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Rol Interno : C-1145-2014 Búsqueda

Rol Unico : 14- 4-195075-4


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Tribunal : Juzgado de Letras de La Ligua

COMPETENCIA : CIVIL ¿ CONTENCIOSO


PROCEDIMIENTO : ORDINARIO
MATERIA : INDEMNIZACIÓN DE PERJUICIOS
DEMANDANTE : ARAVENA GUZMÁN, JUAN CARLOS
: PAYACÁN CARRASCO, INÉS MARGARITA
APODERADO : MACAYA ABARCA, CHRISTIAN
: STAFORELLI ÓRDENES, PATRICIO
: ALICERA CEPEDA, YENIFER VERÓNICA
DEMANDADO : MORALES PROVIDEL, VÍCTOR MANUEL
APODERADO : RISSO STEGMANN, ITALO ARTURO
: ZAPATA ESCOBAR, ALEJANDRO
CÓDIGO : I-05
ROL : C-1145-2014
FECHA DE INICIO : 22 DE SEPTIEMBRE DE 2014
FECHA PARA FALLO : 02 DE MARZO DE 2015

La Ligua, diez de marzo de dos mil quince.


VISTOS:
A fojas 10, comparece don Juan Carlos Aravena Guzmán,
cédula nacional de identidad número 8.978.210-4, chileno,
trabajador, casado, y doña Inés Margarita Pacayán Carrasco,
cédula nacional de identidad número 11.329.698-4, chilena,
casada, dueña de casa, ambos con domicilio en Sitio N° 3,
sector La Higuera, comuna de La Ligua, e interpone
demanda en procedimiento sumario de indemnización de
perjuicios por responsabilidad civil extracontractual contra
don Víctor Manuel Morales Providel, cédula nacional de
identidad número 13.365.797-5, chileno, chofer, con
domicilio en Pasaje Presidente Bulnes N° 573, Villa Los
Jardines, ciudad y comuna de La Ligua, solicitando sea
condenado a pagar la suma total de $16.922.680 (dieciséis
millones novecientos veintidós mil seiscientos ochenta
pesos), o la suma que el Tribunal determine, conforme los
siguientes antecedentes:
I. Los hechos:
1. Que, según sentencia de fecha 26 de agosto de 2014,
dictada por el Juzgado de Garantía de La Ligua, en causa
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RIT N° 1006-2013, RUC N° 1300502756-4, don Víctor


Manuel Morales Providel, fue condenado a sufrir la pena de
41 (cuarenta y un) días de prisión en su grado máximo, la
suspensión de cargos u oficio público durante el tiempo de la
condena y la suspensión de su licencia de conducir por un
plazo de seis meses, por el cuasidelito de lesiones graves
descrito y sancionado en el artículo 490 N° 2 y 492 en
relación al artículo 397 N° 2, todos del Código Penal, debido
a los hechos acaecidos el día 20 de mayo de 2013 en que se
verificará una colisión de vehículos producto del actuar
negligente del demandado, don Víctor Manuel Morales
Providel, cuya consecuencia inmediata fueron las graves
lesiones sufridas por doña Inés Margarita Pacayán Carrasco,
más los cuantiosos daños ocasionados al vehículo de
propiedad de don Juan Carlos Aravena Guzmán.
2. Que, dicha sentencia a la fecha se encuentra firme y
ejecutoriada.
3. Que, según consta de los autos penales, el día 20 de
mayo de 2013 aproximadamente a las 5:20 horas, don
Víctor Manuel Morales Providel conducía el bus de la
empresa Sol del Pacifico, marca Mercedes Benz, modelo LO
915, placa patente única CCRW-97, por calle Serrano de la
ciudad de La Ligua, cuando al llegar a la intersección con
calle Portales, no respetó la serial "PARE" existente en el
lugar, lo que motivo que colisionará el vehículo marca
Chevrolet, modelo Vectra, placa patente única SU-9601, de
propiedad de don Juan Carlos Aravena Guzmán en que
transitaba don Inés Margarita Pacayán Carrasco, producto
de lo cual resulta con fractura nasal y policontusa, lesión de
carácter grave, más los daños de consideración con que
resultó el móvil que conducía.
4. Que, luego de ocurrido estos hechos y en sede criminal
se ha instado en reiteradas oportunidades al demandado,
don Víctor Manuel Morales Providel, a hacer frente a todos
estos gastos, promoviéndose incluso un acuerdo reparatorio,
a lo cual no accedió.
5. Que, todo lo anterior ha generado enormes gastos para
ambos demandantes, tanto de atenciones, traslados y
medicamentos, así como el hecho que se debe intervenir
quirúrgicamente a futuro a efectos de corregir la desviación
del tabique nasal producto del impacto, ya que la
demandante, doña Inés Margarita Pacayán Carrasco, no ha
logrado recuperarse completamente, sufriendo
permanentemente de dolores en la zona nasal existiendo

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actualmente un defecto estético que debe ser corregido en


lo sucesivo; y, a todos estos gastos que han significado ya
considerables desembolsos, se debe añadir que ha debido
postergarse el arreglo del vehículo el cual tiene un costo de
reparación ascendente a $2.822.680 (dos millones
ochocientos veintidós mil seiscientos ochenta pesos), según
consta en presupuesto de reparación, y más aún, a efectos
de poder trasladar a los niños al colegio se ha debido
contratar los servicios de un furgón escolar utilitario, puesto
que antes se les llevaba en el mencionado automóvil desde
la localidad de La Higuera a la comuna de La Ligua.
6. Que, se debe señalar que en ningún instante el
demandado, don Víctor Manuel Morales Providel, ha
colaborado en la recuperación de la demandante, doña Inés
Margarita Pacayán Carrasco, y tampoco en afrontar los
gastos patrimoniales derivados del suceso, ya que solo se
limitó a hacer más dilaciones que las necesarias en el
proceso penal tornando más perniciosas las consecuencias
de esta situación.
7. Que, lo descrito naturalmente provoco en su persona y
en su entorno familiar que conforman, en calidad de
cónyuges, así como entorno de amistades cercanas, difíciles
momentos; y, en consecuencia, durante todo el tiempo
transcurrido, no solo han sufrido el dolor y malestar a causa
de las lesiones y daños, así como la angustia del entorno,
sino además han debido cubrir fuertes gastos tendientes a
mitigar estas aflicciones. A modo de ilustrar menciona solo
algunos conceptos:
a) Que, desde la fecha del hecho y hasta la fecha de
presentación de la demanda, han debido efectuar
desembolsos por concepto de tratamientos y medicamentos.
b) Que, en cuanto al daño del vehículo este aún está sin ser
reparado pues no cuentan con dichos medios económicos.
c) Que, han debido además incurrir en gastos de traslado
de sus hijos en furgón escolar.
d) Que, deben afrontar además una cirugía tendiente a
efectuar la corrección del tabique nasal en lo sucesivo.
8. Que, en consecuencia, a partir del fatídico día, se han
generado consecuencias económicas en su entorno familiar
que deben ser reparadas.
II. Daño:
1. Que, el daño es la privación o menoscabo que
experimenta una persona en si misma o en sus bienes como
consecuencia del hecho ilícito de otra y que le ha lesionado

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un derecho subjetivo patrimonial; según lo dispone el


artículo 2.314 del Código Civil.
2. Que, en el caso de autos, el daño sufrido es cierto, por
cuanto se trata de una grave lesión física lo que ha
acarreado consecuencias perjudiciales e irreparables en la
salud de doña Inés Margarita Pacayán Carrasco, consistente
en una fractura nasal, como asimismo han sufrido
psicológicamente.
3. Que, el daño ha lesionado un derecho subjetivo, y en el
ámbito patrimonial; extra patrimonialmente, han sufrido
daño moral, consistente en una aflicción derivada del dolor
físico y para el entorno el dolor de ver irremediablemente
deteriorada la calidad de vida; angustia y sufrimiento,
menoscabo emocional y psicológico derivado del hecho
dañoso.
4. Que, conforme la doctrina y jurisprudencia, hay daño
cada vez que un individuo sufre una perdida, disminución,
detrimento o menoscabo en su persona o bienes, o en las
ventajas o beneficios patrimoniales o extra patrimoniales de
que gozaba, siempre que estos sean ilícitos.
5. Que, en este punto es necesario tener presente que, si
bien se dice que el daño moral consiste en el dolor, pesar o
molestia que sufre una persona como consecuencia de la
conducta ajena, jurídicamente este existe cuando el bien
lesionado es de naturaleza inmaterial, y por lo mismo, no
apreciable en dinero.
6. Que, el daño moral se caracteriza por atentar contra los
derechos de la personalidad y contra los no patrimoniales de
familia, lo cual significa que consiste en una lesión o
detrimento que experimenta una persona en su honor,
reputación, integridad física o psicológica, libertad, afectos,
estabilidad y unidad familiar, esto es, en general, en los
atributos o cualidades morales de la persona, los que se
condicen íntimamente al caso de autos, ya que se vislumbra
una relación causal entre el hecho dañoso y perjuicios de la
entidad que significan los propios de un daño moral, por lo
que claramente es procedente, situación que se acreciente
considerando la menor edad de la víctima. En tal sentido, la
doctrina y jurisprudencia ha señalado que dicha reparación
obedece a ciertos principios como son: la equivalencia entre
el daño y la reparación; debe ser probado; y real naturaleza
de la indemnización de un daño moral.
III. Relación causal entre el actuar imputable y el daño:
1. Que, antes de sufrir las lesiones, doña Inés Margarita

