Una breve historia de Fungicidas

Hace un siglo se acaba de nacer la ciencia de la patología de plantas y LR Jones se preguntó, en una
reunión en Atlanta en 1913, si era una buena cosa que la patología de plantas por separado como una
disciplina de la botánica (8). Esto fue sólo unas pocas décadas después de la idea de que los hongos eran
agentes causales de enfermedades de las plantas habían sido aceptadas y que el concepto de "generación
espontánea", que considera los hongos como síntomas en las plantas que sufren de malas condiciones
ambientales, había estado en su salida. Este nuevo concepto de gérmenes que son agentes causales de la
enfermedad tuvo sus primeros seguidores entre los patólogos de plantas como Tillet de toque en el año
1755, Prevost de carbón en 1807, Berkeley y de Bary para finales del hongo del tizón de la papa en la
década de 1850 (13). Por desgracia, no se ha reconocido la importancia de estos hallazgos más amplio, y
sólo fue en los años 1860 de que el trabajo de Pasteur y Koch en patógenos humanos condujo a la ruptura
a través de la teoría de los gérmenes (9). Por lo tanto, no es sorprendente que la comprensión y el nivel de
fungicidas hace un siglo era muy rudimentaria.

Al igual que con muchos inventos, "desarrollo" de la primera fungicida fue el resultado de buenas
observaciones. El primer uso de salmuera de grano con agua salada, seguido de encalado se llevó a cabo
en el medio del siglo 17 para controlar toque, y siguió a la observación de que las semillas de trigo
rescatado del mar estaba libre de toque de bola. Esto había producido mucho antes de Tillet (1755)
estableció que los hongos de semillas transmitidas (Tilletia tritici, T. laevis) causada parcial del trigo y que
podría ser controlado por los tratamientos de semillas de cal o cal y la sal. Otro descubrimiento importante
fue hecho en Francia en 1882 por Millardet, que notó que las vides de uva que habían sido rociados con
una mezcla de color blanco azulado de sulfato de cobre y cal para disuadir rateros conservaron sus hojas a
través de la estación, mientras que las cepas no rociadas perdieron sus hojas.

Después de numerosos experimentos de pulverización Millardet concluyó que una mezcla de sulfato de
cobre y cal hidratada podría controlar eficazmente mildiú velloso de la uva. Hooker en 1923 declaró en su
documento sobre hidróxido de cobre coloidal que no había fungicidas enteramente satisfactorios disponible.
Luego se pasó a describir los defectos de la mezcla de Burdeos y cal de azufre, este último también ser
"más desagradable de manejar." Hasta el control de la enfermedad 1940 química invocada preparaciones
químicas inorgánicas, preparado con frecuencia por el usuario. Luego se pasó a describir los defectos de la
mezcla de Burdeos y cal de azufre, este último también ser "más desagradable de manejar." Hasta el
control de la enfermedad 1940 química invocada preparaciones químicas inorgánicas, preparado con
frecuencia por el usuario. Luego se pasó a describir los defectos de la mezcla de Burdeos y cal de azufre,
este último también ser "más desagradable de manejar." Hasta el control de la enfermedad 1940 química
invocada preparaciones químicas inorgánicas, preparado con frecuencia por el usuario.
Muchos de los primeros esfuerzos para producir cultivos sanos enfermedades que recién se habían
introducido ya la izquierda los cultivadores bastante indefensa involucrados. En las siguientes secciones se
destacan las tendencias en el desarrollo y el uso de fungicidas en el último siglo a la luz de los espectros
siempre cambiante y las intensidades de hongos patógenos, que a menudo se han producido como
consecuencia del cambio de los sistemas de cultivo.

Desarrollo de la importancia de las enfermedades

Desde Tillet presentó los resultados de experimentos bien replicados y controlados en 1755, en la que se
añadió polvo de negro de trigo bunted a las semillas de trigo sano y observó que toque era mucho más
frecuente en las plantas producidas a partir de tales semillas que de no espolvoreado de semillas,
investigadores y los productores han venido combatiendo patógenos de plantas de diversas maneras. La
importancia de las epidemias fue destacado por el tizón tardío de la papa en Europa en la década de 1840
que dio lugar a varias hambrunas severas.
Entre los principales investigadores en este momento era DeBary, cuyos estudios sobre la
Peronosporaceae y el descubrimiento de hospedantes alternativos en el ciclo de vida de los hongos de la
roya fueron dos de sus muchas contribuciones importantes. En ese momento se tomó 100 años para que el
conocimiento del hombre al doble, en la actualidad se realiza en 16 años. En los siguientes 150 años se ha
aprendido mucho sobre el control de enfermedades de las plantas y varios enfoques complementarios
fueron desarrollados para su control (Tabla 1). Dependiendo del cultivo, la enfermedad y la disponibilidad
de métodos de control, se utiliza un conjunto diferente de los enfoques.
Tabla 1.Los métodos clave de controlar enfermedades de plantas.
Las medidas
regulatorias Cuarentena, inspección y certificación de semillas
rotación de cultivos, el saneamiento, la mejora de las condiciones de
métodos de cultivo
crecimiento
Los métodos biológicos Obtención de variedades resistentes, microbios
Tratamiento de semillas; del suelo, las aplicaciones foliares de cosecha y de
El control químico
correos

