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Efectividad de los medios preventivos para encauzar la disciplina en el

Departamento de Policía de Santander. Estudio año 2015

Dario Fernando Rojas Zambrano

Universidad Cooperativa de Colombia

Facultad de Derecho

Bucaramanga, enero 2017


Efectividad de los medios preventivos para encauzar la disciplina en el
Departamento de Policía de Santander. Estudio año 2015

Dario Fernando Rojas Zambrano

Trabajo de grado para optar el título de Abogado.

Asesores

Jhon Edward Jaimes Suárez

Mario Humberto Rodríguez Sepúlveda

Universidad Cooperativa de Colombia

Facultad de Derecho

Bucaramanga, enero 2017


HOJA DE APROBACIÓN DE MONOGRAFÍA

Jurado evaluador
_______________________________________________________________________
_______________________________________________________________________
_______________________________________________________________________

Jurado evaluador
_______________________________________________________________________
_______________________________________________________________________
_______________________________________________________________________

Bucaramanga, enero 2017


Dedicatoria

A mis seres queridos sinónimo de unión y fortaleza, quienes con su interminable e


incondicional apoyo han sido nuestro motor constante para culminar con éxito un peldaño
más de nuestra carrera profesional.

Agradecimientos

Más que un requisito académico, esta monografía es la culminación de un proceso que


a lo largo de cinco años nos permitió crecer personal, espiritual e intelectualmente.
Agradezco a Dios por acompañarnos en cada paso que damos, por su infinita
misericordia, por fortalecer nuestro corazón e iluminar nuestras mentes y por habernos
permitido llevar a cabo un proceso de formación de la mano de todos aquellos que han
sido nuestro soporte y compañía durante todo el proceso académico.
Nuestro más sincero agradecimiento a la Universidad Cooperativa de Colombia, a
través de sus directivas y la Decana de la Facultad de Derecho, Marien Yolanda Correa.
A nuestros asesores Mario Humberto Rodríguez Sepúlveda y Jhon Edward Jaimes
Suárez, por su incansable apoyo, dirección y colaboración brindadas durante todo el
trabajo de grado.
A la Policía Nacional, Inspección General de la Policía Nacional y al Departamento de
Policía de Santander. Al Mayor Camilo Ernesto Rodriguez Sepúlveda, Jefe Oficina
Control Disciplinario Interno, un especial agradecimiento por permitirme trabajar con él
en el proceso inicial de construcción de este trabajo y orientarme sobre la doctrina policial,
además de facilitar el acceso a información. Y a todas aquellas personas sin las cuales,
este trabajo no habría sido posible.
Tabla de contenido

Introducción ................................................................................................................... 1

Justificación ................................................................................................................... 2

Pregunta de investigación .............................................................................................. 3

Objetivos ....................................................................................................................... 3

Metodología................................................................................................................... 3

1 El régimen disciplinario en la Policía Nacional de Colombia...................................... 5

1.1 Contexto jurídico general ................................................................................... 7

1.2 Revisión de la jurisprudencia constitucional ...................................................... 8

1.3 La jerarquía dentro del régimen especial disciplinario..................................... 12

1.4 La disciplina en el régimen especial disciplinario ............................................ 15

1.5 Los medios preventivos dentro del régimen disciplinario especial .................. 17

1.6 El régimen disciplinario policial en el derecho comparado. ............................ 22

1.6.1 El régimen disciplinario en la Guardia Civil Española. ............................ 23

1.6.2 El régimen disciplinario de la Policía Federal Argentina. ........................ 26

2 Análisis de la implementación de medios preventivos para encauzar la disciplina en el


Departamento de Policía de Santander durante el año 2015 ...................................... 31

2.1 Ficha técnica ..................................................................................................... 31

2.2 Descripción y análisis de resultados ................................................................. 31

3 Anexos ........................................................................................................................ 44

3.1 Encuesta aplicada a uniformados destinatarios de la medida preventiva ......... 44

3.2 Encuesta aplicada a comandantes de estación responsables de aplicar la medida


preventiva ............................................................................................................... 45

Referencias .................................................................................................................. 46
Índice de ilustraciones

Ilustración 1. Medios preventivos disciplinarios. ........................................................... 19

Ilustración 2. Personal amonestado con medidas preventivas. ....................................... 32

Ilustración 3. Medios preventivos para encauzar la disciplina en el Departamento de


Policía de Santander, año 2015. ...................................................................................... 34

Ilustración 4. Resultados causas que originaron infracciones al Art. 27 Ley 1015 de 2.006
en el Departamento de Policía de Santander, año 2015. ................................................. 35

Ilustración 5. Resultados reincidencia de los sancionados a través de la aplicación de los


medios preventivos en la Policía de Santander, año 2016. ............................................. 36

Ilustración 6. Percepción del impacto de la medida preventiva en el Departamento de


Policía de Santander, año 2015. ...................................................................................... 37

Ilustración 7. Resultados: Razones por las que se considera un impacto positivo generado
por la sanción en el personal sancionado en el Departamento de Policía de Santander, año
2015. ................................................................................................................................ 37

Ilustración 8. Reporte formal de la conducta reprochable por parte de los comandantes de


las estaciones de policía en el Departamento de Policía de Santander, año 2015. ........ 38

Ilustración 9. Percepción de los comandantes de las estaciones de policía en el


Departamento de Policía de Santander respecto a la efectividad de los medios preventivos
para encauzar la disciplina. ............................................................................................. 39

Ilustración 10. Resultados: Efectividad de los medios para encauzar la disciplina en el


Departamento de Policía de Santander, año 2015. .......................................................... 40
Índice de tablas

Tabla 1. Régimen disciplinario de la Policía Nacional. .................................................... 7

Tabla 2. Cuadro comparativo régimen disciplinario. ...................................................... 28

Tabla 3. Cuadro comparativo: Sanción vs tipo de falta. ................................................. 29

Tabla 4. Medios preventivos aplicados en la Policía de Santander, año 2015................ 34


Resumen

En el presente trabajo de grado se aborda el análisis de los medios preventivos para


encauzar la disciplina contenidos en el régimen disciplinario especial de la Policía
Nacional y se busca determinar la efectividad de estas medidas en el Departamento de
Policía de Santander.
Para dar cumplimiento a este objetivo se planteó una investigación con un diseño mixto
– cualitativa y cuantitativa – a través de la técnica de recolección y análisis de
información. Para tal efecto se tuvieron como referentes las quejas allegadas a la oficina
de control interno disciplinario del Departamento de Policía de Santander.

Palabras clave:
Régimen disciplinario, Policía Nacional, disciplina, medios preventivos, ejercicio del
mando.

Abstract

In this paper grade preventive analysis methodology to guide the discipline


contained in the special disciplinary regime of the National Police and seeks to determine
whether its application has been effective or not in the Police Department of Santander.
To fulfill this objective research with a qualitative and quantitative mixed design
through technical collection and analysis of information was raised. For this purpose were
as close friends concerning the complaints to the disciplinary office of internal control of
the Police Department of Santander.

Keywords:
Disciplinary regime, National Police, discipline, preventive means, exercise of
command.
1

Introducción
La Ley 1015 de 2006 contiene el régimen disciplinario especial aplicable a los
miembros de la Policía Nacional, dentro del cual se establecieron los medios o
herramientas que permiten encauzar la disciplina, que de conformidad con lo dispuesto
por el Art. 27 de la norma en cita, son de dos clases: unos preventivos y otros de carácter
correctivo. Los primeros, hacen referencia al ejercicio del mando con el fin de orientar y
mantener el buen comportamiento y disciplina de los subalternos a través de medidas
como lo son los llamados de atención verbal; los segundos, se refieren de manera concreta
a la aplicación formal del procedimiento disciplinario en casos de ocurrencia de falta
disciplinaria definida como tal en la Ley 1015 de 2006.
El tema central de este estudio es establecer si los medios de carácter preventivo
contenidos en la norma fueron objeto de cumplimiento en el Departamento de Policía de
Santander y si la finalidad con que fueron previstas en la norma se está cumpliendo o no
para el período comprendido entre 01 de enero y el 31 de diciembre del 2015. En este
punto se hace énfasis en que se tomó esta fracción de tiempo, pues por tratarse de
información reservada que puede comprometer temas de seguridad, la autorización de
acceso a la misma fue otorgada bajo ciertas condiciones.
Para el desarrollo del trabajo se tomó como punto de partida los parámetros normativos
y jurisprudenciales referentes al régimen disciplinario cuyos destinatarios son los
miembros de la Policía Nacional colombiana; acto seguido se identificó, a través de un
análisis cuantitativo, si los medios preventivos para encauzar la disciplina han sido o no
efectivos en su aplicación en el Departamento de Policía de Santander durante el año
2015. Para ello se acudió a la fuente obtenida a través de las quejas allegadas a la oficina
de atención al ciudadano de dicha institución y las encuestas aplicadas a sus miembros
objeto de sanción durante el año 2015, así como a los Comandantes de Estación que hacen
parte del mismo. Adicionalmente, y siendo este trabajo de interés institucional, se analizó
si los mandos de este Departamento dan adecuada implementación a los medios objeto de
estudio o en su defecto determinar las causas por las cuales no se dé correcta
implementación y aplicación.
2

Acerca de la investigación

Justificación
En los últimos años se han presentado circunstancias que han generado en la población
colombiana estereotipos y prejuicios frente al comportamiento de la fuerza pública –
entiéndase Fuerzas militares y Policía Nacional – que disminuyen los índices de
credibilidad y confianza respecto de dichas instituciones castrenses, así como de los
regímenes disciplinarios especiales aplicados a sus miembros. Por ello, es importante que
la comunidad académica conozca que la Policía Nacional, regulada disciplinariamente a
través de dos codificaciones, tiene instrumentos de prevención y corrección que buscan
evitar la comisión de atropellos contra la ciudadanía, en una perspectiva de lograr
establecer nuevos paradigmas frente al rol que deben cumplir sus miembros, porque
siendo una fuerza de seguridad, su razón de ser es garantizar el ordenamiento jurídico
desde la ciudadanía, al responder a la razón misma de la etimología de su nombre: Policía:
deriva del latín politīa. Politīa: deriva del griego polis. Polis: ciudad. Luego aparece el
término griego politeia. “Cuerpo encargado de velar por el mantenimiento del orden
público y la seguridad de los ciudadanos, a las órdenes de las autoridades políticas” (RAE,
2016).
Por consiguiente, esta investigación se justifica en la medida en que no se encuentra
un estudio detallado que aborde un análisis sobre la aplicación de los medios preventivos
para encauzar la disciplina de los miembros de la Policía Nacional, los cuales se
encuentran previstos dentro del contexto normativo del régimen disciplinario especial de
la Policía Nacional. Además, permitirá determinar si estos mecanismos previstos en la ley
han sido aplicados para el fin con el que se concibieron en la norma. Por ende, podría
convertirse en una herramienta de consulta para quienes hacen parte activa de la Policía
Nacional, funcionarios competentes de entidades de control del Estado y organizaciones
de Derechos Humanos, para la toma de decisiones y para encauzar su aplicación en aras
de garantizar que no haya abusos policiales.
3

Pregunta de investigación
¿Cuál ha sido la efectividad en la aplicación de los medios preventivos para encauzar
la disciplina contenidos en el Art. 27 Inc. 1º de la Ley 1015 de 2006 – Régimen
disciplinario de la Policía Nacional- a los miembros adscritos al Departamento de Policía
de Santander durante el periodo comprendido entre el 01 de enero y el 31 de diciembre
de 2015?

