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EL PORVENIR DE UNA NACIÓN.

I. PRETEXTO

Párrafo 1: Sí por el porvenir de esta nación y de este circo político en el que se pone
en juego mucho más que el slogan ya refrito de la seguridad democrática.

Párrafo 2: En 1927, Freud plantea una tesis en donde es posible hacer una
evaluación conceptual de una cultura análogamente a la evolución del desarrollo de un
individuo.

Párrafo 3: El hombre es un ser psico-somático, un ser separado de la naturaleza por


la riqueza discapacitante del lenguaje que humaniza y al mismo tiempo enajena, pues el
sujeto estará siempre dividido entre su biología y su mundo lingüístico.

Párrafo 4: Dos aspectos a considerar en la noción freudiana de cultura: todo el saber


y el poder conquistados por el hombre para dominar la naturaleza y todas las ficciones
institucionales que controlan las relaciones entre los hombres.

Párrafo 5: Desde la posición de Freud, el hombre está indefenso ante la naturaleza,


por su condición de prematuración evolutiva, precio que se paga por el tamaño de nuestro
cerebro y tampoco está naturalmente equipado para la vida en comunidad.

Párrafo 6: Freud encuentra que el hombre no es en su esencia un ser racional, tal


como el cogito cartesiano hubiera aseverado: en lo irracional y animal se encuentra su
naturaleza más pura. Su único interés es la satisfacción de una tensión de carácter
primogénito y fisiológico que es condición estructural de su ser biológico.

Párrafo 7: Para vivir en sociedad el hombre debe encontrar en su terreno artificial,


ficticio, simbólico, una fuente para satisfacer unos impulsos de origen absolutamente
natural. Es lo que Freud denominó malestar en la civilización; una imperfección que lleva a
que la cultura deba ser impuesta y no enteramente aceptada.

Párrafo 8: Los logros culturales son el producto de muchos hombres capaces de


abandonar la satisfacción auto erótica de la alineación narcisistica en pos del trabajo
cultural.
Párrafo 9: La coerción es una condición para habitar en la cultura.

Párrafo 10: La cultura suele descansar en un soporte evidente: hay un selecto grupo
de personas que ostentan la posesión de los bienes culturales y otros, despojados de ellos,
que se acoplan a uno designios ajenos.

Párrafo 11: Es posible que este lejos de los alcances de la lógica encontrar una
cultura en la que no haya necesidad de una coerción para mantener cohesionados los grupos
humanos, es decir, no habría una cultura no neurótica. Sin embargo, tal como es posible
afirmar que hay personas más neuróticas que otras es también posible afirmar que hay
culturas más coercitivas que otras.

Párrafo 12: El sacrifico es altamente gravoso para el ser humano; al tiempo que se
hace una renuncia a la bestia se abandona la fuente de goce de la vida del hombre; la vida
pierde placer. La coerción genera resistencia, la resistencia síntomas.

Párrafo 13: Los actos asociales, la violencia en el sentido más amplio, los actos de
ignominia son la emergencia natural de esta pugna en la que el hombre está inmerso desde
el tiempo en que nos inventamos los ritos mortuorios, desde el tiempo en que nació la
cultura humana.

Párrafo 14: La riqueza cultural se mide en los productos culturales, productos de los
caminos alternativos que se le proponen a la pulsión: ciencia, arte, amor, religiones; de
modo sucinto: los hijos del lenguaje.

Párrafo 15: Es posible que toda colectividad humana necesite un conductor, pero no
puede homologarse el conductor de una masa líder de un grupo social. El conductor de la
masa define los destinos de los integrantes; el líder de un grupo no conduce: señala,
sugiere.

Párrafo 16: Los conductores de las masas son enemigos de la educación, porque ésta
trabaja por la cultura y forma caracteres autónomos.

Párrafo 17: El porvenir de una nación es el futuro de los avatares en los que se
resuelve la pugna entre naturaleza y cultura.
Párrafo 18: Colombia es una nación dada a luz por los dolores de parto de una
madre frondosa violada una y otra vez por influjos extranjeros.

