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revisión de REVISTAS

y LIBROs
Rev Chil Salud Pública 2015;
Vol 19 (3): 336-343

Zygmunt Bauman, ¿Para qué sirve realmente…?


un sociólogo. Buenos Aires, Paidós, 2015

Producto de entrevistas, con- una intuición que en las reglas


versaciones, cartas y fragmen- algorítmicas de los “comparti-
tos de textos, este libro recorre mentos denominados escuelas”
transversalmente las ideas del (todas las cursivas son origina-
sociólogo Zygmunt Bauman, en les). La experiencia es siempre y
cuyo centro está el rechazo del “solamente de la existencia cor-
“fetichismo constante de la me- pórea del individuo” a quien la
todología” y el reconocimiento sociología intenta ayudar en su
de que la sociología es parte del “doble plaga de la ignorancia y
mundo social. Distanciarse de la la impotencia”.
academia, sumergirse en la expe- Tan poco como la filoso-
riencia humana, reconociendo fía, puede la sociología cumplir
que lo social se vincula indefecti- con el mandato marxiano de no
blemente con la política y con la solo interpretar sino cambiar el
ética, son sus temas recurrentes. mundo. Bauman hace suya la
Tomando una metáfora de Mi- metáfora de Adorno, renuncia-
lan Kundera, Bauman hermana do a los grandes discurso para
la literatura con la sociología en escribir un “mensaje en la bo-
la tarea común de rasgar el telón tella”, cuyo valor se establece
de los prejuicios. Más impor- en un futuro incierto, cuando
tante que estudiar a Parsons es habrá de ser encontrado, leído,
la lectura de Kafka, Musil, Bor- absorbido y adoptado.
ges. La ciencia natural-científica Ser sociólogo es estar en el
mantiene la dualidad cartesiana mundo, captar sus más diversas
entre observador y su objeto de sonoridades, estar atento a la di-
estudio, a diferencia de la verdad versidad y los matices de la Le-
social-científica que sabe de la benswelt. Recorre la literatura,
identidad ontológica y episte- desde Oviedo a E.M. Forster, se
mológica “entre los estatus de siente cómodo con la filosofía,
los investigadores y de aquellos de Platón a Blanchot, ciertamen-
a quienes investigan”. te en la sociología, introduce
Bauman se define como her- lecturas menos conocidas, como
meneuta sociológico, empeñado la breve obra del protoanárqui-
en interpretar las decisiones hu- co Étienne de La Boétié, el ar-
manas a la luz de las condiciones tículo “Humanism” de Richard
sociales en que las personas vi- Sennet, los escritos satíricos del
ven. La tarea, el servicio que la post-orwelliano Vladimir Voi-
sociología presta en un mundo novich. Aborda el “fenómeno
cambiante, confiando más en Mark Zuckerberg”, las rigideces
de Margaret Thatcher, la actua- Hacia el final del texto, Bau- ha “aprendido para expresar mi
ción de Jack Nicholson, el cine man se refiere a sus indagaciones pensamiento de manera comuni-
de Haneke, el teatro de Terrence actuales, centradas en la separa- cativa”. Casi 40 años después de
Rattigan. Considera que mirar la ción entre poder y política, una haberlo escrito, se mantiene fiel
televisión es un deber de los so- brecha que arrebata al Estado sus a una idea nuclear: ¿cómo hacer
ciólogos y utiliza, en forma irre- tareas sociales y produce lo que que la gente haga lo que tiene
gular y no del todo cómoda, la en el mundo, pero muy especial- que hacer?
comunicación por internet, re- mente en Latinoamérica y desde Es Bauman un escritor muy
conociendo que buena parte de la óptica de la salud pública, es leído, celebrado y premiado.
la Lebenswelt contemporánea se la progresiva paradoja de una El texto reseñado es una visión
despliega en esos medios. “colectivización de los proble- caleidoscópica de un intelec-
La sociología ha de estable- mas junto a la privatización de tual profundamente honesto,
cerse como una política cultu- los instrumentos y de los medios íntegro, coherente, estimulante,
ral, en permanente diálogo de la para resolverlos”. El proletariado convincente. No son muchos,
doxa –“el conocimiento de los es sustituido por el precariado. por lo que hace bien leerlo.
principiantes”–, impregnado de Zygmunt Bauman reconoce
informalidad, apertura, coope- que escribe mucho, no tan bien
ración, so pena de caer en una como quisiera –dice–, impeli-
sociología irrelevante. do por ser el único modo que Miguel Kottow

