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El largo camino hacia la reforma del

sector vivienda

Lecciones de la experiencia chilena

Eduardo Rojas

Banco Interamericano de Desarrollo

Washington D.C.

Departamento de Desarrollo Sostenible


El autor agradece los comentarios de Cedric Pugh de Sheffield Hallam University, UK; Pablo Tri-
velli, de la Universidad de Chile; Andrés Necochea de Habitat y de Michael Jacobs y William Sa-
vedoff del Banco Interamericano de Desarrollo. También agradece a Mabel Correa que tradujo el
documento del original en inglés y a Martha Chávez que preparó el documento para publicación.
La información y opiniones contenidas en este documento son las del autor y no representan las
opiniones y políticas del BID o sus instituciones afiliadas.
Índice

Resumen
i

Medio siglo de desarrollo del sector habitacional


1

El sistema habitacional chileno: Un caso exitoso de intervención estatal


4

La política habitacional chilena: fortalezas y debilidades


15

Lecciones de la experiencia chilena


21

Referencias
23

Anexo
24
Resumen

La política habitacional chilena es generalmente ficar varios factores que contribuyeron al éxito: un
considerada como exitosa. Durante casi una dé- enfoque integrado del sector (que considera las
cada, la construcción de nuevas viviendas ha al- necesidades habitacionales de todos los estratos de
canzado niveles superiores al requerido para pro- ingresos), un sistema de subsidios eficiente (el re-
porcionar viviendas a nuevas familias y reemplazar sultado de un largo proceso de experimentación y
las obsoletas. Esta circunstancia permite abrigar ajustes) y las reformas de los sistemas bancarios y
la esperanza que en el transcurso del próximo de- de seguridad social (los cuales crearon sólidas ins-
cenio todas las familias en Chile habitarán vivie n- tituciones de intermediación de los recursos finan-
das que cumplan con estándares mínimos de cali- cieros que se acumulan en fondos de pensiones y
dad y servicios. Este es un logro nada desprecia- seguros de vida).
ble en un país que recién ingresa a los niveles me-
dios de la escala de desarrollo. Además, el sector A pesar de sus éxitos, el sector habitacional chile-
privado chileno está ejerciendo un papel cada vez no todavía enfrenta grandes desafíos. Se hace
más activo en la producción y financiamiento de necesario movilizar de forma más eficiente los
viviendas. Este hecho es significativo si se consi- recursos públicos asignados a vivienda. La partic i-
dera que en los años setenta la mayoría de las vi- pación directa del gobierno en la construcción de
viendas las construía y financiaba el gobierno. Es viviendas para familias de bajos ingresos y la for-
más, la asistencia gubernamental está llegando ma de financiamiento usada, crea uniformidad en
eficazmente a los pobres y la mayor parte de los el diseño y en los planes de pago, los que no toman
recursos públicos está beneficiando a los hogares en cuenta las muy distintas necesidades de las fa-
de menores ingresos. La confianza en la política milias beneficiadas ni sus diversas capacidades de
habitacional es alta entre la población de menores pago. La falta de coordinación entre las políticas
ingresos como demuestran la participación masiva habitacional y de desarrollo urbano se está trans-
de familias en el programa de ahorro habitacional formando en el principal obstáculo tanto para la
y la ausencia de ocupaciones ilegales de terrenos. producción eficiente de viviendas como para un
crecimiento urbano ordenado y equitativo. Ha
Estos logros son el resultado de un largo proceso llegado el momento para que la política habitacio-
de maduración del sector habitacional chileno. nal chilena avance más allá del enfoque básico
Cincuenta años de política gubernamental han usado en la actualidad y se torne más flexible pa-
consolidado los cimientos legales, institucionales y ra atraer la participación de otros agentes al mer-
empresariales de la actual producción de viviendas cado de la construcción de viviendas económicas.
y su sistema de financiamiento. Se pueden identi-

i
Medio siglo de desarrollo del sector habitacional

EVOLUCIÓN DE LA POLÍTICA por el Estado terminaron beneficiando a un grupo


HABITACIONAL reducido de hogares, mientras la mayoría de las
familias de bajos ingresos continuaron ocupando
Los primeros años: la vivienda como parte de viviendas que no cumplían los requisitos mínimos
la preocupación por el bienestar social. El de habitabilidad.
interés público por la vivienda es de larga data en
Chile. Ya en 1906, el gobierno legisló para crear La búsqueda de una respuesta integral. En los
Consejos para la Vivienda Obrera, los que inicia- años sesenta, el gobierno impulsó una política ha-
ron con recursos públicos proyectos habitacionales bitacional de mayor alcance que buscó solucionar
para mejorar la calidad de la vivienda ofrecida por los requerimientos habitacionales de todos los es-
arrendadores privados a hogares de bajos ingre- tratos económicos de la población a través de una
sos. La cobertura resultó mínima comparada con combinación de programas financiados por los
las necesidades de entonces y la gran mayoría de sectores público y privado. Las piedras angulares
los hogares de escasos recursos no se beneficia- de esta política fueron la creación del Ministerio de
ron con el programa. En promedio, las viviendas Vivienda y Urbanismo (MINVU) para dictar las
iniciadas en el período 1943-58 no llegaron a las 6 políticas y administrar los fondos públicos; el Pro-
mil por año1. grama de Ahorro Popular (PAP) para incentivar el
ahorro en los sectores de menores ingresos y el
En los años cincuenta se puso en vigencia una po- establecimiento de las asociaciones de ahorros y
lítica habitacional de mayor alcance. En 1948 y préstamos (AAP). Se otorgaron recursos fiscales
1959 se pusieron en vigencia leyes que otorgaban al MINVU para la construcción de viviendas de
incentivos al sector privado para que invirtiera en bajo costo accesibles a las familias de bajos ingre-
proyectos habitacionales. En 1952 se creó un or- sos bajo diversos planes subvencionados. El plan
ganismo público para edificar viviendas a precios de pago consideraba las necesidades del grupo
asequibles con recursos públicos. Las leyes de familiar, el monto ahorrado en el programa PAP y
desarrollo urbano que exigieron a los municipios la la capacidad del grupo para pagar la deuda. Las
adopción de planos reguladores y de ordenanzas asociaciones de ahorros y préstamos captaban
especiales para regular la subdivisión de terrenos ahorros de los hogares de ingresos medianos y
para viviendas de bajo costo también entraron en altos para financiar la adquisición de viviendas a
vigencia durante este período. Asimismo, se esta- través de préstamos hipotecarios. Un sistema in-
bleció una agencia técnica para supervisar la cali- dexado para el cálculo de la deuda y amortizacio-
dad de la construcción, actividad de vital importan- nes, ayudó al sistema a operar en un ambiente in-
cia en un país sísmico. Sin embargo, estos esfuer- flacionario. No obstante, fue incapaz de satisfacer
zos fueron incapaces de producir el número de la demanda habitacional de una población urbana
viviendas requeridas por una población cada vez en rápido crecimiento y finalmente sucumbió a
más urbanizada 2. Las viviendas subvencionadas mediados de la década del setenta (período de
gran inflación y recesión económica) no en poca

1
Las cifras relativas a la construcción se obtuvieron de
Bravo, L. (1993), Anexo 2. allí que las ciudades crecieran a tasas anuales de más de
2,5% durante las décadas de los años cincuenta, sesen-
2
La población urbana aumentó de 58,4% del total en ta y setenta. La demanda por viviendas aumentó a ta-
1950 a 83,3% en 1992. La tasa de crecimiento del total sas más altas debido a que la tasa de formación de ho-
de la población sólo bajó de 2% en los años setenta, de gares permaneció cerca del 3% durante este período.

1
medida por los riesgos inherentes a su estructura terioridad necesitaron la intervención estatal para
de financiamiento (depósitos de corto plazo finan- mejorar sus condiciones sanitarias y regularizar los
ciando préstamos a largo plazo). títulos de propiedad. Desde 1983 el gobierno ha
La vivienda rural no estuvo dentro de las priorida- financiado un Programa de Erradicación de
des del Ministerio de la Vivienda y fue dejada en Asentamientos Irregulares ejecutado por las muni-
manos de organismos de desarrollo agrícola y de cipalidades con financiamiento parcial del Banco
promoción social. Está de más decir que estos Interamericano de Desarrollo (BID). A la fecha,
organismos lograron poco y la mayoría del campe- el programa casi ha erradicado por completo los
sinado continuó viviendo en viviendas de mala ca- asentamientos irregulares. El gobierno militar que
lidad. El total de viviendas construidas aumentó en asumió el poder en 1973 reprimió con firmeza las
el período de 1958 a 1970 a un promedio de 8 mil ocupaciones ilegales de terrenos, eliminando este
por año, aún insuficiente para satisfacer las nece- mecanismo empleado por los pobres para acceder
sidades. a un terreno. La ausencia de medios alternativos
para acceder a un sitio donde vivir, en conjunto
La vivienda como “un derecho”. El Gobierno con las largas esperas y el ahorro previo requerido
de la Unidad Popular (1970-1973) amplió la res- para optar a los subsidios ofrecidos en los progra-
ponsabilidad gubernamental declarando que el vivir mas patrocinados por el gobierno, forzaron a un
bajo un techo digno constituía un derecho y que gran número de nuevos hogares a vivir como
proveerlo era la obligación del Estado. En conse- “allegados” compartiendo viviendas con familiares
cuencia, durante los primeros años de la década u otros (Necochea, 1987). Con el correr de los
del setenta se realizaron esfuerzos significativos años, este proceso aumentó el hacinamiento. Se-
para entregar viviendas a través de proyectos pú- gún McDonald (1994) a principio de los años 1990
blicos. Este esfuerzo copó la capacidad institucio- se encontraban bajo condiciones de hacinamiento
nal y financiera del gobierno y puso a prueba la más de 600 mil viviendas.
capacidad de la industria de la construcción. La
escasez de recursos impidió que esta política hicie- AGENDA DE LA REFORMA LIBERAL
ra mucha mella en las deplorables condiciones ha-
bitacionales de los hogares pobres. Aunque el Principios orientadores. A partir de 1977 el go-
número de viviendas iniciadas aumentó, el de las bierno puso en marcha una extensa reforma del
viviendas terminadas no aumentó demasiado (en sector habitacional basada en las ideas neolibera-
promedio, se entregaron 9 mil al año). Muchos les que guiaron las reformas de otros sectores de
proyectos quedaron a medio terminar, ya sea por la economía. La construcción y el financiamiento
falta de materiales de construcción o de financia- de viviendas quedarían a cargo del sector privado
miento. y el gobierno sólo actuaría como facilitador. Se
consideró que las dificultades encontradas por el
La ocupación ilegal de terrenos, una válvula mercado para satisfacer las necesidades de la po-
de escape. Una política no declarada pero real de blación de escasos recursos eran producto, más
fines de la década de los sesenta y comienzos de que nada, del bajo poder adquisitivo de esos hoga-
los setenta fue el permitir la invasión de terrenos. res. Por eso, el Estado, en un papel subsidiario,
Los datos oficiales muestran la ocurrencia cre- ayudaría a las familias más necesitadas suple-
ciente de invasiones durante este período, las que mentando su poder adquisitivo con subsidios di-
aumentaron de menos de 10 por año en 1968 a rectos, en tanto que los bancos privados ofrecerían
más de 220 en 1970 (Fadda y Ducci,1993). Otra financiamiento suplementario. Los sectores de
manera de paliar la escasez de vivienda fue la ingresos medios y altos conseguirían financia-
subdivisión incompleta de sitios promovida por el miento en los bancos privados. La securitización
gobierno. Esto redujo el hacinamiento en las vi- de hipotecas formaba parte del desarrollo futuro
viendas existentes, pero creó barrios que con pos- del sistema de financiamiento habitacional a medi-

