Beruflich Dokumente
Kultur Dokumente
1- El desarrollo económico
Recalaban esas flotas en los únicos puertos autorizados para realizar intercambio comercial
directo con España y que eran: Veracruz (México), Portobelo y Panamá (América Central)
y Cartagena (América del Sur)
Por otra parte, los europeos del siglo XVI provenían de un continente en el cual
predominaba una sociedad estamental caracterizada fundamentalmente por la existencia de
tres grandes cuerpos sociales: nobleza, clero y estado llano. La movilidad social era muy
escasa y la pertenencia a cada estamento dependía de la pureza de la sangre. Es decir, quien
nacía en cuna noble moría noble y quien nacía campesino terminaba sus días de igual
manera.
En el siglo XVI indiano no hubo una sociedad única sino varias coexistentes y coincidentes
en diversos grados de relación y dependencia. A grandes rasgos se pueden identificar dos
universos sociales: las llamadas "república de los españoles" y "república de los indios".
Los españoles se concentraron esencialmente en torno a las ciudades, en tanto los nativos
permanecieron en el ámbito rural. Esto implicó la aparición de una dicotomía campo-
ciudad muy significativa en la historia de la América española.
Dicha política se asentaba sobre cinco principios: el señorío de la Corona sobre todas las
tierras conquistadas; la tierra como aliciente que hizo posible las expediciones de
descubrimiento y conquista y sentó las bases del latifundismo, especialmente durante el
siglo XVI, cuando la tierra era obtenida por merced real; la tierra como fuente de ingresos
para las cajas reales, que ya consolidado el dominio español prevaleció aunque no sustituyó
totalmente al segundo, expresándose mediante el procedimiento de composición, que
permitía legalizar la propiedad de tierras realengas usurpadas mediante el pago de una
determinada cantidad de dinero; la dotación
de ejidos a los pueblos de indios y la
posibilidad de que pudieran adquirir tierras
adicionales mediante composición; y el
bloqueo agrario de los mestizos, que el autor
encuentra que no se desprende de las leyes,
pues ellas “no hacen discriminación de la
gente mestiza (‘las castas’, los ladinos) sino
más bien ofrecen puntos de apoyo legal
para que ellos también las puedan
obtener” (Martínez, 1994: 159), pero es
confirmado por los hechos, en especial la
necesidad de los españoles y criollos de
evitar que la proliferación de haciendas y
labores les disputaran el acceso al trabajo forzado de los indígenas.