ELECTROLITOS Y SUS DESEQUILIBRIOS

Sodio (Na)
Siendo el encargado de la distribución del agua corporal y del volumen extracelular,
participando también en la transmisión de impulsos nerviosos, en la contracción
muscular y en el equilibrio ácido-base. Su concentración plasmática normal oscila
entre 135-145 mEq/l.
 Hiponatremia
Concentración plasmática de sodio menor de 135 mEq/l. Las
manifestaciones dependen del grado de hiponatremia. Cuando presenta
valores menores de 120 mEq/l, hay sobre todo manifestaciones neurológicas
como el edema cerebral, que se acompaña de cefalea, letargia, convulsiones
y en ocasiones se puede llegar a un estado de coma. Como manifestaciones
gastrointestinales aparece anorexia y nauseas precoces. También puede
aparecer calambres musculares y agotamiento.
 Hipernatremia
Concentración de sodio por encima de 150 mEq/l. La mayoría de los
síntomas están relacionadas con manifestaciones del SNC expresando
deshidratación celular: sed intensa, irritabilidad, agitación, convulsiones,
coma y muerte, debilidad.
Potasio (K)
Es el electrolito principal en el espacio intracelular. Sus valores oscilan entre 3.5-5
mEq/l. Su efecto más importante es la influencia sobre los mecanismos de
excitabilidad sobre el corazón, músculo esquelético y musculo liso.
 Hipopotasemia
Concentración de potasio menor de 3.5 mEq/l. Las manifestaciones más
importantes se relacionan con el sistema neuromuscular. Los pacientes
presentan debilidad muscular, fatiga, calambres en las piernas, íleo
paralitico, parálisis arreflexia e insuficiencia respiratoria.
 Hiperpotasemia
Cuando la concentración de potasio está por encima de 5.5 mEq/l.
La hipopotasemia se tolera bien, sin embargo, la hiperpotasemia puede ser
una circunstancia mucho más grave. Se presentan alteraciones
neuromusculares con calabrés en las extremidades. Debilidad muscular,
espasmos intestinales y diarrea. Entre las alteraciones cardiacas la más
grave será el enlentecimiento de la conducción cardiaca, también se
presenta pulso irregular y fibrilación ventricular que puede terminar en un
paro cardiaco.
Calcio (Ca)
En el plasma l calcio se halla en gran parte unido a proteínas (2.1 mEq/l), otras
forman parte de complejos (0.4 mEq/l) y el resto se encuentra en forma de iones
libres (2.5 mEq/l) teniendo en cuenta que la concentración de este puede variar de
forma independiente; siendo la concentración total de 5 mEq/l. Está implicado en
procesos metabólicos como la activación celular, formación ósea, funciones
enzimáticas, respuestas hormonales, conducción nerviosa, contracción muscular y
coagulación.
 Hipocalcemia
Es una disminución de calcio por debajo de 5 mEq/l. Entre sus signos y
síntomas se encuentran adormecimiento alrededor de la boca, espasmo
laríngeo, disminución de la contractilidad miocárdica que puede contribuir a
la aparición de insuficiencia cardiaca, en una situación severa puede haber
convulsiones, psicosis y demencia.
 Hipercalcemia
Elevación de la concentración de calcio por encima de 5.5 mEq/l. El exceso
de calcio bloquea el efecto del sodio en el musculo esquelético, con lo que
se reduce la excitabilidad de nervios y músculos. Sus manifestaciones
dependen del nivel de calcio y la enfermedad base, ya que existen pacientes
asintomáticos o por el contrario, pueden presentar debilidad, disminución de
los reflejos, confusión, náuseas, vomito, dolor óseo, poliuria, deshidratación.
Cloro (Cl)
Los niveles normales séricos son de 96-106 mEq/l, y en el espacio intracelular es
alrededor de 4 mEq/l. su carga negativa le permite asociarse habitualmente con el
sodio y de esta forma es corresponsable de mantener la osmolaridad sérica y el
balance hídrico. También mantiene el ambiente del ácido gástrico mediante la
secreción de ácido clorhídrico, colabora en el trasporte de dióxido de carbono en los
hematíes y a la formación del líquido cefalorraquídeo.
 Hipoclorémica
Concentración sérica inferior a 96 mEq/l. Entre sus síntomas se encuentra la
irritabilidad, agitación, hiperactividad de los reflejos, tetania, calambres,
mareos, arritmias cardiacas, bradipnea, coma.
 Hipercloremia
Concentraciones de Cl superiores a 106 mEq/l. Las manifestaciones pueden
ser taquipnea, letargo, astenia, arritmia, también se asocian edemas,
hipertensión y signos de hipovolemia.
Bibliografía

1. Grupo CTO. (2011). Equilibrio hidroeléctrico. España: Editorial CTO.

Recuperado de:
http://www.ctoenfermeria.com/ALUMNO_EIR/pdf/2011/OVA1/anexos
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2. Trujillo Santos, Antonio J. (sin fecha). El sodio y el cloro. Cartagena

Colombia: Fundación para la Formación e Investigación Sanitarias de
la Región de Murcia.
Recuperado de:
http://www.ffis.es/volviendoalobasico/tema_4_el_sodio_y_el_cloro.ht
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