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Origen de la teatralidad

Algunos conceptos

El teatro y el rito son manifestaciones humanas, que hasta ahora han sido, muchas
veces, claramente diferenciadas. Antes de poder afirmar o refutar estas diferencias es
necesario pensar si podemos acercarnos a aquello que dio origen a estas manifestaciones
culturales y el porqué surgieron. Para ello existen una serie de conceptos que es importante
conocer para poder entender mejor lo que referiremos a lo largo de todo el texto.
El Teatro es el arte de la representación; se apoya en las demás artes,
ciencias y actividades humanas para existir1, en un tiempo y lugar definidos. Es un arte
efímero, así que nada de lo que suceda durante la función podrá repetirse, ninguna
emoción, aplauso, ni siquiera las acciones de los actores en escena. Desde el principio hasta
el final de la representación se confrontan los actores y espectadores creando una situación
especial2 e imposible de duplicar, aún para aquellos que estudian la puesta en escena a
partir de fotos o video.
De acuerdo con algunas fuentes, la palabra teatro proviene del griego theastri,
mirar3 o del término griego theatron, derivado del verbo theámai, ver, contemplar4. Hasta
finales del siglo XIX en Alemania y otras partes del mundo el teatro era una actividad
elitista, para la burguesía culta, mas Herrmann, Niessen y Kutscher, entre otros,
contribuyeron a crear una visión más amplia del teatro, prestando atención a los rituales,
fiestas y otros tipos de representaciones que hasta ese momento habían sido discriminadas
por completo dentro de la definición de arte teatral5.
El rito, por su parte, es la más antigua manifestación del fenómeno representacional,
una de las primeras formas de comunicación dentro de una comunidad. Surge como algo
inevitable, como un medio para unir a un grupo social y poder sobrevivir6.

1
Sarah Bernhardt , El arte teatral, Nicolás Olivari (Pról.), Anaconda, Buenos Aires, p. 17.
2
Erika Fischer-Lichte, Op. Cit.
3
Antonio Prieto Stambaugh y Yolanda Muñoz González, El teatro como vehículo de comunicación, Trillas,
México, 1992, p. 21.
4
César Oliva y Francisco Torres Monreal, Historia básica del arte escénico, Cátedra, Madrid, 1990, p. 13.
5
Erika Fischer-Lichte, Op. Cit.
6
Antonio Prieto, Op. Cit., p. 13.
2

Ningún ser viviente se salva de los ritos, inclusive los animales tienen los suyos 7 y
hacen teatro, pues el mimetismo, el juego 8, los cortejos, entre otros, son ya actividades
rituales 9 . En el caso del ser humano los rituales son especiales, pues cuentan con la
manipulación de los elementos culturales, creando símbolos y conceptos abstractos. De este
modo, al significar, el rito comunicará con las convenciones que ha creado, en el lugar y
grupo social específico10.
El rito surgió de una necesidad comunicativa, para mostrar deseos, inquietudes,
miedos y afectos. Lo creó el ser humano indefenso frente a la naturaleza, mágica, dadivosa
y hostil. Surgió cuando la humanidad empieza a divinizar los elementos de la naturaleza, a
los que quiere comunicarles sus deseos y gratitudes, pero al ser éstos más poderosos que e
imponentes se necesitaba una manera especial de acercarse a ellos, por lo que el contacto se
realizó en comunidad. Se crearon máscaras que pudieran dar una fuerza y poder especial al
que la portaba, danzas11 y ritmos dedicados a los dioses; olores, sonidos, disfraces12, con
los que el portador desarrollaba los movimientos y actitudes del elemento, animal o dios;
emociones, que todo el grupo creaba.
En las diferentes tribus, además de los ritos, empiezan a formar ceremonias y otras
formas de expresión, dando origen a la teatralidad, al incorporar elementos simbólicos e
inventar formas dramáticas con un sentido metafísico13.
El rito fue la mejor manera de crear lazos entre la comunidad, reforzar su
cosmovisión, crear un vínculo entre lo sagrado y lo profano y una fuerte armonía con la
naturaleza.14 El individuo miraba hacia su interior y exterior, se creaba una introspección
que no lleva a la soledad, sino que hacía verse y ver a los otros, danzar y cantar en armonía
con el prójimo15.
Sin embargo el rito evolucionó y al ir perdiendo su sentido místico dio lugar a la
representación escénica. Cuando el tono mágico del rito se debilitó y las creencias que lo

