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Justificación
El último conjunto de módulos de la ESPAC estuvo determinado por la intención de
encuadrar el proceso de formación de los catequistas en la estructura del catecumenado de
adultos. Se veía necesario que la formación ofrecida a los catequistas supliera las
deficiencias que pudiera haber en ellos con relación a su iniciación cristiana.
Esto trajo como ventaja que se incorporaran al proceso formativo de la ESPAC aspectos
pedagógicos de la iniciación cristiana que lo enriquecieron, desde el punto de vista de su
impacto en la asimilación de la formación, pero esta opción hizo que la duración del
itinerario se prolongara más allá de lo conveniente y que pudiera perderse un tanto de
vista la especificidad de la ESPAC como elemento perteneciente a la tercera etapa del
proceso evangelizador, en cuanto formación específica orientada a desarrollar un servicio
evangelizador particular.
Si bien es cierto, en todas las etapas del proceso evangelizador hay que tener en cuenta la
dimensión kerigmática y el propósito de despertar y animar la fe, no lo es menos que cada
etapa debe aportar lo suyo propio, máxime cuando se trata de un servicio tan fundamental
para la vida de la Iglesia, como lo es la catequesis, y que requiere de una cualificación tan
especial.
Al respecto, es necesario tomar en cuenta que la mayoría de las diócesis del país están
implementando procesos de iniciación cristiana de jóvenes y adultos, a la luz de los
documentos y textos publicados por el Departamento de Catequesis y Biblia de la
Conferencia Episcopal. Este progreso podría conducir paulatinamente a que se admitan al
proceso de formación para el servicio catequístico sólo a personas que ya hayan hecho los
correspondientes procesos de iniciación cristiana. Si ello fuere así, mantener el itinerario
actual de la ESPAC sería ocasión de repeticiones.
Por otra parte, es innegable que la mentalidad de las personas y sus formas de aprendizaje
evolucionan continuamente y, así mismo, las metodologías y didácticas. Baste pensar, tan
sólo, en los recursos digitales. Por ello resulta importante revisar los módulos actuales
para que se actualicen desde la óptica de la incorporación de nuevos recursos, de las
metodologías y de la diagramación. Esto, por su puesto, sin dejar de lado el espíritu de la
formación ESPAC, ni sus apuestas formativas esenciales.
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Objetivo
Elaborar una nueva colección de módulos para la ESPAC que responda mejor a la
especificidad de la formación de los catequistas para su servicio evangelizador y haga
suyos los avances comunicativos y metodológicos desarrollados en los últimos años.
Estructura general de los nuevos módulos
El ser del catequista (Primera dimensión: un semestre)
El saber del catequista (Segunda dimensión: dos semestres)
El saber hacer del catequista (Tercera dimensión: un semestre)
La cuarta dimensión, el querer hacer, la formación de la voluntad del catequista, no se
trabajará en un módulo aparte, sino que deberá ser tenida en cuenta en todos.
Plan temático de los módulos y de los encuentros
Primera dimensión: el ser del catequista
Módulo 1: El catequista, discípulo y misionero
1.1 Amigo de Dios que hace que otros seamos amigos de Dios.
1.2 Conoce a Jesús, lo ama, lo sigue y lo sirve.
1.3 Vive en y de la comunidad de los discípulos de Jesús.
1.4 En formación y conversión permanentes.
Módulo 2: La vocación y misión del catequista
2.1 Llamados por Dios: iniciado en la fe y la vida cristiana, conoce sus carismas
y los pone al servicio de la Iglesia.
2.2 Ministerio de la catequesis y misión del catequista.
2.3 La iglesia discierne, verifica, capacita y envía a los catequistas.
2.4 Edificar la iglesia: de la iglesia y para la iglesia, ubicación del ministerio en
el conjunto de la acción evangelizadora de la Iglesia y sus etapas.
Módulo 3: Experto en humanidad.
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3.1 Se conoce a sí mismo y conoce las relaciones de los demás. Sabe discernir y
acompañar.
3.2 Conoce la historia y conoce los interrogantes más profundos de los
corazones humanos.
3.3 Virtudes humanas que pide y que cultiva.
3.4 Conoce los procesos y sabe desarrollar procesos. Paciencia y perseverancia.
Módulo 4: Espiritualidad del catequista
4.1 Centrada en Cristo Maestro, con referencia trinitaria, neumatológica y
eclesiológica.
4.2 Entusiasta espiritualidad de la comunidad y la misión.
4.3 El reino de Dios es su motivo y su horizonte.
Ya: bienaventuranzas, sermón de la montaña, misericordia, preceptos
evangélicos.
Pero todavía no: esperanza que da seguridad, serenidad y confianza, llamado
a la eternidad con Dios.
4.4 Mirada sobre la realidad socio pastoral y sincero ardor por la construcción de
un mundo mejor.
