CADA VEZ SOMOS MENOS, PORQUE DÍA A DÍA NOS ESTÁN

CALLANDO

RESUMEN:
La Violencia contra la Mujer en el Perú es uno de los flagelos más frecuentes que aqueja a nuestra
sociedad. Día a día tomamos conocimiento de nuevos casos por los diversos medios de
comunicación, donde observamos mujeres con rostros desfigurados y a otras siendo veladas en
un ataúd, porque fueron brutalmente silenciadas, en su mayoría por parte de su pareja
sentimental.

Ante esta problemática, el Estado, a través del Poder Legislativo, procura combatir la violencia
de género promulgando leyes más drásticas, pero ¿cuán eficientes son estas leyes?, ¿realmente
a través de dicha normativa se está logrando erradicar la violencia contra la mujer?

Lamentablemente estas y otras preguntas tienen como respuesta un no, entonces ¿qué es lo que
está fallando?

De acuerdo a las últimas estadísticas, el Perú es el tercer país con el más alto índice de violencia
contra las mujeres y Feminicidio a nivel de Latinoamérica, según datos del Ministerio de la Mujer
y Personas Vulnerables (MIMP), las estadísticas arrojan que en el Perú al día se reportan 11
casos de violencia en pareja, siendo la tasa más alta la que se registra en Lima.

ABSTRACT
Violence against Women in Peru is one of the most frequent scourges that afflicts our society.
Every day we take knowledge of new cases by the various media, where we see women with
disfigured faces and others being veiled in a coffin, because they were brutally silenced, mostly
by their sentimental partner.

Faced with this problem, the State, through the Legislative Power, seeks to combat gender
violence by enacting more drastic laws, but how efficient are these laws? Is it really through this
regulation that violence against women is being eradicated?

Unfortunately these and other questions have a no answer, so what is wrong?

According to the latest statistics, Peru is the third country with the highest rate of violence
against women and Feminicide in Latin America, according to data from the Ministry of Women
and Vulnerable Persons (MIMP), statistics show that in the Peru is reporting 11 cases of partner
violence, with the highest rate being recorded in Lima.

Palabras claves: violencia contra la mujer, feminicidio, operadores de justicia.

Escrito por: María Milagros MENA

VERA

disfigured faces and others being veiled in a coffin, because they were brutally silenced, mostly
by their sentimental partner.

Faced with this problem, the State, through the Legislative Power, seeks to combat gender
violence by enacting more drastic laws, but how efficient are these laws? Is it really through this
regulation that violence against women is being eradicated? .

Unfortunately these and other questions have a no answer, so what is wrong ?.