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Pacayán Carrasco, gozaba de buena salud y estética facial,


no sufría de dolor físico y era segura en la conducción; todo
aquello cambio dramáticamente desde el momento en que
sufre el choque expuesto precedentemente por lo que el
actuar negligente del demandado, don Víctor Manuel Morales
Providel, es causa directa y basal de dicho cambio en el
estado de las cosas.
2. Que, en el caso, existe un hecho dañoso vinculado
causalmente con la conducta culpable del sujeto autor.
3. Que, resulta nítida en la especie, la existencia de un
cuasidelito de lesiones graves que se encuentra determinado
por sentencia firme y ejecutoriada; y, resulta claro además,
que esto es consecuencia directa e inmediata del actuar
negligente del demandado, don Víctor Manuel Morales
Providel, por cuanto, los informes de lesiones señalan como
causa basal de dichas lesiones la conducta desplegada por el
sujeto autor, demandado en estos autos.
IV. Indemnizaciones solicitadas: Que, la cuantía de los
perjuicios que se demandan asciende a la suma de
$15.000.000 (quince millones de pesos), según el siguiente
detalle:
a) Daño emergente:
a.1. Que, en atención a que el mencionado accidente ha
significado una serie de desembolsos tales como atenciones
médicas, traslados a controles, terapias de rehabilitación, sin
perjuicio de los gastos que en meses subsecuentes
desembolsaremos como es el caso de una cirugía facial,
estos ascienden a la suma de $5.000.000 (cinco millones de
pesos).
a.2. Que, solo por concepto de reparación del vehículo
incluido el presupuesto efectuado ello asciende a la suma de
$2.842.680 (dos millones ochocientos cuarenta y dos mil
seiscientos ochenta pesos).
a.3. Que, de igual forma, en atención a que desde la fecha
del suceso al mes de la presentación de la demanda, como
padres han debido contratar un furgón escolar para sus hijos
que ha generado gastos que ascienden a la suma de
$1.080.000 (un millón ochenta mil pesos).
a.4. Que, el total por daño emergente es la suma de
$8.922.680 (ocho millones novecientos veintidós mil
seiscientos ochenta pesos).
b) Daño moral:
b.1. Que, es dificultoso tener que traducir en una
estimación pecuniaria, aspectos tan abstractos y personales

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como son el dolor, la angustia, el sufrimiento, el menoscabo


emocional, las secuelas de tipo físico y moral, y el daño
psicológico derivado del hecho.
b.2. Que, este es producto de la abstracción a las
actividades otrora normales para doña Inés Margarita
Pacayán Carrasco, y el cambio en su conducta, que de ser
una conductora segura ha pasado a convertirse en una
persona con miedos, ello es solo una parte de los trastornos
que negativamente afectaron y afectaran su vida ordinaria,
sumado a los dolores físicos que obviamente fueron
provocados por el golpe sufrido y posteriores tratamientos
médicos, además de la incertidumbre relativa a la
recuperación definitiva, en atención a que probablemente
jamás lograra una completa rehabilitación del dolor nasal
puesto que existe el antecedente de una fractura, y
debiendo estar en situación permanente de alerta en sus
años venideros. Como padres asimismo, han sentido en
primera persona dicho dolor.
b.3. Que, dada la situación expuesta, hacen estimar que el
daño moral ascendente a $8.000.000 (ocho millones de
pesos).
b.4. Que, en consecuencia el demandado, don Víctor
Manuel Morales Providel, debe reparar los perjuicios que se
ha sufrido a causa del actuar culpable del demandado, en
este sentido de indemnizar los perjuicios patrimoniales y
morales que correspondan.
A fojas 25, consta notificación de la demanda al
demandado, don Víctor Manuel Morales Providel, en
conformidad a lo dispuesto en el artículo 44 del Código de
Procedimiento Civil.
A fojas 47, consta realización de audiencia de estilo con la
asistencia de la parte demandante, representada por su
apoderado don Patricio Staforelli Órdenes, y de la parte
demandada, representada por su apoderado, don Alejandro
Zapata Escobar.
La parte demandante ratifica la demanda en todas sus
partes.
La parte demandada contesta la demanda solicitando sea
rechazada en todas y cada una de sus partes, con costas, y,
para el improbable caso en que el Tribunal estime que
corresponde algún grado de responsabilidad a su
representada, solicita se rebajen los montos demandados a
los que estime de derecho, merito del proceso y prueba
rendida; conforme los siguientes argumentos:

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I. Improcedencia de la demanda: Niega todo derecho del


actor para actuar en contra de su representada y niego que
los hechos relatados por la parte demandante, se ajusten a
la realidad; en efecto, se ha demandado a su representada
como conductor del vehículo causante del accidente y se le
ha sindicado como responsable del mismo, siendo el
accidente ocurrido, un hecho fortuito, por lo cual se debe en
ese aspecto civil, desecharse la demanda.
II. Contestación subsidiaria: Que, en cuanto los conceptos y
sumas demandadas, solicita que la demanda sea rebajada
sustancialmente, tomando en cuenta las siguientes
consideraciones:
1. Que, respecto a los montos solicitados en la demanda,
correspondiente al daño moral, en donde la actora, solicita la
suma de $8.000.000 (ocho millones de pesos), estima que
la demanda debe ser rechazada por no existir
responsabilidad de su representada, y además por ser los
montos solicitados desproporcionados.
2. Que, no obstante el hecho de lamentar las lesiones
sufridas por la actora, tampoco existen pruebas que
determinen los efectos estéticos dañosos que la misma
reclama; se refiere a una fractura nasal, pero no de una
lesión que dejara huellas imborrables o deformes que
afecten la calidad de vida de manera tal, que solo ello sea
aminorado con el pago de la suma de $8.000.000 (ocho
millones de pesos).
3. Que, por otra parte todos estos daños, sufrimientos y
angustias tanto como conductora, o como madre, como
señala en la demanda, deben ser probados.
4. Que, en todo caso, estima que los montos solicitados
escapan a la realidad de lo que tradicional y habitualmente
los Tribunales de Justicia otorgan para estos casos, en
consideración al estado, edad, capacidad y condiciones tanto
de la víctima, como de los autores del daño.
5. Que, independientemente del sufrimiento aludido, de la
prueba que deba rendirse respecto a su existencia y
extensión, la suma solicitada debe en todo caso ser
determinada por el Tribunal considerando diferentes
elementos , entre ellos la circunstancia que es evidente que
existió una exposición imprudente al daño por parte de la
víctima, toda vez que su representado había atravesado la
mitad del cruce o intersección cuando fue impactado por el
vehículo que conducía la actora, lo que habla del exceso de
velocidad con que ingresaba al cruce; resulta en

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consecuencia aplicable la moderación y ponderación del


daño provocado, conforme lo señala el artículo 2330 del
Código Civil.
6. Que, respecto al daño emergente, el actor demanda en
forma genéricamente por este concepto, gastos médicos,
traslados a controles, terapias unos gastos futuros de
atenciones médicas y cirugía de rehabilitación, por el cual
solicitan la demanda de $5.000.000 (cinco millones de
pesos).
7. Que, al respecto solicita se rechace la demanda pues no
se ha acreditado de manera alguna el desembolso de esas
sumas; esos gastos tampoco son directos y muchos de ellos
tienen cobertura y han sido absorbidos por los sistemas
previsionales de salud y del seguro obligatorio de accidentes
personales, por lo que no es dable cobrar por ellos.
8. Que, en cuanto a la suma de $2.842.680 (dos millones
ochocientos cuarenta y dos mil seiscientos ochenta pesos),
por concepto de reparación del vehículo del actor, señala que
tal suma es del todo exagerada, abultada y ajena a la
realidad, en efecto, el vehículo del actor tiene un valor
comercial de entre $1.400.000 (un millón cuatrocientos mil
pesos) y $1.800.000 (un millón ochocientos mil pesos), por
lo que a todas luces se trata de una pérdida total, y a ese
valor comercial debe restársele el salvataje o valor de los
restos, el que no puede ser inferior a la suma de $400.000
(cuatrocientos mil pesos); es decir, en otras palabras, existe
una pérdida efectiva de entre $1.000.000 (un millón de
pesos) y a todo evento de $1.400.000 (un millón
cuatrocientos mil pesos), pero no de la suma de $2.800.000
(dos millones ochocientos mil pesos).
9. Que, solo a modo referencial, existen publicaciones por
vehículos similares en los portales de internet, por la suma
de $1.600.000 (un millón seiscientos mil pesos) y
$1.800.000 (un millón ochocientos mil pesos), siendo la
tasación del mismo vehículo, efectuada por Servicio de
Impuestos Internos de $1.830.000 (un millón ochocientos
treinta mil pesos).
10. Que, en consecuencia, solicita que la suma demandada
por daño emergente sea rebajada a la cantidad de
$1.000.000 (un millón de pesos) a lo menos, o a la suma
menor que el Tribunal estime, conforme a derecho y a la
prueba rendida. 11. Que, por último en cuanto a la suma
demandada por gasto de traslado en un furgón escolar de
sus hijos, debido a la falta de vehículo, y por la cual

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demandan la suma de $1.080.000 (un millón ochenta mil


pesos), solicita que especialmente la demanda sea rebajada
ya que no existe prueba alguna respecto a la efectividad de
tal circunstancia, y no consta si efectivamente con
anterioridad los menores eran trasladados de la misma
forma o similar; y, además la suma solicitada es abultada y
exagerada, y, por ello la demanda debe ser rechazada en
esta parte, o al menos ponderada por el Tribunal.
A fojas 50, se dicta sentencia interlocutoria que establece
los hechos sustanciales, pertinentes y controvertidos a
establecer.
A fojas 51, la parte demandante se notifica expresamente
de la sentencia interlocutoria de prueba, conforme
resolución de fojas 52; y a fojas 57, consta notificación de la
sentencia interlocutoria de prueba al apoderado de la parte
demandada, don Ítalo Arturo Risso Stegmann, por cédula,
por Receptor Judicial.
A fojas 182, se encuentra agregado certificado efectuado
por Ministro de Fe del Tribunal conforme al cual el término
probatorio se encuentra vencido.
A fojas 187, se cita a las partes a oír sentencia.
CON LO RELACIONADO Y CONSIDERANDO:
A) PRUEBAS APORTADAS POR LAS PARTES:
PRIMERO: Que, la parte demandante, a fin de acreditar su
pretensión, aparejó al proceso los siguientes elementos de
convicción:
Documental:
1. Copia autorizada sentencia definitiva en procedimiento
simplificado, dictada con fecha 26 de agosto de 2014, por el
Juzgado de Garantía de La Ligua, con certificado efectuado
por Ministro de Fe del Tribunal, con fecha 9 de septiembre
de 2014, conforme al cual la referida sentencia se encuentra
firme y ejecutoriada, de fojas 1 y siguientes, que en lo
resolutivo establece:
a) Que, se condena a don Víctor Manuel Morales Providel,
cédula nacional de identidad número 13.365.797-5, chofer,
domiciliado en Presidente Bulnes N° 573, Los Jardines de La
Ligua, La Ligua, ya individualizado, por su responsabilidad a
título de autor del cuasidelito de lesiones graves, prescrito y
sancionado en el artículo 490 numeral 2° y 492, con relación
al artículo 397 numeral 2°, todos del Código Penal, en
perjuicio de doña Inés Margarita Pacayán Carrasco, cédula
nacional de identidad número 11.329.698-4, ejecutado en
esta jurisdicción en grado de desarrollo consumado el día 20