Objetivos
Objetivo General: Determinar si los medios preventivos para encauzar la disciplina
de los miembros de la Policía Nacional en el Departamento de Policía de Santander,
contenidos en el Art. 27 Inc. 1º de la Ley 1015 de 2006 – Régimen disciplinario de la
Policía Nacional – han sido efectivos en su aplicación en el Departamento de Policía de
Santander durante el año 2015.

Objetivos específicos:
1. Establecer la referencia necesaria que permita comprender el régimen disciplinario
aplicado a la Policía Nacional en Colombia y en particular la figura de los medios
preventivos.
2. Analizar la implementación de los medios preventivos para encauzar la disciplina en
el Departamento de Policía de Santander, a partir de los datos correspondientes al año
2015.

Metodología
Diseño metodológico: Mixto, por cuanto se aplica un diseño cualitativo y cuantitativo.
Cualitativo, porque se describe el régimen disciplinario de la Policía Nacional y los
medios preventivos para encauzarla. Cuantitativo, por cuanto se realizará un estudio
estadístico y la clasificación de características para la construcción de resultados que
permitan establecer el índice de efectividad de los medios para encauzar la disciplina (Ley
1015, 2006, art. 27) en el Departamento de Policía de Santander.
Método de Recolección: En esta investigación además de realizar una sistematización
de las normas jurídicas, jurisprudencia y doctrina con su correspondiente aplicación en el
4

ámbito del derecho disciplinario especial del cual son sujetos los miembros de la Policía
Nacional, se realizará un análisis de las estadísticas de quejas que reposan en las bases
de datos de la oficina de atención al usuario del Departamento de Policía de Santander,
así como de la recolección de información que se realizó a través de la aplicación de
encuestas realizadas a los Comandantes de las diferentes estaciones de Policía que
conforman el Departamento de Santander.
5

1 El régimen disciplinario en la Policía Nacional de Colombia

En Colombia los miembros de la Policía Nacional ostentan doble condición: Por un


lado, la de funcionarios o servidores públicos lo que hace que deban observar las reglas
generales que rigen para todos los funcionarios del Estado y por otro lado la de servidor
de la Policía Nacional dadas las relaciones especiales e intensificadas de sujeción con el
Estado, por ser una institución armada de naturaleza civil. Entonces, dado esta segunda
condición, están sometidos a normas y disposiciones especiales, procurando el
cumplimiento de objetivos que atiendan a reglas específicas, dado que su función entraña
el uso de la fuerza y de las armas, lo mismo que sus facultades para privar de la libertad a
las personas, por lo que las disposiciones disciplinarias en este caso tienen por objeto
brindar una protección adicional a los asociados frente al actuar de los miembros de la
Institución. Circunstancia ésta que encuentra su justificación en el riesgo que representa
para cualquier persona la arbitrariedad, el exceso o el uso indebido de las medidas de
coerción y de fuerza de las que pueden hacer uso estos funcionarios.
Los servidores públicos de la Policía Nacional son especialmente entrenados bajo la
dirección de funcionarios superiores, por lo que a la hora de valorar sus conductas, unos
y otros deben demostrar que han hecho uso adecuado y proporcionado de medios y
procedimientos autorizados cuando intervienen frente a perturbaciones de la tranquilidad,
la salubridad, la moralidad o el orden público interno; así como que han adoptado las
medidas e impartido las órdenes e instrucciones requeridas para garantizar el
cumplimiento de esa actividad dentro de los parámetros constitucionales y legales.
Esta previsión restrictiva de las actuaciones de los miembros de la Policía Nacional
deriva igualmente del hecho de que con sus actuaciones, más que otros servidores
públicos, pueden afectar o violar derechos humanos y por razón del conflicto armado
acaecido desde hace varias décadas, incurrir en infracciones al Derecho Internacional
Humanitario. Es así como se acepta desde los ámbitos jurisprudencial, legal y doctrinal
que hay dos clases de control disciplinario; uno interno a cargo de los funcionarios
encargados dentro de la misma Institución y otro externo que ya seria de la órbita de
competencia de la Procuraduría General de la Nación. El control disciplinario interno de
la Policía Nacional es el ejercido por la propia Institución a través de sus oficinas de
6

control interno disciplinario, regulado en la Ley 1015 de 2006; el control externo es el


ejercido en virtud del poder preferente por la Procuraduría General de la Nación, en
aplicación de la Ley 734 de 2002. Para que esta entidad asuma competencia en contra de
los miembros adscritos a la Policía Nacional, se deben tener en cuenta aspectos como la
calidad del sujeto disciplinable, la naturaleza del hecho, el territorio donde ocurren los
hechos, entre otros.
En consecuencia, por las funciones que debe cumplir el personal de la Policía Nacional
estos tienen un régimen disciplinario especial para las faltas en las que incurren y se
encuentran estrictamente relacionadas con la función o el servicio público que
desempeñan. La Ley 1015 de 2006 prevé la especificidad que rige en materia sustantiva,
esto es, en cuanto a los tipos de conductas que deben observar y que se les debe tener en
cuenta, por razón de sus funciones. Norma que regula aspectos relativos al uso de la
fuerza, al empleo de las armas, a conductas relacionadas con sus actividades policivas,
órdenes e instrucciones que se imparten y a detención de personas. Además determina
qué aspectos, como los de carácter administrativo, contractual, presupuestal y en general
lo que no tenga relación directa con la función de policía, se rigen por las disposiciones
aplicables a los demás servidores públicos1. Es decir, se reitera que en lo sustancial los
miembros de la Policía Nacional tienen un régimen especial para las actuaciones propias
de su función policial, lo mismo que un régimen similar al de los servidores públicos para
cuestiones diferentes a la función policial. Por consiguiente, su régimen especial
disciplinario “es una de las condiciones esenciales para el funcionamiento de la institución
policial e implica la observancia de las disposiciones constitucionales, legales y
reglamentarias que consagra el deber profesional” (Ley 1015, 2006, Arts. 25 y 26). Norma
que prevé unos mecanismos preventivos que permiten encauzar la conducta de los
policiales si sucede algún acto que transgreda su finalidad, pero que no constituye falta
disciplinaria per se.

1 Tal es el caso, por ejemplo, de lo que tiene que ver con sistemas de contratación, manejo presupuestal,
contable, de bienes e inventarios, aspectos fiscales, mantenimiento de inmuebles y en general todas aquellas
actividades que están ligadas a servicios o funciones públicas pero que no corresponden a funciones propias
de la actividad de policía, situaciones regidas por las aplicables al resto de servidores estatales.
7

1.1 Contexto jurídico general

La Ley 1015 de 2006, conocida como el Régimen Disciplinario de los miembros de la


Policía Nacional, como se ha indicado antes, establece un conjunto de normas de carácter
sustancial y procesal que exigen obediencia, disciplina y un comportamiento ético, moral
y eficaz frente al desempeño funcional de sus destinatarios. Por su parte, la Ley 734 de
2002, Código Único Disciplinario, aplicable a todos los servidores públicos, en donde se
establece el ámbito de aplicación de la ley disciplinaria, los sujetos, las formas de
realización de las conductas o comportamientos, las causales de exclusión de
responsabilidad, la extinción de la acción disciplinaria, los derechos, los deberes,
prohibiciones, incompatibilidades, impedimentos, inhabilidades y los conflictos de
intereses de los servidores públicos, también se destinará para los miembros de la Policía
Nacional en los asuntos que no son propios de la función policial. La siguiente tabla
permite identificar el parangón normativo frente a las dos codificaciones en mención.

Tabla 1. Régimen disciplinario de la Policía Nacional.


Variables Ley 734 de 2002 Ley 1015 de 2006
Potestad Disciplinaria En cabeza del Estado. En cabeza del Estado
Órgano disciplinario Procuraduría General de la Nación Oficinas de Control Interno
en ejercicio del poder preferente Disciplinario. Función asignada a
determinados funcionarios
policiales en razón del rango
superior.
Destinatarios Son sujetos disciplinables todos los Personal uniformado escalafonado
servidores públicos, aunque se y auxiliares de Policía que estén
encuentren retirados del servicio y prestando servicio militar en la
los particulares que ejerzan Policía Nacional. Retirados o en
funciones públicas. servicio activo.
Los miembros de la Policía Nacional
son funcionarios públicos.
En virtud del principio de En virtud del principio de
especialidad, a los miembros de la especialidad, al personal policial
Ámbito de aplicación Policía Nacional les son aplicables le son aplicadas las faltas y
las normas que contienen faltas y sanciones del régimen especial.
sanciones disciplinarias del régimen
general en aquellos asuntos
relacionados con el ejercicio de
funciones administrativas, como por
ejemplo las de contratación o
manejo de presupuesto.
8

Variables Ley 734 de 2002 Ley 1015 de 2006


Y en aplicación del principio de
subsidiariedad les es aplicable en
aquellas faltas y sanciones que no se
encuentran previstos en el régimen
disciplinario especial.

Fuente: Construcción propia a partir de la Ley 734 de 2002 y Ley 1015 de 2006

No obstante lo anterior, el derecho adjetivo en materia de investigaciones disciplinarias


también se regula por Ley 1474 del 12 de julio de 2011, por la cual se dictaron normas
para fortalecer los mecanismos de prevención, investigación y sanción de actos de
corrupción y la efectividad del control de la gestión pública, más conocida como el
Estatuto Anticorrupción.