La realidad social de las estructuras sociales en las que vive: política, economía, educación,
medio ambiente, etc. Y la realidad pastoral es una realidad interna de la
Iglesia, el estado real de los procesos pastorales, la situación de la fe de laicos,
religiosos, sacerdotes…
RETIRO ESPIRITUAL
Segunda dimensión: el saber del catequista
Módulo 5: La revelación
5.1 Jesucristo, revelador del Padre.
5.2 El proceso de la revelación.
5.3 Las fuentes de la revelación
- Sagrada Escritura
- El Magisterio
5.4 Consecuencias catequísticas del concepto cristiano de revelación.
Módulo 6: La Sagrada Escritura
La Sagrada Escritura (se puede desarrollar en los 4 hilos de oro que atraviesan la Biblia: promesa,
elección, alianza y ley)
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Módulo 7: Jesucristo, hijo de Dios y salvador de la humanidad
7.1 La identidad trascendente de Jesucristo como Hijo de Dios.
7.2 La vida de Jesús como camino de salvación.
7.3 La Pascua de Jesús.
7.4 Consecuencias catequísticas del cristocentrismo de la fe.
Módulo 8: Trinidad y eclesiología
8.1 La afirmación fundamental de la fe cristiana: Dios es amor.
8.2 El misterio de la Trinidad.
8.3 La Iglesia.
8.4 Consecuencias catequísticas del carácter comunional del misterio cristiano.
SEMINARIO: PSICOLOGÍA GENERAL
Módulo 9: El ser humano y su vocación en Cristo
9.1 La visión cristiana del ser humano: su condición creatural, el carácter divino
de su vocación, su condición corpóreo-espiritual, su dimensión social.
9.2 El pecado y la gracia.
9.3 El destino escatológico del ser humano y de la humanidad en su conjunto.
9.4 Consecuencias catequísticas.
Módulo 10: La vida cristiana como comunión con Cristo y sus mediaciones
10.1 La vida cristiana como comunión con Cristo.
10.2 La oración.
10.3 La liturgia y los sacramentos.
10.4 Consecuencias catequísticas.
Módulo 11: La vida cristiana como seguimiento de Jesucristo
11.1 El discipulado como seguimiento de Jesús.
11.2 El nuevo mandamiento, centro y principio inspirador de la moral cristiana.
11.3 Moral de la vida.
11.4 Moral sexual.
Módulo 12: La doctrina social de la Iglesia
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SEMINARIO: PSICOLOGÍA EVOLUTIVA
Tercera dimensión: el saber hacer del catequista
Módulo 13: Pedagogía de la iniciación cristiana
13.1 Pedagogía de Dios, de Cristo y de la Iglesia.
13.2 La pedagogía de la fe está al servicio del diálogo de salvación y del
encuentro con Cristo.
13.3 La pedagogía de la iniciación es educación a la fe.
13.4 La pedagogía de la fe es acción del Espíritu Santo.
Módulo 14: Pedagogía catecumenal e inspiración catecumenal de la catequesis
14.1 El modelo de la iniciación cristiana es el catecumenado bautismal.
14.2 El catecumenado es responsabilidad de toda la comunidad cristiana.
14.3 Principios de pedagogía catecumenal y mistagógica.
14.4 El catecumenado de adultos y la catequesis de adultos, criterios
inspiradores y estructurantes de todas las demás situaciones de iniciación
cristiana.
Módulo 15: Principios pedagógicos de procesos e itinerarios para acompañar las
diferentes situaciones de iniciación cristiana hoy
15.1 Diferencias y relaciones entre procesos e itinerarios.
15.2 El encuentro con Cristo eje articulador de toda pedagogía en la fe.
15.3 Diferentes situaciones de iniciación cristiana hoy (edades).
15.4 Diferentes situaciones de iniciación cristiana hoy (culturas, mentalidades y
ambientes).
Módulo 16: La comunidad y el catequista mistagogos
16.1 La comunidad cristiana es el origen, el camino y la meta de iniciación
cristiana.
16.2 Pedagogía del acompañamiento.
16.3 Pedagogía mistagógica: Unión biblia-liturgia.
16.4 Pedagogía mistagógica: teología sacramental y sacramentos de iniciación
cristiana.
SEMINARIO: DIDÁCTICAS CATEQUÉTICAS
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Criterios para la redacción de los módulos
1. Caracterización de los módulos
Un módulo está compuesto por cuatro encuentros.
Cada encuentro tiene un objetivo y está dividido en dos partes:
Trabajo personal, previo al encuentro grupal, cuya duración es de dos horas
aproximadamente.
Ese trabajo individual tiene los siguientes momentos:
● Oración personal con base en la Palabra de Dios.
● Texto con el tema de fondo del encuentro.
● Ejercicio de asimilación personal de lo expuesto en el texto.
● Lectura complementaria (Sugerencia bibliográfica o remisión a página
digital). Pueden ser videos, grabaciones, capítulos de libros, números de
documentos del magisterio, lecturas patrísticas).
● Trabajo de campo sobre el tema.
Trabajo Grupal
● Lectura meditada y orante de la Palabra.
● Preguntas para propiciar la asimilación en grupo del tema de fondo.
● Pautas para compartir el trabajo de campo.
● Ideas para la síntesis sobre el tema que el animador del grupo propondrá al
final del encuentro.
Pautas de redacción
Tener en cuenta que es un texto dedicado a jóvenes y a adultos. Respecto de lo segundo se
habla hoy de la andragogía.
Exponer de manera clara la enseñanza de la Iglesia con aportes teológicos actuales y con
un vocabulario comprensible.
Tener presente que todos los encuentros deben contribuir a la formación integral del
catequista.
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Considerar el contexto sociocultural del país y de Latinoamérica.
Procurar escribir textos sencillos, de fácil comprensión para un público de diversos niveles
socio cultural.
Evitar las frases muy largas o construidas con muchos períodos. Así mismo no construir
párrafos extensos, para que la diagramación quede aireada.
Respetar el número de caracteres que será señalado oportunamente.
Contar con la asesoría de la editorial.
Evitar aparatos críticos prolijos e incluir solamente las citas indispensables.
Ser muy cuidadosos en la elaboración de las preguntas, de las pautas de reflexión y, sobre
todo, de los ejercicios de campo para que sean fácilmente comprensibles y no resulten de
difícil respuesta o ejecución.