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Tostación Oxidante:
Tostación reductora
La tostación con reactivo reductor, o tostación reductora, se utiliza para
eliminar parcial, o totalmente cuando ello es posible, el oxígeno de los
óxidos metálicos sin necesidad de fundir la carga mineral, facilitando así
su posterior extracción piro o hidrometalúrgica.
a. tostación parcial
Esta tostación disminuye el grado de oxidación del metal lo que facilita su
lixiviación ácida como es el caso del paso de MnO2, a MnO en la llamada
tostación solubilizante, y, la volatilización arsénico y antimonio en forma
de As2O3 y Sb2O3 en la tostación volatilizante; también se emplea como
preparación mineralúrgico para eliminar por separación magnética en la
tostación magnetizante, parte de la ganga férrica de menas metálicas, ya
que convierte la hematites: Fe2O3 en magnetita: Fe3O4
Su objetivo es:
Transformar la mena por oxidación parcial, quedando el metal
parte en su forma química original y parte como óxido.
Variantes:
Reacción inicial:
Reacciones posteriores:
Principio:
tostación clorurante
Esta tostación, que utiliza como reactivos sustancias clorurantes sólidas y
gaseosas, tiene por objeto transformar las menas metálicas,
indistintamente sulfuros u óxidos, en cloruros. Al igual que en la tostación
reductora, la acción directa sobre las menas se produce por agentes
presentes en la atmósfera del reactor, bien aportados a ella directamente,
como en el caso de las cloraciones con cloro gas o indirectamente al
formarse cloruros volátiles, entre ellos el gas HCl, en presencia de cloruros
alcalinos o alcalino térreos en la carga, principalmente NaCl o CaCl2. En
la atmósfera del reactor están presente, además, gases oxidantes, como
O2, o reductores, como CO, según se cloruren respectivamente sulfuros u
óxidos.
Su objetivo es:
Transformar una mena (sulfuro, óxido) en un cloruro soluble o volátil
para su posterior tratamiento
Variantes:
Al igual que en el caso de los óxidos, los metales base son también más
afines por el cloro que por el azufre, incluido ahora el hierro ferroso. Sin
embargo, al contrario que en los óxidos, la afinidad relativa del Ca, y Mg, por
el cloro y oxígeno es superior a la que presentan por el azufre lo que impide
emplearlos como agentes de cloración de estos compuestos.
Las tostaciones por gas cloro, tanto de óxidos como de sulfuros, y la de estos
con NaCl en atmósfera oxidante, son exotérmicas y de nivel de temperatura
moderado, algo por encima de los500°C pudiendo ser térmicamente
autógenas si la concentración de la mena es suficiente.
Principios:
Tostación Carburante:
Tostación Magnetizante:
Tostación Magnetizante:
4.2.2 FUSIÓN
4.2.3TIPOS DE HORNOS
Horno cuba
Debido a su gran capacidad el horno de cuba da tratamiento en poco volumen,
funcionamiento sencillo, y es económico.
Desventajas: Perdidas de CO en los gases y dificultad para recuperarlas y el
difícil control del proceso de funcionamiento
Horno reverbero
Ventajas
Desventajas
Aunque hay una reacción rápida, ésta tiene poca selectividad. Es decir,
resultan materiales impuros.
Bajo rendimiento de las reacciones químicas.
A veces es necesario repetir las etapas, lo que implica mucho gasto de
energía
Son procesos altamente contaminantes ya que emanan mucho CO2 y
sulfuros (SO2)
Tiene un consumo energético elevado, por lo tanto se limita a minerales de
alta ley.
Proceso:
La tostación debe efectuarse por encima de los 700ºC, en aire y con continua
agitación. El exceso de aire hay que controlarlo con el fin de que no baje del
4,5% el contenido de SO2 en los gases del horno; esto para el control del
proceso y para los requerimientos de la planta de ácido sulfúrico. En la figura 2
se puede ver el diagrama de Kellog para el sistema Zn-S-O a 800 y 1200 K. En
el diagrama de la figura se ha señalado la zona de trabajo del tostador en la que
se garantiza la conversión total del sulfuro en óxido a la mayor temperatura.