Al mirar las pérdidas por enfermedades, los más devastadores se producen después de la cosecha, ya que
estos incluyen todos los costos incurridos en la producción del cultivo. Uno de los mayores descubrimientos
en fitopatología en el siglo XX fue el de la Flor, en la década de 1940 cuando propuso su gen de la teoría
de los genes, sobre la base de los resultados de sus cruces de lino, cada una de las cuales eran resistentes
a ninguna, una o varias carreras de la roya del lino (3). Flor encontró que tanto la resistencia en plantas, así
como de avirulencia en el patógeno fueron heredadas, y que ambos rasgos fueron dominantes.

Los criadores de plantas en las universidades y las empresas de semillas han invertido miles de años-
hombre en la crianza de cultivos resistentes a las enfermedades desde entonces. Se puede llegar a tardar
para criar un nuevo gen de resistencia a un nuevo cultivar de introducir un nuevo fungicida (± 10 años),
aunque este tiempo puede acortarse un poco hoy con herramientas moleculares mediante la reducción de
los ciclos de retrocruzamiento. Los agentes patógenos pueden superar los dos medios de control por parte
de la selección de cepas adaptadas en un corto período de tiempo, la invocación de este modo el viejo
dicho de que la naturaleza aborrece el vacío.
Más recientemente, la tendencia hacia el cultivo más intensivo, la introducción de variedades de alto
rendimiento y el abandono de la rotación adecuada de cultivos han dado lugar a nuevas enfermedades en
algunos cultivos. labranza mínima o siembra directa sin ningún tipo de arado, así como mecanización de la
cosecha en frutales o las uvas también pueden cambiar el espectro de las enfermedades para las que los
productores necesitan encontrar medidas de control. Tales cambios en las variedades de cultivos y en los
métodos de producción mantienen el cuadro de la enfermedad muy dinámico por lo que se necesitan
continuamente que los nuevos métodos para el control de enfermedades.

Visión general de Desarrollo y uso de fungicidas

Hasta 1940.A través del estudio de las enfermedades que causaron daño económico claro y el estudio de
la epidemiología de los patógenos, se establecieron los principios básicos de control de la enfermedad. Los
principales productos utilizados hasta 1940 se enumeran en la Tabla 2. En general, el control de
enfermedades sustancia química fue dirigido a los cultivos hortícolas (frutas y verduras), así como
tratamientos de semillas. La preocupación por el impacto de los productos sobre el medio ambiente eran
prácticamente no existen, al igual que las preocupaciones por el aplicador. La mayoría de los usuarios
prepararon sus propios fungicidas a partir de recetas básicas.
Tabla 2.Fungicidas en uso hasta hasta 1940 [2005 después de Russell (15)]
Año Fungicida Uso primario
1637 Salmuera tratamiento de semillas de cereales
1755 Arsénico tratamiento de semillas de cereales
1760 Sulfato de cobre tratamiento de semillas de cereales
1824 El azufre (polvo) oidio y otros patógenos
1833 sulfuro de cal amplio espectro de patógenos foliares
1885 caldo bordelés amplio espectro de patógenos foliares
1891 cloruro de mercurio fungicida césped
1900 CuOCl2 Especialmente Phytophthora infestans
1914 cloruro de fenilmercurio tratamiento de semillas de cereales
1932 Cu2O De semillas y de amplio espectro enfermedades foliares
1934 ditiocarbamatos patentados protectores de amplio espectro
1940 Cloranilo, diclona tratamiento de semillas de amplio espectro

Los productos propietarios estaban disponibles en este momento para aquellos que no quieren tomar el
tiempo y la molestia de tomar sus propias decisiones. Antes de la introducción de los ditiocarbamatos, la
prueba de que fue descrito por McCallan de la Universidad de Cornell en 1930, la mayoría de los productos
utilizados como fungicidas se aplicaron a tasas elevadas, por ejemplo, de 10 a 20 kg de ia / ha (~ 9 a 18 lbs
/ acre) para el azufre contra el mildiu polvoriento en uvas. Los productos que no siempre dan un buen
control, podría ser fitotóxicos y tuvo que ser aplicado con frecuencia. La Fig. 1 muestra la reducción en el
tonelaje de fungicida utilizado en los EE.UU. entre 1944 y 2002. Este es un reflejo de la reducción drástica
de las tasas de uso por hectárea (acre) como fungicidas más eficaces y selectivos se introdujeron durante
este tiempo. Por ejemplo, las tasas de uso actuales de muy por debajo de 100 gr / ha (1.

