Sie sind auf Seite 1von 63

EXAMEN UDEA

1-Dos cuadrados de lados 6 y 4 unidades, respectivamente, se


traslapan como lo muestra la figura.

La diferencia entre las áreas que no se traslapan es:


Seleccione una:
a.

b.

c.

d.

2 He apostado contigo y ahora tengo los 2/3 de lo que tú ahora


tienes. Si inicialmente teníamos lo mismo. ¿Qué fracción de lo que
teníamos apostamos?
Seleccione una:
a. 1414

b. 1313

c. 1212

d. 15

Se tiene una caja de caras rectangulares cuyo volumen es igual a 1000 cm 3.Si el largo es cuatro veces
el ancho y la altura es el doble del ancho, entonces, el área superficial de la caja en cm 2 es:

Seleccione una:
a. 800
b. 500
c. 1000
d. 700

3-En la figura se ilustra un rectángulo mayor que está subdividido en 4


rectángulos de menor tamaño.

Cada uno de los tres números mostrados representa el perímetro


del rectángulo que lo contiene. El perímetro del rectángulo marcado
con la X es:
Seleccione una:
a. 5
b. 3
c. 6
d. 4

4-Una persona que pesa 120kg, decide hacer una dieta. Esta persona
sabe que el 40% de su masa total, está conformada por grasa. Si
durante el primer mes de su dieta, esta persona pierde el 60% de
grasa y mantiene los otros índices iguales, entonces al finalizar el
primer mes ella pesa:
Seleccione una:
a. 91,2 kg
b. 100 kg
c. 89,6 kg
d. 96 k

Un sólido está formado por dos cilindros I y II como se indica en la


figura. El volumen del sólido es:

Seleccione una:
a. 2πrh2πrh

b. 10πrh210πrh2

c. 10πr2h10πr2h

d. 7πr2+h

J1-34. El número máximo de paquetes de dimensiones 3 x 4 x 5 cm


que puede colocarse enuna caja de dimensiones 9 x 12 x 10 cm es:
Seleccione una:
a. 12
b. 24
c. 18
d. 10

Si 12 obreros se tardan 30 días en acabar una obra, el número de


obreros que se necesitan para acabar la misma obra en 24 días es:
Seleccione una:
a. 16
b. 13
c. 14
d. 15

Si el primer término de una progresión aritmética es 3 y la diferencia


común es 2, entonces el undécimo término de la progresión es:
Seleccione una:
a. 23
b. 32
c. 26
d. 22

De los 150 alumnos de un colegio, 120 toman clases de teatro, 100 de


danza y 20 ninguna de estas. El número de estudiantes que toman
clases de teatro y danza es:
Seleccione una:
a. 90
b. 100
c. 95
d. 85

Se plantea el siguiente proceso iterativo a partir de un cuadrado de


área 1 U2U2. Todas las figuras sombreadas resultantes en cada
iteración son cuadrados

El número de cuadrados sombreados que se producen en la cuarta


iteración es:
Seleccione una:
a. 128
b. 64
c. 512
d. 256

Una biblioteca tiene 35 libros de matemáticas y se está interesado en


identificarlos según tres temas, a saber, A: álgebra, T: trigonometría, y
G: geometría. Al hacer la clasificación se obtuvieron los siguientes
resultados; sobre el número de libros que tratan determinado(s)
tema(s):

 A: 20  T: 14

 G: 15  A y T: 7

 A y G: 5  G y T: 6

 A, T y G: 2

El número de libros de matemáticas que no tratan ninguno de los tres


temas es:

Seleccione una:
a. 3
b. 2
c. 0
d. 1

El siguiente diagrama representa una población estudiantil, clasificada


según practiquen o no el baloncesto y según escuchen o no música
rock. Los óvalos interiores representan, respectivamente, a los
estudiantes que practican baloncesto (B) y a los que escuchan música
rock(R).
En los siguientes diagramas la región sombreada que representa a las
mujeres que no practican baloncesto pero que escuchan música rock

es:

Seleccione una:
a. Diagrama D
b. Diagrama B
c. Diagrama A
d. Diagrama C

Usando fósforos se están formando las figuras como las


representadas en la secuencia. La cantidad de
fósforos (F)(F) depende del número de cuadrados (C)(C) que se
están formando:

La expresión que determina el número de fósforos (F)(F) en función


de la cantidad de cuadrados (C)(C) que se están formando es:
Seleccione una:
a. F=4C−1F=4C−1

b. F=3C+1F=3C+1
c. F=4C−3F=4C−3

d. F=C+3

En una empresa de transporte el 30% de los empleados


puede manejar taxi y el 24% puede manejar bus. Si
1/3 de los empleados que manejan taxi también pueden
manejar bus, entonces el porcentaje de los
empleados que no pueden manejar taxi ni bus es:
Seleccione una:
a. 24%
b. 58%
c. 42%
d. 56%

A continuación se ilustran las primeras 3 figuras de una serie de


cuadrados que contienen a su vez cuadrados más pequeños
sombreados:

La fracción del área sombreada que correspondería a la figura (4) es:


Seleccione una:
a. 21/64
b. 90/256
c. 81/128
d. 85/256

Una biblioteca tiene 35 libros de matemáticas y se está interesado en


identificarlos según tres temas, a saber, A: álgebra, T: trigonometría, y
G: geometría. Al hacer la clasificación se obtuvieron los siguientes
resultados; sobre el número de libros que tratan determinado(s)
tema(s):
 A: 20  T: 14

 G: 15  A y T: 7

 A y G: 5  G y T: 6

 A, T y G: 2

El número de libros de matemáticas que tratan temas de álgebra o


trigonometría, pero no de geometría es:
Seleccione una:
a. 18
b. 12
c. 16
d. 14

El siguiente gráfico nos muestra la cantidad de niños por año que hay
en una escuela:

Analizando el Gráfico la observación general más destacada es:


Seleccione una:
a. La mayor deserción se presenta entre los niños de 6 años
b. Hay más niños mayores de 6 años que mayores de 6 años
c. No se puede hablar de una regularidad en el gráfico
d. El comportamiento regular del gráfico es alterado por la cantidad de
niños de 10 años

La siguiente tabla contiene el total de espectadores y de taquilla


recaudada en millones de pesos en los estadios de Bogotá, Medellín,
Cali y Barranquilla durante una fecha del campeonato rentado.

La proporción de las ciudades donde el número de espectadores fue


inferior a 3500035000 es:
Seleccione una:
a. 1313

b. 1212

c. 3434

d. 14

La siguiente tabla contiene el total de espectadores y de taquilla


recaudada en millones de pesos en los estadios de Bogotá, Medellín,
Cali y Barranquilla durante una fecha del campeonato renta

Con respecto a Medellín y Bogotá, el porcentaje de diferencia en la


taquilla fue:
Seleccione una:
a. 14.3 %
b. 90 %
c. 7.7 %
d. 24 %

Una compañía procesadora de aluminio, hierro y cobre presenta un


informe de sus ventas en los año 1985, 1990, 1995 y 2000.

De las siguientes afirmaciones la única falsa es:


Seleccione una:
a. En el año 2000 se vendieron 675 toneladas de metal.
b. La venta de aluminio en el año 2000 tuvo un incremento de 1/3 con
respecto a la cantidad de aluminio vendida en el año 95.
c. La cantidad total de metal vendido en el año 90 fue igual a la
vendida en el año 95.
d. La cantidad total de metal vendido en el año 90 tuvo un incremento
del 20% con respecto al año 85.

El cuadro muestra los resultados obtenidos en una encuesta aplicada


a 400 personas, con relación al principal medio utilizado para
informarse sobre los sucesos diarios ocurridos

Con relación a la información suministrada en el cuadro la gráfica


anterior representa, frente a caden el país.a medio, los porcentajes
correspondientes a:
Seleccione una:
a. La respuesta de los hombres con respecto al total de los hombres.
b. La respuesta de las mujeres, con respecto a la población total.
c. La respuesta de las mujeres, con respecto al total de mujeres.
d. La respuesta de la población total.
En una empresa hay 10 obreros y 3 empleados. Si se eligen 3 de ellos
al azar, indistintamente, la probabilidad de que los 3 sean empleados
es:
Seleccione una:
a. 313313

b. 213213

c. 12861286

d. 113

La probabilidad de que al lanzar 2 dados, bien balanceados, la suma


de los 2 números que salen sea mayor que 6 es·
Seleccione una:
a. 7/12
b. 1/2
c. 1/3
d. 2/3

Un recipiente completamente oscuro contiene 12 bombillas, entre las


cuales hay 2 defectuosas.
La probabilidad de que al extraer al azar una muestra de 3
bombillas, al menos una sea defectuosa es:

Seleccione una:
a. 811811

b. 522522

c. 311311

d. 511

Un colegio participa en 12 partidos de fútbol en una temporada.


El número de maneras posibles en las que el equipo puede terminar la
temporada con 7 victorias es:
Seleccione una:
a. 5040
b. 792
c. 64
d. 124

Se va a formar un número entero positivo de 5 dígitos mayor que


10 mil con los dígitos 0, 2, 3.
La probabilidad de formar al azar un entero par, con las condiciones
antes mencionadas, es:
Seleccione una:
a. 1313

b. 2323

c. 2929

d. 12

A,BA,B y CC son ciudades que están comunicadas de la siguiente


manera: para ir desde AA hasta CC, es necesario pasar por BB; hay
tres rutas distintas entre AA y BB, y cuatro rutas distintas
entre BB y CC.
El número de maneras posibles para hacer un viaje de ida y vuelta
desde AA hasta CC sin repetir ruta es:

Seleccione una:
a. 72
b. 144
c. 14
d. 60
Un reloj digital da la hora mostrando 4 dígitos. Por ejemplo cuando es
media noche el muestra 00:00 y cuando falta un minuto para la media
noche él muestra 23:59. El número de veces por día que la hora
mostrada está formada por 4 dígitos pares es:

Seleccione una:
a. 180
b. 120
c. 105
d. 60

A,BA,B y CC son ciudades que están comunicadas de la siguiente


manera: para ir desde AA hasta CC, es necesario pasar por BB; hay
tres rutas distintas entre AA y BB, y cuatro rutas distintas
entre BB y CC.
El número de maneras posibles para hacer un viaje de ida y vuelta
desde AA hasta CC es:

Seleccione una:
a. 144
b. 24
c. 14
d. 18

Suponga que a Juan le gusta la fruta, no le gusta la zanahoria, le


gusta el maní y no le gusta la yuca.
Cual de las siguientes afirmaciones es falsa.
Seleccione una:
a. A Juan le gusta la yuca o la zanahoria.
b. A Juan le gusta la yuca o la fruta.
c. A Juan le gusta el mani o la fruta.
d. A Juan le gusta la fruta o la zanahoria.
El diagrama muestra las rutas de acceso a las puertas de ingreso A,
B, C, D de un estadio. Los números del 1 al 8 representan guías que
señalan la dirección de la circulación para el público que accede al
estadio en la zona aledaña a éste
y C1,C2,C3C1,C2,C3 y C4C4 indican puestos de control fijados por las
autoridades para requisar a todas las personas que ingresan al
estadio. Una persona que ingresa por la guía 1 a la zona aledaña
puede ingresar finalmente por cualquiera de las puertas de ingreso,
siguiendo únicamente las rutas indicadas por las flechas.

De las proposiciones siguientes la única verdadera es:

Seleccione una:
a. Si una persona pasó por la guía 6, entonces, pasó por la guía 5
b. Si una persona no pasa por la guía 6, entonces, tiene que pasar por
la guía 5
c. Si una persona no pasó por la guía 6, entonces, no pasó por la guía
5
d. Si una persona pasó por la guía 5, entonces, pasó por la guía 6

Suponga que a Juan le gusta la fruta, no le gusta la zanahoria, le


gusta el maní y no le gusta la yuca.
Cual de las siguientes afirmaciones es Verdadera.
Seleccione una:
a. A Juan le gusta la yuca y la fruta.
b. A Juan le gusta la yuca y la zanahoria.
c. A Juan le gusta la fruta y la zanahoria.
d. A Juan le gusta el maní y la fruta.
Los asistentes a un encuentro deportivo están repartidos así:

 50% son hinchas de los Leones.


 EL 50% del resto son hinchas de los Tigres
 Los hinchas de los Caimanes son el doble de los de las Panteras
 Los hinchas de las Águilas son el mismo número que el de los
Caimanes
 Los hinchas de las panteras son 1000

El número de asistentes al encuentro fue:


Seleccione una:
a. 28000
b. 22000
c. 25000
d. 20000

En un zoológico se ha observado que:

 17 osos comen tanto como 170 chimpancés.


 100.000 ratones comen tanto como 50 chimpancés
 4 elefantes comen tanto como 10 osos

El número de ratones que se requiere para acabar la comida de 12


elefante es:
Seleccione una:
a. 400.000
b. 450.000
c. 600.000
d. 500.000

La suma de las dos cifras de un número es 11. Si invertimos el orden


de las cifras, el número resultante es igual al triple del primer número
más 5. ¿Cuál es el número?

Seleccione una:
a. 29
b. 92
c. 3
d. 27

Una antigua caja contiene monedas de 10 y 25 pesos . Si el total de


monedas contenidas en la caja es de 30 y suman un valor total de 420
pesos , el número de monedas de 10 pesos es:
Seleccione una:
a. 20
b. 22
c. 18
d. 24

Un rectángulo se divide en 4 subregiones como muestra la figura. A y


B son cuadrados de 36 y 81 m2 de área respectivamente y C es un
triángulo de 54 cm2 .

