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Pero hay golpes y golpes, algunos golpes sacan sangre o dejan morados, incluso
un mal golpe puede producir la muerte, pero hay otros más sutiles que no se ven,
pero que se graban a fuego lento no sólo en mente sino en la identidad de ese niño
o de esa niña. Se graban en su "yo", y los frutos de estos golpes emocionales se
van a ver después en sus relaciones con personas significativas y en su relación
con el mundo.
Los autores han señalado que este tipo de agresiones se da básicamente por tres
factores:
2- la carencia afectiva
Está claro, que cuando se repiten los golpes físicos, pero sobre todo los psicológicos
o emocionales, se va agotando el amor. Nosotros los adultos sabemos como duele
el silencio, tal vez más que las palabras ofensivas. Ese silencio es el peor de los
castigos, ahora imagínese a un niño que no ha hecho nada y no se le habla, y no
se le abraza y acaricia, cómo se va conformando su identidad..., pensemos en eso.
Consecuencias de la violencia intrafamiliar en los niños
Todos estos golpes emocionales y psicológicos hacen tanto daño en la niñez porque
el niño o la niña no sabe defenderse; su mente apenas empieza a desarrollar
lentamente ciertos mecanismos de defensa para poder filtrar y analizar lo que ve y
oye. Su mente es como una esponja: recibe todo. No tiene capacidad para decir
esto es verdad o no es verdad, lo que dicen es justo o injusto. Por eso los mensajes-
golpes son como olas gigantescas que llegan sin control a lo más profundo de ese
ser indefenso. Pero en distinta es la niñez y el futuro de sus hijos cuando ellos
palpan el amor entre su padre y su madre, cuando ellos desde pequeños ven que
su madre recibe con un beso, un abrazo al padre que llega del trabajo, o cuando el
padre viene con un ramo de flores para su esposa o le da un beso a su esposa. Son
detalles que se van grabando en el alma de los niños, que van modelando su
personalidad, que van llenando de amor ese tanque-corazón. Créame, esa será la
mejor herencia que podrá dejar a sus hijos.
Una investigación de los psicólogos norteamericanos, el Dr. John Gottman y Dr. Neil
Jacobson. Señalan que los hombres maltratadores caen en dos categorías: pitbull
y cobra, con sus propias características personales:
Pitbull:
Solamente es violento con las personas que ama
El pitbull espía a su mujer, es celópata, cae bien a todas las personas, excepto a
sus novias o esposas.
Cobra:
Uno depende emocionalmente de otra persona, pero insiste que su pareja haga lo
que él quiere.
El cobra es un sociópata, frío, calculador, puede ser cálido. El maltrato no cesa por
sí solo.
Después de que la mujer ha sido físicamente maltratada y tiene miedo, a veces cesa
este tipo de abuso y lo reemplaza con un constante maltrato psicológico, a través
del cual le deja saber a su víctima, que el abuso físico podría continuar en cualquier
momento.
Se trata del abuso psicológico, sexual o físico habitual. Sucede entre personas
relacionadas afectivamente, como son marido y mujer o adultos contra los menores
que viven en un mismo hogar.
Hay mujeres que se avergüenzan por lo que les sucede y que hasta se creen
merecedoras de los abusos. Por eso prefieren mantenerlos en secreto y así esa
situación puede prolongarse durante años. Los que maltratan a sus víctimas lo
hacen de acuerdo a un patrón de abuso psicológico.
Igual que en el caso del alcohólico, el que golpea a una mujer o la maltrata
psicológica o sexualmente, lo primero que hará es negarlo. Negación es decir: "No,
es que yo le pego con razón". No hay ninguna razón para golpear a una mujer, ni a
nadie. Pero lo niegan. Dicen: "Yo no la he golpeado, yo no le hecho nada, sólo
tocarla".
También dentro de ese hábito de abuso psicológico está el abuso económico. "Si
dices algo no te voy a dar la mensualidad". Dentro de ese abuso psicológico de los
maridos que golpean (lo que se llama en psicología la triangulación), hay otro tipo
de abuso: utilizar a los hijos para hacerles sentir culpables a las esposas. En este
caso los hijos sirven de mensajeros: "dile a tu madre que..." Las amenazas a través
de los hijos, las amenazas de que le van a quitar al hijo, todos estos son abusos
psicológicos que preceden al abuso físico.
Todos estos abusos impiden que la mujer deje el hogar, ese hogar violento. Es que
esa violencia psicológica a que están sometidas muchas mujeres, es más horrorosa
que el abuso físico. Pregúntele a cualquier mujer a la cual han maltratado
físicamente qué es lo que le duele más; si las palabras hirientes, los desprecios o
los golpes. Los golpes se pasan, los abusos psicológicos, los insultos, los
desprecios se clavan en el corazón.
Aislamiento: Control abusivo de la vida del otro, mediante vigilancia de sus actos y
movimientos, escucha de sus conversaciones, impedimento de cultivar amistades,
etc.
