Veo A Jesus en Toda La Biblia PDF

Copia Autorizada para distribución sin fines de lucro
Responsables del texto: Francisco Valdivia
Carolina Guerrero
Diseño y dibujos: Carolina Guerrero
Distribuido por Iglesia de niños Encuentro Kids, ministerio Infantil de Comunidad Bautista Encuentro
Altona 3335 Pobl. Aurora de Chile Hualpen, Concepción VIII Región del Bio - Bio, Chile.
Consultas a Encuentrokids@gmail.com
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Introducción
La Biblia no es una serie de historias desconectadas, es un solo narrativo en que cada historia, y cada
personaje señala a una persona que es más grande.
La historia de Adán y Eva no se trata sólo del primer hombre y la primera mujer, hay un mejor y
verdadero Adán que pasó la prueba en el huerto y cuya obediencia se nos confiere.
Hay un mejor y verdadero Abel que fue inocentemente asesinado y cuya sangre clama por nuestra
absolución en vez de nuestra condenación.
Hay un mejor y verdadero Abraham quien contestó el llamado de Dios para dejar todo lo cómodo y
familiar y salir al vacío a crear un nuevo pueblo de Dios.
Hay un mejor y verdadero Isaac, el hijo de risa, de gracia. Que no sólo fue ofrecido por su padre en
el monte, sino que verdaderamente fue sacrificado por nosotros.
Hay un mejor y verdadero Jacob quien luchó y recibió el golpe de justicia que nosotros merecíamos
para que al igual que Jacob solo recibiéramos las heridas de gracia que nos despiertan y
nos disciplinan.
Hay un mejor y verdadero José quien a la diestra del Rey perdona a los que le traicionaron y
vendieron y que usa su nuevo poder para salvarlos.
Hay un mejor y verdadero Moisés quien se pone en la brecha entre el pueblo y el Señor y es mediador
de un nuevo pacto.
Hay una mejor y verdadera peña de Moisés quien siendo golpeado con la vara de la justicia de Dios,
ahora nos brinda agua en el desierto.
Hay un mejor y verdadero Job quien de veras sufrió inocentemente para después interceder por y
salvar a sus amigos insensatos.
Hay un mejor y verdadero David cuya victoria se convierte en la victoria del pueblo aunque ellos
mismos ni siquiera levantaron una piedra.
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Hay una mejor y verdadera Ester, quien no sólo arriesgó perder un palacio terrenal, sino que perdió
Su gran palacio celestial. No sólo arriesgaba su vida, sino que la entregó para salvar a su pueblo.
Hay un mejor y verdadero Jonás, arrojado a la tempestad por el rescate de muchos.
Hay un mejor y verdadero cordero pascual: inocente, perfecto, indefenso, inmolado para que pasara
de largo el ángel de la muerte. Él es el verdadero templo, el verdadero profeta, sacerdote y rey, el
verdadero cordero y sacrificio, la luz verdadera y el pan verdadero.
La Biblia no es una serie de historias desconectadas es un solo narrativo que nos señala a una
persona... a Jesús
Extracto video Mejor y verdadero
Dan Stevers
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Palabras del Autor…
Quiero dar las gracias primeramente a Dios por permitirnos participar de este hermoso libro creado
con solo propósito, mostrar a Jesús en toda la Biblia y así los niños puedan amar la Palabra de Dios
de principio a fin, conociendo la verdad, conociendo que toda ella cumple un objetivo esencial y es
cumplir la perfecta voluntad de nuestro Padre Celestial.
Este Libro Extrae las historias más reconocidas y significativas, como también los salmos y profecías
que vemos claramente la figura de Jesús y su plan redentor.
Agradezco también a mi Esposo Francisco Valdivia por su paciencia y apoyo en la interpretación de

los textos aquí compilados, sin su ayuda creo que habría sido más lenta su reproducción.
Doy gracias en especial al precioso Santo Espíritu quien nos guía e inspira día tras día a través de la
Biblia, toda revelación, toda nueva enseñanza es de su entera autoría, sin la ayuda de Él jamás
podríamos haber hecho nada de esto.
Muchas gracias a nuestro Padre Celestial por revelarnos a su Hijo Unigénito, por darnos su Nombre,
por darnos a conocer y regalarnos su Gracia y así poder entrar a su Reino eternal, gracias por darnos
la autoridad de ser hechos hijos de suyos por el solo hecho de creer en su Hijo Jesucristo.
Todo honor, toda Gloria, toda alabanza sean dadas a Rey de reyes y Señor de señores, a nuestro
amado, fiel y justo, JESÚS.
Carolina Guerrero
Coordinadora Iglesia de niños Encuentro Kids
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En el CULTO de niños…
EL orden del Culto es de suma importancia, los niños son personas que están formación, tanto su
carácter como su forma de desempeñarse en la sociedad, por esto, ellos necesitan una rutina
estable donde puedan aprender con tranquilidad y seguridad, cualquier cosa que los saque de la
rutina impide una concentración optima y llevará al niño a una comprensión parcial y errónea de la
lección.
Si se requiere hacer actividades lúdicas estas deben ir en consecuencia con el tema central de la
lección, cualquier otra cosa se debe realizar fuera del horario de la escuela bíblica.
Los tiempos que mencionaremos es importante no sobrepasarlos, ya que la atención de los niños
es muy limitada (30 minutos) por esto se sugiere que la explicación del tema central este en el pic
de atención que es en el minuto 20 aproximadamente.
Al inicio se reúne todo el grupo de niños, independiente de las edades para:

- la oración y bienvenida.
- Cantos de alabanza y adoración
- Predicación
- Oración de ministración
- Ofrenda
Luego se reparten por grupos, niveles o por edades para:

- Reflexión en grupo (sobre la predicación principal)
- Actividad o manualidad en clase (siempre ligada al texto y la reflexión base)
- Colación (puede ser dada por el ministerio o el niño la puede traer de casa)
- Oración en grupo
Para finalizar nos volvemos a reunir todos para:

- Conclusión del día
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- Oración y canto final.
También podemos agregar una actividad extra que pueden evaluar, y es el versículo clave, este
debe ser voluntario, pero no menos importante, al niño que se aprenda el versículo se debe premiar
distintivamente para incentivar tanto al niño como al grupo a aprender los versículos clave.
ALGUNOS TIPS:
La preparación es muy importante, por esto considere las siguientes sugerencias para cada
momento:
PREPARACIÓN PERSONAL: Leer la lección por lo menos con una semana de anticipación y pedir en
oración la revelación de este, siempre Dios tendrá inspiración y estrategias nuevas para enriquecer
la clase.
AMBIENTACIÓN DE LA CLASE. Pueden adornar la sala con toda clase de cosas que hagan referencia
al tema central de cada lección, también resulta muy bien pegar pequeñas frases o los versículos
clave en las paredes.
EN LA PREDICACIÓN. Pueden utilizar todo tipo de ayuda visual, como videos, obras de teatros, obras
de títeres, papelografos, franelografos, fotos, dibujos, ppt, etc. Es importante que el mensaje lo
reciba escuchando, mirando y experimentando.
EN LA ACTIVIDAD POR GRUPO. Siempre al final de la reflexión es fundamental reforzarla con algo
que les haga experimentar la lección aprendida, coloreando, dibujando, recortando, haciendo
rompe cabezas, con juegos de mesa, fabricando recuerdos, etc. Ponga música suave para incentivar
a la creatividad.
RECUERDOS. Aunque pudiera ser que no siempre se haga, pero de vez en cuando es bueno
prepararles un recuerdo para que lleven a casa algo de la lección aprendida. Puede ser también de
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los días festivos como el día del niño, fiesta patrias, pascua o navidad. Un recuerdo significativo y
que represente el amor que el maestro tiene hacia el niño.
EL orden e instrucciones básicas son solo una sugerencia donde los recursos humanos y materiales
sean óptimos. Cada maestro debe adaptar las clases como mejor le convenga.
Los Padres pueden utilizar como tarea, reforzar las clases en casa y ayudar a los niños a aprender
los versículos claves para memorizar.
El conjunto maestro –padres es la mejor alianza para ayudar a los niños en su vida de fe, el niño no
solo obtendrá el conocimiento sino que podrá vivir una vida de fe conforme a las escrituras desde
su más tierna edad, solo depende de nosotros los adultos cuan comprometidos estemos de instruir
la palabra de Dios y vivir conforme a ellas.
Procuremos conocer y dar a conocer a Jesús, a las nuevas generaciones y ganarlos para el Reino de
Dios.
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Índice Temático
Serie#1 La Creación
1.- El hombre a su Imagen
2.- La simiente de la mujer
3.- Abel y su ofrenda
4.- El Arca de Noé
Serie#2 Dios Construye una nación

5.- Abraham y la promesa
5.- Melquisedec, sacerdote para siempre
7.- Isaac y la provisión en Moriah
8.- Jacob en Peniel
Serie#3 De la Esclavitud a la libertad

9.- Llamados de Egipto
10.- El cordero Pascua
11.- El paso por el mar Rojo
12.- El maná
13.- El agua de la Roca
Serie#4 El sacerdocio
14.- El Tabernáculo
15.- El día de Reposo
16.- El Holocausto
17.- El sacerdocio de Aarón
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Índice Temático
Serie#5 La tierra prometida

18.- La serpiente de Bronce
19.- La ciudad de refugio
20.- La tierra prometida
21.- El profeta como Moisés
Serie#6 La Sombra de un Mesías

22.- José, Humillación y exaltación
23.- Sansón, Fuerza incomparable
24.- David y Mefi-Boset
25.- Job
26.- Ester
Serie#7 Anunciado EN LOS SALMOS i

27.- El Justo de Dios
28.- El Hijo de Dios
29.- Perseguido por el maligno
30.- E Hijo de hombre
Serie#8 Anunciado en los salmos ii

31.- Jesús y la maldad del hombre
32.- El hombre incorruptible
33.- El hombre desamparado
34.- El buen Pastor
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Índice Temático
Serie#9 anunciado en los salmos iii

35.- La seguridad de Cristo
36.- Elogios al Rey
37.- Jesús el Rey de Gloria
38.- El perdón de Cristo
Serie#10 Los profetas

39.- El anuncio del nacimiento de Jesús
40.- Su nacimiento
41.- La visita de los reyes
42.- Adoración celestial
Serie#11 Señales
43.- Varón de dolores
44.- Aquel que llevó nuestros pecados
45.- Silenciosa muerte
46.- Gloriosa resurrección
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Serie #1 La Creación
El Hombre a su Imagen
Cuando Dios en el principio creo los cielos y la tierra y todo lo que en ellos
hay, y vio que todo lo que había hecho era bueno.
Entonces dijo: «Hagamos al ser humano a nuestra imagen y semejanza.
Que tenga dominio sobre los peces del mar, y sobre las aves del cielo;
sobre los animales domésticos, sobre los animales salvajes, y sobre todos
los reptiles que se arrastran por el suelo.» Y Dios creó al ser humano a su
imagen; lo creó a imagen de Dios. Hombre y mujer los creó, y los bendijo con estas palabras: «Sean
fructíferos y multiplíquense; llenen la tierra y sométanla; dominen a los peces del mar y a las aves
del cielo, y a todos los reptiles que se arrastran por el suelo.» También les dijo: «Yo les doy de la tierra
todas las plantas que producen semilla y todos los árboles que dan fruto con semilla; todo esto les
servirá de alimento. Y doy la hierba verde como alimento a todas las fieras de la tierra, a todas las
aves del cielo y a todos los seres vivientes que se arrastran por la tierra.» Y así sucedió. Dios miró
todo lo que había hecho, y consideró que era muy bueno. Y vino la noche, y llegó la mañana: ése fue
el sexto día.
(Génesis 1:26-31)
Jesús es la verdadera imagen

Cuando hablamos de imagen de Dios, nos resulta difícil saber de ¿Cómo es Dios? Aunque en el texto
anterior nos dice claramente que su imagen es como la nuestra.
Cuando Jesús estuvo entre nosotros dijo que El venía de Dios e incluso en Juan 14; 9 dice: el que me
ha visto a mí, ha visto al Padre. Por una deducción sencilla podemos decir que Dios tiene forma
humana. Pero esto es más profundo de lo que podemos pensar.
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En el texto de Génesis Dios dice “Hagamos” al hombre a “nuestra imagen”, si sabemos que Dios es
uno solo, ¿Por qué dice “hagamos”? Juan el Bautista dijo algo referente a esto en Juan 1: 1-3 En el
principio era el Verbo, y el Verbo era con Dios, y el Verbo era Dios. Este era en el principio con Dios.
Todas las cosas por él fueron hechas, y sin él nada de lo que ha sido hecho, fue hecho. Aquí se describe
a Jesús como el Verbo o la Palabra y menciona que desde el principio estuvo con Dios.
Luego los apóstoles lo siguieron confirmando en Hebreos 1: 3 el cual, siendo el resplandor de su gloria,
y la imagen misma de su sustancia, y quien sustenta todas las cosas con la palabra de su poder… Jesús
es la imagen verdadera de Dios.
Cuando el hombre fue creado Dios sacó la imagen de Jesús, pues Él tenía un gran plan desde antes
que el mundo existiera, Toda la humanidad fue creada por una razón, para que el Hijo de Dios
pudiera venir a esta tierra y además pudiera cumplir (Jesús) su más profundo sentir, y era exaltar a
su Padre, no haciéndose igual a Él, sino que despojándose de su condición divina se hizo hombre
(Filipenses 2:5-11). Jesús desde antes ya tenía planeado venir a la tierra con la forma humana, es por
eso que nos dio esta particular forma.
Desde que Jesús es introducido en el mundo terrenal ya no podemos hacernos más imágenes de
cómo es Dios, aunque desde antes ya estaba advertido en los diez mandamientos “no te harás
imagen”, pues Dios ya tiene una forma, y es Jesús. Ahora bien, ninguno de nosotros conoció en
persona a Jesús para poder recordar su rostro, pero si tenemos algo que podemos recordarle y más
que eso, Él nos dejó algo para que podamos vivir tranquilos y protegidos, él nos dejó su Nombre,
Jesús. Ya no necesitamos imágenes, su nombre en nuestra mente es suficiente para tener la idea de
quien es Dios.
Creamos que Jesús es la verdadera imagen de Dios, vivamos con Fe en el hermoso regalo que EL no
dejó, su nombre, entreguemos todo nuestro corazón cada vez que oremos y declaremos con toda
la fe su nombre, y sobre todo creamos que en el Nombre de Jesús tenemos la Salvación y la vida
eterna.
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Verso clave
Él es la imagen del Dios invisible, el primogénito de toda creación.

(Colosenses 1:15)
Entrevistas para Recordar

Formen equipos de dos personas: uno será el entrevistador y el otro el entrevistado,
las preguntas están dispuestas en unas tarjetas al final del tema, al terminar las
entrevistas los entrevistadores deberán leer las respuestas que consiguieron
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La simiente de la mujer
Cuando el día comenzó a refrescar, oyeron el hombre y la

mujer, que Dios andaba recorriendo el jardín; entonces
corrieron a esconderse entre los árboles, para que Dios no los
viera. Pero Dios el SEÑOR llamó al hombre y le dijo: — ¿Dónde
estás? El hombre contestó: —Escuché que andabas por el
jardín, y tuve miedo porque estoy desnudo. Por eso me
escondí. — ¿Y quién te ha dicho que estás desnudo? —Le preguntó Dios—. ¿Acaso has comido del
fruto del árbol que yo te prohibí comer? Él respondió: —La mujer que me diste por compañera me
dio de ese fruto, y yo lo comí. Entonces Dios el SEÑOR le preguntó a la mujer: — ¿Qué es lo que has
hecho? —La serpiente me engañó, y comí —contestó ella. Dios el SEÑOR dijo entonces a la
serpiente: «Por causa de lo que has hecho, ¡maldita serás entre todos los animales, tanto domésticos
como salvajes! Te arrastrarás sobre tu vientre, y comerás polvo todos los días de tu vida. Pondré
enemistad entre tú y la mujer, y entre tu simiente y la de ella; su simiente te aplastará la cabeza, pero
tú le morderás el talón.» A la mujer le dijo: «Multiplicaré tus dolores en el parto, y darás a luz a tus
hijos con dolor. Desearás a tu marido, y él te dominará.» Al hombre le dijo: «Por cuanto le hiciste
caso a tu mujer, y comiste del árbol del que te prohibí comer, ¡maldita será la tierra por tu culpa! Con
penosos trabajos comerás de ella todos los días de tu vida. La tierra te producirá cardos y espinas, y
comerás hierbas silvestres. Te ganarás el pan con el sudor de tu frente, hasta que vuelvas a la misma
tierra de la cual fuiste sacado. Porque polvo eres, y al polvo volverás.» El hombre llamó Eva a su
mujer, porque ella sería la madre de todo ser viviente.
(Génesis 3:8-20)
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Jesús es la verdadera Simiente
En el texto que acabamos de leer vemos claramente las consecuencias de lo que hicieron Adán y
Eva, ellos habían desobedecido un mandamiento, “no comer del árbol del fruto del bien y del mal”.
Por un lado Dios pidió explicaciones a ambos y ninguno tuvo el valor de reconocer su error.
Detengámonos esta vez en la “consecuencia” que tuvo que cargar la mujer, Dios declara que desde
ese momento habría enemistad entre la mujer y su simiente y la serpiente, y que la simiente de la
mujer aplastaría la cabeza de la serpiente y esta le mordería el talón.
Al pasar por las historias, vemos que pasan muchas generaciones que no cumplen con lo que Dios
dice, más cuando Jesús nace en esta tierra, recién allí comienza el cumplimiento de esa declaración.
¿Cómo Jesús cumple la sentencia que Dios había dado? La serpiente que vemos en el Jardín de Edén
es el Diablo y la simiente a la que Dios se refería era a su propio Hijo, nacido luego de una mujer, este
era el único que podía destruir al Diablo, nadie más, nadie tiene el suficiente poder para realizar esto,
solo el Hijo de Dios. Entonces, cuando Jesús viene a la tierra, cumple la voluntad de su Padre, El vino
a destruir al Diablo y sus obras (1 Juan 3:8).
Para que entendamos bien como se cumplió todo, debemos pensar en la muerte y resurrección de
Jesús, Cuando Jesús “muere” el Diablo creyó que realmente lo había destruido y ahí es donde se
cumple lo dicho por Dios en el Génesis “Pero tú le morderás el talón”, pero sabemos que Jesús no
quedó allí muerto, sino que resucitó, en ese instante se cumple lo que Dios había dicho de la simiente
de la mujer, “Aplastarás su cabeza” que quiere decir, Él te matará.
Muchos cristianos viven hoy en día pensando que el Diablo puede hacerles mucho daño, si tu lo
crees puede pasar, pero debes saber que Jesús ya lo venció y el Diablo anda muy asustado pues ya
viene su total destrucción cuando venga Jesús en su segunda venida.
Si crees que Jesús es tu Señor, debes saber que El traspasa la victoria de la destrucción de las obras
del Diablo, debes saber que la victoria de Jesús es tu victoria.
Vivamos con Fe, vivamos creyendo que Jesús destruyó las obras del Diablo, vivamos siempre
confiados de que Jesús siempre nos cuidará y protegerá de todo mal, vivamos agradecidos por
nuestro Señor Jesús, que es la verdadera simiente, es el verdadero Hijo de Dios.
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Verso Clave
El que practica el pecado es del diablo, porque el diablo ha estado pecando desde el
principio. El Hijo de Dios fue enviado precisamente para destruir las obras del diablo.
(1Juan 3:8)

El Guía será el entrevistador del grupo, haciendo preguntas espontáneas de la historia,
la persona que sepa más respuestas correctas, obtendrá un premio “Al más atento”
Apuntes
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Abel y su ofrenda
Tiempo después, Caín presentó al SEÑOR una ofrenda del fruto

de la tierra. Abel también presentó al SEÑOR lo mejor de su
rebaño, es decir, los primogénitos con su grasa. Y el SEÑOR miró
con agrado a Abel y a su ofrenda, pero no miró así a Caín ni a su
ofrenda. Por eso Caín se enfureció y andaba cabizbajo. Entonces
el SEÑOR le dijo: « ¿Por qué estás tan enojado? ¿Por qué andas
cabizbajo? Si hicieras lo bueno, podrías andar con la frente en alto. Pero si haces lo malo, el pecado
te acecha, como una fiera lista para atraparte. No obstante, tú puedes dominarlo.» Caín habló con
su hermano Abel. Mientras estaban en el campo, Caín atacó a su hermano y lo mató. El SEÑOR le
preguntó a Caín: — ¿Dónde está tu hermano Abel? —No lo sé —respondió—. ¿Acaso soy yo el que
debe cuidar a mi hermano? — ¡Qué has hecho! —Exclamó el SEÑOR—. Desde la tierra, la sangre de
tu hermano reclama justicia. Por eso, ahora quedarás bajo la maldición de la tierra, la cual ha abierto
sus fauces para recibir la sangre de tu hermano, que tú has derramado. Cuando cultives la tierra, no
te dará sus frutos, y en el mundo serás un fugitivo errante. —Este castigo es más de lo que puedo
soportar —le dijo Caín al SEÑOR—. Hoy me condenas al destierro, y nunca más podré estar en tu
presencia. Andaré por el mundo errante como un fugitivo, y cualquiera que me encuentre me
matará. —No será así —replicó el SEÑOR—. El que mate a Caín, será castigado siete veces. Entonces
el SEÑOR le puso una marca a Caín, para que no fuera a matarlo quien lo hallara. Así Caín se alejó de
la presencia del SEÑOR y se fue a vivir a la región llamada Nod, al este del Edén.
(Génesis 4:3-16)
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La Sangre que clama desde la Tierra
Sin duda la historia de Caín y Abel es una de las más dramáticas que hay en el antiguo testamento,
un hermano que mata a otro realmente es un cuadro terrible, que no debiera jamás volverse a hacer.
Incentivado por la envidia Caín toma la vida de su hermano, creyendo que así conseguiría una
exclusiva atención de Dios, claro, ya no tendría más competencia, pero ya vemos que Dios
prontamente comienza a preguntar a Caín por su hermano.
Esta historia es una sombra de lo que Jesús hizo por nosotros en la tierra, cuando murió en la cruz,
su sangre fue derramada, y ¿para qué? Para que ella limpiara todos nuestros pecados. Suena extraño
decirlo así, pero es la verdad.
LA sangre de Jesús es tan preciosa para Dios Padre que todo aquel que la desprecia queda
totalmente fuera de la salvación, mas todo aquel que reconoce que Jesús murió por El y su sangre
le limpió de los pecados es salvo. Esto es un gran misterio que muy pocos logran comprenderlo.
Muchas religiones creen que por hacer muchas cosas, trabajar duro y siempre dar a Dios el fruto de
mi gran esfuerzo resulta para obtener la salvación, pero no. Es por eso que Jesús se sacrificó por
nosotros, para que nosotros no tuviéramos nada que hacer, para que la salvación, la entrada al cielo
fuera totalmente un regalo.
Cuando Dios le preguntó a Caín por su hermano, este trató de ocultar su muerte, mas Dios ya sabía
lo que había ocurrido, pues la sangre de Abel era como una declaración de justicia, y al igual que esta
sangre que Dios pudo percibir tan claramente, que más la sangre de su propio Hijo, esa sí que Dios
Padre la oye como un grito desgarrador que dice, yo morí por el mundo, por amor, ellos son mi
herencia, ellos son para mí. Como dice la Biblia, Jesús con su sacrificio nos compró por precio de
sangre. (1 corintios 7; 23). Y esta sangre, no clama por venganza como la de Abel, sino que clama por
nuestra Salvación.
Vivamos la Fe creyendo que la sangre que Jesús derramó fue para mí salvación, fue para que yo
confíe en Él y le entregue mi adoración, creamos siempre que su sangre tiene el pode de limpiar
todos los pecados del mundo y sobre todo tiene el poder de protegerme de todo mal.
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Verso clave
Por la fe Abel ofreció a Dios un sacrificio más aceptable que el de Caín, por lo cual
recibió testimonio de ser justo, pues Dios aceptó su ofrenda. Y por la fe Abel, a pesar
de estar muerto, habla todavía.
(Hebreos 11:4)