7
Idem.
8
Nicolas Evréinoff, Le théâtre dans la vie (en: Robert Pignarre, Historia del teatro, EUDEBA, Buenos Aires,
1970, p. 9.).
9
Cabe aclarar que todo ritual puede evolucionar y cambiar el fin para el que fue creado.
10
Antonio Prieto, Op. Cit., p. 14.
11
César Oliva, Op. Cit., p. 12.
12
Gaston Baty y René Chavance, El arte teatral, FCE, México, 1993, p. 9.
13
César Oliva, Op. Cit., p. 12.
14
Antonio Prieto, Op. Cit., p. 14.
15
Ibid., p. 48.
3

formaron perdieron dominio, el rito se gastó, entonces nació el actor de la degradación de


esa magia sagrada, mas como fue necesaria la práctica, las fiestas continuaron 16. Del rito
surgió el teatro.
La teatralidad es la serie de manipulaciones que se producen para hacer relación
entre un espacio ficcional con otro real, en el que los receptores se encuentran, dispuestos a
aceptar dicha relación17. Cito a continuación un poco de lo que refiere Erika Fischer-Lichte
sobre la teatralidad:

[…] Teatralidad significa aquí la totalidad de todos los materiales y sistemas de signos que
se aplican en una representación teatral y que constituyen la singularidad de la puesta en
escena, esto es la organización específica del movimiento corporal, de la voz, los sonidos,
tonos, luz color, ritmo, etc. 18 […] Nikolai Evreinov la define como “ley de carácter
obligatorio y general de la transformación creativa del mundo percibido”19.

Originalmente el teatro era un juego social, de todos para todos20, su esencia reside
en la ceremonia, en la que alguien oficia (los comediantes por ejemplo) entre y a los
espectadores. El teatro y el rito eran una misma cosa. Ambos, en un principio, dieron origen
a la teatralidad, característica que aún hoy los acompaña como un obligatorio (sin la
necesidad de una clasificación).

16
Robert Pignarre, Op. Cit., p. 10- 11.
17
César Oliva, Op. Cit., p. 13.
18
Erika Fischer-Lichte, Op. Cit.
19
Nicolai Evreinov, Teatr dlja sebja parte I, San Petersburgo, 1915 (en: Erika Fischer-Lichte, Op. Cit.)
20
Erika Fischer-Lichte, Op. Cit.
4

Formas teatrales
Algunos ritos y ceremonias

Rito y teatro eran una misma cosa, cuando aún no perdía fuerza el carácter sagrado
y anterior a que se crearan nombres y categorías. El fenómeno representacional se ha
creado como una necesidad, a través de los tiempos, de modo que en diferentes partes del
mundo los rituales surgieron, en formas distintas, con códigos e historias particulares. El
acercarse a algunas manifestaciones representacionales, hace pensar que muchas pueden ser
consideradas teatro.
Algunas representaciones aún tienen lugar en las fiestas de las comunidades y
pueblos, otras se perdieron en el tiempo, dejando su huella plasmada en distintos
documentos humanos y existen las que permanecen en la memoria de los que tuvieron la
oportunidad de verlas21. Pese a ser representaciones teatrales, muchas de ellas siguen siendo
llamadas acercamientos al teatro o formas preteatrales, por seguir consagradas a los dioses,
por no cumplir con los cánones 22 , ni tener influencia de las formas europeas (griegas
principalmente).
El teatro griego, del que los textos dramáticos y Aristóteles dan testimonio, es la
evolución del rito ditirámbico, en el que los fieles a Dionisios se contorsionaban, danzaban
y formaban parte de la mímesis extática y la purificación catártica 23 . Sin embargo las
personificaciones de Pan y los sátiros, que acompañaban al dios, con sus danzas fálicas,
pieles, antorchas y cantos, cambiaría cuando alguien sobre el altar refirió la leyenda
divina 24 , cuando la tragoedia (canto del cabrón) 25
empezó a combinar los temas
dionisiacos con otros mitos y finalmente cuando los temas fueron de lo divino a lo
humano26.

