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PALABRAS”
Hechos 3, 1-11
INTRODUCCIÓN AL ENCUENTRO
Invocación: En el nombre del Padre, y del Hijo, y del Espíritu Santo. Amén.
Canto: Se sugiere un canto que la comunidad sepa sobre el tema.
Ambientación: En el pasaje bíblico que meditaremos en este octavo encuentro
vamos a descubrir que en el nombre de Jesucristo los apóstoles realizan los
signos y prodigios que manifiestan el poder de Dios, concedido a ellos en favor
de los enfermos, los que sufren, los paralíticos, los ciegos, los incapacitados,
etc.
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En aquel tiempo, estaba Juan con dos de sus discípulos y, fijándose en Jesús que pasaba,
dice:
– «Éste es el Cordero de Dios.»
Los dos discípulos oyeron sus palabras y siguieron a Jesús. Jesús se volvió y, al ver que lo
seguían, les pregunta:
– «¿Qué buscáis?»
Ellos le contestaron:
– «Rabí (que significa Maestro), ¿dónde vives?»
Él les dijo:
– «Venid y lo veréis.»
Entonces fueron, vieron dónde vivía y se quedaron con él aquel día; serían las cuatro de la
tarde. Andrés, hermano de Simón Pedro, era uno de los dos que oyeron a Juan y siguieron a
Jesús; encuentra primero a su hermano Simón y le dice:
– «Hemos encontrado al Mesías (que significa Cristo).»
Y lo llevó a Jesús. Jesús se le quedó mirando y le dijo:
– «Tú eres Simón, el hijo de Juan; tú te llamarás Cefas (que se traduce Pedro).»
Para las pistas de meditación del evangelio de hoy, comienzo con el comentario realizado por
el Papa Emérito, Benedicto XVI, en el 15 de enero de 2012:
Y otro punto para nuestra meditación, podría ser, el fijarnos en el discípulo Andrés , como
comunica su experiencia rapidísimamente, “hemos encontrado al Mesías”, no puede ocultarla,
se hace instrumento de encuentro con el Señor, “lo llevo a Jesús”. ¿Qué nos esta pasando a
los que hemos tenido la dicha de encontrarnos con el Señor? ¿Dónde esta la pasión de ser
vehículo de Buenas Noticias? ¿Nos vemos portadores de un tesoro que necesita el hombre de
nuestro tiempo? Todos necesitamos testigos que nos acerquen al Señor, y tú también eres
necesario para que muchos otros tengan la dicha de recibir este tesoro.