Sie sind auf Seite 1von 4

Jurisdicción Especial de Paz

Ir a la navegación

Ir a la búsqueda

Logo de la Jurisdicción Especial para la Paz.

La Jurisdicción Especial para la Paz (JEP), también conocida como Justicia Especial para la Paz es el
mecanismo de justicia transicional por medio del cual se investiga y juzga a los integrantes de las
FARC, miembros de la Fuerza Pública y terceros que hayan participado en el Conflicto armado
colombiano. Su presidente es la abogada Patricia Linares, designada en septiembre de 2017 por el
Comité de Escogencia del Sistema de Verdad, Justicia y Reparación y No Repetición.12

La JEP, componente de justicia del Sistema Integral de Verdad, Justicia, Reparación y No


Repetición,3 está vigente en Colombia desde marzo de 2017 cuando fue aprobado en el Senado y
afecta a los delitos cometidos durante el conflicto armado hasta la firma de los acuerdos de paz
entre el gobierno de Juan Manuel Santos y la guerrilla de las FARC el 24 de noviembre de 2016.

Su creación fue pactada por el gobierno de Juan Manuel Santos y la guerrilla de las FARC en el
marco de los acuerdos de paz firmados en La Habana como sistema de rendición de cuentas con el
objetivo principalmente de satisfacer los derechos de las víctimas, con la tarea de esclarecer “en el
contexto y en razón del conflicto armado, en particular los delitos más graves y representativos”
para poner punto final a más de medio siglo de conflicto armado.4

En este acuerdo se acepta que hay delitos cometidos en el contexto y en razón del conflicto
armado que son tan graves que no pueden ser objeto de amnistías e indultos, y que la transición
del conflicto armado a la paz en Colombia se hará garantizando el derecho de las víctimas a la
justicia.3

Desde su conformación, la JEP ha sido cuestionada debido a los casos que investiga relacionados al
conflicto armado con las FARC que incluyen presuntos delitos de lesa humanidad. sobre todo por
el partido de derecha Centro Democrático presidido por el expresidente y senador Álvaro Uribe
Velez y el presidente de la república, del mismo partido político, Iván Duque Márquez, quienes
manifiestan que estos delitos no debieran ser amnistiables y la JEP lo que hará es "darle
impunidad" a aquellos que cometieron delitos atroces. También es cuestionada por algunos
escándalos que involucran contratos sin el cumplimiento de requisitos y sobornos a fiscales de la
JEP para favorecer ciertos casos, por lo que Uribe propone derogar esta Jurisdicción Especial de
Paz.56

Historia del acuerdo sobre justicia transicional[editar]

El acuerdo sobre la justicia transicional fue el resultado de largas discusiones entre el gobierno y
los abogados de la guerrilla en La Habana y Bogotá en el marco de las negociaciones de los
acuerdos de paz, que habían comenzado en julio trabajando bajo el ultimátum de Santos para
alcanzar tal acuerdo en noviembre a más tardar. Ante un callejón sin salida en La Habana, los
negociadores delegaron el trabajo a un grupo de seis respetados juristas: el abogado español
Enrique Santiago, el político conservador Álvaro Leyva, el defensor de los derechos humanos Diego
Martínez, el ex juez Manuel José Cepeda, el profesor Douglass Cassel y rector de la Universidad de
Notre Dame de la Universidad Externado de Colombia Juan Carlos Henao; los primeros tres
seleccionados por las FARC, los últimos tres por el gobierno. Para septiembre, el equipo de seis
tenía un texto listo para ser anunciado en La Habana.7

El 23 de septiembre de 2015 el gobierno de Colombia y las FARC llegaron a un acuerdo histórico


sobre justicia transicional denominado Jurisdicción Especial para la Paz. El presidente Juan Manuel
Santos y el comandante de las FARC Rodrigo Londoño viajaron a La Habana para el anuncio del
acuerdo escenificando el primer encuentro público entre un presidente de Colombia y el
comandante de las FARC.8

La delegación presidencial incluyó al presidente del Congreso y Senador Luis Fernando Velasco, al
presidente de la Cámara de Representantes Alfredo Deluque, al senador y líder liberal Horacio
Serpa, al senador Antonio Navarro Wolff (él mismo un guerrillero desmovilizado del M 19) y al
senador Iván Cepeda, así como Juan Carlos Henao y Manuel José Cepeda, ex jueces del Tribunal
Constitucional que habían participado en la elaboración del acuerdo. La reunión terminó con un
apretón de manos improvisado entre el presidente Santos y Timochenko, ignorado por el
presidente cubano, Raúl Castro. Simultáneamente con el acuerdo, el gobierno también anunció
que se firmaría un acuerdo final dentro de los seis meses o antes del 23 de marzo de 2016. 8

El acuerdo del 23 de septiembre sobre justicia transicional fue considerado el más importante en
el proceso de paz hasta la fecha, ya que resolvió uno de los temas más complicados mediante una
fórmula satisfactoria tanto para la guerrilla como para el gobierno, combinando justicia
restaurativa con sentencias alternativas para guerrilleros y agentes del Estado que han cometido
crímenes de lesa humanidad con amnistía para los responsables de crímenes políticos. Con el
acuerdo, el proceso de paz se consideró "irreversible".

