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Fuente: MATKEI
Una aguada artificial, específicamente un tajamar, puede ser construida utilizando un
tanque australiano de 3000 metros cúbicos y con reservorios de agua de 20.000 metros
cúbicos. Primero, es necesario estudiar la captación de agua, la cual se
suministrará a los tajamares, distribuyendo por medio del tanque a los respectivos
potreros, donde los animales podrán aprovechar el recurso hídrico.
ELECCIÓN DE CAUCES NATURALES
Para conocer la potabilidad del agua, es importante realizar un análisis químico del
agua, a fin de asegurar a los animales un líquido sin bacterias que puedan afectarlos.
La altura del tanque australiano es de aproximadamente seis metros. Se opta por esta
altura si la distancia a la que llegará el agua es lejana; en este caso, a 1600 metros, por
lo que es necesario que exista presión. Este sistema tiene un punto de salida donde se va
a poner un registro de distribución, construido totalmente de material. Deben colocarse
uniones en los lugares o destinos a donde llegará el agua. Debe también contar con una
llave de paso general y otras llaves en las diferentes aguadas con el objetivo de realizar
los mantenimientos correspondientes a cada bebedero.