2
da que los mercados de capitales se expandieran y La idea original se modificó reiteradamente para
vigorizaran. En 1978, el gobierno sumó a estas adaptarla a las necesidades de la transición. Al-
reformas profundos cambios en la planificación gunos ejemplos ilustran este punto. En un comie n-
urbana con el propósito de liberalizar el desarrollo zo, se subvencionó a hogares pertenecientes a una
de los centros urbanos. Se simplificaron las reglas amplia gama de la estructura de ingresos. Se con-
para incorporar terrenos a usos urbanos y se flexi- tinuó el apoyo entregado previamente a familias de
bilizaron las normas que regulaban el uso de la ingresos medios, a fin de asegurar un mínimo nivel
tierra para permitir que el crecimiento urbano de demanda para las viviendas construidas por el
marchase más de acuerdo a las tendencias del sector privado. Esto distorsionó el objetivo inicial
mercado. de concentrar los recursos públicos sólo en el
sector poblacional de más bajos ingresos (estas
Ajustes durante la ejecución. Las reformas se distorsiones se eliminaron en años posteriores). El
concibieron para liberar el supuestamente reprimi- gobierno también debió asumir un papel más activo
do potencial del sector privado para financiar y que el previsto originalmente cuando quedó de
construir viviendas y para concentrar la ayuda gu- manifiesto que las empresas constructoras y los
bernamental en los hogares con limitado acceso a bancos no se interesaban por edificar y financiar
las fuentes privadas de financiamiento. Las nue- viviendas económicas. Hasta la fecha, el MINVU
vas políticas entraron en vigencia en un período de contrata directamente con empresas privadas la
bajo crecimiento económico, por lo que también se construcción de viviendas de bajo costo y las dis-
diseñaron de modo que contribuyeran a la reacti- tribuye entre los beneficiarios inscritos en una lista
vación de la economía a través de la reactivación nacional. Más aún, abandonando ostensiblemente
de la construcción de nuevas viviendas. Por con- el objetivo original de transferir al sector privado la
siguiente, se proveyó subsidios sólo para la compra total responsabilidad de financiamiento de hipote-
de viviendas nuevas y no se hizo ningún esfuerzo cas, el gobierno ha estado otorgando en forma di-
por apoyar a la reventa, remodelación y mejora- recta los préstamos suplementarios que necesitan
miento de las viviendas existentes o para asistir al los beneficiarios de bajos ingresos para pagar las
sector de viviendas de arriendo. viviendas que el Estado produce puesto que, hasta
el presente, ningún banco se ha interesado por fi-
nanciar estos préstamos.

3
El sistema habitacional chileno:
Un caso exitoso de intervención estatal

RESPUESTA PRAGMÁTICA: presas privadas con ahorros propios y présta-


LA INTERVENCIÓN ESTATAL DENTRO mos hipotecarios otorgados por la banca pri-
DE UN MARCO DE IDEOLOGÍA LIBE- vada.
RAL
Las características básicas del sistema chileno de
Después de muchos tanteos emergió en Chile un subsidio habitacional aparecen en la Tabla 1, en
sistema de financiamiento y producción de la vi- tanto que el Anexo contiene detalles de los dife-
vienda con tres niveles. El sistema incluye: rentes esquemas de subsidio, en vigencia en 1999.

• Viviendas construidas por el gobierno Los programas que apoyan viviendas construi-
(contratadas con empresas constructoras pri- das por el gobierno son dos. El más importante,
vadas) que se entregan a familias de bajos in- desde el punto de vista cuantitativo es el Programa
gresos con grandes subsidios y préstamos gu- de Vivienda Básica (VB) (ver Tabla 2), el cual
bernamentales directos; provee una pequeña vivienda completa, financiada
• Viviendas con ayuda gubernamental, un con los ahorros del beneficiario, un subsidio y un
sistema mixto de subsidios gubernamentales préstamo del gobierno. El Programa de Vivienda
no reembolsables, suplementados con présta- Progresiva (VP), proporciona al beneficiario un
mos otorgados por bancos privados y ahorros terreno totalmente urbanizado y un núcleo habita-
de los beneficiarios que permite a hogares de cional mínimo3. Este último sirve a familias de

Tabla 1. Sistema de financiamiento habitacional en 1999


(US dólares)

Rango de Financiamiento
Rango de
Tipo de viviendas ingresos
precios
US$/mes ahorros préstamos subsidios
Construidas por el gobier- 0 4,200 240 0 3,960
no 220 6,900 300 2,400 4,200
221 7,000 300 4,000 2,700
Con ayuda del gobierno
1,680 45,000 4,500 38,700 1,800

Préstamos disponibles en bancos privados


Financiadas privadamente 1,681+
5 a 20 años - indexados - 9% a 12% interés - 25% pago inicial

Fuente: Anexo

ingresos medianos y bajos financiar viviendas


construidas por empresas inmobiliarias priva- 3
das y Se entiende por "núcleo habitacional mínimo" una
habitación y baño en un terreno totalmente urbanizado.
• Viviendas financiadas privadamente que Esto permite a los beneficiarios ocupar el terreno mien-
permite a familias de ingresos medio-altos y tras completan la vivienda ya sea construyendo ellos
altos comprar viviendas construidas por em- mismos o con ayuda comunitaria.

4
ingresos muy bajos (menos de US$100 al mes) la participación de los bancos privados en el finan-
que no están en condiciones de cumplir con los ciamiento de las viviendas básicas. La mayoría de
requisitos de ahorro y pagos hipotecarios estable- estas metas no pudieron lograrse. El Banco Inte-
cidos para el Programa de Vivienda Básica. Por ramericano de Desarrollo apoyó el diseño y la
lo tanto, el Programa de Vivienda Progresiva exige puesta en marcha del Programa de Vivienda Pro-
ahorros menores que los de la VB y no requieren gresiva. Una de las características clave de este
que los beneficiarios efectúen pagos después de programa fue la entrega de las viviendas a los be-
asignado el terreno. El programa permite, además, neficiarios sobre la base de una contribución inicial
que los beneficiarios postulen como grupo organi- mínima y sin otra obligación de pago. Esto permite
zado. a los beneficiarios dedicar toda su capacidad de
ahorro a mejorar el núcleo habitacional proporcio-
Ambos programas seleccionan los beneficiarios de nado por el programa.
una lista nacional de candidatos usando procedi-
mientos transparentes. Se asigna a los postulantes Los programas con ayuda del gobierno, que
un puntaje basado en sus ahorros (cantidad aho- proporcionan una asistencia financiera parcial para
rrada y tiempo ahorrando), nivel de ingresos y ne- la compra de viviendas construidas por inversio-
cesidades habitacionales (tamaño de la familia y nistas privados, incluyen varias líneas de acción,
condiciones habitacionales actuales). Las vivie n- siendo la más importante el Programa de Subsidio
das se asignan anualmente a los hogares que en- Unificado (PSU). Este emite certificados de sub-
cabezan la lista nacional. Como se mencionó an- sidio, canjeables en efectivo, que complementan la
teriormente, el Estado no pudo encontrar empresas capacidad de ahorro de los hogares, ayudándolos
privadas dispuestas a proveer viviendas básicas ni así a comprar viviendas construidas por empresas
viviendas progresivas. Asimismo, las firmas privadas4. El Programa Especial de Trabajadores
constructoras no estuvieron dispuestas a propor- (PET) proporciona subsidios directos a grupos or-
cionarlas bajo contratos "llave en mano". Fue por ganizados con capacidad de ahorro superior a la
eso que el Estado comenzó la producción directa de beneficiarios de viviendas básicas o que tienen
de viviendas, adquiriendo terrenos y contratando fuentes adicionales de asistencia (empleadores,
firmas privadas para la construcción tanto de vi- ONG). El subsidio para Vivienda Rural permite a
viendas básicas como de viviendas progresivas. El hogares rurales de bajos recursos acceso a una
gobierno completa el ciclo como urbanizador ha- vivienda mínima (por un costo casi igual al valor
ciendo entrega de las viviendas directamente a los total del subsidio) o a una vivienda mejor si la fa-
beneficiarios. Más aún, dada la falta de interés milia logra obtener un préstamo. El subsidio de
por parte de los bancos privados de proporcionar Renovación Urbana promueve la construcción de
los pequeños préstamos necesarios para el finan-
ciamiento de viviendas básicas, el gobierno provee 4
El Programa de Subsidio Unificado opera a través de
préstamos directamente a los beneficiarios a tra-
certificados de subsidio. Esta es una de las característi-
vés del MINVU. La cartera de préstamos gene- cas más conocidas y emuladas del sistema habitacional
rada por el gobierno ha presentado altos niveles de chileno. Los certificados son emitidos por el monto total
mora. del subsidio. Al cierre de la transacción de compra el
beneficiario lo endosa y entrega al constructor como
Los bancos multilaterales de desarrollo han contri- parte del pago. El resto del costo de la vivienda provie-
buido al desarrollo de estos programas. El Banco ne de fondos propios del beneficiario más un préstamo
Mundial apoyó el Programa de Vivienda Básica hipotecario obtenido de un banco privado. Original-
mente, los certificados servían solo para comprar vi-
con un préstamo dirigido a mejorar el mecanismo
viendas nuevas y tenían restricciones en caso de la
de financiamiento existente, cuyos objetivos in- compra de viviendas existentes (el objetivo era fomentar
cluían la eliminación de la mora de la cartera de la industria de la construcción). A la fecha se han le-
préstamos del gobierno, la privatización de la aten- vantado casi todas las restricciones y los certificados
ción al servicio de los préstamos y el aumento de se pueden usar para la compra de viviendas existentes.