En una caja colocar preguntas sobre la lección, sentar al grupo en un círculo y hacer
pasar la caja uno en uno al ritmo de la música o una canción. Al detenerse, el que tenga
la caja debe sacar una pregunta y responderla, y así sucesivamente.
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El arca de Noé
Al ver Dios tanta corrupción en la tierra, y tanta

perversión en la gente, le dijo a Noé: «He decidido
acabar con toda la gente, pues por causa de ella la
tierra está llena de violencia. Así que voy a
destruirles junto con la tierra. Construye un arca
de madera resinosa, hazle compartimentos, y
cúbrela con brea por dentro y por fuera. Dale las
siguientes medidas: ciento cuarenta metros de largo, veintitrés de ancho y catorce de alto. Hazla de
tres pisos, con una abertura a medio metro del techo y con una puerta en uno de sus costados.
Porque voy a enviar un diluvio sobre la tierra, para destruir a todos los seres vivientes bajo el cielo.
Todo lo que existe en la tierra morirá. Pero contigo estableceré mi pacto, y entrarán en el arca tú y
tus hijos, tu esposa y tus nueras. Haz que entre en el arca una pareja de todos los seres vivientes, es
decir, un macho y una hembra de cada especie, para que sobrevivan contigo. Recoge además toda
clase de alimento, y almacénalo, para que a ti y a ellos les sirva de comida.» Y Noé hizo todo según
lo que Dios le había mandado.
…Y la tierra quedó inundada ciento cincuenta días… Dios se acordó entonces de Noé y de todos
los animales salvajes y domésticos que estaban con él en el arca. Hizo que soplara un fuerte viento
sobre la tierra, y las aguas comenzaron a bajar. Se cerraron las fuentes del mar profundo y las
compuertas del cielo, y dejó de llover. Poco a poco las aguas se fueron retirando de la tierra. Al cabo
de ciento cincuenta días las aguas habían disminuido. El día diecisiete del mes séptimo el arca se
detuvo sobre las montañas de Ararat…
(Gen 6:12-22 / 7:24/ 8:1-4)
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La Importancia de Noé
La lección de hoy es muy importante que la entendamos bien, y debemos saber que Dios siempre
tiene un propósito más grande de lo que se ve a simple vista.
En esta oportunidad vemos casi la total destrucción de la creación que Dios mismo hizo, casi, pues
quedó con vida Noé, su familia y los animales ¿Por qué Noé fue salvado? Simplemente porque en él
estaba el espíritu que Dios había soplado en Adán en el principio.
Recordando las historias podemos ver que hay una genealogía después de Adán, llegando hasta
Noé y la Biblia dice que Noé era un hombre justo y honrado entre su gente y que siempre anduvo
fielmente con Dios. (Génesis 6; 9)
La maldad humana era tan grande que Dios vio un peligro inminente que se destruyera el espíritu
que Él había puesto en los hombres (Adán) y es por esto que decide destruir la maldad y conservar
aquellos que tenían el Espíritu que había puesto en Adán (Génesis 2; 7) sin ese espíritu el Hombre
jamás podría salvarse e ir al final de los tiempos al cielo, Además la venida de Jesús y su posterior
predicación no habría tenido sentido, pues la carne no puede obtener la salvación, pero sí el espíritu.
Gracias a la fidelidad de Noé y el posterior diluvio es que todos los que habitamos la tierra tenemos
espíritu y por lo mismo tenemos la gran oportunidad de ser salvos, es por esto también que
debemos seguir predicando y anunciando que Jesús es salvador pues muchas personas, a pesar de
tener espíritu, no sabe esta tremenda noticia.
Amemos nuestro espíritu, cuidémosle siempre alimentándolo con la palabra de Dios, dándole de
beber con la oración y siempre demos gracias a nuestro Padre Dios por darnos la oportunidad de
ser salvos.
Verso clave
Por la fe Noé, advertido sobre cosas que aún no se veían, con temor reverente
construyó un arca para salvar a su familia. Por esa fe condenó al mundo y llegó a ser
heredero de la justicia que viene por la fe.
Hebreos 11; 7
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El que dirige la historia debe preguntar en orden aleatorio a los presentes, la
historia narrada. El primero que es señalado debe empezar la historia, el segundo debe
continuar y así el tercero, el cuarto, etc. En orden lógico. El que dirige debe interrumpir
al que esta contando la historia para que todos los asistentes puedan relatar un pedacito
de historia.
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Serie #2 dios construye una nación
Abraham y la promesa
El SEÑOR le dijo a Abram: «Deja tu tierra, tus parientes y la casa de

tu padre, y vete a la tierra que te mostraré. »Haré de ti una nación
grande, y te bendeciré; haré famoso tu nombre, y serás una
bendición. Bendeciré a los que te bendigan y maldeciré a los que te
maldigan; ¡por medio de ti serán bendecidas todas las familias de la
tierra!» Abram partió, tal como el SEÑOR se lo había ordenado, y Lot
se fue con él. Abram tenía setenta y cinco años cuando salió de Jarán. Al encaminarse hacia la tierra
de Canaán, Abram se llevó a su esposa Saray, a su sobrino Lot, a toda la gente que habían adquirido
en Jarán, y todos los bienes que habían acumulado. Cuando llegaron a Canaán, Abram atravesó toda
esa región hasta llegar a Siquén, donde se encuentra la encina sagrada de Moré. En aquella época,
los cananeos vivían en esa región. Allí el SEÑOR se le apareció a Abram y le dijo: «Yo le daré esta
tierra a tu descendencia.» Entonces Abram erigió un altar al SEÑOR, porque se le había aparecido.
De allí se dirigió a la región montañosa que está al este de Betel, donde armó su campamento,
teniendo a Betel al oeste y Hai al este. También en ese lugar erigió un altar al SEÑOR e invocó su
nombre. Después, Abram siguió su viaje por etapas hasta llegar a la región del Néguev.
(Génesis 12:1-9)
Un Mejor Abraham
Cuando hablamos de hombres de Fe siempre se dice que Abraham es el padre, y de cierta forma es
cierto, pues después de salir de su tierra y su parentela Dios comenzó una gran nación, pero esta
nación no era a la que Dios se refería en la bendición que puso sobre El, sino una mucho más grande.
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Al revisar la tremenda declaración de parte de Dios hacia Abraham cuesta un poco creer que era
solo para un hombre y sus hijos, y claro esto no fue tan así.
En filipenses 5:1- 11 dice que hubo un sentir en el Hijo de Dios y este fue “humillarse hasta lo más bajo
y tomar la forma que tenía su propia creación”, este Hijo a quien nosotros conocemos como Jesús
dejó su trono y se adentró a una tierra que no era la de su naturaleza, al igual a lo que pasó con
Abraham, ¿Puedes ir comprendiendo las similitudes? Dios al llamar a Abraham estaba mostrando en
eso lo que su propio Hijo haría miles de años después y esa bendición le llegó Abraham, por
supuesto, pero traspaso su vida y generaciones, llegándole al que verdaderamente dejo su tierra y
parentela, a Jesús, y la declaración que Dios dijo –“haré famoso tu nombre, y serás una bendición”-
¿Quién más que Jesús la tiene? Solo El.
La Palabra de Dios no es solo un conjunto de historias compiladas, no, cada una de esas historias
tiene un gran significo y que Dios se encargó de ordenarlas tan bien para que la humanidad pudiera
ir comprendiendo todo lo que El haría. Para nosotros es un poco más fácil pues vemos desde la
perspectiva de Jesús, pero antes de Jesús las personas solo tenían estas historias para comprender
la voluntad de Dios.
Hoy cuando creemos en Jesús y pasamos por el bautismo nos hacemos automáticamente parte de
esa gran nación que Dios prometió, nuestras familias son bendecidas en el nombre de Jesús.
Disfrutemos siempre de esta gran bendición que Dios nos dio a través de su Hijo, disfrutemos de su
gran amor hacia nosotros.
Verso clave
Por la fe Abraham, cuando fue llamado para ir a un lugar que más tarde recibiría como
herencia, obedeció y salió sin saber a dónde iba.
(Hebreos 11:8)
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Preparar láminas de dibujos que narren la historia Biblia, escoger a niños para que
expongan a sus compañeros que fracción de la historia cuenta la lámina, luego pasa
el siguiente y también debe narrar, así sucesivamente, narrar en orden lógico
Apuntes
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Melquisedec, sacerdote para siempre
Cuando Abram volvía de derrotar a Quedorlaómer y a los reyes que

estaban con él, el rey de Sodoma salió a su encuentro en el valle de Save,
es decir, en el valle del Rey. Y Melquisedec, rey de Salém y sacerdote del
Dios altísimo, le ofreció pan y vino. Luego bendijo a Abram con estas
palabras: « ¡Que el Dios altísimo, creador del cielo y de la tierra, bendiga
a Abram! ¡Bendito sea el Dios altísimo, que entregó en tus manos a tus enemigos!» Entonces Abram
le dio el diezmo de todo.
El rey de Sodoma le dijo a Abram: —Dame las personas y quédate con los bienes. Pero Abram le
contestó: —He jurado por el SEÑOR, el Dios altísimo, creador del cielo y de la tierra, que no tomaré
nada de lo que es tuyo, ni siquiera un hilo ni la correa de una sandalia. Así nunca podrás decir: “Yo
hice rico a Abram.” No quiero nada para mí, salvo lo que mis hombres ya han comido. En cuanto a
los hombres que me acompañaron, es decir, Aner, Escol y Mamré, que tomen ellos su parte.
(Génesis 14:17-24)
Un verdadero Sacerdote
LA historia del sacerdote Melquisedec es bastante corta como para saber de donde era o sobre su
familia o qué tipo de vida llevaba, e incluso no sabemos de qué raza era o su edad, Melquisedec
sacerdote del Dios Altísimo y rey de Salem es lo único que sabemos de Él.
Una cosa curiosa es que esta historia es antes que Dios trajera la ley a los hombres, y vemos que
este sacerdote era de Dios y que Abram le dio los diezmos, también es curioso que el autor de los
Salmos diga que el Señor que viene será del sacerdocio según el orden de Melquisedec (Salmo 110)
y en Hebreos lo vuelve a mencionar (Hebreos 5:6) ¿Porque?
Porque al igual que Melquisedec nadie lo nombró como mediador o intercesor entre los hombres y
Dios, ninguna persona, sino que es un don directo de Dios, Jesús es el sacerdote perfecto que puede
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constantemente perdonar nuestros pecados pues él no tiene necesidad de hacer sacrificios por sus
propios pecados pues él no tiene, es santo.
Jesús es el perfecto sacerdote para siempre, que vino de Dios y que El mismo lo constituyó nuestro
intercesor, abogado, amigo y compañero para siempre, aquel que puesto hasta su propia sangre
para que nuestros pecados fuesen borrados.
Acerquémonos confiadamente a Jesús, sabiendo que El ya hizo el sacrificio por nosotros, hoy al
creer en El somos santos delante de Dios, sin manchas, no por nuestros méritos, sino por el mérito
de Hijo de Dios, nuestro Sacerdote perfecto.
Verso clave
El SEÑOR ha jurado y no cambiará de parecer: «Tú eres sacerdote para siempre, según
el orden de Melquisedec.»
(Salmos 110:4)

Hacer preguntas, por ejemplo. ¿Quién es el personaje principal? ¿Qué otros
personajes hay en la historia? ¿Se imaginan el paisaje de la historia? ¿Qué cosas buenas
ocurrieron en la historia? ¿Qué enseñanza puedo aprender de ella? Etcétera
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Isaac y la provisión en Moriah
Pasado cierto tiempo, Dios puso a prueba a Abraham y le dijo:

—¡Abraham! —Aquí estoy —respondió. Y Dios le ordenó: —
Toma a tu hijo, el único que tienes y al que tanto amas, y ve a
la región de Moria. Una vez allí, ofrécelo como holocausto en
el monte que yo te indicaré. Abraham se levantó de
madrugada y ensilló su asno. También cortó leña para el
holocausto y, junto con dos de sus criados y su hijo Isaac, se encaminó hacia el lugar que Dios le
había indicado. Al tercer día, Abraham alzó los ojos y a lo lejos vio el lugar. Entonces le dijo a sus
criados: —Quédense aquí con el asno. El muchacho y yo seguiremos adelante para adorar a Dios, y
luego regresaremos junto a ustedes. Abraham tomó la leña del holocausto y la puso sobre Isaac, su
hijo; él, por su parte, cargó con el fuego y el cuchillo. Y los dos siguieron caminando juntos. Isaac le
dijo a Abraham: —¡Padre! —Dime, hijo mío. —Aquí tenemos el fuego y la leña —continuó Isaac—;
pero, ¿dónde está el cordero para el holocausto? —El cordero, hijo mío, lo proveerá Dios —le
respondió Abraham. Y siguieron caminando juntos. Cuando llegaron al lugar señalado por Dios,
Abraham construyó un altar y preparó la leña. Después ató a su hijo Isaac y lo puso sobre el altar,
encima de la leña. Entonces tomó el cuchillo para sacrificar a su hijo, pero en ese momento el ángel
del SEÑOR le gritó desde el cielo: —¡Abraham! ¡Abraham! —Aquí estoy —respondió. —No pongas
tu mano sobre el muchacho, ni le hagas ningún daño —le dijo el ángel—. Ahora sé que temes a Dios,
porque ni siquiera te has negado a darme a tu único hijo. Abraham alzó la vista y, en un matorral, vio
un carnero enredado por los cuernos. Fue entonces, tomó el carnero y lo ofreció como holocausto,
en lugar de su hijo. A ese sitio Abraham le puso por nombre: «El SEÑOR provee.» Por eso hasta el
día de hoy se dice: «En un monte provee el SEÑOR.» El ángel del SEÑOR llamó a Abraham por
segunda vez desde el cielo, y le dijo: —Como has hecho esto, y no me has negado a tu único hijo,
juro por mí mismo —afirma el SEÑOR— que te bendeciré en gran manera, y que multiplicaré tu
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descendencia como las estrellas del cielo y como la arena del mar. Además, tus descendientes
conquistarán las ciudades de sus enemigos. Puesto que me has obedecido, todas las naciones del
mundo serán bendecidas por medio de tu descendencia. Abraham regresó al lugar donde estaban
sus criados, y juntos partieron hacia Berseba, donde Abraham se quedó a vivir.
(Genesis 22:1-19)
La verdadera provisión
Al ver este estremecedor relato podemos deducir varias cosas a simple vista, 1.-Dios quería Probar a
Abraham, 2- Ver si Isaac era un digno hijo y obediente. 3.- Dios siempre provee. Esto es a simple
vista, pero vallamos a lo que realmente pasó.
En la época de Abraham era costumbre que los hijos fueran sacrificados y hasta el día que Dios le
pidió a Abraham que sacrificara a su Hijo, este Dios sonaba diferente, Dios al pedirle el hijo a
Abraham estaba tratándole de mostrar y vemos que luego no quiere Dios matar al hijo, sino que lo
detiene y le da un carnero para sacrificar, dándole a conocer los sacrificios que luego pediría.
Dios mostró a Abraham, le mostró a su amigo lo que haría El mismo con su propio Hijo, Jesús. Quien
lo dio en sacrificio para salvar a toda la humanidad, nosotros al igual que Abraham no nos
esforzamos por encontrar un buen sacrificio para darlo a Dios, sino que Dios mismo lo dio, lo
proveyó, y este sacrificio es tan perfecto que se hizo una vez y para siempre, ya no hay más sacrificios
por los pecados, ya no hay nada que podamos hacer para merecernos el cielo, pues Jesús lo hizo
todo, todo fue consumado en Jesús.
Hoy solo nos queda creer en ese sacrificio, creer que fue para mí salvación, para mi entrada gratuita
al cielo eterno de Dios. ¿No crees que es una buena noticia?
Amemos el sacrificio de Jesús, amemos su resurrección y sobre todo amemos al Dios Padre quien
planeó todo esto porque nos amó.
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Verso clave
El siguiente día vio Juan a Jesús que venía a él, y dijo: He aquí el Cordero de Dios, que
quita el pecado del mundo.
(Juan 1:29)

Preparar tres láminas, con diferentes dibujos de diferentes historias. Una de las
láminas será de la historia narrada, las otras dos serán historias que no tienen relación
alguna. Los niños deben decir cual de las tres es la historia verdadera.
Apuntes
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Jacob en Peniel
Aquella misma noche Jacob se levantó, tomó a sus dos esposas, a sus
dos esclavas y a sus once hijos, y cruzó el vado del río Jaboc. Una vez
que lo habían cruzado, hizo pasar también todas sus posesiones,
quedándose solo. Entonces un hombre luchó con él hasta el
amanecer. Cuando ese hombre se dio cuenta de que no podía vencer
a Jacob, lo tocó en la coyuntura de la cadera, y ésta se le dislocó
mientras luchaban. Entonces el hombre le dijo: — ¡Suéltame, que ya
está por amanecer! — ¡No te soltaré hasta que me bendigas! —
respondió Jacob. — ¿Cómo te llamas? —le preguntó el hombre. —Me llamo Jacob —respondió.
Entonces el hombre le dijo: —Ya no te llamarás Jacob, sino Israel, porque has luchado con Dios y
con los hombres, y has vencido. —Y tú, ¿cómo te llamas? —le preguntó Jacob. — ¿Por qué preguntas
cómo me llamo? —le respondió el hombre. Y en ese mismo lugar lo bendijo. Jacob llamó a ese lugar
Peniel, porque dijo: «He visto a Dios cara a cara, y todavía sigo con vida.» Cruzaba Jacob por el lugar
llamado Peniel, cuando salió el sol. A causa de su cadera dislocada iba rengueando. Por esta razón
los israelitas no comen el tendón que está en la coyuntura de la cadera, porque a Jacob se le tocó
en dicho tendón.
(Génesis 32:22-32)
La Verdadera Lucha
Increíble relato de Jacob, ¿Te imaginas luchar con un ángel y más encima toda la noche? Suena un
poco extraño ¿no crees? Pues hasta ahora sabemos que los ángeles son seres espirituales que fueron
creados para servir a los que creen en Jesús ( Hebreos 1; 14), no para luchar con ellos.
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La Historia de Jacob y la lucha en Peniel muestra la realidad que hoy vivimos, hay muchos cristianos
que así como Jacob, luchan por conseguir sus bendiciones, luchan para que la bendición de Dios
esté sobre ellos ¿Crees que eres uno de esos cristianos luchadores?
Veamos un poco lo que dice Jesús con respecto a esto. En mateo 11; 12 dice: Desde los días de Juan el
Bautista hasta ahora, el reino de los cielos sufre violencia, y los violentos lo arrebatan. ¿Qué quiere decir
esto?
Imagínate el cielo de Dios, limpio, santo y todo lo que allí hay no tiene ni una sola mancha de pecado
o corrupción, el cielo está rodeado de ángeles protegiéndolo de todo lo impuro y lo que a Dios no
le agrada, pero ¿qué pasó?, Jesús dice que desde los días de Juan el Bautista el Reino sufre violencia,
y si lo vemos como un juego de guerra nos podemos dar cuenta que cuando Jesús llegó a la tierra,
el hombre comenzó a ganar su pelea para entrar al cielo, sus posibilidades se hicieron enormes y
Juan el Bautista lo estaba anunciando: Arrepiéntanse!!! Bautícese!!! Crean en el Mesías!!! Desde ese
momento comenzó hacerse como una grieta en la gran muralla que separaba lo santo de lo
pecaminoso, dando una entrada al hombre, no por merecerlo sino solo por el mérito que le daba
Jesús ¿Crees que esto es justo? ¿El hombre hace algún tipo de esfuerzo por creer en Jesús?
Físicamente no, pero espiritualmente es una gran lucha.
El Reino de Dios se dejó vencer cuando Jesús entregó su vida, la debilidad del Reino de Dios es
nuestra mayor fortaleza pues gracias a esta podemos tener libre entrada al cielo de Dios, sin Jesús
aun estaríamos tratando con nuestra conducta de ser como a Dios le gusta, tratando de cumplir la
ley y sabemos que para el hombre esto es imposible.
EL verso de Mateo termina diciendo “los violentos lo arrebatan” para creer y mantenerse en la fe
necesariamente se necesitan personas apasionadas, llenas de amor por Dios, pues en el camino
vendrán problemas y obstáculos, debilitando muchas veces la fe, pero ahí debe estar la violencia
que no importando lo que sientas, siempre la fe debe triunfar, esto no es fácil pero tiene mucha
recompensa.
Atrévete a creer cada día más en Jesús, él es nuestra fortaleza, nuestra entrada al cielo, nunca te
rindas sigue creyendo a pesar de todos los problemas, Dios está y estará contigo siempre solo
confía, aliméntate de la palabra de Dios y sobre todo, lo que sientas, díselo todo a nuestro Padre en
oración.
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Verso clave
Desde los días de Juan el Bautista hasta ahora, el reino de los cielos sufre violencia, y
los violentos lo arrebatan.
(Mateo 11:12)

Elegir a un niño o niña que cuente la historia a sus compañeros (siempre ayudándole
para que no se largue el momento)
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Serie #3 de esclavitud a libertad
Llamados de Egipto
Israel emprendió el viaje con todas sus pertenencias. Al

llegar a Berseba, ofreció sacrificios al Dios de su padre
Isaac. Esa noche Dios le habló a Israel en una visión: —
¡Jacob! ¡Jacob! —Aquí estoy —respondió. —Yo soy Dios,
el Dios de tu padre —le dijo—. No tengas temor de ir a
Egipto, porque allí haré de ti una gran nación. Yo te
acompañaré a Egipto, y yo mismo haré que vuelvas.
Además, cuando mueras, será José quien te cierre los ojos. Luego Jacob salió de Berseba, y los hijos
de Israel hicieron que su padre Jacob, y sus hijos y sus mujeres, subieran en los carros que el faraón
había enviado para trasladarlos. También se llevaron el ganado y las posesiones que habían
adquirido en Canaán. Fue así como Jacob y sus descendientes llegaron a Egipto. Con él se llevó a
todos sus hijos, hijas, nietos y nietas, es decir, a todos sus descendientes…
…Todos los familiares de Jacob que llegaron a Egipto, y que eran de su misma sangre, fueron
sesenta y seis, sin contar a las nueras. José tenía dos hijos que le nacieron en Egipto. En total los
familiares de Jacob que llegaron a Egipto fueron setenta…Los israelitas se asentaron en Egipto, en
la región de Gosén. Allí adquirieron propiedades, prosperaron y llegaron a ser muy numerosos.
Jacob residió diecisiete años en Egipto, y llegó a vivir un total de ciento cuarenta y siete años. Cuando
Israel estaba a punto de morir, mandó llamar a su hijo José y le dijo: —Si de veras me quieres, pon
tu mano debajo de mi muslo y prométeme amor y lealtad. ¡Por favor, no me entierres en Egipto!
Cuando vaya a descansar junto a mis antepasados, sácame de Egipto y entiérrame en el sepulcro de
ellos. —Haré lo que me pides —contestó José. —¡Júramelo! —insistió su padre. José se lo juró, e
Israel se reclinó sobre la cabecera de la cama. Sin embargo, los israelitas tuvieron muchos hijos, y a
tal grado se multiplicaron que fueron haciéndose más y más poderosos. El país se fue llenando de
ellos. Pero llegó al poder en Egipto otro rey que no había conocido a José, y le dijo a su pueblo:
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¡Cuidado con los israelitas, que ya son más fuertes y numerosos que nosotros! Vamos a tener que
manejarlos con mucha astucia; de lo contrario, seguirán aumentando y, si estalla una guerra, se
unirán a nuestros enemigos, nos combatirán y se irán del país.» Fue así como los egipcios pusieron
capataces para que oprimieran a los israelitas. Les impusieron trabajos forzados, tales como los de
edificar para el faraón las ciudades de almacenaje Pitón y Ramsés. Pero cuanto más los oprimían,
más se multiplicaban y se extendían, de modo que los egipcios llegaron a tenerles miedo; por eso
les imponían trabajos pesados y los trataban con crueldad. Les amargaban la vida obligándolos a
hacer mezcla y ladrillos, y todas las labores del campo. En todos los trabajos de esclavos que los
israelitas realizaban, los egipcios los trataban con crueldad.
(Génesis 46; 1-7 / 26-27 / 47:27-31 /Éxodo 1: 7-14)
De Egipto llamé a mi Hijo

Generalmente toda historia en la Biblia tienen un propósito, alguna enseñanza que nos deja, toda
historia está totalmente conectada con todas las historias de la Biblia. Esta historia en particular
muestra al pueblo de Israel como una nación que tuvo que refugiarse en un país llamado Egipto,
pero que con el tiempo este país comenzó a mirar con malos ojos a sus visitantes, tratándoles como
esclavos. El pueblo de Israel no lo soportó por siempre y clamó a Dios para ser liberados, y ya
sabemos la historia.
Cuando leemos las profecías de Jesús, encontramos una muy particular que tiene mucha relación
con esta historia, y está en Oseas 11; 1 y dice: Cuando Israel era muchacho, yo lo amé, y de Egipto llamé
a mi hijo. Aunque aquí se nombra a Israel en el nuevo testamento esta profecía se le atribuye al Hijo
de Dios, ¿Por qué? Porque Israel de verdad no era su hijo sino que fue como un siervo, era el pueblo
en el cual su Hijo nacería, Dios no solo veía al pueblo, veía a su Hijo que nacería entre ellos, siempre
la mirada de Dios va más allá de las circunstancias que se estén en el presente. El único y verdadero
hijo de Dios es Jesús, es por eso que en Mateo 2; 15 en el tiempo en que José y María tuvieron que ir
a Egipto porque el emperador quería matar a Jesús, y dice: y estuvo allá hasta la muerte de Herodes;
para que se cumpliese lo que dijo el Señor por medio del profeta, cuando dijo: De Egipto llamé a mi Hijo.
Jesús dijo en una ocasión, mencionado en Juan 5:19 y dice: De cierto, de cierto os digo: No puede el
Hijo hacer nada por sí mismo, sino lo que ve hacer al Padre; porque todo lo que el Padre hace, también
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lo hace el Hijo igualmente. Jesús nunca actúo fuera del marco de la Palabra de Dios, siempre fue fiel
a lo que estaba escrito.
Seamos cada vez como nuestro Señor Jesucristo, lleno de la palabra de Dios, lleno de humildad y
deseo de querer exaltar a su Padre en todo, Oremos siempre pidiendo a nuestro Padre celestial que
nos brinde un corazón cada vez mas parecido al de El.
Verso clave
No puede el Hijo hacer nada por sí mismo, sino lo que ve hacer al Padre; porque todo
lo que el Padre hace, también lo hace el Hijo igualmente
Juan 5:19

Formen equipos de dos personas: uno será el entrevistador y el otro el entrevistado, las
preguntas están dispuestas en unas tarjetas al final del tema, al terminar las entrevistas
los entrevistadores deberán leer las respuestas que consiguieron
Apuntes
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El Cordero Pascual
En Egipto el SEÑOR habló con Moisés y Aarón. Les dijo:

«Este mes será para ustedes el más importante, pues será
el primer mes del año. Hablen con toda la comunidad de
Israel, y díganles que el día décimo de este mes, todos
ustedes tomarán un cordero por familia, uno por cada
casa. Si alguna familia es demasiado pequeña para
comerse un cordero entero, deberá compartirlo con sus vecinos más cercanos, teniendo en cuenta
el número de personas que sean y las raciones de cordero que se necesiten, según lo que cada
persona haya de comer. El animal que se escoja puede ser un cordero o un cabrito de un año y sin
defecto, al que cuidarán hasta el catorce del mes, día en que la comunidad de Israel en pleno lo
sacrificará al caer la noche. Tomarán luego un poco de sangre y la untarán en los dos postes y en el
dintel de la puerta de la casa donde coman el cordero. Deberán comer la carne esa misma noche,
asada al fuego y acompañada de hierbas amargas y pan sin levadura. No deberán comerla cruda ni
hervida, sino asada al fuego, junto con la cabeza, las patas y los intestinos. Y no deben dejar nada.
En caso de que algo quede, lo quemarán al día siguiente. Comerán el cordero de este modo: con el
manto ceñido a la cintura, con las sandalias puestas, con la vara en la mano, y de prisa. Se trata de la
Pascua del SEÑOR. »Esa misma noche pasaré por todo Egipto y heriré de muerte a todos los
primogénitos, tanto de personas como de animales, y ejecutaré mi sentencia contra todos los dioses
de Egipto. Yo soy el SEÑOR. La sangre servirá para señalar las casas donde ustedes se encuentren,
pues al verla pasaré de largo. Así, cuando hiera yo de muerte a los egipcios, no los tocará a ustedes
ninguna plaga destructora. »Éste es un día que por ley deberán conmemorar siempre. Es una fiesta
en honor del SEÑOR, y las generaciones futuras deberán celebrarla. Durante siete días comerán pan
sin levadura, de modo que deben retirar de sus casas la levadura el primer día. Todo el que coma
algo con levadura desde el día primero hasta el séptimo será eliminado de Israel. Celebrarán una
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reunión solemne el día primero, y otra el día séptimo. En todo ese tiempo no harán ningún trabajo,
excepto preparar los alimentos que cada uno haya de comer. Sólo eso podrán hacer. »Celebrarán la
fiesta de los Panes sin levadura, porque fue ese día cuando los saqué de Egipto formados en
escuadrones. Por ley, las generaciones futuras siempre deberán celebrar ese día. Comerán pan sin
levadura desde la tarde del día catorce del mes primero hasta la tarde del día veintiuno del mismo
mes. Durante siete días se abstendrán de tener levadura en sus casas. Todo el que coma algo con
levadura, sea extranjero o israelita, será eliminado de la comunidad de Israel. No coman nada que
tenga levadura. Dondequiera que vivan ustedes, comerán pan sin levadura.» Convocó entonces
Moisés a todos los ancianos israelitas, y les dijo: «Vayan en seguida a sus rebaños, escojan el cordero
para sus respectivas familias, y mátenlo para celebrar la Pascua. Tomen luego un manojo de hisopo,
mójenlo en la sangre recogida en la palangana, unten de sangre el dintel y los dos postes de la
puerta, ¡y no salga ninguno de ustedes de su casa hasta la mañana siguiente! Cuando el SEÑOR pase
por el país para herir de muerte a los egipcios, verá la sangre en el dintel y en los postes de la puerta,
y pasará de largo por esa casa. No permitirá el SEÑOR que el ángel exterminador entre en las casas
de ustedes y los hiera. »Obedezcan estas instrucciones. Será una ley perpetua para ustedes y para
sus hijos. Cuando entren en la tierra que el SEÑOR ha prometido darles, ustedes seguirán celebrando
esta ceremonia. Y cuando sus hijos les pregunten: “¿Qué significa para ustedes esta ceremonia?”,
les responderán: “Este sacrificio es la Pascua del SEÑOR, que en Egipto pasó de largo por las casas
israelitas. Hirió de muerte a los egipcios, pero a nuestras familias les salvó la vida.” » Al oír esto, los
israelitas se inclinaron y adoraron al SEÑOR, y fueron y cumplieron al pie de la letra lo que el SEÑOR
les había ordenado a Moisés y a Aarón.
(Exo 12:1-28)
Jesús nuestra verdadera pascua