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de mayo de 2013, a sufrir la pena de 41 (cuarenta y un)


días de prisión en su grado máximo, la suspensión de cargo
u oficio público durante el tiempo de la condena, y la
suspensión de su licencia de conducir por un plazo de seis
meses.
b) Que, reuniéndose en la especie respecto del sentenciado
los requisitos del artículo 4° de la Ley N° 18.216, se
sustituye la ejecución de la pena privativa de libertad
impuesta por la de remisión condicional, quedando sujeto al
control en el Centro de Reinserción Social de La Ligua, por el
periodo mínimo de un año, y debiendo presentarse para su
cumplimiento dentro de quinto día de ejecutoriada la
presente sentencia a las 10:00 horas, bajo apercibimiento
de disponer en su contra una orden de detención, y revocar
la pena sustitutiva si así no lo hiciere, y sin días de abono
que considerar para el evento de revocación del mismo.
c) Que, para el cómputo del lapso de suspensión de la
licencia de conducir previsto en esta sentencia se reconocen
dos días de abono. Se concede el plazo de 20 (veinte) días
corridos contados desde que se encuentre ejecutoriada esta
sentencia para poner a disposición del Tribunal la licencia de
conducir correspondiente, bajo apercibimiento de remitir los
antecedentes a la Fiscalía Local para la investigación del
delito que pudiere configurarse.
2. Certificado de inscripción Registro Vehículos Motorizados
del Servicio de Registro Civil e Identificación de vehículo
station wagon, marca Chevrolet, modelo Vectra 1.6, año
1999, placa patente única SU.9601-0, a nombre de don Juan
Carlos Aravena Guzmán, cédula nacional de identidad
número 8.978.210-4; de fojas 4 y siguiente.
3. Factura N° 002682 emitida por Taller mecánico
automotriz ¿Ricardo Toro¿, con fecha 30 de octubre de 2013,
a nombre de don Juan Aravena Guzmán, cédula nacional de
identidad número 8.978.210-4, con domicilio en Sitio N° 3,
La Higuera, La Ligua, por presupuesto N° 5643, por un total
de $20.000 (veinte mil pesos), I.V.A. incluido; de fojas 6 y
siguientes.
4. Presupuesto N° 005643 efectuado con fecha 30 de
octubre de 2013 por Mecánica Automotriz ¿Ricardo Toro¿, a
nombre de don Juan Aravena Guzmán, respecto de vehículo
marca Chevrolet, modelo Vectra, año 1999, placa patente
única SU.9601, con indicación de repuestos y mano de obra,
por un total de $2.822.680 (dos millones ochocientos
veintidós mil seiscientos ochenta pesos); de fojas 9.

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5. Comprobante de pago de ¿Transporte Escolar, Turismo y


Viajes Especiales Tío Toño¿, emitidos a nombre de ¿Franco y
Rocío Aravena¿, de fojas 59 a 61 vuelta; por las siguientes
fechas y montos:
a) 30 de junio de 2013: $60.000 (sesenta mil pesos).
b) 29 de julio de 2013: $60.000 (sesenta mil pesos).
c) 30 de agosto de 2013: $60.000 (sesenta mil pesos).
d) 30 de septiembre de 2013: $60.000 (sesenta mil pesos).
e) 30 de octubre de 2013: $60.000 (sesenta mil pesos).
f) 30 de noviembre de 2013: $60.000 (sesenta mil pesos).
g) 30 de diciembre de 2013: $60.000 (sesenta mil pesos).
h) 30 de marzo de 2014: $60.000 (sesenta mil pesos).
i) 30 de abril de 2014: $60.000 (sesenta mil pesos).
j) 31 de mayo de 2014: $60.000 (sesenta mil pesos).
k) 30 de junio de 2014: $60.000 (sesenta mil pesos).
l) 31 de julio de 2014: $60.000 (sesenta mil pesos).
ll) 30 de agosto de 2014: $60.000 (sesenta mil pesos).
m) 30 de septiembre de 2014: $60.000 (sesenta mil
pesos).
n) 30 de octubre de 2014: $60.000 (sesenta mil pesos).
ñ) 30 de noviembre de 2014: $60.000 (sesenta mil pesos).
6. Certificado de nacimiento emitido por el Servicio de
Registro Civil e Identificación de Rocío Belén Aravena
Pacayán, cédula nacional de identidad número 20.766.466-
9, nacida el 29 de abril de 2002, hija de don Juan Carlos
Aravena Guzmán, cédula nacional de identidad número
8.978.210-4 y doña Inés Margarita Pacayán Carrasco,
cédula nacional de identidad número 11.329.698-4, según
inscripción N° 159 de la circunscripción de La Ligua, año
2002; de fojas 62.
7. Certificado de nacimiento emitido por el Servicio de
Registro Civil e Identificación de Franco Emilio Aravena
Pacayán, cédula nacional de identidad número 22.654.018-
0, nacido el 20 de febrero de 2008, hijo de don Juan Carlos
Aravena Guzmán, cédula nacional de identidad número
8.978.210-4 y doña Inés Margarita Pacayán Carrasco,
cédula nacional de identidad número 11.329.698-4, según
inscripción N° 30 de la circunscripción de La Ligua, año
2008; de fojas 63.
8. Set de 6 fotografías; la de fojas 64 y 65 grafica el rostro
de un mujer, adulto, con hematomas y lesiones en el sector
de ojos y nariz; y la de fojas 66 a 69 grafica un vehículo
colisionado y destruido en la parte delantera.
Testimonial

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A fojas 74 y siguientes se encuentra agregada acta de


prueba testimonial consistente en la declaración de DOÑA
Jenny Solange López Casanova y don Benjamín Arturo
Rodríguez Valdés; quienes previamente individualizados y
juramentados depusieron en juicio.
La primera contesta al punto uno de prueba, esto es,
efectividad que el día 20 de mayo de 2013 el demandado
don Víctor Manuel Morales Providel conducía el bus marca
Mercedes Benz, modelo LO 915, placa patente única CCRW
97; que sí, es efectivo el día 20 de mayo, en horas de la
mañana, don Víctor Manuel Morales Providel, conducía el bus
marca Mercedes Benz, con patente CCRW-97, lo que sabe y
le consta porque ese mismo día le conto por vía telefónica
doña Inés Margarita Pacayán Carrasco, a quien había
chocado el bus conducido por esta persona.
Indica al punto dos de prueba, esto es, efectividad que el
día 20 de mayo de 2013 doña Inés Margarita Pacayán
Carrasco conducía el vehículo marca Chevrolet, modelo
Vectra, placa patente única SU.9601, y, en su caso,
efectividad que el vehículo es propiedad de don Juan Carlos
Aravena Guzmán; que sí, es efectivo que el día 20 de mayo
de 2013, doña Inés Pacayán Carrasco, conducía el automóvil
marca Chevrolet, modelo Vectra, patente SU-9601, y
también es efectivo que el dueño de este vehículo es don
Juan Carlos Aravena Guzmán, lo que le consta porque los
conoce a ellos, son amigos de sus papás, y también como
dijo, ella la llamó el día del accidente, ambos son
matrimonio y el automóvil es de propiedad de don Juan
Carlos Aravena Guzmán, lo que le consta porque vio el
padrón del vehículo.
Sostiene al punto tres de prueba, esto es, efectividad que el
día 20 de mayo de 2013 don Víctor Manuel Morales Providel
colisiono con su vehículo a la demandante, doña Inés
Margarita Pacayán Carrasco y en la efectiva, circunstancias y
lugar en que se produce la colisión. Hechos, positivos que lo
justifican; que sí, es efectivo, el señalado día 20 de mayo de
2013, el señor Morales Providel, colisionó al vehículo
conducido por doña Inés Pacayán y sabe que fue en la
ciudad de La Ligua, lo que le consta porque recibió la
llamada telefónica de doña Inés Pacayán acerca de este
accidente.
Señala al punto cuatro de prueba, esto es, efectividad que a
consecuencia de la colisión el vehículo de propiedad de don
Juan Carlos Aravena Guzmán, sufrió daños materiales, y

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doña Inés Margarita Pacayán Carrasco sufrió lesiones físicas;


que sí, es efectivo, el vehículo de propiedad de don Juan
Carlos Aravena Guzmán sufrió daños materiales en la parte
delantera, tanto en su parachoques, radiador, capo,
parabrisas, y en general todo el tren delantero, lo que sabe
y le consta porque vio fotografías en el estado en que quedó
el vehículo; y, en cuanto a doña Inés Pacayán Carrasco, a
raíz de la colisión sufrió lesiones en su rostro, se quebró la
nariz, y moretones en diferentes partes del cuerpo.
Concluye al punto quinto de prueba, esto es, existencia del
daño demandado, origen y monto; que sí, existe daño tanto
en lo originado en lo material con respecto al vehículo, y
daño físico y moral para la doña Inés Pacayán; el origen
claramente está a la vista por este accidente y por lo que
tiene conocimiento doña Inés Pacayán incurrió en costosos
gastos médicos por hospitalización y medicamentos y por
otro lado el vehículo, a raíz de esta colisión, sufrió severos
daños de costosa reparación y por lo mismo la
desvalorización del mismo.
Repreguntada explica que doña Inés Pacayán demoro en
mejorar de las lesiones como tres meses, más o menos, y
ha gastado, doña Inés Pacayán, aproximadamente $300.000
(trescientos mil pesos), entre medicamentos y viajes al
Hospital de Quillota; y, en cuanto al estado de ánimo de
doña Inés Pacayán y su familia en ese período, estaban
todos mal, porque fue en un momento en que
económicamente estaban mal, de hecho el auto era una
herramienta porque transportaban a los niños y tuvieron que
incurrir en gastos de furgón escolar, porque los niños
estudian en La Ligua y ellos viven en el sector de La
Higuera, ella cayó en depresión, se sentía muy mal, tanto
físicamente como psicológicamente.
El segundo contesta al punto primero de prueba, esto es,
efectividad que el día 20 de mayo de 2013 el demandado
don Víctor Manuel Morales Providel conducía el bus marca
Mercedes Benz, modelo LO 915, placa patente única CCRW-
97; que sí, es efectivo, el día 20 de mayo de 2013, en horas
de la madrugada, mientras se encontraba en el paradero de
¿Radiotaxis Zero¿ en calle Portales casi al llegar a calle
Serrano, estaba estacionado en el tercer lugar, vio que el
bus marca Mercedes Benz con patente CCRW-97 y recuerda
que esa madrugaba mientras fumaba con sus colegas en el
paradero observó que iba un auto en dirección al oriente por
calle Portales, y por calle Serrano subía el bus en dirección

