Contenidos: Teoría y discurso en el siglo XX. El “giro
lingüístico” de la filosofía ha transformado el planteo del saber, particularmente con relación al canon de la Teoría del Conocimiento en la Modernidad. Esta transformación no supone un substrato lingüístico de la filosofía, sino por el contrario, la interrogación de la propia concepción organicista del saber en la que se sostiene, a partir del siglo XIX en particular, incluso la fundación científica de la lingüística. El proyecto de un programa unificado del conocimiento, más allá de las distintas direcciones que tomó en el siglo XX -el círculo de Viena, la fenomenología husserliana, el estructuralismo post-saussuriano- desembocó mutatis mutandi en un replanteo de la tradición metafísica y en una lectura alternativa de la cuestión de la Teoría. Teoría y discurso en el siglo XX.
● Dos acepciones de Teoría:
-“Ver considerando”/ “Contemplar” (antigua) -Elaboración autónoma de los objetos capaces de explicar el comportamiento de los objetos (post-kantiana/moderna) ● Tres acepciones de Discurso: -Formalización del raciocinio (Descartes, Leibniz) -“Habla” en Saussure (acto psicofísico de un individuo que hace efectiva la lengua. -Discurso: Performativo (Austin) o Enunciación (Benveniste), se genera un vínculo entre hablantes que los involucra a partir del uso de la lengua. Saber, discurso y conocimiento -“(...El “giro lingüístico” de la filosofía ha transformado el planteo del saber, particularmente con relación al canon de la Teoría del Conocimiento en la Modernidad...)”. -“Saber”: Debilita la acepción de conocimiento en tanto que “Teoría del conocimiento” “(...Elaboración autónoma de los conceptos...)” -Ese “debilitamiento” de la noción de “conocimiento” es efecto fundamentalmente de la intervención de la noción de discurso (sobre todo) a partir de los años 60' del siglo pasado (interviene tanto en la tradición analítica (Wittgenstein/Austin, como en la Escuela de Frankfort (Habermas, Appel) como en la post-estructuralista (Derrida, Foucault). Lingüística, organicismo, filosofía “(...Esta transformación no supone un substrato lingüístico de la filosofía, sino por el contrario, la interrogación de la propia concepción organicista del saber en la que se sostiene, a partir del siglo XIX en particular, incluso la fundación científica de la lingüística...)”. -La expresión “giro lingüístico” supone que la filosofía se reformula a partir de la lingüística o de su objeto. En efecto, la fundación científica de la lingüística está pautada por esta pregunta de Saussure acerca del “objeto coherente e integral de la lingüística”. Este objeto solo es integral si la lengua es una entidad natural en el sentido empírico de “naturaleza”. Pero si aceptamos esa refencia, aceptamos el organicismo del saber empírico del siglo XIX, como lo señaló Benveniste en su crítica a Saussure en “Naturaleza del signo lingüístico”. Replanteo de la metafísica y lectura alternativa de la teoría “(...El proyecto de un programa unificado del conocimiento, más allá de las distintas direcciones que tomó en el siglo XX -el círculo de Viena, la fenomenología husserliana, el estructuralismo post-saussuriano- desembocó mutatis mutandi en un replanteo de la tradición metafísica y en una lectura alternativa de la cuestión de la Teoría...)”. La “revolución del 900'” (Saussure, Frege, Husserl) supuso una ruptura con el organicismo del siglo XIX y una puesta de relieve del papel de la decisión teórica en el conocimiento. El “2o. Giro lingüístico” (Wittgenstein, Lévi-Strauss) radicalizó ese movimiento y rompió con el vínculo necesario entre saber y determinación empírica de la experiencia. La determinación empírica supone una existencia del objeto previa a su conocimiento, el saber discursivo supone un acontecer de la enunciación como efecto de sentido. Replanteo de la tradición metafísica
● ¿En qué consiste tal replanteo de la tradición
metafísica? ● Consiste en entenderlo como “tradición”. ● O sea, que la tradición es un vector conceptual del propio replanteo, en cuanto interviene como agente de la formulación conceptual. ● Esto supone que la historia de la filosofía es discontinua respecto a sí misma y se somete a la lectura del presente (es decir, a lo que moviliza al enunciador a construir su aproximación al pasado). La metafísica como tradición
● Siempre la filosofía ha elaborado el relato de los
antecedentes que habilitan su propia condición teórica. Por ejemplo, Platón refiriendo a Parménides o a Heráclito y proyectando su propio planteo a través de la enseñanza de Sócrates. ● La senda por la que Heidegger lee la clausura del ser en la representación moderna, hace de la tradición de la filosofía un desarrollo intrínseco a su propia teoría y no sólo un contexto que se reivindica o cuestiona. El lenguaje como fundamento universal para el género humano (“tradición” como memoria) “Y aquí se da fin a este Libro de las lenguas con la idea de un diccionario de las voces, por decirlo así, mentales, común a todas las naciones, que explicando sus ideas uniformes acerca de las sustancias y teniendo en cuenta las diversas modificaciones con que pensó cada nación relativamente a las mismas necesidades o utilidades humanas comunes a todas, mirándolas por diversas propiedades, según diversidad de parajes y cielos y por tanto naturaleza y costumbres, narre los orígenes de las diversas lenguas vocales, acordadas todas a una lengua ideal común” (Vico, 1993, Principios de la Ciencia Nueva, p. 233). Lo contemporáneo: efecto de la proyección de cierto presente sobre el pasado (“tradición” como enunciación) “Es como si este invisible haz de oscuridad del presente proyectara su sombra sobre el pasado, mientras que éste, cubierto por ese haz de sombres, adquiriese la capacidad de responder a las tinieblas del presente. Algo de esta índole debía tener presente el espíritu de Michel Foucault cuando escribía que sus investigaciones sobre el pasado no eran sino la sombra arrojada por su interrogación teórica del presente”.
Giorgio Agamben, 2008, Qu'est-ce que le contemporain?, p.40.
¿Puede la tradición ser discontinua?
● “Esto supone que la historia de la filosofía es discontinua
respecto a sí misma y se somete a la lectura del presente (es decir a lo que moviliza al enunciador a construir su aproximación al pasado)”.
● La tradición supone la transmisión. Pero no hay
transmisión sin enunciación (incluso de una memoria ante sí misma). Por lo tanto cada intervención que retoma el pasado lo hace desde su propia recepción/emisión, cada vez singular, según el presente de cada quién. ¿A qué se opone la discontinuidad en historia y más allá? Perspectiva desde el salón de los espejos Continuidad en el organicismo (S. XIX)
“La palabra historia reúne en nuestra lengua el aspecto objetivo y el
aspecto subjetivo, significa tanto el relato de los acontecimientos como los acontecimientos mismos, no se aplica menos a lo que ocurre que al relato de lo que ha ocurrido.” (Hegel) Hegel se refiere a la significación de “Historia” en la lengua alemana. ¿Qué sucede si substituimos “lengua” por “sociedad”, “cultura” o “conciencia”? “La palabra historia reúne en nuestra (sociedad, cultura, conciencia) el aspecto objetivo y el aspecto subjetivo, significa tanto el relato de los acontecimientos como los acontecimientos mismos, no se aplica menos a lo que ocurre que al relato de lo que ha ocurrido.” “Discontinuidad” en Foucault
Dispositivo o red (“cuerpo social” en Foucault):
-elementos heterogéneos: a) vigilante/vigilados
-relaciones de fuerza: b) castigo/prisión -juego estratégico: c) control/conducta
Gabilondo, A. 1991, El discurso en acción, pp. 170-171.