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Presentado por.
Instructor
Regional Santander
Agosto 01 de 2019
Este manual ofrece una orientación hacia el control adecuado de trabajos de construcción
que permitan mitigar impactos negativos en las vías, que corresponden a deformaciones
o movimientos naturales de las estructuras que conforman las carreteras de nuestro país,
o por consiguiente de desestabilizaciones de superficies inclinadas naturales como lo son
los taludes, rocas o algún otro tipo de formación geológica que son adyacentes a este
tipo de obras, en este documento se pudo evidenciar las diversas particularidades y
fundamentos transcendentales, que ordenan gran interés en ser tenidas en cuenta en el
desarrollo de las valoraciones con criterio, que permiten garantizar la condición final de
los procesos constructivos que trataran de disminuir los riesgos de derrumbes,
deslizamientos o algún otro fenómeno que altere el funcionamiento idóneo de la
infraestructura vial.
Las diferentes características que los movimientos de suelos adyacentes a una vía nos
muestran durante su proceso de traslación, derrumbamiento o flujo, son aspectos que
nos dan indicios, de lo que pueda estar sucediendo en estas masas de suelo o roca, por
lo cual es necesario profundizar con estudios geológicos para llegar con precisión y
criterios en la toma decisiones en cuanto a las obras que se ajusten más a la solución de
la inestabilidad. Por otro lado, es importante comprender los procesos de inspección y
control de las obras de pavimentación, ya que, por consiguiente, los comportamientos de
los taludes próximos igualmente afectan a la estructura de los pavimentos, por lo tanto,
hay que determinar los componentes inherentes en la apreciación de dichos taludes, con
el objeto de referir las eventuales causas directas de las fallas que se presentan en esas
masas de suelo, que pueden resultar por fallas geológicas, niveles freáticos, efectos
antropogénicos, sísmicos, climatológicos entre otros.
Las inestabilidad de los taludes, adyacentes a las vías deben contar con los drenajes que
permitan, evacuar esas aguas de escorrentía que provienen desde la corona del talud
hasta su base, o por otro lado los fluidos que provienen del interior, que afloran entre el
talud, la elaboración de cunetas, subdrenes, filtros son obras de drenaje superficial,
semiprofundas y profundas, que permiten que las presiones hidrostáticas disminuyan,
evitando moderar el empuje que genera esa masa de materiales saturados, hacia los
elementos de contención que son construidos para contrarrestar esos esfuerzos activos,
ninguna obra garantiza una función correcta si previamente no se considera estas obras
de drenaje, que son parte fundamental en el desarrollo de casi cualquier obra de
estabilización.
BIBLIOGRAFIA