El área de la región sombreada es:


Seleccione una:
a. 144 cm 2
b. 117 cm 2

c. 171 cm 2

d. 315 cm 2

PRUEBA DE COMPETENCIA LECTORA

“Cuando llego a mi casa la encuentro impávida y burlona, me saluda


con gritos que son una algarabía que a veces no aguanto. A veces no
quisiera llegar a la casa, más bien salir del trabajo, deambular por las
calles, caminar por mi ciudad sin rumbo fijo; pero reflexiono, sé que
ella me necesita, ella en mis soledades me hace mucha falta.
Sé soportar sus ruidos, sus desatinos, su parlanchina lengua, sus
groseras palabras y lenguaje burdo y descarado... No sé cómo la
soporto, llevamos cinco años juntos y desde entonces es así. No he
podido corregirla un momento; cuando llevo amigos a mi casa está
ella presente para atraer la conversación o más bien para distraerla.
Hay días en que me levanto contento, sucede pocas veces, quisiera
cantar, reír, gritar; pero sé que al pronunciar algo ella está presta a
responderme, burlándose de lo que yo diga.
Quisiera seguirla soportando, pero mi paciencia tiene límite. Estoy a
punto de enloquecer, de perder la razón, sé que la culpa de todo la
tiene ella. Algún día tomaré medidas en el asunto y ese día será
definitivo, ese día todo acabará de manera trágica; terminaré
rompiendo en mil pedazos su frágil y delicado cuello.
No cabe la menor duda, tengo ganas de matar esa maldita lora”.

En el texto, algarabía puede sustituirse por las siguientes palabras,


EXCEPTO por:
Seleccione una:
a. Alboroto
b. Gritería
c. Ruido
d. Sosiego

“Cuando llego a mi casa la encuentro impávida y burlona, me saluda


con gritos que son una algarabía que a veces no aguanto. A veces no
quisiera llegar a la casa, más bien salir del trabajo, deambular por las
calles, caminar por mi ciudad sin rumbo fijo; pero reflexiono, sé que
ella me necesita, ella en mis soledades me hace mucha falta.
Sé soportar sus ruidos, sus desatinos, su parlanchina lengua, sus
groseras palabras y lenguaje burdo y descarado... No sé cómo la
soporto, llevamos cinco años juntos y desde entonces es así. No he
podido corregirla un momento; cuando llevo amigos a mi casa está
ella presente para atraer la conversación o más bien para distraerla.
Hay días en que me levanto contento, sucede pocas veces, quisiera
cantar, reír, gritar; pero sé que al pronunciar algo ella está presta a
responderme, burlándose de lo que yo diga.
Quisiera seguirla soportando, pero mi paciencia tiene límite. Estoy a
punto de enloquecer, de perder la razón, sé que la culpa de todo la
tiene ella. Algún día tomaré medidas en el asunto y ese día será
definitivo, ese día todo acabará de manera trágica; terminaré
rompiendo en mil pedazos su frágil y delicado cuello.
No cabe la menor duda, tengo ganas de matar esa maldita lora”.

Impávida significa en el texto:


Seleccione una:
a. Con pávido
b. Imperfecta
c. Sin pavezno
d. Imperturbable

Discurso Premio Nobel de Literatura (Fragmento)

El hombre más sabio que he conocido en toda mi vida no sabía leer ni


escribir. A las cuatro de la madrugada, cuando la promesa de un
nuevo día aún venía por tierras de Francia, se levantaba del catre y
salía al campo, llevando hasta el pasto la media docena de cerdas de
cuya fertilidad se alimentaban él y la mujer. Vivían de esta escasez
mis abuelos maternos, de la pequeña cría de cerdos que después del
desmame eran vendidos a los vecinos de la aldea. Azinhaga era su
nombre, en la provincia del Ribatejo.
Se llamaban Jerónimo Melrinho y Josefa Caixinha esos abuelos, y
eran analfabetos uno y otro. En el invierno, cuando el frío de la noche
apretaba hasta el punto de que el agua de los cántaros se helaba
dentro de la casa, recogían de las pocilgas a los lechones más débiles
y se los llevaban a su cama. Debajo de las mantas ásperas, el calor
de los humanos libraba a los animalillos de una muerte cierta. Aunque
fuera gente de buen carácter, no era por primores de alma compasiva
por lo que los dos viejos procedían así: lo que les preocupaba, sin
sentimentalismos ni retóricas, era proteger su pan de cada día, con la
naturalidad de quien, para mantener la vida, no aprendió a pensar
mucho más de lo que es indispensable. Ayudé muchas veces a éste
mi abuelo Jerónimo en sus andanzas de pastor, cavé muchas veces la
tierra del huerto anejo a la casa y corté leña para la lumbre, muchas
veces, dando vueltas y vueltas a la gran rueda de hierro que
accionaba la bomba, hice subir agua del pozo comunitario y la
transporté al hombro, muchas veces, a escondidas de los guardas de
las cosechas, fui con mi abuela, también de madrugada, pertrechados
de rastrillo, paño y cuerda, a recoger en los rastrojos la paja suelta que
después habría de servir para lecho del ganado. Y algunas veces, en
noches calientes de verano, después de la cena, mi abuelo me decía:
"José, hoy vamos a dormir los dos debajo de la higuera".
Había otras dos higueras, pero aquélla, ciertamente por ser la mayor,
por ser la más antigua, por ser la de siempre, era, para todas las
personas de la casa, la higuera. Más o menos por antonomasia,
palabra erudita que sólo muchos años después acabaría conociendo y
sabiendo lo que significaba. En medio de la paz nocturna, entre las
ramas altas del árbol, una estrella se me aparecía, y después,
lentamente, se escondía detrás de una hoja, y, mirando en otra
dirección, tal como un río corriendo en silencio por el cielo cóncavo,
surgía la claridad traslúcida de la vía lactea, el camino de Santiago,
como todavía le llamábamos en la aldea. Mientras el sueño llegaba, la
noche se poblaba con las historias y los sucesos que mi abuelo iba
contando: leyendas, apariciones, asombros, episodios singulares,
muertes antiguas, escaramuzas de palo y piedra, palabras de
antepasados, un incansable rumor de memorias que me mantenía
despierto, al mismo que suavemente me acunaba. Nunca supe si él se
callaba cuando descubría que me había dormido, o si seguía hablando
para no dejar a medias la respuesta a la pregunta que invariablemente
le hacía en las pausas más demoradas que él, calculadamente, le
introducía en el relato: "¿Y después?". Tal vez repitiese las historias
para sí mismo, quizá para no olvidarlas, quizá para enriquecerlas con
peripecias nuevas. En aquella edad mía y en aquel tiempo de todos
nosotros, no será necesario decir que yo imaginaba que mi abuelo
Jerónimo era señor de toda la ciencia del mundo. Cuando, con la
primera luz de la mañana, el canto de los pájaros me despertaba, él ya
no estaba allí, se había ido al campo con sus animales, dejándome
dormir. Entonces me levantaba, doblaba la manta, y, descalzo (en la
aldea anduve siempre descalzo hasta los catorce años), todavía con
pajas enredadas en el pelo, pasaba de la parte cultivada del huerto a
la otra, donde se encontraban las pocilgas, al lado de la casa.
Mi abuela, ya en pie desde antes que mi abuelo, me ponía delante un
tazón de café con trozos de pan y me preguntaba si había dormido
bien. Si le contaba algún mal sueño nacido de las historias del abuelo,
ella siempre me tranquilizaba: "No hagas caso, en sueños no hay
firmeza". Pensaba entonces que mi abuela, aunque también fuese una
mujer muy sabia, no alcanzaba las alturas de mi abuelo, ése que,
tumbado debajo de la higuera, con el nieto José al lado, era capaz de
poner el universo en movimiento apenas con dos palabras. Muchos
años después, cuando mi abuelo ya se había ido de este mundo y yo
era un hombre hecho, llegué a comprender que la abuela, también
ella, creía en los sueños. Otra cosa no podría significar que, estando
sentada una noche, ante la puerta de su pobre casa, donde entonces
vivía sola, mirando las estrellas mayores y menores de encima de su
cabeza, hubiese dicho estas palabras: "El mundo es tan bonito y yo
tengo tanta pena de morir". No dijo miedo de morir, dijo pena de morir,
como si la vida de pesadilla y continuo trabajo que había sido la suya,
en aquel momento casi final, estuviese recibiendo la gracia de una
suprema y última despedida, el consuelo de la belleza revelada.
Estaba sentada a la puerta de una casa, como no creo que haya
habido alguna otra en el mundo, porque en ella vivió gente capaz de
dormir con cerdos como si fuesen sus propios hijos, gente que tenía
pena de irse de la vida sólo porque el mundo era bonito, gente, y ése
fue mi abuelo Jerónimo, pastor y contador de historias, que, al
presentir que la muerte venía a buscarlo, se despidió de los árboles de
su huerto uno por uno, abrazándolos y llorando porque sabía que no
los volvería a ver.
Muchos años después, escribiendo por primera vez sobre éste mi
abuelo Jerónimo y ésta mi abuela Josefa (me ha faltado decir que ella
había sido, según cuantos la conocieron de joven, de una belleza
inusual), tuve conciencia de que estaba transformando las personas
comunes que habían sido en personajes literarios y que ésa era,
probablemente, la manera de no olvidarlos, dibujando y volviendo a
dibujar sus rostros con el lápiz siempre cambiante del recuerdo,
coloreando e iluminando la monotonía de un cotidiano opaco y sin
horizontes, como quien va recreando sobre el inestable mapa de la
memoria, la irrealidad sobrenatural del país en que decidió pasar a
vivir. La misma actitud de espíritu que, después de haber evocado la
fascinante y enigmática figura de un cierto bisabuelo berebere, me
llevaría a describir más o menos en estos términos un viejo retrato
(hoy ya con casi ochenta años) donde mis padres aparecen. "Están
los dos de pie, bellos y jóvenes, de frente ante el fotógrafo, mostrando
en el rostro una expresión de solemne gravedad que es tal vez temor
delante de la cámara, en el instante en que el objetivo va a fijar de uno
y del otro la imagen que nunca más volverán a tener, porque el día
siguiente será implacablemente otro día.

José Saramago
De la siguiente frase escoge los antónimos de las palabras
subrayadas

Muchos años después, escribiendo por primera vez sobre éste


mi abuelo Jerónimo y ésta mi abuela Josefa:
Seleccione una:
a. Antes – Previamente – Nieto
b. Antes – Última – Nieto
c. Antes – Última – Abuelo
d. Anterior – Última – Nieto

El gato negro (fragmento)


El gato, entretanto, mejoraba poco a poco. Cierto que la órbita donde
faltaba el ojo presentaba un horrible aspecto, pero el animal no parecía
sufrir ya. Se paseaba, como de costumbre, por la casa, aunque, como
es de imaginar, huía aterrorizado al verme. Me quedaba aún bastante
de mi antigua manera de ser para sentirme agraviado por la
evidente antipatía de un animal que alguna vez me había querido tanto.
Pero ese sentimiento no tardó en ceder paso a la irritación. Y entonces,
para mi caída final e irrevocable, se presentó el espíritu de la
perversidad. La filosofía no tiene en cuenta a este espíritu; y, sin
embargo, tan seguro estoy de que mi alma existe como de que la
perversidad es uno de los impulsos primordiales del corazón humano,
una de las facultades primarias indivisibles, uno de esos sentimientos
que dirigen el carácter del hombre. ¿Quién no se ha sorprendido a sí
mismo cien veces en momentos en que cometía una acción tonta o
malvada por la simple razón de que no debía cometerla? ¿No hay en
nosotros una tendencia permanente, que enfrenta descaradamente al
buen sentido, una tendencia a transgredir lo que constituye la Ley por
el solo hecho de serlo?

Edgar Allan Poe


En la palabra transgredir el prefijo trans significa: más allá de o al otro
lado. De las siguientes palabras cuál prefijo se relaciona con el mismo
significado:
Seleccione una:
a. Transmilenio
b. Tránsito
c. Transgénero
d. Trance

El problema
Un anfiteatro era lo que le esperaba a nuestra relación. Cada vez que
sus reclamos llegaban una neuralgiamartillaba mis pensamientos, mi
calma. La cronología de nuestros actos ya alertaban una caída en la
manera de mirarnos. Solo un acto metafísico como el de los ejercicios
divinos podría acabar con mi antropocentrismo. Admito ser la razón
del conflicto, mi poligamia no encuentra lugar con sus moldes
mentales. Sin embargo, la nostalgia me apremia. Debo parar de ser
un cefalópodo que atrapa lo primero que ve y lo devora. Debo dejar de
usar mis ojos como si fuesen periscopios que se alertan con una falda.
Yo aquí soy el problema y debo resolverlo para no terminar siendo
el asocial que no quisiera ser por mis ansias desenfrenadas.
Anónimo

Teniendo en cuenta que el sufijo “-podo” significa pie, la definición


de cefalópodo es:
Seleccione una:
a. Persona que tiene los pies en la cabeza
b. Persona que tiene la cabeza en los pies
c. Persona que da de patadas en la cabeza
d. Persona que piensa con los pies

En la nueva generación se advierte mucho menos dispersión y mucho


menor egotismo. Los jóvenes tienden a agruparse, tienden a
entenderse. La obra del intelectual de vanguardia no quiere ser
un monólogo. Se propaga, poco a poco, la convicción de que los
hombres nuevos del Perú deben articular y asociar sus esfuerzos. Y
de que la obra individual debe convertirse, voluntaria y
conscientemente, en obra colectiva. La exploración de la realidad
profunda del Perú no es posible sin cooperación intelectual. El nombre
es lo de menos. Lo que a todos nos importa es el fin. (José Carlo
Mariátegui).
Con base en el texto responde la siguiente pregunta:

La palabra monólogo, resaltada en el texto, tiene la raíz mono y el


sufijo -logo, que significan:
Seleccione una:
a. Chimpancé - imagen/obra
b. Uno/único - imagen/obra
c. Mico - palabra/habla
d. Uno - palabra/habla

Establece la siguiente analogía


ADVERTENCIA: ULTIMATUM::
Seleccione una:
a. Murmuración: Grito
b. Deseo: Gana
c. Pedido: Exigencia
d. Pesar: Pena

Es que somos muy pobres


Aquí todo va de mal en peor. La semana pasada se murió mi tía Jacinta,
y el sábado, cuando ya la habíamos enterrado y comenzaba a
bajársenos la tristeza, comenzó a llover como nunca. A mi papá eso le
dio coraje, porque toda la cosecha de cebada estaba asoleándose en
el solar. Y el aguacero llegó de repente, en grandes olas de agua, sin
darnos tiempo ni siquiera a esconder aunque fuera un manojo; lo único
que pudimos hacer, todos los de mi casa, fue estarnos arrimados debajo
del tejabán, viendo cómo el agua fría que caía del cielo quemaba
aquella cebada amarilla tan recién cortada.
Y apenas ayer, cuando mi hermana Tacha acababa de cumplir doce
años, supimos que la vaca que mi papá le regaló para el día de su santo
se la había llevado el río
El río comenzó a crecer hace tres noches, a eso de la madrugada. Yo
estaba muy dormido y, sin embargo, el estruendo que traía el río al
arrastrarse me hizo despertar en seguida y pegar el brinco de la cama
con mi cobija en la mano, como si hubiera creído que se estaba
derrumbando el techo de mi casa. Pero después me volví a dormir,
porque reconocí el sonido del río y porque ese sonido se fue haciendo
igual hasta traerme otra vez el sueño.
Cuando me levanté, la mañana estaba llena de nublazones y parecía
que había seguido lloviendo sin parar. Se notaba en que el ruido del río
era más fuerte y se oía más cerca. Se olía, como se huele una
quemazón, el olor a podrido del agua revuelta.
A la hora en que me fui a asomar, el río ya había perdido sus orillas. Iba
subiendo poco a poco por la calle real, y estaba metiéndose a toda prisa
en la casa de esa mujer que le dicen la Tambora. El chapaleo del agua
se oía al entrar por el corral y al salir en grandes chorros por la puerta.
La Tambora iba y venía caminando por lo que era ya un pedazo de río,
echando a la calle sus gallinas para que se fueran a esconder a algún
lugar donde no les llegara la corriente.
Y por el otro lado, por donde está el recodo, el río se debía de haber
llevado, quién sabe desde cuándo, el tamarindo que estaba en el solar
de mi tía Jacinta, porque ahora ya no se ve ningún tamarindo. Era el
único que había en el pueblo, y por eso nomás la gente se da cuenta
de que la creciente esta que vemos es la más grande de todas las que
ha bajado el río en muchos años.
Mi hermana y yo volvimos a ir por la tarde a mirar aquel amontonadero
de agua que cada vez se hace más espesa y oscura y que pasa ya muy
por encima de donde debe estar el puente. Allí nos estuvimos horas y
horas sin cansarnos viendo la cosa aquella. Después nos subimos por
la barranca, porque queríamos oír bien lo que decía la gente, pues
abajo, junto al río, hay un gran ruidazal y sólo se ven las bocas de
muchos que se abren y se cierran y como que quieren decir algo; pero
no se oye nada. Por eso nos subimos por la barranca, donde también
hay gente mirando el río y contando los perjuicios que ha hecho. Allí fue
donde supimos que el río se había llevado a la Serpentina, la vaca esa
que era de mi hermana Tacha porque mi papá se la regaló para el día
de su cumpleaños y que tenía una oreja blanca y otra colorada y muy
bonitos ojos.
No acabo de saber por qué se le ocurriría a la Serpentina pasar el río
este, cuando sabía que no era el mismo río que ella conocía de a diario.
La Serpentina nunca fue tan atarantada. Lo más seguro es que ha de
haber venido dormida para dejarse matar así nomás por nomás. A mí
muchas veces me tocó despertarla cuando le abría la puerta del corral
porque si no, de su cuenta, allí se hubiera estado el día entero con los
ojos cerrados, bien quieta y suspirando, como se oye suspirar a las
vacas cuando duermen.
Y aquí ha de haber sucedido eso de que se durmió. Tal vez se le ocurrió
despertar al sentir que el agua pesada le golpeaba las costillas. Tal vez
entonces se asustó y trató de regresar; pero al volverse se encontró
entreverada y acalambrada entre aquella agua negra y dura como tierra
corrediza. Tal vez bramó pidiendo que le ayudaran. Bramó como sólo
Dios sabe cómo.
Yo le pregunté a un señor que vio cuando la arrastraba el río si no había
visto también al becerrito que andaba con ella. Pero el hombre dijo que
no sabía si lo había visto. Sólo dijo que la vaca manchada pasó patas
arriba muy cerquita de donde él estaba y que allí dio una voltereta y
luego no volvió a ver ni los cuernos ni las patas ni ninguna señal de
vaca. Por el río rodaban muchos troncos de árboles con todo y raíces y
él estaba muy ocupado en sacar leña, de modo que no podía fijarse si
eran animales o troncos los que arrastraba.
Nomás por eso, no sabemos si el becerro está vivo, o si se fue detrás
de su madre río abajo. Si así fue, que Dios los ampare a los dos.
La apuración que tienen en mi casa es lo que pueda suceder el día de
mañana, ahora que mi hermana Tacha se quedó sin nada. Porque mi
papá con muchos trabajos había conseguido a la Serpentina, desde que
era una vaquilla, para dársela a mi hermana, con el fin de que ella
tuviera un capitalito y no se fuera a ir de piruja como lo hicieron mis otras
dos hermanas, las más grandes.
Según mi papá, ellas se habían echado a perder porque éramos muy
pobres en mi casa y ellas eran muy retobadas. Desde chiquillas ya eran
rezongonas. Y tan luego que crecieron les dio por andar con hombres
de lo peor, que les enseñaron cosas malas. Ellas aprendieron pronto y
entendían muy bien los chiflidos, cuando las llamaban a altas horas de
la noche. Después salían hasta de día. Iban cada rato por agua al río y
a veces, cuando uno menos se lo esperaba, allí estaban en el corral,
revolcándose en el suelo, todas encueradas y cada una con un hombre
trepado encima.
Entonces mi papá las corrió a las dos. Primero les aguantó todo lo que
pudo; pero más tarde ya no pudo aguantarlas más y les dio carrera para
la calle. Ellas se fueron para Ayutla o no sé para dónde; pero andan
de pirujas.
Por eso le entra la mortificación a mi papá, ahora por la Tacha, que no
quiere vaya a resultar como sus otras dos hermanas, al sentir que se
quedó muy pobre viendo la falta de su vaca, viendo que ya no va a tener
con qué entretenerse mientras le da por crecer y pueda casarse con un
hombre bueno, que la pueda querer para siempre. Y eso ahora va a
estar difícil. Con la vaca era distinto, pues no hubiera faltado quién se
hiciera el ánimo de casarse con ella, sólo por llevarse también aquella
vaca tan bonita.
La única esperanza que nos queda es que el becerro esté todavía vivo.
Ojalá no se le haya ocurrido pasar el río detrás de su madre. Porque si
así fue, mi hermana Tacha está tantito así de retirado de hacerse piruja.
Y mamá no quiere.
Mi mamá no sabe por qué Dios la ha castigado tanto al darle unas hijas
de ese modo, cuando en su familia, desde su abuela para acá, nunca
ha habido gente mala. Todos fueron criados en el temor de Dios y eran
muy obedientes y no le cometían irreverencias a nadie. Todos fueron
por el estilo. Quién sabe de dónde les vendría a ese par de hijas suyas
aquel mal ejemplo. Ella no se acuerda. Le da vueltas a todos sus
recuerdos y no ve claro dónde estuvo su mal o el pecado de nacerle
una hija tras otra con la misma mala costumbre. No se acuerda. Y cada
vez que piensa en ellas, llora y dice: “Que Dios las ampare a las dos.”
Pero mi papá alega que aquello ya no tiene remedio. La peligrosa es la
que queda aquí, la Tacha, que va como palo de ocote crece y crece y
que ya tiene unos comienzos de senos que prometen ser como los de
sus hermanas: puntiagudos y altos y medio alborotados para llamar la
atención.
-Sí -dice-, le llenará los ojos a cualquiera dondequiera que la vean. Y
acabará mal; como que estoy viendo que acabará mal.
Ésa es la mortificación de mi papá.
Y Tacha llora al sentir que su vaca no volverá porque se la ha matado
el río. Está aquí a mi lado, con su vestido color de rosa, mirando el río
desde la barranca y sin dejar de llorar. Por su cara corren chorretes de
agua sucia como si el río se hubiera metido dentro de ella.
Yo la abrazo tratando de consolarla, pero ella no entiende. Llora con
más ganas. De su boca sale un ruido semejante al que se arrastra por
las orillas del río, que la hace temblar y sacudirse todita, y, mientras, la
creciente sigue subiendo. El sabor a podrido que viene de allá salpica
la cara mojada de Tacha y los dos pechitos de ella se mueven de arriba
abajo, sin parar, como si de repente comenzaran a hincharse para
empezar a trabajar por su perdición.
Juan Rulfo

La vaca en el cuento es análoga a:


Seleccione una:
a. El intercambio
b. La dote
c. La propiedad
d. El crédito

La nariz

El barbero Iván Yakovlievich se había despertado bastante temprano,


reparando al punto en el olor a pan caliente. Incorporándose un poco
en la cama, vio que su esposa, una señora de aspecto bastante
respetable, muy aficionada al café, sacaba del horno pan recién
cocido. -Hoy no tomaré café, Prascovia Osipovna -dijo Iván
Yakovlievich-. En lugar de ello, tengo ganas de comer pan caliente con
cebolla. Es decir, Iván Yakovlievich quería lo uno y lo otro, pero sabía
que era imposible exigir ambas cosas a la vez, pues a Prascovia
Osipovna no le agradaban semejantes caprichos. «¡Que coma pan el
muy tonto! Tanto mejor para mí -pensó su mujer para sus adentros-;
así quedará más café.» Y echó un pan sobre la mesa. Iván
Yakovlievich, por decoro, se puso el frac sobre la camisa, y tras
haberse sentado a la mesa, echó sal, preparó dos cabezas de cebolla,
cogió el cuchillo y, haciendo una mueca significativa, se dispuso a
cortar el pan. Al partirlo en dos pedazos miró al centro, y con gran
sorpresa vio algo que brillaba. Con sumo cuidado, Iván Yakovlievich
introdujo el cuchillo y lo palpó con el dedo: «¡Qué duro está! -pensó
para sí-. ¿Qué será?» Metió los dedos y sacó..., ¡horror!, ¡una nariz!...
Iván Yakovlievich se quedó petrificado. Empezó a restregarse los ojos
y a palpar la nariz. Sí, no cabía duda: se trataba de una nariz, y hasta
le parecía que era de un conocido. El espanto le cambió el semblante.
Pero este espanto no fue nada comparado con la indignación de su
esposa. -¡Qué bárbaro! ¿Dónde cortaste esa nariz? -gritó, furiosa-.
¡Canalla, borracho! Yo misma te denunciaré a la Policía. ¡Jesús, qué
bandido! Ya es la tercera persona a quien oigo decir que cuando
afeitas, tiras tanto de la nariz que no hay quien lo resista.
Gogol

Según la lectura anterior, ¿Cuál de las siguientes analogías se podría


establecer?
El BARBERO es a la NARIZ
Seleccione una:
a. El pan a la mantequilla
b. El desayuno al pan
c. El estilista a la oreja
d. El barbero a la cuchilla

