Sie sind auf Seite 1von 2

Concebimos como democracia, a la doctrina, organización social o forma de gobierno

en la que el la soberanía reside en las decisiones colectivas de los ciudadanos o el


“pueblo”, representados por un determinado grupo de personas a quienes se les
confiere este poder a través del voto. Por otra parte, la adopción homoparental es,
en efecto un tema controversial que, durante los últimos años ha tomado fuerza y
se ha convertido en tema de debate entre quienes se encuentran a favor y en contra
de ello.
Francamente, quisiera desglosar la pregunta por partes, ya que cada término
planteado representa un concepto que vale la pena relacionar al contexto. En
primera instancia se inquiere si el referendo propuesto por Vivian Morales es
“democrático”.
Como ya lo mencioné el poder de a democracia reside en el pueblo; sin embargo,
todos somos individuos, lo que significa que todos somos diferentes a nivel físico,
emocional e intelectual y, aunque algunos de nosotros llegamos a compartir gustos,
disgustos, ideas, creencias e incluso preceptos morales, siempre habrá un algo en
lo que llegaremos a diferir. Como consecuente, lograr que el cien porciento de la
población colombiana concuerde en un mismo asunto es un imposible que ni siquiera
en la más perfecta de las utopías sería sencillo de concebir.
Es por ello que delegamos el poder de gobernar a determinadas personas, elegidas
a través del juicio de las mayorías. Vivian Morales en la misiva dirigida a Carlos
Gaviria asegura que ella, acompañada por 238.000 ciudadanos, presentó una
propuesta “para decidir si aceptamos o negamos la adopción de niños desamparados
por parte de parejas del mismo sexo”. Para 2016 Colombia era un país con 48.65
millones de habitantes de los cuales el 57,89% corresponde a la población mayor
de edad que es considerada apta para votar, por ende, si sólo consideramos a las
personas que factualmente apoyan este referendo, no estamos tomando en cuenta
mucho más del 0,5% de la población total. Entonces ¿es democrático? No en el
estricto sentido de la palabra, mas es irrefutable el hecho de que este grupo de
personas es lo suficientemente grande, según lo exigido por la ley, para solicitar
determinada petición.
Ahora, ¿es pertinente? Observando los hechos y las verdades de nuestra realidad,
podría decirse que no. ¿Por qué? Bueno, para enero de 2017 habían más de 11.000
niños en espera a ser adoptados, de los cuales, alrededor de 4.325 eran
considerados de difícil adopción puesto al rango de edad en el que se encontraban
o por el simple hecho de poseer alguna discapacidad. Vivian Morales tiene razón en
dos cosas, primero que nada, obviando sexo y condición sexual, la adopción no es
ningún derecho para quien adopta y, segundo, por encima de todo debe prevalecer
el bienestar de los niños y su derecho a una familia; no obstante, el concepto de
familia que ella posee no es una verdad universal, ningún concepto lo es y si existe
quien se encuentre en capacidad de dar cobijo, comodidad, amor y bienestar a todos
estos niños desamparados ¿Por qué no?
Pertinente significa oportuno y adecuado y, con tantos niños abandonados, con
tantos niños expuestos a los peligros de la sociedad y de no ser correctamente
guiados, no puede considerarse pertinente el negar la oportunidad a alguien de criar
a uno de estos pequeños, basados meramente en su orientación sexual.

Dándome la oportunidad de leer tu aporte, he llegado a la conclusión que hay


diversas formas de interpretar el concepto de “pertinente” en lo que respecta al
referendo. Por supuesto, concuerdo contigo con respecto a que es pertinente la
revisión de temas como estos -de amplia controversia- en el país. Sin embargo,
difiero si he de considerar la cantidad de niños que se encuentran en espera de ser
adoptados hoy en día. No hay estudios irrefutables que prueben que la orientación
sexual del padre influya directamente en la del hijo, de hecho, los que se han
realizado demuestran todo lo contrario y, claramente, todos los niños requieren
mucha más atención y comodidad de la que se les puede brindar en los centros del
bienestar familiar. Por supuesto, el concepto de familia es subjetivo, pero si existe
quien o quienes puedan concederles a los pequeños desamparados todo el confort,
el bienestar y el amor que necesitan, independientemente de si cumplen o no el
arquetipo de familia establecido por la sociedad, no se les debería negar.
Ahora, el problema que encuentro con la propuesta de democracia ofrecida por
Vivian Morales es que si bien ella considera la participación activa de la ciudadanía,
es innegable que no toda la población esta capacitada para tomar este tipo de
decisiones. Hay una razón por la que las personas que se postulan para representar
al pueblo se preparan durante años para ello y aunque las masas son amplias
cantidad no implica calidad, por lo que la opinión general puede no siempre ser la
más apropiada.

Das könnte Ihnen auch gefallen