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ANTROPOLIGIA

DANIEL E. SERRANO

PROFESOR. Dr. Jim Bearss

SEMINARIO REFORMADO LATINOAMERICANO

RELACION ENTRE ANTIGUO Y NUEVO TESTAMENTO

BOGOTA, MAYO 13 DE 2019


ANTROPOLOGIA

I. EL HOMBRE …………………. 4-5

II. EL PECADO …………………. 5-6

III. LA CAIDA Y SUS CONSECUENCIAS ………………….. 6-7

IV. CONCLUCIONES………………………………………………………. 7-8

V. BIBLIOGRAFIA…………………………………………………………. 8

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INTRODUCCION

La antropología es la ciencia que estudia el origen del hombre, su naturaleza, su caída, y su


redención en el marco de la cosmovisión bíblica, estas últimas partes la incluimos en
nuestro caso como creyentes, dado que consideramos que afecta la naturaleza y origen en
gran manera. No debemos confundir el presente asunto con el estudio de la antropología
general o ciencia de la humanidad que incluye todas aquellas ciencias que tienen al hombre
por objeto de investigación.

Este hecho parece no tener tanta injerencia en la construcción teológica en algunas iglesias
en algunas denominaciones e incluso entre algunos hermanos, quienes ven como suficiente
el hecho de no aceptar las doctrinas humanistas de la evolución para tener como claro lo
escrito en el libro de génesis. Durante este corto recorrido por lo que considere primordial
veremos que el solo hecho de no acoger estos postulados no es suficiente, ya que en
algunos casos el desconocimiento de los fundamentos humanistas ha permitido que
posiciones que riñen en forma clara con las doctrinas bíblicas se hayan convertido en
banderas de denominaciones.

Principalmente hay tres puntos en donde se convierte en neurálgicas las doctrinas acerca
del hombre y su origen. El primero de ellos y claramente esencial es su origen, ya que en
estas épocas ha tomado mucha fuerza entre los más jóvenes y una buena porción de
mayores las doctrinas evolucionistas y el teísmo creacionista.

Junto con esta verdad se torna también relevante el pecado su origen y sus consecuencias,
dado que sorprendentemente en Latinoamérica tomaron fuerza doctrinas erradas como la
perfección cristiana y otras herejías que pervierten las escrituras y que seducen a incautos
que buscan estas corrientes para no perder su unión con el mundo y sus deseos carnales.

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I. EL HOMBRE

“La transición de la teología a la antropología, es decir, del estudio de Dios al estudio del hombre
es perfectamente natural. El hombre no es solamente la corona de la creación, sino también el
objeto del cuidado especial de Dios” (teología sistemática – L. Berkhof – capitulo 15 el origen del
hombre.)

Indiscutible resulta pensar por parte de los creyentes que existe una posición diferente a la
descrita en el génesis acerca de la creación del hombre por parte de Dios, pero resulta que
en estos tiempos se han construido por parte de corrientes humanistas algunas doctrinas en
donde evidentemente se distorsiona esta verdad y se compromete la fe de manera directa,
las cuales han sido abrazadas por algunos hermanos, si pudiéramos llamarlos así en algunos
casos, de tal manera que sorprende.

Lo primero será mostrar correctamente esta doctrina. La doctrina del hombre


evidentemente debe seguir a la doctrina de Dios, es decir el conocimiento claro de nuestro
origen es siguiente a conocer con precisión a nuestro creador.

Las escrituras nos ofrecen en el libro de génesis esta descripción, Entonces dijo Dios:
Hagamos al hombre a nuestra imagen, conforme a nuestra semejanza; y señoree en los
peces del mar, en las aves de los cielos, en las bestias, en toda la tierra, y en todo animal
que se arrastra sobre la tierra. Y creó Dios al hombre a su imagen, a imagen de Dios lo
creó; varón y hembra los creó.(génesis 1. 26-27) Y además en el mismo libro podemos ver
también , Entonces Jehová Dios hizo caer sueño profundo sobre Adán, y mientras éste
dormía, tomó una de sus costillas, y cerró la carne en su lugar. Y de la costilla que Jehová
Dios tomó del hombre, hizo una mujer, y la trajo al hombre. Dijo entonces Adán: Esto es
ahora hueso de mis huesos y carne de mi carne; ésta será llamada Varona, porque del
varón fue tomada. (Génesis 2, 21-23). Estos eventos son indiscutibles por parte de aquellos
detractores porque a la luz de las evidencias, los hombres siguen siendo los mismos que
relata la escritura.