Uribe, El culebrero

Allá el señor, allá la dama: acérquesen que para el día de hoy le tengo
la solución de sus problemas; yo soy varón de varones, soy culebrero
de fama; acá donde ustedes me ven, yo hice llorar al padre Marianito,
le inventé alas a Paloma Valencia, hice que María Fernanda perdiera
su Cabal, metí a Diego a Palacio y dije que María del Pilar había
Hurtado … Sí, señor: yo le hice un hoyo a Santoyo, yo hice fiera a
Noguera, yo hice pana a Salvador Arana, yo volví tuso a Mancuso... Y
acá vengo para arreglarles la vida y a defendermen de quienes me
ataquen.
Póngamele, pues, cuidado, señores y señoras: le tengo el remedio
para que le salga pelo a Obdulio, entendimiento a Pachito, mesura a
Fernando Londoño: ¿le parece que los guerrilleros no pueden ser
senadores a menos de que se llamen Everth? ¿Cree que no los
pueden encerrar en zonas de concentración, sino en suites del hotel
Tequendama? ¿Quiere que al Congreso vaya gente que alcance a
votar antes de que la metan presa, pero no el terrorista Far que nos
quiere imponer identidá de género?
Entonces arrimen; le tengo la receta para sobrevivir a 28 procesos,
para no comerle cuento a la justicia: ¿que le pusieron los procesitos
en lesa inmunidá?; ¿que lo pillaron hablando con unos malandros?;
¿que al señor le da pudor, que a la niña le da vergüenza? Nada de
eso, caballero: acá se actúa sin vergüenza. Repita por todo lado que
se instaló el castrochavismo y que lo están persiguiendo; diga a toda
hora que Lafar no entregó armas; haga que la gente salga a votar
berraca. Y si lo agarran en la mentira, se encomienda al santo Job.
Arrime, pues, por acá, tráigame al niño y lo alzo, le tengo el Croc que
no resbala, la peinilla que no necesita filo, el frac que sirve de babero:
acá en este canasto traigo la culebra que no necesita pagar, el pato
que puede llevar de candidato, la vaca sagrada para que la Ordóñez.
Yo soy el Macho de Machos: yo me gané el premio del Gran
Colombiano, el diploma de la Sergio Arboleda y la Asociación de
Machistas de Casanare me ofreció el Cojón de Oro… Allá la dama y el
caballero: ¿quieren hacersen famosos y que todo mundo los
reconozca? Hagan la receta de mi tía Dolly, que no le ‘dolí-a’ meterse
en líos con la mafia, y aliméntesen con la dieta de las frutas: sandías
para el doctor Macías; naranja para ofrecerle a Tanja… y lulo para que
le den las buenas noches.
Eh, ave María, allá el señor, allá la dama: en este canasto traigo el
remedio para acabar con Lafar, el brevaje para acabar con los pobres,
el jarabe de la chu: de la chumbimba, papá, y si así no caen, entonces
le aplica un poquito de nitrato: ni trato con ustedes y les doy es bala,
pues, papá… ¿Que esos muchachos estaban recogiendo café? ¡De
malas! ¿Que querían paz, pero no así? ¡Ya voy Toño! Yo también iba
a hacer procesito de paz, pero como dijo mi tía Fortuna: si acá no se
hace mi receta, no se hace ninguna.
A ver el caballero, a ver la dama: ¿quieren volverse ricos de un día
para el otro? ¿Sus hijos parecen entecos y lombricientos? ¡Tengo esta
receta mágica para que un lote cualquiera se les vuelva zona franca,
vea! Muy fácil: póngalos a trabajar, apláceles el gustico, agarre esta
escritura y esta chatarra, y listo Medellín, cabina ocho…
¿El suyo es esfuercito de caballito discapacitado? ¿La culebrita no le
queda viva ante las muchachas? ¿Se tomó un aguardientico y se le va
a salir el diablo? Le traigo el remedio para mejorar la salud: sume 50 y
50 y eso le da 100 y con eso haga una ley y quiebre al médico. ¿Dije
quebrar? ¡A quebrar se dijo, sáquese la mano del bolsillo, sea varón!
¿Quiere la paz con impunidá que ofrece el castrochavista Petro y no la
guerra con impunidá que ofrecemos nosotros?
Nada de eso, caballero: acá le traigo este menjurje prodigioso para
recobrar el rumbo, probado por alias la Mechuda en cada mecha, por
el Curita Velásquez en cada cura, vea: tiene un colmillo con sangre
seca del procurador, tres pelos de la senadora Valencia, gotas de
saliva de la doctora Cabal: lávese bien lavada la cabeza mientras
repite: “Manque me busque la corte / a mí me da mucha risa / con mi
pollo gano en junio / y ese proceso hago trizas”.
¿Le escuchan las conversaciones esos hijueputas? ¿En un mismo
mes le dicen que se sobrepasa con las damas, que le quitó un tornillo
al helicóptero del amigo al que le faltaba un ídem, que montó
bloquecito con el hermano y unos buenos muchachos? ¡Nanái cucas!;
frótese este aceite en las carnitas y huesitos, y repita diez veces: son
patrañas del castrochavismo Far; y lo verá que todo le resbala.
Véngasen, pues, acá, con este brujo; cómpremen mi receta: téngasen,
pues, del miedo, que ya viene el Cocomunismo y se los traga; y hagan
la fila ligerito que para todos hay: para el negociante prolijo, que es mi
hijo… Para mi nuevo man, que es Iván. Y allá en Palacio para la
persona impoluta, que es muy… tarde y me tengo que ir: adiós.
Daniel Samper Ospina
Tomado de: Columna de opinión revista
Semana. http://www.semana.com/opinion/articulo/alvaro-uribe-el-
culebrero-por-daniel-samper-ospina/558805

La expresión “para no comerle cuento a la justicia” quiere dar a


entender que:
Seleccione una:
a. No hace caso de lo que dice la justicia
b. No cree en la justicia
c. No está seguro de lo que dice la justicia
d. No cree en lo que está escrito por la justicia

Lea el siguiente fragmento de A la diestra de Dios Padre de Tomás


Carrasquilla y responda:
Y dicho y hecho: trajo el cuchillo cocinero y echó a cortar por lo
redondo; trajo la batea grande y la colmó; y al momentico echó a
chirriar la cazuela y a regase por toda la casa aquella güelentina tan
sabrosa. Como Dios li ayudó les puso el comistraje. Y nada desganao
qu'era el viejito; el mozo sí no comió cosa. A Peralta ya no le quedó ni
hebra de duda que aquello era un milagro patente; y con todito
aquel contento que le bailaba en el cuerpo sargentió por todas
partes, y con lo menos roto y menos sucio de la casa les arregló las
camitas en las dos puntas de la tarima. Se dieron las buenas noches y
cada cual si acostó.

¿La expresión subrayada corresponde a qué tipo de unidad


fraseológica?
Seleccione una:
a. Enunciado fraseológico, porque es una fórmula rutinaria o refrán
b. Colocación, porque es una expresión prefabricada que consta de
dos elementos
c. No es considerada una unidad fraseológica, porque no es de uso
fijado.
d. Locución, porque es una expresión que funciona como una sola
pieza y tiene un sentido unitario
Uribe, El culebrero
Allá el señor, allá la dama: acérquesen que para el día de hoy le tengo
la solución de sus problemas; yo soy varón de varones, soy culebrero
de fama; acá donde ustedes me ven, yo hice llorar al padre Marianito,
le inventé alas a Paloma Valencia, hice que María Fernanda perdiera
su Cabal, metí a Diego a Palacio y dije que María del Pilar había
Hurtado … Sí, señor: yo le hice un hoyo a Santoyo, yo hice fiera a
Noguera, yo hice pana a Salvador Arana, yo volví tuso a Mancuso... Y
acá vengo para arreglarles la vida y a defendermen de quienes me
ataquen.
Póngamele, pues, cuidado, señores y señoras: le tengo el remedio
para que le salga pelo a Obdulio, entendimiento a Pachito, mesura a
Fernando Londoño: ¿le parece que los guerrilleros no pueden ser
senadores a menos de que se llamen Everth? ¿Cree que no los
pueden encerrar en zonas de concentración, sino en suites del hotel
Tequendama? ¿Quiere que al Congreso vaya gente que alcance a
votar antes de que la metan presa, pero no el terrorista Far que nos
quiere imponer identidá de género?
Entonces arrimen; le tengo la receta para sobrevivir a 28 procesos,
para no comerle cuento a la justicia: ¿que le pusieron los procesitos
en lesa inmunidá?; ¿que lo pillaron hablando con unos malandros?;
¿que al señor le da pudor, que a la niña le da vergüenza? Nada de
eso, caballero: acá se actúa sin vergüenza. Repita por todo lado que
se instaló el castrochavismo y que lo están persiguiendo; diga a toda
hora que Lafar no entregó armas; haga que la gente salga a votar
berraca. Y si lo agarran en la mentira, se encomienda al santo Job.
Arrime, pues, por acá, tráigame al niño y lo alzo, le tengo el Croc que
no resbala, la peinilla que no necesita filo, el frac que sirve de babero:
acá en este canasto traigo la culebra que no necesita pagar, el pato
que puede llevar de candidato, la vaca sagrada para que la Ordóñez.
Yo soy el Macho de Machos: yo me gané el premio del Gran
Colombiano, el diploma de la Sergio Arboleda y la Asociación de
Machistas de Casanare me ofreció el Cojón de Oro… Allá la dama y el
caballero: ¿quieren hacersen famosos y que todo mundo los
reconozca? Hagan la receta de mi tía Dolly, que no le ‘dolí-a’ meterse
en líos con la mafia, y aliméntesen con la dieta de las frutas: sandías
para el doctor Macías; naranja para ofrecerle a Tanja… y lulo para que
le den las buenas noches.
Eh, ave María, allá el señor, allá la dama: en este canasto traigo el
remedio para acabar con Lafar, el brevaje para acabar con los pobres,
el jarabe de la chu: de la chumbimba, papá, y si así no caen, entonces
le aplica un poquito de nitrato: ni trato con ustedes y les doy es bala,
pues, papá… ¿Que esos muchachos estaban recogiendo café? ¡De
malas! ¿Que querían paz, pero no así? ¡Ya voy Toño! Yo también iba
a hacer procesito de paz, pero como dijo mi tía Fortuna: si acá no se
hace mi receta, no se hace ninguna.
A ver el caballero, a ver la dama: ¿quieren volverse ricos de un día
para el otro? ¿Sus hijos parecen entecos y lombricientos? ¡Tengo esta
receta mágica para que un lote cualquiera se les vuelva zona franca,
vea! Muy fácil: póngalos a trabajar, apláceles el gustico, agarre esta
escritura y esta chatarra, y listo Medellín, cabina ocho…
¿El suyo es esfuercito de caballito discapacitado? ¿La culebrita no le
queda viva ante las muchachas? ¿Se tomó un aguardientico y se le va
a salir el diablo? Le traigo el remedio para mejorar la salud: sume 50 y
50 y eso le da 100 y con eso haga una ley y quiebre al médico. ¿Dije
quebrar? ¡A quebrar se dijo, sáquese la mano del bolsillo, sea varón!
¿Quiere la paz con impunidá que ofrece el castrochavista Petro y no la
guerra con impunidá que ofrecemos nosotros?
Nada de eso, caballero: acá le traigo este menjurje prodigioso para
recobrar el rumbo, probado por alias la Mechuda en cada mecha, por
el Curita Velásquez en cada cura, vea: tiene un colmillo con sangre
seca del procurador, tres pelos de la senadora Valencia, gotas de
saliva de la doctora Cabal: lávese bien lavada la cabeza mientras
repite: “Manque me busque la corte / a mí me da mucha risa / con mi
pollo gano en junio / y ese proceso hago trizas”.
¿Le escuchan las conversaciones esos hijueputas? ¿En un mismo
mes le dicen que se sobrepasa con las damas, que le quitó un tornillo
al helicóptero del amigo al que le faltaba un ídem, que montó
bloquecito con el hermano y unos buenos muchachos? ¡Nanái cucas!;
frótese este aceite en las carnitas y huesitos, y repita diez veces: son
patrañas del castrochavismo Far; y lo verá que todo le resbala.
Véngasen, pues, acá, con este brujo; cómpremen mi receta: téngasen,
pues, del miedo, que ya viene el Cocomunismo y se los traga; y hagan
la fila ligerito que para todos hay: para el negociante prolijo, que es mi
hijo… Para mi nuevo man, que es Iván. Y allá en Palacio para la
persona impoluta, que es muy… tarde y me tengo que ir: adiós.
Daniel Samper Ospina

Tomado de: Columna de opinión revista


Semana. http://www.semana.com/opinion/articulo/alvaro-uribe-el-
culebrero-por-daniel-samper-ospina/558805

La expresión “Vaca sagrada” puede definirse como: personaje


importante que la opinión pública considera que no se debe criticar o
como un animal que es objeto de veneración y de culto. Según el texto
se puede afirmar que, EXCEPTO:

Seleccione una:
a. En el texto se utiliza en un sentido figurado
b. En el texto la expresión es utilizada como un atenuante para
nombrar directamente a ese personaje importante
c. Esta expresión se utiliza en un sentido literal
d. En el texto esta expresión se utiliza para nombrar justamente a un
personaje que no se puede criticar

¡Diles que no me maten! (Fragmento)

-¡Diles que no me maten, Justino! Anda, vete a decirles eso. Que por
caridad. Así diles. Diles que lo hagan por caridad.
-No puedo. Hay allí un sargento que no quiere oír hablar nada de ti.
-Haz que te oiga. Date tus mañas y dile que para sustos ya ha estado
bueno. Dile que lo haga por caridad de Dios.
-No se trata de sustos. Parece que te van a matar de a de veras. Y yo
ya no quiero volver allá.
-Anda otra vez. Solamente otra vez, a ver qué consigues.
-No. No tengo ganas de eso, yo soy tu hijo. Y si voy mucho con ellos,
acabarán por saber quién soy y les dará por afusilarme a mí también.
Es mejor dejar las cosas de este tamaño.
-Anda, Justino. Diles que tengan tantita lástima de mí. Nomás eso
diles. Justino apretó los dientes y movió la cabeza diciendo:
-No. Y siguió sacudiendo la cabeza durante mucho rato. Justino se
levantó de la pila de piedras en que estaba sentado y caminó hasta la
puerta del corral. Luego se dio vuelta para decir:
-Voy, pues. Pero si de perdida me afusilan a mí también, ¿quién
cuidará de mi mujer y de los hijos?
-La Providencia, Justino. Ella se encargará de ellos. Ocúpate de ir allá
y ver qué cosas haces por mí. Eso es lo que urge.

Juan Rulfo
El término “de a de veras” significa:
Seleccione una:
a. De verdad.
b. Seguramente.
c. Cierto.
d. En la vida real.

¡Diles que no me maten! (Fragmento)

-¡Diles que no me maten, Justino! Anda, vete a decirles eso. Que por
caridad. Así diles. Diles que lo hagan por caridad.
-No puedo. Hay allí un sargento que no quiere oír hablar nada de ti.
-Haz que te oiga. Date tus mañas y dile que para sustos ya ha estado
bueno. Dile que lo haga por caridad de Dios.
-No se trata de sustos. Parece que te van a matar de a de veras. Y yo
ya no quiero volver allá.
-Anda otra vez. Solamente otra vez, a ver qué consigues.
-No. No tengo ganas de eso, yo soy tu hijo. Y si voy mucho con ellos,
acabarán por saber quién soy y les dará por afusilarme a mí también.
Es mejor dejar las cosas de este tamaño.
-Anda, Justino. Diles que tengan tantita lástima de mí. Nomás eso
diles. Justino apretó los dientes y movió la cabeza diciendo:
-No. Y siguió sacudiendo la cabeza durante mucho rato. Justino se
levantó de la pila de piedras en que estaba sentado y caminó hasta la
puerta del corral. Luego se dio vuelta para decir:
-Voy, pues. Pero si de perdida me afusilan a mí también, ¿quién
cuidará de mi mujer y de los hijos?
-La Providencia, Justino. Ella se encargará de ellos. Ocúpate de ir allá
y ver qué cosas haces por mí. Eso es lo que urge.

