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El Yetzer Hará la Morfología del mal, que habita en el Hombre. Estudios avanzados de la Teología Hebrea

CONTENIDO

1 EL YETZER HARÁ; LA MORFOLOGÍA DEL MAL.

2 EL ÁRBOL DE LA CIENCIA DEL BIEN Y DEL MAL.

3 EL MAL QUE HABITA DENTRO DEL HOMBRE Y SU ABSOLUCIÓN POR MEDIO DEL MESÍAS UNGIDO.

4 EFECTOS DEL YETZER HARÁ SOBRE LA NATURALEZA NO-REDIMIDA DEL HOMBRE.

5 EL YETZER HARÁ DESDE LA PERSPECTIVA DEL CUERPO DEL MESÍAS.

6 DISPOSICIÓN Y ORIENTACIÓN FINAL.


El Yetzer Hará la Morfología del mal, que habita en el Hombre.
EL YETZER HARÁ; LA MORFOLOGÍA DEL MAL.
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Dentro de la literatura bíblica existe un término que por siglos ha
sido objeto de innumerables calificativos que al final de cuentas nos
han dejado con un vago sentido de su significado, nos referimos a la
palabra “Pecado”. Cuando revisamos su concepto tradicional, nos
da la idea de alguien que trata infructuosamente de acertar un
blanco por medio de una flecha usando por supuesto un arco, es
decir; errar el blanco. Pero dicha definición para Pecado parece ser
tan simple como muy superficial y tal ves esta falta de
profundización y clarificación de su verdadero origen etimológico,
sea la causa que ha generado una equivocada percepción y un mal
entendimiento de esta palabra revelada en las sagradas escrituras.
Empecemos por entender primero que el concepto tradicional de
Pecado, no guarda relación con el significado transmitido en los
textos sagrados. Siempre cuando las escrituras lo mencionan como
por ejemplo; en Romanos 7:8, su esencia esta mas ligado a una
conducta adquirida o forma de comportamiento, que obedece mas
bien a una naturaleza cuyos sentidos están completamente
habituados hacia la perversión. Dentro del pensamiento Occidental
la idea sigue siendo errar un blanco o fallar un objetivo, y por ende
las traducciones bíblicas enfocadas en dicho pensamiento conservan
la misma línea de ideas.
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Sin embargo dentro de los textos hebreos, hallamos un significado
más profundo y cónsono con su origen primero. Considerando que
las mismas escrituras conforman un legado cultural de la nación
Judía; es imperioso entender el concepto de Pecado dentro de la
raíz del pensamiento hebreo, y es basado en esta perspectiva que
queremos analizarlo ahora.
Las traducciones griegas utilizaron el termino (μαρτάνω) jamartáno
Strong G-264; que se traduce como errar el blanco, no participar del
premio; cometer pecado, pecar, practicar el pecado. Aunque ya
hemos explicado que esta definición es muy superficial debido a la
cosmovisión tan limitada del pensamiento helénico que carecía del
conocimiento hebraico de las escrituras, queremos usarlo como una
referencia, más que como un modelo conceptual.
Existen dos términos equivalentes en el hebreo para la palabra
Pecado: uno es (‫ )עָוֹון‬avón Strong H-5771; perversidad, mal (moral)
falta, iniquidad, mal, maldad, malo, delito, pecado, y el otro
(‫ )רַע‬rah; Strong H-7451; inicuo, injusto, mal, maldad, malestar,
malicia, maligno, malo, malvado, molesto, parecer, pecado, penoso,
perniciosa, perversidad, perverso, quebrantamiento. Los términos
en griego y en hebreo parecen representar lo mismo si lo
comparamos en sus definiciones gramaticales simples, pero
realmente lo que nos interesa destacar, es el hebraísmo que
contienen las palabras en su lengua original. Lamentablemente esto
fue pasado por alto en las traducciones griegas de la Reina Valera.

El Yetzer Hará la Morfología del mal, que habita en el Hombre.
Uno de estos hebraísmos lo podemos observar claramente en el
texto de Bereshit/Génesis 4:6-7 (versión Kadosh Israelita de D.
Ascunce); Entonces YAHWEH dijo a Caín: ¿Por qué te has ensañado,
y por qué ha decaído tu semblante? Si bien hicieres, ¿no serás
enaltecido? y si no hicieres bien, el pecado está a la puerta; con
todo esto, a ti será su deseo, y tú te enseñorearás de él.
El texto hebreo que acabamos de referir nos introduce a un tema
esencial e importante para comprender la naturaleza tan compleja
del comportamiento humano después de la caída de Adán. Caín
luego de ser rechazada su ofrenda por parte de Hashem, se ensaña
contra su hermano Abel cuya ofrenda si había sido aceptada delante
de Hashem, la aptitud que asume Caín es reprendida por YAHWEH
quien le advierte del riesgo que corre si no depone su mala
inclinación sustituyéndola por una inclinación hacia el bien. Es aquí
donde identificamos el hebraísmo que buscamos, debido que en el
texto original hebreo la expresión que intentaron traducir a la
lengua Koiné (griego) como practicar el pecado fue; el Yetzer Hará
por ende si queremos entender el significado puro de las palabras
que YAHWEH hablo a Caín solo será posible si la estudiamos en su
correcto contexto hebraico.
La expresión Yetzer Hará proviene de la raíz hebrea; (‫ )יֵצֶר‬yetsér
Strong H-3336, que se traduce como; moldear en una forma,
delinear una imagen, figura o concepción y condición, designio,
intento, obra, pensamiento. Y el termino Hará que proviene de la
raíz hebrea; (‫ ) ָרעַע‬raá Strong H-7489 que significa lo malo.
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Esta definición más exacta, si nos da una idea mejor y precisa de lo
que YAHWEH esta hablando a Caín referente al pecado que le
asecha, leamos ahora nuevamente el texto bajo su definición
hebrea; Entonces YAHWEH dijo a Caín: ¿Por qué te has ensañado, y
por qué ha decaído tu semblante? Si te inclinas a hacer el bien
dando buena forma a tu conducta, ¿no serás enaltecido? y si no
hicieres bien sino que te inclinas hacia el mal dando forma a tu
naturaleza maligna (Yetzer Hará) entonces tu transgresión estará a
la puerta; y por todo esto, la concupiscencia de tus deseos
perversos (Yetzer Hará) estarán sobre ti para dominarte, sin
embargo si escuchas mi voz tú te podrás enseñorear de él.
A la luz del correcto contexto gramatical del texto de
Bereshit/Génesis 4:6-7, entendemos ahora si que lo que conocemos
como practica del pecado (Yetzer Hará) no es tanto como
simplemente errar el blanco, su origen etimológico va mucho más
allá de eso. Su significado real nos lleva a entenderlo como la
imagen ya formada de una naturaleza inclinada por hábito o
costumbre a hacer constantemente lo malo, como consecuencia de
dejar de hacer lo bueno. Esto nos lleva por otra parte a un nuevo
nivel de compresión acerca de nuestra naturaleza humana que
antes no teníamos. De acuerdo a lo que venimos tratando; el
hombre dentro de su naturaleza humana combate así mismo en
oposición a una inclinación cuyo “molde en esencia” y tendencia, es
continuamente hacia el mal. Si esto es así nos preguntamos ahora
¿como el hombre cayo en este estado tan decadente de esclavitud?
donde es gobernado por una “forma” de concupiscencia pervertida
que es alimentada cada día por la trasgresión que constantemente
se hace en contra de la Torah (instrucciones) de YAHWEH El