1.2 Revisión de la jurisprudencia constitucional

La Corte Constitucional colombiana tiene dentro de sus funciones, al tenor de lo


ordenado por la Carta Política de 1991, la de “Decidir sobre las demandas de
inconstitucionalidad que promuevan los ciudadanos contra los actos reformatorios de la
Constitución, cualquiera que sea su origen, sólo por vicios de procedimiento en su
formación” (Const., 1991, Art. 241, numeral 1º). Por ende, y en aras de revisar precedente
jurisprudencial sobre el tema objeto de estudio en este trabajo, se hará acotación de
algunos de los pronunciamientos de dicho Alto Tribunal.
En Sentencia C-417 de 1993, refiriéndose al derecho disciplinario, la Corte
Constitucional consideró que es éste “consustancial a la organización política y por lo
tanto se hace necesario en un Estado Social de Derecho”, para avalar “la buena marcha y
buen nombre de la Administración Pública, así como asegurar a los gobernados que la
función pública sea ejercida en beneficio de la comunidad y para la protección de los
derechos y libertades de los asociados”. Es decir, se anclan los fundamentos
constitucionales dentro del sistema normativo que regirá la responsabilidad disciplinaria
de los servidores públicos, habida cuenta que son los valores constitucionales los que se
deben proteger en un Estado Social de Derecho.
En igual sentido se pronunció esta misma Corte cuando, resaltando los intereses de la
comunidad, considero que el Estado debe “desarrollar actividades concretas en beneficio
9

general, mediante el ejercicio de los distintos poderes de intervención de los cuales


dispone”, para lograr que los servidores públicos obren conforme “a los imperativos de la
eficacia, la eficiencia y la moralidad administrativa.”, porque debe asegurar “el adecuado
funcionamiento de los servicios estatales, el correcto manejo y la preservación del
patrimonio público y la buena imagen de la administración” (Corte Constitucional, C-
280,1996).
Así las cosas, si la fuerza pública cumple una labor fundamental en cuanto a la
protección de los residentes en el país, revestidos de atribuciones para lograr su finalidad,
hay un vínculo más intenso que el originado frente a los demás servidores públicos,
acentuado en cuanto a su responsabilidad disciplinaria y la autorización constitucional y
legal para que el Estado sancione si se obra contrario a derecho por estos agentes.
Precisamente, el Art. 218 de la Constitución Política, inciso primero, contiene un
elemento esencial que autoriza al Congreso de la República para expedir una normativa
específica en la regulación de las conductas disciplinarias cometidas por los miembros de
la Policía Nacional, dadas las privativas funciones que desempeñan estos servidores
públicos. Por ello, en ejercicio de tal facultad constitucional el legislador profirió la Ley
1015 de 2006, norma jurídica que pretende proteger las relaciones de sujeción entre el
Estado y los servidores públicos de la fuerza policial.
Asimismo, la Corte Constitucional estimó que, con fundamento en lo establecido en
los Arts. 217 y 218 de la Constitución Política, “es posible que por las especiales funciones
que cumplen ciertos servidores públicos, como es el caso de los miembros de las fuerzas
militares y de policía, existan disposiciones disciplinarias especiales para ellos, por razón
de sus especiales funciones” (Corte Constitucional, C-431,2004). Argumento que
defiende el régimen especial para la fuerza pública, diferente del que se imponga al resto
de servidores públicos, por las específicas actividades a su cargo. Claro, como lo reconoce
la misma Corte, sin perjuicio de que también estén sometidos al régimen disciplinario
general que rige para los otros servidores públicos.
Es reiterativa la Corte Constitucional al señalar que el régimen especial disciplinario
de la Policía Nacional “se justifica por la particular actividad que le corresponde cumplir
a sus miembros en la conservación del Estado de Derecho, las que en ningún caso se
identifican con las asignadas a otras entidades del Estado” (Corte Constitucional, C-796,
10

2004). Un sistema que configura las conductas y sanciones a imponer, debido a la


especificidad de la función pública que los miembros de esa institución deben cumplir
dentro de la estructura del Estado. Lo confirma cuando dispone:
[…] el régimen disciplinario especial no puede incluir cualquier tipo de faltas, sino únicamente
aquellas que están relacionadas directamente con las funciones atribuidas, es decir, aquellas cuya
comisión afecta inescindiblemente el servicio público encomendado a tales fuerzas, por lo que
dichos regímenes solo pueden comprender las regulaciones íntimamente vinculadas con su objeto
específico; por el contrario, todas aquellas conductas que trasciendan la función propiamente
policial, por carecer de relación directa con el servicio, no podrán ser cobijadas dentro de las
señaladas regulaciones (Corte Constitucional, C-1079,2005).

Debido a las condiciones en que se manifiesta esa relación especial entre los miembros
de la Policía y el Estado, también se intensifica la vigilancia de su conducta, en aquellos
eventos en los que aparentemente están desligados del servicio2.
Los miembros de la policía que se encuentran en las situaciones administrativas (franquicia,
permiso, licencia, vacaciones, suspendido, incapacitado, excusado de servicio o en
hospitalización), conservan su condición de servidores públicos de la institución “en servicio
activo”, lo que implica que efectivamente y de manera actual desempeñan un empleo o cargo en
esa Institución. Esta circunstancia hace que aún bajo las situaciones administrativas descritas
retengan su condición de garantes de las condiciones necesarias para el goce efectivo de los
derechos y las libertades ciudadanas, y para el aseguramiento de una convivencia pacífica” (Const.,
1991, Art. 218).

Conforme a los principios que rigen la actividad policial, sus miembros están obligados
a actuar bajo la inmediatez, la obligatoriedad de intervención, y el apoyo policivo.
Imperativos, adscritos a la condición de servidor público policial, que imprimen
especiales características a la función pública policial que trasciende el estrecho marco
del servicio. Por ello, el hecho de que estén transitoriamente separados del servicio, no
hace a sus agentes sujetos no disciplinables, a menos de que se trate de conductas

2
Situaciones como la franquicia, los permisos, las licencias, las vacaciones, las incapacidades, entre
otros. De hecho. la Ley 1015 de 2006 señala que constituye falta grave y gravísima la comisión de una
conducta prevista en la ley como delito o contravención cuando se encuentre en situaciones administrativas
como las indicadas en este texto (Art. 34, numeral 10 y Art. 35, numeral 18).
11

enmarcadas dentro de la esfera privada del servidor público. Porque lo que se castiga es
la transgresión jurídica porque dar lugar a:
[…] una ruptura del deber funcional en su expresión de deber de actuar conforme a la Constitución
y a la ley, lo que eventualmente puede ser objeto legítimo de imputación disciplinaria, siempre y
cuando se establezca la necesaria conexidad entre la conducta delictiva o contravencional y el
menoscabo de la función pública. (Corte Constitucional, C- 819,2006).

De otro lado, de la exposición de motivos de la Ley 1015 de 2006 se deriva que la


pretensión normativa es controlar las actividades de miembros de la Policía Nacional
colombiana, dado el vínculo especial que tienen con el servicio público de seguridad y
teniendo en cuenta que la experiencia y los resultados estadísticos demuestran que muchas
de sus conductas irregulares graves ocurren cuando se encuentran en actuaciones
administrativas.
Adicional a lo anterior, todos aquellos actos que afecten el decoro, la dignidad, la
credibilidad, el respeto o el prestigio de la Institución policial son objeto del derecho
disciplinario al interior de la misma institución. Al fin y al cabo, una de las características
esenciales de las fuerzas públicas es la extrema disciplina que debe prevalecer en todas
sus actuaciones, cuyo límite se encuentra en los principios y derechos constitucionales,
con la matización de la necesidad que la imputación disciplinaria sea consecuencia del
quebrantamiento del deber funcional y por tanto de la configuración de la ilicitud
sustancial. Descripciones legales que caracterizan a un régimen disciplinario especial
como el de la Policía Nacional y por supuesto distan de las aplicables a la generalidad de
los servidores públicos.
Por lo anterior, se insiste que los actos que atenten contra la disciplina y que afectan
de manera sustancial los deberes funcionales policiales, requieren una respuesta para
salvaguardar los fundamentos de la misma. Lo dijo la Corte con amplia llaneza:
Con el propósito de asegurar la obediencia, la disciplina, la eficiencia en el cumplimiento de las
obligaciones y el adecuado comportamiento de los servidores públicos en el ejercicio de sus cargos,
el legislador colombiano expidió el Código Disciplinario Único (Ley 734 de 2002), el cual
determina qué conductas se consideran faltas disciplinarias, las sanciones en las que se puede
incurrir y el procedimiento que debe seguirse para establecer la responsabilidad disciplinaria. Con
la expedición de este Código se buscó la instauración de un estatuto uniforme y comprensivo de
todo el régimen disciplinario aplicable a los servidores del Estado.
12

No obstante, en razón a la naturaleza específica de sus funciones, la propia Constitución otorgó al


legislador la facultad para establecer regímenes especiales de carácter disciplinario aplicables a los
miembros de la fuerza pública (Fuerzas Militares y Policía Nacional). […]
Los regímenes disciplinarios especiales que rigen la conducta funcional de los miembros de la
fuerza pública (Fuerzas Militares y Policía Nacional), revisten tal naturaleza en virtud de la
concurrencia de dos caracteres: (i) porque están conformados por un conjunto de normas singulares
o particulares en las que se consagran las faltas, las sanciones, los funcionarios competentes para
imponerlas y el procedimiento o trámite que debe seguir el proceso respectivo, incluyendo
términos, recursos, etc., aplicables a un determinado grupo de personas, en este caso a los
miembros de las Fuerzas Militares y de la Policía Nacional: y (ii) por la especificidad de las
funciones que corresponde cumplir a sus destinatarios.
[…]
La índole de las funciones específicas que están llamados a ejecutar estos cuerpos armados, es lo
que determina la configuración de faltas propias de un régimen especial y las sanciones que se les
pueden imponer. […]
[…]

Lo anterior, porque las funciones de la Policía Nacional son de tanta relevancia social
que ameriten normas privativas para evitar que sus miembros obren contrario a derecho y
sitúen en entredicho la imagen institucional. No obstante, no toda conducta ha de ser
objeto de una sanción en primera instancia, porque si no constituye falta disciplinaria
existe la opción de hacer uso de los llamados medios preventivos contenidos en la Ley
1015 de 2006, que se estudiarán más adelante.

1.3 La jerarquía dentro del régimen especial disciplinario

El concepto de superioridad jerárquica propia de las instituciones organizadas por


mandos, indica la especial característica de supeditación que gobierna la organización
policial y sirve de sustento a la teoría del vínculo de subordinación o también llamada
relación intensificada especial de sujeción, en la medida que determina el ejercicio del ius
puniendi y el ius corrigendi, entendiéndose ésta última como la facultad correctiva para
encauzar la disciplina que tiene cualquier superior y que no se considera sanción
disciplinaria. Mientras que la primera, es de carácter sancionatorio y es asignada a
determinadas personas que la ley faculta para ello, en la que también se incluye la
13

competencia para sancionar las conductas que constituyen faltas ya sean graves,
gravísimas y leves.
Al fin y al cabo, el medio de subordinación en el régimen disciplinario policial no es
otro que la orden que destaca sobre la atribución de mando. El referido mandato
vinculante centra de manera profunda la relación entre superior y subordinado, debido a
sus características: legítima, lógica, oportuna, clara y precisa, así como a la
responsabilidad que genera la orden. En todo caso, esas relaciones intensificadas
especiales de sujeción a las que están sometidos los miembros de la Policía Nacional se
extienden hasta derechos fundamentales, tales como la libertad de expresión, de constituir
sindicatos, el derecho a la huelga, circulación y movimiento, a la participación política,
entre otros, en razón al estado de subordinación específica y la especialísima actividad o
función que cumplen.
Esta relación exclusiva de sujeción se encuentra estrechamente relacionada con la
potestad disciplinaria del Estado, pues se concreta en la facultad de sancionar a sus propios
funcionarios con el fin de garantizar el cumplimiento de los fines estatales indicados desde
la Constitución Política y el normal ejercicio de la función pública; esa posibilidad de
sanción surge como elemento esencial dentro del ámbito de las relaciones de sujeción,
característico de las instituciones policiales, en razón a que:
1. Dicha dependencia supone que una es la responsabilidad jurídica general para todos
los ciudadanos y otra la responsabilidad especial, exclusiva y excluyente de los
servidores públicos, lo que encuentra sustento en la Constitución Política. (Const.,
1991, Art. 6 y Art. 123, inciso 2º).
2. Si se ha establecido que los ciudadanos responden por infringir la Constitución y la
ley, con mayor razón están sujetos quienes estén al servicio del Estado, cuando su
infracción se hace desde el ámbito de sus funciones, por acción o por omisión.