Juan Rulfo

En el texto, la expresión “ya ha estado bueno” se refiere a:


Seleccione una:
a. La inteligencia de un personaje.
b. Una situación que llegó a su límite.
c. Algo que pasó a estar malo.
d. La necesidad de ser buenas personas.

En 1914, don Jesús del Corral publicó su famoso cuento “Que pase el
aserrador”, el cual, desde entonces, figura en todas las antologías de la
literatura colombiana dado que reúne las calidades literarias del cuento
bien escrito: historia atrayente, narración concisa y eficaz, humor
dosificado, final inesperado.
La pequeña obra de don Jesús narra las aventuras de Simón Pérez,
desertor de uno de los ejércitos en contienda en la guerra civil de 1885
y quien, en compañía de un soldado boyacense, se internó en las selvas
del bajo Cauca en busca de una mina de oro que estaba montando el
Conde de Nadal a orillas del río Nus. A pesar de su total ignorancia en
el oficio, Simón se hizo pasar por experto aserrador y a punto de trovas,
cuentos, embustes y brebajes, obnubiló a la familia del Conde y pasó
dos años a cuerpo de rey en la mina, mientras por ingenuo y crédulo
"aquel pobre indio de Boyacá se murió de hambre... sin llegar a ser
aserrador".
Fuera de sus valores literarios, en el imaginario colectivo el cuento
representa el arquetipo del antioqueño: recursivo,
atrevido, chacharachero, audaz. Hay una palabra que agrupa con
precisión todas estas características: el avispado.
El pueblo antioqueño creó el culto al avispado. El avispado tiene
profunda confianza en sí mismo, por tanto, no requiere de preparación,
dado que su astucia natural le permite salir triunfante en todas las
situaciones. El avispado no prevé las situaciones, las resuelve en cada
momento gracias a su viveza. El avispado no hace empresas, hace
negocios. Para el avispado la mejor universidad es la calle y la vida. El
avispado no cree en el esfuerzo pues sabe cómo se la gana de ojo. El
avispado no conversa, sino que se come de cuento a la gente. El
avispado es cañero, fafarachero, lanza, espuelón, fregao y ventajoso,
tiene agallas y se lleva a todo el mundo por delante. El avispado se
ufana: "Yo no lo tumbé, el se cayó sólo". Para el avispado no hay mayor
triunfo que sacar ventaja en cada negocio.
Es muy simbólico el léxico utilizado por el habla popular para exaltar la
figura del avispado, por lo general asociado con la fauna predadora.
Para destacar a alguien nos referimos a él como una fiera, un tigre, un
águila, una culebra. Por el contrario, la víctima del avispado se asocia
con la flora: una papa, un aguacate, un arracacho, una torta. Claro que
no faltan los elementos faunísticos como el marrano y el burro o cierto
órgano masculino.
Fragmento tomado de: Mejía Arango, J. ”El culto al avispado”.
Columnista invitado, portal UdeA.

Una fiera, un tigre, un águila, una culebra, en el párrafo 5,


pertenecen al campo de las:
Seleccione una:
a. Metáforas
b. Onomatopeyas
c. Interjecciones
d. Metonimias

Progreso y retroceso
Inventaron un cristal que dejaba pasar las moscas. La mosca venía,
empujaba un poco con la cabeza y pop ya estaba del otro lado. Alegría
enormísima de la mosca. Todo lo arruinó un sabio húngaro al descubrir
que la mosca podía entrar pero no salir, o viceversa, a causa de no se
sabe qué macana en la flexibilidad de las fibras de este cristal que era
muy fibroso. En seguida inventaron el cazamoscas con un terrón de
azúcar adentro, y muchas moscas morían desesperadas. Así acabó
toda posible confraternidad con estos animales dignos de mejor suerte.

Julio Cortázar

En la oración “La mosca venía, empujaba un poco con la cabeza y pop


ya estaba del otro lado”, “pop” es:
Seleccione una:
a. Retruécano
b. Onomatopeya
c. Sonido
d. Anáfora

En 1914, don Jesús del Corral publicó su famoso cuento “Que pase el
aserrador”, el cual, desde entonces, figura en todas las antologías de la
literatura colombiana dado que reúne las calidades literarias del cuento
bien escrito: historia atrayente, narración concisa y eficaz, humor
dosificado, final inesperado.
La pequeña obra de don Jesús narra las aventuras de Simón Pérez,
desertor de uno de los ejércitos en contienda en la guerra civil de 1885
y quien, en compañía de un soldado boyacense, se internó en las selvas
del bajo Cauca en busca de una mina de oro que estaba montando el
Conde de Nadal a orillas del río Nus. A pesar de su total ignorancia en
el oficio, Simón se hizo pasar por experto aserrador y a punto de trovas,
cuentos, embustes y brebajes, obnubiló a la familia del Conde y pasó
dos años a cuerpo de rey en la mina, mientras por ingenuo y crédulo
"aquel pobre indio de Boyacá se murió de hambre... sin llegar a ser
aserrador".

Fuera de sus valores literarios, en el imaginario colectivo el cuento


representa el arquetipo del antioqueño: recursivo, atrevido,
chacharachero, audaz. Hay una palabra que agrupa con precisión todas
estas características: el avispado.

El pueblo antioqueño creó el culto al avispado. El avispado tiene


profunda confianza en sí mismo, por tanto, no requiere de preparación,
dado que su astucia natural le permite salir triunfante en todas las
situaciones. El avispado no prevé las situaciones, las resuelve en cada
momento gracias a su viveza. El avispado no hace empresas, hace
negocios. Para el avispado la mejor universidad es la calle y la vida. El
avispado no cree en el esfuerzo pues sabe cómo se la gana de ojo. El
avispado no conversa, sino que se come de cuento a la gente. El
avispado es cañero, fafarachero, lanza, espuelón, fregao y ventajoso,
tiene agallas y se lleva a todo el mundo por delante. El avispado se
ufana: "Yo no lo tumbé, el se cayó sólo". Para el avispado no hay mayor
triunfo que sacar ventaja en cada negocio.

Es muy simbólico el léxico utilizado por el habla popular para exaltar la


figura del avispado, por lo general asociado con la fauna predadora.
Para destacar a alguien nos referimos a él como una fiera, un tigre, un
águila, una culebra. Por el contrario, la víctima del avispado se asocia
con la flora: una papa, un aguacate, un arracacho, una torta. Claro que
no faltan los elementos faunísticos como el marrano y el burro o cierto
órgano masculino.

Fragmento tomado de: Mejía Arango, J. ”El culto al avispado”.


Columnista invitado, portal UdeA.

La expresión p →→ q se puede traducir como:


Seleccione una:
a. Don Jesús del Corral es el mismo Simón Pérez
b. Como Simón Pérez era antioqueño se sentía muy avispado
c. Si el soldado boyacense hubiese sido más avispado entonces no se
habría muerto de hambre
d. Que “Pase el aserrador” es un cuento colombiano

La virgen de los sicarios (Fragmento)

La Virgen de Sabaneta hoy es María Auxiliadora, pero no lo era en mi


niñez: era la Virgen del Carmen, y la parroquia la de Santa Ana. Hasta
donde entiendo yo de estas cosas (que no es mucho), María Auxiliadora
es propiedad de los salesianos, y la parroquia de Sabaneta es de curas
laicos. ¿Cómo fue a dar María Auxiliadora allí? No sé. Cuando regresé
a Colombia allí la encontré entronizada, presidiendo la iglesia desde el
altar de la izquierda, haciendo milagros. Un tumulto llegaba los martes
a Sabaneta de todos los barrios y rumbos de Medellín adonde la Virgen
a rogar, a pedir, a pedir, a pedir, que es lo mejor que saben hacer los
pobres amén de parir hijos. Y entre esa romería tumultuosa los
muchachos de la barriada, los sicarios. Ya para entonces Sabaneta
había dejado de ser un pueblo y se había convertido en un barrio más
de Medellín, la ciudad la había alcanzado, se la había tragado; y
Colombia, entre tanto, se nos había ido de las manos. Eramos, y de
lejos, el país más criminal de la tierra, y Medellín la capital del odio. Pero
estas cosas no se dicen, se saben. Con perdón.

Fernando Vallejo
Del siguiente fragmento: “Ya para entonces Sabaneta había dejado de
ser un pueblo y se había convertido en un barrio más de Medellín, la
ciudad la había alcanzado, se la había tragado; y Colombia, entre
tanto, se nos había ido de las manos. Eramos, y de lejos, el país más
criminal de la tierra, y Medellín la capital del odio” se puede inferir que:
Seleccione una:
a. Sabaneta no hacía parte de la capital del odio porque era un pueblo
alejado de Medellín
b. Sabaneta hacia parte de la capital del odio porque se había
convertido en un barrio más de Medellín
c. Sabaneta hacía parte de Colombia por lo tanto era la más criminal
del mundo
d. Sabaneta era el país más criminal de la tierra

De acuerdo a la imagen cuál es el referente en la situación:


Seleccione una:
a. La desorientación del paciente
b. La visita al médico
c. El diagnóstico del médico
d. La dolencia del paciente

Destino
Llegué al puente que muy pocos logran cruzar.
-¡Pasa! -exclamó el guardián, pero me reí y le dije:
-Hay tiempo.
Entonces él sonrió y cerró los portones.
Al puente que muy pocos logran cruzar llegaron jóvenes y viejos. A
todos ellos se les denegó la entrada. Yo estaba ahí cerca,
holgazaneando, y fui contándolos, uno a uno, hasta que, cansado ya
de sus ruidos y protestas, volví al puente que muy pocos logran
cruzar.
La muchedumbre cerca del portón chilló:
-¡Este hombre llega tarde!
Pero me reí y les dije:
-Hay tiempo.
-¡Pasa! -exclamó el guardián mientras yo ingresaba; luego sonrió y
cerró los portones.

Robert W. Chambers
El emisor del diálogo anterior es:
Seleccione una:
a. Un sabio
b. Un guardián
c. El narrador.
d. Un hombre osado

Mi vida con la ola (Fragmento)


Cuando dejé aquel mar, una ola se adelantó entre todas. Era esbelta y
ligera. A pesar de los gritos de las otras, que la detenían por el vestido
flotante, se colgó de mi brazo y se fue conmigo saltando. No quise
decirle nada, porque me daba pena avergonzarla ante sus compañeras.
Además, las miradas coléricas de las mayores me paralizaron.
Cuando llegamos al pueblo, le expliqué que no podía ser, que la vida
en la ciudad no era lo que ella pensaba en su ingenuidad de ola que
nunca ha salido del mar. Me miró seria: “Su decisión estaba tomada. No
podía volver.” Intenté dulzura, dureza, ironía. Ella lloró, gritó, acarició,
amenazó. Tuve que pedirle perdón. Al día siguiente empezaron mis
penas. ¿Cómo subir al tren sin que nos vieran el conductor, los
pasajeros, la policía? Es cierto que los reglamentos no dicen nada
respecto al transporte de olas en los ferrocarriles, pero esa misma
reserva era un indicio de la severidad con que se juzgaría nuestro acto.
Tras de mucho cavilar me presenté en la estación una hora antes de la
salida, ocupé mi asiento y, cuando nadie me veía, vacié el depósito de
agua para los pasajeros; luego, cuidadosamente, vertí en él a mi amiga.
El primer incidente surgió cuando los niños de un matrimonio vecino
declararon su ruidosa sed. Les salí al paso y les prometí refrescos y
limonadas. Estaban a punto de aceptar cuando se acercó otra sedienta.
Quise invitarla también, pero la mirada de su acompañante me detuvo.
La señora tomó un vasito de papel, se acerco al depósito y abrió la llave.
Apenas estaba a medio llenar el vaso cuando me interpuse de un salto
entre ella y mi amiga. La señora me miró con asombro. Mientras pedía
disculpas, uno de los niños volvió abrir el depósito. Lo cerré con
violencia.
La señora se llevó el vaso a los labios: -Ay el agua esta salada. El niño
le hizo eco. Varios pasajeros se levantaron. El marido llamo al
Conductor: -Este individuo echó sal al agua. El Conductor llamó al
Inspector: -¿Conque usted echó substancias en el agua? El Inspector
llamó al Policía en turno: -¿Conque usted echó veneno al agua? El
Policía en turno llamó al Capitán: – ¿Conque usted es el envenenador?
El Capitán llamó a tres agentes. Los agentes me llevaron a un vagón
solitario, entre las miradas y los cuchicheos de los pasajeros. En la
primera estación me bajaron y a empujones me arrastraron a la cárcel.
Durante días no se me habló, excepto durante los largos interrogatorios.
Cuando contaba mi caso nadie me creía, ni siquiera el carcelero, que
movía la cabeza, diciendo: “El asunto es grave, verdaderamente grave.
¿No había querido envenenar a unos niños?”. Una tarde me llevaron
ante el Procurador. -Su asunto es difícil -repitió-. Voy a consignarlo al
Juez Penal. Así pasó un año. Al fin me juzgaron. Como no hubo
víctimas, mi condena fue ligera. Al poco tiempo, llegó el día de la
libertad. El Jefe de la Prisión me llamo: -Bueno, ya está libre. Tuvo
suerte. Gracias a que no hubo desgracias. Pero que no se vuelva a
repetir, porque la próxima le costará caro… Y me miró con la misma
mirada seria con que todos me veían.

