que sólo
permiten a los hijos mayores de doce años decidir cuál de sus padres debe
hacerse cargo de ellos, y es para estos casos en que, tratándose de divorcio,
debe oírse a los cónyuges, menores y Ministerio Público, pues de otro modo
se estimaría que los menores de siete años pueden decidir en ese aspecto,
resultando innecesaria la disposición contenida en el inciso a) de la
mencionada fracción II del artículo 635, que imperativamente señala que los
menores de siete años quedarán al cuidado de la madre. En consecuencia,
ambos padres no pueden tener la custodia del menor, ni tampoco esperar a
la ejecución de sentencia para decidir cuál de ellos debe ejercerla, ya que el
Juez debe analizar las circunstancias del caso y resolver a cuál de sus
padres corresponde su custodia, atendiendo al interés de los menores.
SEGUNDO TRIBUNAL COLEGIADO EN MATERIA CIVIL DEL SEXTO

CIRCUITO.
Amparo directo 298/2001. Nohemí Márquez Ávila. 10 de agosto de 2001.

Unanimidad de votos. Ponente: Gustavo Calvillo Rangel. Secretaria: Martha
Gabriela Sánchez Alonso.
Novena Época
Instancia: CUARTO TRIBUNAL COLEGIADO EN MATERIA CIVIL DEL
PRIMER CIRCUITO.
Tomo: XI, Marzo de 2000
Tesis: I.4o.C.36 C
Página: 976
CONVIVENCIA FAMILIAR. PUEDE PROMOVERSE EN EJECUCIÓN

DE SENTENCIA O EN UN JUICIO AUTÓNOMO. Aun cuando en la
sentencia de divorcio no se haya hecho pronunciamiento respecto a la
convivencia familiar, de conformidad con el artículo 283 del Código Civil, los
Jueces gozan de las más amplias facultades para resolver, en la sentencia de
divorcio, todo lo relativo a los derechos y obligaciones inherentes a la patria
potestad, su pérdida, suspensión o limitación, según sea el caso, y en
especial a la custodia y cuidado de los hijos; por lo que si en la sentencia de
divorcio se resolvió que ambos cónyuges conservarían la patria potestad de
sus menores hijos, y que la guarda y custodia quedaría a cargo de uno de
ellos, la fijación de reglas para la convivencia familiar, como un derecho de
los padres, inherente a la patria potestad, bien puede pedirse en juicio
autónomo o mediante incidente después de concluido el juicio de divorcio.
CUARTO TRIBUNAL COLEGIADO EN MATERIA CIVIL DEL PRIMER

CIRCUITO.
Amparo en revisión 4940/99. Lucía López Calzada y Adolfo Ramos Lemus.

28 de enero de 2000. Unanimidad de votos. Ponente: Rafaela Reyna Franco
Flores, secretaria de tribunal autorizada por el Pleno del Consejo de la
Judicatura Federal para desempeñar las funciones de Magistrada. Secretaria:
Leticia Araceli López Espíndola.
Novena Época

22
Instancia: SEXTO TRIBUNAL COLEGIADO EN MATERIA CIVIL DEL

PRIMER CIRCUITO.
Tomo: IX, Abril de 1999
Tesis: I.6o.C.175 C
Página: 571
MENORES DE EDAD. SU DEPÓSITO BAJO TUTELA PROVISIONAL

DE UN ALBERGUE NO CONSTITUYE DETENCIÓN NI PRIVACIÓN
ILEGAL DE LA LIBERTAD, SINO QUE LA MEDIDA ES PARA
OTORGARLES PROTECCIÓN Y LOGRAR SU DESARROLLO
INTEGRAL EN CASO DE ABANDONO, CONFLICTO, DAÑO O
PELIGRO. El hecho de que un menor sea puesto bajo la tutela provisional
de un albergue por ordenamiento escrito de autoridad competente, fundando
y motivando la causa legal para ello, no significa que esté en calidad de
detenido o bajo privación ilegal de la libertad conculcándose algún precepto
de orden público y como consecuencia el artículo 16 constitucional, toda vez
que la finalidad de la medida es de otorgar protección a los menores de edad
que por alguna razón se encuentren en abandono, conflicto, daño o peligro,
para lograr en ellos su desarrollo integral; lo anterior, de conformidad con lo
dispuesto por los artículos 40 y 41 del Reglamento de la Ley Orgánica de la
Procuraduría General de Justicia del Distrito Federal, hasta en tanto quien
tenga la guarda y custodia provisional, pueda ejercitar su facultad; en la
inteligencia de que sólo se utilizará como medida de último recurso y durante
el periodo más breve que proceda.
SEXTO TRIBUNAL COLEGIADO EN MATERIA CIVIL DEL PRIMER

CIRCUITO.
Amparo en revisión 4366/98. Juan Silvestre García Acevedo y otro. 2 de

febrero de 1999. Unanimidad de votos. Ponente: Adalid Ambriz Landa.
Secretaria: María Teresa Covarrubias Ramos.
Así mismo, su Señoría, debió valora las circunstancias de la Demanda para conceder la
medida provisional de la forma en que loa otorgó, ya que no valora al conceder la visita de el
menor con el padre, sin obtener un domicilio donde dormirá el menor es decir soltó a el menor
al padre sin saber donde habitará con el menor, y sin valora si el domicilio que desde luego
desconocemos reúne las características necesarias de salubridad e higiene, Sirve para
valorar lo anterior las siguientes circunstancias:
Novena Época
Tomo: VIII, Octubre de 1998
Tesis: II.2o.C.123 C
Página: 1126
CONVIVENCIA DEL PADRE CON SUS MENORES HIJOS. NO

PROCEDE SI EXISTE PRESUNCIÓN FUNDADA DE QUE EL
PROGENITOR COMETIÓ ACTOS LIBIDINOSOS EN PERJUICIO DE
DICHOS HIJOS (LEGISLACIÓN DEL ESTADO DE MÉXICO). De
conformidad con lo que dispone el artículo 267 del Código Civil para el
Estado de México, el juzgador al resolver sobre el divorcio debe determinar lo
referente a la guarda y custodia de los menores hijos, así como lo relativo al
derecho de convivencia, pero siempre acorde con lo que beneficie a tales
menores. De consiguiente, si en el juicio respectivo obran las diversas
documentales ofrecidas por las partes, consistentes en copia certificada de la
orden de aprehensión dictada contra el interesado como presunto
responsable de haber cometido actos libidinosos en contra de sus menores
hijos, así como un informe en sicología, y ambas pruebas, concatenadas
entre sí, permitieron a la responsable estimar que existe una clara presunción
fundada y lógica de que la convivencia del padre con las menores aludidas
pueda producir efectos dañinos en la salud, costumbres, y sobre todo, temor
y alteración respecto de la figura paterna por parte de sus hijos, ello es

23
concluyente para que el ahora quejoso no tenga derecho a tal convivencia,

previniéndose así posibles daños irreparables en perjuicio de dichas
menores, cuya decisión no es conculcatoria de las garantías de legalidad y
seguridad jurídica.
SEGUNDO TRIBUNAL COLEGIADO EN MATERIA CIVIL DEL SEGUNDO

CIRCUITO.
Amparo directo 199/98. Juan Carlos Ruiz Ríos. 1o. de septiembre de 1998.
Unanimidad de votos. Ponente: Virgilio A. Solorio Campos. Secretario: José
Valdés Villegas.
Segundo.- Ocasiona serio perjuicio el contenido del auto dictado por su

Señoría en Audiencia de fecha 7 de abril del año en curso y publicado mediante boletín No. 68 de fecha 12 abril
del año en curso, causando perjuicio lo dictado en dicha audiencia, y en especial lo descrito de la siguiente
manera:

al C. Secretario de Relaciones exteriores no se le ha solicitado implementar medida alguna

24

y de quien detenta la Guarda y Custodia de el menor, en razón a que el mismo no provee respecto de las
pruebas documentales con excepción de la documental marcada con el número cuatro toda vez que la misma
si indica en que consiste el informe a solicitar, de donde de la simple lectura y debida interpretación se
desprende que se solicita que el señor ABEL ESCARPULLI GARCIA solicite pasaporte u obtenga un nuevo
pasaporte para el menor MAURICIO ESCARPULLI GONZÁLEZ lo cual tiene un gran relación con el temor
fundado para que sustraiga al menor de la compañía de su madre, y de la prueba documental marcada con el
apartado cinco, toda vez que al C. Secretario de Relaciones Exteriores y en ese acto se le solicita implementar
medidas para que el demandado no obtenga duplicado del pasaporte del menor antes mencionado de la
situación en que vive el menor, es decir, vive en compañía de su madre dentro del Distrito Federal, poniendo en
peligro a el menor en cada traslado de lo cual hacemos responsable a su Señoría, además de que en dicho
menor tiene apenas un año de edad, situación de la cual es omisa el Juez que conoce de la causa, pasando
por alto lo descrito por los artículos que a a continuación transcribo pero en especial sobre lo decretado en las
medidas precautorias que tiendan a preservar la familia y proteger a sus miembros, así:
“ARTICULO 940
Todos los problemas inherentes a la familia se consideran de orden público, por constituir
aquella la base de la integración de la sociedad.”
“ARTICULO 941
El juez de lo familiar estará facultado para intervenir de oficio en los asuntos que afecten a la
familia, especialmente tratándose de menores, de alimentos y de cuestiones relacionadas con
violencia familiar, decretando las medidas precautorias que tiendan a preservar la familia y
proteger a sus miembros.
En todos los asuntos del orden familiar los Jueces y Tribunales están obligados a suplir la
deficiencia de las partes en sus planteamientos de derecho....”
De lo anterior, es necesario recordarle al A Quo que existen en ese sentido criterios

expresados por la Suprema Corte de Justicia, así:
Novena Época
Instancia: SEGUNDO TRIBUNAL COLEGIADO EN MATERIA CIVIL DEL SEGUNDO
CIRCUITO.
Tomo: XVII, Enero de 2003
Tesis: II.2o.C.78 K
Página: 1870
SUSPENSIÓN PROVISIONAL. PROCEDE CONCEDERLA MIENTRAS SE DECIDE

SOBRE LA DEFINITIVA TRATÁNDOSE DE MENORES, SUPLIÉNDOSE LA
DEFICIENCIA DE LA QUEJA. Si en un juicio de amparo el ascendiente de un menor
reclama la falta de legalidad de la determinación que declara ejecutoriado el fallo de primera
instancia, y solicita la suspensión para evitar que éste sea entregado a su madre, debe
concederse tal medida provisionalmente, mientras se decide sobre la definitiva, ya que al
encontrarse sub júdice la legalidad o no de los actos reclamados, carece de definitividad tal
resolución. Así, con independencia de ser cierto que existe un interés de orden público en que
se cumplan las sentencias ejecutoriadas, también resulta verídico que mientras no se decida
en definitiva sobre la legalidad del aludido acuerdo, es conveniente que se conceda la medida
cautelar solicitada atendiéndose fundamentalmente a la minoría de edad del hijo, cuya
custodia discuten sus padres, para que entre tanto no se le afecte ni sufra daños de difícil
reparación en su persona e integridad, porque la sociedad y el Estado están interesados en
que tratándose de los menores de edad se les proteja y que se evite que pudieren sufrir algún
maltrato físico o emocional en su entorno personal y social. Ello, porque en términos de lo
dispuesto por el artículo 76 bis, en su fracción V, de la Ley de Amparo, las autoridades que
conozcan del juicio de garantías tienen el deber de suplir la deficiencia de los conceptos de
violación o de los agravios respectivos, siempre que esté de por medio, directa o
indirectamente, el bienestar de un menor de edad.

25
SEGUNDO TRIBUNAL COLEGIADO EN MATERIA CIVIL DEL SEGUNDO CIRCUITO.
Queja 25/2002. Francisco García Lugo. 22 de noviembre de 2002. Unanimidad de votos.

Ponente: Virgilio A. Solorio Campos.
Novena Época
Instancia: SEGUNDO TRIBUNAL COLEGIADO EN MATERIA CIVIL DEL SEGUNDO
CIRCUITO.
Tomo: XVII, Junio de 2003
Página: 993
GUARDA Y CUSTODIA. ES CORRECTA Y LEGAL LA DETERMINADA EN FAVOR DE

LA MADRE, SI PRIMORDIALMENTE ELLO BENEFICIA AL MENOR. Tratándose de un
juicio donde se discuta el ejercicio de la guarda y custodia de un menor, la cual queda a cargo
de la madre, y en el hogar o domicilio respectivo vive el infante junto con sus hermanas, sin
demostrarse que tal situación pudiere causar algún daño o tener una influencia negativa en el
desarrollo físico, emocional e intelectual de dicho menor, debe estimarse adecuado y acorde a
la ley lo decidido por la responsable al confirmar dichas guarda y custodia a favor de la
progenitora, sobre todo si la controversia no se sustentó en la falta de las condiciones ideales
sobre dicha convivencia familiar en ese núcleo, aunado ello a que el pequeño interesado ha
externado su deseo de estar a lado de su madre, por prevalecer un mejor clima de
convivencia en dicho ambiente familiar primario conformado además por las hermanas, lo cual
incuestionablemente le favorecerá y no es contrario a los principios de legalidad y de
seguridad jurídica; salvo que de las actuaciones relativas se advirtiera la necesidad imperiosa
de recabar pruebas oficiosamente en dicha temática.
SEGUNDO TRIBUNAL COLEGIADO EN MATERIA CIVIL DEL SEGUNDO CIRCUITO.
Amparo directo 80/2003. 3 de marzo de 2003. Unanimidad de votos. Ponente: Virgilio A.

Solorio Campos. Secretario: Faustino García Astudillo.
Novena Época
Instancia: TERCER TRIBUNAL COLEGIADO EN MATERIA CIVIL DEL SEGUNDO
CIRCUITO.
Tomo: XVI, Octubre de 2002
Tesis: II.3o.C. J/4
Página: 1206
GUARDA Y CUSTODIA. DEBE DETERMINARSE CONSIDERANDO EL INTERÉS

SUPERIOR DE NIÑAS, NIÑOS Y ADOLESCENTES CONFORME A LA CONVENCIÓN
SOBRE LOS DERECHOS DEL NIÑO. El derecho a la guarda y custodia de una niña, niño
y adolescente, implica considerar no sólo las pruebas ofrecidas por las partes con las que
pretendan demostrar una adecuada capacidad para el cuidado del menor, sino que atendiendo
al beneficio directo de la infancia, el juzgador también debe considerar el interés superior de la
niña, niño y adolescente como presupuesto esencial para determinar quién tiene derecho a la
guarda y custodia. Ello, porque conforme a lo dispuesto por el artículo 4o. constitucional que
establece el desarrollo integral, el respeto a la dignidad y derechos de la niñez, así como los
artículos 3o., 7o., 9o., 12, 18, 19, 20 y 27 de la Convención sobre los Derechos del Niño,
ratificada por México el veintiuno de septiembre de mil novecientos ochenta y nueve, que
establece que los Estados garantizarán que los tribunales judiciales velen por el interés
superior del niño, los juicios en los que se vean involucrados derechos inherentes de las niñas,
niños y adolescentes, como el caso en que se demande la guarda y custodia, debe tenerse
como presupuesto esencial el interés superior del niño y darle intervención al Ministerio
Público, para que en su carácter de representante de la sociedad, vele por los derechos de los
infantes y adolescentes.
TERCER TRIBUNAL COLEGIADO EN MATERIA CIVIL DEL SEGUNDO CIRCUITO.
Amparo directo 170/2000. Adrián Escorcia Martínez y otra. 1o. de marzo de 2001. Unanimidad
de votos. Ponente: Felipe Alfredo Fuentes Barrera. Secretaria: Cristina García Acuautla.

26
Amparo directo 935/2000. Rosa María Reyes Galicia y otro. 17 de octubre de 2001.
Unanimidad de votos. Ponente: Raúl Solís Solís. Secretaria: Yolanda González Medrano.
Amparo directo 980/2000. Geni Vega Espriella. 26 de junio de 2001. Unanimidad de votos.
Ponente: Raúl Solís Solís. Secretaria: Yolanda González Medrano.
Amparo directo 701/2001. Ignacio Alfaro Hernández. 29 de enero de 2002. Unanimidad de

votos. Ponente: Raúl Solís Solís. Secretaria: E. Laura Rojas Vargas.
Amparo directo 367/2002. Carlos Octavio Juárez González. 9 de julio de 2002. Unanimidad de
votos. Ponente: José Fernando García Quiroz, secretario de tribunal autorizado por el Pleno
del Consejo de la Judicatura Federal para desempeñar las funciones de Magistrado.
Secretario: Jorge Luis Mejía Perea.
Así es necesario que se analice debidamente la ejecutoria que a continuación transcribo, para
que la Ad Cuem modifique el acuerdo combatido, así que:
Novena Época
Semanario Judicial de la Federación y su Gaceta
Instancia: Tribunales Colegiados de Circuito
Época: NOVENA EPOCA
Página: 1207
AMPARO DIRECTO 367/2002. CARLOS OCTAVIO JUÁREZ GONZÁLEZ.
CONSIDERANDO:
QUINTO. El estudio de los conceptos de violación arroja el siguiente resultado.
Para ilustrar la decisión que este órgano colegiado habrá de tomar en el presente asunto,
conviene realizar las siguientes precisiones:
La familia es un núcleo de personas que como grupo social ha surgido de la naturaleza y

deriva primordialmente del hecho biológico de la generación.
En un sentido amplio, es el conjunto de personas que proceden de un progenitor o tronco

común; sus fuentes son el matrimonio, la filiación (legítima o natural) y en casos excepcionales
la adopción.
Esta relación conyugal, paterno filial y de parentesco colateral de origen consanguíneo o

simplemente de naturaleza legal, establece vínculos entre los componentes de ese grupo
familiar de diverso orden e intensidad (sentimentales, morales, jurídicos, económicos y de
auxilio o ayuda recíproca) que no permanecen ajenos al derecho objetivo sino, por el
contrario, éste afianza, reafirma y consolida, atribuyendo a dichos vínculos el carácter de
deberes, obligaciones, facultades y derechos.
Las normas jurídicas que se ocupan de regular, creando y organizando tales relaciones,
forman el derecho de familia que comprende las disposiciones legales relativas al matrimonio,
al concubinato, a la filiación, a los alimentos, al patrimonio de la familia, a la patria potestad, a
la emancipación, a la tutela, etcétera.
Por tanto, el derecho de familia es un conjunto de normas jurídicas destinadas a regir la

conducta de los miembros del grupo familiar entre sí, creando las relaciones conyugales,
constituidas por un sistema de derechos y obligaciones, poderes, facultades y deberes entre
consortes y parientes.
Esas facultades y deberes de carácter asistencial que nacen entre los parientes colaterales
(hermanos, tíos, sobrinos, etcétera), tienen entre ascendientes y descendientes un aspecto de
potestades y sujeciones establecidas para la protección de los hijos.

27
Así pues, el derecho de familia se ocupa, entre otros aspectos, de la protección de los
menores a través del ejercicio de la patria potestad, la que es considerada como una
institución protectora de la persona y bienes de los hijos menores de edad, no emancipados,
que nace de la filiación. Su ejercicio corresponde en primer término a los progenitores (el
padre y la madre del menor) y a falta de éstos, a los demás ascendientes por la línea paterna
y por la línea materna, a falta de padres y abuelos paternos.
Pero cuando ambos padres del menor ejercen la patria potestad, pero viven separados sea
cual fuere la causa, entonces surge la necesidad de determinar con quién de ellos habrá de
vivir el menor, es decir, cuál de los progenitores ejercerá el derecho de custodia sobre ese hijo.
Es pertinente precisar que la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, que rige
el sistema jurídico de nuestro país desde mil novecientos diecisiete, estableció diversas
garantías de orden personal y social en favor de los menores, precisamente en su artículo 4o.,
en los términos siguientes:
"Artículo 4o. ...
"Es deber de los padres preservar el derecho de los menores a la satisfacción de sus
necesidades y a la salud física y mental. La ley determinará los apoyos a la protección de los
menores, a cargo de las instituciones públicas."
"Artículo 4o. ...
"Los niños y las niñas tienen derecho a la satisfacción de sus necesidades de alimentación,
salud, educación y sano esparcimiento para su desarrollo integral.
"Los ascendientes, tutores y custodios tienen el deber de preservar estos derechos. El Estado
proveerá lo necesario para propiciar el respeto a la dignidad de la niñez y el ejercicio pleno de
sus derechos.
"El Estado otorgará facilidades a los particulares para que se coadyuven al cumplimiento de
los derechos de la niñez."
También es pertinente dejar asentado que nuestro país es parte integrante de la Convención
sobre los Derechos del Niño, adoptada en Nueva York, Estados Unidos de América, en mil
novecientos ochenta y nueve, en vigor desde el dos de septiembre de mil novecientos noventa
y ratificada por nuestro país el veintiuno de septiembre de ese mismo año.
La declaración de principios contenida en el preámbulo de este instrumento de derecho

internacional, resalta como puntos esenciales: la igualdad de derechos para todos los
miembros de la familia humana; la dignidad y el valor de la persona humana; la promoción del
progreso y elevación de los niveles de vida dentro de un marco de libertad; el derecho de la
infancia a tener cuidados y asistencia especiales por su falta de madurez tanto física como
mental; la protección de la familia como grupo en el cual la niñez crece y se desarrolla; el
reconocimiento de la persona humana en su niñez, su necesidad de crecer en un ambiente
familiar de felicidad, amor y comprensión para lograr un desarrollo pleno y armonioso; la
preparación de la niñez para una vida independiente con "espíritu de paz, dignidad, tolerancia,
libertad, igualdad y solidaridad"; la toma de conciencia de las condiciones especialmente
difíciles en las que viven muchos niños y niñas en el mundo y la importancia de las
tradiciones.
Con base en esa declaración de principios, los artículos del 1o. al 41 de la citada convención
enuncian los siguientes derechos para la niñez: el derecho a la vida y a un sano desarrollo
psicofísico; el derecho a la identidad, que incluye el derecho al nombre y a la nacionalidad; el
derecho a una atención especial en consideración a sus propios intereses calificados de
superiores en todas las instancias judiciales, administrativas o de bienestar social; el derecho
a dar su opinión y que ésta sea tomada en cuenta en todos los asuntos que le afecten,
incluyendo los de carácter judicial y administrativo; el derecho a la no discriminación; el
derecho a vivir en familia, que incluye la incorporación plena a una nueva familia a través de la
adopción; el derecho a ser protegido contra peligros físicos o mentales, contra el descuido, el
abuso sexual, la explotación, el uso de drogas y enervantes o el secuestro y la trata; el
derecho a que se le proporcionen los cuidados alternativos adecuados en caso de desamparo
familiar; el derecho a una educación, trato y cuidados especiales en caso de impedimento
psicofísico o cuando hayan sido víctimas de maltrato; el derecho a disfrutar del más alto nivel

28
posible de salud; el derecho a la enseñanza primaria y a una educación que respete su

dignidad y los prepare para la vida en un espíritu de comprensión, paz y tolerancia; el derecho
al descanso, al juego y a las actividades culturales y artísticas; el derecho a disfrutar
libremente de su cultura, religión o idioma, entre otros.
Ahora bien, de la Convención sobre los Derechos del Niño, cabe destacar lo prescrito en los
dispositivos 3o., 7o., 9o., 12, 18, 19, 20 y 27, que en forma preponderante constriñen a los
tribunales judiciales a velar por el interés superior del niño, en los siguientes términos:
"Artículo 3o.
"1. En todas las medidas concernientes a los niños que tomen las instituciones públicas o
privadas de bienestar social, los tribunales, las autoridades administrativas o los órganos
legislativos, una consideración primordial a que se atenderá será el interés superior del niño.
"2. Los Estados Partes se comprometen a asegurar al niño la protección y el cuidado que sean
necesarios para su bienestar, teniendo en cuenta los derechos y deberes de sus padres,
tutores u otras personas responsables de él ante la ley y, con ese fin, tomarán todas las
medidas legislativas y administrativas adecuadas.
"3. Los Estados Partes se asegurarán de que las instituciones, servicios y establecimientos
encargados del cuidado o la protección de los niños cumplan las normas establecidas por las
autoridades competentes, especialmente en materia de seguridad, sanidad, número y
competencia de su personal, así como en relación con la existencia de una supervisión
adecuada."
"Artículo 9o.
"1. Los Estados Partes velarán porque el niño no sea separado de sus padres contra la
voluntad de éstos, excepto cuando, a reserva de revisión judicial, las autoridades competentes
determinen, de conformidad con la ley y los procedimientos aplicables, que tal separación es
necesaria en el interés superior del niño. Tal determinación puede ser necesaria en casos
particulares, por ejemplo, en los casos en que el niño sea objeto de maltrato o descuido por
parte de sus padres o cuando éstos viven separados y debe adoptarse una decisión acerca
del lugar de residencia del niño.
"2. En cualquier procedimiento entablado de conformidad con el párrafo 1 del presente

artículo, se ofrecerá a todas las partes interesadas la oportunidad de participar en él y de dar a
conocer sus opiniones.
"3. Los Estados Partes respetarán el derecho del niño que esté separado de uno o de ambos
padres a mantener relaciones personales y contacto directo con ambos padres de modo
regular, salvo si ello es contrario al interés superior del niño.
"4. Cuando esa separación sea resultado de una medida adoptada por un Estado Parte, como
la detención, el encarcelamiento, el exilio, la deportación o la muerte (incluido el fallecimiento
debido a cualquier causa mientras la persona esté bajo la custodia del Estado) de uno de los
padres del niño, o de ambos, o del niño, el Estado Parte proporcionará, cuando se le pida, a
los padres, al niño o, si procede, a otro familiar, información básica acerca del paradero del
familiar o familiares ausentes, a no ser que ello resultase perjudicial para el bienestar del niño.
Los Estados Partes se cerciorarán, además, de que la presentación de tal petición no entrañe
por sí misma consecuencias desfavorables para la persona o personas interesadas."
"Artículo 12.
"1. Los Estados Partes garantizarán al niño que esté en condiciones de formarse un juicio
propio el derecho de expresar su opinión libremente en todos los asuntos que afectan al niño,
teniéndose debidamente en cuenta las opiniones del niño, en función de la edad y madurez
del niño.
"2. Con tal fin, se dará en particular al niño oportunidad de ser escuchado, en todo
procedimiento judicial o administrativo que afecte al niño, ya sea directamente o por medio de
un representante o de un órgano apropiado, en consonancia con las normas de procedimiento
de la ley nacional."

29
"Artículo 19.
"1. Los Estados Partes adoptarán todas las medidas legislativas, administrativas, sociales y
educativas apropiadas para proteger al niño contra toda forma de perjuicio o abuso físico o
mental, descuido o trato negligente, malos tratos o explotación, incluido el abuso sexual,
mientras el niño se encuentre bajo la custodia de los padres, de un representante legal o de
cualquier otra persona que lo tenga a su cargo.
"2. Esas medidas de protección deberían comprender, según corresponda, procedimientos

eficaces para el establecimiento de programas sociales con objeto de proporcionar la
asistencia necesaria al niño y a quienes cuidan de él, así como para otras formas de
prevención y para la identificación, notificación, remisión a una institución, investigación,
tratamiento y observación ulterior de los casos antes descritos de malos tratos al niño y, según
corresponda, la intervención judicial."
"Artículo 20.
"1. Los niños temporal o permanentemente privados de su medio familiar, o cuyo superior
interés exija que no permanezcan en ese medio, tendrán derecho a la protección y asistencia
especiales del Estado.
"2. Los Estados Partes garantizarán, de conformidad con sus leyes nacionales, otros tipos de
cuidado para esos niños.
"3. Entre esos cuidados figurarán, entre otras cosas, la colocación en hogares de guarda, la
kafala del derecho islámico, la adopción o de ser necesario, la colocación en instituciones
adecuadas de protección de menores. Al considerar las soluciones, se prestará particular
atención a la conveniencia de que haya continuidad en la educación del niño y a su origen
étnico, religioso, cultural y lingüístico."
"Artículo 21.
"Los Estados Partes que reconocen o permiten el sistema de adopción cuidarán de que el
interés superior del niño sea la consideración primordial. ..."
"Artículo 27.
"1. Los Estados Partes reconocen el derecho de todo niño a un nivel de vida adecuado para
su desarrollo físico, mental, espiritual, moral y social.
"2. A los padres u otras personas encargadas del niño les incumbe la responsabilidad
primordial de proporcionar, dentro de sus posibilidades y medios económicos, las condiciones
de vida que sean necesarias para el desarrollo del niño. ..."
Como efecto inmediato de esta convención aparece en el sistema jurídico mexicano el

concepto del interés superior de la niñez, el cual implica que en todo momento las políticas,
acciones y toma de decisiones relacionadas con esta etapa de la vida humana, tendrán que
realizarse de tal manera que, en primer término, se busque el beneficio directo del niño o niña
a quien van dirigidas.
De esta manera, las instituciones familiares heredadas desde el derecho romano vuelven a
sufrir una transformación acercándose más hacia la niñez y alejándose más de los intereses
de los adultos. La patria potestad es un ejemplo muy claro de estas transformaciones.
Antiguamente implicaban el derecho de vida o muerte que el pater tenía sobre las personas
sujetas a él; visión que, poco a poco, fue cambiando para dirigir su foco de atención hacia la
niñez, estableciendo no sólo derechos para quien ejerce la patria potestad, sino también
deberes y, como ya vimos, los primeros sólo existen en función de estos últimos para facilitar
su cumplimiento. Así, se convierte de un poder, en una función social.
En este panorama, la aparición del concepto interés superior de la niñez supedita, con mayor
claridad, los derechos que las personas adultas pudieran tener sobre un niño o niña, al deber
de atenderlos y cuidarlos, buscando siempre el mayor beneficio posible para ellos, como un
imperativo de la comunidad hacia las personas que ejercen la patria potestad. Con ello, la
función social es ahora explícitamente de orden público e interés social.