Fig. 1. El documento US Crop Protection Fungicida uso (5).

1940 a 1970.De 1940 a 1970 hubo una serie de nuevas clases de química introducidas como fungicidas
(Tabla 3). Los ditiocarbamatos y más tarde las ftalimidas representaron una mejora importante sobre los
fungicidas inorgánicos utilizados previamente en que eran más activo, menos fitotóxico y más fáciles de
preparar por el usuario. El clima de investigación fungicida de que el tiempo está bien descrito por Horsfall
(7), que fue clave en el descubrimiento y la introducción de los ditiocarbamatos, el grupo más ampliamente
usado de los fungicidas orgánicos.
Tabla 3.clases de fungicidas clave introducidas entre 1940 y 1970.
clase fungicida Ingrediente activo y Año
ditiocarbamato tiram 1942, zineb, nabam 1943, maneb 1955, mancozeb 1961
Hidrocarburos bifenilo
aromáticos 1944

ftalimida captan, folpet 1952, captafol 1962

fentina acetato de fentina, hidróxido de fentina 1954
Antibiótico blasticidina S 1955, kasugamicina, polioxina 1965
triazina anilazina 1955
guanidina dodine 1957
nitroanalina diclorán 1960
bencimidazoles tiabendazol 1964, benomil 1968, tiofanato de metilo 1,970
ftalonitrilo clorotalonil 1964
morfolina dodemorf 1965, 1969 tridemorf
carboxanilida Carboxina 1966, 1966 oxicarboxin

Vale la pena señalar que durante este período de tiempo: (i) varias de estas clases de química también dio
lugar a herbicidas - por ejemplo, triazinas y nitroanalines, (ii) se introdujo un antibiótico para controlar el
tizón del arroz en Japón y se clasifica como una sistémica y, (iii) el columpio había tenido lugar a la
dependencia de los productos producidos comercialmente que ayudan a dar lugar a la industria de
protección de cultivos. Con este columpio vino el interés por el modo de acción bioquímico de fungicidas.
La mayoría de estos fungicidas se estaban utilizando en 1,5 a 3 kg de ia / ha (~ 1.3 a 2.7 lb / acre) (ver Fig.
1).
La década 1960-1970 vio una rápida expansión de la investigación y el desarrollo, junto con un rápido
crecimiento de los mercados de fungicidas. En esta década, los fungicidas de contacto más utilizados,
mancozeb y clorotalonil, se introdujeron. La década también nos dio el primero de amplio espectro foliar
sistémico, tiabendazol, y la sistémica carboxina tratamiento de semillas. Gran parte de esta nueva química
surgió como resultado de los fabricantes básicos de haber movido lejos de en pantallas vitro para pantallas
en vivo. En estas pantallas en vivo, jóvenes plantas en maceta se pulverizaron o Drench tratados con los
compuestos de ensayo y se inocularon con un patógeno importante poco después. Las plantas luego se
colocaron en una cámara de invernadero o crecimiento bajo condiciones de enfermedad ideales hasta que
los síntomas de la enfermedad aparecieron y que podría ser clasificado para el contacto o la eficacia
sistémica, así como para la fitotoxicidad.

Más allá de 1970.Los fungicidas modernos más importantes introducidas desde 1970 se enumeran en la
Tabla 4 de acuerdo con su modo de acción o clase química. Para información adicional sobre el modo de
acción y riesgo de resistencia, véase también la Tabla 5. Una discusión de las clases principales de
fungicidas modernos sigue.
• Se introdujeron los fungicidas de bencimidazol para el control de enfermedades de las plantas en la
década de 1960 y principios de 1970 como fungicidas foliares, tratamiento de semillas y para su uso en
aplicaciones posteriores a la cosecha. Poseían propiedades únicas nunca antes vistas en los protectores.
Estos incluyen las tasas de uso bajos, de amplio espectro y sistematicidad con la acción después de la
infección que permitió que para el intervalo de pulverización extendida. Todas estas cualidades les hizo
muy popular entre los productores sino también utilizadas de forma errónea, como la mala cobertura de la
pulverización y la pulverización curativa. El primer caso de resistencia a los benzimidazoles se produjo en el
oídio en invernaderos en 1969, un año después de la introducción.
Por 1984, la resistencia se había informado sobre muchos de los agentes patógenos contra los cuales
benzimidazoles son activos (17). La razón para el rápido desarrollo de la resistencia fue que estos
fungicidas eran inhibidores de sitio único de ensamblaje de los microtúbulos durante la mitosis fúngica, a
través de tubulina-benzimidazol-interacciones. Los titulares de las patentes primarios de esta clase fueron
DuPont (Benlate), Merck, Sharp & Dohme (Mertec) y Nippon Soda (Topsin M). La clasificación actual de las
ventas mundiales es: carbendazima, tiofanato, tiabendazol.

