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Filosofía de la Ciencia

José David Mora Gonzalez

El papel de la filosofía en el
conocimiento científico
Introducción

Sin antes mencionar que con temor inicio dicho escrito, pero entusiasmado de pensar algo
nuevo, es de mi agrado y de tal inquietud tratar un tema de tal envergadura, que a mi
entendimiento no es muy asequible, lo cual me propongo descubrir y mencionar aquí,
advirtiendo que mi prosa de suyo transgresora y escueta; sin embargo aunque el tema de la
ciencia no es muy a fin a mis inclinaciones, espero reflexionar acerca del avance científico
desde una postura filosófica, es decir, cual es el papel de la filosofía en el avance científico
o si es lo mismo avance que desarrollo en la conjetura de la dependencia entre teorías; pues
al respecto se creerá que pudiere centrar dicho escrito en un análisis epistemológico o
gnoseológico, pero lo cierto es que no quiero escrutar en ello, sino en la discusión en torno
al avance del conocimiento científico, y con ello responder a mi inquietud, ¿Cuál es el
papel de la filosofía en ese avance?.

La cuestión me ocuparía en primera estancia sobre el concepto de avance y su deferencia


con desarrollo, y como se concatena con el conocimiento científico, así discurrir en el
avance en el conocimiento científico, para después supuesto dicha simpatía, estar en
conformidad con el argumento de no-dogmatizaciòn de la ciencia, y conforme a esto dar
cuenta de la refutabilidad entre teorías sin prescindir ni una de la otra sino su
complementación y en esa tenor plantear el problema que se suponía inquietud sobre el
papel de la filosofía en dicha dinámica.

El desarrollo en el conocimiento científico

La creación de conocimiento científico siempre se ha caracterizado por la misma capacidad


de asombro del mundo y su explicación racional y metódica, además por el espíritu crítico
y no dogmático de los científicos; sin embargo, esa es la cuestión si la filosofía ha dejado
de estar presente en dicho desarrollo o progreso –esto me ocupara más adelante-, pero será
lo mismo avance que desarrollo; a mi parecer, fija un conjunto de sinónimos, pues quizá
simplemente la conceptualización de avance, progreso o desarrollo no es muy importante
sino como es que el conocimiento científico está en una constante renovación y
actualización.
Es de inquietud saber porque en el avance científico se ha prescindido de la filosofía o será
que con la modernidad y la ilustración se desprendieron y dejaron de depender una de otra,
sabiendo que en la antigüedad no se podía concebir una sin la otra, por lo que con el
nacimiento de la necesidad de que cada disciplina contenga su propia metodología y con
ello la división de ciencias en disciplinas (ciencias sociales, ciencias humanas, ciencias,
naturales, y las matemáticas).

Cuando mencioné que la creación de conocimiento científico radica generalmente de la


capacidad de asombro por el mundo, la realidad y la naturaleza, y su explicación racional y
metodológica, será que nunca ha habido tal efervescencia por concebir a la filosofía ajena a
la ciencia, sino que la misma lógica científica y el mismo que hacer científico, o más bien
del ser científico –entiéndase en un plano gnoseológico-, el mismo desarrollo científico es
una actividad filosófica, no en el sentido práctico,, en vista a poner a la filosofía en un
laboratorio para observar su partículas o composiciones químicas, sino desde la misma
reflexión para el desarrollo científico.

Se ha visto que muchos científicos primero fueron filósofos y ya que el ser filosofo no es
una simple chaqueta la cual al termino del invierno se quita para ponerse la otra prenda a
fin a la primavera, más bien es una forma de concebir el mundo, la realidad y la naturaleza,
más bien es una capacidad casi inmersa como la capacidad de hablar, es decir, el que es
filósofo, piensa y vive como filosofo no puede quitarse esa careta; ya es de suponerse que
el científico en un principio era filosofo como lo fue en su momento Bacon, Hume, Locke,
Descartes, Galileo, etc., de tal modo que dese este punto podríamos no concebir a la ciencia
sin filosofía como el mismo Kant lo señalaba.

Pero quizá la cuestión no se centre aquí sino en cómo y cuál es el papel de la filosofía
propiamente en la ciencia, a saber, de la actividad científica en miras a un desarrollo, quizá
se complete la actividad científica en el descubrimiento de un nuevo método como Russell
lo señala en torno al “Conflicto entre el espíritu de inducción y el espíritu de deducción” 1;
es posible que de tal manera se realice ese desarrollo, una lucha entre lo que ya está y lo
que está por hacer, como Russell lo menciona, aquel conflicto que quizá genere
conocimiento o una nueva forma de ver la realidad, el mundo o la naturaleza, una nueva

1 RUSSELL, Bertrand (1982). La perspectiva científica, México, Ariel. p. 28


concepción o si no nueva una mejor forma de interpretación como diría Nietzsche. Pero he
aquí el punto de discusión cuál es ese paso para el desarrollo científico, o más bien como se
es que se genera una nueva o mejor explicación de la realidad.