Párrafo 19: Nuestra historia es el producto pútrido de las inconsistencias de alma de


nuestros dirigentes y de la desorganización profunda de nuestra cultura.

Párrafo 20: Hemos caminado suficientes años con la cabeza gacha, con la misma
parsimonia de una hilera de desplazados, con el mismo rigor motriz con el que se persigue
una carroza funeraria.

Párrafo 21: La academia de psicología no puede estar ajena a la inequidad con la


que se gobierna estas tierras del sagrado corazón, sencillamente porque la inequidad
siembra la miseria del alma.

Párrafo 22: Tampoco puede permanecer ajena a los resortes que mueven el
horizonte actual de nuestra vida política ni al fenómeno apabullante con que nuestra
civilización avanza igual que un burro persiguiendo una zanahoria.

Párrafo 23: Es preocupante que a la gente le encante ver esos “programuchos” que
no reflejan la realidad; esa realidad es mucho más compleja que los guiones estereotipados
que mantienen las pantallas encendidas.

Párrafo 24: El hueso del conflicto está en la inequitatividad, que en Colombia tiene
cara de campesino sin tierra y de terrateniente sin vista suficiente para contar sus cabezas
de ganado.

Párrafo 25: El problema de la nación es de símbolos, de falta de recursos para


distanciarse del decir del gamonal y del mandata del corrupto.

Párrafo 26: Un profesional de la psicología, un estudioso del alma, sigue los


vestigios de los hilos que mantienen su país cohesionado, piensa en el bien que iguales
oportunidades traerían para la salud de la psicología del pueblo.

Párrafo27: Muchas campañas de los que hoy se llaman gobernantes elegidos de este
país del sagrado corazón fueron el compendio sin vergüenza de los errores de gobiernos
salientes, sin otro plan de gobierno que la continuidad de la política masificadora de la
seguridad democrática.

Párrafo 28: Ese modo de política difuso, populista depende de que la gente piense
poco para fabricar su guerra, de estribillos y arrullos publicitarios que unan la nación en la
falta de conciencia de la masa y la ausencia patológica del conocimiento real de sus
necesidades, es el intento desmesurado de continuismo ilusorio e inestabilidad por el que
sufre.

Párrafo 29: El mismo gobierno, comandado por ese presidente decorado con acento
de abuelito paisa y bondadoso, ha continuado con la conducción de nuestra generación a la
extinción progresiva de la dignidad laboral; un contrato decente es el equivalente a un oasis
en el Sahara.

Párrafo 30: El porvenir de la nación depende de las decisiones que se tomen hoy
mismo, del trabajo mancomunado de la sociedad por encontrar modos de regulación que no
dejen en manos de unos pocos lo que debería ser de muchos, que enriquezcan la
subjetividad y la vida.

Párrafo 31: La globalización exige que las leyes del mercado reemplacen las de la
más insipiente lógica humana.

Párrafo 32: Freud: (…) “Es comprensible que los oprimidos desarrollen una tensa
hostilidad contra la civilización que ellos mismo sostienen con su trabajo, pero de cuyos
bienes no participan sino muy poco”

II. TEXTO PRODUCCIÓN


La construcción expuesta en el texto permite contemplar como el humano está
ligado a la coerción, ya que es una condición para habitar en la cultura. Se hace
evidente la ardua realidad que debe enfrentar el hombre, pues por un lado se entiende
que en su constitución hay una parte irracional y animal, y por el otro se encuentran
todas las ficciones institucionales que controlan las relaciones y determina el actuar
entre los hombres. Lo anteriormente mencionado juega un papel crucial en el transcurrir
de la vida de los humanos, porque al estar dentro de la cultura siempre habrá de por
medio restricciones que no le permiten satisfacer sus deseos y anhelos plenamente, es
decir, lo pulsional siempre está presente, sin embargo no siempre puede ser satisfecho
ya que es contra los impulsos que luchamos constantemente para poder ser incluidos y
aceptados por la sociedad y la cultura misma; es en este punto donde es posible
contemplar la vulnerabilidad e ingenuidad de la especie humana, pues al ser la cultura
impuesta, se observa que somos altamente influenciables y accedemos a controlar y ser
controlados o en términos del texto estamos regidos por conductores y aceptamos esta
condición.