5
viviendas en sectores deteriorados del centro de bancos privados y cumplir con un plan de ahorros
las ciudades. Este programa proporciona subsidios preestablecido6.
mayores en atención a que los proyectos de reno- La facilitación de financiamiento privado para vi-
vación urbana generalmente resultan más costosos vienda forma parte de un conjunto más amplio de
que la construcción de unidades nuevas. El crite- reformas a los mecanismos de intermediación fi-
rio de elegibilidad para este tipo de subsidio incluye nanciera y de seguridad social. A la fecha, es el
no sólo a los postulantes (capacidad de ahorro, sistema bancario universal, el principal originador
necesidad habitacional y capacidad de endeuda- de préstamos hipotecarios que son securitizados y
miento), sino también el área donde está ubicada la comercializados en los mercados de capitales.
vivienda, la que debe encontrarse en una zona de- Existen dos instrumentos. El primero puesto en
signada para renovación. Existe también un plan vigencia en 1976, los Bonos Hipotecarios Reajus-
de subsidios para hogares que desean alquilar vi- tados (BHR) emitidos como obligación de los ban-
viendas con promesa de compra (leasing). El cos que los originan y vendidos a inversionistas en
programa fue diseñado para aquellos hogares que el mercado bursátil7. En 1996 se introdujo el Mu-
necesitan urgentemente una vivienda y no tienen tuo Hipotecario Endosable (MHE), instrumento
ahorros. Hogares que llegan a acuerdos de alqui- emitido por bancos y compañías de crédito hipote-
ler con promesa de compra financiados por com- cario. Estos son documentos respaldados por pri-
pañías de arrendamiento inmobiliario privadas, re- meras hipotecas, endosadas por sus originadores
ciben ayuda del Estado a través de subsidios que que transfieren a los inversionistas el riesgo del
cubren entre el 5% y el 8% del costo final. Di- capital y de los intereses del préstamo, entregando
chos subsidios se emiten en un máximo de 240 la propiedad como garantía. La disponibilidad de
cuotas, a medida que los arrendatarios progresan estos instrumentos financieros y la demanda que
en el pago de la deuda 5. por ellos han creado los inversionistas institucio-
nales ? compañías de seguros de vida y fondos
El sistema está diseñado para lograr una buena privados de pensiones? principales compradores
equidad vertical, otorgando subsidios que son pro- de estas obligaciones de largo plazo, forman la
porcionalmente mayores a medida que el costo de espina dorsal del financiamiento hipotecario en
la vivienda disminuye (ver Anexo). Además in- Chile.
tenta fomentar el ahorro familiar. Mientras más
pequeño el subsidio solicitado al momento de la
inscripción, mayor es la probabilidad de obtenerlo. 6
Los ahorrantes se comprometen a hacer depósitos
Lo cual induce al solicitante a optar por el menor mensuales durante un período de tiempo con el fin de
subsidio posible en cada rango y maximiza la con- lograr un determinado monto de ahorro. Los ahorros
tribución familiar por cada vivienda financiada. El ganan una tasa de interés real. Los bancos privados
ahorro, como medida del esfuerzo individual para verifican el cumplimiento del acuerdo e informan al
MINVU para certificar que los ahorrantes califican para
obtener vivienda, ocupa un rango importante en el
el subsidio. A fines de 1997 había 1,3 millones de cuen-
criterio aplicado para otorgar subsidios. Entre los tas con un balance acumulado de US$ 680 millones y
mecanismos usados para promover el ahorro fami- contratos por ahorros eventuales de más de US$ 1,8 mil
liar está el requisito de tener cuenta de ahorros en millones (Pardo 1998). El hecho de que no todos los
ahorrantes logren cumplir sus metas ayuda a racionar
los subsidios habitacionales, dado que el número de
cuentas de ahorro abiertas cada año es muy superior al
de los subsidios disponibles.

5 7
No todos los certificados son canjeados antes de su En Chile todos los préstamos hipotecarios son expre-
fecha de expiración, debido a la imposibilidad por parte sados en una unidad de cuenta, la unidad de fomento
de los beneficiarios de encontrar la vivienda adecuada o (UF). El Banco Central ajusta diariamente el valor de la
de obtener un préstamo. UF la que sigue de cerca los indicadores de inflación.

6
PRODUCCION DE VIVIENDAS
INTERVENCION GUBERNAMENTAL
Uno de los logros más importantes de la política
habitacional chilena es el sostenido aumento del Un análisis más detallado de las formas que adqui-
número de viviendas construidas. La Figura 1 rió la intervención estatal revela aspectos poco
muestra la evolución de la construcción de vivie n- conocidos de la política habitacional chilena y de-
das nuevas en los últimos cincuenta años y el au- muestra como algunas de sus características si
mento de la producción atribuible a la política en bien contribuyeron al aumento del volumen de vi-
discusión8. El número de viviendas nuevas termi- viendas construidas, también generaron rigideces
nadas creció de 79.000 en 1990 a 138.000 en de ejecución y problemas en la asignación de re-
1997, un aumento del 75% (ver Tabla 2). Como lo cursos en el sector.
indica la Figura 2, un significativo aumento en las
viviendas construidas por el gobierno explica el Gran intervención del Estado en el mercado
crecimiento de la producción total de viviendas a habitacional. Las cifras de producción indican
comienzos de la decena de los noventa. Esto se que, a pesar de sus orígenes liberales y declarada
originó en la decisión del entonces recientemente preferencia por los mecanismos privados de pro-
elegido gobierno democrático de Patricio Aylwin ducción, la política habitacional chilena ha condu-
(1990-94) de acelerar la solución al problema ha- cido a una amplia intervención del Estado (aunque
bitacional de los hogares de bajos ingresos para en disminución). A la fecha, el gobierno determina
responder a la demanda acumulada y evitar la las características de más de la mitad (57%) de las
ocupación ilegal de tierras. Vale la pena mencio- viviendas construidas (en 1990 esta cifra era de un
nar que este aumento de producción se logró sin 79%), ya sea en forma directa (contratando la
expandir la planta de personal del MINVU. Des- construcción del 28% del total) o indirectamente
de 1993 a 1995 la construcción de viviendas finan- (determinando el precio máximo de otro 29%). En
ciadas privadamente casi se triplicó, lo que en 1997 la producción habitacional sin subsidios di-
gran medida explica el crecimiento experimentado rectos, o sea, libre de intervención estatal llegó al
por el sector en general. El volumen de viviendas 43% del total, cifra en continuo crecimiento desde
con ayuda del Estado se mantuvo estable durante 1990 cuando representó sólo un 22% 9.
este período (fluctuando entre 40,000 y 44.000
viviendas por año) lo que refleja el volumen cons- Rigideces de la maquinaria gubernamental de
tante de recursos que el gobierno destinó para producción de viviendas. En el sistema actual,
apoyar a los hogares de ingresos medios y medio- el gobierno entrega viviendas directamente a bene-
bajos. Es interesante notar que el financiamiento ficiarios seleccionados de una lista nacional de
privado juega un papel importante en el financia- candidatos, cuyos ingresos no superen los US$
miento de viviendas con ayuda del Estado, ya que 220. Estos hogares se ubican en los dos quintiles
el Programa de Subsidio Unificado no alcanza a más bajos de la escala de distribución del ingreso y
cubrir el 25% del costo total de la vivienda (ver concentran prácticamente al 45% de la población
Anexo para los detalles referentes al nivel de sub- del país. La producción directa de viviendas, sea a
sidio para cada uno de los programas habitaciona- través del Programa de Vivienda Básica (VB) o
les con apoyo del Estado). de Vivienda Progresiva (VP), es una anomalía
dentro del diseño conceptual de la política. Esta
8
forma de producción se hizo necesaria dada la
Información de Bravo, L. (1993) Anexo 2. El número de
viviendas necesarias para satisfacer el aumento de ho-
9
gares y la reposición de viviendas existentes se calculó Una parte de estas viviendas, aquellas con superfi-
sobre la base de la tasa de formación de familias, consi- cies inferiores a 140 m2 se benefician de algunas exe n-
derando una casa por cada nueva familia, agregando las ciones tributarias incluyendo excepción al pago de im-
necesidades de reposición suponiendo que cada año se puestos de bienes raíces por los 10 primeros años y
pierde el 1% de las viviendas existentes. exención del impuesto a la herencia.

7
falta de interés por parte de las empresas inmobi- entrega más de 40.000 viviendas al año. Esto re-
liarias de producir viviendas para este segmento de presenta más del 30% del total de viviendas cons-
la población. truidas y casi el 20% del total de metros cuadrados
de construcción residencial. Este nivel de activi-
Como resultado de estos programas, el MINVU dad tiene un impacto importante sobre el
es hoy la empresa inmobiliaria más grande del pa-
ís. Compra terrenos, contrata la construcción y

Figura 1. Producción de viviendas nuevas 1943 - 1997

160,000

140,000

120,000

100,000
Número de viviendas

80,000

60,000

40,000

20,000

0
1943

45

47

49

51

53

55

57

59

61

63

65

67

69

71

73

75

77

79

81

83

85

87

89

91

93

95

97
Año
Número de viviendas nuevas

Número de viviendas que se requerirían para cubrir el crecimiento del número de familias y para reponer las viviendas que
salen del acervo.