Dios está hablando en este pasaje del día más importante, del evento más importante en la historia
de la creación. Las instrucciones sobre lo que debían hacer esa última noche en Egipto es una de las
figuras más importantes e impresionantes de la Obra de Jesús. Las instrucciones tienen su
centralidad en el cordero, un animal que debía permanecer con ellos un corto tiempo y que luego
debían sacrificar. Finalmente, la sangre del cordero se convertiría en la única esperanza de vivir.
Luego de untar la sangre en sus puertas, las instrucciones indicaban que debían cenar vestidos, listos
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para salir y emprender el viaje; debían esperar el momento de su partida a su verdadero hogar,
debían estar preparados ya que su salida era inminente. Esa noche Dios no sólo les salvaría del ángel
de la muerte, sino que les concedería libertad completa y definitiva del faraón. Ahora sería Dios
mismo su gobernador y sustentador.
Juan el Bautista reconoce a Jesús y clama en alta voz; “¡este es el cordero de Dios!”, Pablo
igualmente dice que Cristo, nuestra Pascua, ya fue sacrificada por nosotros. Cristo es la realidad del
cordero pascual. La humanidad ha recibido instrucciones de Dios mientras permanece en las
tinieblas. Dios nos envió el cordero, quien estuvo un corto tiempo entre nosotros y luego lo
sacrificamos. Ahora Su sangre es la única esperanza de salir con vida de este mundo, debemos
asegurar que hemos untado nuestra vida con la sangre de Jesús y que toda nuestra esperanza se
encuentra en esa sangre, quienes hemos confiado en la sangre de Jesús, sabemos que nuestra
partida es inminente, sabemos que en cualquier momento partimos a nuestro verdadero hogar, a la
herencia eterna reservada en los cielos para nosotros (1 Pedro 1;4). Nos encontramos vestidos con
vestiduras celestiales, nuestros anhelos y deseos profundos no se encuentran en este mundo.
De esta manera, en Cristo Dios no sólo nos ha dado la salvación, sino que también nos ha liberado
del gobierno de este mundo de tinieblas. El diablo, quien es el gobernador de este mundo, ya no
posee ninguna autoridad sobre nosotros. Ahora es Dios nuestro gobernador y nuestro sustentador.
¿Puedes creer la realidad de la Pascua?, ¿Puedes confiar absolutamente en la sangre del Hijo de Dios
para obtener Vida eterna? Si lo has hecho, puedes tener la seguridad de que ya eres ciudadano del
cielo, que ya no tiene temores ni ansiedades ancladas en este mundo, alguien que sabe que otro ya
pagó el precio por su rescate. Enfrenta las situaciones de este mundo como un ciudadano del cielo;
piensa, actúa y vive como quien fue salvado de la muerte y ha obtenido eternamente la gloria
celestial.
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Verso clave
Por la fe celebró la pascua y la aspersión de la sangre, para que el que destruía a los
primogénitos no los tocase a ellos.
(Hebreos 11:28)

El Guía será el entrevistador del grupo, haciendo preguntas espontáneas de la
historia, la persona que sepa más respuestas correctas, obtendrá un premio “Al más
atento”.
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El paso por el mar Rojo
Después de Salir de Egipto, los Israelitas acamparon junto

al Mar Rojo. Pasaron algunos días y Faraón nuevamente
endurecido de corazón salió junto a sus carros a perseguir al
pueblo de Israel para matarlos en el desierto. Cuando los
israelitas se fijaron y vieron a los egipcios pisándoles los talones, sintieron mucho miedo y clamaron
al SEÑOR. Entonces le reclamaron a Moisés: ¿Acaso no había sepulcros en Egipto, que nos sacaste
de allá para morir en el desierto? ¿Qué has hecho con nosotros? ¿Para qué nos sacaste de Egipto? Ya
en Egipto te decíamos: “¡Déjanos en paz! ¡Preferimos servir a los egipcios!” ¡Mejor nos hubiera sido
servir a los egipcios que morir en el desierto! —No tengan miedo —les respondió Moisés—.
Mantengan sus posiciones, que hoy mismo serán testigos de la salvación que el SEÑOR realizará en
favor de ustedes. A esos egipcios que hoy ven, ¡jamás volverán a verlos! Ustedes quédense quietos,
que el SEÑOR presentará batalla por ustedes. Pero el SEÑOR le dijo a Moisés: ¿Por qué clamas a mí?
¡Ordena a los israelitas que se pongan en marcha! Y tú, levanta tu vara, extiende tu brazo sobre el
mar y divide las aguas, para que los israelitas lo crucen sobre terreno seco. Yo voy a endurecer el
corazón de los egipcios, para que los persigan. ¡Voy a cubrirme de gloria a costa del faraón y de su
ejército, y de sus carros y jinetes! Y cuando me haya cubierto de gloria a costa de ellos, los egipcios
sabrán que yo soy el SEÑOR. Entonces el ángel de Dios, que marchaba al frente del ejército israelita,
se dio vuelta y fue a situarse detrás de éste. Lo mismo sucedió con la columna de nube, que dejó su
puesto de vanguardia y se desplazó hacia la retaguardia, quedando entre los egipcios y los israelitas.
Durante toda la noche, la nube fue oscuridad para unos y luz para otros, así que en toda esa noche
no pudieron acercarse los unos a los otros. Moisés extendió su brazo sobre el mar, y toda la noche
el SEÑOR envió sobre el mar un recio viento del este que lo hizo retroceder, convirtiéndolo en tierra
seca. Las aguas del mar se dividieron, y los israelitas lo cruzaron sobre tierra seca. El mar era para
ellos una muralla de agua a la derecha y otra a la izquierda. Los egipcios los persiguieron. Todos los
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caballos y carros del faraón, y todos sus jinetes, entraron en el mar tras ellos. Cuando ya estaba por
amanecer, el SEÑOR miró al ejército egipcio desde la columna de fuego y de nube, y sembró la
confusión entre ellos: hizo que las ruedas de sus carros se atascaran, de modo que se les hacía muy
difícil avanzar. Entonces exclamaron los egipcios: ¡Alejémonos de los israelitas, pues el SEÑOR está
peleando por ellos y contra nosotros! Entonces el SEÑOR le dijo a Moisés: Extiende tu brazo sobre
el mar, para que las aguas se vuelvan contra los egipcios y contra sus carros y jinetes.» Moisés
extendió su brazo sobre el mar y, al despuntar el alba, el agua volvió a su estado normal… Y al ver
los israelitas el gran poder que el SEÑOR había desplegado en contra de los egipcios, temieron al
SEÑOR y creyeron en él y en su siervo Moisés.
(Éxodo 14:1-31)
El anuncio del verdadero bautismo

Este relato es uno de los más angustiantes del pueblo de Israel, donde se muestra la desesperación
de un pueblo que se siente desamparado y pronto a morir, luego vemos el extraordinario milagro
que Dios hiso.
Al mirar este relato con los lentes de Jesús vemos claramente la perfecta figura del bautismo, del
paso de estar esclavos del pecado a estar libres en Cristo. El pueblo de Israel fue llamado por Dios
para salir de Egipto y lo hicieron, pero faltaba un solo paso para quedar totalmente libre, el bautismo
y el mejor lugar que escogieron fue el mar rojo, incluso hay un detalle que debemos poner atención,
y es cuando Moisés viendo la desesperación del pueblo, clama a Dios para que los salve y Dios le
responde “¿Por qué clamas a mí? ¡Ordena a los israelitas que se pongan en marcha!” y así Moisés
extendió su vara y el mar se abrió.
La persona que es llamada por Dios para que tenga la fe en Jesús su paso natural debiera ser el
bautismo, es algo que no se necesita preguntar a Dios si debe o no hacerlo, es lo lógico, ¿Por qué?
¿Será que el bautismo es imprescindible para ser salvo? La respuesta es, no, pero todo aquel que lo
hace su vida experimenta la verdadera libertad, al igual que la libertad que experimentó el pueblo
de Israel al pasar a través del mar rojo en seco.
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Cuando Jesús vino a la tierra lo primero que hizo antes de su ministerio público fue el bautismo y
dijo claramente “Dejémoslo así por ahora, pues nos conviene cumplir con lo que es justo —le
contestó Jesús. (Mateo 3:15) hasta Jesús no cuestionó este paso, sino que lo consideró algo “justo”.
El bautismo no es una expresión pública de fe, es un mandamiento. Es el paso más importante en la
vida de un creyente que quiere crecer saludablemente en el evangelio, es por eso que también los
apóstoles cuando comenzaron su ministerio siguieron haciendo lo que Jesús les había enseñado, lo
vemos en el libro de los hechos: Arrepiéntase y bautícese cada uno de ustedes en el nombre de
Jesucristo para perdón de sus pecados —les contestó Pedro—, y recibirán el don del Espíritu Santo.
(Hechos 2:38)
Cuando hablamos del bautismo, no hablamos de una figura, es la realidad, es el evangelio,
literalmente es nuestra muerte y resurrección, al hundirnos estamos muriendo a nuestros pecados
al espíritu de Adán y al salir del agua resucitamos a la libertad en Cristo al espíritu de Él.
Tomemos enserio el paso del bautismo, apreciémoslo y atesorémoslo, que cada mandamiento que
cumplamos tenga un significado importante en nuestras vidas, pues es nuestra verdadera vida, la
que durará eternamente.
Verso clave
Tú le serás testigo ante toda persona de lo que has visto y oído. Y ahora, ¿qué esperas?
Levántate, bautízate y lávate de tus pecados, invocando su nombre.”
(Hechos 22:15-16)
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El Maná
Allí, en el desierto, toda la comunidad murmuró

contra Moisés y Aarón: —¡Cómo quisiéramos que
el SEÑOR nos hubiera quitado la vida en Egipto! —
les decían los israelitas—. Allá nos sentábamos en
torno a las ollas de carne y comíamos pan hasta
saciarnos. ¡Ustedes han traído nuestra comunidad a este desierto para matarnos de hambre a todos!
Entonces el SEÑOR le dijo a Moisés: «Voy a hacer que les llueva pan del cielo. El pueblo deberá salir
todos los días a recoger su ración diaria. Voy a ponerlos a prueba, para ver si cumplen o no mis
instrucciones. El día sexto recogerán una doble porción, y todo esto lo dejarán preparado.»
Al desaparecer el rocío, sobre el desierto quedaron unos copos muy finos, semejantes a la escarcha
que cae sobre la tierra. Como los israelitas no sabían lo que era, al verlo se preguntaban unos a otros:
¿Y esto qué es? Moisés les respondió: —Es el pan que el SEÑOR les da para comer. Y éstas son las
órdenes que el SEÑOR me ha dado: “Recoja cada uno de ustedes la cantidad que necesite para toda
la familia, calculando dos litros por persona.” Así lo hicieron los israelitas. Algunos recogieron
mucho; otros recogieron poco. Pero cuando lo midieron por litros, ni al que recogió mucho le
sobraba, ni al que recogió poco le faltaba: cada uno recogió la cantidad necesaria. Entonces Moisés
les dijo: —Nadie debe guardar nada para el día siguiente…Pero el día sexto recogieron el doble, es
decir, cuatro litros por persona, así que los jefes de la comunidad fueron a informar de esto a Moisés.
—Esto es lo que el SEÑOR ha ordenado —les contestó—. Mañana sábado es día de reposo
consagrado al SEÑOR. Así que cuezan lo que tengan que cocer, y hiervan lo que tengan que hervir.
Lo que sobre, apártenlo y guárdenlo para mañana. Los israelitas cumplieron las órdenes de Moisés
y guardaron para el día siguiente lo que les sobró, ¡y no se pudrió ni se agusanó! —Cómanlo hoy
sábado —les dijo Moisés—, que es el día de reposo consagrado al SEÑOR. Hoy no encontrarán nada
en el campo. Y llamaron al pan «maná». Era blanco como la semilla de cilantro, y dulce como las
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tortas con miel. —Esto es lo que ha ordenado el SEÑOR—dijo Moisés—: “Tomen unos dos litros de
maná, y guárdenlos para que las generaciones futuras puedan ver el pan que yo les di a comer en el
desierto, cuando los saqué de Egipto.” Luego Moisés le dijo a Aarón: —Toma una vasija y pon en
ella unos dos litros de maná. Colócala después en la presencia del SEÑOR, a fin de conservarla para
las generaciones futuras. Aarón puso el maná ante el arca del pacto, para que fuera conservado
como se lo ordenó el SEÑOR a Moisés. Comieron los israelitas maná cuarenta años, hasta que
llegaron a los límites de la tierra de Canaán, que fue su país de residencia.
(Éxodo 16:2-5/ 16:11-36)
El verdadero pan del cielo

Cuando Jesús estuvo en cuerpo en la tierra repitió varias veces que debíamos comer de él, ¿Qué
significa esto? ¿Acaso Jesús quería que la gente a su alrededor se lo comiera vivo? La respuesta más
sencilla es, sí.
Como hemos explicado en otras lecciones Jesús es la palabra de Dios encarnada, en algunos lugares
se dice de Él que es el verbo (Juan 1:1), y es por esto que Jesús decía que debíamos alimentarnos de
Él, no literalmente de comer su carne humana, sino de comer de sus palabras, de lo que él manda.
En el libro de Juan dice: Yo soy el pan de vida. Vuestros padres comieron el maná en el desierto, y
murieron. Este es el pan que desciende del cielo, para que el que de él come, no muera. Yo soy el pan
vivo que descendió del cielo; si alguno comiere de este pan, vivirá para siempre; y el pan que yo daré es
mi carne, la cual yo daré por la vida del mundo. (Juan 6:48-51) En ese momento a los principales
sacerdotes no les gustó mucho ese discurso, pero lo que decía Jesús era verdad, Jesús es el
verdadero pan del cielo.
En la historia podemos darnos cuenta que Dios proveyó lo que los Israelitas necesitaban y es el
alimento y con esto Dios quería enseñarles a ellos que debían depender plenamente día a día, pues
les dijo que no acumularan nada para los siguientes días. De esta lección podemos sacar muchas
enseñanzas, pero lo más importantes es que nuestro Padre sabe lo que necesitamos y nunca se
equivoca.
En el libro de Deuteronomio el autor recuerda lo que Dios hizo con el pueblo: Y te afligió, y te hizo
tener hambre, y te sustentó con maná, comida que no conocías tú, ni tus padres la habían conocido,
para hacerte saber que no sólo de pan vivirá el hombre, más de todo lo que sale de la boca del Señor
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vivirá el hombre. (Deuteronomio 8:3) Las palabras que Jesús luego repitió cuando el diablo lo quiso
tentar en el desierto “No solo de pan vive el hombre sino de la palabra que sale de la boca de Dios”
esto quiere decir, de lo que Dios manda, sus mandamientos.
Si Dios lo dice es verdad y eso debe sustentar nuestra vida, Jesús es el reflejo de la verdad, es por
eso que EL dijo coman de mi y se comparó con el maná que descendió del cielo, pues como sabes
Jesús también descendió del cielo.
Creamos que Jesús es el verdadero pan del cielo, que con su palabra podemos alimentar nuestra
vida, comamo siempre de la palabra de Dios, nutramos nuestro espíritu.
Verso clave
Éste es el pan que bajó del cielo. Los antepasados de ustedes comieron maná y
murieron, pero el que come de este pan vivirá para siempre.
(Juan 6:58)

El que dirige la historia debe preguntar en orden aleatorio a los presentes, la historia
narrada. El primero que es señalado debe empezar la historia, el segundo debe
al que está contando la historia para que todos los asistentes puedan relatar un
pedacito de historia.
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Apuntes
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El Agua de la Roca
Toda la comunidad israelita partió del desierto de Sin por

etapas, según lo había ordenado el SEÑOR. Acamparon
en Refidín, pero no había allí agua para que bebieran,
así que altercaron con Moisés. —Danos agua para beber
—le exigieron. — ¿Por qué pelean conmigo? —Se defendió
Moisés—. ¿Por qué provocan al SEÑOR? Pero los israelitas estaban sedientos, y murmuraron contra
Moisés. — ¿Para qué nos sacaste de Egipto? —reclamaban—. ¿Sólo para matarnos de sed a
nosotros, a nuestros hijos y a nuestro ganado? Clamó entonces Moisés al SEÑOR, y le dijo: — ¿Qué
voy a hacer con este pueblo? ¡Sólo falta que me maten a pedradas! —Adelántate al pueblo —le
aconsejó el SEÑOR—y llévate contigo a algunos ancianos de Israel, pero lleva también la vara con
que golpeaste el Nilo. Ponte en marcha, que yo estaré esperándote junto a la roca que está en
Horeb. Aséstale un golpe a la roca, y de ella brotará agua para que beba el pueblo. Así lo hizo Moisés,
a la vista de los ancianos de Israel. Además, a ese lugar lo llamó Masá, y también Meribá, porque los
israelitas habían altercado con él y provocado al SEÑOR al decir: «¿Está o no está el SEÑOR entre
nosotros?»
(Éxodo 17:1-7)
Jesús es la verdadera Agua viva

Al igual que en la lección anterior vemos a Dios proveyendo al pueblo de Israel de lo que necesitaban,
esta vez dándoles agua en medio del desierto, un hecho que es imposible naturalmente, pero ya
sabemos que para Dios nada es imposible.
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En el nuevo testamento vemos el significado de esta señal que Dios hizo, como ya hemos aprendido,
casi todo lo que está escrito en el antiguo testamento es una parábola de lo verdadero, en este caso
Dios quiso demostrar que Él es el único que puede dar agua que da vida en medio de la rebelión y la
confusión (así llamaron los Israelitas el agua que salió de la roca rebelión y confusión) pero esta
historia tiene un solo problema, todos aquellos que bebieron de esta milagrosa agua siguieron
teniendo sed, e incluso muchos de ellos murieron, es por eso que cuando Jesús vino dijo lo siguiente:
—Todo el que beba de esta agua volverá a tener sed —respondió Jesús—, pero el que beba del agua
que yo le daré, no volverá a tener sed jamás, sino que dentro de él esa agua se convertirá en un
manantial del que brotará vida eterna. (Juan 4:13-14) ¿Puedes ver lo importante de las palabras de
Jesús? No solo apagará tu sed sino que esa agua producirá en ti un manantial, extraordinario.
Ahora cabe aclarar, ¿Jesús habla del agua que conocemos? ¿Habla del agua que tomamos de la llave?
Pues no, es un agua espiritual, el agua verdadera es el Espíritu de Jesús, su don inmerecido.
Su palabra, La Gracia que está en ella, el evangelio, el perdón, es el agua verdadera, es la fe que solo
Jesús puede dar, nadie la puede conseguirla por sus propios medios, solo Él la puede dar. La gracia
encierra el perdón, la fe, la salvación, cosas que no se consiguen con esfuerzo humano, es por eso
que Jesús dice a la samaritana “Si tú me pidieras”, en paralelo con lo que aconteció con el agua de
la roca también fue algo humanamente imposible y fue don de Dios, pero fue un don pasajero, no
así Jesús, el agua que El ofrece es un don eterno, podemos decir entonces que el agua en el desierto
fue un extraordinario milagro, pero Jesús lo sobrepasa todo, El verdaderamente trajo el agua que
da vida, y vida eterna.
Bebamos del agua que Jesús nos da, bebamos de su Espíritu para que en nosotros se convierta en
una fuente que brota vida eterna, pidámosle siempre en oración que nos dé su agua de vida.
Verso clave
… Pero el que beba del agua que yo le daré, no volverá a tener sed jamás, sino que dentro de él esa
agua se convertirá en un manantial del que brotará vida eterna…
(Juan 4:14)
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expongan a sus compañeros que fracción de la historia cuenta la lámina, luego pasa
el siguiente y también debe narrar, así sucesivamente, narrar en orden lógico.
Apuntes
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Serie #4 El Sacerdocio
El Tabernáculo
El SEÑOR habló con Moisés y le dijo: «Ordénales a los

israelitas que me traigan una ofrenda…para adornar el
efod y el pectoral del sacerdote. Después me harán un
santuario, para que yo habite entre ustedes. El
santuario y todo su mobiliario deberán ser una réplica
exacta del modelo que yo te mostraré.
»Haz un arca de madera de acacia… Recúbrela de oro puro por dentro y por fuera, y ponle en su
derredor una moldura de oro. Funde cuatro anillos de oro para colocarlos en sus cuatro patas, dos
en cada costado. Prepara luego unas varas de madera de acacia, y recúbrelas de oro. Introduce las
varas en los anillos que van a los costados del arca, para transportarla. Deja las varas en los anillos
del arca, y no las saques de allí, y pon dentro del arca la ley que voy a entregarte... En cada uno de
los extremos irá un querubín. Hazlos de modo que formen una sola pieza con el propiciatorio. »Los
querubines deberán tener las alas extendidas por encima del propiciatorio, y cubrirlo con ellas.
Quedarán el uno frente al otro, mirando hacia el propiciatorio. »Coloca el propiciatorio encima del
arca, y pon dentro de ella la ley que voy a entregarte. Yo me reuniré allí contigo en medio de los dos
querubines que están sobre el arca del pacto. Desde la parte superior del propiciatorio te daré todas
las instrucciones que habrás de comunicarles a los israelitas… Procura que todo esto sea una réplica
exacta de lo que se te mostró en el monte.
Ordénales a los israelitas que te traigan aceite puro de oliva, para que las lámparas estén siempre
encendidas. Aarón y sus hijos deberán mantenerlas encendidas toda la noche en presencia del
SEÑOR, en la Tienda de reunión, fuera de la cortina que está ante el arca del pacto. Esta ley deberá
cumplirse entre los israelitas siempre, por todas las generaciones.
(Exo 27:20-21/25:1-40)
63
El verdadero Tabernáculo
¿Qué es el Tabernáculo? Su significado más sencillo es santuario o lugar de adoración. En el relato
una de las frases más significativas que tiene es: “. El santuario y todo su mobiliario deberán ser una
réplica exacta del modelo que yo te mostraré” y casi al final vuelve a decir: “Procura que todo esto
sea una réplica exacta de lo que se te mostró en el monte”. A Moisés no se le ocurrió este modelo,
se lo mostraron, y tuvo que hacerlo tal cual lo vio, y ¿dónde lo vio? En el mismo cielo.
En el libro de hebreos el autor menciona el verdadero tabernáculo, el celestial, el que no es hecho
por mano de hombre (Hebreos 9) pero en este tabernáculo no fue necesario hacer sacrificios de
animales como en el que construyeron los Israelitas sino que fue el mismo Jesucristo fue el sacrificio
por todos nuestros pecados, una vez y para siempre.
Dios quiso mostrar al pueblo de Israel que se sentía vivir con la presencia de Dios en medo de ellos,
aunque el pueblo respetaba mucho el santuario siempre una y muchas veces volvían a hacer lo malo
delante de Dios.
Hoy sabemos que en el cielo está el verdadero tabernáculo, donde existe una adoración constante
hacia nuestro Dios y sabemos que nuestra oración y adoración ya llega hacia este tabernáculo, el
verdadero, aquel que se le mostró a Moisés en el monte.
Acerquémonos a Dios confiadamente, sabiendo que el sacrificio ya fue hecho por mis pecados y por
esto podemos estar delante de Dios sin culpa y sin temor, desde que Jesús murió en la cruz, todo
aquel que cree en él, es participe de este verdadero tabernáculo de este lugar de adoración,
nosotros junto a Dios y Él en medio nuestro.
Verso clave
Y oí una gran voz del cielo que decía: He aquí el tabernáculo de Dios con los hombres,
y él morará con ellos; y ellos serán su pueblo, y Dios mismo estará con ellos como su
Dios.
(Apocalipsis 21:3)
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Hacer preguntas, por ejemplo. ¿Quién es el personaje principal? ¿Qué otros personajes
hay en la historia? ¿Se imaginan el paisaje de la historia? ¿Qué cosas buenas ocurrieron
en la historia? ¿Qué enseñanza puedo aprender de ella? Etcétera.
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El Día de Reposo
El SEÑOR le ordenó a Moisés: «Diles lo siguiente a los israelitas:

“Ustedes deberán observar mis sábados. En todas las generaciones
venideras, el sábado será una señal entre ustedes y yo, para que
sepan que yo, el SEÑOR, los he consagrado para que me sirvan » ” El
sábado será para ustedes un día sagrado. Obsérvenlo» ” Quien no lo
observe será condenado a muerte. » ” Quien haga algún trabajo en
sábado será eliminado de su pueblo. » ” Durante seis días se podrá
trabajar, pero el día séptimo, el sábado, será de reposo consagrado al
SEÑOR. » ” Quien haga algún trabajo en sábado será condenado a muerte.” »Los israelitas deberán
observar el sábado. En todas las generaciones futuras será para ellos un pacto perpetuo, una señal
eterna entre ellos y yo. »En efecto, en seis días hizo el SEÑOR los cielos y la tierra, y el séptimo día
descansó.»
(Éxodo 31:12-17)
El verdadero reposo
Vemos en todo el Antiguo testamento una gran importancia en cuanto a guardar el día de reposo
(sábado), después de que Dios les dio el mandato sobre el día de reposo, algunos lo olvidaban y lo
consideraban una molestia. “Es una gran pérdida de tiempo descansar un día entero” decían
algunos, y no hacían caso del mandamiento; a éstos el profeta Jeremías les dice: “Así ha dicho
Jehová: Guardaos por vuestra vida de llevar carga en el día de reposo, y de meterla por las puertas de
Jerusalén”, es decir, o descansan el día de reposo, o se mueren.
Ahora nos preguntamos ¿Por qué tanta insistencia en el día de reposo?, ¿Por qué para Dios era tan
importante que los hombres obedecieran este mandamiento? Pues bien, el apóstol Pablo nos dice
que el día de reposo es una “sombra de lo que ha de venir” (Col.2:16-17), es decir, estaba anunciando
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una realidad futura para los hombres del Antiguo Testamento; el día de reposo es una sombra, una
figura de la condición espiritual de quienes creen en Jesús.
El día de reposo implica dejar de trabajar, es el cese de la obra humana. Cuando Jesús vino estableció
el nuevo pacto, este nuevo pacto se basa en la obra de Jesús y en su justicia, no en nuestras obras
ni en nuestro esfuerzo (Ef.2:8-9). Podemos decir entonces, que cuando vino Jesús se acabó el
trabajo del hombre por intentar acercarse a Dios, todo esfuerzo y sacrificio humano por tratar de
ganar o merecer el favor de Dios es ahora innecesario. Dios desea relacionarse con nosotros por
medio de la gracia de Jesús, por el regalo de su Salvación y no por medio de nuestra bondad. Por
esto es muy peligroso cuando yo confío en mis buenas obras, pensando que por ellas Dios me tiene
que aceptar, sería como sacar a Cristo y poner en su lugar lo bueno que he hecho, sería romper el
“día de reposo”. El día de reposo hoy no es un día físico de 24 horas, sino un estado permanente
donde mi espíritu es salvado sin mediar ningún trabajo propio, es el ambiente donde puedo
descansar por que Jesús hizo todo el trabajo para hacerme aceptable ante Dios.
El capítulo 4 de Hebreos, el verso 3 dice que los que hemos creído entramos en su reposo (al reposo
se entra sólo por la fe), y en el verso 10 dice que el que ha entrado en su reposo descansa de sus
obras, luego en el verso 11 nos anima diciendo: “Esforcémonos, pues, por entrar en ese reposo”.
Amados, pongamos toda determinación por entrar en su reposo y no ser desobedientes. Es decir
procuremos confiar totalmente en el trabajo de Jesús que nos salvó; no confiemos en nuestras
obras sino que permitamos que Jesús solamente sea nuestra justicia y satisfacción.
Verso clave
“Esforcémonos, pues, por entrar en ese reposo, para que nadie caiga al seguir aquel
ejemplo de desobediencia”
(Hebreos 4:11)
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El Holocausto
Dios llamó a Moisés desde el santuario y le

ordenó que les diera este mensaje a los
israelitas: «Cuando alguno de ustedes me
presente una ofrenda para quemarla en mi honor, podrá ofrecerme terneros, cabritos o corderos.
Éste deberá ser un macho sin ningún defecto. Lo llevará a la entrada del santuario, y allí pondrá su
mano sobre la cabeza del ternero, y lo matará. Así, yo recibiré su ofrenda con agrado, y le perdonaré
sus pecados. »
«Ellos pondrán leña sobre el altar y le prenderán fuego, y allí quemarán los pedazos del ternero,
junto con la cabeza, las patas, los intestinos y la grasa. Se trata de una ofrenda de aroma agradable,
que se presenta en mi honor. »
(Leviticos 1:1-6)
Jesús es el Verdadero Sacrificio

