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ANATOMIA ANIMAL
OSTEOLOGIA
El esqueleto sirve de base a otros órganos o estructuras del cuerpo ya que permite la inserción
de los músculos y forma además las cavidades craneana, la fosa orbitaria, nasal, bucal,
torácica, abdominal, pelviana, en las que se alojan diversos órganos.
El esqueleto aloja la médula ósea es decir que representa también un órgano hematopoyetico
y es además depósito de sales minerales.
Los huesos como palancas de movimiento y sostén del esqueleto. Tienen una estructura
compuesta, que expresa su función y desarrollo. Son órganos duros de color blanquecino –
amarillento. Constituidos esencialmente por sales minerales y además de materia orgánica – la
oseína.
Los huesos se dividen en cuatro clases de acuerdo a su forma y función: Largos, cortos,
planos e irregulares.
En los huesos largos predomina la longitud con respecto a las otras dos dimensiones (anchura
y grosor). Se encuentran formando los miembros toráxico y pelviano.
Constan de una diáfisis cilíndrica relativamente larga en la parte media y de dos extremos o
epífisis cubiertas de cartílago articular. Funcionan principalmente como palancas con función
de sostén, locomoción y presión.
En los huesos planos predominan la longitud y la anchura, siendo el grosor muy reducido. Se
localizan en las paredes dorsal y lateral de la cavidad craneana, los huesos de la cara, su
función principal es de protección. Además de estos encontramos la escápula, mandíbula y
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coxal. En este grupo podemos considerar a las costillas, aunque estas presentan algunas
características de los huesos largos.
Fig. 6. EL ESQUELETO.
Los huesos irregulares son huesos impares situados en la línea media del esqueleto y son las
vértebras y los huesos ventrales de la cavidad craneana. Sirven como protección sostén e
inserción muscular.
ESTRUCTURA DE LOS HUESOS
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Durante el crecimiento activo la capa osteogénica está bien desarrollada pero luego se reduce
de modo extraordinario. La capa fibrosa es más gruesa en los sitios más expuestos. El
periostio es rico en vasos sanguíneos, terminaciones sensitivas y nervios.
LA SUSTANCIA COMPACTA: Es una capa de tejido óseo denso, más gruesa en la diáfisis y
más delgada pero más resistente en las superficies articulares en las epífisis, formadas por
numerosas celdillas limitadas por laminillas óseas delgadas que forman la sustancia
esponjosa. Los espacios dejados por estas se denominan espacios medulares donde se aloja la
médula ósea.
EL ENDOSTIO: Es una membrana fibrosa delgada que recubre la cavidad medular y los
canales haversianos u osteones (canales nutritivos del hueso).
LA MEDULA OSEA: La cavidad de los huesos largos esta ocupada en los animales adultos
por médula ósea amarilla, que es un deposito de sustancias nutritivas y tejido adiposo. En la
sustancia esponjosa de los huesos largos y cortos se encuentra médula ósea roja, que
representa un órgano hematopoyetico.
En el organismo en desarrollo todos los huesos contienen médula ósea roja, rica en hematíes
en formas precursoras: Mieloblastos, eritoblastos, mielocitos, linfocitos, megacariocitos,
monocitos y algunas células adiposas.
Los huesos planos constan de dos láminas de tejido compacto; una externa y otra interna o
tabla vítrea; entre las cuales pueden existir cavidades llenas de aire denominadas senos y a los
huesos que las contienen huesos neumáticos.
El tejido esponjoso que se encuentra entre las dos láminas de los huesos del cráneo se
denomina díploe. Los huesos cortos y los irregulares están compuestos de sustancia esponjosa
rodeada de sustancia compacta.
VASOS Y NERVIOS: La nutrición del hueso proviene de dos arterias, las periosticas y las
medulares; éstas últimas penetran por los forámenes nutricios que en la mayoría de los huesos
largos se encuentran en la diáfisis y se ramifican en la médula.
Las arterias periosticas perforan la sustancia ósea por los conductos de Wolkmann que se
comunican con los conductos de Havers.
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II. Tejido óseo de la diàfisis de un hueso largo: 5. Periostio; 6. Lámina externa de tejido
compacto; 6´. Lámina interna de tejido compacto o tabla vítrea; 7. Osteones; 8. Conductos de
Havers; 9. Vasos sanguíneos; 10. Canales de Wolkmann.