30
Ahora, por disposición expresa del artículo 133 constitucional, los tribunales judiciales, al
resolver sobre controversias que incidan sobre los derechos de los menores, tienen la
obligación de atender a estas disposiciones.
En efecto, el citado precepto establece:
"Esta Constitución, las leyes del Congreso de la Unión que emanen de ella y todos los
tratados que estén de acuerdo con la misma, celebrados y que se celebren por el presidente
de la República, con aprobación del Senado, serán la Ley Suprema de toda la Unión. Los
Jueces de cada Estado se arreglarán a dicha Constitución, leyes y tratados, a pesar de las
disposiciones en contrario que pueda haber en las Constituciones o leyes de los Estados."
De la transcripción anterior se desprende que constitucionalmente se reconoce en los tratados

la fuente única del derecho internacional y, como consecuencia de lo anterior, el Constituyente
mexicano reconoce la incorporación de las normas contenidas en los tratados dentro del
sistema jurídico y las hace vigentes cuando se cumpla con los requisitos que la misma
establece.
De acuerdo con la interpretación gramatical de la primera parte del artículo 133, para
considerar que un tratado sea, junto con las leyes emanadas de la Constitución y que sean
aprobadas por el Congreso de la Unión, "la Ley Suprema de toda la Unión", es menester que
se satisfagan dos requisitos formales y uno de fondo: los primeros se hacen consistir en que el
tratado esté o sea celebrado por el presidente de la República y que sea aprobado por el
Senado. El requisito de fondo consiste en la adecuación de la convención internacional con el
texto de la propia Ley Fundamental.
Por otra parte, es oportuno destacar la supremacía de los tratados frente a la legislación local.
Esta posición ha sido soportada por las diversas teorías asumidas por los principales
constitucionalistas mexicanos, las que plantean la superioridad de los tratados frente a la
legislación local. Esta situación se ve reforzada no sólo por la fuerza normativa que
representan los compromisos internacionales, sino sobre todo por el hecho de que es suscrito
por el presidente de la República en su carácter de jefe de Estado y la participación del
Senado en el proceso que, como se mencionó, representa la participación de las entidades
federativas en el proceso de incorporación de un compromiso internacional al derecho positivo
mexicano. Cuando surgen conflictos entre lo prescrito por las normas de derecho interno y del
derecho internacional adoptado como vigente, de acuerdo con nuestro sistema constitucional,
debe partirse de la base del nivel jerárquico de la norma en cuestión y sobre todo del mandato
que la Constitución establece sobre el particular; un tratado tendrá la jerarquía que expresa o
tácitamente la propia Ley Fundamental le dé, que en nuestro ámbito constitucional se ubica
jerárquicamente por encima de las leyes federales y en un segundo plano respecto de la
Constitución Federal.
Sirve de fundamento a lo anterior la tesis P. LXXVII/99, publicada en el Semanario Judicial de

la Federación y su Gaceta, Novena Época, Tomo X, noviembre de 1999, página 46, que dice:
"TRATADOS INTERNACIONALES. SE UBICAN JERÁRQUICAMENTE POR ENCIMA DE LAS

LEYES FEDERALES Y EN UN SEGUNDO PLANO RESPECTO DE LA CONSTITUCIÓN
FEDERAL. Persistentemente en la doctrina se ha formulado la interrogante respecto a la
jerarquía de normas en nuestro derecho. Existe unanimidad respecto de que la Constitución
Federal es la norma fundamental y que aunque en principio la expresión ‘... serán la Ley
Suprema de toda la Unión ...’ parece indicar que no sólo la Carta Magna es la suprema, la
objeción es superada por el hecho de que las leyes deben emanar de la Constitución y ser
aprobadas por un órgano constituido, como lo es el Congreso de la Unión y de que los
tratados deben estar de acuerdo con la Ley Fundamental, lo que claramente indica que sólo la
Constitución es la Ley Suprema. El problema respecto a la jerarquía de las demás normas del
sistema, ha encontrado en la jurisprudencia y en la doctrina distintas soluciones, entre las que
destacan: supremacía del derecho federal frente al local y misma jerarquía de los dos, en sus
variantes lisa y llana, y con la existencia de ‘leyes constitucionales’, y la de que será ley
suprema la que sea calificada de constitucional. No obstante, esta Suprema Corte de Justicia
considera que los tratados internacionales se encuentran en un segundo plano
inmediatamente debajo de la Ley Fundamental y por encima del derecho federal y el local.
Esta interpretación del artículo 133 constitucional, deriva de que estos compromisos
internacionales son asumidos por el Estado mexicano en su conjunto y comprometen a todas
sus autoridades frente a la comunidad internacional; por ello se explica que el Constituyente

31
haya facultado al presidente de la República a suscribir los tratados internacionales en su

calidad de jefe de Estado y, de la misma manera, el Senado interviene como representante de
la voluntad de las entidades federativas y, por medio de su ratificación, obliga a sus
autoridades. Otro aspecto importante para considerar esta jerarquía de los tratados, es la
relativa a que en esta materia no existe limitación competencial entre la Federación y las
entidades federativas, esto es, no se toma en cuenta la competencia federal o local del
contenido del tratado, sino que por mandato expreso del propio artículo 133 el presidente de la
República y el Senado pueden obligar al Estado mexicano en cualquier materia,
independientemente de que para otros efectos ésta sea competencia de las entidades
federativas. Como consecuencia de lo anterior, la interpretación del artículo 133 lleva a
considerar en un tercer lugar al derecho federal y al local en una misma jerarquía en virtud de
lo dispuesto en el artículo 124 de la Ley Fundamental, el cual ordena que ‘Las facultades que
no están expresamente concedidas por esta Constitución a los funcionarios federales, se
entienden reservadas a los Estados.’. No se pierde de vista que en su anterior conformación,
este Máximo Tribunal había adoptado una posición diversa en la tesis P. C/92, publicada en la
Gaceta del Semanario Judicial de la Federación, número 60, correspondiente a diciembre de
1992, página 27, de rubro: ‘LEYES FEDERALES Y TRATADOS INTERNACIONALES. TIENEN
LA MISMA JERARQUÍA NORMATIVA.’; sin embargo, este Tribunal Pleno considera oportuno
abandonar tal criterio y asumir el que considera la jerarquía superior de los tratados incluso
frente al derecho federal."
En las condiciones apuntadas, debe concluirse que en toda contienda judicial en que se vean
involucrados derechos inherentes a los menores, debe resolverse atendiendo a un principio
básico: el interés superior del niño.
Por ende, para determinar sobre la guarda y custodia de un menor, el juzgador debe atender
al resultado que arrojen los medios probatorios ofrecidos por las partes, básicamente para
establecer si hay obstáculo que impida otorgar a alguno de los progenitores dicha guarda y
que lo lleve a la convicción de que la persona escogida es la adecuada, razonando el por qué
la conducta de la persona a que se entregue el cuidado de los menores es la idónea para
cumplir con el principio del interés superior, por ser quien mejor prodigará satisfactores para la
formación, educación e integración socio-afectiva de los menores.
Así, debe decirse que la madre de el menor tiene, por naturaleza, la presunción fundada de
ser la persona idónea para tenerla bajo su cuidado directo pues, por la edad de la pequeña
-siete años cumplidos- y su condición de mujer, es evidente que le esperan cambios físicos y
psicológicos que su madre podrá explicarle mejor por la confianza obvia derivada de la
relación entre ascendiente y descendiente del mismo sexo, lo que indudablemente incidirá en
una mejor comprensión y aceptación de esos cambios por parte de el menor y, con ello, ésta
tendrá mayores posibilidades de desarrollarse satisfactoriamente en todos sentidos; máxime
que, en la especie, no se advierte ningún dato o circunstancia que destruya esa presunción.
No obsta a lo anterior el hecho de que el quejoso alegue que no se tomó en cuenta la

documental pública consistente en la averiguación previa número LER/I/2441/2001, donde la
ofendida, hoy tercera perjudicada, en su ampliación de declaración de fecha quince de
noviembre de dos mil uno, dijo que: "... esta situación de maltrato psicológico y verbal ha
alterado sobremanera a la de la voz, teniendo que vivir actualmente en casa de mis padres
ubicada en Atizapán de Zaragoza, por lo que solicito ser atendida en el área de psicología en
este Municipio."; lo que, según el quejoso, perjudica los intereses de dicha tercera perjudicada,
pues reconoció que requiere de atención psicológica y que la propia Juez a quo señaló en el
considerando primero de su sentencia que aquélla tiene problemas psicológicos, además de
que existe la confesión de la tercera perjudicada, donde al responder la décima posición
aceptó que tiene problemas psicológicos, con lo que, afirma el quejoso, se provocan daños a
la salud e integridad de el menor.
Ciertamente, a fojas 30 a 35 del expediente de primera instancia obran agregadas copias

certificadas del acta de averiguación previa número LER/I/2441/2001, donde Alejandra Moreno
Daniel hizo denuncia de hechos en contra de Carlos Octavio Juárez González, y en la
ampliación de declaración de fecha quince de noviembre de dos mil uno, aquélla, entre otras
cosas, manifestó: "... mi esposo se llevó a mi hijo de Atizapán donde estábamos viviendo, ese
día, la de la voz dejé a mi hijo en el transporte, en la mañana, a las siete y diez de la mañana,
y a la tres de la tarde cuando la estaba esperando, mi hijo ya no llegó en el transporte, la de la
voz se alarmó mucho, acudí rápidamente a la escuela, hablé con el director de la escuela, con
las maestras, en fin, la busqué por todos lados, decidí de Atizapán venir a Lerma a buscar a mi
hijo y efectivamente mi hijo ya estaba con su papá, esto fue sin avisar y después me enteré,

32
mediante constancia del director de la escuela ‘Colegio Washington’ que mi esposo al bajar mi
hijo del colegio, se dice transporte escolar, a las siete cuarenta y cinco, mi esposo se la llevó
sin avisar poniendo en alarma a toda la escuela; mi esposo ha manipulado a mi hijo diciéndole
que si no lo obedece y hace todo lo que él quiere no le va a dar comida, le dice también que la
puede meter a la cárcel ... mi esposo le dice a mi hijo que si se porta mal o que si no lo
obedece la va a meter a el menor a la cárcel, mi esposo, según palabras de mi hijo Claudia, la
ha llevado de paseo con la amiga de su papá; esta situación de maltrato psicológico y verbal
ha alterado de sobremanera a la de la voz, teniendo que vivir actualmente en casa de mis
padres ubicada en Atizapán de Zaragoza, por lo que solicito ser atendida en el área de
psicología, en este Municipio; por último, deseo manifestar que la de la voz teme no ver más a
su hijo, toda vez que mi esposo me ha amenazado con que se la va a llevar a Sinaloa y no me
va a volver a dejarla ver ...".
Y en la confesional a cargo de la propia tercera perjudicada, a la posición número diez, que

dice: "Que usted tiene problemas psicológicos dentro del núcleo familiar", ésta respondió lo
siguiente: "Sí, sí los tengo por la manera que he sido tratada con vejaciones y sevicias por el
señor Carlos Juárez.".
Sin embargo, de lo anterior no se desprende ningún dato que revele, ni siquiera

presuntivamente, que la ayuda psicológica que la madre de el menor dice necesitar pueda
afectar su capacidad de cuidado y cariño hacia el menor, sobre todo porque los problemas
psicológicos que aquélla dice tener los vincula con los malos tratos de que, afirma, fue objeto
por parte de su esposo, y no con respecto a la relación y trato que tiene para con su hijo.
Ante ello, atendiendo al interés superior de la niña y prescindiendo de la conveniencia e

intereses personales de los padres, debe concluirse que, en la especie, subsiste la presunción
de que la madre debe tener la custodia de el menor y, por virtud de ese interés superior, debe
decirse que resulta irrelevante determinar si los documentos a que alude el quejoso,
consistentes en la constancia y la carta, ambas del director del Colegio Washington, S.C., y el
escrito donde se solicitó la baja de el menor del Centro Educativo Cualcán, son documentos
públicos o privados, o bien, los alcances de los mismos, pues lo cierto es que con los mismos
la hoy tercera perjudicada pretendió acreditar que al darse la separación de los padres de el
menor, ésta permaneció inicialmente con la madre y luego el padre la regresó consigo; pero
esta situación tampoco pone de relieve que el padre haya tenido la custodia de el menor por
un lapso prolongado, y que con motivo de la decisión judicial que se analiza, porque se
decretó la custodia de el menor a favor del padre, se afecte emocionalmente a el menor. Sin
embargo, ello no es determinante para decidir sobre quién resulta la persona idónea para
tener la custodia de la niña, sino que debe atenderse a lo ya expuesto.
Ahora bien, aunque resulta innegable el perjuicio ocasionado a el menor con un cambio de
residencia cuando ella está cursando un ciclo escolar; sin embargo, se estima que ese
perjuicio resulta menor al que se le ocasionaría si la niña continuara separada de su madre,
quien, por los motivos indicados, se considera la idónea para tenerla bajo su guarda y
custodia.
Consecuentemente, al ser ineficaces los conceptos de violación y no advertir deficiencia de la

queja que suplir, en términos del artículo 76 bis, fracción VI, de la Ley de Amparo, procede
negar el amparo solicitado.
Por lo expuesto y fundado, se resuelve:
ÚNICO.-La Justicia de la Unión no ampara ni protege a Carlos Octavio Juárez González en

contra del acto que reclama de la Primera Sala Regional Familiar de Toluca del Tribunal
Superior de Justicia del Estado de México, consistente en la sentencia de fecha veintitrés de
abril de dos mil dos, dictada en el toca número 209/2002, que se precisó en el resultando
segundo de esta ejecutoria.
Notifíquese; con testimonio de esta resolución, vuelvan los autos al lugar de su procedencia y,
en su oportunidad, archívese el presente expediente como asunto concluido.
Así, por unanimidad de votos lo resolvió el Tercer Tribunal Colegiado en Materia Civil del
Segundo Circuito, integrado por los Magistrados presidente Felipe Alfredo Fuentes Barrera,
Raúl Solís Solís y por el licenciado José Fernando García Quiroz, secretario autorizado en
términos del artículo 81, fracción XXII, de la Ley Orgánica del Poder Judicial de la Federación,

33
por acuerdo del Pleno del Consejo de la Judicatura Federal, para actuar en funciones de
Magistrado de Circuito, siendo ponente el último de los nombrados.
Novena Época
Instancia: TERCER TRIBUNAL COLEGIADO EN MATERIA CIVIL DEL SEGUNDO
CIRCUITO.
Tesis: II.3o.C. J/4
Página: 1206
GUARDA Y CUSTODIA. DEBE DETERMINARSE CONSIDERANDO EL INTERÉS

SUPERIOR DE NIÑAS, NIÑOS Y ADOLESCENTES CONFORME A LA CONVENCIÓN
SOBRE LOS DERECHOS DEL NIÑO. El derecho a la guarda y custodia de una niña, niño
y adolescente, implica considerar no sólo las pruebas ofrecidas por las partes con las que
pretendan demostrar una adecuada capacidad para el cuidado del menor, sino que atendiendo
al beneficio directo de la infancia, el juzgador también debe considerar el interés superior de la
niña, niño y adolescente como presupuesto esencial para determinar quién tiene derecho a la
guarda y custodia. Ello, porque conforme a lo dispuesto por el artículo 4o. constitucional que
establece el desarrollo integral, el respeto a la dignidad y derechos de la niñez, así como los
artículos 3o., 7o., 9o., 12, 18, 19, 20 y 27 de la Convención sobre los Derechos del Niño,
ratificada por México el veintiuno de septiembre de mil novecientos ochenta y nueve, que
establece que los Estados garantizarán que los tribunales judiciales velen por el interés
superior del niño, los juicios en los que se vean involucrados derechos inherentes de las niñas,
niños y adolescentes, como el caso en que se demande la guarda y custodia, debe tenerse
como presupuesto esencial el interés superior del niño y darle intervención al Ministerio
Público, para que en su carácter de representante de la sociedad, vele por los derechos de los
infantes y adolescentes.
TERCER TRIBUNAL COLEGIADO EN MATERIA CIVIL DEL SEGUNDO CIRCUITO.
Amparo directo 170/2000. Adrián Escorcia Martínez y otra. 1o. de marzo de 2001. Unanimidad
de votos. Ponente: Felipe Alfredo Fuentes Barrera. Secretaria: Cristina García Acuautla.
Amparo directo 935/2000. Rosa María Reyes Galicia y otro. 17 de octubre de 2001.
Unanimidad de votos. Ponente: Raúl Solís Solís. Secretaria: Yolanda González Medrano.
Amparo directo 980/2000. Geni Vega Espriella. 26 de junio de 2001. Unanimidad de votos.
Ponente: Raúl Solís Solís. Secretaria: Yolanda González Medrano.
Amparo directo 701/2001. Ignacio Alfaro Hernández. 29 de enero de 2002. Unanimidad de

votos. Ponente: Raúl Solís Solís. Secretaria: E. Laura Rojas Vargas.
Amparo directo 367/2002. Carlos Octavio Juárez González. 9 de julio de 2002. Unanimidad de
votos. Ponente: José Fernando García Quiroz, secretario de tribunal autorizado por el Pleno
del Consejo de la Judicatura Federal para desempeñar las funciones de Magistrado.
Secretario: Jorge Luis Mejía Perea.
Novena Época
Instancia: SEGUNDO TRIBUNAL COLEGIADO EN MATERIAS CIVIL Y DE TRABAJO
Tomo: II, Agosto de 1995
Página: 559
MENORES DE EDAD. GUARDA Y CUSTODIA DE LOS . Si bien es cierto que la

Suprema Corte de Justicia de la Nación ha sostenido que cuando se trata de menores de
edad lo más benéfico para su desarrollo y estabilidad es que se encuentren bajo el cuidado de
su madre, también lo es que esto no significa que tal criterio deba aplicarse
indiscriminadamente a todos los casos, pues es obligación del juzgador tomar en cuenta, el
interés del menor sobre cualquier otro.
SEGUNDO TRIBUNAL COLEGIADO EN MATERIAS CIVIL Y DE TRABAJO DEL SEGUNDO

CIRCUITO.

34
Amparo directo 344/95. Elisa Rivera Uribe. 19 de abril de 1995. Unanimidad de votos.
Ponente: Raúl Solís Solís. Secretaria: Laura Rojas Vargas.
TERCERO.- Ocasiona serio perjuicio el contenido del auto dictado por su Señoría en
Audiencia de fecha 7 de abril del año en curso y publicado mediante boletín No. 68 de fecha 12 abril del año en
curso, causando perjuicio lo dictado en dicha audiencia, y en especial lo descrito de la siguiente manera:

al C. Secretario de relaciones exteriores no se le ha solicitado implementar medida alguna
y de quien detenta la Guarda y Custodia de el menor, en razón a que el mismo no decreta procedentes las
pruebas Periciales en materia de Psicología y en Química Farmacéutica, ya que del resultado de las mismas se
proveería veracidad respecto de la situación en que vive el menor, vive en compañía de su madre dentro del

35
Distrito Federal, poniendo en peligro a el menor en cada momento que el mismo convive con su Padre, razón
por la cual se acreditaría la veracidad del temor fundado a que el mismos como consecuencia del la ingestión
de Alcohol y al parecer sustancias prohibidas por la Ley de Salud, con lo que le acarrean los desordenes
psicológicos y químicos; por lo cual hacemos responsable a su Señoría la A Quo, además de que en dicho
menor tiene apenas un año de edad, situación de la cual es omisa el Juez que conoce de la causa y al no
admitir las Pruebas, es prudente recordar que las pruebas ofrecidas reúnen los requisitos descritos por la Ley
toda vez que son de aceptarse todas las pruebas con tal de que no sean contrarias a la moral y a las buenas
costumbres; así que
ARTICULO 293
La prueba pericial procede cuando sean necesarios conocimientos especiales en alguna

ciencia, arte o industria o la mande la ley, y se ofrecerá expresando los puntos sobre los que
versará, sin lo cual no será admitida, y si se quiere, las cuestiones que deban resolver los
peritos.
ARTICULO 347
Las partes propondrán la prueba pericial dentro del término de ofrecimiento de pruebas, en los
siguientes términos:
I.- Señalarán con toda precisión la ciencia, arte, técnica, oficio o industria sobre la cual deba
practicarse la prueba; los puntos sobre los que versará y las cuestiones que se deben resolver
en la pericial, así como la cédula profesional, calidad técnica, artística o industrial del perito
que se proponga, nombre, apellidos y domicilio de éste, con la correspondiente relación de tal
prueba con los hechos controvertidos;
II.- Si falta cualquiera de los requisitos anteriores, el juez desechará de plano la prueba en
cuestión;
III.- En caso de estar debidamente ofrecida, el juez la admitirá, quedando obligados los
oferentes a que sus peritos, dentro del plazo de tres días, presenten escrito en el que acepten
el cargo conferido y protesten su fiel y legal desempeño, debiendo anexar copia de su cédula
profesional o documentos que acrediten su calidad de perito en el arte, técnica o industria para
el que se les designa, manifestando, bajo protesta de decir verdad, que conocen los puntos
cuestionados y pormenores relativos a la pericial, así como que tienen la capacidad suficiente
para emitir dictamen sobre el particular, quedando obligados a rendir su dictamen dentro de
los diez días siguientes a la fecha en que hayan presentado los escritos de aceptación y
protesta del cargo de peritos;
IV.- Cuando se trate de juicios sumarios, especiales, o cualquier otro tipo de controversia de
trámite específicamente singular, las partes quedan obligadas a presentar a sus peritos dentro
de los tres días siguientes al proveído en que se les tenga por designados para que se cumpla
con lo ordenado en el párrafo anterior, los cuales quedan obligados, en estos casos, a rendir
su dictamen dentro de los cinco días siguientes a la fecha en que hayan aceptado y
protestado el cargo;
V.- Cuando los peritos de las partes rindan sus dictámenes, y éstos resulten substancialmente
contradictorios, se designará al perito tercero en discordia tomando en cuenta lo ordenado por
el artículo 349 de este código;
VI.- La falta de presentación del escrito del perito del oferente de la prueba, donde acepte y
proteste el cargo, dará lugar a que el juez designe perito en rebeldía del oferente. Si la
contraria no designare perito, o el perito por ésta designado, no presentara el escrito de
aceptación y protesta del cargo, dará como consecuencia que se tenga a ésta por conforme
con el dictamen pericial que rinda el perito del oferente.
En el supuesto de que el perito designado por alguna de las partes, que haya aceptado y
protestado el cargo conferido, no presente su dictamen pericial en el término concedido, se
entenderá que dicha parte acepta aquél que se rinda por el perito de la contraria, y la pericial
se desahogará con ese dictamen. Si los peritos de ambas partes, no rinden su dictamen
dentro del término concedido, el juez designará en rebeldía de ambas un perito único, el que
rendirá su dictamen dentro del plazo señalado en las fracciones III o IV, según corresponda.

36
En los casos a que se refiere el párrafo anterior, el juez sancionará a los peritos omisos con
multa equivalente a sesenta días de salario mínimo general vigente en el Distrito Federal;
(REFORMADA, G.O. 1 DE JUNIO DE 2000)

VIl. Las partes quedan obligadas a pagar los honorarios de los peritos que hayan nombrado, a
excepción de lo que establece el último párrafo del artículo 353, así como a presentarlos
cuantas veces sea necesario al juzgado. También quedarán obligadas a presentar el dictamen
pericial dentro del plazo señalado, debiendo presentar los peritos el original de su cédula
profesional, o de los documentos anexados a sus escritos de aceptación y protesta del cargo;
VIII.- Las partes en cualquier momento podrán convenir en la designación de un solo perito
para que rinda su dictamen al cual se sujetarán, y
IX.- También las partes en cualquier momento podrán manifestar su conformidad con el
dictamen del perito de la contraria y hacer observaciones al mismo, que serán consideradas
en la valoración que realice el juez en su sentencia.
ARTICULO 346
La prueba pericial sólo será admisible cuando se requieran conocimientos especiales de la

ciencia, arte, técnica, oficio o industria de que se trate, más no en lo relativo a conocimientos
generales que la ley presupone como necesarios en los jueces, por lo que se desecharán de
oficio aquellas periciales que se ofrezcan por las partes para ese tipo de conocimientos, o que
se encuentren acreditadas en autos con otras pruebas, o tan sólo se refieran a simples
operaciones aritméticas o similares.
Los peritos deben tener título en la ciencia, arte, técnica, oficio o industria a que pertenezca la
cuestión sobre la que ha de oírse su parecer, si la ciencia, arte, técnica o industria requieren
título para su ejercicio.
Si no lo requirieran o requiriéndolo, no hubiere peritos en el lugar, podrán ser nombradas

cualesquiera personas entendidas a satisfacción del juez, aun cuando no tengan título.
El título de habilitación de corredor público acredita para todos los efectos la calidad de perito
valuador.
(REFORMADO, D.O.F. 24 DE MAYO DE 1996)

ARTICULO 347
Las partes propondrán la prueba pericial dentro del término de ofrecimiento de pruebas, en los
I.- Señalarán con toda precisión la ciencia, arte, técnica, oficio o industria sobre la cual deba
practicarse la prueba; los puntos sobre los que versará y las cuestiones que se deben resolver
en la pericial, así como la cédula profesional, calidad técnica, artística o industrial del perito
que se proponga, nombre, apellidos y domicilio de éste, con la correspondiente relación de tal
prueba con los hechos controvertidos;
II.- Si falta cualquiera de los requisitos anteriores, el juez desechará de plano la prueba en
cuestión;
III.- En caso de estar debidamente ofrecida, el juez la admitirá, quedando obligados los
oferentes a que sus peritos, dentro del plazo de tres días, presenten escrito en el que acepten
el cargo conferido y protesten su fiel y legal desempeño, debiendo anexar copia de su cédula
profesional o documentos que acrediten su calidad de perito en el arte, técnica o industria para
el que se les designa, manifestando, bajo protesta de decir verdad, que conocen los puntos
cuestionados y pormenores relativos a la pericial, así como que tienen la capacidad suficiente
para emitir dictamen sobre el particular, quedando obligados a rendir su dictamen dentro de
los diez días siguientes a la fecha en que hayan presentado los escritos de aceptación y
protesta del cargo de peritos;
IV.- Cuando se trate de juicios sumarios, especiales, o cualquier otro tipo de controversia de
trámite específicamente singular, las partes quedan obligadas a presentar a sus peritos dentro
de los tres días siguientes al proveído en que se les tenga por designados para que se cumpla

37
con lo ordenado en el párrafo anterior, los cuales quedan obligados, en estos casos, a rendir
su dictamen dentro de los cinco días siguientes a la fecha en que hayan aceptado y
V.- Cuando los peritos de las partes rindan sus dictámenes, y éstos resulten substancialmente
contradictorios, se designará al perito tercero en discordia tomando en cuenta lo ordenado por
el artículo 349 de este código;
VI.- La falta de presentación del escrito del perito del oferente de la prueba, donde acepte y
proteste el cargo, dará lugar a que el juez designe perito en rebeldía del oferente. Si la
contraria no designare perito, o el perito por ésta designado, no presentara el escrito de
aceptación y protesta del cargo, dará como consecuencia que se tenga a ésta por conforme
con el dictamen pericial que rinda el perito del oferente.
En el supuesto de que el perito designado por alguna de las partes, que haya aceptado y
protestado el cargo conferido, no presente su dictamen pericial en el término concedido, se
entenderá que dicha parte acepta aquél que se rinda por el perito de la contraria, y la pericial
se desahogará con ese dictamen. Si los peritos de ambas partes, no rinden su dictamen
dentro del término concedido, el juez designará en rebeldía de ambas un perito único, el que
rendirá su dictamen dentro del plazo señalado en las fracciones III o IV, según corresponda.
En los casos a que se refiere el párrafo anterior, el juez sancionará a los peritos omisos con
multa equivalente a sesenta días de salario mínimo general vigente en el Distrito Federal;

