Beruflich Dokumente
Kultur Dokumente
PISA muestra una relación negativa entre el dinero que ganan los países de sus recursos
naturales y las habilidades de sus estudiantes. "En países con pocos recursos naturales
como Finlandia, Japón o Singapur, la educación es muy valorada en parte porque toda la
población ha entendido que el país debe ganarse la vida con su conocimiento y que éste
depende de la educación", asegura el estudio. A mayor capital de conocimiento acumulado,
habrá mayor desarrollo. En América Latina los estudiantes aprenden mucho menos que los
estudiantes asiáticos. A pesar de que los alumnos de nuestras regiones asisten 6 a 11 horas
diarias a la escuela, el nivel de conocimiento adquirido es mínimo en comparación con lo
que ocurre en Asia.
SOLUCIÓN: C
El texto resalta la importancia de la educación en el desarrollo de los países, y usa esta idea
para promover el incremento de la inversión de los países de América Latina. Esta
inversión sería, según el texto, el mejor camino al desarrollo.
SOLUCIÓN: B
Según el DRAE, determinar significa 'Señalar, fijar algo para algún efecto'. De acuerdo con
el texto las fallas en educación no solo tendrían efectos parciales en el futro de las naciones,
sino que serían determinantes, es decir, causas fijas del desarrollo económico. Las otras
alternativas no obedecen al contenido semantico requerido por el contexto lingüístico.
SOLUCIÓN: C
A. Conseguir el nivel básico en educación tiene efectos directos en el incremento del PBI.
B. No existe una relación directa entre la posesión de recursos naturales y el nivel
educativo.
C. El mundo moderno es altamente competitivo. El concepto de analfabetismo ha
cambiado.
D. El cambio de actitud hacia la educación debe concernir al Estado y a la sociedad.
E. América Latina debe su atraso cultural y económico a las políticas neoliberales.
SOLUCIÓN: E
La premisa E no es abordada de modo directo en el texto. Las otras ideas sí son explicadas
con claridad.
SOLUCIÓN: A
Continuar con una política netamente extractiva es contraproducente con la propuesta del
texto. Lo mejor es invertir en educación.
Texto 02
El Perú lleva más de diez años de crecimiento económico sostenido. Sin embargo, esto no se
refleja en la mejora el poder adquisitivo de las familias. Como en otros países, las riquezas se han
acumulado en pocas personas o empresas, mientras que las mayorías han visto disminuidos sus
ingresos.
Si bien la productividad de bienes y servicios se ha duplicado, esto no ha tenido un correlato en el
salario mínimo real, el cual creció solo 1%. Se infiere con este dato que el crecimiento económico
no es sinónimo de la mejora en el bienestar social.
La riqueza puede tener tres destinos: las utilidades de las empresas, los impuestos y los salarios.
En el país, solo las empresas se han beneficiado con la “bonanza económica”. El Estado y los
trabajadores solo han recibido una pequeña parte del beneficio del país: de cada 100 soles que se
producen en el Perú, solo 15.3 van a la caja fiscal vía impuestos (presión tributaria 2011) y 21.2 a
los trabajadores vía salarios, mientras que 63.1 representan las ganancias del capital y en menor
medida (10%) la de los independientes (excedente de explotación). El porcentaje del PBI que
reciben los trabajadores formales se ha reducido con respecto a épocas pasadas: 25.1% hace diez
años, y 30.1% en 1990.
Esta situación ha provocado que 250 mil peruanos abandonen el país cada año, a diferencia de los
50 mil que huían desesperados en la peor época de crisis de los años 90. ¿Por qué emigran más
peruanos en épocas de “bonanza”?
Ante este panorama no hay pretexto para aumentar el salario mínimo vital, pues se ha demostrado
claramente que las empresas cuentan con mayores ganancias, a diferencia de los años anteriores.