El Yetzer Hará la Morfología del mal, que habita en el Hombre.
verdadero Elohim de los cielos. Para hallar una respuesta
satisfactoria a esta pregunta debemos acudir nuevamente al origen
de todas las cosas; “El Huerto del Edén”.
EL ÁRBOL DE LA CIENCIA DEL BIEN Y DEL MAL.
2 conocimiento, daat, relacionado al Bien, tov, y al Mal, rah. Y para
Cuando YAHWEH creo al hombre en el huerto del Edén inicialmente
le dio una forma y esta fue conforme a su semejanza,
Bereshit/Génesis 2:7;
Entonces YAHWEH Elohim “formó” al hombre del polvo de la tierra,
y sopló en su nariz aliento de vida, y fue el hombre un ser viviente.
YAHWEH durante la creación proporciono una forma (Yatzar) al
hombre y este Yatzar fue moldeado conforme al diseño que el
Alfarero (Creador) dispuso; de modo que no es otra cosa que la
imagen y semejanza de Elohim mismo, Bereshit/Génesis 1:27:
Y creó Elohim al hombre a su imagen (Yatzar), a imagen (Yatzar) de
Elohim lo creó; varón y hembra los creó.
Como vemos el hombre luego de su creación poseía ya una forma o
imagen (Yatzar) y esta era buena debido a que se correspondía al
“Yatzar” de Elohim mismo. Cuando YAHWEH establece al hombre
un orden basado en una instrucción, supuso la intensión de probarle
en su fidelidad y ver si el seria correspondiente con El.
Bereshit/Génesis 2:16-17;
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Y mandó YAHWEH Elohim al hombre, diciendo: De todo árbol del
huerto podrás comer; mas del árbol de la ciencia del bien y del mal
no comerás; porque el día que de él comieres, ciertamente morirás.
La expresión bíblica que refiere al Árbol del Conocimiento del Bien y
del Mal es "etz hadaat tov verá". Es un árbol, etz, que otorga un
saber a qué tipo de conocimiento se alude, basta con entender la
palabra hebrea daat, la cual en todos los casos en que aparece en la
Biblia indica unión, apego y fusión. Por ejemplo, el pasaje bíblico lo
utiliza para indicar que Adán conoció - iadá - a su mujer Eva y ella
concibió y dio a luz. Para que comprendamos mejor su sentido
etimológico veamos algunas definiciones del diccionario Strong de la
lengua hebrea.
Strong H-6086
‫ עֵץ‬ets; de 6095; árbol (por su firmeza); de aquí, madera (plur.
palos):-arboleda, asta, cabo, carpintero, enmaderado, higuera,
horca, ídolo, leña, leñador, leño, madera, madero, manojo, árbol,
palo.
Strong H-2896
‫ טֹוב‬tob; de 2895; bueno (como adj.) en sentido más amplio; usado
igualmente como sustantivo, tanto en masc. como en fem., sing. y
plur. (bueno, cosa buena, bien, hombre bueno, mujer buena; el
bien, cosas buenas, bienes, hombres o mujeres buenas), también
como adv. (bien):-abundancia, acepto, acertado, agradable, agradar,
alegrar, alegre, alegría, amigablemente, benéfica, beneficio,

El Yetzer Hará la Morfología del mal, que habita en el Hombre.
benevolencia, benigno, bien, bienestar, bondad, bueno, contento,
cosa, dichoso, éxito, favor, feliz, fértil, fino, gozar, gozoso, gusto,
hermoso, humanamente, mejor, misericordioso, parecer, placer,
prosperidad, rebosar, suave, tesoro.
Strong H-7451
‫ רַע‬rah; de 7489; malo o (como sustantivo) mal (nat. o mor.):
adversidad, aflicción, agravio, apariencia, avaro, calamidad,
calumnia, castigo, depravado, desastre, desgracia, destructor, difícil,
doloroso, duro, escoria, fastidiosa, feo, feroz, impío, infortunio,
inicuo, injusto, mal, maldad, malestar, malicia, maligno, malo,
malvado, molesto, parecer, pecado, penoso, perniciosa,
perversidad, perverso, quebrantamiento, sarna, terrible, triste.
Es decir, el hombre se unió a su mujer, o tal como lo expresa el
versículo: "la conoció". Y cuando ahora regresamos al Árbol del
Paraíso, ya podemos aproximarnos mínimamente a su sentido: era
el Árbol que fusionaba y entremezclaba al Bien y al Mal. Y una vez
que el hombre come del mismo, entonces "internaliza" a través de
este acto la confusión y, desde ese instante el Bien y el Mal no solo
se confunden entre si sino que le hablan al hombre desde su
interior, en primera persona. El hombre cree que la voz que le habla
es su propia voz, más en realidad, es el mal instinto que lo seduce
desde lo más profundo de su ser.
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Según el comentario de Maimonides; Adán, antes de probar el fruto
prohibido y provocar la confusión antes detallada, distinguía en su
mundo cuatro aspectos diferentes: lo verdadero, lo falso, lo bueno y
lo malo. Y esto, todo el tiempo que el Mal se encontraba afuera de
su persona. Como es lógico, él se guiaba por lo correcto y se alejaba
de lo falso, y su camino era elegido de acuerdo con la verdad. Mas al
caer, al "acceder" al conocimiento que El Eterno le indico no probar,
su vida ya no se rige por lo verdadero y lo falso, o lo correcto o
incorrecto sino por lo bueno y malo. El hombre que basa su vida en
lo que le parece bueno o malo, en lo que la agrada o le provoca
rechazo, es un digno representante del hombre, más en su estado
decadente posterior al pecado. El Bien y Mal, entremezclados y
confusos, desplazan y oscurecen a la Verdad y la Mentira.
Los sabios de Israel mencionan que al principio en la creación había
un hombre y una mujer con un objetivo y tarea divina que cumplir
“trabajar y cuidar el Gan Edén” y una criatura también con un
objetivo tentar al hombre a desviarse del camino correcto. Esto me
pone a examinar y miro que el hombre en ese momento no fue
tentado de una tendencia interna sino externa, se le hablo por
fuera, esta criatura cumplió su propósito, de desviar al hombre de su
propósito original.
Ahora al conocer nuestro ser interior y su relación con el
mandamiento dado, somos por consecuencia tentados por nuestro
Yetzer Hará que habita dentro. Ya desde ese momento los malos
deseos salen del interior como lo dijo Yahshua Hamashiaj.