En condiciones normales de temperatura, por encima de los 900ºC, el sulfato de
zinc no debería estar en el horno (como se muestra en los diagramas de Kellogg
de la figura 2. Se puede demostrar fácilmente que, si bien a 725ºC no existe
sulfato en ausencia de SO2, en la atmósfera del horno, con un 6-12% de SO2
se forma un sulfato básico, el 2 ZnSO4∙ZnO, que es estable hasta 850ºC.
Se puede producir una sulfatación del polvo que sale del horno a medida que
se enfrían los gases. La producción de SO3 se incrementa con la
concentración de O2 en el gas por lo que el exceso de aire debe ser
controlado (10-15%). Así el SO3 es inferior al 1% del azufre total tostado y el
peligro de sulfatación disminuye.
La eliminación de azufre como sulfuro llega a ser de hasta del 0,1%, estando
el azufre también presente como sulfato en cantidades todavía mayores que
varían entre el 0.5 y el 2,5%.
Este sulfato es beneficioso pues sirve para paliar las pérdidas de ácido en el
circuito, eso sí, siempre que no sea una cantidad excesiva ya que exigiría
descargas periódicas.
El mineral usado para el proceso de lixiviación puede ser o bien oxidado o bien
sulfurado. Por ejemplo, para un mineral oxidado, una reacción de lixiviación ácida
simple puede ser ilustrada mediante la reacción de lixiviación del óxido de zinc:
ZnO + H2SO4 → ZnSO4 + H2O
En esta reacción el ZnO sólido se disuelve, formando sulfato de zinc disuelto en agua.
En muchos casos pueden ser usados otros reactivos para lixiviar óxidos. Por ejemplo, en la
metalurgia del aluminio, el óxido de aluminio reacciona son soluciones alcalinas:
Al2O3 + 3H2O + 2NaOH → 2NaAl(OH)4
La lixiviación de sulfuros es un proceso más complejo debido a la naturaleza
refractaria de minerales de sulfuro. Esto implica a menudo el uso de recipientes a
presión, llamados autoclaves. Un buen ejemplo del proceso de autoclave de
lixiviación se puede encontrar en la metalurgia del zinc. Se describe mejor por la
siguiente reacción química:
2ZnS + O2 + 2H2SO4 → 2ZnSO4 + 2H2O + 2S
Esta reacción se produce a temperaturas superiores al punto de ebullición del agua,
creando así una presión de vapor dentro del recipiente. El oxígeno se inyecta a
presión, haciendo que la presión total en la autoclave sea mayor a 0,6 MPa.La
lixiviación de los metales preciosos como el oro puede llevarse a cabo con cianuro
o el ozono bajo condiciones suaves.
TIPOS DE LIXIVIACION:
LIXIVIACION IN SITU:
Se utiliza para menas de ley baja. La inversión es mínima. También se utiliza para
tratar relaves que contengan mineral rico ya que se ve que en la minería artesanal
desechan relaves con una ley baja.
LIXIVIACION EN BOTADEROS:
Su aplicación es para minerales de baja ley tanto para óxidos como sulfuros. Los
ciclos de lixiviación son largos. Este sistema no requiere chancado, ya que el
mineral es descargado tal cual viene de la mina sobre una pendiente o pila y luego
se le implanta un sistema de riego.
LIXIVIACION BACTERIOLOGICA:
Es un proceso de disoluciones ejecutadas por un grupo de bacterias que tienen la
habilidad de oxidar minerales sulfurados, permitiendo liberar los valores metálicos
contenidos en ellos. Su objetivo es explotar menas que por tener baja concentración
de metal no se pueden tratar con métodos tradicionales. Este proceso es utilizado
para la extracción de uranio, cobre, zinc, níquel, cobalto, entre otros. Las bacterias
producen una solución ácida que contiene al metal en su forma soluble.
Las bacterias más utilizadas son las especies Thiobacillus oxidans, T.
thiooxidans, T.ferrooxidans y T.dentrificans. Son seres quimiolitoautótrofos
obligados, es decir, obtienen su energía por la oxidación de elementos presentes
en las rocas, como hierro y azufre. En general estas bacterias requieren, para vivir
y reproducirse, de un medio ácido (son acidofílicas) con un pH entre 1 y 5,
temperaturas de entre 25 °C a 30 °C (hasta 45 °C para algunas especies) y altas
concentraciones de metales. Algunas son aeróbicas y otras anaeróbicas.
