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Caracteres del Totalitarismo Fascista- L. Preti.

El Fascismo, como régimen, concreto en Italia una forma nueva de Estado jamás experimentada. El Adjetivo
Totalitario fue empleado por Giovanni Amendola en 1923 y Mussolini se refirió a voluntad totalitaria en 1925, pero el
verdadero Estado Totalitario, con sus caracteres, se impuso a finales de 1926. Los caracteres fundamentales del Edo
Fascista no reposan en las dictaduras de un tirano. En los Estados totalitarios se debe impedir toda forma de
oposición aplicando cualquier medio necesario para lograrlo.

El Fascismo se proclama como régimen revolucionario al proponer quitar de en medio el “viejo” cuadro político
fundando el Estado y la Sociedad sobre nuevos valores de ansias y esperanzas de las generaciones jóvenes,
especialmente de los que regresaron victoriosos de la guerra. Al nacer de la guerra, el Fascismo enaltece la lucha
como modo de vida, impulsado por una filosofía activista que enmascara un verdadero espíritu revolucionario.

El fascismo profesa que el nuevo Edo representa un progreso decisivo frente a todos los regímenes que lo han
precedido y que se proyecta al futuro. La renovación revolucionaria se concilia con los valores tradicionales del
pasado así como de algunas buenas costumbres tradicionales burguesas. Orden, Trabajo Honesto, al sentido de la
familia u otros que, según los fascistas, se habían deteriorado y corrompido en la democracia liberal. El fascismo
también conquista la autoridad.

En la Organización Estatal, el fascismo subraya las ineficiencias de la democracia liberal: a) multiplicidad de los
partidos políticos sin una visión nacional de los problemas; b) no funcionalidad del parlamento, donde no se
constituyen mayorías disciplinadas para aprobar las leyes necesarias para el país; c) debilidad e ineficiencia de los
gobiernos, sujetos a condicionamientos. Para realizar una efectiva organización estatal el Fascismo se basa en el
principio de autoridad, intentando gobernar sin el parlamento y los partidos, rechaza la noción individualista de libertad
porque acarrea una sociedad atomizada por el egoísmo de las personas y grupos, despreocupándose del interés
general, no protege a los débiles ante los fuertes.

El fascismo afirma el imperativo de la prioridad del todo frente a cada parte, unificando las partes donde se realizan.
Sobresale la ley del todo que los miembros deben obedecer y actúa en nombre de un interés general y que en última
instancia se identifica con el interés de cada uno.

Para el Fascismo la Esencia de la libertad se encuentra en el vinculo con el pueblo y con el Estado, cada uno obedece
y actúa según le compete, desplegando su propia personalidad y da sentido a la vida del todo, el individuo se inspira
en los ideales más altos, como el honor, deber, espíritu, etc, exaltando los valores y la gloria de la nación. En el
Fascismo el interés nacional se coloca como principio, el Edo se centra en torno a la realidad de la nación donde es
necesaria una superestructura jurídico-institucional que les compete la soberanía total, es decir, en la nación se
contrapone al individuo.

En los regímenes democráticos, el pluralismo de los partidos es una gran enfermedad ya que impide servir
adecuadamente al interés general. Es por esto que el Fascismo elimina todos los partidos que se opone al único que
encarna los ideales e intereses de la nación. “Quien no está conmigo, está contra mí”. El partido único funciona como
orientador político de la maquina del Edo, fusionando el aparato estatal con el del partido. También se organiza la
“milicia” que es un cuerpo armado formado por los más fieles militantes, para defender la revolución nacional, sin
interferir con las Fuerzas Armadas Tradicionales, ambos cuerpos se integran como el partido lo hace con el Edo.

Elimina o debilita todo grupo de poder que pudiera oponerse a la autoridad central, los entes institucionales se ven
sometidos al Edo, las asociaciones asistenciales y culturales son controladas por el partido, el fascismo no tolera las
minorías culturales diversas del Edo Nacional, derivándose la política de asimilación coactiva “alógenos”, tiene escasa
consideración de la religión y no juzga lo que supone para una solida Comunidad Nacional.

El fascismo es un régimen populista y declara estar fundado sobre la intervención popular, intenta interesar a los
ciudadanos en los aspectos de la vida nacional, abandonando actitudes reservadas, es necesaria una participación
que se convierta en adhesión política e ideológica de los ciudadanos. El Fascismo piensa en buscar simpatía
mediante propagandas masivas, monopolizando medios de información, silenciar noticias desagradables, manipular
información, que la masa absorbe con facilidad, llegando a cualquier rincón como nueva forma de penetrar la
sociedad. Aborrece la racionalidad como cultura y habla más sobre fe, hacia los sentimientos de lo irracional.