Fuente: Bravo (1993) y cálculos del autor

8
Figura 2. Producción habitacional 1990-97

160000

140000

120000
Número of viviendas

100000

80000

60000

40000

20000

0
1990 1991 1992 1993 1994 1995 1996 1997
Años

Viviendas producidas por el Estado Viviendas con ayuda del Estado


Viviendas financiadas privadamente Total

Fuente: Tabla 2

9
Tabla 2. Producción habitacional 1990 - 1997

AÑO
PROGRAMA

1990 1991 1992 1993 1994 1995** 1996** 1997**

A Vivienda progresiva 0 6.089 10.679 8.100 24.996 8.670 13.466 11.889

B Vivienda básica 16.029 24.805 22.414 21.011 10.273 24.799 32.927 27.004

Viviendas producidas por el Go-


bierno (A+B) 16.029 30.894 33.093 29.111 35.269 33.469 46.393 38.893

C Programa especial para 14.550 12.792 20.743 16.535 15.270 15.698 13.400 11.587
trabajadores

D Subsidio rural 6.307 4.910 8.485 7.602 6.944 7.539 5.454 7.328

E Subsidio unificado (I, II, III) 24.801 22.721 22.368 22.307 21.370 21.430 22.029 19.897

F Subsidio para renovación 0 55 165 726 1.206 1.191 1.409 1.342


urbana

Viviendas con ayuda guberna-


mental (C+D+E+F) 45.658 40.478 51.761 47.170 44.790 45.858 42.292 40.154

Viviendas financiadas privada- 17.217 17.164 20.980 41.837 45.779 57.386 56.438 59.338
mente

Total 78.904 88.536 105.834 118.118 125.838 136.713 145.123 138.385

* Estimación. No existen estadísticas fidedignas respecto al número de viviendas producidas y financiadas por el sector privado. Esta estimación se basa en esta-
dísticas recopiladas por el Instituto Nacional de Estadística, que reporta el total de viviendas construidas cada año. Las viviendas financiadas por el sector público se
restan de este total para estimar el total de viviendas financiadas privadamente.
** Información preliminar.
Fuente: Ministerio de Vivienda y Urbanismo. Informe anual. Instituto Nacional de Estadística.

10
precio de las tierras y el proceso de desarrollo ur- alto nivel de mora se mantuvo incluso después de
bano. El compromiso político de construir un gran que el gobierno contratara el cobro con agentes
número de viviendas al año no le permite al MIN- externos. La mora en los pagos no está directa-
VU modificar el sistema de producción directa a mente relacionada con la imposibilidad de las fami-
pesar de las frecuentes señales de que los recur- lias de pagar, sino más bien es consecuencia del
sos que recibe para estos efectos no están siendo riesgo moral inherente a préstamos directos del
asignados eficientemente. La repetición sistemáti- gobierno. La impresión generalizada entre los be-
ca de modelos habitacionales en la periferia urba- neficiarios de préstamos gubernamentales es que
na es una de las consecuencias de la rigidez inhe- éstos no necesitan ser reembolsados. Esta impre-
rente a un sistema de producción masiva. Esto sión se ve reforzada por el hecho de que el gobie r-
crea situaciones en las cuales muchos solicitantes no es reacio a desalojar a beneficiarios morosos
reciben viviendas más grandes o más pequeñas de por temor a los costos políticos de esta medida y
lo que necesitan y, generalmente, en ubicaciones por las frecuentes renegociaciones del pasado12.
poco deseables. Además, el interés de maximizar Para aquéllos que no cumplen con los pagos, los
el número de viviendas construidas con recursos préstamos de hecho se transforman en subsidios,
limitados tiende a afectar los estándares de cali- los que sumados a los ya altos subsidios que reci-
dad. Hay muchas indicadores que sugieren que ben inicialmente los beneficiarios del programa, lo
las viviendas producidas por el gobierno crean un transforman en un programa altamente regresivo.
acervo habitacional de baja calidad (Rojas y Gree- Al final de cuentas, los beneficiarios del Programa
ne 1995) 10. de Vivienda Básica reciben un subsidio 50% más
alto del que reciben las familias de ingresos meno-
Alta morosidad en los reembolsos de préstamos res que participan en el Programa de Vivienda
estatales. Frente a la falta de interés de los ban- Progresiva.
cos privados por entrar al mercado de préstamos
hipotecarios para el sector de bajos ingresos, el PARTICIPACION DEL SECTOR PRIVA-
gobierno, a través del Ministerio de la Vivienda, DO
optó por proveer préstamos complementarios a los
beneficiarios del Programa de Viviendas Básicas. La participación del sector privado en la produc-
El préstamo de US$ 2.400 se amortiza en 12 años ción y el financiamiento de viviendas ha experi-
con un interés preferencial de 7% al año11. La mentado un constante aumento. En parte, esto se
cartera de préstamos estatales está plagada de debe a la política habitacional pero, como se discu-
retrasos en los pagos. Incluso después de varias tirá más adelante, las reformas del sector vivienda
renegociaciones, el 60% de los préstamos se en- no explican estos resultados en su totalidad. En
cuentran con más de tres meses de retraso. Este una gran medida, el aumento de la participación
privada ha sido posible por las profundas reformas
10 introducidas en el sector financiero y en el sistema
Los beneficiarios, con frecuencia, expresan quejas y
los analistas de la experiencia chilena se preguntan a
12
menudo si el acervo de viviendas producidas tendrá la Entre 1979 y 1997 el gobierno renegoció las deudas
supuesta vida útil de 50 años. En 1996 en Santiago, casi morosas por lo menos siete veces. En la mayoría de los
10% de las casas contratadas por el gobierno bajo el casos, pagos hipotecarios antiguos fueron perdonados
Programa de viviendas básicas, no resistió las incle- a cambio del pago de la última cuota y la promesa de un
mencias de una tormenta de invierno. Hubo filtraciones buen comportamiento futuro. La continua incapacidad
de techos y paredes debido a la mala calidad de los ma- del gobierno de mejorar la situación de la cartera hipo-
teriales usados en su construcción. tecaria del Programa de Vivienda Básica afectó las rela-
ciones con el Banco Mundial durante la ejecución de un
11
Las tasas reales de interés sobre montos indexados préstamo en apoyo a este Programa. El problema no
para hipotecas a 12 años fluctuaron entre 17% y 8,5% afecta el apoyo del BID al Programa de vivienda progre-
en el período 1979-1997. siva ya que éste fue diseñado ex profeso sin préstamos
directos.

11
de seguridad social que crearon las instituciones y ción de viviendas que cumplen con los requisitos
proveyeron los fondos para apoyar la creciente de precio de este Programa, las que en los últimos
participación del sector privado en el financia- diez años han construido entre 20 mil y 22 mil vi-
miento de viviendas. viendas por año. La estabilidad de los recursos
gubernamentales asignados a este segmento del
La creciente participación del sector privado mercado y su estabilidad a través de los años con-
en el área habitacional. La información que se tribuyó a la especialización de las empresas. Los
presenta en la Tabla 2 indica que el sector privado empresarios interesados en este mercado saben de
en Chile se ha forjado un nicho bien definido den- antemano cuantos subsidios serán emitidos cada
tro del sector vivienda. Gracias a la creciente año en las diferentes regiones del país 13. El cons-
prosperidad que ha experimentado el país, este tante flujo de financiamiento proveniente del go-
nicho se está expandiendo. El sector privado ha bierno es un incentivo importante para los empre-
aumentado su actividad de forma sistemática para sarios interesados en este segmento del mercado,
capturar una mayor porción del mercado habita- dado el usualmente prolongado período de gesta-
cional no subsidiado el cual ha experimentado un ción de los proyectos inmobiliarios. Por otro lado,
período de expansión debido al crecimiento de los este mercado se ha vuelto muy competitivo por lo
ingresos, la alta tasa de empleo, la confianza de los que los principales factores de éxito en estos em-
consumidores y la estabilidad de las tasas de inte- prendimientos inmobiliarios han pasado a ser el
rés. En los últimos cinco años la construcción de control de costos y el acceso a tierras de bajo pre-
viviendas financiadas privadamente se triplicó (de cio. La disminución de los márgenes de ganancia
20 mil unidades en 1992 a 60 mil en 1997). Este y la falta de incentivos para mejorar la calidad del
aumento satisface la creciente demanda por vi- producto han llevado a un deterioro en la calidad
viendas nuevas impulsada por el aumento real de de las viviendas14.
los salarios y la disponibilidad de financiamiento.
Durante el período 1987-94 el ingreso per cápita Sesgo suburbano, la expansión de la periferia
promedio por unidad familiar creció en casi un urbana. Además del importante impacto urbano
50% (Banco Mundial 1995) y el valor del finan- que causa la producción directa de viviendas por
ciamiento habitacional respaldado por hipotecas parte del MINVU ? que en su afán de reducir la
transadas en los mercados de capitales se duplicó indicencia del costo del terreno construye de pre-
(Pardo 1998). Bajo todo punto de vista éste es un ferencia en las periferias urbanas? la política ha-
aumento impresionante. Sin embargo, la reducción bitacional chilena también incentiva a los urbaniza-
en la tasa de crecimiento que experimentó la eco- dores privados a contribuir a la expansión hori-
nomía chilena en 1998-1999, puede afectar el cre- zontal de las ciudades. Consideraciones de costo
cimiento de este subsector en los próximos años. y las preferencias de los consumidores de ingresos
medios y altos han inducido al sector privado a
Competencia y especialización, dos fuerzas
que impulsan la industria inmobiliaria en di- 13
El sistema de certificados generó una oportunidad de
recciones opuestas. La estabilidad de la política trabajo para gestores privados que cobran un importe a
habitacional ha facilitado la especialización de em- los urbanizadores por formar grupos de beneficiarios
presas urbanizadoras y constructoras, aumentando con subsidios y capacidad de pagos similares.
su eficiencia. Por otra parte, la fuerte competen-
14
cia ha afectado la calidad de las viviendas. A par- Para ser vendidas en el mercado las viviendas nue-
tir de las primeras etapas de ejecución de la nueva vas deben pasar inspección y aprobación municipal.
Esta revisión se concentra en la solidez de estructura, el
política habitacional, urbanizadores privados mos-
cumplimiento de las normas de uso del suelo y de las
traron interés en participar en la producción de regulaciones urbanísticas, pero no cubre la calidad de
viviendas de mayor valor que califican para el los materiales ni la de la mano de obra. Los comprado-
Programa de Subsidio Unificado. Existen numero- res no tienen el conocimiento técnico necesario para
sas empresas que se especializan en la construc- determinar la calidad de la construcción.

