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INTRODUCCIÓN A LOS PROCESOS FORMADORES DE MENA

LAURENCE ROBB, 2005

PREFACIO

Hay muchos textos excelentes, disponible tanto en niveles introductorios como avanzados, que
describen los depósitos minerales de la Tierra. Muchos describen los depósitos por si mismos y otros
hacen una combinación con explicaciones que proveen entendimiento de como ciertas ocurrencias
minerales se forman. Algunos están dedicados completamente a multitud de procesos que
aumentan los depósitos de mena en el mundo. El principal propósito de este libro es proveer un
mejor entendimiento de los procesos, tal como la naturaleza y origen, de ocurrencias minerales y
como encajan en el sistema Tierra. Esto esta destinado para uso un “senior undergraduate level
(niveles de ercer y cuarto año), o nivel graduado (Norte américa), y asume un nivel básico de
conocimiento en un amplio rango de disciplinas del nucleó de las ciencias de la tierra, como bien
son la química y física. A pesar de ser introductorio, este es razonablemente comprensivo en su
trato de temas, y espera que los geólogos practicantes en los minerales e industrias relacionadas
también encuentren el libro útil como un resumen y actualización de procesos formadores de mena.
Para tal fin el texto esta puntuado por un número de casos de estudios en los cuales depósitos de
mena actuales, son seleccionados como ejemplos clásicos de alrededor del mundo, son brevemente
descritos para dar contexto y relevancia a los procesos que están siendo discutidos en el texto
principal

La metalogenía, o estudio de la génesis de depósitos de mena en relación al paradigma tectónico


global, es un tema que tradicionalmente ha sido, y debería permanecer, como el componente
núcleo del currículo universitario de las ciencias de la tierra. También es una disciplina que forma la
base del entrenamiento de un profesional de las ciencias de la tierra que trabaje en los minerales e
industrias relacionadas de el mundo. Una tendencia en el pasado ha sido la de tratar el geólogo
económico como un tema vocacional y proporcional instrucción solo a estos individuos que deseen
especializarse en la disciplina o seguir una carrera en la industria de los minerales. En los años mas
recientes, los cambios en el currículo de las ciencias de la tierra han resultado en una tendencia, al
menos de buena manera en muchas partes del mundo, en la cual el geólogo económico ha sido
marginado. Un enfoque más holístico de procesos orientado (sistemas de ciencias de la tierra) ha
permitido una más amplia apreciación de la Tierra como un sistema complejo interrelacionado. Otro
enfoque de este libro, por lo tanto, es enfatizar el rango de procesos responsables para la formación
de depósitos de mena enormemente diversos encontrado sobre la Tierra e integrarlos a una
descripción de la evolución de la Tierra y tectónica global. Haciendo esto se espera que los estudios
metalogénicos vayan a ser reintegrado en gran manera al currículo universitario de las ciencias de
la Tierra. Enseñar los procesos que involucran en la formación del decrecimiento del inventario de
reservas del mundo es necesario, no solo porque su relevancia es practica para el mundo real, sino
también porque estos procesos forman un parte integra e informativa del sistema Tierra.

Este libro ha sido escrito principalmente durante una licencia alargada en el Departamento de
Ciencias de la Tierra de la Universidad de Oxford. Estoy muy agradecido a John Woodhouse y el staff
departamental quienes me acomodaron y ayudaría a proporcionar la combinación del rigor
académico y tranquilidad que hacen de escribir este libro un placer.

INTRODUCCIÓN: RECURSOS MINERALES


TEMAS

INTRODUCCION GENERAL Y ENFOQUES DE EL LIBRO

UN ESQUEMA DE CLASIFICACIÓN SIMPLE PARA DEPÓSITOS MINERALES

ALGUNAS DEFINICIONES IMPORTANTES

Metalogenía

Syngenético

Epigenético

Mesotermal

Epitermal

Supérgeno

Hipógeno

ALGUNAS COMPILACIONES IMPORTANTES

Tabla periódica de los elementos

Tabla de las principales menas y minerales ganga

Escala de tiempo geológico

FACTORES QUE HACEN VIABLES LOS DEPÓSITOS MINERALES

Factores de enriquecimiento requeridos para hacer depósitos de mena

¿Como los recursos minerales y reservas de mena son definidos?

RECURSOS NATURALES Y SU FUTURA EXPLOTACIÓN

Sostenibilidad

Responsabilidad ambiental

INTRODUCCION Y ENFOQUES
Dado el crecimiento sin precedentes de la población humana en el último siglo, tanto el incremento
relacionado en demanda como en producción de recursos naturales, es evidente que entender la
naturaleza, el origen y distribución de los depósitos minerales del mundo sigue siendo un tema
estratégico. La disciplina de “geólogo económico”, la cual cubre todos los aspectos pertenecientes
a la descripción y entendimiento de recursos minerales, es, por lo tanto, una que tradicionalmente
ha sido, y debería permanecer, un componente núcleo del currículo universitario de las ciencias de
la tierra. Es también una disciplina que es la base del entrenamiento del profesional de los científicos
de la tierra que trabajen en minerales e industrias del mundo. Una tendencia en el pasado ha sido
la de tratar el geólogo económico como un tema vocacional y proveer de instrucciones solo a los
que desean especializarse en la disciplina o seguir una carrera en la industria de los minerales. En
los años mas reciente, los cambios en el currículo de las ciencias de la tierra han resultado en una
tendencia, al menos de buena manera en muchas partes del mundo, en las cuales el geólogo
económico ha sido marginado.

El desarrollo conceptual de sistemas de ciencias de la tierra, también una característica de los


últimos años del silgo veinte, ha llevado a cambios dramático en la forma en que las ciencias de la
tierra son enseñadas.

Un enfoque de procesos orientado más holístico ha llevado a una apreciación mucho mas amplia de
la Tierra como un sistema complejo interrelacionado. El entendimiento de los mecanismos de
retroalimentación ha traído una apreciación de que la Tierra sólida, sus océanos y atmósfera, y
formas de vida orgánica que ocupan nichos sobre, y debajo de su superficie, están íntimamente
conectados y solo pueden ser entendidos apropiadamente en términos de una interacción de
procesos. Ejemplos incluyen los enlaces entre tectónica global y patrones climáticos, y también
entre la evolución de organismos unicelulares y la formación de depósitos de mena. En este
contexto la enseñanza de muchas de las disciplinas tradicionales asume la nueva relevancia y el reto
de enseñar exitosamente las ciencias de los sistemas de la tierra es la mejor manera de integran un
amplio rango de temas dentro de un currículo que proporciona entendimiento de una entidad.
Enseñar los procesos involucrados en la formación de los tipos de depósitos de mena enormemente
diversos encontrados en la Tierra es necesario, no solo por su relevancia practica al mundo real, sino
también porque estos procesos forman una parte integral e informativa de la evolución de la Tierra

EL propósito de este libro orientado a procesos es el de proporcionar un mejor entendimiento de la


naturaleza y origen de ocurrencias minerales y como encajan dentro del sistema Tierra. Está
destinado para uso de senior undergraduate leve (niveles de 3er y 4to año), o un nivel graduado, y
asume un conocimiento básico en un amplio rango de disciplinas del núcleo de las ciencias de la
tierra, como lo son la química y la física. También espera que geólogos practicantes en los minerales
e industrias relacionadas encuentre el libro útil como un resumen y actualización de procesos
formadores de mena. Para este fin el texto esta puntuado por un numero de casos de estudio
ejemplo de alrededor del mundo, son brevemente descrito para dar contexto y relevancia a
procesos que están siendo discutidos en el texto principal.

UN ESQUEMA PARA DEPÓSITOS DE MENA


Hay muchas diferentes formas de categorizar los depósitos de mena. La mayoría de las personas
que han escrito y descrito depósitos de mena han sido, ya sea inconscientemente o
deliberadamente, involucrado en su clasificación. Esto es especialmente verdad de libros de texto
donde la tarea de proporcionar orden y estructura al conjunto de descripciones invariablemente
involucra algunas formas de clasificación. Los mejores esquemas de clasificación son probablemente
los que permanecen lo más independientes posible a los enlaces genéticos, de este modo
minimizando el alcance a errores y controversias. Sin embargo, los esquemas de clasificación son
básicamente recomendables, como hay la ventaja considerable de tener los procesos de formación
de depósitos de mena reflejados en un conjunto de categorías descriptivas. Guildbert y Park (1986)
discuten el problema de la clasificación de los depósitos de mena a cierta longitud en los Capítulos
1 y 9 de su libro trascendental sobre la geología de los depósitos de mena. Ellos muestras como los
esquemas de clasificación reflejan e, desarrollo de teorías y técnicas, además de el nivel de
entendimiento, en la disciplina. Dado el crecimiento dramático en geología económica en los
últimos años, el esquema de clasificación de Guildbert y Park (1986), modificado del esquema de
Lindgren (1933), es tanto detallado y complejo, y conviene la cobertura comprensiva de el tema
proporcionado por su libro. En uno más reciente, pero igualmente comprensivo, cubre los depósitos
de mena, Misra (2000) ha optado por una caracterización basado esencialmente sobre el tipo
genético y asociación de roca, similar al esquema de Meyer (1981). Esta asociación entre depósitos
de mena y roca caja que es particularmente atractiva por su simplicidad, y que ha sido seleccionado
como un marco de trabajo dentro del cual los procesos descritos en este libro toman lugar.

Las rocas están clasificadas universalmente en términos de una división triple, nombrados ígneas
sedimentarias y metamórficas, que reflejan los procesos fundamentales activos en la corteza de la
Tierra (Figura 1ª.) El esquema es universal porque las rocas son (¡generalmente!) reconocibles tanto
ígneas o sedimentarias, o, en el caso de ambas como precursores, han sido sustancialmente
modificadas para formar rocas metamórficas. Igualmente, las menas son rocas y a menudo pueden
ser relativamente fácil atribuirlas a un origen ígneo o sedimentario/superficial, una característica
que representa una buena base para la clasificación. Esta clasificación también refleja los procesos
genéticos involucrados en formación de mena, desde depósitos sedimentarios e ígneos que son
algunas veces singenéticos y formados al mismo tiempo que la roca caja misma. A pesar de que
muchos depósitos están metamorfoseados y mientras la temperatura y presión aumentan pueden
sustancialmente modificar la naturaleza original de los depósitos de mena, es evidente que el
metamorfismo no representa un proceso fundamental a través del cual los depósitos de mena son
creados. El Hidrotermalismo, sin embargo, es un proceso de formación de mena análogo viable para
metamorfismo y también involucra la modificación de rocas ígneas o sedimentarias, además de
transferencia de calor (y masa) y fluctuación de presión. Una muy simple clasificación de menas es,
por lo tanto, lograda en base a categorías ígneas, sedimentarias/superficiales e hidrotermal (Figura
1b), y esto forma la base para la estructura y puesta en papel de este libro. Esta subdivisión es muy
similar a una usada por Einaudi (2000), quien expresó que los depósitos minerales pueden ser
clasificados en tres tipos basado sobre procesos, específicamente depósitos magmáticos, depósitos
hidrotermales y depósitos superficiales formados por superficie y aguas subterráneas. Una
desventaja de este tipo de clasificación, sin embargo, es que los procesos de formación de mena
son complejos y episódicos. La formación de menas también involucra procesos que involucra, a
veces sobre periodos significativos del tiempo geológico. Por ejemplo, los procesos ígneos se
convierten en magmático hidrotermal cuando la intrusión se enfría y cristaliza, y sedimentos que se
someten a diagénesis y metamorfismo cuando son progresivamente enterrados, con
acompañamiento de flujo de fluidos y alteración. Además, la deformación de la corteza de la Tierra
introduce nuevos conductos que también facilitan el flujo de fluidos y promueve el potencial para
mineralización en virtualmente cualquier tipo de roca. Los procesos formadores de mena pueden,
por lo tanto, abarcar más de una de las tres categorías, y es considerable la superposición entre
ígneos e hidrotermales y entre sedimentarios e hidrotermales, como se ilustra e la figura 1b, y
también en las fotografías acompañante de las tres principales tipos de menas
La parte principal de este libro esta subdividida en tres secciones llamadas Ígneo (Parte 1),
Hidrotermal (Parte 2), y Sedimentario/superficial (Parte 3). La parte 1 comprime los capítulos 1 y 2,
los cuales lidian con procesos de formación de mena Ígneos y magmático-hidrotermal
respectivamente. La parte 2 contiene el capítulo 3 y cubre el gran y diverso rango de procesos
hidrotermales no tratado en la parte 1. La parte 3 comprime el capitulo 4 sobre procesos supérgenos
y superficiales, además el capítulo 5, el cual cubre los depósitos de mena sedimentarios, incluyendo
una corta sección de combustibles fósiles. El capítulo final del libro, el capítulo 6, es efectivamente
un apéndice de esta subdivisión triple y es un intento de describir la distribución de depósitos de
mena, tanto espacialmente en el contexto de la tectónica global y temporalmente en términos de
la evolución de la corteza a través de la historia de la Tierra. Este capítulo es considerado relevante
hoy en día por el paradigma de la tectónica de placas, la cual ha influenciado ubicuamente a través
de la geología desde 1970s, proporciona otra base conceptual dentro de la cual clasificar los
depósitos de mena. De hecho, la geología económica moderna, y exploración científica de depósitos
minerales, ahora esta firmemente conceptualizada en términos de tectónica global y evolución de
la corteza. Aunque todavía hay mucho por aprender los enlaces entre la tectónica de placas y la
génesis de mena están ahora lo suficientemente bien establecido que los estudios de depósitos de
mena están empezando a contribuir a un mejor entendimiento del sistema Tierra.
QUE HACE VIABLE UN DEPÓSITO MINERAL
En la trayectoria de este libro referencia este hecho para el término “depósitos mena” con poca o
ninguna consideración de si estas ocurrencias pueden ser económicamente viable. Aunque estas
consideraciones pueden ser irrelevantes en el contexto presente es necesario enfatizar que las
instituciones profesionales ahora insisten en la correcta definición y uso de la terminología
perteneciente a los resultados, recursos minerales, y reservas de mena. Esta terminología debería
ser ampliamente usada y aplicada, igual debería ayudar en reducirla irresponsabilidad, y algunas
veces el uso de terminología fraudulenta, especialmente con respecto al publico inversionista. La
terminología correcta puede también asistir en la descripción e identificación de depósitos de mena
genuinos de zonas de interés económico marginal o simples concentraciones anómalas de un
determinado commodity.

Aunque la legislación que gobierna la publicación de ocurrencias minerales obviamente varia de un


país a otro, hay un acuerdo razonable en cuanto a la definición de términos. En general esta
acordado que diferentes términos deberían aplicar a las ocurrencias minerales dependiendo en el
nivel de conocimiento y grado de confianza que esta asociado con la medición de su cantidad. La
Figura 3 es una matrix que refleja la terminología asociada con un incremento del nivel de
conocimiento geológico global y confianza, y modificando factores como los relacionados a técnicas
de minería, extracción metalúrgica, marketing, y reclamación ambiental. Los resultados de
exploración pueden ser traducido en un recurso mineral una vez este claro que una ocurrencia de
interés económico intrínseco existe en una forma y cantidad que hay prospectos razonables para
una eventual explotación. Este recurso puede ser referido como una reserva de mena solamente si
es parte de un recurso mineral medido o indicado extraíble. Un problema con esta terminología es
que si es económicamente extraíble en operación artesanal Tercer Mundista puede no ser viable en
una economía técnicamente desarrollada Primer Mundista, y viceversa. El termino “depósito de
mena” no tiene significado en una descripción profesional de una ocurrencia mineral y su mejor uso
es como termino simplemente descriptivo o genérico.
ALGUNAS DEFINICIONES UTILES Y COMPILACIONES
Algunas definiciones generales.

Esta sección no está pensada para proporcionar un glosario comprensivo de términos usados en
este libro

. Hay, sin embargo, varios términos que son usados a través del texto donde su definición es utíl y
necesaria para evitar las ambigüedades. Las siguientes definiciones son consistentes con las
proporcionadas en el Glossary of Geology (Bates y Jackson, 1987) y The Encyclopedia of the Solid
Earth Sciences (Kearey, 1993).

Mena: cualquier material natural del cual un mineral o agregado de valor puede ser extraido para
beneficio. En este libro el concepto se extiende a carbón (una combustible roca comprimida con
más del 50% en peso de material carbonáceo) y petróleo (hidrocarburos naturales en estado sólido,
líquido y gaseoso).

Singenético: se refiere a los depósitos de mena que se forman al mismo tiempo que sus rocas caja.
En este libro se incluyen los depósitos que se forman durante las etapas tempranas de diagénesis
de sedimentos.

Epigenético: se refiere a los depósitos de mena que se forman después que la roca caja.

Hipógena: se refiere a la mineralización causada por soluciones hidrotermales ascendentes.

Supérgena: se refiere a la mineralización causada por procesos de enriquecimiento acompañados


con meteorización y oxidación de menas de sulfuros y óxidos sobre o cerca de la superficie.

Metalogénia: el estudio de la génesis de depósitos minerales, con énfasis en sus relaciones en


espacio y tiempo con características geológicas de la corteza de la Tierra.
Metalotecto: cualquier característica geológica, tectónica, litológica o geoquímica que juega un
papel en la concentración de uno o mas elementos en la corteza terrestre.

Época Metalogénica: una unidad de tiempo geológico favorable para la depositación de mena o
caracterizado por un grupo particular de tipos de depósitos.

Provincia metalogénica: una región caracterizada por un grupo particular de tipos de depósitos.

Epitermal: depósitos de mena hidrotermal formados a profundidades someras (menor a 1500


metros) y temperaturas mas o menos bajas (50-200°C).

Mesotermal: depósitos de mena hidrotermal formados a profundidades (1500-4500 metros) y


temperaturas intermedias (200-400°C).

Hipotermal: depósitos de mena hidrotermal formados a profundidades considerables (mas de 4500


metros) y temperaturas elevadas (400-600°C).

Tabla periódica de elementos.

La pregunta del numero de elementos presentes en la Tierra es una difícil de responder. La mayoría
de las recopilaciones de elementos relevantes en las ciencias de la tierra muestras mas de 92
elementos, la mayoría de ellos ocurren en fácilmente en cantidades detectables en la corteza de la
Tierra. La figura 4 muestra una tabla periódica donde estos elementos son presentados en número
atómico ascendente y también categorizado en grupos que son relevantes en la metalogénesis. De
hecho, hay 118 elementos que son conocidos por el hombre, pero los de número atómico mayor a
92 (U: Uranio) ocurren en cantidades muy pequeñas como isotopos inestables que son producto de
varias reacciones de descomposición radioactiva natural o son creados sintéticamente en reactores
nucleares. El elemento mas pesado conocido, ununoctium (Uuo, numero atómico 1189, ha sido
temporalmente detectado en un reactor nuclear y se especula su actual existencia. Algunos de los
elementos pesados, inestables son, sin embargo, manufacturados sintéticamente y sirven para una
variedad de usos. Plutonium (Pu, número atómico 94), por ejemplo, es fabricado en reactores de
cultivo rápido y es usado como combustible nuclear en la fábrica de armas. Americium (Am, número
atómico 95) es también fabricado en reactores y es ampliamente usado como agente activo de
detectores de humo.

De los 92 elementos mostrados en la figura 4, casi todos tienen algún uso en nuestra sociedad
tecnológicamente moderna. Algunos de los elementos (hierro y aluminio) son requeridos en
cantidades abundantes como materia prima para la fabricación de vehículos y en construcción,
mientras que otros (tierras raras, por ejemplo) son necesitados en cantidades mucho menores para
usarse en aleaciones e industrias electronicas. Solo tres elementos que aparecen en la tabla casi no
tienen uso o no lo tienen del todo (Figura 4). Estos son astatine (At, número atómico 85), francium
(Fr, número atómico 87), y proactinium (Pa, número atómico 91). El francium es radioactivo y vida
tan corta, ¡que solo 20-30 g existen en toda la corteza terrestre al mismo tiempo! Astatine,
igualmente, es muy inestrable y existen en cantidades muy pequeñas en la corteza, o es fabricado
sintéticamente. El Radón (Rn, número atómico 86) es un gas noble o inerte que es formado como
producto de descomposición radioactiva del radium. Tiene uso limitadas en aplicaciones médicas,
pero, contrariamente, si se permite acumularse puede representar amenazas serias para la salud en
varios ambientes.

Los elementos útiles pueden ser ampliamente subdividos de diferentes maneras. La mayoría de los
elementos pueden ser clasificados como metales (Figura 4), con una pequeña fracción siendo no
metales. Los elementos B, Si, As, Se, Te y At tiene propiedades intermedias y son referidos como
metaloides.

Otra clasificación de elementos, atribuida al geoquímico pionero Goldschmidt, esta basada en sus
asociaciones de roca y forma de la cuenca para distinguir entre elementos litófilos (asociados con
silicatos y concentrados en la corteza), calcófilos (asociados con sulfuros), siderófilos (ocurren como
metales nativos y concentrados en el núcleo), y atmósfilos (ocurren como gases en la atmósfera).

Algunos elementos tienen propiedades que permiten clasificarlos de más de una forma y el hierro
es un buen ejemplo, en que este ocurre fácilmente en oxidos y sulfuros.

Menas comunes y minerales ganga


Esta estimado que hay cerca de 3800 minerales conocidos que han sido identificados y clasificados
(Battery y Pring, 1997). Solo una pequeña proporción hacen parte de la mayoría de las rocas de la
corteza terrestre, comúnmente como minerales formadores de roca. Igualmente, un número
relativamente pequeño de minerales del mundo son depósitos de mena económicamente viable.
La siguiente recopilación es un análisis de las minerales mena más comunes en término de su clase
química basado principalmente en la parte aniónica de su formula mineral. También se incluyen
algunos de las “gangas” más comunes las cuales son minerales que forman parte del cuerpo de
mena, pero que no contribuyen una parte económicamente extraíble del depósito. La mayoría de
estos son grupos de alteración formados durante los procesos hidrotermales. La recopilación,
incluye formula química ideal, esta subdivida en seis secciones, llamadas elementos nativos,
haluros, sulfuros y sulfosales, óxidos e hidróxidos, oxisales (como los carbonatos, fosfatos,
tungstanatos, sulfatos), y silicatos. Descripciones mas detalladas tanto de minerales mena y ganga
pueden ser encontradas en una variedad de textos mineralógicos, como lo son Deer et al. (1982),
Berry et al. (1983), y Battery y Pring (1997). Mas información de texturas y ocurrencias de minerales
mena pueden ser encontrados en Craig y Vaughan (1994) y Ixer (1990).

1. Elementos nativos
Tanto metales y no metales existen en la naturaleza de forma nativa, donde esencialmente solo un
elemento existes en la estructura. Cobre, plata, oro y platino son todos caracterizados por atomos
de empaquetado cubico, con altas densidades y son maleables y blandos. Los atomos de carbono
en el diamante están elanzados en grupos de tetraedros formando cristales bien aferrados, muy
duros y translucidos. Los sulfuros ocurren como anillos de ocho atomos y forman bipirámides o son
amorfos.

Metales
Gold – Au
Silver – Ag
Platinum – Pt
Palladium – Pd
Copper – Cu
Non-metals
Sulfur – S
Diamond – C
Graphite – C

2. Haluros
Es el grupo de minerales que comprime compuestos hechos por enlaces iónicos. Minerales como la
halita y silvita son cúbicos, tiene una formula química simple, y son altamente solubles en agua. Los
haluros a veces forman minerales mena, como la chlorargyrite y atacamite.
Halite – NaCl
Sylvite – KCl
Chlorargyrite – AgCl
Fluorite – CaF2
Atacamite – Cu2Cl(OH)3

3. Sulfuros y sulfo-sales
Este gran y complejo grupo de minerales en los cuales los enlaces son de tipo iónico y covalente. El
grupo sulfuros tiene una formula general AMXP, donde X, el átomo más grande, es típicamente S
pero puede ser As, Sb, Te, Bi, o Se, y A es uno o mas metales. Las sulfo-sales, que son mucho mas
raros que los sulfuros, tiene formula general AMBNXP, donde A es comúnmente Ag, Cu o Pb, B es
comúnmente As, Sb o Bi, y X es S, Los minerales sulfuros y sulfo-sales son genéricamente opacos,
pesados y tiene brillo metálico o submetálico.

Sulfuros
Chalcocite – Cu2S
Bornite – Cu5FeS4
Galena – PbS
Sphalerite – ZnS
Chalcopyrite – CuFeS2
Pyrrhotite – Fe1–xS
Pentlandite – (Fe,Ni)9S8
Millerite – NiS
Covellite – CuS
Cinnabar – HgS
Skutterudite – (Co,Ni)As3

Sperrylite – PtAs2
Braggite/cooperite – (Pt,Pd,Ni)S
Moncheite – (Pt,Pd)(Te,Bi)2
Cobaltite – CoAsS
Gersdorffite – NiAsS
Loellingite – FeAs2
Molybdenite – MoS2
Realgar – AsS
Orpiment – As2S3
Stibnite – Sb2S3
Bismuthinite – Bi2S3
Argentite – Ag2S
Calaverite – AuTe2
Pyrite – FeS2
Laurite – RuS2

Sulfo-sales
Tetrahedrite – (Cu,Ag)12Sb4S13
Tennantite – (Cu,Ag)12As4S13
Enargite – Cu3AsS4

4. Óxidos e hidróxidos
Este grupo de minerales varia en sus propiedades, pero esta caracterizado por uno o más metales
en combinación con oxigeno o grupos hidroxilo. Los óxidos e hidróxidos típicamente exhiben enlaces
iónicos. Los minerales óxidos pueden ser duros, densos y refractarios en la naturaleza (magnetita,
casiterita) sino también son blandos y menos densos, formando productos de alteración
hidrotermal y meteorización como goetita y gibsitam que son típicamente producto de
meteorización extrema y alteración.

Óxidos
Cuprite – Cu2O
Hematite – Fe2O3
Ilmenite – FeTiO3
Hercynite – FeAl2O4
Gahnite – ZnAl2O4
Magnetite – Fe3O4
Chromite – FeCr2O4
Rutile – TiO2
Anatase – TiO2
Pyrolucite – MnO2
Cassiterite – SnO2
Uraninite – UO2

Thorianite – ThO2
Columbite-tantalite – (Fe,Mn)(Nb,Ta)2O6

Hidróxidos (o oxihidróxidos)
Goethite – FeO(OH)
Gibbsite – Al(OH)3
Boehmite – AlO(OH)
Manganite – MnO(OH)

5. Oxi-sales
Grupo de minerales de carbonato formados cuando grupos aniónicos de carbonatos (CO32-) están
enlazados por cationes intermedios como Ca, Mg y Fe. Ocurrencia de hidroxilos y carbonatos
hidratados pueden ser formados, usualmente como resultado de meteorización y alteración. Las
otras oxi-sales como los tungstanatos, sulfatos, fosfatos, y vanadatos son análogos a los carbonatos,
pero construidos acerca de un grupo aniónico de forma XO4n-.

Carbonatos
Calcite – CaCO3
Dolomite – CaMg(CO3)2
Ankerite – CaFe(CO3)2
Siderite – FeCO3
Rhodochrosite – MnCO3
Smithsonite – ZnCO3
Cerussite – PbCO3
Azurite – Cu3(OH)2(CO3)2
Malachite – Cu2(OH)2CO3

Tungstanatos
Scheelite – CaWO4
Wolframite – (Fe,Mn)WO4

Sulfatos
Baryte(s) – BaSO4
Anhydrite – CaSO4
Alunite – KAl3(OH)6(SO4)2
Gypsum – CaSO4.2H2O
Epsomite – MgSO4.7H2O

Fosfatos
Xenotime – YPO4
Monazite – (Ce,La,Th)PO4
Apatite – Ca5(PO4)3(F,Cl,OH)

Vanadatos
Carnotite – K2(UO2)(VO4)2.3H2O

6. Silicatos
La mayoría de la corteza de la Tierra y manto estan hecho de minerales de silicatos que pueden ser
subdivididos en varias series minerales basadas en su estructuras y coordinación de tetraedros de
grupos aniónicos SiO44-. Los minerales silicatos son generalmente duros, refractarios y translucidos.
La mayoría no pueden ser considerados como minerales mena en parte porque no representa una
prate extraíble de un cuerpo de mena, y la lista proporcionada debajo muestra sólo algunos de los
silicatos mas comunes aosciados con ocurrencias minerales de ganga o productos de alteración.
Algunos silicatos como el zircón y spodumene, son minerales mena y representan una importante
fuente de minerales mena como el zirconi y lito, respectivamente. Otros como la caolinita, son
buscados por sus propiedades intrínsecas (ej. Como arcilla para la industria cerámica).
Tecto (framework
Quartz – SiO2
Orthoclase – (K,Na)AlSi3O8
Albite – (Na,Ca)AlSi3O8
Scapolite – (Na,Ca)4[(Al,Si)4O8)]3 (Cl, CO3)
Zeolite (analcime) – NaAlSi2O6.H2O

Neso (orto)
Zircon – Zr(SiO4)
Garnet (almandine) – Fe3Al2(SiO4)3
Garnet (grossular) – Ca3Al2(SiO4)3
Sillimanite – Al2SiO5
Topaz – Al2SiO4(F,OH)2
Chloritoid – (Fe,Mg,Mn)2(Al,Fe)Al3O2(SiO4)2(OH)4

Ciclo (anillo)
Beryl – Be3Al2Si6O18
Tourmaline –
(Na,Ca)(Mg,Fe,Mn,Al)3(Al,Mg,Fe)6Si6O18
(BO3)3(OH,F)4

Soro (di)
Lawsonite – CaAl2Si2O7(OH)2.H2O
Epidote – Ca2(Al,Fe)3Si3O12(OH)

Filo (lamina)
Kaolinite – Al4Si4O10(OH)8
Montmorillonite – (Na,Ca)0.3(Al,Mg)2
Si4O10(OH)2.nH2O
Illite – KAl2(Si,Al)4O10(H2O)(OH)2
Pyrophyllite – Al2Si4O10(OH)2
Talc – Mg3Si4O10(OH)2
Muscovite – KAl2(AlSi3O10)(OH)2
Biotite – K(Fe,Mg)3(Al,Fe)Si3O10(OH,F)2
Lepidolite – K(Li,Al)3(Si,Al)4O10(OH,F)2
Chlorite – (Fe,Mg,Al)5–6(Si,Al)4O10(OH)8

Ino (cadena)
Tremolite-actinolite – Ca2(Fe,Mg)5Si8O22(OH)2
Spodumene – LiAlSi2O6
Wollastonite – CaSiO3

Estructura desconocida
Chrysocolla – (Cu,Al)2H2Si2O5(OH)4.nH2O

Escala de tiempo geológico


El desarrollo de una escala de tiempo geológico ha estado sujeta a una cantidad considerable de
ideas e investigación en las últimas décadas pasadas y continúa ocupando las mentes y actividades
de un gran número de geocientificos a lo largo del mundo. La definición de un marco de trabajo
dentro del cual se describe secularmente la evolución de las rocas, y por lo tanto la Tierra, ha sido y
continúa siendo, un ejercicio polémico. La Comisión Internacional de Estratigrafía (ICS es un grupo
de la Unión Internacional de Ciencias Geológicas IUGS) ha tomado la tarde de formalizar la escala
de tiempo geológico y su trabajo esta en curso (www.micropress.org/stratigraphy/). En varias
referencias de este libro a veces se hace el timing de varios eventos y procesos y la provisión de una
escala de tiempo de la que el lector se puede referir es, por lo tanto, útil. La figura 5 es una escala
de tiempo basada en la edición 2000 de la Carta Estratigráfica Internacional publicada y aprobada
por la ICS y IUGS. En este diagrama global los términos cronoestratigráficos son presentados como
eones, eras, periodos, y epócas, y definidos por edades absolutas en millones de años antes del
presente (M.a). También muestra las posiciones sobre la escala de tiempo de muchos depósitos de
mena o provincias metalogénicas referidas en el texto.

RECURSOS NATURALES, SUSTENTABILIDAD, Y RESPONSABILIDAD AMBIENTAL


Uno de los mayores problemas que caracterizan el desarrollo social y económico hacia el fin del siglo
veinteavo gira en torno a la amplia aceptación de que los recursos naturales de la Tierra son finitos,
y que su explotación debe ser llevada a cabo de manera que no afecte perjudicialmente las futuras
generaciones. El concepto de “desarrollo sostenible” en términos de la explotación de ocurrencia
de minerales implica que el futuro social y la practica económica deben esforzarse a no agotar los
recursos naturales al punto donde las necesidades futuras no puede tenerlos. Esto podría ser un
objetivo imposible dado el crecimiento imprecedente en la población en el ultimo siglo y el hecho
de que muchos commodities van a disminuir dentro de los próximos 100 años. El reto para el
suplemento de commodities en el próximo siglo es que se requiere un entendimiento multifacético
y mejor del sistema tierra, mejorando los incentivos a promover reciclaje más eficiente de recursos
existentes, y significa encontrar fuentes alternativas para commodities que están en peligro de
agotamiento serio.

Hubo un incremento global dramático en la población mundial en los ultimos150 años. El número
de humanos en la tierra aumentó de 1 billón en 1830 a 6 billones al final de siglo veinte. Las mejores
predicciones sugieren que las poblaciones de la mayoría de los países empezarán a nivelarse en los
próximos 30 años y los números se estabilizarán en alrededor de 11 billones de personas para el
final del siglo 21. Las sociedades en los próximos 100 años van, sin embargo, a enfrentar un
escenario donde la demanda por la utilización de recursos naturales continuará aumentando y
ciertos commodities pueden ser agotados en este intervalo. Las tendencias de producción para
commodities como el petróleo, bauxita, cobre y oro. (Figura 6) confirman que la demanda de
recursos refleja que el crecimiento en la población es probable que continúe en las siguientes
décadas. La producción mundial de petróleo aumentó precipitadamente hasta finales de los 1970s,
pero desde que una variedad de factores político y económicos han contribuido a templar la
producción (Figura 6ª), de esta manera asegurando la reserva base a largo plazo. Una nivelación
similar en la producción se evidencia en bauxista (Figura 6b) pero están tendencia no se evidencia
aun para metales preciosos como oro o platino. Para algunos commodities, como el cobre (figura
6c), las reservas base del mundo también están estabilizándose, una característica que en parte
también refleja algunos nuevos y grandes descubrimientos. La escasez critica de la mayoría de los
commodities naturales probablemente no presenten problemas durante la parte temprana del siglo
21 (Einaudi, 2000=, pero esta situación deteriorará a menos que las estrategias para sustentabilidad
sean puestas en marcha inmediatamente.

El agotamiento de commodities en la corteza de la Tierra es particularmente serio para los metales


que ya son escasos en términos de abundancia en la corteza y para los de mayor grado de
enriquecimiento con el fin de hacer viable los depósitos de mena. La figura 2 ilustra el punto para
referirse a la producción de hierro como medida base contra la extracción de otros metales puede
ser comparados (Skinnner, 1976). Estos elementos caen sobre la línea de producción Fe
(notablemente Au, Ag, Bi, Sb, Sn, Cu, Pb y Zn) que están siendo extraídos o agotados a tasa mas
rápidas, relativo a sus abundancias en la corteza, mas que el hierro. En estos metales que son mas
posibles a agotarse en los siguientes 50 años o menos la producción es mejorada o la reserva base
es remplazada. Por el contrario, esos metales que caen bajo la línea de producción del Fe (como Ti,
Mg y Al) están siendo extraidos a tasa mas lentas que el hierro y son menos probables a ser agotados
durante este siglo.

Una de las formas, en la cual la metalogénia puede asistir en la creación de un patrón sustentable
de utilización de recursos, es entendiendo mejor los procesos mediante los cuales las menas son
concentradas en la corteza de la Tierra. El remplazamiento de la reserva base globalde un
commodity es obviamente dependiente al éxito en la exploración y la habilidad para encontrar
nuevos depósitos que pueda remplazar estos que están siendo agotados. Esto, desde luego,
incrementa la dificultad para encontrar nuevos depósitos grandes de menas convencionales, ya que
la mayoría de las partes accesibles del globo han sido extensamente inspeccionadas y evaluadad
para potencial mineral. La búsqueda de depósito mas profundos es una opción pero es
independiente de gran extensión en la disponibilidad de tecnología que tengan lugar en la minera y
sea seguro y beneficios a profundidades de más de 4000 metros (actualmente la minería mas
profunda en minas de oro en Sudáfrica). Otra opción es extraer el material de partes inaccesibles
del globo, como el fondo oceánico, una propuesta que ha recibido consideraciones serias con
respecto a metales como Mn y Cu.

De nuevo hay barreras tecnológicas que presentan estos procesos, pero puede ser superadas, como
se ha demostrado en varias explotaciones, extracciones de petróleo y gas del fondo marino. Una
tercera opción es aumentar la sostenibilidad de explotación de recurso, es extraer commodities
útiles de las rocas que tradicionalmente no han sido tenidas en cuenta para menas viables. Este
desarrollo puede ser logrado solo si las llamadas “barreras mineralógicas” (Skinner, 1976) son
superadas. Este concepto puede ser descrito en términos de cantidades más baratas para extraer
Fe de una formación de hierro bandeada (BIF) que de un olivino u ortopiroxenos en una roca ígnea,
aún cuando ambos tipos de rocas pueden contener cantidades significantes del metal. La minería
económica y la amplia disponibilidad formaciones de hierro bandeado (BIF) dictan que la extracción
de Fe de un mineral silicatado es esencialmente posible. Lo mismo no ocurre con el níquel. Aunque
es más barata y fácil extraer Ni de minerales mena de sulfuro (como pentlandita) ahora hay una
amplia extracción del metal de minerales silicatados niquelíferos (garnierita) que se forman durante
la meteorización laterítica de rocas ultramáficas. Aun cuando el Ni es más difícil y costoso de extraer
de lateritas que de menas de sulfuros, los altos tonelajes y tenores, además de amplio desarrollo y
facilidad para acceder a ellos, significa que representa proposiciones de minería a pesar de las
dificultades extractivas. Últimamente, esto puede también volverse atractivo considerar minería de
lateritas de hierro, pero esto solo ocurriera si las formaciones de hierro bandeadas (BIF) son
agotadas, o si la operación completa de las lateritas favorece económicamente mas que las
formaciones de hierro. Esto no es probable que ocurra a corto plazo, pero, si se planea, el escenario
puede ser la esperanza para la sostenibilidad a largo plazo. En resumen, la producción sostenible de
recursos minerales requiere un entendimiento riguroso de procesos formadores de mena y significa
aplicar esto al descubrimiento de nuevas ocurrencias minerales. También requiere el desarrollo
oportuno de tecnologías, tanto en las ciencias de la tierra y sus campos relacionados a la minería y
la metalurgia extractiva, que habilitará el suministro de recursos minerales para ser
económicamente explotados en el futuro.
Minería y responsabilidad ambiental
La población global de 11 billones para el final del siglo presenta un problema mayor en términos
del suministro de la mayoría de los recursos minerales del mundo. Que es aun mas serio, sin
embargo, es el enorme esfuerzo que toma lugar en el ambiente fragíl de la Tierra surgiendo de una
expectación justicificable que las sociedades tecnológicamente avanzadas del futuro van a proveer
un estándar adecuado de vida en términos de comida, agua, vivienda, recreación y beneficios
materiales, para toda su población. Además, los problemas de suministros de commodities también
serán caracterizados por un agotamiento sin precedentes de recursos aún más crítico en formas de
suelo, agua, y aire limpio (Fyfe, 200). La legislación que apunta a lidiar con estos problemas como la
polución atmosférica y emisiones de gases de efecto invernadero, residuos de fabrica y drenajes
ácidos, la quema y destrucción de bosques la protección de especies en vías de extinsión,
sobrepastoreo, y erosión es altamente conveniente pero lejos de su aplicación globalmente porque
es percibido como un lujo que solo un mundo desarrollado se pueda permitir.

El estudio de proceso formadores de mena es ocasionalmente visto como un tema indeseable que
últimamente contribuye a la explotación de los recursos naturales preciosos del mundo. Nada mas
lejos de la verdad. Un entendimiento de los procesos por los cuales los metales son concentrado en
la corteza terrestre es conocimiento esencial para cualquiera preocupado en la preservación y
remediación del medio ambiente. Los principios que apoyan la concentración natural de menas en
la corteza son los mismo que pueden ser usado en problemas como el control de drenajes ácidos
de mina, y suelos y manejo de erosión. Las operaciones de minería alrededor el mundo han tenido
que asumir mejor las responsabilidades para la reclamación del paisaje una vez el recurso ha sido
agotado. La industria ahora abarca un rango de actividades que van desde exploración geológica y
evaluación, a través de la minería y beneficio, y eventualmente a la reclamación ambiental. Este es
el ciclo minero y su manejo efectivo en el futuro será un ejercicio multidisciplinario llevado a cabo
por científicos altamente calificados e ingenieros. La ciencia de los sistemas de la Tierra, y en
particular la concentración de mena en primer lugar, serán centrales en la operación entera.

RESUMEN
La disciplina de “geología económica” y en particular el campo de la metalogénia (estudio de la
génesis de depósitos mena) permanece crítica para enseñar la ciencia de los sistemas de la tierra.
Un enfoque holístico involucra la integración del conocimiento relevante a la atmósfera, biósfera, y
litósfera es ahora considerado como esencial para el entendimiento de las complejidades del
sistema tierra. El desarrollo de la responsabilidad ambiental y políticas de sostenibilidad con
respecto al suministro futuro de todos los recursos naturales demandará de conocimiento riguroso
de la naturaleza y funcionamiento del sistema tierra. Central a esto es un entendimiento de la
metalogénia y la naturaleza y origen de espectro completo de recursos minerales, incluyendo los
combustibles fósiles. La clasificación de depósitos minerales en términos de procesos puede ser
lograda de forma sencilla y efectiva en términos de asociaciones de roca, llamados ígneos,
hidrotermales, y sedimentarios. Esta división forma la base de la puesta en papel de este libro.
Procesos Ígneos
Metalogenia de corteza oceánica y continental
Tipos de magmas fundamentales y el “factor de herencia”
• Hipótesis “late-venner” (revestimiento tardío) de diamantes y concentraciones de metales en
kimberlitas/lamproitas en manto metasomatizados y granitos tipo S- y tipo I.
Fusión parcial y cristalización fraccionadas como procesos formadores de mena
Distribución de elementos traza durante la fusión parcial
Distribución de elementos traza durante la cristalización fraccionada
Capas de Cromitas monominerálicas
Inmiscibilidad de liquidos como un proceso formador de mena
Énfasis especial sobre procesos de mineralización en intrusiones máficas con capas
• Solubilidad de sulfuros
• Coeficientes de partición de sulfuros-silicatos
• Factor R
• Cluster PGE y modelos hiatus

1.1 Introducción
Las rocas ígneas hospedan un gran numero de diferentes tipos de depósitos. Ambas rocas félsicas y
máficas son enlazadas a depósitos minerales, ejemplos de los cuales van desde mena de cromitas
resultantes de cristalización fraccionada de magmas máficos a depósitos de tin(estaño) asociados
con ciertos tipos de granitos.

Los procesos descritos en este capítulo relatan las propiedades que son intrínsecas al magma mismo
y pueden ser enlazadas genéticamente a su enfriamiento y solidificación. Una discusión de procesos
relacionados, a través de los cuales una fase acuosa líquida se forma o” exsolve” de un magma
mientras que cristaliza, toma lugar en el capitulo 2. Los tópicos discutidos bajo los estandartes de
procesos formadores de mena ígneos y magmáticos-hidrotermales están íntimamente enlazados y
forman parte de la Parte 1 de este libro.

Una medida de la importancia económica de los depósitos de mena hospedados en rocas ígneas
puede ser obtenida de una compilación de datos de producción mineral como función del tipo de
roca hospedante. Un país como Sudáfrica, por ejemplo, es infrayacido predominantemente por
rocas sedimentarias y estas indudablemente hospedan muchos de los recursos minerales valiosos
(especialmente si los combustibles fósiles son tomados en consideración).

Sin embargo, el valor de las menas hospedadas en rocas ígneas por unidad de área de afloramiento
puede ser comparable con el de las rocas sedimentarias como muestra la Tabla 1.1. Aunque
Sudáfrica es caracterizada por una dotación bastante especial de riqueza de minerales relacionados
al gran Complejo Bushveld, la importancia de los depósitos hospedados en rocas ígneas es sin
embargo aparente.
1.2 Magmas y Metalogenia
Es bien conocido que diferentes tipos de rocas ígneas hospedan depósitos de mena con diferentes
asociaciones de metales, y que estos deben ser relacionados de alguna manera a los ambientes
donde los magmas son generados y las características composicionales resultantes ellos la heredan
sus varias configuraciones. Esto es ampliamente reconocido, por ejemplo, que muchos de los
elementos calcófilos y siderófilos (como el Ni, Co, Pt, Pd, y Au) son mas probables a ser asociados
con tipos de rocas máficas, mientras que concentraciones de muchos elementos litófilos (como el
Li, Sn, Zr, U, y W) son típicamente encontrados en asociación con tipos de rocas félsicas y alcalinas.
Esto tiene implicaciones para el entendimiento de la génesis de mena y, consecuentemente, algunos
de los factores relacionados a estas diferencias son discutidas a continuación.