21
Dado que estas manifestaciones siguen evolucionando, hoy muchas perecieron en el camino o cambiaron
por completo, y sólo algunas personas, por lo general ancianos, y en algunos casos los videos, escritos o
fotografías, pueden contar cómo se llevaban a cabo las fiestas y su preparación.
22
Creados, principalmente desde el Renacimiento, con base en la poética de Aristóteles, los textos
dramáticos clásicos y la idea que desarrollaron los eruditos de cómo pudo haber sido el teatro griego.
23
César Oliva, Op. Cit., p. 32.
24
Gaston Baty, Op. Cit., p. 22.
25
Robert Pignarre, Op. Cit., p. 13.
26
Gaston Baty, Op.Cit., p. 23.
5

La celebración dejó el bosque para pasar a espacios especiales para las


celebraciones, lugares que delimitaban espacios destinados al público, el coro y los
personajes27; se crearon concursos dramáticos y reglas para los textos (tragedias, comedias
y dramas satíricos). No obstante, como bien menciona Baty, aquellas fiestas nunca dejaron
de ser consideradas ceremonias religiosas y los concursos, obras y espacios, parte del
culto.28
La necesidad de representar la propia cosmogonía dio origen a los ritos, que en
cierto grado de evolución pudieron cambiar de nombre, por ejemplo en Grecia, teatro. Pero
así como los griegos dieron importancia y cambio a ciertos aspectos en las
representaciones, otros pueblos pudieron crear sus propios cánones y reglas, erigiendo su
teatro, sin depender de la influencia de Sófocles o Eurípides. De hecho Grecia compone su
teatro a partir de las representaciones e influencias cretenses y egipcias.
Creta construyó estadios, anfiteatros, dio lugar a concursos gimnásticos y musicales,
y ritos en los que los coribantes29 participaban, acompañados de instrumentos y figuras
dancísticas30, – que los griegos tomaron como ideas para elaborar sus propias creaciones.
El pueblo egipcio, por su parte, se consagró a su magia funeraria y los misterios de
Osiris. Representaban a los vientos, la vida diaria, costumbres y hechos sagrados. La más
famosa de las representaciones31 estaba dedicada a Osiris. Para la celebración, los actores
llevaban adornos corporales, pelucas, trenzas y anilina en los ojos 32 ; los sacerdotes
personificaban a la familia del dios: Shu, Geb (padre y abuelo de Osiris), Horus (hijo),
Anubis, Thot y los hijos de Horus. Entre los personajes femeninos se encontraban Isis,
Neftis y otras deidades 33 . El centro de la celebración eran los rituales de la muerte,
resurrección y entrada de Osiris al templo34. En la celebración no sólo los actores tenían

27
Antonio Prieto, Op. Cit., 20.
28
Ibid., p.25.
29
Gaston Baty, Op. Cit., p. 21.
30
Robert Pignarre, Op. Cit., p. 14.
31
César Oliva (Op. Cit., p. 21.) menciona que las representaciones duraban ocho días, correspondientes a
cada uno de los actos de la obra, mas Baty (Op. Cit., p. 19.) dice: “el drama entero, que finalizaba con la
resurrección de Osiris, se dividía en veinticuatro escenas (una hora)”.
32
César Oliva, Op. Cit., p. 21.
33
Gaston Baty, Op. Cit., p. 19.
34
César Oliva, Op. Cit., p. 21.
6