12
construir un gran número de viviendas unifamilia- acuerdo a un estudio reciente, hasta fines de 1997,
res para este mercado. El costo del terreno es un quince bancos habían originado más de 440 mil
componente importante del valor de las viviendas operaciones de financiamiento habitacional (Pardo
económicas y a menudo representa el 40% de 1998).
costo total. Buscando reducir costos, los urbani-
zadores ofrecen viviendas en zonas periféricas El importante desarrollo del financiamiento hipote-
donde los terrenos baldíos son más baratos. Ade- cario privado en Chile fue posible gracias a las
más, los proyectos totalmente nuevos permiten un reformas de los mercados financieros puestas en
mayor control de los costos y menores plazos de práctica después de la crisis bancaria de 1982 y a
entrega lo que reduce los costos financieros. Por las reformas del sistema de seguridad social intro-
lo tanto, hay un estímulo implícito para continuar ducidas en 1981. Las reformas de los mercados
expandiendo la periferia urbana ya que esta es- financieros reforzaron el sistema de la banca uni-
trategia posibilita la adquisición de terrenos más versal que origina la mayoría de las hipotecas; las
baratos y fáciles de urbanizar15. La construcción de la seguridad social aumentaron significativa-
de viviendas en áreas de renovación urbana sigue mente la oferta de fondos para préstamos de largo
representando una parte muy pequeña del total de plazo. La fortaleza de los bancos respalda los bo-
la construcción nueva (1% del total) a pesar de la nos hipotecarios ya que, como se explicara ante-
disponibilidad de subsidios especiales para vivie n- riormente, son obligaciones de los bancos emiso-
das localizadas en estos sitios. Esto es atribuible a res. Como ya se mencionó, las reformas financie-
la mayor dificultad de conseguir lotes de tamaño ras recientes permitieron la formación de compa-
adecuado en los centros de las ciudades y a los ñías de crédito hipotecario y la emisión de Mutuos
plazos de ejecución, que en los proyectos de reno- Hipotecarios Endosables (MHE) en los que los
vación urbana son menos predecibles. inversionistas asumen el riesgo. La formación de
fondos de pensiones privados para administrar las
El rol de las reformas a la seguridad social e contribuciones de empleados y empleadores a los
instituciones financieras en la expansión del fondos de retiro personal, dio origen a poderosos
financiamiento privado de la vivienda. La polí- inversionistas institucionales en el mercado de ca-
tica habitacional chilena ha movilizado eficazmente pitales chileno. Además, el sistema amplió el pa-
a la inversión privada. Durante los últimos diez pel de las compañías de seguros de vida que pro-
años, además del financiamiento complementario porcionan seguros de invalidez y sobrevivencia y
proporcionado a las 20 mil viviendas que en pro- venden pensiones anuales a los jubilados. Estos
medio se benefician anualmente de ayuda guber- inversionistas tienen un apetito natural por los valo-
namental, los mercados de capitales han otorgado res de largo plazo que igualen sus obligaciones.
fondos para la mayoría de las unidades entera-
mente financiadas por el sector privado, las que En 1997 el valor en cartera de bonos hipotecarios
alcanzaron a 60 mil en 1997. Desde que la refor- era de US$ 10,6 mil millones. Este aumento es
ma de 1976 estableció los Bonos Hipotecarios significativo, ya que en 1986 era de sólo US$ 2,2
Reajustables (BHR), el sistema bancario ha sido el mil millones. Los bancos originadores mantenían
principal originador de préstamos hipotecarios. US$ 2,8 mil millones en BHR, mientras que la ma-
Más recientemente, compañías de crédito hipote- yor parte del resto (US$ 7,4 mil millones) estaba
cario han comenzado a originar hipotecas para en poder de las compañías privadas de fondos de
venderlas en los mercados de capitales. De pensiones y de seguros (60% y 34% respectiva-
mente). En la actualidad los bonos hipotecarios
15 son ampliamente aceptados en el mercado de ca-
Sólo recientemente (1997), fueron introducidas algu-
nas restricciones a la incorporación de tierras al uso
pitales chileno; sin embargo, Pardo (1998) informa
urbano, un proceso anteriormente sujeto a una de las que durante los primeros años y para enfrentar la
políticas urbanísticas más liberales del mundo occiden- falta de interés de los inversionistas, el Banco
tal. Central debió crear un poder comprador para los

13
BH. La expansión de la industria aseguradora y el los fondos de pensiones para expandir la participa-
crecimiento de los fondos de pensiones aseguran ción de los valores hipotecarios, dado que actual-
la disponibilidad de fondos para desarrollar aun mente representan sólo un 16% de los activos to-
más el financiamiento hipotecario. Los activos en tales. De acuerdo a una estimación, la demanda
fondos de pensiones han crecido de US$ 299 mi- por activos securitizados de parte de inversionistas
llones en 1981 a US$ 31,1 mil millones en 1998, institucionales en Chile puede ser de más de
equivalente al 41% del PNB. Se espera que futu-
ros crecimientos aumenten la acumulación de re-
cursos en los fondos de pensiones los que se prevé
llegaran a 53% del PNB en el año 2015. Hay mu-
cho espacio en las carteras de

14
US$ 12 mil millones por año16. En el corto plazo,
las mayores limitaciones para satisfacer esta de-
manda se originan en la falta de experiencia de las
instituciones financieras para emitir este tipo de
valores (Pardo 1998).

16
Comunicación personal con Mario Abuhabda, con-
sultor chileno de instituciones inversionistas (mayo
1999).

15
La política habitacional chilena: fortalezas y debilidades

LOGROS ma cambió todo esto. El mejoramiento de la foca-


lización del gasto público en vivienda se debió, ma-
Mejoras en las condiciones habitacionales de yormente, a dos medidas. La primera fue la con-
la población. El número de viviendas construidas solidación de un mecanismo de financiamiento hi-
en Chile ha ido en aumento por casi una década, potecario privado para familias de ingresos medios
en marcado contraste con la experiencia de los 40 y medio-altos. La segunda fue la introducción del
años anteriores (ver Figura 1). Esto ha afectado sistema de certificados de subsidios que creó un
considerablemente las condiciones habitacionales mecanismo programado, transparente y de frente
de la población. Las estimaciones del gobierno para extender subsidios habitacionales a los hoga-
indican que hacia 1994, se requerían 82 mil vivie n- res de bajos ingresos. El establecimiento de un
das por año para acomodar a familias nuevas y sistema unificado, transparente y basado en fór-
reemplazar las viviendas obsoletas. Las cifras de mulas preestablecidas para la asignación de los
construcción por sobre este umbral, por ejemplo certificados creó confianza en el sistema, prote-
100 mil al año, contribuyen a mejorar las condicio- giéndolo de presiones políticas indebidas. Muy
nes de vida de las 800 mil familias que se estima importantes en la definición de la fórmula son los
vivían por debajo de un estándar mínimo habitacio- factores que miden las necesidades sociales (ta-
nal, 600 mil hogares compartiendo viviendas con maño de la familia, ingreso y necesidades habita-
otras familias y los otros 200 mil viviendo en casas cionales) y el compromiso de la familia de resolver
que requieren mejoramiento (McDonald 1994). su problema habitacional reflejado en su esfuerzo
Esta cifra meta de 100 mil unidades nuevas al año de ahorro (tiempo ahorrando y cantidad de aho-
ha sido sobrepasada durante los últimos seis años. rros). Este mecanismo ha demostrado ser efecti-
Estimaciones recientes indican que en 1998 los vo en seleccionar familias con necesidades habita-
14,8 millones de habitantes del país ocuparon 4,05 cionales apremiantes. A través de los años se han
millones de viviendas, vale decir una relación pro- perfeccionado los mecanismos de focalización re-
medio de 3,7 habitantes por vivienda, lo que repre- duciendo el rango de familias en condición de soli-
senta un mejoramiento significativo sobre las cifras citar subsidios para así dedicar más recursos a
del Censo de 1992 que arrojaron una relación de familias en los deciles más bajos de la escala de
4,1 persona por vivienda. distribución del ingreso.

Focalización de los recursos fiscales. Desde el Estudios realizados a mediados de los años no-
comienzo, el sistema de financiamiento habitacio- venta indican que los beneficiarios de los Progra-
nal se preocupó por focalizar los recursos fiscales. mas de Vivienda Progresiva y de Vivienda Básica
Antes de la reforma, los grupos de ingresos medio se ajustan a la distribución del ingreso del total de
y medio-alto recibían una cantidad desproporcio- los candidatos, lo que indica que el sistema está
nada de los subsidios gubernamentales, ya sea logrando equidad horizontal (ver tabla 3). La in-
como subsidios a las tasas de interés o por incum- formación que se detalla en la tabla muestra tam-
plimiento en el pago de los préstamos 17. La refor- bién las dificultades que enfrentan las familias de

17
De acuerdo a Castañeda (1990), en 1969 el 30% de las Aunque la administración de Allende (1970-1973) au-
familias más pobres recibió sólo el 22% de los subsidios mentó la construcción directa de viviendas para familias
habitacionales en tanto que el 30% de las familias en el de bajos ingresos, no eliminó los subsidios recibidos
grupo de ingresos medios recibió el 37% de los subsi- por las familias de ingresos medios a través de las hipo-
dios y el 40% restante recibió el 41%. Este cuadro no tecas financiadas por las Asociaciones de Ahorro y
cambió significativamente hasta la reforma de 1977. Préstamo.

