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Introducción:

Como todos sabemos, existen muchos deportes, algunos de ellos más


pasionales que otros.

En Argentina en particular, el deporte por excelencia es el futbol, el cual


despierta emociones, muy fuertes, capaces de detener al país. Quizás
más que en otras partes del mundo, y no solo es la pasión con la que el
argentino se destaca, sino lamentablemente en la violencia que
particulariza al futbol argentino. Un ejemplo claro es lo sucedido en la
cancha de independiente, donde se disputaba un cotejo, el cual permitiría
a independiente seguir en la copa sudamericana .En el comienzo del
segundo tiempo el arquero rival del equipo argentino recibió un brutal
piedrazo en su cabeza, lo que le causo una herida. El árbitro del partido,
sin embargo decidió continuar con el partido, algo que contradice
claramente al reglamento.

Para lograr una mejor visión de la actualidad, haremos un repaso rápido


de las barras bravas.

En primer lugar el término “barra brava” se utiliza en América latina para


denominar a grupos organizados que se caracterizan por producir
incidentes violentos ya se dentro o fuera de la cancha.

Las barras bravas se ubican en las tribunas populares, las cuales no


poseen asientos, utilizan banderas, trapos, bombos y otros elementos.
Otra característica son sus canticos, los cuales presentan rasgos de
discriminación hacia otros clubes, extranjeros y homosexuales.

"El hincha es una variante de la personalidad autoritaria. No pueden faltar


en él el racismo ni la xenofobia."

Según estos grupos la buena hinchada es aquella que pelea bien, y


cuantas más peleas hayan ganado mejor hinchada te convierte.

La primera víctima de estas agrupaciones fue asesinada en 1924, esta


noticia sorprendió a la sociedad. Esto cambiaria, ya que en el año 1958, el
asesinato de Mario Linker, haría que la sociedad comience a naturalizar la
violencia en el futbol.

A partir de la década de 1950 aumenta el número de muertes


notablemente, hubo 103 muertes entre el año 1958 y 1985.

En los últimos años, las barras han conseguido un poder importante, tal es
así que hacen y deshacen a su antojo. Esto es producto de la inacción de
los dirigentes, que a pesar de conocer a los responsables no toman
medidas claras ya sea por miedo o por conveniencia permitiendo que los
barras tengan una vida activa en el club teniendo mecanismos de
recaudación (changuitas en actos políticos, otros ofrecen servicios de
seguridad, actúan como patovicas, revenden entradas, organizan eventos,
venden merchandising, etc.)

Ante todas estas posibilidades de obtener dinero, es lógico que haya


disputas de poder entre mafias con muertos y heridos.

Este poder adquirido es responsabilidad de los dirigentes los cuales


permiten que estos violentos sigan concurriendo a la cancha, sin tomar
medidas claras, y no solo eso sino que además les otorgan changuitas,
como las mencionadas anteriormente.

Sin ser ingenuos no es solo por miedo que no actúan sino por la utilización
que pueden hacer los dirigentes o políticos de estos grupos organizados,
como grupos de choque, para perpetuarse o llegar al poder.

En este tema se va a centrar esta monografía, la cual buscara probar que


las intromisiones políticas para con las barras incrementa aun más la
violencia en el futbol.

Un factor importante que contribuye a que haya más violencia es el


periodismo, muchas veces utilizado para dejar que se manifiesten los
violentos, o reproduciendo códigos de barras.

-Adrián de Devoto, hincha de Lamadrid: "Quiero contarle al taradito de


Marcio, hincha de Comu (Comunicaciones), que si no sabe que no hable al
pedo (sic). Los corrimos desde la estación Villa del Parque (eran 30) hasta
el club, donde estaba tu hinchadita y tu seguridad privada. Rompimos
todo y empezaron a correr por Avenida San Martín. Comu, por favor no
molestes más, te rompimos el club, te robamos seis banderas y cada vez
que pasás por Beiró te rompemos el micro y nunca bajaste ni vas a bajar
porque sos un cagón”.
-Miguel de Varela, hincha de Defensa y Justicia: "Quiero decirle a los
hinchas amargos del Quilmes cagón (sic), que el trapo no lo recuperan
más. La banda de Varela baja en Ezpeleta, no tiren tiros y piedras como la
última vez, porque ya se parecen a Bera y al Tambo, que son todos
cagones .Quilmes ya falta poco para volvernos a ver, quiero otro trapo.
Aguante Varela".

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