hacia una nueva epistemología de la psiquiatría

Por lo tanto, sus objetos y sus


Germán Berríos, Hacia una preocupaciones no pueden caer
nueva epistemología de la en reduccionismos resumidos
Psiquiatría. Buenos Aires, en “menús de síntomas” (p. 153)
Polemos, 2011 justificados conceptualmente
en que los “trastornos mentales
son comportamientos distor-
Desde la actual e innegable ne- sionados ‘causados’ por algu-
cesidad en generar espacios na patología cerebral [, ya que]
de investigación que crucen y fomentan un énfasis exagerado
desdibujen las fronteras de las de la neurociencia” para con la
disciplinas y que configuren es- comprensión de su objeto. Pero
pacios comunes y complejos de tampoco en que “los síntomas
investigación –donde se plantee mentales son solo expresiones
lo interdisciplinario como me- simbólicas de procesos psicoló-
todología fundante–, el libro de gicos [, pues,] fomentan un énfa-
Germán Berríos se inserta jus- Este libro, que es la sínte- sis exagerado de la investigación
tamente en analizar y argumen- sis general de lo trabajado en la psicodinámica, sociocultural y
tar la relevancia de estos cruces, Escuela de Epistemología de la hermenéutica” (p. 156).
planteando la urgencia de iniciar Psiquiatría en la Universidad de La obra, de sencilla lectura,
investigaciones epistemológicas Cambridge, inicia planteando se divide en cuatro partes: co-
en Psiquiatría y Salud Mental, que una de las complejidades que mienza con ‘Filosofía y Episte-
ante las controversias, determi- enfrenta la Psiquiatría es consti- mología de la Psiquiatría’, luego
nismos y naturaleza híbrida de tuirse entre las “ciencias natura- ‘El lenguaje de la Psiquiatría’,
sus objetos. les y ciencias humanas” (p. 28). seguida de ‘Objetos de la Psi-

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Revista Chilena de Salud Pública

quiatría’ y finalmente ‘Datos etcétera. Así, lo relevante de la ponder a estas preguntas, pero sí
de la Psiquiatría’. En ella se va obra es (re)insertar la Psiquiatría movilizar el diálogo, afirmo que
argumentando con nutrido co- en las discusiones de lo interdis- una herramienta para comenzar
nocimiento sobre la historia y ciplinario, en el sentido de que a configurar el campo que po-
las problemáticas que envuelven esto llamado “Psiquiatría” no es dríamos llamar “Salud Mental
a la psiquiatría como una cien- “una” disciplina monometodo- Pública”, es lo interdisciplinario.
cia, de qué modo es posible que lógica o uniparadigmática; es, de Tal como propuse al inicio, este
se vayan fijando o estabilizando otro modo, un campo complejo libro es una muestra de lo que es
ciertas nociones conceptuales so- donde dialogan y se cruzan en posible realizar cuando vemos la
bre lo “normal”, “lo anormal”, diferentes grados y momentos: necesidad de establecer puentes
e incluso los actuales debates en la cultura, lo social, lo biológico, entre las disciplinas, en este caso
torno a la “localización orgáni- lo químico o lo histórico. Esto entre la Filosofía de la Ciencia y
ca causal del síntoma mental”, y nos muestra que nuestros cono- la Psiquiatría. Es más, parece in-
cómo éstas definen las formas de cimientos sobre un área del saber sostenible e ingenuo creer que el
investigar y legitimar “algunos” están expuestos a influencias his- trabajo “disciplinar” puede lle-
conocimientos y sus perfiles por tóricas que participan en la cons- varnos a “encontrar la verdad”.
sobre “otros”. Es decir, el autor trucción y la constitución de sus La progresiva asepsia política
va desarrollando la idea de que la objetos y sujetos. No se trata de e histórica de ciertas prácticas
forma que tenemos de enfrentar, acceder a una especie de conoci- “científicas” y la negación de
tratar, observar, construir o, di- miento “oculto”, sino de proce- sus efectos, como también de
cho de otro modo, hacer visibles sos que se han vuelto invisibles sus prácticas endogámicas en la
los “síntomas mentales”, es un pero radicalmente importantes, producción del conocimiento,
proceso complejo que está inte- pues son los nodos que permiten convierten lo interdisciplinario
grado por varios factores que, de la articulación para que dicho en una herramienta mínima para
no realizar investigaciones que conocimiento o práctica pueda crear espacios situados de aná-
den cuenta de este proceso de arrancar en la historia. lisis y configuración epistemo-
articulación histórica, nos puede Más allá del esfuerzo que lógica y ontológica donde estos
traer problemas, pues la dinámi- representa este libro, nos pro- factores sean tomados en cuenta.
ca de una ciencia donde el debate pone varios desafíos. Si sabida Por lo tanto, este libro es una
y la crítica tanto de la naturaleza, es la complejidad no solo del obra totalmente recomendable
estructura, relaciones, efectos o campo “salud” sino de la “salud para quienes crean que la ciencia
causas de sus objetos y sujetos mental” en particular, ¿cómo es posible de construirse local-
de investigación, plantea Berríos podemos crear metodologías mente y en diálogo con otras dis-
“puede alterarse cuando aquéllos y espacios reflexivos e investi- ciplinas o parcialidades de ellas,
que están a cargo de la investiga- gativos en Psiquiatría con estas y tal vez lo más relevante: que la
ción empírica comienzan a creer concepciones? O incluso antes: salud mental es un campo com-
que su trabajo ya no plantea más ¿hay actualmente en Salud Pú- plejo abierto, en donde, como
problemas conceptuales” (p. XI). blica y Psiquiatría lugares y es- plantea Berríos, “para el episte-
Como vemos, el autor se po- pacios para comenzar a trabajar mólogo, nada puede considerar-
siciona claramente en la necesi- sobre esta base? ¿Qué teorías, se como sagrado, incluso la idea
dad de investigar cómo es posible conceptos y prácticas tenemos de que la Psiquiatría debe ser una
que tengamos ciertas “ideas de actualmente que dan cierto sen- rama de la Medicina” (p. XIII).
ciencia” que se traducen en pro- tido a nuestros objetos-sujetos y
tocolos, perfiles de formación, preocupaciones en Psiquiatría en
instituciones, normas técnicas, nuestro país? Sin ánimo de res- Jorge Gallardo