1.2.1 Arquitectura de la corteza y riqueza mineral


Aunque las más grandes concentraciones de elementos siderófilos y calcófilos residen casi
definitivamente en el manto y núcleo de la Tierra, estos son generalmente inaccesibles debido a sus
profundidades muy grandes. De hecho, la mayoría de la riqueza mineral económicamente
explotable del mundo efectivamente se extienden sobre la superficie o justo debajo de la superficie
de la tierra. La mina mas profundad del mundo, las minas de oro Western Deep Levels cerca de
Johannesburg, Sudáfrica, se extiende justo sobre los 4000m de profundidad y esto ubica un limite
efectivo sobre la explotación de un cuerpo de mena, al menos en términos de las tecnologías
presentes. Sin embargo, muchos commodities minerales son formados mucho más profundo en la
corteza que 4km, los cuales algunos incluso siendo derivados del manto. Los diamantes, por
ejemplo, son hospedados en magma kimberlíticos que han sido llevados a profundidades
explotables por una variedad de mecanismos ígneos o tectónicos. Entender los procesos de génesis
de mena, por lo tanto, requiere un conocimiento de la arquitectura litosférica (ej. Corteza y manto
superior), y también del origen y naturaleza de las rocas ígneas en esta sección de la Tierra.

La corteza oceánica, la cual cubre algo de las dos terceras partes de la superficie de la tierra, es
delgada (menos de 10km) y, comparada a los continentes, tiene una composición y estructura que
son relativamente simples y consistentes sobre su completa extensión. La capa superior, sobre un
promedio solo de 0.4km de grosor (Kearey y Vine, 1996), comprime una combinación de sedimentos
terrígenos y pelágicos que son distribuidas principalmente por corrientes turbidíticas. Estas a veces
son altamente reducidas y cargadas en metales. Esta es infrayacida por una capa típicamente de 1-
2.5km espesor, que es tanto de carácter extrusivo como intrusivo y dominantemente de
composición basáltica. Los basaltos están, uno por uno, infrayacidos por un cuerpo principal de
corteza oceánica que es de carácter plutónico y formados por cristalización y fraccionamiento de
magmas basálticos. Este conjunto acumulado comprime principalmente gabbro, piroxenitas y
peridotitas. Las secciones de litosfera oceánica tectonizados y metamorfoseados pueden ser
observados en complejos ofiolíticos los cuales represetan segmentos de la corteza occeánica
(usualmente cuencas back-arc) que han sido empujada o obductadas dentro de márgenes
continentales durante una colisión continente-océano.

Los tipos de depósitos de menas que uno esperaría encontrar asociados con rocas ofiolíticas son
mostradas en la Figura 1.1. Estas incluyen la categoría de depósito de cromita podiforme (en forma
lenticular o de vara alargada) que son relacionadas a cristalización fraccionada de basaltos de
dorsales medio oceánicas (MORB), y también tienen potencial para mineralización de Ni y
elementos del grupo del Pt (PGE). Las acumulaciones de manganeso en nodulos sobre el fondo
marino, concentraciones ricas en metales en lodos pelágicos, y depósitos de Cu -Zn en sulfuros
masivos volcanogénicos exhalativos (VMS) también pueden ocurrir en esta configuración tectónica,
pero no están directamente relacionados a los procesos ígneos y son discutidos en otra parte
(Capitulos 3 y 5).

La corteza continental difiere marcadamente de su contraparte oceánica. Esta es típicamente de 35-


40 km de espero, pero adelgaza a cerca de 20 km bajo zonas de rift y se engrueso a 80km o más
bajo zonas de cinturones montañosos jóvenes. Históricamente, la corteza continental se pensaba
que comprime una zona superior hecha principalmente de granito (y sus derivados sedimentarios)
y una inferior, zona más máfica, con las dos capas separadas por la discontinuidad de Conrad (la cual
marca un cambio en las velocidades sísmicas, y, por lo tanto, la densidad de la corteza). Estudios
geofísicos y geológicos recientes indican claramente que la arquitectura de al corteza es mas
compleja y refleja una tectónica persistente e historia magmática, extendida en algunos casos sobre
3800 millones de años (Figura 1.2)
Los continentes han sido progresivamente construidos a través del tiempo geológico por una
variedad de procesos magmáticos, sedimentarios y orogénicos tomando lugar a lo largo de
márgenes activos de placas y, en menor extensión, dentro de los continentes mismos. Además,
masas de terrenos continentales han sido repetidamente rotos en partes y reamalgamados a través
de la historia geológica. Estos episodios, conocidos como ciclos de Wilson, han reordenado la
configuración de fragmentos continentales varias veces en el pasado geológico. En el Proterozoico
temprano, por ejemplo, es concebible que los segmentos del sur de África y oeste de Australia
pudieran haber sido parte del mismo continente. El significado de estos ciclos, y patrones de
evolución de la corteza con el tiempo, a la metalogénia global es discutido en más detalles en el
Capítulo 6.

La corteza superior, la cual en algunas secciones continentales es definida como la extensión de la


discontinuidad de Conrad a cerca de 6km de profundidad, esta compuesta de composiciones félsicas
a intermedias (granitos a dioritas) junto con detritos sedimentarios derivados de la meteorización y
erosión de este material. Los fragmentos continentales del Arqueano (más de 2500 m.a. de
antigüedad) también contienen un componente significativo de material del cinturón greenstone,
representando fragmentos preservados de corteza oceánica antigua. La corteza inferior, entre las
discontinuidades de Conrad y Mohorovicic, son variables en composición, pero son hechos
típicamente por material mas caliente y usualmente mas denso. Esto es porque las temperaturas y
presiones en la corteza incrementan con la profundidad a tasas promedios de 25°C/km y 30 MPa/km
respectivamente (Kearyey y Vine, 1996). La corteza inferior no es necesariamente en composición
diferente de la corteza superior, pero existen grados metamórficos mas altos. Esta también es
probable que sea anhídrica y residual, en el sentido de que el magma ahora presente a niveles mas
altos fue extraído de la corteza inferior, dejando un residuo de material modificado. Algo de la
corteza inferior puede ser mas máfica en composición, comprimiendo material como anfibolitas,
gabbro y anortositas.

La mayoría de los depósitos de mena conocidos en el mundo son, por supuesto, hospedados en
rocas de la corteza continental, y el amplio rango no es mostrado en la Figura 1.2. Algunas de las
rocas ígneas mas importantes relacionadas con tipos de depósitos son mostrados y estos incluyen
kimberlitas diamantíferas, depósitos de Ti hospedados en anortositas, los conjuntos Cr-V-Pt-Cu-Ni
de mena en suites máficas continentales en capas, y la familia de Sn-W-F-Nb-REE-P-U de menas
litófilas relacionadas a granitos e intrusiones alcalinas.

1.2.2 Tipos de magmas y contenido en metales


Aunque sus propiedades reológicas son diferentes, las dos capas exteriores de la Tierra, la más rígida
litósfera y la dúctil astenosfera, son ampliamente sólidas. Las zonas dentro de estas capas que son
anómalas en términos de presión o temperatura, sin embargo, se forman y pueden causar fusión
localizada de rocas presentes. La naturaleza de las rocas que están bajo fusión y la extensión de
dicho fundido son los principales factores que controla la composición del magma que es formado.
La composición del magma, una por una, dicta la naturaleza de las concentraciones de metales que
son probables a formarse en las rocas que se solidifican del magma.

Aunque es teóricamente posible que se forma al menos un rango infinito de composiciones del
magma (desde ultramáficos a altamente alcalinos), para una discusión más sencilla esta sección esta
subdividida en cuatro partes, cada una representando que es considerada como un tipo de magma
fundamental – estas son magmas basálticos, andesíticos, riolíticos, y alcalinos, los últimos incluyen
kimberlitas.

Basaltos
Los basaltos se forman casi en cualquier ambiente tectónico, pero la mayoría de la producción de
magma basáltico toma lugar a lo largo de dorsales medio oceánicas, y en respuesta a puntos
calientes relacionados a plumas, para formar corteza oceánica. Además, los basaltos son formado
junto con una variedad de magmas félsicos, a lo largo de arcos de islas y márgenes continentales
orogénicos. Los magmas basálticos también pueden intruir o extruir corteza continental, incluso a
lo largo de fracturas bien definidas o rift (como las provincias basálticas continentales flood, o el
Gran Dique de Zimbabue) o en respuesta a actividad intraplaca de un punto caliente (el cual puede
haber sido responsable de la formación del Complejo Bushveld de Sudáfrica).

Los basaltos se forman por fusión parcial del material del manto, mucho del cual puede ser
generalmente descrito como de composición peridotita. Ciertas rocas del manto, como las
Iherzolitas (una peridotita que contiene clinopiroxeno y/o granate o espinela), han sido mostrado
experimentalmente para producir líquidos basálticos en fusión, mientras que otros, como las
peridotitas tipo alpina (comprimiendo principalmente olivino y ortopiroxeno), son también
refractarias para rendir líquidos basálticos y pueden ciertamente representar residuos dejados
debajo despues de que el magma basáltico ya ha sido extraído del manto. Igualmente, la corteza
oceánica hecha de basaltos hidratados (serpentinizados) y derretidos bajo dentro de una
subducción es también una potencial roca fuente para el tipo de magmatismo de arcos de islas y
márgenes continentales. Las Komatiitas, que son magmas basálticos ultramáficas (con >18% MgO)
principalmente restringidas a cinturones greenstone del Arqueano, tienen un origen controversial
pero se cree generalmente que representan altos grados de fusión parcial del manto durante
condiciones de alto flujo de calor que prevalecen en las etapas tempranas de formación de corteza
priorizado a 2500 Ma.
Los depósitos de mena asociados con rocas ígneas máficas típicamente comprimen un distintivo
conjunto de metales (principalmente siderófilos y calcófilos), entre otros, Ni, CO, Cr, V, Cu, Pt y Au.
La examinación de estos elementos que son intrínsecamente enriquecidos en magmas basálticos.
La Figura 1.3 ilustra las abundancias relativas de estos metales en tres tipos de magmas
fundamentales y las concentraciones significativamente altas en basaltos por comparación con
andesitas y riolitas. La mejora en la concentración de estos metales en cada caso es relacionada al
hecho de que los materiales fuentes del cual el basalto se ha formado deben igualmente haber sido
enriquecidos en estos constituyentes. Además, las mejoras en las abundancias también reflejan la
afinidad química que estos materiales tienen para los elementos mayores que caracterizan a
magmas basálticos (Mg y Fe) y dictan su composición mineral (olivino y los piroxenos).

La afinidad química que un elemento tiene para otro es relacionada con sus propiedades atómicas
por sus posiciones relativas en la tabla periódica (ver Fig 4, Introducción). Los elementos
alcalinotérreos (ej. K, Na, Rb, Cs, etc), por ejemplo, son todos muy similares el uno con el otro, pero
tiene propiedades que son bastante diferentes a los metales de transición (como el Fe, Co, Ni, Pt,
Pd). Además, los elementos menores o trazas, que ocurren en bajas abundancias en magmas que
pueden formar una fase mineral discreta, están presentes por virtud de su habilidad o para sustituir
otro elemento químicamente similar en una red cristalina. Este comportamiento es referido como
un diadoquia o sustitución y explica mucho, pero no todo, del comportamiento de los elementos
traza en rocas. La substitución de un elemento traza por un elemento mayor en un cristal toma lugar
si su radio iónico y carga son similares. Típicamente el radio debe ser entre 15% de uno al otro y la
carga no debe diferir por mas de una unidad proporcionada, la diferencia de carga puede ser
compensada por otra sustitución. La fuerza del enlace y tipo también afecta la diadoquia y
preferiblemente ocurre en cristales donde los enlaces ionicos predominan.

Un buen ejemplo de comportamiento diadoquico es la sustitución de Ni2+ por Mg 2+ en olivino, o


V3+ por Fe3+ en magnetita. Datos analíticos para contenido de Ni de basaltos muestra una excelente
correlación entre contenidos Ni y MgO. Los altos contenidos intrínsecos de Ni de basaltos
ultrmáficos y komatiitas debería sugerir que las ultimas rocas son quizás mejor apropiadas a
hospedar depósitos viables de níquel magmático, una observación trasmitida por la presencia de
depósitos de clase mundial de níquel hospedado en las komatiitas del Arqueano del distrito minero
de Kambala en el Oeste de Australia (ver Box 1.5) y cualquier otro en el mundo.
Andesitas
Las andesitas son rocas que cristalizan de magmas de composición intermedia entre basaltos y
riolitas (típicamente con contenidos de SiO2 entre 53 y 63 wt%). Su petrogénesis permanece
continua, aunque es muy bien conocido que estas tienden a ocurrir dominantemente en zonas
orogénicas, o a lo largo de arcos de islas o sobre márgenes continentales bajo los cuales la
subducción de corteza oceánica está tomando lugar (Hall, 1996). La discusión acerca del origen de
las andesitas gira en torno si esta representa una composición de magma primario derivado
directamente de un grado apropiado de fusión de una roca fuente apropiada, o un fundido
evolucionado formado por diferenciación de un magma mas máfico como un basalto.

Las observaciones geológicas apoyan la noción de que las andesitas se pueden formar como un
magma de composición primaria y por fraccionación in situ.

La observación de que los volcanes andesíticos ocurren directamente bajos secciones asísmicas de
una zona Benioff (ej. La lamina de subducción que produce los terremotos debido al movimiento y
fracturamiento de roca) sugiere que la producción de fundido (y amortiguación de las ondas
sísmicas) ha ocurrido en estas áreas. Esto debería apoyar la nocion que los magmas andesíticos son
producidos por fusión directa de corteza oceánica hidratada, o probablemente, la cuña del manto
suprayaciendo la zona de subducción como es permeada por fluidos expulsados de la corteza
oceánica subyacente.

Alternativamente, los magmas andesíticos pueden ser producidos por fraccionación de fases como
la hornblenda y magnetita de magmas parentales relativamente ricos en agua (Osborn, 1979), o por
contaminación de un fundido originalmente más máfico por material félsico o fundido.

Independientemente del modo de formación de una andesita es aparente que es un tipo de magma
que no exhibe una asociación primaria con algún conjunto particular de metales o depósitos de
mena. En cambio, parece que los depósitos de mena tienden a ser asociados con magmas
representando el final del espectro composicional, y que fundidos de composición intermedia son
simplemente caracterizados por abundancia intermedia de elementos traza. La examinación de la
Tabla 1.2 muestra que las andesitas aparecen para tener poco o ninguna particularidad de metales
y son caracterizados por abundancias de elementos traza que son intermedios entre los de los
basaltos por una parte o los granitos o rocas alcalinas en la otra.

Riolitas
Los magmas félsicos también se pueden formar en una variedad de ambientes geológicos. Ellos
cristalizan a profundidad para formar un espectro de composiciones de rocas en un rango desde
tonalitas ricas en Na a granitos alcalinos ricos en k, o extruidos sobre la superficie para formar rocas
volcánicas dacíticas a riolíticas. Muy pocos magmas granitícos se forman en corteza oceánica o a lo
largo de arcos de islas que fueron formados entre dos placas oceánicas. Donde un granito oceánico
ocurre es típicamente el resultado de una diferenciación de un tipo de magma más máfico
originalmente formado por fusión del manto. A lo largo de la dorsal medio oceánica del Atlántico
en Islandia, por ejemplo, las erupciones del volcán Hekla son iniciadas por producción de un pulso
de ceniza félsica que es rápidamente seguido por una erupción más típica de andesitas basálticas.
Esto sugiere que el periodo de intervención entre erupciones pudo haber sido responsable de la
subsecuente erupción (Baldrigfe et al., 1973). Estas observaciones, entre muchas otras, claramente
indican que los fundidos graníticos ser producto de diferenciación de magmas más máficos en
configuración oceánica.

Los magmas más félsicos, sin embargo, son derivados de fusión parcial de material
predominantemente de la corteza a lo largo de arcos de islas océano-continente y márgenes
orogénicos continentales. Aunque las zonas de subducción de tipo Andino pueden facilitar la fusión
parcial de la lámina subduciendo misma, la proporción mucho más alta de magmas félsicos formado
en este ambiente comparado con ambientes oceánicos apunta a un papel significativo de corteza
continental como una fuente.

Hay ahora un acuerdo general que la subducción de tipo andino relacionada a magmatismo recibe
contribuciones de fundido tanto de manto litosférico y la corteza continental, con el amplio rango
de composiciones llamadas conjuntos ígneos “calco-alcalinos” siendo atribuidos a la combinación
de mezcla de magmas y cristalización fraccionada (Best, 2003).

Cantidades significativas de magmas félsico son producidas en las últimas etapas de una colisión
continente-continente y también en configuraciones continentales anorogénicas donde el rifting y
adelgazamiento de la corteza ha tomado lugar. La colisión de continentes tipo Himalaya, por
ejemplo, es usualmente acompañado por un engrosamiento de la corteza asociado con intenso
fallas de empuje (Thrusting), duplicación tectónica y gradientes metamórficos inversos. Estos
procesos causan deshidratación del material de corteza, el cual, por turnos, promueve la fusión
parcial de magma leucograniticos de niveles altos derivado de rocas fuentes que a veces contienen
proporciones significativas de material sedimentarios (Le Fort, 1975). El magmatismo continental
anorogénico, por otra parte, es usualmente relacionado a adelgazamiento de la corteza
(¿acompañado actividad de pluma o punto caliente?) y es tipificado por la producción de magmas
con composiciones bimodales (ej. Basaltos mas Riolitas). Un buen ejemplo es el Complejo Bushveld
en Sudáfrica, donde los magmas máficos tempranos intruyeron para formar el más grande complejo
ígneo en capas del mundo, seguido por el emplazamiento de un conjunto voluminoso de granitos.

Los depósitos de mena asociados con rocas ígneas félsicas a veces comprimen concentraciones de
elementos litófilos como Li, Be, F, Sn, W, U y Th. La Tabla 1.2 muestra que esta lista corresponde a
los elementos que son intrínsecamente enriquecidos en magmas riolíticos y la Figura 1.5 ilustra, en
forma de diagramas de barras, las abundancias relativas de estos elementos, y, en particular, las
abundancias más altas en riolitas en comparación con andesitas y basaltos.

El enriquecimiento relativo de ciertos elementos litófilos en magma riolíticos es particularmente


relacionado a su naturaleza geoquímicamente incompatible. Un elemento incompatible es uno cuya
carga iónica y radio lo hacen difícil para sustituir por cualquiera de los elementos estequiométricos
en rocas formando minerales. Así, los elementos incompatibles tienden a ser excluidos del producto
de la cristalización se concentran en magma residuales o diferenciados (como los magmas graníticos
que se pudieron formar por cristalización fraccionada de magmas máficos en configuraciones
oceánicas). Alternativamente, los elementos incompatibles tambien tienden a ser concentrado en
fundidos de corteza derivada de bajos grado de fusión parcial de rocas fuente que ella mismas
pueden haber sido dotadas de elementos litófilos. Estos conceptos son discutidos en mas detalles
en la sección 1.4 a continuación.

Una característica bien conocida de los depósitos de mena que son genéticamente asociados con
intrusiones de granitos es que el origen y composición del magma generalmente controla la
naturaleza del conjunto de metales en el depósito (Chappell y White, 1974; Ishihara, 1978, 1981).
Este control esta casi ciertamente relacionado en parte, a la dotación de metales heredados por el
magma del que las rocas fueron fundidas. Donde un magma félsico es derivado del fundido de un
protolito sedimentario o supracortical (llamados granitos tipo S), los depósitos de mena asociados
son caracterizados por concentraciones de metales como el Sn, W, U, y Th. Esta asociación es
metalogénicamente muy significativa y es discutida en mas detalle en la sección 1.3.4 debajo y de
nuevo en el Capítulo 2.

Magmas alcalinos y kimberlitas


Aunque la mayoría de las composiciones del magma pueden ser representadas por el espectro
basalto-andesita-riolita, algunos se desvían de esta tendencia y son composicionalmente inusuales.
Por ejemplo, los magmas que son empobrecidos en SiO2 pero altamente enriquecidos en elementos
alcalinos (NA, K, y Ca) son relativamente raro, pero pueden ser económicamente importantes
porque frecuentemente contienen concentraciones impresionantes de un amplio rango de metales
formadores de mena (como el Cu, Fe, P, Zr, Nb, REE, F, U y Th). Además, las kimberlitas y tipos de
magma relacionados (como lamproitas) son la principal fuente de diamantes.
El mas común de los magmas alcalinos máficos es la nefelinita, la cual cristaliza para dar un rango
de tipos de rocas (suite ijolite; Hall, 1996) comprimiendo minerales bastante inusuales, como los
feldespatoides, piroxenos cálcicos, y conjuntos de carbonatos. Las lavas nefeliníticas son observadas
en configuraciones oceánicas como en las islas Cape Verde y Hawaianas, pero son mejor vistas en
configuraciones volcánicas jóvenes (Paleoceno al reciente) como los del valle de Rift del Este
Africano, Europa central y sureste de Australia.

Los complejos ígneos alcalinos antiguos son raros, uno de los mejores preservados siendo de 2050
Ma de edad es el Complejo Phalaborwa en Sudáfrica, que es minado para cobre y fosfatos asi como
una gran cantidad de productos secundarios.

Las nefelinitas, así como los asociados, pero raro, los fundidos carbonaticos (ej. magmas
comprimiendo esencialmente CaCO3 y menor Na2CO3), son indudablemente derivados de tipos de
magma primarios del manto por muy bajos grados de fusión parcial bajo condiciones alta Ptotal y
PCO2 (Hall, 1996). La relación entre magmas nefeliníticos y carbonaticos es generalmente atribuida
a la inmiscibilidad de líquidos, mediante el cual un magma silicatado rico en álcali original rico en un
componente carbonatado se exsuelve en dos fracciones líquidas, una silicatada y la otra
carbonatada (Ferguson y Currie, 1971; Le Bas, 1987). Bajos grados (2%) de fusión parcial de una
fuente Iherzolítica con granate en el manto van a rendir típicamente composiciones olivino
nefeliníticas y estos magmas asociados con volcanismo basáltico (Le Bas, 1987). El magma
nefelinítico asociado con carbonatitas, por otra parte, es solo considerado posible si la fuente del
material también contiene una fase carbonatada (como dolomita) y una soda-anfibolita. Este tipo
de roca fuente del manto es probable a ser el resultado de un gran metasomatismo, un proceso que
involucra ingreso de fluidos y enriquecimiento de volátiles y otros elementos compatibles. La fusión
de una roca fuente del manto fértil es probablemente la principal razón de porque los magmas
alcalinos son tan enriquecidos en una variedad de constituyentes de menas mencionadas a
continuación. La extensión del enriquecimiento relativo de metales en un basalto promedio es
ilustrada en la Figura 1.6.

Los magmas kimberlíticos y magmas ultramáficos relacionados cristalizan para formar rocas muy
raras e inusuales, con contenido entre otros minerales tanto mica y olivino. Las kimberlitas son ricas
en potasio (K2O típicamente 1—3 wt%)y, aunque derivado de muy profundo en el manto, son
también hidratados y carbonatados. Estos usualmente ocurren en pequeños cuerpos (<1km
diámetro) como tuberías (pipes), o diques y silos, y comúnmente extruidos en erupciones altamente
explosivas, cargadas de gas. El origen localizado en profundidad de las kimberlitas es evidente del
hecho que estas comúnmente transportan xenolitos Iherzoliticos con granate y eclogitas a la
superficie, tipos de rocas hechas de conjuntos minerales de muy altas presiones que solo pueden
venir del manto. Además, una pequeña proporción de las kimberlitas también contienen
xenocristales de diamantes. El diamante es un polimorfo estable de carbón bajo condiciones muy
reductores, y en profundidades que exceden cerca de 100 km y temperaturas mayores a 900°C
(Haggerty, 1999).

El origen de los magmas kimberlíticos no es demasiado diferente del de las rocas alcalinas descritas
anteriormente, y la fusión parcial a altas presiones de una roca fuente peridotita con granate con
contenido adicional de flogopita o anfíbol-K (richterita), así como una fase carbonatada, es visto
como un escenario probable (Hall, 1996). El enriquecimiento de constituyentes incompatibles
(como el K, Rb, H2O y CO2) en kimberlitas, como con magmas alcalinos en general, de nuevo indica
que el metasomatismo del manto ha jugado un papel importante en la provisión de un ambiente
localizado profundamente capaz de producir magmas altamente enriquecidos, o fértiles. Estos
aspectos son discutidos en más detalles en la sección 1.3 a continuación.

1.3 ¿Porque algunos magmas son más fértiles que otros? El “factor de
herencia”
La herencia geoquímica es claramente un factor importante en entender la naturaleza de procesos
formadores de mena en rocas ígneas. El magma puede heredar un excedente de elementos traza
potenciales para formación de menas porque la fuente del material del cual fue derivado fue
enriquecida asimismo en estos componentes. Promover la concentración de elementos traza
incompatibles dentro de un magma residual, o de elementos traza dentro de fases cristalizando,
tomará lugar durante el enfriamiento y solidificación del magma, y estos procesos son discutidos en
mas detalle en la sección 1.4 debajo.

Una pregunta pertinente que relaciona el problema de la herencia geoquímica es porque ciertas
porciones de la corteza de la Tierra parecen ser mucho mas dotadas en depósitos minerales que
otros. Las concentraciones espectaculares de, por ejemplo, de depósitos de oro y platino en
Sudáfrica, relacionados a la Cuenca WItwatersrand y al Complejo Bushveld respectivamente, quizás
apuntan a alguna forma (¿relacionada al manto?) de enriquecimiento de estos metales que es
especifico de esta región y no de otras partes del globo. ¿Porque es que Sudbury es tan rico en Ni y
los Andes es tan bien dotado con grandes depósitos de Cu, y hay alguna explicación para la
tendencia de kimberlitas diamantíferas que solo ocurren en áreas cratónicas antiguas? Estas
preguntas son dirigidas a continuación en relación con algunas ideas bastante innovadores
sugiriendo que los metales pueden haber sido preferencialmente concentrado en ciertas partes del
manto y después subsecuentemente trasferidos dentro de la corteza a través de una variedad de
agentes mineralizantes.

1.3.1 La hipótesis “late veneer” de concentración de metales siderófilos-- ¿Un origen


extraterrestre para el Au y Pt?
En las etapas muy tempranas de evolución de la Tierra, prevaleciendo la teoría que sugiere que
originalmente homogénea, un planeta fundido diferenciado ente un núcleo metálico,
comprimiendo esencialmente Fe y FeO con menos Ni, y un manto el cual tuvo una composición
silicatada. Como esta diferenciación toma lugar en metales siderófilos (ej. Los que tiene afinidad
fuerte por Fe como el Au y los elementos del grupo del platino o PGE) fueron ampliamente
fraccionados dentro del núcleo. Experimento por Holzheid et al. (2000) indican que la concentración
promedio de elementos como el Au, Pt y Pd en el manto de la Tierra debía ser al menos 10.4 veces
menor al promedio de abundancias condríticas. Estas concentraciones son, de hecho, tan bajas que
virtualmente impiden la posibilidad de formar depósitos de mena en rocas extraídas del manto (ej.
La corteza). Aun la actual concentración de estos metales preciosos en el manto, aunque
empobrecidas, son solo cerca de 150 veces menor al promedio de abundancias condríticas. Este
empobrecimiento pudo ser acomodado por el hecho de que ha habido numerosos depósitos de
mena formados en el tiempo geológico que han sido extraídos estos metales del manto. Otra
explicación es que la eficiencia con la cual los metales siderófilos son fraccionados entre metales del
núcleo y manto silicatado disminuye con el incremento de la presión (profundidad) y que esto podría
explicar porque el manto no esta empobrecido como la teoría predice.

Aunque una última noción probablemente aplica al níquel, los experimentos recientes sugieren que
no es aplicable a los metales preciosos y que alguna otra explicación debe ser buscada para las
concentraciones mas altas que las esperadas de lo último en el manto.

Una prueba de porque el manto puede ser relativamente enriquecido en metales siderófilos cae en
el hecho de que sus tasas de abundancia (ej. La abundancia e un elemento relativo a otro, como el
Au/Pt o Pt/Pd) son generalmente similares a las tasas de abundancia condrítica determinados de
análisis de meteoritos que han caído en la Tierra. La única forma de explicar esto es teniendo una
proporción sustancial de metales preciosos en el manto derivados de meteoritos que impactaron
en la proto-corteza durante las etapas tempranas de evolución de la tierra, pero después la
diferenciación conocida como hipótesis“late veneer” (Kimura et al., 1974), sugiere que mucho, sino
todo del Au y el Pt que es minado de depósitos de mena sobre la superficie de la Tierra hoy
básicamente tuvo un origen extraterrestre y que el propio inventario del planeta de estos metales
esta presentemente encerrado en el núcleo. Desde el flujos de meteoritos mismo y la subsecuente
distribución del material a través del manto probablemente han sido irregulares, esta hipótesis
también es consistente con la distribución heterogénea de metales precisos sobre la superficie de
la Tierra

Como piedenota es intrigante notar que los metales precisos pueden no ser los únicos commodities
con valor introducidos a la Tierra por meteoritos. Los enigmáticos diamantes “carbonado”
encontrados en metasedimentitas de 1500 Ma de edad de Bahia State en Brazil y en la Republica
Africana Central tienen características mineralógicas e isotópicas diferentes a cualquier diamante
de origen terrestre. Haggerty (1999) ha sugerido que los diamantes carbonados son derivados del
ultimo recurso de un asteroide fragmentado de tipo carbón que impactó en la corteza terrestre a
un tiempo cuando las partes relevantes de Brazil y Africa formaban un solo continente. Aunque
polémica, la noción de un origen extraterrestre para ciertos constituyentes de la superficie de la
tierra (¿y la vida misma?) es una que es probable que atraiga la atención en el futuro.

1.3.2 Diamantes y la historia que nos cuentan


El manto de la Tierra, entre 35 a 2500 km de profundidad, está la última fuente de material que,
sobre el tiempo geológicos, ha contribuido, o directamente por reciclamiento, a la formación de
corteza. Considerando que el manto es esencialmente inaccesible a él, sin embargo, ha sido tema
de numerosos estudios para geólogos y geofísicos y su estructura y composición son ahora
razonablemente bien conocidas. Una razón para estudiar el manto es para entender el origen del
diamante. Este remarcable mineral, junto con los magmas que lo traen a superficie, ha
proporcionado un gran acuerdo de información acerca de la Tierra profunda, muchos de los cuales
son muy relevantes para entender sus propiedades del manto que también relacionan la fuente de
metales en otros depósitos de mena ígneos.

La mayoría de los diamantes son traídos a la superficie de la Tierra por magmas kimberlíticos (ver
sección 1.2) o un fundido composicionalmente similar conocidos como lamproita. La mayoría de las
kimberlitas y lamproitas son estériles, y los magmas diamantíferos solo intruyen en corteza
continental estable, antigua que es típicamente de edades mayores a 2500 Ma, pero a veces más
jóvenes que 1500 Ma. Los magmas kimberlíticos que transportan diamantes a la superficie, sin
embargo, son típicamente mucho menores que las rocas que intruyen, formados en episodios
distintos en las eras Mesozoico y Cenozoico. Los episodios intrusivos más antiguos también han sido
observados en el Devónico, tanto alrededor de 500 Ma y de nuevo a 1000 Ma (Haggerty, 1999). Las
kimberlitas diamantíferas deben también haber sido emplazadas durante el Arcaico, desde los
conglomerados Witwatersrand en Sudáfrica, por ejemplo, son conocidos que contienen diamantes
verdes detríticas. Para complicar mas la historia, los diamantes mismo tienden a ser mucho mas
antiguos que sus rocas kimberlíticas hospedantes y con un rango de edad desde 1500 a 3000 Ma,
indicando que ellos han residido en el manto por periodos considerables de tiempo antes de su
erupción hacia la superficie de la Tierra. Los diamantes, por lo tanto, no cristalizan de la kimberlitas,
pero fueron introducidos a la superficie de la Tierra como xenocristales dentro del magma
(Richardson et al., 1984). Los xenocristales de Diamante ocurren tanto como cristales solo en una
matriz kimberlítica o como minerales dentro de distinto xenolitos de ya sean peridotitas (Diamantes
tipo P – los mas comunes) o eclogitas (diamantes tipo E). La fase de alta presión relaciona que
caracteriza los conjuntos minerales en estos xenolitos del manto indica que los diamantes son
derivados de zonas de litósfera sub-cratónica, engrosada al menos de 200 km de espesor, que se
extiende bajo áreas de escudo estables del Arqueano-Proterozoico (Figura 1.8). Estos colapsos
litosféricos comprimen peridotitas antiguas, empobrecidas (ej. de los cuales el fundido del manto
ya ha sido extraído) tanto como eclogitas primitivas, más jóvenes, que generalmente no tienen una
fracción del fundido extraído y es, por lo tanto, mas fértil con respecto a elementos formadores de
corteza (Haggerty, 1999).

Ahora es generalmente aceptado que los diamantes son generados de profundidades en el manto,
en la capa conocida con la Zona de Transición entre al manto inferior y superior a alrededor de 400
a 650 km de profundidad. Porque el manto superior es relativamente pobre en carbono (100 ppm
comparado con los 1000-3700 ppm en el manto inferior; Wood et al., 1996) esto es poco probables
para ser una fuente viable para carbono primordial del que están hecho los diamantes. El manto
inferior mas fértil es mas probable que sea la fuente del carbono, y esto es apoyado por la presencia
de minerales de altas presiones ocurriendo como pequeñas inclusiones en muchos diamantes. Sin
embargo, el manto superior es mas reducido que el manto inferior, el cual, además de sus altos
contenidos de carbono, también contiene sustancialmente más agua (500-1900 ppm comparados
con los 200 ppm en el manto superior). El manto superior es, por lo tanto, mas probables a preservar
los diamantes porque la estabilidad del mineral depende de la existencia de un ambiente reductor.
El carbono en el manto inferior relativamente oxidado rico en fluidos debería, a pesar de sus altas
presiones, no ocurren como diamantes del todo, coo CO2, CCO o MgCO3 (Wood et al., 1996). El
modelo de formación de diamantes (Figura 1.8), por lo tanto, sugiere que plumas transfieren
fundido y volátiles del manto inferior, y precipita diamante a niveles mas altos ya sea en ambientes
reducidos representados por la Zona de Transición o en las quillas (keels) extendiéndose bajo
litosfera cratónica gruesa. Así, los diamantes tipo P más comunes se forman cuando los fluidos
carbónicos relativamente oxidados disueltos en plumas ascendentes interactúan con el manto
reducido a niveles mas altos y precipita el carbono elemental. Este proceso de transferencia de masa
es referido como metasomatismo e involucra el movimiento de fluidos y volátiles del manto
profundo de la Tierra a niveles mas altos. Este proceso es se vuelve muy relevante para los
conceptos de fertilización del manto y herencia geoquímica. Los diamantes mas raros los tipo E, por
el contrario, son considerados que han cristalizado directamente de un magma intruido dentro o
estancado bajo las quillas (Haggerty, 1999).

La formación de magmas kimberlíticos que transportan diamantes a la superficie de la Tierra han


sido atribuidos a actividad de pluma y la transferencia metasomática de volátiles constituyente de
un manto inferior fértil dentro de un manto superior empobrecido. Evidencias para este proceso
viene de la observación que muchos de los mayores episodios de intrusiones de kimberlitas
mencionadas anteriormente correlacionan con eventos “supercrónicos” que son definidos como
periodos geológicamente largos de tiempo de polaridad unidireccional en el campo magnético de
la Tierra. Las Supercronas son causadas por interrupciones del limite núcleo-manto que
incrementan la tasa de convección de líquidos del núcleo, causando una amortiguación de la
intensidad del campo geomagnético, pero promoviendo la actividad de la pluma y metasomatismo
del manto. La intrusión de kimberlitas diamantíferas han sido enlazadas en tiempo a eventos
geológicos mayores, como la separación de continentes y magmatismo de flood basálticos
(Haggerty, 1994). England y Houseman (1984) sugieren que el aumento en intrusiones kimberlíticas
puede ser relacionado a periodos de baja velocidad de placas cuando la convención ininterrumpida
del manto da lugar a fusión parcial y producción de volátiles en la litósfera, y subsecuentemente la
formación de actividad de pluma. Acompañando el levantamiento epirogénico las fracturas creadas
que permiten que el magma kimberlítico intruya rápidamente hacia arriba y, en muchos casos, a
extruir violentamente dentro de la superficie de la Tierra. Esta explicación es ciertamente
consistente con la configuración geodinámica de kimberlitas, tal como su predominancia en África
durante el Mesozoico aun manteniéndose (ver capítulos 6). La rareza relativa de la formación de
kimberlitas y penetración a la superficie es también consistente con este modelo, desde que la
formación del magma requiere que un numero de condición casualmente optimas apliquen.

1.3.3 Concentraciones de metales en mantos metasomatizados y su transferencia


dentro la corteza
Aunque ha sido evidente por muchos años que hay una asociación entre el metasomatismo del
manto y la formación de diamantes, un enlace a la fertilización del manto con respecto a otros
constituyentes como los metales base y preciosos, solo ha sido sugerida recientemente. Una
comparación de tasas isotópicas Re-Os de menas hidrotermales de Cu-Au de la gran mina Ladolam
o la Isla Lihir, cerca a Papua Nueva Guinea, con xenolitos de peridotitas transportadas a la superficie
del océano por actividad volcánica de la cuña infrayaciente del manto, muestra que los
constituyentes del manto. Aunque esto no es inesperado, estudios mas cercanos de material
peridotitícos involucrados revelan que algunos de sus materiales han sido ampliamente
metasomatizados para formar un conjunto de minerales hidrotermales de alta temperatura
compuesto de olivino, piroxeno, flogopita, magnetita, y sulfuros de Fe-Ni (McInnes et al., 1999). El
metasomatismo es considerado a ser el resultado de deshidratación de la lámina oceánica cuando
se mueve bajo la zona de subducción, rindiendo fluidos que migran hacia arriba dentro de la cuña
del manto suprayaciente. Las peridotitas metasomatizadas contienen concentraciones de metales
base y precisos que son mas de dos veces en magnitud enriquecido relativo al manto inalterado
(Figura 1.9).
La subducción de corteza oceánica bajo un arco de isla, como que la Isla Lihir hace parte, ha
resultado en la formación de basaltos alcalinos que construyen el arco y finalmente forma las rocas
hospedantes a depósitos Cu-Au de Ladolam. El depósito por si mismo ocurre a altos niveles en la
corteza por la circulación de fluidos hidrotermales cargados en metales, un proceso que no es
relevante para presentar una discusión excepto por el hecho de que estos fluidos tienen disueltos
los constituyentes de mena que ellos llevan para formar rocas intermedias regionales (ej. basaltos
alcalinos. Una característica interesante del estudio de McInnes et al. (1999) es que las rocas
regionales basálticas y sieníticas para el depósito (referido a b y s en la figura 1.9) fueron analizados
bien lejos de la mineralización misma y también exhiben enriquecimientos significativos en
concentraciones de metales base y preciosos. La conclusión es, por lo tanto, que aunque los metales
de mena residieron originalmente en el manto, fueron redistribuidos, y sus concentraciones son
mejoradas, por los procesos metasomáticos de alta temperatura observados en peridotitas del
manto. Porque esta peridotita metasomatizada que es probable que ha sido preferencialmente
fundida bajo la zona de subducción (por virtud de su naturaleza hidratada y temperatura más baja
de solidus), el magma alcalino basáltico resultante va a heredar una dotación significante de
metales, así mejorando las posibilidades de crear un depósito de mena sustancial durante las etapas
(hidrotermales) subsecuentes de formación de mena. El estudio de Ladolam ilustra tres
caracteristicas importantes: el primero, que el metasomatismo y flujo de fluidos son procesos muy
importantes en la redistribución y concentración de elementos incompatibles en el manto; el
segundo, que la fusión parcial es el proceso principal por el cual la materia es transferida del manto
a la corteza; y tercero, que la herencia es fundamental para la naturaleza y formación de depósitos
de mena hospedados en rocas ígneas, como para la circulación subsecuente de fluidos es probable
para formar depósitos hidrotermales viables.
1.3.4 Magmas de granitos tipo I- y S- y especificidad de metales
Como lo mencionado previamente, los diferentes tipos de granitos, y más específicamente los
orígenes de magmas félsicos, puedan ser enlazados a asociaciones distintas de metales. De muchos
esquemas de clasificación que existen para rocas graníticos, uno de los mas relevantes, con respecto
a estudios de depósitos de mena, es el esquema de tipo I- y S-, originalmente ideada para Cinturón
Plegado Lachlan en el sureste de Australia (Figura 1.10 a) por Chappell y White (1974). En esta forma
simple el esquema implica que los granitos orogénicos pueden ser subdivididos en base de si sus
magmas parentales fueron derivados por fusión parcial de predominantemente rocas fuente ígneas
(tipos I) o sedimentarias (tipo S). En general, los granitos tipo I tienden a ser metaluminosos y
representados por composiciones tonalíticas (o cuarzo dioríticas) a granodioríticas, mientras que los
granitos tipo S son a veces peraluminosos y tienen composiciones adamelíticas (o cuarzo-
monzonítica) a graníticas. Tambien muy importantes desde un punto de vista metalogénico es el
hecho que los granitos tipo I tienden a ser mas oxidados (ej. tienen una fO2(fugacidad) magmática
mas alto) que los granitos tipo S, cuyos magmas fueron originalmente más o menos reducidos por
la presencia de grafito en sus rocas fuente. Un indicador aproximado del estado de oxidación de
magmas graníticos puede ser obtenido de su tasa de roca total Fe2O3/FeO (la cual registra
efectivamente la tasa ferríca/ferrosa). Blevin y Chappell (1992) han mostrado que una tasa
Fe2O3/FeO de cerca de 0.3 proporciona un discriminante útil entre granitos tipo I- (con Fe2O3/FeO
>0-3) y granitos tipo S (con Fe2O3/FeO <0.3), al menos para el caso australiano (Figura 1.10 b y c).
Una clasificación de granitos de acuerdo a su estado de oxidación fue, de hecho, realizada
relativamente temprano por Ishihara (1977), quien distinguió entre magmas granitícos reducidos
(formando granitoides series ilmenita) y sus equivalentes mas oxidados (formando granitoides
series magnetita). El significado metalogénico de este tipo de clasificación de granitos fue también
reconocida por Ishihara (1981), que indicó que depósitos de Sn-W fueron preferencialmente
asociados con granitoides series ilmenita, mientras que menas de Cu-Mo-Au debian ser enlazadas
genéticamente a granitoides oxidados serie magnetita. Los granitoides series magnetita son
equivalente a la mayoría de los tipos I, mientras que los granitoides series ilmenita agrupan todos
los tipos S y también las tipo I mas reducidos.
Aunque ahora se considera de alguna manera muy simplificada, al menos con respecto a ideas mas
recientes considerando la petrogénesis de granitos, el esquema de clasificación tipo S y tipo I es, sin
embargo, atractivo por sus implicaciones tectónicas y puede ser usado para inferir el
posicionamiento relativo de la subducción a lo largo de márgenes contiene tales de tipo andino (ver
figura 1.2). El esquema también tiene significado metalogénico por la observación empírica de
mineralización de pórfidos de Cu-Mo (con menas asociadas de Pb-Zn-Au-Ag) es típicamente
asociada con granitos tipo I, mientras que la mineralización Sn-W (junto con concentraciones de U
y Th) es generalmente mas hospedada por granitos tipo S. Aunque esta relación es ampliamente
aplicable, también, es muy simplificada. Algunos granitos, notablemente los que son post-tectónicos
o anorogénicos, no concuerdan con el esquema, como los granitos alcalinos del Complejo Bushveld,
los cuales son polimetálicos y contienen mineralizaciones tanto de Sn-W y metales base (Robb et
al., 2000). Una estimación mas precisa de la relación entre la composición del magma (incluyendo
su estado de oxidación) y asociación metalogénica es dada por Barton (1996). La Figura 1.11 muestra
el esquema de Barton, el cual considera los granitos como un tipo composicional continuo y su
asociación de metales en términos de intrusiones diferentes relacionada a tipos de depósitos de
mena.
Adyacente a zonas de subducción de tipo Andina un patrón espacial claramente definido existe con
respecto a la distribución de intrusiones de granitos tipo I y tipo S, también su zonación
metalogénica asociada (Sillitoe, 1976; Clark et al.,1990). El borde delantero (ej. el lado oceánico) de
las zonas de subducción tiende a correlacionarse con la producción de magmas de granitos tipo I y
están asociados con la formación de estilo de mineralización de pórfidos de Cu. Al contrario, el lado
continental de la zona de subducción contiene granitos de tipos mas diferenciados que a veces son
tipo S en carácter y con estilos de mineralización Sn-W asociados. Otros ejemplos de este tipo de
zonación regional son vistos en granitos Cordilleranos del oeste de los Estados unidos y el cinturón
plegado del sureste de Australia, donde los granitos tipo I y tipo S fueron originalmente definidos
(Figura 1.10 a). De nuevo, aunque excepciones y complicaciones pueden existir, el reconocimiento
y delineamiento de estos patrones es claramente importante con respecto a entender la
distribución espacial de los diferentes tipos de depósitos hospedados en rocas ígneas.