El anuncio fue aclamado internacionalmente. El secretario de Estado, John Kerry, elogió


efusivamente el acuerdo, y sus palabras fueron transmitidas por el jefe negociador jefe de las
FARC, Iván Marquez. Fatou Bensouda, fiscal de la Corte Penal Internacional, "señaló con
optimismo que el acuerdo excluye la concesión de amnistías para crímenes de guerra y crímenes
contra la humanidad y está diseñado, entre otras cosas, para poner fin a la inmunidad para los
crímenes más graves".9 Sin embargo, Human Rights Watch criticó el acuerdo y dijo que eximiría a
los responsables de los peores abusos de pasar un solo día en la cárcel, opinión compartida en
Colombia por Álvaro Uribe. En Colombia, el anuncio fue recibido con cauto optimismo. Según una
encuesta de Ipsos en octubre el optimismo en el proceso de paz aumentó del 29% al 46% desde
julio, aunque la mayoría de los encuestados continuaron dudando del compromiso de las FARC
con la paz y oponiéndose a su participación política.10

Tras la firma de los acuerdos de paz el 24 de noviembre de 2016 el Acto Legislativo Jurisdicción
Especial para la Paz (JEP) se convirtió en norma Constitucional tras aprobarse en el Senado el 14
de marzo de 2017 con 60 votos a favor y 2 en contra.4

Objetivos de la JEP[editar]

Los objetivos de la Jurisdicción son satisfacer el derecho de las víctimas a la justicia, ofrecer verdad
a la sociedad colombiana, proteger los derechos de las víctimas, contribuir al logro de una paz
estable y duradera, y adoptar decisiones que otorguen plena seguridad jurídica a quienes
participaron de manera directa o indirecta en el conflicto armado interno, respecto a hechos
cometidos en el contexto y en razón del mismo, en particular aquellos que constituyan graves
infracciones al Derecho Internacional Humanitario o graves violaciones de los Derechos
Humanos.3

Se trata de un sistema de rendición de cuentas que, además, tendrá la tarea de esclarecer y


sancionar las conductas cometidas “en el contexto y en razón del conflicto armado, en particular
los delitos más graves y representativos”. En el acuerdo se acepta que hay delitos cometidos en
medio de la guerra que “son tan graves que no pueden ser objeto de amnistías e indultos”.4

Según el Alto Comisionado para la Paz los objetivos de la JEP son:

Satisfacer el derecho de las víctimas a la justicia

Ofrecer verdad a la sociedad colombiana

Contribuir a la reparación de las víctimas

Contribuir a luchar contra la impunidad

Adoptar decisiones que otorguen plena seguridad jurídica a quienes participaron de manera
directa o indirecta en el conflicto armado, respecto a hechos cometidos en el contexto y en razón
de éste.

Contribuir al logro de una paz estable y duradera.

Composición[editar]

La JEP estará integrada por Magistrados principalmente colombianos, sin perjuicio de una
participación minoritaria de extranjeros, y estará compuesta por cinco órganos y una Secretaría
Ejecutiva:43
El Tribunal para la Paz, que estará compuesto por diferentes secciones encargadas de evaluar las
conductas reconocidas, los responsables, las sanciones y el modo en que éstas serán ejecutadas.
También deben verificar el cumplimiento de sus sentencias. Al tribunal llegarán las acusaciones de
la Sala Unidad de Investigación y las apelaciones sobre las decisiones de las otras salas y de sus
propias secciones. En los casos de las personas que hayan cumplido una pena en la justicia
ordinaria, será esta autoridad quien revise las sentencias y su cumplimiento.

Sala de Reconocimiento de Verdad y Responsabilidad y de Determinación de los Hechos y


Conductas: a cargo de recibir toda la información y los reconocimientos de responsabilidad en
hechos del conflicto armado, como lo señaló el Alto Comisionado para la Paz. Además deberá
identificar los casos más graves y representativos. Aun así, su competencia no se limita a ellos.

Sala de Amnistía e Indulto: para decidir si otorga o no la amnistía o el indulto, cuando se trate de
casos y personas que puedan aspirar a ello. Cuando se trate de individuos que califiquen para
ninguna de estas dos categorías deberá remitir los casos a la primera sala.

Sala de Definición de Situaciones Jurídicas: tiene la responsabilidad de definir qué pasará con la
situación jurídica de quienes no sean objeto de amnistía ni indulto ni tampoco estén incluidos en
las resoluciones emitidas por la Sala de Reconocimiento de Verdad y Responsabilidad.

Sala de Unidad de Investigación y Acusación: cuando se presente un caso en el que la persona o


los implicados no reconozcan su responsabilidad, esta será la autoridad encargada de investigar y,
si existe mérito, llevar los procesos ante el Tribunal para la Paz. En caso de que considere que no
es necesario acusar o investigar, remitirá los expedientes a la Sala de Definición de Situaciones
Jurídicas o a la Sala de Amnistía e Indulto. Además de contar con un equipo de investigación
técnico forense, deberá tener un equipo de investigación especial para casos de violencia sexual.

Secretaría Ejecutiva: encargada de la administración, gestión y ejecución de los recursos de la JEP.

Aplicación[editar]

La JEP se aplica a todos quienes habiendo participado de manera directa o indirecta en el conflicto
armado, cometieron delitos en el contexto y en razón de éste. En este sentido, la Jurisdicción se
aplicará a:3

los miembros de grupos guerrilleros que suscriban un acuerdo final de paz con el Gobierno, una
vez hayan dejado las armas;

los agentes del Estado que hayan cometido delitos en el contexto y en razón del conflicto armado;

y las personas que sin formar parte de las organizaciones o grupos armados hayan participado de
manera indirecta (financiadores o colaboradores) en el conflicto armado y hayan tenido
responsabilidad en la comisión de los crímenes más graves y representativos.

Das könnte Ihnen auch gefallen