El Yetzer Hará la Morfología del mal, que habita en el Hombre.
Mattiyahu 15:19, (versión Kadosh israelita de D. Ascunce);
Porque del corazón salen los pensamientos perversos, los
asesinatos, los adulterios, y todo tipo de inmoralidad sexual, robos,
mentiras, calumnias. Estas son las cosas que hacen impura a una
persona."
La instrucción que vino posteriormente como un orden legislativo
para los seres vivientes en el huerto del Edén, establece a partir de
ese momento, una condición que marcara en un sentido u otro el
Yatzar que Elohim le dio al hombre.
El mismo estará en gran medida definido por las acciones que con
lleven a desobedecer las instrucciones de Elohim.
Dentro del contexto hebreo el orden o secuencia de las cosas tiene
mucha importancia; Nótese en primer lugar que a diferencia de lo
que la tradición piensa el hombre no fue creado única y
exclusivamente del polvo de la tierra, ya en Bereshit/Génesis 1:27
según el texto hebreo el hombre fue formado primeramente como
espíritu en semejanza a Elohim que en esencia es Espíritu, y en
segundo orden en Bereshit/Génesis 2;7 YAHWEH prepara el cuerpo
del polvo de la tierra para que repose el espíritu del hombre sobre
él.
Esta secuencia en el orden de la creación nos demuestra que el
hombre no es solo carne o cuerpo físico, mas bien su esencia
principal esta en que el es ante todo espíritu formado con aliento de
vida.
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Adán cuando fue colocado con su cuerpo en el huerto del Edén tenía
perfecta noción tanto del mundo espiritual que no se ve, así como
también del mundo físico hecho del que no se ve. Por lo tanto el
espíritu de Adán podía percibir perfectamente el mundo
sobrenatural donde operan los seres celestiales y por otro lado con
su cuerpo físico y por medio de los sentidos, podía percibir el mundo
material que le rodeaba.
Sin embargo esta armonía fue rota en el instante en que Adán y Eva
transgreden la instrucción dada por Elohim, si analizamos en detalle
el texto hebreo veremos que tanto Adán y por supuesto Eva no
poseían un sentido practico de la maldad pero esto no quiere decir
que no entendieran por definición del mandamiento dado, lo que
era debido (bueno) o lo que no era debido (malo), por ello cuando
Eva es confrontada con el argumento de la serpiente acerca de que
no morirán si comen del fruto del árbol del bien y del mal en
contradicción a lo que YAHWEH ya había sentenciado, no fue capaz
de discernir la intención maligna (Yetzer Hará) que se cernía sobre
ella. La causa principal de la caída del hombre radica en que su
única garantía de protección había sido socavada sutilmente por una
idea o pensamiento tergiversado acerca de la instrucción dada por
YAHWEH. Esto desde luego lo entendemos así por la evidencia que
se encuentra en el texto hebreo específicamente en
Bereshit/Génesis 3:3; donde Eva equivocadamente interpreta el
mandamiento de Elohim; pero del fruto del árbol que está en medio
del huerto dijo Elohim: No comeréis de él, ni le tocaréis, para que no
muráis.

El Yetzer Hará la Morfología del mal, que habita en el Hombre.
En todo lo que Eva dijo a la serpiente solo encontramos una frase
fuera de contexto la cual Elohim nunca ordeno al hombre
inicialmente, YAHWEH nunca prohibió tocar el árbol de la ciencia
del bien y del mal solo prohibió comer de el, es decir que Eva añadió
esta prohibición invalidando de cierto modo el mandamiento y
permitiendo a la serpiente tomar lugar. Cuando quebrantamos los
mandamientos de Elohim añadiendo mandamientos de hombre
causamos que la instrucción originalmente dada se desvirtué
perdiendo su función principal que es resguardar, proteger, cercar y
custodiar a quienes observen correctamente dicho mandamiento.
Eva perdió la garantía de la protección del mandamiento al
invalidarlo con prohibiciones añadidas y por otro lado sobre Adán
recayó la responsabilidad por no haber actuado en resguardar la
pureza de la instrucción que YAHWEH personalmente le transmitió.
La serpiente uno de los animales mas astutos del Huerto
(Bereshit/Génesis 3;1) no procuro tentar a Adán quien conocía
perfectamente el mandamiento de Elohim, por el contrario escogió
muy bien a Eva porque observo en ella mayor posibilidad de éxito en
hacerla transgredir puesto que ella no estaba solidamente
fundamentada en el mandamiento original de YAHWEH sino mas
bien en una interpretación tergiversada del mismo.
El Yetzer Hará adquiere de esta manera en Eva su forma final
induciendo toda codicia delante de los ojos de ella,
Bereshit/Génesis 3:6, (Versión Kadosh Israelita de D.Ascunce) ;
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Y vio la mujer que el árbol era bueno para comer, y que era
agradable a los ojos, y árbol codiciable para alcanzar la sabiduría;
y tomó de su fruto, y comió; y dio también a su marido, el cual comió
así como ella.
La frase “y vio la mujer” dentro del texto hebreo, indica
inequívocamente una inclinación o deseó hacia lo malo, bien
podemos decir que la codicia y la vanagloria fueron las primeras
concupiscencias que brotaron en la naturaleza humana dando forma
al Yetzer Hará que de ahora en adelante regirá todas las conductas
en la vida del hombre.
Después de la caída de Adán y Eva su mujer, el primer efecto visible
como consecuencia del surgimiento del Yetzer Hará en ellos, fue la
separación de la habilidad de discernir el mundo espiritual y caminar
en la dimensión sobre natural, adicionalmente ellos quedaron
sujetos a sus propios cuerpos carnales y como única ventana, el uso
de sus sentidos físicos; de allí la expresión “y sus ojos fueron
abiertos” y conocieron que estaban desnudos. Basándonos
entonces en los fundamentos establecidos anteriormente, El Yetzer
Hará se debe entender dentro de su contexto hebraico como la
forma o molde esculpido por la trasgresión en el huerto del Edén y
hecho posteriormente como una nueva imagen amorfa y decadente
del hombre que reemplaza el Yatzar (imagen perfecta de Elohim) y
cuya inclinación ahora es continuamente hacia el mal. Esta
definición podemos verla con claridad en el texto hebreo de
Bereshit/Génesis 6:5; Y vio YAHWEH que la maldad de los hombres
era mucha en la tierra, y que todo designio de los pensamientos del
corazón de ellos (Yetzer Hará) era de continuo solamente el mal.