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Diario de Hiroshima de un médico japonés:
6 de agosto-30 de septiembre de 1945

agranulocitopenia ¿radiactivas? poráneas. Y este registro de unos


Hachiya Michihiko, Diario
Drama clínico, político, béli- pocos días, en un pequeño espa-
de Hiroshima de un médico co, epistemológico, narrado cio clínico, quizás valga como el
japonés: 6 de agosto-30 de en palabras breves como flores envés de los textos de Canguil-
septiembre de 1945, Turner, de cerezo. Trucha, melocotón, hem o el mismo Foucault, sobre
2005 vendas, objetos que recuperan la clínica, la enfermedad, la nor-
su mayor nobleza. malidad. Los vacilantes pasos de
Si los 70 años de Hiroshi- un saber clínico, afirmándose
A ratos el siglo XX parece per- ma y Nagasaki deben ser un ante lo desconocido y buscando
dido en un horizonte arqueoló- momento de la salud pública producir nociones provisiona-
gico: centena breve marcada por actual, no es solo por el aco- les, predictivas y pragmáticas,
guerras, revoluciones, partidos pio de saber que allí se incuba, microscopía en mano, autopsias,
políticos de masas, movimiento estadísticas. Entre política, pla-
sociales, antibióticos, mecánica netas escasos, síndromes ignora-
cuántica, ventilación mecánica, dos, escalas dislocadas.
medicina experimental, ADN, Me gustaría saber qué hacía
salud pública de riesgos. Pero, Fleck aún en Treblinka mien-
también de pronto, el siglo XX tras Hachiya escribía su diario.
es nuestro presente. Ambos clínicos, afectos al mi-
Diario de Hiroshima qui- croscopio y al laboratorio, in-
zás pueda ser uno de esos ob- tentando hacer medicina en las
jetos que conectan arqueología condiciones de su época, sin sos-
con actualidad posibilitando layar la intensidad ética de sus
justamente la labor de exca- decisiones. Recomendaría a los
var el presente. El testimonio estudiantes de los ramos de me-
de un médico que asiste como todología de la investigación que
paciente y como tratante des- leyeran a este cazador de radia-
de las primeras horas del pika, ciones en sus ires y venires, en la
denominación coloquial para el genialidad de sus errores, y en la
resplandor o luz viva, que devi- precisión de su reporte público,
no signo lingüístico para deno- pegado como las tesis de Calvi-
minar lo desconocido. Hachiya no a la entrada de las ruinas de
sino porque ese estilo de cono-
en su diario va describiendo su su hospital. También sueño con
cimiento es aún el nuestro. No
laboriosa elaboración clínica Goffman leyendo a este micro-
se trata únicamente de agentes
para caracterizar la nosología sociólogo, la minuciosa descrip-
físicos o síndromes agudos.
que tiene enfrente. Una lección ción de las maneras con que las
de cómo se produce saber clíni- Como ha escrito Joseph Masco,
personas roban los objetos.
co, de qué manera lo descono- la visión gaiana de un planeta
Diario de Hiroshima nos
cido nos obliga a recurrir a lo agente surgió del siglo XX, de la dice que la medicina incluye po-
conocido, a rebarajarlo, recom- Guerra Fría y de su consecuente lítica y valores, sociología e in-
ponerlo, torcerlo, traducirlo. La escalada nuclear (Joseph Mas- certidumbre, literatura y poesía,
pregunta por el agente que uni- co, Bad Weather: On Planetary incluso en minúsculos y dañados
fica a sus enfermos como casos, Crisis. Social Studies of Science, espacios clínicos como el Hospi-
lo que provoca la enfermedad, 40(1) (February 2010: 7-40). Los tal de Comunicaciones de Hiro-
las manifestaciones clínicas y los escritos testimoniales de Hiro- shima en ese agosto de 1945.
cursos posibles de una patología shima pueden ser leídos como
nueva: disentería ¿infecciosa?, cartas a la deriva de las múltiples
¿tóxica? Petequias, alopecía y épocas que hoy nos son contem- Yuri Carvajal

