Sie sind auf Seite 1von 6

Control Médico Laboral

Obligaciones y límites legales del control por empresas de medicina laboral

Oscar Ibarra Pérez


Abogado especializado en Derecho del Trabajo
Universidad de Buenos Aires

Introducción
Las empresas de medicina laboral son contratadas por el empleador para
ejercer de manera delegada el control médico a que hace referencia la Ley de Contrato
de Trabajo en su art. 210 (Ley 20.744). Este control debe cumplir con las distintas
leyes, código y pautas de conducta que regulan tanto el ejercicio de medicina, así como
la normativa laboral específica y el resto de las normas aplicables, en especial aquellas
de rango constitucional como los tratados de derechos humanos concordantes con la
materia. Por ello, considero que este control médico debe privilegiar rigurosamente la
salud del paciente, el respeto por su dignidad y privacidad, debe ser ejercido de modo
razonable y con carácter restrictivo debido a su unilateralidad y a los principios que
inspiran la normativa médica y laboral.

Contextualización del control médico


El control médico como facultad se activa como producto del aviso que
realiza el trabajador de encontrarse imposibilitado de prestar tareas como consecuencia
de una enfermedad inculpable (art 209 LCT). Este aviso puede ser informal; es decir,
verbal, telefónico, por mail o a través de un tercero pero aconsejo como práctica
realizarlo en modo fehaciente por telegrama laboral gratuito, de esta manera el
trabajador se asegurará contar una constancia escrita que justifique su inasistencia.

El empleador una vez recibido el aviso (art. 209 LCT) puede ejercer el
control con su personal médico dependiente o bien delegarlo en un tercero, usualmente
se tratan de empresas de medicina laboral. Estas empresas se dedican a realizar su
práctica asociada al trabajo; realizan preocupacionales, exámenes periódicos y el
llamado control de ausentismo o en rigor; control médico por enfermedades
inculpables. Por ello, cabe presentar a la actividad de estas empresas como enmarcadas
en el ejercicio de una actividad regulada por la legislación laboral a la vez que

1
atravesada por los distintos tipos de normas que hacen a la materia, que pasaremos a
detallar.

Legislación Médica
En primer lugar tendremos la Ley Nacional Nº17.132 en el orden
nacional y la Ley 4534 en la Provincia de Buenos Aires. Ambas leyes regulan lo básico
en cuanto al ejercicio del arte de curar; resulta pertinente destacar que además del
título y matrícula requerida definen qué se entiende por ejercicio de la medicina, por
ello, el control médico se encuentra incluido en la ley lo que define como: “anunciar,
prescribir, indicar o aplicar cualquier procedimiento directo o indirecto de uso en el
diagnóstico, pronóstico y/o tratamiento de las enfermedades de las personas o a la
recuperación, conservación y preservación de la salud de las mismas; el asesoramiento
público o privado (…)”. Naturalmente cabe realizar una aclaración, el control médico no
implica un tratamiento ya que tiene sólo tiene como finalidad constatar la dolencia o
sintomatología por lo que lo entiendo como un procedimiento de diagnóstico y/o
pronóstico respecto a la existencia y evolución de la enfermedad.

Por otro lado, internándonos específicamente en las formas, decoros y


pautas a la hora de ejercer la medicina, encontramos a los Códigos de Ética elaborados
por los distintos colegios en orden nacional y provincial que agrupan a los galenos; así
como los confeccionados por las distintas Asociaciones Médicas. Concretamente,
considero aplicable en la órbita de la medicina laboral la Resolución 693/2204 de la
Superintendencia de Riesgos del Trabajo que adopta el Código Internacional de Ética
para los Profesionales de la Salud Ocupacional, aprobado por la Junta Directiva de la
Comisión Internacional de Salud Ocupacional (ICOH) y mediante dicha resolución
establece su vigencia en nuestro país.

Dentro del ejercicio del control médico destaco, como relevantes y


aplicables, las siguientes pautas éticas:

 Los deberes de los profesionales de la salud ocupacional incluyen la


protección de la vida y la salud de los trabajadores, el respeto a la
dignidad humana y la promoción de los más elevados principios éticos en las
políticas y programas de salud ocupacional.

