Sie sind auf Seite 1von 7

ÍNDICE

CAPÍTULO I: Biografía de Tito Livio.


1. Lugar y fecha de nacimiento
2. Pasantía por Roma
3. Maestro del futuro
emperador: Claudio
4. Amistad con el emperador
Agusto
5. Tito Livio como historiador
de Roma

CAPÍTULO II: Tito Livio y


su personalidad como escritor.
1. Características de la escritura de Tito Livio

CAPÍTULO III: Breve análisis a su Obra cumbre


de Tito Livio-Historia de Roma desde su
fundación.
CAPÍTULO I
Biografía de Tito Livio

Tito Livio fue un Historiador latino. Instalado en Roma probablemente a partir


del año 30 a.C., se interesó por la retórica y escribió diálogos morales, que
después dejó de lado para consagrarse a la redacción de una gran historia de
Roma, Ab urbe condita libri (más conocida como las Décadas), que le valió el
favor del emperador Octavio Augusto. Sólo se conservan 35 libros de los
142 que componían la obra, que cubre desde la fundación de la ciudad hasta
el año 9 a.C. Pieza cumbre de la prosa latina del final del período clásico,
para su composición se sirvió de archivos y de historiadores antiguos a los
que rara vez cita (por lo que su obra carece de fiabilidad respecto a algunas
épocas) e intercaló pequeñas reflexiones en medio de la narración, marcada
por un tono épico y dramático. Livio concebía la historia desde un punto de
vista moral, y, más que una obra científicamente construida, la suya es la
aportación de un poeta que canta con entusiasmo el esplendor del pueblo
romano. Muy admirado por sus contemporáneos, sirvió de modelo a
historiadores posteriores e influyó en los poetas épicos.
1. Lugar y fecha de nacimiento

Tito Livio nació en (Patavium, hoy Padua, Italia, h. 64 a.C. - id., 17 d.C.).

Padua

2. Pasantía por Roma


Descendiente de una familia acomodada, Tito Livio adquirió una
buena formación cultural en Grecia, y estudió retórica y filosofía
en Padua y más tarde en Roma. Su infancia coincidió con los
últimos acontecimientos que precipitaron la crisis republicana
hacia la monarquía cesariana; asumió la toga viril cuando
Padua, junto con toda la Galia Cisalpina, fue incorporada por
Augusto a los dominios de Roma. En adelante, el futuro
historiador vería en Roma a la madre común. La "patavinitas"
("paduanidad" o peculiaridades propias de Padua) que en Tito
Livio o más probablemente en su lenguaje vislumbraba Asinio
Polión permite creer que su cultura debió de formarse sobre
todo en la ciudad natal; en ella habría madurado el espíritu
conservador debido al cual mantendría ciertas simpatías
pompeyanas y afirmaría no saber si el nacimiento del César
había de considerarse un bien o un mal para Roma.

Con todo, tal inclinación conservadora, poco personal y todavía


menos partidista, no fue sino consecuencia de una ética
patriótica que le sitúa en la misma tradición de Horacio y Virgilio,
como cantor de las antiguas glorias republicanas y, al mismo
tiempo, de la paz restaurada por el príncipe. Livio fue amigo de
Octavio Augusto, quien le llamaba "pompeyano" por el espacio
que dedicó en su obra a las grandes figuras de la República. De
su fama y prestigio dan cuenta Plinio el Joven y Plinio el
Viejo, Séneca, Quintiliano, Marcial y Tácito. Se han perdido sus
obras filosóficas, recordadas por Séneca, y la carta al hijo donde
habla de Cicerón como modelo de oratoria.
En su madurez, Livio vivió al margen de la política, dedicado a
redactar, entre el 28 a.C. y el 17 d.C., su extensa obra
histórica Ab urbe condita (Desde la fundación de la ciudad). En
ella desarrolló la historia de Roma desde su fundación hasta el
año 9 a.C. De los 142 libros que originalmente la componían
sólo se han conservado los diez primeros, que abarcan desde
Rómulo y el período de los siete reyes hasta el año 293 a.C., y
los comprendidos entre el libro XXI y el XLV, que tratan sobre las
campañas de Aníbal, la segunda guerra púnica, la tercera guerra
macedónica y los sucesos ocurridos hasta el año 170 a.C.