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Antes de que el inspirado escritor consigne la creación del hombre, nos hace retroceder,
digamos así, hasta el concilio divino dándonos a conocer el decreto de Dios en las
palabras, "Hagamos al hombre a nuestra propia imagen, según nuestra semejanza",
Génesis. 1: 26. (Teología sistemática – L. Berkhof – capitulo 15 el origen del hombre.)

Este tópico presenta una nueva inquietud, como creo Dios al hombre?, Lo cual
evidentemente representa un nuevo reto. En esto podemos decir que existen dos maneras en
las que Dios ejecuta las cosas, por medio de las obras de su creación o per medio de las
obras de su providencia divina. Podemos entonces decir que la creación del hombre se
debió, según la biblia, no a la acción providencial de Dios por medio de la naturaleza, sino
es un acto sobrenatural, es decir Dios no ordeno el curso de la naturaleza par que apareciera
el hombre, sino que el mismo lo creo.

II. EL PECADO

El catecismo menor de Westminster determina el pecado como “El pecado es no


conformarse a la ley de Dios o desobedecerla. Rom.4:15; Sant.2:10; 4:17; 1 Juan 3:4.”
(Catecismo menor Westminster Pregunta 14).

No escucho mucho más sobre el pecado desde el púlpito. El reconocimiento y la


identificación del mismo; luchando con la culpa de ello; arrepentirse de ello, o para el
caso, tratar con ello en absoluto – todas esas ideas son pasé en la mayoría de las iglesias
de hoy. Lo que se oye es un montón de charlas sobre de quebrantamiento y negatividad,
como si Cristo se humilló hasta el punto de la muerte para curar la depresión y corregir
las malas actitudes. La iglesia moderna en gran medida ha suprimido el lenguaje bíblico
del pecado y de la salvación, reemplazándolo con verbosidad posmoderna pegajosa que
atrae a una generación criada en seminarios psicologizados y de autoayuda.
(evangelio.blog - junio1 de 2015 –jeremiah jhonson).

Después de ver estas perspectivas, y poniendo en el contexto de hoy encontramos que en


gran parte la iglesia esta permeada por las corrientes humanistas que ponen el pecado como
un acto inmoral o una conducta incorrecta, o en otros casos como el desenfreno del placer.
Sin duda debemos rechazar estas perspectivas que en todo sentido socavan la construcción
del carácter del hombre, ya que ponen la experiencia humana por encima de la ley de Dios.

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El pecado, según la biblia, no solo es una conducta contraria a la experiencia de la raza,
no es solo una conducta antisocial, es ante todo una ofensa a Dios. (Visión cristiana del
pecado – gresham machen).

El pecado aunque las escrituras en el antiguo testamento no lo describen claramente, tiene


su origen en la transgresión voluntaria de Adán al mandato de Dios. Este concepto creció
en la iglesia en contra del principio del gnosticismo que planteaba que el pecado es
inherente a la materia. Por ultimo debemos dejar en claro que aunque Dios es quien decreta
todo en este mundo, “Es verdad que el decreto eterno de Dios hizo segura la entrada del
pecado en el mundo, pero esto no debe interpretarse de manera que Dios resulte la causa
del pecado en el sentido de ser su autor responsable” (teología sistemática de L. Berkhof –
Capitulo 19).

III. LA CAIDA Y SUS CONSECUENCIAS

“Y mandó Jehová Dios al hombre, diciendo: De todo árbol del huerto podrás comer; más
del árbol de la ciencia del bien y del mal no comerás; porque el día que de él comieres,
ciertamente morirás.” (Génesis 2, 16-17).

Dios determino poner al hombre ante el estado más elevado como meta a alcanzar por
medio del mandato divino, si el hombre hubiese cumplido dicho mandato el resultado si
hubiese visto en la vida eterna, no que el hombre no la tuviese ya, sino que por tal
obediencia hubiese encontrado la seguridad de ella.

“El pecado es un asunto muy serio, y Dios lo considera con severidad, aunque los hombres
con frecuencia lo tratan con ligereza. No solamente es una transgresión de la ley de Dios,
sino un ataque al mismo gran Legislador, una rebelión en contra de Dios.”(Teología
sistemática de L. Berkhof – Capitulo 23). El mandato divino contemplo claramente la
seriedad y severidad de la desobediencia, “He aquí que todas las almas son mías; como el
alma del padre, así el alma del hijo es mía; el alma que pecare, esa
morirá.”(ezequiel18,4).