El método que Dios determinó para que un hombre se acercara a él en el A.T. es el sacrificio. El
sacrificio de un animal era el elemento necesario para que Dios mirara con agrado a un hombre.
Podríamos mirar esto como un acto bastante cruel e injusto, ¿Por qué tiene que morir un animalito?
¿Qué culpa tiene el animal? ¿Acaso a Dios le gusta cuando un animal muere?
La verdad es que la muerte de los animales no estaba mostrando la crueldad de Dios hacia los
animales, sino la Gracia de Dios hacia los hombres. Pensemos en esto; el hombre es pecador, es una
criatura que usó su voluntad para apartarse de Dios, ante la Ley divina sólo hay un diagnóstico;
“Todos hemos pecado, y por eso estamos lejos de Dios” (Rom.3:23).
Naturalmente, Dios no puede aceptarnos; para una criatura que pecó, su único destino es la muerte,
para cualquier criatura, la paga del pecado es la muerte (Rom.6:23).
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Sin embargo, Dios tenía pensado un extraordinario plan para permitir al hombre venir a él aun
cuando éste fuera pecador, el plan de Dios consistía en trasladar el castigo desde el hombre hacia
su Hijo, su plan era que Su Hijo muriera “cargando el pecado de todos nosotros” (Is.53:6) y
regalarnos de esta manera su completo perdón.
Antes de que Jesús viniera para morir, Dios anunció Su obra por medio de animales. En realidad, la
muerte de los animales no otorgaba el perdón (Heb.10:4), pero eran un símbolo para que
pudiéramos comprender la muerte de Jesús y obtuviéramos el perdón por medio de ella.
Veamos qué lecciones aprendemos del mandamiento sobre el holocausto; primero, el sacrificio que
el hombre debía traer era un animal sin defecto. Esto representa la perfección de Jesús, el no tuvo
ninguna clase de pecado, es totalmente limpio e inocente. Jesús, al venir como hombre, fue el único
hombre totalmente agradable y aceptado por Dios. En segundo lugar, el hombre pecador debía
poner su mano sobre la cabeza del animal, en este acto el pecado del hombre se traspasa al animal
y la inocencia del animal se traslada al hombre; esto es lo que sucede cuando tocamos por la fe a
Jesús, nuestra maldad se traspasa a su cuerpo y nuestro castigo es pagado por su muerte, a la vez,
la Justicia de Jesús nos llena y nos vuelve semejantes a él; totalmente aceptados por Dios. Jesús
tomó nuestro lugar y murió como un pecador, y nosotros tomamos el suyo viviendo libres de culpa.
En tercer lugar, Jesús es la ofrenda agradable; Dios siempre recibirá con agrado la ofrenda de su Hijo
y perdonará nuestros pecados cuando oremos en su nombre.
Por esto, tengamos mucha alegría en la gracia de Dios, el mayor regalo que hemos recibido es que
Jesús es nuestro perfecto sacrificio. Ya no hace falta nada más, él es la ofrenda y sacrificio perfecto,
de olor fragante a Dios (Ef.5:2) que cancela nuestra culpabilidad y nuestro castigo.
Verso clave
Y lleven una vida de amor, así como Cristo nos amó y se entregó por nosotros como
ofrenda y sacrificio fragante para Dios.
(Efesios 5:2)
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Elegir a un niño o niña que cuente la historia a sus compañeros (siempre
ayudándole para que no se largue el momento)
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El sacerdocio de Aarón
«Toma a Aarón y a sus hijos, junto con sus vestiduras, el

aceite de la unción, el novillo para el sacrificio expiatorio,
los dos carneros y el canastillo de los panes sin levadura, y
congrega a toda la comunidad a la entrada de la Tienda de
reunión». Moisés llevó a cabo la orden del SEÑOR, y
congregó a la comunidad a la entrada de la Tienda de
reunión. Allí Moisés les dijo: «Esto es lo que el SEÑOR nos
ha ordenado hacer.» Acto seguido, Moisés hizo que se
acercaran Aarón y sus hijos, y los lavó con agua. A Aarón le puso la túnica y se la ciñó con la faja;
luego lo cubrió con el manto, y encima le puso el efod, ciñéndoselo con la cinta del mismo. En
seguida, le colocó el pectoral, y sobre éste puso el urim y el tumim. Por último, le colocó la tiara en
la cabeza, y en la parte delantera puso la placa de oro, símbolo de su consagración, tal como el
SEÑOR se lo había mandado. Luego, para consagrar a Aarón, lo ungió derramando sobre su cabeza
el aceite de la unción.
(Levíticos 8:2 -12)
Jesús es el Verdadero Sacerdote

En el tiempo del primer pacto había sacerdotes, que estaban entre Dios y los israelitas. Personas
autorizadas por Dios para servir y llevar a cabo todas las actividades del culto en el tabernáculo y en
el templo. Ellos recibían, autorizaban y preparaban los sacrificios, de manera que la persona venía a
Dios a través del sacerdote. Aarón y su familia fueron escogidos para ser la familia de sacerdotes
más importantes de Israel. Así, los descendientes de Aarón eran nombrados sacerdotes y cuando
morían, sus hijos tomaban el puesto, esto fue así hasta que llegó Jesús.
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Jesús vino como un sacerdote mucho más perfecto que Aarón. Aarón fue escogido sacerdote para
presentar el pacto provisorio de la Ley, Jesús vino y estableció el pacto definitivo de la Verdad, los
hijos de Aarón eran hombres mortales e imperfectos, Jesús es perfecto y vive para siempre
(Heb.7:25), los hijos de Aarón tenían que presentar muchos sacrificios todos los años, ya que el
pecado nunca se terminaba, sin embargo Jesús ofreció un solo sacrificio, su cuerpo, y erradicó el
pecado por siempre (Heb.10:12), es decir, hizo perfectos para siempre a todos a los que se acercan
por él a Dios (Heb.10:14).
Jesús es el hijo del Hombre, por lo que es compasivo con nuestras debilidades (Heb.4:15), y también
es el Hijo de Dios, por lo que es poderoso para salvarnos (Hech.7:26).
Podemos ver fácilmente a Jesús a través de la consagración de Aarón; primero, él no se escogió a
sí mismo, sino que Moisés lo llamó. De la misma manera, el Padre fue quién encargó al Hijo la misión
del sacerdocio (Heb.5:5). En segundo lugar, Aarón fue vestido con variados elementos; El Padre
vistió a Jesús la túnica del cuerpo humano, el manto es su dignidad real, la cual voluntariamente se
sacó para servirnos (Jn.13:4), el Efod fuimos nosotros los hombres puestos en su pecho para ser
amados por él, la tiara su sello de consagración, y el urim y tumim representan su poder y autoridad
sobrenatural. En tercer lugar, Aarón fue ungido con aceite; El Padre ungió a Jesucristo con el
Espíritu Santo (Hech.10:38), Su unción es la señal de la presencia de Dios en él, es su alegría eterna
(Heb.1:9)
Ahora Jesús es nuestro sumo sacerdote, eso quiere decir que sólo podemos venir a Dios a través de
él (Jn.14:6). Jesús es el mejor sacerdote que podríamos tener, uno que nos ama, nos comprende y
que tiene toda la autoridad y el poder para salvarnos, acerquémonos a él confiadamente, llenos de
gratitud y alegría.
Verso clave
Porque tal sumo sacerdote nos convenía: santo, inocente, sin mancha, apartado de los
pecadores, y hecho más sublime que los cielos;
(Hebreos 7:26)
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Formen equipos de dos personas: uno será el entrevistador y el otro el
entrevistado, las preguntas están dispuestas en unas tarjetas al final del tema, al
terminar las entrevistas los entrevistadores deberán leer las respuestas que
consiguieron.
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Serie #5 La Tierra Prometida
La Serpiente de Bronce
Los israelitas salieron del monte Hor por la ruta del Mar Rojo, bordeando el
territorio de Edom. En el camino se impacientaron y comenzaron a hablar contra
Dios y contra Moisés: Para qué nos trajeron ustedes de Egipto a morir en este
desierto? ¡Aquí no hay pan ni agua! ¡Ya estamos hartos de esta pésima comida!
Por eso el SEÑOR mandó contra ellos serpientes venenosas, para que los
mordieran, y muchos israelitas murieron. El pueblo se acercó entonces a Moisés,
y le dijo: Hemos pecado al hablar contra el SEÑOR y contra ti. Ruégale al SEÑOR
que nos quite esas serpientes. Moisés intercedió por el pueblo, y el SEÑOR le
dijo: Hazte una serpiente, y ponla en un asta. Todos los que sean mordidos y la
miren, vivirán. Moisés hizo una serpiente de bronce y la puso en un asta. Los que eran mordidos,
miraban a la serpiente de bronce y vivían.
(Números 21:4-9)
Jesús es la Imagen que Salva

¡Que tragedia tan grande la que vivió el pueblo de Israel! Había serpientes por todos lados, su
mordida era mortal, parecía imposible escapar de la muerte. La solución de Dios no fue expulsar las
serpientes, tampoco un veneno que las eliminara. Fue una colosal imagen de una serpiente de
bronce en un asta. Dios dijo que aquel que miraba a la serpiente viviría. Parecía imposible, pero
quienes creyeron pudieron beneficiarse y vivir después de las mordeduras.
¿Por qué Dios deseó este método tan inusual? Es porque Dios deseaba mostrar en esta situación la
venida de su Hijo que vendría a Salvar a toda la humanidad de mordida mortal del pecado.
La Biblia nos enseña que después del pecado de Adán, el pecado entró en la humanidad, como si
fueran mortales serpientes, mordían e infectaban con su mortal veneno a cada ser humano que
nacía en este mundo.
79
Jesús vino a este mundo para llevar tu pecado y morir a causa de él, es decir, morir en tu lugar. Jesús,
el ser más Santo de este mundo se hizo maldito para que tú no recibieras maldición.
La serpiente era un animal inmundo, además de eso la Ley dice que es maldito todo lo que cuelga
de un madero (Gal.3:13). Lo anterior hace de la figura de una serpiente sobre un madero una imagen
completamente inmunda. Jesús fue la serpiente de Bronce, es decir, se volvió inmundo para que
nosotros fuéramos santificados. El hombre pecador e inmundo, llega a ser limpio y santo delante de
Dios sólo por la obra de Jesús. Aleluya!!!
Otro asunto a considerar es que cuando Moisés puso la serpiente de Bronce, las serpientes seguían
ahí. No desaparecieron automáticamente, Sin embargo, la Biblia nos dice que el problema se
solucionó. ¿Cómo pues se solucionó el problema? Lo más probable es que los propios israelitas
sacaron a las serpientes, como ya ellas no tenían el poder de matarlos, los israelitas dejaron de ser
víctimas indefensas ante las serpientes y pudieron defenderse, sacaron a las serpientes para
siempre. Esto mismo ocurre con el pecado, Cuando crees en Jesús, el perdona tu pecado, el veneno
del pecado ya no te matará pues la vida indestructible de Jesús ha venido a ser tuya. Pero el pecado
aún es una realidad presente, seguirán asechando el deseo de cometer nuevos pecados, pero ahora
es diferente ya que no eres mas una víctima indefensa ante el pecado, ahora puedes echarlo fuera
de ti para siempre, quizá las serpientes del pecado segirán molestando durante toda tu vida, pero
recuerda que su veneno ya no es mortal, Jesús está en ti, sólo cree esto y echa fuera toda serpiente
que quiera dañarte.
Que el Señor te Bendiga y seas lleno de la fe para que tu vida sea libre de Serpientes.
80
Verso clave
Y como Moisés levantó la serpiente en el desierto, así es necesario que el Hijo del Hombre
sea levantado, para que todo aquel que en él cree, no se pierda, mas tenga vida eterna.
(Juan 3:14-15)

atento”.
Apuntes
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Serie #5 LA Tierra Prometida
La Ciudad De Refugio
El SEÑOR le ordenó a Moisés que les dijera a los israelitas:

«Cuando crucen el Jordán y entren a Canaán, escojan
ciudades de refugio adonde pueda huir quien
inadvertidamente mate a alguien. Esa persona podrá huir a
esas ciudades para protegerse del vengador. Así se evitará
que se mate al homicida antes de ser juzgado por la
comunidad. »Seis serán las ciudades que ustedes
reservarán como ciudades de refugio. Tres de ellas estarán en el lado este del Jordán, y las otras tres
en Canaán. Estas seis ciudades les servirán de refugio a los israelitas y a los extranjeros, sean éstos
inmigrantes o residentes. Cualquiera que inadvertidamente dé muerte a alguien, podrá refugiarse
en estas ciudades. »… La comunidad deberá proteger del vengador al acusado, dejando que el
acusado regrese a la ciudad de refugio adonde huyó, y que se quede allí hasta la muerte del sumo
sacerdote que fue ungido con el aceite sagrado. »Pero si el acusado sale de los límites de la ciudad
de refugio adonde huyó, el vengador podrá matarlo, y no será culpable de homicidio si lo encuentra
fuera de la ciudad. Así que el acusado debe permanecer en su ciudad de refugio hasta la muerte del
sumo sacerdote. Después de eso podrá volver a su heredad.
(Números 35:9-28)
Jesús es nuestra Ciudad de Refugio

El Texto que leímos dice que cuando alguien mate sin querer a otra persona, el asesino tendrá la
oportunidad de salvar su vida de los vengadores huyendo a una ciudad especial llamada “Ciudad de
Refugio”. El hombre se encontrará seguro sólo dentro de los límites de la ciudad, si sale de ahí ya no
estará protegido y podrían cobrar venganza en contra de él.
83
Dios estableció estas ciudades porque deseaba mostrar que él es un Dios que siempre otorga
oportunidades a quienes tienen pasión por la vida, es decir, a aquellos que desean vivir. A Dios le
agrada cuando una persona tiene pasión por la vida, él nunca niega la vida a aquel que la desea.
Es más, Dios envió a Jesús precisamente para que pudiéramos obtener la vida, antes de enviar a su
Hijo, Dios envió la Ley por medio de Moisés. La Ley nos condenó y nos hizo ver que éramos culpables,
una vez ya sabemos que somos culpables, Dios envió a su Hijo para que corriéramos a él y
estuviésemos a salvo. Cristo es como una bendita ciudad de refugio en la cual los pecadores
podemos estar seguros, libres de todo daño.
La ley motiva nuestra pasión por la vida, nos irrita para que corramos a Jesús. Aquel que no corre a
refugiarse en Jesús no está mostrando pasión por la vida. Aquel que no pone ningún interés en Jesús
carece del deseo de vivir por lo que Dios no le puede dar ya más posibilidades y terminará recibiendo
el castigo del fuego eterno.
Sin embargo, aquellos que tienen pasión por la vida corren hacia Jesús, los que desean vivir
eternamente se esfuerzan por permanecer en Jesús, renuncian a cosas de este mundo con tal de
estar más cerca de Jesús, estar en Jesús y permanecer en él se vuelve la primera prioridad en toda
la Vida.
Seamos las personas que aman su vida, que permanecen firmes en la gracia de Jesús, que aman la
vida eterna que Jesús obtuvo por nosotros por su sacrificio. Demos gracias a Dios por darnos
seguridad eterna todos los días de nuestra vida.
Verso clave
Permaneced en mí, y yo en vosotros. Como el pámpano no puede llevar fruto por sí

mismo, si no permanece en la vid, así tampoco vosotros, si no permanecéis en mí.
(Juan 15:4)
84
En una caja colocar preguntas sobre la lección, sentar al grupo en un círculo y hacer pasar
la caja uno en uno al ritmo de la música o una canción. Al detenerse, el que tenga la caja
debe sacar una pregunta y responderla, y así sucesivamente
Apuntes
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La Tierra Prometida
Ciertamente ustedes han visto con sus propios

ojos todas las maravillas que el SEÑOR ha
hecho. Por eso, cumplan todos los
mandamientos que hoy les mando, para que
sean fuertes y puedan cruzar el Jordán y tomar
posesión de la tierra, y para que vivan mucho
tiempo en esa tierra que el SEÑOR juró dar a los
antepasados de ustedes y a sus descendientes, tierra donde abundan la leche y la miel. Esa tierra,
de la que van a tomar posesión, no es como la de Egipto, de donde salieron; allá ustedes plantaban
sus semillas y tenían que regarlas como se riega un huerto. En cambio, la tierra que van a poseer es
tierra de montañas y de valles, regada por la lluvia del cielo. El SEÑOR su Dios es quien la cuida; los
ojos del SEÑOR su Dios están sobre ella todo el año, de principio a fin. »Si ustedes obedecen
fielmente los mandamientos que hoy les doy, y si aman al SEÑOR su Dios y le sirven con todo el
corazón y con toda el alma, entonces él enviará la lluvia oportuna sobre su tierra, en otoño y en
primavera, para que obtengan el trigo, el vino y el aceite. También hará que crezca hierba en los
campos para su ganado, y ustedes comerán y quedarán satisfechos… »Si ustedes obedecen todos
estos mandamientos que les doy, y aman al SEÑOR su Dios, y siguen por todos sus caminos y le son
fieles, entonces el SEÑOR expulsará del territorio de ustedes a todas esas naciones. Así podrán
desposeerlas, aunque sean más grandes y más fuertes que ustedes. Todo lugar donde planten el pie
será de ustedes; su territorio se extenderá desde el desierto hasta el monte Líbano, y desde el río
Éufrates hasta el mar Mediterráneo. Nadie podrá hacerles frente. Por dondequiera que vayan, el
SEÑOR su Dios hará que todo el mundo sienta miedo y terror ante ustedes, como se lo ha prometido.
(Deuteronomio 11:1-32)
87
Jesús es la Tierra Prometida
Cuando Dios llama a Abraham le da promesa de una tierra muy buena conocida como “la tierra
prometida” o “la tierra del reposo”. A pesar de la promesa, los descendientes de Abraham nunca
pudieron tomar la tierra que Dios les había prometido. Si se dan cuenta en el texto anterior, había
un requisito para obtener la tierra, este era cumplir todos los mandamientos de Dios, si se fallaba la
ira de Dios quebraba la promesa. El nieto de Abraham, Jacob, tuvo que ir a Egipto por causa de
hambre en los tiempos de José, en Egipto la descendencia de Jacob fue esclava hasta que Dios les
libera por medio de Moisés, cruzando el desierto, los descendientes de Jacob (Israelitas), fueron
dirigidos para obtener la tierra de la promesa. A la cual ingresaron finalmente por medio de Josué.
Al entrar, los Israelitas pensaron obtener la tierra del reposo, pero esto no fue así (Heb.4:8), por
causa de su reiterado pecado y porfía, nunca pudieron disfrutar plenamente de las promesas de
bendición de la tierra prometida.
Por esto Dios estableció un nuevo pacto a través de su Hijo, este pacto ya no depende de nuestras
propias obras sino de las obras de Jesús, por este motivo el nuevo pacto es firme ya que no se basa
en las debilidades de nuestra carne sino en la fortaleza de Jesús. Por este nuevo pacto de Jesús
entramos en la tierra prometida gracias a los méritos de Jesús y no por nuestras propias obras. Así,
los que hemos creído entramos en el reposo (Heb.4:3). Por la fe en Jesús podemos efectivamente
hoy entrar en la tierra prometida, en esta tierra no hay carencias ni enfermedades, la tierra produce
en abundancia todo lo necesario para vivir. Jesús dijo que no nos preocupáramos por ninguna cosa,
sino que confiáramos en él y buscáramos su Reino, si confiamos en Jesús nos mantendremos en
esta tierra de reposo eternamente.
Que glorioso es poder disfrutar de la tierra prometida!, Jesús es nuestra tierra prometida en quien
tenemos toda la bendición. Ef.1:3 dice que Dios nos bendijo con toda bendición en los lugares
celestiales en Cristo, toda la bendición espiritual significa muchas cosas y privilegios, pero el mas
hermoso, es poder contar con la compañía de Jesús. Disfrutar en la tierra prometida poder hablar
con Jesús todo el tiempo, escucharlo y conocerlo profundamente. Hablemos con Jesús cada día con
la seguridad de que él nos oirá y nos responderá porque vivimos en la tierra prometida por la fe. No
nos quejemos de las cosas malas que nos puedan ocurrir en este mundo, porque ninguna de estas
cosas pueden movernos de esta maravillosa tierra.
Demos gracias a Dios por haber entrado en Jesús, la tierra prometida, y ser Bendecidos
eternamente!!!
88
Verso clave
Porque no por la ley fue dada a Abraham o a su descendencia la promesa de que sería
heredero del mundo, sino por la justicia de la fe. Porque si los que son de la ley son los
herederos, vana resulta la fe, y anulada la promesa. Pues la ley produce ira; pero donde
no hay ley, tampoco hay transgresión. Por tanto, es por fe, para que sea por gracia, a fin
de que la promesa sea firme para toda su descendencia; no solamente para la que es de
la ley, sino también para la que es de la fe de Abraham, el cual es padre de todos nosotros.
(Romanos 4:13-16)

de historia.
Apuntes
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El Profeta como Moisés
»Las naciones cuyo territorio vas a poseer consultan a

hechiceros y adivinos, pero a ti el SEÑOR tu Dios no te ha
permitido hacer nada de eso. El SEÑOR tu Dios levantará de
entre tus hermanos un profeta como yo. A él sí lo escucharás.
Eso fue lo que le pediste al SEÑOR tu Dios en Horeb, el día de
la asamblea, cuando dijiste: “No quiero seguir escuchando la
voz del SEÑOR mi Dios, ni volver a contemplar este enorme fuego, no sea que muera.” »Y me dijo el
SEÑOR: “Está bien lo que ellos dicen. Por eso levantaré entre sus hermanos un profeta como tú;
pondré mis palabras en su boca, y él les dirá todo lo que yo le mande. Si alguien no presta oído a las
palabras que el profeta proclame en mi nombre, yo mismo le pediré cuentas. Pero el profeta que se
atreva a hablar en mi nombre y diga algo que yo no le haya mandado decir, morirá. La misma suerte
correrá el profeta que hable en nombre de otros dioses.” »Tal vez te preguntes: “¿Cómo podré
reconocer un mensaje que no provenga del SEÑOR?” Si lo que el profeta proclame en nombre del
SEÑOR no se cumple ni se realiza, será señal de que su mensaje no proviene del SEÑOR. Ese profeta
habrá hablado con presunción. No le temas.
(Deuteronomio 18:14-22)
Jesús es el profeta como Moisés

En un momento de instrucción, cuando Dios le está diciendo a Israel lo que ellos deberían hacer en
el futuro, Dios promete a Moisés un descendiente muy especial. Era “un profeta como él”, un
profeta parecido a Moisés, la palabra de Dios estaría en su boca y la orden de Dios para todo Israel
fue “a él deben escuchar”.
Desde ese momento en adelante todos los Israelitas esperaban a éste “profeta escatológico” es
decir, a un profeta extraordinario a quién debíamos obedecer sin dudar, ya que todas sus palabras
91
serían las mismas palabras de Dios. Cada profeta que aparecía Israel debía probarlo, viendo si
efectivamente su palabra se cumplia o no, o si hablaba en nombre de otros Dioses.
Muchos profetas vinieron después de Moisés, pero ninguno de ellos llegaba a la altura de este
profeta prometido que vendría a ocupar el lugar que Moisés ocupó para los israelitas del pasado.
Jesús nació 1500 años después de Moisés, en una oportunidad Jesús estaba en un monte y el monte
se llenó de Luz, aparecieron a su lado Moisés y Elias, el mayor de los profetas. La Biblia dice que en
un momento desaparecieron Moisés y Elías y quedó Jesús sólo, en ese momento la voz de Dios se
hizo oír y dijo “Este es mi Hijo, yo lo amo mucho y estoy muy contento con él. Ustedes deben
obedecerlo”, por esta acción, Dios estaba diciendo que Jesús era aquel profeta que él había
prometido, Dios cumplió la promesa hecha a Moisés enviando a su propio Hijo como el profeta
excelente que sólo habla las palabras de Dios, todas las palabras que Jesús habló son palabras de
Dios (Juan 14:10), la palabras de Dios están siempre en sus labios.
Jesús mostró públicamente que él era efectivamente el profeta como Moisés, Jesús enseñó la ley al
pueblo igual que Moisés (Mt.5-7), alimentó al pueblo en el desierto (Juan 6 ) y de la misma manera
como Moisés fue un juez para Israel, Jesús será quien juzgue todas las cosas (Juan5:22). Sin
embargo, el pueblo de Israel no recibió a Jesús ni le reconoció como al gran profeta para obedecerlo,
y decidieron eliminarlo. El texto de la página anterior dice que aquel que no escuche a éste profeta
Dios mismo le pedirá cuentas, es decir, ya se volvió un enemigo de Dios.
Sin embargo, nosotros conocemos que Jesús es este verdadero y gran profeta a quien hay que
escuchar con mucha atención, toda nuestra vida debe estar enfocada a poner atención a las palabras
de Jesús. El escuchar con fe a Jesús es lo mejor que podemos hacer en toda nuestra vida,
recordemos que Jesús felicitó a María por ocupar su tiempo en poner atención a sus palabras a pesar
de que su hermana la retaba por estar “perdiendo el tiempo”. Aquellos que no entienden el mundo
espiritual piensan que oír a Jesús es una pérdida de tiempo, pero la Biblia nos dice que es lo mejor
en que podemos usar nuestro tiempo. El apóstol Pablo le dice a la Iglesia de Galacia que ellos
recibieron el Espíritu Santo por oír las palabras de Jesús con fe (Gal.3:2).
Como vemos, escuchar con fe las palabras de Jesús es lo mejor que podemos hacer, es el tiempo
mejor invertido, es obedecer la orden sublime de Dios de obedecer a aquel profeta que vendría en
lugar de Moisés.
Seamos quienes obedecen a Dios escuchando con fe las palabras de Jesús!!!
92
Verso clave
Mientras él aún hablaba, una nube de luz los cubrió; y he aquí una voz desde la nube, que
decía: Este es mi Hijo amado, en quien tengo complacencia; a él oíd.
(Mat 17:5)

expongan a sus compañeros que fracción de la historia cuenta la lámina, luego pasa el
siguiente y también debe narrar, así sucesivamente, narrar en orden lógico.
Apuntes
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Serie #6 La Sombra de un Mesías
José, Humillación y exaltación
Jacob tenía doce hijos, pero de todos sus hijos, José era
su favorito. Un día Jacob le regaló una nueva túnica. Era
hermosa y lujosa, con todos los colores del arcoíris. Eso
hizo que los hermanos de José sintieran envidia; ellos
también querían sus túnicas elegantes.
En ese tiempo José tuvo unos sueños muy especiales, él soñó que era rey y sus hermanos y padres
se arrodillaban ante él, decir ese sueño a sus hermanos no fue muy buena idea, pues sus hermanos
sentían mucho más odio, incluso querían matarlo.
Un día José fue a verlos en el campo para llevarles comida, y los hermanos de José lo tomaron y lo
echaron en un pozo, pasaron por ahí unos comerciantes y los hermanos de José tuvieron una terrible
idea; le quitaron su túnica y lo vendieron.
Estos comerciantes llegaron con José a Egipto y volvieron a venderlo, esta vez fue a Potifar, en la
casa de él trataron muy bien a José e incluso Potifar lo llegó a querer mucho, pasó el tiempo y la
esposa de Potifar discutió fuertemente con José y quiso que lo encerrarán y así fue, José terminó
encerrado en la cárcel del palacio, allí conoció a muchas ´personas y comenzaron a saber que José
tenía un don especial y era de interpretar los sueños.
Un día el faraón tuvo unos extraños sueños que nadie podía interpretar, entonces un copero que
conoció a José le comentó de él. José interpretó muy bien los sueños de faraón y él en
agradecimiento lo dejó en un lugar privilegiado junto a él.
José con el tiempo se volvió una de las personas más poderosas de Egipto, en esos días en la tierra
había mucha hambre y los hermanos de José llegaron a Egipto a pedir alimentos para sus familias,
no esperaron que José está a cargo. Lo bueno de todo fue que José ya había perdonado a sus
hermanos y tenía plena certeza que Dios había preparado todo para ese momento y poder salvar a
su familia de morir de hambre, sus hermanos avergonzados pidieron su perdón y José les pidió que
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vinieran a vivir cerca de él, dándoles la mejor tierra del lugar, la tierra de Gosén. Jacob volvió a ver a
su hijo, y no solo a su hijo sino que también a sus nietos.
(Texto Adaptado de Génesis 37 al 48)
José y el camino del Hijo de Dios