VIl. Las partes quedan obligadas a pagar los honorarios de los peritos que hayan nombrado, a
excepción de lo que establece el último párrafo del artículo 353, así como a presentarlos
cuantas veces sea necesario al juzgado. También quedarán obligadas a presentar el dictamen
pericial dentro del plazo señalado, debiendo presentar los peritos el original de su cédula
profesional, o de los documentos anexados a sus escritos de aceptación y protesta del cargo;
VIII.- Las partes en cualquier momento podrán convenir en la designación de un solo perito
para que rinda su dictamen al cual se sujetarán, y
IX.- También las partes en cualquier momento podrán manifestar su conformidad con el
dictamen del perito de la contraria y hacer observaciones al mismo, que serán consideradas
en la valoración que realice el juez en su sentencia.
ARTICULO 348
El juez, antes de admitir la prueba pericial, dará vista a la contraria por el término de tres días,
para que manifieste sobre la pertinencia de tal prueba y para que proponga la ampliación de
otros puntos y cuestiones además de los formulados por el oferente, para que los peritos
dictaminen.
.
De igual forma, Su señoría no establece por que causas no acepta las

pruebas ofrecidas por parte de mi representada y de su menor hijo, ya que del resultado de dichas pruebas se
probará la razón de la controversia familiar, y con ella servirá para emitir el fallo que protegerá a el menor, en
contra de las agresiones de las que ha sido objeto por parte del señor MAURICIO ESCARPULLI GARCÍA para
con el menor, sin cerciorarse de que la prueba es la idónea, así como del señalamiento de quien deberá rendir
su dictamen pericial, toda vez que mi representada no cuenta con los recursos económicos suficientes para
designar a un perito particular, con ello en contravención de lo descrito por la ley.
Cuarto.- Ocasiona serio perjuicio el contenido del auto dictado por su Señoría en Audiencia
de fecha 7 de abril del año en curso y publicado mediante boletín No. 68 de fecha 12 abril del año en curso,
causando perjuicio lo dictado en dicha audiencia, y en especial lo descrito de la siguiente manera:

38

Así que el auto reclamado es contrario a los designios de seguridad y

estabilidad de el menor y de quien detenta la Guarda y Custodia de el menor, en razón a que
el mismo no provee respecto de las pruebas documentales con excepción de la documental
marcada con el número cuatro toda vez que la misma si indica en que consiste el informe a
solicitar, de donde de la simple lectura y debida interpretación se desprende que se solicita
que la Secretaria de Relaciones Exteriores no otorgue al señor ABEL ESCARPULLI GARCIA
pasaporte u obtenga un nuevo pasaporte para el menor MAURICIO ESCARPULLI
GONZÁLEZ, a efecto de que no pueda ser sacado de la república mexicana, lo cual tiene un
gran relación con el temor fundado de la madre del menor para que separe al menor de su
guarda y custodia,, razón por la cual combato el auto emitido por la A Quo, al ser omiso al
particular y no conceder las medidas precautorias solicitadas.
Quinto.- Ocasiona serio perjuicio el contenido del auto dictado por su Señoría en Audiencia
de fecha 7 de abril del año en curso y publicado mediante boletín No. 68 de fecha 12 abril del año en curso,

39

la zona del Distrito Federal. Sin lugar a acordar las medidas provisionales marcadas con los
Nos causa agravio y perjuicio el auto combatido toda vez que no autoriza ni
concede las medidas provisionales solicitadas en el escrito de demanda, ya que el A Quo se
concreta a mencionar “...Sin lugar a acordar las medidas provisionales marcadas con los
Distrito Federal....” lo anterior causa perjuicio a mi representada y en especial al menor ya que
como se manifiesta existe el temor fundado por parte de la Madre del Menor a que el Padre
del mismo le cause daño, ya que su conducta violenta así lo determina, además de que el
menor tiene un año de edad, como se desprende de las constancias que obran en autos, así
que la A Quo, simplemente se constriñe a señalar que que las mediadas preventivas
solicitadas tales como:
 6.- Se gire oficio dirigido a la Secretaría de Relaciones Exteriores con domicilio ubicado en plaza
de las Tres Culturas, domicilio conocido, a efecto de que se sirva bloquear o prohibir que el señor

40
ABEL ESCARPULLI GARCÍA, de nacionalidad mexicana, tramite y obtenga un nuevo

pasaporte, ya sea provisional o definitivo en favor de mi menor hijo MAURICIO de apellidos
ESCARPULLI GONZÁLEZ, toda vez que existe temor fundado de que secuestre o la lleve al
extranjero a el menor en virtud de que es su padre y retire a ésta de la guardia y custodia.
 Así mismo se le requiera informe a este H. Juzgado de la recepción del presente y de las medias
implementadas en protección del menor MAURICIO de apellidos ESCARPULLI GONZÁLEZ,
toda vez que existe temor fundado de que sea llevado al extranjero el menor en virtud de que es
su padre que el señor ABEL ESCARPULLI GARCÍA, pueda tramitar y obtenga un duplicado o
nuevo pasaporte, ya sea provisional o definitivo del menor.
 7.- Se gire oficio dirigido al Instituto Nacional de Migración, dependiente de la Secretaria de

Gobernación domicilio conocido en esta Ciudad de México, a efecto de que se sirva tomar
conocimiento de la presente demanda y en su caso se sirva bloquear o prohibir que el señor
ABEL ESCARPULLI GARCÍA, de nacionalidad Mexicana, para que se sirva instrumentar lo
necesario en las diversas Aduanas y puertos del país, para que de cumplimiento del Arraigo
Judicial que su señoría se sirva ordenar a efecto de que mi menor hijo MAURICIO de apellidos
ESCARPULLI GONZÁLEZ no pueda salir del país.
 8.- Así mismo se le requiera informe a este H. Juzgado de la recepción del presente y de las
medias implementadas en protección del menor MAURICIO de apellidos ESCARPULLI
GONZÁLEZ, toda vez que existe temor fundado de que sea llevado al extranjero al menor en
virtud de que es su padre que el señor ABEL ESCARPULLI GARCÍA, de nacionalidad
Mexicana, pueda sacar del país de forma temporal o definitiva a el menor.
 Así mismo se le requiera informe a este H. Juzgado de la recepción del presente y de las medias
implementadas en protección de el menor MAURICIO de apellidos ESCARPULLI GONZÁLEZ,
toda vez que existe temor fundado de que sea llevado al extranjero el menor en virtud de que es
su padre que el señor MAURICIO ESCARPULLI GARCÍA, de nacionalidad Mexicana, tiene
la intención de sacar del país de forma temporal o definitiva a el menor.
 9.- Se sirva girar oficio al Representante legal de la Guarderia “Baby Bee, S.C.” con domicilio
Emersón #515, Colonia Polanco, Delegación Miguel Hidalgo D.,F. Al efecto de que se sirva
informar a este H. Juzgado de la situación del menor MAURICIO de apellidos ESCARPULLI
GONZÁLEZ. , a efecto de en cumplimiento de sus determinaciones Judiciales se sirva bloquear o
prohibir que se le entregue o recoja de sus instalaciones al menor MAURICIO de apellidos
ESCARPULLI GONZÁLEZ y le sea entregada al señor ABEL ESCARPULLI GARCÍA, de
nacionalidad Mexicana, siendo únicamente autorizada para ello la madre del menor, o quien para
ese caso autorice, lo anterior en virtud de que existe temor fundado de que secuestre al
menor o le infrinja actos violentos en contra del menor. Apercibiendo lo en caso de
desobediencia a una determinación Judicial.
De lo anterior nos causa agravio la resolución combatida ya que de ninguna

menra la A Quo toma en consideración lo descrito por los artículos que a continuación
transcribo para su mejor comprensión, dejando en un estado de indefensión al menor y a su
madre frente a las posibles agresiones del señor Abel Escarpulli García :
(REFORMADO, G.O. 25 DE MAYO DE 2000)

ARTICULO 323 Ter.- Los integrantes de la familia tienen derecho a
desarrollarse en un ambiente de respeto a su integridad física y psíquica, y obligación de
evitar conductas que generen violencia familiar.
A tal efecto, contarán con la asistencia y protección de las instituciones

públicas, de acuerdo a las leyes para combatir y prevenir conductas de violencia familiar.
(ADICIONADO, G.O. 25 DE MAYO DE 2000)

ARTICULO 323 Quáter.- Por violencia familiar se considera el uso de la
fuerza física o moral, así como la omisión grave que se ejerce contra un miembro de la familia
por otro integrante de la misma, que atente contra su integridad física, psíquica o ambas,
independientemente del lugar en que se lleve a cabo y que pueda producir o no lesiones.
La educación o formación del menor no será en ningún caso considerada

justificación para alguna forma de maltrato.

41

ARTICULO 323 Quintus.- También se considera violencia familiar la conducta
descrita en el artículo anterior llevada a cabo contra la persona con que se encuentra unida
fuera de matrimonio, de los parientes de ésta, o de cualquier otra persona que esté sujeta a su
custodia, guarda, protección, educación, instrucción o cuidado, siempre y cuando el agresor y
el ofendido convivan o hayan convivido en la misma casa.

ARTICULO 323 Sextus.- Los integrantes de la familia que incurran en
violencia familiar, deberán reparar los daños y perjuicios que se ocasionen con dicha
conducta, con autonomía de otro tipo de sanciones que éste y otros ordenamientos legales
establezcan.
En todas las controversias derivadas de violencia familiar, el Juez dictará las

medidas a que se refiere la fracción VII del artículo 282 de este Código.

ARTICULO 282.- Desde que se presenta la demanda de divorcio, y sólo
mientras dure el juicio, se dictarán las medidas provisionales pertinentes conforme a las
disposiciones siguientes:
I.- La separación de los cónyuges. El Juez de lo Familiar determinará con

audiencia de parte, y teniendo en cuenta el interés familiar y lo que más convenga a los hijos,
cuál de los cónyuges continuará en el uso de la vivienda familiar y asimismo, previo inventario,
los bienes y enseres que continúen en ésta y los que se ha de llevar el otro cónyuge,
incluyendo los necesarios para el ejercicio de la profesión, arte u oficio a que esté dedicado,
debiendo informar éste el lugar de su residencia.
La separación conyugal decretada por el juez interrumpe los términos a que

se refieren las fracciones VIII y IX del artículo 267 de este Código;
II.- Señalar y asegurar las cantidades que a título de alimentos deben dar el
deudor alimentario al cónyuge acreedor y a los hijos que corresponda;
III.- Las que se estimen convenientes para que los cónyuges no se puedan
causar perjuicios en sus respectivos bienes ni en los de la sociedad conyugal en su caso.
Asimismo, ordenar, cuando existan bienes que puedan pertenecer a ambos cónyuges, la
anotación preventiva de la demanda en el Registro Público de la Propiedad del Distrito Federal
y de aquellos lugares en que se conozca que tienen bienes;
IV.- Dictar, en su caso, las medidas precautorias que la ley establece respecto
a la mujer que quede embarazada;
V.- Poner a los hijos al cuidado de la persona que de común acuerdo

hubieren designado los cónyuges, pudiendo ser uno de éstos. En defecto de ese acuerdo, el
cónyuge que pida el divorcio propondrá la persona en cuyo poder deben quedar
provisionalmente los hijos. El Juez de lo Familiar, previo el procedimiento que fije el Código
respectivo y tomando en cuenta la opinión del menor, resolverá lo conducente.
Salvo peligro grave para el normal desarrollo de los hijos; los menores de
doce años deberán quedar al cuidado de la madre;
VI.- El Juez de lo Familiar resolverá teniendo presente el interés superior de

los hijos, quienes serán escuchados, las modalidades del derecho de visita o convivencia con
sus padres;
VII.- En los casos en que el Juez de lo Familiar lo considere pertinente, de

conformidad con los hechos expuestos y las causales invocadas en la demanda, tomará las
siguientes medidas, con el fin de salvaguardar la integridad y seguridad de los interesados,
que tratándose de violencia familiar deberá siempre decretar:
a) Ordenar la salida del cónyuge demandado de la vivienda donde habita el

grupo familiar.

42
b) Prohibición al cónyuge demandado de ir a lugar determinado, tal como el

domicilio o el lugar donde trabajan o estudian los agraviados.
c) Prohibir que el cónyuge demandado se acerque a los agraviados a la

distancia que el propio Juez considere pertinente.
VIII.- Revocar o suspender los mandatos que entre los cónyuges se hubieran
otorgado, con las excepciones que marca el artículo 2596 de este Código;
IX.- Requerirá a ambos cónyuges para que le exhiban, bajo protesta de decir
verdad, un inventario de sus bienes y derechos, así como, de los que se encuentren bajo el
régimen de sociedad conyugal, en su caso, especificando además el título bajo el cual se
adquirieron o poseen, el valor que estime que tienen, las capitulaciones matrimoniales y un
proyecto de partición. Durante el procedimiento, recabará la información complementaria y
comprobación de datos que en su caso precise; y
X.- Las demás que considere necesarias.
De lo anterior se desprende que la A Quo de ninguna manera valoró la

violencia familiar que produce el Demandado Abel Escarpulli García en contra de su
esposa y en contra de su menor hijo, a quienes amenaza que se llevará al menor.
Sexto.- Ocasiona serio perjuicio el contenido del auto dictado por su Señoría en Audiencia de
fecha 7 de abril del año en curso y publicado mediante boletín No. 68 de fecha 12 abril del año en curso,


43
la zona del Distrito Federal. Sin lugar a acordar las medidas provisionales marcadas con los
Nos causa agravio y perjuicio el auto combatido toda vez que no autoriza ni
concede las medidas provisionales solicitadas en el escrito de demanda, ya que el A Quo se
concreta a mencionar que se reduzcan los testigos sin valorar debidamente que los testigos
propuestos son para hechos distintos, y que con ellos se pretende probar hechos narrados
que no tienen que ver entre sí. La A Quo, simplemente menciona “...Prevéngase al ocursante
para que en el término de tres días reduzca a 2 el numero de testigos por cada hecho,
apercibida que de no hacerlo así, el suscrito juez lo reducirá en su rebeldía con fundamento en
el artículo 298 del Código en cita...” sin valorar que cada hecho tiene diferentes testigos, es
decir para el hecho 6 y 7 se señalan a los señores Gabriel García Aguilar y la señora
Maria Lilia Bermejo Quiroz ya que se percataron de la salida del domicilio conyugal
del demandado y delas amenazas de que fuimos victimas; y en el hecho 13 lo fue el
señor ALBERTO GONZÁLES CÁRDENAS testigo de la falta de ministración de
alimentos ya que el es quien le a otorgado en calidad de préstamo, cantidades para
pagar los diferentes gastos del menor. Es por lo anterior que no se deben reducir los
testigos como dicta la resolución combatida.
Por lo expuesto; A Usted c. Juez, atentamente pido se sirva:
Primero.- Tenerme por presentada, en tiempo y forma, interponiendo recurso de

apelación en contra del auto que se menciona.
Segundo.- Tener por hechas las anteriores manifestaciones para los efectos legales
a que haya lugar.
Espero se proveerá de conformidad.
México, Distrito Federal a 4 de junio de 2019.

44

Vs.
Expediente: 427/04
C. JUEZ 27º DE LO FAMILIAR, EN EL DISTRITO FEDERAL.
LIC. LUIS NAZARIO COLIN RIVERO, titular de la cédula

profesional número 1636628, abogado patrono de la señora
CLARA PATRICIA GONZALEZ ESCOBAR, de nacionalidad
Colombiana, y de su hijo de nombre MAURICIO ESCARPULLI
GONZÁLEZ, de nacionalidad Mexicana, comparecemos
respetuosamente para exponer:
Por medio del presente escrito y visto el estado que

guardan los presentes autos, y visto que la parte
demandada no ha manifestado nada respecto de la vista
ordenada en autos sobre las pertinenencia de las pruebas
periciales, tomes como conforme con las mismas, y
ordénese girar los oficios de estilo para los efectos
legales a que haya lugar.
Así mismo vengo a solicitar se dicte nueva fecha para

la realización de la audiencia de Ley ordenada en autos y
se notifique a las partes de la día, hora y fecha de la
celebración de la misma.
De igual forma vengo a autorizar al C. ANAUAR ABRAHAM

REYES EL MEHARAFILLE, para oír, recibir y recoger todo
tipo de documentos y notificaciones.
Por lo expuesto; A Usted c. Juez, atentamente

pido se sirva:
Primero.- Tenerme por presentada, en tiempo y forma,

acusando la rebeldía en que incurrió la parte demandada
al no desahogar la vista ordenada en autos sobre la
pertinencia de las pruebas y de las pruebas periciales.
Segundo.- Tener por hechas las anteriores

manifestaciones para los efectos legales a que haya lugar
y se dicte nueva fecha para la realización de la

45
audiencia de Ley ordenada en autos y se notifique a las

partes de la día, hora y fecha de la celebración de la
misma.
Tercero.- Se tenga por autorizado al C. ANAUAR

ABRAHAM REYES EL MEHARAFILLE, para oír, recibir y recoger
todo tipo de documentos y notificaciones.

LIC. LUIS NAZARIO COLIN RIVERO

46

Vs.
Expediente: 427/04
C. JUEZ VIGÉSIMO SÉPTIMO DE LO FAMILIAR, EN EL DISTRITO FEDERAL.

profesional número 1636628, abogado patrono de la señora CLARA
PATRICIA GONZALEZ ESCOBAR, de nacionalidad Colombiana, y de su
hijo de nombre MAURICIO ESCARPULLI GONZÁLEZ, de nacionalidad
Mexicana, y señalando como domicilio para recibir toda clase de
notificaciones, el despacho marcado con el número 102 del
edificio marcado con el número 1650 de la Avenida Insurgentes
Sur, en la colonia Florida de la delegación Álvaro Obregón
Distrito Federal, c.p. 01030 autorizando para recibir toda clase
de notificaciones, documentos y valores a los pasantes en derecho
señores, Jorge Campderá Gutiérrez, Anuar Abraham Reyes El
Meharafille, comparecemos respetuosamente para exponer:
Por medio del presente escrito vengo, en tiempo y forma, con

fundamento en lo dispuesto por los artículos 691 y 692 del Código
de Procedimientos Civiles, vengo a interponer recurso de
apelación en contra del auto de fecha 7 de abril del año en
curso, por considerar que ocasiona agravio a los intereses de mí
representada y de su menor hijo y publicado mediante boletín
No.42 de fecha lunes 13 de Septiembre de 2004, Surtiendo sus
efectos desde el día 17 de Septiembre del año en curso; causando
perjuicio lo dictado en dicha auto, y en especial lo descrito de
la siguiente manera:
“México D.F. a 13 de Septiembre de 2004.
Con el escrito del demandado en términos expuestos, se

le tiene por presentado desahogando la vista que se le
mandó dar por auto de fecha siete de abril del año en
curso y toda vez que la actora no esta asesorada a
través de defensor de oficio en términos de lo
dispuesto por el artículo 535 del Código de
Procedimientos Civiles, al no haber nombrado perito de
su parte en las materias de Psicología y Química
farmacéuticas que ofreció en los apartados 9 y 10 de su
demanda, con fundamento en lo dispuesto por el código
en cita, se desechan dichas probanzas. Notifiquese.
Rubricas”
Lo anterior transcrito en sus términos, consideramos

que ocasiona agravio a los intereses de mi representada y de su
menor hijo;
Señalo como constancias que deberán integrar el

testimonio de apelación correspondiente, todo lo actuado en el
presente juicio, mismo que tendrá que remitirse a la superioridad

47
y toda vez que esta es la segunda apelación ante la cuarta Sala

Familiar a la brevedad posible en términos de lo descrito por los
artículos
A G R A V I O S
PRIMERO.- Ocasiona serio perjuicio el contenido del

auto dictado por su Señoría en fecha 13 de septiembre del año en
curso y publicado mediante boletín no.43 de fecha 17 septiembre
del año en curso, causando perjuicio lo dictado en dicha
audiencia, y en especial lo descrito de la siguiente manera:
“México D.F. a 13 de SEPTIEMBRE de 2004.
A SUS AUTOS EL ESCRITO DEL DEMANDADO EN TÉRMINOS

EXPUESTOS, SE LE TIENE POR PRESENTADO DESAHOGANDO LA
VISTA QUE SE LE MANDÓ DAR POR AUTO DE FECHA SIETE DE
ABRIL DEL AÑO EN CURSO Y TODA VEZ QUE LA ACTORA NO ESTA
ASESORADA A TRAVEZ DE DEFENSOR DE OFICIO EN TÉRMINOS DE
LO DISPUESTO POR EL ARTÍCULO 353 DEL CODIGO DE
PROCEDIMIENTOS CIVILES, AL NO HABER NOMBRADO PERITO DE
SU PARTE EN LAS MATERIAS DE PSICOLOGIÍA Y
QUIMICOFARMACEUTICA QUE OFRECIÓ EN LOS APARTADOS 9 Y 10
DE SU DEMANDA, CON FUNDAMENTO EN LO DISPUESTO POR EL
CÓDIGO EN CITA, SE DESACHAN DICHAS PROBANZAS.
NOTIFIQUESE. RUBRICAS.”
Así que el auto reclamado es contrario a los designios

de seguridad y estabilidad del menor y de quien detentará la
Guarda y Custodia de el menor, en razón a que el mismo no provee
respecto de la situación en que vivirá el menor, es decir que
vivirá en compañía de su madre dentro del Distrito Federal, de lo
cual es omiso como se observa de la simple lectura del acuerdo
combatido, siendo omiso a todas luces respecto de la convivencia
que se dará al menor respecto de la convivencia con el padre del
mismo, poniendo en peligro a el menor en cada traslado, de lo
cual hacemos responsable a su Señoría, además de que en dicho
menor tiene apenas un año de edad, situación de la cual es omisa
el Juez que conoce de la causa. Violando con ello cualquier
derecho que se le otorga al menor mediante lo descrito por la
Convención sobre los derechos de Niño, dejando en estado de
indefensión a el menor y comprometiendo la seguridad del menor
con la resolución combatida.
De igual forma, Su señoría no establece que el

menor deberá pasar la visita con su padre sin establecer el
domicilio en donde realizará la visita el señor MAURICIO
ESCARPULLI GARCÍA con el menor, esta en atención a que los
menores tienen derecho a estar en un lugar apropiado para su
estancia, situación de la cual en padre no tiene, evitando
alteraciones que pudieran afectar tomando su edad y madurez
emocional; razón por la cual, su Señoría es omisa en dar vista al
C. Agente del Ministerio Público, ya que en ningún momento se le
requiere para que emita su aprobación a lo decretado, y solamente
se le toma en consideración al desahogo de la vista del Padre,
donde manifiesta en su escrito “que sea una vez a la semana como
dice que venia realizando desde el mes de octubre hasta el mes de
julio de 2004. Por lo que es prudente que la A Quo modifique el
régimen provisional de visitas y establezca el solicitado por la
madre ya que de ninguna manera con ella se perjudicaría los
intereses del menor y más aún, se le protegería, debido a que el

48
padre no prueba debidamente estar capacitado para el trato y el

cuidado del menor. Ya que, en caso de que el menor habite con el
señor MAURICIO ESCARPULLI GARCÍA su señoría deberá cerciorarse de
las condiciones en que realizará las visitas, pudiendo solicitar
una inspección que se realice por parte de personal de DESARROLLO
INTEGRAL DE LA FAMILIA (DIF) de la casa donde habita el señor
MAURICIO ESCARPULLI GARCÍA, para que en auxilio de este H Juzgado
y de la Representación social y sobre todo del menor, se
practique un estudio socio económico y habitación del domicilio
donde habita el señor MAURICIO ESCARPULLI GARCÍA , el cual deberá
de practicarse en el domicilio que señala como lugar donde
habita, mismo y que sirva de base para determinar si la situación
en que vive el Padre de el menor y si es la más adecuada para su
desarrollo Psicológico y educativo el tiempo en que se encuentra
realizando la visita.
En efecto, el auto apelado deja de proveer

respecto de la Situación en que habita el demandado MAURICIO
ESCARPULLI GARCÍA y algo muy importante la causa planteada por la
parte Actora, quién en cumplimiento a lo que dispone el artículo
255 fracción V del Código Procesal Civil hizo valer ante dicha
autoridad, así como de lo descrito por 941, 492 y 943 en relación
con lo descrito por 945 del código de Procedimientos Civiles, ya
que de ninguna manera solicita se practiquen diligencias por los
especialistas para que o instituciones especializadas en la
materia, y en cuyo caso deberá emitir su resolución con base a lo
descrito, expresando los fundamentos de la valoración jurídica
realizada y de su decisión; la resolución combatida, es contraria
a lo que dispone el artículo 402 del mismo ordenamiento que
determina que los acuerdos deberán valorar por todos los medios
de prueba aportados y admitidos, y serán valorados en su conjunto
por el juzgador, atendiendo a las reglas de la lógica y de la
experiencia. En todo caso el tribunal deberá exponer
cuidadosamente los fundamentos de la valoración jurídica
realizada y de su decisión, lo que en la especie no sucedió.
Así, al momento en que su Señoría dicta las

mediadas provisionales combatidas, dictadas en el acuerdo de
fecha 7 de abril del año en curso, debió valorar todas las
circunstancias que rodean a la demandada y las que rodean
respecto de la seguridad del menor; violando con ello cualquier
determinación establecida por el Código Civil, Código de
Procedimientos Civiles y lo descrito por la Convención sobre los
derechos de Niño
Al omitir el A Quo determinar sobre dicha falta de

elementos de valoración de las circunstancias antes descritas, y
su determinación de procedencia de las medidas provisionales, se
esta atentando contra los derechos de defensa y acción de la
actora y de el menor, así como al orden público y el interés
social, cuestión que el juez familiar debe tomar siempre en
cuenta.
“...Artículo 282. Desde que se presenta la demanda

de divorcio, y sólo mientras dure el juicio, se
dictarán las medidas provisionales pertinentes
conforme a las disposiciones siguientes:
I. La separación de los cónyuges. El

Juez de lo Familiar determinará con audiencia de
parte, y teniendo en cuenta el interés familiar y

49
lo que más convenga a los hijos, cuál de los

cónyuges continuará en el uso de la vivienda
familiar y asimismo, previo inventario, los bienes
y enseres que continúen en ésta y los que se ha de
llevar el otro cónyuge, incluyendo los necesarios
para el ejercicio de la profesión, arte u oficio a
que esté dedicado, debiendo informar éste el lugar
de su residencia.
La separación conyugal decretada por

el Juez interrumpe los términos a que se refieren
las fracciones VIII y IX del artículo 267 de este
código;
II. Señalar y asegurar las cantidades

que a título de alimentos deben dar el deudor
alimentario al cónyuge acreedor y a los hijos que
corresponda;
III. Las que se estimen convenientes

para que los cónyuges no se puedan causar
perjuicios en sus respectivos bienes ni en los de
la sociedad conyugal en su caso. Asimismo,
ordenar, cuando existan bienes que puedan
pertenecer a ambos cónyuges, la anotación
preventiva de la demanda en el Registro Público de
la Propiedad del Distrito Federal y de aquellos
lugares en que se conozca que tienen bienes;
IV. Dictar, en su caso, las medidas

precautorias que la ley establece respecto a la
mujer que quede embarazada;
V. Poner a los hijos al cuidado de la

persona que de común acuerdo hubieren designado
los cónyuges, pudiendo ser uno de éstos. En
defecto de ese acuerdo, el cónyuge que pida el
divorcio propondrá la persona en cuyo poder deben
quedar provisionalmente los hijos. El Juez de lo
Familiar, previo el procedimiento que fije el
código respectivo y tomando en cuenta la opinión
del menor, resolverá lo conducente.
Salvo peligro grave para el normal

desarrollo de los hijos, los menores de doce años
deberán quedar al cuidado de la madre;
VI. El Juez de lo Familiar resolverá

teniendo presente el interés superior de los
hijos, quienes serán escuchados, las modalidades
del derecho de visita o convivencia con sus
padres;
VII. En los casos en que el Juez de lo

Familiar lo considere pertinente, de conformidad
con los hechos expuestos y las causales invocadas
en la demanda, tomará las siguientes medidas, con
el fin de salvaguardar la integridad y seguridad
de los interesados, que tratándose de violencia
familiar deberá siempre decretar:

50
a) Ordenar la salida del cónyuge

demandado de la vivienda donde habita el grupo
familiar.
b) Prohibición al cónyuge demandado de

ir a lugar determinado, tal como el domicilio o el
lugar donde trabajan o estudian los agraviados.
c) Prohibir que el cónyuge demandado

se acerque a los agraviados a la distancia que el
propio Juez considere pertinente.
VIII. Revocar o suspender los mandatos

que entre los cónyuges se hubieran otorgado, con
las excepciones que marca el artículo 2596 de este
código;
IX. Requerirá a ambos cónyuges para

que le exhiban, bajo protesta de decir verdad, un
inventario de sus bienes y derechos, así como, de
los que se encuentren bajo el régimen de sociedad
conyugal, en su caso, especificando además el
titulo bajo el cual se adquirieron o poseen, el
valor que estime que tienen, las capitulaciones
matrimoniales y un proyecto de partición. Durante
el procedimiento, recabará la información
complementaria y comprobación de datos que en su
caso precise; y
X. Las demás que considere

necesarias.”
Del análisis de los artículos antes citados se

advierte claramente que el Juez Vigésimo Séptimo debió de valorar
las circunstancias especiales que rodean al menor, para que
entonces determine, razone y fundamente sus determinaciones ya
que no lo hace la Apelada. En consecuencia, esta Sala deberá
revocar el auto apelado y dictar otro en su lugar que decrete y
ordene la practica de diversas diligencias para que sean
valoradas y en su momento se dicten medidas provisionales
sustitutivas a las decretadas, así como decretar las nuevas,
además de que se encuentran pendientes de realizar pruebas tales
como la Prueba Pericial Psicológica decretada en autos, y en la
misma se emita nueva ordenando la reposición del procedimiento y
la nulidad de las posibles actuaciones y medidas provisionales
que se hayan decretado y efectuado durante el tiempo en que se
tramite la presente apelación.
Así mismo, es procedente la presente interposición

del Recuso de Apelación, por virtud de que su Señoría no le da
vista la C. Agente del Ministerio Público, simplemente se
constriñe a señalar: “....A sus autos el escrito del demandado en
terminos ....”, y atendiendo a su superior interés la suscrita es
de la opinión que se debe tomar en cuenta lo manifestado por esta
en atención a que los menores tienen derecho a expresar su
opinión respecto de los actos que pudieran afectar tomando su
edad y madurez emocional, y visto la edad del menor y que no
puede hablar por ser menor, de un año, se debió valorar las
circunstancias de seguridad para el menor, por lo que manifiesto
mi inconformidad con el régimen provisional decretado por su
señoría, razón por la cual, su Señoría en ningún momento le da
vista al C. Agente del Ministerio Público, y en ningún momento
se le requiere para que manifieste lo que a su representación

51
competa con las mediadas provisionales solicitadas. Por lo que es

prudente revocar el régimen provisional. Ya que en caso de que el
señor MAURICIO ESCARPULLI GARCÍA visite al menor lo deberá hacer
el circunstancias debidamente de seguridad, y su señoría Apelada
no se cerciora y no sabe el lugar y las condiciones, pudiendo
solicitar una inspección que se realice por parte de personal de
DESARROLLO INTEGRAL DE LA FAMILIA (DIF) de la casa donde habita
el señor MAURICIO ESCARPULLI GARCÍA, y para que en auxilio de
este H Juzgado y de la Representación social y sobre todo del
menor, se practique un estudio socio económico y habitación del
domicilio donde habita el señor MAURICIO ESCARPULLI GARCÍA , el
cual deberá de practicarse en el domicilio que señala como lugar
donde habita, mismo y que sirva de base para determinar si la
situación en que vive el Padre de el menor y si es la más
adecuada para su desarrollo Psicológico y educativo el tiempo en
que se encuentra realizando la visita.
Tal situación se deberá valorar todas las

circunstancias que rodean a la seguridad del menor, sin que su
Señoría lo haga, siendo omisa a lo que debió ordenar, así como de
diversas diligencias, de las que se valoraran las circunstancias
del menor y que en su caso, que derivara de la practicade
Inspección Ocular realizada por el personal que el C. Juez
ordenara o comisionara, lo cual no fue llevado a cabo por la
Secretaria de Acuerdos de ese Juzgado, de dicha diligencia no se
advierten elementos que determinen que existen circunstancias
viables para el menor, para que no fuera procedente dichas
mediadas Provisionales dictadas y combatidas, ya que como hemos
venido refiriendo en el acuerdo de fecha 7 de abril del presente
año combatido y emitido por el A Quo, y deberá únicamente valorar
las cuestiones planteadas en la demanda y en la Vía Determinada,
y al dar contestación a la demanda la parte demandada, ésta debió
dar contestación a los hechos planteados de acuerdo a lo señalado
por los artículos 260, fracción I y V de lo cual se desprende que
de la misma, su Señoría debió valorar todas las circunstancias
que rodean al menor y a la misma y más aún cuando la litis se
concentra el Temor fundado de que el padre separe de la Madre a
el menor, por ello se solicita un régimen de Guarda y Custodia,
pero apegado alas circunstancias reales y con apoyo de la
valoración de las mismas de las partes y con respeto de el menor,
así se transcribe la siguiente:
Octava Época
Instancia: SEGUNDO TRIBUNAL COLEGIADO DEL SEXTO
CIRCUITO.
Tomo: VIII, Septiembre de 1991
Página: 178
PRUEBAS PARA MEJOR PROVEER EN CUESTIONES

FAMILIARES. FACULTAD DEL JUEZ. (LEGISLACION DEL
ESTADO DE PUEBLA). Si bien es cierto que los
artículos 1102 y 1105 del Código de Procedimientos
Civiles del Estado de Puebla, respectivamente
establecen, que los procedimientos sobre
cuestiones familiares son de orden público y que
el juez en esos procedimientos tiene amplias
facultades para investigar la verdad real y podrá
ordenar la recepción de cualquier prueba aunque no
la ofrezcan las partes, también es cierto que el
hecho de recabar pruebas, aunque no se hayan
ofrecido por las partes, es una facultad del

52
juzgador, lo cual significa que discrecionalmente

puede o no hacer uso de tal atribución.
SEGUNDO TRIBUNAL COLEGIADO DEL SEXTO CIRCUITO.
Amparo directo 109/90. Jorge Raúl Sampieri. 11 de

mayo de 1990. Unanimidad de votos. Ponente: José
Galván Rojas. Secretario: Vicente Martínez
Sánchez.
De lo anterior, se infiere que su Señoría no realizó

todas las valoraciones y de las circunstancias que rodeaban a el
menor y de las que se dan durante el proceso.
Novena Época
Instancia: SEGUNDO TRIBUNAL COLEGIADO EN MATERIA
CIVIL DEL SEXTO CIRCUITO.
Fuente: Semanario Judicial de la Federación y su
Gaceta
Página: 1290
MENORES DE SIETE AÑOS. EL JUEZ DEBE DECIDIR SOBRE

SU CUSTODIA DE OFICIO, SIN ESPERAR A LA EJECUCIÓN
DE SENTENCIA, CUÁL DE LOS CÓNYUGES DEBE EJERCERLA,
PREVALECIENDO EL INTERÉS DE AQUÉLLOS (LEGISLACIÓN
DEL ESTADO DE PUEBLA). Los artículos 293 y 635,
fracciones I y II, incisos a) y c), del Código
Civil para el Estado de Puebla disponen: "Artículo
293. Los negocios familiares se resolverán
atendiendo preferentemente al interés de los
menores o mayores incapaces o discapacitados, si
los hubiere en la familia de que se trate; en caso
contrario se atenderá al interés de la familia
misma y por último al de los mayores de edad
capaces que formen parte de ella." y "Artículo
635. ... I. El padre y la madre convendrán quién
de ellos se hará cargo de la guarda del menor y
con éste habitará el hijo; II. Si los padres no
llegaren a ningún acuerdo: a) Los menores de siete
años quedarán al cuidado de la madre. ... c) Los
mayores de doce años elegirán cuál de ambos padres
deberá hacerse cargo de ellos y si éstos no
eligen; el Juez decidirá quién deba hacerse cargo
de ellos ...". Ahora bien, si la autoridad
responsable sostiene que el Juez de primera
instancia incumplió con el artículo 463 del Código
Civil en comento, porque no oyó a los cónyuges, al
menor de siete años y al Ministerio Público y que,
por ello, la custodia de dicho menor debe ser
decidida en ejecución de sentencia, este criterio
es incorrecto, ya que dicho artículo debe
interpretarse armónicamente con el contenido de
los artículos 293 y 635, fracción II, incisos a) y
c), del citado código, que sólo permiten a los
hijos mayores de doce años decidir cuál de sus
padres debe hacerse cargo de ellos, y es para
estos casos en que, tratándose de divorcio, debe
oírse a los cónyuges, menores y Ministerio
Público, pues de otro modo se estimaría que los
menores de siete años pueden decidir en ese
aspecto, resultando innecesaria la disposición

53
contenida en el inciso a) de la mencionada

fracción II del artículo 635, que imperativamente
señala que los menores de siete años quedarán al
cuidado de la madre. En consecuencia, ambos padres
no pueden tener la custodia del menor, ni tampoco
esperar a la ejecución de sentencia para decidir
cuál de ellos debe ejercerla, ya que el Juez debe
analizar las circunstancias del caso y resolver a
cuál de sus padres corresponde su custodia,
atendiendo al interés de los menores.
SEGUNDO TRIBUNAL COLEGIADO EN MATERIA CIVIL DEL

SEXTO CIRCUITO.
Amparo directo 298/2001. Noemí Márquez Ávila. 10

de agosto de 2001. Unanimidad de votos. Ponente:
Gustavo Calvillo Rangel. Secretaria: Martha
Gabriela Sánchez Alonso.
De lo anterior también es necesario que se revoque la

resolución combatida en virtud de que su Señoría deja de valorar
las circunstancias que rodean a el menor, de acuerdo con los
artículos del Código Civil del Distrito Federal, los hijos e
hijos menores de cinco años se mantendrán al cuidado de la madre;
así como conforme lo descrito por la Convención sobre los
Derechos del Menor, deben quedar al cuidado de la madre los hijos
menores de siete años; de lo que se deduce que el legislador tuvo
como voluntad que, tanto durante el trámite de los juicios
respectivos como al decidirse éstos, si los cónyuges tuvieren
hijos menores de cinco o siete años, deberían pasar a la guarda y
custodia de su madre y en su caso de que convivan con su padre
será necesario que lo realicen en las mismas condiciones que lo
hacen con la madre. Lo anterior es así, si se parte de la base,
que es de explorado conocimiento jurídico, que los legisladores
no producen disposiciones redundantes ni contradictorias y que si
lo hacen es principio de hermenéutica jurídica que las
disposiciones de la ley deben interpretarse armónicamente, de tal
manera que las mismas valgan sin excluirse en lo individual y se
complemente con las restantes. Luego, si de los preceptos citados
anteriormente se deduce claramente que, tratándose de menores y
tratándose del trámite provisional como acto prejudicial en un
juicio o de controversia familiar o en la decisión provisional o
final que se tome en un procedimiento de tal naturaleza, la ley
impuso al Juzgador la obligación "siempre" y "en todo caso", que
los menores aludidos se a quien se entreguen en guarda y
custodia, ya sea la madre o el padre, los mismos, obviamente,
deberán tener un lugar apropiado para la convivencia con el
menor, sin mediar el trámite incidental, porque fue precisamente
esa la voluntad del legislador, lo que se presenta como una
situación razonable y de fácil explicación, si se toma en
consideración que el ser humano en esa edad, necesita de extremos
cuidados, enorme protección y cariño que sólo le podrán ser
proporcionados por la madre, pues por más que se le pudieran
proporcionar por cualquier otra persona, incluso el padre, nunca,
cuando menos en situaciones normales, tendrán estas personas la
posibilidad de sustituir la calificada atención que le otorga la
naturaleza a la madre de los pequeños.
Así transcribo la siguiente, para reafirmar nuestro

agravio:
Novena Época

54
Instancia: TRIBUNAL COLEGIADO DEL VIGESIMO

CIRCUITO.
Gaceta
Tomo: IV, Julio de 1996
Tesis: XX.97 C
Página: 397
GUARDA Y CUSTODIA DEL MENOR. AUN CUANDO EL PADRE

POSEA UNA SITUACION ECONOMICA MAS ELEVADA QUE LA
DE LA MADRE ES INSUFICIENTE PARA OTORGARLE LA.
(LEGISLACION DEL ESTADO DE CHIAPAS). De
conformidad con el artículo 216 del Código de
Procedimientos Civiles, los hijos menores de siete
años deben permanecer bajo el cuidado de la madre,
ya que se ha estimado que, dada su condición
física y natural, es quien puede proporcionar los
mayores cuidados y atención con la eficacia y
esmero necesarios para su normal desarrollo, y
sólo en los casos de excepción que el Código Civil
prevé en el artículo 439, puede privársele a la
madre de la custodia o, en su caso, la patria
potestad, según proceda; por tanto, la
circunstancia de que el quejoso, en el carácter de
progenitor del menor, goce de una situación
económica más holgada en relación con la madre de
éste, cuya custodia se controvierte, es
insuficiente para separar a dicho menor de su
citada progenitora.
TRIBUNAL COLEGIADO DEL VIGESIMO CIRCUITO.
Amparo directo 1016/95. Cándido Girón Garay. 3 de

mayo de 1996. Unanimidad de votos. Ponente:
Francisco A. Velasco Santiago. Secretario: José
Gabriel Clemente Rodríguez.
De igual forma, su Señoría de ninguna manera valora las

circunstancias que rodean al caso, ya que simplemente resuelve
que el menor conviva con el demandado, sin cerciorarse de que el
mismo es una persona apta para la convivencia, ya que esta
pendiente para realizarse una prueba que sería la mas idónea para
determinar la sanidad mental del Padre del el menor, lo que en la
especie no sucede, sino que simplemente se concreta a determinar
la resolución combatida sin hacer análisis de la circunstancias
que rodean al caso, así que su Señoría simplemente viola el
Principio de Seguridad Jurídica, y dicta el auto combatido
otorgándole la convivencia de el menor en casa del Padre, en
contravención de lo manifestado por el Código Civil, Código de
Procedimientos Civiles y de la Convención sobre los Derechos del
Menor, dejando en franco estado de indefensión, para lo cual me
pregunto si estamos demandado un régimen de gurda y custodia, por
existir el temor fundado de que el menor sea sustraída de la
gurda de la Madre, y le concede al padre un régimen provisional
al padre sin estar supervisada el menor, que o quien nos
garantiza que el menor no será llevada a otro estado, o a otro
país, a pesar de lo decretado, toda vez que no existe garantía,
con la resolución combatida que el padre de el menor prive a su
madre de la guarda y custodia, ya decretada en autos, raspón por
la cual solicitamos se decrete nula y en su lugar se emita una
que permita la convivencia los Sábados de 10:00 A.M. a 12:00 P.M.
y domingos de 10:00 A.M a 12:00 P.M.. en la Casa de Visitas

55
dependiente del Tribunal Superior de Justicia; lo anterior por

virtud de que el menor habita en compañía de su madre; domicilio
que ha quedado indicado en autos mediante escrito de fecha 20 de
abril del año en curso. La anterior determinación se deberá
considerar que el menor necesita llegar a una hora apropiada para
que pueda cenar y bañarse para el día siguiente.
Novena Época
Instancia: SEGUNDO TRIBUNAL COLEGIADO EN
MATERIAS CIVIL Y DE TRABAJO DEL SEGUNDO
CIRCUITO.
Fuente: Semanario Judicial de la Federación y
su Gaceta
Tomo: III, Enero de 1996
Página: 293
GUARDA Y CUSTODIA. Si bien es cierto que de

conformidad con el artículo 267 del Código
Civil del Estado de México, tratándose de
divorcio, corresponde al cónyuge inocente la
guarda y custodia de los hijos habidos en el
matrimonio; también lo es que esto no
significa que tal disposición se aplique
indiscriminadamente a todos los casos, porque
el mismo precepto legal establece una
excepción cuando dispone que el juez puede
discrecionalmente, acordar de oficio
cualquier providencia que considere benéfica
para los hijos, lo que implica que el
juzgador debe cuidar que la resolución que
emita en este sentido, sea acorde a los
intereses de los menores.
SEGUNDO TRIBUNAL COLEGIADO EN MATERIAS CIVIL

Y DE TRABAJO DEL SEGUNDO CIRCUITO.
Amparo directo 884/95. Rafael Martínez

Procel. 13 de septiembre de 1995. Unanimidad
de votos. Ponente: Raúl Solís Solís.
Secretaria: E. Laura Rojas Vargas.
Octava Época
Instancia: QUINTO TRIBUNAL COLEGIADO EN
MATERIA CIVIL DEL PRIMER CIRCUITO.
Tomo: VII, Junio de 1991
Página: 388
PRUEBAS PARA MEJOR PROVEER. CONSTITUYE

FACULTAD DISCRECIONAL DEL JUEZ DECRETAR SU
DESAHOGO. Es cierto que de conformidad con
el artículo 278 del Código de Procedimientos
Civiles para el Distrito Federal, el juzgador
puede valerse de cualquier medio, no
prohibido por la ley ni contrario a la moral,
para conocer la verdad de los puntos
controvertidos, pero también lo es que esa
norma no tiene el alcance consistente en que
por el solo hecho de que en un juicio se
afirme una situación, el juez esté legalmente
obligado a allegarse los medios de convicción
conducentes para determinar si es verdadera o

56
falsa, pues de acuerdo con el numeral 281 del

citado ordenamiento, las partes deben asumir
la carga de la prueba de los hechos
constitutivos de sus pretensiones.
QUINTO TRIBUNAL COLEGIADO EN MATERIA CIVIL

DEL PRIMER CIRCUITO.
Amparo directo 1391/91. Rodolfo Molina

Sánchez. 2 de mayo de 1991. Unanimidad de
votos. Ponente: José Luis Caballero Cárdenas.
Secretario: Alejandro Javier Pizaña Nila.
Novena Época
MATERIA CIVIL DEL SEPTIMO CIRCUITO.
su Gaceta
Tomo: XIV, Octubre de 2001
Tesis: VII.2o.C.70 C
Página: 1117
DIVORCIO. SOLICITUD DE CONVIVENCIA DE LOS

PADRES CON SUS MENORES HIJOS, DURANTE EL
TRÁMITE DEL JUICIO. INTERPRETACIÓN CONJUNTA Y
SISTEMATIZADA DEL ORDINAL 156, FRACCIÓN VI,
CON LOS DIVERSOS 157, 345 Y 346 DEL CÓDIGO
CIVIL (LEGISLACIÓN DEL ESTADO DE VERACRUZ).
Es de explorado derecho que en la relación
matrimonial existen prerrogativas y
obligaciones legalmente reconocidos en
principio al padre y a la madre, lo que
válidamente se puede traducir en el concepto
de patria potestad. Tales derechos sólo
pueden verse mermados por resolución
judicial, como lo establece el dispositivo
157 del Código Civil local, el cual refiere
que en una sentencia de divorcio se fijará en
definitiva la situación de los hijos,
resolviéndose lo relativo a los derechos y
obligaciones inherentes a la patria potestad,
su pérdida, suspensión o limitación y, en
especial, a la custodia y al cuidado de los
hijos; por lo cual, y dada precisamente la
importancia del caso, el legislador local
previó la posibilidad de emitir medidas
provisionales, en tratándose de la custodia
de los hijos, durante el desarrollo del
procedimiento de disolución, reflejada tal
idea en el ordinal 156, fracción VI, de la
normatividad en cita; ello teniendo como
finalidad el evitar afectación a la salud
física y mental de los menores; empero, tal
precepto no puede ser captado en el sentido
de que si las partes no realizan
planteamiento al respecto en la demanda o
reconvención, precluya su derecho y, como
consecuencia, tengan que esperar hasta el
pronunciamiento del fallo definitivo, pues
como se viene diciendo, los afectados serían
los hijos. Por todo ello, indudablemente, el
artículo 156, fracción VI, debe ser
interpretado de manera conjunta y armónica

57
con los diversos 157, 345 y 346, todos de la

legislación sustantiva civil, para sostener
que en caso de divorcio, quienes ejercen la
patria potestad, deben continuar con el
cumplimiento de sus deberes y derechos,
mientras no exista determinación judicial en
contrario que decida provisionalmente a quién
corresponderá el cuidado y atenciones de
ellos durante la secuela del procedimiento; y
en caso de plantearse solicitud sobre la
convivencia de los padres con sus menores
hijos en cualquier etapa del juicio, deberá
ser atendida ipso facto, en pro de los hijos,
efectuando el trámite respectivo.
SEGUNDO TRIBUNAL COLEGIADO EN MATERIA CIVIL

DEL SÉPTIMO CIRCUITO.
Amparo en revisión 634/2000. Armando

Silvestre Zavalza Santillán. 16 de noviembre
de 2000. Unanimidad de votos. Ponente:
Roberto Alejo Rebolledo Viveros. Secretario:
Omar Liévanos Ruiz.
Sí mismo, es necesario citar la siguiente tesis, ya que su

Señoría no valoró las circunsancias que rodean a el menor y los
hechos y las causas que se dieron para interponer la presente
controversia de Guarda y custodia de el menor MAURICIO ESCARPULLI
GONZÁLEZ, RESPECTO DE EL TEMOR FUNDADO DE LAS ACCIONES QUE
REALIZARÍA SU PADRE, por lo que:
Novena Época
MATERIA CIVIL DEL SEXTO CIRCUITO.
su Gaceta
Página: 1290
MENORES DE SIETE AÑOS. EL JUEZ DEBE DECIDIR

SOBRE SU CUSTODIA DE OFICIO, SIN ESPERAR A LA
EJECUCIÓN DE SENTENCIA, CUÁL DE LOS CÓNYUGES
DEBE EJERCERLA, PREVALECIENDO EL INTERÉS DE
AQUÉLLOS (LEGISLACIÓN DEL ESTADO DE PUEBLA).
Los artículos 293 y 635, fracciones I y II,
incisos a) y c), del Código Civil para el
Estado de Puebla disponen: "Artículo 293. Los
negocios familiares se resolverán atendiendo
preferentemente al interés de los menores o
mayores incapaces o discapacitados, si los
hubiere en la familia de que se trate; en
caso contrario se atenderá al interés de la
familia misma y por último al de los mayores
de edad capaces que formen parte de ella." y
"Artículo 635. ... I. El padre y la madre
convendrán quién de ellos se hará cargo de la
guarda del menor y con éste habitará el hijo;
II. Si los padres no llegaren a ningún
acuerdo: a) Los menores de siete años
quedarán al cuidado de la madre. ... c) Los
mayores de doce años elegirán cuál de ambos
padres deberá hacerse cargo de ellos y si

58
éstos no eligen; el Juez decidirá quién deba

hacerse cargo de ellos ...". Ahora bien, si
la autoridad responsable sostiene que el Juez
de primera instancia incumplió con el
artículo 463 del Código Civil en comento,
porque no oyó a los cónyuges, al menor de
siete años y al Ministerio Público y que, por
ello, la custodia de dicho menor debe ser
decidida en ejecución de sentencia, este
criterio es incorrecto, ya que dicho artículo
debe interpretarse armónicamente con el
contenido de los artículos 293 y 635,
fracción II, incisos a) y c), del citado
código, que sólo permiten a los hijos mayores
de doce años decidir cuál de sus padres debe
hacerse cargo de ellos, y es para estos casos
en que, tratándose de divorcio, debe oírse a
los cónyuges, menores y Ministerio Público,
pues de otro modo se estimaría que los
menores de siete años pueden decidir en ese
aspecto, resultando innecesaria la
disposición contenida en el inciso a) de la
mencionada fracción II del artículo 635, que
imperativamente señala que los menores de
siete años quedarán al cuidado de la madre.
En consecuencia, ambos padres no pueden tener
la custodia del menor, ni tampoco esperar a
la ejecución de sentencia para decidir cuál
de ellos debe ejercerla, ya que el Juez debe
analizar las circunstancias del caso y
resolver a cuál de sus padres corresponde su
custodia, atendiendo al interés de los
menores.

DEL SEXTO CIRCUITO.
Amparo directo 298/2001. Nohemí Márquez

Ávila. 10 de agosto de 2001. Unanimidad de
votos. Ponente: Gustavo Calvillo Rangel.
Secretaria: Martha Gabriela Sánchez Alonso.
Novena Época
Instancia: CUARTO TRIBUNAL COLEGIADO EN
su Gaceta
Tomo: XI, Marzo de 2000
Tesis: I.4o.C.36 C
Página: 976
CONVIVENCIA FAMILIAR. PUEDE PROMOVERSE EN

EJECUCIÓN DE SENTENCIA O EN UN JUICIO
AUTÓNOMO. Aun cuando en la sentencia de
divorcio no se haya hecho pronunciamiento
respecto a la convivencia familiar, de
conformidad con el artículo 283 del Código
Civil, los Jueces gozan de las más amplias
facultades para resolver, en la sentencia de
divorcio, todo lo relativo a los derechos y
obligaciones inherentes a la patria potestad,
su pérdida, suspensión o limitación, según
sea el caso, y en especial a la custodia y

59
cuidado de los hijos; por lo que si en la

sentencia de divorcio se resolvió que ambos
cónyuges conservarían la patria potestad de
sus menores hijos, y que la guarda y custodia
quedaría a cargo de uno de ellos, la fijación
de reglas para la convivencia familiar, como
un derecho de los padres, inherente a la
patria potestad, bien puede pedirse en juicio
autónomo o mediante incidente después de
concluido el juicio de divorcio.
CUARTO TRIBUNAL COLEGIADO EN MATERIA CIVIL

Amparo en revisión 4940/99. Lucía López

Calzada y Adolfo Ramos Lemus. 28 de enero de
2000. Unanimidad de votos. Ponente: Rafaela
Reyna Franco Flores, secretaria de tribunal
autorizada por el Pleno del Consejo de la
Judicatura Federal para desempeñar las
funciones de Magistrada. Secretaria: Leticia
Araceli López Espíndola.
Novena Época
Instancia: SEXTO TRIBUNAL COLEGIADO EN
su Gaceta
Tesis: I.6o.C.175 C
Página: 571
MENORES DE EDAD. SU DEPÓSITO BAJO TUTELA

PROVISIONAL DE UN ALBERGUE NO CONSTITUYE
DETENCIÓN NI PRIVACIÓN ILEGAL DE LA LIBERTAD,
SINO QUE LA MEDIDA ES PARA OTORGARLES
PROTECCIÓN Y LOGRAR SU DESARROLLO INTEGRAL EN
CASO DE ABANDONO, CONFLICTO, DAÑO O PELIGRO.
El hecho de que un menor sea puesto bajo la
tutela provisional de un albergue por
ordenamiento escrito de autoridad competente,
fundando y motivando la causa legal para
ello, no significa que esté en calidad de
detenido o bajo privación ilegal de la
libertad conculcándose algún precepto de
orden público y como consecuencia el artículo
16 constitucional, toda vez que la finalidad
de la medida es de otorgar protección a los
menores de edad que por alguna razón se
encuentren en abandono, conflicto, daño o
peligro, para lograr en ellos su desarrollo
integral; lo anterior, de conformidad con lo
dispuesto por los artículos 40 y 41 del
Reglamento de la Ley Orgánica de la
Procuraduría General de Justicia del Distrito
Federal, hasta en tanto quien tenga la guarda
y custodia provisional, pueda ejercitar su
facultad; en la inteligencia de que sólo se
utilizará como medida de último recurso y
durante el periodo más breve que proceda.

60
SEXTO TRIBUNAL COLEGIADO EN MATERIA CIVIL DEL

PRIMER CIRCUITO.
Amparo en revisión 4366/98. Juan Silvestre

García Acevedo y otro. 2 de febrero de 1999.
Unanimidad de votos. Ponente: Adalid Ambriz
Landa. Secretaria: María Teresa Covarrubias
Ramos.
Así mismo, su Señoría, debió valora las circunstancias

de la Demanda para conceder la medida provisional de la
forma en que la otorgó, ya que no valora al conceder la
visita de el menor con el padre, sin obtener un
domicilio donde dormirá el menor es decir soltó a el
menor al padre sin saber donde habitará con el menor, y
sin valora si el domicilio que desde luego desconocemos
reúne las características necesarias de salubridad e
higiene, Sirve para valorar lo anterior las siguientes
circunstancias:
Novena Época
MATERIA CIVIL DEL SEGUNDO CIRCUITO.
su Gaceta
Tomo: VIII, Octubre de 1998
Página: 1126
CONVIVENCIA DEL PADRE CON SUS MENORES HIJOS.

NO PROCEDE SI EXISTE PRESUNCIÓN FUNDADA DE
QUE EL PROGENITOR COMETIÓ ACTOS LIBIDINOSOS
EN PERJUICIO DE DICHOS HIJOS (LEGISLACIÓN DEL
ESTADO DE MÉXICO). De conformidad con lo que
dispone el artículo 267 del Código Civil para
el Estado de México, el juzgador al resolver
sobre el divorcio debe determinar lo
referente a la guarda y custodia de los
menores hijos, así como lo relativo al
derecho de convivencia, pero siempre acorde
con lo que beneficie a tales menores. De
consiguiente, si en el juicio respectivo
obran las diversas documentales ofrecidas por
las partes, consistentes en copia certificada
de la orden de aprehensión dictada contra el
interesado como presunto responsable de haber
cometido actos libidinosos en contra de sus
menores hijos, así como un informe en
sicología, y ambas pruebas, concatenadas
entre sí, permitieron a la responsable
estimar que existe una clara presunción
fundada y lógica de que la convivencia del
padre con las menores aludidas pueda producir
efectos dañinos en la salud, costumbres, y
sobre todo, temor y alteración respecto de la
figura paterna por parte de sus hijos, ello
es concluyente para que el ahora quejoso no
tenga derecho a tal convivencia,
previniéndose así posibles daños irreparables
en perjuicio de dichas menores, cuya decisión
no es conculcatoria de las garantías de
legalidad y seguridad jurídica.