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Revista Chilena de Salud Pública

la agonía del eros

en Filosofía, Letras y Teología un estado de desreconocimiento,


Byung-Chul Han, La agonía nos lanza directo a la cara, con vacío y transgresión, que para el
del Eros (traducción Raúl una violencia transformada en autor, es material absolutamente
Gabás). España, Herder, danza casi natural. Quizás es necesario hacia el escape del in-
2014 porque Han acaricia la tradición fierno narcisista. “No se puede
filosófica occidental de Aristó- amar al otro despojado de su al-
teles, Platón, Hegel, Heidegger, teridad, solo se puede consumir”,
Nietzsche, y con oriental suti- escribirá con pluma cargada. El
leza, la pone al servicio de una “amor domesticado” neoliberal,
crítica tan aguda como radical al ése que parece en su superficie
hombre-en-el-mundo-neolibe- como pura positividad, pura dis-
ral. El homo aeconomicus neoli- tención y gratas sensaciones, ca-
beral ya no sería más un sujeto rece de negatividad, capacidad de
obediente, sino que ahora se ex- transgresión y trascendencia, no
plota a sí mismo dentro de un ré- se entrega a la propia muerte, no
gimen donde la proclamación de tiene “capacidad de muerte”. Así,
la libertad (“sé libre”) se vuelve el sujeto narcisista actual para
un imperativo paradójico, ya que Han queda entregado a la mera
precipita al sujeto de rendimien- vida y no a la buena vida, al tra-
to a la depresión y el agotamien- bajo y la salud como valores ab-
to. El tú puedes ejercería aun solutos: se convierte finalmente
mayor coacción que el anterior en esclavo. El texto de Han insta
imperativo tú debes, y lo que es a una revolución política donde
peor: contra uno mismo no hay el Eros y la experiencia erótica,
resistencia posible. Para Han no siempre misteriosa, siempre fan-
Texto para saborear lentamente, hay experiencia erótica dentro de tasía, conduce y seduce al logos a
para demorarse. Un momento este régimen donde la multiplici- través de lo no transitado. Ahora
para leer con “ojos erotizados” dad de opciones de consumo se- es nuestro turno de caminar.
las frases cortas cargadas de po- xual hace desaparecer la alteridad
tencia y sentido que este coreano del otro, ese otro que nos expone
formado en Friburgo y Múnich a un mundo ajeno e incomodo, a Sebastián Medina

revisión de tesis (magíster EN bioestadística)

Validación de constructo El estrés laboral, que representa tra el Cuestionario Psicosocial


del cuestionario CoPsoQ una amenaza para la salud de los de Copenhague (CoPsoQ), de-
(ISTAS21): una aplicación trabajadores y para la eficiencia sarrollado por investigadores
del análisis factorial
de las empresas, está influencia- del Instituto Nacional de Salud
confirmatorio usando
modelos de ecuaciones do por múltiples variables, tanto Laboral de Dinamarca, y que ha
estructurales individuales como ambientales. sido adaptado y traducido a dife-
Javiera Burgos, Tesis Esta naturaleza multifactorial rentes países e idiomas.
(Magíster en Bioestadística), y de rasgo latente ha motivado Particularmente, en España
Universidad de Chile, 2011 el desarrollo de diversos ins- la versión validada y estandari-
trumentos (cuestionarios) para zada del CoPsoQ se denominó
medirlo. Entre éstos se encuen- ISTAS21. El instrumento intenta