E paso de una teoría a otra me daría la impresión que podría ser propiamente una actividad
filosófica, pues como dijera el mismo Russell “Lo que se hace no es arrojar lo anterior,
sino reemplazarlo por algo ligeramente más exacto” 2; esa actividad que pareciera soberbia
en tanto que se pensara que entre teorías se desechan por inservibles que fueran, no es
posible aquí, sino que se complementan, o como lo señala Thomas Kuhn hablando sobre el
ser de la estructura de las revoluciones científicas,

El desarrollo científico se convierte así en el proceso gradual mediante la cual esos


elementos se han sumado, uno a uno y en combinación, al acervo siempre creciente que
constituye la técnica y el conocimiento científicos.3

Desde una lógica aristotélica en conformidad con la abstracción y la simpatía a la


experimentación, sobre todo en su pequeña reseña histórica en el libro I de la Metafísica, y
en conformidad con el libro de los Analíticos, no es que deseche toda una historia antes de
él, sino que le da una nueva perspectiva, señalando la deducción como principal
herramienta a lo que la inducción contenida en la abstracción, descubriendo una mejor
forma de explicar la realidad de forma racional y metódica. Es como se nos va mostrando
que en la misma actividad científica del paso de una teoría a otra se halla inmerso el
cuestionamiento filosófico, pues sin aquel espíritu crítico ni aquella capacidad de asombro
no habría avance científico. O que también analógicamente con Lakatos en una
reconstrucción racional de la historia de la ciencia en ese perfil de no desentender y
menospreciar a las demás teorías.

Se supondrá y de manera comprensible, que cuando se habla de desarrollo del


conocimiento científico, se piense en una serie de acumulación aglutinante, en el que solo
se llenen libros o enciclopedias para la consulta de alguna investigación, o se estampe en la
internet y poder consultar desinteresada cualquier dato por muy laxo que sea; pero la
realidad es que llena de tristeza que la ciencia se considere de tal modo, ya que se ha
2 Ibídem. p. 55
3 Thomas S. Kuhn, La estructura de las revoluciones científicas, traducción de Carlos Solís Santos, FCE,
México. p. 102
destronado el papel mismo de la filosofía lo cual me parece algo aberrante además quita el
verdadero sentido e importancia de la ciencia, arrebata el gozo y placer del conocer el
mundo, la naturaleza y la realidad, y solo se revisa como mero dato cuántico sin mayor
repercusión en la existencia; es por ello que como señala Kuhn, “Quizá la ciencia no se
desarrolle mediante a acumulación de descubrimientos e invenciones individuales” 4, pues
ya lo señalaba Larry Laudan, que la ciencia es un dialogo con la naturaleza. No es un
aglutinamiento en la historia de la ciencia, un basurero de teorías, sino que es un cambio de
paradigma o más preciso “Todas ellas exigieron el rechazo por parte de la comunidad de
una teoría científica en su día reverenciada en favor de otra incompatible con ella” 5; entre
las teorías no se desechan sino que se complementan.

Esa tarea en el conocimiento científico la llama a una recuperación del conocimiento


precedente, lo afirma de tal modo Karl Popper, en su pretensión de hacer una especie de
síntesis en el análisis entre teorías y su filtro respecto a la psudociencia, en una síntesis la
cual denomina con testabilidad, “El criterio para establecer el estatus científico de una
teoría es su refutabilidad o su testabilidad”6; es interesante esta parte de la que habla Popper
para escudriñar en el papel de la filosofía, pues si bien se sabe que con los griegos el paso
del mito al logos, sobreviene de una referencia cítrica, es así en la ciencia, pues bien lo
expresa Popper:

“Pues la actitud crítica no se opone a la actitud dogmática (…) una actitud crítica
necesita como materia primera, por decir así teorías o creencias defendidas más o menos
dogmáticamente” 7,

De tal importancia que es como esa misma actitud para mejoras en el conocimiento
científico, no es más que actividad y reflexión filosófica.

En conclusión, quiero hacer mención que es simplemente una reflexión de suyo


transgresora, empero puede ser de tal envergadura dicho tema para una mejor investigación
por lo que la premura me inclina a dar por finalizado dicho escrito.

4 Ibíd. p. 103
5 Ibíd. p. 108
6 POPPER, Karl (1991). Conjeturas y refutaciones, Barcelona, Paidós p.61
7 Ibídem. p.77

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