III. Esquema del ostión: 11. Láminas de los conductos de Havers con fibrillas; 12. Osteocitos.
La circulación de retorno por las venas, utiliza la gran cantidad de agujeros grandes y
pequeños que perforan las epífisis.
Los nervios del hueso solo proceden del periostio, que es muy rico en terminaciones nerviosas
sensitivas y por lo tanto es extremadamente susceptible al dolor.
Los huesos cocidos y desecados pierden toda el agua y los lípidos, contienen 30-40% de
oseína y 60-70% de sales minerales. De las sales minerales las más abundantes es el fosfato
de calcio en un 85%, el carbonato de calcio en un 9% y carbonato de magnesio y cloruro de
sodio en mucha menor cantidad.
La oseína es más abundante en los huesos de los animales jóvenes y las sales minerales en los
adultos. En los herbívoros la cantidad de sales minerales en periodos de buena pastura es
mayor.
El peso de la totalidad de los huesos de un animal, desecados al aire libre, oscila entre el 7 -
8.5% del peso total del animal en pie. La mitad del peso corresponde a los huesos de los
miembros toráxico y pelviano.
El color de los huesos esta determinado por el contenido de grasa y a la cantidad de irrigación
sanguínea que tenga el hueso.
El peso específico del hueso compacto fresco es de 1.9. Resisten a la compresión de 3600 Kg.
/cm² y la tensión de 2600 Kg/cm².
OSTEOGENESIS
Durante la vida embrionaria el esqueleto está representado por tejido fibroso y cartilaginoso.
El proceso por medio del cual estos tejidos se transforman en hueso se denomina osificación u
osteogénesis.
Los huesos que se forman a partir de tejido fibroso son los planos (cara, paredes dorsal y
lateral del cráneo) y la osificación se denomina ínter membranosa; el resto de los huesos del
esqueleto se osifican a partir de cartílagos y la osificación se denomina endocondral. Las
células que intervienen en este proceso son los osteoblastos.
Los huesos presentan en sus superficies, eminencias y depresiones que pueden ser articulares
o no, lo mismo que perforaciones.
Eminencias articulares:
CABEZA: Extremidad más o menos esférica, como las cabezas del fémur, húmero y costillas.
CONDILO: Es una masa más o menos cilíndrica. Ej.: Cóndilos de la epífisis distal del
húmero, cóndilos del occipital, cóndilo de la mandíbula.
TROCLEA: Superficie en forma de polea, como la tróclea del fémur, sobre la cual se desliza
la rótula o patela.
Eminencias no articulares:
APOFISIS O PROCESO: Toda proyección ósea como los procesos espinosos de las vértebras;
ésta últimas poseen también procesos que presentan facetas articulares.
TUBERCULO: Proyección algo menor que la anterior. Excepto el tubérculo de las costillas
que es articular.
TROCANTER: Son eminencias propias del fémur.
CRESTA: Es una arista aguda, como las que forman la tróclea del fémur.
LINEA: Es una pequeña prominencia alargada; a veces una simple señal sobre un hueso
causada por la tracción de un músculo. Ej.: Línea glútea del coxal.
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Depresiones articulares:
Depresiones no articulares:
FOSA: Depresión no articular que puede estar en relación con una depresión articular como la
fosa acetabular del coxal; existe una fosa articular que es la fosa odontoidea del atlas.
Perforaciones:
SENO: Cavidades espaciosas situadas entre las láminas de algunos huesos de la cabeza.
ARTROLOGIA Y SINDESMOLOGIA
Las articulaciones están formadas por la unión de dos o más huesos o cartílagos por
intermedio de otros tejidos.
Articulaciones fibrosas: En las que los huesos están unidos por tejido conjuntivo denso.
Articulaciones cartilaginosas: En las que los huesos están unidos por cartílago.
Articulaciones sinoviales: En las que existen cavidades entre los huesos ocupadas por líquido,
la sinovia.
SUTURAS: Es una clase particular de unión entre los huesos planos de la cabeza. Los huesos
están íntimamente unidos por medio de tejido fibroso.
Según la estructura de la superficie de unión de los huesos las suturas se dividen en: Sutura
serrata, escamosa y armónica.
La sutura serrata se presenta cuando los bordes de los huesos presentan irregularidades que
engranan entre sí. Ejemplo: La sutura frontal.