una participación importante, sino también el coro de plañideras35, los recitadores de los
poemas y los músicos.36
Además se han encontrado libretos egipcios, por ejemplo sobre la muerte de Horus,
en el que la evolución dramática es claramente visible, pues ya no hay recitador junto a los
actores, sino que estos dialogan mientras representan, entran y salen del escenario. Se
divide en tres episodios, separados por danzas y declamaciones líricas37.
Pero no sólo tienen méritos aquellos que influenciaron al teatro griego, sino, de
igual forma, los pueblos lejanos o totalmente distantes que concibieron formas de
representación, en tiempos similares o alejados por los siglos; como el desarrollo del teatro
en América, que acompañó, a modo de elemento ritual, las ceremonias teocráticas de
diferentes pueblos.
En el mundo inca el teatro era escrito en lengua quechua, estaba destinado a la
creación de loas para los gobernantes. 38 De los mayas-quichés también se conserva un
texto, el Rabinal Achí, obra originalmente musical, que narra la captura, interrogatorio y
muerte de un guerrero por cometer actos reprobables 39 . Pero no todas las expresiones
teatrales eran escritas, pues el teatro náhuatl utilizaba las herramientas del espectáculo
audiovisual, sin la necesidad de un texto para crear teatro de tipo ritual y profano
(Cuecuechcuicatl). Existía una educación estética para el teatro ritual, misma que tenía
lugar en el Cuicacalli o Cuicacalco, escuela mixta en la que se impartían el canto y la
danza para las representaciones 40 . Los teotihuacanos y olmecas dejaron vestigios de
plataformas, llamadas momoztlis, utilizadas exclusivamente para las representaciones
escénicas. En Teotihuacán, estos testimonios del teatro ritual, tienen una superficie de 400
metros cuadrados41.

35
Plañidera (según la Enciclopedia Salvat, Diccionario, Tomo 10, 1976, p. 2658.): mujer llamada y pagada
que iba a llorar en los entierros. Se hace mención de estas mujeres desde la más remota antigüedad.
||Plañidero: Lloroso, lastimero. || Se menciona en el texto de Baty (Op. Cit., p.19) que los personajes
femeninos “a veces hacían el papel de plañideras”.
36
Gaston Baty, Op. Cit., p. 19.
37
Gaston Baty menciona que “mil años antes de Esquilo, el teatro Egipcio alcanza la cúspide misma de la
tragedia esquiliana” (Op. Cit., p. 20).
38
Antonio Avitia, Teatro para principiantes, Pax México, México, 1996, p. 181.
39
Ibid., p. 182.
40
Ibid., p. 181 – 182.
41
Ibid., p. 181.
7

A causa de la Conquista, en México desapareció toda la producción teatral náhuatl y


buena parte de la perteneciente a otras regiones del país42. Los frailes evangelizadores, dice
Antonio Prieto, al ver la cruz – que aquí significaba los cuatro rumbos del universo – lo
tomaron como una prueba de que el mensaje de Cristo había llegado hasta esas tierras 43, y
conjuntamente les fue fácil sustituir el teatro ritual indígena por el evangelizador de la Edad
Media, incluso se tradujeron autos sacramentales al náhuatl, zapoteco, tarasco, maya y
demás lenguas indígenas – que aún hoy se representan - 44.
El drama litúrgico medieval, mismo que sustituyó al teatro indígena de América, fue
también un evento ritual, que recordaba mitos del cristianismo (cosmogonía), con cantos,
una breve historia y una representación acompañante de la celebración ceremonial. No
había foros teatrales pero sí la necesidad de transmitir la información religiosa de manera
representacional 45 . El teatro medieval, culto, tuvo influencia de las formas dramáticas
griegas, habiendo inclusive un teatro de tipo erudito46, pero la ritualidad se ajustó a las
necesidades de la época y el lugar, siendo creaciones distintas y únicas.
Tenemos más ejemplos del fenómeno representacional en los países de Oriente, en
los que el arte se formó a partir de un universo mitológico47.
En China el teatro buscó mostrar el curso de los astros, en forma de ballets 48, aún
guarda sus representaciones con marionetas y la increíble preparación actoral. En ésta,
desde tiempos milenarios debían de tener el conocimiento de los elementos expresivos,
como la danza, pantomima, acrobacia y canto. Para lograrlo, el duro entrenamiento
empezaba a los doce años49. Los actores dependían totalmente de su expresión corporal
pues no había elementos escenográficos, la intención era hacer trabajar a la imaginación.