La especial circunstancia de servir al Estado origina una responsabilidad exclusiva y


excluyente, que encuentra su fundamento en la omisión o extralimitación en el ejercicio
de sus funciones oficiales, según la Ley 734 de 2002:
14

1. Uno de los presupuestos exigidos, dada la relación especial entre el servidor público
y la sociedad, es que su conducta tenga un grado de afectación al deber funcional en
términos sustanciales (Art. 5º).
2. Esa responsabilidad disciplinaria tiene que imputarse conforme a un juicio pleno a
título de dolo o de culpa, pues en el campo disciplinario y en el penal se encuentra
proscrita toda forma de responsabilidad objetiva (Art. 13).

Pero en aplicación de la Constitución Política, como se dijo en párrafos anteriores, la


fuerza pública se cobija también bajo un régimen especial, por la característica de sus
actividades. Lo especial de su régimen recae en la parte sustantiva, esto es, en el contenido
de faltas y sanciones, pero no en el aspecto procesal, es decir en lo que tiene que ver con
la ritualidad en el procedimiento para aclarar las actuaciones, en la investigación y en el
pronunciamiento de la decisión a la que haya a lugar, en donde les son aplicables las
normas generales de procedimiento. Un régimen que no puede ser aplicable para cualquier
tipo de falta, sino para las relacionadas con la función militar o de policía, cuya omisión
afecta directamente el servicio público encomendado a tales fuerzas. Por esta razón, estos
regímenes disciplinarios no pueden elevar a la categoría de falta cualquier
comportamiento, sino exclusivamente los que afectan sus deberes funcionales.
En ese orden de ideas, se hace preciso señalar que el fuero militar o policial no implica
en sí un fuero disciplinario. Por ello los miembros de la Fuerza Pública, como empleados
públicos que son, también están sujetos a la potestad disciplinaria preferente de la
Procuraduría de la General de la Nación. Precisamente, en Sentencia del año 1993, la
Corte Constitucional abordó el estudio de constitucionalidad sobre la actuación que el
Ministerio Público ejerce sobre los miembros de las instituciones militares y de la policía,
resaltando sus facultades especiales mediante el ejercicio de su poder disciplinario sobre
todos los servidores estatales. Dijo la Corte que, siendo los miembros de la Fuerza Pública
servidores estatales, son sujetos disciplinables bajo competencia de la Procuraduría, sin
desconocer el control disciplinario interno en cabeza de los jefes inmediatos o superiores
de la institución correspondiente, con prevalencia del control externo cuando se den
ambas competencias (Corte Constitucional, C-152, 1993).
15

Por ello se insiste, como el régimen especial de la Policía Nacional busca defender la
soberanía, la independencia, la integración del territorio nacional y el mantenimiento del
orden constitucional y del orden público, la disciplina y la responsabilidad de cada uno de
sus miembros difieren de las de cualquier otro servidor público. Luego, apoyados en
sendos pronunciamientos jurisprudenciales, cuando existe un régimen especial éste
prevalece sobre el general, por lo que si las fuerzas policiales tienen su régimen
disciplinario, se aplicará únicamente a sus miembros, por los procedimientos y
autoridades previstos, siempre que sus disposiciones no sean contrarias al ordenamiento
constitucional.

1.4 La disciplina en el régimen especial disciplinario

Desde su concepto más primigenio, la disciplina se concibe como: “Doctrina,


instrucción de una persona, especialmente en lo moral” (RAE, 2016). Por consiguiente,
la disciplina policial, es aquella manifestación de la precisión y la marcialidad para el
logro de profesionales de la Policía educados, provistos de buenas actitudes y hábitos,
para que contribuyan al cumplimiento de la misión institucional. Por regla general, los
reglamentos de disciplina tienen como objetivo preservar la obediencia y la disciplina de
los miembros de la Fuerza Pública. Es así como la disciplina en el contexto colombiano
es condición esencial para el funcionamiento de la institución policial; de su
mantenimiento son responsables todos los miembros de la Institución.
El incumplimiento de órdenes es el quebrantamiento de la disciplina, entendiendo la
orden como una manifestación externa del superior con autoridad que debe obedecer,
observar y ejecutar por parte del subalterno, debiendo ser legítima, lógica, oportuna, clara,
precisa y relacionada con la actividad institucional. Por el contrario, el cumplimiento de
órdenes está estrechamente relacionado con la disciplina y la obediencia. Se reitera: la
disciplina en las instituciones como la Policía Nacional es el conjunto de obligaciones y
deberes impuestos por los diversos ordenamientos o reglamentos policiales a la totalidad
de sus miembros, de acuerdo a las jerarquías y con fundamento en la estricta obediencia
a las normas jurídicas que rigen su conducta en el contexto del servicio y sus funciones.
Así, la disciplina se hace extensiva no sólo a quienes los instruyen, dado que el mando y
16

la obediencia tienen una sucesión de experiencias asimiladas en el servicio que regulan el


comportamiento del superior y del subalterno.
La necesidad de mantener incólume la disciplina al interior de la Institución obliga a
su aplicación estricta; para mantenerse debe procurarse con severidad su cumplimiento,
lo que requiere de aspectos como la constancia y la exigencia. De ahí que la misma Policía
Nacional a través de sus redes de formación ha establecido algunas manifestaciones para
mantener aquella, tales como:
 Cumplir a cabalidad la misión institucional.
 Capacitación del personal.
 Adoptar comportamientos ejemplares, lo que significa mantener e imprimir autoridad,
respeto y confianza en los demás.
 Exigir en la disciplina, atendiendo a que la naturaleza en la estructura de la institución
es jerárquica y por ende implica la existencia de relaciones de subordinación en
estricto sentido.

Inclusive, la Policía Nacional tiene como pilares fundamentales dos valores que aunque
son independientes, están en permanente conexión y le exigen al servidor público policial
un comportamiento coherente en su ámbito personal y laboral:
 La integridad: La cual hace referencia al comportamiento recto, probo e intachable
de los miembros de la policía en cumplimiento de los principios éticos y en el
desempeño de sus funciones.
 La transparencia: Se refiere a la claridad de sus actos, sin dejar ningún tipo de duda
en sus desempeños.

Luego, al establecerse un sistema ético policial con valores, principios y directrices


éticas se fortalece el posicionamiento del policía como un referente social digno de imitar.
La disciplina en la institución policial ha sido objeto de regulación, no sólo en la Ley
1015 de 2006, sino también mediante directrices o lineamientos que a nivel interno ha
establecido la Policía, destacando:
1. Resolución Nº 05726 de 2008, por la cual se creó el Código de Buen Gobierno en el
que se establecen las normas de conducta, mecanismos e instrumentos que deben
17

adoptar los directores para generar confianza hacia la institución entre los usuarios
públicos internos y externos.
2. Resolución 05293 de 2008, en donde se determinan las normas del fuero interno y
creencias fundamentales del Policía sobre las formas como se debe desempeñar la
función pública y determina, entre otras cosas lo siguiente:
- El actuar policial se fundamenta en el honor y el orgullo patrio.
- EL interés general prevalece sobre el particular.
- El servicio policial se presta sin exclusión ni preferencia.
- El policía es íntegro en todos los ámbitos de su vida.
- El policía es garante del orden constitucional.
- Los derechos humanos son el marco de la función policial.

1.5 Los medios preventivos dentro del régimen disciplinario especial

Siendo la disciplina un eje fundamental que orienta el accionar policial como una de
las condiciones esenciales para el buen funcionamiento de la Institución, implica el
cumplimiento de las disposiciones constitucionales, legales y reglamentarias que consagra
el deber profesional; de tal forma que para encaminarla, el régimen disciplinario previó
unos medios preventivos que podrán ser aplicados por los encargados del ejercicio del
mando a todo nivel, a través de la imposición de correctivos menores, como registros al
folio de vida del infractor, llamados de atención verbal, imposición de tareas de tipo
pedagógico, asistencia a cursos de formación ética y trabajos escritos, como medio
disuasivo de aquellas conductas que no trascienden ni afectan la función pública, por lo
tanto no constituyen antecedente disciplinario.
Los medios preventivos para encauzar la disciplina se encuentran descritos en la Ley
1015 de 2006, Artículo 27, inciso primero, que dice:
Artículo 27. Medios para encauzarla. Los medios para encauzar la disciplina son preventivos y
correctivos.
Los medios preventivos hacen referencia al ejercicio del mando con el fin de orientar el
comportamiento de los subalternos a través de llamados de atención verbal, tareas tales como
acciones de tipo pedagógico, asistencia a cursos de formación ética, trabajos escritos, como medios
18

disuasivos de aquellas conductas que no trascienden ni afectan la función pública, sin que ello
constituya antecedente disciplinario.
[…]

Son medios disuasivos de las conductas que no afecten, ni trasciendan la función


pública; medios legal y constitucionalmente válidos en su aplicación, siempre y cuando
respeten los límites de la dignidad humana y se orienten al cumplimiento de los fines
misionales y constitucionales de la Policía Nacional. En efecto, la Policía Nacional tiene
lineamientos internos para mantener un comportamiento ético y disciplinado, acorde con
los mandatos encomendados.
Se debe destacar que desde el proceso mismo de selección para el ingreso a las escuelas
de formación de los diferentes niveles y especialidades de la Policía Nacional, se enfatiza
en la necesidad de adquirir y mantener comportamientos acordes con la función y misión
institucional. Dentro de los factores de comportamiento, consagrados en la Resolución
2037 de 2001, Art. 1º, se tienen en cuenta aspectos de suma relevancia, como lo son:
 Comportamiento personal.
 Comportamiento institucional.
 Disciplina Policial.
 Acatamiento de normas.
 Trabajo en equipo.
 Relaciones Interpersonales.
 Condiciones físicas.

Luego, la intención al aplicar los medios preventivos es garantizar que todos y cada
uno de los miembros de la Institución acaten las conductas bajo la expectativa de un buen
actuar. Si las acciones no corresponden a lo esperado y afectan la disciplina, pueden ser
objeto de medios preventivos disciplinarios (Ver siguiente ilustración)
19

Ilustración 1. Medios preventivos disciplinarios.

