En nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo, Amén.
Dios de infinita caridad, de amor absoluto y de poder ilimitado, que nos has creado a tu imagen y semejanza en las condiciones de varón y mujer para que podamos tener un hogar santo, ante ti damos infinitas gracias por la familia que nos has regalado y te presentamos con humildad esta plegaria para que suba delante de ti. Dios Padre, Hijo y Espíritu Santo, Tú que Eres esa familia divina intratrinitaria, de la cual emanan toda la fortaleza, todo el amor y toda la unidad de nuestras familias. A ti te consagro cada uno de los miembros de nuestro hogar, para que sean santificados en Tu presencia, para que sean protegidos de todo adversario y enemigo, para que sean iluminados en las decisiones que toman y defendidos en los caminos en los cuales Tú los has puesto, que la unidad de nuestro hogar sea irrompible como la de la Santísima Trinidad. Ayúdanos a que todas las familias del mundo, sean un lugar propicio para el crecimiento y desarrollo adecuado de los niños y de los jóvenes. Que los padres y las madres comprendan su responsabilidad de dar amor a sus hijos y educarlos en la Fe. También oramos por aquellas familias que viven momentos de dificultad. Pidamos a Dios para todas ellas, el regalo del amor verdadero y profundo, que llena los corazones de esperanza y de paz, y permite superar todos los obstáculos y diferencias, todos los miedos y todas las violencias, todas las incapacidades y las cobardías. Ayúdanos a que nuestras familias permanezcan unidas por la oración en los momentos de gozo y de dolor. Enséñanos a ver a Jesucristo en los miembros de nuestra familia especialmente en los momentos de angustia. Haz que el corazón de Jesús Eucaristía haga nuestros corazones mansos y humildes como el suyo y ayúdanos a sobrellevar las obligaciones familiares de una manera santa. En este día no puedo dejar de pensar en los niños, que son la semilla del mañana, la esperanza de un mundo mejor, un hermoso don dado por Ti. Te pido por aquellos que están por nacer y están siendo interrumpidos sus nacimientos. También por los niños que sufren el terror de la guerra, el miedo a perder a sus familias, que viven llenos de dolor, angustia y desesperación. Dales paz Señor. Señor mío, te presento a mis hijos, te pedimos que los guardes como a la niña de tus ojos, escóndelos bajo la sombra de tus alas, muéstrales tus caminos, enséñales tus sendas. Encamínalos en tu verdad, porque tú eres compasivo y misericordioso desde toda la eternidad, eres el Dios de su salvación. A ti Dios mío, te pido por todos los que se sienten agobiados por el peso de los años, tu amorosa presencia permitió que se prolongases sus días en la tierra, alegra su corazones cansados y batidos, ahuyenta los fantasma de la soledad, del abandono y del desprecio y rodéales de amparo y calor humano en su diario vivir. Te pedimos por la mujer que es esposa: que sea reconocida, valorada y ayudada por su esposo, compañero fiel en la vida conyugal; que ella se respete y se dé a respetar, para vivir ambos la comunión de corazones y anhelos que se prolongan en la fecundidad de una nueva vida humana, participando así en la máxima obra de la creación: el ser humano. Señor mío, te presento a los enfermos de nuestra familia, ten compasión de los que sufren en su cuerpo, de los que sufren en su corazón y de los que sufren en su alma, bendícelos a todos y haz que muchos vuelvan a encontrar la salud, que su fe crezca y se vayan abriendo a las maravillas de tu amor, para que también ellos sean testigos de tu poder y de tu compasión. Finalmente, te pedimos por intercesión de la Sagrada Familia de Nazaret, que también nuestras familias sean auténticas escuelas del Evangelio y pequeñas Iglesias domésticas. Que cada día nos amemos más unos a otros, como Dios nos ama, y enséñanos a perdonarnos mutuamente nuestras faltas, como Tú perdonas nuestros pecados. Que aquí sepamos ser condescendientes con las debilidades del otro, y que sepamos utilizar nuestras virtudes que nos diste sin que el otro se sienta humillado por nuestra ayuda, has pues, Señor que siempre la Fe, la Esperanza y la Caridad reinen en nuestro hogar como en el hogar de Nazaret, y consagro esta mi familia a la fiel custodia de San José, de la Santísima Virgen María y de Tu Hijo Jesucristo nuestro señor. Amén