El cinturón plegado Lachlan proporciona un excelente ejemplo de la relación entre el tipo de magma
y asociación metalogénica y, como se predijo, los granitos relacionados a mineralizaciones
dominadas por Sn-W en principalmente granitos tipo S hacia el Oeste de la línea I-S, mientras que
grandes menas de Mo y menores de Cu son encontradas en terrenos de granitos tipo I hacia su este
(Figura 1. 10 a) Otra característica muy importante de contenido de metal de granitos es, sin
embargo, también aparente en el cinturón plegado Lachan. Cuando la tasa Fe2O3/FeO (un indicador
de estado de oxidación del magma) para granito que son mineralizados en términos de cualquiera
de los dos Sn-W o Mo-Au (Figura 1.10 b y c) es claro que el contenido metalico no es una función
simple de solo el tipo de magma. Es aparente que intrusiones de Cu-Mo-Au relacionadas
típicamente tengan mayores tasas de Fe2O3/FeO que los asociados a mineralizaciones de Sn-W, y
son, por lo tanto, preferencialmente asociados con granitos tipo I. Que es quizás mas claramente
aparente, sin embargo, es que la mineralización de Sn y W es asociada con intrusiones que son
altamente mas fraccionadas que las que contienen Cu-Mo-Au (Blevin y Chappell, 1992). Los
contenidos de metales son, por lo tanto, también una función de los procesos que ocurren cuando
el magma se enfría y estos procesos son discutidos en más detalle en la sección 1.4 a continuación.
De hecho, la mineralización en granitos también involucra procesos hidrotermales que son muy
distintos ya sea por herencia geoquímica o fraccionación, y estos son examinados en el Capítulo 2.

1.4 Fusión parcial y cristalización fraccionadas como procesos formadores de mena


La sección anterior discutió varios procesos formadores de magma y algunas de las razones porque
son dotados variablemente con respecto a sus elementos traza y contenidos minerales. Esta sección
examina como los elementos traza y minerales se comportan en el magma, tanto cuando se están
formando y después subsecuentemente durante el enfriamiento y solidificación. La abundancia de
elementos traza puede ser muy buen indicador de procesos petrogenética, durante fusión parcial y
cristalización fraccionada. Desde muchos depósitos de mena magmáticos que resultan de
concentraciones de metales que fueron originalmente presente en muy pequeñas abundancias, el
comportamiento de los elementos traza durante procesos ígneos es también muy útil en entender
la formación de mena.

Un elemento traza es definido como un elemento que esta presente en una roca a concentraciones
menores que 0.1 wt% (0 1000ppm), aunque este limita lugares a restricciones bastante artificiales
en definiciones. En general los elementos traza sustituyen a los elementos mayores en minerales
formadores de roca, pero en ciertos casos pueden y formar componentes estequiométricos de fases
de elementos accesorios (Rollinson, 1993). Muchas de las menas asociadas con rocas ígneas son
formados de elementos (Cu, Ni, Cr, Ti, P, Sn, W, U, etc.) que existieron originalmente a
concentraciones traza en un magma o roca y fueron subsecuentemente enriquecidos a tenores de
mena por procesos discutidos en esta y la última sección.

Cuando la roca sufre fusión parcial la partición de elemento traza a si mismos entre una fase fundida
y un residuo sólido. Aquellos que prefieren el sólido son referidos como compatibles (ej. los que
tienen afinidad con elementos de la red cristalina de un mineral existente), mientras que los que
prefieren el fundido son llamados incompatibles. De la misma manera, durante el enfriamiento y
solidificación del magma, los elementos compatibles son preferencialmente tomados en los
cristales, mientras que los elementos incompatibles son enriquecidos en el fundido residual. El
enriquecimiento de elementos traza y potencial formación de mena pueden, por lo tanto, ser
enlazados con la concentración de elementos incompatibles en la fase temprana de la fase fundida
de una roca sufriendo anatexis (ver Box 1.2), o el magma residual durante el proceso de
cristalización (ver Box 1.3). Los elementos traza compatibles tienden ser “encerrados” en minerales
formadores de rocas tempranos y no son típicamente concentrados efectivamente lo suficiente
para formar un tenor de mena viable de material. Una excepción de esto es proporcionada, por
ejemplo, durante la formación de capas de cromitita, como se discute en la sección 1.4.3 debajo.

Una descripción breve de como uno puede cuantificar la distribución de elementos traza durante
procesos ígneos es presentada a continuación, con un indicador de como estos procesos pueden ser
aplicados para entender la selección de procesos formadores de mena.

1.4.1 Las condiciones del fundido.


A pesar del hecho que las altas temperaturas en el manto superior cada 1500 °C y más. La fusión (o
anatexis) no es tan extensa como se podría esperar por la correlación positiva que existe entre la
presión y el comienzo de la fusión de una roca (ej. temperatura solidus). La astenosfera, que es
definida como la zona en el manto donde las rocas están más próximas a sus solidus y donde la
deformación ocurre en una manera dúctil (la cual explica las fuerza menor de la astenosfera relativa
a la litósfera elásticamente deformable), es la “sala de máquinas” donde una cantidad considerable
de magma es formada. Los mayores episodios de generación de magma, sin embargo, no ocurren
aleatoriamente y sin causa, pero son catalizados por procesos como la disminución de la presión
(causado, por ejemplo, por adelgazamiento cortical en un régimen extensional como en una dorsal
medio oceánica) o por adicion de volátiles a temperaturas mas bajas que el solidus (como durante
la subducción y metasomatismo). Un incremento en el suplemento local de calor no es
generalmente importante en la promoción de fusión parcial, aunque es posible que plumas del
manto estén implicadas en este papel.

La fusión parcial, llamada asi porque las rocas fuente son muy raramente fundidas por completo,
dejando siempre un residuo solida debajo. Este es un proceso complejo que es afectado por un
numero de variables, la mas importante siendo la naturaleza del conjunto mineral del que esta
hecho el protolito, tanto como presión local, temperatura y contenido de agua/volátiles. Un trabajo
experimental temprano sobre la fusión progresiva de peridotitas con el aumento en la temperatura
(Mysen y Kushiro, 1976) ayudan a explicar el proceso de fusión parcial en la astenosfera, a pesar de
que la descripción resumida debajo no es probable que sea un buen indicador particularmente de
procesos muy complicados actualmente involucrado.

En la Figura 1.12 la fusión de peridotitas comienza justo encima de 1400°C con la formación de una
pequeña fracción del fundido en equilibrio con piroxenos y olivinos. La fusión puede continuar con
adición significativa de calor entre 30 y 40 % de la roca es fundida y el clinopiroxeno es totalmente
consumido. Una vez el clinopiroxeno desaparece, mas adelante la fusión puede solo continuar con
adición de calor (primer punto de inflexión en las curvas en las Figuras 1.12), el cual, si está presente,
debería entonces promover la fusión de ortopiroxenos. Una vez el ortopiroxeno ha sido consumido,
despues algo del 50-60% de la roca se ha fundido, una ioposterior entrada de calor es requerido (el
segundo punto de inflexión) si el olivino esta para completamente incluido dentro del producto
fundido. Un pequeño grado de fusión parcial de peridotitas va, sin embargo, a rendir un magma de
composición que es dominada por el producto del fundido de clinopiroxeno (un basalto alcalino),
con un residuo reflejando la composición mayoritaria de ortopiroxeno + olivino. En realidad, los
procesos de fusión son mas complejos y usualmente involucran la fusión de mas de un solo mineral
al mismo tiempo. Es también pertinente notar que la presencia de incluso una pequeña cantidad de
agua en el sistema va a catalizar la extensión de la fusión y también permite que ocurra la anatexis
a bajas temperaturas.
La anatexis en la corteza es mejor explicada considerando la fusión parcial de un protolito
metasedimentario, para formar, por ejemplo, un granito tipo S. Si el sedimento consintió solo de
cuarzo entonces la temperatura debió haber excedido los 1170°C (la temperatura de fusión del SiO2
a PH2O=1 kbar) con el fin de empezar la fusión. Si el sedimento fuera una arcosa, sin embargo, hecha
de un conjunto recristalizado de cuarzo+ortoclasa+albita (como el mostrado en la figura 1.13),
entonces la fusión debería comenzar a temperaturas mucho más bajas por el decaimiento de los
puntos de fusión que ocurren para mezclas eutéctica ternarias. Así, cuando el cuarzo + albita están
en contacto, la fusión debería comenzar a temperaturas cercanas a 790°C y, cuando el cuarzo +
albita + ortoclasa se juntan en una intersección triple a fusión debería comenzar a menos de 720°C.
La disgregación de un protolito de arcosa podría, por lo tanto, toma lugar por pequeños incrementos
de fusión parcial formando a lo largo de bordes de granos seleccionados dentro de la roca. El residuo
dejado debajo durante este proceso es posible que sea hecho de minerales fragmentados que no
pueden ser fundidos sobre ellos mismo a la temperatura dada. El fundido y residuo son también
probable que tengan diferentes composiciones.
La extracción de un fundido parcial de su residuo, aunque este formado de un protolito ígneo y
sedimentario, es un proceso que segrega componentes químicos y es referido como fraccionación.
Los fundidos parciales pueden ser considerados enriquecidos en ciertos elementos, pero
empobrecido en otros, relativos a la roca fuente. Los mecanismos a través de los cuales el fundido
es removido de su residuo pueden diferir, y esto es discutido en más detalle debajo. Descripciones
cuantitativas mas detalladas de modelos de fusión parcial son proporcionadas en Cox et al. (1979),
Rollinson (1993), y Albarede (1996).

Distribución de elementos traza durante la fusión parcial


En teoría hay dos extremos limitantes por los cuales la fusión parcial puede ocurrir. El primero prevé
la formación de un incremento de un solo fundido que permanece en equilibrio con su residuo
solido hasta la remoción física y emplazamiento como un magma. Este proceso puede ser aplicado
a la formació de fundidos de alta viscodiad graníticos (Rollinson, 1993) y es conocido como “fusión
de lotes” (batch melting). Es cuantificada por la siguiente ecuación, cuya derivación (junto con otras
discutidas a continuación) es proporcionada en Wood y Fraser (1976):

Donde: Cliq es la concentración de un elemento traza en el liquido (fundido); Co es la


concentración de elemento traza en el solido parental (sin fundir); D res es el coeficiente de
partición mayoritario del solido residual (después de que el fundido es extraído); F es el
peso de la fracción de fundido producido. Un diagrama ilustrativo de la extensión del
enriquecimiento (o empobrecimiento) de un elemento incompatible (o compatible) es un
lote de fundido parcial es presentado en la Figura 1.14 a, donde la tasa Cliq/Co es graficada
como una función del grado de fundido producido (F) para una variedad de valores de Dres.
Los enriquecimientos marcados de elementos altamente incompatibles (ej. los de valores
muy bajos de Dres) puede ocurrir en pequeñas fracciones de fundido, con un factor de
enriquecimiento máximo siendo 1/Dres cuando F se aproxima a 0.
El segundo proceso de fusión parcial es referido como “fusión fraccional” y es el proceso por el cual
pequeños incrementos del fundido son instantáneamente removidos de su residuo sólido,
agregándolos en cualquier parte para formar un cuerpo de magma. Este proceso puede ser mas
aplicable a magmas basálticos de baja viscosidad donde pequeñas fracciones de fundido pueden ser
removidas de sus regiones fuente. La distribución de elementos traza durante la fusión fraccional es
cuantificada en términos de la siguiente ecuación:

donde: Do es el coeficiente de partición mayoritario del solid

o original (previo a la fusión); y los otros símbolos son los mismos de la ecuación [1.1].

La extensión del enriquecimiento de elementos traza y empobrecimiento en una fusión parcial


fraccional es mostrada en la Figura 1.14 b. Para grados muy bajos de fusión los cambios en las
concentraciones de elementos traza relativa al material fuente son extremos y varían desde un valor
máximo de enriquecimiento (1/Do cuando F se aproxima a 0) a disminuciones en el magma como
proceso de fusión. Diferente a la situación del lote de fusión, el enriquecimiento de elementos
compatibles puede también ocurrir durante la fusión fraccional, pero esta solo es probable que pase
en eventos de más 70% de fusión parcial. Un ejemplo de concentración de elemento incompatibles
en un fundido parcial granítico es proporcionado en el Box 1.2

1.4.2 Cristalización de magmas


La secuencia de fundido para una peridotita descrita en la Figura 1.12 puede ser usada al revés para
ilustrar la cristalización de un magma que se enfría (teniendo en cuenta que en realidad el magma
derivado de completa fusión de un protolito peridotítico de alrededor de 1800°C es improbable que
haya existido).

La secuencia de cristalización de un magma máfico es, por supuesto, es otra manera de


fraccionamiento de componentes químicos, porque minerales de una composición son a veces
físicamente separados de un magma composicionalmente diferente del cual se formaron. Una vez
los minerales son removidos del magma (por un proceso como establecimiento de cristales) hay
poca o ninguna comunicación (o equilibración) química entre componentes sólidos y líquidos de la
camara. Este proceso es referido como cristalización fraccionada o fraccionación Rayleigh. La
naturaleza de la cristalización fraccionada, y la geometría de rocas acumuladas que se forman
durante estos procesos, son ambas relevantes para entender los depósitos de mena hospedados en
rocas ígneas. Es, por lo tanto, necesario considerar estos procesos en más detalle y, en particular,
su relación a la concentración de metales y formación de mena. Esta debe ser también enfatizada a
la etapa de emplazamiento y cristalización del magma, acompañada de variaciones de los grados de
asimilación de la roca local por el magma. Consecuentemente, las tendencias químicas reflejan que
los procesos de fraccionamiento están acompañados por los efectos de la contaminación del magma
y estos, también, tienen importantes implicaciones para los procesos de formación de mena (ver
secciones 1.4.3 y 1.6).

La forma y zonación interna de cuerpos ígneos


Los mecanismos de emplazamiento del magma dentro de la corteza de la Tierra y formas resultantes
de las intrusiones ígneas son un tema complejo y es revisado en Hall (1996), Pitcher (1997), y Best
(2003). Las intrusiones basálticas son típicamente muy diferentes en figura y forma a los batolitos
graníticos. Además, los mecanismos de cristalización fraccionada dentro de una camara magmática
máfica son también diferentes a los aplicables dentro de intrusiones de granitos. Estas diferencias
son relevantes para la formación de mena en magmas cristalizando, como la naturaleza estratiforme
ejemplificada en capas de cromitita en intrusiones máficas como el Complejo Bushveld (ver Box 1.4)

Intrusiones máficas La viscosidad de un magma basáltico es relativamente baja, como es


ilustrado por la facilidad con que los magmas basálticos fluyen en erupción. Las densidades de los
minerales máficos son típicamente mayores que 3 g/cm3, mientras que los magmas máficos tienen
una densidad alrededor de 2.6 g/cm3. La baja viscosidad de un magma máfico y las altas densidades
de los minerales cristalizando implica que los minerales como el olivino y piroxenos van típicamente
a hundirse en un magma a velocidades entre 40 y 1000m/año en cualquier parte dependiendo de
su composición y tamaños (Hall, 1996). Al contrario, los minerales menos densos, como los
feldespatoides, pueden flotar en un magma alcalino ya que tienen densidades menores a 2.5 g/cm3.
La plagioclasa puede flotar en un magma basáltico a presiones mayores a mas o menos 5 kbar, pero
pueden hundirse en el mismo magma emplazado a niveles mas altos de la corteza (Kushiro, 1980).
La secuencia de rocas en capas que resulta de una cristalización inducida gravitatoriamente es
referida como acumulados y sus composiciones difieren de las del magma inicial. La cristalización
es, por lo tanto, una forma de cristalización fraccionada y este proceso podría explicar la segregación
de constituyentes químicos y sus posibles concentraciones dentro ya sea de fases líquidas o solidas
de la cámara. Los elementos traza que son inmediatamente incorporado (por sustitución) dentro de
cúmulos minerales son referidos como elementos compatibles. Por el contrario, los elementos traza
que son excluidos del conjunto de cúmulos (porque no puede ser fácilmente sustituidos dentro de
los sitios de la red cristalina de minerales mayores formadores de roca) son llamados elementos
incompatibles y estos van, naturalmente, a volverse progresivamente mas enriquecidos en un
magma residual cuanto los conjuntos de cúmulos se formen.

La cristalización gravitatoriamente inducida de minerales en intrusiones máficas parecería ser la


forma más lógica de explicar la estructura interna de capas bien definida observada en estos
cuerpos. Los primeros modelos para explicar la cristalización y estratificación en intrusiones máficas
fueron derivados del trabajo clásico de Wager y Brown 1968) sobre la intrusión Skaergaard de
Groenlandia. El ultimo es particularmente bien situado para estudios petrogenéticos porque es
considerado que representa un solo pulso de magma que cristalizó por completo en una camara
cerrada sin adición sustancial o remoción de magma durante la solidificación. Las capas
subhorizontales que se forman en intrusiones máficas se presentan de la acumulación inicial de
minerales tempranamente formados (como los olivinos y ortopiroxenos), seguido, en un sentido
estratigráfico, por acumulaciones de minerales formados después como piroxenos y plagioclasa. Los
minerales de oxidos menor como la cromita y magnetita son también observado como
acumulaciones entre fases mayores de minerales silicatados. La intrusión Skaergaard esta hecha de
una fase marginal fría y una zona interna relativamente simple hecha de capas rítmicas y cripticas
(ej. donde la estratificación no es visualmente obvia per es reflejada solo en variaciones químicas),
con un rango en composiciones hacia arriba que va desde gabbro a ferrodiorita y granfido (Figura
1.15).

Aunque, se intenta a atribuir la estratificación relativamente ordenada, subhorizontal que es


característica de intrusiones como la de Skaergaard a cristalización gravitacionalmente inducida, la
solidificación de cámaras magmáticas, incluyendo la de Skaergaard es un proceso mucho mas
complejo (McBirney y Noyes, 1979). Los gradientes de temperatura y variaciones asociadas en la
densidad del magma que se forma en cuerpos magmáticos en enfriamiento han sido mostrados
como resultado en una estratificación marcada por la densidad, con la formación de capas líquidas
con elementos difusos en respuesta tanto a gradientes químicos y de temperatura (Huppert y
Sparks, 1980; Turner, 1980; Irvine et al., 1983; McBirney, 1985). Las variaciones de densidad en el
tiempo de una cámara magmática son también producto de la cristalización fraccionada misma. En
la Figura 1.16 a es aparente que durante las primeras etapas de cristalización de olivino la densidad
del magma residual disminuye por los componentes químicos extraídos por el olivino que tienen
mayores densidades que el liquido inicial. Los cambios de tendencia, sin embargo, con la aparición
del liquidus de un mineral como la plagioclasa, la cual tiene una densidad menor que la del magma.
En esta situación es posible, después de un Intervalo de cristalización, para un magma residual que
se vuelva más denso que cuando empezó a solidificarse.

Este patrón de variación de densidad tiene implicaciones mayores para el comportamiento de la


cristalización en una cámara magmática. En la figura 1.16 b dos situaciones son consideradas. Si el
nuevo magma tiene una densidad que es mayor a la del liquido residual en la cámara (puede ser el
caso de un magma nuevo que fue inyectado justamente después que la cristalización ha
comenzado), después una característica forma de fuente bastante tenue va a formar una mezcla
entre los líquidos nuevos y evolucionados que se van a limitar a una capa a lo largo de la base de la
cámara. Por el contrario, si el nuevo magma es inyectado tarde en la secuencia de cristalización, hay
una posibilidad de que su densidad sea menor a la del liquido residual y una característica forma de
pluma más impactante se puede formar (ver Figura 1.16b) y el nuevo magma podría ascender por
su propio nivel de densidad, o muy al tope de la cámara. En un ultimo escenario de mezcla
turbulenta entre líquidos residuales y nuevos es probable que sea completa. La inyección una pluma
tiene también una fuerte implicación en la formación de mineralizaciones tanto de cromita y PGE
(elementos del grupo del platino) en Bushveld (Kinnaird et al., 2002).

En un primer vistazo, las intrusiones máficas estratificadas como la de Skaergaard pueden parecer
ser producto de cristalización directa, inducida gravitatoriamente, de minerales que aparecen
secuencialmente en una secuencia creciente. En detalle, la naturaleza de las capas puede ser muy
compleja y lo normal, usualmente más grueso, conjuntos de cúmulos son probables a ser afectados
por procesos complejos involucrando tasas relativas de difusión química y termal. Además, las
corrientes convectivas en la cámara magmática, tanto corrientes turbidíticas en las que el flujo de
cargado de cristales del magma surge bajo un pendiente en los márgenes o fondo de la cámara,
agregando complejidades a la cristalización. Finalmente, la composición de los minerales
cristalizando a cualquier tiempo van a ser sensibles a perturbaciones en la química del magma y
cambios rápidos causado ya sea por inyección de un nuevo magma o contaminación del magma
existente por la roca pared. Los procesos resultantes en cristalización fraccionada, variaciones de
densidad y cambios en la composición del magma son todos fundamentales para la formación de
concentraciones de tenores mena de cromita, magnetita, elementos del grupo del platino, sulfuros
de metales base e incluso oro en complejos máficos estratificados. Como los procesos son mejor
entendidos, estas intrusiones están atrayendo más la atención de exploradores mundiales y aun
cuerpos bien estudiados como el Skaergaard, son ahora conocidos por ser mineralizados. Aunque
la presencia de minerales sulfuros en Skaergaard fue reconocida tempranamente (Wager et al.,
1957), el reconocimiento potencialmente significativo como recurso de Au y Pd solo vino mucho
después (Bird et al., 1991; Andersen et al., 1998). La interacción entre procesos magmáticos y el
papel que ellos juegan en la mineralización son discutidos en mas detalle debajo, y también
ilustrados en casos de estudio.

Intrusiones félsicas Las intrusiones de granitos no exhiben la estratificación subhorizonale bien


definida que representa las intrusiones máficas. Eso es debido ampliamente al hecho de que los
magmas félsicos son muy grandes en ordenes de magnitud, mas viscoso que los máficos (por
ejemplo arriba de 106 Pa s para una riolita comparada a los 102 Pa s para un basalto a la misma
temperatura; Hall, 1996). Además, el contraste de densidades que existe en cámaras magmáticas
máficas en cristalización no están marcada con respecto a la cristalización de cuarzo y feldespatos
formados en cámaras félsicas. La cristalización es intrascendente en todo pero en algunos plutones
graníticos, que son relativamente calientes, los granitos alcalinos hidratas cuyos magmas parentales
fueron emplazados a profundidades someras en la corteza. Es sin embargo evidente que el
fraccionamiento sustancial ocurre en intrusiones félsicas y hay muchos ejemplos registrados de
zonación interna en plutones graníticos (Pitcher,1997). La mayoría de los plutones registran una
zonación concéntrica, con zonas exteriores preservando las composiciones mas máficas (ej. diorita,
tonalita, granodiorita) y los tipos de rocas. se vuelven progresivamente mas fraccionadas hacia el
centro. Desde que muchos plutones graníticos intruyen a niveles someros de la corteza y la mayoría
de su calor es, por lo tanto, perdido hacia las paredes laterales, este tipo de zonación es lógicamente
atribuida a la cristalización que comenzó de los bordes y techo de la cámara magmática y
progresivamente hacia adentro. Aunque los cristales no están siendo removidos del magma por el
proceso de fijación aplicable en intrusiones máficas, estos son efectivamente aislado del manto
residual por el frente de cristalización el cual avanza hacia el centro de la cámara. Este proceso,
referido como diferenciación de limite de bordes de capa, puede también, por lo tanto, ser
considerado como una forma de concentración de cristalización fraccionada de elementos
incompatibles en el centro de la intrusión donde al final el incremento del fundido de granito
diferenciado se acumula.
Distribución de elementos trazas durante la cristalización fraccionada
Hay varias formas por cuales la cristalización puede ser modelada pero el mas apropiados debería
aparecer donde los cristales son removidos del sitio de formación con un equilibrio solo limitado
entre las fases líquida y sólida. En este caso la distribución de elementos traza puede ser descrita en
términos de fraccionamiento de Rayleih, el cual es:

Para concentraciones de elementos traza en magmas residuales (líquidos), y

Para concentraciones de elementos traza en conjuntos de cristalización (solido), donde: Co es la


concentración original del elemento traza en el líquido parental; D es el coeficiente de partición
mayoritario del conjunto de fraccionamiento; F es el peso de la fracción de fundido restante.

La extensión del enriquecimiento y disminución de elementos traza durante la cristalización


fraccionada es mostrada en la Figura 1.17. El enriquecimiento de un elemento traza incompatible
en un fundido residual relativa a la concentración original en el magma parental es demostrado en
la Figura 1.17 a, donde las abundancias pueden verse incrementadas exponencialmente cuando la
cristalización procede (ej. cuando la fracción de fundido restante, F disminuye). Los elementos
compatibles van, desde luego, a disminuir continuamente en el fundido residual cuando son
extraídos dentro de las fases sólidas. La figura 1.17 b muestra, sin embargo, que la concentración
relativa de un elemento incompatible en un conjunto de cristalización va a empezar a enriquecerse
solo para rocas formadas en las etapas tempranas de cristalización. Las concentraciones relativas
van a disminuir con el progreso de la cristalización porque el magma rápidamente se empobrece a
si mismo de elementos compatibles ya que ellos son retirados dentro del conjunto cristalización.

Las ecuaciones de fraccionación de Rayleigh aplican razonablemente bien a magmas basáltica de


baja viscosidad donde los efectos de la cristalización fraccionada son muy evidentes. Como lo
mencionado anteriormente, aunque, los magmas graníticos no exhiben muy bien la estratificación
ígnea y tienden a solificar por nucleación hacia adentro de un limite de borde de capa. Este estilo in
situ de cristalización fraccionada, donde el frente de cristalización es espacialmente distinta del
magma residual, es parecida al fraccionamiento de Rayleigh, pero las ecuaciones que gobiernan la
distribución de elementos traza tiene que ser modificada, como se muestra a continuación, para
acomodar la fracción de fundido que es retomada a la cámara magmática cuando la zona de
solidificación se mueve progresivamente hacia adentro de la cámara (Langmuir, 1989):

Donde: Mliq es la masa de líquido restante en la cámara magmática; Mo es la masa inicial de líquido
en la zona de solidificación retomada a la cámara magmática; y los otros simbolos los mismo del a
ecuación [1.4].
La distribución tiende de elementos compatibles e incompatibles durante este estilo de
solidificación progesiva hacia adentro son esencialmente similares a la fraccionación Rayleigh
(Figura 1.17) aunque lo grados de concentración, especialmente a valores bajos de f, no son tan
extremos (Rollinson, 1993). Este de acuerdo con observaciones de los efectos de cristalización
fraccionada en granitos tiende a ser menos evidentes que en intrusiones máficas.

Un ejemplo de concentración de elementos traza durante la nucleación hacia el centro del borde de
capa limite en granitos es proporcionada por el depósito de Sn Zaaiplaats en la fase granítica del
Complejo Bushveld en Sudáfrica (ver Box 1.3). Hay mucho ejemplo de concentraciones de
elementos traza en intrusiones máficas estratificadas y subsecuentes secciones discuten algunos de
los procesos complejo involucrados en la acumulación de depósitos de Pt, Cu y Ni a tenores de mena
como los del Complejo Bushveld , Kambalda, y Sudbury (ver Boxes 1.4, 1.5, 1.6 y 1.7). Un caso donde
la cristalización fraccionada sola, sin complicaciones características agregadas de reabastecimiento
de estos magmas o contaminación, ha resultado en enriquecimiento significativo de Au, Pd y S es
proporcionado por los Reefs Platinova del Complejo Skaergaard. La figura 1.15 muestra que esta
zona potencialmente de tenor de mena de enriquecimiento de elementos preciosos ocurre hacia el
topo de la Zona Media y formados después de que una proporción sustancial de la cámara
magmática ha cristalizado. La naturaleza incompatible del Au, Pd y S con respecto a los cristales
formado tempranamente (dominantemente plagioclasa, olivino y piroxeno con poca magnetita y
apatito) resultado de un enriquecimiento progresivo de esto metales en el fundido residual
(Anderson et al., 198). Una vez la concentración de sulfuros ha alcanzado los niveles de saturación
(creyendo que esta está entre 0-16y 0.3 wt% en el magma Skaergaard) los metales precipitados
como aleación de Au-Pd para ser después concentrados como inclusiones dentro de minerales
sulfuros que ahora ocurren distribuidos intersticialmente entre cúmulos normales de conjuntos
minerales. Las concentraciones de Au y Pd que resultan de la cristalización fraccionada in situ del
magma Skaergaard en cantidades de cerca de 2 ppm para cada metal y estos han sido estimados
con un potencial de 90 millones de toneladas de tenor de material mena disponible en los Reef
Platinova (Anderson et al.,1998).

1.4.3 Cristalización fraccionada y la formación de capas de cromitita monominerálica

1.7 Un modelo para la mineralización estratificada en intrusiones máficas


El complejo Bushveld en Sudáfrica, junto con el Gran Dique de Zimbabue y el Complejo Stillwater de
Montana, representa los primeros ejemplos de cromita y formación de mena de sulfuros-PGE en
intrusiones máficas estratificadas. Estos ejemplos tienen muchas características en común y
estudios detallados de investigadores como Irvine (1977), Naldrett y von Grünewaldt (1968),
Nalderett y Wilson (1991), y Campbell et al. (1983), como muchos otros, facilita la compilación de
un modelo relativamente simple para explicar la ocurrencia y formación de estos depósitos
importantes. La naturaleza y origen de depósitos de Cu-Ni importantes como Sudbury (Ontario),
Noril’sk-Talnakh (Siberia), y Duluth (Minnesota) son algo diferentes, pero su formación puede sin
embargo ser explicada por algunos de los procesos descritos a continuación. El dómelo descrito en
esta sección representa un resumen útil, pero para facilidad la explicación es simplificado, tanto
conceptualmente y con respecto a la naturaleza actual de los depósitos de mena que la representa.
Los lectores deben ser cautos en aplicar este modelo muy rigurosamente a una situación real.
Detalles adicionales pueden ser obtenidos de una referencia de artículos originales, en particular
Naldrett (1968b, 1997).

Secciones anteriores de este capítulo han enfatizado con respecto a la formación de menas en
intrusiones ígneas:

1 Cristalización fraccionada y cristalización gravitatoriamente inducida

2 Estratificación por densidad de la cámara magmática y la habilidad de los magmas que sufren
cambios de densidad cuando procede la cristalización

3 Recarga repetida de cámaras por inyección de magma fresco.

4 La habilidad del magma fresco para encontrar su propio nivel de densidad y la mezcla turbulente
con el magma residual.

5 La existencia de periodos antiguos de cristalización cuando una sola fase la cromita es sobre el
liquidus

6 La formación de glóbulos de sulfuros líquidos una vez el magma se vuelve saturado o


supersaturado con respecto a sulfuros.

7 Coeficiente de fraccionamiento muy alto de elementos siderófilicos para fracción de sulfuros


inmiscibles.

Estas características son todas usadas para construir el modelo en la Figura 1.25, que muestra una
intrusión máfica estratificada esquematizada con elementos de mineralización representando
depósitos bien conocidos como sulfuros-PGE de Merensky, J-M (Stillwater), y LSZ (Zona Inferior de
Sulfuros, Gran Dique) arrecifes, y las capas cromititíferos UG y LG (grupos superior e inferior
respectivamente) del complejo Bushveld. La cromitita UG2 es particularmente importante porque
contiene grandes reservas de Cr y también PGE ocurriendo juntos en el mismo, muy extenso,
horizonte.

Una observación empírica que no ha sido previamente mencionada, pero que se vuelve de
importancia considerable para entender tanto la posición y tenores de estas menas, es el nivel
“estratigráfico” en la intrusión estratificada donde la plagioclasa aparece primero como una fase
cumulo. Este punto aparentemente inocuo en la evolución de una intrusión ígnea (claramente
marcado en la Figura 1.25) divide el horizonte mena que tiende a ser menos enriquecido PGE debajo
que sobre, el cual tiene a ser más enriquecido en ambos y mas sustancial (al menos en Bushveld y
Stillwater). En la Figura 1.16 a es claro que un magma evolucionando se volverá mas denso que
cuando inició una vez plagioclasa significante es extraído. Que tiene implicaciones importantes para
el comportamiento de fundido recientemente inyectado dentro de la cámara magmática y afecta la
formación de fuentes y plumas (Figura 1.16b) tanto por la magnitud del factor R, que toma el control
de las concentraciones de metales dentro de la fracción de sulfuro inmiscible (Figura 1.22). Así, con
referencia a la Figura 1.25, cualquier nuevo magma que es introducido dentro de la cámara
tempranamente en su secuencia de cristalización (ej. antes de la aparición de plagioclas sobre el
liquidus) tendera a comportarse como fuente. El grado limitado de mezla que ocurre (punto AC en
el “modelo Irvine” Figura 1.25) va a forzar la composición del magma dentro del campo de la cromita
y da lugar a capas de cromitita asociadas con cumulos ultramáficos como los de, por ejemplo, el
Gran Dique. La composición del magma en esta etapa será infrasaturado con respecto a sulfuros
(punto AC en el “modelo Naldrett y von Grünewaldt”, Figura 1.25) y, por lo tanto, no se van a formar
menas de sulfuros. Cuando la cristalización continua, sin embargo (A a B en el “modelo Naldrett y
von Grünewaldt”, Figura 1.25), la saturación se alcanzará y los sulfuros inmiscibles van a segregar
para formar diseminaciones de mena de sulfuros en ortopiroxenos de rocas cumuladas. Coeficientes
de partición muy altos de Cu, Ni, y PGE dentro de la fracción inmiscible van a significar que incluso
con buyancia limitada y mezcla de los sulfuros mas tempranos van a ser enriquecido en estos
elementos.

Como mas adelante los sulfuros se exsolven, sin embargo, van a volverse rápidamente
empobrecidos en baja abundancia de metales porque el magma residual en equilibrio con estos
sulfuros, los cuales originalmente ellos mismo solo tuvieron abundancias muy bajas de PGE, se
vuelven empobrecidos (referido a la Figura 1.22 para cuantificación de este efecto). Este rasgo
caracteriza las menasa de Pt-Pd de la Zona Inferior de Sulfuros del Gran Dique, por ejemplo, donde
a pesar de la existencia de sulfuros de Cu-F sobre un intervalo de 2-3 metros de extensión, las menas
contienene tenores de PGE solo sobre unos cuantos centímetros a la base de la zona mineralizada.

Por el contrario, si una nueva inyección de magma toma lugar despues de la primera aparición de la
plagioclasa despues este va a tener una densidad mas baja que la del magma residual y emplaza a
si mismo en una manera turbulenta, flotante a un nivel relativamente alto en la cámara. La mezcla
mas eficiente que ocurre de nuevo promueve la precipitación de cromita (punto AD en el “modelo
Irvine”, Figura 1.25). Estas capas de cromita serán asociadas con ya sea rocas cumuladas gabroícos
o ultrmáficas, dependiendo de las proporciones relativas de liquido A y D que son mezclados juntos,
y también es posible que vayan a ser mejor desarrollados. La mezcla de magmas primitivos A con
un líquido evolucionado D también va, en este caso, a resultar en una mezcla que es sobresaturada
de sulfuros (punto AD en el “modelo Naldrett y von Grünewaldt”, Figura 1.25), resultando en la
formación de una fracción inmiscible de sulfuro. El efecto pluma que es creado por la inyección de
un magma primitivo de menor densidad va a resultar en flotación y alto grado de circulación
convectiva de estos sulfuros, que se traduce dentro de un facto R alto. Los PGE son de nuevo
fuertemente fraccionados dentro de una fracción de sulfuro pero los tenores van a ser mas altos y
mas equitativamente porque los sulfuros tienen la oportunidad de equilibrarse con una masa mucho
más grande del magma. Esta situación es aplicable a la formación de los Merensky y arrecifes J-M,
ambos de los cuales son bien formados sobre la primera aparición de plagioclasa en rocas
cumuladas. Esto también aplica a la formación de mantos UG2 donde los sulfuros-PGE son
íntimamente asociados con una capa mayor de cromitita.

RESÚMEN
Hay muchos diferentes tipos de menas de depósitos asociados con rocas ígneas; hay también un
rango amplio de composiciones con las que los depósitos de mena van a estar enlazados. Los
magmas tienden a heredar su dotación de metales de un área fuente de la cual típicamente son
fundido. Las áreas fuente fértiles, como el manto metasomatizado o rocas sedimentarias, son
usualmente ellas mismas un producto de algún tipo de proceso de concentración de metal. Los
magmas félsicos cristalizan par formar granitos, o sus extrusivos equivalentes, y son asociados con
concentraciones de elementos como Sn, W, U, Th, Li, Be, y C, también con Cu, Mo, Pb, Zn y Au. Los
elementos incompatibles en magmas félsicos son concentrados dentro de productos de grados muy
bajos de fusión parcial o dentro de un magma residual y una etapa avanzada de cristalización. Estos
procesos no son, sin embargo, muy a menudo resultan en menas depósitos económicamente
viables. La cristalización fraccionada en magmas máficos, por otra parte, resulta en concentraciones
importantes de elementos como Cr, Ti, Fe y V, mientras la inmiscibilidad de sulfuros asociados en
estas rocas resulta en acumulaciones de PGE, Cu, Ni y Au. Las intrusiones máficas estratificadas son
objetivos de exploración muy importantes para este tipo de metales en el mundo. Los depósitos de
diamantes primarios representan una situación muy inusual donde una corrientes de magmas
máficos ubicados profundamente a la superficie por volcanes explosivos de tipos diatrema-maar,
llevando con ellos, xenocristales de diamantes mas antiguos de un manto fertilizado. Tanto en
magmas máficos y félsicos las últimas etapas de cristalización son acompañadas por la exsolución
de una fase fluida carbónica dominantemente acuosa que finalmente juega un papel muy
importante en la formación de mena. Este proceso es el tema del Capítulo 2.

Box 1.1
Box 1.2
PROCESOS MAGMÁTICOS-
HIDROTERMALS FORMADORES DE MENA
TEMAS
ALGUNAS PROPIEDADES FÍSICAS Y QUÍMICAS DEL AGUA
FLUIDOS MAGMÁTICOS-HIDROTERMALES
Solubilidad del agua en magmas
Depósitos de mena magmáticos-hidrotermales relacionados a granitos
COMPOSICIÓN Y CARACTERISTICAS DE FLUIDOS MAGMÁTICOS-HIDROTERMALES
PEGMATITAS Y SU SIGNIFICADO
TRANSPORTE DE METALES Y PRODUNDIDAD DE EMPLAZAMIENTO DE MAGMAS
GRANÍTICO
FLUJO DE FLUIDO DENTRO Y ALREDEDOR DE INTRUSIONES GRANÍTICAS
ORIGÉN DE DEPÓSITOS DE PÓRFIDOS Cu, Mo, Y W
DEPÓSITOS DE SKARNS POLIMETÁLICOS
DEPÓSISTOS DE AU-AG-(CU) EPITERMALES
PAPEL DE LOS LFUIDOS EN ROCAS MÁFICAS MINERALIZADAS

2.1 INTRODUCCIÓN
En el capítulo 1 se enfatizó sobre la concentración de metales durante procesos ígneos asociados
específicamente con formación de magmas y su subsecuente enfriamiento y cristalización. Una
pequeña mención fue hecha en capítulos anteriores sobre soluciones acuosas (o fluidos
hidrotermales), a pesar de que es bien conocido que estos fluidos a vece han jugado un papel en la
formación o modificación de varios depósitos magmáticos. La interacción entre procesos ígneas e
hidrotermales es extremadamente importante para la formación de una amplia variedad de
depósitos de mena, especialmente en ambientes cercanos a superficie donde magmas y fluidos son
espacialmente y genéticamente enlazados. Este capítulo introduce el concepto de fluidos
“magmáticos-hidrotermales” y se concentra sobre estos fluidos especialmente derivado de adentro
del cuerpo de magma mismo. Un énfasis particular es dado a estos fluidos derivados de magmas
graníticos cristalizando en la corteza terrestre.

Hay una pequeña duda sobre si la mayoría de depósitos de mena alrededor del mundo son un
producto directo de procesos de concentración surgiendo de circulación de soluciones acuosas
calientes a través de la corteza de la Tierra, o han sido significativamente modificados por estos
fluidos. Una amplia variedad de procesos formadores de mena son asociados con fluidos
hidrotermales y estos pueden ser aplicados tanto a ambientes ígneos y sedimentarios, y a presiones
y temperaturas que van del rango desde las aplicables a niveles someros de corteza a profundo en
la litosfera. Muchos diferentes de fluidos son involucrado en procesos hidrotermales formadores de
mena. La mayoría de estos fluidos magmáticos-hidrotermales primitivos o “juveniles” que se
originan de magmas cuando se enfrían y cristalizan a varios niveles de la corteza terrestre, y un
número importante de tipos depósitos de mena son relacionados a la concentración de metales que
surgen de la circulación de dichas soluciones. Este capítulo tiene relevancia particular para depósitos
de mena como la gran familia de depósitos de pórfidos de Cu y Mo, tanto como en depósitos de Au-
Ag epitermales de “alta sulfuración” que a veces representa en la superficie o manifestaciones
volcánicas de depósitos d pórfidos. Además, la formación de menas de Sn-W relacionadas a greisen,
mineralización de skarn polmetálicos, y depósitos relacionados a pegmatitas son también explicados
en este capítulo. La discusión de procesos involucrado en la formación menas hidrotermales que no
están directamente enlazados a actividad magmática sigue en la Parte 2 del libro (Cpítulo 3)

2.2 ALGUNAS PROPIEDES FÍSICAS Y QUÍMICAS DEL AGUA


El agua (H2O) es un líquido a temperatura y presión estándar o ambiente (STP). Por el contrario,
otras moléculas ligeras (CH4, NH3, H2S, etc) a STP existen como vapor y formas hidruros gaseosos.
El H2O ebulle a mucho más alta temperatura que los hidruros formados por otros elementos ligeros.
La principal razón para esto es que el hidrogeno en una de agua tienen una fuerte afinidad para el
oxígeno que los enlaces hidrogeno son formados temporalmente entre ellos y los átomos de
oxigeno alrededor de la molecula de agua (Figura 2.1). El agua es, por lo tanto, un liquido polímero
a STP, y es el responsable para muchas de sus propiedades anómalas.

Las propiedades físicas del agua que la hacen tan importante para procesos químicos, biológicos y
geológicos incluyen:

1 Una alta capacidad calorífica, que significa que puede conducir calor más inmediatamente que
otros líquidos

2 Alta tensión superficial implicando que puede “mojar” fácilmente superficies minerales.

3 Una densidad máxima a temperaturas justo por debajo del punto de congelamiento, que significa
que H2O sólida (hielo) va a flotar en H2O líquido.

4 Un alta constante dieléctrica y, por tanto una habilidad para disolver sustancias mas iónicas, y en
mayores cantidades, que otro cualquier otro líquido natural.

La ultima propiedad es particularmente relevante para la formación de depósitos de mena, desde


que el agua es gran responsable de la disolución, transporte, y, por tanto, concentración de un
amplio rango de elementos y compuestos, incluyendo metales, en la corteza terrestre.
Las propiedades químicas del agua son dominadas por su alto momento dipolo, una característica
relacionada al hecho que las moléculas de agua no es simétrica pero contiene dos átomos de
hidrógenos que no son directamente opuesto el uno del otro pero inclinado relativamente al eje del
diámetro de un solo, átomo de oxígeno, mucho más grande (Figura 2.1). La molécula de H2O es, por
lo tanto, un dipolo eléctrico en el que la carga positiva del centro no coincide con el centro de la
carga negativa. Consecuentemente, las moléculas de agua puede alinearse ellas mismas en una
campo eléctrico u orientarse alrededor de otras especies iónicas cargadas. La agrupación
(clustering) de moléculas de agua alrededor de un ion disuelto es referido como hidratación, y se
promueve la estabilidad de iones en soluciones acuosas. La constante dieléctrica es una medida de
la habilidad del fluido para separar iones u otros dipolos y su funciones del número de dipolos por
unidad de volumen. El alta constante dieléctrica del agua también tiene el efecto de mejorar la
disolución e incrementa la solubilidad.

En aguas naturales existen tres diferentes fase, sólida (o hielo), vapor (o humo), y líquida (Figura
2.2ª). El H2O hielo típicamente existe najo O°C y se forma cuando las moléculas de aguas son puestas
en una estructura cristalina hexagonal similar a muchos de los minerales silicatados formadores de
rocas. Cuando el hielo-H2O se derrite solo una pequeña proporción de los enlaces de hidrogeno son
rotos y H2O líquida retienen una gran cantidad de coordinación de tetraedros. A temperatura
cercanas al punto de congelamiento, esta estructura es unida más gruesamente que hielo, lo que
explica porque la forma líquida del agua es mas densa que la sólida, y el hielo flota. La densidad del
H2O liquida varia principalmente como una función de la temperatura, pero también la presión,
como ilustra la Figura 2.2b. La densidad se define como la diferencia entre la fase líquida
(típicamente alrededor de 1 g/cm3 a temperatura ambiente) y su vapor coexistente (donde las
densidades son una o dos veces más bajas), Líneas de igual densidad (o volumen) en espacio P-T son
referidas como isocoras (Figura 2.2c). La fase límite a lo largo de la cual el líquido y vapor están en
quilivrio (ej., entre el punto triple y el punto crítico en la Figura 2.2ª) define el equilibrio o saturación
de presión de vapor, también conocida simplemente como curva del punto de fusión. Sobre la
superficie de la Tierra, el agua efectivamente “ebulle” cuando el equilibrio de vapor de presión
excede la presión atmosférica prevalente y burbujas de vapor pueden salir.