42
Ibid., p. 182.
43
Antonio Prieto, Op. Cit., p. 39.
44
Antonio Avitia, Op. Cit., p. 182- 183.
45
Óscar Armando García, (I. Los géneros dramáticos: una reflexión sobre su historia), Los géneros
dramáticos, su trayectoria y su especificidad, PAIDEIA, UNAM, México, 2007, p. 21.
46
El teatro erudito se refiere al creado a partir del estudio de los clásicos. En la Edad Media se formó en
monasterios, conventos y a principios del Renacimiento pasaron estas prácticas a las universidades. Un
ejemplo son las obras de Hroswita de Gandersheim.
47
Robert Pignarre, Op. Cit., p. 22.
48
Ibid., p. 12.
49
Antonio Avitia, Op. Cit., p. 201.
8

En las cortes chinas existieron bufones, pantomimos, ballets y el fascinante teatro de


sombras. También hubo educación actoral en El Jardín de los Perales, academia imperial en
la que los actores aprendían a recitar, cantar bailar, etc.
En Japón, el teatro se fundó a partir de los mitos: Amaterasu, diosa del sol, la
responsable de la creación del teatro 50 . Susano, su hermano, realizó la primera obra en
verso de la dramaturgia japonesa, utai51 y Hono Susori, la pantomima52. La misión de los
hombres (actores) fue perpetuar las acciones de los dioses, siguiendo su ejemplo a través
del rito53.
Las formas que tomó el teatro en Japón tuvieron la misión de perpetuar la
religiosidad de la región:
Los matzuri fueron festivales solemnes, que acompañaban las plegarias
dramatizadas que alejaban las desdichas con procesiones y pantomimas. Los matzuri dieron
origen a los kagura y éste al drama (sarugaku). El teatro no (nogaku) surge como evolución
de los ritos primitivos enriquecido por las leyendas guerreras, entre las evoluciones
coreográficas, con los personajes que dialogan con el poema54. El bunraku, teatro de títeres
japonés, fue representado alguna vez por personas y alcanzó una gran calidad técnica 55. El
kabuki fue y es el teatro popular de Japón56.
En la India también tiene un origen divino el teatro: Brahama agregó un quinto
Veda consagrado al teatro, el Natya-Veda, resumido por el santo krishi Bharata en el Natya-
Sastra 57. El texto habla de la danza, el canto, la mímica y las pasiones58. Los dioses
Siva y
Parvati crearon la tandava, danza violenta, y el lasya, danza del encantamiento59. Krishna
fue motivo del desarrollo del arte escénico, al contar su nacimiento60 y aventuras.
Una representación típica iniciaba con la bendición de un dios, muy comúnmente
Shiva, después se ejecutaban danzas y cantos; le seguía un prólogo, en el que el actor