Octavio Paz

Dada la compleja situación en la que se encuentra el hombre en el


último párrafo se deduce que:
Seleccione una:
a. Existe una barrera comunicativa porque los personajes tienen
sistemas de valores diferentes.
b. El hombre tiene inhibiciones y tabúes que le impiden comunicarse
de forma clara y concisa.
c. El canal por medio del cual se comunican los diferentes personajes
no es el adecuado, se presentan interferencias.
d. Al hombre le faltó precisión al momento de comunicarse y los
diferentes receptores no prestaron la atención adecuada ni creyeron
en el mensaje.

Destino
Llegué al puente que muy pocos logran cruzar.
-¡Pasa! -exclamó el guardián, pero me reí y le dije:
-Hay tiempo.
Entonces él sonrió y cerró los portones.
Al puente que muy pocos logran cruzar llegaron jóvenes y viejos. A
todos ellos se les denegó la entrada. Yo estaba ahí cerca,
holgazaneando, y fui contándolos, uno a uno, hasta que, cansado ya
de sus ruidos y protestas, volví al puente que muy pocos logran
cruzar.
La muchedumbre cerca del portón chilló:
-¡Este hombre llega tarde!
Pero me reí y les dije:
-Hay tiempo.
-¡Pasa! -exclamó el guardián mientras yo ingresaba; luego sonrió y
cerró los portones.

Robert W. Chambers
El receptor del mensaje de la historia es:
Seleccione una:
a. El lector.
b. Los jóvenes.
c. El guardián.
d. El hombre.

¿Qué son las Pastillas Anticonceptivas y cómo actúan?


Las pastillas anticonceptivas son también conocidas como “la píldora,”
es un tipo de anticoncepción en forma de pequeñas tabletas que se
toma diariamente. La mayoría de las píldoras contienen dos tipos de
hormonas femeninas sintéticas, es decir elaboradas en un laboratorio
a semejanza de las secretadas normalmente por el ovario. Ellas son
estrógeno y progesterona y se llaman contraceptivos orales
combinados.
Hay diferentes tipos de anticonceptivos orales combinados. El
estrógeno y la progesterona previenen el embarazo, suprimiendo la
secreción de la glándula hipófisis, que detiene el desarrollo ovular y
retiene el óvulo en el ovario. Es decir, no se produce la ovulación. La
progesterona también ayuda a que el esperma no alcance al óvulo,
mediante un doble mecanismo: 1) alterando el moco cervical y 2)
modificando el endometrio del útero.
Un tipo de píldora contiene un solo tipo de hormona, la progesterona,
y es llamada “píldora progestínica” o “mini-píldora.” Inhibe la ovulación
y evita que el espermatozoide fertilice al óvulo.
¿Qué pastilla anticonceptiva puedo tomar?
Primeramente, quien está a cargo del cuidado de tu salud, necesita
encontrarse contigo para examinarte y hacerte algunas preguntas. Si
él o ella, decide que puedes tomar la pastilla anticonceptiva, deberá
elegir cuál es la que se adecua a tus necesidades. Hay diferentes
pastillas anticonceptivas, pues contienen distintas dosis de hormonas.
La píldora combinada es un poco más efectiva que la píldora
progestínica sola y tiene más beneficios médicos. Sin embargo,
algunas personas no toleran la píldora combinada y en esos casos es
necesario recurrir a la píldora progestínica sola.
Tomado de: https://youngwomenshealth.org/2006/03/23/pastillas-
anticonceptivas/

Si la información contenida en el texto aparece en un país


hispanohablante escrito en mandarín, se presentaría un problema de
comunicación en:
Seleccione una:
a. El receptor
b. El código
c. El canal
d. El emisor

Agonía sin fin: 12 años de la masacre de Bojayá (Fragmento)


La joven guerrillera clavó la culata del fusil en la arena húmeda de la
orilla del río Atrato, que bordea la población antioqueña de Vigía del
Fuerte, y lloró. Levantó el rostro al cielo y por sus mejillas bañadas en
sudor y barro corrieron las lágrimas. Fue un llanto silencioso pero
cuando vio a unos hombres, la mayoría heridos, algunos mutilados, que
alcanzaban a rastras la playa y suplicaban que no los mataran porque
ellos eran apenas pobladores, la joven combatiente se dejó caer de
rodillas y exclamó: “¡Dios mío!, ¿qué hemos hecho?”.
Dionisio Valencia, de 21 años, de piel color uva, de cuerpo macizo y de
dientes impecablemente blancos, apenas la escuchó. “La miré pero qué
me iban a dar ganas de consolarla, dijo. Lo único que yo quería era
respirar”. El muchacho también acababa de atravesar los 2.800 metros
de orilla a orilla que separan a Vigía del Fuerte de Bellavista, principal
punto urbano del selvático municipio de Bojayá, departamento del
Chocó.
Cruzó el río vadeando en una canoa sobre el mediodía de ese jueves 2
de mayo del 2002. “Usamos las manos. Huíamos agachados para
esquivar las balas. Algunas caían cerca como cuando se lanzan
piedritas al agua”. Huía de Bellavista, donde horas atrás, a las 10:15
minutos de la mañana, un cilindro de gas cargado con dinamita lanzado
por las FARC atravesó el cielo, rompió las tejas de Eternit de la capilla
San Pablo Apóstol de Bellavista y cayó en el altar, junto a la imagen de
Cristo. La iglesia, de 117 metros cuadrados, donde en ese momento se
refugiaban de las balas 300 personas de Bellavista y los sacerdotes
Janeiro Jiménez Atencio, Antonio Mena y Antún Ramos Cuesta, explotó
en mil pedazos.
Los cristales volaron. Las tejas cayeron convertidas en afilados
cuchillos y la madera de una de las 12 bancas salió disparada en
astillas. La joven Luz Nelly Mosquera, de 19 años, recuerda que sintió
un silencio profundo. “No sabía si yo también estaba muerta. No sentía
nada”. En realidad estaba sorda por la explosión. Desde la puerta del
templo, donde estaba, miró el camino construido en material, de dos
metros de ancho por 90 de largo, y empezó a caminar con lentitud hacia
el otro extremo, a la orilla del río Atrato. Creyó que nadie se había
salvado. Su madre, sus amigos, los niños, todos.

Tomado de: https://www.semana.com/nacion/articulo/masacre-de-


bojaya-12-anos-despues/385639-3

La intención comunicativa del texto es:


Seleccione una:
a. Explicar las razones que tuvo la guerrilla para realizar el ataque
b. Interpelar al lector para que actúe frente al conflicto y la violencia
c. Narrar y describir la masacre ocurrida en Bojayá desde diferentes
puntos de vista
d. Demostrar el dolor de las víctimas en el conflicto armado

Agonía sin fin: 12 años de la masacre de Bojayá (Fragmento)


La joven guerrillera clavó la culata del fusil en la arena húmeda de la
orilla del río Atrato, que bordea la población antioqueña de Vigía del
Fuerte, y lloró. Levantó el rostro al cielo y por sus mejillas bañadas en
sudor y barro corrieron las lágrimas. Fue un llanto silencioso pero
cuando vio a unos hombres, la mayoría heridos, algunos mutilados, que
alcanzaban a rastras la playa y suplicaban que no los mataran porque
ellos eran apenas pobladores, la joven combatiente se dejó caer de
rodillas y exclamó: “¡Dios mío!, ¿qué hemos hecho?”.
Dionisio Valencia, de 21 años, de piel color uva, de cuerpo macizo y de
dientes impecablemente blancos, apenas la escuchó. “La miré pero qué
me iban a dar ganas de consolarla, dijo. Lo único que yo quería era
respirar”. El muchacho también acababa de atravesar los 2.800 metros
de orilla a orilla que separan a Vigía del Fuerte de Bellavista, principal
punto urbano del selvático municipio de Bojayá, departamento del
Chocó.
Cruzó el río vadeando en una canoa sobre el mediodía de ese jueves 2
de mayo del 2002. “Usamos las manos. Huíamos agachados para
esquivar las balas. Algunas caían cerca como cuando se lanzan
piedritas al agua”. Huía de Bellavista, donde horas atrás, a las 10:15
minutos de la mañana, un cilindro de gas cargado con dinamita lanzado
por las FARC atravesó el cielo, rompió las tejas de Eternit de la capilla
San Pablo Apóstol de Bellavista y cayó en el altar, junto a la imagen de
Cristo. La iglesia, de 117 metros cuadrados, donde en ese momento se
refugiaban de las balas 300 personas de Bellavista y los sacerdotes
Janeiro Jiménez Atencio, Antonio Mena y Antún Ramos Cuesta, explotó
en mil pedazos.
Los cristales volaron. Las tejas cayeron convertidas en afilados
cuchillos y la madera de una de las 12 bancas salió disparada en
astillas. La joven Luz Nelly Mosquera, de 19 años, recuerda que sintió
un silencio profundo. “No sabía si yo también estaba muerta. No sentía
nada”. En realidad estaba sorda por la explosión. Desde la puerta del
templo, donde estaba, miró el camino construido en material, de dos
metros de ancho por 90 de largo, y empezó a caminar con lentitud hacia
el otro extremo, a la orilla del río Atrato. Creyó que nadie se había
salvado. Su madre, sus amigos, los niños, todos.

Tomado de: https://www.semana.com/nacion/articulo/masacre-de-


bojaya-12-anos-despues/385639-3

La función del lenguaje que no se hace presente en el texto es la:


Seleccione una:
a. Referencial
b. Emotiva
c. Metalingüística
d. Apelativa

Considerando:
–Que ante el frustrado nombramiento del doctor Alejandro Ordóñez
Maldonado como hijo putativo de Antioquia (nombramiento que, ante
presión mediática, fue reemplazado por ceremonia privada en el
restaurante Mondongo’s, e imposición de collar de arepas al
homenajeado, deglutidas en el acto por él mismo), es necesario
compensar el desaire con nuevo homenaje a otra figura pública
ejemplar; Que las canciones del bardo antioqueño Juan Luis Londoño
Arias, alias Maluma, son poesía urbana y muestra evidente de audacia
lírica y de calidad literaria, dignas de ser evidenciadas como ejemplo
ante la juventud antioqueña; Que al permear su obra con influencias
sajonas, a la manera de Borges, como en su celebrada canción Las
cuatro babies, el artista promueve el bilingüismo y la apertura hacia
nuevas culturas, factores fundamentales para hacer de Antioquia la más
educada, como fue el deseo de la administración anterior.

Qué tipología se vislumbra en el texto anterior:


Seleccione una:
a. Explicativo
b. Argumentativo
c. Narrativo
d. Expositivo

Corvina al ajillo
Si es necesario limpia la corvina, con ayuda de papel de cocina quita
el exceso de humedad del pescado y espolvorea ligeramente harina.
En una sartén agrega dos cucharadas de aceite y pon a calentar a fuego
medio, sella los filetes por ambos lados y retira los filetes. En la misma
sartén pon a saltear el ajo previamente rallado o finamente picado,
antes de que dore, agrega media taza de vino blanco, sazona con sal y
pimienta y revuelve.
Deja hervir y agrega los filetes, deja cocinar por unos minutos más para
que se mezclen los sabores. Si lo deseas puedes decorar con perejil o
cilantro.
Si quieres espesar la salsa agrega una cucharadita de harina, revuelve
bien y deja hervir.
Fuente: https://encolombia.com/vida-
estilo/alimentacion/recetas/pescado/corvina-al-ajillo/

La tipología textual del fragmento anterior permite determinar que la


intención del autor es:
Seleccione una:
a. Describir una receta culinaria.
b. Exponer la forma en que se prepara una receta.
c. Detallar los pormenores de preparar pescado.
d. Mostrar las ventajas de la corvina al ajillo.