61

Amparo directo 199/98. Juan Carlos Ruiz Ríos.

1o. de septiembre de 1998. Unanimidad de
votos. Ponente: Virgilio A. Solorio Campos.
Secretario: José Valdés Villegas.
Segundo.- Ocasiona serio perjuicio el

contenido del auto dictado por su Señoría en Auto de fecha 13 de
septiembre del año en curso y publicado mediante boletín No. 73
de fecha 17 septiembre del año en curso, causando perjuicio lo
dictado en dicha audiencia, y en especial lo descrito de la
siguiente manera:


de seguridad y estabilidad de el menor y de quien detenta la
Guarda y Custodia de el menor, en razón a que el mismo no provee
respecto de las pruebas documentales con excepción de la
documental marcada con el número nueve y diez, toda vez que la
misma si indica en que consiste el informe a solicitar, de donde
de la simple lectura y debida interpretación se desprende que se
simplemente se desechan las pruebas 9 y 10 consistentes en las
pruebas en las materias de psicologiía y quimicofarmaceutica, que
se solicitan, ya que esgrime que la Actora no se encuentra
asesorada a través de Defensor de Oficio, y por no haber nombrado
perito de “su” parte se desechan, pruebas las que servirán para
determinar la realidad de los hechos y lo cual tienen un gran
relación con el temor fundado para que el Demandado sustraiga al
menor de la compañía de su madre, es decir, poniendo en peligro a
el menor; en cuyo caso, hacemos responsable a su Señoría de
cualquier situación suceda en perjuicio del Menor, además de que
en dicho menor tiene apenas un año de edad, situación de la cual
es omisa el Juez que conoce de la causa, pasando por alto lo
descrito por los artículos que a continuación transcribo del
Código de Procedimientos Civiles del Distrito Federal, pero en
especial sobre lo decretado en las medidas precautorias que
tiendan a preservar la familia y proteger a sus miembros, así:
“ARTICULO 940
Todos los problemas inherentes a la familia se

consideran de orden público, por constituir aquella la
base de la integración de la sociedad.”

62
“ARTICULO 941
El juez de lo familiar estará facultado para intervenir

de oficio en los asuntos que afecten a la familia,
especialmente tratándose de menores, de alimentos y de
cuestiones relacionadas con violencia familiar,
decretando las medidas precautorias que tiendan a
preservar la familia y proteger a sus miembros.
En todos los asuntos del orden familiar los Jueces y

Tribunales están obligados a suplir la deficiencia de
las partes en sus planteamientos de derecho....”
De lo anterior, es necesario recordarle al A Quo que

existen en ese sentido criterios expresados por la Suprema Corte
de Justicia, así:
Novena Época
Tomo: XVII, Enero de 2003
Tesis: II.2o.C.78 K
Página: 1870
SUSPENSIÓN PROVISIONAL. PROCEDE CONCEDERLA MIENTRAS SE

DECIDE SOBRE LA DEFINITIVA TRATÁNDOSE DE MENORES,
SUPLIÉNDOSE LA DEFICIENCIA DE LA QUEJA. Si en un
juicio de amparo el ascendiente de un menor reclama la
falta de legalidad de la determinación que declara
ejecutoriado el fallo de primera instancia, y solicita
la suspensión para evitar que éste sea entregado a su
madre, debe concederse tal medida provisionalmente,
mientras se decide sobre la definitiva, ya que al
encontrarse sub júdice la legalidad o no de los actos
reclamados, carece de definitividad tal resolución.
Así, con independencia de ser cierto que existe un
interés de orden público en que se cumplan las
sentencias ejecutoriadas, también resulta verídico que
mientras no se decida en definitiva sobre la legalidad
del aludido acuerdo, es conveniente que se conceda la
medida cautelar solicitada atendiéndose
fundamentalmente a la minoría de edad del hijo, cuya
custodia discuten sus padres, para que entre tanto no
se le afecte ni sufra daños de difícil reparación en su
persona e integridad, porque la sociedad y el Estado
están interesados en que tratándose de los menores de
edad se les proteja y que se evite que pudieren sufrir
algún maltrato físico o emocional en su entorno
personal y social. Ello, porque en términos de lo
dispuesto por el artículo 76 bis, en su fracción V, de
la Ley de Amparo, las autoridades que conozcan del
juicio de garantías tienen el deber de suplir la
deficiencia de los conceptos de violación o de los
agravios respectivos, siempre que esté de por medio,
directa o indirectamente, el bienestar de un menor de
edad.

CIRCUITO.

63
Queja 25/2002. Francisco García Lugo. 22 de noviembre

de 2002. Unanimidad de votos. Ponente: Virgilio A.
Solorio Campos.
Novena Época
Tomo: XVII, Junio de 2003
Página: 993
GUARDA Y CUSTODIA. ES CORRECTA Y LEGAL LA DETERMINADA

EN FAVOR DE LA MADRE, SI PRIMORDIALMENTE ELLO BENEFICIA
AL MENOR. Tratándose de un juicio donde se discuta el
ejercicio de la guarda y custodia de un menor, la cual
queda a cargo de la madre, y en el hogar o domicilio
respectivo vive el infante junto con sus hermanas, sin
demostrarse que tal situación pudiere causar algún daño
o tener una influencia negativa en el desarrollo
físico, emocional e intelectual de dicho menor, debe
estimarse adecuado y acorde a la ley lo decidido por la
responsable al confirmar dichas guarda y custodia a
favor de la progenitora, sobre todo si la controversia
no se sustentó en la falta de las condiciones ideales
sobre dicha convivencia familiar en ese núcleo, aunado
ello a que el pequeño interesado ha externado su deseo
de estar a lado de su madre, por prevalecer un mejor
clima de convivencia en dicho ambiente familiar
primario conformado además por las hermanas, lo cual
incuestionablemente le favorecerá y no es contrario a
los principios de legalidad y de seguridad jurídica;
salvo que de las actuaciones relativas se advirtiera la
necesidad imperiosa de recabar pruebas oficiosamente en
dicha temática.

CIRCUITO.
Amparo directo 80/2003. 3 de marzo de 2003. Unanimidad

de votos. Ponente: Virgilio A. Solorio Campos.
Secretario: Faustino García Astudillo.
Novena Época
Instancia: TERCER TRIBUNAL COLEGIADO EN MATERIA CIVIL
Tesis: II.3o.C. J/4
Página: 1206
GUARDA Y CUSTODIA. DEBE DETERMINARSE CONSIDERANDO EL

INTERÉS SUPERIOR DE NIÑAS, NIÑOS Y ADOLESCENTES
CONFORME A LA CONVENCIÓN SOBRE LOS DERECHOS DEL NIÑO.
El derecho a la guarda y custodia de una niña, niño y
adolescente, implica considerar no sólo las pruebas
ofrecidas por las partes con las que pretendan
demostrar una adecuada capacidad para el cuidado del
menor, sino que atendiendo al beneficio directo de la
infancia, el juzgador también debe considerar el
interés superior de la niña, niño y adolescente como
presupuesto esencial para determinar quién tiene

64
derecho a la guarda y custodia. Ello, porque conforme a

lo dispuesto por el artículo 4o. constitucional que
establece el desarrollo integral, el respeto a la
dignidad y derechos de la niñez, así como los artículos
3o., 7o., 9o., 12, 18, 19, 20 y 27 de la Convención
sobre los Derechos del Niño, ratificada por México el
veintiuno de septiembre de mil novecientos ochenta y
nueve, que establece que los Estados garantizarán que
los tribunales judiciales velen por el interés superior
del niño, los juicios en los que se vean involucrados
derechos inherentes de las niñas, niños y adolescentes,
como el caso en que se demande la guarda y custodia,
debe tenerse como presupuesto esencial el interés
superior del niño y darle intervención al Ministerio
Público, para que en su carácter de representante de la
sociedad, vele por los derechos de los infantes y
adolescentes.
TERCER TRIBUNAL COLEGIADO EN MATERIA CIVIL DEL SEGUNDO

CIRCUITO.
Amparo directo 170/2000. Adrián Escorcia Martínez y

otra. 1o. de marzo de 2001. Unanimidad de votos.
Ponente: Felipe Alfredo Fuentes Barrera. Secretaria:
Cristina García Acuautla.
Amparo directo 935/2000. Rosa María Reyes Galicia y

otro. 17 de octubre de 2001. Unanimidad de votos.
Ponente: Raúl Solís Solís. Secretaria: Yolanda González
Medrano.
Amparo directo 980/2000. Geni Vega Espriella. 26 de

junio de 2001. Unanimidad de votos. Ponente: Raúl Solís
Solís. Secretaria: Yolanda González Medrano.
Amparo directo 701/2001. Ignacio Alfaro Hernández. 29

de enero de 2002. Unanimidad de votos. Ponente: Raúl
Solís Solís. Secretaria: E. Laura Rojas Vargas.
Amparo directo 367/2002. Carlos Octavio Juárez

González. 9 de julio de 2002. Unanimidad de votos.
Ponente: José Fernando García Quiroz, secretario de
tribunal autorizado por el Pleno del Consejo de la
Judicatura Federal para desempeñar las funciones de
Magistrado. Secretario: Jorge Luis Mejía Perea.
Así es necesario que se analice debidamente la

ejecutoria que a continuación transcribo, para que la Ad Cuem
modifique el acuerdo combatido, Por ello tenemos que:
Novena Época
Semanario Judicial de la Federación y su Gaceta
Época: NOVENA EPOCA
Página: 1207
AMPARO DIRECTO 367/2002. CARLOS OCTAVIO JUÁREZ

GONZÁLEZ.
CONSIDERANDO:

65
QUINTO. El estudio de los conceptos de violación arroja

el siguiente resultado.
Para ilustrar la decisión que este órgano colegiado

habrá de tomar en el presente asunto, conviene realizar
las siguientes precisiones:
La familia es un núcleo de personas que como grupo

social ha surgido de la naturaleza y deriva
primordialmente del hecho biológico de la generación.
En un sentido amplio, es el conjunto de personas que

proceden de un progenitor o tronco común; sus fuentes
son el matrimonio, la filiación (legítima o natural) y
en casos excepcionales la adopción.
Esta relación conyugal, paterno filial y de parentesco

colateral de origen consanguíneo o simplemente de
naturaleza legal, establece vínculos entre los
componentes de ese grupo familiar de diverso orden e
intensidad (sentimentales, morales, jurídicos,
económicos y de auxilio o ayuda recíproca) que no
permanecen ajenos al derecho objetivo sino, por el
contrario, éste afianza, reafirma y consolida,
atribuyendo a dichos vínculos el carácter de deberes,
obligaciones, facultades y derechos.
Las normas jurídicas que se ocupan de regular, creando

y organizando tales relaciones, forman el derecho de
familia que comprende las disposiciones legales
relativas al matrimonio, al concubinato, a la
filiación, a los alimentos, al patrimonio de la
familia, a la patria potestad, a la emancipación, a la
tutela, etcétera.
Por tanto, el derecho de familia es un conjunto de

normas jurídicas destinadas a regir la conducta de los
miembros del grupo familiar entre sí, creando las
relaciones conyugales, constituidas por un sistema de
derechos y obligaciones, poderes, facultades y deberes
entre consortes y parientes.
Esas facultades y deberes de carácter asistencial que

nacen entre los parientes colaterales (hermanos, tíos,
sobrinos, etcétera), tienen entre ascendientes y
descendientes un aspecto de potestades y sujeciones
establecidas para la protección de los hijos.
Así pues, el derecho de familia se ocupa, entre otros

aspectos, de la protección de los menores a través del
ejercicio de la patria potestad, la que es considerada
como una institución protectora de la persona y bienes
de los hijos menores de edad, no emancipados, que nace
de la filiación. Su ejercicio corresponde en primer
término a los progenitores (el padre y la madre del
menor) y a falta de éstos, a los demás ascendientes por
la línea paterna y por la línea materna, a falta de
padres y abuelos paternos.
Pero cuando ambos padres del menor ejercen la patria

potestad, pero viven separados sea cual fuere la causa,

66
entonces surge la necesidad de determinar con quién de

ellos habrá de vivir el menor, es decir, cuál de los
progenitores ejercerá el derecho de custodia sobre ese
hijo.
Es pertinente precisar que la Constitución Política de

los Estados Unidos Mexicanos, que rige el sistema
jurídico de nuestro país desde mil novecientos
diecisiete, estableció diversas garantías de orden
personal y social en favor de los menores, precisamente
en su artículo 4o., en los términos siguientes:
"Artículo 4o. ...
"Es deber de los padres preservar el derecho de los

menores a la satisfacción de sus necesidades y a la
salud física y mental. La ley determinará los apoyos a
la protección de los menores, a cargo de las
instituciones públicas."
"Artículo 4o. ...
"Los niños y las niñas tienen derecho a la satisfacción

de sus necesidades de alimentación, salud, educación y
sano esparcimiento para su desarrollo integral.
"Los ascendientes, tutores y custodios tienen el deber

de preservar estos derechos. El Estado proveerá lo
necesario para propiciar el respeto a la dignidad de la
niñez y el ejercicio pleno de sus derechos.
"El Estado otorgará facilidades a los particulares para

que se coadyuven al cumplimiento de los derechos de la
niñez."
También es pertinente dejar asentado que nuestro país

es parte integrante de la Convención sobre los Derechos
del Niño, adoptada en Nueva York, Estados Unidos de
América, en mil novecientos ochenta y nueve, en vigor
desde el dos de septiembre de mil novecientos noventa y
ratificada por nuestro país el veintiuno de septiembre
de ese mismo año.
La declaración de principios contenida en el preámbulo

de este instrumento de derecho internacional, resalta
como puntos esenciales: la igualdad de derechos para
todos los miembros de la familia humana; la dignidad y
el valor de la persona humana; la promoción del
progreso y elevación de los niveles de vida dentro de
un marco de libertad; el derecho de la infancia a tener
cuidados y asistencia especiales por su falta de
madurez tanto física como mental; la protección de la
familia como grupo en el cual la niñez crece y se
desarrolla; el reconocimiento de la persona humana en
su niñez, su necesidad de crecer en un ambiente
familiar de felicidad, amor y comprensión para lograr
un desarrollo pleno y armonioso; la preparación de la
niñez para una vida independiente con "espíritu de paz,
dignidad, tolerancia, libertad, igualdad y
solidaridad"; la toma de conciencia de las condiciones
especialmente difíciles en las que viven muchos niños y
niñas en el mundo y la importancia de las tradiciones.

67
Con base en esa declaración de principios, los

artículos del 1o. al 41 de la citada convención
enuncian los siguientes derechos para la niñez: el
derecho a la vida y a un sano desarrollo psicofísico;
el derecho a la identidad, que incluye el derecho al
nombre y a la nacionalidad; el derecho a una atención
especial en consideración a sus propios intereses
calificados de superiores en todas las instancias
judiciales, administrativas o de bienestar social; el
derecho a dar su opinión y que ésta sea tomada en
cuenta en todos los asuntos que le afecten, incluyendo
los de carácter judicial y administrativo; el derecho a
la no discriminación; el derecho a vivir en familia,
que incluye la incorporación plena a una nueva familia
a través de la adopción; el derecho a ser protegido
contra peligros físicos o mentales, contra el descuido,
el abuso sexual, la explotación, el uso de drogas y
enervantes o el secuestro y la trata; el derecho a que
se le proporcionen los cuidados alternativos adecuados
en caso de desamparo familiar; el derecho a una
educación, trato y cuidados especiales en caso de
impedimento psicofísico o cuando hayan sido víctimas de
maltrato; el derecho a disfrutar del más alto nivel
posible de salud; el derecho a la enseñanza primaria y
a una educación que respete su dignidad y los prepare
para la vida en un espíritu de comprensión, paz y
tolerancia; el derecho al descanso, al juego y a las
actividades culturales y artísticas; el derecho a
disfrutar libremente de su cultura, religión o idioma,
entre otros.
Ahora bien, de la Convención sobre los Derechos del

Niño, cabe destacar lo prescrito en los dispositivos
3o., 7o., 9o., 12, 18, 19, 20 y 27, que en forma
preponderante constriñen a los tribunales judiciales a
velar por el interés superior del niño, en los
"Artículo 3o.
"1. En todas las medidas concernientes a los niños que

tomen las instituciones públicas o privadas de
bienestar social, los tribunales, las autoridades
administrativas o los órganos legislativos, una
consideración primordial a que se atenderá será el
interés superior del niño.
"2. Los Estados Partes se comprometen a asegurar al

niño la protección y el cuidado que sean necesarios
para su bienestar, teniendo en cuenta los derechos y
deberes de sus padres, tutores u otras personas
responsables de él ante la ley y, con ese fin, tomarán
todas las medidas legislativas y administrativas
adecuadas.
"3. Los Estados Partes se asegurarán de que las

instituciones, servicios y establecimientos encargados
del cuidado o la protección de los niños cumplan las
normas establecidas por las autoridades competentes,
especialmente en materia de seguridad, sanidad, número
y competencia de su personal, así como en relación con
la existencia de una supervisión adecuada."

68
"Artículo 9o.
"1. Los Estados Partes velarán porque el niño no sea

separado de sus padres contra la voluntad de éstos,
excepto cuando, a reserva de revisión judicial, las
autoridades competentes determinen, de conformidad con
la ley y los procedimientos aplicables, que tal
separación es necesaria en el interés superior del
niño. Tal determinación puede ser necesaria en casos
particulares, por ejemplo, en los casos en que el niño
sea objeto de maltrato o descuido por parte de sus
padres o cuando éstos viven separados y debe adoptarse
una decisión acerca del lugar de residencia del niño.
"2. En cualquier procedimiento entablado de conformidad

con el párrafo 1 del presente artículo, se ofrecerá a
todas las partes interesadas la oportunidad de
participar en él y de dar a conocer sus opiniones.
"3. Los Estados Partes respetarán el derecho del niño

que esté separado de uno o de ambos padres a mantener
relaciones personales y contacto directo con ambos
padres de modo regular, salvo si ello es contrario al
interés superior del niño.
"4. Cuando esa separación sea resultado de una medida

adoptada por un Estado Parte, como la detención, el
encarcelamiento, el exilio, la deportación o la muerte
(incluido el fallecimiento debido a cualquier causa
mientras la persona esté bajo la custodia del Estado)
de uno de los padres del niño, o de ambos, o del niño,
el Estado Parte proporcionará, cuando se le pida, a los
padres, al niño o, si procede, a otro familiar,
información básica acerca del paradero del familiar o
familiares ausentes, a no ser que ello resultase
perjudicial para el bienestar del niño. Los Estados
Partes se cerciorarán, además, de que la presentación
de tal petición no entrañe por sí misma consecuencias
desfavorables para la persona o personas interesadas."
"Artículo 12.
"1. Los Estados Partes garantizarán al niño que esté en

condiciones de formarse un juicio propio el derecho de
expresar su opinión libremente en todos los asuntos que
afectan al niño, teniéndose debidamente en cuenta las
opiniones del niño, en función de la edad y madurez del
niño.
"2. Con tal fin, se dará en particular al niño

oportunidad de ser escuchado, en todo procedimiento
judicial o administrativo que afecte al niño, ya sea
directamente o por medio de un representante o de un
órgano apropiado, en consonancia con las normas de
procedimiento de la ley nacional."
"Artículo 19.
"1. Los Estados Partes adoptarán todas las medidas

legislativas, administrativas, sociales y educativas
apropiadas para proteger al niño contra toda forma de
perjuicio o abuso físico o mental, descuido o trato

69
negligente, malos tratos o explotación, incluido el

abuso sexual, mientras el niño se encuentre bajo la
custodia de los padres, de un representante legal o de
cualquier otra persona que lo tenga a su cargo.
"2. Esas medidas de protección deberían comprender,

según corresponda, procedimientos eficaces para el
establecimiento de programas sociales con objeto de
proporcionar la asistencia necesaria al niño y a
quienes cuidan de él, así como para otras formas de
prevención y para la identificación, notificación,
remisión a una institución, investigación, tratamiento
y observación ulterior de los casos antes descritos de
malos tratos al niño y, según corresponda, la
intervención judicial."
"Artículo 20.
"1. Los niños temporal o permanentemente privados de su

medio familiar, o cuyo superior interés exija que no
permanezcan en ese medio, tendrán derecho a la
protección y asistencia especiales del Estado.
"2. Los Estados Partes garantizarán, de conformidad con

sus leyes nacionales, otros tipos de cuidado para esos
niños.
"3. Entre esos cuidados figurarán, entre otras cosas,

la colocación en hogares de guarda, la kafala del
derecho islámico, la adopción o de ser necesario, la
colocación en instituciones adecuadas de protección de
menores. Al considerar las soluciones, se prestará
particular atención a la conveniencia de que haya
continuidad en la educación del niño y a su origen
étnico, religioso, cultural y lingüístico."
"Artículo 21.
"Los Estados Partes que reconocen o permiten el sistema

de adopción cuidarán de que el interés superior del
niño sea la consideración primordial. ..."
"Artículo 27.
"1. Los Estados Partes reconocen el derecho de todo

niño a un nivel de vida adecuado para su desarrollo
físico, mental, espiritual, moral y social.
"2. A los padres u otras personas encargadas del niño

les incumbe la responsabilidad primordial de
proporcionar, dentro de sus posibilidades y medios
económicos, las condiciones de vida que sean necesarias
para el desarrollo del niño. ..."
Como efecto inmediato de esta convención aparece en el

sistema jurídico mexicano el concepto del interés
superior de la niñez, el cual implica que en todo
momento las políticas, acciones y toma de decisiones
relacionadas con esta etapa de la vida humana, tendrán
que realizarse de tal manera que, en primer término, se
busque el beneficio directo del niño o niña a quien van
dirigidas.

70
De esta manera, las instituciones familiares heredadas

desde el derecho romano vuelven a sufrir una
transformación acercándose más hacia la niñez y
alejándose más de los intereses de los adultos. La
patria potestad es un ejemplo muy claro de estas
transformaciones. Antiguamente implicaban el derecho de
vida o muerte que el pater tenía sobre las personas
sujetas a él; visión que, poco a poco, fue cambiando
para dirigir su foco de atención hacia la niñez,
estableciendo no sólo derechos para quien ejerce la
patria potestad, sino también deberes y, como ya vimos,
los primeros sólo existen en función de estos últimos
para facilitar su cumplimiento. Así, se convierte de un
poder, en una función social.
En este panorama, la aparición del concepto interés

superior de la niñez supedita, con mayor claridad, los
derechos que las personas adultas pudieran tener sobre
un niño o niña, al deber de atenderlos y cuidarlos,
buscando siempre el mayor beneficio posible para ellos,
como un imperativo de la comunidad hacia las personas
que ejercen la patria potestad. Con ello, la función
social es ahora explícitamente de orden público e
interés social.
Ahora, por disposición expresa del artículo 133

constitucional, los tribunales judiciales, al resolver
sobre controversias que incidan sobre los derechos de
los menores, tienen la obligación de atender a estas
disposiciones.
En efecto, el citado precepto establece:
"Esta Constitución, las leyes del Congreso de la Unión

que emanen de ella y todos los tratados que estén de
acuerdo con la misma, celebrados y que se celebren por
el presidente de la República, con aprobación del
Senado, serán la Ley Suprema de toda la Unión. Los
Jueces de cada Estado se arreglarán a dicha
Constitución, leyes y tratados, a pesar de las
disposiciones en contrario que pueda haber en las
Constituciones o leyes de los Estados."
De la transcripción anterior se desprende que

constitucionalmente se reconoce en los tratados la
fuente única del derecho internacional y, como
consecuencia de lo anterior, el Constituyente mexicano
reconoce la incorporación de las normas contenidas en
los tratados dentro del sistema jurídico y las hace
vigentes cuando se cumpla con los requisitos que la
misma establece.
De acuerdo con la interpretación gramatical de la

primera parte del artículo 133, para considerar que un
tratado sea, junto con las leyes emanadas de la
Constitución y que sean aprobadas por el Congreso de la
Unión, "la Ley Suprema de toda la Unión", es menester
que se satisfagan dos requisitos formales y uno de
fondo: los primeros se hacen consistir en que el
tratado esté o sea celebrado por el presidente de la
República y que sea aprobado por el Senado. El
requisito de fondo consiste en la adecuación de la

71
convención internacional con el texto de la propia Ley

Fundamental.
Por otra parte, es oportuno destacar la supremacía de

los tratados frente a la legislación local. Esta
posición ha sido soportada por las diversas teorías
asumidas por los principales constitucionalistas
mexicanos, las que plantean la superioridad de los
tratados frente a la legislación local. Esta situación
se ve reforzada no sólo por la fuerza normativa que
representan los compromisos internacionales, sino sobre
todo por el hecho de que es suscrito por el presidente
de la República en su carácter de jefe de Estado y la
participación del Senado en el proceso que, como se
mencionó, representa la participación de las entidades
federativas en el proceso de incorporación de un
compromiso internacional al derecho positivo mexicano.
Cuando surgen conflictos entre lo prescrito por las
normas de derecho interno y del derecho internacional
adoptado como vigente, de acuerdo con nuestro sistema
constitucional, debe partirse de la base del nivel
jerárquico de la norma en cuestión y sobre todo del
mandato que la Constitución establece sobre el
particular; un tratado tendrá la jerarquía que expresa
o tácitamente la propia Ley Fundamental le dé, que en
nuestro ámbito constitucional se ubica jerárquicamente
por encima de las leyes federales y en un segundo plano
respecto de la Constitución Federal.
Sirve de fundamento a lo anterior la tesis P.