16
ingresos más bajos para lograr acceso a estos pro- tales? han aprovechado esta oportunidad. Como
gramas. Los requisitos de ahorro impuestos por los lo demuestran las cifras, el sector privado ha ex-
programas dan lugar a una discriminación contra pandido su actividad en el financiamiento y la
las familias sin capacidad o disciplina de ahorro. construcción de viviendas. Debe hacerse hincapié
No obstante lo anterior, cabe destacar que la efi- en que esto no es resultado sólo de las reformas
caz focalización de los recursos fiscales y el nú- habitacionales. Como se indicara anteriormente,
mero de viviendas construidas constituyen los ma- las reformas financieras y las de la seguridad so-
yores logros de la política habitacional chilena. cial de comienzos de los años ochenta jugaron un
papel importante en fomentar la participación pri-

Tabla 3. Focalización de los programas de viviendas progresivas y básicas (en %)


Viviendas progresivas Viviendas básicas

Beneficiarios

Beneficiarios
Solicitantes

Aplicantes
Criterio Factor

Ingresos (a) Indigente 55,8 47,5 56,1 52,8

(b) Pobre 31,0 35,0 28,3 26,2

Bajos ingresos (a) + (b) 86,8 82,5 84,4 79,0

Ingresos no bajos 13,2 17,6 15,6 21,0


Situación Sin agua potable 55,9 66,7 44,3 60,1
habitacional
Sin alcantarillado 57,6 72,7 44,8 62,8

Sin electricidad 18,1 15,0 9,5 13,4

Techumbre deficiente 59,5 54,2 43,8 54,2

Pisos deficientes 45,7 39,1 38,7 39,5

Murallas deficientes 71,0 65,5 58,9 69,1

Fuente: MINVU (1995) citado por Rojas y Greene (1995)

Movilización de recursos financieros y empre- vada en el financiamiento habitacional, proporcio-


sariales privados. El hecho de que la interven- nando respectivamente las instituciones interme-
ción estatal en vivienda esté bien focalizada ha diarias y los fondos.
permitido que la significativa intervención pública
no desplace al sector privado. Más bien ha permi- Confianza sostenida en la política del gobier-
tido a las empresas privadas expandir su participa- no. El alto y sostenido volumen de viviendas pro-
ción en este sector. Empresarios privados, ? que ducido por el sistema habitacional chileno ha dado
compiten por capturar el mercado creado por los a las familias de escasos recursos la seguridad de
subsidios del Estado y la disponibilidad de finan- que una solución formal a sus problemas habita-
ciamiento a largo plazo en los mercados de capi- cionales está a su alcance. Esto explica los altos

17
niveles de participación en los programas de aho- miento, basada en un nivel estándar de subsidio
rro habitacional que requiere el sistema estatal de para un solo tipo de vivienda, impide que el sistema
subsidios y la ausencia de ocupaciones ilegales de ajuste los pagos al ingreso familiar. Resultado de
tierras después del retorno a gobiernos democráti- esto es que es altamente probable que el sistema
cos. no esté recuperando de los beneficiarios todos los
recursos que éstos puedan dedicar a vivienda.
DESAFIOS Esta falla de diseño se ve reforzada por la imposi-
bilidad del sistema de conseguir el pago completo
A pesar de sus muchos logros, la política habita- de los préstamos otorgados por el gobierno. Se
cional chilena tiene varias características que es- podría lograr mayor flexibilidad, pero a un cierto
tán afectando su capacidad de satisfacer efecti- costo. Se requeriría asignar más recursos a los
vamente una demanda creciente diversificada y de programas para familias de bajos ingresos de mo-
movilizar más recursos privados (especialmente do de permitir la diversificación de los tipos de vi-
de hogares de bajos ingresos). Asimismo, los en- vienda y mejorar su calidad. Los mayores subsi-
cargados de la política habitacional han mostrado dios podrían ser afrontados por una economía en
poca preocupación por su impacto urbano. Esta rápido crecimiento y el precio para el gobierno
omisión está afectando el logro de metas cuantita- tendría que pagar puede incluso ser menor si se
tivas y reduciendo el impacto de la política en el ajustan los préstamos a la capacidad real de pago
bienestar general de los beneficiarios. de los beneficiarios (y no un monto fijo del 35%) y
se elimina la morosidad de la cartera de présta-
Introducir más flexibilidad a los mecanismos mos. Los beneficios no sólo se sentirían en la ma-
de entrega de viviendas. Desde el comienzo, la yor satisfacción de los beneficiarios sino también
política habitacional ha centrado su atención en en la reducción del impacto urbano negativo al
lograr metas cuantitativas de construcción de vi- permitir soluciones de mayor costo que pueden
viendas nuevas. Esto induce al MINVU a con- construirse en terrenos más centrales.
centrarse en la minimización de costos, lo que lo
lleva a adoptar rígidos sistemas de producción para La falta de apoyo inicial de la política a la compra
las viviendas construidas por el gobierno18. Mo- de viviendas existentes impidió la transferencia
delos estandarizados de viviendas se reproducen fluida de viviendas económicas usadas disponibles
indefinidamente y se asignan a familias en muy en el mercado. Esto habría contribuido a una
diferentes etapas del ciclo familiar. Además, las asignación más eficiente del acervo de viviendas.
nuevas viviendas se localizan de acuerdo al precio Recientemente esta rigidez fue eliminada, por lo
del terreno sin atender a las preferencias de los que se espera una mejoría en el futuro. Sin em-
beneficiarios. A pesar de ser el urbanizador más bargo, la larga tradición de apoyo estatal a la pro-
importante del país, el MINVU aún no ha desa- piedad individual de viviendas, junto a los controles
rrollado un enfoque orientado a la demanda que le de arriendos que existieron por muchos años (eli-
permita ajustar mejor sus programas a las necesi- minados en 1979), ha limitado el desarrollo del
dades y a la capacidad real de pago de las familias mercado de arrendamientos, lo que ha desaprove-
que atiende. La rígida estructura de financia- chado otro mecanismo para la asignación eficiente
del acervo de viviendas. Esto ha dificultado la mo-
vilidad residencial. En Chile, las familias tienden a
18
El argumento del MINVU a favor de continuar la con- permanecer en la misma casa por la mayor parte
tratación directa de viviendas básicas y progresivas de su ciclo vital. Como resultado, no sólo los re-
está relacionado al costo. La contratación directa, con
cursos se asignan mal (las familias no ajustan los
pagos a los contratistas durante la ejecución permite al
Ministerio producir viviendas básicas de aproximada-
gastos de vivienda a sus necesidades) sino que la
mente 40m2 por un promedio de US$ 6.500 (US$ 165 por movilidad laboral también se ve afectada. Posibles
metro cuadrado), uno de los costos más bajos en Amé- soluciones a la escasez de viviendas económicas
rica Latina. de arrendamiento podrían incluir un fondo de ga-

18
rantía de arriendo patrocinado por el gobierno el reembolso a los bancos de los mayores costos de
que podría atenuar la renuencia de los inversionis- administración generados por los préstamos de
tas a construir viviendas económicas de alquiler. reducido monto demandados por estas familias,
debería ser suficiente para atraer a los bancos a
La movilización efectiva de recursos de vivien- participar en este mercado relativamente grande
das provistas por el gobierno. Los préstamos (40 mil préstamos al año de aproximadamente
directos del gobierno han demostrado ser inefi- US$ 2.500 cada uno). Con todo, el costo adicional
cientes y poco equitativos. La ineficiencia surge para el gobierno (seguros y mayores costos admi-
de su incapacidad para movilizar todos los recur- nistrativos) sería menor que el costo de la enorme
sos que estas familias podrían destinar a adquirir mora que afecta a la cartera de préstamo del
una casa. La falta de equidad se origina en la alta MINVU.
morosidad de la cartera fiscal en el Programa de
Vivienda Básica. Esto permite que las familias de La integración de las políticas habitacional y
relativamente mayor ingreso se beneficien de sub- de desarrollo urbano. El éxito cuantitativo de la
sidios cuyo valor monetario es mayor que el de política habitacional chilena está exacerbando una
aquellos recibidos por los beneficiarios de menores de sus mayores debilidades, su falta de preocupa-
ingresos del programa de vivienda progresiva. La ción por los impactos urbanos. La preocupación
baja recuperación de la cartera fuerza al gobierno dominante por aumentar el acervo habitacional
a financiar la mayoría de los subsidios con asigna- indujo al MINVU a dar prioridad al número de
ciones del presupuesto público anual. El flujo de viviendas construidas con los recursos disponibles
fondos de la gran cartera de préstamos acumula- en perjuicio de la calidad del ambiente urbano que
dos por el MINVU (más de 180 mil préstamos estaba construyendo con sus intervenciones. Este
solamente en los últimos siete años) podría propor- enfoque llevó a importantes pérdidas de terrenos
cionar recursos adicionales para financiar más agrícolas (producto del crecimiento horizontal de
subsidios y mejorar la calidad de las viviendas. La las ciudades) y a la creación de grandes barrios de
alta morosidad está obligando a los contribuyentes familias de bajos ingresos desprovistos de los equi-
a asumir toda la carga de los subsidios y perpetúa pamientos urbanos básicos.
la estrategia de minimización de costos que afecta
la calidad del acervo habitacional generado por El sistema habitacional se ha basado en la adquisi-
estos programas. La rigidez del sistema de entre- ción masiva de terrenos que efectuaron los em-
ga de viviendas también afecta a los beneficiarios presarios privados a fines de los años setenta; una
con mayor capacidad de pago, quienes podrían estrategia que se hizo posible gracias a la reforma
estar dispuestos a gastar más por viviendas de de las normas de incorporación de tierras a usos
mejor calidad, pero se ven forzados, con el arreglo urbanos. Las empresas constructoras y los urba-
actual, a aceptar las viviendas estandarizadas que nizadores compraron grandes extensiones de te-
provee el gobierno. rrenos agrícolas ubicados en la periferia de ciuda-
des importantes. Los terrenos fueron luego gra-
El financiamiento habitacional privado ha progre- dualmente subdivididos para satisfacer la demanda
sado lo suficiente en Chile como para poder cubrir creada por los programas de producción directa de
parte de las necesidades financieras de las familias viviendas del gobierno, los programas de subsidios
de bajos recursos. Una opción para iniciar la tran- y más tarde la creciente demanda por viviendas no
sición a un financiamiento totalmente privado sería subsidiadas. La liberalización en 1978 de las nor-
crear un fondo de seguros financiado por el go- mas de uso y subdivisión de tierras explican las
bierno para garantizar préstamos provistos por bajas distorsiones de precios inducidas por regula-
bancos privados a familias con ingresos bajo cierto ciones que se observan en la mayoría de las ciu-
monto. Este seguro, junto con procedimientos ex- dades de Chile. Esto facilitó la implementación de
peditos de ejecución de garantías hipotecarias y el