• fungicidas morfolina son mejor conocidos por su excelente control de las enfermedades de los cereales, el
oidio en las verduras y uvas, y la sigatoka del banano. Durante la década de 1980 fenpropidina y
fenpropimorf eran fungicidas clave en el mercado europeo de cereales, mientras que tridemorf se utiliza
ampliamente para la sigatoka. Esta clase de química, a pesar de haber visto los cambios en la sensibilidad
de algunos patógenos (sigatoka en América Central y del Sur), está todavía en uso. patentes clave se
llevaron a cabo por BASF (Calixin y Corbel) y el Dr. R. Maag (Corbel y Tern). Dimethomorph, aunque una
morfolina, es muy distinta de las morfolinas anteriores con su actividad contra Oomycetes a través de la
inhibición de la formación de la pared celular (grupo FRAC 40 en la Tabla 5). La clasificación actual de las
ventas mundiales es: dimetomorf, fenpropidina, fnpropimorph, sprioxamine.
fungicidas de morfolina pertenecen a un amplio grupo de fungicidas que se refiere a menudo como
inhibidores de la biosíntesis de esterol (SBI). Otros EBSs incluyen los siguientes cuatro grupos de
fungicidas (véase también la Tabla 5).
• Las piperazinas: el actor principal en este grupo triforina, que fue utilizado ampliamente como un producto
de la casa y el jardín (especialmente en las rosas) era. Clave para la aceptación de triforina era su eficacia
y seguridad a una amplia gama de plantas. El productor clave fue CelaMerck (Saprol).
• Los imidazoles incluyen un pequeño número de compuestos de esta clase que son activos contra
patógenos de las plantas. Los más importantes son el imazalil (Janssen) y procloraz (Botas). Los usos
principales para imazalil eran como un tratamiento cosecha tratamiento de semillas y post, mientras que se
utilizó procloraz (Sportak) en cereales, siendo especialmente activo en Pseudocercosporella mancha
ocular.
• Las pirimidinas son una clase de fungicidas que fueron ampliamente explorada por Eli Lilly dando lugar a
nuarimol, fenarimol y triarimol. El actor principal de ellos era fenarimol (Rubigan) en frutales de pepita, la
uva y el césped.
• Los triazoles son la clase más grande de fungicidas (ver Fig. 2). Bayer fue la primera en lanzar un triazol,
a saber TRIADIMEFON (Bayleton) en 1973. Esto fue seguido por el triadimenol (Baytan) y bitertanol
(Baycor). Janssen Pharmaceuticals vendió los derechos de uso agrícola a Ciba-Geigy para propiconazol
(Tilt), que fue lanzado en 1979. Muchos otros triazoles se han puesto en marcha ya que, con la más
reciente entrada siendo prothiaconazole de Bayer (prolina) en 2004. La razón de la longevidad de este
clase de fungicidas es que mientras que siendo productos de amplio espectro altamente eficaces, se ha
producido la resistencia en el tiempo como un cambio lento que resulta en una disminución de la
sensibilidad a su modo de acción como inhibidores de metilación dE (DMI). Los triazoles nuevas, siendo
intrínsecamente más activo, empujan las curvas de sensibilidad de nuevo a sus valores ED original 50.
• anilidas son un grupo diverso de fungicidas. La primera introducción fue anilazina (Dyrene),
principalmente como un fungicida mancha de la hoja de Bayer y Nissan, seguido por el carboxin tratamiento
de semillas (Vitavax), que es altamente eficaz en toques, carbones y Basidiomycetes variados tales como
Rhizoctonia spp. Esto fue seguido por la dicarboximidas iprodiona (Rovral) de Rhone-Poulenc, vinclozolina
(Ronilan) de BASF y procimidona (Sumisclex) de Sumitomo. todos estos fungicidas tenían Actividad
protectora excepcional sobre los géneros Botrytis, Monilinia y Sclerotinia. La lucha contra la resistencia se
convirtió en un problema con el uso a gran escala de estos fungicidas.
Sin lugar a dudas el más grande de este grupo de anilidas fueron los fungicidas de fenilamida metalaxil
(Delantal / Ridomil) de Ciba-Geigy y benalaxil (Galben) de Isagro. Estos, junto con fosfonato fosetil-Al
(Aliette) de Rhone-Poulenc, que también fue introducido en 1977, trajeron un completamente nuevo nivel
de control a los Oomycetes a través de sus propiedades sistémicas, ofreciendo protección a las plantas
como tratamientos de semillas, y el suelo o aplicaciones foliares. Oxadixilo (Sandofan) de Sandoz era un
miembro posterior de los fenilamidas. Recientemente, Syngenta (1996) con mefenoxam (delantal XL y
Ridomil oro) y Isagro (2005) con kiralaxyl han introducido los isómeros resueltos de metalaxil y benalaxil.
Una vez más, lo que ha limitado el uso de los fungicidas fenilamida ha sido el desarrollo de la resistencia,