Lea comprensivamente el siguiente texto de Simón Granja Matías:


Los niños y jóvenes se están convirtiendo en un ejemplo para los
adultos a la hora de leer. Puede que lo hagan en tabletas, computadores
o en el celular, pero cada vez consumen más literatura. Y aunque queda
un largo trayecto para alcanzar un nivel de lectura alto, las cifras
demuestran un avance significativo.
Según la última encuesta sobre consumo de lectura publicada por el
Dane, los niños de entre 5 y 11 años leen, en promedio, 3,2 libros al
año. Esa cifra contrasta con el promedio de lectura de los adultos,
quienes leen menos de dos libros anualmente. (En contraste, los
adultos en España leen, en promedio, 10,3 libros cada año y en Chile y
Argentina, 5.)
Según los resultados del área de lenguaje de las Pruebas Saber, los
estudiantes han mejorado sus competencias comunicativas en lectura
y escritura. Por ejemplo, en el grado tercero el promedio subió de 305
a 313 puntos; en el grado quinto, de 297 a 313 y en el grado noveno
pasó de 295 a 307 (todos en una escala de 100 a 500). Finalmente, los
estudiantes de grado once pasaron (en una escala de cero a 100) de
48 a 51 puntos entre 2015 y 2016.
“Nuestros estudiantes de preescolar, básica y media están
comprendiendo mejor lo que leen y desarrollando más habilidades para
la escritura”, aseguran expertos del Mineducación.
Para Consuelo Gaitán, directora de la Biblioteca Nacional, existe una
mala percepción sobre los jóvenes: se cree que no leen por el simple
hecho de no tener libros en las manos. Pero de lo que la gente no suele
percatarse es de que lo hacen en soportes distintos. “Los jóvenes no
solo usan las tabletas y los celulares para jugar o chatear, sino que se
unen a clubes de lectura y leen revistas especializadas –afirma Gaitán–
. Los temas y contenidos que consumen son muy distintos a los que
nosotros leíamos. Están las sagas, la literatura fantástica, las historias
de zombis y los cómics”.
Incluso existe la idea equivocada de que las redes sociales y las nuevas
tecnologías están alejando a los niños y a los jóvenes de la lectura. Pero
los ‘booktubers’ demuestran lo contrario al aprovechar plataformas
como YouTube para reseñar libros y hablar de la lectura.
Juana Silva, coordinadora de contenido juvenil e infantil de la Cámara
del Libro, explica que la diferencia entre un joven que lee y uno que no
lo hace es grande. “Aquel que se acerca a un libro porque le atrae
encuentra empatía, se ve a sí mismo reflejado en los personajes y
entiende distintas realidades. Le es más fácil comprender el mundo y
desarrolla habilidades sociales”, dice.
Y la directora de la Biblioteca Nacional añade: “La literatura amplía la
capacidad de interpretar el mundo, muestra diferentes perspectivas,
formas de vida y de pensar que no necesariamente conocemos,
culturas maravillosas. Además, despierta criterio para no tragar entero.
Son herramientas fundamentales para la ciudadanía”.
La evidencia muestra que la idea de que ‘los colombianos no leen’ se
puede estar revirtiendo. Pero ¿cuál es la importancia de hacer de la
lectura un hábito?
Según el ‘Estudio internacional de progreso de comprensión lectora’,
leer es fundamental en el proceso de aprendizaje de los niños. El
documento sostiene que los estudiantes lectores son exitosos
académicamente y no solo en lenguaje, sino también en matemáticas,
ciencias naturales y sociales, y demás áreas.
Además, explica que, sin importar su nivel socioeconómico, los niños
que nacen y crecen en hogares en los que se recrea la tradición oral a
través de canciones, cuentos y juegos de palabras, y donde se lee en
voz alta a los pequeños, tienen muchos beneficios.
“Son niños que se expresan mejor, viven el aprendizaje formal de la
lectura y la escritura con mayor facilidad y tienen más posibilidades de
convertirse en lectores autónomos y críticos”, añade el mismo estudio.

Según su estructura este texto podría ser considerado:


Seleccione una:
a. Una noticia
b. Un reportaje
c. Artículo de opinión
d. Un artículo

Lea atentamente el siguiente texto de Jean Jacques Rousseau:


Voy a hablar del hombre, y el asunto que examino me indica que voy a
hablar a los hombres; mas no se proponen cuestiones semejantes
cuando se teme honrar la verdad. Defenderé, pues, confiadamente la
causa de la humanidad ante los sabios que me invitan, y no quedaré
descontento de mí mismo si consigo ser digno de mi objeto y de mis
jueces.
Considero en la especie humana dos clases de desigualdades: una, que
yo llamo natural o física porque ha sido instituida por la naturaleza, y
que consiste en las diferencias de edad, de salud, de las fuerzas del
cuerpo y de las cualidades del espíritu o del alma; otra, que puede
llamarse desigualdad moral o política porque depende de una especie
de convención y porque ha sido establecida, o al menos autorizada, con
el consentimiento de los hombres. Esta consiste en los diferentes
privilegios de que algunos disfrutan en perjuicio de otros, como el ser
más ricos, más respetados, más poderosos, y hasta el hacerse
obedecer.
No puede preguntarse cuál es la fuente de la desigualdad natural
porque la respuesta se encontraría enunciada ya en la simple definición
de la palabra. Menos aún puede buscarse si no habría algún enlace
esencial entre una y otra desigualdad, pues esto equivaldría a preguntar
en otros términos si los que mandan son necesariamente mejores que
lo que obedecen, y si la fuerza del cuerpo o del espíritu, la sabiduría o
la virtud, se hallan siempre en los mismos individuos en proporción con
su poder o su riqueza; cuestión a propósito quizá para ser disentida
entre esclavos en presencia de sus amos, pero que no conviene a
hombres razonables y libres que buscan la verdad.
¿De qué se trata, pues, exactamente en este DISCURSO? De señalar
en el progreso de las cosas el momento en que, sucediendo el derecho
a la violencia, a naturaleza quedó sometida a la ley; de explicar por qué
encadenamiento de prodigios pudo el fuerte decidirse a servir al débil y
el pueblo a comprar un reposo quimérico al precio de una felicidad real.
Todos los filósofos que han examinado los fundamentos de la sociedad
han comprendido la necesidad de retrotraer la investigación al estado
de naturaleza, pero ninguno de ellos ha llegado hasta ahí. Unos no han
titubeado en suponer en el hombre en tal estado la noción de justo e
injusto, sin cuidarse de probar que pudiera haber existido esa noción, ni
aun que lo fuera útil. Otros han hablado del derecho natural que tiene
cada cual de conservar lo que le pertenece, sin explicar qué entendían
por pertenecer. Otros, atribuyendo primero al más fuerte la autoridad
sobre el más débil, han hecho nacer en seguida el gobierno, sin pensar
en el tiempo que debió transcurrir antes de que el sentido de las
palabras autoridad y gobierno pudiera existir entre los hombres. Todos,
en fin, hablando sin cesar de necesidad, de codicia, de opresión, de
deseo y de orgullo, han transferido al estado de naturaleza ideas
tomadas de la sociedad: hablaban del hombre salvaje, y describían al
hombre civil. No ha despuntado siquiera en el espíritu de la mayor parte
de nuestros filósofos la duda de que hubiera existido el estado natural,
cuando es evidente, por la lectura de los libros sagrados, que el primer
hombre, habiendo recibido directamente de Dios reglas y
entendimiento, no se hallaba por consiguiente en ese estado, y que,
concediéndose a las escrituras de Moisés la fe que les debe todo
filósofo cristiano, debe negarse que, aun antes del diluvio, se hayan
encontrado nunca los hombres en el puro estado natural, a menos que
no hubiesen recaído en él, paradoja muy difícil de defender y
completamente imposible de probar.

La oración principal del párrafo cinco es:


Seleccione una:
a. Todos los filósofos que han examinado los fundamentos de la
sociedad han comprendido la necesidad de retrotraer la investigación
al estado de naturaleza, pero ninguno de ellos ha llegado hasta ahí
b. Todos, en fin, hablando sin cesar de necesidad, de codicia, de
opresión, de deseo y de orgullo, han transferido al estado de
naturaleza ideas tomadas de la sociedad: hablaban del hombre
salvaje, y describían al hombre civil
c. Unos no han titubeado en suponer en el hombre en tal estado la
noción de justo e injusto, sin cuidarse de probar que pudiera haber
existido esa noción, ni aun que lo fuera útil
d. No ha despuntado siquiera en el espíritu de la mayor parte de
nuestros filósofos la duda de que hubiera existido el estado natural,
cuando es evidente, por la lectura de los libros sagrados, que el primer
hombre, habiendo recibido directamente de Dios reglas y
entendimiento

Lea atentamente el siguiente texto de Jean Jacques Rousseau:


Voy a hablar del hombre, y el asunto que examino me indica que voy a
hablar a los hombres; mas no se proponen cuestiones semejantes
cuando se teme honrar la verdad. Defenderé, pues, confiadamente la
causa de la humanidad ante los sabios que me invitan, y no quedaré
descontento de mí mismo si consigo ser digno de mi objeto y de mis
jueces.
Considero en la especie humana dos clases de desigualdades: una,
que yo llamo natural o física porque ha sido instituida por la
naturaleza, y que consiste en las diferencias de edad, de salud, de las
fuerzas del cuerpo y de las cualidades del espíritu o del alma; otra,
que puede llamarse desigualdad moral o política porque depende de
una especie de convención y porque ha sido establecida, o al menos
autorizada, con el consentimiento de los hombres. Esta consiste en los
diferentes privilegios de que algunos disfrutan en perjuicio de otros,
como el ser más ricos, más respetados, más poderosos, y hasta el
hacerse obedecer.
No puede preguntarse cuál es la fuente de la desigualdad natural
porque la respuesta se encontraría enunciada ya en la simple
definición de la palabra. Menos aún puede buscarse si no habría algún
enlace esencial entre una y otra desigualdad, pues esto equivaldría a
preguntar en otros términos si los que mandan son necesariamente
mejores que lo que obedecen, y si la fuerza del cuerpo o del espíritu,
la sabiduría o la virtud, se hallan siempre en los mismos individuos en
proporción con su poder o su riqueza; cuestión a propósito quizá para
ser disentida entre esclavos en presencia de sus amos, pero que no
conviene a hombres razonables y libres que buscan la verdad.
¿De qué se trata, pues, exactamente en este DISCURSO? De señalar
en el progreso de las cosas el momento en que, sucediendo el
derecho a la violencia, a naturaleza quedó sometida a la ley; de
explicar por qué encadenamiento de prodigios pudo el fuerte decidirse
a servir al débil y el pueblo a comprar un reposo quimérico al precio de
una felicidad real.
Todos los filósofos que han examinado los fundamentos de la
sociedad han comprendido la necesidad de retrotraer la investigación
al estado de naturaleza, pero ninguno de ellos ha llegado hasta ahí.
Unos no han titubeado en suponer en el hombre en tal estado la
noción de justo e injusto, sin cuidarse de probar que pudiera haber
existido esa noción, ni aun que lo fuera útil. Otros han hablado del
derecho natural que tiene cada cual de conservar lo que le pertenece,
sin explicar qué entendían por pertenecer. Otros, atribuyendo primero
al más fuerte la autoridad sobre el más débil, han hecho nacer en
seguida el gobierno, sin pensar en el tiempo que debió transcurrir
antes de que el sentido de las palabras autoridad y gobierno pudiera
existir entre los hombres. Todos, en fin, hablando sin cesar de
necesidad, de codicia, de opresión, de deseo y de orgullo, han
transferido al estado de naturaleza ideas tomadas de la sociedad:
hablaban del hombre salvaje, y describían al hombre civil. No ha
despuntado siquiera en el espíritu de la mayor parte de nuestros
filósofos la duda de que hubiera existido el estado natural, cuando es
evidente, por la lectura de los libros sagrados, que el primer hombre,
habiendo recibido directamente de Dios reglas y entendimiento, no se
hallaba por consiguiente en ese estado, y que, concediéndose a las
escrituras de Moisés la fe que les debe todo filósofo cristiano, debe
negarse que, aun antes del diluvio, se hayan encontrado nunca los
hombres en el puro estado natural, a menos que no hubiesen recaído
en él, paradoja muy difícil de defender y completamente imposible de
probar.

La oración principal del párrafo dos es:


Seleccione una:
a. Oración temática final
b. Oración temática inicial
c. Oración temática medial
d. Ninguna de las anteriores

“La muerte del caudillo” (fragmento)


El comandante Hugo Chávez Frías pertenecía a la robusta tradición de
los caudillos, que, aunquemás presente en América Latina que en otras
partes, no deja de asomar por doquier, aun en democracias avanzadas,
como Francia. Ella revela ese miedo a la libertad que es una herencia
del mundo primitivo, anterior a la democracia y al individuo, cuando el
hombre era masa todavía y prefería que un semidiós, al que cedía su
capacidad de iniciativa y su libre albedrío, tomara todas las decisiones
importantes sobre su vida. Cruce de superhombre y bufón, el caudillo
hace y deshace a su antojo, inspirado por Dios o por una ideología en
la que casi siempre se confunden el socialismo y el fascismo –dos
formas de estatismo y colectivismo– y se comunica directamente con
su pueblo, a través de la demagogia, la retórica y espectáculos
multitudinarios y pasionales de entraña mágico-religiosa.
Su popularidad suele ser enorme, irracional, pero también efímera, y el
balance de su gestión infaliblemente catastrófica. No hay que dejarse
impresionar demasiado por las muchedumbres llorosas que velan los
restos de Hugo Chávez; son las mismas que se estremecían de dolor y
desamparo por la muerte de Perón, de Franco, de Stalin, de Trujillo, y
las que mañana acompañarán al sepulcro a Fidel Castro. Los caudillos
no dejan herederos y lo que ocurrirá a partir de ahora en Venezuela es
totalmente incierto. Nadie, entre la gente de su entorno, y desde luego
en ningún caso Nicolás Maduro, el discreto apparatchik al que designó
su sucesor, está en condiciones de aglutinar y mantener unida a esa
coalición de facciones, individuos e intereses encontrados que
representan el chavismo, ni de mantener el entusiasmo y la fe que el
difunto comandante despertaba con su torrencial energía entre las
masas de Venezuela.
Pero una cosa sí es segura: ese híbrido ideológico que Hugo Chávez
maquinó, llamado la revolución bolivariana o el socialismo del siglo XXI,
comenzó ya a descomponerse y desaparecerá más pronto o más tarde,
derrotado por la realidad concreta, la de una Venezuela, el país
potencialmente más rico del mundo, al que las políticas del caudillo
dejan empobrecido, fracturado y enconado, con la inflación, la
criminalidad y la corrupción más altas del continente, un déficit fiscal
que araña el 18 % del PIB y las instituciones –las empresas públicas, la
justicia, la prensa, el poder electoral, las fuerzas armadas–
semidestruidas por el autoritarismo, la intimidación y la obsecuencia.
La muerte de Chávez, además, pone un signo de interrogación sobre
esa política de intervencionismo en el resto del continente
latinoamericano al que, en un sueño megalómano característico de los
caudillos, el comandante difunto se proponía volver socialista y
bolivariano a golpes de chequera. ¿Seguirá ese fantástico dispendio de
los petrodólares venezolanos que han hecho sobrevivir a Cuba con los
cien mil barriles diarios que Chávez poco menos que regalaba a su
mentor e ídolo Fidel Castro? ¿Y los subsidios y/o compras de deuda a
19 países, incluidos sus vasallos ideológicos como el boliviano Evo
Morales, el nicaragüense Daniel Ortega, a las FARC colombianas y a
los innumerables partidos, grupos y grupúsculos que a lo largo y ancho
de América Latina pugnan por imponer la revolución marxista? El
pueblo venezolano parecía aceptar este fantástico despilfarro
contagiado por el optimismo de su caudillo; pero dudo de que ni el más
fanático de los chavistas crea ahora que Nicolás Maduro pueda llegar a
ser el próximo Simón Bolívar. Ese sueño y sus subproductos, como la
Alianza Bolivariana para los Pueblos de Nuestra América (ALBA), que
integran Bolivia, Cuba, Ecuador, Dominica, Nicaragua, San Vicente y
las Granadinas y Antigua y Barbuda, bajo la dirección de Venezuela,
son ya cadáveres insepultos.
Vargas Llosa, M. (2013). “La muerte del caudillo” (fragmento). El País.
Recuperado
de https://elpais.com/elpais/2013/03/08/opinion/1362743193_691007.h
tml