Fue al parecer al día siguiente de la batalla de Actium, que


devolvió la paz y concordia al imperio romano agitado por un
siglo de guerras civiles, cuando Tito Livio concibió el proyecto de
narrar la historia de Roma en una obra que por su amplitud de
líneas, elevación de miras y nobleza de forma fuese digna de la
grandeza del tema; de estas cualidades carecían las
narraciones, por lo demás extensas, de los analistas de la época
ciceroniana. En el 27 o 26 a. de C., Livio publicaba los primeros
libros de su obra, que le granjearon la admiración universal; y ya
después consagró a su gigantesco empeño el resto de su vida.
Los 142 libros que llegó a componer constituyen la obra más
voluminosa de toda la literatura latina.
3. Maestro (Tito Livio) del futuro emperador:
Claudio (Tiberio Claudio César Augusto Germánico)

Tito Livio fue contratado como su tutor para enseñarle historia,


con la asistencia de Sulpicio Flavio.

4. Amistad con el emperador Agusto

Es célebre la relación que entabló Tito Livio con el emperador


Augusto, lo que se demostraba en las lecturas públicas de su
obra; sin embargo, pueden apreciarse en la obra de “Tito Livio”
críticas hacia el imperio de Augusto que refutan tal condición de
legitimidad. Al parecer el historiador y el gobernante quien era
su mecenas eran muy amigos y eso permitió que la obra del
primero se plasmara tal como éste lo decidiera.

5. Tito Livio como historiador de Roma

Historiador latino. Instalado en Roma probablemente a partir del


año 30 a.C., se interesó por la retórica y escribió diálogos
morales, que después dejó de lado para consagrarse a la
redacción de una gran historia de Roma, Ab urbe condita libri
(más conocida como las Décadas), que le valió el favor del
emperador Octavio Augusto. Sólo se conservan 35 libros de los
142 que componían la obra, que cubre desde la fundación de la
ciudad hasta el año 9 a.C.
Livio concebía la historia desde un punto de vista moral, y, más
que una obra científicamente construida, la suya es la
aportación de un poeta que canta con entusiasmo el esplendor
del pueblo romano. Muy admirado por sus contemporáneos,
sirvió de modelo a historiadores posteriores e influyó en los
poetas épicos.

CAPÍTULO II: Tito Livio y su personalidad


como escritor.
2. Características de la escritura de Tito Livio

Tito Livio no utilizo fuentes primarias (documentales); si no


exclusivamente de fuentes secundarias (obras literarias). En
cuanto a su concepto y método historiográfico Tito Livio se sitúa
como un historiador desde una perspectiva nacionalista y no
universalista.

Su método es analista y relata los acontecimientos año por año.


Livio ordenó la historia año por año, siguiendo la técnica
analítica, y articulando el relato en bloques de cinco libros o
"péntadas". Se basó en historiadores como Polibio de
Megalópolis, utilizó numerosos recursos formales y de
contenido, y usó la lengua latina posterior a Cicerón. Alternó, sin
mezclarlos, hechos civiles de carácter político y social con
episodios militares o diplomáticos, y aunque a menudo se valió
de un estilo propagandístico y moralizante para exaltar el
pasado de Roma, logró a lo largo de la obra una admirable
unidad y una cuidada organización. Para conseguir viveza en la
narración recurrió al relato, a los discursos, a la descripción de
personajes y a determinados episodios dramáticos, logrando
una magistral exposición de los hechos.

CAPÍTULO III: Breve análisis a su Obra cumbre


de Tito Livio-Historia de Roma desde su
fundación.

Das könnte Ihnen auch gefallen