 Se debe dar especial atención a los dilemas éticos que puedan surgir de la
consecución simultánea de objetivos que pueden estar en competencia, tales
como la protección del empleo y la protección de la salud, el derecho a la

2
información y a la confidencialidad, y los conflictos entre intereses individuales
y colectivos.

 La salud ocupacional debe enfocarse a La promoción y mantenimiento del


más alto grado de bienestar físico, mental y social de los
trabajadores en todas las ocupaciones; la prevención de daños a la salud
causados por sus condiciones de trabajo;

 El propósito de la salud ocupacional es servir a la salud y el bienestar


social de los trabajadores en forma individual y colectiva

 Los profesionales de la salud ocupacional deben actuar siempre, como cuestión


prioritaria, en defensa de la salud y seguridad de los trabajadores.

 En caso de dudas o diferencias de opinión en relación a la naturaleza de los


peligros o los riesgos involucrados, los profesionales de la salud ocupacional
deben ser transparentes al emitir sus juicios de valor

 La vigilancia debe llevarse a cabo con el consentimiento informado de los


trabajadores. Como parte del proceso de obtención del consentimiento, se debe
informar a los trabajadores acerca de las posibles consecuencias positivas o
negativas resultantes de su participación en la aplicación de los programas de
detección y de vigilancia de la salud. La vigilancia de la salud debe ser realizada
por un profesional de la salud en el trabajo aprobado por la autoridad
competente.

 Los resultados de los exámenes practicados en el marco de la vigilancia de la


salud deben ser explicados cabalmente al trabajador involucrado. Cuando
se requiera la determinación de la aptitud para determinado trabajo, ésta se
debe fundamentar en el profundo conocimiento de las demandas y
requerimientos del cargo y del puesto de trabajo, y en la evaluación de la
salud del trabajador. Los trabajadores deben ser informados sobre la
posibilidad de impugnar las conclusiones sobre su aptitud para el trabajo
cuando resulten contrarias a sus propios intereses. Por lo tanto, se deberá
establecer un procedimiento de apelación para tal fin.

 Los profesionales de la salud ocupacional no deben tratar de obtener ningún


tipo de información personal que no sea pertinente para la protección,
mantenimiento y promoción de la salud de los trabajadores en relación con su
trabajo o la salud general de la fuerza de trabajo.

3
Derechos del Paciente
Las obligaciones legales de los médicos e instituciones públicas y
privadas avocadas a la materia encuentran como correlato y contracara los derechos de
los pacientes. Resulta debatible encuadrar al trabajador como paciente, toda vez que el
médico laboral no esta facultado para llevar un tratamiento de recuperación, sólo puede
en virtud de la legislación laboral examinarlo a efectos de control, pero esto no niega
que sea sujeto de prácticas médicas y los derechos lo alcancen. El trabajador es un
sujeto de preferente tutela constitucional (Art. 14 bis de la Constitución Nacional) por
lo que en modo alguno puede negársele los derechos de los que gozan el resto de los
habitantes y ciudadanos del país.

Por ello, sumo a la normativa obligatoria a observar la Ley


Nacional Nº 26.529 de Derechos del Paciente en su Relación con los
Profesionales e Instituciones de la Salud. Considero a las empresas de medicina laboral
como instituciones privadas que realizan prácticas médicas por lo cual, destaco los
siguientes aspectos en relación al control médico laboral y los derechos con que cuenta
el trabajador:

Trato digno y respetuoso. El paciente tiene el derecho a que los agentes del sistema
de salud intervinientes, le otorguen un trato digno, con respeto a sus convicciones
personales y morales, principalmente las relacionadas con sus condiciones
socioculturales, de género, de pudor y a su intimidad, cualquiera sea el padecimiento
que presente, y se haga extensivo a los familiares o acompañantes.