La última anilida a ser registrado (2003) es boscalida (esmeralda, Endura, prístina) de BASF. Boscalid se ha
registrado para el uso foliar en una amplia gama de verduras, frutas y cultivos de frutos secos, ya sea solos o en
una mezcla con piraclostrobina como prístina.
Nombre común de
Grupo Año compuestos espectro principal/ usos
Inhibitorsof 1973 triadimefón cosecha de la semilla y broadpost
la imazalil (imidazol)
biosíntesis 1975 fenarimol (pirimidina) oidio
de esterol 1977 triadimenol semilla treatmentcereal fungicida
(triazolesif procloraz (imidazol)
se indique 1979 propiconazol, bitertanol ancho
lo contrario) fenpropimorf (morfolina) amplias / cereales
mil triflumizol ancho
novecientos
ochenta y
dos
1983 flutriafol, diniconazol,
fluzilazole, penconazol ancho
1986 fenpropidina (morfolina) amplias / cereales
hexaconazol, ciproconazol,
miclobutanil, ancho
pirifenox (piridina) amplia / hoja cropsbroad, foliar y de semilla
tebuconazol
1988 tetraconazol difenoconazol, amplio, foliares y semillas amplio
fenbuconazol
1990 epoxiconazol amplias / cereales
1992 metconazol, fluquinconazol ancho
triticonazol amplio, foliares y semillas
2002 protioconazol ancho
Los 1992 azoxistrobina fungicida broadcereal
inhibidores cresoxim-metilo
de 1996 famoxadona (azolone) oomicetos
citocromo 1998 fenamidona (azolone) oomicetos
BC1 (Qo trifloxistrobina ancho
sitio y 2000 picoxstrobin fungicida para cereales
analoguesif piraclostrobina, fluoxastrobina ancho
estrobilurina 2001 ciazofamida (Qi sitio de acción,
no se cianoimidazol) oomicetos
indique lo
contrario)
Otras clases,
varios fungicidas y Principal
activadores de espectro
plantas Los nombres comunes de introducción withyear / usos
dicarboximidas iprodiona 1974, vinclozolina 1975, procymidione 1976 Botrytis, Monilinia
fenilamidas metalaxil 1977, 1981 benalaxil, oxadixil 1983, 1996 oomicetos
mefenoxam
fenilpirroles fenpiclonilo 1990, fludioxonil 1990 amplio foliar y de semilla
Anilinopyrimidies pirimetanil 1992, ciprodinil 1994 ancho
la síntesis de triciclazol 1975, pyroquilone 1985, carpropamide 1997 arroz / agua y
melanina foliar

fungidices CAA * dimetomorf 1988, iprovalicarbo 1998, bentiavalicarbo oomicetos

2003, 2005 mandipropamid
activadores de probenazol 1979, acibenzolar-S.methyl 1996 hongos, bacterias, virus
defensa
Varios cimoxanilo 1976, fosetil-Al 1977, propamocarb 1978, oomicetos
carbendazim 1976, 1992 fluazinam ancho
quinoxyfén 1997 oidio

• Las estrobilurinas, lanzados en 1996, son ahora el grupo de química segundo mayor de fungicidas (Fig. 2)
como resultado del uso generalizado de los cereales y, más recientemente, en la soja (un mercado que
alcanzó $ 600 millones en 2004). Las empresas han promovido recientemente, también los atributos de
salud de plantas de este grupo de fungicidas en la soja y el maíz. Los fungicidas de estrobilurina tienen un
amplio espectro, son altamente eficaces, y son adecuados para una amplia gama de cultivos. Algunos
problemas con la resistencia a enfermedades están afectando a las ventas (por ejemplo, Septoria en trigo
en Europa, y el mercado de césped de Estados Unidos). Como resultado, las empresas se están
adaptando las recomendaciones de uso de mezclas en desarrollo y otros usos, incluyendo el tratamiento de
semillas.