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3 EL MAL QUE HABITA DENTRO DEL HOMBRE Y SU
ABSOLUCIÓN POR MEDIO DEL MESÍAS UNGIDO.
A Raíz de la decadencia del hombre producto de su transgresión, se
hace necesario un factor de redención que permita restituirlo a su
Yatzar original conforme a la semejanza de Elohim YAHWEH y es
bajo este contexto teológico que surge el concepto del Mesías
prometido por primera vez dentro del judaísmo antiguo. La
necesidad de la figura del Ungido nos lleva a entender las razones de
porque todo lo creado en el huerto del Edén dependía ahora de la
promesa anunciada acerca de la simiente que vendría a través de la
mujer. Todo estaba sujeto a muerte como consecuencia de la
transgresión de Adán y solo uno semejante a él en la misma
condición, podría restituir lo que se había perdido en el Edén (El
Yatzar de Elohim YAHWEH en el hombre).
La función del Mesías ungido principalmente radicaría en restaurar
la imagen de YAHWEH en la creación; que por los efectos de la caída
de Adán se encontraba en sujeción y bajo maldición, y en segundo
lugar establecería la forma (Yatzar) en que el hombre lograra
librarse de su inclinación al mal (Yetzer Hará) restituyéndolo a la
imagen y semejanza de Elohim YAHWEH. Por ende sobre el Mesías
Ungido recaía la responsabilidad de traer una obra de restauración
que incluía ayudar al hombre a superar su conflicto interior de
naturalezas y por supuesto romper las ataduras que ligaban a la
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descendencia de Adán a su Yetzer Hará. Para comprender
efectivamente el gran conflicto interior que conforma la naturaleza
humana y como la gran obra de restitución llevada a cabo por el
Mesías ungido sellaría definitivamente su redención, debemos
acudir a una fuente elocuentemente descriptiva de dicho conflicto;
“las sagradas escrituras”. En el Brit Hadahsah específicamente en la
carta a los Romanos; Rav Sahul expone con extremada precisión la
raíz del conflicto interior del hombre causado por el efecto de su
Yetzer Hará. En los capítulos 6 y 7, Shaulo aborda con profundidad,
el estado actual en que se encuentra la naturaleza del hombre
esclavizado y oprimido por una forma de inclinación marcada por los
deseos y concupiscencias que brotan de su Yetzer Hará o imagen
amorfa, esta seudo-imagen por así decirlo se encuentra distanciada
totalmente de la imagen original creada por Elohim en el huerto del
Edén antes de la caída.
Shaulo en su carta a los Romanos 6:12; explica que no debemos
permitir que el Yetzer Hará reine en nuestro cuerpo mortal haciendo
que obedezcamos a sus deseos corrompidos, esto es posible
lograrlo, si solo sí; somos sumergidos en el Mesías Yahshua y
participamos así mismo de su muerte. Dentro del mismo contexto
del capítulo 6, Shaulo afirma lo siguiente; cuando ponemos nuestra
confianza en Yahshua como el Mesías dado a Israel, somos
sumergidos dentro de su Ruaj Hakodehs (Espíritu Santo) lo cual
implica entre otras cosas ser sumergido en su muerte y esto por
consiguiente significa que ya no nos debemos a los deseos de
nuestro Yetzer Hará porque hemos muerto a esa forma de vida para
ser introducidos ahora en una vida llena de plenitud en el Espíritu de
Yahshua (Romanos. 6:3-4 versión Kadosh Israelita de D, Ascunce);