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norte a sur, y sin respetar el disco ¿pare¿ se le cruza al


automóvil de propiedad de don Juan Carlos Aravena
Guzmán, y conducido por su cónyuge doña Inés Pacayán
Carrasco, quien sufrió diferentes lesiones en su cuerpo; le
consta, además, todo lo sucedido porque inmediatamente
después de haberse ocasionado esta colisión junto con sus
colegas acudieron a prestar socorro, y después llegó
Carabineros.
Señala al punto cuatro de prueba, esto es, efectividad que a
consecuencia de la colisión el vehículo de propiedad de don
Juan Carlos Aravena Guzmán, sufrió daños materiales, y
doña Inés Margarita Pacayán Carrasco sufrió lesiones físicas;
que sí, exactamente, tanto el vehículo de propiedad de don
Juan Carlos Aravena sufrió daños materiales, en su tren
delantero, parachoques, capot, vidrio parabrisas, pilar y la
puerta del copiloto y, en cuanto a las lesiones físicas que
sufrió en este accidente doña Inés Pacayán, cuando la fue a
ver tenía cortes en la cabeza, de la cual sangraba, dolor de
espalda, cuello y extremidades y se quejaba mucho de dolor,
lo que sabe y le consta porque asistió a los segundos de la
colisión.
Confesional:
A fojas 172 se encuentra agregada acta de absolución de
posiciones rendida por el demandado, don Víctor Manuel
Morales Providel, conforme pliego agregado a fojas 169 y
siguientes.
El absolvente, demandado, don Víctor Manuel Morales
Providel, contesta que es efectivo que con fecha 20 de mayo
de 2013 aproximadamente a las 5:20 horas conducía un bus
de la empresa Sol del Pacifico por calle Serrano de la ciudad
de La Ligua, cuando al llegar a la intersección con calle
Portales colisionó con el vehículo conducido por doña Inés
Margarita Pacayán Carrasco; y, que es efectivo que por la
calle que transitaba, esto es, calle Serrano, existía y existe
aún, una señal ¿PARE¿.
Agrega que es efectivo que por la calle que transitaba doña
Inés Margarita Pacayán Carrasco, esto es, calle Portales, no
existía ni existe señal del tránsito que obligue a la detención
o ceder el paso; y que ¿no sabría que decir sobre las
lesiones sufridas a consecuencia de la colisión por doña Inés
Margarita Pacayán Carrasco¿.
Señala que no es efectivo que colisionara con la parte
delantera derecha del bus que conducía, ¿y no tiene idea de
los tratamientos médicos y farmacológicos y de

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rehabilitación que haya debido asumir doña Inés Margarita


Pacayán Carrasco¿.
Concluye que es efectivo que en audiencia de 26 de agosto
de 2014 en el Juzgado de Garantía de La Ligua, en causa
RIT N° 1006-2013, admitió responsabilidad en los hechos,
producto de lo cual, fue condenado a 41 (cuarenta y un)
días de prisión en su grado máximo, suspensión de cargo u
oficio público y suspensión de licencia por seis meses, por su
autoría en el cuasidelito de lesiones graves en contra de
doña Inés Margarita Pacayán Carrasco; y que ¿no tiene idea
de los daños que afectaron al vehículo menor de propiedad
de don Juan Carlos Aravena Guzmán producto del impacto ni
la cuantía de su reparación¿.
SEGUNDO: Que, la parte demandante rindió prueba
documental, consistente en:
1. Certificado de inscripción Registro Vehículos Motorizados
del Servicio de Registro Civil e Identificación de vehículo
station wagon, marca Chevrolet, modelo Vectra 1.6, año
1999, placa patente única SU.9601-0, a nombre de don Juan
Carlos Aravena Guzmán, cédula nacional de identidad
número 8.978.210-4; de fojas 33 y siguiente, de idéntico
contenido al agregado a fojas 4 y siguientes.
2. Consulta tasación de vehículos livianos, de fojas 35, que
contiene, en lo pertinente: ANO TIPO MARCA MODELO PTAS.
CIL. COMB. TRANS. EQUIPO TASACION
$ 1999 STATION WAGON CHEVROLET ASTRA 1.6 75HP 5
1600 BENC MEC FULL 1.810.000 1999 STATION WAGON
CHEVROLET TROOPER S 3AS MT 205 HP 4 3200 BENC MEC
FULL 2.800.000 1999 STATION WAGON CHEVROLET
TROOPER S 205HP 4WD 4 3200 BENC MEC FULL 2.730.000
1999 STATION WAGON CHEVROLET ASTRA 1.6 75HP 5 1600
BENC MEC EQU1 1.730.000 1999 STATION WAGON
CHEVROLET CORSA 1.6 92 HP 5 1600 BENC MEC NORM
1.430.000 1999 STATION WAGON CHEVROLET CORSA 1.6
GL 5 1600 BENC MEC NORM 1.410.000 1999 STATION
WAGON CHEVROLET VECTRA 1.6 I00HP 5 1600 BENC MEC
EQUI 1.830.000 1999 STATION WAGON CHEVROLET
VECTRA 1.6 100HP 5 1600 BENC MEC FULL 1.950.000 1999
STATION WAGON CHEVROLET VECTRA 1.8 115HP 5 1800
BENC MEC FULL 2.090.000 1999 STATION WAGON
CHEVROLET VECTRA 1.6 I00HP LL 5 1600 BENC MEC EQUI
1.890.000 3. Publicación Portal Internet Chileautos de 10 de
noviembre de 2014, que ofrece por la suma de $1.800.000
(un millón ochocientos mil pesos), vehículo marca Chevrolet,

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modelo Vectra, año 1998, sedán, color burdeos, con


160.000 kilómetros, cilindrada de 1.800 cc, dirección
hidráulica, aire acondicionado, alza vidrios eléctrico, espejos
eléctricos, cierre centralizado, combustible tipo bencina,
cuatro puertas; de fojas 36 y siguiente.
4. Memorándum emitido por Corredores de Seguros FR
Group con fecha 6 de noviembre de 2014 a Ruíz Tagle, Risso
y Compañía Limitada Abogados, de fojas 38 y siguientes,
respecto del siniestro de fecha 20 de mayo de 2013 del
vehículo placa patente CCRW-97, que contiene la denuncia
del siniestro y la hoja de antecedentes, esta última referida
al vehículo bus Mercedes Benz patente CCRW-97.
TERCERO: Que, se encuentran agregados al proceso, los
siguientes antecedentes:
a) Copia de investigación remitida por don Luis Cortez
Muñoz, Fiscal Jefe de la Fiscalía Local de La Ligua, cusa RUC
N° 1300502756-4, agregado a fojas 87 y siguientes, que
contiene los siguientes antecedentes:
1. Acta de audiencia de juicio oral simplificado efectuado
con fecha 26 de agosto de 2014, en que el requerido don
Víctor Manuel Morales Providel admite responsabilidad en los
hechos materia del requerimiento en procedimiento
simplificado, y sentencia condenatoria, de idéntico contenido
a la agregada a fojas 1 y siguientes.
2. Acta de audiencia de preparación de juicio oral
simplificado efectuado con fecha 18 de agosto de 2014.
3. Requerimiento en procedimiento simplificado presentado
por el Ministerio Público contra don Víctor Manuel Morales
Providel, cédula nacional de identidad número 13.365.797-
5, en causa RUC N° 1300502756-4, RIT N° 1006-2013, que
establece:
3.1. Hechos: ¿El 20 de mayo de 2013, aproximadamente a
las 05:20 horas, el requerido Víctor Manuel Morales Providel,
conducía el bus de la empresa Sol del Pacifico, marca
Mercedes Benz, modelo LO 915, P.P.U. CCRW.97, por calle
Serrano de la ciudad de La Ligua, cuando al llegar a la
intersección con calle Portales, no respeto la señal "PARE"
existente en el lugar, lo que motivó que colisionara el
vehículo que transitaba por calle Portales, marca Chevrolet,
modelo Vectra, P.P.U. SU.9601, conducido por doña Inés
Pacayán Carrasco, quien producto de lo anterior, resultó con
fractura nasal y policontusa, lesiones de carácter grave¿.
3.2. Calificación jurídica: ¿Los hechos precedentemente
descritos, en concepto del Ministerio Publico, constituyen el

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delito de cuasidelito de lesiones graves, prescrito y


sancionado en el artículo 490 N° 2 y 492 del Código Penal,
el cual se encuentra en grado de desarrollo de consumado y
en el que el requerido ha participado como autor¿.
4. Informe de lesiones V-QUI-LES231-2013, de doña Inés
Margarita Pacayán Carrasco, efectuado por el doctor Jorge
Abde Carvajal, Médico Legista Jefe, Servicio Médico Legal
Quillota, de 11 de julio de 2013, que establece:
4.1. Anamnesis y antecedentes clínicos: Sufre accidente del
tránsito el 20 de mayo de 2013, golpeándose en la cara,
tórax y en diferentes partes del cuerpo. Actualmente siente
molestias en diferentes partes del cuerpo: permaneció
hospitalizada por un día en La Ligua.
4.2. Examen físico actual: No hay lesión evidente al
momento del examen.
4.3. Conclusiones: Fractura nasal; policontusa; lesión de
carácter grave.
4.4. Observaciones: A la vista epicrisis Hospital La Ligua;
radiografías y set fotográfico.
5. Declaración efectuada en la Fiscalía Local de La Ligua,
con fecha 25 de junio de 2013, por don Víctor Manuel
Morales Providel, cédula nacional de identidad número
13.365.797-5, quien indica: ¿Es chofer de la empresa Sol
del Pacifico, desde hace dos meses a la fecha. El 20 de mayo
de 2013, a las 05.20 horas aproximadamente, en
circunstancias que conducía el bus de la empresa Sol del
Pacifico, con recorrido Cabildo-Valparaíso, marca Mercedes
Benz- Busccar, modelo LO 915, color azul con amarillo, año
2009, patente CCRW-97, transitando por calle Serrano
comuna de La Ligua, de norte a sur, al llegar a la
intersección con calle Ortiz de Rozas se detuvo en el disco
"PARE" y como no venía nada continuó su marcha y al llegar
a la calle Diego Portales se detuvo nuevamente, por existir
un signo "PARE" en el lugar, vio hacia el poniente que venía
un vehículo particular, pero calculó por la distancia y por la
velocidad permitida en la zona, que alcanzaba a pasar, por
ese motivo continuó la marcha y cuando atravesaba el eje
central de la calzada de calle Portales, siente un fuerte
impacto que movió completamente la máquina. En el bus
iban dos pasajeros, pero no resultaron lesionados. El
vehículo menor impactó al bus en el centro del costado
lateral derecho, resultando con daños en la faja lateral
inferior costado derecho abollado y estanque de petróleo
dañado. Al vehículo conducido por la señora lo vio venir por

