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UNIDAD 1 y 2: FASE 5 – REFLEXIONES FINALES

INSTITUCIONES DÉBILES ANTE GOBIERNOS CORRUPTOS

ESTUDIANTE
ANA MAILETH BALETA PÉREZ
ANDRES FELIPE RIOS LOSADA
YEIMY LISETH IMBACHI CHAVARRO

TUTOR:
MAYCOL JAVIER PARRADO

UNIVERSIDAD NACIONAL ABIERTA Y A DISTANCIA


COMUNICACIÓN SOCIAL
SOCIOLOGÍA
GRUPO 100006A_611
UDR AGUACHICA CESAR
2019
1. INTRODUCCIÓN

INTRODUCCIÓN
La corrupción en nuestro país es un tema de mucha polémica y hoy en día se ha vuelto mucho
más común y que está a la orden del día de todos los colombianos, todos los grupos
gubernamentales han experimentado en algún momento hechos de corrupción, por medio de
personas que aprovechan los cargos que ejercen para obtener beneficios personales.

La Crisis en la Justicia y otros actos son síntomas de un Estado cada vez más débil, Porque
hay normas en el papel, gobernantes con poder, funcionarios con decretos, y jueces con
atribuciones, pero en la vida cotidiana poco se sienten y la autoridad parece adormecida en
el ejercicio de gobernar con trasparencia, estas convicciones se profundizan dentro del
contenido de este ensayo con el objetivo de identificar porque están débiles las instituciones
del estado y por qué la corrupción no acaba o disminuye si tenemos tantas herramientas,
mecanismos e instrumentos contemplados en la Constitución para combatirlas, son acaso
aspectos relacionados con la cultura o con lo permisivo de la ley colombiana.

INSTITUCIONES DÉBILES ANTE GOBIERNOS CORRUPTOS

La corrupción hace daño a las instituciones, no hay excusa que justifique la corrupción dentro
de las instituciones públicas, estamos llamados a respetar las leyes. Es paradójico que los
funcionarios mejores pagos dentro del sistema y con cargos públicos influyentes elegidos
por votación popular, sean los que encabezan los mayores actos de corrupción en Colombia,
los entes de fiscalización, vigilancia y control están en la obligación de auditar, prever y
corregir situaciones irregulares dentro de diferentes contratos y licitaciones para garantizar
la ejecución de obras con trasparencia e impedir los malos manejos de los recursos del estado
y de todos los colombianos.
La falta de valores y la cultura que ha trascendido a través de los años de generación en
generación en los entornos políticos, legislativos y democráticos del país han permitido que
se hagan muchas leyes, decretos y resoluciones entre otros, para establecer los lineamiento
necesarios en busca de buen manejo de los recursos, pero como es de saberse, en Colombia
hecha la ley hecha la trampa, muchos casos de corrupción son impunes debido a que en
Colombia las normas y las instituciones, incluidas las que regulan los comportamientos de
los individuos (como Contraloría, Fiscalía y Procuraduría) siguen siendo débiles. Las bajas
penas, los vacíos de las leyes, la dispersión de las mismas, las deficientes y bajas condenas a
los corruptos de cuello blanco no solo desestimulan la denuncia, sino que alimenta la cultura
de la corrupción como dice esa frase popular ser corrupto paga.

La corrupción, es un problema que viene de nacimiento; pero también de un sistema de