Tabla 4.Los principales grupos de fungicidas introducidos desde 1970 con sus representantes más
importantes.
*amidas de ácidos carboxílicos

Zeneca comenzó a investigar esta química en la década de 1980, primero la síntesis de azoxistrobina
(Amistar, abundan, Quadris) en 1988; ahora es el miembro más grande de la venta de este grupo. Sin
embargo, cresoxim-metilo (Cygnus, Sovran) de BASF fue el primer miembro para ser comercializado en
1996. BASF desde entonces ha entrado en el mercado (2002) con un piraclostrobina estrobilurina espectro
más amplio (Cabrio, Headline, insignias) también se vende en combinación con cresoxim metil como Opera
y con boscalida tan prístina. Otros fungicidas de estrobilurina incluyen, trifloxistrobina (Flint) descubierto por
MAAG pero vendido por Bayer, y fluoxastrobina (desarmarse, Evito) descubierto por Bayer pero vendido
por Arysta. La clasificación actual de las ventas mundiales es: azoxistrobina, piraclostrobina, trifloxistrobina,
cresoxim-metilo, picoxistrobina.
• Otros sistémicos Fungicidas incluyen un grupo diverso de productos, tales como: triciclazol (Beam)
lanzada en 1975 por Eli Lily / Dow y aún ampliamente utilizado para el control de tizón del arroz; cimoxanilo
(Curzate), un fungicida velloso de DuPont; el cereal y fruta fungicida ciprodinil (Vanguard, Unix) de
Syngenta; fludioxonil (Saphire, Switch, Maxim) de Syngenta; y quinoxifeno (fortaleza, Quintec), un fungicida
en polvo de Dow.
Los nuevos principios activos introducidos recientemente se bentiavalicarbo (Valbon de Kumiai) y
mandipropamid (Revus de Syngenta), a partir de la amida de ácido carboxílico (CAA) grupo fungicida, y
fluopicolide (Infinito de Bayer), metrafenona (Flexity de BASF), proquinazid (Talius de DuPont), y zoxamida
(Electis de Dow). Para una descripción técnica más detallada de los fungicidas modernos, como la química,
nos referimos al tratado editado por Kramer y Schirmer (10).
Uno de los nuevos productos novedosos introducidos por Ciba-Geigy es acibenzolar-S-metilo (Actigard,
Bion). En las tasas de uso de 30 gr / ha (~ 0,4 oz / acre) o menos, se activa el proceso del anfitrión
sistémica resistencia adquirida (SAR) en muchas plantas de cultivo. Ofrece una amplia protección frente a
hongos, bacterias y virus sin tener ninguna actividad directa sobre estos patógenos (11). Actigard ha
realizado mejor cuando se incorpora en un programa de aerosoles químicos, como el nivel inherente de
control de la enfermedad rara vez ha sido suficiente cuando se aplica solo. Este producto ha iniciado un
nuevo campo de investigación en la utilización de péptidos para las enfermedades de control, y otros
medios de estimular la SAR y la ruta del ácido jasmónico (JA) con productos químicos y agentes biológicos
en las plantas.

Manejo de la Resistencia a Fungicidas

En la Fig. 2 cuotas de mercado para los principales grupos químicos de fungicidas se resumen para 2005
incluyendo usos no agrícolas. Según esta fuente, el grupo más joven, los stobilurines, había superado en
pocos años todos los grupos de edad avanzada fungicidas en importancia con la única excepción de la
DMI. Esto indica que el potencial de innovación ha sido sustancial de fungicidas con nuevos modos de
acción y un excelente rendimiento, sobre todo porque algunos de los grupos de mayor edad han sufrido
una erosión de la eficacia contra algunos patógenos importantes debido a la aparición de resistencia [véase
también FRAC 2007 (1)]. El cultivo no utiliza incluir hierba equipamiento, que es el más grande mercado de
fungicidas solo en los EE.UU. Los numerosos agentes patógenos que atacan estas hierbas altamente
conservadas, como las que se encuentran en campos de golf, frecuentemente requieren aplicaciones de
pulverización semanales durante todo el verano. Esto ya ha dado lugar a la aparición de resistencia en
Magnaporthe grisea (mancha gris) a las estrobilurinas.