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calle Portales y según su apreciación alcanzaba a pasar


antes que este, pero ella venía a exceso de velocidad, lo que
se desprende del nivel de daños que generó el choque¿.
6. Declaración efectuada en la Fiscalía Local de La Ligua,
con fecha 25 de junio de 2013, por doña Inés Margarita
Pacayán Carrasco, cédula nacional de identidad número
11.329.698-4, quien indica: ¿Su marido don Juan Carlos
Aravena Guzmán, es dueño de un vehículo marca Chevrolet,
modelo Vectra, color verde, año 1999, patente SU-9601; su
marido y su hijo trabajaban en Teno, por eso todos los días
lunes los iba dejar a Pullally a las 05:00 horas, para que
tomaran un bus en dirección al sur. El 20 de mayo de 2013,
a las 05.20 horas aproximadamente, luego de haber dejado
a su marido y a su hijo en Pullally, venía de vuelta en
dirección a La Higuera, para lo cual tiene que cruzar en
sector céntrico de La Ligua por calle Portales, en
circunstancias que transitaba en el vehículo de su marido
patente SU-9601, por calle Portales en dirección de poniente
a oriente y al llegar a la esquina calle Serrano, continuó la
marcha, iba a una velocidad aproximada de 50 kilómetros
por hora, con las luces encendidas y usando su cinturón de
seguridad, cuando cruzaba calle Serrano de forma
sorpresiva aparece un bus por calle Serrano, el cual no
respeto la señalética "PARE" existente en el lugar, por este
motivo lo impactó de forma frontal a la altura de la mitad de
la micro, entre los dos ejes por el lado derecho. Su vehículo
resultó con daños de consideración: capot abollado,
tapabarro delantero derecho e izquierdo abollado,
parachoque delantero quebrado, foco e intermitentes
delantero, ambos costados quebrados, radiador deteriorado,
motor, caja hidráulica y tren delantero con todas sus partes
y piezas deterioradas. Resultó con las siguientes lesiones
"politraumatizada, fractura nasal" de carácter grave. Llegaría
a un acuerdo reparatorio ya que el vehículo no tiene arreglo,
este tiene un valor comercial de $2.500.000 (dos millones
quinientos mil pesos).
7. Parte Detenidos de Carabineros de Chile, Primera
Comisaría de La Ligua, de 20 de mayo de 2013, que
respecto de los daños y antecedentes viales, establece:
7.1. Daños: El bus P.P.U. CCRW-97 resultó con daños
consistentes en faja lateral inferior; costado derecho
abollado; y, estanque de petróleo dañado. El automóvil
P.P.U. SU-9601, resultó con capot abollado; tapabarro
delantero derecho e izquierdo abollado; parachoque

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delantero quebrado; foco e intermitentes delanteros ambos


costados quebrados; radiador deteriorado, motor, caja
hidráulica y tren delantero, con todas sus partes y piezas
deterioradas.
7.2. Antecedentes viales: estado atmosférico, neblina;
luminosidad, regular, nocturna, con luz artificial; calzada,
unidireccional; estado de la calzada, buena; condición de la
calzada, húmedo; huellas de frenada, no existen;
señalización, existe señal ¿PARE¿; tramo de la vía, cruce
señalizado ¿PARE¿.
b) Informe evacuado con fecha 6 de enero de 2015 por el
Jefe del Departamento de Tránsito y Transporte Público de la
Ilustre Municipalidad de La Ligua, doña Carmen Gloria
Céspedes Duarte, de fojas 164, que indica: ¿Que, la
intersección de calles Portales con Serrano, se encuentra
regulada con la señal de prioridad RPI-2 (PARE), la cual se
encuentra ubicada en calle Serrano, en las aceras oriente y
poniente, sentido de transito de norte a sur; y, además, en
dicha intersección se encuentran demarcados los respectivos
pasos peatonales para ambas vías¿.
c) Informe evacuado con fecha 12 de enero de 2015 por el
doctor Gabriel Zamora Salinas, Director Regional Servicio
Médico Legal de Valparaíso, de fojas 177, que adjunta
Informe de Lesiones N° 231-2013, de 11 de julio de 2013,
efectuado a doña Inés Margarita Pacayán Carrasco, cédula
nacional de identidad número 11.329.698-4, agregado a
fojas 176, de idéntico contenido al incluido en los
antecedentes remitidos por el Ministerio Público, Fiscalía
Local de La Ligua, agregado a fojas 134.
B) OBJETO DEL JUICIO. HECHOS ACREDITADOS.
CONCURRENCIA DE LOS REQUISITOS LEGALES DE LA
ACCIÓN INTENTADA:
CUARTO: Que, conforme se colige de la etapa de discusión,
el objeto del juicio consiste en determinar si concurren los
requisitos para establecer la obligación de indemnizar por
parte del demandado, don Víctor Manuel Morales Providel, el
daño reclamado por cada uno de los actores.
QUINTO: Que, al efecto el artículo 2314 del Código Civil
prescribe que el que ha cometido un delito o cuasidelito que
ha inferido daño a otro, es obligado a la indemnización; sin
perjuicio de la pena que le impongan las leyes por el delito o
cuasidelito.
SEXTO: Que, los requisitos o elementos de la denominada
responsabilidad civil extracontractual, fundada en el citado

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artículo 2314 del Código Civil, son:


a) Acción u omisión; es decir, el hecho ilícito, entendido
como el comportamiento contrario al ordenamiento jurídico,
sea la ejecución de un hecho (in comitendo) o la no
ejecución de un hecho (in omitendo).
b) Dolo, es decir, la intención positiva de inferir daño a la
persona o propiedad de otro, en los términos del artículo 44
del Código Civil; o culpa, es decir, la falta de aquella
diligencia o cuidado que los hombres prudentes emplean
ordinariamente en sus actos o negocios propios.
c) Daño o perjuicio, entendido como detrimento o
menoscabo que un sujeto experimenta, sea en su persona,
en sus bienes o en cualquiera de sus derechos
extrapatrimoniales.
d) Relación causal, que exige que entre el hecho y el daño
exista una relación directa y necesaria; y, como señala la
doctrina, explicando los dos aspectos de la causalidad, el
aspecto natural que se expresa en una relación empírica de
causa a efecto entre el hecho y el daño, y el aspecto
normativo, que se expresa en la exigencia de que exista una
relación de suficiente proximidad entre ambos, de modo que
los efectos dañinos consecuentes del hecho del demandado
sólo son atribuidos a ese hecho en la medida que exista
entre ambos una relación sustancial y no meramente
accidental. (Enrique Barros Bourie. Tratado de
Responsabilidad Extracontractual. Editorial Jurídica de Chile.
Año 2007. Página 374 y siguientes).
e) Capacidad delictual o cuasi delictual, siendo la regla
general la capacidad.
SÉPTIMO: Que, con los antecedentes que obran en el
proceso, se encuentran acreditados los siguientes hechos:
1. En cuanto a la acción: Que, el día 20 de mayo de 2013,
aproximadamente a las 05:20 horas, en circunstancias de
don Víctor Manuel Morales Providel, quien se desempeñaba a
esa fecha como chofer de la empresa de transporte de
pasajeros Sol del Pacifico en el recorrido Cabildo-Valparaíso,
conducía el bus, perteneciente a dicha empresa, marca
Mercedes Benz, modelo LO 915, placa patente única CCRW-
97, por calle Serrano de la ciudad de La Ligua, al llegar a la
intersección con calle Portales de la misma ciudad, no
respetando el signo o señal ¿PARE¿ que existe en dicha
intersección, colisionó el vehículo menor, marca Chevrolet,
modelo Vectra, placa patente única SU-9604, de propiedad
de don Juan Carlos Aravena Guzmán, que era conducido por

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doña Inés Margarita Pacayán Carrasco, que transitaba por


calle Portales¿.
Que, al efecto, el hecho anteriormente establecido, como
acreditado, se encuentran justificado en el proceso, con el
mérito de los antecedentes contenidos en la carpeta de
investigación del Ministerio Público, y con el mérito de la
sentencia definitiva, firme y ejecutoriada, dictada en
procedimiento simplificado, con fecha 26 de agosto de 2014,
en autos RIT N° 1006-2013, el Juzgado de Garantía de La
Ligua, instancia en que, el Juez de Garantía, estableció la
efectividad del hecho antes descrito, contenido en el
requerimiento en procedimiento simplificado presentado por
el Ministerio Público, ya reseñado, como asimismo, la autoría
en el mismo, del demandado, don Víctor Manuel Morales
Providel.
2. En cuanto al dolo o culpa: Que, el hecho desplegado por
el demandado, don Víctor Manuel Morales Providel, ocasionó
el accidente y colisión con el vehículo menor conducido por
doña Inés Margarita Pacayán Carrasco, y este tiene su causa
basal y directa en una conducta negligente, imputable al
demandado, y, en este sentido, conforme el mérito de la
prueba rendida, especialmente las piezas de la carpeta de
investigación efectuada por el Ministerio Público, RUC N°
1300502756-4, y de la sentencia condenatoria dictada por el
Juzgado de Garantía de La Ligua, en causa RIT N° 1006-
2013, en concordancia con el informe emitido por el
Departamento de Tránsito y Transporte de la Ilustre
Municipalidad de La Ligua, se establece que, el demandado,
don Víctor Manuel Morales Providel, en su calidad de chofer
conducía el bus de la empresa Sol del Pacifico, y al llegar a
la intersección de calle Serrano con calle Portales de la
ciudad de La Ligua, no obstante enfrentar una señal ¿PARE¿,
continuó su recorrido, omitiendo la obligación legal y
reglamentaria que el impone dicha señalética, provocando la
colisión con el vehículo conducido por la demandada, doña
Inés Margarita Pacayán Carrasco, quien conduciendo por
calle Serrano no tenía señal de tránsito que la obligará a
detenerse o a parar.
Que, al efecto, el artículo 108 de la Ley de Tránsito
establece que todo conductor deberá mantener el control de
su vehículo durante la circulación y conducirlo conforme a
las normas de seguridad determinadas en la ley, sin que
motivo alguno justifique el desconocimiento o
incumplimiento de ellas, y están obligados a mantenerse

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atentos a las condiciones del tránsito del momento.