Desprecio: Tratar al otro como inferior, tomar las decisiones importantes sin
consultar al otro
¿Qué es mejor, tener un padre que golpea a su madre y que luego golpeará a sus
hijos, o no tener padre? Se les hace mucho más daño a los hijos cuando ven que
su padre golpea a su madre. Para los niños pequeños la madre es la base de toda
su vida, la base de su afectividad, la base de su seguridad. Si una madre es
golpeada, sus hijos se derrumban afectivamente.Es mucho mejor separase.
Cuando se pregunta a algunas mujeres por qué aguantaron maltrato durante años,
la respuesta más común es ésta: "Por mis hijos; no quería que se criaran sin un
padre". Parece una respuesta válida, pero si la analizamos profundamente
descubrimos su inconsistencia. Sucede que en una situación de violencia los hijos
también sufren. El crecimiento en una atmósfera de miedo, tensión y terror influirá
negativamente en su desarrollo emocional y más tarde se manifestará en el
abandono escolar, en el uso de drogas, en desórdenes psicológicos y en violencia
y delincuencia.
En muchos casos influye el factor económico. Soportan cuanta vejación venga con
tal de no perder la seguridad económica para sí y sus hijos. Se trata generalmente
de mujeres con poca preparación académica, conscientes de que sin el marido no
podrían vivir cómodamente.
Violencia doméstica y violencia de género
Las mujeres que aguantan una relación abusiva indefinidamente acaban perdiendo
su salud física y mente, se enferman, toda la familia termina enferma. Las mujeres
en situaciones abusivas pierden su autoestima. No saben protegerse, ni se dan
cuenta del peligro que corren.
Primero hay una raíz cultural histórica (relacionada con el sistema patriarcal).
Durante mucho tiempo nuestra sociedad ha sido muy machista, el hombre ha creído
que tiene el derecho primario a controlar, a disciplinar con severidad, incluso a
abusar de la vida de la mujer y de los hijos. Eso ha sucedido bajo la apariencia del
rol económico del hombre, proveedor de la alimentación. Dicho rol se ha ido
manteniendo en nuestra sociedad, es por ello que, hoy en día la mujer sigue siendo
víctima de abusos, violaciones, cobra menos, recibe acoso en el trabajo...
Otra causa es la cultura actual. La gente se tira de los pelos. ¿Por qué pasa esto?
El modelo presente de nuestra sociedad está reforzando el uso de la fuerza para
resolver los problemas. Por eso el abusador usa la fuerza física, para mantener el
poder y el control sobre la mujer, porque ha aprendido que la violencia es efectiva
para obtener ese fin de control y como ellos no han sufrido las consecuencias, las
mujeres se han callado.
Cuando uno toma alcohol o usa cualquier droga, estos centros quedan como un
barco sin timón. Y ¿Qué le pasa a un barco sin timón? Pues se estrella contra las
rocas. Sobre todo la agresividad, el instinto sexual, quedan sin control. Entonces
viene el golpear a la mujer y a los hijos bajo el efecto del alcohol y el abusar de la
mujer sexualmente.Los recuerdos, los valores, los consejos, cuando uno usa o
abusa del alcohol o drogas, no funcionan y viene la violencia doméstica.
Ese aprendizaje negativo se arraiga tanto que muchas veces pasa de generación
en generación. Si a esto se añade la "glorificación" de la violencia en los medios de
comunicación, podemos entender el por qué muchos seres humanos recurren a la
violencia, a veces con una frialdad que asusta más que el mismo acto violento.
Entendemos que las personas que sufren hambre endémica se subleven y hasta se
alcen en armas. ¿Por qué no entendemos que una mujer pisoteada, escarnecida,
degradada en lo más íntimo de su ser pueda explotar y volverse violenta? Eso,
aunque no se justifique, se explica.
Así podríamos continuar sobre el tema. Esto sin hablar de las violencias de
palabras, de tono de voz cuando le hablan a su pareja o hijos. Negarles la
importancia que tienen en la familia, no escuchar sus opiniones. Todo es violencia.
Pero no es sólo esa violencia; son los asesinatos, sobre todo perpetrados por
menores o por mayores; asesinatos que, muchas veces no tienen explicación lógica,
sino que suceden porque sí. Los grandes problemas sociológicos y de conducta que
enfrentamos hoy nos indican que la sociedad está ávida de valores, de principios,
de conocimientos, de buscar una mejor vida, pero sus componentes no las
conocemos bien y, por lo tanto, la parte que se comporta bien no está capacitada
para enseñar o ayudar a la otra. Me gustaría saber si los estudiantes secundarios
que salen a la calle violentamente son objeto de estudio de parte de profesores,
directores y autoridades educativas. Si priva la conversación y el entendimiento con
ellos o se cree que la mejor solución es la represión o la respuesta violenta que crea
más violencia.
