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GRUPO: 3

Caso:

LIDERAZGO VERSUS DIRECCIÓN

Cuando hablamos de liderazgo versus dirección, estamos refiriéndonos a dos conceptos

complementarios. En realidad podríamos decir: influir en conductas versus conseguir resultados
con los demás.

El liderazgo es la capacidad de influir en las conductas de otras personas o grupos. La Dirección

es el conjunto de procesos y actividades realizadas a través de un equipo para conseguir
resultados positivos.

La vía para conseguir el éxito en ambas áreas estribaría en saber integrar los objetivos propios
junto con los del equipo en un proyecto común que sería más que la suma de las partes:

En el gráfico observamos cómo los objetivos del directivo difieren sustancialmente de los del
equipo y, por consiguiente, los objetivos comunes son mínimos.

Para lograr la integración de los objetivos de ambas partes en unos objetivos comunes, el
directivo debe saber:

 ¿Cuál es la motivación de cada miembro del equipo, es decir, que es lo que le mueve
fundamentalmente en el trabajo?
 Saber prever el comportamiento del equipo, dirigirlo y controlarlo.

La frase "el palo y la zanahoria" responde a la concepción clásica de la Dirección. Dos son las
legitimidades básicas del directivo: autoridad y competencia.

La autoridad es aquélla que le es conferida al directivo desde arriba, la competencia es su

capacidad profesional.

Esta concepción del directivo parte de un tipo de trabajador medio que es perezoso,
irresponsable, partidario del mínimo esfuerzo, etc., de quien, en definitiva, sólo se puede
obtener resultados con políticas "duras".
A través de esta visión clásica, la Dirección aparece como algo estático en el tiempo en
concordancia con la idea de que la empresa es también estática, cerrada y en un medio
ambiente casi impermeable.

La visión moderna de la empresa y del trabajador ha cambiado radicalmente. Hoy se considera

a la empresa inmersa en un ambiente permeable, en continuo cambio y con unas fuertes
competencias e interrelaciones sectoriales. Al mismo tiempo, el tipo de empleado
predominante ya no es el vago por naturaleza, sino aquél que se plantea el trabajo como una
parte más de su vida, tiene ambiciones de realización y progresión profesional y responde a
estímulos que tienen que ver con la autorrealización, la mejora del desempeño y la promoción
profesional.

En estas condiciones, una nueva legitimidad se ha venido a añadir a las dos anteriores
(autoridad, competencia): la confianza. Esta es la legitimidad que aportan los propios
subordinados. En el logro de esta legitimidad son fundamentales para el líder –directivo el
comportamiento ético y la buena comunicación.

LIDERAZGO Y PODER

Todo líder tiene poder. Existen básicamente dos tipos de poder:

 El poder conferido por la autoridad: proviene del cargo que se ejerce. Es la legitimidad
que ostenta quien tiene los niveles más altos en la empresa.
 El poder personal: deriva de las propias características del líder que le llevan a mantener
buenas relaciones con sus colaboradores y que hace que éstos se sientan
comprometidos con él.

Ambos tipos de poderes están interrelacionados y es conveniente que se den en un líder. Es

decir, se posee más poder personal cuanto mayor es la autoridad que se tiene en la empresa y
más autoridad cuanto mayor es el poder personal.

Ahora bien, ello no se produce en todas las circunstancias, provocando conflictos y desajustes
en las organizaciones. Además, conviene saber que ningún tipo de poder se mantiene
indefinidamente en nuestra empresa.

EFICACIA DE LOS DIVERSOS ESTILOS DIRECTIVOS

Son muchas las características que podemos anotar, pero nos vamos a referir a las que
consideramos fundamentales:

 La cultura de la empresa, es decir, el sistema de valores, comportamientos y estilos que

dirigen nuestra empresa. Por tanto, no será igual de eficaz dirigir con un estilo
participativo una organización más o menos jerarquizada o una donde predomina el
paternalismo.
 La naturaleza del trabajo que realicemos, es decir, para un trabajo más rutinario será
más eficaz un alto comportamiento hacia la tarea.
 Si tenemos que actuar con rapidez, obviamente no tendremos tanto tiempo disponible
para consultar a los subordinados.
 Las características propias de cada líder: sus valores, su estilo, su forma de pensar, etc.
 El tipo de subordinado que componga la empresa. Es fácil comprender que unos pueden
ser más útiles para unas actividades o para otras. O que, según su madurez, unos
requieran un tipo de liderazgo u otro.
 Ahora bien, de todas estas circunstancias la fundamental es la relación que en cada momento
establezcan el líder y los subordinados. Es a esa relación a la que todo líder ha de prestar mayor
atención, centrando su análisis en valorar cuál es el grado de madurez que tienen sus
empleados o subordinados.

El grado de madurez de los subordinados lo podemos evaluar tomando en consideración:

 Su capacidad, es decir, el conjunto de conocimientos y habilidades necesarios para

realizar la tarea que se le confía.
 Su voluntad, es decir, el compromiso, la motivación, el deseo de ejecutar las tareas
encomendadas.

Ambos factores están estrechamente relacionados, de tal manera que la madurez de un equipo
o de un conjunto de colaboradores es el resultado del querer (motivación para hacer) y el saber
(el conocimiento y habilidad para hacerlo).

CASO PRÁCTICO A RESOLVER:

LIDERAZGO VERSUS DIRECCIÓN

Ud. es el jefe de ventas de una empresa de electrodomésticos que tiene su sede social en el
corredor de Linares (Guadalajara). Cuenta, dentro de sus equipos de vendedores, con D. Jaime
Salazar Perón a quien quiere promocionar a jefe del equipo de ventas de Guadalajara.

DATOS DEL VENDEDOR

 Lleva trabajando en la empresa 4 años.

 Sus resultados en último ejercicio han sido excelentes y avalan que es un buen
vendedor.
 Al proponerle Ud. que se haga cargo de equipo, D. Jaime se mostró inseguro.

SE PIDE:

1. Averigüe qué nivel de desarrollo tiene D. Jaime Salazar para desempeñar tal
puesto que Ud. ha pensado:

El nivel de desarrollo sería Dificultad (media) puesto que. D. Jaime Salazar al ofrecerle
el nuevo cargo de equipo, él mostro una inseguridad de sí mismo, lo cual pueden
influenciar algunos aspectos como.
 No está efectivamente capacitado para desempeñar el nuevo cargo.
 Falta de experiencia.
 Temor a decidir dentro del equipo de trabajo, puesto que es otro nuevo
cargo que el deberá desempeñar.
D. Jaime Salazar podría hacerse cargo del nuevo equipo de trabajo mediante,
capacitaciones, incentivo en su salario, etc. Ya que él posee las capacidades y habilidades
para ejercer el nuevo puesto, ya que avenido demostrando un buen desempeño en su
trabajo durante los años que ha estado en la empresa.
Esto se fundamenta en el liderazgo de dirigir.

2. ¿Cuál sería el estilo de liderazgo más adecuado a aplicar por Ud. con el citado
vendedor?

Estilo democrático

Adaptando este estilo de liderazgo podremos caracterizar por ser participativo e

incluyente, suele buscar un consenso general y la satisfacción máxima posible de todas
las opciones y posesiones. Esto hace que el líder solicite la participación de sus
colaboradores en la toma de decisiones consultándolos o haciendo por medio de
votaciones.