En el párrafo 1 (uno) el conector aun puede reemplazarse sin alterar


la intención comunicativa por:
Seleccione una:
a. Todavía
b. También
c. No obstante
d. Incluso

Completa:
Nosotros llegaremos a las instituciones educativas con un taller muy
práctico, donde les vamos a enseñar que es un conflicto, _______ el
hombre naturalmente llega en debate y en conflicto, ___ _____la
naturaleza del ser humano es enfrentar emociones,________ nosotros
les mostramos cómo podemos llevar con objetividad las mismas para
ayudar a resolver los conflictos en las instituciones educativas. Es
necesario entender que los conflictos no solo se dan entre pares, entre
estudiantes, sino _______ hay conflictos entre padres de familia,
profesores ______ es ahí donde nosotros empezamos a crear un
diagnóstico para poder ayudar a la comunidad educativa, para
empoderar a los chicos de grados octavo a décimo y puedan generar
un cambio positivo en su convivencia.
Seleccione una:
a. Porque, pues, pero, también, y
b. Sin embargo, en definitiva, no obstante, pero, también
c. Aunque, además, sin embargo, que, pero
d. Asimismo, porque, por el contrario, también, además

Al son de la tierra: músicas tradicionales de Colombia (Fragmento)

(I) Las músicas tradicionales en Colombia son tantas, tan variados sus
ritmos, tan diferentes sus instrumentos, tan diversas las formas de
interpretarlos y tan dispares las miradas de sus intérpretes, que es
evidente la ausencia de reglas que puedan establecerse, o trazar
líneas fijas que las definan histórica y territorialmente en sus
componentes musicales más íntimos.
(II) Pero ¿cuál es verdaderamente la longitud adecuada? Habría que
embalsamar los brazos de esos hombres y mostrarlos cuando surgiera
la ocasión. No hay un estándar, una medida oficial, un metraje único.
Esa es tal vez la mayor virtud de las músicas tradicionales en
Colombia y al mismo tiempo un gran reto: no hay dos gaitas iguales en
el Atlántico, así como no hay dos marimbas de chonta iguales en el
Pacífico sur, ni dos golpes de tambor que se repitan exactos aunque
produzcan el mismo sonido, o dos abozaos idénticos en el Chocó.
Virtud porque expresa una fecunda diversidad creativa y una riqueza
inconcebible en las formas de interpretar esos instrumentos, en los
sonidos que producen y en el color de la fiesta o el acontecimiento que
con ellos se acompaña. Reto porque implica generar conceptos y
métodos específicos y porque resulta arduo delimitar los géneros, los
toques o los instrumentos y sistematizarlos, o encontrar matrices y
bases que permitan definir lo que es un vallenato sin despertar el
descontento de alguien que considera que es otra cosa muy distinta.
O establecer sin lugar a discusiones lo que es el abozao chocoano en
Quibdó cuando en Nuquí le cambian alguna nota.
(III) Cuando se le pregunta a un fabricante de gaitas, o a un músico
gaitero de la costa norte colombiana, cuál es el tamaño adecuado para
la caña de una gaita, es normal que estire uno de sus brazos y señale
desde el hombro hasta la punta de sus dedos la longitud ideal. Su
respuesta es nítida y no admite controversia, la longitud es esa que
muestra, no otra, pero al preguntársele a otro músico éste no señalará
el brazo de su compañero, sino el suyo. Todos los fabricantes de
gaitas e intérpretes de este instrumento que habitan las sabanas del
norte del país podrían desfilar señalando sus brazos desde el hombro
hasta la punta de sus dedos, siempre ofreciendo la misma respuesta:
el largo ideal de la caña es el de sus brazos.

Tomado de:
http://www.mincultura.gov.co/SiteAssets/documentos/migracion/DocNe
wsNo822DocumentNo1048.PDF

De acuerdo a la respuesta anterior se puede afirmar que el párrafo de


introducción parte de:

Seleccione una:
a. Una anécdota
b. Un concepto
c. Una pregunta
d. Una cita

Poesía y poema (Fragmento)

La poesía es conocimiento, salvación, poder, abandono. Operación


capaz de cambiar al mundo, la actividad poética es revolucionaria por
naturaleza; ejercicio espiritual, es un método de liberación interior. La
poesía revela este mundo; crea otro. Pan de los elegidos; alimento
maldito. Aisla; une. Invitación al viaje; regreso a la tierra natal.
Inspiración, respiración, ejercicio muscular. Plegaria al vacío, diálogo
con la ausencia: el tedio, la angustia y la desesperación la alimentan.
Oración, letanía, epifanía, presencia. Exorcismo, conjuro, magia.
Sublimación, compensación, condensación del inconsciente. Expresión
histórica de razas, naciones, clases. Niega a la historia: en su seno se
resuelven todos los conflictos objetivos y el hombre adquiere al fin
conciencia de ser algo más que tránsito. Experiencia, sentimiento,
emoción, intuición, pensamiento no dirigido. Hija del azar; fruto del
cálculo. Arte de hablar en una forma superior; lenguaje primitivo.
Obediencia a las reglas; creación de otras. Imitación de los antiguos,
copia de lo real, copia de una copia de la idea. Locura, éxtasis, logos.
Regreso a la infancia, coito, nostalgia del paraíso, del infierno, del limbo.
Juego, trabajo, actividad ascética. Confesión. Experiencia innata.
Visión, música, símbolo. Analogía: el poema es un caracol en donde
resuena la música del mundo y metros y rimas no son sino
correspondencias, ecos, de la armonía universal. Enseñanza, moral,
ejemplo, revelación, danza, diálogo, monólogo. Voz del pueblo, lengua
de los escogidos, palabra del solitario. Pura e impura, sagrada y maldita,
popular y minoritaria, colectiva y personal, desnuda y vestida, hablada,
pintada, escrita, ostenta todos los rostros pero hay quien afirma que no
posee ninguno: el poema es una careta que oculta el vacío, ¡prueba
hermosa de la superflua grandeza de toda obra humana!
¿Cómo no reconocer en cada una de estas fórmulas al poeta que la
justifica y que al encarnarla le da vida? Expresiones de algo vivido y
padecido, no tenemos más remedio que adherirnos a ellas —
condenados a abandonar la primera por la segunda y a ésta por la
siguiente. Su misma autenticidad muestra que la experiencia que
justifica a cada uno de estos conceptos, los trasciende. Habrá, pues,
que interrogar a los testimonios directos de la experiencia poética. La
unidad de la poesía no puede ser asida sino a través del trato desnudo
con el poema.
Al preguntarle al poema por el ser de la poesía, ¿no confundimos
arbitrariamente poesía y poema? Ya Aristóteles decía que «nada hay
de común, excepto la métrica, entre Homero y Empédocles; y por esto
con justicia se llama poeta al primero y fisiólogo al segundo». Y así es:
no todo poema —o para ser exactos: no toda obra construida bajo las
leyes del metro— contiene poesía. Pero esas obras métricas ¿Son
verdaderos poemas o artefactos artísticos, didácticos o retóricos? Un
soneto no es un poema, sino una forma literaria, excepto cuando ese
mecanismo retórico —estrofas, metros y rimas— ha sido tocado por la
poesía. Hay máquinas de rimar pero no de poetizar. Por otra parte, hay
poesía sin poemas; paisajes, personas y hechos suelen ser poéticos:
son poesía sin ser poemas. Pues bien, cuando la poesía se da como
una condensación del azar o es una cristalización de poderes y
circunstancias ajenos a la voluntad creadora del poeta, nos
enfrentamos a lo poético. Cuando —pasivo o activo, despierto o
sonámbulo— el poeta es el hilo conductor y transformador de la
corriente poética, estamos en presencia de algo radicalmente distinto:
una obra. Un poema es una obra. La poesía se polariza, se congrega y
aisla en un producto humano: cuadro, canción, tragedia. Lo poético es
poesía en estado amorfo; el poema es creación, poesía erguida. Sólo
en el poema la poesía se aisla y revela plenamente. Es lícito preguntar
al poema por el ser de la poesía si deja de concebirse a éste como una
forma capaz de llenarse con cualquier contenido. El poema no es una
forma literaria sino el lugar de encuentro entre la poesía y el hombre.
Poema es un organismo verbal que contiene, suscita o emite poesía.
Forma y substancia son lo mismo.
Apenas desviamos los ojos de lo poético para fijarlos en el poema, nos
asombra la multitud de formas que asume ese ser que pensábamos
único. ¿Cómo asir la poesía si cada poema se ostenta como algo
diferente e irreducible? La ciencia de la literatura pretende reducir a
géneros la vertiginosa pluralidad del poema. Por su misma naturaleza,
el intento padece una doble insuficiencia» Si reducimos la poesía a unas
cuantas formas — épicas, líricas, dramáticas—, ¿qué haremos con las
novelas, los poemas en prosa y esos libros extraños que se llaman
Aurelia, Los cantos de Maldoror o Nadja? Si aceptamos todas las
excepciones y las formas intermedias —decadentes, salvajes o
proféticas— la clasificación se convierte en un catálogo infinito. Todas
las actividades verbales» para no abandonar el ámbito del lenguaje, son
susceptibles de cambiar de signo y transformarse en poema: desde la
interjección hasta el discurso lógico. No es ésta la única limitación, ni la
más grave, de las clasificaciones de la retórica. Clasificar no es
entender. Y menos aún comprender. Como todas las clasificaciones,
las nomenclaturas son útiles de trabajo. Pero son instrumentos que
resultan inservibles en cuanto se les quiere emplear para tareas más
sutiles que la mera ordenación externa. Gran parte de la crítica no
consiste sino en esta ingenua y abusiva aplicación de las nomenclaturas
tradicionales.
Un reproche parecido debe hacerse a las otras disciplinas que utiliza la
crítica, desde la estilística hasta el psicoanálisis. La primera pretende
decirnos qué es un poema por el estudio de los hábitos verbales del
poeta. El segundo, por la interpretación de sus símbolos. El método
estilístico puede aplicarse lo mismo a Mallarmé que a una colección de
versos de almanaque. Otro tanto sucede con las interpretaciones de los
psicólogos, las biografías y demás estudios con que se intenta, y a
veces se alcanza, explicarnos el porqué, el cómo y el para qué se
escribió un poema. La retórica, la estilística, la sociología, la psicología
y el resto de las disciplinas literarias son imprescindibles si queremos
estudiar una obra, pero nada pueden decirnos acerca de su naturaleza
última.

Octavio Paz

Se puede afirmar que en el primer párrafo:


Seleccione una:
a. El autor utiliza un párrafo de introducción, para destacar la
importancia del tema que se va a tratar y hace uso de la analogía para
comparar la poesía con otros elementos o situaciones semejantes
b. El autor usa un párrafo de contenido, en el cual introduce diferentes
ejemplos para referirse al tema central que es la poesía
c. El autor usa un párrafo de introducción porque intenta atraer la
atención del lector utilizando diferentes recursos como la comparación,
el contraste, la ejemplificación y la analogía para definir ese concepto
tan amplio que es la poesía
d. El autor usa un párrafo de contenido con orden cronológico para
señalar la evolución y los cambios que ha sufrido el concepto de
poesía en el trascurso de la historia
De acuerdo con los datos presentados es posible afirmar que la
intención de la infografía es:
Seleccione una:
a. Denunciar
b. Convencer
c. Informar
d. Divulgar

De acuerdo con la información que brinda la infografía se puede


deducir que una mujer corre más riesgos en:
Seleccione una:
a. Su lugar de estudio
b. En exteriores
c. Su lugar de trabajo
d. Su casa

Cuál de las siguientes afirmaciones es incorrecta, según la situación


que describe la imagen
Seleccione una:
a. Se nota que los dos personajes tratan de entenderse
b. Entre los dos personajes de la imagen hay un diálogo amistoso.
c. La posición de las manos del personaje de la derecha indica que
trata de explicar algo
d. El personaje de la izquierda está ignorando completamente a su
interlocutor

La forma de comunicación empleada en la imagen es:


Seleccione una:
a. Paraverbal
b. Verbal
c. No verbal
d. Verbal y no verbal
Observa atentamente la siguiente imagen.

El término que abarcaría la idea de la imagen es:


Seleccione una:
a. Fusilamiento
b. Muerte
c. Aprovechamiento
d. Opresión
La figura literaria que se puede apreciar en la imagen es una:
Seleccione una:
a. Hipérbole
b. Personificación
c. Hipérbaton
d. Metáfora

Das könnte Ihnen auch gefallen