Beruflich Dokumente
Kultur Dokumente
ESTUDIANTE
ANA MAILETH BALETA PÉREZ
ANDRES FELIPE RIOS LOSADA
YEIMY LISETH IMBACHI CHAVARRO
TUTOR:
MAYCOL JAVIER PARRADO
INTRODUCCIÓN
La corrupción en nuestro país es un tema de mucha polémica y hoy en día se ha vuelto mucho
más común y que está a la orden del día de todos los colombianos, todos los grupos
gubernamentales han experimentado en algún momento hechos de corrupción, por medio de
personas que aprovechan los cargos que ejercen para obtener beneficios personales.
La Crisis en la Justicia y otros actos son síntomas de un Estado cada vez más débil, Porque
hay normas en el papel, gobernantes con poder, funcionarios con decretos, y jueces con
atribuciones, pero en la vida cotidiana poco se sienten y la autoridad parece adormecida en
el ejercicio de gobernar con trasparencia, estas convicciones se profundizan dentro del
contenido de este ensayo con el objetivo de identificar porque están débiles las instituciones
del estado y por qué la corrupción no acaba o disminuye si tenemos tantas herramientas,
mecanismos e instrumentos contemplados en la Constitución para combatirlas, son acaso
aspectos relacionados con la cultura o con lo permisivo de la ley colombiana.
La corrupción hace daño a las instituciones, no hay excusa que justifique la corrupción dentro
de las instituciones públicas, estamos llamados a respetar las leyes. Es paradójico que los
funcionarios mejores pagos dentro del sistema y con cargos públicos influyentes elegidos
por votación popular, sean los que encabezan los mayores actos de corrupción en Colombia,
los entes de fiscalización, vigilancia y control están en la obligación de auditar, prever y
corregir situaciones irregulares dentro de diferentes contratos y licitaciones para garantizar
la ejecución de obras con trasparencia e impedir los malos manejos de los recursos del estado
y de todos los colombianos.
La falta de valores y la cultura que ha trascendido a través de los años de generación en
generación en los entornos políticos, legislativos y democráticos del país han permitido que
se hagan muchas leyes, decretos y resoluciones entre otros, para establecer los lineamiento
necesarios en busca de buen manejo de los recursos, pero como es de saberse, en Colombia
hecha la ley hecha la trampa, muchos casos de corrupción son impunes debido a que en
Colombia las normas y las instituciones, incluidas las que regulan los comportamientos de
los individuos (como Contraloría, Fiscalía y Procuraduría) siguen siendo débiles. Las bajas
penas, los vacíos de las leyes, la dispersión de las mismas, las deficientes y bajas condenas a
los corruptos de cuello blanco no solo desestimulan la denuncia, sino que alimenta la cultura
de la corrupción como dice esa frase popular ser corrupto paga.
Según Andrés Espinosa Fenwarth, El populismo y la demagogia son el cáncer que corroe la
democracia moderna, que lucha, inerme y frágil, para mantenerse a flote en su concepción
más pura; según el pensador francés más lúcido del siglo XX, Raymond Aron, la democracia
es la organización política de competencia pacífica para ejercer el poder donde el arte del
compromiso y los partidos políticos son imprescindibles. La ventaja de la democracia,
sostenía Aron, es que se trata de un régimen “no creado para asegurar la eficacia de los
poderes, sino para defender a los individuos contra los excesos del poder”. Es decir, la
democracia es la mejor forma de gobierno, sirve por igual a los ciudadanos de bien y a sus
detractores, de allí la importancia de reclamar a las gobiernas y a nuestros líderes políticos el
respeto y rescate de los valores morales y éticos para que gobiernen con honestidad,
transparencia y enfocados en el crecimiento y desarrollo de la población o región que haya
puesto su confianza mediante el voto popular.
Desde otro punto de vista la sociología política puede ayudarnos a entender todo lo que
engloba la política de una nación desde sus inicios hasta la evolución que tiene hoy en día,
su sistema electoral, el poder ejecutivo, poder judicial, poder legislativo, las regulaciones
administrativas, medios de comunicación, conflictos sociales y relaciones internacionales
que hacen funcionar el sistema político y la administración pública.
CONCLUSIÓN
Se necesita autoridad. Es decir, instituciones con capacidad efectiva para hacer cumplir las
leyes y para castigar a quienes las violan. La corrupción es como un cáncer maligno, cada
vez que se presenta acaba con todas las buenas intenciones y desarrollo de un estado desde
todas las dependencias y elementos que lo componen (población, territorio y soberanía), la
autoridad poco se ejerce y la credibilidad en las instituciones es frágil; Necesitamos
instituciones con capacidad efectiva para hacer cumplir las leyes y para castigar a quienes las
violan con altos niveles de legitimidad, de confianza y acatamiento, los actos de corrupción y
mal manejo de los recursos del estado se imponen en cualquier escenario y con mayor auge
en las instituciones que hacen parte de la rama ejecutiva del país, estas son violaciones de la
Constitución Política de Colombia y hay que hacerla cumplir por tres razones: por
convicción, por respeto o por miedo. Porque cuando no hay confianza ni credibilidad en las
instituciones del estado las normas, no se acatan, no se cumplen ni se obedecen.
Bibliografía