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medir cinco grandes dimensio- Desde el punto de vista es- eliminada del análisis. Lo inte-
nes: “Exigencias psicológicas”, tadístico, la tesis entrega un resante de este último hallazgo
“Trabajo activo y desarrollo de marco teórico de muy buena ca- es que hace plantearse hipótesis
habilidades”, “Apoyo social en lidad, con una claridad tal, que sobre posibles causas de este
la empresa y calidad de lide- una vez que entrega los resul- comportamiento distinto de la
razgo”, “Compensaciones” y tados se hace muy sencillo para población trabajadora chilena
“Doble presencia”. Cada una el lector seguir su descripción respecto a la española, lo que,
de estas dimensiones está, a su e interpretación. Totalmente como plantea Burgos en su
vez, constituida por varias sub- recomendable para alguien que discusión, “podría deberse a
dimensiones. quiera conocer esta metodolo- una menor participación de la
Esta tesis analizó si el mo- gía estadística. mujer en el mercado laboral o a
delo teórico del cuestionario IS- En cuanto a los resultados, un mayor acceso a la ayuda do-
TAS21 se ajusta al ser aplicado el instrumento mostró una méstica remunerada por parte
en Chile, utilizando una mues- buena consistencia interna y de los trabajadores”, por lo que
tra representativa de 1557 tra- se verificó que el modelo teó- sugiere investigarla más detalla-
bajadores chilenos de distintos rico sobre el cual está basado damente en estudios futuros.
sectores productivos. Para ello, se ajusta a la realidad de los En definitiva, esta tesis
se utilizó el método de Análisis trabajadores chilenos, compro- constituye un buen ejemplo de
Factorial Confirmatorio (AFC) bando su validez de construc- la aplicación del AFC, con una
haciendo uso de ecuaciones es- to. La única excepción es que descripción metodológica deta-
tructurales, que permite con- la dimensión “Doble presen- llada y una clara descripción y
siderar la forma o estructura cia”, que se relaciona con las discusión de los resultados.
jerárquica del modelo teórico exigencias y preocupaciones
que supone el instrumento, simultáneas de tareas labora-
dado por las dimensiones y sub- les y domésticas, mostró una
dimensiones antes mencionadas. baja consistencia interna y fue Mauricio Fuentes

salud colectiva

Quadrelli A, Cardoso MH, A propósito de la extrañeza


Castiel L, Sobre el carácter causada por la descripción téc-
indiciario del método clínico: nica del síndrome, se inicia una
una mirada antropológica a búsqueda hermenéutica para
partir de un relato de caso comprender la “forma alieníge-
publicado. na” del texto. Esta operación le
Salud Colectiva mayo 2014 permite a los autores remarcar
10(2), pp. 157-169 el carácter narrativo de la medi-
cina y desplegar la presencia de
“ciertas dosis de adivinación o
De vez en cuando reaparece el de inducción abductiva”.
debate sobre el método indi- Un artículo que actualiza
ciario como una variante epis- las descuidadas connotaciones
temológicamente relevante en ja en un texto casi olvidado lla- epistemológicas y semióticas de
el campo clínico. Este artículo mado “¡La bolsa o la especie! la medicina clínica, dimensiones
renueva esta reivindicación, que (Para volver a pensar el puesto que propiamente son tan salud
en nuestro Cono Sur articulara de la abducción en el sistema de pública como las cifras que do-
el filósofo argentino Juan Sama- las inferencias)”. minan la escena.