DISCIPLINA
Medios
Prweventivos
Art. 27 Inc. 1º
Ley 1015 de
2006

Trabajos LLamados de
escritos atención

Asistencia a
Tareas de tipo
cursos de
pedagógico
formación ética

Fuente: Construcción propia. Artículo 27 Inc. 1º Ley 1015 de 2006.

Todos los medios preventivos previstos por la norma constituyen un engranaje que va
a permitir, en sentido estricto, conservar los estándares de disciplina que exige el
funcionamiento de la Policía Nacional, dado que aquella es un componente vital de su
función misional, debiendo ser objeto de dirección y responsabilidad de todos los
servidores policiales. Por ello, los comandantes de estaciones y quienes ejercen algún
nivel de mando no pueden excusarse en su desconocimiento, pues no sólo están regulados
en la ley, sino que forman parte de los procesos de formación cuando se ingresa a la
Institución.
La explicación de cada uno de los medios preventivos legales, es la siguiente:
a) Llamados de atención verbal: Son requerimientos efectuados por parte del superior al
subordinado de manera inmediata a la ocurrencia de un hecho que atente contra el
mantenimiento de la disciplina3.

3
Claro ejemplo de ello: cuando no se acude a la hora puntual al lugar de trabajo, en primera medida
puede ser objeto de llamado de atención para que no se vuelva a repetir.
20

b) Acciones de tipo pedagógico: Son las emprendidas con fines de autoaprendizaje en


aquellos eventos en que el comportamiento del personal no es acorde con la filosofía
e imagen institucional.
c) Asistencia a cursos de formación ética: Se trata de concurrencia obligatoria a jornadas
de educación ética, por conducto de quienes ejercen mando. Hacen parte del esquema
de formación continua en la Policía Nacional.
d) Trabajos escritos: Son tareas de índole investigativa y formativa que se imponen al
personal cuando se observan comportamientos de desinformación, ya sea al interior
de la Institución con otros compañeros o con superiores, o cuando se está
suministrando una información que no satisface la inquietud de algún miembro de la
comunidad.

Estos medios preventivos son impuestos dependiendo el tipo de falta cometida, pues
deben ser proporcionales a la conducta censurada, para lograr el fin previsto en la norma:
medio para mantener las condiciones de disciplina y buen comportamiento que se debe
observar al interior de la Institución. Para tal efecto, se cuenta con un esquema de
seguimiento a cada policial reglamentado en el Decreto 1800 de 2000, que regula la
evaluación periódica del desempeño de quienes están en servicio activo de la Policía
Nacional, para establecer y valorar los logros de la gestión desarrollada, facilitando la
formulación de perfiles ocupacionales y profesionales, con planes de capacitación,
otorgamiento de estímulos y ascensos, facilitación de la reubicación laboral, asignación
de cargos y decisión sobre su permanencia (Art. 4, Ut supra).
El Decreto 1800 de 2000, Artículo 8º, ha establecido tres ejes de evaluación: el
operativo, el administrativo y el docente. Como quiera que el objeto de esta investigación
se centra en los medios preventivos para encauzar la disciplina, concordantes éstos con el
eje operativo, donde confluyen los procesos que desarrolla la gran mayoría del personal
activo de la Policía Nacional, se hará una revisión del mismo.
En el eje operativo se evalúa el desempeño del personal que ejecuta los procesos
encaminados a contrarrestar el accionar de la delincuencia común y organizada; además
de ser los responsables directos de la preservación y conservación del orden público, la
convivencia pacífica, misiones de vigilancia, Policía Judicial, entre otras (Decreto 1800,
21

2000, Art. 9º). Este nivel de evaluación, según la norma en cita, comprende tres
categorías:
1. De dirección: Se refiere al personal responsable de metas estratégicas.
2. De ejecución: Incluye a los encargados de ejecutar los procesos operativos. Entre ellos
se encuentran los que pertenecen a las especialidades de: aviación policial, policía de
carreteras, policía fiscal y aduanera, comando de operaciones especiales, escuadrón
móvil antidisturbios, comandantes de distrito, estaciones y subestaciones.
3. Básica: Comprende el personal encargado de ejecutar las actividades básicas de
vigilancia, inteligencia, policía judicial, antinarcóticos, entre otros.

El proceso de evaluación policial4 está integrado por varias etapas (Decreto 1800,
2000, Título II, Capítulo III, Arts. 13-18), dentro de las cuales se destaca la de seguimiento
a cada unidad policial, consistente en la observación del comportamiento y desempeño de
quien va a ser evaluado. Dicha evaluación permite orientar al personal en el
mantenimiento de un comportamiento disciplinado, acorde con la misión de la Institución.
En todo caso, estas evaluaciones pueden ser objeto de reclamación por parte de quienes
estén inconformes o en desacuerdo con la información suministrada en sus anotaciones.
Por ello se lleva el registro de los actos o conductas objeto de los medios para encauzar la
disciplina, verificando si se han impuesto acciones pedagógicas, trabajos escritos o
llamados de atención, siempre y cuando hayan sido reportados por los mandos encargados
de hacerlo. Sin embargo, frente a estos medios preventivos para encauzar la disciplina,
como se hacen de manera inmediata a la ocurrencia del hecho, en ese mismo instante
pueden manifestar sus argumentos y justificar su actuar o asumir que cometieron un error.
Reiterando sobre las reclamaciones que pueden efectuarse a las evaluaciones de
desempeño policial, existe un procedimiento para realizarlas, a partir de la notificación o
comunicación del resultado obtenido en la evaluación de desempeño:
Las reclamaciones por registros y datos, que se realizan con ocasión de las acciones diarias del
desempeño profesional y por aquellas anotaciones de seguimiento, proceden por escrito ante el

4
El desempeño policial es evaluado de forma periódica con el fin de hacer un seguimiento al desempeño
tanto profesional como personal; con el propósito de direccionar a aquellos que no cumplen con un buen
nivel de desempeño; esto será un factor a tener en cuenta a la hora de posibilitar, por ejemplo, un ascenso.
22

evaluador dentro de las 24 horas siguientes a su comunicación, quien tendrá un término igual para
resolver.
En caso de mantener su decisión, remitirá lo actuado ante el revisor dentro de las 24 horas
siguientes, quien decide en forma definitiva en el término de 48 horas.
(Decreto 1800, 2000, Art. 52).

Asimismo, la Policía Nacional dio origen al Comité de Recepción, Atención,


Evaluación y Trámites de Quejas e Informes (en adelante CRAET), reglamentado a través
de la Resolución 04647 de 2008, el cual se instituyó con la finalidad de contribuir al
mantenimiento de la disciplina, “mediante el análisis de los comportamientos que den
lugar a quejas e informes, para determinar las acciones a seguir, tanto en el ámbito
preventivo como en el correctivo” (Resolución 04647, 2008, Art. 1º).
Dentro de sus funciones se destaca, “el conocer y evaluar las quejas e informes
recepcionados en cada una de las unidades para determinar las posibles acciones y
disponer el trámite a los funcionarios o autoridades competentes para resolver cada caso”
(Resolución 04647, 2008, art. 4º). Como corolario, si bien es cierto los medios para
encauzar la disciplina son herramientas preventivas utilizadas en aras de mantener el buen
comportamiento del personal de la Policía Nacional, cuando se incurra en conductas que
atenten contra la disciplina pero que no constituyen falta disciplinaria y se observa cierta
gravedad en cuanto a los estándares de comportamiento disciplinado y ético que el
personal debe tener, éstos tienen la entidad suficiente para ser objeto de registro y
seguimiento en las evaluaciones de desempeño, pues su fin es el de permitir el
direccionamiento diario y constante del personal en el cumplimiento de los deberes
mínimos que acarrea el tener la calidad de servidor público de esta Institución.

1.6 El régimen disciplinario policial en el derecho comparado.

Para enriquecer el planeamiento se abordará la normatividad genérica que desarrolla


el régimen disciplinario en los cuerpos policiales de España y Argentina, países escogidos
por cuanto España ha sido tomado por Colombia como referente en diferentes procesos
misionales policivos y a su vez Argentina está abordando el modelo policial colombiano
para restructurar su modelo de funcionamiento y ser certificado institucionalmente.
23

1.6.1 El régimen disciplinario en la Guardia Civil Española.

En España la institución policial con similares características al cuerpo policial


colombiano es la llamada Guardia Civil. Cuerpo de seguridad pública de naturaleza
militar y ámbito nacional que forma parte de las fuerzas y cuerpos de seguridad del Estado.
Depende del Ministerio del Interior en cuanto a servicios, retribuciones, destinos y medios
y del Ministerio de Defensa en cuanto a ascensos y misiones de carácter militar. Su
régimen disciplinario se encuentra contenido en la Ley Orgánica 8 de 2014, pues dada su
naturaleza militar y la condición militar de sus miembros, es necesario acoger los
principios y normas rectoras que resulten esenciales para mantener una perspectiva en
aquellos aspectos como la acción de mando, las muestras exteriores de disciplina o los
distintos actos y manifestaciones que, en amplio espectro, se contienen dentro de ese
régimen especial. Al ser una organización jerarquizada, disciplinada y cohesionada, la
acción de mando en la guardia civil se refiere al ejercicio de la autoridad con la
consiguiente obligación, que corresponde a todo guardia civil en razón de su cargo,
destino o servicio, tal cual lo dispone su normativa disciplinaria.
La disciplina en la guardia civil española se manifiesta externamente a través de las
muestras de respeto y subordinación entre militares, de la corrección en el saludo y en la
uniformidad, de la cortesía en sus relaciones profesionales y del tratamiento debido a
superiores y subordinados. Aspectos éstos que se regulan en el Real Decreto 2945 de
1983. Allí mismo, específicamente en su Artículo 279, reza:
La disciplina halla su expresión externa en las muestras de respeto y subordinación entre militares,
quienes a estos efectos se atendrán el orden jerárquico de empleo y antigüedad,
independientemente del ejército, arma, cuerpo o escala a que pertenezcan

Son entonces disposiciones que enfatizan en el respeto mutuo en la relación superior -


subordinado, evidenciado en el saludo y en la uniformidad, el tratamiento debido y la
cortesía en las relaciones entre los militares, incluyendo en su relación fuera de actos de
servicio.
Frente al tema del saludo, no es sólo el que se da entre los miembros uniformados, sino
también el que se exige frente a las banderas y estandartes o durante la interpretación del
himno patrio, así como el que se debe a miembros de la Corona española o a los altos
representantes del gobierno, e incluso a militares extranjeros con rangos representativos.
24