Intimidad. Toda actividad médico - asistencial tendiente a obtener, clasificar, utilizar,


administrar, custodiar y transmitir información y documentación clínica del paciente
debe observar el estricto respeto por la dignidad humana y la autonomía de la voluntad,
así como el debido resguardo de la intimidad del mismo y la confidencialidad de sus
datos sensibles, sin perjuicio de las previsiones contenidas en la Ley Nº 25.326;

Confidencialidad. El paciente tiene derecho a que toda persona que participe en la


elaboración o manipulación de la documentación clínica, o bien tenga acceso al
contenido de la misma, guarde la debida reserva, salvo expresa disposición en contrario
emanada de autoridad judicial competente o autorización del propio paciente;

4
Autonomía de la Voluntad. El paciente tiene derecho a aceptar o rechazar
determinadas terapias o procedimientos médicos o biológicos, con o sin expresión de
causa, como así también a revocar posteriormente su manifestación de la voluntad

Consentimiento Informado
Merece fundamental atención el deber y obligación que considero
indisociable de la práctica médica y sobre todo para el control médico laboral: el
consentimiento informado. La Ley Nacional de Derechos del Paciente lo define como
“la declaración de voluntad suficiente efectuada por el paciente, o por sus
representantes legales en su caso, emitida luego de recibir, por parte del profesional
interviniente, información clara, precisa y adecuada con respecto a: a) Su estado de
salud; b) el procedimiento propuesto, con especificación de los objetivos perseguidos;
c) Los beneficios esperados del procedimiento; d) Los riesgos, molestias y efectos
adversos previsibles; e) La especificación de los procedimientos alternativos y sus
riesgos, beneficios y perjuicios en relación con el procedimiento propuesto; f) Las
consecuencias previsibles de la no realización del procedimiento propuesto o de los
alternativos especificados.

Acto seguido la ley lo dota de obligatoriedad en su artículo sexto: “Toda


actuación profesional en el ámbito médico-sanitario, sea público o privado, requiere,
con carácter general y dentro de los límites que se fijen por vía reglamentaria, el
previo consentimiento informado del paciente.” Asimismo se especifica que el
consentimiento debe ser por escrito en los siguientes supuestos: a) Internación;
b) Intervención quirúrgica;
c) Procedimientos diagnósticos y terapéuticos invasivos;
d) Procedimientos que implican riesgos según lo determine la reglamentación de la
presente ley.

Historia Clínica
Asimismo, el paciente tiene derecho a solicitar copia autenticada de la
historia clínica obrante en las empresas de medicina laboral. Las mismas deben detallar
los procedimientos practicados y sus fundamentos, es decir ser suficientes. La entrega
deberá ser realizada en un plazo que no supere las 48 horas.

Conclusión
Estimamos procedente la difusión entre los trabajadores de los derechos
que le asisten como sujetos de control médico laboral. Es importante asimismo, que las

5
empresas que se avocan a esta labor adecúen su proceder toda vez que si bien la
relación laboral se caracteriza por una dependencia y relación asimétrica de poder, en
la práctica médica el trabajador no tiene por qué obedecer órdenes ni someterse a
prácticas invasivas sin el debido consentimiento otorgado luego de ser informado de
manera completa, clara y adecuada de las técnicas, procedimientos y rigor a observar.
El control médico laboral es un acto unilateral que en modo alguno implica dotar al
dictamen de carácter definitivo, toda vez que se trata de una facultad delegada al
empleador que tiene como contracara el dictamen médico del profesional de confianza
del trabajador. En caso de discrepancia tiene establecido el máximo tribunal en
material laboral (CNAT – Cámara Nacional de Apelaciones de Trabajo) que el
empleador carga con la obligación y costas de dirimir la controversia en sede judicial o
administrativa.

Buenos Aires, Diciembre 2013.-

Todos los derechos reservados.


Se autoriza la reproducción y difusión de material contenido en este producto informativo para fines educativos u
otros fines no comerciales sin previa autorización escrita de los titulares de los derechos de autor, siempre que se
especifique claramente la fuente. Se prohíbe la reproducción del material contenido en este producto informativo
para reventa u otros fines comerciales sin previa autorización escrita de los titulares de los derechos de autor.

Das könnte Ihnen auch gefallen