 El término violencia contra la Mujer
aparece por primera vez en La Declaración
sobre la Eliminación de la Violencia contra la
Mujer, aprobada en Resolución de la Asamblea
General de Naciones Unidas 48/104, del 20 de
diciembre de 1993, publicada el 23 de febrero
de 1994 (ONU,1993), que establece de manera
clara y específica esta tipología de violencia,
estipulando en su artículo primero que la
violencia contra la mujer es todo acto de
violencia basado en la pertenencia al sexo
femenino, que tenga o pueda tener como
resultado un daño o sufrimiento físico, sexual
o psicológico para la mujer, así como las
amenazas de tales actos, la coacción o la
privación arbitraria de la libertad, tanto si se
produce en la vida pública como en la vida
privada.
Exponiendo asimismo dicho documento
internacional que los actos que constituyen
violencia contra las mujeres, son los siguientes:
1. La violencia física, sexual y psicológica que se
produce en la familia, incluidos los malos
tratos, el abuso sexual de las niñas en el hogar,
la violencia relacionada con la dote, la violencia
por el marido, la mutilación genital femenina y
otras prácticas tradicionales nocivas para la
mujer, los actos de violencia perpetrados por
otros miembros de la familia y la violencia
relacionada con la explotación.
2. La violencia física, sexual y psicológica
perpetrada dentro de la comunidad en
general, inclusive la violación, el abuso sexual,
el acoso y la intimidación sexual en el trabajo,
en instituciones educacionales y en otros
lugares, la trata de mujeres y la prostitución
forzada. 3. La violencia física, sexual y
psicológica perpetrada o tolerada por el
Estado, dondequiera que ocurra.
La violencia contra la mujer, se ha
convertido en uno de los flagelos más
preocupantes de nuestra sociedad, día a
día se tienen noticias de mujeres
agredidas por parte de su pareja o por
cualquier otro individuo que habiendo
tenido o no una relación sentimental, se
cree con el derecho de denigrarla,
violentarla, menospreciarla; hombres que
se creen el dueño de éstas, que dicen
amarlas, pero que ese amor es enfermo y
obsesivo, que los lleva a cometer los
crímenes más crueles y aberrantes.
Según cifras oficiales del
Ministerio de la Mujer y Personas
Vulnerables (MIMP), en el Perú al día se
reportan once casos de violencia de
pareja, siendo la más alta tasa la
registrada en Lima; asimismo las
estadísticas arrojan que en el Perú el 85%
de los feminicidios y las tentativas son
cometidos por la pareja o ex pareja de la
víctima, teniéndose que en año 2017 se
perpetraron 121 casos a nivel nacional y
las tentativas de feminicidio alcanzaron
las 247, siendo que ocho de cada diez
hechos de violencia contra la mujer se
produjeron en un lugar íntimo.
Ante dicho tsunami de violencia
contra la mujer, el Estado, a través del
poder Legislativo, busca ponerle un alto a
este problema, creando y promulgando
leyes; habiendo dado un paso importante
con la entrada en vigencia de la Ley N°
30364 - LEY PARA PREVENIR,
SANCIONAR Y ERRADICAR LA VIOLENCIA
CONTRA LAS MUJERES Y LOS
INTEGRANTES DEL GRUPO FAMILIAR,
publicada en el diario oficial El peruano,
con fecha 23 de noviembre del 2015, con
la cual se derogó la ya desfasada Ley N°
26260 – LEY DE PROTECCIÓN FRENTE A
LA VIOLENCIA FAMILIAR.
 La Ley N° 30364 en comparación
con la Ley N° 26260, reconoce la
violencia contra la mujer y la define en el
artículo 5 como: “cualquier acción o
conducta que les causa muerte, daño o
sufrimiento físico, sexual o psicológico
por su condición de tales, tanto en el
ámbito público como en el privado”; es
decir, reconoce que la violencia contra la
mujer no solo se da en el contexto
familiar, sino que también se da en el
ámbito público y privado, lo cual
conocemos como violencia de género.
Asimismo, la Ley N° 30364,
reconoce una gama de derechos con los
que cuenta la víctima, dentro de ellos el
derecho a un acceso a la información en
torno a la denuncia, el derecho a la
atención de salud gratuita en cualquier
establecimiento de salud del Estado;
además del reconocimiento de derechos
laborales y en el campo de la educación,
por lo que se puede inferir que nos
encontramos frente a una Ley garantista
y protectora que busca salvaguardar en
todos los aspectos a la mujer,
determinando plazos cortos,
determinando la actuación de los
operadores de justicia (PNP, Ministerio
Público, Poder Judicial) y estableciendo
Medidas de protección, con las que se
busca prevenir, cesar y erradicar todo
acto de violencia contra la mujer.
Entonces, si tenemos una Ley
proteccionista, que busca sancionar la
violencia contra la mujer; entonces nos
preguntamos ¿por qué esta Ley no está
siendo eficaz en la lucha de la violencia
contra la mujer?, ¿qué es lo que está
fallando?, ¿por qué a las mujeres nos
siguen maltratando y cruelmente
asesinando?, acaso es que la intención
fue buena, pero se quedó solo en el papel.
Dando respuesta a las interrogantes
del párrafo anterior, se tiene que son
muchos los factores que influyen a que la
violencia contra la mujer no disminuya,
dentro de éstos encontramos la desidia,
falta de sensibilidad, falta de compromiso
y deficiencia por parte de los operadores
de justicia, puesto que en el caso de los
miembros de la PNP encargados de
recepcionar las denuncias a las víctimas,
omiten hacerlo, o en todo caso omiten
remitir la denuncia al Juzgado de Familia
en el plazo de 24 horas, tal y como lo
establece la Ley vigente; mientras que
otras veces pese a existir flagrancia
delictiva no proceden con la detención del
agresor.
Por su parte el Juzgado de Familia,
que de conformidad a la Ley N° 30364,
debe dictar las Medidas de Protección que
requiera la víctima en el plazo de 72
horas, en caso las circunstancias
ameriten, omiten hacerlo, aduciendo la
existencia de carga procesal; mientras
que la Fiscalía Penal, pese a la existencia
de lesiones en las víctimas, expresadas
en el correspondiente Certificado Médico
legal, habiendo flagrancia y habiéndose
detenido al agresor, disponen su libertad;
entonces de qué estamos hablando.
El estado debe adoptar las medidas
pertinentes, a fin de sancionar a los malos
funcionarios públicos, no basta con
promulgar leyes que serán vistas mas no
observadas ni aplicadas.
Mujer rompe el círculo de la
violencia, valórate y exige tus derechos,
decídete a decirle basta a la violencia y
atrévete a denunciar, porque el amor
construye más no destruye.
REFERENCIAS:

- LEY N° 30364 - LEY PARA PREVENIR,

SANCIONAR Y ERRADICAR LA
VIOLENCIA CONTRA LAS MUJERES Y
LOS INTEGRANTES DEL GRUPO
FAMILIAR.

- LEY N° 26260 - LEY DE PROTECCIÓN

FRENTE A LA VIOOLENCIA FAMILIAR.

- DECLARACIÓN SOBRE LA
ELIMINACIÓN DE LA VIOLENCIA
CONTRA LA MUJER.

- RECUPERADO DE:
http://rpp.pe/peru/actualidad/violen
cia-de-genero-en-el-peru-las-cifras-
a-las-que-se-refirio-el-papa-
francisco-noticia-1100670