Que, por su parte, el artículo 139 de la Ley de Tránsito,
estatuye lo que se denomina el ¿derecho preferente de
paso¿, y, en el inciso tercero, expresamente señala que ¿el
derecho preferente de paso no regirá entre otros, en
¿aquellos cruces donde se haya determinada la preferencia
mediante signos "PARE" o "CEDA EL PASO"; y, en
consecuencia, habiéndose establecido en el proceso, con el
mérito de la prueba rendida, que el demandado, don Víctor
Manuel Morales Providel, al conducir el bus marca Mercedes
Benz de la empresa Sol del Pacifico, placa patente única
CCRW-97, desconoció la obligación de detenerse que el
imponía el ¿SIGNO PARE¿ existente en la intersección de
calles Serrano con Portales, de la ciudad de La Ligua,
específicamente al vehículo que transita por calle Serrano,
como es el caso del demandado el día 20 de mayo de 2013,
debe necesariamente concluirse que su actuar fue
negligente y culpable, por cuanto, considerando que ejerce
el oficio de chofer, por lo que debe imponérsele incluso un
mayor conocimiento y respecto de la normativa de tránsito y
vial, es menester señalar que el ¿SIGNO PARE¿, no impone
como obligación al conductor el realizar una operación físico
matemática a efectos de calcular según factores de
distancia, tiempo y velocidad si ¿alcanza a cruzar¿, antes
que lo pueda colisionar un vehículo que viene por la vía
transversal, sino que lisa y llanamente impone la obligación,
ley imperativa, de detener y ¿parar¿ la marcha, por cuanto,
de lo contrario asume y expone al resto, tanto peatones
como conductores, a un riesgo por imprudencia y
negligencia, como en definitiva acaeció respecto de la
víctima doña Inés Margarita Pacayán Carrasco.
Que, en este sentido, el artículo 140 de la Ley de Tránsito,
que infringió el demandado, don Víctor Manuel Morales
Providel, estatuye, en el inciso primero, que ¿el conductor
que enfrente el signo "PARE" deberá detener el vehículo y
permitir el paso a los que circulen por la otra vía, y reiniciará
la marcha sólo cuando pueda hacerlo en condiciones que
eliminen toda posibilidad de accidente¿, y dicha obligación
no fue satisfecha y acatada por el demandado, don Víctor
Manuel Morales Providel, por cuanto, en el hecho fáctico
atestiguado y que le mereció reproche penal, no detuvo la
marcha al enfrentarse al signo ¿PARE¿, ocasionando, con su
actuar negligente, un accidente vehicular.
Que, ratifica lo anterior la circunstancia que la propia Ley de

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Tránsito, en el artículo 167, presume la responsabilidad del


conductor en los accidentes de tránsito, cuando, conduce el
vehículo sin estar atento a las condiciones del tránsito del
momento y no respetar el derecho preferente de paso de
peatones o vehículos y las indicaciones del tránsito dirigido o
señalizado, ambas circunstancias establecidas en la
investigación criminal seguida contra el demandado, don
Víctor Manuel Morales Providel, atendido que éste fue
condenado en virtud de su responsabilidad en los hechos
contenidos en el requerimiento en procedimiento
simplificado presentado en su contra por el Ministerio Público
que se sustenta en la circunstancia de que no respetó la
señal de tránsito, signo ¿PARE¿, existente en el lugar del
suceso.
3. En cuanto al daño: Que, a consecuencia del actuar
negligente desplegado por el demandado, don Víctor Manuel
Morales Providel, los demandantes resultaron con los
siguientes daños; directos, además de aquellos que se
producen a consecuencia de la pérdida inmediata del bien
material y de las lesiones sufridas:
a) Don Juan Carlos Aravena Guzmán: Daños materiales:
Vehículo marca Chevrolet, modelo Vectra 1.6, año 1999,
placa patente única SU.9601-0, de su propiedad, según
certificado de inscripciones y anotaciones vigentes emitido
por el Servicio de Registro Civil e Identificación, Registro de
Vehículos Motorizados: Daños en la estructura delantera;
capot abollado; tapabarro delantero derecho e izquierdo
abollado; parachoque delantero quebrado; foco e
intermitentes delantero, ambos costados, quebrado;
radiador deteriorado, motor, caja hidráulica y tren delantero
con todas sus partes y piezas deterioradas; conforme se
atestigua en Parte Denuncia de Carabineros de Chile,
Primera Comisaría de La Ligua, que ratifican el contenido de
las fotografías de fojas 66 y siguientes.
b) Doña Inés Margarita Pacayán Carrasco: Daños físicos:
Lesiones consistentes en fractura nasal y policontusa, las
que clínica y medicamente fueron calificadas de ¿carácter
grave¿.
4. En cuanto a la relación de causalidad: Que, no existiendo
ningún elemento probatorio -aportado por el demandado,
don Víctor Manuel Morales Providel- que permita atribuir al
suceso la concurrencia de alguna causal de eximente de
responsabilidad, como sería el supuesto alegado de caso
fortuito o fuerza mayor, el que por lo demás como defensa

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no desarrolla en cuanto, mínimamente, explicitar la forma


en que el mismo se configuraría en el caso de autos, y que
como tal, por lo demás, es absolutamente descartado por
cuanto considerando que el suceso, accidente vehicular,
tiene una única causa, perfectamente identificable, cual es,
que el demandado, don Víctor Manuel Morales Providel no
respetó la señal de ¿PARE¿ al enfrentarse a la intersección
de calle Serrano con calle Portales de la ciudad de La Ligua,
es jurídicamente inadmisible ¿calificar¿ dicha conducta como
¿un imprevisto a que no es posible resistir¿, en los términos
que exige el artículo 45 del Código Civil, y, por ende, sólo
puede concluirse que el daño sufrido por cada uno de los
demandantes, deriva, en su causa directa e inmediata, del
actuar desplegado por el demandado, don Víctor Manuel
Morales Providel, y en tal sentido, ¿suprimiendo¿ el hecho
¿no respetar el signo ¿PARE¿ el demandado al enfrentarse a
la intersección de las calles Serrano con Portales de la
ciudad de La Ligua - necesariamente se ¿elimina¿ el daño,
como consecuencia de aquel.
Que, dicha circunstancia se encuentra, asimismo,
atestiguada con el mérito de la sentencia condenatoria
dictada por el Juzgado de Garantía de La Ligua en causa RIT
N° 1006-2013, en que se estableció que el demandado ¿era
autor de un cuasidelito consumado de lesiones graves, en
perjuicio de doña Inés Margarita Pacayán Carrasco,
cometido el 20 de mayo de 2013 en la comuna de La Ligua¿,
lo cual, es ratificado por la declaración de los testigos doña
Jenny Solange López Casanova y don Benjamín Arturo
Rodríguez Valdés, este último presencial de los hechos
acaecidos el 20 de mayo de 2013, y especifico en sostener
que la colisión entre el bus conducido por el demandado,
don Víctor Manuel Morales Providel, y el vehículo menor
conducido por doña Inés Margarita Pacayán Carrasco, de
propiedad de don Juan Carlos Aravena Guzmán, tuvo su
causa basal en la circunstancia que el chofer del bus,
demandado de autos, no respecto la orden de detención,
como excepción al derecho preferente de paso, que le
impone el signo ¿PARE¿ existente en calle Serrano, en la
intersección con calle Portales, lo que por lo demás es
reconocido, asimismo, por el propio demandado, don Víctor
Manuel Morales Providel, al absolver posiciones en estos
autos, lo que constituye plena prueba, conforme lo previsto
en los artículo 384 regla segunda del Código de
Procedimiento Civil, en cuanto a la declaración de los

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testigos, al tratarse de dos testigos contestes en el hecho y


sus circunstancias esenciales, sin tacha y legalmente
examinados, y de lo previsto en el artículo 399 del Código
de Procedimiento Civil en relación al artículo 1713 del
Código Civil, en cuanto a la confesión judicial rendida por el
demandado, don Víctor Manuel Morales Providel; y, en
consecuencia, no habiéndose desvirtuado por otro elemento
de convicción, constituyen, como se ha indicado, plena
prueba, y permiten acreditar la responsabilidad del
demandado, don Víctor Manuel Morales Providel, en cuanto,
el suceso puede configurarse, para efectos de la imputación
de responsabilidad, como una acción culpable cometida por
el agente (demandado) que causa perjuicio a las víctimas
(demandantes).
C) EN CUANTO A LA ALEGACIÓN FORMULADA POR EL
DEMANDADO DE CONCURRENCIA DE LA CIRCUNSTANCIA
CONTEMPLADA EN EL ARTÍCULO 2330 DEL CÓDIGO CIVIL:
OCTAVO: Que, el artículo 2330 del Código Civil estatuye:
¿La apreciación del daño está sujeta a reducción, si el que lo
ha sufrido se expuso a él imprudentemente¿.
NOVENO: Que, para efectos de establecer la procedencia o
no de la norma en análisis deben considerarse las siguientes
circunstancias:
a) Que, en sede penal ¿referente al proceso seguido ante el
Juzgado de Garantía de La Ligua en causa RIT N° 1006-
2013- no se justificó por el demandado ¿imputado en dicho
proceso penal-, don Víctor Manuel Morales Providel, que se
configurara a su respecto, ya como eximente de
responsabilidad penal, ya como atenuante de la misma,
responsabilidad en el accidente con colisión vehicular, y, por
en contrario, según mérito de carpeta de investigación
efectuada por el Ministerio Público, y sustentada en el
requerimiento en procedimiento presentado contra el
demandado, se establece que la causa basal del accidente es
única y exclusivamente que el demandado, don Víctor
Manuel Morales Providel no detuvo, paro, la marcha del
vehículo al enfrentarse al signo ¿PARE¿, es decir, incumplió e
infringió las normas legales y reglamentarias que regulan el
transito vehicular, respecto de las cuales, desempeñando el
oficio de chofer, debe incluso exigírsele mayor respecto a las
mismas, por efectuar traslado de pasajeros.
b) Que, en este proceso, de carácter civil, el demandado,
don Víctor Manuel Morales Providel, no aparejó ningún
elemento de convicción tendiente a acreditar sus alegatos de