Sólo se exoneran de tal muestra de disciplina y respeto cuando su “servicio o función […]
exija una atención que le impida distraerse de su cometido” (R.D. 2945, 1983, Art. 288).
El concepto de uniformidad se refiere al uso obligatorio del uniforme en contexto de
“propiedad y corrección” acorde con las ocasiones.
En cuanto a los tratamientos, es decir, el “Título que se da a una persona por cortesía
o en función de su cargo o condición” (RAE, 2016), en España son claramente
identificadas las maneras como han de cumplirse, sea frente a militares, monarcas,
gobernantes, caballeros u otros específicamente identificados en la norma (RD. 2945,
1983, Arts. 301-305). El no hacerlo constituye demostración de indisciplina e irrespeto.
Finalmente, la norma Ut supra regula las presentaciones y visitas para la Guardia Civil
Española; siendo importante que con motivo de su incorporación, cese o ausencia
temporal del destino, ascenso, cambio de situación o realización de comisiones, deba
presentarse a sus superiores para ponerse a sus órdenes o despedirse.
Con sustento en lo anterior, los miembros de la Guardia Civil pueden ser objeto de
sanción penal y disciplinaria, ésta última con una connotación de faltas leves. Las faltas
y sanciones disciplinarias para aquellos se encuentran reguladas en el Título I de la L.O.
08 del 2014; las faltas leves son 35 y se regulan en su Artículo 6º, destacando las siguientes
por su relación con la especificidad de sus funciones policiales:
1. Inexactitud en el cumplimiento de las órdenes o instrucciones de los superiores en la
estructura orgánica u operativa.
2. Expresar públicamente opiniones que, relacionadas estrictamente con el servicio en
las Fuerzas Armadas, no se ajusten a los límites derivados de la disciplina, realizadas
cualesquiera de ellas de palabra, por escrito o por medios telemáticos.
3. Inobservar las indicaciones o instrucciones de otro militar que, aun siendo de empleo
igual o inferior, se encuentre en servicio y actúe en virtud de órdenes o consignas que
esté encargado de hacer cumplir.
4. Omitir el saludo a un superior, el no devolverlo a otro militar de igual o inferior
empleo y el inexacto cumplimiento de las normas que lo regulan.
5. Demostrar falta de interés en la instrucción o preparación personal.
6. Extralimitarse en su ejercicio de autoridad o mando, siempre que no cause daño grave.
25

La misma Ley Orgánica contempla las sanciones que se aplicarán frente a las faltas
leves, según se lee en su Art. 11, numeral 1º, que reza:
1. Las sanciones que pueden imponerse por faltas leves son:
a) Reprensión.
b) Privación de salida de uno a ocho días.
c) Sanción económica de uno a siete días.
d) Arresto de uno a catorce días.

Es decir, el régimen disciplinario aplicable a la Guardia Civil española guarda un cierto


grado de relación con el previsto para la Policía colombiana. Pues además de tener una
función similar, reglada en la Constitución y las leyes, el establecimiento de un régimen
especial en ambos países obedece a la especial naturaleza de estas instituciones, así como
a la especialísima estructura que entraña su funcionamiento. Ello, en razón a que la
disciplina es uno de los elementos esenciales que caracterizan el ejercicio de la función
policial. Es decir, en España al igual que en Colombia, la potestad disciplinaria es
asignada bajo un esquema de relación directa que se establece en orden jerárquico
dependiendo el tipo de falta en que se incurra.
Ahora, en cuanto al tema que ocupa este estudio, si bien el régimen disciplinario
especial español no contempla expresamente unos medios preventivos para encauzar la
disciplina de los miembros de las fuerzas armadas, pues es de una naturaleza más
coercitiva y sancionadora en estos aspectos, la norma implícitamente establece como
mecanismos con similares características las advertencias o amonestaciones verbales que
para el mejor cumplimiento de las obligaciones puede hacerse en el ejercicio del mando.
En la L.O. 08, 2014, Art. 12, inciso segundo se lee: “No constituye sanción disciplinaria
la advertencia o amonestación verbal que, para el mejor cumplimiento de las obligaciones,
puede hacerse en el ejercicio del mando”. Significando ello que no es una sanción
disciplinaria con las connotaciones que tal categoría normativa implica, por ejemplo la
carencia de antecedentes de este orden.
Se concluye que en España hay una concepción íntegra de prevención, porque se hace
más efectiva al contener dentro del catálogo de sus faltas leves aquellas conductas
inherentes al mantenimiento de la disciplina del personal adscrito a las fuerzas armadas,
26

lo que desde la etapa de formación es objeto de instrucción a todos los miembros de la


institución.

1.6.2 El régimen disciplinario de la Policía Federal Argentina.

La Policía Federal Argentina es una institución civil armada que depende del poder
ejecutivo nacional por intermedio del Ministerio de Seguridad de la Nación. Cumple
funciones de policía de seguridad y judicial en el territorio de las provincias y la capital
de la nación acorde a su desempeño en temas de investigación federal. Su régimen
disciplinario está contemplado en la Ley 21.965 del 27 de marzo de 1979, Título V. Una
normatividad que establece como falta disciplinaria toda transgresión a los deberes y
obligaciones policiales establecidas expresa o implícitamente en los reglamentos o
disposiciones vigentes.
La Ley fue reglamentada mediante Decreto 1.866 del 26 de julio de 1983, en cuyo
Artículo 535 está el listado de conductas que constituyen faltas graves, dentro de las que
se destacan:
 El incumplimiento de deberes y obligaciones.
 Hacer propaganda que pueda afectar la disciplina o el prestigio de la institución.
 Insubordinación.
 Abandono del servicio.
 Embriaguez.
 La pérdida o sustracción de armamento, entre otros.

Así mismo, se relaciona una serie de conductas que constituyen faltas disciplinarias,
sin graduarlas como graves, leves o gravísimas como si lo indica el régimen disciplinario
de la Policía Nacional de Colombia, contenidas en el Artículo 537 Ut supra, enfatizando
las siguientes, por su relación con la temática en comento:
 La falta de celo, puntualidad y exactitud en el cumplimiento de los deberes inherentes
a la función, así como la negligencia o imprudencia en un acto del servicio.
 La falta de pulcritud en su persona o uniforme.
 La entrada sin necesidad durante el servicio a comercios o cualquier otro lugar
público.
27

 El trato descomedido para con el público.


 Las deudas frecuentes que se contraigan sin oportuna satisfacción.

En todo caso, las faltas disciplinarias son sancionadas, según la clasificación contenida
en el Capítulo III del Título V del Decreto que se estudia, Artículos 545 a 564 y
concordantes. Dichas sanciones son:
 Apercibimiento. Consiste en “la advertencia formulada por el superior al subalterno
de la comisión de una falta cuya naturaleza o magnitud no hace menester otra sanción
mayor. […]” Exigiendo que la misma sea clara, precisa y moderada, para que no se
constituya en una “afrenta o injuria a la persona del culpado” (Art. 547).
 Arresto. “ARTICULO 549 - El arresto consiste en la permanencia del sancionado en
su dependencia o en el lugar que se determine, con las modalidades que en cada caso
se indiquen”
 Cesantía: “[…] la baja del sancionado con pérdida del estado policial y los derechos
que le son inherentes” (Art. 561).
 Exoneración: Cuya graduación es la más grave, consiste en “la baja definitiva e
irrevocable del sancionado, con la pérdida del estado policial y los derechos que le
son propios” (Art. 562).

También dispone el Decreto en comento las causales de agravación y de atenuación


que incidirán en la graduación de la sanción a imponer.
En cuanto al objeto de análisis de este trabajo, si bien es cierto el régimen disciplinario
especial de la Policía Federal Argentina no contiene los llamados medios para encauzar
la disciplina, al igual que en el español y a diferencia del sistema colombiano, se observa
que la potestad para mantener la disciplina de sus miembros se otorga implícitamente en
la facultad que ostentan los superiores para advertir al subalterno de la comisión de una
falta por cuya naturaleza no se hace necesario imponer una sanción mayor, esto es, el
llamado apercibimiento, que puede ser individual o colectivo y en ambos casos quedará
constancia de ello en los legajos (conocidos en Colombia como la hoja de vida del
uniformado).
28

A continuación se presentan dos tablas que incluye el paralelo de los tres regímenes
disciplinarios para el personal policial argentino, español y colombiano, desde las
variables finalidad, falta, graduación de la sanción y sanciones, así como el de la
comparación entre sanciones y clases de faltas.

Tabla 2. Cuadro comparativo régimen disciplinario.


Variable Régimen Régimen Disciplinario de Régimen Disciplinario de
Disciplinario de la la Guardia Civil Española la Policía Nacional de
Policía Federal Ley orgánica 08 de 2014 Colombia-Ley 1015, 2006
Argentina-Ley 21.965

Finalidad de la Ley Regular al personal Garantizar la observancia El acatamiento a la ley


con estado policial de de las reglas de disciplinaria garantiza el
la Policía Federal de comportamiento de los cumplimiento de los fines
Argentina. Las militares, en particular la y funciones del Estado.
normas que contiene disciplina, la jerarquía y la
este reglamento deben unidad.
interpretarse teniendo
en cuenta que su
finalidad es afirmar y
mantener la
disciplina.
Falta Disciplinaria Constituye falta Las faltas disciplinarias se La conducta de los
disciplinaria toda definen como las acciones destinatarios será contraria
trasgresión a los u omisiones dolosas o a derecho, cuando afecte el
deberes y imprudentes previstas en deber funcional sin
obligaciones la ley. justificación alguna. La
policiales responsabilidad
establecidas expresa o disciplinaria se da por
implícitamente en los acción o por omisión en el
reglamentos o ejercicio de sus funciones.
disposiciones en
vigencia.
Graduación de las Faltas Graves y faltas Faltas Leves, Graves y Faltas Gravísimas, Graves
Faltas disciplinarias. muy Graves. y Leves.
29

Variable Régimen Régimen Disciplinario de Régimen Disciplinario de


Disciplinario de la la Guardia Civil Española la Policía Nacional de
Policía Federal Ley orgánica 08 de 2014 Colombia-Ley 1015, 2006
Argentina-Ley 21.965
Sanciones En orden de gravedad, Sanciones para faltas Se establecen las siguientes
las sanciones leves: sanciones:
prescritas para las -Represión -Destitución e inhabilidad
faltas cometidas ya - Privación de la salida general.
sean graves o de 1 a 8 días. -Suspensión e inhabilidad
simplemente faltas -Sanción económica de 1 especial.
disciplinarias son: a 7 días. -Multa
Apercibimiento -Arresto de 1 a 14 días. -Amonestación escrita
Arresto Para faltas graves: Dependiendo del grado de la
Cesantía -Sanción económica de 8 falta y de si su modalidad es
Exoneración a 15 días. dolosa o culposa, se
La clase y extensión -Arresto de 15 a 30 días. establece un término para
de la sanción -Pérdida de destino graduar la sanción así:
dependerá del libre -Baja del centro docente -Para faltas gravísimas
arbitrio del superior militar de formación. dolosas o realizadas con
que la imponga. Para faltas muy graves: culpa gravísima:
-Arresto de 31 a 60 días. Destitución e Inhabilidad
-Suspensión del empleo. General entre 10 y 20 años.
-Separación del servicio. -Para faltas gravísimas
-Resolución de realizadas con culpa grave o
compromiso. graves dolosas: Suspensión
Para faltas graves e inhabilidad especial entre
realizadas con culpa 6 y 12 meses sin derecho a
grave, o leves dolosas remuneración.
multa entre 10 a 180 -Para faltas graves
días. realizadas con culpa grave, o
Para faltas leves leves dolosas: Multa entre
culposas: Amonestación 10 y 180 días.
escrita. -Para faltas leves culposas:
Amonestación escrita.