50
César Oliva, Op. Cit., p. 17.
51
Idem.
52
Gaston Baty, Op. Cit., 12.
53
César Oliva, Op. Cit., p. 17.
54
Ibid., p. 13.
55
Antonio Avitia, Op. Cit., p. 203.
56
Ibid., p. 206.
57
Gaston Baty, Op. Cit., p. 14.
58
César Oliva, Op. Cit., p. 18.
59
Gaston Baty, Op. Cit., p. 14.
60
Gaston Baty, Op. Cit., p. 15.
9

principal habla con su mujer o con sus colaboradores sobre el tema de la obra para situar al
público en la historia y sin más transición se pasaba a la representación propiamente
dicha61.
Así como los hindúes, nahuas, japoneses o los cristianos crearon sus formas
particulares de representación, cada comunidad tiene, desde sus orígenes, representaciones
de acuerdo a sus necesidades culturales.
Podemos pensar, muy acertadamente, que el teatro existió por sí mismo, sin
necesidad del nombre o de una concepción globalizada de los cánones para crearlo.
Consagrado a los dioses nació, de maneras similares, en todas partes el teatro.

61
César Oliva, Op. Cit., p. 19
10

Teatro
¿Una clasificación?

Los ejemplos de actividades escénicas referidos anteriormente 62 son una clara


muestra del teatro que se realizaba con una connotación ritual. La importancia del rito
en la existencia del teatro es más que clara, sin embargo, aún falta encontrar sus diferencias
y similitudes, de modo que podamos comprender su separación.
Teatro y rito son una necesidad, que surgen del deseo de una nueva forma de
expresión, en la que la comunidad participante crea lazos comunicativos (y sociales), da lo
mejor de sí misma63 y confirma la continuidad de un grupo social.
Ambos tienen la finalidad de transmitir y reforzar patrones culturales a manera de
representación, viva, latente y efímera. Los dos utilizan la teatralidad como una herramienta
de creación pues son los símbolos, la manipulación de la información cultural 64 , las
repeticiones y las decisiones estéticas, los responsables de dar como resultado final la
puesta en escena65.
Tanto el teatro como el rito pueden estar basados en un guión – plan maestro –, que
no sólo maneja el discurso verbal, sino los patrones conductuales de la ceremonia66 . No
obstante, el texto es quizá el elemento menos importante, pues la esencia y totalidad del
teatro reside en la ceremonia67. Herrmann respondió al fanatismo sobre el texto: “En el arte
teatral la puesta en escena es lo fundamental”68.
Para que las actividades representacionales puedan existir son necesarios
espectadores y participantes. No debemos perder de vista que el espectador es un miembro
activo de la representación, sea que dance y cante o sólo observe y se encuentre presente. El
público es el creador del arte teatral69.

62
Por la extensión del trabajo recomendaría que no sólo se tomen en cuenta los ejemplos que pude citar,
sino también de los que el lector tenga referencias o la oportunidad de investigar.
63
César Oliva, Op. Cit., p. 11.
64
Antonio Prieto, Op. Cit., p. 14.
65
Juan Agustín Rossi Vaquié, Tratado de la puesta en escena, Escenología, México, 2006, p. 27.
66
Antonio Prieto, Op. Cit., p. 17.
67
Anne Ubersfeld, Semiótica teatral, Cátedra, Universidad de Murcia, Madrid, 1989, p. 14.
68
Erika Fischer-Lichte, Op. Cit.
69
Ibid.
11

Muchas teorías, como la aristotélica, estipulan que para existir el teatro se debe dar
una clara separación entre el actor y el espectador70.

“La coronación de un rey, no es teatro; pero lo será cuando tenga como


sujetos no jefes o reyes, sino actores que lo finjan71.”