Cuando la temperatura aumenta la densidad de H2O liquida disminuye, esta debe coexistir en
equilibrio con un vapor cuya presión parcial de vapor (y densidad) esta aumentando. La temperatura
del punto de ebullición de agua pura incrementa progresivamente con la presión hasta que un límite
máximo es alcanzado. Llamado punto crítico, a 374°C y 221 bar (Figura 2.2ª). El punto crítico es
donde no es posible incrementar el punto de ebullición por incremento en la presion y es
efectivamente definido como la etapa donde no hay distinción física (ej., un contraste de densidad)
entre el líquido y vapor. Las densidades del líquidpo y vapor en el punto crítico se han fusionado a
un valor al rededorde 0.3 g/cm3 (Figura 2.2c). Desde allí los términos “liquido” y “vapor” no tienen
significado en el punto crítico, el término “fluido supercrítico” (ver sección 2.3.3 abajo) es usado
para describir una sola fase homogéneas que existe a presiones y temperaturas sobre el punto
crítico.

Para un gas ideal que obedece la Ley de Gases, la relación entre presion (P) y temperatura (T), y
volumen (V) o la densidad expresada por la ecuación bien conocida:

PV=RT [2.1]

Donde R es la constante de los gases.

El agua sólo se comporta como un gas ideal a muy altas temperaturas y bajas presioens y la ecuación
[2.1] no puede, por lo tanto, ser usada par predecir relaciones de fase acuosa bajo condiciones
naturales en la corteza terrestre. Consecuentemente, se han hecho muchos intentos para introducir
factores de corrección y modificaciones a la ecuación de gases ideales que esta deja de reflejar
precisamente el comportamiento no ideal. Las formas modificadas de la ecuación, de la que muchas
han sido derivadas empírica y teóricamente, son referidas como ecuaciones de estado, que
incorporan dos términos correctivos, es una expresión conocida como la ecuación de van der Waals:

Donde a es el termino correctivo que cuanta para el potencial atractivo entre moléculas, y b es el
término que cuenta para el volumen ocupado por estas moléculas.

Una ecuación ampliamente utilizada para el estado del agua a altas presiones y temperaturas es
modificada de la ecuación de Redlich-Kwong, una discusión mas detallada de la que, junto con su
aplicabilidad a las propiedades químicas y termodinámicas de fluidos magmáticos, puede ser
encontrada a Hollowat (1987).
2.3 FORMACIÓN DE UNA FASE MAGMÁTICA ACUOSA
2.3.1 El agua magmática—¿de dónde proviene?
En etapas tempranas de desarrollo de la Tierra había probablemente muy poca agua ya sea en la
atmosfera o sobre la superficie del planeta. Parece probable que océanos incipientes se
desarrollaran tan pronto la corteza oceánica fue establecida y aguas lluvias se estancaban en
superficie. Cuerpos sustanciales de agua (océanos o mares) existieron por al menos 3800 Ma como
evidencia de la preservación de sedimentos del Arcaico y rocas volcánicas subsecuentemente
depositadas. Algunas de estas aguas tempranas fueron derivadas por desgasificación de magmas
volcánicos cuando fueron extruidos sobre la corteza temprana, y es referida como un agua juvenil.
Como los procesos de tectónica de placas dominaron progresivamente los procesos de la Tierra, el
agua ha estado sujeta a reciclamiento extenso y es probable que mucho de los fluidos introducidos
por actividad magmática a superficie en tiempos geológicos recientes ya no sean juveniles, aunque
están aún siguen referidas como magmáticas.

La subducción oceánica de la corteza oceánica que ha sido altamente alterada e hidratad por aguas
marinas percolando es un escenario que puede ser usado para explicar los contenidos de H2O de la
mayoría de magmas andesíticos a basálticos relacionado a arcos. Los arcos relacionados a magmas
probablemente, por lo tanto, contienen agua disuelta derivada de mezcla de fluidos derivados del
manto, primitivos, y agua marina. Un menor componente de fluidos meteóricos (ej., derivados de
la hidrosfera) es también posible. Es interesante notar que los magmas basálticos hidratados cuyo
calor es reponsable de iniciar la anatexis de corteza inferior para formar fundidos graníticos, puede
contribuir su agua a estos fundidos. Whitney (2989) ha sugerido que el underplating de magmas
félsico resultará en transferencia difusiva de elementos y especies volátiles a través de limite de
capa.

La mayoría del agua del agua presente en magmas graníticos es, sin embargo, derivada de
deshidratación de minerales en la corteza que fueron fundidos ellos mismos del magma. El concepto
de “ausente de fluido” o fusión deshidratada (ej., donde la fusión ocurre sin la presencia de agua
libre en la roca) es considerada como un modelo realístico para la generación de granitos en la
corteza terrestre. El proceso puede ser explicado considerando las fases de equilibrio tres minerales
esenciales, muscovita, biotita y hornblenda. Aunque las reacciones detalladas son complejas (ver
Clemens y VIelzeuf, 19987; Whitney, 1989; burnham, 1997), las condiciones aproximadas para
fusión deshidratada de muscovita, biotita y hornblenda en relacion con el gradiente geotermal
promedio son mostradas en la Figura 2.3: La cantidad de H2O contenido dentro de estos minerales
disminuye de cerca de 8-10% en muscovita, de 3-5% en biotita y 2-3% en hornblenda. Por
consiguiente, la actividad del agua en fundidos formados por descomposición de minerales
hidratados van a variar considerablemente y un magma derivado por anatexis de un precursor con
muscovita es probable que contenga más agua disuelta que uno derivado de una anfibolita. El
material fuente conteniendo dominantemente muscovita y enterrado progresivamente a lo largo
de geotermas de 25°C/km en la Figura 2.3 van a empezar a fundirse en el punto A. El contenido de
agua del primer magma formado será de 7.4 wt% (Burnham, 1997). Si la fuente de material contiene
principalmente biotita como fase hidratada, la fusión podría empezar a temperaturas y presiones
significativamente más altas, en el punto B, y en este caso el primer fundido formado podría
contener sólo 3.3 wt% H2O. Igualmente, la fusión deshidratada de una roca fuente anfibolítica
podría producir sólo un fundido P-T incluso mas altas (punto C, Figura 2.3), y este podría contener
2.7wt % H2O. Es aparente, por lo tanto, que granitos de composiciones variables derivados de
diferentes niveles de la corteza van a contener inicialmente contenidos de H2O muy diferentes.

Es claro que volúmenes sustanciales de agua magmática serán agregados a la corteza terrestre como
magmas graníticos formando progresivamente continentes. Es relevante apuntar que la fusión de
una roca fuente con un contenido de muscotiva- o muscovita+biotita- (representado en la
naturaleza por rocas tanto como metasedimentos) es probable que rinda composiciones de granitos
tipo S, peraluminosos (ver sección 1.3.4). Los tipos de granitos con los que la mayoría de conjuntos
de mena Sn-W-U son típicamente asociados van, por lo tanto, a ser relativamente “húmedos”, y con
contenidos de H2O iniciales altos. Los granitos tipo S generalmente se relacionan con los granitos
relativamente reducido “series ilmenita” de Ishihara (1977), que hereda su carácter bajo de fO2
(fugacidad) por fusión de material metasedimentario con grafito. Al contrario, la fusión de un
material fuente con biotita- o biotita+horblenda- (representado por rocas meta-igneas) van a rendir
composiciones de granitos tipo I, metaluminosos. Las suites de depósitos de mena pórfidos de Cu
son asociadas globalmente con estos últimos(pórfidos de Cu) y son típicamente relativamente
“secos” comparados con granitos tipo I, y son caracterizados por magmas con más alta fO2 (Ishihara,
1981).

2.3.2 Solubilidad del H2O en magmas silicatados


Es evidente que de la discusión anterior los magmas derivados en diferentes ambientes tectónicos
son probables a tener contenidos iniciales variables de H2O, y que este esto es parcialmente una
función de la cantidad de agua suplida por el material fuente durante la fusión. Esto es, sin embargo,
un límite máxima de la cantidad de H2O que un magma dado puede disolver, y este es definido por
la solubilidad del agua en cualquier magma dado. La solubilidad del H2O en magmas silicatados es
determinada principalmente por la presión y en menor extensión la temperatura. La Figura 2.4a
muestra los resultados de determinaciones experimentales del contenido de agua en fundidos de
composiciones basálticas, andesíticas, y graníticas, o pegmatiticas. Los experimentos sugieren que
el contenido de agua es fuertemente depende de la presión, con magmas en la base de la corteza
(circa 10kbars) capaces de disolver entre 10 a 15% H2O. Esto podría también aparecer de la Figura
2.4ª que para cualquier presión dada, los fundidos félsicos son capaces de disolver mas agua que
los máficos.

Cuando el agua se disuelve en un magma esta existe esencialmente como grupos hidroxilos (OH),
aunque es probables que a mas alta presión y contenidos de agua distintos, el agua molecular (H2O)
también puede existir (Stolper, 1982). La solubilidad del agua en un magma silicatado es probable
que este gobernada por la siguiente reacción:

H2O (molecular) +O0 <-> 2OH [2.3]

Donde el O0 se refiere al oxigeno que hace puente o polimeriza la estructura silicatada del magma.
Los magmas basálticos de baja viscosidad contienen una proporción menor de puenteo O0 que los
fundidos graníticos polimerizados. Los magmas basálticos pueden, por lo tanto, acomodan menos
grupos OH en sitios de O0 sustituidos, que podrían explicar su inhabilidad para disolver tanta agua
como un granito. A presiones altas, sin embargo, las solubilidades del agua son esencialmente
independientes de la composición del magma. Como una generalización, la fracción molar
(cuadrado) del agua disuelta en cualquier magam es proporcional a la fugacidad del agua (fH2O o
concentración efectiva en una solución no ideal) del magma y es fuertemente dependiente de la
presión. Un indicador de la cantidad de agua disuelta en una fundido hidratado como una función
de la presión y fugacidad de agua es proporcionado en la Figura 2.4b. A menores presiones, donde
las solubilidades totales son bajas, los grupos OH son especies dominantes de una agua disuelta en
magmas silicatados, mientras que a presiones mayores la solubilidad del agua es dominada por H2O
molecular (Stolper, 1982).
2.3.3 El modelo Burnham
La importancia de los procesos a través de los cuales la zonas de magma saturado en H2O son
formados y localizados hacia el techo de una intrusión granítica, y su significado con respecto a los
depósitos de mena granitoides, fue enfatizada por el trabajo pionero de C. W. Burnham (1967, 1979,
1997). El concepto ha estimulado mucha investigación fructífera y continua para recibir
refinamiento experimentales y teóricos a través del trabajo de Whitney (1975, 1989), Candela
(1989ª,b, 1991; 1992, 1997), Shinohara (1994), y muchos otros.

Cuando un magma granítico cristaliza el conjunto liquido es dominado por minerales anhidricos y la
concentración de constituyentes incompatibles disueltos incluyendo H2O y otras especias volátiles,
aumentan por procesos parecidos al fraccionamiento Rayleigh (ver Capitulo 1). En algun etapa, ya
sea temprana o tardía en la secuencia de cristalización, el magma granítico se volverá saturado en
agua, resultando en una exsolución de un fluido acuoso para formar una fase químicamente distinta
en el fundido silicatado. Este proceso es llamado saturación de agua, pero a veces también referido
como “boiling” o “saturación de vapor”. Estos términos a veces llevan a una confusión semántica y
el pie de nota* debe proporcionar alguna claridad sobre este problema. Porque el fluido acuoso
tiene una densidad que es considerablemente menor (usualmente menor que o alrededor de 1
g/cm3, ver Figura 2.2c) que el de un magma granítico (que es típicamente alrededor de 2.5 g/cm3)
este tenderá a aumenta y concentrar en el techo, o carapace, de la cámara magmática. Aunque algo
del OH- original en el magma puede ser utilizado para formar rminerales formadores de roca
hidratados (como biotita y hornblenda), la cantidad de agua magmática-hidrotermal formada de
esta forma puede ser muy sustancial.
El concepto de la formación de una zona de magma saturado en H2O en un nivel alto de la intrusión
granítica (2km profundidad) que inicialmente contuvo cerca de 2.7 wt& H2O es esquemáticamente
ilustrado en la Figura 2.5. A estas profundidades someras la saturación de H2O alcanzada despues
de solo el 10% de la cristalización, cuando el contenido de agua del magma residual alcanza 3.3 wt%.
A presiones bajas como las pertenecientes en la Figura 2.5, el fluido de hecho ebulle, debido a que
el equilibrio de la presion de vapor se iguala a la presion de carga sobre el sistema magmático y las
burbujas de gas (ej., vapor de agua mas otros volátiles como CO2) vesicular. El proceso a través del
cual la vaporsaturación es alcanzada por virtud de la disminución de la presión (ej., por el
emplazamiento hacia arriba del magma o fracturamiento mecánico de la cámara) es llamado
“primera ebullición” y es particularmente aplicable a sistemas de alto nivel. Como lo mencionado
antes, es posible alcanzar también la saturación con respecto a un fluido acuoso por cristalización
progresiva de minerales dominantemente anihidricos bajo condiciones isobáricas, y este proceso es
referido específicamente como “segunda ebullición”. La segunda ebullición generalmente ocurre en
sistema magmáticos (emplazados) más profundos y ocurre solo despues de una etapa relativamente
avanzada de cristalización. Como lo mostrado despues, las diferencias entre la primera y segunda
ebuliicion, y mas específicamente el timing de la saturación de fluido H2O en relación al progreso
de la solidificación del magma, es muy importante para entender que diferente los depósitos de
mena relacionados a granitos se forman (ver secciones 2.6 y 2.7).

Además de la fuerte dependencia de la ebullición sobre la presión, es obvio que la saturación de


fluido también va ser función del contenido de agua original del fundido inicial. Los fundidos que
son mas enriquecidos en agua y volátiles van a alcanzar la saturación mas temprano (en relación a
la progresión de la cristalización) que los mas pobres en estos componentes. Estudios
experimentales han confirmado los efectos de la presión y contenido inicial de agua sobre la
saturación de fluido. La Figura 2.6 compara la consecución de la saturación de H2O en un fundido
granítico típico a altas y bajas presiones, y en términos de secuencias de cristalización y contenido
inicial de H2O. En una situación profunda en la corteza de la Tierra (ej., 8 kbar), donde el fundido
granítico original contuvo 2 wt% H2O, la cristalización tuvo que haber comenzado con la nucleación
de plagioclasa a temperaturas alrededor de 1100°C, seguido por la aparición de feldespato K y
cuarzo sobre el liquidus a presiones menores (A-A’-A’’, Figura 2.6ª). La saturación de H2O es
alcanzada a temperaturas que son justo unos cuantos grados sobre el solidus (en A’) y

Solo despues de que cerca del 80% del fundido ha cristalizado. El solidos es intersectado a 650°C,

* A menos que la presión, temperatura, y composición de una solución acuosa magmática son especificados, no se puede
decir si esta existe como liquido o vapor, o una fase supercrítica homogénea (ver Figura 2.2). En este caso esto debería ser
referido por el termino genérico “H2O fluida”. Debido a que la fase acuosa magmática es mucho menos densa que el
fundido silicatado del cual esta fue derivada, y porque esta puede contener otras especies volátiles de baja solubilidad
como CO2 o SO2, estas también pueden ser referidas a veces como fase “vapor” o “volátil”. Además, un fluido supercrítico
es el que podría llenar efectivamente un container, y en este sentido debería ser considerados como un gas o vapor,
aunque su densidad puede ser mucho mayor que un gas como podemos verlo en la superficie de la Tierra. Por
consiguiente, en este libro los términos de saturación de H2O, ebullicióm, desgasificación, y saturación de vapor son usado
intercambiablemente. Los conceptos son discutidos de nuevo en la sección 2.4.4

Punto en el cual es granito ha solidificado totalmente. En el evento improbable que este granito fue
inicialmente saturado en H2O a 8 kbar este pudo haber contenido al menos 12 wt% H2O y, como lo
ilustrado por el patrón de cristalización B-B’ (Figura 2.6ª), pudo no haber empezado a cristalizar la
plagioclasa hasta que la temperatura del fundido se enfriara hasta alrededor de 750°C. En este caso
la solidifiación pudo haber aumenta muy rápidamente entre 750 y 650°C y completamente en
presencia de H2O fluida.
A niveles mas someros de corteza (2 kbar) la situación es bastante diferente (Figura 2.6b). La misma
composición de magma granítico puedo ser saturado en agua si originalmente contuvo solo 6-7 wt%
H2O y en esta situación (patrón D-D’) la cristalización en presencia de H2O fluida pudo tomar lugar
sobre un intervalo de temperatura más amplio que a una profundidad mayor. El mismo patrón de
cristalización a 8 kbar pudo haber existido sobre la mayoría de este rango de temperatura en el
campo infrasaturado en H2O. Un fundido granítico a 2kbar con bajo contenido inicial de agua (2
wt% ; patrón C-C’-C’’ en Figura 2.7b) pudo haber cristalizado sobre un intervalo significativo de
temperatura, pero en este caso la saturación de H2O pudo haber sido alcanzada a temperatura mas
alta (alrededor de 700°C en C’) y solo despues de que cerca del 60-70% de la cristalización.

Estos datos experimentales refuerzan el concepto de que un fluido acuoso va a exsolver de un


fundido granítico como una consecuencia normal de su cristalización. El modelo Burnham tiene gran
relevancia para la formación de un amplio rango de tipos de depósitos de neba. Los depósitos de
suite pórfidos Cu-Mo, epitermal de metales mena preciosos, y depósitos de tipo skarn polimetálicos
son todos ejemplos de depósitos cuyos orígenes son relacionados a procesos conceptualizados en
este modelo. Una discusión mas detallada de estos tipos de depósitos es presentada en secciones
posteriores.
Una nota sobre los efectos mecánicos de la ebullición
Un fluido acuoso restringido a la zona techo de una camara magmática granítica va a tener un efecto
limitado sobre la concentración de metales a menos de que tenga la oportunidad de circular
eficientemente dentro y alrededor del complejo intrusivo del cual este es derivado. La aparición de
un fluido H2O exsuelto dentro de un magma es, sin embargo, acompañado también por la liberación
de energía mecánica, debido a que el volumen por unidad de masa de fundidos silicatado mas la
baja densidad del H2O fluida es mayor que la masa equivalente de H2O de magma saturado
(Burnham, 1979). A niveles someros en la corteza el cambio de volumen acompañando la
producción H2O fluida puede ser como mucho un 30% (a Ptotal de 1 kbar). Esto resulta en la
sobrepresión del interior de la cámara y causa un fracturamiento frágil de las rocas envolventes. El
hidrofracturamiento que resulta de este tipo de fractura usualmente forma fracturas con un
buzamiento empinado , porque la expansión de la masa de roca toma lugar, en dirección del
esfuerzo principal mínimo, el cual usualmente es en el plano horizontal. Las hidrofracturas tienden
a emanar de zonas de producción de H2O fluida en las porciones apicales del cuerpo granítico y
puden propagarse dentro de la roca caja e incluso alcanzar la superficie. Este concepto es
esquematizado en la Figura 2.7.

Trabajos experimentales han confirmado que el emplazamiento de granitos de alto nivel aumenta
la posibilidad de fracturamiento frágil, tant en la intrusión mismo y en las rocas encajantes
envolventes (Dingwell et al., 1997), de esta manera proporcionando una excelente preparación del
suelo para la circulación eficiente de fluidos con mena. Los factores que pueden ayudar a promover
el fracturamiento frágil en sistemas formando mena relacionado a granitos de alto nivel incluyen la
viscosidad del magma por la deshidratación, vesiculación de burbujas, y enfriamiento rápido.

2.4 LA COMPOSICIÓN Y CARACTERISTICAS DE LAS SOLUCIONES


MAGMATICAS-HIDROTERMALES

2.4.1 Venas de cuarzo – ¿que nos cuentan sobre las composiciones del fluido?
Las venas de cuarzo son producto de la precipitación de sílica de soluciones acuosas caliente
percolando a través de fracturas en la corteza de la Tierra. Cuando la presión y temperatura
aumentan, el agua se vuelve progresivamente en un solvente poderoso y puede disolver cantidades
significativas de la mayoría de los minerales formadores de roca. La solubilidad del cuarzo en agua
aumenta alrededor de 8 wt% a temperaturas de 900°C y presiones de mas de 7 kbar (Anderson y
Burnham, 1965). Cuando se disuelve en agua, la sílica existe en forma de H4SiO4. Este es un
constituyente típico de soluciones hidrotermales, y explica la ocurrencia común de cuarzo en venas.
La variación de la solubilidad de cuarzo es solución acuosa es, sin embargo, bastante compleja
(Rimstidt, 1997) y otros parámetros en adición a la P y T, como el PH y salinidad, juegan un papel
importante. Los efectos combinado de P, T, y PH sobre la solubilidad de cuarzo en soluciones
acuosas es mostrado en Figura 2.8.

2.4.2 Elementos mayores en soluciones magmáticas acuosas


Además de la sílica, el agua puede disolver cantidades significativas de otros elementos mayores,
como los metales alcalinos. En un ahora experimento clásico, Burnham (1967) reacciono un granito
con agua pura bajo una variedad de condiciones y mostro que a altas presiones y temperaturas (10
kbar y 650 °C) el contenido total de soluto en la solución fue de cerca 9 wt% y contuvo Si, Na, y K en
proporciones que son aproximadamente las mismas de un granito eutéctico (o minimamente
fundido) composiciójn (Figura 2.9). Esto indicó que el material precipitando de una solución acuosa
a alta P-T pudo tener la misma composición y mineralogía de un granito que cristalizó de un fundido
silicatado (ej., cuarzo+plagioclasa+feldespato K en proporciones aproximadamente iguales). A
presiones y temperaturas progresivamente menores, sin embargo, el contenido total de soluto de
la solución disminuyó (a un mínimo de cerca del 0.7 wt% a 2 kbar), con los metales alcalinos (ej.,
Na+K) también la disminución relativa de sílica (Figura 2.9). Cerca a la superficie, por lo tanto, los
productos precipitando de una solución hidrotermal acuosa contiene principalmente sílica.
Además de su habilidad para disolver especies catiónicas (ej., repectores de electrones) como el
Na+, K+, y Si4+, las soluciones magmáticas acuosas pueden también transportar cantidades
significativas de Ca2+. Mg2+, y Fe2+, al igual que una variada de sustancias aniónicas, en particular
Cl-. Los aninoes son referidos como ligantes (donadores de electrones) y hay varias otras que son
encontradas también comúnmente en soluciones acuosas, incluyendo HS-, HCO3-, y SO42-. Estos
componentes adicionales son importantes en procesos formadores de mena y son disctidos en mas
detalla a continuación. Mas discusión de solución química, y la habilidad de los fluidos hidrotermales
para transportar diferentes metales, es presetando en el Capítulo 3.

2.4.3 Otros componentes importantes de las soluciones magmáticas acuosas


Las rocas son principalmente hechas de cerca de diez elementos mayores oxidos que son usados
para forma los minerales formadores de roca mas abundantes. Cualquier muestra de roca dada
también contiene otros elementos mas conocidos, no obstante para muchos de ellos
desapareciendo en pequeñas cantidades. Su detección, para la mayoría, depende de las barreras
impuestas por tecnologías analíticas. Para una cierta extensión, lo mismo ocurre para el contenido
soluto de soluciones acuosas en la corteza de la Tierra, que, aunque dominada por algunas especies
altamente solubles, contienen un amplio rango de otros constituyentes, algunos de los cuales son
fácilmente detectables, con el resto ocurriendo solo en cantidades mínimas. Los constituyentes
traza de una solución acuosa no pueden ser simplemente descartados, especialmente en una
contexto formando mena, como estos ingredientes que distinguen un fluido formador de mena de
un que probablemente es estéril.
La composición típica de una solución magmática acuosa en la corteza de la Tierra es probablemente
mejor obtenido por análisis directo de aguas producidas adyacente a volcanes activos o
emanaciones geotermales. Aunque ahora es conocido que estos fluidos no son de origen
completamente magmático (la mayoría tienen contribuciones significativas de aguas meteóricas),
su composición da un indicador razonable de los tipos y cantidades de componentes disueltos en
soluciones acuosas. La Tabla 2.1 muestra las composiciones químicas de fluidos volcánicos y
geotermales de una variedad de lugares alrededor del mundo. Los datos muestran que estos fluidos
naturales son variables en composición y esto refleja las diferentes rocas a través de las cuales ellos
han estado circulando, y también, posiblemente, la contaminación por otros tipos de fluidos.
Típicamente el contenido de soluto de fluidos magmáticos es dominado por cationes alcalinos y
alcalinotérreos metálicos y por clorina como el mayor ligante, aunque excepciones ocurren (ej.,
Rotorua, Tabla 2.1).
Algunos comentarios adicionales son relevantes. Hay a veces una cantidad significativa de dióxido
de carbono asociado con fluidos magmáticos y esta es discutida de nuevo debajo. La cantidad de
azufre en fluidos magmáticos es generalmente baja, pero esta puede reflejar el hecho de que a
niveles altos de corteza las particiones de SO2 dentro de la fase vapor sobre la ebullición. Las formas
oxidadas y reducidas del azufres son esencialmente exclusivas y existen ya sea como complejo SO42.
(con S6+), o como comlejos HS- reducidos (con S2-). Los fluidos magmáticos relativamente oxidados
tipo I tienden a contener azufre como SO42- que se fracciona dentro de la fase acuosa líquida Los
depósitos de tipo pórfidos Cu y Mo, por lo tanto, son asociados con abundantes minerales de
sulfuros en la forma de pirita y calcopirita. Los magmas tipo S, que son mas reductores porque el
equilibrio con metasedimentos con grafito, exsuelven fluidos acuosos que contienen principalmente
H2S o HS- y tiene menor contenido total de azufre. La presencia de especies de azufre reducidas
promueve la estabilidad de minerales de sulfuros bajo menores temperaturas, como las que los
minerales óxidos de Sn y W (casiterita y esquelita) asociados con granitos tipo S tiende a formar
temprano en la secuencia de mineralización de estos sistemas (Burnham, 1997). Es importante
apuntar que la Tabla 2.1 ilustra los componentes mayores disueltos de soluciones acuosas naturales.
Las concentraciones de metales mena, los cuales puede ser considerados como constituyentes traza
en fluidos hidrotermales, usualmente son considerablemente menores que los mostrado en la tabla.
Desarrollos analíticos recientes han permitido mediciones de fluidos magmáticos formadores de
mena directamente de volúmenes pequeños de fluidos atrapados en inclusiones fluidas individuales
y esto ha proporcionado algunos nuevos entendimientos sobre la composición tanto de líquidos
acuoso y fases vapor en sistemas de granitos formadores de mena.

Composiciones de fluidos magmáticos de análisis de inclusiones fluidas


Los fluidos formadores de mena quizas pueden ser mejor y la mayoría directamente estudiados por
examinación de inclusiones fluidas (típicamente 5-30 µm en diámetro) que existen particularmente
en cuarzo, pero también en otros muchos minerales formadores de roca y mena. Los estudios de
sistemas de pórfidos de Cu y Mo han mostrado que la generación temprana fluidos atrapados en
inclusiones fluidas primarias es caracterizada por altas temperaturas y altas salinidades, y también
proporciona evidencia de la separación de fase líquida-vapor, o ebullición (Roedder, 1984). Las altas
salinidades de estos fluidos formadores de mena son confirmadas por el hecho de que sus
inclusiones fluidas asociadas a veces contienen cristales hios (ej., pequeños minerales que
precipitan del fluido por enfriamiento despues y fue atrapado dentro de la inclusión; ver
microfotografía añadida en Figura 2.10ª). La mayoría de estos cristales hijos identificados como
halita (NaCl) y, para una extensión menos, silvita (KCl), y confirma el hecho de que los fluidos
mamgáticos contienen cantidades significativas de K, Na, y Cl. Un grafico de composiciones fluidas
derivada de experimentos de homogenización microtermométricas sobre inclusiones fluidas
individuales para un amplio rango de depósitos de pórfidos Cu es mostrada en la Figura 2.10ª. Una
descripción mas detallada de estos datos y su significado puede ser encontrado en Roedder (1984).

Una evaluación mucho más completa y mas precisa de la composición de fluidos mena relacionados
a pórfidos de Cu, sin embargo es obtenida de análisis cuantitativos de inclusiones fluidas
individuales por ablación laser inductivamente acoplada plasma espectrometría de masa (LA-ICP-
MS). Esta técnica remarcable permite el reconocimiento y análisis de un amplio rango de especies
catiónicas en un pequeño volumen de inclusión fluida, y bajo lo niveles de cerca de 1 ppm. La Figura
2.10b muestra los resultados de análisis LA-ICP-MS de dos inclusiones fluidas coexistentes, la una
de inclusión rica en vapor y la otra inclusión hipersalina rica en líquidos conteniendo varios cristales
hijos, indica que el fluido mena estaba en ebullición cuando fue atrapado. Estos análisis reflejan la
extensión de dichos elementos fue divida entre líquido y vapor, también ss abundancia de metales
en cada uno. El grafico muestra que la mayoría de los elementos mencionados dividieron
preferencialmente (por un factor de cerca de 10 a 20X) dentro de la fase líquida en vez del vapor
(Figura 2.10b). Como lo esperado, los contenidos de Na y K del fluido mena son altos, pero también
lo es el contenido de Fe. El líquido también contienen cantidades significativas de Mn, Cu, Pb y Zn
en otros metales en los que preferencialmente se dividieron dentro de la fase vapor, un
característica también anteriormente anotada por Lowestern et al. (1991) y Heinrich et al. (1999).
2.4.4 Dióxido de carbono en fluidos magmáticos
Despues del agua, el CO2 es el gas mas común emanando de erupciones volcánicas y su presencia
es importante en una variedad de procesos formadores de mena, no obstante, en una forma mas
oculta que para el H2O. Este se disuelve como CO2 molecular en fundidos normales félsico o
máficos, pero en magmas alcalinos también existe como complejos ionicos de carbonato en solución
(Lowestern, 2001). Como un indicador, los fundidos de riolita y basalto a 3 kbar normalmente van a
contener entre 1000 y 2000 ppm CO2 disuelto comparado a valores al menos 4-5 veces mas alto en
un fundido leucitita. Las solubilidades de CO2, por lo tanto, aumenta como una función de la presión
y alcalinidad del magma.

Porque las solubilidades de CO2 son mucho menores que las del H2O, esta sigue que el CO2 va a
exsolver temprano de estos vapores generados a una etapa temprana de solidificación van a tender
a ser mas ricos en CO2 que los que se forman despues. El dióxido de carbono va a dividirse
preferiblemente dentro de la fase vapor y es probables que muchos magmas normales, tanto félsico
y máficos, sean saturados en vapor a profundidades significativas de la corteza, incluso a media
corteza (Lowestern, 2001). Otros gases de baja solubilidad son también probables a ser asociados
con la fase vapor creada por saturación temprana de CO2 o efervescencia. Los volátiles que son
generados en sistemas que han sufrido diferenciación extendida, o alcanzan niveles someros de
corteza, tienden a ser dominado por H2O debido a gases relativamente insolubles como CO2,
también el N2 y otros, que ya van a ser burbujeados fuera. Es, por lo tanto, posible para los magmas
volverse saturados en volátiles antes e independientemente de, la saturación de H2O fluida. La
presencia de CO2 en un fluidos acuosos en evolución dentro de un granito en cristalización va a
promover la inmiscibilidad entre las fases vapor y liquido salino de la solución. Estos procesos
pueden ser muy importante durante los procesos formadores de mena debido a que promueven la
precipitación de metales de una solución (Lowestern, 2001). La efervescencia del CO2 de un fluido
también va a promover ciertos tipos de alteración en las rocas caja e incrementar el pH en el fluido
remanente, además influenciando procesos formadores de mena (ver Capítulo 3, para mas
discusión de este y otros temas relacionados). Así, aunque el CO2 no parece jugar un papel directo
en el transporte y concentración de metales en soluciones hidrotermales, aun así tiene un papel que
jugar en la distribución y precipitación de metales, especialmente mediante volátiles o fase vapor.

2.4.5 Otras características importantes de los fluidos magmáticos


Una característica importante de las soluciones magmáticas acuosas a bajas presiones es que
tienden a ser segregados en dos fases de diferentes densidades y composición. Esta característica
de las soluciones hidrotermales a veces es pasada por alto, y también complica mas la descripción
de estos fluidos. Es evidente que la curva llamada punto de ebullición (Figura 2.2) es actualmente
parte de un solvus que separa H2O de baja densidad del H2O de lata densidad. Como se enfatiza
debajo, esta distinción se vuelve insignificante en espacio P-T sobre el punto crítico (o el solvus)
donde las densidades del liquido y vapor se han fusionado y una sola una fase “fluida” existe. El
punto crítico del agua pura, a 374°C, 220 bar, y 0.322 g/cm3, migra hacia temperaturas y presiones
mas altas cuando disuelve sales (usualmente en forma de complejos de cloruros alcalinos) son
adicionadas al agua. Un representación de los puntos críticos para soluciones hidrotermales de
diferentes salinidades y el efecto sobre las densidades de fluidos (isocoras) es mostrado en la Figura
2.11ª. La ubicación de los puntos críticos, como una función del incremento en la salinidad,
representa un límite solvus de comportamiento inmiscible en soluciones acuosas.

Las relaciones de fase de soluciones magmáticas acuosas (salmueras) son también, por lo tanto,
dependen de este solvus, dependiendo de la presion, temperatura, y composición del fluido, dicta
si una sola fase homogénea existe sobre el punto crítico, o dos fases inmiscibles bajo este. La Figrua
2.11b muestra una proyección del sistema H2O-NaCl dentro del plano T-X en el que la curva del
solvus para varia presiones es mostrada. Las relaciones de fase muestran que, para un granito a 600
bar en el que un fluido H2O exsuelto se ha formdo con una composición en el punto A, el fluido
existe bajo el solvus relevante. Este fluido se debe segregar dentro de dos fases, una pequeña
proporción de salmuera conteniendo 87 wt% NaCl (A’’) y un fluido de baja densidad mas voluminoso
(A’) conteniendo solo 1 wt% NaCl (Burnham, 1997). El mismo granito a 1 kbar (punto B, Figura 2.11b)
podría también exsolver dos soluciones acuosas, pero con diferentes composiciones. La salmuera
podría en este caso contener 53 wt% NaCl (B’’), mientras el fluido remanente podría tener 2 wt%
NaCl (B’). El granito a 2 kbar (punto C), sin embargo, podría existir sobre el solvus (que cae fuera del
diagrama en la Figura 2.11b) y podría exsolver una sola, fase fluida homogénea conteniendo cerca
de 12.5 wt% NaCl. Debería ser anotado que la presencia de CO2 en el fluido va a promover la
inmiscibilidad a mucho mas altas presiones y, como lo mencionado antes, este es uno de los papeles
mas importantes que este gas común juega en los procesos formadores de mena. Estas
caracterisicas de un fluido H2O exsolviendo de un magma graníticos son extremadamente
importante para entender los procesos formadores de mena porque la división de metales por si
misma diferentemente entre la salmuera de alto contenido de soluto y la fase de H2O mas pura.
Este tema es discutido en mas detalle en la sección 2.6 debajo.

La discusión de los fluidos magmáticos-hidrotermales y procesos formadores de mena en las


secciones anteriores ha dad lugar a alguna confusión en la terminología. Como un resumen, y antes
de proceder más, las siguientes definiciones son presentadas en orden de clarificar algunos de los
conceptos referidos.

• Saturación H2O En alguna etapa, ya sea temprana o tardía en la secuencia de


cristalización, el magma granítico se va a volver saturado en agua, resultando en la formación
de una fase químicamente distinta, acuosa en el fundido silicatadao.
La fase magmática acuosa puede existir como líquido, vapor, o fluido supercrítico homogéneo.
En el último caso este debería también ser considerado como gas debido a que es una sustancia
que podría llenar su contenedor. Por esta razón el fluido magmático acuoso es a veces
simplemente referido como “fase vapor”.
• Saturación vapor, también se refiere como ebullición, ocurre cuando el equilibrio de
la presión de vapor del magma iguala a la presión de carga sobre el sistema y burbujas de gas
(ej., vapor o vapor de agua, CO2, N2, SO2, H2S, etc.) nuclean en el magma. La saturación vapor
de volátiles de baja solubilidad como el CO2 puede no ser relacionado a, y pude preceder, la
saturación H2O.
El proceso de saturación H2O puede ser alcanzado en dos formas, ya sea por cristalización
progresiva del magma, o por disminución de la presión del sistema:
• Primera ebullición se refiere al caso donde la saturación vapor es alcanzada por virtud
de la disminución en la presión (ej., por el emplamiento hacia arriba del magma o
fracturamiento mecánico de la cámara) y es particularmente aplicable a sistemas de alto nivel.
Refleja el hecho de que las solubilidades de fases volátiles den un fundido aumentan como una
función de la presión.
• Segunda ebullicicón se refiere a la consecución de la saturación H2O fluido por
cristalización progresiva dominantemente de minerales anhidrícos bajo condiciones isobáricas.
Pertenece a sistemas magmáticos (emplazados) más profundos y ocurre solo despues de una
etapa relativamente avanzada de cristalización.
• Inmiscibilidad se refiere a la tendencia de las soluciones salmuera a bajas
presiones, o en presencia de CO2, para segregar en dos fases, una densa, salmuera mas salina y
otra solución acuosa de baja densidad, menor densidad.

2.5 UNA NOTA SOBRE PEGMATITA Y SU SIGNIFICADO PARA PROCESOS


FORMADORES DE MENA RELACIONADOS A GRANITOS.
2.6 FRACCIONAMIENTO DE ELEMENTOS TRAZA DE FLUIDO-FUNDIDO

2.6.3 Confirmación experimental de comportamiento de fraccionamiento del Cu, Mo,


W

En una serie de experimentos corren a 750 °C y 1.4 kbar, Candela y Holland (1984) fueron capaces
de medir la extensión a la cual el Cu y Mo se dividen entre el fundido granítico y un fluido acuoso
coexistente conteniendo tanto Cl- y F-. Los resultados de estos experimentos son mostrados en la
Figura 2.18 y claramente demuestran que el Cu es un metal cuyo comportamiento de
fraccionamiento es fuertemente controlado por la concentración Cl- de la fase fluida, mientras el
Mo permanece inafectado por este último. El valor DCuFluido/fundido varia de cerca de 1, para fluidos de
baja salinidad, cerca de mas del 50 a altas salinidades (Figura 2.16ª) y es determinado por la relación
DCuFluido/fundido=9.1 [Cl-]. Al contrario, aunque Mo es también preferencialmente dividido en el fluido
H2O (DMoFluido/fundido=2.5), su coeficiente de partición es arreglado y permance constate
independiente de la concentración de Cl- (Figura 2.16b). Es interesante notar que el
comportamiento de fraccionamiento tanto de Cu y Mo no es afectado por la presencia de F- en la
solución acuosa. Esto es porque la fluorina se tiende a dividir mas fuertemente dentro del fundido
silicatada (DFFluido/fundido0.2-0.3) que dentro del fluido acuoso y es, por lo tanto, generalmente no
presente como un agente de acomplejando para metales en la fase fluida.

El comportamiento de fraccionamiento fluido-fundido del W no están bien restringido como para el


Cu y Mo, aunque experimentos sugieren que sus propiedades son similare a las del Mo, pero que su
coeficiente de partición es incluso menor (DWfluido/fundido =1: Manning y Henderson, 1984; Keppler y
Wyllie, 1991). Sin embargo, es también conocido que el W se comporta como un elementos
incompatible en términos de su comportamiento de fraccionamiento crsital-fundido en magmas
graníticos relativamente reducidos (ej., tipo S) solidificando a alguna profundidad de la corteza de
la Tierra. Al contrario, el Mo en una manera mas competible en el mismo tipo de magma que la
fraccionamiento tenderá a resultar en aumento en las tasas W/Mo (Candela, 1992). La eficiencia de
la extracción de metales por una fase acuosa exsolviendo tarde en la secuencia de cristalización de
este un granito que va, por lo tanto, a favorecer la concentración de W sobre Mo, a pesar de los
valores DFluido/fundido menores. El comportamiento de fraccionamiento cristal-fundido de W también
contrasta con el del cobre, que tiende a actuar como un elemento compatible en virtualmente
cualquier composición de magma (Candela y Holland, 1986). Un valor de DCucristal/fundido=3 fue
calculado por una composición basáltica de magma cristalizando y es probable que sea >1 para un
granito también, debido a que Cu es capaz de sustituir muy eficientemente dentro de fases sulfuros
accesorios y, a una menor extensión, dentro de biotita y magnetita.

Es aparente que tanto los coeficientes de partición fluido-fundidos y cristal-fundidos juegan un


papel importante en la distribución de metales dentro y alrededor de plutones de granitos
cristalizando. Estos parámetros, cuando se acopla con consideraciones de tipo granito, profundidad
de emplazamiento, y el timing de saturación -agua en relación a la secuencia de cristalización, puede
ser usado para explicar la naturaleza y origen de muchos diferentes tipos de depósitos de mena
magmáticos-hidrotermales. Un modela que resumen algunas de las características discutidas en
este capitulo es presentado en la sección 2.8 despues como una explicación para las características
de depósitos de Cu, Mo, y Au relacionados a granitos.

2.7 CONTENIDO DE AGUA Y PROFUNDIAD DE EMPLAZAMIENTO DE


GRANITOS – RELACIONES CON LOS PROCESOS FORMADORES DE MENA

Muchos de los depósitos de mena asociados con granitos, como menas de pórfidos Cu y epitermal
Au-Ag, son relacionados al emplazamiento de magma a altos niveles de la corteza donde la
producción H2O fluido y el hidrofracturamiento puede tomar lugar. Estos tipos de depósitos son
comúnmente localizados en ambientes volcánicos y subvolcánicos y se han formado como mucho
de la acción del agua derivada de superficie (o meteórico) como ellas se fomran de la circulación de
aguas magmáticas. Otros tipos de depósitos, como los de pórfidos Mo y depósitos Sn-W hospedado
en granitoides, son generalmente asociados con magmas emplazados en niveles mas profundos en
la corteza. La profundidad de emplazamiento de un magma granítico, junto con los parámetros
relacionados como la composición del magma y contenido de agua inicial, juegan un papel muy
importante en determinar la naturaleza y origen de depósitos de mena asociados con rocas ígneas
félsicas, y estos temas son discutidos debajo.

La sección 1.3.1 describe como los magmas graníticos derivados de fusión de materiales fuente
diferentes, a diferentes presiones y temperaturas en la corteza, podría contener cantidades
variables de agua. Un fundido derivado por anatexis de una roca conteniendo principalmente
muscovita, por ejemplo, podría contener en la región de 7-8 wt% H2O. Por el contrario, la fusión de
deshidratación de una roca fuente anfibolítica debería producir solo un fundido a presión y
temperatura más alta (ej., profundos en la corteza) y esto podría contener solo 2-3 wt% H2O (Figura
2.3). Esto fue sugerido en base de que los magmas de granitos tipo S podrían contener inicialmente
mas agua que un magma de granitos tipo I. En términos de este modelo el magma granito tipo I mas
seco (posiblemente con contribuciones del manto superior), mientras los granitos tipo S viene de
material fundido en corteza media- a inferior. Varios trabajadores han usado estos conceptos para
desarrollar modelos que enlazan las profundidades emplazamiento de granitos con sus
características metalogénicas (Hyndman, 1981; Strong, 1981).

La Figura 2.17ª muestran el mismo diagram P-T como la Figura 2.3 pero invertida para reflejar la
superficie (ej., presiones bajas) al tope del diagrama. Las zonas hipotéticas de fusión son mostradas
para cada uno de los tres casos donde el agua requerida para iniciar la fusión es suplida por la
descomposición de muscovita, biotita, y anfíbol. Si el suficiente fundido es permitido para acumular
y despues aumentar hacia arriba en la corteza a lo largo de un patrón de enfriamiento adiabático,
es aparente, al menos teóricamente, que cada uno de estos magmas podría cristalizar a diferentes
niveles en la corteza. El movimiento adiabático hacia arriba del magma (ej., donde la perdida de
calor conductivo del magma es ignorado) podría involucrar enfriamiento a una tasa de cerca de
1.5°C/kbar y en espacio P-T podría aproximadamente seguir las curvas empinadas que definen los
limites de fase mineral. Conceptualmente, por lo tanto, los magmas podrían ascender hacia arriba
de la corteza hasta que interseca el solidus de granito saturado en agua, por lo cual el tiempo ellos
se podrían volver completamente solido y pudo no intruir más. En realidad, la cristalización es
probables que ha ocurrido antes de este nivel porque la perdida de calor por las rocas caja y el
solidus de saturación de agua efectivamente representa la profundidad sobre la que un magma es
improbable a ser emplazado. Estas consideraciones sugieren que los magmas de granitos tipo S
deben ser emplazados a profundidades de corteza media (4-5 kbar), como es dictado por la
intersección de la curva de descomposición de la muscovita con el solidus de granito saturado en
agua. Por el contrario, la intersección de la curvas de descomposición biotita o anfíbol con el solidus
de granito saturado en agua indica que un magma tipo I se pudo mover a niveles de corteza mucho
mas someros (1 kbar o menos) antes de solidificarse completamente (Figura 2.17ª): La Figura 2.17b
es un perfil esquemático de la corteza mostrando las relaciones entre la profundidad de
emplazamiento y el carácter metalogénico de varios tipos de depósitos relacionados a granitos. Los
magma tipo I generados profundo en la litosfera usualmente formados adyacente a zonas de
subducción y comúnmente recibe una contribución de fundidos derivados del magma máficos.
Formándose a altas temperaturas (1000 °C o más) y siendo relativamente seco (contenidos de H2O
<3-4 wt%) van a ascender a niveles someros de la corteza y puede incluso extruir para formar
estructuras volcánicas sustanciales. Estos magma van típicamente a exsolver una fase vapor
magmática por la primera ebullición, un evento que tambian va a promover hidrofracturamiento,
brechamiento, y la circulación amplia de soluciones hidrotermales dentro y alrededor de los sitios
de actividad magmática.