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defensa, esto es, que en el caso de autos proceda la


aplicación del artículo 2330 del Código Civil, considerando
que ni siquiera explicita los hechos en que hace consistir la
conducta de los actores, ni en cuanto al modo ni en cuanto a
la forma en que se habrían, supuestamente, expuesto
imprudentemente al daño, considerando que el accidente
vehicular, según ha quedado suficientemente establecido, se
ocasiono únicamente por la circunstancia de haber infringido
el demandado, don Víctor Manuel Morales Providel, la
obligación de detenerse al enfrentarse a un signo ¿PARE¿,
pretendiendo, incluso atribuir responsabilidad a la
demandada, doña Inés margarita Pacayán Carrasco, quien,
conforme el mérito de la investigación seguida por el
Ministerio Público, conducía respetando las leyes de tránsito,
por cuanto, continúo por la vía, calle Portales, en razón de
no imponérsele la obligación de detención a su respecto, y
considerando, por lo demás, que el propio demandado, don
Víctor Manuel Morales Providel, al prestar declaración ante el
Ministerio Público con fecha 25 de junio de 2013 reconoce
que ¿vio el vehículo que era conducido por doña Inés
Margarita Pacayán Carrasco pero calculó que alcanzaría a
pasar por lo que no detuvo la marcha no obstante enfrentar
el signo ¿PARE¿.
DÉCIMO: Que, en este sentido, explica la doctrina que: ¿En
virtud del principio de compensación de las
responsabilidades, la comparación entre la conducta del
tercero y de la víctima no lleva a un juicio de ¿todo o nada¿,
sino a una comparación de las responsabilidades. Hay casos,
sin embargo, en que el daño puede ser normativamente
imputado por completo al hecho culpable de la víctima, o, lo
que es más frecuente, que la culpa de la víctima, a pesar de
haber influido en el resultado dañoso, es tenida por
irrelevante. La cuestión es típicamente de imputación
normativa del daño, y la pregunta consiste en saber si la
consecuencia dañina puede ser normativamente atribuida
sólo al hecho de la víctima o del tercero, en términos que
uno de esos hechos sea tenido por causalmente excluyente
del otro. Así se ha fallado que procede eximir de
responsabilidad al demandado si ¿la causa suficiente,
principal o determinante del perjuicio proviene del hecho
negligente o de la omisión del perjudicado¿ (Enrique Barros
Bourie. Tratado de Responsabilidad Extracontractual.
Editorial Jurídica de Chile. Año 2007. Página 435 y
siguientes).

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DÉCIMO PRIMERO: Que, la norma contenida en el artículo


2330 del Código Civil, como explica la doctrina, se
fundamenta en el principio de igualdad que rige las
relaciones de derecho privado, y, conforme lo razonado, es
improcedente su aplicación en el caso de marras, en
atención a que el demandado, don Víctor Manuel Morales
Providel, no ha acreditado que la víctima, demandante,
efectivamente ¿se expusiera imprudentemente al daño¿, no
habiendo, ni remotamente, atestiguado que la doña Inés
Margarita Pacayán Carrasco cometiera alguna infracción
legal o reglamentaria al conducir su vehículo por una vía,
calle Portales, que le otorga derecho preferente de
circulación al intersectarse con calle Serrano; y, en tal
sentido se ha resuelto: ¿Aun cuando exista culpa en la
víctima, pero si ella no ha influido de modo alguno en la
producción del daño, no procede la reducción del artículo
2330 del Código Civil. En el caso de autos no se ha
demostrado de modo alguno la imprudencia de la víctima en
los hechos ocurridos¿. (Corte de Apelaciones de Concepción,
sentencia dictada con fecha 25 de febrero de 2009 en autos
Rol N° 743-2008).
DÉCIMO SEGUNDO: Que, en consecuencia, conforme lo
indicado, en inaplicable la norma del artículo 2330 del
Código Civil, sobre compensación de culpas al caso de autos,
por no haber indicado ni menos justificado el demandado,
don Víctor Manuel Morales Providel, los hechos en que
sustenta su petición, debe ser desestimada, y, en este
sentido, explica la doctrina, que: ¿La prueba de la culpa se
refiere al hecho del demandado y a todas las circunstancias
que permiten calificar la conducta como negligente. A la
víctima de accidentes de tránsito le será generalmente
suficiente probar la conducta del demandado, porque en la
mayoría de los casos, ella constituye el supuesto de hecho
de una culpa infraccional; en consecuencia, le bastará
probar los hechos constitutivos de la infracción para que se
tenga por configurada la negligencia. Y si el demandado
invoca una excusa, a él corresponderá probar los hechos que
desvirtúan la presunción prima facie de negligencia que
envuelve la infracción a la norma legal o reglamentaria. El
requisito esencial para que opere esta atenuación ¿artículo
2330 del Código Civil-, es que la imprudencia de la víctima
haya tenido algún grado de incidencia en el daño, de lo
contrario, la culpa de la víctima resulta irrelevante, en virtud
del principio de que no hay responsabilidad si el daño

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también se habría producido a resultas del comportamiento


ilícito alternativo¿. (Enrique Barros Bourie. Tratado de
Responsabilidad Extracontractual. Editorial Jurídica de Chile.
Año 2007. Página 721 y siguientes).
D) EN CUANTO AL DAÑO RECLAMADO Y ACREDITADO:
DÉCIMO TERCERO: Que, concurriendo los requisitos de
existencia del cuasidelito civil, y determinada la
responsabilidad en el mismo del demandado, don Víctor
Manuel Morales Providel, concurren los presupuestos de
procedencia de la responsabilidad extracontractual, por lo
que el demandado debe indemnizar los daños causados.
DÉCIMO CUARTO: En cuanto al daño emergente: Que, el
daño emergente, esto es, la pérdida efectiva, se define como
el empobrecimiento real y efectivo que sufre el patrimonio
del deudor.
DÉCIMO QUINTO: Que, como indica la doctrina, (José Luis
Diez Schwerter, El Daño Extracontractual), en relación al
daño emergente su existencia estará probada cuando conste
en el proceso que el hecho ilícito generó para la víctima una
mengua de su patrimonio, como consecuencia de la
destrucción o deterioro de un bien o de la realización de
desembolsos.
DÉCIMO SEXTO: Que, en tal sentido, se ha acreditado que
la parte demandante, a consecuencia del actuar culpable y
negligente del demandado, don Víctor Manuel Morales
Providel, vio afectado bienes de su patrimonio, de forma real
y efectiva, y, al efecto, en el caso de marras, con el mérito
de la prueba rendida se han justificado los siguientes
hechos:
1. Costos de reparación del vehículo colisionado: Que, a
consecuencia de la colisión, resultó con daños de
envergadura, según se ha establecido en autos, el vehículo
de propiedad de don Juan Carlos Aravena Guzmán, esto es,
vehículo marca Chevrolet placa patente única SU.9601-0, y,
en este sentido, desembolso efectivamente la suma de
$20.000 (veinte mil pesos) para efectos de requerir un
presupuesto de reparación del mismo, y, en concreto la
reparación del vehículo importa un costo de $2.822.680 (dos
millones ochocientos veintidós mil seiscientos ochenta
pesos), conforme consta en los documentos de fojas 6 a 9,
no objetados, suma que por lo demás es proporcional y
razonable con la circunstancia que el vehículo a
consecuencia de la colisión prácticamente resultó con
pérdida total, y que, en el mercado vehículos de dichas

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características se ofertan por sumas de fluctúan entre


$1.800.000 (un millón ochocientos mil pesos) a $2.500.000
(dos millones quinientos mil pesos), en relación a la tasación
fiscal de los mismos, que constituye, como es sabido, un
parámetro para la determinación del valor comercial de los
bienes.
Que, asimismo, en este sentido, debe indicarse que el
demandado, don Víctor Manuel Morales Providel, alega como
defensa y compensación la circunstancia de haber operado
supuestamente el ¿seguro¿, pero no acredita que este
efectivamente importara que la compañía respetiva
asumiera el costo de reparación del vehículo de propiedad
del demandante, don Juan Carlos Aravena Guzmán,
considerando que el presupuesto presentado a fojas 9 es de
fecha 30 de octubre de 2013, esto es, cinco meses después
de ocurrido el suceso, y que los documentos agregados a
fojas 39 y siguientes datan de 3 de julio de 2013 y
exclusivamente se refieren a la cobertura respecto del bus
marca Mercedes Benz placa patente única CCRW-97,
conducido por el demandado, don Víctor Manuel Morales
Providel.
Que, en consecuencia, se ha acredita la existencia del daño
emergente, patrimonial, por este concepto ascendente a la
suma de $2.842.680 (dos millones ochocientos cuarenta y
dos mil seiscientos ochenta pesos), que debe ser
indemnizado por el autor del mismo, el demandado.
2. Costos derivados de la contratación de vehículo de
transporte escolar: Que, asimismo, a este respecto se
encuentran justificados los siguientes hechos: a) Que, los
demandantes, don Juan Carlos Aravena Guzmán y doña Inés
Margarita Pacayán Carrasco, tienen dos hijos menores de
edad, Rocío Belén y Franco Emilio; b) Que, los
demandantes, don Juan Carlos Aravena Guzmán y doña Inés
Margarita Pacayán Carrasco, tienen domicilio en la localidad
de La Higuera, localidad distante a 10 (diez) kilómetros
aproximadamente de la ciudad de La Ligua y en la cual no
existen establecimientos de educación públicos o privados;
c) Que, para acceder a la ciudad de La Ligua es menester
emplear vehículo particular o, en defecto, locomoción
pública.
Que, sentados estos antecedentes, debe necesariamente
establecerse que se ha justificado con el mérito de la
declaración prestada por doña Jenny Solange López
Casanova, que, respecto del punto cinco de prueba, reúne

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las condiciones del artículo 384 regla primera del Código de


Procedimiento Civil, al tratarse de un testigo imparcial y
verídico, y, es concordante con la prueba documental
rendida, por lo que se ha establecido que efectivamente a
consecuencia de la pérdida del vehículo, ocasionado por la
colisión en que fue exclusivamente responsable el
demandado, don Víctor Manuel Morales Providel, los
demandantes han incurrido en costos de transporte escolar
para el traslado de sus hijos menores de edad, acreditando a
este respecto vigencia del servicio contratado entre el mes
de junio de 2013 al mes de noviembre de 2014, por un
monto de $960.000 (novecientos sesenta mil pesos).
DÉCIMO SÉPTIMO: Que, sin embargo, no obstante haberse
justificado que la demandante, doña Inés Margarita Pacayán
Carrasco sufrió, a consecuencia del accidente, lesiones de
carácter grave, específicamente fractura nasal, no se han
aportado antecedentes probatorios suficientes que permitan
establecer procesalmente los costos asociados al tratamiento
y rehabilitación por dicha lesión, por lo que el Tribunal
carece de elementos indispensables para acoger la
pretensión indemnizatoria.
DÉCIMO OCTAVO: Que, acreditada la existencia del daño
emergente, por haberse justificado que la parte demandante
a consecuencia de la colisión vehicular con el bus marca
Mercedes Benz placa patente única CCRW-97, conducido el
día del suceso, 20 de mayo de 2013, por el demandado, don
Víctor Manuel Morales Providel, y por negligencia y culpa de
éste, sufrió en su patrimonio, daños materiales, que
provocaron una real merma y disminución de éste, por lo
que debe ser indemnizado, el que conforme los
antecedentes allegados, que justifican los costos de
reparación de los mismos, se regula en la suma de
$3.802.680 (tres millones ochocientos dos mil seiscientos
ochenta pesos).
DÉCIMO NOVENO: En cuanto al daño moral reclamado por
la parte demandante: Que, el daño moral o no patrimonial
se conceptualiza como la molestia o dolor no patrimonial y
en el sufrimiento moral o físico, es decir, aquel que sin
recaer en un bien material susceptible de ser avaluado en
dinero, causa un perjuicio en la psiquis del individuo, ya sea
dañando sus acciones íntimas, ya bienes morales que a este
le pertenecen, ya impidiendo al perjudicado la adquisición de
bienes no materiales, siempre que unos y otros sean lícitos y
esencialmente internos.