El Yetzer Hará la Morfología del mal, que habita en el Hombre.
“No saben que aquellos de nosotros que hemos sido inmersos en el
Mashíaj Yahshúa, hemos sido inmersos en su muerte. Por medio de
la inmersión en su muerte, hemos sido sepultados con El; para que
tal como por la gloria del Padre, el Mashíaj fue levantado de la
muerte, de la misma manera nosotros también vivamos una vida
renovada.”
En el mismo texto el Shaliat/Apostol Shaulo continúa explicándonos
que ya ahora no vivimos conforme a nuestra vieja naturaleza sino
que por el contrario al participar de la misma muerte de Yahshua
hemos sido sacrificados conjuntamente con El en la estaca de
ejecución para que así el cuerpo entero de nuestra propensión
pecaminosa (Yetzer Hará) sea destruido a fin de ya no ser más
transgresores de la Torah de YAHWEH. (Romanos. 6:6 versión
Kadosh Israelita de D, Ascunce); Sabemos que nuestro viejo yo fue
muerto en la estaca de ejecución con El, para que el cuerpo entero
de nuestra propensión pecaminosa (Yetzer Hará) pudiera ser
destruido, y a fin de no ser esclavizados más por el pecado.
La Torah de Moisés establecía que una persona ligada por ley
quedaba exentó de su compromiso en el momento de su muerte,
así por ejemplo cuando una pareja quedaba ligada por el pacto
matrimonial solo se podía anular si alguien de la relación conyugal
muriera dejando libre a la otra parte que aun permaneciera con
vida, de esa forma podía perfectamente ligarse en compromiso con
otra persona. Shaulo de la misma forma aclara que los redimidos
por el sacrificio del Mesías Ungido se encuentran ahora ligados por
ley y pacto a Él (Yahshua) y por ende los mismos al participar de su
muerte quedan liberados de la ligadura del Yetzer Hará.
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(Romanos. 6:7 versión Kadosh Israelita de D, Ascunce);
Porque cuando uno muere, queda libre de pecado. Ahora, puesto
que hemos muerto con el Mashíaj, confiamos que también
viviremos con El.
Y en otro texto nos explica lo mismo. (Romanos. 7:1-3 versión
Kadosh Israelita de D, Ascunce); Seguramente ustedes saben,
hermanos, pues hablo a aquellos que entienden la Toráh, que la
Toráh tiene autoridad sobre una persona mientras vive. Por
ejemplo, una mujer casada está ligada por la Toráh a su esposo
mientras él vive; pero si el esposo muere, ella es libre de la parte de
la Toráh que tiene que ver con su marido.
De la misma manera los redimidos por el sacrificio de Yahshua al
participar de su muerte en la estaca de ejecución quedan libres de
aquella forma (Yetzer Hará) que los llevaba continuamente a
quebrantar la Torah de Moisés, para ahora así ser de otro; de aquel
que resucito de los muertos a fin de que puedan producir frutos
para YAHWEH nuestro Elohim, por medio de una vida llena de su
Ruaj Hakodehs. Pues la muerte del Mesías Ungido fue un evento
único que restituye a los redimidos al “Yatzar” original que tenía
Adán con Elohim antes de caer; por ende ahora ellos son
considerados muertos para el cuerpo de propensión pecaminosa,
pero vivos para Elohim YAHWEH por medio de su unión con el
Mesías Yahshua.

El Yetzer Hará la Morfología del mal, que habita en el Hombre.
4 EFECTOS DEL YETZER HARÁ SOBRE LA NATURALEZA
NO-REDIMIDA DEL HOMBRE.
En este punto del estudio ya estamos en capacidad de comprender
que por causa de la desobediencia de uno, es decir; Adán, todos
fuimos sujetados a muerte por medio del Yetzer Hará que
heredamos del primer hombre, sin embargo gracias a la obra de
restitución llevada a cabo por YAHWEH a través de su Mesías
Ungido, por la obediencia de uno, es decir; Yahshua, todos los que
pongamos nuestra confianza en El uniéndonos en semejanza a su
muerte, seremos justificados. Establezcamos ahora los tres niveles
de tentación que existen según la Torah, que reflejan la condición
natural del hombre y su interacción con el Yetzer Hará.
Comencemos por determinar las características de cada uno de los
tres niveles de tentación en que el hombre se relaciona con su
Yetzer Hará. Para ello explicaremos en detalle cada nivel de acuerdo
al fundamento en la Torah de Moisés y los escritos del Brit
Hadashah, que establecen su significado.
1.- Bajo la Torah (Maldición)
Los 3 niveles
2.-Por encima de la Torah (sin ley) de tentación
del Yetzer Hará
3.- A nivel de la Torah (Vida)
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Clasificación de los 3 niveles de tentación según las sagradas
escrituras hebreas.
1.- Bajo la Torah (Maldición); desde esta perspectiva el hombre se
encuentra bajo sujeción a la muerte producto de su incapacidad de
vivir en armonía con la Torah, es decir, su estado es de maldición
como consecuencia de la transgresión de la Torah de YAHWEH que
constantemente hace el hombre por medio de vivir conforme a su
Yetzer Hará.
Davarim/Deuteronomio 11:26-28 (versión Reina Valera
modificada);
He aquí yo pongo hoy delante de vosotros la bendición y la
maldición: la bendición, si oyereis los mandamientos de YAHWEH
vuestro Elohim, que yo os prescribo hoy, y la maldición, si no oyereis
los mandamientos de YAHWEH vuestro Elohim, y os apartareis del
camino que yo os ordeno hoy.
En el Brit Hadashah Shaulo interpreta de la misma manera la
condición del hombre bajo la Torah en un estado total de maldición.
Si el mandamiento o instrucción que YAHWEH ha establecido, es
invalidado por las acciones de los hombres al incumplirlo; el Yetzer
Hará se activara y traerá como consecuencia su muerte. De allí la
expresión hebraica de Bereshit/Génesis 2:17; “muriendo morirás”.
Entonces estar bajo la Torah implica descender de status, ser
destituido de la gloria de una vida en obediencia a Elohim, caer de la
forma en que lo hiso Adán en el huerto del Edén, y esto se traduce