LXXVII/99, publicada en el Semanario Judicial de la
Federación y su Gaceta, Novena Época, Tomo X, noviembre
de 1999, página 46, que dice:
"TRATADOS INTERNACIONALES. SE UBICAN JERÁRQUICAMENTE

POR ENCIMA DE LAS LEYES FEDERALES Y EN UN SEGUNDO PLANO
RESPECTO DE LA CONSTITUCIÓN FEDERAL. Persistentemente
en la doctrina se ha formulado la interrogante respecto
a la jerarquía de normas en nuestro derecho. Existe
unanimidad respecto de que la Constitución Federal es
la norma fundamental y que aunque en principio la
expresión ‘... serán la Ley Suprema de toda la
Unión ...’ parece indicar que no sólo la Carta Magna es
la suprema, la objeción es superada por el hecho de que
las leyes deben emanar de la Constitución y ser
aprobadas por un órgano constituido, como lo es el
Congreso de la Unión y de que los tratados deben estar
de acuerdo con la Ley Fundamental, lo que claramente
indica que sólo la Constitución es la Ley Suprema. El
problema respecto a la jerarquía de las demás normas
del sistema, ha encontrado en la jurisprudencia y en la
doctrina distintas soluciones, entre las que destacan:
supremacía del derecho federal frente al local y misma
jerarquía de los dos, en sus variantes lisa y llana, y
con la existencia de ‘leyes constitucionales’, y la de
que será ley suprema la que sea calificada de
constitucional. No obstante, esta Suprema Corte de
Justicia considera que los tratados internacionales se
encuentran en un segundo plano inmediatamente debajo de
la Ley Fundamental y por encima del derecho federal y
el local. Esta interpretación del artículo 133
constitucional, deriva de que estos compromisos
internacionales son asumidos por el Estado mexicano en

72
su conjunto y comprometen a todas sus autoridades

frente a la comunidad internacional; por ello se
explica que el Constituyente haya facultado al
presidente de la República a suscribir los tratados
internacionales en su calidad de jefe de Estado y, de
la misma manera, el Senado interviene como
representante de la voluntad de las entidades
federativas y, por medio de su ratificación, obliga a
sus autoridades. Otro aspecto importante para
considerar esta jerarquía de los tratados, es la
relativa a que en esta materia no existe limitación
competencial entre la Federación y las entidades
federativas, esto es, no se toma en cuenta la
competencia federal o local del contenido del tratado,
sino que por mandato expreso del propio artículo 133 el
presidente de la República y el Senado pueden obligar
al Estado mexicano en cualquier materia,
independientemente de que para otros efectos ésta sea
competencia de las entidades federativas. Como
consecuencia de lo anterior, la interpretación del
artículo 133 lleva a considerar en un tercer lugar al
derecho federal y al local en una misma jerarquía en
virtud de lo dispuesto en el artículo 124 de la Ley
Fundamental, el cual ordena que ‘Las facultades que no
están expresamente concedidas por esta Constitución a
los funcionarios federales, se entienden reservadas a
los Estados.’. No se pierde de vista que en su anterior
conformación, este Máximo Tribunal había adoptado una
posición diversa en la tesis P. C/92, publicada en la
Gaceta del Semanario Judicial de la Federación, número
60, correspondiente a diciembre de 1992, página 27, de
rubro: ‘LEYES FEDERALES Y TRATADOS INTERNACIONALES.
TIENEN LA MISMA JERARQUÍA NORMATIVA.’; sin embargo,
este Tribunal Pleno considera oportuno abandonar tal
criterio y asumir el que considera la jerarquía
superior de los tratados incluso frente al derecho
federal."
En las condiciones apuntadas, debe concluirse que en

toda contienda judicial en que se vean involucrados
derechos inherentes a los menores, debe resolverse
atendiendo a un principio básico: el interés superior
del niño.
Por ende, para determinar sobre la guarda y custodia de

un menor, el juzgador debe atender al resultado que
arrojen los medios probatorios ofrecidos por las
partes, básicamente para establecer si hay obstáculo
que impida otorgar a alguno de los progenitores dicha
guarda y que lo lleve a la convicción de que la persona
escogida es la adecuada, razonando el por qué la
conducta de la persona a que se entregue el cuidado de
los menores es la idónea para cumplir con el principio
del interés superior, por ser quien mejor prodigará
satisfactores para la formación, educación e
integración socio-afectiva de los menores.
Así, debe decirse que la madre de el menor tiene, por

naturaleza, la presunción fundada de ser la persona
idónea para tenerla bajo su cuidado directo pues, por
la edad de la pequeña -siete años cumplidos- y su
condición de mujer, es evidente que le esperan cambios
físicos y psicológicos que su madre podrá explicarle

73
mejor por la confianza obvia derivada de la relación

entre ascendiente y descendiente del mismo sexo, lo que
indudablemente incidirá en una mejor comprensión y
aceptación de esos cambios por parte de el menor y, con
ello, ésta tendrá mayores posibilidades de
desarrollarse satisfactoriamente en todos sentidos;
máxime que, en la especie, no se advierte ningún dato o
circunstancia que destruya esa presunción.
No obsta a lo anterior el hecho de que el quejoso

alegue que no se tomó en cuenta la documental pública
consistente en la averiguación previa número
LER/I/2441/2001, donde la ofendida, hoy tercera
perjudicada, en su ampliación de declaración de fecha
quince de noviembre de dos mil uno, dijo que: "... esta
situación de maltrato psicológico y verbal ha alterado
sobremanera a la de la voz, teniendo que vivir
actualmente en casa de mis padres ubicada en Atizapán
de Zaragoza, por lo que solicito ser atendida en el
área de psicología en este Municipio."; lo que, según
el quejoso, perjudica los intereses de dicha tercera
perjudicada, pues reconoció que requiere de atención
psicológica y que la propia Juez a quo señaló en el
considerando primero de su sentencia que aquélla tiene
problemas psicológicos, además de que existe la
confesión de la tercera perjudicada, donde al responder
la décima posición aceptó que tiene problemas
psicológicos, con lo que, afirma el quejoso, se
provocan daños a la salud e integridad de el menor.
Ciertamente, a fojas 30 a 35 del expediente de primera

instancia obran agregadas copias certificadas del acta
de averiguación previa número LER/I/2441/2001, donde
Alejandra Moreno Daniel hizo denuncia de hechos en
contra de Carlos Octavio Juárez González, y en la
ampliación de declaración de fecha quince de noviembre
de dos mil uno, aquélla, entre otras cosas, manifestó:
"... mi esposo se llevó a mi hijo de Atizapán donde
estábamos viviendo, ese día, la de la voz dejé a mi
hijo en el transporte, en la mañana, a las siete y diez
de la mañana, y a la tres de la tarde cuando la estaba
esperando, mi hijo ya no llegó en el transporte, la de
la voz se alarmó mucho, acudí rápidamente a la escuela,
hablé con el director de la escuela, con las maestras,
en fin, la busqué por todos lados, decidí de Atizapán
venir a Lerma a buscar a mi hijo y efectivamente mi
hijo ya estaba con su papá, esto fue sin avisar y
después me enteré, mediante constancia del director de
la escuela ‘Colegio Washington’ que mi esposo al bajar
mi hijo del colegio, se dice transporte escolar, a las
siete cuarenta y cinco, mi esposo se la llevó sin
avisar poniendo en alarma a toda la escuela; mi esposo
ha manipulado a mi hijo diciéndole que si no lo obedece
y hace todo lo que él quiere no le va a dar comida, le
dice también que la puede meter a la cárcel ... mi
esposo le dice a mi hijo que si se porta mal o que si
no lo obedece la va a meter a el menor a la cárcel, mi
esposo, según palabras de mi hijo Claudia, la ha
llevado de paseo con la amiga de su papá; esta
situación de maltrato psicológico y verbal ha alterado
de sobremanera a la de la voz, teniendo que vivir
actualmente en casa de mis padres ubicada en Atizapán
de Zaragoza, por lo que solicito ser atendida en el

74
área de psicología, en este Municipio; por último,

deseo manifestar que la de la voz teme no ver más a su
hijo, toda vez que mi esposo me ha amenazado con que se
la va a llevar a Sinaloa y no me va a volver a dejarla
ver ...".
Y en la confesional a cargo de la propia tercera

perjudicada, a la posición número diez, que dice: "Que
usted tiene problemas psicológicos dentro del núcleo
familiar", ésta respondió lo siguiente: "Sí, sí los
tengo por la manera que he sido tratada con vejaciones
y sevicias por el señor Carlos Juárez.".
Sin embargo, de lo anterior no se desprende ningún dato

que revele, ni siquiera presuntivamente, que la ayuda
psicológica que la madre de el menor dice necesitar
pueda afectar su capacidad de cuidado y cariño hacia el
menor, sobre todo porque los problemas psicológicos que
aquélla dice tener los vincula con los malos tratos de
que, afirma, fue objeto por parte de su esposo, y no
con respecto a la relación y trato que tiene para con
su hijo.
Ante ello, atendiendo al interés superior de la niña y

prescindiendo de la conveniencia e intereses personales
de los padres, debe concluirse que, en la especie,
subsiste la presunción de que la madre debe tener la
custodia de el menor y, por virtud de ese interés
superior, debe decirse que resulta irrelevante
determinar si los documentos a que alude el quejoso,
consistentes en la constancia y la carta, ambas del
director del Colegio Washington, S.C., y el escrito
donde se solicitó la baja de el menor del Centro
Educativo Cualcán, son documentos públicos o privados,
o bien, los alcances de los mismos, pues lo cierto es
que con los mismos la hoy tercera perjudicada pretendió
acreditar que al darse la separación de los padres de
el menor, ésta permaneció inicialmente con la madre y
luego el padre la regresó consigo; pero esta situación
tampoco pone de relieve que el padre haya tenido la
custodia de el menor por un lapso prolongado, y que con
motivo de la decisión judicial que se analiza, porque
se decretó la custodia de el menor a favor del padre,
se afecte emocionalmente a el menor. Sin embargo, ello
no es determinante para decidir sobre quién resulta la
persona idónea para tener la custodia de la niña, sino
que debe atenderse a lo ya expuesto.
Ahora bien, aunque resulta innegable el perjuicio

ocasionado a el menor con un cambio de residencia
cuando ella está cursando un ciclo escolar; sin
embargo, se estima que ese perjuicio resulta menor al
que se le ocasionaría si la niña continuara separada de
su madre, quien, por los motivos indicados, se
considera la idónea para tenerla bajo su guarda y
custodia.
Consecuentemente, al ser ineficaces los conceptos de

violación y no advertir deficiencia de la queja que
suplir, en términos del artículo 76 bis, fracción VI,
de la Ley de Amparo, procede negar el amparo
solicitado.

75
Por lo expuesto y fundado, se resuelve:
ÚNICO.-La Justicia de la Unión no ampara ni protege a

Carlos Octavio Juárez González en contra del acto que
reclama de la Primera Sala Regional Familiar de Toluca
del Tribunal Superior de Justicia del Estado de México,
consistente en la sentencia de fecha veintitrés de
abril de dos mil dos, dictada en el toca número
209/2002, que se precisó en el resultando segundo de
esta ejecutoria.
Notifíquese; con testimonio de esta resolución, vuelvan

los autos al lugar de su procedencia y, en su
oportunidad, archívese el presente expediente como
asunto concluido.
Así, por unanimidad de votos lo resolvió el Tercer

Tribunal Colegiado en Materia Civil del Segundo
Circuito, integrado por los Magistrados presidente
Felipe Alfredo Fuentes Barrera, Raúl Solís Solís y por
el licenciado José Fernando García Quiroz, secretario
autorizado en términos del artículo 81, fracción XXII,
de la Ley Orgánica del Poder Judicial de la Federación,
por acuerdo del Pleno del Consejo de la Judicatura
Federal, para actuar en funciones de Magistrado de
Circuito, siendo ponente el último de los nombrados.
Novena Época
Instancia: TERCER TRIBUNAL COLEGIADO EN MATERIA CIVIL
Tesis: II.3o.C. J/4
Página: 1206
GUARDA Y CUSTODIA. DEBE DETERMINARSE CONSIDERANDO EL

INTERÉS SUPERIOR DE NIÑAS, NIÑOS Y ADOLESCENTES
CONFORME A LA CONVENCIÓN SOBRE LOS DERECHOS DEL NIÑO.
El derecho a la guarda y custodia de una niña, niño y
adolescente, implica considerar no sólo las pruebas
ofrecidas por las partes con las que pretendan
demostrar una adecuada capacidad para el cuidado del
menor, sino que atendiendo al beneficio directo de la
infancia, el juzgador también debe considerar el
interés superior de la niña, niño y adolescente como
presupuesto esencial para determinar quién tiene
derecho a la guarda y custodia. Ello, porque conforme a
lo dispuesto por el artículo 4o. constitucional que
establece el desarrollo integral, el respeto a la
dignidad y derechos de la niñez, así como los artículos
3o., 7o., 9o., 12, 18, 19, 20 y 27 de la Convención
sobre los Derechos del Niño, ratificada por México el
veintiuno de septiembre de mil novecientos ochenta y
nueve, que establece que los Estados garantizarán que
los tribunales judiciales velen por el interés superior
del niño, los juicios en los que se vean involucrados
derechos inherentes de las niñas, niños y adolescentes,
como el caso en que se demande la guarda y custodia,
debe tenerse como presupuesto esencial el interés
superior del niño y darle intervención al Ministerio
Público, para que en su carácter de representante de la
sociedad, vele por los derechos de los infantes y
adolescentes.

76
TERCER TRIBUNAL COLEGIADO EN MATERIA CIVIL DEL SEGUNDO

CIRCUITO.
Amparo directo 170/2000. Adrián Escorcia Martínez y

otra. 1o. de marzo de 2001. Unanimidad de votos.
Ponente: Felipe Alfredo Fuentes Barrera. Secretaria:
Cristina García Acuautla.
Amparo directo 935/2000. Rosa María Reyes Galicia y

otro. 17 de octubre de 2001. Unanimidad de votos.
Ponente: Raúl Solís Solís. Secretaria: Yolanda González
Medrano.
Amparo directo 980/2000. Geni Vega Espriella. 26 de

junio de 2001. Unanimidad de votos. Ponente: Raúl Solís
Solís. Secretaria: Yolanda González Medrano.
Amparo directo 701/2001. Ignacio Alfaro Hernández. 29

de enero de 2002. Unanimidad de votos. Ponente: Raúl
Solís Solís. Secretaria: E. Laura Rojas Vargas.
Amparo directo 367/2002. Carlos Octavio Juárez

González. 9 de julio de 2002. Unanimidad de votos.
Ponente: José Fernando García Quiroz, secretario de
tribunal autorizado por el Pleno del Consejo de la
Judicatura Federal para desempeñar las funciones de
Magistrado. Secretario: Jorge Luis Mejía Perea.
Novena Época
Instancia: SEGUNDO TRIBUNAL COLEGIADO EN MATERIAS CIVIL
Y DE TRABAJO DEL SEGUNDO CIRCUITO.
Tomo: II, Agosto de 1995
Página: 559
MENORES DE EDAD. GUARDA Y CUSTODIA DE LOS. Si bien es

cierto que la Suprema Corte de Justicia de la Nación ha
sostenido que cuando se trata de menores de edad lo más
benéfico para su desarrollo y estabilidad es que se
encuentren bajo el cuidado de su madre, también lo es
que esto no significa que tal criterio deba aplicarse
indiscriminadamente a todos los casos, pues es
obligación del juzgador tomar en cuenta, el interés del
menor sobre cualquier otro.
SEGUNDO TRIBUNAL COLEGIADO EN MATERIAS CIVIL Y DE

TRABAJO DEL SEGUNDO CIRCUITO.
Amparo directo 344/95. Elisa Rivera Uribe. 19 de abril

de 1995. Unanimidad de votos. Ponente: Raúl Solís
Solís. Secretaria: Laura Rojas Vargas.
TERCERO.- Ocasiona serio perjuicio el contenido del

auto dictado por su Señoría en auto de fecha Auto de fecha 13 de
siguiente manera:

77


de seguridad y estabilidad de el menor y de quien detenta la
Guarda y Custodia de el menor, en razón a que el mismo no decreta
procedentes las pruebas Periciales en materia de Psicología y en
Química Farmacéutica, ya que del resultado de las mismas se
proveería veracidad respecto de la situación en que vive el
menor, vive en compañía de su madre dentro del Distrito Federal,
poniendo en peligro a el menor en cada momento que el mismo
convive con su Padre, razón por la cual se acreditaría la
veracidad del temor fundado a que el mismos como consecuencia del
la ingestión de Alcohol y al parecer sustancias prohibidas por la
Ley de Salud, con lo que le acarrean los desordenes psicológicos
y químicos; por lo cual hacemos responsable a su Señoría la A
Quo, además de que en dicho menor tiene apenas un año de edad,
situación de la cual es omisa el Juez que conoce de la causa y al
no admitir las Pruebas, esgrimiendo que la Actora porque no se
encuentra asesorada a través de Defensor de Oficio; es prudente
recordar que las pruebas ofrecidas reúnen los requisitos
descritos por la Ley toda vez que son de aceptarse todas las
pruebas con tal de que no sean contrarias a la moral y a las
buenas costumbres; así como lo describe los siguientes
aartículos:
“ARTICULO 293
La prueba pericial procede cuando sean necesarios

conocimientos especiales en alguna ciencia, arte o
industria o la mande la ley, y se ofrecerá expresando
los puntos sobre los que versará, sin lo cual no será
admitida, y si se quiere, las cuestiones que deban
resolver los peritos.
ARTICULO 347
Las partes propondrán la prueba pericial dentro del

término de ofrecimiento de pruebas, en los siguientes
términos:
I.- Señalarán con toda precisión la ciencia, arte,

técnica, oficio o industria sobre la cual deba
practicarse la prueba; los puntos sobre los que versará
y las cuestiones que se deben resolver en la pericial,
así como la cédula profesional, calidad técnica,
artística o industrial del perito que se proponga,
nombre, apellidos y domicilio de éste, con la

78
correspondiente relación de tal prueba con los hechos

controvertidos;
II.- Si falta cualquiera de los requisitos anteriores,

el juez desechará de plano la prueba en cuestión;
III.- En caso de estar debidamente ofrecida, el juez la

admitirá, quedando obligados los oferentes a que sus
peritos, dentro del plazo de tres días, presenten
escrito en el que acepten el cargo conferido y
protesten su fiel y legal desempeño, debiendo anexar
copia de su cédula profesional o documentos que
acrediten su calidad de perito en el arte, técnica o
industria para el que se les designa, manifestando,
bajo protesta de decir verdad, que conocen los puntos
cuestionados y pormenores relativos a la pericial, así
como que tienen la capacidad suficiente para emitir
dictamen sobre el particular, quedando obligados a
rendir su dictamen dentro de los diez días siguientes a
la fecha en que hayan presentado los escritos de
aceptación y protesta del cargo de peritos;
IV.- Cuando se trate de juicios sumarios, especiales, o

cualquier otro tipo de controversia de trámite
específicamente singular, las partes quedan obligadas a
presentar a sus peritos dentro de los tres días
siguientes al proveído en que se les tenga por
designados para que se cumpla con lo ordenado en el
párrafo anterior, los cuales quedan obligados, en estos
casos, a rendir su dictamen dentro de los cinco días
siguientes a la fecha en que hayan aceptado y
V.- Cuando los peritos de las partes rindan sus

dictámenes, y éstos resulten substancialmente
contradictorios, se designará al perito tercero en
discordia tomando en cuenta lo ordenado por el artículo
349 de este código;
VI.- La falta de presentación del escrito del perito

del oferente de la prueba, donde acepte y proteste el
cargo, dará lugar a que el juez designe perito en
rebeldía del oferente. Si la contraria no designare
perito, o el perito por ésta designado, no presentara
el escrito de aceptación y protesta del cargo, dará
como consecuencia que se tenga a ésta por conforme con
el dictamen pericial que rinda el perito del oferente.
En el supuesto de que el perito designado por alguna de

las partes, que haya aceptado y protestado el cargo
conferido, no presente su dictamen pericial en el
término concedido, se entenderá que dicha parte acepta
aquél que se rinda por el perito de la contraria, y la
pericial se desahogará con ese dictamen. Si los peritos
de ambas partes, no rinden su dictamen dentro del
término concedido, el juez designará en rebeldía de
ambas un perito único, el que rendirá su dictamen
dentro del plazo señalado en las fracciones III o IV,
según corresponda.
En los casos a que se refiere el párrafo anterior, el

juez sancionará a los peritos omisos con multa

79
equivalente a sesenta días de salario mínimo general

vigente en el Distrito Federal;
(REFORMADA, D.O.F. 1 DE JUNIO DE 2000)

VIl. Las partes quedan obligadas a pagar los honorarios
de los peritos que hayan nombrado, a excepción de lo
que establece el último párrafo del artículo 353, así
como a presentarlos cuantas veces sea necesario al
juzgado. También quedarán obligadas a presentar el
dictamen pericial dentro del plazo señalado, debiendo
presentar los peritos el original de su cédula
profesional, o de los documentos anexados a sus
escritos de aceptación y protesta del cargo;
VIII.- Las partes en cualquier momento podrán convenir

en la designación de un solo perito para que rinda su
dictamen al cual se sujetarán, y
IX.- También las partes en cualquier momento podrán

manifestar su conformidad con el dictamen del perito de
la contraria y hacer observaciones al mismo, que serán
consideradas en la valoración que realice el juez en su
sentencia.
ARTICULO 346
La prueba pericial sólo será admisible cuando se

requieran conocimientos especiales de la ciencia, arte,
técnica, oficio o industria de que se trate, más no en
lo relativo a conocimientos generales que la ley
presupone como necesarios en los jueces, por lo que se
desecharán de oficio aquellas periciales que se
ofrezcan por las partes para ese tipo de conocimientos,
o que se encuentren acreditadas en autos con otras
pruebas, o tan sólo se refieran a simples operaciones
aritméticas o similares.
Los peritos deben tener título en la ciencia, arte,

técnica, oficio o industria a que pertenezca la
cuestión sobre la que ha de oírse su parecer, si la
ciencia, arte, técnica o industria requieren título
para su ejercicio.
Si no lo requirieran o requiriéndolo, no hubiere

peritos en el lugar, podrán ser nombradas cualesquiera
personas entendidas a satisfacción del juez, aun cuando
no tengan título.
El título de habilitación de corredor público acredita

para todos los efectos la calidad de perito valuador.
(REFORMADO, D.O.F. 24 DE MAYO DE 1996)

ARTICULO 347
Las partes propondrán la prueba pericial dentro del

término de ofrecimiento de pruebas, en los siguientes
términos:
I.- Señalarán con toda precisión la ciencia, arte,

técnica, oficio o industria sobre la cual deba
practicarse la prueba; los puntos sobre los que versará
y las cuestiones que se deben resolver en la pericial,
así como la cédula profesional, calidad técnica,

80
artística o industrial del perito que se proponga,

nombre, apellidos y domicilio de éste, con la
correspondiente relación de tal prueba con los hechos
controvertidos;
II.- Si falta cualquiera de los requisitos anteriores,

el juez desechará de plano la prueba en cuestión;
III.- En caso de estar debidamente ofrecida, el juez la

admitirá, quedando obligados los oferentes a que sus
peritos, dentro del plazo de tres días, presenten
escrito en el que acepten el cargo conferido y
protesten su fiel y legal desempeño, debiendo anexar
copia de su cédula profesional o documentos que
acrediten su calidad de perito en el arte, técnica o
industria para el que se les designa, manifestando,
bajo protesta de decir verdad, que conocen los puntos
cuestionados y pormenores relativos a la pericial, así
como que tienen la capacidad suficiente para emitir
dictamen sobre el particular, quedando obligados a
rendir su dictamen dentro de los diez días siguientes a
la fecha en que hayan presentado los escritos de
aceptación y protesta del cargo de peritos;
IV.- Cuando se trate de juicios sumarios, especiales, o

cualquier otro tipo de controversia de trámite
específicamente singular, las partes quedan obligadas a
presentar a sus peritos dentro de los tres días
siguientes al proveído en que se les tenga por
designados para que se cumpla con lo ordenado en el
párrafo anterior, los cuales quedan obligados, en estos
casos, a rendir su dictamen dentro de los cinco días
siguientes a la fecha en que hayan aceptado y
V.- Cuando los peritos de las partes rindan sus

dictámenes, y éstos resulten substancialmente
contradictorios, se designará al perito tercero en
discordia tomando en cuenta lo ordenado por el artículo
349 de este código;
VI.- La falta de presentación del escrito del perito

del oferente de la prueba, donde acepte y proteste el
cargo, dará lugar a que el juez designe perito en
rebeldía del oferente. Si la contraria no designare
perito, o el perito por ésta designado, no presentara
el escrito de aceptación y protesta del cargo, dará
como consecuencia que se tenga a ésta por conforme con
el dictamen pericial que rinda el perito del oferente.
En el supuesto de que el perito designado por alguna de

las partes, que haya aceptado y protestado el cargo
conferido, no presente su dictamen pericial en el
término concedido, se entenderá que dicha parte acepta
aquél que se rinda por el perito de la contraria, y la
pericial se desahogará con ese dictamen. Si los peritos
de ambas partes, no rinden su dictamen dentro del
término concedido, el juez designará en rebeldía de
ambas un perito único, el que rendirá su dictamen
dentro del plazo señalado en las fracciones III o IV,
según corresponda.

81
En los casos a que se refiere el párrafo anterior, el

juez sancionará a los peritos omisos con multa
equivalente a sesenta días de salario mínimo general
vigente en el Distrito Federal;

VIl. Las partes quedan obligadas a pagar los honorarios
de los peritos que hayan nombrado, a excepción de lo
que establece el último párrafo del artículo 353, así
como a presentarlos cuantas veces sea necesario al
juzgado. También quedarán obligadas a presentar el
dictamen pericial dentro del plazo señalado, debiendo
presentar los peritos el original de su cédula
profesional, o de los documentos anexados a sus
escritos de aceptación y protesta del cargo;
VIII.- Las partes en cualquier momento podrán convenir

en la designación de un solo perito para que rinda su
dictamen al cual se sujetarán, y
IX.- También las partes en cualquier momento podrán

manifestar su conformidad con el dictamen del perito de
la contraria y hacer observaciones al mismo, que serán
consideradas en la valoración que realice el juez en su
sentencia.
ARTICULO 348
El juez, antes de admitir la prueba pericial, dará

vista a la contraria por el término de tres días, para
que manifieste sobre la pertinencia de tal prueba y
para que proponga la ampliación de otros puntos y
cuestiones además de los formulados por el oferente,
para que los peritos dictaminen.
De igual forma, Su señoría no establece por

que causas por las que no acepta las pruebas ofrecidas por parte
de mi representada y de su menor hijo, ya que del resultado de
dichas pruebas se probará la razón de la controversia familiar es
decir “la Litis” como hace mención al Demandado, y con ella
servirá para emitir el fallo que protegerá a el menor, en contra
de las agresiones de las que ha sido objeto por parte del señor
MAURICIO ESCARPULLI GARCÍA para con el menor, sin cerciorarse de
que la prueba es la idónea, así como del señalamiento de quien
deberá rendir su dictamen pericial, toda vez que mi representada
no cuenta con los recursos económicos suficientes para designar a
un perito particular, con ello en contravención de lo descrito
por la ley.
Cuarto.- Ocasiona serio perjuicio el contenido del auto

dictado por su Señoría en Audiencia de fecha Auto de fecha 13 de
siguiente manera:


82

 Nos causa agravio y perjuicio el auto combatido toda vez

que no autoriza ni concede las medidas provisionales
solicitadas en el escrito de demanda, ya que el A Quo se
concreta a mencionar “...Y TODA VEZ QUE LA ACTORA NO ESTA
PROCEDIMIENTOS CIVILES, AL NO HABER NOMBRADO PERITO DE SU
PARTE EN LAS MATERIAS DE PSICOLOGIÍA Y
DE SU DEMANDA....” lo anterior causa perjuicio a mi
representada y en especial al menor ya que como se
manifiesta existe el temor fundado por parte de la Madre
del Menor a que el Padre del mismo le cause daño, ya que
su conducta violenta así lo determina, además de que el
menor tiene un año de edad, como se desprende de las
constancias que obran en autos, así que la A Quo,
simplemente se constriñe a desechar las pruebas ofrecidas
sin valorar que se señalaron como peritos a la
institución denominada Hospital Psiquiátrico, para que se
realice la prueba Pericial en Psicología y a la
Procuraduría General de la República para la celebración
de la prueba Pericial en Química Farmacéutica, y se
ofrecieron debidamente señalar que las mediadas
provisionales, solicitadas tales en el capítulo
respectivo; lo anterior en virtud de que existe temor
fundado de que secuestre al menor o le infrinja actos
violentos en contra del menor. Apercibiendo lo en caso de
desobediencia a una determinación Judicial.
De lo anterior nos causa agravio la

resolución combatida ya que de ninguna manera la A Quo
toma en consideración lo descrito por los artículos que
a continuación transcribo para su mejor comprensión,
dejando en un estado de indefensión al menor y a su
madre frente a las posibles agresiones del señor Abel
Escarpulli García :

ARTICULO 323 Ter.- Los integrantes de la
familia tienen derecho a desarrollarse en un ambiente
de respeto a su integridad física y psíquica, y
obligación de evitar conductas que generen violencia
familiar.
A tal efecto, contarán con la asistencia y

protección de las instituciones públicas, de acuerdo a
las leyes para combatir y prevenir conductas de
violencia familiar.

ARTICULO 323 Quáter.- Por violencia familiar
se considera el uso de la fuerza física o moral, así
como la omisión grave que se ejerce contra un miembro

83
de la familia por otro integrante de la misma, que

atente contra su integridad física, psíquica o ambas,
independientemente del lugar en que se lleve a cabo y
que pueda producir o no lesiones.
La educación o formación del menor no será en

ningún caso considerada justificación para alguna forma
de maltrato como se desprende del Código Civil, así:

ARTICULO 323 Quintus.- También se considera
violencia familiar la conducta descrita en el artículo
anterior llevada a cabo contra la persona con que se
encuentra unida fuera de matrimonio, de los parientes
de ésta, o de cualquier otra persona que esté sujeta a
su custodia, guarda, protección, educación, instrucción
o cuidado, siempre y cuando el agresor y el ofendido
convivan o hayan convivido en la misma casa.

ARTICULO 323 Sextus.- Los integrantes de la
familia que incurran en violencia familiar, deberán
reparar los daños y perjuicios que se ocasionen con
dicha conducta, con autonomía de otro tipo de sanciones
que éste y otros ordenamientos legales establezcan.
En todas las controversias derivadas de

violencia familiar, el Juez dictará las medidas a que
se refiere la fracción VII del artículo 282 de este
Código.