Defiéndete: Aprende técnicas de defensa personal. Las más recomendadas son las
de origen oriental pues la sostiene una filosofía de no agresión. DENUNCIALA. No
considere a la violencia intrafamiliar como algo natural o privado, aunque ocurra en
otro hogar es un delito que se penaliza.
No agredas: Usa la comunicación positiva para resolver los conflictos. Los gritos,
ofensas e insultos invitan a la violencia.
Está demostrado estadísticamente que las mujeres son las más vulnerables cuando
se habla de violencia, y las denuncias así lo demuestran. Niños y adultos de la
tercera edad completan el escalafón de uno de los flagelos que afecta a la sociedad.
Muchas veces esto se da de manera silenciosa, situación que dificulta
visualizar y solucionar el problema.
Lo que sucede, es que la agresión es utilizada por los hombres a fin de mantener
una relación de discriminación, desigualdad y de poder. Dicho estado de tensión se
manifiesta a través de agresiones físicas, sexuales, verbales y psicológicas,
perpetradas generalmente dentro del ámbito familiar.
Pero cuando nadie interviene en una situación como esta, la misma se cronifica y
se vuelve en algo difícil de revertir. Silvina Bentivegna, abogada explica la
violencia es un tema álgido en el cual se produce un daño real o potencial para
la salud, el desarrollo y la dignidad de la persona que lo sufre, de allí la
importancia de combatirla a tiempo.
Violencia doméstica.
Maltrato infantil.
Abuso físico.
Violencia en el noviazgo.
Violación marital.
Violación perpetrada por una persona con la que se tiene una cita.
Acoso.
Los Centros para el Control y Prevención de las Enfermedades ("CDC", por sus
siglas en inglés) ofrece los siguientes datos sobre la violencia familiar y las mujeres:
Física: Se refiere a palizas o golpes que causan lesiones físicas que pueden
incluir moretones, fractura de huesos, sangrado interno e incluso la muerte.
A menudo, el maltrato comienza con contactos leves y con el tiempo empeora
para convertirse en acciones más violentas.
TIPOS DE MALTRATO:
1. Maltrato Físico:
2. Maltrato Emocional.
MALTRATADORES:
- Son todas aquellas personas que cometen actos violentos hacia su pareja o
hijos; también puede ser hacia otros en general.
- Sumisos y dependientes
- Conformistas.
- No expresan su afecto.
Aprender a:
- Comprenderse.
- Respetarse.
Muchas veces dentro de las familias no se les presta la adecuada atención a ciertas
actitudes de sus miembros, y muchas veces con un insulto o un empujón que se ve
como algo leve se comienza una violencia dentro del ambiente familiar. La violencia
en la pareja no es permanente, sino que se da por ciclos; la interacción varia entre
periodos de calma y afecto hasta situaciones de violencia que pueden poner en
peligro la vida.
Periodo de
Acumulación
calma o luna
de tensiones
de miel
Modelo Estratégico
La terapia estratégica no busca las causas profundas del problema ya que lo que
se considera, no es el modo en que el problema se ha formado en el pasado, sino
como éste se mantiene en el presente. Es más, un saber cómo que un saber por
qué, es decir, se observa cómo funciona el problema que se presenta dentro del
sistema relacional, centrándose en la interacción presente y en las conductas
observables que mantienen el problema. En otras palabras, cómo ha intentado el
sujeto, hasta el momento, combatir o solucionar el problema y cómo es posible
cambiar esa situación problemática de la manera más rápida y eficaz.
Este enfoque rompe con la creencia según la cual los problemas que persisten
durante mucho tiempo necesitan obligatoriamente de un tratamiento igual de largo
y tormentoso. La terapia estratégica no es una intervención superficial y sintomática,
sino una intervención radical ya que apunta a la reestructuración de las maneras en
que cada uno construye la realidad que luego afronta, se trata por lo tanto de
construir realidades terapéuticas.
Para intervenir en la familia porque pensamos que los problemas de conducta y los
trastornos emocionales, así como la violencia, tienen poco o nada que ver con algo
del interior de la persona, con su mente, su personalidad, con un diagnóstico o un
problema químico. Más bien, es la relación entre las personas lo que causa
problemas en el individuo, ya se trate de niños, jóvenes o adultos, y es la
modificación de las relaciones lo que lleva al individuo a cambiar y a superar sus
problemas. Por eso, para entender al individuo, debemos entender a la familia (sus
relaciones, sus valores, sus necesidades y su contexto social).
Abordaje Cognitivo
La terapia emocional emotiva de Ellis nos dice que no importa tanto los hechos
que están involucrados en una determinada situación, sino la manera de evaluar
cada evento como positivo o negativo, esto último determinará la respuesta
emocional.
TERAPIA SISTÉMICA
ESTRATEGIAS:
ESTRATEGIAS