Vimos en el texto anterior un resumen de la vida de José, El Hijo favorito es separado de su padre y
sufre en un camino descendente hasta llegar a lo más oscuro de un frio calabozo. Desde ahí fue
exaltado hasta ser el más poderoso en Egipto después de Faraón, y desde ese lugar de poder salva
a su familia de la muerte inminente y los ubica en Gosén, el mejor lugar de Egipto.
Jesús es el Hijo amado de Dios, de la misma manera que José, descendió de su posición de Gloria en
el Seno del Padre para venir al frio y oscuro calabozo del universo, y nació como un hombre en esta
tierra.
Desde este lugar y luego de su resurrección, Jesús fue levantado por Dios hasta el lugar de mayor
autoridad, el Reino del Cielo. Desde el trono del Cielo Jesús está pidiendo por nosotros los hombres
que estamos sobre la tierra para que podamos recibir Su Gracia y salvación, Jesús envió su espíritu
para que nos hablara de Jesús y nos sellara como su propiedad para siempre. Cuando el tiempo
determinado se cumpla, Jesús volverá a encontrarse con nosotros y estaremos siempre con el Señor
Jesús.
Y si me fuere y os preparare lugar, vendré otra vez, y os tomaré a mí mismo, para que donde yo estoy,
vosotros también estéis.
(Juan 14:3)
Padre, aquellos que me has dado, quiero que donde yo estoy, también ellos estén conmigo, para que
vean mi gloria que me has dado; porque me has amado desde antes de la fundación del mundo.
(Juan 17:24)
Nosotros somos quienes hasta ahora permanecemos en esta tierra, y esperamos en este mundo
expectantes, ya que sabemos que Jesús, quién tiene todo poder en los cielos y en la tierra, nos cuida
cada día y que finalmente viviremos con él por toda la eternidad. Él nos dará para vivir el mejor lugar
de la creación; que el Reino del Cielo, donde no hay sol ya que él mismo ilumina todo.
Siendo esto así, debemos confiar todos los días en Cristo, que por amor a nosotros bajó hasta este
mundo para llevarnos junto a él. Vivamos felices disfrutando cada día y comunicándonos con Jesús
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por medio de la oración, él te responderá y te librará de cualquier situación difícil. Y finalmente
estarás con él en el mejor de los lugares para siempre !!!
Verso clave
Y si me fuere y os preparare lugar, vendré otra vez, y os tomaré a mí mismo, para que
donde yo estoy, vosotros también estéis.
(Juan 14:3)

en la historia? ¿Qué enseñanza puedo aprender de ella? Etcétera.
Apuntes
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Sansón, Fuerza incomparable
Sansón fue un hombre con una fuerza extraordinaria,

pues Dios siempre estaba con él.
Los filisteos, que eran un pueblo extranjero que
mantenía a los israelitas cautivos y oprimidos,
siempre procuraban matarle y es por eso que con
engaños lo capturaron, le cortaron su pelo, lo
encarcelaron, le sacaron los ojos y lo amarraron a una
piedra de molino, y así pasó mucho tiempo.
Un día los principales de los filisteos se juntaron para ofrecer sacrificio a Dagón su dios y para
alegrarse; y dijeron: Llamen a Sansón, para que nos divierta. Y llamaron a Sansón de la cárcel, y sirvió
de juguete delante de ellos; y lo pusieron entre las columnas. Entonces Sansón dijo al joven que le
guiaba de la mano: Acércame, y hazme palpar las columnas sobre las que descansa la casa, para que
me apoye sobre ellas. Y la casa estaba llena de hombres y mujeres, y todos los principales de los
filisteos estaban allí; y en el piso alto había como tres mil hombres y mujeres, que estaban mirando
el escarnio de Sansón. Entonces clamó Sansón al Señor, y dijo: Señor acuérdate ahora de mí, y
fortaléceme, te ruego, solamente esta vez, oh Dios, para que de una vez tome venganza de los
filisteos por mis dos ojos. Tomó luego Sansón las dos columnas de en medio, sobre las que
descansaba la casa, y echó todo su peso sobre ellas, su mano derecha sobre una y su mano izquierda
sobre la otra. Y dijo Sansón: Muera yo con los filisteos. Entonces se inclinó con toda su fuerza, y cayó
la casa sobre los principales, y sobre todo el pueblo que estaba en ella.
Así murieron los filisteos y los hijos de Israel fueron libres de su opresión
(Jueces 16:23-31)
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Sansón y la Victoria del Hijo de Dios
Sansón es uno de los Jueces más famosos de Israel. Dios lo capacitó con una fuerza descomunal con
el propósito de librar a los israelitas de la opresión de los filisteos. Sansón nunca pudo ser arrestado
mientras la fuerza de Dios estaba con él, pero en un momento Dios lo dejó desamparado, lo
arrestaron y lo humillaron, quedó a merced de sus enemigos, pero él estaba destinado a destruir a
sus enemigos y liberar a todos los Israelitas. Al fin, ya derrotado y sentenciado a muerte, Sansón
apoyó sus manos sobre las columnas del estadio y con su propia muerte destruyó a sus enemigos.
De la misma manera Jesús vino a este mundo, y desde que fue bautizado caminaba con el poder de
Dios, nadie lo podía dañar mientras el poder de Dios estaba con él, pero después de tres años Dios
lo desamparó para permitir su ejecución. Jesús vino para morir, y con Su muerte el destruyó
definitivamente a sus enemigos, si bien sus enemigos lo humillaron, lo golpearon y se burlaron de
él, finalmente lo llevaron a la muerte. Pero la muerte significó la destrucción total para quienes lo
estaban matando. El destruyó con su muerte a sus enemigos. Sus enemigos no eran los seres
humanos, sino el diablo y sus ángeles, ellos torturaron a Jesús y lo llevaron a la muerte. Los hombres
fueron aquellos que estaban bajo la opresión del diablo, y quienes fueron liberados por la obra de
Jesús. El diablo fue totalmente derrotado por la muerte de Jesús, de la misma manera nosotros
fuimos totalmente liberados por la muerte de Jesús.
Así que, por cuanto los hijos participaron de carne y sangre, él también participó de lo mismo, para
destruir por medio de la muerte al que tenía el imperio de la muerte, esto es, al diablo, y librar a todos
los que por el temor de la muerte estaban durante toda la vida sujetos a servidumbre.
(Heb 2:14-15)
El que practica el pecado es del diablo; porque el diablo peca desde el principio. Para esto apareció el
Hijo de Dios, para deshacer las obras del diablo.
(1Jn 3:8)
¿De qué nos libró Jesús? Pues de la obra del diablo, la obra del diablo es muerte, enfermedad y
opresión. Primero, la muerte de Jesús te dio vida abundante y eterna, debes saber que tú no puedes
ya morir, todos nuestros cuerpos un día morirán, pero tu espíritu vivirá por siempre con el Señor en
el Reino del Cielo, la vida abundante y eterna la posees hoy, vive sin temor ni inseguridad porque
Jesús está contigo. En segundo lugar, Jesús murió para que tú seas sano. Es decir, ante cualquier
enfermedad debes pedir a Jesús y confiar en él. Él llevó esa enfermedad sobre su cuerpo, y el desea
que seas sano, por tanto puedes pedir confiando en su segura respuesta. Y en tercer lugar, Jesús te
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libró de la opresión; cualquier cosa mala que estés viviendo, puedes pedir a Jesús, si tienes miedo
en la noche o al futuro, puedes pedir a Jesús y él responderá protegiéndote y dándote valentía, si
alguien te molesta o intenta hacerte daño, cuéntalo a tus padres y pide a Jesús que él te libre. Jesús
es el gran libertador, confía en el todos los días de tu vida y para todos tu problemas, él te ama y se
alegra en protegerte.
Verso clave
El que practica el pecado es del diablo; porque el diablo peca desde el principio. Para esto apareció el
Hijo de Dios, para deshacer las obras del diablo.
(1Jn 3:8)

Preparar tres láminas, con diferentes dibujos de diferentes historias. Una de las láminas
será de la historia narrada, las otras dos serán historias que no tienen relación alguna.
Los niños deben decir cuál de las tres es la historia verdadera
Apuntes
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David y mefi-Boset
Dijo David: ¿Ha quedado alguno de la casa de Saúl, a quien haga yo

misericordia por amor de Jonatán? Y había un siervo de la casa de Saúl,
que se llamaba Siba, al cual llamaron para que viniese a David. Y el rey le
dijo: ¿Eres tú Siba? Y él respondió: Tu siervo. El rey le dijo: ¿No ha
quedado nadie de la casa de Saúl, a quien haga yo misericordia de Dios?
Y Siba respondió al rey: Aún ha quedado un hijo de Jonatán, lisiado de
los pies. Entonces el rey le preguntó: ¿Dónde está? Y Siba respondió al
rey: He aquí, está en casa de Maquir hijo de Amiel, en Lodebar. Entonces
envió el rey David, y le trajo de la casa de Maquir hijo de Amiel, de Lodebar. Y vino Mefi-boset, hijo
de Jonatán hijo de Saúl, a David, y se postró sobre su rostro e hizo reverencia. Y dijo David: Mefi-
boset. Y él respondió: He aquí tu siervo. Y le dijo David: No tengas temor, porque yo a la verdad haré
contigo misericordia por amor de Jonatán tu padre, y te devolveré todas las tierras de Saúl tu padre;
y tú comerás siempre a mi mesa. Y él inclinándose, dijo: ¿Quién es tu siervo, para que mires a un
perro muerto como yo? Entonces el rey llamó a Siba siervo de Saúl, y le dijo: Todo lo que fue de Saúl
y de toda su casa, yo lo he dado al hijo de tu señor. Tú, pues, le labrarás las tierras, tú con tus hijos y
tus siervos, y almacenarás los frutos, para que el hijo de tu señor tenga pan para comer; pero Mefi-
boset el hijo de tu señor comerá siempre a mi mesa. Y tenía Siba quince hijos y veinte siervos. Y
respondió Siba al rey: Conforme a todo lo que ha mandado mi señor el rey a su siervo, así lo hará tu
siervo. Mefi-boset, dijo el rey, comerá a mi mesa, como uno de los hijos del rey. Y tenía Mefi-boset
un hijo pequeño, que se llamaba Micaía. Y toda la familia de la casa de Siba eran siervos de Mefi-
boset. Y moraba Mefi-boset en Jerusalén, porque comía siempre a la mesa del rey; y estaba lisiado
de ambos pies.
(2Sa 9:1-13)
103
Mefi Boset y la Gracia del Hijo de Dios
Cómo vimos en la lectura anterior, Mefi Boset era un hombre miserable, estaba lisiado viviendo
continuamente bajo el temor, ya que su abuelo era Saúl, el antiguo Rey, y pensaba que el David, el
nuevo rey, alguna vez lo buscaría para hacerle mal. Lo que Mefi Boset no sabía era que mucho
tiempo antes su padre Jonathan había hecho un pacto, un compromiso con el ahora Rey David, ellos
eran muy amigos y David se comprometió a cuidar y hacer bien a toda la familia de Jonathan. Pero
como Mefi Boset no sabía nada de esto, tenía miedo de David y vivía miserablemente.
Esto sucedía hasta que el propio David buscó incesantemente a Mefi Boset, y cuando lo encontró lo
favoreció mas allá de todo límite, y le permitió comer junto a él.
El día de hoy hay muchos hombres, mujeres y niños que viven miserablemente, no se acercan a Dios
porque piensan, al igual que Mefi Boset, que Dios tiene algo contra ellos y les hará mal. Todos ellos
deben saber que Dios hizo un compromiso con su propio Hijo en la eternidad; este compromiso es
el pacto de la Gracia de Dios. En este pacto Dios se comprometió a perdonar para siempre y hacerle
bien a toda la descendencia de Jesús, es decir, a todos los que creyeran en él.
El dia de Hoy, al igual como David buscaba a Mefi Boset para bendecirlo, Dios busca al ser humano,
en cada rincón de este mundo Dios busca a hombres, mujeres y niños y les pide que crean en Jesús
para bendecirlos más allá de todo límite. El Espíritu Santo fue enviado por el Padre Dios para que
buscara a los hombres y les regalara la bendición del nombre de Jesús; cuando un hombre recibe
este nombre, su bendición no tiene fin, puede orar y obtener la respuesta de Dios para todo cuanto
necesite y Dios los considera su propio Hijo. Aquel que recibe el nombre Jesús come con Dios y se
sienta a su mesa cada día.
Así que si has creído en Jesús, alégrate!!! Dios te encontró por fin y desea llenarte de Bendición por
medio del nombre de Jesús, tu espíritu ya no es miserable, sino que tiene plena comunión con Dios,
se acerca y conversa con Dios todos los días. Eres como Mefi Boset, porque has descubierto que
Dios no te buscaba para el mal, sino para bendecirte más allá de todo límite, y para permitir que te
sentaras junto a él y le conocieras.
Tiene el resto de tu vida para conocer este precioso amor, amor que nunca terminará no importa las
cosas que puedan ocurrir, por tu fe en Jesús eres Hijo de Dios desde ahora y para siempre!!!
104
Verso clave
No me elegisteis vosotros a mí, sino que yo os elegí a vosotros, y os he puesto para que vayáis y
llevéis fruto, y vuestro fruto permanezca; para que todo lo que pidiereis al Padre en mi nombre, él
os lo dé.
(Jua 15:16)

Apuntes
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105
106
Job
Respondió Job, y dijo: Ciertamente yo sé que es así ;

¿Y cómo se justificará el hombre con Dios? Si quisiere
contender con él, No le podrá responder a una cosa entre
mil. Él es sabio de corazón, y poderoso en fuerzas;
¿Quién se endureció contra él, y le fue bien? El arranca los
montes con su furor, Y no saben quién los trastornó; El
remueve la tierra de su lugar, Y hace temblar sus
columnas; El manda al sol, y no sale;
Y sella las estrellas; El solo extendió los cielos,
Y anda sobre las olas del mar; El hizo la Osa, el Orión y las Pléyades,
Y los lugares secretos del sur; El hace cosas grandes e incomprensibles, Y maravillosas, sin número.
He aquí que él pasará delante de mí, y yo no lo veré; Pasará, y no lo entenderé. He aquí, arrebatará;
¿quién le hará restituir? ¿Quién le dirá: ¿Qué haces? Dios no volverá atrás su ira,
Y debajo de él se abaten los que ayudan a los soberbios. ¿Cuánto menos le responderé yo,
Y hablaré con él palabras escogidas? Aunque fuese yo justo, no respondería;
Antes habría de rogar a mi juez. Si yo le invocara, y él me respondiese,
Aún no creeré que haya escuchado mi voz. Porque me ha quebrantado con tempestad,
Y ha aumentado mis heridas sin causa. No me ha concedido que tome aliento,
Sino que me ha llenado de amarguras. Si habláremos de su potencia, por cierto es fuerte;
Si de juicio, ¿quién me emplazará? Si yo me justificare, me condenaría mi boca;
Si me dijere perfecto, esto me haría inicuo. Si fuese íntegro, no haría caso de mí mismo;
Despreciaría mi vida... ... Porque no es hombre como yo, para que yo le responda,
Y vengamos juntamente a juicio. No hay entre nosotros árbitro que ponga su mano sobre nosotros
dos. Quite de sobre mí su vara, Y su terror no me espante. Entonces hablaré, y no le temeré;
Porque en este estado no estoy en mí.
Job 9:1-35 (Extracto)
107
Job y la Justicia del Hijo de Dios
Job es sinónimo de sufrimiento. Fue un hombre que destacaba por su Justicia ante los demás, era
un hombre íntegro y correcto que no hacía mal a nadie. Sin embargo lo anterior, Dios permitió que
el justo Job pasara por pruebas realmente terribles, todo lo que tenía se arruinó de un día para otro
y hasta llegó a estar muy enfermo. En su triste agonía Job reflexionaba que aunque se intentara
defender delante de Dios, esto sería una tarea imposible. Dios es mucho más grande, más sabio y
más poderoso, y no hay forma de librarse de él. Job soñaba que alguna vez hubiera un juez que lo
pudiera defender delante de Dios, se lamentaba de que Dios no fuera hombre para poder hablarle,
comprenderle y sentirse comprendido. En el fondo de su alma albergaba una sutil esperanza de que
ese juez apareciera, un defensor que lo redimiera y lo levantara del polvo, Job sabía que ese tipo de
Juez era su única esperanza, por eso declara:
“Yo sé que mi Redentor vive, Y al fin se levantará sobre el polvo”

(Job 19:25)
Con estas palabras, parece que Job podía percibir débilmente la gran obra de Dios que se estaba
preparando. Un plan increíble se estaba desarrollando en la eternidad y pronto se daría a conocer.
Dios estaba preparando la venida de su Hijo a este mundo en forma de hombre ¡el sueño de Job se
haría realidad!, Dios enviaría a su Hijo en forma de hombre, se levantaría sobre el polvo para redimir
y levantar del polvo a todos los hombres. Sabemos por el mismo Job que nadie, por más bueno que
sea podría parecer bueno delante de Dios, pero este Juez vino para que por medio de su Justicia
pudiéramos presentarnos como inocentes ante Dios. La verdad es que todos nosotros hemos hecho
cosas malas que a Dios no le gustan, pero en lugar de castigarnos, Dios envió a este Juez para que
fuera castigado en nuestro lugar; el castigo que Jesús tuvo que soportar era el castigo que la
humanidad merecía, el redentor vino, y vino siendo un hombre como nosotros; fue un niño que
jugaba como tú lo haces con tu amigos, por esto Jesús comprende todas las cosas que te pasan, y
desea ayudarte y estar contigo. Nada de lo que pudiera ocurrir está oculto ante sus ojos, por esto
puedes tener plena confianza en Jesús y contarle todo en tus oraciones.
La próxima vez que vayas a orar, dale gracias a Dios el Padre por enviar un redentor tan grandioso
como Jesús, alguien que te comprende y te ama tanto, que te regaló su propia Justicia para que
pudieras entrar al Cielo y estar con él para siempre.
108
Verso clave
“Yo sé que mi Redentor vive, Y al fin se levantará sobre el polvo”

(Job 19:25)

consiguieron.
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109
110
Ester
Ester se arrodilló ante el rey y le rogó, una vez más, que hiciera algo
para impedir que se llevara a cabo el plan de Amán en contra de los
judíos. El rey la señaló con el cetro de oro, y entonces ella se puso de
pie y le dijo: —Si a Su Majestad le parece bien y justo, y si en verdad me
ama, escriba una orden que anule el documento que Amán dictó para
destruir a los judíos. ¡No podría yo soportar la tragedia que amenaza a
mi pueblo! ¡No podré resistir que se destruya a mi familia! Entonces el rey Asuero les dijo a Ester y a
Mardoqueo: —Yo le he regalado a Ester las propiedades de Amán, el cual ha sido colgado en la horca
por querer matar a los judíos. Escriban ustedes cartas ordenando lo que quieren que se haga en
favor de los judíos, y pónganles mi sello. Nadie puede anular una orden escrita y sellada en mi
nombre. Ester y Mardoqueo llamaron enseguida a los secretarios, y estos escribieron todo lo que
Mardoqueo les ordenó acerca de los judíos. Era el día veintitrés del mes de Siván. La orden fue
enviada a todos los gobernadores y principales autoridades de las veintisiete provincias, desde la
India hasta Etiopía. A cada provincia se le escribió en su propio idioma, y también a los judíos. Las
cartas fueron escritas en nombre del rey, selladas con su anillo y enviadas por medio de mensajeros
que montaban veloces caballos criados en los establos del rey. Las cartas daban permiso a los judíos
de reunirse en todas las ciudades para defenderse, matar y destruir totalmente a quienes los
atacaran, sin importar de dónde vinieran y sin respetar a las mujeres y a los niños. Además, les daba
el derecho de apoderarse de sus pertenencias.
(Est 8:3-11)
111
Ester y la Intercesión del Hijo de Dios
Ester es una figura muy importante en la Historia del pueblo de Israel, en un tiempo donde Israel era
esclavo y estaba seriamente amenazado por un edicto real que implicaba la completa destrucción
de sus habitantes, Ester llegó a ser Reina y desde esa posición de privilegio pudo interceder ante el
Rey para defender al pueblo de Israel. Esta defensa permitió que el rey dictara otro edicto, que
permitía a los Israelitas defenderse, este edicto fue la salvación del pueblo. Israel aún recuerda esta
gran Salvación por medio de la fiesta de Purim.
Sin embargo, toda esta historia nos está mostrando lo que Jesús hizo con todos nosotros los
hombres. Debido al pecado de Adán, hubo una sentencia de Dios que dictaba nuestra muerte, el
“ciertamente morirás” que Dios le dijo a Adán significa la inminente destrucción de toda la
humanidad. Por esto Dios nos proveyó de un mediador, por medio de Jesús Dios nos otorgó otro
edicto, llamado la verdad; este edicto nos permite defendernos de la muerte y tener completa
victoria. Para esto el Señor nos dejó armas espirituales con las cuales podemos vencer fácilmente
las tinieblas; una de estas armas es su palabra, la Biblia dice que la palabra de Dios es como una
espada con la cual vencemos, procuremos usar su palabra con fe y nada nos será imposible. Otra
poderosa arma espiritual es la oración, por medio de ella hablamos con Dios, le adoramos y
conocemos sus respuestas. El es un Dios vivo con quien puedes hablar cada día. Al usar
continuamente estas armas espirituales nuestros pensamientos se llenarán de fe y todos lo que no
nos permite conocer a Dios será derribado. ¡Qué gran noticia es que Dios nos permita luchar con sus
armas!
Los israelitas hasta hoy festejan el día en que el Rey les mostró su favor y les permitió tener victoria,
nosotros también cada día debemos celebrar que por medio del amor de Cristo somos más que
vencedores. Esta victoria nos acompañará por siempre, también debemos recordar que cada
semana celebramos esta victoria junto con nuestros hermanos en el culto al Señor, vivir el culto nos
permite recordar lo que Jesús hizo por nosotros y nos concede la inspiración para usar las armas de
la palabra y la oración. Cuando un soldado espiritual deja de asistir al culto, pronto se olvida de esta
victoria y suelta sus armas, por lo cual es vencido y el reino de tinieblas finalmente lo esclavizará.
No vivamos derrotados cuando Dios ya nos dio la victoria!, celebremos el edicto nuevo de la verdad
y usemos cada día las armas que él nos entregó, Muchas Bendiciones!!!
112
Verso clave
Porque las armas de nuestra milicia no son carnales, sino poderosas en Dios para
la destrucción de fortalezas, derribando argumentos y toda altivez que se levanta contra
el conocimiento de Dios, y llevando cautivo todo pensamiento a la obediencia a Cristo,
(2Co 10:4-5)

atento”.
Apuntes
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113
114
Serie #7 Anunciado EN LOS SALMOS
El Justo de Dios
Bienaventurado el varón que no anduvo en consejo de malos,

Ni estuvo en camino de pecadores, Ni en silla de escarnecedores
se ha sentado; Sino que en la ley de Jehová está su delicia, Y en su
ley medita de día y de noche.
Será como árbol plantado junto a corrientes de aguas, Que da su
fruto en su tiempo, Y su hoja no cae; Y todo lo que hace,
prosperará.
No así los malos, que son como el tamo que arrebata el viento.
Por tanto, no se levantarán los malos en el juicio, Ni los pecadores en la congregación de los justos.
Porque Jehová conoce el camino de los justos; Mas la senda de los malos perecerá.
(Salmos 1:1-6)
El Justo de Dios
El Salmo primero comienza describiendo a un hombre justo, esto quiere decir, completamente
inocente y digno de las bendiciones de Dios, alguien que no tiene falta de ninguna clase. Sin
embargo, la Biblia nos dice que no existe nadie que cumpla con esta condición. Al contrario, la Biblia
dice que todos los hombres son pecadores.
“por cuanto todos pecaron, y están destituidos de la gloria de Dios”