La bacteria más estudiada en cuanto a la oxidación biológica de los minerales
sulfurados es la Thiobacillus ferroxidans. Es una bacteria Gram negativa
anaeróbica.
Obtiene su energía mediante la oxidación de sulfuros (pirita, marcasita, galena,
calcopirita, bornita, blenda, covellina), y requiere de CO2 como fuente de carbono,
nitrógeno y fosforo par sinterizar su alimento, además de una temperatura entre
28 °C y 35 °C.
VENTAJAS DE LA LIXIVIACIÓN DEL ZINC
Las principales ventajas que ofrecen los procesos hidrometalúrgicos frente a los
pirometalúrgicos, además de la práctica eliminación de los efluentes o emisiones
gaseosas, es la alta pureza que puede llegar a obtenerse en los productos. Es
cierto que se originan mayor cantidad de efluentes líquidos, pero éstos pueden
tener, según se diseñen los procesos, una carga contaminante muy pequeña.
Otra de las ventajas que presentan estos procesos es que permiten la obtención del
metal a partir de concentrados y de materiales pobres en mineral. Su potencial
flexibilidad permite tanto su aplicación en la metalurgia primaria como en la
secundaria.
PROCESOS HIDROMETALÚRGICOS:
Zinc Nacional cuenta con la mejor tecnología disponible para recuperar y reciclar
residuos, particularmente en los Polvos de Horno de Arco Eléctrico generados por
la industria acerera (Mini-Mills) y otros subproductos con contenido de zinc.
El manejo de estos residuos se realiza cumpliendo con todas las normas y leyes
establecidos por las autoridades ambientales correspondientes, brindando a la
industria la mejor opción sobre cualquier otro método de disposición final.
Zinc Nacional es la mejor opción para recuperar y reciclar residuos ya que elimina
la responsabilidad adquirida por el generador al transformar los residuos en
productos finales, útiles para el hombre, en beneficio de la sociedad.
Elimina también la disposición final de los residuos y reduce la extracción de
recursos naturales, logrando un verdadero desarrollo sustentable
Los gases de salida del reactor de tostación, a 800-1000°C, se llevan a una caldera
de recuperación de calor de dos zonas: en la primera zona de radiación los gases
calientes radián a las paredes provistas de tuberías de agua para genera vapor de
alta presión. Los gases se enfrían en esta zona de 1000 a 800°C. En la segunda
zona de convección-radiación los gases se enfrían al pasar entre los
intercambiadores de tubos hasta cerca de 400°C.
Una parte importante de las calcinas (polvos) que es arrastrado con los gases de
reacción y que dependiendo del tamaño de las partículas puede llegar al 40% del
total de las calcinas se recolectan en a la caldera recuperadora de calor. El conjunto
de intercambiadores de calor en el lecho y caldera recuperadora de calor generan
aproximadamente 1 Ton de vapor a alta presión (±360-400°C) por cada tonelada de
concentrado tostado.
Los gases se limpian seguidamente en ciclones donde se recupera otro 20% del
sólido y posteriormente se enfrían hasta cerca de 300°C en una cámara evaporativa,
empleando agua pulverizada, temperatura a la cual terminan de limpiar en un
precipitador electrostático que remueve el resto del sólido y deja menos de 0.5 g/m3
de sólido. La eficiencia global de separación sólido-gas es de sobre 99.8%.
Los gases limpios, con 5-8% SO2 se llevan a la planta de ácido sulfúrico. En la
Figura 1 se observa un reactor de tostación típico de lecho fluidizado de 400 TPD
de concentrado de 54% Zn (planta de CEZ, Montreal, Canadá).