Estos son ambientes en los que los depósitos de tipo pórfido Cu, tanto como epitermal Au-Ag,
ocurren.

Por el contrario, los magmas tipo S son generados en la corteza media- e inferior- por fusión parcial
de una roca fuente que contiene una proporción sustancial de material metasedimentario. Estos
fundidos se van a formar a temperaturas relativamente bajas (alrededor 700°C) y van a contener
inicialmente H2O significativamente disuelto en el magma. Este tipo de magma va a cristalizar en
corteza media, no tan lejos de su sitio de generación, y va a ser típicamente estéril. Si una
cristalización fraccionada sustancialmente ocurre, sin embargo, los elementos traza incompatibles
se van a volver concentrados en fundidos residuales, y en estas rocas representando productos
cristalizados de magma diferencia (ver Box 1.3, Capítulo 1). La saturación H2O fluido va también a
ocurrir eventualmente en un magma residual por la segunda ebullición, para formar pegmatitas y
depósitos relacionados. La concentración de volátiles, tanto como elementos como el boro y
fosforo, va, junto con agua exsuelto en el magma residual, disminución de la temperatura de solidus
de granitos saturados en agua a menores temperaturas (500-600°C) como los que el magma pudo
continuar su migración hacia arriba a niveles mas altos en la corteza (Figura 2.17b). Las presiones
fluidas probablemente podrían no ser suficientes para fracturar la roca a estas profundidades, pero
otros controles estructurales podría sin embargo promover la circulación de fluidos y es en estos
ambientes en los que depósitos de Sn greisen, depósitos de pórfidos Mo, menas de skarns
polimetálicos, y venas mesotermales se pueden formar.

BOX 2.1 Fluidos magmáticos hidrotermales asociados con intrusiones


de granito: 1 Depósitos de pórfido de cobre La Escondida, Chile

Chile es el mayor productor de cobre del mundo, con una exportación en el 2000 de cerca de 4.6
millones de toneladas de cobre fino, o el 36% de la producción mundial (Camus y Dilles, 2001). El
norte de Chile en particular contiene varios depósitos de pórfidos de cobre gigantes, incluyendo
minas mundialmente reconocidos como Chuquicamata, El Teniente, y El Salvador. Los depóstos de
pórfidos de cobre de esta provincia metalogénica formada durante cinco episodios magmaticos
distintos extendiéndose del Cretácico al Plioceno. La mas prolífica de estas es el periodo de
magmatismo Eoceno-Oligoceno, tiempo durante el cual al menos 10 depósitos de pórfidos de cobre
mayores fueron formados, incluyendo las dos minas de cobre mas grande del mundo, La Escondida
y Chuquicamata. La Escondida fue descubierta recientemente en 1981 y en 1999 produció cerca de
800 000 toneladas de cobre fino de una reserva base de mas de 2 billones de toneladas de mena al
1.15 wt% cobre (Padilla Garza et al. 2001).
La Escondida, junto con otros sistemas de pórfidos gigantes como Potrerillos, El Salvador,
Chuquicamata, El Abra, y Collahuasi hacia el norte y sur, caen sobre el sistema de fallas Domenyko
(Figura 1.). El fallamiento fue dominantemente transcurrente durante el magmatismo Eoceno-
Oligoneco. Localmente desarrolló áreas de transtensión y dilatación son consideradas de haber
creado un ambiente conductivo para el ascenso del magma a alto niveles y acompañando
alteración-mineralización (Richards et al., 2001). El distrito La Escondida actualmente contiene seis
depósitos separados (del cual La Escondida es el mas grande) contenido dentro de un sistema de
fallas de rumbo lateral-izquierdo. La mineralización es asociado con intrusiones de cuarzo
monzonita (adamelita) y granodiorita dentro de los que la alteración evolucionaron de la temprana
potásica a sericita-clorita y cuarzo-sericita. Estos conjuntos han sido sobreimpuestos por un
conjunto de alteración argílica avanzada, y tanto menas de sulfuros hipógenos y sulfuros supérgenos
+ oxidos ocurren (Padilla Garza et al., 2001).

Los cortes a través de La Escondida (Figura 2) muestra que el sistema es relacionado a una intrusión
multifase, 38 Ma de edad, la Escondida stock, que corta a través de andesitas del Paleoceno. Este
fue ocultado, hace 35 millones de años, por un domo riolítico. La alteración secuencial de tres fases
es registrada en el depósito. La etapa más temprana involucra alteración potásicca (feldespato K +
biotita) con silicificación asociada y alteración propilítica (clorita-sericita), y es enlazado a magnetita,
calcopirita, y bornita. Esto fue seguido por alteración fílica (sericita-clorita-cuarzo) con la que la
calcopirita, pirita, y molibdenita son asociados. La etapa de alteración hidrotermal final involucra
sulfato-ácido o alteración argílica avanzada (cuarzo-pirofilita-alunita). La precipitación de conjuntos
de sulfuros hipógenos, principalmente durante las dos primeras etapas de alteración, es atribuido a
una caída en la temperatura cuando el sistema magmático enfriado fue levantado, tanto la dilución
progresiva de fluidos magmáticos por soluciones meteóricas (Padilla Garza et al., 2001).

Un aspecto importante del sistema formador de mena en La Escondida es el desarrollo de


mineralización supérgena (ver Capítulo 4 y Box 4.2) en áreas donde las tres etapas de alteración
hidrotermal se sobreimponen (ej., donde los máximos sulfuros fueron concentrados). Los procesos
supérgenos fueron activos entre 18 y 15 Ma y fueron responsables del 65% de los recursos totales
de cobre de la mina (Figura 2).

Las porciones superiores de la zona supérgena contiene una capa lixiviada caracterizada por bajos
contenidos de Cu y Mo y limonita, hematita, y goetita. Esta es infrayacida por una cobertura
supérgena enriquecida en sulfuros conteniendo principalmente tenores (mas de 3.5 wt% Cu) ocurre
en las partes mas gruesas de la zona supérgena, y tambien coincide con zonas de intensa venas
stockwork y sobreimposición de alteración hidrotermal. Los minerales “oxidos” de cobre como la
crisocola, brochantita, y atacamita tambien ocurren, principalmente en fracturas tardías.

2.8 MODELOS DE FORMACIÓN DE DEPÓSITOS DE TIPO PÓRFIDO Cu, Mo, y W

El progreso considerable ha sido hecho en entendimiento de los procesos que ocurren en una
intrusión de granitos cristalizando para formar depósitos de metales base asociados (Candela y
Holland, 1984, 1986; Candela, 1989, 1991, 1994; Candela y Piccoli, 1995). Como una generalización,
los depósitos de pórfidos Cu-Mo son asociados con magmas relacionados a arco “calco-alcalino” o
tipo I generándose adyacente a zonas de subducción tipo Andino. Los depósitos Sn-W son a veces
mas asociadas con granitos tipo S que son derivados por fusión parcial de corteza continental que
pudo normalmente incluir una proporción significativa de material metasedimentariao En ciertos
ambientes los últimos depósitos son también considerados como “tipo pórfido” incluso aunque
pueden diferir significativamente en sus características geológicas de los tipos Cu-Mo. Cada uno de
estos tipos de depósitos es considerado en turnos debajo.
2.8.1 El origen de depósitos de tipo pórfidos Cu-(Mo) y pórfidos Mo-(Cu)
La familia de tipos de depósitos conocidos como menas pórfidos Cu-Mo pueden ser subdivididos en
dos grupos, uno en el que el Cu es el metal explotable dominante (junto con menor Mo y
ocasionalmente Au), y el otro donde el Mo es el metal explotable dominante (con menos Cu y a
veces W). Los dos grupos son referidos debajo como pórfidos de tipo Cu-(Mo) y Mo-(Cu),
respectivamente. Los depósitos de pórfidos son la fuente mas importante del mundo tanto para Cu
y Mo y, respectivamente en la región circum-Pacifico, hay muchos depósitos de clase mundial que
explotan estos metales. Una descripción de uno de los mas grandes depósitos de pórfidos Cu-(Mo),
La Escondida en Chile, es proporcionado en el Box 2.1.

Como ilustra la Figura 2.18, ambos tipos son asociados con la generación de magmas de granitos
oxidados tipo I asociados con procesos de fusión adyacentes a corteza oceánica en subducción. Los
pórfidos Cu-(Mo) pueden ser explicados en términos de un cuerpo de magma con un contenido H2O
inicial relativamente bajo (heredado del fluido en ascenso de fusión de un protolito anfibolítico)
ascendiendo a niveles altos en la corteza antes de que la cristalización significativa toma lugar. Es
considerado probables que algunas fracciones del fundido de esta cámara magmática de alto nivel
va ser ´pulsado fuera y extruir sobre la superficie. Estas fracciones van a cristalizar para forma suites
de rocas volcánicas o subvolcánicas (pórfidos) cuyas composiciones no serán altamente
diferenciados (ej., granodiorítica a riodacítica) por el bajo grado de fraccionamiento que toma lugar
antes de la extrusión. Porque el magma es emplazado a baja presión de carga, la saturación de
contenido de agua va a ser relativamente baja y probablemente no significativamente diferente al
contenido inicial de agua. La saturación-vapor va, por lo tanto, a ocurrir temprano en la secuencia
de cristalización, esencialmente debido a la “primera ebullición”. A pesar de que el Cu es un
elemento compatible en un fundido granítico cristalizando (secuestro de Cu dentro de fases de
sulfuros accesorios y resulta biotita en DCucristal/fundido>1), la ausencia de cristalización significa que
muy poco del metal va ser removido del fundido para el tiempo en que la saturación-agua ocurre.
La fase vapor, por el contrario, es caracterizada por altas concentraciones de Cl- y por lo tanto, va a
escarbar eficientemente el Cu de una fundido silicatado.

En esta configuración, sin embargo, la situación con respecto al Mo es diferente. El Mo es un


elemento incompatible en una fundido granítico cristalizando (DMo cristal/fundido<1) pero, por el bajo
grado de cristalización, su concentración en el magma residual no va a incrementar
significativamente antes de la saturación de agua. Sobre la saturación, el Mo va a dividirse dentro
de la fase H2O fluida, porque su coeficiente de partición es relativamente pequeño e inafectado por
la concentración de Cl- (DMo Fluido/fundido=2.5) nunca va a alcanzar concentraciones muy significativas
en la fase fluida. En este ambiente, por lo tanto, un magma de alto nivel granodiorítico tipo I va a
exsolver una fase fluida acuosa que es altamente enriquecida en Cu, pero solo moderadamente en
Mo, y forma un depósito de pórfidos Cu-(Mo) típico.

Un escenario diferente puede ser construido para la construcción de depósitos de pórfidos Cu-(Mo),
donde es imaginado que el magma tipo I parental pudo originalmente contener un contenido de
agua inicial un poco mayor (quizas debido al ascenso de fluido por fusión de una protolito con
biotita) que en la situación de Cu dominante. Como muestra en la Figura 2.18, este magma no podría
ascender normalmente a los mismos niveles de corteza someros como su equivalente más seco. La
saturación del contenido de agua del magma es también considerablemente mayor en esta
situación y, consecuentemente, un grado mayor de cristalización necesita tomar lugar antes de que
la saturación-agua es alcanzada (en este caso la saturación-vapor pudo ocurrir por segunda
ebullición). Como el magma cristaliza el Cu va a ser extraído del fundido y finaliza distribuido de
alguna manera equitativamente a través de rocas representando las zonas marginales del pluton.
Este Cu no va, desde luego, a estar disponible para fracionamiento en el fluido acuoso una vez la
saturación es alcanzada. El Mo, por otra parte, es incompatible y su concentración va a continuar
con el incremento en el fundido residual. Cuando la saturación ocurre, el Mo va ser concentrado
incluso mas dentro de la fase H2O fluida por su coeficiente de partición favorable. A pesar del hecho
de que el Cu será fuertemente dividioo dentro del H2O fluida altamente salina, su abundancia en el
fundido ahora es significativamente empobrecida debido al secuestro mas temprano cristal-fundido
y la fase vapor no va ser significativamente concentrada en Cu. La extracción de una fracción fundida
de una camara magmática emplazada profundo va a dar ascenso a un pluton que es menos probable
que alcance la superficie y cuya composición es mas altamente diferenciada debido al grado de
cristalización mayor antes de la extracción. La mineralización de estilo pórfido asociado con la
circulación de un fluido magmático hidrotermal dentro y alrededor de esta intrusión pudo tener
concentraciones de Mo en exceso de Cu, dando lugar a la mineralización de tipo pórfido Mo-(Cu).
2.8.2 El origen de los depósitos de tipo pórfido W
El anterior modelo puede ser usado también para explicar algunas caracteristicas de depósitos de
mena tipo pórfidos, dominados por W, que son asociados con muchos ambientes de arco
magmático. Candela (1992) ha enfatizado las relaciones que existen entre depósitos de tipo pórfidos
ricos en W y los mas reducidos, granitos tipo S, con ilmenita, que cristalizan a niveles relativamente
profundos sobre la corteza de la Tierra y cuyo ambiente es ilustrado bajo (3) en la Figura 2.18. Bajo
condiciones oxidantes, como las aplicables a granitos tipo I, con magnetita discutidos antes, la
eficiencia de extraer W de un sistema magmático-hidrotermal dentro de un cuerpo de mena es
relativamente bajo y este metal no es un componente normal de depósitos de pórfidos Cu-Mo. Bajo
condiciones reductoras, sin embargo, el W se comporta como un elemento incompatible en
términos de su fraccionamiento cristal-fundido durante la cristalización fraccionada. Cuando un
magma se forma de fusión parcial de un precursor metasedimentario, el fundido formado va a ser
relativamente profundo en la corteza. Este fundido es también probable a ser peraluminoso y
relativamente reducido debido a que ha equilibrado con el material metasedimentario que pudo
haber contenido carbono orgánico. La saturación del contenido de agua bajo estas condiciones va a
ser alta y un grado significativo de cristalización va a ocurrir antes de que la saturación es alcanzada
(por segunda ebullición). Porque el W es incompatible bajo estas condiciones su concentración va
aumentar en el fundido residual, mientras las concentraciones de Mo va a tender a disminuir porque
se comporta de una forma más compatible bajo condiciones reductoras. Cuando a fase H2O fluida
se exsuelve va a interactuar con un fundido altamente diferenciado que es significativamente
enriquecido en W. La fase fluida va a escarbar algo de W pero el coeficiente de partición
relativamente bajo (DW Fluido/fundido=1) va a asegurar que la mayoría de la concentración es alcanzada
antes de la saturación de agua. Los depósitos que se forman en este ambiente van a ser asociados
con granitos tipo S altamente diferenciados, de nivel profundo con concentraciones de metales
dominadas por W y solo en menor cantidad Mo.

2.9 FLUJO DE FLUIDOS DENTRO Y ALREDEDOR DE PLUTONES


GRANÍTICOS
Las discusión ha enfocado en este capítulo mas a los mecanismo por los cuales una fase fluida
magmática acuosa es formada y su papel en el transporte de metales derivados esencialmente del
fundida. De igual importancia con respecto a la formación de depósitos de mena magmáticos-
hidrotermales son consideraciones de los patrones de fluidos dentro y alrededor de la intrusión que
forma el fluido fuente, y también que tanto tiempo los fluidos magmáticos-hidrotermales pueden
permanecer activos subsecuente al emplazamiento del magma. Los caminos fosilizados de flujo de
fluidos son revelados por reconocimiento de efectos de alteración y mineralización que una solución
hidrotermal impone sobre las rocas a través de las cuales circuló (ve Capítulo 3). La predicción de
donde estos por modelamiento de efectos termales de una fase fluida en evoluciones en términos
tanto de perdida de calor conductiva y convectiva dentro y alrededor de una intrusión terórica. Ha
habido mucho intentos de modelar el flujo de fluidos alrededor de plutones de granitos y estos han
probado la utilidad en predecir donde el flujo de fluidos optimo, y que mejora la mineralización,
debería ser localizado en relación con la intrusión.

Cathlles (1981) uso un modelamiento termal enfocado a demostrar que las intrusiones se enfrían
muy rápidamente, al menos en términos de una escala de tiempo geológico. En la Figura 2.19ª las
curvas modelos que son graficadas relatan el tiempo en el que una intrusión se enfría al 25% de su
temperatura inicial, y el tamaño y geometría de la intrusión. Los modelos pueden ser levantados en
casos donde la perdida de calor es por solo por conducción, o por una combinación de conducción
y flujo de fluidos convectivos. Para el caso donde una intrusión pequeña (1-2 km ancho) se enfría
por conducción de calor a las rocas pared, la solidificación va ser completa y una la circulación de
fluidos magmáticos-hidrotermales va se efectivamente sobre 10 5 -10 6 años. Si el enfriamiento es
acompañado por perdida de calor convectivo causado por la circulación de un fluido hidrotermal a
través de una red permeable de fracturas (como las que podrían ocurrir en el caso en que hay un
hidrofracturamiento; ver sección 2.3.3 y Figura 2.7) entonces este pluton podría ser reducido al 25%
de su temperatura inicial en tan solo 104 años. Así, un sistema altamente permeable donde el flujo
de fluidos es maximizado por exsolución de fluidos e hidrofracturamiento, la perdida de calor va a
ser muy rápida y una sola intrusión no va a ser capaz de sostener los periodos geológicamente largos
de circulación hidrotermal. Esta característica odría ir en contra del desarrollo de un cuerpo de mena
viable, si es considerado que los fluidos magmáticos son los únicos responsables de la formación de
mena. Debe, sin embargo, ser anotado que la mineralización dentro y alrededor de la intrusión
magmática también puede ser resultado de fluidos derivados externamente y que estos pueden
circular en respuesta a otros factores además de gradientes termales.

Norton y Cathles (1979) han sido capaces de modelar la evolución del flujo de fluidos hidrotermales
con el tiempo dentro y alrededor de una intrusión granítica. La Figura 2.19b y c ilustran las isotermas
y dibuja el contorno del flujo de fluidos que son probables a existir alrededor de una intrusión
granítica en dos periodos distintos (ej., 2x104 y 105 años despues del emplazamiento del magma y
saturación de fluidos) para situaciones donde el calor es perdido tanto por conducción y convexión.
En breve despues de la intrusión de incluso un cuerpo de magma granitíco pequeño (Figura 2.19b)
una anomalía termal sustancial es creada por mas de 2 km alrededor de la intrusión y un sistema
activo de flujo de fluidos circulatoria es establecido tanto en los bordes y el tope del cuerpo. Las
soluciones acuosas establecen una celda convectiva donde el flujo es hacia arriba de la intrusión, y
circula de nuevo hacia abaja a alguna distancia lejos. Estas soluciones podrían incorporar aguas de
rocas encajantes envolventes al igual que fluidos magmáticos derivados del enfriamiento del pluton
mismo. Un indicador del flujo de fluidos alrededor de la intrusión es obtenido en los diagramas de
gradientes de la función corriente que definen las líneas de corriente (streamlines) (ej., las mas
cercanas junto las líneas de corriente, el mayor flujo de fluidos). El fin de la celda de fluido
hidrotermales es demostrado en la Figura 2.19c, donde es claro que la anomalía termal
proporcionando la energía para la circulación de fluidos, igual que la convexión de fluidos misma,
ha disminuido a proporciones insignificantes dentro de 105 años del emplazamiento del magma y
saturación de fluidos. Esto de nuevo refuerza la vista de que los eventos formadores de mena es
probablemente que sean de corta duración dentro y alrededor de intrusiones graníticas pequeñas
representando justo un solo pulso de magma. De la misma manera, los cuerpos de mena que se
forman bajo estos tipos de condiciones son también posibles a ser pequeños y quizás sub-
económicos, Las intrusiones multi-episódicas, mas grandes son requeridos para crear un sistema
donde un cuerpo de mena magmático-hidrotermal se va formar.

Un buen ejemplo de donde la naturaleza del flujo de fluidos dentro y alrededor de un granito de
intrusiones contribuye en gran manera para entender la distribución de mineralización magmática-
hidrotermal es proporcionada por depósitos polimetálico (Sn-W-Cu-Pb-Zn) del batolito Cornubian
en Cornwall y Devon, al suroeste de Inglaterra. En este distrito minero clásico venas mineralizadas
ocurren a lo largo de márgenes de plutones graníticos individuales, pero también se extiende dentro
de rocas encajantes metasedimentarias en los alrededores. La mineralización también es
caracterizada por una zonación regional pronunciada en la distribución de metales. Estos patrones
pueden ser explicados en términos de la naturaleza del flujo de fluidos dentro y alrededor de
plutones graníticos individuales, tanto en la forma de las intrusiones y la extensión de la cual han
sido exhumados. Una descripción de la mineralización y zonación de metales en el batolito
Cornubian es proporcionado en el Box 2.2

BOX 2.2 Flujo de fluidos dentro y alrededor de intrusiones graníticas:


mineralización polimetálica asociada con granitos de Cornwall,
suroeste de Inglaterra
El granito del batolito Cornubian, emplazado hace 280-290 Ma durante la orogenia Varisca del
Carbonífero al Pérmico, es asociado con uno de los distritos mineros polimetálicos del mundo. Los
afloramientos de batolitos como unas series de 5 plutones mayores, además como un hospedante
de cuerpos graníticos menores y diques relacionados, en los condados de Cornwall y Devon,
suroeste Inglaterra (Figura 1). Se cree que el batolito ha sido emplazado en respuesta a la
subducción causada por convergencia de Laurasia y África (ensamble de Pangea), con granitos
similares y estilos de mineralización también evidente en otros lugares a lo largo del cinturón
orogénico, notablemente en España, Portugal, Francia y Republica Checa en Europa, y New
Brunswick-Newfoundland en Norte América. En el suroeste de Inglaterra la minería pued ser trazada
desde antes de la Edad de Bronce, pero los picos de actividades ocurrieron en el silgo diecinueve.
Históricamente, el distrito ha sido predominantemente productor de Sn (2.5 millones de toneladas
de producción acumulada de metal) y Cu (2 millones de toneladas de producción acumulada de
metal), aunque otros metales como el Fe, As, Pb, Zn, W, U, y Ag han sido también extraidos
(Alderton, 1993). Actualmente el distrito sigue siendo un productor mayor de caolinita (arcilla China)
para la industria de la cerámica (ver sección 4.4.1 del capítulo 4).
El granito Cornish, como muchos cuerpos similarmente mineralizados en otras partes a lo largo del
cinturón Variscano, es peraluminoso en composición, enriquecido en Rb, Li, F, B, y Be y puede ser
clasificado como un granito tipo S (Willis-Richards y Jackson, 1989). La mineralización en el granito
es relacionada a la exsolución temprana de una fase acuosa voluminosa del magma que es
responsable de la amplia alteración de márgenes del Plutón y mucha de la mineralización (Jackson
et al., 1989). La alteración es típicamente zonada y caracterizada por la secuencia turmalina –
alteración potásia (feldespato-k y biotita) – sericita – clorita como un progreso lejos de la
mineralización. Los fluidos magmáticos hidrotermales son también responsables de la formación de
venas de cuarzo mineralizadas que son tanto endo- y exograníticas. La característica particular de la
mineralización Cornubian es la presencia de conjuntos de venas de greisen-bordeado, laminadas
que generalmente representa los sitios de mineralización Sn-W preferenciales. Estas venas
consisten esencialmente de cuarzo y turmalina con variable de casiterita y wolframita, y un halo
alteración con contenido de muscovita, mica-Li, y topacio. Estos sistemas de venas a veces se
extienden por varios kilómetros dentro de las rocas encajantes envolventes y registra una zonación
metalogénica bien definida o secuencia paragenética. La zonación de mineral mena progresa de un
conjunto dominado por oxidos temprano (casiterita y wolframita junto con turmalina) a un conjunto
de sulfuros posterior con calcopirita, esfaleria, y galena, junto con fluorita y clorita. El patrón de
zonación es evidente tanto verticalmente dentro de un solo sistema de vena y lateralmetne fuera
de un cuerpo de granito como muestran las Figuras 1 y 3. Aunque la zonación de metal es compleja
(Willis-Richards y Jackson, 1989), la progresión de Sn-W a Pb-Zn refleja un fluido que evolucionó,
en términos de el enfriamiento y los cambios químicos debido a interacciones fluido-fluido y fluido
roca.

Simulaciones computalizadas numéricas de un flujo de fluidos dentro y alrededor de los granitos


Cornubian han proporcionado conocimiento útil dentro de la distribución de la mineralización,
también controles sobre la zonación de metales que es una característica del distrito. Una de la
característica del batolito Cornubian es que la mineralización es preferencialmente distribuida a lo
largo de un marge del Plutón de granito expuesto, como en el margen al norte del plutón
Carnemellis y los márgenes al sur de los plutones Austell y Bodmin (Figura 1). Dos de los factores
que influencia el patrón de flujo de fluidos magmáticos-hidrotermales dentro y alrededor del
plutones de granitos son la forma del cuerpo y su profundidad de emplazamiento (Sams y Thomas-
Betts, 1988). El máximo flujo de fluidos tiende a ser concentrado sobre los márgenes buzando mas
ligeramente de un cuerpo granítico, que cuenta para la asimetría en distribución de la
mineralización. Adémas, la erosión progresiva de un granito va a causar el lugar de flujo convectivo
de flujo de fluidos que migra hacia fuera del granito, dentro de sedimentos en los alrededores. Un
modelo para el sureste del margen del granito St Agnes-Cligga (Sams y Thomas-Betts, 1988), el cual
la mayoría esta bajo el mar, ilustra como la progresiva erosión del cuerpo causa el lugar de flujo de
fluidos verticual que se mueve progresivamente fuera de los márgenes del pluton. La evolución
termal y química de las soluciones mineralizantes sobre un intervalo de tiempo representado por la
erosión del techo pudo contar para un incremento progresivo de depositación de metales y la
zonación regional de metales observada.

2.10 DEPÓSITOS SKARN


La palabra “skarn” es un antiguo termino Sueco que originalmente se refería a rocas muy duras
compuestas dominantemente de minerales calco-silicatados (ej., granates ricos en Ca, piroxeno,
anfíbol, y epidota) que identifica los conjuntos de alteración bastante inusual asociado con
depósitos de magnetita y calcopirita en este país. Ahora es ampliamente usado para referirse a
remplazamiento metasomático de rocas carbonatadas (calizas y dolomitas) por conjuntos minerales
calco-silicatados durante procesos metamórficos de contacto o regional. Los depósitos asociados
con conjuntos skarns son referidos como depósitos skarns, y son típicamente producto de
metamorfismo de contacto y metasomatismo asociado con la intrusión de granitos dentro de rocas
carbonatadas. Una amplia variedad de tipos de depósitos y asociaciones de metales son agrupados
dentro de la categoría de depósitos skarn, y estos incluyen menas de W, Sn, Mo, Cu, Fe, Pb-Zn, y Au.
Los diferentes metales encontrados en depósitos skarn son un producto de diferentes
composiciones, estado de oxidación, y afinidades metalogénicas de la intrusión ígnea, como se
describe en el Capítulo 1 (Einaudi et al., 98; Misra, 2000). Un diagrama simple relatando la
composición del grantioida al tipo de depósito skarn es mostrada en la Figura 2.20. Como una regla
general los depósitos skarn de Fe, y Au tienden a ser asociados con intrusiones de composición
máfica a intermedia. El Cu, Pb, Zn, y W son enlazados a intrusiones calco-alcalinas, con magnetita,
graníticas oxidadas (Tipo-I), y Mo y Sn con granitos mas diferenciados que pueden ser reducidos
(tipo S) y con ilmenita. Debería ser notado que hay excepciones a esta tendencia general.

Los depósitos Skarn pueden ser clasificados dentro de tipos cálcico o magnesiano dependiendo
ampliamente sobre si la roca caja es una caliza o dolomita. Tambien han sido descritos como endo-
o exo-skarns, dependiendo de si el conjunto metasomático es interno o externo al pluton
intruyendo. La mayoría de los grandes depósitos skarn, económicos son asociados con exoskarn
cálcicos. Los skarns de Tunsgteno producen la mayor parte de la producción mundial de W y son
típicamente asociada con la intrusión de intrusivos calco-alcalinos, emplazados relativamente
profundo en la corteza. Los ejemplos incluyen la mina King Island de Tasmania y el depósito
MacTung en el territorio de Canada (ver Box 2.3). Los skarn de cobre, por el contrario, son a veces
asociados con intrusiones de estilo pórfido de alto nivel y muchos sistemas de pórfidos de cobre
que intruyen rocas caja carbonatadas tiene skarns de cobre asociados con ellos. Un ejemplo clásico
es el distrito Bingham de Utah, USA, que contiene no solo un enorme depósito de pórfido Cu, sino
también el depósito skarn Cu mas grande del mundo. Adémas, las menas que no son de pórfidos en
Bingham contiene menas económicamente viables de Pb-Zn-Ag en calizas que son distales a la
mineralización de cobre (Einaudi, 1982). Es interesante notar que la mina mas grande del mundo,
en Grasberg en el distrito Ertberg de West Papua, también exhibe una asociación pórfiod-skarn y
actualmente produce oro como un sub-producto de procesos de minería de cobre (Meinert, 2000).
Los skarn de oro asociado con mineralización de pórfidos Cu son aosciados con emplazamiento de
granitoides de alto nivel, oxidados, con magnetita. Otros depósitos de skarn de oro específicos,
donde el Au ocurre en asociación con un conjunto de metales Bi-Te-As, son enlazados con
intrusiones granitoides, mas reducidos, con ilmenita (Meinert, 2000). Los skarns de Fe, que
ocasionalmente, de depósitos grande, económicamente viables, como el Sverdlovsk y Sarbai en
Rusia, son asociados con intrusiones mas máficas grabbroicas a granodioríticas, y son tipificados por
alteración de endoskarn y metasomatismo de sodio (Einaudi et al., 1981). Los skarns de Tin son
generalmente asociados con granitoides altamente diferenciados tipo S (o con ilmenita), una buen
ejemplo del cual en la mina Reninson Bell en Tasmania.

Aun incluso hay muchas asociaciones de metales diferentes en depósitos skarn, los procesos por lo
cuales se forman son similares, llamados emplazamiento de granitoides y actividad magmática-
hidrotermal, no obstante en diferentes niveles en la corteza. Una asociación con intrusión de granito
no siempre puede ser demostrada, pero es usualmente inferida. Los depósitos skran se forman
típicamente como resultado de tres procesos secuenciales (Einaudi et al., 1981; Meinert, 1992).
Estos son metamorfismo de contacto isoquímico durante etapas tempranas de emplazamiento del
pluton y cristalización, seguido por un sistema abierto de metasomatismo y alteración durante la
saturación de fluidos magmaticos, y, finalmente, la mezcla y descenso del nivel de aguas con fluidos
meteóricos (para una definición ver Capítulo 3) durante el enfriamiento del pluton.
Metamorfismo de contacto isoquímico – progrado (Figura 2.21ª)
Cuando un pluton de granito intruye la roca caja, los sedimentos son sujetos a metamorfismo de
contacto y la formación de una variedad de texturas hornfelsicas. Estos conjuntos minerales que se
forman en esta etapa reflejan la composición de la litología dentro de la cual se formaron. El
metamorfismo de contacto es ampliamente un efecto termal aunque fluidos son probables a
circular durante este proceso y son en gran mayoría un producto de reaccions metamórficas
progradas y, por lo tanto, contienen principalmente H2O y CO2 (ver Capítulo 3 para una descripción
de fluidos metamórficos). En unidades dolomíticas la zonación de metales metamórficas aproxima
la secuencia granate-clinopiroxeno-tremolita-talco/flogopita, reflejando la distancia aumentada y
progresivamente conjuntos mas hidratados fuera de la intrusión. En unidades de calizas la zonación
mineral es granate-vesubianita + wollastonita-marmol-. No hay mineralización asociada con esta
etapa, aunque proceso de deshidratación cerca de los márgenes de plutones pueden ser
importantes para el incremento en la porosidad de las rocas fuente facilitando el flujo de fluidos
durante episodios de mineralización posteriores.

Metasomatismo y remplazamiento – progrado (Figura 2.21ª)


La segunda etapa en la formación de depósitos skarn involucra H2O fluida y saturación-vapor del
magma intruyendo (como una función de ya sea la primera o segunda ebullición o ambas) y la salida
de la fase fluida dentro de la aureola de contacto alrededor. A niveles mas profundos de corteza el
flujo de fluidos es probable a ser concentrado a lo largo de conductos estructurales o estratificados
paralelos distintos, mientras que a niveles mas altos el flujo de fluidos va ser mas invasivamente
distribuida, quizás debido al hidrofracturamiento, en un amplio halo dentro y alrededor de la cupula
del granito. Los conjuntos minerales metasomáticos van a ser similares a los formados durnte
metamorfismo de contacto pero la alteración va ser mas invasiva y de grano gruso, y va a remplazar
conjuntos formados anteriormente. El Si, Al, y Fe, al igual que otros componentes, van a ser
introducidos dentro de sedimentos calcáreos por fluidos magmáticos acuosos, minetras que Ca, Mg,
y CO2 son localmente derivados y también introducidos dentro del sistema metasomático. La
mineralización de sulfuros no se forma a esta etapa, aunque la magnetita y scheelite (en skarns W)
precipitan en las etapas (waning) menguantes del metasomatismo progrado.

Ingreso de fluidos meteóricos y precipitación principal de metales – retrogrado (Figura 2.21b)


Todos los sistemas magmáticos-hidrotermales sufren enfriamiento progresivo y decaída del sistema
de fluidos de alta temperatura. Cuando los fluidos se vuelven progresivamente dominados por
aguas meteóricas someras, una serie de reacciones retrogradas complejas toman lugar, al igual que
la precipitación de las etapas principales de metales base y preciosos, sulfuros relacionados a
mineralización (Einaudi et al., 1981). Los conjuntos de alteración retrograda son sobreimpuesto
sobre minerales metamórficos y metasomáticos anteriores y, típicamente, este proceso es
reconocido por la formación parageneticamente tardía de epidota, biotita, clorita, plagioclasa,
calcita, cuarzo (todos despues de varios tipos de granates), tremolita-actinolita, y talco (todos
despues de piroxenos) y serpentina (despues de olivinos). Los minerales de sulfuros mena, al igual
que la magnetita y hematita, ocurren diseminados, o en venas, que cortan a través de conjuntos
progrados. Los conjuntos como pirita-calcopirita-magnetita caracterizan ambientes proximales,
mientras que la bornita y esfalerita-galena son típicamente mas distales en ocurrencia. La
precipitación paragenéticamente tardía de la mayoría de menas relacionadas a skarn sugieren que
la precipitación de metales es relacionada a la disminución en temperatura de los fluidos mena (y
un caída resultante en la solubilidades), mezcla de fluidos, o neutralización del fluido mena por
reacción con litología de carbonatos.

La mezcla de fluidos magmáticos mena con el componente meteórico tardio, y las reacciones redox
relacionadas en el fluido, pueden ser controles adicionales sobre los procesos de formación de
mena. Una descripción detallada de los mecanismos de precipitación en soluciones hidrotermales
es proporcionada en el Capítulo 3.
2.11 PROCESOS MAGMÁTICOS-HIDROTERMALES CERCANOS A
SUPERFICIE – LOS DEPÓSITOS “EPITERMALES” DE FAMILIA Au-Ag-(Cu)
La exploración para oro en la región circum-Pacífico especialmente desde 1970s, ha permitido
descubrir un gran numero de depósitos de clase mundial asociados con ambientes volcánicos
activos o geológicamente recientes. Estos depósitos son ahora considerados como una categoría
importante y muy prospectivo del tipo de depósitos de oro, llamados depósitos epitermales. El
termino “epitermal” es derivado de la clasificación de Lindren (1933) de depósitos de mena y se
refiere a lo que son formados a niveles de corteza someros (ej., epizona). Muchos estudios de
ambiente de formación de mena, y en particulara las comparaciones con analogos activos,
modernos como la zona volcánica Taupo en la isla al norte de Nueva Zelanda, ha mostrado que los
depósitos epitermales se forman a temperaturas entre 160 y 270°C y presiones equivalente a
profundidades entre 50 y 1000m (Cooke y Simmons, 2000; Hedenquit et al., 2000).

Hay dos estilos contrastantes de mineralización que son ahora reconocidos en depósitos
epitermales, y estostipos son referidos como alta-sulfuración y baja-sulfuración. Estos términos se
refieren específicamente al estado de oxidación del azufre en el fluido mena, la química y pH del
cual también relata la naturaleza de alteración asociada con cada tipo.

Desafortunadamente, la literatura geológica contiene un exceso de confusión de sinonimos para


estos dos tipos. La Tabla 2.2 intenta resumir estos términos y también ilustra las caracteristicas
principales de cada uno. Note que los dos términos no relacionan a la abundancia de azufrem como
este es altamente variable en cada tipo de depósito, pero en algunas publicaciones “alto azufre” y
“bajo azufre” han sido igualados con alta-sulfidación y baja-sulfidación respectivamente.

Los depósitos epitermales de alta- y baja-sulfuración pueden ser vistos como end-members de
procesos relacionados a evolución de fluidos y circulación dentro y alrededor de volcanes. Los
depósitos de alta sulfuración ocurrena dentro o cerca de la ventana volcánica misma. Los fluidos
que son involucrados con la mineralización son derivados directamente del magma como un
producto de saturación de vapor y saturación de fluidos y están usualmente ebullendo en el
ambiente formador de mena. Los fluidos son muy ácidos (pH de 1-3) y oxidado, llevando especies
oxidadas S+4 o S+6 como SO2, SO42., o HSO4- en solución. Como este fluido ebulle y el SO2 y CO2
son dividos dentro de la fase vapor, el liquido restante lleva un excedente de H+, el cual lo hace muy
ácido (pH=1; Hedenquist et al. 2000). Este fluido ácido es también capaz de lixiviar la mayoría de
elementos de las rocas volcánicas o volcano-sedimentarias encajantes a través de las cuales cirucla,
resultando en texturas oquerosas y un estilo de alteración argílica avanzada (ver Tabla 2.2 y también
la explicación mas detallada de alteración hidrotermal en el Capítulo 3). Por el contrario, los
depósitos de baja sulfuración son asociados con fluidos que son similares a los involucrados en
fuentes termales y otras manifestaciones geotermales en áreas de flujo de calor aumentado. Estos
fluidos se han equilibrado con sus rocas encajantes y generalmente contienen un componente
meteórico dominante, aunque es probables que esta haya sido mezclado con un fluido magmático
evolucionado si el volcanismo activo es localizado cerca. Consecuentemente, los depósitos de baja-
sulfuración se pueden formar dentro del edificio volcánico, especialmente durante estapas
menguantes (waning) de actividad magmática quizas mas probable cuando son llevados hacia abajo
fluidos meteóricos. Mas típicamente se pueden formar en localizaciones que de alguna manera se
removieron del foco del volcanismo. El fluido involucrado es casi neutro y tiene salinades bajas, pero
como el ambiente es alta sulfuración, es también probable que haya ebullido dentro y alrededor de
la zona de formación de mena.

Las características de los depósitos de alta- y baja-sulfuración son mostrados esquemáticamente en


la Figura 2.22.

Este digrama sugiere que un enlace espacial y genético existes entre los dos tupos, pero debe ser
enfatizado que este no puede ser el caso. Muchos distritos de oro contienen depósitos de baja
sulfuración (como los grandes depósitos en Nevada, USA, incluyendo Round Mountain, Comstock
Lode, Midas y Sleeper) o de depósitos alta-sulfuración (como muchos de los depósitos Andinos,
incluyendo Yanacocha, Pierina, y El Indio-Tambo). Hay, sin embargo, un numero incrementando de
casos donde los enlaces espaciales y genéticos son evidentes. Un área donde ambos depósitos de
alta y baja-sulfuración ocurre en proximidad justamente cercana el uno del otro es en Kyushu, en la
parte mas sur de Japo (Box 2.4). Es evidente en la Figura 2.22 que podría haber también un enlace
genético entre depósitos de pórfidos Cu-(Mo-Au) formados en el ambiente sub-volcánico y
depósitos Au-Cu de alta sulfuración en superficie. Este enlace puede ser demostrado en el caso de
el depósito Lepanto epitermales Au-cu y el depósito Far Southeast de pófido Cu-Au sobre Luzon en
Filipinas. Estos dos depósitos son adyacente el uno del otro en rocas del Plioceno tadío, con
mineralización en ambos ocurriendo en un periodo breve de tiempo de 300 000 años alrededor 1.3
Ma (Arribas et al., 1995). Es también pertinente notar que la mineralización de baja sulfuración Au-
Ag es localizada con unos cuantos kilómetros del sistema Lepanto-Far Southest, indicando que los
enlaces espaciales y genéticos entre los estilos de mineralización de alta y baja sulfuración
epitermaly de pórfidos es probable. El hecho de que su coexistencia es solo raramente
documentada es, al menso parcialmente, por lo tanto una función de la erosion y ausencia de
preservación.

2.11.1 Mecanismos de precipitación de oro en depósitos epitermales


Los mecanismo de precipitación de oro en depósitos de alta y baja sulfuración son complejos y
varian dependiendo en el ambiente geológico y naturaleza de los fluidos involucrados (Cooke y
Simmons, 2000). La siguiente sección considera brevemente mecanismos de precipitación de oro
como aplicables a depósitos epitermales, aunque los principios discutidos aquí también aplican a
otros tipos de depósitos de oro. El lecto es animado a leer las secciones relevantes sobre la
solubilidad de metales y mecanismos de precipitación en Capítulo 3 (secciones 3.4 y 3.5) antes de
continuar con esta sección.

Las especies aniónicas, o ligantes, de cloruro (Cl-) y sulfuros (específicamente HS-) son considerados
como esenciales para solubilizar el oro en soluciones acuosas (Seward y Barnes, 1997). En soluciones
acuosas, reducidas, de pH casi neutras el Au es probable que sea transportado como el complejo
Au(Hs)2-(Bisulfuro) es este es también probables a ser preferido medio para el movimiento del oro
en ambientes de baja sulfuración. Por el contraio, a temperaturas mayores (>300°C) y para
soluciones que son tanto mas acidas como salinas, el oro es preferencialmente transportado como
complejo Au(Cl)2. (cloruros) y este modo de transporte probablemente aplique para ambientes de
alta sulfuración. Debido a que el mecanismo mediante el cual el oro es transportado podría ser
fundamentalmente diferente en los dos tipos de depósitos epitemales, sigue que los controles
químicos y físicos que precipita el oro de fluidos hidrotermales son también probables a diferir.

Para depósitos de baja sulfuración la precipitación de oro es relativamente directo y es enlazado a


uno, o dos, de los procesos que caracterizan la evolución de fluidos en este ambiente, llamados
ebullición y mezcla de fluidos. La ebullición de un fluido mena en este caso va a resulta en perdida
de H2S a la fase vapor, que causa una desastibilización del complejo Au(Hs)2 y la precipitación de
Au, como describe la ecuación [2.7] (de Cooke y Simmons, 2000):
La mezcla de un agua meteórica oxidada con el mismo fluido mena debió tener también un efecto
del oro precipitando, como muestra en la ecuación [2.8]:

Evidencia para precipitación de Au inducida por ebullición es proporcionado por sistemas


geotermales modernos que explotan vapor para llevar turbinas generando electricidad, como en
Broadlands en Nueva Zelanda (Cooke y Simmons, 2000). Es bien conocido en estas estaciones de
poder que la escala silcea que cubre dentro de las tuberías y acompaña el vapor de agua
intermitente es a veces enriquecido tanto en Au y Ag. En depósitos actuales de baja sulfuración el
intervalo vertical amplio sobre el cual la mineralización ocurre hospedad en venas (como en
Hishikari; Box 2.4) es otro indicador que la ebullición actua como un control fundamental sobre la
precipitación de mena. Aunque es claro que la mezcla de fluidos también juega un papel, en
depósitos como Creede en Colorado, la evidencia para un papel amplio para este mecanismo es
poco claro (Cooke y Simmons, 2000).

Para depósitos de alta sulfuración los mecanismos de depositación de Au no son tan bine entendidos
y mas complejos, debido a que es viable para transportar oro, no solo como un complejo Au(Cl)2. (,
como sugerido antes, sino también como un complejo bisulfuro (Au(HS)) en fluidos con una
actividad. Es también considerado posible que el Au es transportado junto con Cu en la fase vapor
(ver sección 2.4.2 antes). Si el oro es transportado como un complejo bisulfuro en ambientes de alta
sulfuración entonces los mecanismos de precipitación son también probables a ser relacionados a
ebullición y mezcla de fluidos, , como para sistemas de baja-sulfuración. Si, por otra parte, el oro es
transportado como un complejo cloruro, entonces la ebullición y extracción de especies de azufre
oxidado (SO2 y SO42-) dentro de la fase vapor va a tener un efecto pequeño sobre su estabilidad. La
mezcla de fluidos, entre un fluido mena, caliente, ácido a salino con Au(Cl)2- y una solución
meteórica neutra mas fría, podría, sin embargo, ser un mecanismo de precipitación importante,
debido a que tendrá el efecto del aumento del pH y disminución de la salinidad (por dilución) del
fluido mena. Estudios en Lepanto, por ejemplo, indica que la mezcla de fluidos ocurrió con
variaciones en la tasa de fluidos magmáticos a meteóricos que van desde 9:1 a 1:1 sobre depósitos
mena (Hedenquist et al., 1998).

