Pascual Zanone, Jean Delfo

Código: 17150034 – Sociología

Perú en el Cambio Social en América Latina

CONQUISTADORES ESPAÑOLES: LA GRAN REBELIÓN INCA CONTRA PIZARRO

Para entender lo que ha pasado en la conquista de hace quinientos años se ha confiado en las
crónicas escritas por los conquistadores españoles, pero éstas tergiversan la historia por
intereses de los españoles en aquella época. Hay un gran interés por conocer los detalles de
cómo un puñado de españoles sometió a un gran Imperio como el Inca.

Los Incas eran los romanos del nuevo mundo creando el sistema de carreteras mas complejo de
Sudamérica pero su mayor talento era el de conquistadores. En Lima se ha estado trabajando
en las excavaciones de unos cementerios incas llamado Cementerio de Puruchuco. Se habían
arrojados cuerpos de forma caótica encima del cementerio que no seguían los rituales de
enterramiento en el mundo Inca como si se encontraron en las capas más profundas. Casi todos
presentaban señales de violencia extrema, casi todos los cráneos habían sido aplastados y
orificios en los esqueletos. Es posible que sean víctimas de los españoles y los primeros restos
forenses de las batallas de la conquista. Para salir de la duda se hicieron algunos exámenes de
los esqueletos en la Universidad de New Haven (Estados Unidos) en su laboratorio de
criminalística, sobre todo examinar lo que podría ser la primera herida por arma de fuego en
América de hace 500 años en el cráneo de un esqueleto a quien se le ha bautizado como
Mochito. Podría ser el impacto de un arcabus del siglo XVI. Los resultados arrojaron que se
encontraron fragmentos de hierro y algunas balas de mosquete se hacían con este metal.

Por otra parte, los restos que presentan fracturas con armas de piedra nos dice que la mayoría
no murió por los españoles sino por otros indios. De setenta individuos encontrados en
Puruchuco solo tres mostraban que habían muerto por las armas españolas. Se tienen referentes
de lucha contra el asedio en Lima pero principalmente de indios contra indios, es decir, que los
españoles que lucharon estuvieron protegidos por indios que estaban de su lado. El papel de los
aliados indios minimizados sistemáticamente por las crónicas fue fundamental para el éxito de
la conquista. Nadie ha encontrado más pruebas de esto que la historiadora María
Rotwstorowsky. A Lima la salvó no los conquistadores heróicos, sino un ejército enviado por la
madre de la concubina de Pizarro.

Los conquistadores no eran soldados, eran aventureros y sus cronistas intentaban justificar la
conquista y para magnificar la gloria de los españoles exageraron, las crónicas resaltan las
penurias que pasaron los conquistadores en sus travesías, pero ignoran la ayuda que recibieron
de sus aliados. En 1536 se dio la rebelión Inca contra los españoles y un enorme ejército Inca se
dirigió hacia la Costa para asediar Lima, fue probablemente en estas circunstancias que Mochito
y su gente perdieron la vida ya que es el único acontecimiento que puede explicar sus heridas y
la posición estratigráfica. Se puede comparar las narraciones que contienen los documentos
europeos con pruebas materiales como ésta, con la realidad, una especie de trabajo forense
para corroborar o refutar esas narraciones.

Los españoles estaban en deuda con los aliados y no querían que recordaran la deuda. Después
de la conquista las promesas se olvidaron. Debido a intereses políticos se borró de la historia
todo lo referente a la ayuda de los indígenas a Pizarro. Es la gran historia no contada de la
conquista y son los huesos de Mochito y su gente quienes han dado testimonio de esta verdad
largamente olvidada.
 Pascual Zanone, Jean Delfo

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INCAS IMPERIALES

Fue durante el gobierno del Inca Pachacutec que se convirtió en un Imperio el gobierno incaico
a mediados del siglo XV. En ese interés por expandirse, los Incas chocaron con otras etnias que
tenían las mismas pretenciones, los Chankas, su principal enemigo durante la expansión.

Los Chankas avanzaron al Cusco en la época que gobernaba el Inca Wiracocha pero fue su hijo
Cusi Yupanqui quien tomó la defensa y con sus fuerzas rechazaron el avance de los Chankas
dándole el triunfo a los incas. Curiosamente los andahuaylinos actuales se sienten orgullosos de
ser descendientes de los chankas porque fueron los únicos que pudieron hacer frente a los incas,
a pesar que no salieron victoriosos.

Pachacútec reconstruyó el Cusco y fue el responsable de la creación del estado, es el reformador

de la propia nobleza. Es alguien a quien se le atribuye como una forma religiosa. Una de sus
obras atribuidas es Macchu Picchu, un centro urbano para refugiarse en caso de alguna invasión
poderosa cuya naturaleza era de propiedad de la élite de los incas.

Las conquistas de Pachacutec se debieron a causa de la instauración de un ejército disciplinado

poderoso y una burocracia estatal cada vez más profesional. Se definió el sistema de panacas y
mitaes, el servicio de gobernadores y espías, estableció el rol de los curacas, el ejército y reformó
el sacerdocio procurando disminuir el poder de éstos. Escogió a su hijo Amaru Yupanqui para
que lo suceda, pero no cumplió las expectativas por lo que fue reemplazado por su hermano
Túpac Yupanqui quien resultó un vasto guerrero que conquistó varias regiones.

Con Tupac Yupanqui las fronteras del Tawantinsuyo llegaron alcanzar hasta seis países en la
actualidad. Fue el gran expandor el imperio inca. El que empezó con las construcciones de
Sacsayhuamán y en el plano religioso el Santuario del Sol en una isla del Lago Titicaca que se
trataba de un complemento a la divinidad de la costa. Antes de morir eligió como sucesor a su
hijo Tito Cusi Hualpa, quien al ser reconocido como inca se le llamó Huayna Cápac.

Éste último conservó los territorios que conquistó su padre Túpac Yupanqui y logró sofocar cada
intento de rebelión de las otras etnias. Estableció una especie de segunda capital en lo que ahora
es Ecuador por la inmensidad del imperio. Cayó víctima de las epidemias que trajeron los
españoles cuando se encontraba en Quito muriendo al poco tiempo. Huáscar y su hermano
Atahualpa, ambos hijos de Túpac Yupanqui entraron en guerra por el trono y terminaron
desmoronando lo que construyeron sus antecesores, el poderoso estado panandino.