La sutura escamosa se presenta cuando los bordes son biselados y un hueso cubre parte de
otro, ejemplo: La sutura temporo parietal.
La sutura armónica se presenta cuando los bordes son planos o ligeramente redondeados.
Ejemplo: La sutura nasal.
SINDESMOSIS: En estas articulaciones el medio de unión está formado por tejido blanco
fibroso, por tejido elástico o por una mezcla de ambos.
Ejemplo: Las uniones entre los cuerpos de los metacarpianos, las inserciones entre sí de los
cartílagos costales y la articulación entre las diáfisis del radio y el cubito en los caninos.
ARTICULACIONES CARTILAGINOSAS:
SINFISIS: Articulaciones simétricas del esqueleto en las que el medio de unión consiste en
cartílago aplicado al hueso y tejido fibroso en el medio. Ejemplo: Sínfisis pelviana y sínfisis
mandibular.
Las superficies articulares son en muchos casos lisas y de formas variadas. Están formadas de
hueso denso especial. En algunos casos se encuentran interrumpidas por cavidades no
articulares con el nombre de fosas sinoviales. Ejemplo: En el equino la articulación cubital; la
articulación de la cadera y la articulación del tarso.
Los cartílagos articulares generalmente son de tejido cartilaginoso hialino, forman una
envoltura sobre la cara articular de los huesos. Son avasculares y de tinte azulado.
Disminuyen los efectos de los choques y reducen en gran manera los roces entre los huesos.
La membrana sinovial reviste la cavidad articular, excepto cuando está limitada por los
cartílagos articulares; se ubica normalmente en el borde de estos últimos. Provista de vasos
sanguíneos y nervios. Forma con frecuencia pliegues y vellosidades, que se proyectan en el
interior de la cavidad articular y son los vellos sinoviales y los pliegues sinoviales.
En algunas articulaciones la cápsula forma un abombamiento que son las bolsas sinoviales.
Que generalmente se localizan entre los huesos y los tendones de los músculos que pasan por
las articulaciones.
La sinovia es un líquido claro amarillento y viscoso, el cual contiene: Albúmina, moco, gotas
de grasa, células errantes y sales, que es secretada por la membrana sinovial y que cumple
funciones de lubricación de las superficies articulares de los huesos, disminuye la fricción
entre estas y es además el medio de nutrición del cartílago articular.
Los ligamentos son cintas o membranas compuestas de tejido fibroso blanco, que unen los
huesos entre sí, están desprovistos de elasticidad. No obstante en algunos pocos casos,
ejemplo: El ligamento nucal; está compuesto de tejido elástico.
Los ligamentos pueden dividirse, según su posición en periarticulares e intraarticulares.
Los que están a los lados de una articulación se denominan colaterales. Los que ponen en
conexión directa superficies óseas opuestas se denominan ligamentos interoseos.
Los discos o meniscos articulares son láminas de tejido fibroso denso o de fibrocartílago
colocadas entre los cartílagos articulares que dividen la cavidad articular parcial o
completamente en dos compartimientos. Permiten mayor variedad de movimientos y
disminuyen los efectos de la presión.
No existe cavidad articular, aunque en algunos casos pueda existir una rudimentaria.
Angulares: Cuando los movimientos articulares son de flexión y extensión. Se presenta en las
articulaciones clasificadas como ginglimo.
Rotación: Cuando un segmento gira alrededor del eje longitudinal de otro segmento se
presenta un movimiento articular de rotación. Ej.: La articulación atlantoaxoidea, la
articulación costocentral.
Pronación: Es el movimiento que tiende a girar un miembro de modo que el dorso del mismo
quede ubicado hacia abajo.
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Supinación: Es el movimiento que tiende a girar un miembro de tal modo que la superficie
palmar o plantar quede hacia arriba.
MIOLOGIA
El subsistema muscular representa la parte activa del aparato locomotor. Consta de los
músculos y sus órganos auxiliares.
Fijados en el esqueleto como un sistema de palancas, los músculos al contraerse producen los
diferentes movimientos del cuerpo (función dinámica del músculo) o fijan el esqueleto en
determinada posición y al tiempo dan la forma al cuerpo del animal y su pose (función
estática de los músculos).