Los reactores de lecho fluidizado son reactores del tipo perfectamente mezclados o
de retromezcla en que la composición interna del lecho es igual a la descarga. El
tiempo de reacción o retención se llama tiempo medio t de reacción y vale t = W/ F°
donde W es la cantidad de material en el interior del lecho en un instante cualquiera
y F° la tasa másica de alimentación. Un reactor de 10 m de diámetro que contiene
200 T de calcina y con una capacidad de 350 TPD tiene un tiempo medio de
retención del sólido de 13.7 hrs.
Fig. 4. Reactor para tostación de concentrados de cinc. Capacidad 400 TPD de
concentrado de 54% Zn, 8% Fe, 31% S. Calcina generada con 0.1% S residual.
(Canadian Electrolytic Cinc Co., CEZ-Montreal, Canada)
Las reacciones de tostación que ocurren a 900-1050°C generan una gran cantidad
de calor que permite mantener la operación en forma autotérmica. Las principales
reacciones son:
Esfalerita: ZnS(s) + 1.5O2 = ZnO(s) + SO2 (2)
ΔG°950°C = -151.0 Kcal
Marmatita: (0.8Zn + 0.2Fe)S(s) + 1.55O2 = 0.8ZnO(s) + 0.1Fe2O3(s)+ SO2 (3)
ΔG°950°C = -163.4 Kcal
Pirita: FeS2(s) + 2.75O2 = 0.5Fe2O3(s) + 2SO2 (4)
ΔG°950°C = -197.3 Kcal
Ferrita de cinc: Fe2O3(s) + ZnO(s) = ZnO·Fe2O3(s) (5)
ΔG°950°C = -1.8 Kcal
La reacción de formación de ferrita (5) significaba una pérdida de cinc debido a que
ésta es virtualmente insoluble en ácido sulfúrico diluido en la etapa de “lixiviación
neutra” de la calcina y sólo con el desarrollo del proceso de la jarosita se ha podido
tratar comercialmente y recuperar el cinc contenido.
La electrólisis del cinc se efectúa a 300-400 A/m2, con una eficiencia de corriente
de aproximadamente 90% y un voltaje de 3.3 a 3.5 V, con un consumo de energía
de 3100 a 3250 KW/Ton cinc electrolítico. El electrolito de entrada tiene 150 g/lt Zn
y de salida 80. En un grupo especial de celdas de agotamiento, este nivel se baja
luego a 50 g/lt.
El electrolito gastado, con 50 gpl Zn y 150-200 gpl H2SO4 s emplea para lixiviar las
calcinas en la etapa de “lixiviación neutra” ya que el contenido de H2SO4 baja a 5-
8 gr/lt por efecto del ZnO. Una pequeña parte del electrolito gastado se lleva a un
sistema de extracción de arsénico y/o manganeso mediante SX u otro método para
control de estos elementos. Los cátodos de cinc se funden y vacían como lingotes
para su comercialización.
Este residuo insoluble de la lixiviación neutra y contiene entre 5 hasta 20% del total
del cinc en la forma de ferrita de cinc, se lixivia separadamente en una segunda
etapa o lixiviación ácida con 100-120 gpl de ácido sulfúrico a 90-100°C, condición
bajo la cual se disuelve completamente la ferrita de cinc generando soluciones
concentradas en cinc y hierro, de acuerdo a la reacción global:
ZnO·Fe2O3(s) + 4H2SO4(l) = ZnSO4(l) + Fe2(SO4)3(l) + 4H2O (12)
El problema que existiría es que estas soluciones tenían contenidos tan altos de
hierro (40-50 gr/lt) que hasta el desarrollo del proceso de jarosita no podía ser
recuperado el cinc por la alta acidez resultante y alto contenido de hierro.
La electrodeposición del zinc tiene lugar en la casa de celdas tipo Veille Montagne,
la capacidad de diseño es de 111,000 TM de cátodos cinc /año; Los electrodos
están constituidos por ánodos insolubles de aleación de Pb/Ag al 0,75 % de plata y
cátodos de aluminio, con un área efectiva de deposición de 2,6 m2 (ambas caras)
La corriente es suministrada por 4 transforrectificadores de corriente eléctrica. La
densidad de corriente es de 420 amperios por metro cuadrado de superficie
catódica. Las celdas electrolíticas son de concreto armado con envoltura interior de
material sintético, están dispuestas en dos circuitos eléctricos de 4 filas c/u; cada
fila tiene 29 celdas y cada celda 48 cátodos y 49 ánodos, el periodo de
electrodeposición es de 48 horas.