(Romanos 3:23)
“Por tanto, como el pecado entró en el mundo por un hombre, y por el pecado la muerte, así la muerte
pasó a todos los hombres, por cuanto todos pecaron”
(Romanos 5:12)
115
Siendo así, nuestra sentencia sería la correspondiente a los malos, de los cuales el Salmo dice; “son
como el tamo que arrebata el viento. Por tanto, no se levantarán los malos en el juicio” es decir, que
no nos irá bien cuando Dios nos examine. Y también dice “Mas la senda de los malos perecerá”.
En este punto es cuando debemos comprender el contenido del Evangelio. La Biblia nos dice que
Jesús es el verdadero justo. Es más, Jesús es la justicia misma de Dios, él es el estándar de justicia
delante de Dios, Jesús es quién nunca pecó aunque fue tentado en todo (Heb.4:15). El Salmo primero
se refiere a Jesús cuando habla del hombre bienaventurado que nunca anduvo en consejo de malos
ni estuvo en camino de pecadores, Jesús es absolutamente Justo. Pero esto no es aún la buena
noticia del evangelio, la buena noticia es que Dios le mandó a Jesús morir por nosotros, es decir,
pagar con su muerte todos nuestros pecados. Dios ordenó que el único Justo muriera por todos
nosotros los injustos, para llevarnos a Dios.
“Porque también Cristo padeció una sola vez por los pecados, el justo por los injustos,
Para llevarnos a Dios…”
(1Pedro 3:18 a)
De esta manera, eres justificado sólo por creer esta verdad, es decir, Dios te considera Justo a pesar
de tu condición. No importa lo malo que hayas hecho, tu fe en Jesús te da el derecho de ser Justo
delante de Dios, de la misma manera en que Jesús es justo. Esto es maravilloso, no existe otra noticia
más buena que esta. Hemos recibido la justicia completa como un regalo sin nosotros haber hecho
nada para obtenerla. Ahora, como creemos en Jesús, obtenemos la parte buena de este Salmo, que
dice “Será como árbol plantado junto a corrientes de aguas, que da su fruto en su tiempo, Y su hoja
no cae; Y todo lo que hace, prosperará”. Así es, darás fruto en el tiempo preciso, y todo lo que hagas
te saldrá bien. No tengas más temor de lo que viene, recuerda que llevas el sello de la justicia de
Dios, todo lo que haga, prosperará. Ten seguridad de estas palabras y vive confiado en este regalo
glorioso de su justicia.
116
Verso clave
“Porque también Cristo padeció una sola vez por los pecados, el justo por los injustos,
para llevarnos a Dios…”
(1Pedro 3:18 a)

Apuntes
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117
118
El Hijo de Dios
¿Por qué se amotinan las gentes,

Y los pueblos piensan cosas vanas?
Se levantarán los reyes de la tierra, Y príncipes consultarán
unidos Contra el Señor y contra su ungido, diciendo:
Rompamos sus ligaduras, Y echemos de nosotros sus cuerdas.
El que mora en los cielos se reirá; El Señor se burlará de ellos.
Luego hablará a ellos en su furor, Y los turbará con su ira.
Pero yo he puesto mi rey Sobre Sion, mi santo monte. Yo publicaré el decreto; El Señor me ha dicho:
Mi hijo eres tú; Yo te engendré hoy. Pídeme, y te daré por herencia las naciones, Y como posesión
tuya los confines de la tierra. Los quebrantarás con vara de hierro; Como vasija de alfarero los
desmenuzarás.
Ahora, pues, oh reyes, sed prudentes; Admitid amonestación, jueces de la tierra. Servid a Jehová
con temor, Y alegraos con temblor. Honrad al Hijo, para que no se enoje, y perezcáis en el camino;
Pues se inflama de pronto su ira. Bienaventurados todos los que en él confían.
(Salmos 2:1-12)
El Hijo de Dios
El Salmo segundo comienza mostrando la enemistad de los hombres contra Dios, el hombre por
naturaleza considera a Dios su enemigo, considera su palabra una restricción de su propia libertad,
el hombre durante toda su historia ha intentado deshacerse de Dios y suprimir sus palabras. Dios ha
mirado esta realidad y ha buscado la reconciliación. Esta reconciliación se ha efectuado en dos
partes; en primer lugar Dios nos mostró su ira, nos habló en su furor y nos turbó con su ira, esto lo
hizo por medio de la Ley. Dios entregó la Ley al pueblo de Israel por mano de Moisés y por medio de
la Ley los hombres conocieron la ira de Dios, por medio de la Ley conocemos el pecado que nos
separa de Dios. Pero en segundo lugar, Dios puso a su rey sobre “Sión”, esto quiere decir que mostró
a Jesús, el rey del reino del cielo. Cuando mostró a este rey Dios publicó el decreto; “Mi hijo eres tú;
119
Yo te engendré hoy. Pídeme, y te daré por herencia las naciones, Y como posesión tuya los confines
de la tierra” (Hebreos.1:5). Jesús es el Hijo de Dios, por tanto posee toda autoridad sobre la creación,
los confines de la tierra son posesión suya, Jesús es el dueño del cielo y de la tierra. Y él será
finalmente el gobernador de todos los hombres y ángeles.
Siendo él el rey, el salmo nos hace una solemne advertencia “Honrad al Hijo”. Desde que Dios mostró
a Jesús en este mundo, su irá está contra aquellos que no honran a su Hijo, pero su amor y su gracia
permanecen sobre aquellos que lo honran (Juan.3:36), es decir, sobre aquellos que le creen y
valoran sus palabras. Los que confían en este Hijo Rey son bienaventurados, aquellos que depositan
su confianza completamente en sus dichos son inmensamente libres felices.
Ya no debes ser enemigo de Dios, él ha puesto a su Hijo como rey para que al honrarlo seas su amigo,
sé amigo de Dios al confiar en su Hijo. Déjate gobernar por el Hijo en cada situación, permite que él
sea tu guía en cada área de tu vida.
Verso clave
El que cree en el Hijo tiene vida eterna; pero el que rehúsa creer en el Hijo no verá la
vida, sino que la ira de Dios está sobre él.
(Juan 3:36)

al que está contando la historia para que todos los asistentes puedan relatar un pedacito
de historia.
120
Serie #7 anunciado
Perseguido por el maligno
Jehová Dios mío, en ti he confiado;

Sálvame de todos los que me persiguen, y líbrame, No sea
que desgarren mi alma cual león,
Y me destrocen sin que haya quien me libre.
Jehová Dios mío, si yo he hecho esto, si hay en mis manos

iniquidad; Si he dado mal pago al que estaba en paz conmigo (Antes he libertado al que sin causa
era mi enemigo), Persiga el enemigo mi alma, y alcáncela; Huelle en tierra mi vida, y mi honra ponga
en el polvo.
Levántate, oh Jehová, en tu ira; Álzate en contra de la furia de mis angustiadores, Y despierta en

favor mío el juicio que mandaste. Te rodeará congregación de pueblos, Y sobre ella vuélvete a sentar
en alto. Jehová juzgará a los pueblos; Júzgame, oh Jehová, conforme a mi justicia, Y conforme a mi
integridad.
Fenezca ahora la maldad de los inicuos, más establece tú al justo; Porque el Dios justo prueba la
mente y el corazón. Mi escudo está en Dios, Que salva a los rectos de corazón. Dios es juez justo,
Y Dios está airado contra el impío todos los días. Si no se arrepiente, él afilará su espada; Armado
tiene ya su arco, y lo ha preparado. Asimismo ha preparado armas de muerte, Y ha labrado saetas
ardientes.
He aquí, el impío concibió maldad, Se preñó de iniquidad, Y dio a luz engaño. Pozo ha cavado, y lo
ha ahondado; Y en el hoyo que hizo caerá. Su iniquidad volverá sobre su cabeza, Y su agravio caerá
sobre su propia coronilla.
Alabaré a Jehová conforme a su justicia, Y cantaré al nombre de Jehová el Altísimo.
(Sal 7:1-17)
121
Perseguido por el maligno
El Salmo 7 es una plegaria de David por sus perseguidores, David era un rey que constantemente
estaba en peligro de invasiones extranjeras, y habitualmente estaba envuelto en guerras y batallas,
por esto pide a Dios ayuda en medio de la persecución.
Sin embargo, este clamor nos muestra también una persecución mucho más cruel y despiadada que
se llevó a cabo durante el ministerio terrenal de Jesús; cuando Jesús nació en este mundo, el diablo
gobernaba legalmente, Jesús le llama al diablo “el príncipe de este mundo” (Jn.14:30), lo que
significa que este ser tan maligno gobernaba en aquel tiempo el mundo espiritual. El diablo persiguió
a Jesús desde el momento de su nacimiento; este ser incitó a Herodes para matar a Jesús antes de
que creciera, pero Dios protegió a su Hijo y éste fue refugiado en Egipto. (Mt.2:15)
Después de que Jesús fue bautizado, el diablo buscó la manera de hacer caer a Jesús, lo tentó en el
desierto y lo persiguió durante su ministerio, finalmente influyó en Judas para que éste le entregara
y fuera condenado a morir. (Jn.13:27)
Por esto, esta súplica hecha Salmo refleja la súplica del Hijo de Dios ante la opresión del enemigo,
pide no ser destruido, pide ayuda en la aflicción, pide a Dios que se levante con ira contra sus
enemigos. También dice “despierta en favor mío el juicio que mandaste” esto es porque Dios ya
había determinado el Juicio del diablo por medio de la muerte de Jesús.
El Salmo también declara que Dios prepara contra su enemigo flechas ardientes, estas flechas
ardientes son la condenación de Dios hacia el diablo, el fuego es una alusión al infierno. El Infierno
es el lugar donde el diablo pagará su culpa, es el castigo preparado por Dios para el diablo y sus
ángeles (Mt.25:41). El diablo intenta engañar al hombre condenándolo con la Ley de Dios, es decir,
haciéndolo pensar que está condenado por Dios, el diablo ataca al hombre con dardos de fuego
(Ef.6:16). Sin embargo, la verdad es que Dios decidió salvar al hombre, no condenarlo. El diablo ya
está condenado, pero el hombre fue salvado por medio de Jesús, todos deben conocer esta gran
salvación. Así, el diablo y sus ángeles están condenados, pero el hombre fue salvado por Cristo.
Por lo anterior, alabamos a Dios, damos gracias que el enemigo de Jesús cayó en el mismo hoyo que
él cavó, que su maldad se volvió sobre su propia cabeza, alabamos a Dios por su Justicia, Y cantamos
al nombre de Jesús el Altísimo.
122
Verso clave
Sobre todo, tomad el escudo de la fe, con que podáis apagar todos los dardos de fuego
del maligno.
(Efesios 6:16)

expongan a sus compañeros que fracción de la historia cuenta la lámina, luego pasa el
siguiente y también debe narrar, así sucesivamente, narrar en orden lógico.
Apuntes
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124
El Hijo del Hombre
¡Oh Jehová, Señor nuestro,

Cuán glorioso es tu nombre en toda la tierra!
Has puesto tu gloria sobre los cielos; De la boca de

los niños y de los que maman, fundaste la fortaleza, A causa de tus enemigos,
Para hacer callar al enemigo y al vengativo.
Cuando veo tus cielos, obra de tus dedos, La luna y las estrellas que tú formaste, Digo: ¿Qué es el
hombre, para que tengas de él memoria, Y el hijo del hombre, para que lo visites?
Le has hecho poco menor que los ángeles, Y lo coronaste de gloria y de honra. Le hiciste señorear
sobre las obras de tus manos; Todo lo pusiste debajo de sus pies: Ovejas y bueyes, todo ello, Y
asimismo las bestias del campo, Las aves de los cielos y los peces del mar; Todo cuanto pasa por los
senderos del mar.
¡Oh Jehová, Señor nuestro, Cuán grande es tu nombre en toda la tierra!
(Sal 8:1-9)
El Hijo del Hombre

El Salmo 8 es hermoso, es un canto de gratitud y alabanza a Dios. Es un canto de admiración a Dios
por su grandeza plasmada en la creación.
También es una alabanza por la posición en que Dios dejó al hombre dentro de la creación; el
salmista dice “lo coronaste de gloria y honra” y luego dice “todo lo pusiste debajo de sus pies”. El
salmista David estaba considerando cómo Dios otorgó al hombre una posición privilegiada de honor
sobre el resto de la creación.
125
Pero a la luz del nuevo testamento, las palabras del Salmo 8 adquieren un nuevo y emocionante
significado:
“pero alguien testificó en cierto lugar, diciendo: ¿Qué es el hombre, para que te acuerdes de él,
O el hijo del hombre, para que le visites? Le hiciste un poco menor que los ángeles,
Le coronaste de gloria y de honra, Y le pusiste sobre las obras de tus manos; Todo lo sujetaste bajo
sus pies.
Porque en cuanto le sujetó todas las cosas, nada dejó que no sea sujeto a él; pero todavía no vemos
que todas las cosas le sean sujetas. Pero vemos a aquel que fue hecho un poco menor que los
ángeles, a Jesús, coronado de gloria y de honra, a causa del padecimiento de la muerte, para que
por la gracia de Dios gustase la muerte por todos”
(Heb 2:6-9)
El autor de Hebreos dice que el Salmo 8 no se refiere a cualquier hombre, sino a Jesús que nació
como hijo de hombre siendo menor que los ángeles. Jesús fue efectivamente “coronado de gloria y
honra a causa de su muerte” La muerte de cualquier hombre no es honrosa, pero la muerte de Jesús
en obediencia al Padre resultó en su exaltación a los cielos, Jesús es lleno de gloria y honra ya que
murió obedeciendo el mandato del Padre. Y Por esto también todo fue sujetado debajo de sus pies.
Jesús es Señor de toda la hermosa creación de Dios.
El autor de Hebreos nos recuerda también que la muerte de Jesús fue por todos nosotros, esto
quiere decir que por su muerte nosotros compartimos su posición de gloria y honra, su muerte
también fue nuestra corona de gloria y honra.
Por lo anterior, debemos siempre alabar a Dios por la grandeza de su nombre, porque su Hijo
Jesucristo siendo Dios se hizo hombre, siendo superior a todos se hizo menor que los ángeles y
tomó nuestra posición, compartió con nosotros en la debilidad del cuerpo humano y luego
compartió también con nosotros la gloria del Reino del Cielo. Cada día exaltemos a Dios junto con
el salmista ¡Cuán grande es tu Nombre en toda la tierra!
126
Verso clave
Pero vemos a aquel que fue hecho un poco menor que los ángeles, a Jesús, coronado
de gloria y de honra, a causa del padecimiento de la muerte, para que por la gracia de
Dios gustase la muerte por todos.
(Hebreos 2:9)

en la historia? ¿Qué enseñanza puedo aprender de ella? Etcétera
Apuntes
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Serie #8 Anunciado EN LOS SALMOS ii
Jesús y la maldad del Hombre
Dice el necio en su corazón: No hay Dios.

Se han corrompido, hacen obras abominables;
No hay quien haga el bien. Jehová miró desde los cielos sobre los
hijos de los hombres, Para ver si había algún entendido,
Que buscara a Dios.
Todos se desviaron, a una se han corrompido; No hay quien haga lo bueno, no hay ni siquiera uno.
¿No tienen discernimiento todos los que hacen iniquidad, Que devoran a mi pueblo como si
comiesen pan, Y a Jehová no invocan?
Ellos temblaron de espanto; Porque Dios está con la generación de los justos. Del consejo del pobre
se han burlado, Pero Jehová es su esperanza. ¡Oh, que de Sion saliera la salvación de Israel!
Cuando Jehová hiciere volver a los cautivos de su pueblo, Se gozará Jacob, y se alegrará Israel.
(Salmos 14:1-7)
El cumplidor de la Ley
El Salmo 14 nos habla de la naturaleza del hombre. De cómo es el hombre realmente, de cómo Dios
mira al hombre. Al leer el Salmo quedamos tristemente asombrados de nuestra especie.
El Salmo comienza diciendo que dentro del ser humano hay tal necedad que ignora a Dios, y al
ignorarlo, todas sus acciones se corrompen, el Salmo dice “No hay ni siquiera un bueno”. Este verso
es también citado por Pablo en Romanos 3:10 diciendo “No hay justo, ni aún uno”. Esta es la
conclusión de la Ley, la ley mira al hombre y lo encuentra culpable. Según la Ley de Dios somos
indignos y no podemos entrar en el Cielo. Jesús no vino a abrogar la Ley, sino a cumplirla. Mateo 5:17
dice.
No penséis que he venido para abrogar la ley o los profetas; no he venido para abrogar,
sino para cumplir.
129
En primer lugar, Jesús vino a cumplir la Ley al darle su correcta interpretación; los judíos no habían
comprendido la ley y pensaban que eran personas buenas y que Dios debía bendecirles, ya que
habían cumplido todos los mandamientos, sin embargo Jesús les dijo que el mandato que dice “no
matar” no habla sólo de asesinato, sino que también aquel que se enoja con su hermano, mata su
alma y rompe el mandamiento. Por tanto, incluso aquellos que se creían buenos, son pecadores ante
Dios, se cumple nuevamente el diagnóstico lapidario de la Ley; “No hay Justo”.
En segundo lugar, Jesús vino a cumplir la Ley al demostrar esta maldad del hombre. Jesús fue el
único hombre bueno, libre de toda maldad, no hay en él malas intenciones ni amarguras. Jesús es el
hombre perfecto. Cuando los seres humanos conocieron al hombre perfecto, lo rechazaron y lo
asesinaron. La cruz es el crudo testimonio de la inmensa magnitud de la maldad del hombre, y de lo
inmenso y profundo del amor de Dios.
¿Por qué la cruz es también la muestra del amor de Dios?
La muerte de Jesús logró lo que ningún hombre pudo lograr por sí mismo, hizo que el hombre
pudiera ser justo ante Dios. ¿Pero si sabemos que la Ley dice: no hay justo?, ¿cómo el salmo termina
diciendo que Dios está con la generación de los justos? Esto es por la obra de la cruz. Jesús murió
cargando todas nuestras maldades y pecados sobre su cuerpo, el murió como un pecador siendo
santo, para que todos los hombres pecadores fueran tratados como santos por Dios. Es decir, la
muerte de Jesús como un pecador permitió que Dios regalara su justicia a todos los hombres, y los
hiciera sus hijos. 1Pe.3:18 dice que el Justo murió por los injustos, para llevar a los injustos, es decir a
nosotros, a Dios.
Eso es la Verdad, el hecho de que eres Hijo amado y Santo de Dios si crees en Jesús. Por su gracia no
serás tratado por Dios como pecador, sino como Santo, como Justo. Es decir, eres parte de la
generación de los justos, de aquellos a quienes Dios jamás abandonará!!!
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Verso clave
Porque también Cristo padeció una sola vez por los pecados, el justo por los injustos, para llevarnos a
Dios, siendo a la verdad muerto en la carne, pero vivificado en espíritu;
(1Pedro 3:18)

Apuntes
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serie #8 Anunciado EN LOS SALMOS ii
El Hombre Incorruptible
Guárdame, oh Dios, porque en ti he confiado. Oh alma mía, dijiste a

Jehová:
Tú eres mi Señor; No hay para mí bien fuera de ti.
Para los santos que están en la tierra, Y para los íntegros, es toda mi
complacencia. Se multiplicarán los dolores de aquellos que sirven diligentes a
Otro dios. No ofreceré yo sus libaciones de sangre, Ni en mis labios tomaré sus nombres.
Jehová es la porción de mi herencia y de mi copa; Tú sustentas mi suerte.
Las cuerdas me cayeron en lugares deleitosos, Y es hermosa la heredad que me ha tocado.
Bendeciré a Jehová que me aconseja; Aun en las noches me enseña mi conciencia.

A Jehová he puesto siempre delante de mí; Porque está a mi diestra, no seré conmovido.
Se alegró por tanto mi corazón, y se gozó mi alma;
Mi carne también reposará confiadamente; Porque no dejarás mi alma en el Seol,

Ni permitirás que tu santo vea corrupción. Me mostrarás la senda de la vida;
En tu presencia hay plenitud de gozo; Delicias a tu diestra para siempre.
(Salmos 16:1-11)
133
El Hombre Incorruptible
El Salmo 16 es una oración de confianza. Comienza pidiendo a Dios protección y expresando su fe.
Expresa también una dulce intimidad entre quien está orando y Dios, y una también profunda
gratitud por su herencia diciendo “Es hermosa la heredad que me ha tocado”.
Aunque sabemos que el autor del Salmo es el rey David. Podemos ver que el Espíritu Santo inspiró
este Salmo para mostrar la oración íntima de Jesús, el Hijo de Dios. Jesús es el heredero de Dios
(Heb.1:3), que vino a este mundo para morir, y cuando estaba en este mundo, oraba intensamente
pidiendo protección y liberación de la muerte (Heb.5:7) y sabemos que Dios le respondió.
El Señor Jesús murió conforme a la voluntad de Dios y fue sepultado, pero a los tres días Dios le
resucitó haciéndole vencer la muerte. La gloria de la resurrección es la autoridad de vencer la
muerte, Jesús fue el primero en resucitar, nosotros los que creemos en Jesús somos quienes
también resucitaremos para vivir por siempre en el Cielo junto a él.
La hermosa expresión “Mi carne también reposará confiadamente; Porque no dejarás mi alma en el
Seol, ni permitirás que tu santo vea corrupción” es una de las expresiones más hermosas del nuevo
testamento, nos recuerdan que el deseo profundo de Dios era llevar a Su Hijo a la Gloriosa herencia
del Cielo, no dejarlo en este mundo ni el lugar de muerte, y junto con Su Hijo, Dios también deseó
llevarnos a nosotros a ese precioso lugar. Hoy también podemos nosotros decir que nuestra carne
reposará confiadamente, porque Dios no dejará nuestra alma en el Seól.
Por la resurrección, el cuerpo de Jesús nunca se corrompió, es decir, no tuvo tiempo de

descomponerse. Esto nos indica que realmente la oración no era de David, sino de Cristo, esto es lo
que nos dice el apóstol Pedro en el libro de los Hechos 2:25-32.
Por esto, Jesús es quién nos muestra el camino, nos enseña a orar a nuestro Padre pidiendo
protección, a confiar plenamente en él como nuestro cuidador y a ser agradecidos cada día por la
hermosa herencia que él nos ha prometido. Estaremos con él por siempre, Gracias Señor!!!
134
Verso clave
Por lo cual mi corazón se alegró, y se gozó mi lengua,

Y aun mi carne descansará en esperanza; Porque no dejarás mi alma en el Hades,
Ni permitirás que tu Santo vea corrupción. Me hiciste conocer los caminos de la vida;
Me llenarás de gozo con tu presencia.
(Hechos 2:26-28)

Apuntes
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136
Serie #8 anunciado en lo salmos ii
El Hombre Desamparado
Dios mío, Dios mío, ¿por qué me has desamparado?

¿Por qué estás tan lejos de mi salvación, y de las palabras de mi
clamor? Dios mío, clamo de día, y no respondes; Oprobio de los
hombres, y despreciado del pueblo. Todos los que me ven me
escarnecen; Estiran la boca, menean la cabeza, diciendo: Se
encomendó a Jehová; líbrele él; Sálvele, puesto que en él se
complacía. Pero tú eres el que me sacó del vientre; El que me hizo
estar confiado desde que estaba a los pechos de mi madre. Sobre
ti fui echado desde antes de nacer;
Desde el vientre de mi madre, tú eres mi Dios. No te alejes de mí, porque la angustia está cerca;
Porque no hay quien ayude. Me han rodeado muchos toros; Fuertes toros de Basán me han cercado.
Abrieron sobre mí su boca Como león rapaz y rugiente. He sido derramado como aguas,
Y todos mis huesos se descoyuntaron; Mi corazón fue como cera, Derritiéndose en medio de mis
entrañas. Como un tiesto se secó mi vigor,
Y mi lengua se pegó a mi paladar, Y me has puesto en el polvo de la muerte. Porque perros me han
rodeado; Me ha cercado cuadrilla de malignos; Horadaron mis manos y mis pies. Contar puedo todos
mis huesos; Entre tanto, ellos me miran y me observan. Repartieron entre sí mis vestidos,
Y sobre mi ropa echaron suertes. Mas tú, Jehová, no te alejes; Fortaleza mía, apresúrate a
socorrerme. Libra de la espada mi alma, Del poder del perro mi vida. Sálvame de la boca del león,
Y líbrame de los cuernos de los búfalos. Anunciaré tu nombre a mis hermanos; En medio de la
congregación te alabaré. Los que teméis a Jehová, alabadle; Glorificadle, descendencia toda de
Jacob, Y temedle vosotros, descendencia toda de Israel. Porque no menospreció ni abominó la
aflicción del afligido, Ni de él escondió su rostro; Sino que cuando clamó a él, le oyó.
(Salmos 22:1-24)
137
El Hombre Desamparado
Dios es bueno, ¿Cómo es posible que pueda desamparar a alguien? Este Salmo comienza con una
declaración dramática en forma de pregunta ¿Por qué me has desamparado? David escribió esto en
un tiempo de gran angustia y este salmo llega a ser uno de los escritos proféticos más
extraordinarios del Antiguo Testamento. Jesús, unos minutos antes de morir en la Cruz, en su agonía
gritó “Dios mío, por qué me has desamparado?” (Mt.27:46) citando el Salmo 22. El Salmo 22 es una
asombrosa descripción de los sufrimientos de Cristo y de la agonía de su desamparo.
En el momento de la cruz, Jesús está pagando en su cuerpo todos los pecados de la humanidad,
está haciéndose maldición para que nosotros fuéramos bendecidos (Gal.3:13), haciéndose pecado
para que nosotros fuéramos hecho justos (2Cor.5:21). Es el momento donde Dios desampara a su
propio Hijo para aceptarnos a nosotros.
En nuestra redención está involucrado el sufrimiento del Padre, quién carga los pecados de la
humanidad sobre su Hijo amado, está involucrado el sufrimiento de Cristo, que soportó las burlas,
los golpes y las heridas de la crucifixión, y está involucrado también el sufrimiento del Espíritu Santo,
quien debe venir y morar en los seres humanos, guiándoles a la verdad para glorificar a Jesús, dentro
del ser humano el Espíritu es muchas veces contristado, apagado e ignorado.
Nuestra salvación tuvo el gran costo del sufrimiento de Dios. El Salmo muestra como horadaron
(perforaron) las manos y los pies de Cristo, cómo se burlaron de él, como repartieron sus vestidos.
Sin embargo, el Salmo termina con expresiones impresionantes de victoria diciendo, “anunciaré a
mis hermanos tu nombre”, nuevamente la Biblia nos dice que es Cristo quién expresa estas palabras
(Heb.2:11-12), diciendo que esta victoria que viene después del sufrimiento no es tan sólo para él,
sino también para todos sus hermanos, sus hermanos se refiere a todos aquellos que creen en él.
Jesús fue quién nos anunció el nombre de Dios (Jn.17:26), y al creer en su Nombre hemos sido
hechos Hijos de Dios (Jn.1:12) y participamos de su victoria.
Gracias al gran sufrimiento de Dios por nosotros, podemos participar de su Herencia eterna,
estemos siempre agradecidos de Dios por Su Gracia eterna !!!
138
Verso clave
Al que no conoció pecado, por nosotros lo hizo pecado, para que nosotros fuésemos hechos justicia
de Dios en él.
(2Corintios 5:21)

Formen equipos de dos personas: uno será el entrevistador y el otro el entrevistado, las
preguntas están dispuestas en unas tarjetas al final del tema, al terminar las entrevistas
los entrevistadores deberán leer las respuestas que consiguieron.
Apuntes
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Serie #8 Anunciado EN LOS SALMOS ii
El Buen Pastor
Jehová es mi pastor; nada me faltará. En lugares de delicados pastos me

hará descansar;
Junto a aguas de reposo me pastoreará. Confortará mi alma;
Me guiará por sendas de justicia por amor de su nombre. Aunque ande en
valle de sombra de muerte, No temeré mal alguno, porque tú estarás
conmigo; Tu vara y tu cayado me infundirán aliento. Aderezas mesa delante
de mí en presencia de mis angustiadores; Unges mi cabeza con aceite; mi
copa está rebosando. Ciertamente el bien y la misericordia me seguirán
todos los días de mi vida, Y en la casa de Jehová moraré por largos días.
(Salmos 23:1-6)
El Buen Pastor
En el Salmo 23 David muestra a Dios como su pastor. Él pudo verlo de esa manera ya que el mismo
David fue pastor de ovejas. David las cuidaba y las protegía, incluso a riesgo de su propia vida
(1Sam.17:34-36). David pudo ver en Dios el carácter de un amoroso pastor que le cuidaba a él de
forma cercana y personal como parte de su rebaño, ¡y su visión fue muy acertada!
Muchos años después, cuando Jesús vino a este mundo, dijo acerca de él mismo:
Yo soy el buen pastor; el buen pastor su vida da por las ovejas.