Los movimientos del animal son muy variados, puede trasladarse en el espacio, cambiar la
posición del cuerpo. Ej.: levantar, bajar o girar la cabeza y el cuello.
Los movimientos del animal son respuestas a estímulos recibidos del medio ambiente o del
medio interior (percepción del frió, apetito sexual). Esto se debe a la relación del subsistema
muscular con el subsistema nervioso en su desarrollo y diferenciación.
Los órganos del subsistema muscular son abastecidos por receptores (aparato sensitivo) que al
ser estimulados condicionan la aparición de la sensibilidad articular y muscular. El estimulo
junto con el sentido del equilibrio aseguran la conservación del equilibrio del cuerpo, y con el
sentido de la vista aseguran la presición de los movimientos musculares.
El subsistema muscular en su trabajo transforma la energía química que recibe por medio de
la sangre en energía calórica (hasta un 70%), en el trabajo mecánico se utiliza tan solo un 30%
de la energía química, por esta razón los músculos necesitan de gran cantidad de
aprovisionamiento sanguíneo (irrigación).
El peso total de la musculatura es diferente para cada una de las especies en dependencia de
su raza, edad y condiciones de vida.
En el equino el 47.5% del peso del animal esta representado por musculatura.
El músculo esquelético consta de dos partes diferentes por su función y estructura que son: El
vientre muscular y el tendón. (Fig.52). El vientre muscular al contraerse provoca el trabajo
muscular y el tendón sirve para la fijación del vientre a los huesos como palancas de
movimiento.
El parénquima está compuesto por las fibras musculares que miden de 10-100 nm. de
diámetro y de 5-10 cm. de largo, se ven a simple vista al desprenderlas una por una. En las
fibras musculares terminan los nervios somáticos sensitivos y motores. Cada fibra muscular
está abastecida de vasos sanguíneos, los cuales también presentan una inervación simpática
(motora y sensitiva) en su membrana muscular.
El tejido conectivo separa las fibras musculares entre si, envuelve los haces o paquetes de
fibras y a su vez a todo el músculo en conjunto.
El perimisio interno consta de fibras colágenas y elásticas de dirección longitudinal las cuales
envuelven los diferentes haces o paquetes de fibras musculares.
El endomisio forma alrededor de cada fibra muscular una membrana delgada y débil de
colágeno que va paralela a las fibras.
El tejido conectivo del vientre muscular evita el engrosamiento de las fibras en la contracción,
lo que mejora las condiciones de trabajo. Evita además el estiramiento exagerado de las fibras
durante la relajación. Este presenta sus respectivos nervios y vasos sanguíneos.
La coloración de los músculos no es similar en todas las especies, en los animales de diferente
edad y en las diferentes partes del cuerpo. Ej.: Los músculos del equino, son más oscuros
(rojos), que los del bovino; en los terneros y cerditos son mucho más claros que en los
animales adultos; en los miembros toráxicos y pelvianos son más oscuros que en el tórax y en
el abdomen; en las aves los músculos del tórax son más claros que en los miembros
posteriores; en las aves silvestres los músculos son más oscuros que en las aves domesticas.
El color de los músculos depende de su función y estructura, son más oscuros en los músculos
ricos en mioglobina y sarcoplasma, son más lentos en su trabajo, pero más vigorosos.
Los músculos claros son pobres en mioglobina y sarcoplasma, más rápidos en su trabajo y
menos vigorosos, rápidamente se fatigan. La coloración también depende de la irrigación del
músculo.
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El tendón muscular consiste en haces de fibras de colágeno, envueltos en tejido conectivo, en
el cual hay capas interna y externa. Del tejido conectivo a los haces de colágeno van los vasos
y nervios en menor cantidad que en el vientre muscular.
De la cantidad de tejido conectivo denso depende la resistencia del tendón (para su ruptura en
un corte transversal se requiere de una fuerza de 670-903 kg/cm²).
Los haces de fibras de colágeno del tendón penetran profundamente el tejido óseo, lo que
garantiza la fijación fuerte del músculo al hueso.
Cada músculo como órgano recibe inervación somática y simpática, que contiene fibras
nerviosas de dos tipos sensitivas y motoras.