Fig. 2. Porcentaje cuota de mercado de las principales clases químicas de fungicidas para 2005 (incluyendo el uso no es de cultivo) (14).

Por lo tanto, una consideración importante para el diseño de estrategias de uso de fungicidas es la
amenaza de la resistencia a los fungicidas. Se han realizado considerables esfuerzos realizados por la
industria para llevar a cabo la investigación en las áreas de modo de acción, riesgo de resistencia,
monitoreo de campo para las variaciones de sensibilidad y de sensibilidad de referencia en los campos
tratados.
Con base en los resultados, utilizar estrategias están diseñadas para reducir el riesgo de resistencia a los
fungicidas acumulación o peor, la pérdida de eficacia de los fungicidas clases enteras.
Esta amenaza de la resistencia a los fungicidas y el hecho de que la resistencia cruzada a menudo existe
para productos de diferentes fabricantes ha dado lugar a una estrecha colaboración entre ellos en el FRAC
(Resistance Action Committee fungicida). Los resultados de la investigación en el modo de acción, el riesgo
de la resistencia y la vigilancia sobre el terreno se reúnen y se desarrollan estrategias para minimizar el
riesgo de resistencia a la acumulación. FRAC ha producido varias monografías sobre diversos aspectos de
la resistencia a los fungicidas y ha agrupado los fungicidas disponibles según diferentes criterios que
facilitan la comprensión del riesgo de resistencia de los diferentes grupos de fungicidas (Tabla 5). Tales
evaluaciones de la resistencia riesgo se hacen difíciles por la imprevisibilidad de la resistencia cruzada, la
cual, en la mayoría de los casos, es clara y sigue el modo de acción pero en otros casos puede ser
bastante complejo. Al final, lo que importa a efectos prácticos, no es tanto el modo de acción de un
fungicida pero su resistencia cruzada a otros fungicidas.
Tabla 5.Modo de acción de las clases principales fungicidas, su código de FRAC y el riesgo de resistencia.
Para obtener información adicional, consulte laLista de códigos de FRAC.

clase de El riesgo
Código producto de
FRAC químico Modo de acción / inhibición resistencia
1 bencimidazoles biosíntesis de beta-tubulina alto
2 dicarboximidas NADH c reductasa citocromo en lípidos alto
3 Azoles, C-14 desmetilación en la biosíntesis de esterol medio
pirimidinas
4 fenilamidas ARN polimerasa alto
5 morfolinas ^ 8 y ^ 7 isomerasa y ^ 14 reductasa en la biosíntesis de medio bajo
esterol
7 carboxamidas la oxidación de ácidos succínico medio
9 anilinopirimidina biosíntesis de metionina medio
11 estrobilurinas síntesis mitocondrial en BC1 citocromo alto
dieciséis Varios química la biosíntesis de melanina (dos sitios) medio
40 amidas de ácidos formación de la pared celular en Oomycetes medio bajo
carboxílicos
M1 inorgánicos contactos múltiples sitios bajo
M3 ditiocarbamatos contactos múltiples sitios bajo
M5 ftalimidas contactos múltiples sitios bajo

Los beneficios y riesgos de los fungicidas

La aplicación de cualquier producto químico de un cultivo o alimentos plantea la cuestión de los riesgos y
beneficios. Esta discusión de riesgo ha pasado de hacer frente a la toxicidad para el usuario en el campo y
el consumidor (4) a un enfoque mucho más amplio que incluye todo el medio ambiente y el ecosistema en
el que los cultivos están creciendo (16). Como consecuencia de ello se requieren más y más estudios antes
de un fungicida puede ser utilizado, dando lugar a enormes costes de desarrollo. Esto lleva a la industria
concentrarse en los grandes mercados, mientras que los mercados más pequeños se quedan cada vez
más y en necesidad urgente de fungicidas eficaces. En los EE.UU. el programa IR-4 se ha establecido para
proporcionar soluciones de gestión de plagas seguras y eficaces para los productores de cultivos
especiales.
En general, la mayoría de los análisis llegan a la conclusión de que los beneficios de los fungicidas son muy
superiores a los riesgos, si se usan con cuidado y de acuerdo con las recomendaciones de la etiqueta.
Actualmente más del 80% de los cultivos de frutas y vegetales cultivados en los EE.UU. recibir un fungicida
de cada temporada. El beneficio del uso de fungicidas en la agricultura de Estados Unidos se dice por
Gianessi y Reigner (5) para aumentar los ingresos agrícolas en cerca de $ 13 mil millones al año. Las
alternativas propuestas por los agricultores orgánicos, que se oponen a la agricultura intensiva en conjunto,
no incluyen el uso de fungicidas sintéticos, pero permiten el uso de cobre y azufre basado fungicidas
inorgánicos. Todavía hay un debate en curso acerca de si los productos cultivados tradicionalmente u
orgánicamente son más seguros para el consumidor. Por ejemplo,