No queremos decir con esto que Dios fue sorprendido por el pecado del hombre, por el
contrario es deber nuestro deber entender que incluso el pecado ocurrió de acuerdo al
consejo divino de Dios.

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Como Adán era el representante de la humanidad entonces todos los que aún no habíamos
nacido caímos en Adán. Además porque como nosotros nacemos por generación
espontánea, entonces se nos trasmite ese pecado y esa tendencia pecaminosa. Como dice el
Salmo 51 “He aquí, yo nací en iniquidad, y en pecado me concibió mi madre” (La Biblia
de las Américas 1997). Desde ese momento el hombre tuvo una vida de males y de muerte.
El pecado afectó y afecta todos. Todo hombre en su vida peca reafirmando el pecado de
Adán, por eso no debemos excusarnos en Adán, sino que nosotros mismos somos
culpables.

IV. CONCLUCIONES

Después de ver estas perspectivas podemos entonces concluir con toda certeza que el
Hombre fue creado de manera sobrenatural por el Dios, que el hombre es el objeto de
cuidado de Dios, pero es Dios el centro de todas las cosas creadas. Esta verdad precede en
importancia al conocimiento de Dios, y debe ser de especial estudio por parte de los
creyentes para construir a partir de ello el carácter cristiano y la defensa racional de la fe
frente a las doctrinas humanistas que invitan a pensar en la evolución como la verdad.

De igual forma podemos concluir que Adán, quien fue el hombre creado, y a quien se le
entrego el mandato por parte de Dios, desobedeció al mismo de manera voluntaria
originando con esto el pecado y su posterior caída. Concluimos pues que para Dios no fue
una sorpresa el pecado, sino por el contrario ocurrió de acuerdo al consejo divino de Dios.
También podemos inferir razonablemente que es incorrecto pensar que el pecado del
hombre yace en la carne como equivocadamente algunas corrientes de pensamiento han
querido introducir en el cristianismo, ya que es imposible separar la esencia material de la
inmaterial del hombre, hecho este que solo se dara cuando ocurra nuestra muerte.

Este hecho nos lleva a concluir también de manera secundaria, pero no menos importante
que el hombre se compone de dos esencias y no de tres como erróneamente muchos han
querido introducir. Buena cuenta de ello podemos encontrarlo en textos como el del
evangelio de Juan capítulo 3 versículo 6, cuando Jesús se refiere a los que es de la carne y
lo que es del espíritu.

Como resultado de este hecho se originó entonces la caída del hombre, su salida del huerto
del edén, y con ello el castigo por parte de Dios. Castigo que de buena forma lo describe la
teología sistemática de L. Berkhof “Estos castigos presuponen no meramente las leyes
naturales de la vida, sino una ley positiva del gran Legislador, con sanciones adicionales.

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No son castigos que resulten naturalmente de la naturaleza de la transgresión, son castigos
que se añaden a las transgresiones mediante edictos divinos. Son impuestos por la ley
divina que tiene absoluta autoridad.”(Teología sistemática L. Berkhof – capitulo 20).

Como aplicación práctica y parte de estas conclusiones podemos decir entonces que una
visión correcta de estas verdades acerca del origen del hombre, de su transgresión y
posterior caída, proceden en primer lugar del conocimiento bíblico de Dios el cual nos
permite rechazar cualquier posición humanista, que provenga del mundo y sus corrientes e
incluso que provenga de las misma iglesia por herejías comunes en algunas
denominaciones.

De la misma manera y de manera seguida, podemos aplicar estos conceptos en la


construcción de nuestra carácter cristiano, y por consiguiente la construcción correcta de
nuestra cosmovisión, sin lugar a dudas una verdadera necesidad en las condiciones actuales
de nuestra sociedad, que fácilmente da rienda suelta a sus impulsos y placeres sin que ellos
repercutan de manera alguna en su visión de la eternidad.

V. BIBLIOGRAFIA

- Biblia de estudio MacArthur.

- Teología sistemática – L. Berkhof.

- Visión cristiana del hombre – J Gresham Machen

- Evangelio.blog - junio1 de 2015 –jeremiah jhonson

- Todas las citas bíblicas tomadas de versión reina Valera 1960.

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