MONICIÓN DE ENTRADA

Queridas hermanas, profesores, compañeras y compañeros: Nos hemos reunido para

celebrar juntos el gozo y la alegría de SABER y SENTIR que Dios mismo en forma de NIÑO
nos visita. Se ha hecho pequeño, para pasarla con nosotros, para ser la solución a nuestros
problemas, la alegría en nuestras penas, la fortaleza en nuestra debilidad, el Amigo en todos
los momentos de la vida. No podemos estar tristes, estrenemos optimismo, no temamos,
Jesús está con nosotros. Comencemos la Eucaristía con mucha atención, El Niño que viene,
HABLA y trae un mensaje para cada uno.

UNA MONICIÓN PARA TODAS LAS LECTURAS

La Palabra de Dios nos pide que estemos preparados para acoger la Buena Noticia de la
salvación de Dios. Escuchemos a Dios que nos va a hablar.

PRIMERA LECTURA: Sof. 3, 14-18ª (el Señor se alegrará en ti)

El canto jubiloso del profeta Sofonías, anuncia la restauración de Jerusalén. El profeta ve a
Jerusalén libre de su condenación. Escuchemos.

SEGUNDA LECTURA: Fil.4, 4-7 (Estén siempre alegres en el Señor; Él está cerca)
La exhortación de San Pablo a los filipenses, nos permite continuar celebrando una liturgia
alegre. El cristiano vive la alegría de un mundo nuevo. La certeza de la venida del Señor
debe quitarnos toda inquietud. Presten atención.

EVANGELIO: Lc 3, 10-18 (¿Qué hemos de hacer?)

San Lucas, nos trasmite las normas de conducta que San Juan Bautista presentaba para
recibir la inmensa alegría del perdón y las promesas mesiánicas. Para encontrarse con Jesús
no hace falta huir del trabajo, ni de la vida diaria. La alegría cristiana consiste en compartir
con el prójimo lo que hemos recibido de Dios. De Pie por favor, para escuchar la Buena
Nueva, pero antes entonemos el Aleluya.

PETICIONES
1. Jesús, TÚ sabes que hoy día, casi todo el mundo, anda con el móvil. Nos llegan
muchísimos mensajes, pero casi nunca vemos o escuchamos los tuyos.
 -Te pedimos oídos atentos a tu voz para todos, para el Papa, los obispos, los
sacerdotes y para todos nosotros.
TODOS: QUE ESCUCHEMOS TU VOZ, SEÑOR

2. Jesús, Tú has dicho que estás en los pobres, en los necesitados, en los que sufren y
a veces los tenemos muy cerca.
-Te pedimos ojos para verte en los demás y no pasar indiferentes a su lado.
TODOS: QUE SEPAMOS VERTE EN LOS DEMÁS

3. Jesús, solo por AMOR, tú que eres el rey y dueño de todo el mundo, vienes a
nosotros lo más sencillo y humilde que puedes, para enseñarnos cómo tenemos
que ser, cómo tenemos que amar.
-Te pedimos, comprender la verdadera grandeza del hombre que es AMAR y
SERVIR.
TODOS: QUE SEAMOS SENCILLOS Y AMOROSOS COMO TÚ

4. Jesús, los ángeles te anunciaron en Belén a los pastores.

-Te pedimos ser ángeles que con nuestra vida digamos a todos que hay que
confiar, porque Tú estás entre nosotros.
TODOS: QUE SEAMOS ÁNGELES QUE TE ANUNCIEN

OFERTORIO
Es el momento de ofrecer a Dios Padre con Jesús, lo mejor de nuestras vidas y todo
lo que somos y tenemos.
1. OFRECEREMOS UN MÓVIL Para que, desde hoy los mensajes más
importantes para nosotros, sean los tuyos.
2. OFRECEREMOS UNA HUCHA (alcancía) Para que Tú seas nuestra principal
riqueza y compartamos lo que tenemos con los necesitados.
3. OFRECEMOS PAN Y VINO Que se convertirán en tu cuerpo y sangre para ser
nuestra fortaleza y felicidad.

ACCIÓN DE GRACIAS
El primer regalo de Navidad, nadie lo envolvió, ni le hizo reverencias, no fue comprado por
Internet, ni en comercio alguno.
El primer regalo de Navidad, fue algo muy sencillo, un don muy sagrado. No fue oro, ni
incienso, ni mirra. Fue un regalo de Amor, de paz, de esperanza, dado por un padre a todos
sus hijos, porque de tal manera amaba Dios al mundo y tanto te amaba a Ti, a Ti y a cada
uno de nosotros que nos dio a su Hijo. Él es la Navidad, Jesucristo. Él es el regalo para esta
Navidad.
Descubre el regalo, acógelo en tu corazón, disfrútalo. Demos gracias en nuestro corazón
por este regalo que es Jesús y se nos da en cada comunión.