ARTICULO 282.- Desde que se presenta la
demanda de divorcio, y sólo mientras dure el juicio, se
dictarán las medidas provisionales pertinentes conforme
a las disposiciones siguientes:
I.- La separación de los cónyuges. El Juez de

lo Familiar determinará con audiencia de parte, y
teniendo en cuenta el interés familiar y lo que más
convenga a los hijos, cuál de los cónyuges continuará
en el uso de la vivienda familiar y asimismo, previo
inventario, los bienes y enseres que continúen en ésta
y los que se ha de llevar el otro cónyuge, incluyendo
los necesarios para el ejercicio de la profesión, arte
u oficio a que esté dedicado, debiendo informar éste el
lugar de su residencia.
La separación conyugal decretada por el juez

interrumpe los términos a que se refieren las
fracciones VIII y IX del artículo 267 de este Código;
II.- Señalar y asegurar las cantidades que a

título de alimentos deben dar el deudor alimentario al
cónyuge acreedor y a los hijos que corresponda;
III.- Las que se estimen convenientes para

que los cónyuges no se puedan causar perjuicios en sus
respectivos bienes ni en los de la sociedad conyugal en
su caso. Asimismo, ordenar, cuando existan bienes que
puedan pertenecer a ambos cónyuges, la anotación
preventiva de la demanda en el Registro Público de la

84
Propiedad del Distrito Federal y de aquellos lugares en

que se conozca que tienen bienes;
IV.- Dictar, en su caso, las medidas

precautorias que la ley establece respecto a la mujer
que quede embarazada;
V.- Poner a los hijos al cuidado de la

persona que de común acuerdo hubieren designado los
cónyuges, pudiendo ser uno de éstos. En defecto de ese
acuerdo, el cónyuge que pida el divorcio propondrá la
persona en cuyo poder deben quedar provisionalmente los
hijos. El Juez de lo Familiar, previo el procedimiento
que fije el Código respectivo y tomando en cuenta la
opinión del menor, resolverá lo conducente.
Salvo peligro grave para el normal desarrollo

de los hijos; los menores de doce años deberán quedar
al cuidado de la madre;
VI.- El Juez de lo Familiar resolverá

teniendo presente el interés superior de los hijos,
quienes serán escuchados, las modalidades del derecho
de visita o convivencia con sus padres;
VII.- En los casos en que el Juez de lo

Familiar lo considere pertinente, de conformidad con
los hechos expuestos y las causales invocadas en la
demanda, tomará las siguientes medidas, con el fin de
salvaguardar la integridad y seguridad de los
interesados, que tratándose de violencia familiar
deberá siempre decretar:
a) Ordenar la salida del cónyuge demandado de

la vivienda donde habita el grupo familiar.
b) Prohibición al cónyuge demandado de ir a

lugar determinado, tal como el domicilio o el lugar
donde trabajan o estudian los agraviados.
c) Prohibir que el cónyuge demandado se

acerque a los agraviados a la distancia que el propio
Juez considere pertinente.
VIII.- Revocar o suspender los mandatos que

entre los cónyuges se hubieran otorgado, con las
excepciones que marca el artículo 2596 de este Código;
IX.- Requerirá a ambos cónyuges para que le

exhiban, bajo protesta de decir verdad, un inventario
de sus bienes y derechos, así como, de los que se
encuentren bajo el régimen de sociedad conyugal, en su
caso, especificando además el título bajo el cual se
adquirieron o poseen, el valor que estime que tienen,
las capitulaciones matrimoniales y un proyecto de
partición. Durante el procedimiento, recabará la
información complementaria y comprobación de datos que
en su caso precise; y
X.- Las demás que considere necesarias.
De lo anterior se desprende que la A Quo de

ninguna manera valoró la violencia familiar que produce

85
el Demandado Abel Escarpulli García en contra de su

esposa y en contra de su menor hijo, a quienes amenaza
que se llevará al menor.
Por lo expuesto; A Usted c. Juez, atentamente pido se

sirva:
Primero.- Tenerme por presentada, en tiempo y

forma, interponiendo recurso de apelación en contra del auto que
se menciona.
Segundo.- Tener por hechas las anteriores

manifestaciones para los efectos legales a que haya lugar.

86

Vs.
Expediente: 427/04
C. JUEZ VIGÉSIMO SÉPTIMO DE LO FAMILIAR, EN EL DISTRITO

FEDERAL.

profesional número 1636628, abogado patrono de la señora CLARA
PATRICIA GONZALEZ ESCOBAR, de nacionalidad Colombiana, y de su
hijo de nombre MAURICIO ESCARPULLI GONZÁLEZ, de nacionalidad
Mexicana, comparecemos respetuosamente para exponer:
Por medio del presente escrito venimos, en tiempo y

forma, vengo a desahogar la vista que se nos mandó dar con la
copia del escrito de contestación de demanda, por lo que se
desahoga en los siguientes términos:
RESPECTO DE LA EXCEPCIONES Y DEFENSAS SE CONTESTA:
1. RESPECTO DE LA EXCEPCIÓN DE FALTA DE ACCIÓN Y DERECHO, es

falso lo expresado por el Demandado a través de su abogado, ya
que demuestra la falta de conocimiento del Derecho, o busca
sorprender a su Señoría, debido a que se le olvida lo expresado
por los artículos que a continuación transcribo para su mejor
educación profesional:
CÓDIGO CIVIL LIBRO PRIMERO. De las personas

TÍTULO SEXTO. Del parentesco, de los alimentos y de la
violencia familiar.
CAPÍTULO II. De los alimentos
Artículo 301. La obligación de dar alimentos es

recíproca. El que los da tiene a su vez el derecho de
pedirlos.
CÓDIGO CIVIL LIBRO PRIMERO. De las personas

TÍTULO SEXTO. Del parentesco, de los alimentos y de la
violencia familiar.
Artículo 302. Los cónyuges deben darse alimentos;

la ley determinará cuando queda subsistente esta
obligación en los casos de divorcio y otros que la misma
ley señale. Los concubinos están obligados, en igual
forma, a darse alimentos si se satisfacen los requisitos
señalados por el artículo 1635.
C.C.F. LIBRO PRIMERO. De las personas

87
TÍTULO SEXTO. Del parentesco, de los alimentos y de

la violencia familiar.
Artículo 303. Los padres están obligados a dar

alimentos a sus hijos. A falta o por imposibilidad de los
padres, la obligación recae en los demás ascendientes por
ambas líneas que estuvieren más próximos en grado.
C. C. D. F. LIBRO PRIMERO. De las personas

TÍTULO SEXTO. Del parentesco, de los alimentos y de
la violencia familiar.
Artículo 315. Tienen acción para pedir el

aseguramiento de los alimentos:
I. El acreedor alimentario;
II. El que ejerza la patria potestad o el que tenga

la guarda y custodia del menor;
III. El tutor;
IV. Los hermanos y demás parientes colaterales

dentro del cuarto grado;
V. La persona que tenga bajo su cuidado al acreedor

alimentario; y
VI. El Ministerio Público.
Del análisis de la primera parte del artículo 301 y

303 del Código Civil del Distrito Federal que anteceden,
es prudente demostrar al demandado y al inculto de su
abogado, que el señor ABEL ESCARPULLI GARCÍA tiene la
obligación a proporcionar los alimentos necesarios para
su menor hijo y a su esposa,, como de forma reciproca se
les faculta que ellos tienen el derecho a reclamar el
pago de los alimentos, ya que, desde el momento en que se
establecieron el vínculo matrimonial entre la actora y el
hoy demandado, se dan con fuerza legal para ello,
situación que se acredita en el expediente mediante la
copia certificada del acta de matrimonio que se exhibe.
En la misma forma, es prudente aclarar, que el menor hijo
del Demandado, tiene derecho de la asistencia económica
de parte de su padre desde el momento en que ha sido
procreado y reconocido por parte de el mismo Demandado,
teniendo derecho a que se le entreguen en la medida en la
que venía proporcionándolos, derecho que se ve acreditado
y fundado mediante la copia Certificada del acta de
nacimiento que corre agregada en autos, derecho el cual
no se le puede restar crédito, ya que el Demandado dentro
de su excepciones razonamiento alguno que permita
demostrar o entender el razonamiento del porque dice que
ha cumplido con sus obligaciones, y de ninguna forma
demuestra las causas por las que no tiene derecho
faltando al principio jurídico de la prueba, que dice:
“el que afirma tiene que probar...” lo que en la especie
no sucede y se ve truncada su supuesta defensa y carente
de sustento legal, ya que de ninguna forma demuestra las
razones de su cliente para dejar de llevar a cabo y dar
cumplimiento a la obligación a proporcionar alimentos a

88
la cónyuge y a su menor hijo, simplemente se concentra en

afirmar sin probar; De lo anterior, es prudente
desestimar sus argumentos con los que pretende basar sus
excepciones y defensas.
Para tal efecto transcribo las siguientes

jurisprudencias
Octava Época
Tomo: XIII, Junio de 1994
Tesis: I.1o.C.82 C
Página: 512
ALIMENTOS. SON DE NATURALEZA JURIDICA DIVERSA LOS

QUE SE RECLAMAN COMO CONSECUENCIA DEL MATRIMONIO,
DE LOS QUE SE RECLAMAN COMO CONSECUENCIA DEL
DIVORCIO, AUN CUANDO EN ESTE NO EXISTA DECLARACION
DE CONYUGE CULPABLE. Menester es no confundir los
alimentos reclamados como consecuencia directa del
matrimonio, de aquellos que se pueden reclamar
como consecuencia de la disolución conyugal. Los
primeros reconocen como fuente del derecho al
vínculo matrimonial vivo, en los términos del
artículo 302 del Código Civil, en tanto que los
otros ya no dependen de éste, puesto que
jurídicamente ya no existe, sino que pueden
sobrevenir como consecuencia de la propia
disolución conyugal, según se desprende de los
artículos 302, segunda parte, y 288 del citado
código. Por ello, si se demanda una pensión
alimenticia por incumplimiento de uno de los
cónyuges y antes de sentencia, se decrete, en otro
juicio, la disolución del vínculo matrimonial, es
evidente que la fuente del derecho ejercitado
desaparece y la acción correspondiente se torna
improcedente cuando en la aludida resolución no se
condena a tal prestación. No es óbice para la
conclusión arribada, lo considerado en la
Jurisprudencia 17/90 sustentada por la Tercera
Sala de la Suprema Corte de Justicia, publicada en
el Tomo V, Primera Parte, página 221 del Semanario
Judicial de la Federación, Octava Epoca, bajo el
RUBRO: ALIMENTOS. SUBSISTE LA OBLIGACION DE
SUMINISTRARLOS EN LOS DIVORCIOS EN QUE NO HAY
CONYUGE CULPABLE, COMO OCURRE EN LA CAUSAL
RELATIVA A LA SEPARACION POR MAS DE DOS AÑOS
PREVISTA POR EL ARTICULO 267, FRACCION XVIII, DEL
CODIGO CIVIL PARA EL DISTRITO FEDERAL, pues si
bien en ella se establece que el derecho a los
alimentos subsiste después de la disolución
matrimonial, se entiende que tal derecho
sobreviene por virtud del divorcio mismo, como una
condena impuesta al que tiene la posibilidad de
dar los alimentos en favor del que los necesita, y
no como consecuencia directa del matrimonio.
PRIMER TRIBUNAL COLEGIADO EN MATERIA CIVIL DEL

PRIMER CIRCUITO.
Amparo directo 301/94. María Guadalupe Hermelinda

Santos García. 28 de febrero de 1994. Unanimidad

89
de votos. Ponente: Carlos Villegas Vázquez.

Secretario: José Guadalupe Tafoya Hernández.
De igual forma se menciona la siguiente:
Séptima Época
Instancia: Tercera Sala
Tomo: 3 Cuarta Parte
Página: 28
ALIMENTOS. DERECHO A PERCIBIRLOS. SURGE DESDE QUE

SE ADQUIERE EL CARACTER DE ACREEDOR ALIMENTARIO.
No es exacto que El auto recurrido que se
pronuncia en un juicio de alimentos da nacimiento
al derecho de la acreedora alimentaria de
percibirlos, ya que ese derecho nace desde que se
adquiere la calidad de padre, hijo, cónyuge, etc.,
puesto que los artículos 302, 303, 304, 305, 306 y
307 del Código Civil, señalan quienes están
obligados a proporcionar alimentos. De
consiguiente, en El auto recurrido sólo se declara
el derecho a percibir alimentos, pero tal derecho
existe desde cuando se adquiere el carácter de
acreedor alimentario; es decir, la calidad de
cónyuge, hijo, etc. y si bien es en dicha
sentencia donde se determina definitivamente el
importe de la pensión alimentaria, con vista de
las pruebas rendidas por el acreedor y el deudor
alimentario, esto no impide que la condena
comprenda las pensiones causadas durante la
tramitación del juicio, puesto que el derecho a
percibir alimentos se tiene con anterioridad a El
auto recurrido. Dicho de otro modo, el derecho a
alimentos no nace por el pronunciamiento de El
auto recurrido, sino por el carácter de acreedor
alimentario, según quedó asentado.
Amparo directo 794/68. Mina Diana Haro Buchsbaum.

10 de marzo de 1969. Mayoría de tres votos.
Disidente y relator: Mariano Ramírez Vázquez.
Sexta Época, Cuarta Parte:
Volumen CXXI, página 12. Amparo directo 718/65

Guillermo Macedo García. 7 de julio de 1967.
Unanimidad de cuatro votos. Ponente: Mariano
Ramírez Vázquez.
De la misma forma se describe lo siguiente:
Novena Época
Gaceta
Tomo: IX, Enero de 1999
Tesis: I.5o.C.84 C
Página: 824
ALIMENTOS. LA PRESUNCIÓN DE NECESITARLOS NO

ES EXCLUSIVA DE LA CÓNYUGE MUJER. De los

90
artículos 162, 164, 301 y 302 del Código Civil

para el Distrito Federal, deriva la obligación de
los cónyuges de socorrerse mutuamente, de
contribuir económicamente al sostenimiento del
hogar y de proporcionarse alimentos en forma
recíproca; lo anterior confirma, de principio,
una equiparación legal en ese rubro entre el
hombre y la mujer. Originalmente, en los Códigos
Civiles de 1870 (artículos 200 y 202) y de 1884
(artículos 191 a 193), el marido debía proteger y
dar alimentos a la mujer y a ésta correspondía
atender lo doméstico, la educación de los hijos y
la administración de los bienes y sólo cuando la
mujer tuviera bienes propios debía dar alimentos
al marido, cuando éste careciera de aquellos y
estuviere impedido para trabajar. Con diferente
redacción pero con el mismo perfil fue adaptado
ese contenido en el artículo 42 de la Ley sobre
Relaciones Familiares, señalando que el marido
debía dar alimentos a la mujer y hacer todos los
gastos necesarios para el sostenimiento del
hogar. El Código Civil de 1928 siguió los mismos
lineamientos en su artículo 164. Sin embargo, en
la reforma publicada en el Diario Oficial de la
Federación de treinta y uno de diciembre de mil
novecientos setenta y cuatro, se modificó
radicalmente la redacción del artículo 164
referido, bajo la inspiración de la igualdad
jurídica, política, económica y social de la
mujer con el hombre, pues ahora se estableció que
era a cargo de los cónyuges (tanto él como ella)
la contribución económica para el sostenimiento
del hogar, su propia alimentación y la de sus
hijos, sin perjuicio de distribuirse esa carga en
la forma y proporción que ellos convengan y de
acuerdo con sus respectivas posibilidades. De
ello se sigue, que actualmente ya no se deja a
cargo del marido la carga alimentaria, sino que
se solidariza con la obligación de la mujer si
ésta tiene posibilidades económicas. Por tanto,
si bien sigue rigiendo la presunción de que la
esposa necesita alimentos porque ordinariamente
en la familia mexicana el hombre es quien aporta
los medios económicos para sufragar los gastos
del hogar, ello no excluye al hombre quien
también tiene en su favor esa presunción de
necesitar alimentos cuando precisamente los
demanda. Lo anterior sin dejar pasar por alto,
que la presunción que deriva de la obligación
solidaria que se comenta, no resistiría de
acreditarse que la necesidad de los alimentos que
demanda el marido emana de su falta de aplicación
al trabajo; pues en tal evento tendría vigencia
la hipótesis prevista en el artículo 320,
fracción IV, del Código Civil para el Distrito
Federal.
QUINTO TRIBUNAL COLEGIADO EN MATERIA CIVIL

Amparo directo 6815/98. Julio César Tinoco

Oros. 29 de octubre de 1998. Unanimidad de votos.

91
Ponente: Arturo Ramírez Sánchez. Secretario: José

Manuel Quistián Espericueta.
2. RESPECTO DE LA OSCURIDAD DE LA DEMANDA manifiesta el

Demandado que es procedente por virtud de imprecisiones
en cuanto al tiempo, lugar y día en que ocurrieron los
hechos y circunstancias narradas en la demanda, es de
desecharse tal excepción ya que de la simple lectura de
los hechos de la demanda se podrá dar cuenta su señoría
que se ubica perfectamente en tiempo modo y lugar los
hechos, razón por la cual su señoría se dará cuenta que
la parte Demandada busca sorprender a Su Señoría.
Es prudente resaltarle al Demandado por conducto de

su Abogado, que la excepciones que opone es carente de
fundamento, debido a que dentro de la misma demanda se
describen las circunstancia que se vieron rodeados los
hechos que se describen y más aún, su cliente da
contestación a las mismas, con lo que se ve desvanecida la
improbable procedencia de excepción y por lo tanto resulta
ser frívola e improcedente, por lo que deberá ser desechada,
para tal efecto sirve de fundamento la siguiente
Jurisprudencia:
Octava Epoca
Instancia: QUINTO TRIBUNAL COLEGIADO EN MATERIA
CIVIL DEL PRIMER CIRCUITO.
Página: 503
EXCEPCIONES PROCESALES. PROCEDE DESECHARLAS SIN

MAYOR TRAMITE CUANDO SON NOTORIAMENTE FRIVOLAS E
IMPROCEDENTES. A pesar de que el Código de
Procedimientos Civiles para el Distrito Federal no
contiene un precepto que expresamente faculte a
los jueces del fuero común a desechar en el
momento de proveer sobre su admisión, las
excepciones procesales, cuando sean notoriamente
frívolas e improcedentes; como el numeral 35 del
ordenamiento citado dispone que el órgano
jurisdiccional resolverá en la audiencia previa y
de conciliación las objeciones de los presupuestos
procesales y las excepciones dilatorias, salvo la
de incompetencia, y es de explorado derecho que la
excepción de falta de personalidad no es oponible
a quien comparece en juicio por derecho propio,
debe decirse que el tribunal de segundo grado
resolvió correctamente al confirmar con apoyo en
lo dispuesto por el artículo 72 del código en
cita, aplicado analógicamente el desechamiento
decretado por el juez antes de que tuviera
verificativo la audiencia previa y de
conciliación, de la excepción de falta de
personalidad que la demandada opuso, pues al haber
comparecido el actor al juicio natural por su
propio derecho, era incuestionable que la
excepción referida resultaba notoriamente frívola
e improcedente, ya que ni siquiera existía en la
especie personalidad alguna que examinar.

92
QUINTO TRIBUNAL COLEGIADO EN MATERIA CIVIL DEL

PRIMER CIRCUITO.
Amparo directo 4865/91. Eva Retchkiman. 23 de

enero de 1992. Unanimidad de votos. Ponente: José
Luis Caballero Cárdenas. Secretario: Alejandro
Javier Pizaña Nila.
3. RESPECTO DE LA EXCEPCION DERIVADA DEL ARTÍCULO 303 DEL

CÓDIGO CIVIL manifestamos que es falso lo expresado por
el Demandado, en virtud de que EL ARTÍCULO 303 DEL Código
Civil, establece excepción alguna, para mejor
conocimiento de mi contraparte transcribo literalmente el
mismo para todos los efectos legales a que haya lugar:
“C. C. D. F. LIBRO PRIMERO. De las personas.

TÍTULO SEXTO. Del parentesco, de los alimentos y
de la violencia familiar.
CAPÍTULO II. De los alimentos.
Artículo 303. Los padres están obligados a dar

alimentos a sus hijos. A falta o por imposibilidad
de los padres, la obligación recae en los demás
ascendientes por ambas líneas que estuvieren más
próximos en grado.”
De lo anterior se desprende y comprueba que el

Demandado opone una excepción inoperante ya que saca raja de
algo que de ninguna manera existe excepción alguna y aunado
a que de ninguna manera demuestra estar haber liquidado los
Alimentos a que tenemos derecho, su menor hijo MAURICIO
ESCARPULLI GONZÁLEZ Y LA ACTORA CLARA PATRICIA GONZÁLEZ
ESCOBAR. De tal suerte que el Demandado a través de su
Abogado, buscan sorprender a su señoría y a quienes
intervienen en el proceso, ya que afirman de forma falaz que
ha realizado pago de las prestaciones reclamadas como
alimentos, ya que simplemente se constriñe en afirmar que ha
pagado, sin probar debidamente el estar al corriente de sus
obligaciones alimentarias. Para tal caso comento y desmiento
tales afirmaciones temerarias del Demandado.
4. RESPECTO DE LA EXCEPCIÓN DERIVADA DEL ARTÍCULO 311 DEL

CODIGO CIVIL, manifiesto que debe desestimarse dicha
excepción toda vez que en el artículo 311 del Código
Civil establece que los padres están obligados a
contribuir proporcionalmente a los gastos de los menores
hijos de ambos, pero el Demandado de ninguna manera
establece el cuanto adquiere por concepto de sueldos y
salarios, es decir no establece claramente sus ingresos,
por lo que sería importante practicar una auditoria
fiscal al patrón, para determinar el monto de los
ingresos reales que tiene el señor ABEL ESCARPULLI
GARCÍA, independiente de lo anterior transcribo lo
conducente del artículo 311 del Código Civil, para su
mejor entendimiento:


93
Artículo 311. Los alimentos han de ser

proporcionados a las posibilidades del que debe
darlos y a las necesidades de quien deba
recibirlos. Determinados por convenio o sentencia,
los alimentos tendrán un incremento automático
mínimo equivalente al aumento porcentual anual
correspondiente al Índice Nacional de Precios al
Consumidor publicado por el Banco de México, salvo
que el deudor alimentario demuestre que sus
ingresos no aumentaron en igual proporción. En
este caso, el incremento en los alimentos se
ajustará al que realmente hubiese obtenido el
deudor. Estas prevenciones deberán expresarse
siempre en la sentencia o convenio
correspondiente.”
De lo anterior, no se demuestra la cantidad que percibe

por sueldos y salarios, así como de que está al
corriente en las pensiones alimentistas para con su
menor hijo, por lo que no es prudente valorar la misma
por falta de seriedad y objetividad de sus
razonamientos.
5. RESPECTO DE LA EXCEPCIÓN DERIVADA DEL ARTÍCULO 322 DEL

CODIGO CIVIL, manifiesto que debe desestimarse dicha
excepción toda vez que en el artículo 322 del Código
Civil establece que los padres están obligados a
contribuir proporcionalmente a los gastos de los menores
hijos de ambos, pero el Demandado de ninguna manera
establece el cuanto adquiere por concepto de sueldos y
salarios, es decir no establece claramente sus ingresos,
por lo que sería importante practicar una auditoria
fiscal al patrón, para determinar el monto de los
ingresos reales que tiene el señor ABEL ESCARPULLI
GARCÍA, independiente de lo anterior transcribo lo
conducente del artículo 322 del Código Civil, para su
mejor entendimiento:

Artículo 322. Cuando el deudor alimentario no

estuviere presente, o estándolo rehusare entregar
los alimentos a que está obligado, será
responsable de las deudas que los acreedores
contraigan para cubrir sus exigencias.
El Juez de lo Familiar resolverá respecto al monto
de la deuda, en atención a lo dispuesto en el
artículo 311.”
De lo anterior y, no a contrario Sensu, haciendo la

aclaración que en este caso no es procedente realizar
análisis por mayoría de Razón, el Demandado de ninguna
manera demuestra estar al corriente en sus obligaciones, ya
que claramente el Código Civil establece lo siguiente:
“CÓDIGO CIVIL PARA EL DISTRITO FEDERAL.
Disposiciones Preliminares.

94
Artículo 6o. La voluntad de los particulares no

puede eximir de la observancia de la ley, ni
alterarla o modificarla. Sólo pueden renunciarse
los derechos privados que no afecten directamente
al interés público, cuando la renuncia no
perjudique derechos de tercero.”
“Artículo 10. Contra la observancia de la ley no

puede alegarse desuso, costumbre o práctica en
contrario”
“Artículo 19. Las controversias judiciales del

orden civil deberán resolverse conforme a la letra
de la ley o a su interpretación jurídica. A falta
de ley se resolverán conforme a los principios
generales de derecho.”
Es por ello que, lo argumentado por el Demandado

esta fuera de orden y derecho, y con ello no puede
argumentar situaciones que lo faculten a no contribuir
al los alimentos del menor. De lo anterior se desprende
y comprueba que el Demandado opone una excepción
inoperante ya que saca raja de algo que de ninguna
manera existe excepción alguna y aunado a que de
ninguna manera demuestra estar haber liquidado los
Alimentos a que tenemos derecho, su menor hijo
MAURICIO ESCARPULLI GONZÁLEZ Y LA ACTORA CLARA PATRICIA
GONZÁLEZ ESCOBAR. De tal suerte que el Demandado a
través de su Abogado, buscan sorprender a su señoría y
a quienes intervienen en el proceso, ya que afirman de
forma falaz que ha realizado pago de las prestaciones
reclamadas como alimentos, ya que simplemente se
constriñe en afirmar que ha pagado, sin probar
debidamente el estar al corriente de sus obligaciones
alimentarias. Para tal caso comento y desmiento tales
afirmaciones temerarias del Demandado.
6. RESPECTO DE LA EXCEPCIONES DERIVADAS DE LOS ARTICULOS 416

Y 417 DEL CÓDIGO CIVIL SE CONTESTA DE LA SIGUIENTE
MANERA, de la lectura de lo descrito por el artículo 416
se colige que no existe ninguna excepción que pueda
esgrimir la parte Demandad respecto de la convivencia ya
que existen circunstancias que derivan en una franca
violencia y desapego del Demandado en contra del Menor,
ya que existe el temor fundado de que el Demandado
produzca daños al menor debido a su carácter y desvíos de
personalidad, razón la cual quedará debidamente probado
con los exámenes psicológicos que se le practicarán. De
lo anterior se transcribe el artículo citado para su
mejor análisis y comprensión

TÍTULO OCTAVO. De la patria potestad.
CAPÍTULO I. De los efectos de la patria potestad
respecto de la persona de los hijos.
Artículo 416. En caso de separación de quienes

ejercen la patria potestad, ambos deberán
continuar con el cumplimiento de sus deberes y
podrán convenir los términos de su ejercicio,
particularmente en lo relativo a la guarda y
custodia de los menores. En caso de desacuerdo, el

95
Juez de lo Familiar resolverá lo conducente oyendo

al Ministerio Público, sin perjuicio de lo
previsto en el artículo 94 del Código de
Procedimientos Civiles para el Distrito Federal.
En este supuesto, con base en el interés superior

del menor, éste quedará bajo los cuidados y
atenciones de uno de ellos. El otro estará
obligado a colaborar en su alimentación y
conservará los derechos de vigilancia y de
convivencia con el menor, conforme a las
modalidades previstas en el convenio o resolución
judicial.”
Es claro que el artículo citado se compone de distintas

conceptos que permiten analizar las circunstancias del caso
concreto ya que el Demandado de ninguna manera comprueba estar
debidamente capacitado para dar los más elementales cuidados al
menor, quien tiene un año, de lo cual se observa que el menor
deberá estar bajo la guarda y custodia en todo momento del menor.
Para ello, en caso de separación de quienes ejercen la patria
potestad, ambos deberán continuar con el cumplimiento de sus
deberes y obligaciones alimentarias lo que en la especie no
sucede, y para el caso de desacuerdo podrán convenir los términos
de su ejercicio, particularmente en lo relativo a la guarda y
custodia del menor. Toda vez que estamos en un caso de
desacuerdo, el Juez de lo Familiar deberá resolver lo conducente,
siempre y cuando oiga el criterio y lo dispuesto por el
Ministerio Público; así que es prudente citar lo descrito por el
artículo 417 del Código Civil para que entienda que el Demandado
representa un peligro para el normal desarrollo del menor, para
ello se mandan se le realicen las pruebas conducentes para
determinar el grado de peligrosidad que representa para el menor,
así transcribo el artículo para su mejor entendimiento:

TÍTULO OCTAVO. De la patria potestad.
CAPÍTULO I. De los efectos de la patria potestad
respecto de la persona de los hijos.
Artículo 417. Los que ejercen la patria

potestad, aun cuando no tengan la custodia, tienen
el derecho de convivencia con sus descendientes,
salvo que exista peligro para éstos....
...el Juez de lo Familiar resolverá lo conducente

en atención al interés superior del menor. Sólo
por mandato judicial podrá limitarse, suspenderse
o perderse el derecho de convivencia a que se
refiere el párrafo anterior, así como en los casos
de suspensión o pérdida de la patria potestad,
conforme a las modalidades que para su ejercicio
se establezca en el convenio o resolución
judicial.”
Situación que deberá ser determinada por el C. Agente

del Ministerio Público, conjuntamente con Su señoría, lo que en
la especie no ha sucedido, de igual manera será prudente apuntar
que de ninguna manera se está buscando el conculcar los derechos
que pudiera tener el padre, razón por la cual se solicita que las
visitas se lleven a cabo las visitas de forma provisional y en su
caso definitiva, el ubicado en el Centro de Convivencia Paterno
Filial, institución dependiente del Tribunal Superior de Justicia

96
del Distrito Federal y ubicada en la casa marcada con el No. 54

de la calle de Río de la Plata, Col. Cuauhtemoc, Delegación
Cuauhtemoc, México Distrito Federal, C.P. 06500, a efecto de
resguardar la integridad física y en su caso psicológica del
menor y solo los días sábados por el termino de dos horas ya que
el menor tiene un año de edad.
OBJECIÓN DE PRUEBAS DE LA CONTESTACIÓN DE DEMANDA

En tiempo y forma y en términos de lo previsto por el artículo 386 del Código de Procedimientos
Civiles, vengo a objetar los documentos exhibidos por la parte demandada con sus escrito de contestación
de Demanda, así como del ofrecimiento de pruebas, en los siguientes términos:
1.- Primeramente objeto todos y cada uno de los documentos ofrecidos como prueba por la
contraria y no exhibidos con su demanda, puesto que ésta estuvo obligada a presentarlos con la misma
por ser de fecha posterior a su presentación y a ls situaciones de hecho y derecho, en términos de lo
previsto por el artículo 943 del Código de Procedimientos Civiles., razón por la cual deberá dejarse de
admitir los mismos y de darles valor probatorio alguno, negándoles así fuerza y valor probatorio.
2.- Se objeta la documental privada marcada con el numeral 2. de su escrito de contestación de

demanda y que ofrece la parte demandada, ya que dicho documento no esta relacionado con la Litis, ya
que dicho contrato fue finiquitado con el Arrendador y no corresponde al domicilio actual donde se
encuentra habitando el menor en compañía de la Actora, mismos que en este acto solicito se tengan por
reproducidos, documento del cual solo los que exhibe copia simple con su escrito de contestación de
demanda, los cuales carecen del alcance y valor probatorio que le pretende dar por las razones siguientes:
Se trata de un documento del cual de ninguna forma parte de la demanda, y con ello no se prueba
haber dado cumplimiento a su obligación de pago de las prestaciones reclamadas, mucho menos es
posible realizarla en la forma que indica la demandada pretendiendo darle fuerza probatoria plena como de
manera simplista expresa en su escrito.
En todo caso, los documentos que exhibe la Parte Demandada ya que no pueden ser elementos
probatorios, como pretende, puesto que se trata de un simple documento de la demandada sin
fundamento alguno realiza y que desde luego, este documento se objeta y se le niega valor alguno y
deberá ser desestimado por su Señoría.
Con la pretensión de dar al documento objetado un carácter que no tiene, es decir pretender que
ha dado cumplimiento a sus obligaciones alimenticias para con el menor y la que suscribe, la contraria
evidencia ante ese H. Juzgador la falta de probidad que ha demostrado a lo largo del presente
procedimiento, pretendiendo hacer valer documentos como que ha dado cumplimiento a su obligación
alimentaria, ahora, pretendiendo engañar al propio tribunal respecto de las características y alcance de lo
que exhibe y ofrece como prueba.
3.- Se objeta la documental privada marcada con el número 3. de su escrito de contestación de

demanda, los cuales carecen del alcance y valor probatorio que le pretende dar.
El documento en cuestión pretende cuantificar, malamente, dineros que no fueron entregados a

mi, o a favor de nuestro menor hijo, lo que evidencia que se trata de un documento inadmisible y que ha
sido fabricado unilateralmente por la parte demanda para pretender probar cuestiones inoperantes e
improcedentes, más y cuando sabe y confiesa en el hecho marcado con el numeral 3. de los hechos de
su escrito de contestación de demanda, lo cual no se acredita con los documentos denominados “Recibos
de Renta” que se encuentre al corriente en sus obligaciones Alimentistas para con el menor.
Por las razones expresadas, el documento que se objeta no deberá producir efecto legal alguno, ni
que se le pueda atribuir alcance o valor probatorio alguno.