(Juan 10:11)
Jesús es el buen pastor, es quién fue enviado para estar con nosotros y protegernos. Cuando Jesús
estaba en la tierra, vio a los humanos como un gran redil de ovejas, él nos llamó como el pastor y
aquellos que oyeron su voz fueron bendecidos.
Veamos qué pasa cuando entendemos que Jesús es nuestro pastor:
141
En primer lugar, descansamos. Sabemos que ya no hay amenazas y que todo está en control porque
nuestro pastor es el más poderoso de todos, como nadie lo puede vencer, estamos completamente
seguros como sus ovejas ¡descansemos en los delicados pastos, reposemos en sus aguas de reposo!
En segundo lugar, el conforta nuestra alma. Sabemos que podemos contar con nuestro pastor todo
el tiempo, cuando tengamos algún problema o cuando estemos tristes, nuestro pastor nos dará
ánimo y nos fortalecerá.
En tercer lugar, nos guía por sendas de justicia; siempre estará ahí cuando necesitemos consejo,
nuestro pastor nos guiará y nos mostrará siempre el mejor camino, si obedecemos a nuestro pastor,
tendremos el éxito asegurado.
En cuarto lugar, no tendremos temor de ningún mal. Aunque vivamos situaciones difíciles, sabremos
que nuestro pastor nunca nos dejará, podemos decir “No temeré mal alguno, porque tu estarás
conmigo”, Ya no hay miedo cuando sabemos que él nos ama (1Jn.4:18)
En quinto y último lugar, Jesús “unge nuestra cabeza con aceite” ¿Qué significa eso? Es una forma
de decir que nos envía al Espíritu Santo, el que comienza a vivir en nosotros. Estaremos llenos de
Dios por siempre, por esto el Salmo dice “mi copa está rebosando”, no habrá ningún lugar donde
Dios no llene con su hermosa presencia. Como estaremos llenos de Dios, el bien y la misericordia
nos seguirán todos los días de nuestra vida. Hasta el día en que viviremos junto a Jesús por siempre.
Alegrémonos y demos gracias porque él es nuestro buen Pastor!!!
142
Verso clave
Yo soy el buen pastor; el buen pastor su vida da por las ovejas.

(Juan 10:11)

atento”.
Apuntes
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Serie #9 Anunciado EN LOS SALMOS iii
La Seguridad de Cristo
El SEÑOR es mi luz y mi salvación; ¿a quién temeré? El SEÑOR es el

baluarte de mi vida; ¿quién podrá amedrentarme?
Cuando los malvados avanzan contra mí para devorar mis carnes,
cuando mis enemigos y adversarios me atacan, son ellos los que
tropiezan y caen.
Aun cuando un ejército me asedie, no temerá mi corazón; aun cuando
una guerra estalle contra mí, yo mantendré la confianza.
Una sola cosa le pido al SEÑOR, y es lo único que persigo: habitar en la casa del SEÑOR todos los
días de mi vida, para contemplar la hermosura del SEÑOR y recrearme en su templo Porque en el día
de la aflicción él me resguardará en su morada; al amparo de su tabernáculo me protegerá, y me
pondrá en alto, sobre una roca Me hará prevalecer frente a los enemigos que me rodean; en su
templo ofreceré sacrificios de alabanza y cantaré salmos al SEÑOR.
(Salmos 27:1-6)
La Seguridad de Cristo
El Salmo 27 es una descripción preciosa de la vida de Jesús, y de cómo Cristo, cuando vivió en este
mundo, confió plenamente en el poder de su Padre. El Salmo comienza con dos preguntas; Si Dios
es mi luz y salvación, ¿de quién temeré? ¿Quién podrá atemorizarme? La conciencia real de la
presencia de Dios en nosotros nos quita todo temor y echa afuera toda inseguridad. Jesús no tuvo
nunca miedo de sus enemigos aunque estos le buscaban y deseaban matarlo. En cada momento
Jesús podía ver que su Padre tenía el control de todas las cosas. Incluso la noche que arrestaron a
Jesús sus enemigos “tropezaron y cayeron” literalmente (Juan.18:6). Los enemigos espirituales de
145
Jesús que deseaban destruirlo, incitaron a los hombres y finalmente condenaron a Jesús a la muerte;
parecía que estaban triunfando pero era Jesús quién estaba venciendo sobre ellos por medio de su
muerte. Jesús con su muerte venció finalmente a todos sus enemigos, quienes tropezaron y
cayeron.
Así que, por cuanto los hijos participaron de carne y sangre, él también participó de lo mismo, para
destruir por medio de la muerte al que tenía el imperio de la muerte, esto es, al diablo, y librar a todos
los que por el temor de la muerte estaban durante toda la vida sujetos a servidumbre.
(Hebreos 2:14-15)
Así, Jesús tuvo tal valentía que fue capaz de entregarse a la muerte para salvarnos, si él hubiera sido
dominado por el miedo y hubiese escapado, nosotros no tendríamos esperanza de entrar en el Cielo,
pero gracias a Dios por Cristo, que siempre mantuvo su seguridad y confianza plenas en Su buen
Padre.
Pero, ¿cómo pudo Jesús mantener ese tipo de vida tan extraordinaria?, lo dice el salmo en los versos
que siguen; “una cosa le pido a Dios” “una cosa busco”; habitar y estar junto a él, contemplar su
hermosura y alegrarme en su templo. Jesús no tenía deseo más grande sino estar y disfrutar junto a
su Padre, lo deseaba cada día, cada día se imaginaba estando junto a Dios en lugar de su herencia,
admirándose de él. Jesús oraba diciendo:
Ahora pues, Padre, glorifícame tú al lado tuyo, con aquella gloria que tuve contigo antes que el mundo
fuese.
(Juan 17:5)
El pedía a su Padre estar con él, al lado suyo, y disfrutar de su gloria. Cuando nosotros sólo tenemos
deseos terrenales y perdemos de vista a Dios, entonces no podemos tener la seguridad y valentía
de Jesús. Pero si nuestro mayor deseo es conocerle, si cada día nos imaginamos estando junto a él
y nuestro corazón suspira sólo por él en cada momento, nuestra vida se llenará de la misma
seguridad y valentía de Jesús, podremos experimentar la victoria de Jesús en cada área de nuestra
vida, estaremos “mirando con sus ojos” es decir, deseando lo mismo que él deseaba.
146
Seamos imitadores de Jesús y vivamos libres de temores e inseguridades por el resto de nuestra
vida, Cristo nos dio espíritu de amor, de poder y de dominio propio para ser más que vencedores en
este mundo ¡Que mi espíritu tenga la seguridad de Cristo!
Verso clave
Ahora pues, Padre, glorifícame tú al lado tuyo, con aquella gloria que tuve contigo antes
que el mundo fuese.
(Juan 17:5)

Hacer preguntas, por ejemplo. ¿Quién es el personaje principal? ¿Qué otros
personajes hay en la historia? ¿Se imaginan el paisaje de la historia? ¿Qué cosas buenas
ocurrieron en la historia? ¿Qué enseñanza puedo aprender de ella? Etcétera.
Apuntes
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Elogios Al Rey
Rebosa mi corazón palabra buena; Dirijo al rey mi canto; Mi lengua

es pluma de escribiente muy ligero. Eres el más hermoso de los
hijos de los hombres; La gracia se derramó en tus labios;
Por tanto, Dios te ha bendecido para siempre. Ciñe tu espada
sobre el muslo, oh valiente, Con tu gloria y con tu majestad. En tu
gloria sé prosperado; Cabalga sobre palabra de verdad, de
humildad y de justicia, Y tu diestra te enseñará cosas terribles. Tus
saetas agudas, con que caerán pueblos debajo de ti, Penetrarán
en el corazón de los enemigos del rey.
Tu trono, oh Dios, es eterno y para siempre; cetro de justicia es el cetro de tu reino.
Has amado la justicia y aborrecido la maldad; por tanto, te ungió Dios, el Dios tuyo, con óleo de
alegría más que a tus compañeros.
Mirra, áloe y casia exhalan todos tus vestidos; Desde palacios de marfil te recrean.
Hijas de reyes están entre tus ilustres; está la reina a tu diestra con oro de Ofir.
Oye, hija, y mira, e inclina tu oído; Olvida tu pueblo, y la casa de tu padre; Y deseará el rey tu
hermosura; E inclínate a él, porque él es tu señor.
(Salmos 45:1-11)
La hermosura de Cristo
El salmo 45 es una preciosa descripción de la persona de Jesús. En Hebreos 1:8-9 vemos que el autor
dice que David no escribió esto refiriéndose a los ángeles, sino al Hijo. El Hijo de Dios es a quién canta
el salmista diciendo “dirijo al Rey mi canto”, y describe a Cristo diciendo “eres el más hermoso de los
hijos de los hombres, la gracia se derramó sobre tus labios”, Jesús es el hombre perfecto, no existe
hermosura más impresionante que la personalidad de Cristo, sus palabras reflejan la pureza y
hermosura de su corazón; aquellos que lo oyeron quedaron impresionados por las palabras de
149
gracia que salían de su boca (Lucas 4:22), las ciudades se agolpaban para oírle (Mr.1:33) y hasta los
guardias que fueron a arrestarlo quedaron paralizados al oírle diciendo “¡ jamás hombre alguno ha
hablado como este hombre!” (Juan 7:46). De Jesús podemos beber gracia inagotable, sus palabras
son una fuente infinita y eterna de gracia y de verdad, sus palabras son la vida de nuestro espíritu,
sus palabras son la luz que disipa toda tiniebla (Juan 1:5).
“Ciñe tu espada sobre el muslo, oh valiente, Con tu gloria y con tu majestad”. El es hombre mas valiente
que jamás haya pisado esta tierra, descendió desde el seno del Padre, tomó la débil forma de un
hombre, para enfrentarse al reino de tinieblas. En esta débil condición juzgó y destruyó la autoridad
del diablo (Heb.2:14). Se lanzó como un kamikaze dispuesto a sufrir la condenación del pecado del
hombre con tal de liberar a toda la raza humana, sus palabras fueron su arma, como una espada
invencible Jesús penetró el corazón de los enemigos del Rey; logró nuestra gran liberación y la
condenación del diablo para siempre.
“Tu trono, oh Dios, es eterno y para siempre”, Cristo es el hombre exaltado hasta lo sumo, él es quién
posee toda la gloria de Dios en los cielos, él es el Dios del Cielo que gobernará por toda la eternidad,
su reino no tiene fin. Jesús es el “ungido con óleo de alegría”, es el hombre más alegre, su profunda
alegría es perfecta e imperturbable, nadie puede jamás amenazarle, nadie puede jamás ofenderle,
es está en el lugar más alto, todos sus enemigos están bajo sus pies.
Lo más impresionante de todo, es que este hermoso Jesús nos está invitando a estar a su lado, el
no vino sólo a mostrarse, sino a ser nuestro hermano, a permitir que fuésemos uno con él.
Nunca tendrás una invitación más gloriosa que ésta, el Rey te invita a participar de su gloria, todo
está cancelado, todo precio está pagado; sólo debes venir y beber la abundante gracia que sale de
los labios de Cristo, permite que sus palabras dirijan toda tu vida y tus pensamientos, confía
plenamente en sus palabras y no serás defraudado. Habla con él cada día en tus oraciones y
conviértete en su mejor amigo. Que el centro de tu vida sea conocer al hombre más impresionante
y hermoso de todos, Jesús.
150
Verso clave
“Porque de su plenitud tomamos todos, y gracia sobre gracia. Pues la ley por medio de Moisés fue dada,
pero la gracia y la verdad vinieron por medio de Jesucristo”
(Juan 1:16-17)

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Jesús el Rey de Gloria
De Jehová es la tierra y su plenitud; El mundo, y los que en él

habitan. Porque él la fundó sobre los mares, Y la afirmó sobre
los ríos. ¿Quién subirá al monte de Jehová? ¿Y quién estará en
su lugar santo? El limpio de manos y puro de corazón; El que no
ha elevado su alma a cosas vanas, Ni jurado con engaño. El
recibirá bendición de Jehová, Y justicia del Dios de salvación. Tal
es la generación de los que le buscan, De los que buscan tu
rostro, oh Dios de Jacob. Alzad, oh puertas, vuestras cabezas, Y alzaos vosotras, puertas eternas, Y
entrará el Rey de gloria. ¿Quién es este Rey de gloria? Jehová el fuerte y valiente, Jehová el poderoso
en batalla. Alzad, oh puertas, vuestras cabezas, Y alzaos vosotras, puertas eternas, Y entrará el Rey
de gloria. ¿Quién es este Rey de gloria? Jehová de los ejércitos, Él es el Rey de la gloria.
(Sal 24:1-10)
Jesús el Rey de Gloria

El Salmo 24 nos muestra a Dios como el Rey absoluto sobre su creación, comienza afirmando que a
Dios pertenecen todas las cosas. Y luego se lanza la pregunta ¿Quién estará en su lugar santo? Es
decir, ¿habrá alguien digno de ser compañero y estar junto a este Rey absoluto? En su respuesta, el
salmo describe a un hombre perfecto, limpio de manos (que nunca haya cometido pecados con su
cuerpo), puro de corazón (que su alma no tenga ningún rasgo de impureza).
No encontraremos a ningún hombre como en la descripción jamás, sin embargo Jesús es el Verbo
encarnado, es aquel que siendo en forma de Dios, se despojó a sí mismo haciéndose hombre. Jesús
es el hombre completamente puro y perfecto!, por esto califica para estar en el “lugar santo” de
Dios que es el Cielo.
153
Ahora, como Jesús vino a la tierra antes de entrar en su trono de gloria, el salmo describe la
bienvenida que el Cielo da a este hombre perfecto. Levanten sus cabezas puertas eternas, y entrará
el Rey de Gloria !!!.
En el tiempo de David no había venido Jesús aún, por eso sólo dice que Dios es el Rey de Gloria, sin
embargo hoy vemos claramente por medio de este Salmo a Jesús siendo alzado al trono, a Jesús
siendo coronado como el rey absoluto del Cielo. Jesús, ¡El es el rey de Gloria!
Lo maravilloso de esto es que Jesús no va a ser el único que entrará al cielo, también llevará junto
con él a todos los que deseen ir. Si cualquiera cree en Jesús, esta fe le da derecho de seguir a Jesús
hasta el Cielo. Por esto el Salmo dice “Tal es la generación de los que te buscan”, si tú eres parte de
la generación que busca a Jesús, ten la seguridad que entrarás al cielo junto con él, aunque tu veas
que no eres perfecto, eres de los que recibirá justicia de parte del Dios de salvación. Es Jesús quien,
perdonando y borrando todas tu faltas, te hará brillar con su misma perfección.
Alégrate de pertenecer a la generación bendita de los que buscan a Jesús y saben que él es el Rey
de Gloria !!!
Verso clave
“Que guardes el mandamiento sin mácula ni reprensión, hasta la aparición de nuestro Señor
Jesucristo, la cual a su tiempo mostrará el bienaventurado y solo Soberano, Rey de reyes, y Señor
de señores”
(1Ti 6:14-15)
154
El que dirige la historia debe preguntar en orden aleatorio a los presentes, la historia narrada. El
primero que es señalado debe empezar la historia, el segundo debe continuar y así el tercero, el
cuarto, etc. En orden lógico. El que dirige debe interrumpir al que está contando la historia para que
todos los asistentes puedan relatar un pedacito de historia.
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El Perdón de Cristo
Bienaventurado aquel cuya transgresión ha sido

perdonada, y cubierto su pecado. Bienaventurado el
hombre a quien Jehová no culpa de iniquidad, Y en cuyo
espíritu no hay engaño. Mientras callé, se envejecieron
mis huesos En mi gemir todo el día. Porque de día y de
noche se agravó sobre mí tu mano;
Se volvió mi verdor en sequedades de verano.
Mi pecado te declaré, y no encubrí mi iniquidad.

Dije: Confesaré mis transgresiones a Jehová; Y tú perdonaste la maldad de mi pecado.
Por esto orará a ti todo santo en el tiempo en que puedas ser hallado; Ciertamente en la inundación
de muchas aguas no llegarán éstas a él.
Tú eres mi refugio; me guardarás de la angustia; Con cánticos de liberación me rodearás.
Te haré entender, y te enseñaré el camino en que debes andar; Sobre ti fijaré mis ojos.
No seáis como el caballo, o como el mulo, sin entendimiento,
Que han de ser sujetados con cabestro y con freno,
Porque si no, no se acercan a ti. Muchos dolores habrá para el impío; más al que espera en Jehová,
le rodea la misericordia.
Alegraos en Jehová y gozaos, justos; Y cantad con júbilo todos vosotros los rectos de corazón.
(Sal 32:1-11)
157
El Salmo 32 nos muestra la experiencia que el Rey David tuvo sobre el perdón de sus pecados.
Comienza con una expresión que brota de su maravillosa experiencia con Dios; “Feliz es aquel cuya
maldad fue perdonada y cubierto su pecado” David valoraba mucho el que Dios pudiese perdonar su
propia maldad.
Pero esto no fue así siempre; hubo un tiempo cuando David tomó muy malas decisiones, y no tomó
en cuenta a Dios en todo lo que hizo, como consecuencia David hizo cosas muy malas. Cuando David
hizo esto, se escondió de Dios y no se atrevía a orar para decirle a Dios lo que había hecho, pensaba
que Dios no lo iba a perdonar y que sólo lo castigaría. Pero mientras no le dijo nada a Dios David se
sentía muy mal, dijo “se envejecieron mis huesos en mi gemir todo el día”, es decir, se sentía muy
enfermo y no podía más con esa situación.
Finalmente David confesó su pecado a Dios, no encubrió nada delante de él. La Biblia dice que nos
engañamos cuando pensamos en ocultar algo a Dios, ya que él conoce todo.
Y no hay cosa creada que no sea manifiesta en su presencia; antes bien todas las cosas están desnudas
y abiertas a los ojos de aquel a quien tenemos que dar cuenta.
(Hebreos 4:13)
Cuando David confesó su pecado, se dio cuenta del maravilloso perdón que Dios puede extender,
“Tu perdonaste la maldad de mi pecado” es el canto de gratitud de David. Ya no veía a Dios como una
amenaza, sino como su refugio, como si Dios le rodeara con cantos de liberación y como si Dios fijara
sobre él sus ojos.
Esa sensación maravillosa de libertad produjo una alegría sin igual en David, que ahora invita a todos
a orar a este Dios misericordioso sin temor.
Termina diciendo David, “Alegraos en Jehová y gozaos, justos” Es decir, David quiere que
compartan su alegría, y les llama justos, ya que ahora David sabe que Dios perdona los pecados.
Esta experiencia de David nos habla de la obra de Jesús, que por su sacrificio logró el perdón
completo de todos nuestros pecados, por su sacrificio somos justificados. Pablo recuerda este
salmo en Romanos 4:6-9 diciendo que Jesús nos dio justicia sin obras. Podemos alegrarnos sabiendo
que somos los bienaventurados a quienes Dios no inculpa de pecado.
158
Verso clave
Como también David habla de la bienaventuranza del hombre a quien Dios

atribuye justicia sin obras, diciendo:
Bienaventurados aquellos cuyas iniquidades son perdonadas,
Y cuyos pecados son cubiertos. Bienaventurado el varón a quien el Señor no inculpa de pecado
(Rom 4:6-8)
Apuntes
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160
Serie #10 Los Profetas
El anuncio del nacimiento de Jesús
Dios envió al ángel Gabriel a la ciudad galilea de Nazaret para

ver a María, una virgen que estaba comprometida con José,
un hombre que era descendiente de David. El ángel entró en
donde ella estaba y le dijo: ¡Salve, muy favorecida! El Señor
está contigo. Cuando ella escuchó estas palabras, se
sorprendió y se preguntaba qué clase de saludo era ése. El
ángel le dijo: María, no temas. Dios te ha concedido su
gracia. Vas a quedar encinta, y darás a luz un hijo, y le
pondrás por nombre JESÚS. Éste será un gran hombre, y lo llamarán Hijo del Altísimo. Dios, el Señor, le
dará el trono de David, su padre, y reinará sobre la casa de Jacob para siempre, y su reino no tendrá fin.
Pero María le dijo al ángel: ¿Y esto cómo va a suceder? ¡Nunca he estado con un hombre! El ángel le
respondió: El Espíritu Santo vendrá sobre ti, y el poder del Altísimo te cubrirá con su sombra. Por eso el
Santo Ser que nacerá será llamado Hijo de Dios. También tu parienta Elisabet, la que llamaban estéril,
ha concebido un hijo en su vejez, y ya está en su sexto mes de embarazo. ¡Para Dios no hay nada
imposible! María dijo entonces: Yo soy la sierva del Señor. ¡Cúmplase en mí lo que has dicho! Y el ángel
se fue de su presencia.
(Lucas 1:26-38)
Hijo del Altísimo

En esta nueva serie “Los Profetas” veremos tanto las profecías cumplidas de Jesús como las que aún se
deben cumplir.
El relato de Lucas en el capítulo 1 es una de las profecías sobre el Mesías que todo Israel esperaba que
se cumpliese, y esa es, el anuncio de su nacimiento. Muchos años atrás fue anunciado por el profeta
Isaías, y dice así: Por tanto, el Señor mismo os dará señal: He aquí que la virgen concebirá, y dará a luz
un hijo, y llamará su nombre Emanuel. (Isaías 7; 14)
161
Emanuel significa “Dios con nosotros” y eso fue lo que ocurrió, en el momento que El Espíritu Santo
puso al Hijo de Dios en el vientre de María Dios estuvo con nosotros en la tierra por primera vez, El Hijo
de Dios, Jesús, vivió con nosotros, y a pesar de los años Dios sigue estando con nosotros, y no solo eso,
Él está “en” Nosotros, pues su Santo Espíritu viene a morar en nuestro espíritu.
La profecía de Isaías no solo se cumplió con la venida de nuestro Señor Jesús sino que se volvió a cumplir
cuando el Espíritu Santo vino a morar en nosotros, Dios sigue estando con nosotros ¡Aleluya!
Cuando Jesús hablo con los discípulos camino a Emaús les dijo: La ley, Los profetas y salmos hablan de
mí, hablaban de su venida, de su nacimiento. Dios nunca deja las cosas al azar siempre advierte,
anuncia, previene antes que las cosas ocurran, es por eso que debemos confiar en lo que dice su
palabra, cada verso y profecía se cumplieron y aún se cumplen, no hay ninguna palabra más confiable,
que la palabra de Dios.
Disfrutemos de la profecía cumplida “Dios está con nosotros” alegrémonos y demos esta buen noticia
a todos, ya no estamos solos, nuestro Padre celestial está y estará siempre con todos aquellos que
creen en su Hijo Jesucristo.
Verso clave
Por tanto, el Señor mismo os dará señal: He aquí que la virgen concebirá, y dará a luz un
hijo, y llamará su nombre Emanuel. (Isaías 7; 14)

consiguieron.
162
Su Nacimiento
El nacimiento de Jesucristo fue así: Estando desposada

María su madre con José, antes que se juntasen, se halló que
había concebido del Espíritu Santo. José su marido, como era
justo, y no quería infamarla, quiso dejarla secretamente. Y
pensando él en esto, he aquí un ángel del Señor le apareció
en sueños y le dijo: José, hijo de David, no temas recibir a
María tu mujer, porque lo que en ella es engendrado, del Espíritu Santo es. Y dará a luz un hijo, y
llamarás su nombre JESÚS, porque él salvará a su pueblo de sus pecados. Todo esto aconteció para que
se cumpliese lo dicho por el Señor por medio del profeta, cuando dijo: He aquí, una virgen concebirá y
dará a luz un hijo, Y llamarás su nombre Emanuel, que traducido es: Dios con nosotros. Y despertando
José del sueño, hizo como el ángel del Señor le había mandado, y recibió a su mujer. (Mat 1:18-25)
Aconteció en aquellos días, que se promulgó un edicto de parte de Augusto César, que todo el mundo
fuese empadronado. Este primer censo se hizo siendo Cirenio gobernador de Siria. E iban todos para
ser empadronados, cada uno a su ciudad. Y José subió de Galilea, de la ciudad de Nazaret, a Judea, a la
ciudad de David, que se llama Belén, por cuanto era de la casa y familia de David; para ser empadronado
con María su mujer, desposada con él, la cual estaba encinta. Y aconteció que estando ellos allí, se
cumplieron los días de su alumbramiento. Y dio a luz a su hijo primogénito, y lo envolvió en pañales, y
lo acostó en un pesebre, porque no había lugar para ellos en el mesón. (Lucas 2:1-7)
EL cumplimiento de su Palabra
Cuando leemos la historia de Jesús en la biblia, debemos saber que todo lo que está escrito allí es por
una sola razón, para que tengamos vida en su Nombre, leamos Juan 20; 31: Pero éstas se han escrito
para que creáis que Jesús es el Cristo, el Hijo de Dios, y para que creyendo, tengáis vida en su nombre.
La vida de Jesús desde su concepción fue el fiel reflejo del cumplimiento de la Palabra de Dios, e incluso
él mismo le dijo a sus discípulos que no puede hacer nada que su Padre no le haya dicho, en Juan 5; 19
163
dice: No puede el Hijo hacer nada por sí mismo, sino lo que ve hacer al Padre; porque todo lo que el
Padre hace, también lo hace el Hijo igualmente. Todo lo que Dios Padre anunció o hizo en el Antiguo
Testamento Jesús de igual forma lo hizo y cumplió en el nuevo testamento.
El relato anterior menciona que José y María vivían en Galilea, pero por causa de un censo, tuvieron
que dirigirse a la ciudad natal de José que era Belén, y fue allí donde Jesús nació. En el libro del profeta
Miqueas capítulo 5 versos 2 al 4 dicen: Pero tú, Belén Efrata, pequeña para estar entre las familias de
Judá, de ti me saldrá el que será Señor en Israel; y sus salidas son desde el principio, desde los días de la
eternidad. Pero los dejará hasta el tiempo que dé a luz la que ha de dar a luz; y el resto de sus hermanos
se volverá con los hijos de Israel. Y él estará, y apacentará con poder de Jehová, con grandeza del nombre
de Jehová su Dios; y morarán seguros, porque ahora será engrandecido hasta los fines de la tierra.
¿Coincidencia? No, la profecía estaba dicha y debía cumplirse, de Belén debía nacer el Mesías y así
aconteció.
Así como esta profecía se cumplió, en la palabra de Dios hay muchas profecías y promesas reservadas
para aquellos que creen en el nombre de Jesús, muchos aún no se dan cuenta la riqueza que está
disponible para todo aquel que quiera tomarla, es solo cuestión de conocer las promesas y pedir a
nuestro Padre que se cumplan, Jesús dijo en Juan 1; 24: Hasta ahora nada habéis pedido en mi nombre;
pedid, y recibiréis, para que vuestro gozo sea cumplido.
La palabra de Dios es fiel, pidamos a Dios para que nuestro gozo sea cumplido, cuando acudamos a Dios
en oración no pongamos los ojos en nuestros errores, pongamos nuestra mirada en la fe, aunque sea
pequeña, esta es la que le agrada a nuestro Padre. Ejercita tu fe, conoce las promesas de la palabra de
Dios para Ti y pide a Dios que se cumplan en tu vida.
Verso clave
Pero tú, Belén Efrata, pequeña para estar entre las familias de Judá, de ti me saldrá el
que será Señor en Israel;(A) y sus salidas son desde el principio, desde los días de la
eternidad.
(Miqueas 5:2)
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atento”.
Apuntes
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La visita de los Reyes
Jesús nació en Belén de Judea en los tiempos del rey