El futuro de Fungicidas
Un vistazo a la historia de fungicidas nos debe dar una idea de lo que cabe esperar en el futuro. Los
principales cambios en el uso de fungicidas por lo general se han asociado con cambios en el espectro de
patógenos, así como en la intensidad de los cultivos, las prácticas o los precios. La migración de moho azul
del tabaco en Europa o roya de la soja en las Américas tuvo un impacto dramático en el uso de fungicidas
en estos cultivos. La Fig. 3 muestra el valor de fungicidas de los grupos principales de cultivos e ilustra la
importancia de la naturaleza dinámica del mercado de fungicida. Cereales, especialmente las aplicaciones
foliares, representan un mercado relativamente reciente si se compara con las frutas y las verduras. El
mercado de la soja fue insignificante hasta hace unos años, cuando el óxido llegó a las grandes superficies
de soja en América del Norte y del Sur. Tales cambios en los espectros patógeno no se podían prever y
continuarán ocurriendo en el futuro debido al aumento del comercio global con material vegetal. Del mismo
modo el dramático aumento de la intensidad de cultivo en la producción de cereales de Europa en la
década de 1960 y 70 creó un gran mercado donde prácticamente no existía antes. La notable capacidad de
los nuevos patógenos para adaptarse a los cereales ha dado lugar a una gran lista de patógenos que
pueden amenazar estos cultivos cultivados intensivamente. De manera más general, la creciente población
mundial que quiere ser alimentado mejor que hoy dará lugar a un aumento de las zonas de cultivo intensivo
y, por tanto, muy probablemente, el uso de fungicidas también aumentará. El aumento de la demanda en
algunos productos de granos para su uso como biocombustible ya ha resultado en existencias remanentes
muy bajos de grano, lo que se traducirá inevitablemente en los aumentos de precios (2). Esto ejerce
presión para una mayor intensificación de estos cultivos. Maíz en los EE.UU. es un buen candidato para
fungicidas convirtiendo en una práctica de producción regular.

Fig. 3. cuota de mercado de fungicidas Global para los principales grupos de cultivos para el año 2005 (14).
La tendencia hacia un uso más juicioso de los fungicidas en combinación con sistemas de pronóstico de la
enfermedad que se ha observado en el pasado se espera que continúe en el futuro. Esto ayudará a reducir
el riesgo de adaptación por los hongos diana y al mismo tiempo reduce los residuos en el medio ambiente y
en el producto. Los esfuerzos de mejoramiento para resistencia a enfermedades también continuarán y
posiblemente aumentar mediante la utilización de las herramientas de la ingeniería genética. Tanto la
resistencia genética y fungicidas selectivos son propensos a la adaptación por el patógeno. El equilibrio
entre el control genética y química, por tanto, será muy probable que continúe e investigación en ambas
áreas se complementan entre sí para asegurar la disponibilidad de combinaciones eficaces de la
resistencia del huésped y fungicidas para cultivos que deberían producir rendimientos cada vez más altos
de cada vez mejor calidad.
Actualmente los productos de control biológico contribuyen menos del 1% del mercado de fungicidas; sin
duda, que contribuirán más en el futuro, con la avenida más probable ser a través de compuestos naturales
conocidos como bioplaguicidas. Una nueva área de investigación interesante es el uso de péptidos
antimicrobianos (AMP) para mejorar la resistencia a los patógenos usando plantas transgénicas como bio-
fábricas para fungicidas o bactericidas.
Por lo tanto las grandes compañías multinacionales se centrarán su futuro en una integración de rasgos
genéticos y agroquímicos. El crecimiento proyectado del mercado de agroquímicos es del 3,4% en los
próximos 5 años, mientras que se pronostica que los rasgos que crezca en un 7%. La corriente promedio
(2005) los gastos de I + D de las seis grandes empresas Agro es 64,5% para la química y el 35,5% para las
semillas y rasgos. Esto asegura que los nuevos fungicidas seguirán siendo desarrollado para proteger los
cultivos cada vez más preciosos, en los que no tienen suficiente resistencia a las enfermedades genéticas.
Este equilibrio entre resistencia y control de enfermedades genéticas productos de naturaleza química,
bioquímica o biológica seguirá siendo, y no es probable que cambie drásticamente en un futuro próximo.