III. APLICACIÓN DEL TEXTO DESDE LO PSICOLÓGICO O SOCIAL.


El hombre es una especie social, pues habita en un entorno donde se encuentra
rodeado de otras personas, por lo tanto se crea la necesidad de relacionarse los unos con
los otros; por esta condición el ser humano debe medir y controlar sus acciones y hasta
sus pensamientos con el fin de que se dé un ambiente no perturbador y al tiempo pueda
ser incluido y aceptado como ser válido y legítimo ante los ojos de los demás. No
obstante, si se tiene en cuenta la teoría psicoanalítica de Freud nos encontramos con el
hecho de que somos en esencia seres puramente neuróticos (algunos más que otros), y
también todos tenemos internamente algo de perversos; es a partir de la resistencia que
ponemos para no dejarnos llevar por los impulsos que aparece el denominado malestar
en la civilización.
En cualquier sociedad, se hace evidente que hay personas que sobresalen más
que otras; por consiguiente tienen cierto poder o facilidad para manejar a los que los
rodean de una manera conveniente dependiendo de la necesidad y la situación. En
contexto no siempre los sujetos que poseen el poder de persuadir a los demás utilizan
este recurso para el beneficio colectivo sino que lo emplean para el beneficio propio, un
ejemplo claro de esto es la realidad social política de nuestro país, pues es evidente la
corrupción, explotación, engaño, manipulación e inequidad que nos rodea. Los factores
mencionados anteriormente son causantes de violencia, rencor, ira, tristeza, indignación
y mucho más por parte de los ciudadanos; sin embargo, los que tiene el poder saben
utilizar herramientas efectivas para dispersar en cierto modo la percepción de la
realidad, algunas de estas son: no invierten en una educación adecuada, ya que si lo
hicieran despertarían consciencia en los estudiantes y podría ser perjudicial para la
supremacía que están manejando, sacan contenido televisivo en donde se plasman
realidades que están alejadas de la propia realidad, suministran información falsa o
camuflada a través de medios de comunicación masiva, entre otras.
Ésta es una situación deplorable, debido a que están jugando con la vida de las
personas; es en este punto donde el rol del psicólogo cumple una tarea importante:
propender por el bienestar psicológico de sus pacientes y de esta forma ir haciendo
modificaciones significativas en las vidas de cada uno de estos; es importante recalcar
que el papel del psicólogo es ser sensible ante las situaciones que perjudican a las
personas, no podemos tomar las problemáticas como una realidad ajena.
Finalmente, es importante reconocer la necesidad de búsqueda y obtención de
placer que inquieta y moviliza a todos los seres humanos y al mismo tiempo, ésta
condición se encuentra limitada por la propia cultura en la que estamos inmersos.
Sabemos que en nuestro país se viven problemáticas lamentables, muchos nos quejamos
de la situación en la que nos encontramos, la cuestión está en que no hacemos mayor
esfuerzo por hacer cambios, pues para poder efectuarlos se requiere de vigor y
dedicación y tal vez por miedo, pereza o simple indiferencia no logramos modificar la
problemática con la que no estamos de acuerdo. Por tanto es necesario comenzar a ser
responsables de nuestros actos, ser personas que contamos con la capacidad de tener
determinación ante sucesos que nos pasan a diario y de esta forma puede ser posible
lograr los cambios que tanto deseamos.

IV. REFERENCIAS

Andrade, R. (2011). El porvenir de una nación. Revista Electrónica de Psicología


Social <<Poiésis>>, volumen (22), recuperado de:
http://www.funlam.edu.co/revistas/index.php/poiesis/index
EL PORVENIR DE UNA NACIÓN

LAURA VM

JUAN CARLOS OCAMPO

SOCIOBIOLOGÍA

INSTITUCIÓN UNIVERSITARIA DE ENVIGADO

SEPTIEMBRE 01 DE 2015

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