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Observaciones experimentales:
DIAGRAMA DE FLUJO
REACCIONES QUÍMICAS
CÁLCULOS Y RESULTADOS
DISCUSIÓN E INTERPRETACIÓN DE LOS RESULTADOS
El pH de cada uno de los compuestos analizados varía dependiendo de la capacidad que tienen
los mismo para ionizarse en el agua y esto a su vez depende del par conjugado (acido – base
conjugada, base – acido conjugado) que posea el compuesto y cuál de estos dos permite la
hidrolisis. Por ejemplo, en el caso de la descomposición del NH4Cl en agua se produce NH4+
(ácido fuerte) pues es el ácido conjugado de NH3 que es una base débil. Por lo tanto el ion
amonio es quien reacciona con agua y genera iones H3O+ lo que produce una disolución en
equilibrio ácida (pH < 7) por otro lado el ion cloruro Cl- es una base muy débil pues es la base
conjugada de uno de los ácidos más fuertes (HCl) de esta manera el ion cloruro no reacciona
con el agua y no se hidroliza, por lo tanto ,la disolución final posee carácter ácido ya que la
hidrólisis de ion amonio ha producido un aumento en la concentración de iones H3O+ . Este
razonamiento también se aplica para las demás disoluciones; sin embargo, uno de los
compuestos analizados no produce un aumento o disminución de H+ ni OH , es el caso de
NaCl, considerada una sal neutra, y se debe a que su formación procede de HCl y NaOH , ácido
y base fuertes, respectivamente, por lo tanto no generan un equilibrio iónico, la disolución en
agua es completa y su ionización en el agua no genera una variación en el pH original (pH = 7).
Observaciones finales:
Conclusiones:
La actual normativa vigente obliga a que todas las aguas residuales que vayan
a ser vertidas a la red tengan un pH controlado y se mantenga dentro de unos
niveles tolerables, típicamente entre pH6 y pH8. Esto se consigue a través
de sistemas de dosificación, sistemas de neutralización o sistemas de regulación
de pH que trabajan con diferentes tecnologías:
Dosificación de ácido clorhídrico HCl
Dosificación de ácido sulfúrico H2SO4
Dosificación de sosa NaOH
Dosificación de CO2 (gas)
Si el agua a tratar tiene pH alto y queremos disminuir el pH, dosificamos ácido
clorhídrico HCl o ácido sulfúrico H2SO4.
Si por contra el agua a tratar tiene pH bajo y queremos aumentar el pH,
dosificamos sosa NaOH.
Un sistema de neutralización dispone un pHmetro para medir este valor en el
agua a tratar, y en función del su valor dosificar ácido o sosa. Cuando el pH está
dentro de los valores correctos se puede proceder a la descarga. El caudal de
ácido o sosa a inyectar depende del caudal de agua a tratar y del valor del pH
inicial.
La dosificación de CO2 gas es un método alternativo muy válido para tratar aguas
alcalinas en lugar de la dosificación de ácidos inorgánicos (ácido sulfúrico y
clorhídrico).
El CO2 es un gas inerte, incoloro y no tóxico, que en presencia de agua forma
ácido carbónico permitiendo la neutralización de aguas alcalinas y que aporta
innumerables ventajas:
1. Al ser menos peligroso y agresivo que los ácidos minerales, resulta más
seguro a la hora de su manipulación. Este gas no genera vapores tóxicos
ni quemaduras y elimina la posibilidad de sufrir las lesiones que se
generan en las operaciones tradicionales con ácidos.
2. Al ser un proceso automatizado que permite un funcionamiento continuo,
elimina todos los problemas de dosificación excesiva. Y, por lo tanto,
mejora todavía más las condiciones de seguridad operacional.
3. Mantiene los límites de neutralización por encima de un pH de 5 al no
existir la posibilidad de sobre acidificación, por lo que se elimina el riesgo
de una caída brusca del pH. Esto supone una reducción en los costes
relacionados con la corrección de pH, que por el contrario existen en los
sistemas tradicionales.
Cabe destacar que, la utilización de CO2 en la neutralización de aguas residuales
alcalinas permite el uso de sistemas de dosificación con una tecnología más
sencilla, segura y respetuosa con el medio ambiente.
RESUMEN:
En la industria química, muchos de las aguas residuales que se generan son enviados al mar;
sin embargo, existen regulaciones legales que impiden la contaminación del agua, es decir,
estas normas velan porque el pH o la salinidad de estas aguas no afecte la vida en el mar o a la
salud pública. Para eliminar dichos contaminantes (contenidos en las aguas residuales) se
utilizan métodos físicos, químicos y biológicos. Una vez tratada, el agua puede devolverse a la
naturaleza.
El cumplimiento de los actuales requerimientos ambientales hace necesario que las aguas
residuales industriales alcalinas, deban ser tratadas para reducir su pH a niveles tolerables. El
Dióxido de Carbono (CO2) es un gas inerte y no tóxico, que en presencia de agua forma ácido
carbónico permitiendo la neutralización de las aguas residuales. Esto constituye un método
alternativo y un sustituto potencial importante de ácidos inorgánicos (ácido sulfúrico y
clorhídrico) los que tradicionalmente se utilizan en la industria.
H2CO3 ⇆ HCO3- + H+
Las aguas naturales contienen carbonatos provenientes del lavado de rocas calizas, estas
reaccionan con el agua y se obtienen iones OH- y bicarbonato
De esta manera ya sean ácidos o bases las sustancias inmersas en las aguas residuales, estas
podrán ser neutralizadas por los iones que el CO2 logra realizar una vez disuelto en agua.
COMENTARIOS:
- En este caso, una buen alternativa de subsanar el tipo de daños (por aguas residuales) es el
CO2 , se utiliza a menudo pues disminuye los gastos y los peligros si es que se utilizaran H2SO4 o
HCl por ejemplo el CO2 no genera vapores tóxicos ni quemaduras. Mantiene los límites de
neutralización por encima de un pH de, por lo que se elimina el riesgo de una caída brusca del
pH.
PONLE MARCO A LA HOJA DE APLICACIÓN
INDUSTRIAL 😊