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EL COMODATO

II.- DEFINICIÓN

El Art. 1728 define al comodato: «Por el comodato una persona entrega a otra
gratuitamente alguna cosa para que lo use por cierto tiempo, o para cierto fin, y después
lo devuelva». Del contrato nace la obligación del comodante a entregar un bien. Esta
entrega constituye la ejecución del contrato

III.- CARACTERÍSTICAS

 Es un contrato principal o autónomo, porque tiene vida propia e independiente.


No es accesoria como la fianza, la prenda, la anticresis.
 Es gratuito, porque es un contrato “en el cual una de las partes recibe una ventaja
o beneficio, en tanto que la otra soporta un sacrificio sin contrapartida”.
 Es un contrato de prestaciones correlativas o recíprocas, porque ambas partes
asumen obligaciones vinculadas entre sí, como se menciona en el artículo 1728
del C.C.
 Es un contrato con libertad de forma, pues la entrega no es una condición de su
existencia, sino una fase de su ejecución.
 Es conmutativo, porque se puede prever las consecuencias y se pate de hechos
ciertos.
 Confiere el uso de carácter temporal porque hay la obligación de devolver la
misma cosa, en las circunstancias planteadas por el contenido del contrato y por
la ley. En esto se diferencia del mutuo y de la compraventa, que son de
transferencia definitiva.
 Es individual, porque se perfecciona con el consentimiento que presta el
comodante y el comodatario.
 Es de uso y disfrute, pues su esencia es que el comodatario aproveche del bien y
por ello la doctrina lo conoce con el nombre de préstamo de uso.

IV.- DERECHOS Y OBLIGACIONES DEL COMODANTE

 DERECHOS
1. Exigir la devolución del bien, si tiene necesidad urgente de él.
2. Exigir la devolución del bien si existe peligro de que perezca en poder del
comodatario, aunque se haya estipulado plazo o uso; y
3. Exigir la devolución del bien, si el comodatario lo hubiera entregado en
comodato a un tercero, sin su consentimiento.
 OBLIGACIONES
1. Entregar el bien en el plazo convenido.
(Esta obligación tiene que ser oportuna. De no haberse señalado el plazo la
entrega deberá ser inmediata).
2. Comunicar oportunamente al comodatario si el bien adolece de algún vicio que
conoce.
(Consagra un caso especial de vicio oculto, basado en las características
propias del comodato. De hecho, no se siguen las reglas generales que el código
contiene respecto del vicio oculto, sino que plantea una responsabilidad más
benigna, obligando al comodante únicamente cuando tenga conocimiento del
vicio y no se haya hecho saber al comodatario).
3. No solicitar la devolución del bien, antes del plazo estipulado y, en defecto de
pacto, antes de haber servido al uso para el que fue dado en comodato, salvo el
caso previsto en el artículo 1736.
(Plantea una obligación de no hacer, donde el comodante tiene que respetar los
derechos de la otra parte y está compelido a no solicitar la restitución del bien
antes del término convenido, y a falta del mismo, sin haber servido en el uso
para el que fue prestado).
4. Pagar los gastos extraordinarios que hubiese hecho el comodatario para la
conservación del bien.
(Mantiene la tónica de la legislación comparada, según la cual el comodante
está obligado a reintegrar los gastos extraordinarios que hubiese hecho el
comodatario para la conservación del bien prestado).

V.- DERECHOS Y OBLIGACIONES DEL COMODATARIO

 DERECHOS

El comodatario no responde si el bien se deteriora o modifica por efecto del uso para el
que ha sido entregado.
1. El comodatario tiene derecho a retener el bien, solo cuando no le hayan sido
pagados los gastos extraordinarios a que se refiere el artículo 1735°, inciso 4.
 OBLIGACIONES

Las obligaciones del comodatario están establecidas en el art. 1738 del Código Civil
que señala lo siguiente:

1. Custodiar y conservar el bien con la mayor diligencia y cuidado, siendo


responsable de la pérdida o deterioro que no provenga de su naturaleza o del uso
ordinario.
En caso de perecimiento del bien, y en atención a lo señalado en el artículo
1742º, el comodatario debe pagar el valor del bien dado en comodato si este
perece por causa que no le es imputable, siempre que hubiese podido evitarlo
sustituyéndolo con uno de su propiedad, pero no lo hizo.
2. Emplear el bien para el uso determinado en el contrato o, en su defecto, según la
naturaleza del mismo y la costumbre, siendo responsable del deterioro o pérdida
provenientes del abuso.
El inciso anteriormente indicado, se coloca en dos hipótesis distintas a saber: a)
Que en el contrato se haya expresado cual seria el uso que se dará al bien, pues
el contrato tiene fuerza de ley entre las partes; y b) Que a falta de pacto, ese
uso sea coherente con su naturaleza, pues de otro modo habrá abuso por parte
del comodatario. Si se presta en uso un automóvil para que sirva como medio
de trasporte el comodatario no podrá emplearlo en competencias deportivas.
3. Permitir que el comodante inspeccione el bien para establecer su estado de uso y
conservación.
En este inciso se reconoce el derecho del comodante de establecer en cualquier
tiempo el estado de uso y conservación del bien prestado. En caso de
comprobarse desnaturalización del contrato, podrá adoptar medidas necesarias
para proteger sus intereses y evitar deterioros o pérdidas posteriores.
4. Pagar los gastos ordinarios indispensables que exija la conservación y uso del
bien, ello mientras se sirva de él. En caso sean gastos extraordinarios, revierten
al comodante. Es cuestión casuística determinar por el perito o el juez, si el
gasto es ordinario o extraordinario.
En el inciso 4) se impone al comodatario la obligación de efectuar los fastos
ordinarios inherentes a la conservación y uso del bien, como contrapartida por
el hecho de que esos beneficios le son otorgados a título gratuito.
5. Devolver el bien en el plazo estipulado o, en su defecto, después del uso para el
que fue dado en comodato. Pero considerando la naturaleza gratuita del contrato,
el comodante puede solicitarle el bien, si necesita con urgencia, amparado en el
art 1736º y 1737º.

VI.- BIENES MATERIA DEL CONTRATO (OBJETO)

Se pueden dar en comodato, bienes muebles o inmuebles, que su uso debe ser posible,
que tenga un valor económico y que sea permitido por la ley o las buenas costumbres.
Tratándose de bienes muebles, estos deben ser bienes no fungibles o no consumibles,
pues existe la obligación del comodatario de devolver el mismo bien sin más deterioro
que el uso normal y diligente.
Además, conforme al código civil, en el artículo 1729° hace mención al comodato de
bien consumible; el cual prescribe: “hay comodato de bien consumible sólo si es
prestado a condición de no ser consumido.”
Por lo tanto, cuando el comodato tuviese por objeto bienes consumibles, solo será
considerado como tal si ellos fuesen prestados como no consumibles, pues deberán
ser restituidos en forma idéntica (in natura). Tal sería el caso, por ejemplo, de un
excelente vino prestado con la finalidad de ser exhibido en una feria o exposición,
pero que luego debe ser devuelto al comodante en forma idéntica a como fue
entregado, esto es, sin haber sido consumido; o de una cantidad de bolsas de granos
o artículos de almacén (azúcar, aceite de cocina, etc.) Que se prestan para armar un
escenario o para un comercial o propaganda, entre tantas otras posibilidades. En
suma, la idea eje de este contrato de uso sobre un bien consumible prestado con la
condición de no ser consumido, es que dicho bien se destine a una finalidad distinta a la
que por su naturaleza le correspondería.
Sobre el particular, Castillo Freyre precisa que "celebrar un comodato sobre un bien de
carácter consumible implica, necesariamente, que en ese contrato se prevea un destino
distinto de aquel que normalmente se debería dar a ese bien, ya que -precisamente- el
destino normal y su naturaleza, son los elementos que hacen que habitualmente se le
califique como bien consumible.

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