justicia imperfecto, que no funciona, donde no se logran las cosas por mérito propio, sino por
ser vivo y aprovecharse de aquellos que, si intentan hacer las cosas con transparencia, y
también porque las personas denuncian y no ocurre nada. Mientras no se combata la
impunidad, mientras la corrupción no sea efectiva, oportuna y eficazmente sancionada, va a
ser difícil combatirla. El miedo y el estigma hacia quien denuncia es un punto a favor de los
corruptos, hoy en día los funcionarios no denuncian porque piensan que no va a pasar nada,
también porque les da miedo a perder el puesto y al desprestigio, porque una forma de hacer
quedar mal al denunciante es desprestigiándolo, también, por el miedo a poner en riesgo su
vida, la protección de testigos y denunciantes en el país está avanzando en temas relacionados
con el conflicto armado, pero no ocurre con quienes denuncian casos de corrupción. La
denuncia es vital para luchar contra la corrupción, pero uno de los graves problemas es que
al ciudadano le cuesta saber dónde puede denunciar e identificar si determinado delito es
competencia de la Procuraduría, la Contraloría o la Fiscalía. Este país puede progresar más
si las obras contratadas se realizan en los términos contratados con trasparencia, ningún
funcionario debe tomar ventaja de su posición para sacar provecho de los ciudadanos y de
los recursos del estado, la corrupción es un cáncer de la democracia y ha evolucionado tanto
que, para los entes de control, como para el ciudadano de a pie, es cada vez más difícil
identificar un hecho ilegal que ponga en riesgo los recursos públicos.

Todas las dificultades sociales, económicas, administrativas, entre otras, disminuirían


considerablemente si se mejorara los niveles de educación en el país y se educaran a los
jóvenes y niños en la ética, moral y honestidad, mejoraría nuestra sociedad y para que esto
se pueda cumplir necesitamos profesores bien preparados y que sean enseñar estos valores y
no solo con palabra, si no con su propio ejemplo.

Según Andrés Espinosa Fenwarth, El populismo y la demagogia son el cáncer que corroe la
democracia moderna, que lucha, inerme y frágil, para mantenerse a flote en su concepción
más pura; según el pensador francés más lúcido del siglo XX, Raymond Aron, la democracia
es la organización política de competencia pacífica para ejercer el poder donde el arte del
compromiso y los partidos políticos son imprescindibles. La ventaja de la democracia,
sostenía Aron, es que se trata de un régimen “no creado para asegurar la eficacia de los
poderes, sino para defender a los individuos contra los excesos del poder”. Es decir, la
democracia es la mejor forma de gobierno, sirve por igual a los ciudadanos de bien y a sus
detractores, de allí la importancia de reclamar a las gobiernas y a nuestros líderes políticos el
respeto y rescate de los valores morales y éticos para que gobiernen con honestidad,
transparencia y enfocados en el crecimiento y desarrollo de la población o región que haya
puesto su confianza mediante el voto popular.

Desde otro punto de vista la sociología política puede ayudarnos a entender todo lo que
engloba la política de una nación desde sus inicios hasta la evolución que tiene hoy en día,
su sistema electoral, el poder ejecutivo, poder judicial, poder legislativo, las regulaciones
administrativas, medios de comunicación, conflictos sociales y relaciones internacionales
que hacen funcionar el sistema político y la administración pública.

CONCLUSIÓN

Se necesita autoridad. Es decir, instituciones con capacidad efectiva para hacer cumplir las
leyes y para castigar a quienes las violan. La corrupción es como un cáncer maligno, cada
vez que se presenta acaba con todas las buenas intenciones y desarrollo de un estado desde
todas las dependencias y elementos que lo componen (población, territorio y soberanía), la
autoridad poco se ejerce y la credibilidad en las instituciones es frágil; Necesitamos
instituciones con capacidad efectiva para hacer cumplir las leyes y para castigar a quienes las
violan con altos niveles de legitimidad, de confianza y acatamiento, los actos de corrupción y
mal manejo de los recursos del estado se imponen en cualquier escenario y con mayor auge
en las instituciones que hacen parte de la rama ejecutiva del país, estas son violaciones de la
Constitución Política de Colombia y hay que hacerla cumplir por tres razones: por
convicción, por respeto o por miedo. Porque cuando no hay confianza ni credibilidad en las
instituciones del estado las normas, no se acatan, no se cumplen ni se obedecen.
Bibliografía

Séptimo Día. (2018). Radiografía de la corrupción en Colombia. Recuperado de


https://www.youtube.com/watch?v=KwRz0Bqu9qo

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