Es un poco duro imponer una regla tal, que los espectadores y los actores
diferenciados entre sí sean necesarios para que el teatro exista. Es cierto que el proceso que
precede a la puesta en escena, la mayoría de sus partes, son preparadas por un grupo selecto
de personas, que memorizaban sus movimientos y diálogos (si los hay), se hacen cargo de
los símbolos, música u otros elementos que se necesiten confeccionar con anterioridad.
Pero caeríamos en contradicciones restando derecho al espectador de participar en la puesta
(danzando, cantando, respondiendo, etc.), ya que en nuestros días se ha tomado, muchas
veces, la postura de interactuar con el público, e incluso hacerlo parte de la representación.
Entonces podría permitírsele al público ser parte del rito, sin que esto mermara la
calidad del mismo ritual, degradándolo a no poder llegar a ser teatro.
Hay verdad en el ejemplo, anteriormente citado, que plantea el filósofo griego, pues
el acto de la coronación real no tiene porque ser teatro, aunque sea un evento social,
comunicativo y un espectáculo72, pero aquellas actividades que rodean y completan el ritual
de la coronación bien pudieron haber sido, algunas, representaciones teatrales, con un fin
ritual o de mero entretenimiento.
Entonces, partimos de los gérmenes73 del fenómeno representacional, en los cuales
los miembros de la comunidad participaban, en su mayoría, como actores de la
representación74. Dedicaban cada movimiento, emoción, grito y canto a la deidad a quien se
le rendía homenaje en la ceremonia. Poco a poco los roles de cada uno de los participantes

70
César Oliva, Op. Cit., p. 13.
71
Aristóteles, en César Oliva, Op. Cit., p. 17.
72
A un evento así puede denominársele Cultural performance, como Milton Singer denominó a los eventos
que tienen “un periodo de tiempo claramente limitado, un principio y fin, un programa organizado de
actividades, un grupo de intérpretes, un público, un lugar determinado y un motivo para el performance”
(en: Erika Fischer-Lichte, Op. Cit.).
73
En varias culturas fue el inicio, y en otras aún se efectúan.
74
César Oliva, Op. Cit.,p. 14. [“Todos los miembros de la comunidad eran actores del mismo espectáculo,
aunque con diferente cometido.”]
12

fueron quedando más claros, e incluso jerarquizados, se decidieron las historias que se
llevarían a la escena, junto con los elementos teatrales de los que se apoyaría la puesta.
Algunas civilizaciones decidieron crear espacios propios para las representaciones
(por ejemplo, los momoztli, el theatrón, los escenarios hindúes o los propios para el teatro
noh), otras prefirieron permanecer en sus templos o patios para realizarlas.
Los temas de las puestas pasaron de lo divino a lo profano, sin perder la intención
de que formarán parte de las fiestas a las divinidades. Mas el tiempo pasa, y con él todo
cambia, y como dijese Heráclito de Eféso75, no podía empaparse el teatro dos veces en las
mismas aguas, pues la corriente seguía su curso.
Las cosmogonías y necesidades cambiaron y con ellas, el teatro, pues se necesitaban
ritualidades distintas y particulares sistemas de representación.
Hoy día el teatro76 ha perdido, en su mayoría, la intención ritual, y ha buscado su
propósito en la estética, la belleza y la reflexión, esto a causa de la mentalidad de las
comunidades. Anteriormente el teatro era consagrado a una o varias divinidades, hoy el
propósito es hacer arte.
El teatro es una actividad propia de las sociedades humanas, no exclusiva de un
tiempo o lugar determinados; sin necesidad de reglas fijas (iguales en todas las regiones) ni
vasos comunicantes - de un territorio o periodo a otro 77 . Entonces las representaciones
hindúes, las nahuas, mayas, incas, chinas, africanas, entre otras, deben ser consideradas
teatro, sin necesitar de la influencia del teatro griego para existir.

75
La cita de Heráclito es “Ningún hombre puede bañarse dos veces en el mismo río”. Lo que Heráclito
plantea es que todo cambia, no de una manera anárquica, sino siguiendo un orden impuesto por el logos,
que corresponde a un cambio de lo contrario (vida-muerte, seco-húmedo, sagrado-profano).
76
Considero que hoy (siglo XXI) el teatro sigue la línea de ser una actividad para un grupo (burgués) especial
de persona. Es poco el teatro que se acerca a las clases más pobres, un ejemplo claro es México, pues al ser
un país con una mayoría poblacional de bajos recursos, son pocos (y los mismos) que acuden al teatro.
77
Óscar Armando García, Op. Cit., p. 20.
13

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