Las fibras nerviosas somáticas motoras terminan en las fibras musculares. Por los nervios
motores son transmitidos los impulsos nerviosos, por la acción de estos las fibras musculares
y los músculos se contraen completamente, realizando un trabajo determinado con el aumento
simultaneo del metabolismo. De tal forma la fibra muscular se puede considerar el órgano
motor de la célula nerviosa y dos fibras musculares juntas como el aparato neuromuscular que
funcional y morfológicamente son uno solo.
Las fibras nerviosas somáticas sensitivas se originan en los interoreceptores, en los husos
neuromusculares o en los tendones.
Las fibras nerviosas simpáticas motoras y sensitivas terminan en los vasos sanguíneos de los
músculos y de esta forma regulan la irrigación durante el trabajo y en estado de reposo.
Durante el trabajo los vasos sanguíneos se dilatan bajo la acción de los metabolitos y como
consecuencia de la inhibición de los nervios simpáticos.
Cada fibra muscular contiene mayor o menor cantidad de capilares sanguíneos, los cuales
forman alrededor de estas amplias redes.
La forma de los músculos es muy variada, se dividen por forma principalmente en músculos
laminares y gruesos.
Los músculos laminares se caracterizan por la forma plana de su vientre y del tendón que
recibe el nombre de aponeurosis. Estos músculos se encuentran principalmente en el tronco
(músculos abdominales), algunos en los miembros (tensor de la fascia del antebrazo, sartorio,
tensor de la fascia lata) y en la cabeza el milohiodeo y otros.
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Los músculos laminares pueden ser amplios y de tal manera de diferente forma como:
Triangulares, romboides, trapecio, serrato y por el contrario reducidos, angostos, acintados
como el m. braquiocefálico y los músculos intercostales.
Los músculos gruesos tienen la forma más variada de la musculatura: Forma de huso,
piriformes y de cono y se encuentran principalmente en los miembros toráxico y pelviano.
Algunos músculos se fijan en varios huesos y se pueden originar en un solo hueso y terminar
en varios (Los multifidos en la columna vertebral) o al contrario, sus tendones de origen e
inserción se encuentran en un recorrido (M. larguísimo, M. Iliocostal).
Se encuentran músculos con un tendón, pero con varios vientres musculares, los cuales
reciben el nombre de cabezas. Ej.: Bíceps, Tríceps y Cuadriceps.
Un solo vientre muscular puede tener varios tendones, que se ramifican. Ej.: M. Extensor
digital común, M. Flexor digital superficial y profundo en los animales con varios dedos.
Los nombres o designaciones de los músculos también son muy variados, para su
nomenclatura se tienen en cuenta varios parámetros que expresan:
La función y el lugar de ubicación de la fuerza del músculo. Ej.: M. Extensor del tarso, M.
Extensor del carpo, M. Flexor del carpo, M. extensor digital común.
La forma y dimensión del músculo. Ej.: M. Redondo mayor, M. Redondo menor, M. Largo
del cuello, M. Larguísimo del cuello, cabeza y atlas.
Los músculos que cumplen diferentes funciones, se diferencian unos de otros por su
estructura, por la relación de sus fibras musculares, tendones, por su forma, color y ubicación
en el esqueleto.
Los músculos estatodinamicos tienen una estructura penada y se clasifican en: Penados,
bipenados y multipenados. (Fig.53).
Esta diferencia en la arquitectura de los músculos depende de la relación entre las haces de
fibras musculares y los tendones.
En los músculos penados el tendón se extiende desde un extremo del músculo hacia una
superficie del vientre y del otro extremo hacia la superficie contraria. Los haces de fibras
musculares se ubican entre los tendones oblicuamente con relación a la dirección del músculo.
En los músculos bipenados en uno de los extremos el tendón se ramifica en dos láminas, que
se ubican en la superficie contraria del vientre y el otro extremo del tendón penetra el interior
del vientre muscular. Los haces de fibras musculares van oblicuos, pero entre tres tendones.
Los músculos no penados (acintados, fusiformes) tienen haces de fibras largas, pero la
cantidad de fibras es menor, en los músculos penados la longitud de las fibras es más corta,
pero la cantidad de fibras es mayor, particularmente en los músculos multipenados.
La arquitectura del músculo está condicionada por su función. Cada músculo cumple
determinado trabajo. El volumen de trabajo se mide por la fuerza perdida durante la
realización del mismo, multiplicada por el recorrido. La fuerza del músculo es directamente
proporcional a la cantidad de fibras musculares, el recorrido es directamente proporcional a la
longitud de las fibras musculares (en la contracción las fibras pueden acortarse más allá de
dos veces su longitud).
