LOCALIZACION CEREBRAL DE LAS FUNCIONES EJECUTIVAS

Atención: Ríos, et all (2013) en el libro Neurociencia Cognitiva, aseguran que

más allá de todas las definiciones que se le pueden dar al concepto de
“atención”, esta constituye “algo más que la simple selección de estímulos”,
dando a demostrar de este modo que las funciones atencionales parecen no
ser autónomas, sino que conjuntamente participan con otros procesos
cognitivos como la percepción, la memoria, la planificación, entre otras; y, por
este motivo son difíciles de separar conceptualmente como funcionalmente
dichos procesos.
El estudio neuroanatómico de la atención se ha visto favorecido por el avance
de la ciencia y la neuroimagen que, con el uso de métodos no invasivos, se ha
logrado observar la activación de distintos procesos a estudiar.
Son estos estudios los que han hecho posible el aporte de evidencias claras
acerca de las diversas áreas cerebrales involucradas en los procesos
atencionales.
Entre estas áreas se encuentran las siguientes (Ríos, 2013):
 Lóbulos frontales. Algunos autores han podido demostrar que la
inhibición de las respuestas necesarias para la selección de estímulos
se realiza especialmente en áreas dorsolaterales frontales (Liddle, Kiehl,
y Smith, 2011). Además, una de las áreas relacionada con el control de
la atención selectiva es la corteza cingulada, mostrando aparentemente
altos niveles de actividad cuando se trata de la atención voluntaria. Del
mismo modo, nos encontramos con el área motora suplementaria (AMS)
hecho que plantea la posibilidad de que su función no sea
exclusivamente motora (Braver et al., 2001; Liddle et al., 2001; Ojeda et
al., 2002; Sylvester et al., 2003)
 Regiones extrafrontales. Algunos estudios demuestran que la atención
no solo involucra áreas frontales, sino también regiones extrafrontales
como la corteza parietal, en donde estudios sugieren que
específicamente la región temporoparietal aumenta su activación cuando
se reorienta la atención hacia un estímulo que aparece en un lugar
inesperado (Corbetta, et all. 2000); y,
 Estructuras subcorticales, tomando en cuenta que la región prefrontal
recibe fibras aferentes del troncoencéfalo, del hipotálamo, del sistema
límbico, del tálamo y otras áreas de la corteza poniendo de esta forma
en evidencia, que para el proceso de la atención se activa una completa
red neuronal atencional a gran escala.

Memoria: Es el proceso por el que la información adquirida se convierte en

conocimiento que guardamos para utilizarlo posteriormente cuando sea
necesario. (Solís, et all. 2009)
Diversos estudios experimentales y estudios clínicos en humanos resaltan que
las estructuras cerebrales relacionadas con la memoria son el hipocampo, el
tálamo, la amígdala del lóbulo temporal, cuerpos mamilares y el cerebelo, entre
otras. Además destacan la participación de diversos neurotransmisores entre
los que destaca principalmente la acetilcolina, en lo que se trata a la
bioquímica. (Solís, et all. 2009)
Para tener una clasificación más detallada de las estructuras encefálicas
involucradas en el proceso de la memoria, podemos clasificar a la memoria en:
- Memoria a corto plazo, que se define como la capacidad habitual para
mantener en la mente una experiencia durante algunos segundos
intervienen estructuras como las áreas sensoriales primarias, el lóbulo
prefrontal, el núcleo dorso-mediano, el tálamo y la región neoestriada

- Memoria a largo plazo la cual hace posible la retención de la información

durante un tiempo variable, se subdivide en: memoria declarativa o
explicativa, que permite al sujeto comunicarse bajo una forma verbal y
en la que participan áreas como el lóbulo temporal, el hipocampo, el giro
dentado, la amígdala y los núcleos talámicos y la memoria no
declarativa implícita o procedimental donde áreas como el hipocampo,
los ganglios basales y el cerebelo se encuentran involucradas. (Solís, et
all. 2009)

Lenguaje: El lenguaje es un instrumento usado por el ser humano para

comunicarse y pensar. (González, R; Hornauer, A, 2014)
En el proceso del lenguaje intervienen múltiples áreas cerebrales por lo que
alguna alteración en estas áreas, puede provocar alteraciones del lenguaje.
Las funciones cerebrales superiores como el lenguaje, son un sistema
funcional que depende del trabajo integrado de un grupo de zonas corticales y
subcorticales, sin embargo, los componentes principales del lenguaje se
encuentran en el hemisferio dominante (izquierdo) en la zona perisilviana.
(Donoso A, 2008)
El desarrollo de la imagenología cerebral en los últimos años ha permitido
saber y demostrar más sobre las bases neurológicas del lenguaje y su
funcionamiento.
A continuación se describen las áreas cerebrales relacionadas con el lenguaje,
tomando en cuenta que corresponden a un sujeto diestro, adulto, que sabe leer
y escribir; ya que, lo más probable es que las áreas en un sujeto zurdo podrían
variar:
- Lóbulo frontal Izquierdo – AREA DE BROCA (44, 45): involucrada
principalmente en la formulación verbal y cumple un rol en el
procesamiento de verbos. También se le atribuye una participación en la
planificación y programación motora del habla.