Medios No se encuentran No existen en la Se encuentran descritos en


Preventivos Contenidos en la Norma. el Art. 27 de la Ley 1015, los
Para encauzar Norma. cuales se dividen en dos:
La Disciplina Unos de carácter correctivo
y otros de carácter
preventivo.

Fuente: Construcción propia a partir de: Ley 21.965, 1979; Decreto 1.866, 1983; Ley Orgánica 08, 2014; Ley 1015,
2006

Tabla 3. Cuadro comparativo: Sanción vs tipo de falta.


Variable Conducta Tipo de falta Sanción
Argentina La revelación a Falta Grave Depende del criterio del
personas ajenas a la superior encargado
institución de informes, establecer la sanción, que
órdenes o constancias puede ser apercibimiento,
secretas o reservadas.
30

Variable Conducta Tipo de falta Sanción


(Ley 21965, 1979, art. arresto, cesantía o
535 lit. c) exclusión.
España El incumplimiento del Falta muy Grave Depende del criterio del
deber de reserva sobre superior encargado; éste
secretos oficiales y puede sancionar con:
materias clasificadas. Arresto de 31 a 60 días,
(Ley 08, 2014, art. 8 N° suspensión del empleo,
4). separación del servicio o
resolución de compromiso.
Colombia Permitir, facilitar, Falta Gravísima La sanción podría ser de
suministrar Destitución e Inhabilidad
información o utilizar General entre 10 y 20 años o
los medios de la Suspensión e Inhabilidad
institución, para especial entre 6 y 12 meses
cualquier fin ilegal o sin derecho a remuneración,
contravencional (Ley dependiendo de si la falta es
1015, 2006, art. 34 N° realizada de manera dolosa,
4). con culpa gravísima o con
culpa grave
respectivamente.
Fuente: Construcción propia a partir de: Ley 21.965, 1979; Decreto 1.866, 1983; Ley Orgánica 08, 2014; Ley 1015,
2006
31

2 Análisis de la implementación de medios preventivos para encauzar la


disciplina en el Departamento de Policía de Santander durante el año 2015

Comprendiendo el significado y alcance de los medios preventivos para encauzar la


disciplina del personal en servicio activo de la Policía Nacional, como acción de los
superiores sobre los subordinados para enderezar el comportamiento de quienes cometen
ciertas acciones, se procederá a revisar y analizar la implementación de esos instrumentos
en el Departamento de Policía de Santander. Se aclara que, como se indicó en páginas
anteriores, sólo se trabajará con estadística del año 2015, habida cuenta que la información
sobre esta categoría de medios es de carácter reservada, pues involucra datos personales
y de seguridad de los servidores policiales afectados con medidas de disciplina. Por ello,
la autorización para acceder a la misma se dio única y exclusivamente para el período de
estudio.

2.1 Ficha técnica

Información estadística suministrada por la Oficina de atención al ciudadano del


Departamento de Policía de Santander.
 Año 2015: 1.530 hombres y mujeres componen el pie de fuerza (distribuidos entre
patrulleros, suboficiales, agentes y oficiales que hacen presencia en 9 Distritos y 78
municipios).
 Total reporte personas con aplicación de medios preventivos: 47.
 Porcentaje aplicación: 3.07%

Encuesta a 60 de los 78 comandantes de estación de Policía del Departamento de


Santander:
 Porcentaje encuestados: 76.92%

2.2 Descripción y análisis de resultados

Del dato obtenido surgen varias hipótesis:


32

 El personal responde de manera casi que perfecta a los lineamientos disciplinarios de


la institución.
 Sólo se reportaron algunos de los casos en los que han sido impuestas estas medidas,
o
 Los mandos están haciendo caso omiso a la implementación y reporte de las medidas
preventivas.

Ilustración 2. Personal amonestado con medidas preventivas.

1530
1600

1400

1200

1000

800

600

400

200
47
0

FUERZA EFECTIVA DESAN 2015 PERSONAL APLICO ART. 27

Fuente: Construcción propia. Datos Oficina de Atención al Ciudadano del Departamento de Policía de Santander

Efectivamente se observa que de los 1.530 miembros del pie de fuerza de Santander
sólo 47, es decir un 3,07% de personal en servicio activo del Departamento de Policía de
Santander ha sido objeto de medios preventivos para encauzar la disciplina
Pues bien, las anteriores hipótesis son posibles, pero al contrastar la realidad se
encuentra una Oficina de Control interno disciplinario con altos niveles de congestión por
el volumen de procesos disciplinarios que deben iniciarse cada día. Esta manifestación se
hace sustentados en información suministrada por la persona a cargo del sistema de
información de quejas y procesos disciplinario, en cuanto a que durante el año 2016 se
33

adelantaron 90 nuevos procesos disciplinarios por conductas que no son consideradas


faltas y podrían ser objeto de sanción a través de los medios preventivos para encauzar la
disciplina; lo anterior, dado que las quejas que presentan los ciudadanos no son filtradas
en debida forma por los comandantes de las estaciones y algunas de ellas no tienen la
entidad suficiente para ser calificadas como faltas disciplinarias. Por esta razón, los
medios para encauzar la disciplina, siendo herramientas más eficaces y expeditas para
facilitar su manejo, se están quedando en el plano netamente teórico, a pesar de que son
objeto de instrucción y enseñanza a los mandos en sus cursos de ascenso y capacitaciones.
Igualmente y existiendo el CRAET, órgano investido de la facultad para establecer si
la conducta que genera una queja tiene o no la suficiente entidad para dar inicio a una
investigación penal o disciplinaria, con información canalizada a través de la Oficina de
Atención al Ciudadano, allí deben llegar las quejas de los ciudadanos y las que reporten
los comandantes de estación. Luego, se prevé que hay un balance desmedido y nada
proporcional entre los reportes de la aplicación de medios y el índice de investigaciones
disciplinarias5 que saturan la Oficinas de Control Interno Disciplinario de la Institución.
Por ende, a partir de lo estudiado sobre la finalidad con que fueron concebidos los
medios preventivos para encauzar la disciplina, su importancia se resalta para aquellas
conductas que no configuran una falta disciplinaria o no constituyen delito pero que si
atentan contra el mantenimiento de la disciplina al interior de la Policía Nacional. Casos
en los cuales los mandos, en función de su jerarquía, pueden tomar aquellas medidas. Su
omisión no puede darse por desconocimiento o temor. Lo primero, porque los
comandantes son instruidos sobre su alcance y existencia, y lo segundo porque dichos
instrumentos tienen fundamento legal y constitucional. Al contrario, encauzar la
disciplina a través de estos medios preventivos va a ser garantía inequívoca del
mantenimiento del orden interno, así como, también va a facilitar el ejercicio de las
funciones que constitucionalmente se ha otorgado a todos sus miembros.

5
Al 2015 se registraron 68 procesos disciplinarios y al 2016 fueron 90, según información fue
suministrada por la Oficina de Control Interno Disciplinario, la cual reposa en el SIJUR (sistema jurídico
de la Policía Nacional).
34

Volviendo a revisar los casos registrados durante el año 2015, se encontró la


categorización de los 47 medios aplicados, así:

Tabla 4. Medios preventivos aplicados en la Policía de Santander, año 2015.


Medio para encauzar la disciplina Departamento de Policía de Santander
Llamados de atención verbal 4
Acciones de tipo pedagógico 2
Asistencia a cursos de formación ética 5
Trabajos escritos 36
Total 47

Fuente: Construcción propia. Datos Oficina de Control Interno Disciplinario del Departamento de Policía de
Santander.

Ilustración 3. Medios preventivos para encauzar la disciplina en el Departamento de Policía de


Santander, año 2015.

40 36

35

30

25

20

15

10 5
4
2
5

0
Trabajos escritos Llamados de atención Asistencias a cursos Acción Pedagógica

Fuente: Construcción propia. Datos de la Oficina de Atención al Ciudadano Departamento de Policía de Santander.

Se observa que el medio de más alta aplicación es el de trabajos escritos, dado que
corresponde al 76.6%, quedando el 23.4% para el resto con menor incidencia las acciones
pedagógicas. Se observa entonces, que los trabajos escritos han sido los medios más
utilizados en situaciones que requieren ser encauzadas para mantener la disciplina; los
que sin duda deben ser utilizados con una real fuerza persuasiva que incida en el hecho
35

de que el funcionario va a encaminar su conducta a la misión de la institución y a la


investidura de servidor público y no va a recaer en su ocurrencia. Hipótesis sustentada en
las causas que originaron las medidas, según se observa en la siguiente tabla:

Ilustración 4. Resultados causas que originaron infracciones al Art. 27 Ley 1015 de 2006 en el
Departamento de Policía de Santander, año 2015.

36
40

35

30

25

20

15

10 6
3 2
5

0
No escuchó No entendieron la Infringió su deber Desconoce el
atentamente la orden dada por el consciente de su procedimiento o
orden impartida por superior. actuar. conducto regular al
el superior. actuar por su
inexperiencia.

Fuente: Encuesta realizada al personal que fue sancionado con medidas para encauzar la disciplina
durante el año 2015 en el Departamento de Policía de Santander.

El análisis de la información anterior, es que el 76.6% de los implicados incurrió en no


escuchar atentamente las órdenes impartidas por sus superiores. Las demás causas
muestran porcentajes menores. Es decir, hay una directa coincidencia con el total de
quienes tuvieron que realizar trabajos escritos (36 personas). Entonces, en efecto podría
afirmarse que quienes no atendieron las órdenes fueron expuestos a realizar trabajos
escritos. Esta coincidencia originó la revisión de folios de vida de quienes fueron objeto
de sanción con medida preventiva para encauzar la disciplina, al tenor de lo contenido en
el Artículo 27 de la Ley 1015 de 2006, correspondiente al período enero-junio de 2016,
encontrando en materia de reincidencia la siguiente información:
36

Ilustración 5. Resultados reincidencia de los sancionados a través de la aplicación de los medios


preventivos en la Policía de Santander, año 2016.

47

2015 2016

Fuente: Oficina de Control Interno Disciplinario del Departamento de Policía de Santander.