3.1. EQUIPOS Y ELEMENTOS UTILIZADOS EN EL PROCESO
IV. Aislador de celdas.- Cada una de las celdas está soportada sobre la
estructura del edificio mediante cuatro aisladores.
Reactivos Dosis
Gelatina 82 gr/TM
Regaliz 36 gr/TM
Cerca del 30% del total de cinc producido actualmente se obtiene mediante la
reducción de sinter con carbón en hornos de cuba (Procesos Imperial Smelting,
de retorta continua y electrotérmico) y de arco eléctrico. Una pequeña cantidad
de minerales oxidados de cinc como ZnCO3 también se reduce de igual forma,
sin embargo, la mayor parte proviene de sinter de concentrados sulfurados de
cinc oxidados en máquinas de sinter.
4.2. SINTERIZACIÓN OXIDANTE DE CONCENTRADOS DE CINC
Puesto que cualquier tipo de horno vertical de cuba requiere de una porosidad
mínima de la carga de mineral o concentrado, fundente y reductor, no es posible
emplear calcina oxidada (tostada) en lechos fluidizados debido a su pequeño
tamaño (<100 mallas). Para formar una masa de alta resistencia mecánica y
tamaño apropiado y alta porosidad y también para remover el azufre, el
concentrado de cinc se oxida en máquinas de sinter o máquinas Dwight-Lloyd
que esencialmente consisten de un tren de cajas o reactores unidos entre si que
tienen el fondo perforado para soplar aire a través de él. El aire se puede
introducir desde el fondo hacia arriba o desde la superficie de las cajas hacia
abajo, ambos tipos de máquinas se emplean.
Las cajas son arrastradas formando un tren el que ingresa a una zona de
quemadores de ignición que inician la reacción, la que luego prosigue en forma
autotérmica mediante el aire que se introduce desde el fondo (o superficie) de
las cajas. Al término del recorrido y cuando la reacción se ha completado, las
cajas se voltean y descargan el sinter que es una masa porosa sólida de aspecto
de escoria solidificada, opaca e irregular, pero de considerable resistencia
mecánica. En la Fig. 7 se observa un esquema de una máquina de sinter.
Fig. 7. Máquina de sinterizado (Máquina Dwight-Lloyd) para concentrados de cinc y
cinc-plomo
El sinter que descarga de la máquina se chanca para tener una carga de +1/4”/-
3” para la etapa de reducción. Los finos se muelen en seco bajo 10 mallas y
mezclan con concentrado fresco para alimentar la máquina de sinter. El sinter
fino sirve como control de la temperatura de oxidación en la máquina de sinter,
las cuales no tienen otro control de temperatura que la dilución de la
alimentación.
Para reducir el ZnO con carbono en forma continua, ambos equilibrios (21) y
(22) deben ser cumplidos simultáneamente de tal forma que la reducción
ocurrirá en la intersección de las rectas que representan estas reacciones.
Puesto que la reducción de ZnO (sólido) con carbono (sólido) el número de
moles de cinc y oxígeno son iguales, se tiene que nZn = nO = nCO + 2nCO2 y por
lo tanto, las presiones serán pZn =pCO+2p CO2.
En la Fig. 8 se observan las rectas de las presiones de equilibrio para cinc puro
y las correspondientes a las reacciones (21) y (22). Se observa que pZn a 920°C
es mayor que pZn para la reacción (21), por lo que se deduce que el cinc vapor
formado no está saturado. Si se aumenta la temperatura se observa que pZn
aumenta más
rápidamente que pZn, cortándose ambas rectas a 1110°C lo que corresponde a
pZn ≈ 5 atm y PT ≈ 10 atm. Esto significa que es posible obtener Zn líquido
directamente desde ZnO por reducción con carbono.