En el régimen totalitario, el ciudadano ya no es sujeto activo de la vida política, puesto que las palabras de orden
vienen del partido o del jefe, mientras que las personas lo comunican con verdadero fanatismo y convicción, así el
ciudadano no se siente excluido.
Junto al partido único, hay algunas organizaciones colaterales de jóvenes, a los cuales se les dedica especial atención
debido a que las generaciones jóvenes deben encarnar al nuevo Edo. La educación política de estos jóvenes es
fundamental, van a escuelas de orientación unitaria y en el seno del régimen; la preparación deportiva también es otro
aspecto de honor, la salud y preparación deportiva de las masas; demostrando al mundo las cualidades de la nueva
generación, fuerte y vigorosa que ha forjado. También se adiestran para estar preparado y servir a la patria en los
momentos decisivos. El joven forzado por el Fascismo es ejemplo de coraje, abnegación, espíritu de sacrificio en
función del interés general.

El totalitarismo fascista está fundado en el principio jerárquico, la sociedad tiene forma de pirámide y esta funda su
propia escala jerárquica en las cualidades intelectuales y políticas de los individuos. En la punta el jefe carismático
dotado de cualidades extraordinarias, luego los jerarcas de los diferentes niveles, nacionales y locales, los militantes
del partido (aristocracia de la nación) y el pueblo.

El jefe encarna los más altos valores de la nación y se convierte en su símbolo, interpreta las instancias necesarias de
las nación, no vive alejado del pueblo (atraviesa la multitud, acaricia niños, abraza a los que veneran la patria). Pero
es un punto débil del Fascismo, porque su contacto con el pueblo es más intenso, debe poseer habilidades
demagógicas para hacer delirar a las masas.

Cada individuo ocupa el puesto merecido en la escala social, la escala de los valores políticos e intelectuales; pero la
ley si es igual para todos. El sistema totalitario está fundado en su conjunto sobre valores falsos que se oponen a los
auténticos valores de la civilización demócrata, se propone meter sus propios contravalores en la cabeza de los
ciudadanos.

Estado totalitario en Alemania- L. Preti.

El Nazismo es una variante del Fascismo. El Nazismo se proclama como régimen revolucionario de jóvenes
templados por el espíritu de una guerra combatida con valor; exalta la lucha como modo de vida.

El Nazismo, como el Fascismo Italiano, declara como muerta la Democracia Liberal y declara como enemigo de la
patria al “abominable” comunismo; rechaza el principio de libertad individual y todas las instituciones que derivan de
ella; contrapone al individuo la nación como idea-fuerza; exalta el interés de la colectividad nacional sobre el de la
persona; cancela toda forma de elección y designación democrática desde abajo; instaura el partido único (columna
vertebral del Edo); organiza al lado del ejercito los cuerpos armados de la revolución (SA, SS).

El Nazismo, como el Fascismo Italiano, combate todo pluralismo; rechaza el principio de igualdad y lo contrapone al
de jerarquía, construye la sociedad en forma de pirámide sobre la base de la fe, dando a cada uno el puesto que le
corresponde; crea el mito del jefe carismático que encarna los ideales de la nación para penetrar en las conciencias
de los ciudadanos y adoctrinarlos para la superación del principio de la democracia.

El Edo Nazi se distingue del Edo Fascista en 5 aspectos fundamentales: 1ero se destaca en todos los sectores por un
rigor incomparablemente superior; 2do debe subrayarse por el total desprecio de las leyes, 3ero tratados y
compromisos adquiridos; 4to el imperialismo del Edo Alemán porque no tiene límites ni frenos; el Edo Nazi gira en
torno al racismo que no desempeña ningún papel en la doctrina fascista; 5to el Edo Totalitario Alemán renuncia a
elaborar una teoría económico-social.

1. En la organización totalitaria del Edo Fascista Alemán, los símbolos, reliquias, objetos sacros, culto de los héroes y
caídos en guerra o en la revolución, etc, tienen una función notablemente más importante, reproduce estos caracteres
de manera mucho más rigurosa. 2. Se modifican numerosas leyes para hacerlas más conformes a las exigencias del
Edo Fascista observando las disposiciones legales vigentes, para realizar un cambio de leyes en pro de la llamada
revolución. 3. La acción represiva del régimen totalitario es mucho más dura en Alemania que en Italia más a niveles
cualitativos que cuantitativos, criticar al régimen Nazi era peligroso porque aquellos que no aceptaban servilmente la
dictadura, fueron a llenar los campos de concentración, la acción represiva debe ser despiadada. 4. Para el Nazismo
hay una jerarquía de los ciudadanos en la sociedad nacional, entre los pueblos superiores se distingue
particularmente el alemán que tenía una misión histórica en la primacía mundial, el nacionalismo imperialista de la
Alemania Nazi era una doctrina donde Alemania tiene derecho a expandirse y los demás tienen el deber de aceptar la
supremacía. 5. Se exalta una imaginaria raza aria dotada de cualidades superiores que vienen de los antiguos
alemanes, rubios, fuertes e inteligentes, la raza judía los nazis le atribuyen todas las cualidades negativas posibles e
imaginables, quiso proponerle una solución final a esta “raza maldita” la eliminación física (genocidio) de todos, pero
esta lucha con los judíos no obtiene provecho, de hecho, un Nazismo que hubiera ignorado a los Judíos hubiera sido
mucho más fuerte y peligroso. 6. Una vez con el poder, rechaza cualquier pretensión de organización económica de la
sociedad, porque el problema político es preeminente y absorbente.

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