97
Valga por último hacer referencia a los presuntos dineros enviados que la actora dice haber
exhibido con su demanda, como afirma en su escrito de contestación de demanda y del ofrecimiento de la
prueba que se objeta.
Por supuesto que la parte actora no exhibió con su demanda constancia alguna de haber sido
recibida notificación alguna por parte de la suscrita, por lo cual el demandado pretender engañar de tal
manera al tribunal solo refleja la ligereza y el cinismo que caracteriza al mismo, quien nuevamente hace
alarde de la falsedad que le ha caracterizado en el presente juicio, el cual nunca tuvo razón alguna de
existir.

demanda, los cuales carecen del alcance y valor probatorio que le pretende dar por las razones siguientes:

que dichos depósitos no son resultado de un que existiera convenio alguno para liquidar los adeudos
alimenticios a favor del menor, ya que dichos depósitos no corresponden a las cantidades necesarias para
la manutención del menor y como lo confiesa la parte Demandada, ya que el mismo confieza haber
depositado de forma irregular los días 3 de marzo de 2004, 1º de abril de 2004, 4 de mayo de 2004, 6 de
julio de 2004, lo que no prueba haber depositado cantidades los meses Junio, Agosto y Septiembre
respectivamente, lo que no es aceptable que sea cantidades para la manutención del menor; mismos que
en este acto solicito se tengan por reproducidos, documento del cual solo los que exhibe copia simple con
su escrito de contestación de demanda, los cuales carecen del alcance y valor probatorio que le pretende
dar por las razones siguientes:
Se trata de un documento del cual tengo conocimiento en este momento y elaborado de forma
unilateral por el Demandado y que de ninguna forma, la parte actora prueba haber dado cumplimiento a su
obligación de pago de las prestaciones reclamadas, mediante el cual está pretendiendo hacer valer como
que liquidó cantidades por concepto de alimentos para su menor hija y, por supuesto, sin que sea
momento procesal para llevar a cabo tal supuesta cuantificación y mucho menos es posible realizarla en la
forma que indica la actora pretendiendo darle fuerza probatoria plena como de manera simplista expresa
en su escrito.
Si bien las afirmaciones unilaterales contenidas en el documento que se objeta en nada le

benefician, si le causan perjuicio, en cuanto que dicha actora no puede acreditar, de manera alguna, que
hubiere existido entrega de dinero con cargo al documento base, por lo cual deberá condenar al
Demandado al pago de las prestaciones reclamadas, así como de los gastos y costas de juicio.

demanda y que ofrece la parte demandada, ya que dichos documentos no esta relacionado con la Litis, y
no son reconocidos como pruebas por los artículos 334 del Código de Procedimientos Civiles
“CÓDIGO DE PROCEDIMIENTOS CIVILES PARA EL DISTRITO

FEDERAL.
TÍTULO SEXTO. Del juicio ordinario.
CAPÍTULO IV. Sección III. De la prueba instrumental.

98
Artículo 334. Son documentos privados los vales, pagarés, libros de

cuentas, cartas y demás escritos firmados o formados por las partes o de
su orden y que no estén autorizados por escribano o funcionario
competente.”
De lo que se desprende que los documentos exhibidos no son medios de prueba, asi lo define la
Ley, y de igual forma la suprema Corte de Justicia.
Novena Epoca
Tomo: II, Diciembre de 1995
Tesis: I.6o.C.27 C
Página: 504
COPIAS FOTOSTATICAS SIMPLES. NO SON DE LOS DOCUMENTOS

PRIVADOS A QUE HACE MENCION EL ARTICULO 334 DEL CODIGO DE
PROCEDIMIENTOS CIVILES PARA EL DISTRITO FEDERAL. Las copias
fotostáticas simples, no son de los documentos privados, a que hace mención el
artículo 334 del Código de Procedimientos Civiles para el Distrito Federal, toda
vez que no están dentro de las hipótesis a que se refiere dicho numeral, aun
cuando ratifiquen las firmas existentes, quienes en ellos hayan intervenido, dado
que más bien, encuadran en los supuestos a que alude el diverso numeral 373,
del mismo ordenamiento legal invocado.
SEXTO TRIBUNAL COLEGIADO EN MATERIA CIVIL DEL PRIMER

CIRCUITO.
Amparo directo 6056/95. Gloria Hernández de Lira y otros. 9 de

noviembre de 1995. Unanimidad de votos. Ponente: Enrique R. García
Vasco. Secretario: Alfredo Flores Rodríguez.
ya que dichas copias que exhibe la parte demandada no contienen firma alguna puesta de mi
puño y letra la redarguyo de falsas, documento del cual solo los que exhibe copia simple con su escrito de
contestación de demanda, los cuales carecen del alcance y valor probatorio que le pretende dar ya que, se
trata de un documento del cual de ninguna forma parte de la demanda, y con ello no se prueba haber dado
cumplimiento a su obligación de pago de las prestaciones reclamadas, mucho menos es posible realizarla
en la forma que indica la demandada pretendiendo darle fuerza probatoria plena como de manera
simplista expresa en su escrito.

no son reconocidos como pruebas por los artículos 334 del Código de Procedimientos Civiles
Así mismo se objeta de forma adicional e independientemente del hecho de que los documentos
exhibidos no son materia de la Litis y no pueden surtir los efectos que ésta pretende, como se ha
establecido líneas arriba, cabe hacer, subsidiariamente, las aclaraciones y objeciones respecto del
unilateral documento que exhibe la contraria.

no son reconocidos como pruebas por los artículos 334 del Código de Procedimientos Civiles con relación
a lo descrito por los artículos 373 del mismo ordenamiento, ya que la parte Demandada de ninguna
manera da cumplimiento a lo descrito por el citado artículo 374 ya que no proporciona los los aparatos oo
elementos necesarios para que pueda apreciarse el valor de los registros, es decir no da cumplimiento a la
obligación y por lo tanto son de objetarse dichas fotografías. Para su mejor comprensión transcribo lo
descrito por los artículos en cita:
Así mismo se objeta de forma adicional e independientemente del hecho de que los documentos
exhibidos no son materia de la Litis y no pueden surtir los efectos que ésta pretende, como se ha

99
establecido líneas arriba, cabe hacer, subsidiariamente, las aclaraciones y objeciones respecto del
unilateral documento que exhibe la contraria.
Tal hecho evidencia que los depósitos exhibidos por el Demandado

ninguna relación guarda con el espurio documento base de la contestación de demanda y de la
reconvencional, con el que no existe el nexo causal que representa ser un requisito sine qua
non para los efectos de prueba que la parte actora pretende con los documentos exhibidos.
Las preguntas lógicas que a primera instancia vienen a la mente son las
siguientes:
- Por qué la actora no exhibe documentos que acredite haber hecho entrega de
dinero para alimentos de las menores.
- Qué no es cierto que la propia actora firma que lo dineros entregados sean para
el pago de alimentos ya que quedan en su poder, por que no acreditar la supuesta disposición por la
suscrita de dichas cantidades.
- Por qué la parte actora exhibe un documento que, evidentemente, no

corresponde a disposición con cargo al los alimentos.
Las respuestas a tales interrogantes surgen naturalmente y con sencillez,

confluyendo en un mismo punto: La contraria no tiene manera de acreditar el pago alguno de alimentos,
por que el actor no entregó absolutamente nada, con relación a los documentos que exhibe.
g) Objeto en cuanto a su alcance y valor probatorio a los recibos de pago de

percepciones que exhibe, en virtud de que a la misma le desconozco su autenticidad en relación alguna
con el presente caso, por lo cual la misma carece de valor alguno.
3. En primer término se objeta el documento marcado con el numeral 9.- de

su escrito de demanda, consistente en la copia de la tarjeta de Américan Express con número de tarjeta
3766 615426 11012 por no tratarse de un documento original del suscrito, por lo que carece de fuerza y
valor probatorio que le pretende dar la actora, quien lo exhibe diciendo que se trata de un documento
original.
En todo caso, dicha tarjeta tuvo vigencia hasta el mes de mayo del año 2002, de
la cual de ninguna forma aparece que haya sido usada por la que suscribe o que en su caso haya hecho
disposiciones de cantidad alguna, este documento se objeta en cuanto a su cotenido y al valor que
pretende hacer valer el Demandado, ya que se refiere a gastos que realizó el Demandado en el Principal,
cantidades que se oportunamente liquidados a la parte demandad, sin que existe relación causal entre
ésta y el pago de cantidades adeudadas a el menor, base de la acción, mismo que el demandado no firmó
ni suscribió de manera alguna.
El documento que se objeta no establece ni sirve para acreditar la existencia de

una relación causal entre dicho documento y la obligación de pago de alimentos a favor de el menor
NICOLE JEAN VAUGHAN RODRÍGUEZ, razón por la cual no acredita, de manera laguna, ni disposición ni
existencia de estar al corriente en las pensiones Alimenticias adeudadas, ni que recibí cantidad alguna con
relación al mismo.
De nada sirve a la contraria la documental que exhibe, puesto que la misma no

guarda relación con el documento base de la acción (ni podría guardarla, puesto que ni lo suscribí ni recibí
cantidad alguna relacionada con éste).
Desconozco por ello valor y alcance probatorio al documento exhibido por la

actora, por no existir nexo de causalidad entre la documental objetada y las obligaciones alimenticias.
Podrá darse cuenta la parte contraria que de ninguna manera se dan los
supuestos alcances probatorios que cacarea en su escrito de ofrecimiento de pruebas, en el cual,
injustificadamente, hace alusiones de desprecio hacia mi persona para tratar de ocultar las tropelías que

100
pretende fraguar con su mal actuar judicial, con el fin de alcanzar una estafa judicial mediante la
fabricación o falsificación de documentos a los que se les atribuye un valor y procedencia que no les
corresponden.
4. Se objeta el documento marcado con el numeral 10.- de su escrito de

demanda, consistente en la copia del recibo de pago de consumo de energía eléctrica de la casa marcada
con el número 03 421 001 1915, a nombre de Concepción Lujan, por no tratarse de un documento original
del suscrito y más aún que no es actual y no se encuentra pagado, como se advierte de la simple lectura y
análisis del mismo, por lo que carece de fuerza y valor probatorio que le pretende dar la actora, quien lo
exhibe diciendo que se trata de un documento original.
En todo caso, dicha recibo tuvo vigencia del mes de enero del año 2002 a marzo
de 2002, de la cual de ninguna forma aparece que haya sido pagado por la que suscribe o haya dispuesto
de cantidad alguna, este documento se objeta en cuanto a su contenido y al valor que pretende hacer
valer el Demandado, ya que se refiere a gastos que realizó el Demandado en el Principal, cantidades que
se oportunamente liquidados a la parte demandad, sin que existe relación causal entre ésta y el pago de
cantidades adeudadas a el menor, base de la acción, mismo que el demandado no firmó ni suscribió de
manera alguna.

relación al mismo.


actora, ni el que pretende hacer valer por no existir nexo de causalidad entre la documental objetada y las
obligaciones alimenticias.
corresponden.

su escrito de demanda, consistente en la copia del recibo de pago de agua, con la cuenta número
06-35-312-365-01-008-3 por no tratarse de un documento original del suscrito, por lo que carece
de fuerza y valor probatorio que le pretende dar la actora, quien lo exhibe diciendo que se trata de
un documento original y pagado ya que no aparece sello alguno de pago por parte de la Comisión
de Agua del Distrito Federal.
En todo caso, dicha documento tuvo valor para el periodo correspondiente

al segundo Bimestre dl año 2002, de la cual de ninguna forma aparece que haya sido usada por la
que suscribe o que en su caso haya hecho disposiciones de cantidad alguna, este documento se
objeta en cuanto a su contenido y al valor que pretende hacer valer el Demandado, ya que se
refiere a gastos que realizó el Demandado en el Principal, cantidades que se oportunamente
liquidados a la parte demandad, sin que existe relación causal entre ésta y el pago de cantidades
adeudadas a el menor, base de la acción, mismo que el demandado no firmó ni suscribió de
manera alguna. De igual forma exhibo los recibos recibos de pago del servicio de agua potable, de
la casa marcada con el número 16 del inmueble marcado con el número 238, de la calle de
Coahuila, Colonia Cuajimalpa, Delegación Cuajimalpa, México D.F.; pagos correspondientes
realizados por los meses de junio, julio, agosto, septiembre, octubre, noviembre y diciembre de
2002. y con los mismos demuestro que el Demandado no ha cubierto las pensiones alimentarias a
favor de u menor hija y de la que suscribe.

101
Con esta prueba se acredita los extremos de la acción intentada toda vez que con los
mismos recibos de pago demuestro que yo he pagado los consumos de servicio agua potable de
los bimestres correspondientes al 1er. 3º., 4º., 5º. Y 6º. Bimestres del año 2002. y con los mismos
demuestro que el Demandado no ha cubierto las pensiones alimentarias a favor de su menor hija y
de la que suscribe.

relación al mismo.

guarda relación con la obligación de pago de pensiones alimentarias, base de la acción (ni podría
guardarla, puesto que ni lo suscribí ni recibí cantidad alguna relacionada con éste).

corresponden.

su escrito de contestación de demanda, consistente en el documento que describe como “recibo de pago
del mantenimiento de la casa 16 con número de folio 904, por no tratarse de un documento original del
suscrito, por lo que carece de fuerza y valor probatorio que le pretende dar la actora, quien lo exhibe
diciendo que se trata de un documento original.
En todo caso, dicha tarjeta tuvo vigencia hasta el mes de abril del año 2002, de la
cual de ninguna forma aparece que haya sido pagado por el demandado o que en su caso haya hecho
disposiciones de cantidad alguna, este documento se objeta en cuanto a su contenido y al valor que
cantidades que hayan sido oportunamente liquidados a la parte actora, sin que existe relación causal entre
El documento que se objeta no establece ni sirve para acreditar la

existencia de una relación causal entre dicho documento y la obligación de pago de alimentos a
favor de el menor NICOLE JEAN VAUGHAN RODRÍGUEZ, razón por la cual no acredita, de
manera laguna, ni disposición ni existencia de estar al corriente en las pensiones Alimenticias
adeudadas, ni que recibí cantidad alguna con relación al mismo. Así mismo exhibo como prueba
los recibos de pago de mantenimiento, de la casa marcada con el número 16 del inmueble
marcado con el número 238, de la calle de Coahuila, Colonia Cuajimalpa, Delegación Cuajimalpa,
México D.F.; pagos correspondientes realizados por el mantenimiento del inmueble
correspondientes por los meses de junio, julio, agosto, septiembre, octubre, noviembre y diciembre
de 2002. y con los mismos demuestro que el Demandado no ha cubierto las pensiones
alimentarias a favor de u menor hija y de la que suscribe.
Con esta prueba se acredita los extremos de la acción intentada toda vez que con los mismos
recibos de pago demuestro que yo he pagado los gastos por el mantenimiento del inmueble
correspondientes por los meses de junio, julio, agosto, septiembre, octubre, noviembre y diciembre de
2002. y con los mismos demuestro que el Demandado no ha cubierto las pensiones alimentarias a favor
de u menor hija y de la que suscribe.

102


corresponden.
7. Se objeta el documento marcado con el numeral 13.- de su escrito de

demanda, consistente en la copia del recibo de servicio telefónico con el número 58-12-22-23 por no
tratarse de un documento original del suscrito, por lo que carece de fuerza y valor probatorio que le
pretende dar la actora, quien lo exhibe diciendo que se trata de un documento original.
En todo caso, dicho documento indica que los consumos realizados en los meses
de enero y febrero el cual tuvo vigencia por los meses de enero y febrero del año 2002, de la cual de
ninguna forma aparece que haya sido usada por la que suscribe o que en su caso haya hecho
disposiciones de cantidad alguna, este documento se objeta en cuanto a su contenido y al valor que
cantidades que se oportunamente liquidados a la parte demandad, sin que existe relación causal entre
El documento que se objeta no establece ni sirve para acreditar la

existencia de una relación causal entre dicho documento y la obligación de pago de alimentos a
favor de el menor NICOLE JEAN VAUGHAN RODRÍGUEZ, razón por la cual no acredita, de
manera laguna, ni disposición ni existencia de estar al corriente en las pensiones Alimenticias
adeudadas, ni que recibí cantidad alguna con relación al mismo. De igual forma ofrezco como
prueba de mi dicho los consistente en los recibo de pago de teléfono No. 58-12-22-23 ubicado en
la casa marcada con el número 16 del inmueble marcado con el número 238, de la calle de
Coahuila, Colonia Cuajimalpa, Delegación Cuajimalpa, México D.F.; pagos correspondientes
realizados por los meses de junio, julio, agosto, septiembre, octubre, noviembre y diciembre de
2002. y con los mismos demuestro que el Demandado no ha cubierto las pensiones alimentarias a
favor de su menor hija y de la que suscribe.
Con esta prueba se acredita los extremos de la acción intentada toda vez que con los
mismos recibos de pago demuestro que he pagado los consumos de servicio telefónico de 2002. y
con los mismos demuestro que el Demandado no ha cubierto las pensiones alimentarias a favor
de su menor hija y de la que suscribe.

guarda relación con el derecho base de la acción (ni podría guardarla, puesto que ni lo suscribí ni recibí

corresponden.

su escrito de demanda, consistente en la copia de la Póliza de Seguros, por no tratarse de un documento

103
original del suscrito, por lo que carece de fuerza y valor probatorio que le pretende dar la actora, quien lo
exhibe diciendo que se trata de un documento original.
En todo caso, de la cual de ninguna forma aparece que haya sido usada por la
que suscribe o por su hija, así como de que en su caso haya hecho uso de servicio, este documento se
objeta en cuanto a su contenido y al valor que pretende hacer valer el Demandado, ya que se refiere a una
póliza de la cual no tengo conocimiento que nos haya incluido el Demandado en el Principal, cantidades
que se oportunamente liquidados a la parte demandad, sin que existe relación causal entre ésta y el pago
de cantidades adeudadas a el menor, base de la acción, mismo que el demandado no firmó ni suscribió de
manera alguna.

relación al mismo.


corresponden.

su escrito de demanda, consistente en la copia del convenio de divorcio por tratarse de un documento
original del suscrito, el cual de ninguna manera a dado cumplimiento al contenido del mismo, ya que dicho
convenio de ninguna manera ha sido respetado por el Demandado en su contenido, y muy en especial en
cuanto al pago de las pensiones rentísticas a favor de su menor hija, así como de proporcionar los
elementos necesarios para seguir con el mismo tren de vida de la misma; por lo que carece de fuerza y
valor probatorio que le pretende dar la actora, quien lo exhibe diciendo que se trata de un documento
original, pero el cual no esta vigente, y que el mismo para serlo debería ser presentado dentro de un juicio
de Divorcio Voluntario, el cual de ninguna forma acredita el Demandado que haya realizado, en virtud de
que no quiso pagar los derechos correspondientes, para que en su calidad de extranjero, se iniciara el
procedimiento judicial de divorcio, lo que en la especie aprovechó en todo momento de tratar de chantajear
a la suscrita y buscar de secuestrar a el menor, pasando por alto la legislación nacional den materia de
Derecho Civil, sobre lo conducente de la Guarda y Custodia; razón por la cual se interpuso por la que
suscribe el procedimiento respectivo ante el Juzgado 11º. De lo Familiar del Tribunal de Justicia del Distrito
Federal, bajo el expediente No. 1469/02.
En todo caso, dicho convenio es válido para las partes en tanto se de

cumplimiento al contenido de la mismo, del cual de ninguna forma aparece que el demandado haya dado
cumplimiento a sus obligaciones para su menor hija y la que suscribe. Por lo que, este documento se
objeta en cuanto a su contenido y al valor que pretende hacer valer el Demandado, sin que existe relación
causal entre ésta y el pago de cantidades adeudadas a el menor, base de la acción, mismo que el
demandado no firmó ni suscribió de manera alguna.

relación al mismo.

104

guarda relación con el Derecho de el menor base de la acción (ni podría guardarla, puesto que ni lo
suscribí ni recibí cantidad alguna relacionada con éste).

corresponden.
Por lo expuesto; A Usted c. Juez, atentamente pido se

sirva:
Primero.- Tenerme por presentada, en tiempo y forma, desahogando

la vista que se me mandó dar con las excepciones y
defensas de la parte demandada
Segundo.- Tener por hechas las anteriores manifestaciones para

los efectos legales a que haya lugar.

Patricia Gonzalez Escobar

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GONZALEZ ESCOBAR, CLARA PATRICIA

C. JUEZ DE LO FAMILIAR, EN TURNO EN EL DISTRITO FEDERAL.

CLARA PATRICIA GONZALEZ ESCOBAR, de nacionalidad Colombiana, por mi propio derecho y

C) El aseguramiento de las pensiones alimenticias, tanto provisional como definitiva de la

D) Decretar, en favor de la suscrita, el otorgamiento de la guarda y custodia provisional de mi

E) Decretar un régimen de visitas Supervisadas a favor de el menor MAURICIO

F) Decretar orden de restricción para el padre de el menor, el señor ABEL ESCARPULLI

Fundo mi instancia en los siguientes hechos y consideraciones de derecho:

2. Del matrimonio, procreamos un menor de nombre MAURICIO ESCARPULLI GONZÁLEZ, de 25 de abril

4. Posteriormente, en fecha 15 de octubre de 2003, el Demandado y la que suscribe, establecimos nuestro

Patiicia González Escobar.doc

Patiicia González Escobar.doc

2. Toda vez que el demandado es empleado y trabaja en la empresa de nombre “MEDIA

3. Se decrete la custodia provisional de mi menor hijo MAURICIO de apellidos ESCARPULLI

7. Se gire oficio dirigido al Instituto Nacional de Migración, dependiente de la Secretaria de Gobernación

Patiicia González Escobar.doc

V. - En cuanto a la prevención del delito, relacionada con la Convención Internacional

VI.- En lo relativo a la protección internacional de el menor, es aplicable lo conducente a la Convención

VII. – En lo relativo a la Legislación Mexicana es aplicable lo conducente de la “LEY PARA LA

“Artículo 1. La presente ley se fundamenta en el párrafo sexto del artículo 4o. de la

Son principios rectores de la protección de los derechos de niñas, niños y adolescentes:

A. El del interés superior de la infancia.

Patiicia González Escobar.doc

Artículo 6. A falta de disposición expresa en la Constitución, en esta ley o en los tratados

Artículo 7. Corresponde a las autoridades o instancias federales, del Distrito Federal,

1. - LA CONFESIONAL a cargo del demandado ABEL ESCARPULLI GARCÍA,

En preparación de la prueba solicito se mande citar personalmente al demandado,

Con esta prueba se acreditarán los extremos de la acción, especialmente en cuanto al

2. - LA DOCUMENTAL PÚBLICA consistente en la copia certificada del acta de

Con esta prueba se acredita la existencia del vínculo matrimonial y de las

3. - LA DOCUMENTAL PÚBLICA consistente en la copia certificada del acta de

Patiicia González Escobar.doc

4. - LA DOCUMENTAL PÚBLICA consistente en el informe que se sirva rendir la

5. – LA DOCUMENTAL PÚBLICA consistente en el informe que se sirvan rendir el

6. – LA DOCUMENTAL PRIVADA consistente en el informe que se sirva rendir la

b) ¿Que tipo de puesto desempeña?

d) ¿Que indique el salario que percibe por el puesto que ocupa?

e) ¿Que indique las prestaciones y bonos que percibe anualmente?

7. - LA TESTIMONIAL a cargo de los señores Gabriel García Aguilar y la

8. – LA TESTIMONIAL a cargo del señor ALBERTO GONZÁLEZ CÁRDENAS,

Patiicia González Escobar.doc

9.- LA PERICIAL EN PSICOLOGÍA que se practique al hoy demandado señor

Que diga el Perito si:

a) Que dictamine si del estado psíquico del demandado, resultan conductas

b) Que dictamine si la suscrita y mí menor hijo MAURICIO DE APELLIDOS

c) Que dictamine si el demandado se encuentra en aptitud del cuidado de nuestra

d) Que dictamine si el demandado presenta conductas agresivas derivadas del

e) Que dictamine el tratamiento que requiere el demandado.

f) Que dictamine las medidas cautelares necesarias y sugeridas para el

g) Que el perito determine si del análisis que practique al demandado se desprende la

h) Que el perito exponga las razones técnicas de su dictamen y las pruebas

Con esta prueba se acreditarán los extremos de la acción, especialmente en cuanto

10. - LA PUEBA PERICIAL EN QUÍMICA FARMACÉUTICA, que deberá

a) Si de las muestras de sangre que se tome al demandado, se encuentran rastros

Patiicia González Escobar.doc

b) Que de las muestras de sangre que se tome al demandado se dictamine si se

c) Que de las muestras que se tome al demandado, se determine si existen rastros

d) Que el perito exponga las razones técnicas y métodos de su dictamen.

Para el perfeccionamiento de la prueba, señalo como perito de mi parte al personal

Con esta prueba se acreditarán los extremos de la acción, especialmente en cuanto al

Con esta prueba se acreditarán los extremos de la acción, en cuanto a la violencia

11. – LA DOCUMENTAL PRIVADA consistente en el informe que se sirva remitir a

a) Nombre del Titular de la cuenta No. 5290010194134588

12. - LA INSTRUMENTAL DE ACTUACIONES en todo lo que favorezca los