19
la política habitacional19. Sin embargo, la liberali-
zación también reduce los incentivos para hacer un Actualmente la política habitacional chilena se en-
uso más eficiente de tierras urbanizadas. frenta a un creciente déficit de tierras a precios
compatibles con los programas de gobierno21. El
Las empresas constructoras que poseen terrenos rápido agotamiento de terrenos urbanizados en la
urbanizables licitan contratos del gobierno para periferia de las grandes ciudades se ve exacerba-
construir casas para el Programa de Vivienda Bá- do por la falta de inversión en infraestructura pri-
sica y proveen casas dentro del marco de los dife- maria ocurrida durante los años de austeridad fis-
rentes programas de subsidio. Los terrenos con cal (1974-1994). Los niveles de inversiones en
las mejores características ambientales y ubicación infraestructura se están recuperando, pero no con
fueron usados para construir casas para el merca- la suficiente rapidez.
do del Programa de Subsidio Unificado. Los ur-
banizadores optaron por construir proyectos habi- Otro aspecto relacionado con el consumo de tie-
tacionales de baja densidad dado el menor costo rras es que la política habitacional chilena no pro-
de construcción de viviendas de uno o dos pisos mueve la renovación del centro de las ciudades.
frente a los topes de precios impuestos por los dis- El actual subsidio de renovación urbana, aunque
tintos programas de subsidio. Con densidades útil, no es suficiente para promover un proceso de
promedio de 250 personas o menos por hectárea renovación urbana significativo. Los urbanizadores
(el equivalente a 50 casas por hectárea), las 600 se ven considerablemente constreñidos frente a la
mil casas contratadas por el gobierno en el período fragmentada estructura de tenencia de la tierra
1974-1997 requirieron cerca de 12 mil hectáreas que caracteriza al centro de las ciudades. La le-
de terrenos urbanos (Rojas y Green 1995). Esto gislación urbanística en Chile no contiene disposi-
explica la conversión tan sólo en la Región Me- ciones que habiliten al gobierno a promover la re-
tropolitana de Santiago de más de 6 mil hectá- novación urbana, en particular la adopción de al-
reas de terrenos agrícolas para usos urbanos 20. A gunas de las medidas que ayudarían al proceso de
este total se debe agregar el consumo de tierras renovación, tales como el apoyo del gobierno para
por parte del Programa de Subsidio Unificado y la la consolidación de suelo, o la puesta en vigencia
demanda de los sectores de ingresos medios y de políticas que disuadan la retención especulativa
medio-altos. de tierras. Como resultado, la mayor parte del
desarrollo urbano tiene lugar en la periferia y
19
Indicadores del Banco Mundial/Habitat muestran que grandes porciones del centro de las ciudades que-
en Santiago, la relación entre el precio medio de terre- dan subutilizadas.
nos urbanizados en la periferia urbana y el precio medio
de terrenos no urbanizados es de 2,6. Al mismo tiempo, Equipamiento urbano en barrios de bajos in-
la relación entre terrenos no urbanizados con o sin per- gresos. Los proyectos de vivienda básica y vi-
miso de planificación es de 0,8. Por su parte, los permi-
vienda progresiva generalmente están agrupados
sos de planificación no demoran la ejecución de la ur-
banización ya que se obtienen en un promedio de sólo
en áreas donde el costo de la tierra es menor. En
tres meses (Banco Mundial 1994). las ciudades grandes generalmente se localizan en
20
La zona metropolitana de Santiago contiene, en la la periferia urbana, en las zonas menos deseadas
periferia del área urbana, algunas de las tierras agrícolas
más productivas del país. La concentración de buena
21
tierra agrícola hace muy importante este problema. Es- En 1995 los urbanizadores informaron que en el área
timaciones indican que en las cuatro décadas de rápida metropolitana de Santiago el costo del casco no urbani-
expansión urbana (1950-1990), Santiago consumió apro- zado representaba el equivalente del 20% al 25% del
ximadamente el 10% del total de tierras agrícolas de pri- costo final de las viviendas básicas. Esto no está de
mera clase que existían en el país. Desde 1990 a 1996 el acuerdo con la apreciación de los mismos urbanizadores
área urbanizada de Santiago creció en aproximadamente que argumentan que para obtener un 11% de utilidad en
2.000 hectáreas al año. las operaciones, el costo de la tierra no debería exceder
el 8% del costo total.

20
de la ciudad. Esto da origen a grandes barrios de
bajos ingresos en los cuales el reducido poder El sistema de transporte urbano, de propiedad y
comprador de la población impide que surjan ser- manejo privados, generalmente reacciona a la de-
vicios urbanos privados (educación, salud y re- manda creada por las nuevas vecindades. Las
creación), en tanto que el sector público responde bajas tarifas reguladas por el gobierno permiten
sólo en parte a estas necesidades. Por ejemplo, que familias de escasos recursos usen el servicio
los proyectos habitacionales del Estado incluyen pero fuerzan a los operadores a extender las rutas
una mínima infraestructura social, a lo sumo un para generar suficientes ingresos. Esto aumenta
lugar de reuniones y un pequeño campo de juegos el tiempo de viaje de la población que vive en la
para niños. Las municipalidades expanden la edu- periferia. En Santiago, el tiempo promedio de viaje
cación primaria y la infraestructura de salud con al trabajo era más de 50 minutos a comienzos de
subvenciones del gobierno central, pero no siempre los años noventa (Banco Mundial-HABITAT
están en condiciones de hacerse cargo pleno de la 1994) tiempo que probablemente ha aumentado
mantención y el manejo de los servicios con sus desde entonces.
ingresos corrientes. Hay dos razones para esto.
Una, que los bienes raíces implantados en sus te- El Estado se enfrenta al desafío de aumentar su
rritorios por los programas del MINVU están li- inversión en la calidad del ambiente urbano de los
bres de pago de impuesto territorial, en circunstan- barrios que ha creado con su política habitacional
cias en que este impuesto es la mayor fuente de para familias de bajos ingresos. Esto requiere
autofinanciamiento de las municipalidades. La mayor cuidado en la inversión, operación y mante-
otra, es que el gobierno central, el cual crea el nimiento de los servicios de educación, salud y
problema con su decisión de construir las viviendas recreación en barrios de bajos ingresos, ya que
en determinados municipios, no contribuye al costo éstos afectan enormemente la calidad de vida de
adicional de proveer los servicios. los hogares.

21
Lecciones de la experiencia chilena

La experiencia chilena proporciona una enorme cionado a un ritmo más lento del que esperaban los
cantidad de ideas para el diseño y ejecución de diseñadores de las políticas. Esto se debe en
políticas así como también lecciones respecto al parte a la inexperiencia inicial de los mercados de
costo, tanto en tiempo como en recursos, en que capitales. Después de casi veinte años, se ha
se incurre para lograr resultados. acumulado suficiente experiencia e información
actuarial para permitir que los valores hipotecarios
Un factor clave del éxito logrado por la política aumenten su participación en el mercado. Con
habitacional chilena en aumentar el volumen de todo, el progreso depende en gran medida de con-
producción y la focalización del gasto público fue diciones macroeconómicas favorables, tales como
el enfoque integral al sector habitacional adoptado baja inflación, tasas de interés estables, rápido
por los reformadores chilenos. La política resul- crecimiento de la economía y un aumento del in-
tante dio respuesta a todos los segmentos del mer- greso de los hogares.
cado habitacional. Esto permitió la focalización de
recursos estatales en los hogares de bajos ingresos La privatización de la producción y del financia-
y la incorporación de la capacidad de financia- miento habitacional se produjo en forma lenta en
miento y construcción del sector privado a la solu- Chile. Sólo a mediados de los años noventa —
ción de los problemas habitacionales. después de casi una década de constante
crecimiento económico— se logró un nivel de
Los resultados obtenidos en Chile son consecuen- construcción con financiamiento privado
cia de desarrollados interrelacionados en varios comparable al de la producción habitacional con
sectores que ocurrieron a lo largo de un extenso ayuda del Estado. El mejoramiento en los ingresos
período de tiempo. La puesta en práctica de as- familiares dio fuerzas a esta expansión. El
pectos claves de la reforma del sector habitacional crecimiento de la producción privada de viviendas
de 1978 fue posible gracias al nivel de desarrollo se vio apoyado también por la demanda estable
alcanzado por la legislación e instituciones del generada por los subsidios habitacionales emitidos
sector habitacional y de desarrollo urbano, a su vez por el gobierno. Lo predecible de la demanda
el resultado de más de 50 años de preocupación permitió a los promotores inmobiliarios programar
estatal por estos temas. Este es el caso del siste- las inversiones y especializarse en segmentos
ma de certificados de subsidios, cuyo éxito des- específicos del mercado, aumentando la eficiencia
cansa en el eficiente y probo funcionamiento de la en un ambiente muy competitivo.
burocracia estatal. El notable avance logrado en La significativa acción pública que ha existido en
el financiamiento habitacional privado es resultado la política habitacional en Chile no desplazó al
de las reformas introducidas a los sistemas de in- sector privado. Por el contrario, al proveer subsi-
termediación financiera y de la seguridad social, dios bien focalizados para fomentar la demanda y
las que consolidaron bancos sólidos y acumularon al introducir reformas financieras y de la seguridad
recursos de inversión de largo plazo en fondos de social, el gobierno creó las condiciones para ex-
pensiones y compañías de seguros de vida. Las pandir la participación privada en el financiamiento
instituciones nacidas de estas reformas, que han y la producción de viviendas. Sin embargo, la in-
operado en un ambiente de estabilidad macroeco- corporación del sector privado ha sido lenta y sólo
nómica, han sido claves para obtener los niveles de despegó en la segunda mitad de los años noventa
participación privada que existen hoy en el finan- después de varios años de estabilidad macroeco-
ciamiento habitacional. Sin embargo, el desarrollo nómica y alto crecimiento económico y de los in-
de mercados secundarios para hipotecas ha evolu- gresos. Esto revela que la política habitacional no