Arribas et al. (1995) ha proporcionado un modelo para la formación de sistemas epitermales de alta
sulfuración refleja las complejidades relacionadas a posibles variaciones de especiación de oro en
este ambiente. El modelo pretende dos etapas de formación de mena. El primero involucra
desgasificación rica de vapores magmáticos ácidos, calientes que son responsables de la lixiviacipon
intensa de rocas caja para formar la zona de cuarzo oqueroso en el conducto fumarolico y el halo
de alteración argílica avanzada alrededor de estas (Figura 2.23ª). Las fases vapor podrían también
mezclarse con aguas meteóricas para formar un sulfato ácido que tiene baja solubilidad Au, pero es
también implicado en el proceso de alteración. La porosidad secundaria y permeabilidad creada
durante este proceso de alteración es considerado como etapa preparatoria necesaria para la
entrada de fluidos con metales posteriores. La depositación de mena subsecuente puede ocurir en
una o dos maneras. Un fluido mena salino, ácido, caliente, llevnado oror como un complejo Au(Cl)2-
, podría ser derivado directamente del magma subyacente y moverse directamente hacia arriba
dentro de la zona de alteración. La precipitación de mena debe ocurrir como un resultado de mezcla
y dilución de este fluido por aguas meteóricas mas frias (Figura 2.23b). Alternativamente, se suigere
que el Cu y Au son inicialmente removidos del magma en la fase vapor y que estos gases cargados
en metales mezclados con aguas subterráneas calentadas circulando alrededor de la intrusión para
formar un fluido de baja salinidad en el cual el oro es transportado como Au(HS). Este fluido debería
entonces precipitar metales por ebullición en un ambiente cerca a superficie, o mezcla con aguas
meteóricas, o ambos (Figura 2.23b).

BOX 2.4 Procesos magmáticos-hidrotermales en ambientes volcánicos:


en los depósitos epitermales Au-Ag de Kasuga y Hishikari, Kyushi, Japón
Kyushu, la gran isla mas al sur del arco Japones, es la principal región productora de oro en el país.
La actividad volcánica del Cenozoico tradio en esta región han dado lugar a varios depósitos
epitermales Au-Ag, todos relacionados a sistemas magmáticos-hidroteramles extitos o menguantes
(waning) surgien de este volcanismo. Ambos estilos de mineralización epitermal de oro son
preservados en Kyushu, la llamada mineralización de alta sulfuración (o sulfato-ácido) representada
por las menas de tipo Nansatsu del cual Kasuga es un ejemplo, y la mineralización de baja-
sulfuración (o adularia-sericita) representada por el depósito Hishikare muy rico.

Kasuga
El distrito Nansatsu en la porción al sur de Kyushu ha sido el sitio de volcanismo calco-alcalino para
los últimos 10 millones de años. Varios depósitos ocurren en el distrito, incluyendo Akeshi, Iwato, y
Kasuga. Kasuga es un pequeño depósito que procude cerca de 120 000 toneladas de mena
anualmente en un tenor promedio de Au de cerca de 3 g/ton. El cuerpo mena es asociado con una
zona residual de alta-silica en andesita del Grupo Nansatsu, que suprayace un basamento
metasedimentario del Supergrupo Shimanto del Cretácico (Hedenquist et al., 1994). La alteración
en el open pit es caracterizada por una zona central rica en cuarzo en la que la roca volcánica
encajante ha sido casi completamente lixiviado de todos los elementos excepto Si (Figura 1ª). El
cuerpo de cuarzo es rodeado por una zona de alteración argílica avanzada (conteniendo alunita,
dickita, y caolinita), la que se turna gradualmetne en una zona propilítica (clorita+illita). Los
minerales mena consisten principalmente de pirita y enargita con posterior azufre nativo covelita,
y goetita. La Au-Ag (electrum) es ampliamente contenido con el cuerpo de cuarzo en el centro del
halo de alteración, aunque remobilización considerable dentro de fases oxidadas tardías también
ocurren. La mineralización es enlazada a exsolución de una fase fluida cargada en metales de la
andesita hospedante, con segregación subsecuente dentro de las fases vapor y líquida. Vapores
altamente ácidos son implicados en la lixiviación de rocas volcánicas del cuerpo de cuarzo porosa.
La fase fluida cargada en metales subsecuentemetne percoló a través de rocas porosas y precipitó
Cu, Ag, y Au. La mezcla progresiva de este fluido con aguas meteóricas fue probablemente el
mecanismo de precipitación principa, y fue también responsable para la zonación en el halo de
alteración y la oxidación tardía de conjuntos pre-existentes (Hedenquist et al., 1994).

Hishikari

El depósito Hishikari, descubierto en 1981, es un depósito epitermal muy rico de baja-sulfuración


con cerca de 260 toneladas de oro mineable (Izawa et al., 2001). Es localizado cerca de 20 km al
noroeste del volcán recientemente activo Kirishima en Kyushu sur-central. El depósito ocurre como
una serie de venas verticales, en echelon en su mayoría dentro del basamento de Supergrupo
Shimanto Cretácico, sino también extendiéndose distancias cortas dentro de andesitas del
Pleistoceno. Las venas consisten principalmente de cuarzo y adularia, con menos arcilla esmectita.
La formación de venas y mineralización se cree que es enlazada al volcanismo que inició cerca de
1.6 Ma, terminó cerca de 0.7 Ma. La vena de adularia relacionada, sin embargo, ha sido datada entre
1.15 y 0.60 Ma, sugiriendo que el sistema geotermal y mineralización comenzó cerca de 0.5 Ma
despues del volcanismo (Izawa et al., 2001). La vena Hosen No.1 espectacularmente rica (¡la cual en
promedio de cerca de 3000g/ton Au y 2000 g/ton Ag!) registra evidencia de tres fases de
depositación de la vena. Cada uno consiste principalmente de cuarzo, adularia, y electrum. Menos
pirita y calcopirita también ocurre pero solo durante las etapas de depositación temprana. Los altos
tenores de mena de Hishikari son restringidos a una elevación especifica, extendiéndose sobre cerca
de 200m de extensión vertical (Figura b), y las venas terminan o se vuelven sub-económicas sobre y
debajo de este rango. Esto, junto con evidencias de inclusiones fluidas, sugieren que la ebullición de
un fluido dominantemente meteórico fue responsable de la precipitaciín de oro y plata de la
solución.
2.12 EL PAPEL DE LOS FLUIDOS HIDROTERMALES EN ROCAS MÁFICAS
MINERALIZADAS
Mucho de este capítulo se ha concentrado en las realciones entre magmas félsico y los fluidos que
exsolven de el. Como mencionaba al comienzo de este capítulo, sin embargo, es también factible
para un fundido máfico exsolver una fase fluida magmática, aunque la fracción de masa resultante
de agua exsuelta puede ser menor que en los fundidos félsicos. En rocas máficas el papel de un
fluido magmático en los procesos formadores de mena es comúnmente pasado por alto, aun incluso
es ahora aparente que esto fluidos pueden ser importantes en la concentración de metales como
Cu, Ni, y elementos del grupo del platino (PGE) en intrusiones máficas estratificadas (Mathez, 1989
a, b).

La solubilidad del H2O en un fundido es mayor que la del CO2 y sigue, por lo tanto, que esta ultima
vaya a exsolver antes de las especies acuosas. Los primeros fluidos en formarse de un fundido máfico
cristalizando son ricos en CO2 (al igual que CO en los ambientes mas reducido), pero van a
evolucionar a composiciones mas ricas en H2O cuando la cristalización progesa. Adémas, el fluido
va a contener también clorina apreciable (como HCl o FeCl2) y azufre (como HS- o SO4-2
dependiendo de fO2). El cambio en la composición del fluido de CO2 a dominado por H2O ocurre
muy rápidamente en fluidos derivados de fundidos máficos y es marcado por la precipitación de C
(grafito) del fluido. Esto fluidos son, por lo tanto, poco probables, al menos inicialmente, a se capaces
de disolver muchos metales, pero teso podría cambia cuando la proporción de agua en la solución
aumenta.

Consideraciones de la concentración de metales en rocas máficas, como las discutidas en longitud


en el Capítulo 1, asumen que los patrones de distribución del Cu, Ni y PGE reflejan el
fraccionamiento cristal-fundido o fundido-fundido durante la cristalización progresiva o
inmiscibilidad silicato-sulfuro. Estas suposiciones presuponen que los depósitos de mena
observados no se han re-equilibrado con una fase vapor y que los patrones distribución de metales
son genuinamente magmáticos y no sobreimpuestos por procesos hidrotermales. Este no siempre
es el caso y observaciones mineralógicas en serpentinitas de este de Australia, por ejemplo, muestra
que incuestionablemente el PGE (en particular Pd, Pt y Rh) tienden a ser inmediatamente
redistribuidos por soluciones hidrotermales, mientras que otros (especificametne Os, Ir, y Ru)
permanece sin ser afectados por estos procesos (Yang y Seccombe, 1994). Los raros casos donde
pepitas, sobrecrecen y detritos de PGE son encontrados en depósitos placer, y en enriquecimiento
de laterita, también indican que bajo ciertas condiciones estos metales son labíles y pueden ser
puesto dentro de solución incluso a baja temperaturas (ver Capítulo 4).

En el caso de los PGE es aparente, con la excepción posible del paladio (Pd), que estos metales
tiendan a exhibir baja solubilidades en fluidos magmáticos-hidroteramles a altas temperaturas y
bajo condiciones justamente reducidas (bajo fO2). En el caso del Pd parece que este metal es
justamente soluble en soluciones salina a elevadas temperaturas (Sassani y Shock, 1990). En
general, sin embargo, la presencia de ligantes como el Cl- aumentan las solubilidades de PGE solo
un poco y disolución significativa de estos etales es solo factible bajo condiciones altamente
oxidadas, condiciones ácidas (Wood et al., 1992). La complexación de hidróxido (OH-) es también
considerada como poco probable que contruya hacia la solubilidad de PGE en soluciones
hidrotermales, aunque puede ser importante en aguas superificiales y complejos PGE-OH- pueden
ser implicado en depósitos placer y lateritas. De la misma manera, complejos bisulfuro (HS-) resultan
en cantidades muy bajas (ppb) de Pt y Pd siendo transportados en las soluciones geológicamente
pertinenetes. Estas observaciones tienden a apoya la visión convencional que las concentraciones
de metales en rocas máficas no han sido modificadas marcadamente por procesos hidrotermales.
Sin embargo, bajo condiciones de muy bajo fSw (donde los sulfuros metalicos y no metálicos son
estables) parece que las solubilidades PGE en una salmuera altamente salina pueden ser altos (102-
103 ppb), principalmente porque la complexación de PGE con Cl- no es afectada nocivamente por la
presencia de ligantes sulfuros. Bajos estas condiciones, un fluido puede jugar un papel importante
en la redistribución de estos metales.
2.12.1 Los efectos de un fluido magmático sobre la mineralización PGE en el Complejo
Bushveld
En el Complejo Bushveld los tenores de mineralización elementos del grupo del platino (PGE) y las
proporciones relativas de estos elementos permanece uniforme sobre cientos de kilómetros de
rumbo, tanto en Merensky Reef y el manto de cromitita UG2 (Cawthorn et al., 2002). Por el
contrario, la mineralogía de PGE varia marcadamente. La plataforma estratiforme normal es
generalmente dominada por sulfuros PGE minerales como la cooperita, braggita, y Laurita.
Situaciones atípicas, representadas por marmitass (ver Box 1.6) y pipes de dunitas ricas en Pt
usualmente discordantes, son caracterizados por aleaciones PGE-Fe y teluluros. El consenco
generales es que la mineralogía dominada por sulfuros de plataformas normales es un producto de
procesos magmáticos, como los discutidos en Capítulo 1, pero que la mineralogía de PGE deficientes
en azufre en marmitass y pipes han interactuado con menas magmáticas, resultando en condiciones
localizadas de bajo fS2.

El Complejo Bushveld contien varios tipos de rocas inusuales como pipes ultramáficos ricos en
hierro, al igual que pegmatitas ricas en hierro (con concentraciones de Pb, As, Sb, y Bi) y venas de
plagioclasa-anfibol-flogopita, que han sido usadas como evidencia de saturación de vapor- y de
fluido-en las etapas tardías de cristalización de magmas Bushveld. Schiffries (1982) considerópipes
de dunitas ricas ne Fe- y Pt- con origen metasomático e implicados en la salmuera acuosa magmática
que reacciono con las rocas caja alrededor de 600 °C y 3.5 kbar. Trabajos mas recientes han indicado
que estos cuerpos son probablemente en cuerpos magmáticos distintos, pero que actuaron como
vías de canal para fluidos hidrotermales de menor temperatura posteriores (Cawthorn et al., 2000).
La mineralogía pobre en sulfuros, dominada por Pt de estos cuerpos es considerado que representa
la re-equilibración de un conjunto de sulfuros magmáticos original por fluidos hidrotermales
posteriores.

Uno de los problemas que aun son polémicos sobre el Complejo Bushveld, sin embargo, es la
extensión de la cual los horizontes mineralizados mayores, como el Merensky Reef y el UG2, debido
a su mineralización de PGE y metales basa por procesos hidrotermal en lugar de magmáticos.
Estudios mineralógicos detallados han mostrado que en ciertos ambientes de fluidos magmáticos
deben haber jugado un papel en la redistribución de sulfuros y recristalización de el PGE. Donde el
horizonte de cromitita UG2 es cortado por un pipe de dunita, por ejemplo, contiene la misma
aleación Pt-FE distintiva y fases Pt-arseniuro (sperrylite) como el pipe mismo. Por el contrario, el
horizonte UG2 es bien removido por estos cuerpos contiene minerales de sulfuros-PGE magmáticos
normales como la braggita y cooperita (Peyerl, 1982).

Adémas, el Meresky Reef mismo a veces exhibe las mismas variaciones en mineralogía que el UGw,
pero en este caso la ocurrencia de minerales PGE deficientes de sulfuros es usualmente relacionado
a la formación de “potholes” (marmitas) y no necesariamente cortando transversalmente pipes de
remplazamiento de dunita (Figura 2.24). Las marmitas de Meresky Reef fueron descritas en el
Capítulo 1 (ver Box 1.6) y son atribuidos a fallamiento syn-magmáticos de cumulos del bloque
yacente justo antes de la inyección de un nuevo pulso de magma, acompañado con metasomatismo
de de rocas dentro de la estructura marmitas por el fluido hidrotermal. La ocurrencia de conjuntos
minerales de PGE desulfurizado en las marmitas es consistente con este proceso y con el hecho que
las marmitas son probablemente también sitios de saturación de fluido y circulación aumentada. La
presencia de fluidos salinos, pero relativamente oxidados, es considerada que han sido responsables
de modifcar mineralogía primaria de mena magmática, desestabilizando metales base y fases de
sulfuros PGE con la perdida resultante de azufre y reacción entre PGE y Fe para formar aleaciones o
teluluros y minerales arseniuros (Kinloch, 1982). Es importante notar que, durante sobreimposicio
hidrotermal, los PGE y metales base no parecen ser redistribuidos y el presupuesto de metales, por
lo tanto, permanece constanto (Cawthorn et al., 2002). Esto parece poca evidencia para un orgine
solamente hidrotermaels para las menas de metales base y preciosos del Merensky Reef, u otra
parte mayor mineralizada del Complejo Bushveld, aunque es claro que los fluidos magmáticos han
reaccionado ampliamente con las rocas de su intrusión máfica.

En resumen, parecería que al contrario que en sistemas relacionados a granitoides, los fluidos
magmáticos en fundidos máficos han jugado un papel relativamente pequeño en los procesos de
mineralización que acompañan la cristalización de este tipo de rocas. La saturación vapor ocurre
pero su influencia como un agente mineralizante generalmente parecería ser limitado a re-
equilibración de PGE magmático existente y sulfuros de metales base, en rocas donde el
metasomatismo es clarametne demostrable, como en marmitas, pipes de dunitas ricas en Fe,
pegmatitas, y venas.

RESUMEN
Todos los magmas contienen constituyentes que, en la cristalización, se combinan para exsovler
fases fluidas y vapor distinta. La mayoría de magma va a exsolver cantidades sustanciales (mas de
varios wt%) de agua, al igual que un orden de magnitud mas o menos de dióxido de carbono, y estos
son los dos fluidos magmáticos-hidrotermales dominantes. El agua en particular tiene la habilidad
de disolver cantidades de sustancias aniónicas, en particular Cl-, el cual promueve la disolución de
otros cationes alcalinos y metales de transición. La fase magmática acuosa puede existir como un
líquido, vapor, o fluido supercrítico homogéneo. El proceso de saturación de H2O puede ser
alcanzado en dos manera, ya sea por disminución de la presión del sistema (llamado primer
ebullición) o por cristalización progresiva del magma (segunda ebullición).

La saturación H2O es particularmente relevante para procesos formadores de mena durante el


emplazamiento y cristalización de magmas graníticos a niveles de corteza moderados a someros.
Este ambiente da lugar a la formación de una amplia variedad de tipos de depósitos mena
incluyendo pórfidos Cu y depósitos Mo, menas de skarns polimetálicos, depósitos relacionados a
granitos Sn-W, y la familia volcánica de depósitos Au-Ag-(Cu) epitermales. Muchos metales van a
dividirse fuertemente en el liquido o vapor que se forman en la saturación H2O y, en estos casos, la
mineralización acompaña la alteración de rocas caja dentro y fuera de la intrusión. La formación de
depósitos de pórfidos de Cu-dominante o Mo-dominante refleja una interacción sutil entre la
profurndidad de intrusión de un cuerpo granítico (el mismo una función del contenido original de
agua), el timing de saturación H2O en relación al progreso de la cristalización, y el comportamiento
de metales durante el fraccionamiento fundido-fluido. La salida de fluidos y vapor del magma y su
subsecuente circulación son depedendientes de la permeabilidad alrededor, y puede ser modificado
por hidrofracturamiento relacionado a ebullición. Depósitos de skarn polimetálico reflejan la
interacción entre los fluidos magmáticos exsueltos de diferentes tipos de granitos y sedimentos
calcáreos. La saturación H2O y ebullición en ambientes volcánicos, produciendo volúmenes
significativos de vapores ricos en volátiles es favorable para la formación de depósitos epitermales.
Los depósitos epitermales de alta y baja-sulfuración reflejan end-members en una contiuidad de
procesos magmáticos-hidrotermales que progresivamente incorporan mas aguas no-magmáticas
cuando el sistema volcánico declina, o se mueve fuera del centro volcánico. Muchos depósitos mena
son producto de fluido que no son relacionados a una fuente magmática y estos son tema del
Capítulo 3

PROCESOS HIDROTERMALES
TEMAS
ORIGEN DE FLUIDOS EN LA CORTEZA TERRESTRE
DEFORMACIÓN, GRADIENTES DE PRESIÓN, Y FLUJO DE FLUIDOS HIDROTERMALES
SOLUBILIDADES DE METALES EN SOLUCIONES ACUOSAS
La naturaleza de complejos ligantes-metales y principio de Pearson
INTERACCIÓN FLUIDO-ROCA Y ALTERACION
MECANISMOS DE PRECIPITACIÓN
Procesos de absorción fisicoquímicos
Procesos biológicamente mediados
ZONACIÓN DE METALES Y SECUENCIAS PARAGENÉTICAS
ANALOGOS MODERNOS DE PROCESOS HIDROTERMALES FORMADORES DE MENA
Continuidad VMS-SEDEX
DEPÓSITOS DE MENA ASOCIADOS CON FLUIDOS HIDROTERMALES ACUO-CARBÓNICOS
Depósitos de oro orogénico, tipo Carlin, y hospedado en conglomerados de guijarros de
cuarzo
DEPÓSITOS DE MENA ASOCIADOS CON FLUIDOS CONNATOS
Depósitos de plomo-zinc tipo Mississippi Valley (MVT) y cobre hospeado en sedimentos
estratiformes (SSC)
DEPÓSITOS DE MENA ASOCIADOS CON FLUIDOS METEÓRICOS
Depósitos de uranio hospedado en areniscas
CASOS DE ESTUDIO
Box 3.1 Mezcla de fluidos y precipitación de metales: Depósito de oxidos de hierro-cobre-oro
de Olympic Dam, Sur de Australia
Box 3.2 Alteración y precipitación de metales: Golden Mile, Kalgoorlie, Oeste de Australia -
Un Depósito de oro orogénico del Arcáico
Box 3.3 Ventilación exhalativa y “fumarolas negras” sobre el fondo marino: depósitos VMS
de tipo Cyprus
Box 3.4 Procesos sedimentarios exhalativos: depósito Red Dog, Alaska, USA.

3.1 INTRODUCCIÓN
Este capítulo extiende el concepto de mineralización hidrotermales a depósitos relacionados a
fluidos derivados de fuentes diferentes a las soluciones magmáticas. Estos fluidos incluyen los
formados de reacciones de deshidratación metamórficas, de la expulsión de fluidos de poros
durante la compactación del sedimento, y de aguas meteóricas. Tambien se considera el agua
marina como un fluido hidrotermal con referencia específica a la formación de depósitos de metales
base sobre el fondo oceánico. Diferente al capítulo anterior, el cual fue principalmente interesado
en depósitos de mena relacionados a granitos, el presente capítulo discute un rango mucho ma
amplio de procesos formadores de mena y ambientes.

Los procesos hidrotermales formadores de mena son ubicuos y hay escasamente un depósito en la
en cualquier parte de la Tierra que no ha sido formado directamente de soluciones acuosas calientes
fluyendo atraves de la corteza, o modificado en grados variables por estos fluidos. Esta visión es
apoyada por el ejemplo en la sección 2.12 del Capítulo 2, donde un caso convincente de
precipitación hidrotermal de mineralización PGE en marmitas del Reef Merensky, Complejo
Bushveld, tradicionalmente considerado como de origen ígneo, es presentado. De la misma manera,
las menas de Au-U de la Cuenca Withwatersrand no puden ser consideradas mas simplemente como
depósitos paleoplacer y procesos hidrotermales han jugado claramente un papel significativo en su
formación (ver sección 3.9 debajo) han migrado a sus localizaciones presentes en la presencia de
agua caliente, durante procesos parecidos a los discutidos debajo para soluciones hidrotermales.
Muchas de los depósitos de mena gigantes del mundo deben sus orignenes, al flujo de fluidos
hidrotermales en la corteza terrestre y la habilidad de las soluciones acuosas de escarbar
efectivamente, transportar, y concentrar un amplio rango de componentes económicamente
importantes.

Sobre las ultimas décadas en particular, un gran asunte de investigación ha sido dirigido hacia
entender mejor la complejidad de los procesos hidrotermales. Conceptos como la fuente de las
soluciones hidrotermales, su paso a través de la corteza Terrestre, y los mecanismos de precipitació
involucrados en la formación de cuerpos mena son ahora relativamente bien entendidos. Las tres
ediciones de Geoquímica Depósitos de Mena Hidrotermal de Barnes (1967, 1979ª, 1997)
proporciona una cuenta para el progeso de su investigación sobre varais décadas. Hay, por lo tanto,
algunas característicos de menas hidrotermales acerca de las cuales entendemos muy poco, y estas
incluyen las edades y duración de procesos formadores de mena, reconocimento detallado de
caminos de fluidos antiguos, las profundidades del flujo de fluidos en la corteza, al igual que la
relación entre la tectónica global y la metalogenía (Skinner, 1997). Este ultimo tema es uno
particularmente importante (ver Capítulo6) que no aplica solo a menas hidrotermales, sino al rango
completo de los tipos de depósitos minerales. Finalmente, el papel de los microorganismo en la
formación de depósitos de mena es un tema que esta comenzando a atraer atención y puede ser
mucho mas importante de lo que uno cree.

Va a se evidente que la separación de los procesos “magmáticos-hidrotermales” e “hidrotermales”


en dos secciones (Capítulos 2 y 3 respectivamente) no es por tanto una necesidad conceptual sino
un requerimiento para la organización y estructura del libro. Los dos capítulos deberían ser vistos
como un espectro que envuelve los procesos que van desde el flujo de fluidos magmáticos a niveles
someros de infiltraciones meteóricas. Para enfatizar la continuidad, este capítulo es terminado con
un diagrama resumen que intenta relaciona la fuent de las soluciones hidrotermales a los tipos de
depósitos de mena, y aplica para los Capítulos 2 y 3.

3.2 OTROS FLUIDOS EN CORTEZA TERRESTRE Y SUS ORIGENES


La figura 3.1ª muestra que, adémas de los fluidos magmáticos, hau otros cuatro tipos principales de
aguas sobre y cerca a la corteza terrestre .Aunque todas pudieron tener orígenes similares, cada
uno de estos fluidos reservorios es diferentes en términos de su composicion y temperatura y van,
por lo tanto, a jugar papeles diferentes en la formación de depósitos de mena. Los principales tipos
de agua son definidos como agua marina, agua meteórica, agua connata y agua metamórfica,
enlistadas típicamente en orden de incremento en la profundidad (y temperatura) en la corteza. Un
quinto fluido reservorio, donde las aguas son derivadas de una mezcla de dos o mas otros tipos de
aguas, es también descrito debajo, específicamente por fluidos mezclados quqe pueden ser muy
importantes en ciertos ambientes de formación de mena.

En sus ambientes presentes cada uno de estos fluidos puede ser identificado porque el ambiente
del cual el fluido viene es conocido. En el pasado geológico, sin embargo, donde solo
manifestaciones indirectas del flujo de fluidos son aparentes, es mucho mas difícil de determinar el
origen de un particular tipo de agua. Afortunadametne, los isotopos caracteristicos de hidrogeno y
oxigeno del agua son razonablemente diagnostico de su fuente y pueden ser usados para deducir
los orígenes de un reservorio antiguo. La Figura 3.1b es un grafico de δD versus δ18O que muestra
tendencias y campos que sirven como huella de los principales fluidos reservorios sobre o cerca de
la corteza terrestre. Los orígenes de varios tipos de aguas y sus caracteristicas isotópicas estables
son brevemente descritas debajo:
3.2.1 Agua marina
Los oceanos colectivamente representa el mas grande fluido reservorio sobre la corteza terrestre
(Figura 3.2), cubriendo cerca del 70% de la superficie y conteniendo cerca del 98% de su agua libre.
Como se mencionó en el Capítulo 2, la superfice terrestre ha sido cubierta por volúmenes
sustanciales de agua desde la historia de la tierra mas temprana. El agua de mar es relativamente
bien mezclada en un escala global, y es débilmente salina por la reacción con productos de erosion
continentales y oceánicos a lo largo del tiempo. Los principales constituyentes disuelta en el agua
marina son los cationes NA+, K+, Ca2+, y Mg2+ y aniones CL-, HCO3-, y SO4 2-, que típicamente
ocurren en una concentración total (o salinidad) de cerca de 35 g de solidos por kg de agua de mar
(3.5 wt%).
El agua de mar es extensamente circulada a través de la corteza oceánica y es responsable de la
amplia alteración y redistribución de metales en esta porción de la corteza terrestre. El descenso
del agua de mar dentro de fallas mayores asociadas con dorsales medio oceánicas y su subsecuente
surgimiento de fumarolas exhalativas “black smokers” es un gran descubrimiento oceanográfico
que ha revolucionado el entendimiento de los depósitos de sulfuros masivos volcanogénicos (VMS)
(ver sección 3.8 debajo). Los depósitos VMS ocurren en muchas partes diferentes del mundo, en
rocas de todas las edades, confirmando la importancia del agua de mar como fuente de fluido
hidrotermal. La Tabla 3.1 ilustra las concentraciones de especies ionicas mayores en el agua marina
y la comprara a los fluidos exhalados de conductos de fumarolas negras, donde concentraciones
signicativas de metales han tomado lugar debio a la interacción entra agua marina caliente y la
corteza oceánica. El agua marina es también compara al agua lluvia y aguas subterráneas derivadas
de aguas meteóricas, que vuelven a tener mayores concentraciones de solutos disueltos a mayores
temperaturas.

3.2.2 Aguas meteóricas


El agua meteórica tien su origen intermedio dentro del ciclo hidrológico y ha estado, por lo tanto,
en contacto con la atmosfera. En un contexto geológico se refiere a aguas subterráneas que han
infiltrado dentro de la corteza superior, a través de aguas de escorrentía o filtración vertical o agua
superficial fluyendo. En este sentido el agua de mar infiltrando dentro de la corteza debería tambier
ser considerado como una fuente de aguas meteóricas. Las aguas subterráneas son el segundo mas
grande reservorio de agua líquida (Figura 3.2) y generalmente existe cerca a la superficie en espacios
de poros intersticiales de rocas y suelo. No se refiere a agua que forma parte de estrucutra cristalina
de minerales hidratados, ni se refieres a inclusiones fluidas de tamaño micrométrico que ocurre
dentro de muchos minerales formadores de rocas de la corteza y manto. Los fluidos meteóricos
pueden sin embargo penetrar a lo largo de fracturasa niveles profundos en la corteza y es, por lo
tanto, involucrado en circulación amplia a lo largo del régimen cortical. Es responsable de la
formación de muchos diferentes tipos de depósitos de mena hidrotermal, pero específicamente de
los caracterizados por transporte y precipitación de baja temperatura, como las menas de uranio
superficial hospedado en areniscas (ver Sección 3.11 y Capítulo4).

Las composiciones isotópicas de oxigeno e hidrogeno de aguas meteóricas, tanto sobre la superficie
y como aguas subterráneas, varian sistemáticamente sobre globo completo como una función de la
latitud y elevación. La relacion lineal entre valores δD y δ18O (línea de aguas meteóricas en Figura
3.1b) existe porque el deuterio e hidrogeno, al igual que el 18O y 16O, son sistemáticamente
fraccionados entre agua líquida y vapor de agua durante procesos de evaporación-condensación del
ciclo hidrológico, y este fraccionamiento aumenta como de una función de la temperatura (Craig,
1961). Así, la mayoría de aguas meteóricas tiene valores δD y δ18O que varian a lo largo de una línea
recta (δD=8xδ18O + 10; Figura 3.1b) y que ayuda a identificar ampliamente las condiciones
climáticas o latitud de donde el agua vinó.

3.2.3 Agua connata


El agua que es incluida dentro de espacios de poros intersticiales de sedimentos cuando es
depositado es referido como connata o agua de formación. Originalmente esta agua ya sea
meteórica o agua marina, pero sufre modificación sustancial cuando el sedimento es enterrado,
compactado, y litificado. Las varias etapas de diagenes que resultan en la transformación de
particulas sin compactar de sedimentos a rocas sedimentarias litificadas produce soluciones acuosas
que evolucionan con el tiempo y profundidad. Estos fluidos invariablemente se mueven a través de
la secuencai y son a veces involucrados en la formación de depósitos de mena.

El enterramiento progresivo del sedimento a profundidades de cerca de 300 metros resulta en una
reducción rápida de la porosidad y la producción inicial de un volumen sustancial de agua. Los shales
son inicialmente muy porosos y las etapas tempranas de enterramiento pueden resultar en la
producción de mas de 3500 litros de agua para cada metro cúbico de sedimento depositado (Hanor,
1979). Mas del 75% del fluido de poros intersticial es probable a ser expulsado de un shale al
momento en que enterrado a 300 metros de profundidad y su porosidad va, por consiguiente,
disminuir rápidamente a esta etapa temprana. Por el contrario, areniscas sin compactar son
inicialmente menos porosas que los shales y ba a liberar solo 700 litros de agua por metro cúbico
de sedimento depositado (Hanor, 1979). Tasas promedio calculadas de agua liberada para shales y
areniscas es mostradas como una función de la profundidad de enterramiento en Figura 3.3.

Una fuente adicional de agua de formación es el agua “estructural” o “bound” que ocurre ya sea
como H2O fijada libremente o moléculas de OH- dentro de particulas de minerales arcillosos en
sedimentos argíliceos. Esta agua es capaz de dejar el mineral hospedante una vez las temperaturas
de 50-100°C han sido alcanzadas. Esto es mostrado cuando el episodio en forma de pico aumenta
en la tasa de liberación de agua del sedimento en perfiles de profundida de la Figura 3.3ª. La
naturaleza y volumen del bound water suelta van obviamente a varia de una situación a la otra y
depeden sobre factores como el gradiente geotermal local y el tipo y proporciones de minerales
arcillosos hospedantes. Las dos principales etapas de producción de fluidos connatos (ej., fluido de
poro y bound wáter) son también esquemáticamente ilustrados en la Figura 3.4, donde han
comparado la producción de fluidos metamórficos que ocurren de alguna manera a mayores
temperaturas y mayores profundidades de enterramiento.

La temperatura de los fluidos connatos aumenta con la profundidad en la secuencia sedimentaria,


con la tasa exacta de aumento siendo una función del gradiente geotermal local. Este ultimo varia
típicamente entre 15 a 40 °C/km. Las presiones de fluido van a incrementar también con la
profundidad, aunque la naturaleza de la variación de presion con el enterramiento progresivo es
probable que sea compleja y dependa sobre la cantidad de fluido en poros presente en una unidad
sedimentaria dada y la interacción entre gradientes de presion hidrostática y litostática. Una
descripción mas detallada de las relaciones entre presion hidrostática y litostatica es presentada en
la sección 3.3.2 debajo, donde su significado con respecto al movimiento de fluidos en secuencias
sedimentarias es discutido. La Figura 3.3b ilustra la forma en que la presion del fluido varia con la
profundidad en sedimentos del Gulf Coast del sureste de USA y apunta las desviaciones significativas
sobre el gradiente hidrostático (ej., “sobrepresión”) causada por horizontes de baja permeabilidad
dentro de una secuencia que impide la expulsión de fluidos asi que el agua de poros apoya el peso
de los estratos suprayacentes y resultan altas presiones de fluidos (Hanor, 1979). Las zonas de
fluidos sobrepresionados dictan la naturaleza del flujo de fluidos y transferencia de masa/calor, que
tiene implicaciones importantes para la migracon de salmueras de petróleo (oil brines) (ver Capítulo
5) y la formación de una variedad de depósitos de mena hidrotermales hospedados en sedimentos.

Los fluidos connatos también sufren aumento en la densidad y salinida con la profundidad, como lo
ilustrado en la Figura 3.3c y d. Los aumentos de densidad son relacionados a aumentos en presion
y salinidad, aunque hay un límite a esto es una tendencia debido a que la temperatura es también
aumentada y esta tiene un efecto inverso sobre la densidad. Las aguas de cuencas profundads son
comúnmente salinas y se extienden a las que son generalmente no potable. El aumento en la
salinidad es aveces relacionada a la interacción de aguas connatas con horizontes evaporiticos que
contienen minerales que se disuelven fácilmente como halita, silvita, yeso, y anhidrita. El
incremento en la salinidad también son, sin embargo, aparentes en secuencias sedimentarias que
no contienen evaporitas y en estos casos proceso de “membrana-“ o “filtración de sales”
probablemente aplican. En capas argiliceas , donde particulas de arcillas son fuertementes
compactadas, la interacción de la carga negativa neta (causada por sustituciones atomicas dentro
de la red cristalina) alrededor de cada particula crea lo que es llamado “Capa Gouy” (Berner, 1971).
Esta ultima actua como una membrana semipermeable o filto que sirve para reflejar aniones en
soluciones pasando a traves de la capa de shale. Debido a que los aniones son excluidos del filtrado
entonces la mayoría deben ser cationes, para mantener la electroneutralidad. El resultado es que
una solución pasando atraves de arcilla compactada va a surgir con una salinidad menor. Las
salmueras migrando hacia arriba van, por lo tanto, a volverse menor salinas, mientras que el
contenido de sales disueltas de aguas residuales mas profundas va a aumentar. Aunque dudas han
sido expresada sobre la eficacia del forzamiento de soluciones hacia arriba en una secuencia
sedimentaria a través de shales semipermeables, el proceso de filtración de sales es generalmente
considerado como una explicación factible para la existencia amplia de salmueras connatas
subsuperficiales- El tema es de considerar la importancia para la genesis de mena, como la
disponibilidad de ligantes en fluidos hidrotermales, especialmente Cl-, es crucial para el incremento
de la solubilidad y eficiencia del transporte de metales en solución (ver Capítulo 2 y sección 3.4
debajo).

La salinidad característica de aguas connatas va a variar de una cuenca sedimentaria a otra, como
lo visto en la Figura 3.3d. De la misma manera, el δD y δ18O caracteristicos de estos fluidos van a
variar también dependiendo de las caracteristicas climáticas y latitud de la cuenca. Debido a que los
fluidos originalmente atrapados en poros en la mayoría de secuencias sedimentarias van a ser aguas
meteóricas o marinas, sus composiciones isotópicas de hidrogeno y oxigeno van inicialmente a
reflejar el punto apropiado a lo largo de la línea de agua meteórica o SMOW (Figura 3.1b). Cuando
los fluidos evolucionan, a través de incremento en temperatura e interacción con rocas
hospedantes, sus características isotópicas estables van a cambiar también y definen tendencias
quetípicamente se desvían de una posición sobre la línea de agua meteórica a lo largo de patrones
de pendiente mas somera. Los fluidos van tender a reflejar valores mas altos de δ18O cunado sus
temperaturas y salinidades aumentar en secuencias sedimentarias (Taylor, 1997). En la Figura 3.1b,
por ejemplo, las aguas de formación Gulf Coast de baja latitu definen una tendencia que es bastante
diferente a la de los fluidos a latitud alta en la Cuenca Alberta de Canada.

3.2.4 Aguas metamórficas


Cuando las rocas son progresivamente enterradas y las temperaturas exceden cerca de 200°C, el
proceso de diagenes se vuelve a uno de metamorfismo. El metamorfismo es un proceso
multifasérito pero esencialmetne involucra la transformación de un mineral o conjunot mineral a
otro cuya estabilidad esta en mas equilibrio con las condiciones prevaleciendo a presion y
temperaturas mas altas. De la importancia en esta discusión es la transformación de silicatos
hidratados y minerales de carnonatos a conjuntos recientemente formados que contienen menos
que volátiles que antes. Las reacciones de deshidratación y descarbonatación durante el
metamorfimos progrado son, por lo tanto, procesos muy importantes que producen volúmenes
sustanciales de aguas metamórficas en corteza media e inferior. Un ejemplo de la Cuenca
Witwatersarand en Sudáfrica (Figura 3.4) muestra que alrededor de 300°C una reacción
metamórfica involucrando la descomposición de caolinita a pirofilita va a resultar en la producción
de agua metamórfica. Esta ultima surge del hecho de que la caolinita contiene mas agua que la
pirofilita asi que el exceso de agua liberado por la fase de transformación ha sido expulsada dentro
de la secuencia sedimentaria. Esta reacción es seguida alrededor de 400°C por la transformación de
muscovita y clorita a biotia, cuando mas fluido va a ser producido. Tanto H2O y CO2 (el ultimo
específicamente cuando reacciones de descomposición involucran minerales de carbonatos), al
igual que los volátiles como CH4 y especies de azufre, son producidas por fluidos metamórficos
durante reacciones progradas de este tipo.

Los fluidos producidos en terrenos metamórficos de grado bajo a medio son dominados
composicionalmente por H2O, CO2, y CH4 en aproximadamente este orden de abundancia. Las
rocas de alto grado tienden a ser dominadas por CO2 denso con menores cantidades de agua y
metano. La mayoría de los fluidos metamórficos tiene bajas salinidades y bajas concentraciones de
azufre reducido. Los fluidos de esta naturaleza son globalmente implicados en la formación de
depósitos de oro orogénico, que representan una categoría muy importante de los tipos de
depósitos de oro (Phillips et al., 1994; ver Box 3.2). Aunque no ha sido mencionado antes, es claro
que el CO2 puede ser un componence importantes de soluciones hidrotermales, no solo en el
originado a través de desvolatilización metamórfica sino también en aguas magmáticas.

El dióxido de carbono es, despues del agua, el componente mas abundante en soluciones
hidrotermales y su fase de equilibrio en relacion a la del agua son brevemente considerados debajo.
Esta es una molecula mas grande que el agua y es no-polar (ver Capítulo 2), que cuenta para sus
puntos de fusión y crítico mas bajos. Es de poca importancia como un solvente de otras especies no
aniónicas como los hidrocarburos, especialmente CH4.
Una parte del diagrama de fase de CO2 puro es mostrado en la Figura 3.5ª y cuando es compara al
diagrama similar para H2O (Figura 2.2c) es visto que tiene densidades y transiciones de fases
caracteristicas remarcablemente simiales al agua, excepto que tiene puntos de fusión (-56.6°C) y
critico (31.1°C) menores. A altas temperaturas el H2O y CO2 son completamente miscibles y forman
una sola fase fluida donde un compuesto es disuelto en el otro. A menores temperaturas H2O y CO2
se vuelven inmiscibles (como el agua y el aceite) y existen como dos fases separadas (usualmente
como H2O líquida y CO2 fluido supercrítico). Estas relacion es mostrada en la Figura 3.5b, donde el
solvus (ej., curva donde se define donde la desmezcla de una sola fase de mezcla ocurre) para H2O-
CO2 puros a 2 kbar identifcia un plateau alrededor de 250°C-300°C, sobre el cual dos componentes
ocurren como una sola fase miscible. Cuando la temperatura cae la única fase fluida se desmezcla
progresivamente hasta que a temperatura ambiente el H2O y CO2 son esencialmente imiscibles.
Este fenómenos es claramente ilustrado en inclusiones fluidas que han atrapado una sola fase de
H2O-CO2 mezclados sobre el solvus relevante. Cuando.es visto en laboratorio a temperatura
ambiente, estas inclusiones fluidas con típicamente caracterizadas por una llamada “burbuja
doble”. La “burbuja” mas grande es actualmente un glóbulo de CO2 fluido inmiscible dentro de H2O
líquido mientras que la “burbuja” mas pequeña interna contiene una mezcla de H2O y CO2 vapor
(Figura 3.5c). La amplia ocurrencia de inclusiones fluidas con H2O y CO2 en el registro de roca
testifica la ubicuidad de fluidos acuo-carbónicos especialemente en la corteza profunda.

Las aguas metamórficas son caracterizadas por valores relativamente altos de δ18O (+10 a +30
pormil) que son típicamente mas diferentes comparados a las aguas meteóricas y connatas, pero
que puede sobreimponerse en una cierta extensión con aguas magmáticas (Figura 3.1b). Las razones
para esto son complejas y relacionadas a la naturaleza variable de protolitos metamórficos y los
efectos ubicuos de interacciones fluido-roca durante metamorfismo regional (Taylor, 1997).

3.2.5 Aguas de origen mezclado


Aunque la discusión previa ha enfatizado la naturaleza y característica de fluidos resrvorios
individuales diferentes en la corteza terrestre, no es razonable esperar que en la naturaleza estas
aguas deberían necesariamente mantere su integridad en el tiempo. En la corteza superior
especialmente , es esperado que los fluidos sufran mezcla y se vuelvan efectivametne en hibridos
con mas de uan sola fuente u origen. Es aparente que la mezcla de fluidos hidrotermales con mena
puede ser una consideración importante en la precipitación de metales de estas soluciones. Las
aguas magmáticas e hidrotermales, por ejemplo, a veces sufren mezcla en los niveles de corteza
volcánica o subvolcánica asociados con ambientes formadores de mena de pórfidos de cobre y
epitermal Au-Ag. La mezcla de aguas meteóricas y connatas es un proceso tambien conocido para
caracterizar cuencas sedimentarias formando ambientes continentales de rift rápidamente
llenados. El efecto principal de la mezcla de fluido es promover la precipitación de metales de
soluciones formadores de mena y, consecuentemente, este tema es discutido en mas detalles en al
sección 3.5.1 debajo
3.3 EL MOVIMIENTO DE FLUIDOS HIDROTERMALES EN LA CORTEZA
TERRESTRE
Para ser un agente mineralizante efectivo, los fluidos hidrotermales necesitan circular a través de la
corteza terrestre. La principal razon para esto es que necesitan interacuar con grandes volúmenes
de roca para disolver y transportar los metales requerido para formar depósitos de mena
hidrotermales. El flujo de un fluido mena debería preferencialmente ser enfoca para que los
constituyentes disueltos puedan ser concentrados dentro de una porción accesible de la corteza
terrestre que tenga dimensiones consistentes con las de un cuerpo de mena potencial. El estudio
del movimiento de fluidos hidrotermales ha recibido muchísimo ímpetu para la industria del
petróleo y gas, donde es particularmente importante entender lo caminos de paso de salmueras
con hidrocarburos en secuencias sedimentarias para explorar estos tipos de depósitos (ver Capítulo
5, sección 5.4). La exploración de menas hidrotermales metálicas ha beneficiado tambien sobre los
ultimo años para entender mejor el flujo de fluidos en la corteza terrestre, especailmetne con
respecto a depósitos de veras de oro del Arcaico y depósitos de Pb-Zn tipo Mississippi Valley (ver
Boxes 3.2 y 3.7 respectivamente).

En el Capítulo 2 la naturaleza y duración del flujo de fluidos hidrotermales asociados con intrusiones
magmáticas fue brevemente discutido. Esta sección miera el flujo de fluidos hidrotermales en la
corteza terrestre en términos mas generales y tambien en una variedad de escalas. Se enfatiza el
papel que la deformación y las caracteristicas estructurales resultantes juegan, en términos del
movimiento y enfocado al flujo de fluidos en la corteza. Son estas caracteristicas que son de
particular importancia para la formación y localización de menas hidrotermaels metálicas.