Si la población cuenta con más dinero, tendrán más capacidad de consumo, con lo que se
dinamizaría el mercado interno. No solo se trata del incremento del salario, sino del bienestar de la
sociedad, de la mejoría de condiciones para el estudio, el pago de deudas o la salud. Una
población con más poder adquisitivo y mejor educación genera una mejor democracia, es decir,
una sociedad más justa.
1. El principal propósito del texto es:
A. explicar los beneficios de la bonanza económica.
B. brindar datos sobre la emigración por motivos económicos.
C. discutir el concepto de democracia, en tiempo de bonanza.
D. justificar el incremento de salario mínimo vital.
E. ilustrar el descenso de salarios en el sector público.
SOLUCIÓN: D
El texto brinda cifras sobre el incremento del PBI para sustentar la idea de que es
necesario incrementar el salario mínimo vital.
SOLUCIÓN: E
SOLUCIÓN: D
Dados los argumentos del texto, es válido sustentar el salario mínimo, pues se ha
incrementado la productividad y el ingreso de los empleadores.
4. ¿Qué tema no se relaciona con el incrementar del salario mínimo, según el texto?
A. Bienestar económico
B. Consumismo
C. Salud
D. Pago de deudas
E. Educación
Solución: B
Solución: C
Recomendar en Facebook5.358
Twittear194
Enviar a LinkedIn11
Archivado en:
Higiene
Estilo vida
Medicina
Salud
Sociedad
Fotograma de la película 'La ducha'.
Enviar
Imprimir
Guardar
Según una encuesta realizada hace unos meses por la agencia de análisis de tendencias
Euromonitor, los brasileños pueden llegar a ducharse hasta doce veces de media a la
semana. Además del país carioca, los sociólogos sitúan a Colombia y Australia entre las
regiones menos alérgicas al agua, con diez y ocho baños semanales por persona. Muy
cerca les siguen Indonesia y México, con unas siete duchas respectivamente. A la cola
de este singular sondeo se encuentran los chinos, quienes al parecer solo se lavan una
vez cada dos días.
Los franceses, estadounidenses y españoles se mantienen en el promedio de la ducha
diaria. Como los indios, quienes por otra parte se lavan el pelo solo una vez por
semana. ¿Los últimos de la clase además de los chinos? Turquía, Alemania, Reino
Unido y –sorprendentemente– Japón, con unas costumbres más que cuestionables.
Habrá quien opine que la sinceridad de los encuestados debería ser un valor
terminante para dar por válidas las conclusiones –un extremo más que razonable si
tenemos en cuenta lo que nos encanta mentir a los humanos–, pero sus responsables
destacan las variables climáticas como argumentos que ofrecen solidez al resultado. En
román paladino: a mayor humedad, más necesidad de refrescarse.
¿Los últimos de la clase además de los chinos? Turquía, Alemania, Reino Unido
y Japón
La cosa viene de lejos. En febrero de este año la periodista Sarah Zhang, de la
web Gizmodo, se hacía eco de la estrategia de marketing que en los albores del siglo
XX motivó que los estadounidenses desarrollaran actitudes rayanas en la obsesión.
Según su testimonio, las empresas productoras de jabones, desodorantes y pastas de
dientes crearon anuncios que desnaturalizaron los hábitos de la sociedad, obligando a
la gente a gastar cantidades ingentes de dinero y amenazándola con el ostracismo
social si no dejaban de preocuparse por la halitosis o la sudoración.
En el siglo XX el aseo personal es también una batalla entre sexos. La compañía sueca
SCA publicó hace unos años un estudio en el que Suecia aparecía como –oh, sorpresa–
un referente de igualdad también a la hora del baño: si en el resto de países analizados
las mujeres se lavan más que lo hombres, en el paraíso escandinavo ellas van a la zaga.
Además el informe hincaba el diente en otras costumbres como depilarse, usar
cosméticos, ponerse accesorios o cuidarse las uñas. Según afirmaba el 84% de los
hombres y mujeres encuestados, en un escenario ideal ellas siempre deben depilarse
las piernas. Tan solo el 51% de las personas opinaba que “el hombre ideal” debe usar
colonia.