- AREA DE BRODMANN (46, 47): relacionada con la función ejecutiva y la

comprensión de oraciones.
 - Lóbulo temporal izquierdo – AREA DE WERNICKE: relacionadas con la
comprensión auditiva y el procesamiento de la selección del léxico.

- Lóbulo parietal inferior - Circunvolución supramarginal: con funciones

como el procesamiento fonológico y la escritura.

- Lóbulo parietal izquierdo – Circunvolución angular: juega un papel

importante en la integración multimodal y en el procesamiento
semántico, cálculo, lectura y escritura

- Lóbulo temporal: relacionado con la denominación y comprensión de

palabras

- Lóbulo de la ínsula: se cree que esta estructura esta involucrada en la

conversión de los fonemas en información motora para que esta pueda
ser leída en el área de Broca.

- Fascículo longitudinal superior: involucrado en la expresión del lenguaje

- Fascículo longitudinal inferior: relacionado con la denominación de

objetos vivos.

- Fascículo fronto-occipital inferior: se cree que podría participar en la

lectura, atención y procesamiento visual.

- Áreas subcorticales – Tálamo y ganglios basales: importantes en el

monitoreo léxico-semántico.

- Hemisferio derecho: participa en el uso del lenguaje en el contexto,

además contribuye de manera significativa a la expresión y comprensión
del discurso

- Áreas pre-frontales: Con un rol fundamental en la habilidad discursiva a

través de la función ejecutiva.

- Cerebelo: que participa en la modulación de la función verbal como

fluencia verbal, evocación de la palabra, sintaxis, lectura, escritura y
habilidades metalingüísticas

Praxias: Las praxias son acciones motoras coordinadas que se realizan para la
consecución de un fin, involucrando diferentes procesos: en primer lugar, es
necesaria la recepción del programa de información sensorial, seguida de un
plan general que influye las operaciones lógicas y finaliza con los programas de
inervación motora. (Ramos, 2011)
Dentro de las bases neuroanatómicas de las praxias encontramos a las áreas
pre-motora y pre-motora suplementaria, lo lóbulos occipitales, parietales y
temporales. Núcleos grises basales, cuerpo calloso y tálamo.
Funciones ejecutivas: Las funciones más complejas del ser humano, como
las funciones ejecutivas, son soportadas principalmente por la corteza
prefrontal (Flores, 2008, cita a Goldberg, 2001), participan en el control, la
regulación y la planeación eficiente la conducta humana, también permiten que
los sujetos se involucren exitosamente en conductas independientes,
productivas y útiles para sí mismos (Flores, 2008 cita a Lezak, Howieson, &
Loring, 2004).
Cálculo: El estudio de las zonas cerebrales involucradas en el razonamiento
matemático inicia un poco tarde debido a que en muchas ocasiones es difícil
encontrar casos en donde el trastorno involucre solamente funciones
matemáticas, sin que esté relacionado también con funciones del lenguaje
(Vargas, 2013), sin embargo, con el avance de la tecnología y la incorporación
de nuevos métodos diagnósticos, se han ido aclarando las áreas relacionadas
a cada proceso cognitivo.
Las regiones cerebrales involucradas en el procesamiento matemático son
(Vargas, 2013):
- El lóbulo frontal: en el cual se destacan la corteza prefrontal, la corteza
premotora y el área motora primaria.

- El lóbulo parietal, en él participan el área somatosensorial primaria y la

corteza de asociación del lóbulo parietal.

- El lóbulo occipital en el cual están involucradas la corteza visual primaria

y la corteza de asociación del lóbulo occipital.

- El lóbulo temporal que incluye la corteza auditiva primaria, la corteza

superior temporal y la corteza de asociación del lóbulo temporal.

Ríos, L; et all. (2013) Neurociencia Cognitiva. Edición 1, capítulo: La

atención. Pp.1-18. Disponible en:
https://www.researchgate.net/publication/257268510_La_atencion
Solís, H; López, E (2009) Neuroanatomía funcional de la memoria.
Medigraphic. Vol. 14. No. 3. Disponible en:
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González, R; Hornauer, A. (2014). Cerebro y Lenguaje. Departamento de
Neurología y Neurocirugía, HCUCH. Revista Hospital Clínico. Universidad
de Chile. Chile. Disponible en:
https://www.redclinica.cl/Portals/0/Users/014/14/14/Cerebro_
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Flores, J; Ostrosky, F. (2008) Neuropsicología de lóbulos frontales,
funciones ejecutivas y conducta humana. Revista Neuropsicología,
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Vargas, R. (2013) Matemáticas y neurociencias: una aproximación al
desarrollo del pensamiento matemático desde una perspectiva biológica.
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http://www.fisem.org/www/union/revistas/2013/36/archivo7.pdf
Ramos, J (2011) Neuropsicología de las praxias. Corporación Universitaria
de Sucre. Disponible en:
http://neuropraxis.blogspot.com/2011/04/neuropsicologia-de-la-praxias.html