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Revista Chilena de Salud Pública

cadernos de saúde Las políticas en curso con-


pública Larouzé B, Ventura M, fían en el dejar hacer del mer-
Roma Sánchez A, Diuana cado mientras subfinancian al
V. Tuberculose nos sector público. Una combina-
presídios brasileiros: entre ción que pone en cuestión los
de March Ronsoni R, de a responsabilização estatal esfuerzos y logros de los hospi-
Aguiar Pereira C, Tetelbom e a dupla penalização dos
tales y atención primaria orga-
Stein A, Henrique Osanai detentos. Cadernos de
nizados en el Sistema Único de
M, Jorge Machado C. Saúde Pública junio 2015
Salud (SUS).
Avaliação de oito 31(6), pp. 1127-1130
Protocolos Clínicos e
Diretrizes Terapêuticas
(PCDT) do Ministério Un artículo en sección Perspec- nature
da Saúde por meio do tiva que revisa los antecedentes
instrumento AGREE II: um de la tuberculosis en la pobla-
estudo piloto. Cadernos de ción carcelaria de Brasil. Con
Saúde Pública junio 2015 Hicks D, Wouters P,
una incidencia 20 veces la de la
31(6), pp. 1157-1162 Waltman L, De Rijcke S,
población general, más que una
Rafols I. Bibliometrics:
enfermedad clásica viviendo en
The Leiden Manifesto for
un grupo humano con caracte-
La producción de protocolos research metrics. Nature.
rísticas específicas, se trata de ce-
despierta pasiones no protoco- 2015 Apr 23;520 (7548):
pas del recinto que circulan en la
lizadas: lamentos por la pérdida 429-431
población carcelaria.
de humanismo, fervor por la es-
A partir de este reconoci-
tandarización de las prácticas.
miento, de las dificultades de
Un camino medio es evaluar “El problema es que la evalua-
vida dentro de estos recintos y
los protocolos, paradójicamente ción es ahora conducida por los
de las dificultades en otorgar
mediante instrumentos a su vez datos más que por el juicio”,
prestaciones, surgen preguntas
estandarizados. dice en sus primeras líneas esta
respecto de la responsabilidad
Este artículo reseña los resul- presentación del Manifiesto de
del Estado por estas condiciones.
tados de tres evaluadores inde- Leiden, un decálogo de con-
pendientes mediante AGREE II sejos acerca de los indicadores
(Instrumentos para la Evaluación de cienciometría. Más que un
de Guías de Práctica Clínicas) de comentario, quisiéramos que
ocho protocolos producidos por Ocké-Reis C. Private nuestros lectores juzgaran la
el Ministerio de Salud de Brasil. health expenditures in pertinencia y relevancia de estas
En escala Likert de 1 a 7 en seis Brazil. Cadernos de Saúde mejores prácticas para la evalua-
dominios, con 23 ítems totales, Pública julio 2015 31(7), ción de investigación. El artículo
las guías obtuvieron un prome- pp. 1351-1353 está traducido en http://www.
dio de 4.25. Los autores recono- ingenio.upv.es/es/manifiesto y
cen en sus resultados la presencia nuestra versión libre de los diez
de algunos aspectos más bien El gasto en salud de Brasil al- principios es:
formales como el retiro en las canza al 9% del PIB, sin em- • La evaluación cualitativa
guías de las referencias. bargo solo un 47% de esa cifra podría apoyar la evalua-
El problema planteado entre- corresponde al sector público. ción cualitativa de exper-
tanto persiste y suscita la necesi- Los planes de salud en el sector tos
dad de nuevas investigaciones. privado representan un 40,4%, • Medir el desempeño res-
haciendo del gasto de bolsillo la pecto de los objetivos de
proporción más relevante. investigación de la institu-
ción, grupo o programa
• Proteger la excelencia en la
investigación localmente
relevante

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• Mantener la recolección • Considerar las variaciones tiva de su portafolio
de datos y los procesos por campos en publicacio- • Evitar concreciones mal
analíticos abiertos, trans- nes y práctica de citación situadas y falsa precisión
parentes y sencillos • Basar la evaluación de in- • Reconocer el efecto sis-
• Permitir a los evaluados ve- vestigadores individuales témico de las medidas y
rificar los datos y el análisis en una evaluación cualita- evaluaciones

Yuri Carvajal

COLABORADORES DE ESTA SECCIÓN

Miguel Kottow Escuela de Salud Pública, Facultad de Medicina Universidad de Chile, Santiago, Chile
Jorge Gallardo Facultad de Estudios Superiores Iztacala, Universidad Nacional Autónoma de México, México
Yuri Carvajal Unidad de Calidad y Seguridad del Paciente. Hospital de Puerto Montt, Chile
Sebastián Medina Escuela de Salud Pública, Facultad de Medicina, Universidad de Chile, Santiago, Chile
Programa de Bioestadística, Escuela de Salud Pública, Facultad de Medicina, Universidad de Chile,
Mauricio Fuentes
Santiago, Chile

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