22
puede por si sola asegurar los resultados observa- chilena. La excesiva confianza en los mecanismos
bles en Chile, sino que requiere reformas en los automáticos de ajuste del mercado explica la
sectores afines además de condiciones macroeco-
nómicas favorables. renuencia inicial de usar medidas proactivas de
regulación urbana. La obsesiva preocupación por
Los sistemas de producción y financiamiento ha- aumentar el número de viviendas financiadas con
bitacional de Chile parecen hoy innecesariamente una determinada asignación presupuestaria explica
rígidos. Las etapas iniciales de ejecución, que pu- la reticencia posterior para incorporar cualquier
sieron énfasis en aumentar el número de viviendas medida de mejoramiento urbano que implicara una
construidas, introdujeron tanto rígidos límites de mayor carga sobre el presupuesto público de vi-
costo (y por extensión del diseño) para las vivie n- vienda. Como resultado, el gobierno está afron-
das subsidiadas como procedimientos estrictos de tando cada vez mayores restricciones de disponibi-
entrada al sistema. Estas rigideces, que en las lidad de suelo para poner en práctica su programa
etapas iniciales probablemente fueron considera- habitacional y la calidad de vida de los beneficia-
das una tolerable distorsión a la asignación de re- rios de viviendas construidas por el gobierno y con
cursos por el mercado, pueden no ser eficientes en ayuda gubernamental va deteriorándose. A la luz
la actualidad dado el progreso logrado en el finan- de esta experiencia, es difícil abogar por la inde-
ciamiento y la producción privados. La introduc- pendencia de las políticas habitacionales y de de-
ción de más flexibilidad en el Programa de Vivie n- sarrollo urbano. Por el contrario, son sólo dife-
das Básicas, ? por ejemplo permitiendo rangos de rentes aspectos de la solución a un mismo proble-
precio más amplios en la oferta de viviendas y la ma, el de la calidad de vida de la población. La
introducción de un financiamiento privado respal- clave para mejorar la eficiencia en la asignación
dado por el gobierno y más a tono con la capaci- de terrenos urbanos es asegurar que los mercados
dad real de pago de los hogares? debería proveer proporcionen a los urbanizadores señales correctas
un incentivo para que urbanizadores privados pro- respecto al costo del desarrollo periférico de baja
duzcan para este segmento del mercado. La pro- densidad. El apoyo del gobierno en la renovación
ducción privada diversificará el tipo de viviendas de terrenos céntricos es muy importante también.
ofrecidas permitiendo así una mayor libertad de No analizaremos aquí las diferentes medidas para
elección para los beneficiarios. La falta de apoyo fomentar estos objetivos puesto que han sido dis-
inicial que experimentó la compra de viviendas del cutidas ampliamente en la literatura especializada.
acervo (justificada por la noción de que construir
viviendas nuevas promueve el crecimiento econó- La ejecución de políticas habitacionales y de desa-
mico) retardó innecesariamente el desarrollo del rrollo urbano integradas requiere una estrecha co-
mercado de viviendas existentes. De igual mane- laboración entre el sector público y el privado.
ra, el énfasis puesto en viviendas de propiedad Para fomentar esta colaboración se requiere un
individual retardó el desarrollo de las viviendas de ambiente institucional que valore y aproveche ple-
alquiler; un segmento muy importante del mercado namente los papeles particulares y complementa-
que otorga flexibilidad a las familias para ajustar su rios que cada sector es capaz de jugar. Esto ne-
consumo de vivienda a los cambios en la estructu- cesariamente lleva a mecanismos de producción y
ra familiar y además fomenta la movilidad geográ- financiamiento habitacional más complejos de los
fica. Asimismo, políticas habitacionales bien con- que existen en Chile hoy. La política habitacional
cebidas deben incluir mecanismos que promuevan chilena en forma muy esquemática separó las fun-
la conservación y adaptación de las viviendas ciones públicas y privadas y los objetivos de la po-
existente, aspecto nunca abordado por la política lítica habitacional de los de la política de desarrollo
habitacional chilena. urbano. Esto condujo a una situación en la cual el
éxito de la política habitacional en producir vivie n-
La falta de interés por el impacto urbano es uno de das y atraer inversiones privadas se ha convertido
los mayores defectos de la política habitacional en el fracaso de los objetivos del desarrollo urbano,

23
el de asegurar buenas condiciones de vida para la
población.

24
Referencias

Banco Mundial-HABITAT. 1994. Housing Indicators. Washington D.C.: Banco Mundial.

Banco Mundial. 1997. Chile. Poverty and Income Distribution in a High-Growth Economy 1987-
1995. (Informe 16377-CH) Washington D.C.: Banco Mundial.

Banco Mundial. 1999. World Development Report 1998-99, Washington D.C.: Banco Mundial.

Bravo, L. y Martinez, C. (Eds). 1993. Chile: 50 Años de Vivienda Social. 1943-1993. Valparaíso:
Universidad de Valparaíso.

Bravo, L. 1993. Retrospectiva de 50 Años de Vivienda Social, En Bravo, L. y Martinez, C. (eds), Op. cit,
págs. 3-72

Castañeda, T. 1990. Para combatir la pobreza. Santiago: Centro de Estudios Públicos.

Fadda, G. y Ducci, M. E. 1993. Politicas de desarrollo urbano y vivienda en Chile. Interrelaciones


y efectos. En Bravo, L. y Martinez, C. (eds) Op. cit, págs. 74-111.

MacDonald, J. 1994. ¿Cuantas casas faltan? El déficit a nivel nacional y regional. Documento de
Trabajo No. 16-94, Santiago: Corporación de Promoción Universitaria.

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(mimeo)

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tiago, Chile

Necochea, A. 1987. Los allegados: una estrategia de supervivencia solidaria en vivienda, Revista EURE
13-39, págs. 85-99

Pardo, C. 1998. Housing Finance in Chile. The Experience of Primary and Secondary Mortgage Finan-
cing. Informe presentado en la Conferencia “The Development of Mortgage Securitization in La-
tin America and the Caribbean” organizada por el Banco Interamericano de Desarrollo, Wa-
shington, D.C., novie mbre 2-3, 1998.

Rojas, E. y Greene, M. 1995. Reaching the poor: lessons from the Chilean housing experience. Envi-
ronment & Urbanization, 7-2, págs. 31-49

25
ANEXO  El sistema de subsidios habitacionales chileno
PROGRAMA BENEFICIARIOS CARACTERÍSTICAS DE LA PRECIO FINANCIAMIENTO
Tipo Ingresos VIVIENDA Subsidio Ahorros Préstamos
Anuales
US$ US$ US$ % US$ % US$ %
Vivienda progresiva Hogares con 0 Terrenos urbanizados de 100 m 2 4.200 3.960 94 240 6 N/A
necesidades 100 con un núcleo básico con baño,
extremas y muy poca cocina y una habitación
capacidad de ahorro 2.100 1.050 50 150 7 900 43
Vivienda Básica Arrendatarios u 101 Vivienda nueva de 40 m 2 con 6.900 4.200 61 300 4 2.400 35
hogares 220 terminaciones básicas. Viviendas
compartiendo de 1 o 2 pisos o departamentos en
vivienda y con algún edificios de 3 o 4 pisos.
ahorro
Programa Especial de Trabajadores 221 Viviendas nuevas de 40 - 50 m 2, 12.000 2.700 23 300 3 9.000 74
Trabajadores organizados con 419 viviendas de 1 o 2 pisos o
salarios estables y departamentos en edificios de 3 o
capacidad de pago 4 pisos.
Subsidio rural Hogares rurales N/A Casas nuevas en tierra propia o 7.800 4.500 58 150 2 3.150 40
propietarios de suelo villorrios agrícolas. 12.000 6.000 50 300 3 5.700 47

Subsidio unificado I Hogares dispuestos 221 Viviendas económicas, nuevas o 15.000 3.600 24 1.500 10 9.900 66
a comprar viviendas 419 usadas, urbanos o rurales 3.300 22 10.200 68
producidas por el Construcción de vivienda nueva en 3.000 20 10.500 70
Subsidio unificado II sector privado, con 420 lotes de propiedad de beneficiario 30.000 3.000 10 3.000 10 24.000 80
ahorro y acceso a 900 2.700 9 24.300 81
crédito hipotecario 2.400 8 24.600 82
Subsidio unificado III otorgado por bancos 901 45.000 2.400 6 4.500 10 38.100 84
privados 1,680 2.100 5 38.400 85
1.800 4 38.700 86
Renovación urbana Hogares dispuestos 420 Viviendas económicas, nuevas o 15.000 6.000 40 1.500 10 7.500 50
a comprar viviendas 1,680 usadas (reparadas o mejoradas). 30.000 5.700 19 3.000 10 21.300 71
en áreas de Construcción de vivienda nueva en 45.000 5.400 12 4.500 10 35.100 78
rehabilitación urbana lote de propiedad de beneficiario.
"Leasing" habitacional Hogares dispuestos 420 Contratos de acuerdo con 45.000 Como en el caso de subsidio Unificado I, II, III, los
a arrendar con 1,680 compromiso de compra pagables subsidios son pagados en 240 cuotas, la diferencia de
compromiso de en 240 cuotas. precios a ser pagado por el beneficiario.
compra

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