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Pasos Para La Elaboración De Una Propuesta Social Y Productiva

El objetivo de una propuesta es ganar apoyo para tu plan al comunicarlo a las personas
apropiadas. Es más probable que tus ideas o sugerencias se aprueben si puedes
comunicarlas de manera clara, concisa y atractiva. Saber cómo escribir una propuesta
persuasiva y fascinante es esencial para triunfar en muchos campos.
Planea tu propuesta
Define el asunto. Si está claro para ti el asunto, ¿también lo está para el lector? Además,
¿el lector cree que realmente sabes de lo que hablas?
Piensa en lo siguiente cuando planees esta parte:
 ¿A qué situación se aplica el asunto?
 ¿Cuáles son las razones detrás de este asunto?
 ¿Estás seguro de que esas y no otras son las verdaderas razones? ¿Cómo estás
seguro de eso?
 ¿Alguna vez alguien ha tratado de lidiar con este asunto?
 Si la respuesta es afirmativa: ¿Funcionó? ¿Por qué?
 Si la respuesta es negativa: ¿Por qué no?
Define la solución.
Debe ser fácil de entender. Una vez que establezcas el asunto que abordas, ¿cómo te
gustaría resolverlo? Trata de hacerlo lo más escueto (y factible) posible.
Tu propuesta necesita definir un problema y ofrecer una solución que convenza a los
lectores escépticos y desinteresados para que la respalden. Tu audiencia quizás no sea el
público más fácil de ganar. ¿La solución que ofreces es lógica y factible? ¿Cuál es el
tiempo que se requiere para su implementación?
Considera pensar en la solución en términos de objetivos. Tu objetivo principal es la meta
que debes lograr absolutamente con tu proyecto. Los objetivos secundarios son las otras
metas que esperas que el proyecto logre.
Ten en cuenta los elementos de estilo.
Dependiendo de la propuesta y de quién la leerá, debes tratar de adaptar tu documento a
un determinado estilo. ¿Qué es lo que esperan? ¿Están interesados en tu problema?
¿De qué manera serás persuasivo? Las propuestas convincentes pueden apelar a las
emociones, pero siempre deben basarse en los hechos como la piedra angular del
argumento. Por ejemplo, una propuesta para empezar un programa de conservación del
panda puede mencionar cuán triste sería para los niños de las generaciones futuras nunca
ver a un panda, pero no debe “detenerse” ahí. La propuesta tiene que basar sus argumentos
en hechos y soluciones para que sea convincente.
Haz un esquema.
No será parte de la propuesta final, pero te ayudará a organizar tus pensamientos.
Asegúrate de saber todos los detalles importantes antes de empezar.
Tu esquema debe consistir en el problema, cómo lo resolverás, la solución, por qué es la
mejor opción y una conclusión. Si escribes una propuesta ejecutiva, tendrás que incluir
cosas como un análisis de presupuesto y los detalles organizacionales.
Escribe tu propia propuesta
Empieza con una introducción firme.
Debe empezar con un gancho. De manera ideal, debes lograr que tus lectores estén
embelesados desde el punto uno. Haz la propuesta lo más deliberada y útil posible. Usa
algo de la información de fondo para atraer la atención de los lectores. Luego expresa el
propósito de la propuesta.
Si tienes hechos reales que arrojen algo de luz sobre la razón por la cual el asunto deba
abordarse inmediatamente, es una opción segura por la que puedes empezar. Sea lo que
sea, asegúrate de empezar con un hecho y no con una opinión.
Expresa el problema.
Después de la introducción llegarás al cuerpo, la esencia de tu trabajo. Aquí es en donde
debes expresar el problema. Si los lectores no saben mucho de la circunstancia,
infórmales. Piensa en esto como la sección del “estado de las cosas” de la propuesta.
¿Cuál es el problema? ¿Qué lo causa? ¿Qué efectos tiene?[9]
Enfatiza en las razones por las que el problema tiene que resolverse inmediatamente.
¿Cómo afectará a tu audiencia el hecho de quedarse sola? Asegúrate de responder todas
las preguntas y cubrirlas con la investigación y los hechos. Usa fuentes fidedignas de
manera abundante.
Propón soluciones.
Sin duda, esta es la parte más importante de la propuesta. La sección de soluciones es en
donde llegas a cómo abordarás el problema, por qué lo harás de esa manera y cuáles serán
los resultados. Para asegurarte de tener una propuesta persuasiva, piensa en lo siguiente:
 Discute los impactos más grandes de tus ideas. Las ideas que parecen de
aplicabilidad limitada es probable que no enciendan el entusiasmo de los lectores
como las ideas que pueden tener efectos generalizados.
 Hablar de por qué harás algo es tan importante como expresar qué harás. Trata de
suponer que tus lectores son escépticos y no aceptarán tus ideas por su valor
aparente.
 Tus lectores deben dejar el documento seguros de que puedes resolver el problema
efectivamente. Literalmente todo lo que escribes debe abordar el problema o cómo
resolverlo.
 Investiga tu propuesta ampliamente. Mientras más ejemplos y hechos puedas dar
a la audiencia, mucho más convincente será tu propuesta. Evita tus propias
opiniones y confiar en la investigación de otros.
 Si tu propuesta no prueba que la solución sirve, no es una adecuada solución. Si
la solución no es factible, destrúyela. También piensa en los resultados de la
solución. Si es posible, prueba previamente la solución y, si es necesario, revísala.
Incluye un programa y un presupuesto.
Tu propuesta representa una inversión. Para convencer a los lectores de que eres una
buena inversión, provee tanto detalle e información concreta del programa y el
presupuesto como puedas. Detalla responsabilidades y compromisos de tiempo a nivel
del departamentos o personal individual.
Cierra con una conclusión.
Esta debe reflejar la introducción y cerrar de manera sucinta el mensaje general. Si en tu
propuesta hay consecuencias que no se han mencionado, abórdalas. Resume los
beneficios de la propuesta y haz entender que los beneficios superan los costos. Deja a tu
audiencia pensando en el futuro. Y, como siempre, agradéceles por su consideración y
tiempo.

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