El Yetzer Hará la Morfología del mal, que habita en el Hombre.
en no corresponder el mandamiento al incumplirlo y por ende
recibir como retribución la maldición y la muerte. En esta condición
el Yetzer Hará se activara. Esto también lo explica Shaulo en otra de
sus epístolas.
Galut-Yah/Galatas 3:10;
Porque todo aquel que depende de la observancia para no
cumplirlos de los mandamientos de la Toráh vive bajo maldición,
puesto que está escrito: "Maldito todo el que no se mantiene
haciendo todo lo escrito en el Rollo de la Toráh.
La maldición de acuerdo a Shaulo es producto de no cumplir
cabalmente los mandamientos de la Torah de YAHWEH y al no
hacerlos para vivir conforme a ellos el efecto devastador del Yetzer
Hará se manifiesta en obras de muerte. Es oportuno ahora destacar
el proceso mediante el cual el Yetzer Hará se activa y revive dentro
de la naturaleza humana para destruirla. Dicho proceso esta
detalladamente esquematizado en las porciones del Brit Hadashah,
veamos una de ellas, Romanos 6:1-2; Qué diremos, pues? ¿La ley es
pecado (transgresión)? En ninguna manera. Pero yo no conocí el
pecado sino por la ley; porque tampoco conociera la codicia, si la
ley no dijera: No codiciarás. Mas el pecado (Yetzer Hará), tomando
ocasión por el mandamiento, produjo en mí toda codicia.
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Estudios avanzados de la Teología Hebrea
En otras palabras el Yetzer Hará inicialmente se encuentra en
estado pasivo dentro del hombre, dormido y esperando a tomar
ocasión por medio del incumplimiento del mandamiento una vez
que este llega a ser conocido, para así activarse y esclavizar al
hombre en sus deseos. Dentro del mismo contexto Shaulo señala
que el mandamiento una vez entregado y aceptado; condiciona al
hombre a mantenerse al nivel de la instrucción guardándola de no
incumplirla, sin embargo el Yetzer Hará intentara provocar que el
hombre lo incumpla. Por ejemplo la Torah de Moisés prohíbe al
hombre codiciar, sin embargo el Yetzer Hará tomando ocasión por
el mandamiento, engaña (como la serpiente a Eva) al hombre
produciendo en el toda codicia y provocando que sucumba a sus
deseos malignos.
En conclusión referente a este primer nivel de tentación, el estado
decadente del hombre al estar bajo la Torah (incumplimiento)
ocasiona que su Yetzer Hará lo incline a hacer lo que no quiere
hacer, es decir; que el hombre por medio de su mente quiere
obedecer el mandamiento y no codiciar pero por el contrario haya
este mal dentro de sí; que el cuerpo de propensión pecaminosa lo
lleva hacer realmente lo opuesto al mandamiento; “codiciar sin
medida obedeciendo a sus deseos perniciosos”
2.-Por encima de la Torah (sin mandamientos); en este nivel de
interacción del hombre con su Yetzer Hará, encontramos un estado
muy particular. Al no existir el mandamiento por consecuencia no
habrá una transgresión y en ese sentido el Yetzer Hará estará
siempre pasivo sin producir efectos en la vida del hombre. La
ausencia de un orden e instrucción como guía, equivale por así

El Yetzer Hará la Morfología del mal, que habita en el Hombre.
decirlo; a un estado de anarquía total donde no hay transgresión y
por ende retribución al pecado. En los escritos del Brit Hadahsah
este estado lo vemos explicado nuevamente por Rav Shaul en
Romanos 5:12-13 (versión Kadosh Israelita de D. Ascunce);
Así es como funciona: por medio de un individuo fue que el pecado
entró en el mundo, y por el pecado la muerte; y así la muerte se
extendió a toda la raza humana, por cuanto todos pecaron. El
pecado realmente estaba presente en el mundo antes que la Toráh
fuera dada, pero el pecado no cuenta como tal donde no hay Toráh.
Como vemos el Shaliat nos confirma que el segundo nivel de
interacción del hombre con su Yetzer Hará, está basado en una
ausencia de instrucciones y la inexistencia de mandamientos que
sirvan de activación para la propensión de los deseos malignos. Esta
conclusión es clara a la luz de la expresión de Shaulo cuando afirma;
“que la transgresión no cuenta donde no hay Torah”
En la historia de la civilización humana encontramos un periodo
donde el estado de un sistema de anarquía (sin instrucciones de
guía) reino en la vida de los hombres. En dicho periodo aunque la
muerte reino sujetando al hombre a esclavitud; el Yetzer Hará
estuvo pasivo debido principalmente a que los descendientes de
Adán habían heredado la muerte por la transgresión directa al
mandamiento que el primer hombre cometió en el huerto del Edén,
y a pesar que el resto de la descendencia de él no cometieron la
misma violación que su antecesor, fueron confinados a un estado de
decadencia absoluta.
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Estudios avanzados de la Teología Hebrea
Romanos 5:14; No obstante, la muerte reinó desde Adam hasta
Moshe aun sobre aquellos que su pecado no fue igual a la violación
de Adam, de un mandamiento directo.
De esta manera estar por encima de la Torah implica ausencia
parcial o absoluta del conocimiento de ella, es decir; estar sin
mandamientos. Y este estado trae como resultado que los efectos
del Yetzer Hará queden inactivos pero presentes aun esperando
revivir para engañar al hombre nuevamente una vez que sea
introducida y conocida la luz de la Torah.
Sin embargo este periodo de ausencia moral por llamarlo de alguna
manera, culmina cuando en el monte de Sinaí, Moisés recibe como
intermediador las tablas de la Torah de YAHWEH y por medio de
ellas el hombre llega a estar consciente de su deplorable condición
al manifestarse el pecado por medio del mandamiento. (Leer Galut-
Yah/Galatas 3:15-25). Si queremos entender con más detalle el
proceso de gestación del pecado solo debemos consultar la carta de
Jacob el Zaddik/Santiago 1:13-15 (versión Reina Valera modificada);
Cuando alguno es tentado, no diga que es tentado de parte de
Elohim; porque Elohim no puede ser tentado por el mal, ni él tienta
a nadie; sino que cada uno es tentado, cuando de su propia
concupiscencia es atraído y seducido. Entonces la concupiscencia,
después que ha concebido, da a luz el pecado; y el pecado, siendo
consumado, da a luz la muerte.