Herodes. En aquel tiempo, unos sabios que venían
desde el oriente llegaron a Jerusalén y preguntaron:
¿Dónde está el rey de los judíos, que ha nacido? Porque
hemos visto su estrella en el oriente, y venimos a
adorarlo. Cuando el rey Herodes oyó esto, se turbó, y
toda Jerusalén con él. Convocó entonces a todos los principales sacerdotes y a los escribas del pueblo,
y les preguntó dónde había de nacer el Cristo. Ellos le dijeron: «En Belén de Judea; porque así está
escrito por el profeta: “Y tú, Belén, de la tierra de Judá, no eres la más pequeña entre los príncipes de
Judá; porque de ti saldrá un guía que apacentará a mi pueblo Israel.” Luego, Herodes llamó en secreto
a los sabios para saber de ellos el tiempo preciso en que había aparecido la estrella. Los envió a Belén,
y les dijo: Vayan y averigüen con sumo cuidado acerca del niño, y cuando lo encuentren, avísenme, para
que yo también vaya a adorarlo. Después de escuchar al rey, los sabios se fueron. La estrella que habían
visto en el oriente iba delante de ellos, hasta que se detuvo sobre el lugar donde estaba el niño. Al ver
la estrella, se regocijaron mucho. Cuando entraron en la casa, vieron al niño con su madre María y,
postrándose ante él, lo adoraron. Luego, abrieron sus tesoros y le ofrecieron oro, incienso y mirra. Pero
como en sueños se les advirtió que no volvieran a donde estaba Herodes, regresaron a su tierra por
otro camino.
(Mateo 2:1-12)
El Cumplimiento del tiempo

En el relato podemos ver a unos sabios de oriente que tenían muy claro el tiempo en que nacería el
Mesías, es por eso que en cuanto vieron la estrella, no dudaron en ir hacia ella para encontrarlo, y fue
así, en el libro del profeta Daniel en el capítulo 9; 24-26 dice: Setenta semanas están determinadas
sobre tu pueblo y sobre tu santa ciudad, para terminar la prevaricación, y poner fin al pecado, y expiar
167
la iniquidad, para traer la justicia perdurable, y sellar la visión y la profecía, y ungir al Santo de los santos.
Sabe, pues, y entiende, que desde la salida de la orden para restaurar y edificar a Jerusalén hasta el
Mesías Príncipe, habrá siete semanas, y sesenta y dos semanas; se volverá a edificar la plaza y el muro
en tiempos angustiosos. Y después de las sesenta y dos semanas se quitará la vida al Mesías, mas no
por sí; y el pueblo de un príncipe que ha de venir destruirá la ciudad y el santuario; y su fin será con
inundación, y hasta el fin de la guerra durarán las devastaciones.
Daniel fue uno de los profetas que dio la fecha exacta cuando aparecería el Mesías en el mundo, y solo
aquellos que estudiaban las profecías tenían certeza de cuando y donde nacería el Cristo, Cuando
Herodes preguntó a sus sabios, ellos también sabían dónde nacería.
Cada relato que había en los profetas acerca del nacimiento de Jesús se cumplió, es por esto además,
que debemos estar seguros de que la palabra de Dios es fiel y verdadera, que toda ella se cumple y
seguirá cumpliéndose en todos aquellos que creen en el nombre del Hijo de Dios.
Confiemos en la palabra de Dios, creamos en ella y seamos portadores del mensaje que ella contiene,
el mensaje del evangelio de Reino.
Verso clave
El pueblo que andaba en tinieblas vio gran luz; los que moraban en tierra de sombra de
muerte, luz resplandeció sobre ellos.
(Isaias 9:2)

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Apuntes
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Adoración celestial
En esa misma región había unos pastores que pasaban la

noche en el campo, turnándose para cuidar sus rebaños.
Sucedió que un ángel del Señor se les apareció. La gloria del
Señor los envolvió en su luz, y se llenaron de temor. Pero el
ángel les dijo: «No tengan miedo. Miren que les traigo
buenas noticias que serán motivo de mucha alegría para
todo el pueblo. Hoy les ha nacido en la ciudad de David un
Salvador, que es Cristo el Señor. Esto les servirá de señal: Encontrarán a un niño envuelto en pañales y
acostado en un pesebre.» De repente apareció una multitud de ángeles del cielo, que alababan a Dios
y decían: «Gloria a Dios en las alturas, y en la tierra paz a los que gozan de su buena voluntad.» Cuando
los ángeles se fueron al cielo, los pastores se dijeron unos a otros: «Vamos a Belén, a ver esto que ha
pasado y que el Señor nos ha dado a conocer.» Así que fueron de prisa y encontraron a María y a José,
y al niño que estaba acostado en el pesebre. Cuando vieron al niño, contaron lo que les habían dicho
acerca de él, y cuantos lo oyeron se asombraron de lo que los pastores decían. María, por su parte,
guardaba todas estas cosas en su corazón y meditaba acerca de ellas. Los pastores regresaron
glorificando y alabando a Dios por lo que habían visto y oído, pues todo sucedió tal como se les había
dicho.
(Lucas 2:8-20)
Todos Adórenle
El autor de los Salmos declara: ¡Aleluya! ¡Alabado sea el SEÑOR! Alaben al SEÑOR desde los cielos,
alábenlo desde las alturas. Alábenlo, todos sus ángeles, alábenlo, todos sus ejércitos. (Salmos 148:1-2)
A lo largo del año hemos aprendido que Dios busca adoradores en espíritu y en verdad, todo lo que
Dios creó fue hecho por su Hijo, ya sea nuestro entorno, el hombre y los ángeles. La diferencia entre la
adoración angelical y la de los hombres es muy diferente. La angelical es una adoración incesante, ellos
171
fueron creados para alabar y servir al Hijo de Dios, claro, ellos al igual que nosotros tienen libre albedrío,
es por eso que ellos también pueden elegir no alabar a Dios, así como eligió Luciel al ángel que
conocemos como Satanás o Diablo. Por otro lado, la adoración de los hombres está mucho más
relacionada con el amor de hijos a su Padre, que como siervos a su Señor, esta adoración es mucho más
íntima.
Antes del nacimiento de Jesús, su trono y el ejército de ángeles que le servirían ya estaban listos para
su llegada, es por eso que cuando Jesús nace, como dice el texto “Todos los ángeles le adoraron” y tanta
cantidad de ángeles se presentaron al nacimiento que salían de la ciudad de Belén, millones y millones
de ellos, y como no, si por primera vez veían la imagen de su Señor, el ser por el cual fueron creados, Él
era el único digno de ser adorado en esta tierra.
Los pastores que se encontraban fuera de la ciudad pudieron ser espectadores de esta gran visión
angelical, les envolvió una gran luz y se les apareció un ángel que les explicó lo que sucedía, ellos al
saber del nacimiento del Hijo de Dios no esperaron más y fueron a Belén.
Como vemos, los ángeles acompañaron a Jesús desde antes de su nacimiento en el seno de Dios Padre,
en el anuncio, a través de los sueños de su padre terrenal José, en su nacimiento, y durante toda su
vida, los ángeles son espíritus creados para el servicio del Hijo de Dios.
Hoy tenemos una gran noticia, pues los ángeles no solo sirven a Jesús sino a todos aquellos que creemos
a Él, en Hebreos 1; 14 dice: ¿No son todos los ángeles espíritus dedicados al servicio divino, enviados
para ayudar a los que han de heredar la salvación? Cada uno de nosotros al igual que nuestro Señor
Jesucristo, podemos tener ángeles a nuestro servicio, es importante poder tener aunque sea uno a
nuestra disposición, ellos nos pueden ayudar en todo lo que necesitemos, ya sea, en la oración, en la
lectura de la palabra, en el servicio de la iglesia, en la adoración, etc.
Pidamos insistentemente a nuestro Padre en oración por ángeles para nuestro servicio, seamos cada
día como El, llenos del poder, la autoridad y la inspiración de su palabra.
Verso clave
Porque nos ha nacido un niño, se nos ha concedido un hijo; la soberanía reposará sobre sus hombros,
y se le darán estos nombres: Consejero admirable, Dios fuerte, Padre eterno, Príncipe de paz.
(Isaías 9:6)
172
de historia.
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Serie #11 Los Profetas ii
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Varón de dolores
Subirá cual renuevo delante de él, y como raíz de tierra seca; no hay
parecer en él, ni hermosura; le veremos, más sin atractivo para que le
deseemos. Despreciado y desechado entre los hombres, varón de
dolores, experimentado en quebranto; y como que escondimos de él el
rostro, fue menospreciado, y no lo estimamos.
(Isa 53:2-3)
La primera parte de la profecía de Isaías 53 nos habla sobre la forma en que el Mesías vendría a esta
tierra. Sería como un brote tierno que crecería delante de Dios, un renuevo es un pequeño tallo que
brota de una planta, un brote vivo en medio de la tierra seca.
La tierra seca se refiere a este mundo, donde la vida de Dios está ausente. Donde sólo hay muerte
espiritual, un pequeño vástago vivo se abriría paso. Cristo nació como un ser espiritual vivo en este
mundo donde todos estaban muertos. Debido a la desobediencia de Adán, la humanidad se volvió
tierra seca, donde la vida no puede prosperar, Cristo es el único hombre que no desciende de Adán,
por tanto no es afectado por el pecado. Cristo es el ser viviente que nació para morir en lugar de los
pecadores.
La profecía también nos dice que Cristo vendría sin hermosura, sin atractivo que lo hiciera deseable.
Cristo es aquel que recibió de Dios la herencia del Reino del Cielo, él es el rey del Cielo. Sin embargo,
Cristo no vino mostrando su realeza, al contrario, vino revestido de debilidad. No parecía algún
personaje importante, no tuvo lugar en los hoteles de la época, y obligadamente tuvo que nacer en
un establo y fue acostado en un frio bebedero de animales.
No tuvo lujos ni vivió como los gobernadores en palacios, sino en hogar completamente normal en
la aldea de Nazareth, nada en su apariencia física ni en su historia familiar hacía pensar que Jesús
175
fuera alguien especial. Antes de su bautismo, el autor de la vida era un hombre común, el hijo del
carpintero de la aldea.
Después de ser bautizado, Jesús comenzó a predicar sobre el Reino de los cielos y la manifestación
de su verdadera identidad fue inminente. Su particular manera de hablar, su sabiduría sin igual y las
señales sobrenaturales que lo seguían daban testimonio que este era más que un hombre, era aquel
que “vino de Dios” para salvar a los pecadores.
Pero a pesar de todo lo anterior, la apariencia normal de Jesús hizo que la gente lo despreciara. En
su propia aldea no pudo hacer muchas señales ya que nadie podía creer que el hijo del carpintero
pudiera ayudarles. Salvo un reducido número de discípulos, Jesús fue menospreciado. No pudieron
ver quién era realmente aquel que estaba con ellos. Todos los desprecios, las burlas y finalmente los
golpes que precedieron la atroz muerte lo hicieron “el varón de dolores” y el “experimentado en
quebranto”, Cristo es el hombre que más ha experimentado el sufrimiento y adversidad, el conoce
el dolor físico y emocional más que ningún otro, por lo que puede comprender y compadecerse del
dolor humano. Jesús tomó el oficio del Cristo, fue el “Hijo del hombre” que puede comprendernos
profundamente. También dice la Biblia que Cristo fue tentado en todo, esto quiere decir que el
conoce la debilidad humana ante la tentación.
Todas estas aflicciones, pruebas y tentaciones que Cristo tuvo que padecer, lo perfeccionaron para
ser nuestro gran sacerdote, nuestro fiel representante y defensor. Cristo siempre comprenderá tu
situación cualquiera que sea, puedes siempre acercarte a él con plena confianza. Su trono no es
trono de juicio y de castigo, sino trono de gracia, donde no se nos paga según nuestras obras, sino
según el regalo inmerecido de Dios de acuerdo a su gran amor por nosotros.
Alégrate!!!, y jamás le desprecies, porque el varón de dolores te ha concedido de su gracia
Porque convenía que Dios, por quien todas las cosas existen y subsisten, perfeccionara mediante el
sufrimiento al autor de la salvación de ellos, a fin de llevar muchos hijos a la gloria.
(Heb 2:10)
Porque no tenemos un sumo sacerdote que no pueda compadecerse de nuestras debilidades, sino uno
que fue tentado en todo según nuestra semejanza, pero sin pecado. Acerquémonos, pues,
confiadamente al trono de la gracia, para alcanzar misericordia y hallar gracia para el oportuno socorro.
(Heb 4:15-16)
176
Verso clave
Porque convenía que Dios, por quien todas las cosas existen y subsisten, perfeccionara
mediante el sufrimiento al autor de la salvación de ellos, a fin de llevar muchos hijos a la
gloria
(Hebreos 2:10)

atento”.
Apuntes
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AQUEL QUE LLEVÓ NUESTROS PECADOS
Ciertamente llevó él nuestras enfermedades, y sufrió nuestros

dolores; y nosotros le tuvimos por azotado, por herido de Dios y
abatido. Mas él herido fue por nuestras rebeliones, molido por
nuestros pecados; el castigo de nuestra paz fue sobre él, y por su
llaga fuimos nosotros curados. Todos nosotros nos descarriamos
como ovejas, cada cual se apartó por su camino; mas Jehová cargó
en él el pecado de todos nosotros.
(Isa 53:4-6)
Jesús cargó con nuestros pecados

En la primera lección de esta serie pudimos ver la forma en que el Mesías prometido vino a este
mundo, y cómo el mundo en general lo despreció. Hoy veremos que todo esto era efectivamente la
voluntad de Dios, y que el desprecio y cruel castigo que Jesús recibió por parte de los hombres tuvo
un propósito glorioso.
La profecía dice que Jesús fue el contenedor de nuestras enfermedades. Él llevó nuestras
enfermedades y también sufrió nuestros dolores. Es decir, cada golpe y dolor que Jesús sufrió fue
por nuestra causa y no por causa de sí mismo.
¿Cuál es el resultado de que él haya llevado nuestra enfermedad y que haya sufrido nuestro dolor?,
pues nuestra sanidad, por sus heridas nosotros fuimos sanados. El evangelio de Mateo nos muestra
una escena donde Jesús sanó a muchos enfermos, diciendo:
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Y cuando llegó la noche, trajeron a él muchos endemoniados; y con la palabra echó fuera a los demonios,
y sanó a todos los enfermos; para que se cumpliese lo dicho por el profeta Isaías, cuando dijo: El mismo
tomó nuestras enfermedades, y llevó nuestras dolencias.
(Mat 8:16-17)
De modo que el evangelista veía en las sanidades realizadas por Jesús el cumplimiento de Isaías. Hoy
en día también tenemos la promesa de sanidad, y la Biblia también nos dice que una de las señales
que seguirán a los creyentes es que pondrán sus manos sobre los enfermos y estos sanarán
(Mr.16:18). Todas estas sanidades que hoy día se manifiestan en todo el mundo son también debido
a que Jesús llevó nuestra enfermedad y dolor.
Jesús fue molido por nuestros pecados, el castigo de nuestra paz fue sobre él. Esto significa que
cuando creemos en el sacrificio de Cristo podemos obtener toda la paz de Dios, de pronto en nuestra
vida como creyentes podemos tener la sensación de haber perdido nuestra paz con Dios debido a
nuestras fallas y pecados, pero debemos recordar aun en los momentos más difíciles, que el castigo
de nuestra paz fue sobre Jesús, es decir, Cristo ya pagó el precio por nuestra paz. Habrá paz
perpetua entre Jesús y nosotros si es que mantenemos nuestra fe, el apóstol Pablo dice en Romanos
5:1.
Justificados, pues, por la fe, tenemos paz para con Dios por medio de nuestro Señor Jesucristo;
(Romanos 5:1)
Por medio de Jesús, somos declarados justos, esto es, santos y sin ninguna mancha. La justificación
es la declaración de Dios sobre nuestras vidas sólo por los méritos de Cristo. Por esta justicia
tenemos paz eterna con Dios.
Si tenemos paz con Dios, luego podemos proyectar esta paz en cada una de nuestras relaciones. Por
ejemplo, aunque exista alguien que desee hacernos mal, sabemos que el ser omnipotente está de
nuestro lado y contamos con su cuidado, por tanto no nos sentiremos amenazados ni victimizados
por nadie, podremos orar por ellos e incluso bendecir a quienes nos persiguen.
Finalmente, debido a que él cargó con nuestros pecados, nosotros pudimos volver confiados a Dios,
no volvimos por algún esfuerzo de nuestra parte ni por algún mérito humano, sino sólo por la obra
bendita de Dios en Cristo. Aunque la humanidad completa se había apartado del camino de vida
predestinado por Dios para nosotros, Dios nos hizo volver a él cargando sobre Cristo toda nuestra
maldad, el apóstol Pedro se refiere a esto cuando dice:
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“quien llevó él mismo nuestros pecados en su cuerpo sobre el madero, para que nosotros, estando
muertos a los pecados, vivamos a la justicia; y por cuya herida fuisteis sanados. Porque vosotros erais
como ovejas descarriadas, pero ahora habéis vuelto al Pastor y Obispo de vuestras almas”
(1Pedro 2:24-25)
Así que, habiendo vuelto al pastor y obispo de nuestras almas, estemos confiados al saber que todos
nuestros pecados, toda nuestra maldad, todo el castigo y condenación, toda enfermedad y dolencia
fue llevada por Cristo. Haciéndonos benditos por siempre.
Verso clave
“Quien llevó él mismo nuestros pecados en su cuerpo sobre el madero, para que nosotros, estando
muertos a los pecados, vivamos a la justicia; y por cuya herida fuisteis sanados. Porque vosotros erais
como ovejas descarriadas, pero ahora habéis vuelto al Pastor y Obispo de vuestras almas”
(1Pedro 2:24-25)

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Silenciosa muerte
Angustiado él, y afligido, no abrió su boca; como

cordero fue llevado al matadero; y como oveja delante
de sus trasquiladores, enmudeció, y no abrió su boca.
Por cárcel y por juicio fue quitado; y su generación,
¿quién la contará?
Porque fue cortado de la tierra de los vivientes, y por la
rebelión de mi pueblo fue herido.
Y se dispuso con los impíos su sepultura, mas con los ricos fue en su muerte; aunque nunca hizo
maldad, ni hubo engaño en su boca. Con todo eso, Jehová quiso quebrantarlo, sujetándole a
padecimiento.
(Isa 53:7-10 a)
No abrió su boca para acusar

Ya hemos visto que esta maravillosa profecía muestra perfectamente la manera en que vino el Hijo
de Dios a este mundo, y cómo los hombres habían de despreciarlo. También vimos el propósito de
su venida, cómo vino para llevar nuestros pecados y sufrir nuestros dolores.
Hoy veremos cómo Cristo consumó su maravillosa obra en nosotros, enfrentando voluntariamente
la muerte.
En primer lugar, el texto de hoy dice que Cristo sufrió una muerte silenciosa, no hubo resistencia.
Cuando lo llevaban violentamente hacia el lugar de la crucifixión, no hubo una palabra de defensa o
de recriminación, Jesús se estaba entregando con valentía extraordinaria a la voluntad de su Padre,
no abrió su boca, no se resistió a lo que Dios deseaba hacer. Luego nos dice como Cristo fue juzgado
183
y encarcelado antes de ser llevado ante Pilato, el juicio y cárcel Jesús fue quitado de las personas, su
gloria ya no se vería públicamente en las calles.
En segundo lugar se anuncia su muerte “fue cortado de la tierra de los vivientes”, su muerte es el
evento más glorioso en toda la creación. Su muerte es el camino para tomar su trono por medio de
la resurrección, también es la manera de juzgar al diablo y condenarlo definitivamente, y también es
la manera de salvar al hombre, muriendo en su lugar cargando el castigo que a los hombres nos
correspondía.
Hay detalles del momento de su muerte, como que estuvo muriendo junto a pecadores, sin embargo
fue puesto en una tumba nueva de gran valor propiedad de José de Arimatea.
En tercer lugar, la profecía también enfatiza que la muerte de Cristo no fue fruto del azar, sino que
fue el cumplimiento de la voluntad de Dios “Jehová quiso quebrantarlo”. Fue algo que Dios ya había
determinado antes de los tiempos; si el hombre pecaba, el castigo, el pago de muerte sería pagado
por su Hijo y no por el hombre. Esta es la voluntad de Dios, nuestra salvación de pura gracia, nuestra
adopción por medio de Jesucristo.
En amor habiéndonos predestinado para ser adoptados hijos suyos por medio de Jesucristo, según el
puro afecto de su voluntad,
Efesios 1:5
Yo sanaré su rebelión, los amaré de pura gracia; porque mi ira se apartó de ellos.
(Ose 14:4)
Esta muerte que resultaría en nuestra sanidad fue anunciada por los profetas. Dios lo anunció una y
otra vez, hasta que Cristo fue finalmente a la cruz y pagó por todos nuestros pecados.
Estemos eternamente agradecidos por el hecho de que Cristo murió por nosotros, de la voluntad
de nuestro buen Dios que por amor envió a su Hijo a morir en nuestro lugar. Gracias porque por su
muerte hoy somos llamados hijos de Dios y podemos tener seguridad de estar siempre con Jesús.
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Verso clave
“En amor habiéndonos predestinado para ser adoptados hijos suyos por medio de
Jesucristo, según el puro afecto de su voluntad”
(Efesios 1:5)

Apuntes
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Gloriosa Resurrección
Cuando haya puesto su vida en expiación por el pecado, verá linaje, vivirá por
largos días, y la voluntad de Jehová será en su mano prosperada. Verá el fruto
de la aflicción de su alma, y quedará satisfecho; por su conocimiento justificará
mi siervo justo a muchos, y llevará las iniquidades de ellos. Por tanto, yo le daré
parte con los grandes, y con los fuertes repartirá despojos; por cuanto derramó
su vida hasta la muerte, y fue contado con los pecadores, habiendo él llevado el
pecado de muchos, y orado por los transgresores.
(Isais 53:10b - 12)
Glorificado es…
Para terminar esta serie basada en Isaías 53, veremos que esta maravillosa profecía nos habla sobre
la resurrección y glorificación de Cristo. El texto escogido para hoy comienza diciendo que una vez
que Cristo haya puesto su vida para perdonarnos, verá una descendencia (linaje). Esta descendencia
se refiere a todos aquellos que han puesto su fe en Jesús, aquellos que han creído que Jesús es el
hijo de Dios y que su muerte ha pagado por nuestro pecado, los que han nacido de nuevo por su
gran obra de salvación. El texto dice que este linaje es la voluntad de Dios que ha sido prosperada
en las manos de Cristo, Dios deseaba esta descendencia espiritual desde que el hombre fue creado
(Malaquias 2:15) . Este linaje también es llamado “el fruto de la aflicción de su alma” En el primer tema
de esta serie vimos que Cristo vino como el varón de dolores, como el que vino para padecer. Ahora,
Cristo mismo verá el fruto de este padecimiento y quedará satisfecho. Amigo, hoy tú eres el fruto
de la aflicción de Cristo, tu fe te ha incluido dentro de este linaje que Dios buscaba, Jesús se siente
muy satisfecho y complacido por haberte salvado, ¡Qué gran noticia!
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En la lección anterior vimos que su muerte estaba anunciada “fue cortado de la tierra de los
vivientes”, pero ahora dice “vivirá por largos días” esto anuncia que Cristo se levantó de los muertos.
Él es quien estuvo muerto, pero ahora vive por los siglos de los siglos (Ap. 1:18).
Dios levantó a Cristo de entre los muertos, y luego de esto le glorificó, es decir, Cristo fue ascendido
al Cielo, al trono que estaba preparado para él antes de la creación del universo.
Por lo cual Dios también le exaltó hasta lo sumo, y le dio un nombre que es sobre todo nombre, para
que en el nombre de Jesús se doble toda rodilla de los que están en los cielos, y en la tierra, y debajo de
la tierra; y toda lengua confiese que Jesucristo es el Señor, para gloria de Dios Padre.
(Filipenses 2:9-11)
Por cuanto Cristo se humilló llevando la maldad de los pecadores, por cuanto fue obediente hasta
la muerte cumpliendo la voluntad de Dios, Cristo fue puesto en el lugar más alto. Este es el lugar
donde actualmente está Cristo, está sentado; lo que indica que su obra está terminada, él nos
compró para Dios de manera definitiva. También está a la diestra de Dios, que el lugar de mayor
autoridad dentro de la creación.
Si, pues, habéis resucitado con Cristo, buscad las cosas de arriba,
donde está Cristo sentado a la diestra de Dios.
(Colosenses 3:1)
Hoy podemos tener plena certeza de nuestra salvación, ya que nuestro salvador ha sido glorificado
con toda la autoridad del Cielo, él es Rey de Reyes y Señor de señores. No puede haber nada en esta
tierra que opaque nuestra gozosa esperanza de estar con Jesús por toda la eternidad, nada puede
separarnos de su gran amor.
Un día Cristo regresará, y nos encontraremos con él para vivir junto a él por siempre (1Tes.4:17), él
vendrá a buscar a su linaje, esta es nuestra cierta esperanza.
Alégrate cada día sabiendo que eres parte del linaje de Jesús, que eres amado por Dios sin límites, y
que él está esperando el día de encontrarse contigo personalmente.
188
Verso clave
Por lo cual Dios también le exaltó hasta lo sumo, y le dio un nombre que es sobre todo nombre, para
que en el nombre de Jesús se doble toda rodilla de los que están en los cielos, y en la tierra, y debajo de
la tierra; y toda lengua confiese que Jesucristo es el Señor, para gloria de Dios Padre.
(Filipenses 2:9-11)

Apuntes
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189
190

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Copia Autorizada para distribución sin fines de lucro

Responsables del texto: Francisco Valdivia

Diseño y dibujos: Carolina Guerrero

Hay un mejor y verdadero Jonás, arrojado a la tempestad por el rescate de muchos.

Extracto video Mejor y verdadero

Agradezco también a mi Esposo Francisco Valdivia por su paciencia y apoyo en la interpretación de

Coordinadora Iglesia de niños Encuentro Kids

Al inicio se reúne todo el grupo de niños, independiente de las edades para:

- Cantos de alabanza y adoración

Luego se reparten por grupos, niveles o por edades para:

- Actividad o manualidad en clase (siempre ligada al texto y la reflexión base)

Para finalizar nos volvemos a reunir todos para:

Serie#2 Dios Construye una nación

Serie#3 De la Esclavitud a la libertad

Serie#5 La tierra prometida

Serie#6 La Sombra de un Mesías

Serie#7 Anunciado EN LOS SALMOS i

Serie#8 Anunciado en los salmos ii

Serie#9 anunciado en los salmos iii

Serie#10 Los profetas

44.- Aquel que llevó nuestros pecados

45.- Silenciosa muerte

46.- Gloriosa resurrección

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