3.3.1 Factores afectando el flujo de fluidos a escala de corteza


La pregunta de que tanto volumen de fluido se puede mover alrededor de niveles profundos en la
corteza terrestre, donde las rocas son altamente compactadas y tienen bajas permeabilidades
intrínsecas, es unas que tiene gran carga de investigadores en una variedad de disciplinas. El
movimiento de fluidos es típicamente una respus a un gradiente termal o de presión en la corteza
terrestre. Este ultimo, en particular, es a veces relacionado a la deformación que causan tanto los
esfuerzos y deformación varíen en rocas que están siendo deformadas. La deformación es
ampliamente registrada cuando ha jugado un papel mayor en el control de flujo de fluidos a través
de la corteza (Sibson et al., 1975; Oliver, 1996) y sus efectos son discutidos en mas detalles en la
sección 3.3.3 debajo. Debido que la deformación de la corteza esta invariablemente enlazada a los
procesos de tectónica global es claroporque estos últimos están íntimamente relacionados a la
formación de menas hdirotermales (ver Capítulo 6).

Otra pregunta que es pertinente para entender la naturaleza del movimiento del fluido en la corteza
terrestre es que el flujo invasivo cuando se es opuesto a un flujo canalizado. Los dos escenarios
pueden ser descritos en términos de “permeabilidad intrínseca” donde los fluidos infiltran
invasivametne a lo largo de bordes de grano y microfracturas en una roca, y la “permeabilidad
hidraúlica”, donde el fluido fluye a través fractura mayores que están los suficientemente
interconectadas para permitir que se desarrollo vías de paso de fluidos distintas (Oliver, 1996). El
flujo de fluidos invasivo puede tomar lugar en rocas porosas a niveles relativamente someros en la
corteza, una situación que permite el movimiento convectivo de fluidos ocurra. La Figura 3.6 ilustra
una variedad de escearios tectónicso a escala de corteza y la naturaleza y distribución de los vectores
de flujo de fluidos principales asociados con cada uno. Niveles de corteza relativamente someros el
flujo de fluidos invasivo, a lo largo de acuiferos porosos, por ejemplo, a veces ocurre en respuesta a
una cabeza hidraúlico manejada por gravedad formada por topografía levantada (Figura 3.6 a). Se
cree que es el tipo dominante de flujo de aguas subterráneas en regiones continentales y tasas de
flujo entre 1 y 10m/año podría desarrollarse dependiendo de la permeabilidad del acuífero (Garven
y Raffensperger, 1997). Un estilo similar de flujo de fluidos de rango-largo es ahora conocido por ser
asociado con periodos de compresión orogénica que efectivamente apreta el fluido fuera de un
paquete de roca dentro canales de paso (¿thrusts?) o acuiferos de alta permeabilidad en el otro
(Figura 3.6b). Los fluidos impulsados por orogenias han sido implicados en la formación de la
provincia de mena de Pb-Zn tipo Mississppi Valley del sureste de USA (ver Box 2.7).
Los fluidos en corteza oceánica se cree que fluyen en respuesta a gradienter termales formados por
el alto flujo de calor que caracteriza las dorsales medio oceánicas (Figrua 3.6c). El agua de mar es
forzada hacia abajo dentro de la corteza a lo largo de falas y, aunque esencialmene canalizada, fluye
ampliamente en respuesta a la convección, reapareciendo cerca a las zonas de máximo flujo de
calor. El flujo convectivo de fluidos termalmente impulsado puede ocurrir, como se mencionaba en
el Capítulo 2, en proximidad cerca a intrusiones magmáticas de alto nivel. Tambien puede ocurrir
en cuencas de rift intracratónicas profundas donde el flujo de calor o gradientes de densidad del
fluiod resultan en flujo convectivo, pero solo en acuiferos donde las permeabilidades son
suficientemente altas (Figura 3.6d).

El flujo de fluidos a gran escala com a escala de corteza puede tambien en asociación con la
“dilatación” (ej., cambios en volumen) de una masa de roca que acompaña el fallamiento y ruptura
sísmica (Figura 3.6 e). Los fluidos impulsados por orogenias pueden ser parcialmetne asociados con
este proceso, pero la dilatación acompaña mas típicamente el fallamiento y cizallamiento y este
proceso particular es considerado en mas detalle en al sección 3.3.3 debajo.

3.3.2 Una nota sobre los gradientes de presión hidrostáticos versus litostáticos
Como lo mencionado anteriormente, uno de los factores principales que controla los caminos de
migración de fluidos es la existenia de un diferencial de presión en la roca caja. En una roca
completamente seca la presion a cualquier profundidad es efectivamente proporcionada por el
peso de mas de roca sobre este punto y es conocida como presión litostática. En la Figura 3.7 el
gradiente de presión litostática es demostrado por una línea de pendiente 25 kPa/m, y refleja la
densidad promedio (ej., cerca de 2.5 g/cm3) de la secuencia de roca sobre este intervalo. La
distribución de esfuerzos (ej., fuerza por unidad de área) en una roca en cualquier punto en un perfil
de profundidad a gradientes litostáticos va a variar con la orientación, y va a ser maximizado en un
sentido vertical, y minimizado horizontalmente. Por el contrario, la presión sobre roca localizada en
el fondo del océano va a ser dada por el gradiente de presión hidrostática (Figura 3.7), que tiene una
pendiente de 10kPa/m, reflejando la menor densidad del agua en relacion a la roca (1g/cm3). Los
esfuerzos bajo presión hidrostátic son distribuidos equitativamente en todas direcciones, que
cuenta para la “weightnessless” (ingravidez) de los objetivos sumergidos en agua.
Los sedimentos sin compactar del fondo oceánico contienen abundante agua de poros que sigue en
contacto directo con la columna de agua oceánica suprayacente que va a ser tambien presurizada a
lo largo del gradiente hidrostático. Cuando el sedimento es enterrado y la compactación procede,
el agua va a ser impulsada fuera. Si, sin embargo, el agua de poros permanece interconectada
entonces la carga aplicada sobre la roca sigue siendo llevada por el agua y la presión va a ser hecha
de componentes parcialmente hidrostáticos y parcialmente litostáticos y tiene valores
intermediosde los dos gradientes. Cuando fluidos de poros drenan de los sedimentos es buena
entonces una condición conocida como compactación de equilibrio va a acompañar el
enterramiento y litificación progresiva de la rca. Si, sin embargo, la remoción de agua es impedida
por baja permeabilidad por compactación de la misma manera va aser retardad (y la porosidad
mantenida en un valor mas alto) y las presiones aumentarán a valores sobre las hidrostáticas, una
condición conocida como “sobrepresión”. Los sedimentos finos y gruesos van a expulsar agua de
poros a diferentes tasas durante el enterramiento, y van por lo tanto a compactar a lo largo de
diferentes gradientes de presión. La presión de fluidos usualmente va a ser significativamente mayor
en unidades de roca menos permeables como shales en relación a rocas bien drenadas como
areniscas. La Figura 3.7 ilustra este efecto con respecto a la secuencia de alternancias de areniscas
y shale y gradica la sobrepresión que ocurre en horizontes de shale compactándose en relación a
areniscas que mantiene el equilibrio de compactación y presiones hidrostáticas. Eventualmente, sin
embargo, con el incremento en la profundidad los perfiles normales de corteza de presión de fluidos
de poros aumenta de hidrostática a litostática (asi que la presión de fluido iguala la presión de roca)
y esto ocurre entre 5 y 10 km de profundidad dependiendo de la naturaleza de las rocas. La
naturaleza de los gradientes de presión hidrostática y litostática en la corteza terrestre, y las
desviaciones de estos escenarios end-memeber, son críticos para entender la naturaleza del flujo
de fluidos en todos los tipos de roca.

3.3.3 Deformación y flujo de fluidos hidrotermales


A niveles progresivamente mas profundos en la corteza, la porosidad de roca es reducida y solo es
el volumen de fluido contenido dentro de la roca. Es mas difícil para los fluidos moverse
invasivamente a través de la roca y bajo estas condiciones la migración de fluidos va a tomar lugar
a lo largo de canales representados por discontinuidades estructurales que se forman durante la
migración. La mayoría del movimiento del fluido ocurre a niveles de corteza profundos, y es
relevante para la formación de depósitos, es localizado dentr de fallas que pueden, como resultado,
volverse sitio para mineralización. El desplazamiento de fallas es generalmente alcanzado por
incrementos en el movimiento rápido que desencadenan eventos de terremotos, usualmente en los
15 km superiores (régimen sismogénico) de la corteza (Sibson, 1994). Las relaciones entre los
eventos de terremoto, propagación de fallas, y flujo de fluiods se han vuelto en un área mayor e
importante de estudio que ha revelado no solo la genesis de mena sino la hidrología y predicción de
terremotos. Es, por ejemplo, bien conocido que los eventos sísmicos desencadenan un amplio rango
de eventos hidrológicos que pueden variar de secamiento súbito de los pozos pro incrementos en
el fujo de ríos adyacentes a fallas (Muir, Wood, 1994). El trabajo de Sibson y colaboradores (Sibson,
1986; 1987; Sibson et al., 1975; 1988) en particular ha enfatizado la importancia del flujo de fluidos
impulsado por fallas (Figura 3.6e) para la formación de depósitos de mena hidrotermales y esto es
discutido en mas detalle debajo
Sibson et al., (1975) primero introdujó el termino pompeo sísmico para describir un modelo teórico
en el que fue pensado que la ciclicidad de las variaciones de esfuerzos dentro y alrededor de una
ruptura, sísmicamente activada por sistemas de fallas debería afectar presiones locales de fluidos y
promover el flujo de fluidos a lo largo de la falla (Figura 3.8ª). Antes del eventos sísmico la fricción
entre las caras opuestas de una falla preveen la ruptura cuando estos esfuerzos de deformación
aumentan y la roca adyacente sufre dilatación (Figura 3.8ª y b). La deformación dilatante que se
desarrolla en la roca alrededor de la falla causa que se formen fracturas, dentro de las cuales los
fluidos fluyen. Consecuentemente , las presiones de fluidos son predecidas que caen en la formación
de fracturas de fallas. En el instante en el que rupturas de fallas y terremotos ocurren, sin embargo,
los esfuerzos de cizalla caen significativamente (Δτ in Figure 3.8b) pero la presion de fluidos
aumenta, resultando en la expulsión hacia arriba de fluidos a lo largo de la falla. Como las fuerzas
de fricción son reincorporadas y los esfuerzos de deformación aumentan de nuevo, el mismo ciclo
completo se podría repetir, causando flujo episódico de fluidos a lo largo de canales relacionados a
fallas en la corteza. El modelo de pompeo sísmico proporciona un explicación y un mecanismo para
el movimiento de fluidos a través de corteza relacionado a variaciones cíclicas tanto en el estado de
esfuerzo y deformación de las rocas alrededor de fallas.
En realidad los factores que controlan el movimiento canalizado de soluciones hidrotermales a
través de la corteza terrestre son mas complejos que los mecanismos del modelo de Sibson et al.,
(1975). Este modelo es tambien de alguna manera no realista debido a que parece haber poca o
ninguna evidencia de algun tipo de propagación de fracturas en rocas adyacentes a falas que fueron
considerada en este modelo (Sibson, 1994). Es sin embargo aun aparente que los ciclos de
esfuerzo/deformación en rocas dentro y alrededor de fallas es un control mayor del movimiento de
fluidos de corteza. La relevancia de estos procesos para la formación de depósitos de vetas de oro
mesotermal ha sido, por ejemplo, demostrado por Sibson et al. (1988). Estos tipos de depósitos (ver
Box 3.2) son típicamente localizados dentro de un fallas inversas de alto angulo (subcertical) (Figura
3.9ª). Estas fallas son un enigma debido a los esfuerzos compresivos en la corteza terrestre que
generalmente forman fallas inversas (thrust) que son someramente inclinadas (ej., 25-30° a una
compresión horizontal máxima principal). La fricción en teoría sugiere que la reactivación de fallas
de alto angulo en un régimen de esfuerzos compresivo horizontal pued solo ocurrir cuando la
presion de fluidos locales alcanza o excede la carga litostática. El subsecuente modelo de Sibson et
al. (1988) considera los sitios de mineralización mesotermal de vetas de oro que son localizado en
estructuras donde la ruptura de fallas han sido causadas por la consecución de presiones litostáticas.
La Figura 3.9c ilustra como la presion de fluidos en una falla sísmicamente activa se desarrolla a
niveles inminentes de carga litostática porque la corteza superior representa un capa anterio al
fluido reservorio por debajo. La ruptura de falla ocurre cuando la presión de fluidos alcanza el
equivalente litostático y el evento sísmico es acompañado por dilatancia y el desarrollo de una
permeabilidad de fracturas hacia arriba y a lo largo de la falla (Sibson et al., 1988). Como la falla se
supende y los esfuerzos de cizalla son sustancialmente reducidos, los fluidos son tambien
descargados entro del espacio abierto creado por la ruptura de falla misma. El incremento
dramático en la presión de fluido (de nuevo hacia valores hidrostáticos) que resulta de la creación
de espacios abiertos podría promover la precipitación de constituyentes disueltos dentro de la
solución hidrotermal, causando a la falla un resello. Una ve esto ha pasado las presiones de fluido
son probables a aumentar de nuevo. Este mecanimos de fractura-sello es ahora conocido como
“fault valve model” (modelo de valvula de falla) y parece explicar muchas de las caracteristicas de
los depósitos de oro de vetas mesotermales (Figura 3.9ª y c).

Un mecanismo un poco diferente de flujo de fluido es considerado con respecto a fallas de rumbo
asociadas con esfuerzos extensionales. Los jogs de fallas dilatacionales son comúnmente
encontrados entre el final de un plano de ruptura en el despliege de fallas en echelon (Figura 3.9b),
y estos sitios son particularmente favorables para la mineralización epitermal a niveles de corteza
altos (Sibson, 1987). Los jogs de falla son típicamente caracterizados por el desarrollo de fracturas
extensionales que son preservadas como una red de venas de cuarzo. El jog de falla relacionado al
desarrollo de venas de cuarzo puede ser tambien mineralizado, por ejemplo como en el depósitos
de oro Martha Hill (o Waihi) de la Peninsula Coromander en Nueva Zelanda (Brathwaite y Faure,
2002). El desarrollo de fracturas extensionales en el jog de falla resulta de la transferencia del
movimiento de la falla de un segmento de falla en echelon a otro durante la actividad sísmica a lo
largo del trazo de la falla. La apertura de espacios abiertos a niveles de corteza altos y la descarga
de fluidos dentro de estos espacios resultan en una caída rápida en la presion de fluidos (Figura 3.9c)
que podría, al menos dentro de 2-3 km o sobre la superficie, tambien ser acompañado por ebullición
del fluido. La energía mecánica liberada durante la ebullición debería resultar en mayor
fracturamiento hidráulico y formación de brechas, con la circulación de fluidos y precipitación de
minerales aumentados. Este particular proceso referido como “suction pump model” (modelo de
bomba de succión) (Sibson, 1987) y parece tener aplicación a sistemas de fallas de rumbo y flujo de
fluidos epitermales a profundidades de corteza somera (Figura 3.9c y b).

No hay duda de que el movimiento de fluidos controlado por deformación a lo largo de sistemas de
fallas mayores en al corteza terrestre es de importancia mayor para la formación de depósitos de
mena hidrotermal sobre un rango considerable de profundidades de corteza. Esto es confirmado
por el hecho de que muchas menas hidrotermales son localizadas dentro de discontinuidades
estructurales y tambien que la explración frecuentemente apunta a caracteristicas estructurales en
la búsqueda de depósitos minerales

3.3.4 Otros factores afectando el flujo de fluidos y precipitación de minerales


La anterior discusión se ha centrado sobre el movimiento de fluidos en estructuras a gran escala
como fallas que son de decenas a cientos de kilómetros en longitud. Esta sección considera la
migración de fluidos a menor escala como a evidentes a mesoescala (como venas de cuarzo
individuales) o microescala (como trazas de inclusiones fluidas en minerales individuales). A estas
escalas el flujo de fluidos efectivo a través de una roca es determinado por por la conductividad
hidráulica, o la extensión de dichas fracturas a lo largo de las caules los fluidos pudieron fluir son
interconectadas (Odling, 1997; Cox et al. 2001). En una roca con muy pocas fracturas, y donde la
porosidad es baja, la permeabilidad pued ser efectivamente cero y poco o nada de fluido va a fluir
a través de la roca (Figura 3.10). Cuando la densidad de fracturas aumenta, hay probabilidad de
dos fracturas interconectándose. Eventualmente en un punto es alcanzado, llamado percolación
threshold, donde la permeabilidad aumenta dramáticamene y el flujo de fluido a través de un
volumen finito de roca se vuelve posible (Figura 3.10; Odling, 1997). El logro de la percolación
thershold, a cualquier escala de masa de roca, es claramente necesario si la circulación efectiva de
fluido toma lugar.

¿Cómo saber que un fluido paso a través de una roca?


La evidencia de que una vez un fluido fluyó a través de una masa de rocas es proporcionadas ya
sea por alteración (ver sección 3.6 debajo) o por la presencia de venas que son típicamente
llenadas con cuarzo o una fase carbonato (ej., calcita, dolomita, siderita, etc.), junto con otros
minerales ganga menos comunes. Las venas son fomradas por un conjunto de minerales que
precipitan de soluciones acuosas calientes que pasaron atraves de una fractura, fosilizando
efectivamente y preservando el conducto de fluido en el registro de roca. La fractura se va a llenar
de dos formas (Bjorlykke, 1994):

1 Por difusión de solidos de los alrededores y precipitación dentro de un fractura o espacio abierto
(ej., un vug (cavidad)). Debido a que minerales como cuarzo tienen menor solubilidad en
soluciones acuosas a menores presiones y temperaturas (ver sección 2.4.1 en Capítulo 2), sigue
que es probable a precipitar en fracturas porque existen espacios abiertos que van a existir bajo
gradientes de presión hidrostática que va a llevar a mayor carga de presión litostática

2 Por precipitación de minerales de los fluidos fluyendo a través de una fractura. En este caso el
materia lpuede ser traido de una fuente distante y va a precipitar en el espacio abierto como una
función de muchos procesos diferentes (ver sección 3.5.1 debajo), cuando la temperatura
disminuye, alteración de roca, disminución en solubilidad, y ebullición.

Los factores controlando la precipitación de minerales variados y complejos y este tema es


discutido en mas detalles con respecto a constituyentes formadores de mena en secciones 3.4 y
3.5 debajo. Minerales tambien precipitan de fluidos fluyendo invasivamente a través de masas de
roca porosas y este es el mecanismo responsable de la diagénesis, mediante el cual las particulas
sedimentarias son cementadas juntas y litificadas (ej., convertidos a roca).

Una ilustación esquemática de precipitación de minerales, y contrariamente disolución de


minerales , es mostrada en la Figura 3.11, donde los fluidos de proos es considerado ser
libremente convectivo a través de una arenisca porosa
3.4 OTROS FACTORES AFECTANDO LA SOLUBILIDAD DE METALES
La solubilidad es definida como el “limite superior de la cantidad de metal disuelto que un fluido
hidrotermal puede transporta” (Wood y Samson, 1998). En el Capítulo 2 el concepto de solubilidad
de metals en soluciones acuosas hidrotermales fue introducido y mencionado por los
experimentos clásicos de Holland (1972) en los que la solubilidad de metales como Pb, Zn, Mn y Fe
fue encontrado como una variación exponencial de la concentracipon de ion cloruro (Cl-) del
fluido. Este trabajo enfatizó el hehco de que el transporte eficiente de metales por fluidos
hidrotermales en la corteza terrestre puede ser alcanzado solo si las soluciones acuosas contienen
otros ingredientes disueltos con los cuales los metales se pueden fijar, promoviendo asi la
disolución de metales.
BOX 3.1 Mezcla de fluidos y precipitación de metales: depósito
Olympic Dam de oxido de hierro-cobre-oro (IOCG), Sur de Australia
El depósito Olympic Dam , 500km al norte de Adelaide en Sur de Australia, fue descubierto en 1975
bajo 350m la cobertura sedimentaria. Este representa uno de los descubrimientos mas
espectaculares de los tiempos modernos, conteniendo alrededor de 2billones de toneladas de Cu,
U, Ag, y mena de Au (olomon y Groves, 1994). El cuerpo de mena es hospedado en un complejo de
brecha detro de porciones apicales del granito Roxby Downs 1588 Ma de edad (Creaser y Cooper,
1993), este ultimo siendo un granito anorogénico o tipo A enriquecido en K-, U- y Th-. La
mineralización es generalmente atribuida a la mezcla de dos fluidos completamente diferentes, uno
de posible derivación magmática, y el otro un fluido meteórico oxidado (Reeve et al., 1990; Oreskes
y Einaudi, 1992; Haynes et al., 1995).

Las brechas que hospedan la mena contienen una variedad de fragmetos, la mayoría de las cuales
son graníticas o hematiticas, junto con framentos volcánicos, rocas sedimentarias, y mena de
sulfuros masivos. Las brechas son extremadamente ricas en hierro y estas contienen un gran recurso
de hierro hecho de hematita y menos magnetita. La mineralización polmetálica, en la forma de
calcosita, bornita, calcopirita, pitch-blende, argentita, oro, y una variedad de elementos de tierras
raras (REE), es mas claramente enlazada a la brecha hematitica. Todas las brechas son cortadas por
diques máficos y félsicos que son aproximadamente de la misma edad que el granito Roxby Downs,
indicando que el magmatismo, brechación, y mineralización fueron ampliamente coetanes (Johnson
y Cross, 1991).
La genesis de mena en Olympic Dam (Solomon y Groves, 1994) fue iniciada por la intrusión de alto
nivel de un granito tipo A fértil, con acompañamiento de exsolución de fluidos y ebullición, que da
lugar a actividad volcánica explosiva y a una fase temprana de brechación. El fluido involucrado allí
es inferido ser de origen magmático y moderadamente oxidante. Fue clarificado tambien que era
rico en Fe y precipitado de una generación temprana de magnetita al igual que minerales con REE-
El enfriamiento del sistema magmático subsecuentemente permitio el descenso de las aguas
subterraneas (quizas derivadas del Playa Lake salino sobre el depósito; Haynes et al., 1995) que
permitió que pasara a actividad volcánica explosiva freática, despues la brechación, y precipitación
de hematita. La asociación espacial entre brecha de hematitia y mineralización polimetálica indica
que a baja temperatura, el fluido meteórico altamente oxidante, fue implicado en la disolución y
transporte de cantidades sustanciales de Cu, Fe, y U, posiblemente del granito, o rocas volcánicas
suprayacentes, o ambos. Este fluido se encontró y mezclo con soluciones magmáticas menos
oxidadas (con especies de azufre reducido), desetabilizando complejo de metales-ligantes y
causando la precipitación de sulfuros metalicos junto con oxidos de hierro. La Figura 2 ilustra un
modelo mostrando la existencia de dos tipos de fluidos fundamentalmente diferentes a diferentes
niveles de corteza, con precipitación de mena ocurriendo en la interfase entre fluidos. Es
considerado que la circulación de fluidos y mezcla continuo episodicametne para una periodo de
tiempo considerable, quizas en parte estimulado por el alto contenido de elementos radioactivos
(K, U,Th) del granito y el calor resultante generado por descomposición radioactiva. La longevidad
de los procesos formadores de mena es consistente con la complejidad de depósitos tamaños
enormes de mena.
3.6 MAS SOBRE LA INTERACCIÓN FLUIDO/ROCA – UNA INTRODUCCIÓN
A LA ALTERACIÓN HIDROTERMAL
El paso de soluciones hidrotermales a través de la corteza terrestre en es invariablemene
acompañado por alteración. La alteración de una roca por el paso de fluidos a través de ella es
marcado por el desarrollo de un conjunto mineral que es diferente del original y refleja la
composición de la roca, al igual que las propiedades y cantidad de fluido que han atravesado el
sistema. Las zonas de alteración marca los camindos de paso de fluidos hidrotermales atraves de la
corteza y pueden representar guias utiles para la exploración de muchos tipos de depósitos de
mena. La naturaleza de la alteración hidrotermal tambien proporciona un indicador de las
propiedades del fluido asociadas con la formación de mena y hay comúnmente una relacion cercana
entre las reacciones químicas involucradas en la alteración y son responsables de la depositación de
metales. Es, porl otnatno, apropiado que un resumen de las caracteristicas de la alteración
hidrotermales que acompañan cualquier descripción de procesos formadores de mena. El tmea es,
sin embargo, uno complejo y la siguiente sección es necesariamente breve. Documentación mas
detallada cuenta la evolución de las ideas considerando la alteración hidrotermal que es
proporcionada en los capítulos relevantes de las tres ediciones de Geochemistry of Hydrothermal
Ore Deposits de H.L. Barnes (mencionado en Meyer y Hemley, 1967; Rose y Burt, 1979; Reed, 1997).

Tradicionalmente, la alteración ha sido considerada como un proceso que, en su forma mas simple,
involucra tanto fluidos hidrotermales (esencialmente agua con sus componentes H+ OH- disociados)
y constituyentes disueltos de la solución acuosa. Los grados bajos a moderados de alteración
isoquímica, invasiva que caracterizan casi cualquier roca involucrando la presencia de un fluido
puede ser ampliamente explicato por hidrolisis o metasomatismo de ion H+ (ver tambien Capítulo
4, sección 4.2.2). Este proceso puede ser representado en términos de equilibrio químico simple, o
reacciones, aunque debe ser recordado que es probables que sean simplificaciones de los procesos
actuales de alteración. Por ejemplo, una de las formas mas comunes de alteración reconocidas en
la naturaleza es la reacción del feldespato K con agua para formar muscovita o sericita. Esta reacción
se expresa:

La hidrolisis de K-feldespato a muscovita en términos de esta reacción no requiere mas que la


presencia de iones H+ en una solución acuosa.

Esta reacción es isoquímica y no se necesitan que nuevos ingredientes se agregen al sistema. Si la


reacción procede a la derecha, los iones H+ son consumidos y el fluido se vuelve mas básico, y va a
continuar hasta que todo el feldespato-k es consumido. La reacción tambien va a producir cuarzo
como parte del conjunto de alteración, al igual que iones K+ disueltos en las solución aucosa.

Si el producto de la reacción [3.6] son permitidos a reaccionar mas con iones H+ en solución el
sistema se va a someter a un incrementos en la tasa fluido/roca, entonces la muscovita puede
reaccionar para formar caolinita, sigue:

La plagioclasa por ejemplo, ocurriendo en la misma roca que originalmente contenia feldespato-K,
pudot tambien reaccionar con iones H+ en solución para formar pirofilita, según:

Todas las tres reacciones reflejan el intercambio acido-base porque un ion H+ acuoso es consumido
y remplazado por cationes de los reactivos. La acumulación de cationes base en el fluido en
evolución va a tener efecto sobre la naturaleza de la alteración aguas abajo, como muchos de estos
van a reaccionar con la roca pared. Este tipo de procesos de alteración son conocidos como
metasomatismo de cationes. Una amplia variedad de productos de alteración se pueden formar de
metasomatismo de cationes, ejemplo de estos son:

En la reacción [3.9] la presencia de cationes de Mg, Fe, y Al en un fluido que equilibra con la
plagioclasa va a resultar en cloritización de este mineral, acompañando con precipitación de cuarzo
y producción significativa de H+. Este tipo de alteración resultará en un fluido que se vuelve mas
acidos durante alteración progresiva, que es contrario al caso de las reacciones de hidrolisis. La
reacción [3.10] muestra los tipos de procesos que toman lugar cuando soluciones acuosas con
cationes interactúan con minerales de carbonatos, como la dolominte, para formar un mineral
silicatado, como el talco. Estos procesos son relevantes para la formación de depósitos de mena de
skarns donde granitos fértiles intruyen rocas caja carbonatadas, y son referidos como silicificación
(ver sección 3.6.1 debajo).

Consideraciones mas recientes de procesos de alteración han sugerido que deberían ser
consideradas no solo en términos de equilibrio químico, sino tambien a sistemas dinámicos que
evolucionan en el tiempo. Dada la escala tiempo de la mayoría de eventos geológicos, lograr el
equilibrio entre roca y fluido es generalmente factible, al menos en una escala local. En sistemas
dinámicos, sin embargo, es probable que consideraciones cinemáticas predominan sobre el estado
de equilibrio estable. Los conjuntos minerales que se forman como resultado de alteración
hidrotermales varian en función de cinco factores (Reed, 1997):

• Temperatura;
• Presión;
• Composicion de la roca caja;
• Composición del fluido; y
• La tasa de fluido a roca en los procesos de alteración (llamda tasa fluido/roca)

La evoución de los conjuntos de alteración en un sistema hidrotermal dinámico puede ser modelado
por reacción de un fludio de composicion inicial conocida, pH, y temperatura con una roca, usando
limitaciones impuestas por datos establecidos de termodinámica, química, y equilibrio (Reed, 1997).
La composición y pH del fluido es entonce cambiado cuando los consituyentes de las reacciones
químicas son consumidos (ej., como un mineral buffer del sistema se descompone). La Figura 3.18b
muestra como los conjuntos de alteración cambian en uan roca de composición andesítica en
reacción con una solución hidrotermal. El escenario es modelado en términos de un sistema con
tasas iniciales altas de fluido/roca y un fluido ácido (pH bajo), evolucionando a tasa menores de
fluido/roca y condiciones alcalinas (pH alto). El pH muestra que un fluido ácido circulando con tasas
de fluido/roca altos a través de un andesita va ser caracterizado por un conjunto de alteración con
cuarzo+pirofilita+alunita, tambien referido como conjuntos de alteración argílica avanzada (Figura
3.18b). Cuando la alteración evoluciona sistematicametne, la misma roca, ahora infiltrada por un
fluido mas alcalino circulando a una tasa de fluido/roca baja, debería ser alterado, inicialmente a un
conjunto sericita+clorita y despues a un conjunto clorita+epidota+muscovita+albita llamado
alteración propilítica y tambien se empareja al conjunto metamórfico típico de facies esquistos
verdes. La distribución esperada de minerales mena en un sistema en evolución es mostrado en la
Figura 3.18 c

3.6.1 Tipos de alteración y sus asociaciones de mena


Esta sección describe algunas de las caracteristicas y asociaciones de mena de los principales estilos
de alteración con una variedad de ambientes hidrotermales.
Alteración potásica
La alteración potásica (o K-silicatada) es caracterizada por la formación de nuevo feldespato K y/o
biotita, usualmente juno con menos sericita, clorita, y cuarzo. Las cantidades accesorias de
magnetita/hematita y anhidrita pueden ocurrir asociados con el conjunto de alteración potásica.
Tipicamente representa la forma de alteración mas alta temperatura (500-600°C) asociadas con
depósitos de tipo pórfidos de Cu, formándose en el nucleo del sistema y usualmente dentro de la
intrusión de granito misma.

BOX 3.2 Alteración y precipitación de metales: Un epósito de oro


orogénico del Arcaíco, Golden Mile, Kalgoorlie, Oeste de Australia
Golden Mile es una zona de mineralización de oro excepcional inmediatamente al este de las
ciudades gemelas Kalgoorli-Boulder en Oeste de Australia. El oro fue descubierto allí en 1893 y mas
de 1200 tons de oro han sido extraidos del área desde entonces. Hasta 1975 la minería fue llevada
a cabo en varia operación bajo suelo, una situación que permitio un declinamiento estable en la
producción debido al incremento en las profundidades y disminución de los tenores. Esta situación
fue contrariada a finales de los 1980s cuando la propiedad fue amalgamada y planes iniciaron para
abrir una gran operación a cielo abierto, de bajo tenor conocida como Fimiston o Super Pit. Ahora
la operación de minería de oro mas grande en Australia produciendo mas de 800 000 oz de oro por
año.

El Golden Mile esta localizado en en cinturón greenstone Norseman-Wiluna del Craton Yilgarn. La
mineralización aurífera es estructuralmente controlada y hospedada principalmente en zonas de
cizalla buzando o vetas que son centradad sobre la falla Golden Mile (Figura 1). Cientos de vetas
subsidiarias concentradas dentro y alrededor del sistema y son hospedadas por intrusiones (silos)
toleiticas ferruginosas de 2675 Ma llamado doleritas Golden Mile. Aunque inicialmente de alto
tenor, ampliamente en subsuelo, los trabajos fueron centrado en zonas de cizalla individuales, el
sistema es acompañado por un halo de alteración extensiva de mineralización de baho tenor que
ahora forma el presupuesto de mena del Super Pit. Esta alteración de rocas doleriticas encajantes
por soluciones hidrotermales acuo-carbonicas mineralizantes se cree que es la principal causa de la
mineralización de oro invasivo en este depósito (Philips, 1986) y esto es discutido en mas detalle
debajo.
Una indicación esquemática de la geología regiona de Golden Mile, y la posición aproximada del
Super Pit, es mostrada en la Figura 1(a). La naturaleza del halo de alteración de cuarzo-pirita-oro
mineralizadp alrededor de zonas de cizalla (como el East Lode en la mina Lake View, que ahora han
sido asumidos por el Super Pit) es motrado en la Figura 1(b). La dolerita Golden Mile fue
regionalmente metamorfoseada a conjuntos dominantemente actinolíticos antes y durante el
plegamiento y deformación ductil del cinturo greenston Norseman-Wiluna. El metamorfismo fue
sustituido por introducción de un fluido reducido, de baja salinidad acuo-carbónico que percoló
durante cientos de zonas de cizalla cortando preferencialmente a través de dolerita relativamente
competentes de Golden Mile, progresivamente alterando rocas caja dentro y alredor de ella. La
alteración es marcadamente zonada alrededor de zonas de cizalla individuales, al igual que ha mayor
escala, y es caracterizada por una secuencia paragenética que comienza con actinolita temprana
(metamórfica) y despues progresa sucesivamente a clorita-, carbonato-(siderita), y eventualmente
a conjuntos dominados por pirita (Philips, 1986). La alteración de clorita (con menor carbonta,
albita, y cuarzo) forma un halo invasivo extendiendos por varios cientos de metras alrededor del
cizallamiento, y sobreimpone el conjunto metamórfico regional. Los conjuntos de carbonatos
reflejan una manifestación mas intensa de alteración (ej., mayor tasa fluido/roca) y ocurren cerca a
zonas de cizalla individuales (ej., en halos extendiendos mas de 5m fuera de la cizalla) o en las partes
mas ferruginosas del silo de dolerita diferenciado. La zona de cizalla mismo es demarcda por un
conjunto de pirita-cuarzo-muscovita-carbonato con el que la mineralización de oro de alto tenor
ocurre. Philips (1986) ha discutido que la paragénesis de alteración es un producto de un solo fluido
metamórfico que introdujó CO2, K, S, y Au dentro del sistema, y que la alteración y mineralización
fueron sincronicas. La precipitación del oro es consideradaque ha sido facilitada por la interacción
de un fluido aurífero reducido con las rocas caja ricas en Fe, como las siguientes reacciones:
Este modelo enfatiza el papel que la alteración de la roca caja juega sobre la precipitación de
metales, como lo describe la sección 3.5.1 de este Capítulo. Aunque el proceso es indudablemente
muy importante en la formación de muchos depósitos de mena hidrotermales, en pocas ocasioes
toma lugar ailsadamente. En Golden Mile, por ejemplo, es ahora reconocido que las menas de alto
tenor de oro-telurio-vanadio de etapa tardía que caracterizan los sistemas de venas ricas como en
Oroya shoot donde el producto de mezcla de un fluido (posiblemente magmatico) oxidado, con SO2
con un fluido metamórfico mas reducido que fue responsable de la alteración invasiva descrita antes
(J. Walshe, www.agcrc.csiro.au/projects). Los procesos de mezcla de fluidos tambien parecen ser
ampliamente coincidenciales con la transición de un regimen de deformación ductil a fragil, un
cambio que es comunmente asociado con mineralización significativa de sistemas de oro orogénico.

Alteración fílica (o sericítica)


Este estilo de alteración es muy común en una variedad de depósitos hidrotermales de mena y
típicamente se forma en un amplio rango de temperatura por hidrolisis de feldespato para formar
sericita (mica blanca de grano fino), con menos cuarzo, clorita, y pirita asociados (ver reacción [3.6]
y Figura 3.18b). La alteración fílica es asociada con depósitos de pórfidos Cu, pero tambien con
depósitos de mena de metales precisos mesotermales y sulfuros masivos volcanogénicos en rocas
félsicas.

Alteración propílitica
La alteración propilítica es probable que seala forma de alteración mas amplia en la que es
esencialmente indistinguible de los conjuntos los cuales se formo durante metamorfismo regional
de esquistos verdes. Contiene principalmente clorita y epidota, junto con menores cantidades de
clinozoisita, calcita y albita. Es una forma blanda de alteración representando las temperaturas
representando temperaturas bajas e intermedias (200-350°C) y bajas tasas de fluido/roca (ver
Figura 3.18). Este estilo de alteración tiende a ser isoquímica y se forma en respuesta a
metasomatismo H+. Se caracteriza en los márgenes de depósitos de pórfidos Cu al igual que en meas
epitermales de metales preciosos

Alteración Argílica
Este estilo de alteración es comúnmente subdividio en categorías intermedia a avanzada
dependiendo en la intensidad de la descomposición del mineral hospedante. La alteración argílica
intermedia afecta principalmente feldespato plagioclasa y es caracterizado por la deformación de
minerales de arcilla del grupo de la caolinita y arcilla (principalmente montmorillonita). Se forma
principalmente debajo de 250°C por metasomatismo H+ y ocurren en los bordes del sistema pórfido.
La alteación argílica avanzada representa una forma extrema de lixiviación base donde las rocas han
sido desnudadad de elementos alcalino por fluidos muy ácidos activos en ambientes alta tasa de
fluido/roca. Es caracterizada por caolinita, pirofilita, o dickita (dependiendo de la temperatura) y
alunita junto con menor cuarzo, topacio, y turmalina. Es comúnmente asociada con depósitos
epitermales cercanos a superficie donde la alteración es asociada con fluido ebullendo y
condensación de vapore ricos en volátiles de soluciones extremadamente ácidas.
Silicatación
La silicatación es la conversión de un carbonato mineral o roca en una silicato mineral o roca (ver
reacción [3.10} antes) y necesariamente involucra la introducción adicional de componentes dentro
del sistema (metasomatismo de cationes). Es el principal proceso que acompaña la etapa prograda
en la formación de depósitos de skarn polimetálicos.

Silicificación
La silicificación no debe ser confundida con las silicatación y se refiere específicamente a la
formación de nuevo cuarzo o minerales de sílica amorfa en una roca durante la alteración. La
silicifación menor se desarrolla en halos de alteración asociados con muchos diferentes tipos de
mena y es usulamete un subproduct de reacciones isoquímicas de hidrolisis donde Si es
localmente derivado. La mayoría de fracturas a través de las cuales fluidos hidrotermales pasaron
están almenos parcialmente llenas de cuarzo por lixiviación de las rocas caja atraves de las cuales
el fluido circuló. La silicificación intensa, sin embargo, se forma como resultado de metasomatismo
de cationes, donde una adicion sustancial de Si4+ en la soluciones es agregado al sistema. Este
tipo de alteración es característica de zoans sinter en depósitos epitermales de alto nivel.

Carbonatización
Se refiere a la formación de carbonatos minerales (calcita, dolomita, magnesita, siderita, etc.)
durante la alteración de una roca y es promovida por fluidos caracterizados con PCO2 altas y pH
alcalino a neutro. El cinturos greenstone del Arcaico relacionado a depósitos de vetas de oro
representa un tipo de depósito de mena donde la alteración de carbonatos es virtualmente ubicua
y es acompañaa por un conjunto con cuarzo, muscovita, biotita, albita, y clorita.

Greisenización
La formación de greisen es específicamente en las zonas cupulas de granitos altamente
dfierenciados (tipo S) que contienen mineralización de Sn y W, al igual que concentraciones
significativas de otros elementos incompatibles como F, Li, y B. Representan un conjunto de
alteración principalmente con cuarzo, muscovita, y topacio, con menos turmalina y fluorita,
usualmente formándose adyacente a venas de cuarzo-casiterita-wolframita.

Hematitización
Alteración que es asociada con fluidos oxidados que a vece resultan en la formación de mineales
con tasa altes d Fe+3/Fe2+ y, en particular, hematitia asociada con felsepato K, sericita, clorita y
epidota. En el ambiente magmático-hidrotermal, ocurrencias como depósitos Cu-Au-FE-U tipo
Olympic Dam, hospedado en granitoides en el Sur de Australia

3.7 ZONACIÓN DE METALES Y SECUENCIA PARAGENÉTICA


Una característica de muchos depósitos de mena hidrotermal es la ocurrencia de un patrón regular
de distribución o zonación, de metales y minerales en el espacio. La zonación puede ser observada
a muchas diferentes escalas, que van desde patrones regionales de distribución de metales (a escala
de patrones de cientos de km), a través de una escala de distrito, a un cuerpo de mena individual
relacionado a variaciones e incluso bajo el nivel de una sola veno o muestra de mano Smirnov, 1977;
Guilbert and Park, 1986; Pirajno, 1992; Misra, 2000). Un buen ejemplo de zonación de metales
regional es la provincia metalogénica de los Andes, donde el patrón distribucional de los depósitos
de mena es relacionado a la subducción a escala contienental a lo largo del margen occidental de
Suramerica. A escala de distrito, sin embargo, la distribución de metales es restringida mas
finamente y mejor definida, y comúnmente caracterizada por un patrón eficiente que es
reproducido en otros ambientes formadores de mena. La zonación a escala de distrito esta bien
ejemplificada por la secuencia Sn-W-Cu-Pb-Zn-Ag-Sb-U del Sur de Inglaterra (ver Box 2.2, Capítulo
2), un patrón que es reproducido en otros sistemas formadores de mena relacionados a granitos. La
zonación a esta y mas pequeñas escalas es claramente relacionada a la evolución sistemática de un
fluido hidrotermal (ej., alteración) y la precipitación secuencial de su presupuesto de metales
contenido mediante procesos discutidos en la sección 3.6 antes. Aunque los procesos que controlan
la precipitación de metales son complejos y variados, patrones relativamente consistentes de
zonación de metales en muchos ambientes formadores de mena diferentes significa que los
procesos deben ser dispuestos a una explicación racional y unificada.

Aunque aun hay alguna ambigüedad en su uso, el termino paragénesis es ahora ampliamente
aplicado a la asociación de minerales y metales que caracterizan un tipo particular de mena y, por
lo tanto, tienen un origen común (Guilbert and Park, 1986; Kutina et al., 1965). Porque tanto espacio
y tiempo necesitan ser considerados en el entendimiento de la zonación, la frase secuencia
paragenética es ahora usada para describir la distribución en tiempo de un conjunto de minerales
o metales genéticamente relacionados. El reconocimiento y significado de paagenesis y secuencias
paragenéticas en depósitos de mena hidrotermal viene de observaciones tempranas de ambientes
formadores de mena por algunos de los fundadores de la geología económica moderna,
notablemente Waldemar Lindgren (1933). En base a estas observaciones empíricas Emmosn (1936)
ideo el concepto de “vena reconstruida”. Esto fue una vena compuesta que se extendió de profundo
en la corteza arriba a la superficie y conteniá una secuencia paragenética de componentes mena
que son típicos de los patrones de zonación observados en muchos diferentes tipos de depósitos de
mena hidrotermal. La” vena reconstruida de Emmons”, revisada por Guildbert y Park (1986) es
resumido en la Tabla 3.3.
Observaciones sugieren que metales como el Mo, W y Sn van a precipitar temprano (o a niveles
profundos) de una solución hidrotermal de alta temperatura. Estas soluciones a veces referidas
como hipotermales. Son seguidas, en la secuencia ideal de precipitación, por Cu, y despus Zn, Pb,
Mn, y Ag, cuando el fluido infiltra hacia arriba en la corteza y se enfira para formar soluciones
mesotermales. Los metales preciosos y volatiles como Au, Sb y Hg son típicamente observados para
representar etapas tardías de la secuencia, formándose de soluciones epitermales mas frias
circulando cerca de la superficie. Extensivos estudios de depósitos de mena hidrotermales dejan
pocas dudas sobre si la secuencia de Emmons mostrada en la Tabla 3.3 tiene aplicabilidad general.
Mucha excepciones, sin embargo, existen y hay una pequeña uda sobre si el esquema puede ser
mas mejorado y extendida en luz de observaciones y teorias modernas.