El Yetzer Hará la Morfología del mal, que habita en el Hombre.
Es así como ahora entendemos la interacción en este segundo nivel
de relación entre; el Yetzer Hará - el mandamiento - y el hombre. El
uno (Yetzer Hará) necesita del otro (mandamiento) para manifestar
a través de la desobediencia, la muerte sobre el último (el hombre).
A esta terrible condición Shaulo se refirió en Romanos 7: 24-25
como un estado miserable y cuya absolución de ella, solo es posible
mediante la ejecución del sacrificio de Yahshua; nuestro Mesías
ungido. Galut-Yah/Galatas 3:13 (versión Kadosh Israelita de D.
Ascunce);
El Mashíaj nos redimió de la maldición pronunciada en la Toráh,
haciéndose maldito en lugar de nosotros; pues el Tanaj dice: "Todo
el que es colgado en una estaca está bajo maldición”
Yahshua habiendo llevado nuestras transgresiones de la Torah de
Moisés en su propio cuerpo, los redimidos al poner su confianza en
su obra; son restituidos nuevamente al mismo nivel de la Torah
como el que tuvo el primer hombre antes de la caída, caminando en
obediencia y armonía con el mandamiento.
3.- A nivel de la Torah (bendición y vida); La connotación que trae el
estar al nivel de la Torah de YAHWEH es precisamente la armonía
que hallamos en el huerto del Edén antes de caer el hombre, Tanto
Elohim, como su instrucción y el hombre creado; forman una
relación circuncentrica donde no hay extremos ni interrupciones
que rompan dicha armonía y su equilibrio. Como mencionamos al
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Estudios avanzados de la Teología Hebrea
inicio de la descripción de los tres niveles de tentación. El acabado
de la obra del Mesías Ungido como el postrer Adán, hiso
nuevamente posible restaurar la relación original del huerto del
Edén entre Elohim YAHWEH y su creación; “el hombre”
Al ser restituido a su origen, el hombre redimido recupera su
habilidad de transcender a lo natural en una vida llena ahora de la
plenitud del Espíritu renacido, y esto se traduce en la facultad de
caminar en armonía total y completa con la Torah de YAHWEH,
obedeciendo sus estatutos caminando al lado de ella en justicia y
rectitud, haciendo morir de esa manera las obras muertas que
producía su propensión al pecado. Bajo este nivel; el Yetzer Hará
asume su forma más combativa aunque permanezca pasivo y
dominado por la obediencia. Cuando decimos que asume su forma
más combativa, nos referimos que de los tres niveles de tentación;
el tercero exige una mayor negación de sí mismo, puesto que el
Yetzer Hará luchara afanosamente en contra del espíritu renacido
del hombre provocándole por medio de sus deseos malignos a
transgredir el mandamiento en una frecuencia mucho más elevada
en comparación con los otros dos niveles. Veamos seguidamente
como Shaulo nos explica este tercer nivel de tentación en su carta a
los Gálatas.
Galut-Yah/Gálatas 5:16-17 (versión Reina Valera modificada);
Digo, pues: Andad en el Espíritu, y no satisfagáis los deseos de la
carne. Porque el deseo de la carne es contra el Espíritu, y el del
Espíritu es contra la carne; y éstos se oponen entre sí, para que no
hagáis lo que quisiereis.

El Yetzer Hará la Morfología del mal, que habita en el Hombre.
El hombre redimido por la obra del Mesías ungido tiene por lo tanto
la misma responsabilidad que el primer Adán, resguardar el huerto
(su alma) ahora por medio de la obediencia a la Torah de Yahshua
negándose a sí mismo a seguir satisfaciendo los deseos del Yetzer
Hará que combaten contra su alma. En otra epístola y por
intermedio de otro Shaliat/Apóstol, leemos la advertencia para los
que se encuentra en el tercer nivel de tentación.
1° de Kefas/Pedro 2:11 (versión Reina Valera modificada); Amados,
yo os ruego como a extranjeros y peregrinos, que os abstengáis de
los deseos carnales (Yetzer Hará) que batallan contra el alma.
Manteniendo buena vuestra manera de vivir entre los gentiles; para
que en lo que murmuran de vosotros como de malhechores,
glorifiquen a Elohim en el día de la visitación, al considerar vuestras
buenas obras (Yatzar-imagen de Yahshua).
5 "Él toma control de la descendencia de Avraham."
EL YETZER HARÁ DESDE LA PERSPECTIVA
DEL CUERPO DEL MESÍAS.
Comprender a cabalidad las condiciones naturales en que se
manifestaría corporalmente el postrer Adán una vez introducido en
el mundo, se hace necesario para entender completamente su
máxima obra redentora. Y ello pasa por interpretar adecuadamente
el texto hebreo concerniente a su venida y aparición durante el
contexto judío social del primer siglo. Es propicio ante todo
establecer correctamente que el Mesías Ungido no es otra cosa que
un hombre de carne y sangre y conforme a la semejanza del primer
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Adán, y cuyos hijos posteriormente (referidos al primer Adán)
también heredarían como naturaleza el Yetzer Hará.
Este fundamento lo establecemos basados en el contundente texto
de Hebreos 2; 14-17 el cual citamos de la versión Kadosh Israelita de
D. Ascunce;
Por lo tanto, por cuanto los hijos comparten una naturaleza física
común como seres humanos, El (Yahshua) se hizo como ellos y
compartió la misma naturaleza humana (Yetzer hará); para que
por su muerte, hiciera inefectivo al que tenía el poder sobre la
muerte, este es; ha satán; y librara a todos aquellos que por el
temor a la muerte habían estado en esclavitud (primer nivel de
tentación).
En verdad es obvio que la mentira no toma control de los ángeles
para ayudarles; por el contrario:
Por lo cual tenía que hacerse como sus hermanos en todo, para que
pudiera convertirse en el kohen gadol (sumo sacerdote),
misericordioso y con llenura de fe en el servicio a YAHWEH, haciendo
kapparah (Redención) por los pecados (prospección hacia lo malo
“Yetzer Hará”) del mundo.
El versículo 14 del capítulo 2 nos da claramente la referencia que
buscamos; Yahshua el Mesías prometido a Israel, participo de un
mismo cuerpo en semejanza a nosotros que estábamos bajo yugo
producto de nuestro Yetzer Hará, el hecho de que el Mesías haya
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El Yetzer Hará la Morfología del mal, que habita en el Hombre. Estudios avanzados de la Teología Hebrea

nacido del vientre de una mujer implica que fue introducido en este YAHWEH de manera irreprensible sin transgredir ni un solo
mundo bajo las mismas condiciones de cualquier otro ser humano, mandamiento, caminando en armonía total y viviendo al nivel de las
de allí la expresión hebrea “Ben Ha Adan” (Hijo de Adan). Dicha instrucciones de YAHWEH su Padre.
afirmación es nuevamente reforzada por el autor de hebreos en el
versículo 17; al confirmarnos que Yahshua tenía que hacerse Por medio de la serpiente; la codicia (El Yetzer Hará) entro en la
semejante en todo a sus hermanos, y esto significa que si sus mujer (Eva), y desde entonces se propaga en cada ser humano que
es formado en el vientre materno. El bien y el mal ahora forman
hermanos estaban bajo un nivel de tentación debido a los efectos
parte del hombre nacido de mujer; y ellos se entremezclan
del Yetzer Hará en sus naturalezas; así de la misma forma El Mesías
participaría de la misma tentación pero sin satisfacer los deseos confundiendo su camino.
perniciosos de la propensión pecaminosa que moraba también en su
cuerpo, destruyéndola por medio de su obediencia a YAHWEH su
Padre.