Los músculos en el esqueleto están distribuidos de manera no similar, donde se necesita una
mayor fuerza como por Ej.: Para la extensión de la articulación del codo con el animal de pie,
se encuentran músculos penados (cabeza larga del tríceps y los M. flexores del carpo y los
dedos). Para llevar hacia delante el miembro anterior se necesita no mucha fuerza como
envergadura de movimientos, lo que se logra con un músculo simple como el M.
Braquiocefálico.
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Entre los órganos auxiliares de los músculos se encuentran: Los elementos de apoyo (huesos,
cartílagos y piel), la fascia, los ligamentos, las bolsas sinoviales, Las vaginas sinoviales del
tendón, las trocleas y los huesos sesamoideos.
La fascia es una película delgada de tejido conectivo denso, construida de fibras de colágeno
en diferente dirección. Las fascias junto con el esqueleto óseo forman el esqueleto fibroso; la
fascia superficial separa la piel de la musculatura. La fascia profunda separa cada músculo o
grupo de músculos y se fija en los huesos. La fascia es abundante en interoreceptores.
Hay además fascia profunda en la musculatura hacia el lado de las cavidades abdominal y
torácica, la fascia abdominal y la fascia endotoracica.
En las regiones donde se ubican los tendones de los músculos largos. Ej.: Los que actúan
sobre el carpo, el tarso y los dedos, la fascia se engruesa y forma la vagina fibrosa del tendón
o retinaculos, la cual se separa del tendón por medio de las vaginas sinoviales. En
determinados lugares las fascias se engruesan formando ligamentos transversales para el
tendón. Ej.: Ligamento palmar transverso del carpo o ligamentos anulares. Estos ligamentos
cambian la dirección de la fuerza de acción muscular.
En algunos casos las fascias profundas se fijan a los músculos, los cuales reciben el
correspondiente nombre (tensor de la fascia del antebrazo, tensor de la fascia lata).
Las bolsas son sacos de tejido conectivo recubiertos en su interior por una capa de células
planas o mesotelio y que contienen en su interior mucosidad o sinovia.
Por lo que reciben el nombre de bolsa mucosa o bolsa sinovial. Como regla general las bolsas
sinoviales se encuentran en las articulaciones y se comunican con la cápsula articular.
Las bolsas disminuyen la fricción entre los músculos, tendones y otros órganos. Por esto las
bolsas se encuentran por debajo de los músculos – Bolsas submusculares o por debajo de los
tendones – Bolsas subtendinosas. Las bolsas se ubican en aquellos lugares, donde los
músculos se relacionan con accidentes óseos significativos. Ej.: En la superficie lateral del
tubérculo mayor del húmero (por debajo del tendón del músculo infraespinoso).
Las bolsas también se observan algunas veces entre los tendones y los ligamentos- Bolsas
subligamentosas y algunas veces bajo la piel – Bolsas subcutáneas.
La vagina sinovial del tendón por su estructura y función es muy similar a las bolsas. Se
forma de las bolsas subtendinosas. Está representada por dos hojas sinoviales, la visceral que
se fusiona con el tendón y la parietal que se fusiona en forma de cilindro con la vaina fibrosa
del tendón.
En los lugares, donde existen trócleas o surcos, los tendones rozan con el hueso, el cual se
encuentra cubierto de cartílago hialino y el tendón es cubierto por la bolsa, la cual se fija en el
hueso al borde de la tróclea. Ej.: Entre el tendón proximal del músculo bíceps braquial y el
surco intertubercular del húmero.
En las regiones de máxima tensión del tendón se desarrolla tejido óseo formando los huesos
sesamoideos. Ej.: En el tendón del músculo interóseo los huesos sesamoideos proximales.
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El más grande de los huesos sesamoideos es la rótula o patela que es una osificación del
tendón del músculo recto femoral que forma parte del músculo cuadriceps femoral, que es
extensor de la articulación femorotibiorotuliana.
La importancia de los huesos sesamoideos radica no solo en que estos aumentan la resistencia
del tendón y disminuyen la fricción, sino que además cambian el ángulo de inserción del
músculo en el hueso y mejoran las condiciones de trabajo.