De los 47 uniformados sancionados en el año 2015, cinco reincidieron en conductas


que fueron objeto de sanción a través de la aplicación de los medios preventivos para
encauzar su disciplina. Es decir, que las medidas sí surtieron el efecto esperado:
direccionar el comportamiento de los uniformados hacia el bien actuar.
Al indagar por el efecto o impacto causado a nivel personal en la imposición de la
sanción se halló que para el 95,74% de los encuestados fue acto positivo. Sus razones:
Para 26 personas la medida les sirvió para redireccionar su actuar en el ejercicio de sus
funciones y para 19 tuvo incidencia en el ámbito laboral y en el personal. Los dos que
reconocieron un impacto negativo de la sanción aducen haber sido objeto de persecución
por parte de algunos de sus compañeros de trabajo (Ver siguientes gráficas)
37

Ilustración 6. Percepción del impacto de la medida preventiva en el Departamento de Policía de


Santander, año 2015.

45
45
40
35
30
25
20
15
10 2
5
0
EFECTO POSITIVO EFECTO NEGATIVO

Fuente: Encuesta realizada al personal que fue sancionado con medidas para encauzar la disciplina
durante el año 2015 en el Departamento de Policía de Santander.

Ilustración 7. Resultados: Razones por las que se considera un impacto positivo generado por la
sanción en el personal sancionado en el Departamento de Policía de Santander, año 2015.

30 26

25
19
20

15

10

0
Redireccionamiento en el ejercicio de Redireccionamiento en el ejercicio de
las funciones las funciones y en el ámbito personal

Fuente: Encuesta realizada al personal que fue sancionado con medidas para encauzar la disciplina
durante el año 2015 en el Departamento de Policía de Santander.
38

Entonces, se infiere que las medidas sí han sido efectivas al impactar en un mejor
desempeño de las funciones a su cargo, así como en su vida personal. No obstante, para
medir sus términos de real efectividad se hace necesario integrar el conocimiento y estricta
aplicación que de estos medios tienen los comandantes de estación. Por tal razón, se
realizó una encuesta aleatoria a 60 de los 78 comandantes de estación de Policía del
Departamento de Santander, en razón a la facilidad de acceso a la información y medios
tecnológicos con que cuentan, obteniéndose la siguiente información:

Ilustración 8. Reporte formal de la conducta reprochable por parte de los comandantes de las
estaciones de policía en el Departamento de Policía de Santander, año 2015.

41

19

Reporte formal a la Oficina de Atención al No reportó ninguna información


ciudadano

Fuente: Encuesta realizada a 60 comandantes de estación adscritas al Departamento de Policía de Santander.


39

Ilustración 9. Percepción de los comandantes de las estaciones de policía en el Departamento de


Policía de Santander respecto a la efectividad de los medios preventivos para encauzar la disciplina.

52

Impacto positivo y efectivo si se aplican Impacto negativo y poco efectivo


de acuerdo al conducto regular

Fuente: Encuesta realizada a 60 comandantes de estación adscritas al Departamento de Policía de


Santander.

Aun cuando el 100% de los encuestados manifiestan conocer los medios preventivos
para encauzar la disciplina en la Policía Nacional, sólo el 31,66% reportó al sistema
jurídico la imposición de aquellos. Igualmente, el 86,66% reconoce la efectividad de estos
medios si se aplican de conformidad al conducto regular, pues incrementa el nivel de
operatividad y buenos resultados en el comportamiento de sus subalternos. Por el
contrario, el 13,33% ve en ellos un impacto negativo dada cierta resistencia y bajo ánimo
en el cumplimiento posterior de sus funciones por quienes fueron objeto de los mismos.
Finalmente se indagó a los 60 encuestados respecto de la efectividad actual y real de
estos medios para encauzar y mantener la disciplina del personal a su cargo y se encontró
que 57 comandantes afirman que no son efectivos en la medida en que estos no se han
aplicado con el estricto sentido con el que fueron concebidos en la norma, mientras que
para tres sí hay efectividad porque alcanzan los fines pretendidos (Ver siguiente gráfico).
40

Ilustración 10. Resultados: Efectividad de los medios para encauzar la disciplina en el Departamento
de Policía de Santander, año 2015.

57

No han sido efectivos Han sido efectivos

Fuente: Encuesta realizada a 60 comandantes de estación adscritas al Departamento de Policía de


Santander.

Con base en la información recolectada a través de las encuestas realizadas y de los


resultados arrojados, se observa que los medios para encauzar la disciplina no cumplen
con la finalidad para la que fueron previstos, pues es escasa su aplicación por parte de los
comandantes de las diferentes estaciones de Policía en el Departamento de Santander, tal
y como lo reconocen estos mismos funcionarios, y así se observó a través de las
herramientas de recolección de datos empleados en esta investigación. Hay alto porcentaje
de funcionarios que es consciente de que no son efectivos si no se aplican y muy pocos
de ellos han hecho uso de los mismos. Entonces, de nada vale que existan normativamente
si no hay una apropiación por parte de los responsables en línea de mando, quienes sí
generan quejas que se tramitan por vía de investigaciones disciplinarias, con inicio de
procesos en la oficina de Control Interno Disciplinario del Departamento de Policía de
41

Santander. La intención no es que se colapsen estas dependencias en el país, sino que se


haga uso de medios preventivos para lograr impacto en la conducta de los uniformados.
De otra parte, fue posible determinar, que si bien hay aplicación de los medios para
encauzar la disciplina, éstos han sido reportados de manera formal por parte de los
comandantes de las diferentes estaciones de Policía que componen el Departamento de
Santander. Los comandantes encuestados afirman haberla aplicado, pero como no se
registra su evidencia en el formulario de seguimiento de cada policía, no permite verificar
su uso. Incluso, esta omisión tienen incidencia en la evaluación y clasificación del
personal, dado que, al tenor de lo regulado en el Decreto 1800 del 2000, estos eventos que
no afectan en la calificación anual sí permiten dejar un antecedente que posteriormente
puede ser tomando por el mando para la toma de decisiones en cuanto al desempeño se
refiere. Por consiguiente, las medidas preventivas que dicen haber impuesto los
comandantes y no se encuentran soportados en el Sistema Jurídico dela Policía Nacional
ni en sus formularios de seguimiento policial, no existen para la vida jurídica y no se
puede probar su aplicabilidad.
Finalmente, entendiendo la efectividad como la “capacidad de lograr el efecto que se
desea o espera” (RAE, 2016), los medios preventivos para encauzar la disciplina de los
miembros adscritos al Departamento de Policía de Santander, consagrados en el Art. 27,
inciso 1º de la Ley 1015 de 2006, se han convertido en letra muerta por su carente
aplicación e implementación.
42

Conclusiones.

Por su carácter especial la Policía Nacional, como las demás instituciones que hacen
parte de la fuerza pública, tienen dentro de su catálogo de premisas fundamentales el
mantenimiento de un comportamiento ético y disciplinario en la totalidad de sus
miembros. Por esta razón, la Ley 1015 de 2006 describe unos mecanismos con la finalidad
de mantener y encauzar la disciplina; unos de carácter preventivo y otros de carácter
correctivo. Los primeros fueron establecidos para facilitar el mando y orientar el
comportamiento de los subalternos; los segundos se determinaron para posibilitar la
aplicación del procedimiento disciplinario formal cuando a ello hubiere lugar. En
consecuencia, como el objeto de estudio de este trabajo se centró en “Determinar si los
medios preventivos para encauzar la disciplina de los miembros de la Policía Nacional en
el Departamento de Policía de Santander, contenidos en el Art. 27 Inc. 1º de la Ley 1015
de 2006 – Régimen disciplinario de la Policía Nacional – han sido efectivos en su
aplicación en el Departamento de Policía de Santander durante el año 2015”, se pudo
concluir que:
 La primordial actitud de los uniformados que fueron objeto de medidas preventivas,
correspondió a falencias en la comunicación al no escuchar o no entender las órdenes
dadas por sus superiores. Incluso, sólo el 3.07% del total de miembros de la Policía
Nacional que hacen parte del pie de fuerza del Departamento de Santander fueron
destinatarios de aquellas; porcentaje no significativo frente al total de miembros, al
confrontar con la existencia de procesos disciplinarios sobre conductas que no
constituían una falta y sí congestionaron la oficina de control interno disciplinario. El
medio preventivo de mayor utilización fue el trabajo escrito, mediante el cual se busca
algún grado de aprendizaje en los sancionados, por las temáticas variadas que se
asignan para realizarlos, precisamente, porque la mayor causal para que se aplique son
las fallas de comunicación, En todo caso, se resalta que hubo impacto positivo en la
actitud y conducta de los uniformados sancionados con esta clase de medios, dado el
reducido índice de reincidencia y el reconocimiento por parte de los destinatarios del
43

sentido que tiene dicho instrumento de prevención. Ellos reconocieron en un alto


porcentaje que la medida fue importante porque contribuyó a redireccionar su actuar
dentro del desempeño de sus funciones.
 Si bien es cierto sólo el 31.66% de los comandantes de estación del Departamento de
Policía de Santander dio estricta aplicación de los medios preventivos efectuando el
reporte a la Oficina de Atención al Ciudadano, un 92% consideró que para que sean
efectivos deben aplicarse con sujeción estricta al conducto regular, pues esto
incrementa el nivel de operatividad y buenos resultados en el comportamiento de los
subalternos.
 La efectividad de los medios preventivos para encauzar la disciplina estaría dada por
la rigurosidad con que éstos sean aplicados y su estricto reporte a la Oficina de
Atención al Ciudadano, pues así su fin persuasivo se estaría materializando y en
consecuencia se daría una disminución notoria en las investigaciones disciplinarias
que inician. Por consiguiente, se puede afirmar que hay efectividad en el ámbito
personal de quienes fueron objeto de sanción en el período indagado. Pero no así
respecto al ámbito institucional; pues su escaso uso, implementación y reporte, así lo
evidencian. Es decir, en el ámbito institucional estos medios preventivos no han sido
efectivos y no han cumplido la finalidad para la cual fueron estatuidos en la Ley 1015
de 2006, debido al escaso uso que de ellos se hace por parte de los comandantes de
las diferentes estaciones de Policía que conforman el Departamento de Policía de
Santander. Entonces, hay necesidad de que quienes ostentan algún grado que implique
el ejercicio del mando asuman con seriedad y responsabilidad el agotamiento de los
procedimientos tanto preventivos como correctivos previstos en la norma; pues no
pueden excusar su negligencia en el desconocimiento de ésta, como algunos
expresaron en las encuestas aplicadas, ya que son sujetos de capacitación constante en
diferentes modalidades desde las escuelas de formación.
44

3 Anexos

3.1 Encuesta aplicada a uniformados destinatarios de la medida preventiva


45

3.2 Encuesta aplicada a comandantes de estación responsables de aplicar la


medida preventiva
46

Referencias

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Disciplinario. [Ley 734 de 2.002]. D.O:44.699.

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para la Policía Nacional. [Ley 1015 de 2.006]. D.O:46.715.

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