Ahora bien podemos enmarcar bajo qué nivel de tentación vivió el

Mesías ungido mientras ocupo un cuerpo de carne y sangre
semejante al nuestro. Veamos en la siguiente cita de Hebreos 4:15
versión Kadosh Israelita de D. Ascunce;

Porque no tenemos un kohen gadol (sumo sacerdote) que no pueda

compadecerse de nuestras debilidades, ya que El (Yahshua) fue
tentado en todo, como nosotros lo somos ahora, con la única
diferencia que El no pecó.
El hecho de que El Mesías fue sometido a todas las formas o
patrones de tentaciones pero sin pecado, nos demuestra de que Él;
durante su estadía corporal en la tierra; vivió bajo el tercer nivel de
tentación que ya hemos explicado anteriormente, es decir; que
sometiendo dentro de si mismo al Yetzer Hará no dándole lugar a
sus deseos malignos, nos mostró como guardar la Torah de
Sin embargo Yahshua el Mesías Ungido prometido a Israel, abrió al
hombre renacido; un camino nuevo y vivo donde puede llegar a ser
verdaderamente libre.
El cumplió por ende toda justicia y fue sin mancha triunfando
victoriosamente sobre el cuerpo de propensión pecaminosa (Yetzer
Hará) hasta clavarlo juntamente con sus pasiones y deseos
desordenados en la estaca de ejecución.
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El Yetzer Hará la Morfología del mal, que habita en el Hombre. Estudios avanzados de la Teología Hebrea

Después de desglosar el verdadero significado de la palabra pecado Tal como la siguiente figura lo ilustra, el género humano pareciera
en el contexto de las sagradas escrituras hebreas, y una vez batirse entre dos impulsos; uno (lo que se cree es bueno) opuesto al
comprendido la raíz del conflicto interior del hombre caído otro (lo que se cree es malo) pero a la ves entrelazados tan
propiciado por su propio Yetzer Hará. Debemos reconocer la perfectamente que terminan solapándose entre si haciendo difícil
maravillosa obra de redención destinada por Elohim YAHWEH desde distinguirlos para el hombre.
un principio en pro de la restitución del orden original, restaurando
su imagen en el hombre renacido por medio del Mesías ungido; a
saber Yahshua, el rabino judío de Nazrat quien a través de su
sacrificio como el Cordero inmolado de YAHWEH, hiso nueva todas
las cosas. A Él sea la gloria por los siglos de los siglos Amen.

6 DISPOSICIÓN Y ORIENTACIÓN FINAL.

Nuestro entendimiento de lo que realmente somos; depende en

gran medida de que tanto estamos dispuestos a regresar al Edén y
reencontrarnos con El Elohim de la Creación. No sentir miedo al
escuchar su voz, o escondernos porque El esta cerca paseándose por
el huerto, son evidencias que manifiestan nuestra profunda
separación del autor y consumador de la vida.

Por ende no hay manera de agradar a Aquel que nos llamo de las
tinieblas a su luz admirable; viviendo nuestras vidas conforme a los
deseos de este siglo, y siguiendo los patrones de conducta del
Yetzer Hará que se alimenta cada día por medio de la El bien y el mal se mezclan de esa manera mantenidos por una
concupiscencia de nuestra propensión pecaminosa. Solo vasta forma de conocimiento que confunde y distorsiona en todo sentido
observar como las sociedades modernas de hoy en día arraigan en las cosas; llamando a lo bueno malo y a lo malo bueno.
sus prácticas con más fuerza, el impulso y la libertad a los deseos
perniciosos que batallan dentro del ser humano.

El Yetzer Hará la Morfología del mal, que habita en el Hombre.
• FACTORES QUE ESTIMULAN LA ACTIVACIÓN DEL
YETZER HARÁ EN NUESTRAS VIDAS
El liberalismo inmoral de la Cultura Occidental representa hoy en día
la principal causa en la perversión de nuestra manera de vivir. Sus
factores más influyentes son los siguientes:
1.- Los anti-valores de la televisión moderna;
• Sexo promiscuo.
• Agente co-ayudador a la rebeldía en los Jóvenes.
• Inspiración a la violencia brutal.
• Entretenimiento placevo para distraer, manipular y
adormecer a las familias para que se rindan al Yatzer Hará.
2.- Las religiones (Cristianismo Apostata); quien a su ves es la mujer
que hoy invalida con sus tradiciones y costumbres paganas los
mandamientos de la Torah de YAHWEH, debilitando al creyente
para que la serpiente (Yetzer Hará) domine todos los aspectos de su
vida, trayendo como consecuencia la muerte (trasgresión de la
Torah).
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Estudios avanzados de la Teología Hebrea
• ACCIONES A TOMAR PARA ESCAPAR DE LA
INFLUENCIA DEL YETZER HARÁ
En consonancia con el gran compromiso que tenemos delante de
YAHWE nuestro Elohim de no vivir conforme a los designios y
vanagloria de este siglo, y ser hallados por ende dignos de escapar
de esta generación perversa, las siguientes acciones a tomar son una
ineludible responsabilidad de cualquier descendiente de Abraham:
1.- Regresar a la Torah de Moisés y los profetas, reconociendo que
ella (La Torah) es; buena, justa y perfecta, confesando nuestra
trasgresión y aceptando que fuimos vendidos al pecado.
2.- Sumergirnos en la muerte de nuestro Adon Yahshua, y comenzar
andar como el anduvo. Juan/Yohanan 2:6 (versión Kadosh Israelita de
D. Ancunce);
“Una persona que declara que está continuamente en unión
con El, debe conducir su vida en la forma que El lo hizo”.
3.- Recordarnos de guardar el Shabbat para santificarlo y así de esta
manera; santificar también a nuestras familias para protegerlas de
la tentación de la serpiente antigua.
No cometamos el error de nuestro padre Adán.
“Descuidar el huerto y dejar que la serpiente lo mine, hasta
destruir la imagen de YAHWEH en el.”
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Primera Edición Julio 2013

Derechos Reservados para los Autores

Permisos de reproducción y copias otorgados solo con fines que no

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Prohibida su reproducción para la venta

Desarrollo de estudios sistemáticos enfocados en la teología hebrea.

Maracaibo 18 de Julio de 2013

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palabra de Di-os

“Compra la verdad y no la vendas también sabiduría disciplina y

discernimiento”

Proverbios 23:23

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