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LENI YULIED AVILA ESPITIA

GRUPO 1
CONFIANZA PÚBLICA E INDEPENDENCIA MENTAL DEL CP.

Día tras día los estudiantes de Contaduría Pública debemos interesarnos por conocer y saber
hasta dónde llega nuestra responsabilidad social para con nuestra carrera, como Contadores
Públicos titulados somos unos de los pocos profesionales que poseemos la facultad de dar fe
pública ante cualquier ente o usuario que lo requiera, ya que nos caracterizamos como
profesionales con independencia mental para la toma de nuestras propias decisiones, la
persona que conozca de Contaduría Pública sabe que el estudio de esta no es solo tomar un par
de números y así mismo aplicarlos, sino que este estudio consta de valores morales y éticos
para la aplicación de sus conocimientos, por lo tanto debe ser un profesional competente,
idóneo, independiente, ágil, autónomo, organizado, y sobre todo que cuente con una gran
capacidad de independencia mental, para así poder adquirir libertad personal. Nuestra
profesión hace también relación al desarrollo de los valores éticos y morales, dado que su
ejercicio profesional incorpora alta responsabilidad social por ser depositario de la confianza
pública.

Uno de los problemas más preocupantes que pone en riesgo a la profesión Contable, es la falta
de ética profesional en cuanto a la facultad que nos ha otorgado el estado de dar fe pública, es
por esta razón que muchos Contadores Públicos se han visto afectados y así mismo la
comunidad, la Fe pública es una figura jurídica que originalmente corresponde al Estado, pero
en vista de la imposibilidad material que tiene el Estado, de dar fe de todos los actos en los que
intervienen las personas, se ha visto en la obligación de delegar ésta función en algunas
personas, como es el caso de los Contadores Públicos y Notarios, quienes son los únicos que
cuentan con la delegación dada por el Estado para dar testimonios por escrito de determinados
actos, la esencia del Contador Público es la CONFIANZA PÚBLICA y esta se logra gracias a las
capacidades técnicas, profesionales y éticas del mismo, el Contador Público defiende LA BUENA
FE, y ésta hace presumir que un acto público está conforme a la ley, los cuales están habilitados
para actuar y dar fe pública de acuerdo con las leyes que regulan cada actividad y/o función
investida de tal facultad, sobre los hechos que conozcan y puedan dar cuenta, por haber
ocurrido en su presencia o haber participado en su ejecución y desarrollo.

Razón por la cual en el ejercicio profesional, el Contador Público deberá tener y demostrar
absoluta independencia mental y de criterio con respecto a cualquier interés que pudiere
considerarse incompatible con los principios de integridad y objetividad, es entonces que la
independencia, es una de las características propias de la Profesión Contable, y debe
considerarse esencial.

Al plantear el mayor de los problemas que nos afecta a nosotros los Contadores Públicos, la
gran debilidad en el ejercicio de la facultad de dar FE PUBLICA, y la responsabilidad social a la
que debemos responder de manera honesta y fielmente, es por esto que quiero resaltar la
importancia que tiene este tema para nosotros. En este planteamiento quiero llevar a cabo una
investigación profunda acerca de la responsabilidad social que posee la fe pública del Contador,
ya que el mundo se encuentra en continuo y constante cambio, globalizando su economía,
diversificando los productos y servicios, necesitando cada día que la contabilidad vaya más a su
ritmo, buscando profesionales de la Contaduría no solo con experiencia sino con experticia, lo
que significa tener la capacidad de comprender, asimilar y aplicar con celeridad los nuevos
esquemas y tecnologías, ya que somos los profesionales que gozamos de la capacidad de dar fe
pública.

Es por ello que tenemos la capacidad de independencia mental, haciendo de nosotros los
Contadores Públicos profesionales con libertad personal, motivo por el cual debemos tener
RESERVA PROFESIONAL, hay que tener confidencialidad tanto con el usuario como con el
personal que tengamos a cargo. Puesto que la ética es lo más importante que debe imperar en
un Contador profesional para que pueda cumplir con su trabajo de una forma honrada y
fidedigna, sin dejarse manipular por los de la alta gerencia para faltar a su ética en mostrar
información falsa puesto que con esto también le está faltando a la comunidad y al estado.

La conciencia moral, la aptitud profesional y la independencia mental constituyen la esencia


espiritual del ejercicio de la Contaduría Pública la cual implica una función social, especialmente
a través de la Fe Pública que se otorga en beneficio del orden y la seguridad en las relaciones
económicas entre el Estado y los particulares, o de estos entre sí.

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