Se exigían para este proceso las calidades siguientes: Prime (EEUU), con un
1,60% de plomo y un 0,08% de hierro; y G.O.B. (GB), con 1,35% de plomo y
0,04% de hierro. Sólo el primer metal obtenido cumplía estas
especificaciones por lo que el resto del metal se sometía a afino. El metal se
vertía en un horno de reverbero en el que la tempera era solo ligeramente
superior a la de fusión del zinc. En estas condiciones, se producía la
sedimentación del plomo y del hierro. El metal afinado tenía 1,1-1,2% de Pb
y 0,02-0,025% de Fe, satisfaciendo bien las especificaciones.
Sobre la zona calentada hay otra zona de 3-4 m, llamada eliminador, que
tiene por fin facilitar la reacción de reversión 4.1. Así, consumido el CO2, de
los gases y producido el polvo azul sobre la carga descendente, se evita que
dicho polvo llegue al condensador, o que se forme en él, con lo que se permite
una mejor coalescencia de las gotas de metal que,
Para fabricar las briquetas se prepara una mezcla de blenda sinterizada con
carbón bituminoso de alto poder aglutinante, antracita y pequeñas
proporciones de arcilla y lejía de sulfito. Se mezcla bien, se amasa y se
conforma en prensas de rodillo.
Se precisa enfriar los vapores tan rápido como sea posible. Para hacer esto,
se hace pasar el vapor que deja el eliminador a una caja en la que se
mantiene un baño de zinc fundido regulado constantemente a 500ºC por
medio de tubos refrigerantes. Este baño de zinc se agita mediante una turbina
de carborundo produciéndose una suspensión de gotitas de zinc en la
cámara, que enfría instantáneamente los gases de la retorta con lo que el
zinc condensa en forma metálica sobre las gotas evitando la posibilidad de
reoxidación. Aproximadamente, el 96% del zinc que entra en el condensador
condensa como metal y menos del 4% como polvo azul.
El condensador está formado por dos tubos verticales conectados a una zona
inclinada con respecto a la horizontal, con 2 m2 de área interna. Éste está
conectado a un pozo enfriador del metal en el que el zinc se enfría mediante
serpentines para que la temperatura del metal esté entre 480 y 500ºC.
Aproximadamente el 93% del zinc que entra en el condensador se condensa
como tal.
El gas, con el zinc residual, se lava para separar aquel que tiene una
composición aproximada de 79% de CO, 3% de CO2 y 18% de N2. Este gas
pasa por una bomba de vacío que succiona con un efecto de 33,3-40 kPa
(250-300 mm Hg). Este vacío es suficiente para hacer pasar el gas a través
del condensador. Se producen 1,42 moles de CO por mol de Zn vaporizado.
El gas tiene un poder calorífico de 93x105 J∙m-3 el cual se utiliza, en un 60%,
para calentar la carga y el resto, en la producción de vapor.
Los residuos del horno precisan ser tratados para extraer de ellos el Zn
(aumentando la recuperación hasta el 95-96%).
Un separador magnético elimina los materiales ferrosos. El 90% del coque
se recupera en mesas neumáticas y, finalmente, un proceso en medios
densos recupera un concentrado de zinc; tanto este concentrado como el
coque se reciclan.
Ha habido muchos intentos de producir zinc a través del horno de cuba; sin
embargo, si ya presenta problemas condensar un gas de retorta con un 45%
de Zn, un 50% de CO y un 1% CO2, es fácil imaginar el problema que
supondría condensar el zinc de un gas que solo tiene un 6-7% de Zn y un
12% de CO2.
El plomo fundido desciende por la carga y actúa como colector del cobre y
de los metales preciosos. Así, se llegaba a un resultado magnífico: el horno
podía usarse para obtener, simultáneamente, plomo y zinc a partir de menas
mixtas. Esto se comprobó pronto, pero se precisó de un cierto tiempo para
fijar los parámetros del proceso y para hacer que éste trabajase sin
problemas. Uno de estos problemas, y además serio, fue el hecho de que
altas cantidades de zinc se depositaban en la parte alta del horno y en los
conductos hasta el condensador. El gas salía de la parte alta del horno en
condiciones en las que la reacción de reducción indirecta estaba en equilibrio
por lo que, tan pronto como la temperatura bajaba, se producía la deposición
del óxido de zinc. Esto llevaba a que el horno dejase de trabajar por atasco.