El amplio rango de aplicabilidad de la secuencia de Emmons sugiere que las precipitación secular de
metales puede ser relacionada simplemente a la disminución en la solubilidad que generalmente
acompaña la disminución en la temperatura. Las seccones 3.5 y 3.6 antes, sin embargo, han
mostrado que las solubilidades de emtales y precipitación son controlados por una varieada de
variables complejamente interactuadno que son relacionadas tantos al fluido mismo t sus
alrededores. Barnes (1975) primero mostró que si los metales son considerado a haber sido
transportados como complejos metal-sulfuro entonces las estabilidades relativas de estos
complejos, cuando se corrijen para diferentes concentraciones de metales en solución, se
emparejan cercanamente a la secuencia de precipitación de Emmons. En esta bases identificó la
siguiente secuencia paragenética:

Fe – Ni – Sn- Cu – Zn – Pb – Ag – Au – Sb – Hg

Por el contrario, si el transporte del metal ocurre por complejación metal-cloruro entonces la
anterior secuencia no aplica mas y un subconjunto de estos metales es mas probables a ser
precipitados de acuerdo a la secuencia:

Cu – Ag – Pb – Zn

Esto suguiere que las secuencias paragenéticas son probables a ser controladas pora mas de una
sola variables. Susak y Crerar (1981) demostró que las secuencias paragenéticas necesitan ser
consideradas en términos de las clases de metales que son agrupados en términos de
estequimoetria mineral y el estado de valencia de las especies de metales acuosos. Estos iban para
mostrar que la secuencia de precipitación de metales de dentro de una clase particular va a ser
controlada esencialmene por las energias libres de Gibbs de los minerales asociados. La
precipitación de metales de diferentes clases debería, sin embargo, ser controlado por el ambiente
dentro de la cual la solución con metales ocurren, y este puede ser mas compleja, de procesos
multivariables. Así, un patrón zonación simple y reproducible o secuencia paragenética es probable
a ser aplicada solo a ambientes hidrotermales formadores de mena que consisten de metales de la
misma clase de zonación.

La secuencia de precipitación predecida para metales en clases de zonación especificamete definida


es illustrada en la Figura 3.19. La secuencia de precipitación para metales en solución de la misma
clase debe ser leida sobre este diagrama en términos de valores de energía libre de Gibbs
disminuyendo para una temperatura específica. Así, la secuencia de precipitación para metales en
el MS (q=2) clase de zonación es Mn-Zn-Cd-Pb-Hg para cualquier temperatura, pero esta secuencia
podría no necesariamente prevalecer bajo condiciones donde una estequiometra diferente y estado
de valencia prevalecen.

Procesos de remplazamiento
En la anterior sección la precipitación de minerales y metales fue discutida en el contexto de las
soluciones acuosas pasando a través de espacios abiertos en una roca, especialmente huecos (vugs)
y venas a niveles someros de corteza. Diferentes condiciones aplican a metales que son precipitados
durante el remplazamiento de minerales mas profundis en corteza de la Tierra. El remplazamiento
ocurre cuando los minerales originales en una roca son disueltos y la precipitación casi simultanea
de minerales secundarios ocurre (Seaward y Barnes, 1997). Al contrario al ambiente mas permeable
cerca a superficie donde la depositación de mena toma lugar cuando hay relleno de un espacio
abierto, la precipitación de metales mas profundos en la corteza ocurre cuando los fluidos percolar
a lo largo de microfracturas pobremente interconectadas y espacios de poros (ver sección 3.3.4).
Por consiguiente, el proceso de reemplazamiento va solo a persistir si la porosidad es mantenida y
si las reacciones acompañantes fluido-roca están caracterización por una reducción en el volumen
molar de un mineral siendo remplazado. Un incremento en el volumen molar debería bloquear
efectivamente el flujo de fluido a través de microfracturas y poros que son llenados por minerales
secundarios que precipitan cuyos volúmenes son mayores que el material siendo reemplazado.

La comparación de los volumnes molares muestran que la calcita, por ejemplo, puede ser
remplazada por la mayoría de minerales calco-silicatos y sulfuros, un rasgo que es comúnmente
observado en depósitos skarn. Por el contrario, los minerales oxidos como la magnetita e ilmenita
son menos probables a ser completamente sulfidizados debido a reacciones relevantes que van a
involucrar un incremente en el volumen molar. En el mejor de los casos, solo remplazamiento parcial
del oxido por sulfuro podría ocurrir debido al incremento de volumen, junto con el acompañante
disminución en la microporosidad que acompaña la reacción, debería limitar el flujo de fluido. La
secuencia de precipitación de mineraes secundarios o mena durante procesos de remplazamiento
pueden ser mejor predecidos en términos de la disminución de volúmenes molares de los
respectivos solidos involucrados, como lo discutido por Seward y Barnes (1997). La secuencia
mineral mostrada debajo, con volúmenes molares relevantes, es utila para entender las secuencias
de remplazamiento. El reemplazamiento va ser efectivo solamente cuando minerales de pequeño
volumen son remplazado con uno de mayor volumen. En la secuencia presentada debajo los
minerales van a remplazar exhaustivamente los ocurren a su izquierda. Adémas, el remplazamiento
mineral va a ocurrir presumiblemente mas inmediatamente a mayor déficit de volumen entre el
mineral original y el secundario.
3.8 ANALOGOS MODERNOS DE PROCESOS FORMADORES DE MENA –
LA CONTINUIDAD VMS-SEDEX
El termino “sulfuro masivo volcanogénico”, o VMS, se refiere a la gran familia de tipos de depósitos
principalmente de Cu-Zn (ocasionalmente con menor Pb y Au) que se formaron durante episodio de
orogénesis mayor a través de la historia de la Tierra(ver Capítulo 6). Los VMS ocurren en una
variedad de ambientes tectónicos, pero son típicamente relacionados a la precipitación de metales
de soluciones hidrotermales circulando en ambientes submarinos volcánicamente activos. Los
depósitos de sedimentos exhalativos (SEDEX), por el contrario, son dominados por una asociación
de metales Zn-Pb (con menor Cu, pero comúnmente Ba y Ag) y son tambien relacionados a fluidos
hidrotermales descargados dentro del fondo marino, pero sin enlace directo u obvio al volcanismo.
Muchos depósitos del mundo son de edad Proterozoico, aunque varios ejemplos, como Red Dog
(ver Box 3.4) tambien se formaron en el Fanerozoico. Aunque no hay enlace temporal o espacial
entre depósitos SEDEX y VMS, es ampliamente soste jdo que representaron una continuidad y son
conceptualmente enlazados por el hecho de que se formaron por los mismos proceso básicos
(Gilmour, 1976; Plimer, 1978; Guilbert and Park, 1986; Kirkham and Roscoe, 1993; Misra, 2000).
Estos procesos son activos y pueden ser estudiados en ambientes en la actualidad discutidos debajo.

La noción de una continuidad entre depósitos de tipo VMS y SEDEX es, sin embargo, polémica y los
lectores deberían ser cautelosos de sobre-interpretar el enlace genético entre los dos tipos de
depósitos. Los principales depósitos VMS y SEDEX aparentemente formado a diferentes tiempos de
la Historia de la Tierra en diferentes ambientes tectónicos. Adémas, estudios han mostrado que
algunos depósitos estratiformes de metales base, que previamente se pensaba que eran
syngenéticos y relacionados en descargas exhalativas de soluciones hidrotermales sobre el fondo
marino, son mas probables a ser producto de procesos de remplazamiento y, por lo tanto, de origen
epigenético. Un reinterpretación de este tipo ha, por ejemplo, sido hecha recientemetne con
respecto a los depósitos Mount Isa en Australia (Perkins, 1997). Con esta condición de advertencia
en mente, es aun asi conveniente discutir los depósitos VMS y SEDEX como una continuidad
conceptual, al menos en lo que los principales procesos formadores de mena sean la parte
interesada. Ambos tipos de depósitos pueden ser discutidos en términos de modelos análogos, lo
cual es una ventaja en la que los procesos formadores de mena pueden ser estudiados
directamente. Los depósitos VMS son discutidos a la luz de los descubrimientos espectaculres sobre
los fondos oceánicos de “fumarolas negras”, mientras que los depósitos SEDEX son considerados en
términos de actividad hidrotermal relacionada a rift en el Mar Rojo y también alrededor de Salto
Sea en California.

3.8.1 “Fumarolas negras” – un análogo moderno para la formación de depósitos VMS


A pesar de que han sido conocido desde los 1960s que salmueras calientes descargadas sobre el
fondo oceánico, fue el descubrimiento en 1979 de “fumarolas negras” en 21°N sobre el East Pacific
Rise (Francheteau et al., 1979) que proporciono conocimiento espectacular en la naturaleza de la
actividad hidrotermal submarina y su potencial impacto sobre el conocimiento de la depositación
de mena en estos ambientes. Las fumarolas negras son descritas como fluidos hidrotermales
calientes (mas de 400°C), cargadas en metales, reducidas, y algo ácids que se descargas sobre el
fondo marino, usualmente en zonas de extensión de volcanismo activo a lo largo de dorsales medio-
oceánicas (Fig. 3.20). Los fluidos se originan esencialmente de agua marina fría (2°C), alcalina,
oxidante, y deficiente de metales. Circular a través de la corteza oceánica basáltica y, haciendo esto,
escarban metales para formar fluidos hidrotermales ahora observado a mas de 100 sitioes de
fumarolas negras en los oceanos Pacífico, Atlántico e Índico al igual que el Mar Mediterranes (Scott,
1997). Los fluidos de fumarolas negras usualmente se descargan a través de estructuras como tubos
(tube-like), llamadas chimeneas (Figura 3.20), que son construidas de una mezcla de pirita, pirrotita,
calcopirita, y esfalerita, al igual que ganga de silica opalina.

Los fluidos cargados en metales descargándose sobre el fondo oceánico apunta a procesos
hidrotermales exhalativos por los cuales la mayoría, si no todos, los VMS y SEDEX pueden ser
explicados. Las descargas de fumarolas negras a lo largo de dorsales medio-oceánicas representan
una analogía directa de un tipo específico de familia de depósitos VMS, llamada depóitos Cu-Zn
hospedados en ofiolitas como los del Macizo Troodos, Chipre (Box 3.3). Una ofiolita representa un
sección de una dorsal medio-oceánica en expansión que es preservada por obducción sobre
material continental, y es caracterizada por un complejo de diques en capas, basaltos
almohadillados, y sedimento pelágico. Un lente de mena de sulfuros masivo, conteniendo
principalmente pirita, calcopirita, y esfalerita esta localizada en la interfase del fondo oceánico y
esto es subyacida por una zona en forma de tubo (pipe-like) de sulfuros diseminados y alteración
clorítica intensa representando el conducto por el cual los fluidos pasaron sobre su camino al fondo
oceánico (Figura 3.21ª). La geometría de este tipo de depósito mena es bastante típico para la
mayoría de otros depósitos VMS (Figura 3.21b) aunque pueden formarse en otros ambientes
tectónicos como arcos de islas, cuencas back-arc, y fore-arc troughs. Otros depósitos VMS tipo
Chipre bien conocidos incluyen Lokken en Noruega y Outokumpu en Finlandia. Ejemplos famosos
de depósitos VMS formados en otros ambientes tectónicos incluyen los depósitos Mattabi y Kidd
Creek hospedados en el cinturon greenstone en Provincia Arcáica Superior de Canada, Besshi y los
numerosos depósitos de tipo-Kuroko del arco de islas Japones, Rio Tinto y Nerves Corvo en el
Cinturon de Pirita Ibérico de España y Portugal, los depósitos Buchans y Bathurst de Newfoundland,
Jerome en Arizona, y los depósitos Mount Lyell y Hellyer en Tasmania.

Ahora hay conciencia general que las descargas submarinas representan un muy buen análogo para
los procesos que aplicaron durante la formación de la mayoría de depósitos VMS actuales
preservado o fosilizados en la Corteza de la Tierra. Revisiones excelentes de la características de los
depósitos VMS actuales y la naturaleza de los procesos formadores de mena son proporcionados
por Franklin et al. (1981), Hekinian y Fouquet (1985), Lydon (1988), Large (1992) y Scott (1997). Los
estudios de muchos depósitos actuales confirman que los fluidos involucrados son derivado
dominantemente de agua marina, aunque los estudios de inclusiones de fluidos e isotopos estables
sugieren que en ciertos casos un componente menor de fluido magmático pudo haber sido
incorporado en el sistema de circulación de fluido. La fuente principal de metales se cree que han
sido rocas volcánicas a través de las cuales el agua marina estuvo percolando, y la evidencia que
apoya esto viene de consideraciones de balance de masas y el hecho de que conjuntos metales en
diferentes depósitos VMS son consistentes con los contenidos y tasas de metales esperados en la
roca igena primaria asociada. Por ejemplo, los depósitos VMS tipo Chipre, los cuales reflejan
lixiviación de una roca fuente volcánica dominantemente máfica, son representados por una
asociación metal Cu+Zn (Franklin, 1993) y esto es explicado por el hecho de que los volcanes máficos
son caracterizados por contenidos mucho mas altos de Cu y Zn que sus equivalente félsicos. Sin
embargo, lo opuesto es cierto de Pb (ver Tabla 1.2, Capítulo1) y esto ayuda a explicar porque los
depósitos Kuroko de Japon, por ejemplo, descritos como una variante Zn-Pb-Cu de la familia VMS
(Pirajno, 1992; Franklin, 1993; Misra, 2000) y asociado con volcanismo bimodal relacionado a arco
(ej., félsico y máfico), tiene una asociación de metales fierente. Por ejemplo, la fuente del azufre es
esencialmente del componente sulfato del agua de mar misma con la reducción del sulfato a sulfuro
ocurriendo durante la interacción fluido-roca antes de la descarga (Ohmoto et al., 183). Es
demostrado en la recopilación de Large (1992), la cual muestra tendencias similares en variaciones
de isotopos de azufre de menas de sulfuros VMS y minerales sulfatos derivados de agua marina
sobre el tiempo (al menos para depósitos del Fanerozoico).
BOX 3.3 Fumarolas exhalativas y “fumarolas negras” sobre el fondo
marino: depósitos VMS de las ofiolitas Troodos, Chipre
El complejo ofiolitico de Troodos de 91 Ma en Chipre representa un fragmento expuesto obducido
de corteza oceánica que ha sido extremadamente bien estudiado. Es tambien famoso como un sitio
de minería de cobre desde la edad de Bronce y contiene al menos 90 depósitos VMS de tamaño
pequeño a intermedio hospedados en basaltos almohadillados, principalmente a lo largo del borde
norte del complejo (Figura 1). La ofiolita es bien expuesta y contiene un perfil de la corteza oceánica,
de cúmulos máficos inferiores a ultramáficos (gabbro y harzburgita que contiene depósitos de
cromotita podiforme; ver Capítulo 1), suprayacido por un complejo de diques laminados y basaltos
almohadillados. Los mayores depósitos son Mavrovouni (15 millons tons) y Skouriotissa (6 millones
tons), aunque varios otros han sido minados en el pasado reciente (Herzig y Hannington, 1995).

La mineralización en los depósitos de Chipre contiene pirita y calcopirita masiva, con menor
esfalerita, hospedados en lavas almohadilladas y asociadas con zonas de intensa silicificación y
alteración de clortia (Figura 2; Constantinou y Govett, 1973). Las lavas son suprayacdas por shales y
cherts que son ricos en Fe- y Mn (referido como un ocre), y puede tambien contener
concentraciones de Au. El fluido hidrotermal responsable de la mineralizacón en las menas VMS de
Troodos fue modificada por agua marina que fue descargada a través de descargas de fumarolas
negras localizadas a lo largo fallas paralelas al eje de la dorsal a temperaturas de 300-350°C
(Spooner, 1980). Las características de los depósitos de Chipre han sido comparadas directamente
con el sitio TAG, un sistema de descarga exhalativa activo sobre la dorsal medio-Atlantica (Eddy et
al., 1998), Es tambien evidente, sin embargo, que las mineralización puede ser asociadad con
actividad magmática que es removida de la que esta ocurriendo a lo largo del eje de la dorsal. La
intrusión de distintos plutones gabbroicos, y la formación de montes submarinos y calderas del
fondo marino , por ejemplo, son caracteristicas que promueven la circulación de fluidos y estilos de
mineralización VMS en áreas que pueden ser lejos del eje de la dorsal. Esta observación tiene
significado obvio para la exploración, y los depósitos Alestos y Memi en Chipre son dos ejemplo de
mineralización de tipo VMS clásico asociado con mineralización fuera del eje (Eddy et al., 1998).
3.8.2 Sistemas geotermales Mar Salton y Mar Rojo – analogos modernos para procesos
de mineralización SEDEX

Sistema geotermal Mar Salton


El mar rojo y la continuidad VMS-SEDEX
BOX 3.4 Procesos sedimentarios exhalativos (SEDEX): depósitos Zn-Pb-
Ag Red Dog, Alaska
La mina Red Dog en el noroeste de Alaska es en presente el mas grande productor de concentrado
de zinc del mundo, contribuyendo cerca del 6% del suplemento global anual. Es un depósito muy
rico y en 2002 tuvo reservas casi de 100 millones de tons de tenor de mena 18% zinc, 5% plomo, y
85g/ton plata (www.teckominco.com). Fue descubierto en 1968 por un astuto piloto que noto una
anomalía de color en las rocas causada por la oxidación de sulfuros mena.

Las menas de Red Dog son hospedadas en shales negros del Carbonifero y calizas de la Formación
Kuna en las montañas De Long del Rango Brooks, norte de Alaska. La sucesión hospedante ha sido
deformada dentro de una secuencia de thrust alóctonos durante la orogenia del Jurásico. La Figura
1 muestra una sección interpretativa a traves de una secuencia de sedimentos del Devónico-
Carbonífero en el Rango Brooks antes del thrusting. La secuencia de sedimentos, incluyendo calizas
y conjuntos turbidíticos, es consistente con depositación en una cuenca oceánica limitada, sin
indicador de volcanismo en los ambientes intermedios. Los cambios laterales de facies abruptis en
la sucesión apuentan la presencia de fallas de crecimiento sin-sedimentarias que pudieron haber
facilitado la circulación de fluidos a través de la cuenca.

La mineralización es stratabound y, a pesar del thrusting, esta relativamente plana (flat-lying)


(Moore et al., 1986). Es marcada por zonas lateralmente extensas de silicificación (chert y
calcedonia) dentro de los cuales sulfuros minerales pobremente estratificados (esfalerita, pirita-
marcasita, y galena) ocurren. La Barita es cercanamente asociada con la menay tiende a capas de
zonas mineralizadas. Una característica interesante de las zonas de mena es la ocurrencia de
estructuras sinuosas cilíndricas interpretadadas como cavernas de gusanos, similares a las
estructuras bióticas observadas en el presenta en ambientes de descarga exhalativa. Esta evidencia
apoya la noción de que la precipitación de sílica y sulfuro tomo lugar en la interfase roca-agua sobre
el fondo marino y fue, por lo tanto, coetánea con la depositación de los sedimentos. Esto es, sin
embargo, evidencia para el remplazamiento de sulfuros de sedimentos en Red Dog, indicando que
procesos duales de exhalación y remplazamiento tomarón lugar (ver sección 3.8.2 de este capítulo).
La figura 2 representa un modelo simplificado del ambiente de formación de mena en Red Dog. Los
fluidos circulando a través de sedimentos marinos ricos en materia orgánica del Carbonífero
escarbaron metales de estas rocas caja y fueron descargados dentro del fondo marino vistos como
fallas de crecimiento sin-sedimentario creadas. La mineralización en Red Dog es masiva, brechada,
y pobremente estratificada, sugiriendo que los sulfuros fueron precipitados justamente cerca a los
sitios de descarga (Moore et al., 1986).

Firmas isotópicas variables en sulfuros minerales sugieren que la precipitación fue un producto de
mezcla de una pluma hidrotermal flotante con el agua marina que se fue volviendo progresivamente
mas oxica con el tiempo. Se suigere que la mineralización cesó cuando el agua marina se volvió lo
suficientemente oxidante para favorecer la precipitación barita sobre sulfuros (Moore et al., 1986).
3.9 DEPÓSITOS MINERALES ASOCIADOS CON FLUIDOS
METAMÓRFICOS ACUO-CARBÓNICOS

3.9.1 Depósitos de oro orogénico


Arcaico
Proterozoico
Fanerozoico
3.9.2 Depósitos de oro tipo Carlin
3.9.3 Depósitos de oro hospedado en conglomerados de guijarros de cuarzo

Los conglomerados de guijarros de cuarzo de edades del Arcaico y Paleoproterozoico representan


una fuente muy importante de oro, aunque la producción en el pasado siglo ha sido dominada por
la Cuenca Witwatersrand en Sudáfrica. Los siete principales campos de oro asociados con las
secuencias Witwatersradn han producido una asombrosas 48 000 tons de oro meta – cerca del 35%
de todo el oro producido en la historia de la humanidad – desde 186 (Phillips y Law, 2000). Otros
depósitos de oro hospedado en conglomerado como los de las cuencas Tarkwa (Ghana) y Jacobina
(Brazil) son relativamente poco importantes en comparación. Independientemente de sus
estadísticas de producción, los depósitos de oror hospedado en guijarros de conglomerados son
caracterizados por controversia considerable acerca del origen de su mineralización de oro. Los
argumentos giran esencialmente en torno a si el oro fue introducido como particulas detríticas
durante la sedimentación (un proceso placer, ver Capítulo 5) o precipitado de soluciones
hidrotermales circulando a través de sedimentos en alguna etapa posterior a la depósitación de
sedimento. Hay una pequeña duda, sin embargo, que en todos los tres casos (ej., Witwatersrand,
Tarkwa, y Jacobina) los sedimentos hospedantes se sometieron a enterramiento y metamorfismo
regional que asociado con la circulación de fluidos metamórfico resultó claramente en un
componente epigenético de mineralización. Los estudios de inclusión de fluidos indican que
indudablemente estos fluidos tienen una mezcla composición mezclada H2O-CO2 y tienen algunas
similitudes a los que se involucran con depósitos de oro orogénico-

Una vista del origen de la mineralización de oro en los sedimentos de Witwatersrand es que ocurre
a lo largo de inconformidades mayores, representada por la depósitación de conglomerados, que
representan zonas de intenso flujo de fluidos y alteración (Figura 3.28a). La alteración es producto
de las reacciones fluido-roca involucrando la neutralización progresiva de un fluido ácido (ver
sección 3.5 antes), con la alteración mas intensa siendo caracterizada por un conjuto de pirofilita-
cloritoide-muscovita-clorita (Barnicoat et al., 1997; Phillips and Law, 2000). En la Cuenca
Witwatersrand, sin embargo, la mineralización de oro es caracterizada por una secuencia
paragenetica de larga duración (Robb et al., 1997; Frimmel y Minter, 2002) es probable a ser
relacionada a mas de solo una interacción fluido-roca. La existencia de un halo de alteración
prominente alrededor de zonas de flujo de fluidos invasivo es no obstante una de las razones porque
los depósitos de oro de Witwatersrand son tan grandes. A escala de un solo depósito efectos
similares pueden ser vistos, como lo ejemplificado por la plataforma Joao Belo en la Cuenca Jacobina
de Brazil (Figura 3.28b). Allí la mineralización de oro coincide con una sección de horizonte de
conglomerado que es cortado por un numero de zonas de cizalla a lo largo de estratificación paralela
que los fluidos han fluido resultando en alteración fuchsita (mica-Cr)-turmalina-rutilo-muscovita-
pirita (Milési et al., 2002). Fuera de esta zona de alteración el conglomerdo es repotado como estéril.

La naturaleza del fluido formador de mena asociado con los conglomerados auríferos de
Witwatersrand, Jacobina, y Tarkwa ha sido descrito como H2O-CO2 mezclado, justamente reductor,
casi neutro, con baja salinidad (Phillips y Law, 2000). Barnicoat et al. (1997) prefirió un fluido acido,
mas oxidado para la Cuenca Witwatersrand mientras que Klemd et al. (1993) sugiere que los fluidos
asociados a mena con los conglomerados Tarkwaian fueron dominantemente de alta densidad
carbónica con contenido significativo de metano y nitrógeno. Estudios de inclusiones fluidas
detallados (Drennan et al., 1999; Frimmel et al., 1999) han indicado que en la Cuenca Witwatersradn
diferentes fluidos son implicandos en al menos dos episodios distintos de mineralización, y estos
fluidos incluyen composiciones H2O-CO2 mezclados al igual que fluidos acuosos, de alta salinidad,
El origen de estos fluidos es tambien polémico y un rango de opcions desde desvolatilización de
rocas máficas de facies esquistos verdes a anfibolita bajo las cuencas sedimentarias, a la derivación
por reacciones de metamorfismo progrado dentro de la misma cuenca. Los procesos hidrotermales
formadores de mena de la Cuenca Witwatersrand en particular son de larga duración y complejos y
esta es la razon porque han sido, y sigue, mucho debate sobre la genésis de estas menas. Es, por
ejemplo, ahora razonablemente bien establecido que la cuenca fue afectada por un gran meteorito
hace 2025 Ma y que la exhumación catastrófica de rocas sedimentarias hospedantes con oro, al
igual que la probable circulación de fluidos meteóricos relacionados, deben haber jugado tambien
un papel importante en los procesos de formación de mena (Gibson y Reimond, 1999).
3.10 DEPÓSITOS DE ORO ASOCIADOS CON FLUIDOS CONNATOS
3.10.1 Depósitos de cobre estratiforme hospedado en sedimento (SSC)
3.10.2 Depósitos Pb-Zn tipo Mississippi Valley (MVT)

DEPÓSITOS DE MENA EN UNA CONTEXTO


TECTÓNICO GLOBAL
TEMAS
PATRONES EN LA DISTRIBUCIÓN DE DEPÓSITOS MINERALES
TASAS DE CRECIMIENTO DE CONTINENTES
EVOLUCIÓN DE LA CORTEZA Y METALOGÉNESIS
Evolución de la hidrosfera y atmósfera
Producción global de calor
Convección del manto
Continental freeboard y cambios en el nivel eustático del mar
Composición de la corteza y transición Arcáico-Proterozoico
METALOGÉNIA A TRAVES DEL TIEMPO
El eón Arcaico
El eón Proterozoico
El eón Fanerozoico
AMBIENTES TECTÓNICOS DE PALAS Y DEPÓSITOS DE MENA—UN RESUMEN

6.1 INTRODUCCIÓN
La mayoría de los grandes depósitos minerales son producto de una superposición fortuita de
procesos geológicos que resultaron en concentraciones anómalas de menas, a veces sobre un
extendido periodo de tiempo. Los anteriores capítulos han mostrado que la formación de depósito
de mena es, sin embargo, relacionada a muchos de las mismas clases de procesos que dieron la
formación de rocas ígneas, sedimentarias y metamórficas en la corteza terrestre. El hecho de que
una relación cercana entre los procesos formadores de roca y formadores de mena significa que la
metalogénia debe ser relevante para entender la naturaleza de la evolución de la corteza a través
del tiempo geológico (Barley y Groves, 1992; Windley, 1995). En cambio, los procesos formadores
de corteza y el paradigma de la tectónica de placas global se han vuelto indispensables para
entender ampliamente como los depósitos de mena se formaron y ningún geólogo económico
puede practicar correctamente sin la apreciación de la historia y evolución de los continentes y
océanos. Consecuentemente, este capitulo resume algunos de los pensamientos recientes que
relacionan la formación de depósito de mena a la tectónica global y la evolución de los continentes.
Hay esencialmente dos formas de hacer esto. La primera es trazar la evolución continental y ubicar
los depósitos de mena en un marco tectónico secular (ej., Meyer, 1981, 1988; Veizer et al., 1989;
Barley y Groves, 1992). El otro es describir empíricamente los depósitos de mena en el contexto de
un ambiente tectónico y las rocas caja en la que ellos ocurre (ej., Mitchell y Garson, 1981; Hutchison,
1983; Sawkins, 1990). El ultimo enfoque ha sido cubierto en considerable detalle en Metal Deposits
in Relation to Plate Tectonics, de Sawkin (1990) y no tiene mucho sentido resumir esa extensa
recopilación aquí. El anterior enfoque es mas difícil de proyectar y requiere un conocimiento a través
de la evolución de los continentes con el tiempo, un tema que se vuelve progresivamente menos
restringido—y mas controversial—a medida que se va mas atrás en la historia de la Tierra. Hay, sin
embargo, beneficios significativos obtenidos por entender los procesos intrínsecos de formación de
mena en términos de evolución secular de la corteza de la Tierra y la atmósfera. Hay un enfoque
que ha sido adoptado abajo, a pesar de que es necesariamente somero (cursory) y en ocasiones
especulativo.

6.2 PATRONES EN LA DISTRIBUCIÓN DE DEPÓSITOS MINERALES


Se sabe que desde hace tiempo que los diferentes estilos de mineralización no son aleatoriamente
distribuidos, ya sea en tiempo o espacio, y que existen amplios patrones cuando se relacionan tipos
de depósitos a evolución de la corteza y ambiente tectónico global. Las recopilaciones originales de
tipos de depósitos de mena como una función del tiempo geológico por Meyer (1982,1988) han sido
reexaminadas por Veizer et al (1989) y Barley y Groves (1992) revelan patrones consistentes. La
figura 6.1 distingue entre distribución secular de depósitos de metales formado en ambientes
anorogénicos y en cuencas continentales. Aunque la recopilación es una generalización de “primer
orden”, es sin embargo claro que los tipos de depósitos clasificados como orogénicos (incluyendo
vetas de oro o menas de oro orogénicos, sulfuros masivos volcanogénicos de metales base, y
familias de pórfidos-epitermales de depósitos de metales base y preciosos) ocurriendo ya sea en
etapas tardías del Eón Arcaico (entre 3000 y 2500 Ma) o en el Eón Fanerozoico, (entre 540 Ma y
presente). El Eón Proterozoico, entre 2500 y 540 Ma, contiene menos de estos tipos de depósitos.
Por el contrario, la mayoría de depósitos de metales que son asociados a los magmatismo llamados
“anorogénicos” (como los de Ti hospedado en anortosita y menas óxidos de Fe-Cu-Au el Olympic
Dam y Kiruna), tanto como menas hospedadas en sedimentos (como los depósitos Pb-Zn tipo SEDEX
y depósitos de Cu de tipo estratiformes “capa-roja”), son dominantemente hospedados en rocas del
Proterozoico (Figura 6.1). Una explicación para este patrón, como es discutido adelante (ver
secciones 6.4.3 y 6.5 en particular), es que la formación de mena podría ser cercanamente enlazada
a los llamados “ciclos de supercontinente”, que describe la amalgamación a escala amplia y
dispersión de fragmentos mayores de continentes con el tiempo. Es, por ejemplo, evidente que
picos en la producción de depósitos de metales anorogénicos y continentales hospedados en
sediemento (Figura 6.1, histograma mas bajo) coinciden con los periodos de estabilidad de la corteza
y la existencia de grandes, amalgamaciones de continentes estables como Nena en el
Mesoproterozoico, Rodinia en el Neoproterozoico y Pangea en el Mesozoico temprano. Periodos de
fragmentacion de continentes a gran escala, por el contrario, parece ser orogénicamente mas
activos y dan lugar a diferentes suites de tipos de depósitos de mena.

En un estudio diseñado para examinar tasas a las que los depósitos de mean son reciclados o
dispersado (ya sea por erosion o desmembramiento tectónico) en la corteza terrestre por Veizer et
al. (1989) ha producido un patrón muy similar a la distribución de mena con el tiempo. En esta
recopilación depósitos hidrotermales y volcanos-sedimentario de metales base-preciosos formados
principalmente en edades del Arcaico tardío y Fanerozoico, mientras depósitos ultramáficos y
sedimentarios-químicos reflejan mecanismos de concentración que toman lugar en el Proterozoico
medio. Las razones detrás de este patrón es probable que sean complejas y multifacéticas y son
discutidas en más detalle debajo. Deberían ser enfatizados en esta etapa, sin embargo, aquellas
relaciones observadas en la Figura 6.1 podrían también ser debidas, al menos en parte, a un factor
de preservación. La existencia de numerosos depósitos orogénicos relacionados a arco en el Arcaico
tardío, por ejemplo, reflejan la preservación de cinturones Greenstone en áreas de escudos estable
del mundo. En el Proterozoico, por el contrario, el predominio de orogenias colisionales pudo haber
levantado y erosionado arcos mineralizados similares a muchos de los relacionados a menas
cercanas a superficie, que fueron destruidos. Los productos de las orogenias jóvenes del Cenozoico
son también preservadas porque muchas de ellas o han sufrido colisión y levantamiento aun y son,
por lo tanto, aun preservadas.

6.3 Tasas de crecimiento continental


Las relaciones ilustradas en la Figura 6.1 indican que estimados de las tasas de crecimiento
continental con el tiempo son importante para cualquier consideración de patrones de ensamblaje
y dispersión de continentes y, por lo tanto, para la metalogénia. Estos estimados son problemáticos
por las dificultades para calcular tasas de reciclamiento (o destrucción) de material continental
relativo a formación de nueva corteza. Las tasas de crecimiento estimado varian enormemente, y
van desde un escenario, donde la mayoría de la corteza continental se formó rápidamente durante
del Arcáico temprano (curva A en Figura 6.2a), a otro donde los continentes crecieron
exponencialmente con el tiempo, con contribuciones más sustanciales viniendo despues de 1.5 Ga
(curva B en Figura 6.2ª). La situación más probable que refleja un caso intermedio donde
crecimiento de corteza, aproximadamente lineal, pero episódico toman lugar. McCulloch y Bennet
(1994) apoyan este escenario en base a un modelo Sm-Nd y datos de distribución de edades de
zircones U-Pb para la corteza continental, mostrando que la proporción de reciclamiento de corteza
relativo al crecimiento es aproximadamente constante. El modelo, ilustrado en la Figura 6.2b,
sugiere episodios distintos de aumento en el crecimiento de corteza. Esto prevé que 50-60% de la
corteza continental de la Tierra ha sido producida desde el final del Arcaico, pero que esto ocurrió
en dos grandes episodios a 3600-3500 Ma y 2800-2600 MA, con el ultimo siendo el periodo mas
importante de crecimiento de corteza en la historia de la Tierra. Dos importantes episodios de
formación de corteza fueron también considerado que tomaron lugar en el Proterozoico, uno a
2000-1800 Ma y otro alrededor de 1100-1000 Ma.

Es interesante notar que el modelo de McCulloch y Bennet sugieren que solo una proporción
relativamente pequeña de nueva corteza fue agregada a la corteza en el Eón Fanerozoico. Esto
parece estar de alguna manera en desacuerdo con la observaciones de que este periodo de la
historia de la Tierra fue particularmente productivo en términos de formación de depósitos de
mena. Esto apoya la nocion de preservación preferencial de ambiente formadores de mena mas
jóvenes comparados con secuencias antiguas que se volvieron progresivamente mas erodadas, o
enterradas y metamorfoseadas, con el tiempo. El crecimiento continental episódico descrito en la
Figura 6.2 es razonablemente consistente con el patrón de evolución metalogénica descrito aca y
es usado como base para una examinación mas cercana de las relaciones entre evolución de corteza
y formación de depósitos de mena.

6.4 Evolución de corteza y metalogénesis


La revisión de Barley y Groves (1992) sugiere que hubieron tres factores principales que afectaron
los patrones de metalogénia global. Estos son la evolución de la hidrosfera-atmosfera, la
disminución secular en la producción global de calor, y la tendencia tectónica global a largo plazo.
Estos factores principales, junto con un numero de parámetros relacionados son discutido en mas
detalle debajo, con una indicación de cómo y porque influencian la temporalidad y distribución
geográfica de los tipos de depósitos de mena.

6.4.1 Evolución de la hidrosfera y la atmósfera


El presupuesto cambiante de O2, y en menor grado de CO2, en la atmosfera de la Tierra con el
tiempo tiene un papel importante en la formación de depósitos de mena, especialmente aquellos
relacionados a procesos redox y a la meteorización y erosión de corteza continental. Durante el
Arcaico es generalmente sostenido que la atmosfera contenía muy poco oxigeno molecular libre
(aunque las cantidades actuales son aun debatidas fuertemente) y que tanto existió como resultado
de fotodisociacion inorgánica de vapor de agua. Una atmosfera reducida en el Arcaico ayuda a
explicar muchas de las características de formación de mena que con el tiempo, incluyendo la amplia
movilidad de FE2+ y desarrollo de formaciones de hierro bandeadas Algoma y Superior, y la
preservación de granos detríticos de uraninita y pirita en secuencias sedimentaria como las de las
cuencas Witwatersand y Huronian. La transición de los Eones Arcaico al Proterozoico, a 2500 Ma,
coincide ampliamente con el primer incremento mayor en el oxígeno atmosférico (Figura 6.3). Este
evento es posiblemente relacionado a la evolución de vida primitiva y al desarrollo de cianobacterias
capaces de producir oxigeno mediante fotosíntesis. Las presiones parciales de O2 en la atmosfera
pueden ser estimadas de la movilidad del Fe2+ en paleosuelos (que permanecen de horizontes de
meteorización o suelos preservados en registros de roca) y sugiere que un incremento agudo en la
presión parcial de oxigeno (pO2) ocurrió alrededor de 2200 MA (Rye y Holland, 1998). El intervalo
entre 2500 Ma y 2000 Ma es conocido como el periodo de “oxiatmoinversion” y se cree
generalmente que coincide con un aumento significativo en los niveles de oxigeno atmosférico. Es
también el periodo en el que despues el desarrollo de formaciones de hierro bandeado de tipo
Superior y depósitos de manganeso estratificados cesó. Otro incremento significativo en los niveles
de oxígeno atmosférico coincidió con el final de Eon Proterozoico, cuando formas de vida
multicelulares, macroscópicas (Fauna metazooaria que requería respiración oxigenada) proliferó.
Además, el Fanerozoico temprano es también la edad cuando plantas vasculares evolucionaron y
estas, también, pudieron haber contribuido al incremento en los niveles de oxigeno atmosférico
(Figura 6.3). Al contrario con la adición neta de O2 en la atmosfera, el CO2 fue disminuyendo
progresivamente con el tiempo. Los niveles inicialmente altos de CO2 en la atmosfera fueron
producto de volcanismo extenso y desgasificación durante el Arcaico, pero los niveles han caído
continuamente, pero episodicametne, como resultado de la depositación de sedimentos de carbono
y carbonatos. La evolución de la atmosfera de la Tierra y, en particular, el O2 y CO2 global tienden
a ser esencialmente no recurrentes e irreversibles y contribuyen a la ocurrencia en edades
especificas de tipos de depósitos de mena como las formaciones de hierro bandeadas y placeres de
tipo Witwatersand.

6.4.2 Disminución secular en la producción global de calor


La producción de calor de la tierra, principalmente de la descomposición isotopos de larda vida
como U, Th, y K, fueron significativamente mas grandes (por un factor de dos o tres veces) en el
Arcaico que hoy en dia. Este patrón, como la evolución atmosférica, es también no recurrente e
irreversible. La Figura 6.4 muestra la caída en la producción de calor global con el tiempo y la
correspondiente curva de crecimiento de corteza similar a la discutida antes. Hay varia
consecuencias para la formación de corteza relacionada a disminución secular en la producción de
calor. Uno de los mas obvios es que el manto de Arcaico era mas caliente (por cerca de 200-300°C;
Windley, 1995) que en el presente y esto pudo permitir un incremento en el volumen de fusión en
este tiempo. Un alto grado de fusión parcial pudo contar para la producción de komatiitas con alto
Mg que representa principalmente cinturones greenstone del Arcaico y que son relativamente raro
en ambientes oceánicos más jóvenes (ver Figura 6.4), aunque otras explicaciones son también
viables. La alta producción de calor así, proporciona una explicación para la ocurrencia preferencial,
en el Arcaico, de komatiitas relacionadas a depósidos de Ni-Cu en sulfuros, como los de Kambalda,
Oeste de Austrakia y en Zumbadwe. Otra consecuencia del alto flujo de calor en el Arcaico es la
sugerencia que un vuelco de convección en el manto pudo haber sido mas rápido, liderando una
tiempos de residencia mas cortos de corteza oceánica y movimiento mas rápido de placas (Windley,
1995). La corteza oceánica del Arcaico es también considerada que ha sido mas grueso en los últimos
periodos, que es apoyado por la sugerencia de ofiolita de mas de 1000 años son mas del doble en
espesor que sus equivalentes mas jóvenes (Moores, 1993). Como otra consecuencia, los oceanos
del Arcaico pudieron haber sido mas someros que los del presente, resultando en una continental
freeboard reducida.
6.4.3 Tendencias a largo plazo de la tectónica global
La amalgamación y dispersión a gran escala de fragmentos continentales en el tiempo, también
referidos como “ciclos de supercontinentes”, es una característica que engloba toda la historia de
la Tierra que tuvo implicaciones virtualmente en cada aspecto de la evolución global, incluyendo la
metalogénia. Como se vio en la Figura 6.1, amplias tendencias temporales en la formación de mena
reflejan el contraste entre episodios de orogenia y periodos de estabilidad. En detalle, sin embargo,
el ciclo de supercontinentes que controla muchos otros factores mas directamente relacionados a
tendencias metalogénicas seculares. A diferencia de los patrones impuestos por evolución
atmosférica y producción de calor, el ciclo de supercontinente es recurrente y cíclico en que los
fragmentos de continentes han sido amalgamados y dispersados varias veces a través de la historia
de la Tierra. Esta ciclicidad ayuda a explica porque algunos tipos de depósitos de mena, o al menos
los procesos que dan lugar a ellos, son reconociblemente repetitivos a pesar de la preferencias de
preservación de depósitos en rocas mas jóvenes. Entender detalladamente el como los ciclos de
supercontinentes pueden ser usados en el estudio de depósitos de mena es un problema complejo
y probablemente permanece un área productiva de investigación futura. Algunos de los conceptos
que son relevantes tanto en tectónica global y los patrones de evolución de corteza/metalogénicos
son brevemente mencionados a continuación.

Tasas de crecimiento de continentes


El crecimiento de corteza continental, ya sea episódica o linear, temprana o tardía, va a afectar la
metalogénia global simplemente porque la mayoría de los depósito viables son localizados dentro
o sobre corteza continental. Los periodos de rápido crecimiento continental reflejan episodios de
actividad magmática más intensa y tectónica, y estos, de uno en uno, promueven la formación de
mnas magmáticas, magmáticas-hidrotermales , e hidrotermales. La mayoría de los depóstios de oro
del mundo, por ejemplo, son relacionados a eventos en el Arcaico o Mesozoico-Cenozoico (Figura
6.1), ambos periodos de orogénesis mayor y formación de corteza (Figura 6.2b)

Naturaleza de la convección del manto


Los modelos de convección del manto sugieren dos modos de ocurrencia (Figura 6.5), que pueden
no ser mutuamente exclusivos y puede operar al mismo tiempo. Un modelo sugiere vuelco del
material en dos capas distintas con algo o ninguna transfercon encia de masa entre ellos, y el otro
prevé que los vuelcos del manto entero son debidos a descenso de material de la lámina litosférica
frio con ascenso concurrente de grandes plumas magmáticas (Stein y Hofmann, 1994). El primer
esquema (Figura 6.5ª) es considerado que representa la situación durante la cual el crecimiento de
corteza ocurre principalmente por subducción oceánica, construcción de arcos, y acreción. En este
modelo los patrones tectónicos globales son reflejados en términos del ciclo de Wilson, en el cual
los oceaos se abren y cierra en periodos ≤500 Millones de años. El otro modo, llamado modelo
MOMO (Mantle Overturn and Major Orogeny), involucra intercambio significativo de material entre
el manto inferior y superior y, por lo tanto, altas tasas de formación de corteza (Figura 6.5b): Este
modo es considerado que opera en periodos mas largos que el Ciclo de Wilson y produce actividad
magmática que coincide con eventos orogénicos mayores, como hacia los 2.8, 2.0, 1.0 y 0.5 Ga
(Figura 6,2b). Desde un punto de vista metalogénico, la proliferación de actividad de plu,a atribuida
a eventos MOMO podría coincidir con periodos de magmatismo alcalino y es, por lo tanto,
relevantes para los depósitos de mena asociados con estas rocas.

Cambios eustáticos en el nivel del mar y “continental freeboard”


La continental freeboard, o relativa elevación de las masas continentales con respecto al nivel del
mar o el geoide, es efectivamente un medida del área de exposición de continentes comparada con
la cubierta por los oceanos. El Continental freeboard es reducido, cuando la profundidad promedio
del océano es reducida, esto causa transgresión marina e inundación de la plataforma continental.
Esta situación esta enlazada a eventos de dispersión de continentes a gran escala, que uno por uno
reflejan aumento en la creación de corteza oceánica, y magmatimos activo y levantamiento a lo
largo de dorsales medio-oceánicas. Por el contrario, un incremente en el área de los continentes
ocurren cuando los oceános se hacen mas profundos y la platadorma continental es expuesta, una
situación que tiende a ser asociada a periodos de estabilidad tectónica y cese de actividad
magmática en dorsales medio-oceánicas (Worsley et al., 1984; Nance et al., 1986). La ciclicidad del
continental freeboard y profundidad del océano en el Eón Fanerozoico esta bien documentada
(Figura 6.6) y muestra que un periodo de máxima exposición continental y ocean low-stand (ej.,
oceanos profundos) coincide con la amalgamación del supercontinente Pangea en edad Pérmico-
Triásico. La naturaleza y duración de los ciclos de Wilson en el Fanerozoico, y su proyección en el
futuro, son también mostrados en la Figura 6,.6. Un periodo similar de ocean lowstand pueden ser
también aplicado con respecto a la amalgamación de supercontinente mas temprano Rodinia,
aproximadamente hace 1000 Ma (ver sección 6.5.2 deabjo). Desde un punto de vista metalogénic,
el continental freeboard tiene su gran influencia sobre la naturaleza y preservación de sedimentos
formando las plataformas continentales. Las transgresiones marinas inundan la plataforma
continental, preservando los sedimentos dentro de los cuales placeres de playa de minerales
pesados, menas de Pb-Zn SEDEX, formaciones de hierro bandeadas, depósitos de manganeso
estratiforme, y fosforitas podrian ser formados. El oceanic lowstand y máxima área continental, por
otra parte, podría tender a resultar en exposición y erosion de la plataforma, con posible destrucción
de cualquier depósitos presente en secuencias sedimentarias

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