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VIGÉSIMO: Que, con el mérito de la prueba rendida se ha


justificado, que la demandante, doña Inés Margarita
Pacayán Carrasco, padeció sufrimiento y aflicción en sus
sentimientos a consecuencia del dolor físico producido por
las lesiones, clínicamente graves, que sufrió a consecuencia
de la colisión vehicular acaecida el 20 de mayo de 2013, y,
asimismo, padecimiento en su esfera emocional, derivado
precisamente de la afección física, que por su naturaleza
requiere dolorosos tratamientos médicos y la afección
derivada asimismo de la alteración de la rutina cotidiana
personal y familiar, y en tal sentido, declara en el proceso,
doña Jenny Solange López Casanova, que como se ha
indicado, cumple con la regla 1ª del artículo 384 del Código
de Procedimiento Civil, al ser concordante con los
documentos agregados a fojas 64 y siguientes, y, con el
informe médico de fojas 176, y, por ende, se colige, que
doña Inés Margarita Pacayán Carrasco, como es esperable
de cualquier ser humano que padezca un episodio
traumático como el vivenciado, ha padecido dolor en la
esfera de su intimidad -, lo que se condice, por lo demás,
como una reacción natural e inherente al hombre medio,
generando en él un estado de desánimo y angustia,
considerando, por lo demás, que la fractura nasal
estéticamente provoca una lesión visible y que debe ser
reparada únicamente con cirugía.
VIGÉSIMO PRIMERO: Que, como indica Enrique Barros
Bourie en su obra ¿Tratado de Responsabilidad
Extracontractual¿, a diferencia de lo que ocurre con los
daños patrimoniales, los daños morales no pueden ser
objeto de reparación; el dolor físico, la pérdida de
autoestima por la desfiguración del rostro, la deshonra a
consecuencia de una difamación o la imposibilidad de
disfrutar las alegrías ordinarias de la vida, no son
propiamente reparables, pues la indemnización no permite a
la víctima volver al estado de cosas anterior al accidente; y
por ello la indemnización de daños no patrimoniales no tiene
carácter reparatorio, sino compensatorio, porque la víctima
recibe una indemnización que no pretende restablecer el
estado de cosas anterior al daño, sino cumplir la función
más modesta de permitirle ciertas ventajas, que satisfagan
su pretensión legitima de justicia y compensen el mal
recibido; los daños morales son inconmensurables en dinero,
porque no existe un mercado para la vida, la salud o el
honor, ni es legítimo poner a una persona en la situación de

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poner precio a esos bienes; sin embargo, esta


inconmensurabilidad no debe impedir su compensación,
porque desde el punto de vista de la justicia correctiva y de
la prevención, es preferible una indemnización basada
prudencialmente en criterios imprecisos de valoración, que
dejar los daños no patrimoniales sin reparación, por cuanto
la reparación del daño moral tiene una función
compensatoria, por los males que la víctima ha sufrido y por
los bienes de que se ha visto privada. (Tratado de
Responsabilidad Extracontractual, Enrique Barros Bourie,
Editorial Jurídica de Chile, Primera Edición, página 231 y
siguiente).
VIGÉSIMO SEGUNDO: Que, en consecuencia, a juicio de
esta sentenciadora, conforme el valor de convicción de los
elementos de prueba aportados se ha justificado la
procedencia de la indemnización de perjuicios demandada,
esto es, la existencia de perjuicio extrapatrimonial, el que,
se avalúa en la suma de $4.0000.000 (cuatro millones de
pesos), ponderando las circunstancias fácticas del hecho
culpable causante del daño y las consecuencias acreditadas
respecto de la parte demandante.
VIGÉSIMO TERCERO: Que, al efecto, es procedente la
reparación demandada la que se basa en la obligación
genérica de no causar daño a otro, lo que los romanos
llamaban alterum non laedere, es decir, la obligación de
reparar el daño causado, acreditado éste, se funda en la
referida premisa, la que crea la obligación de indemnizar si
se contraviene; y por lo tanto, no es el dolor o el sufrimiento
el que obliga a resarcir, éste es la consecuencia de la lesión
inferida en los intereses extrapatrimoniales. (Del Daño Moral
al Daño Extrapatrimonial, Marcelo Barrientos Zamorano,
Revista Chilena de Derecho, Volumen N° 35, N° 1, año
2008, página 85 a 106).
VIGÉSIMO CUARTO: Que, acreditados los requisitos de
procedencia de la acción intentada que persigue hacer
efectiva la responsabilidad extracontractual del demandado,
don Víctor Manuel Morales Providel, fundada en el artículo
2314 del Código Civil, de dará lugar a la demanda;
desestimándose las alegaciones, no acreditadas del
demandado, que pretenden ilusamente atribuir
responsabilidad a la víctima, para la compensación de las
mismas, atribuyéndole una imprudencia y exposición
temeraria respecto de un hecho que se ocasiona
exclusivamente por su conducta negligente incumpliendo las

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normas contenidas en la Ley de Tránsito, y, considerando


además, que el demandado no justificó que asumiera con
responsabilidad y eficiencia la reparación de los daños
derivados de un hecho causado por su culpa y negligencia.
VIGÉSIMO QUINTO: Que, como ha sostenido la Corte
Suprema por mandato legal debe indemnizarse todo daño
que resulte comprobado, como acontece en la especie, por
cuanto se encuentra acreditado, suficiente y legalmente, con
la prueba rendida, que la conducta desplegada por el
agente, demandado, plenamente capaz -entendida como la
capacidad delictual o cuasi delictual-, culpable, ocasionó
perjuicio patrimonial y no patrimonial, o moral, en la
persona de los demandantes, don Juan Carlos Aravena
Guzmán y doña Inés Margarita Payacán Carrasco, existiendo
una relación causal entre la conducta y el resultado; daño
que debe ser reparado, por mandato legal.
VIGÉSIMO SEXTO: Que, finalmente, el artículo 24 del
Código Penal establece que toda sentencia condenatoria en
materia criminal lleva envuelta la obligación de pagar las
costas, daños y perjuicios por parte de los autores,
cómplices, encubridores y demás personas legalmente
responsables, y el demandado, don Víctor Manuel Morales
Providel, fue condenado como autor del cuasidelito de
lesiones graves, en perjuicio de doña Inés Margarita Pacayán
Carrasco, a consecuencia de la colisión verificada con fecha
20 de mayo de 2013, que, como se ha reiterado tiene causa
basal en el hecho que el demandado, chofer, no respeto la
señal de signo ¿PARE¿ existente en la intersección de calle
Serrano con calle Portales de la ciudad de La Ligua,
encontrándose acreditada su responsabilidad en el referido
injusto.
E. EN CUANTO A LAS COSTAS:
VIGÉSIMO SÉPTIMO: Que, el artículo 144 del Código de
Procedimiento Civil dispone que la parte que ¿sea vencida
totalmente en un juicio o en un incidente¿, será condenada
al pago de las costas.
VIGÉSIMO OCTAVO: Que, habiendo resultado
completamente vencida a parte demandada, debe
imponérsele condena en costas, por no justificar, por lo
demás, motivo plausible para litigar.
Por estas consideraciones, y vistos, además lo dispuesto
por los artículos 144, 170, 175, 176, 177, 254 y siguientes,
309 y siguientes, 341, 342 y siguientes, 384 Nº 1 y 2, 385 y
siguientes del Código de Procedimiento Civil; artículos 1698,

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1713, 2314 y demás aplicables del Código Civil; artículo 24


y 59 y siguientes del Código Penal; normas pertinentes de la
Ley de Tránsito, N° 18.290; se declara:
I. Que, SE HACE LUGAR, a la demanda interpuesta a fojas
10 y siguientes por don Juan Carlos Aravena Guzmán y doña
Inés Margarita Pacayán Carrasco contra don Víctor Manuel
Morales Providel, todos ya individualizados.
II. Que, en consecuencia, el demandado don Víctor
Manuel Morales Providel, es obligado a pagar, a favor de la
parte demandante, las siguientes sumas:
a) $3.802.680 (tres millones ochocientos dos mil
seiscientos ochenta pesos), por concepto de daño
emergente.
b) $4.000.000 (cuatro millones de pesos), por concepto de
daño moral.
III. Que, la cantidad indicada se reajustara según la
variación que experimente el Índice de Precios al
Consumidor, IPC, aplicado desde el último día anterior al
mes en que quede ejecutoriada la sentencia y hasta el
último día del mes anterior al de su pago efectivo, y la suma
así reajustada devengara interés corrientes aplicados desde
la fecha en que la sentencia quede ejecutoriada y hasta la
época del pago efectivo.
IV. Que, se condena en costas al demandado don Víctor
Manuel Morales Providel por resultar completamente vencido
y no justificar motivo plausible para litigar.
Regístrese, anótese, notifíquese y archívese en su
oportunidad. Rol C-1145-2014

Dictada por doña Jeannette Roco Ramírez, Juez. Autoriza


don Héctor Andrés Páez Galaz, Jefe de Unidad (S).

CERTIFICO: Que, con esta fecha se dio cumplimiento a lo


dispuesto en el inciso final del artículo 162 del Código de
Procedimiento Civil, mediante la anotación en el estado
diario de este día, de la sentencia que precede. La Ligua 10
de marzo de 2015.

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