Las políticas internas de Hitler, 1933-1945.

Habiendo ganado el poder, se esperaba que los nazis produjeran soluciones a los males
económicos que habían culpado al sistema anterior por descuidar o abordar de manera
incompetente. De los problemas económicos más apremiantes, el desempleo fue, con
mucho, el más destacado.

Empleo

Cuando Hitler asumió el cargo de canciller, el desempleo era de alrededor de 6 millones; En

1939, Alemania estaba experimentando una escasez de mano de obra.

Por impresionante que parezca, es importante señalar que la recuperación económica ya era
evidente a fines de 1932. Además, gran parte de la reducción del desempleo se relacionó con
el establecimiento de una economía basada en la producción para una posible guerra
después de 1 936 (y los Cuatro -Plan del año); y las estadísticas de empleo fueron
manipuladas por una serie de medidas que eliminaron a grandes sectores de la población
de las tablas de desempleo.

Las víctimas de las purgas de la administración pública no se consideraron desempleadas.

Desincentivos

Para que las mujeres casadas permanezcan en el empleo, más la oferta de

Los incentivos para que las mujeres solteras abandonen el empleo para poder optar a los
préstamos matrimoniales fueron seguidos por la introducción de un servicio de trabajo para
jóvenes, hombres desempleados y servicio militar obligatorio en 1935.

Técnicamente estas medidas eliminaron grandes números de las estadísticas oficiales.

Este "masaje" de las cifras de desempleo no restó valor al hecho de que las oportunidades
laborales surgieron de varios proyectos de obras públicas inspirados por el gobierno y
colocaciones en la industria pesada, ya que Alemania anunció su intención de violar las
restricciones de armas de Versalles en 1935. En busca de una política de autosuficiencia
económica, en defensa del "Diktat" y para cumplir las promesas anteriores de "Arbeit und
Brot" ("Trabajo y pan"), el nacionalsocialismo emprendió programas de creación de empleos
para ayudar a reconstruir la economía.

Recuperación económica

Hitler consideraba que la reconstrucción económica era vital para los planes expansionistas
futuros. Las lecciones

El Bloqueo Aliado de la Primera Guerra Mundial, que había paralizado el esfuerzo de

guerra de Alemania y contribuyó enormemente a la derrota, mostró la necesidad de
construir una economía que evitara la dependencia de otros estados. También era consciente
de que la crisis económica había desestabilizado a la República de Weimar y había dado a
sus oponentes (como los propios nazis) la oportunidad de capitalizar el fracaso para aliviar
la miseria de los años de depresión.
Mantener el poder significaba encontrar soluciones rápidas a problemas inmediatos.

Los historiadores han tendido a ver las medidas adoptadas por el nacionalsocialismo como
una serie de programas ad hoc en lugar de un plan de planificación económica bien
pensado. Las grandes empresas y las empresas privadas se encargaron de llevar a cabo los
objetivos generales de la recuperación económica alemana bajo la dirección del régimen.
Hitler declaró que el trabajo del Ministerio de Economía era "presentar las tareas de la
economía nacional" que "la economía privada tendrá que cumplir". Los contratos
gubernamentales celebrados con empresas alemanas garantizaban una asociación entre el
régimen y la industria, siendo el socio principal en esta relación el gobierno. Bajo el
nacionalsocialismo, la industria alemana prosperó en un período de reforzada "estabilidad"
política, un ambiente libre de sindicatos con lucrativas órdenes gubernamentales que
proporcionaban ganancias para los negocios.

Bajo la dirección de Hjalmar Schacht (como presidente del Reichsbank, desde marzo de
1933, y luego como ministro de Economía, 1934-1937), se establecieron prioridades para
tratar con los desempleados y luego planificar el financiamiento del rearme. Ambas
cuestiones estaban parcialmente relacionadas, ya que los programas de obras públicas como
el ferrocarril y la construcción de autopistas proporcionarían la infraestructura de
comunicaciones necesaria para la guerra.

No es casualidad que la mayoría de las autopistas discurrieran de este a oeste, aunque, como
Burleigh señaló, "en realidad, los militares preferían los trenes y pensaban que los vehículos
sobre orugas desgarrarían la superficie de la carretera y romperían los puentes, cuyas
tolerancias de carga no se establecieron hasta la primavera de 1939". Sin embargo, como
proyecto de prestigio muy visible, similar a la autopista fascista de Italia, captó la
imaginación de muchos observadores alemanes y extranjeros, además de proporcionar
trabajo.

El "Nuevo Plan" de Schacht fue testigo del uso de los proyectos de ley "Mefo" para la
industria pesada y la producción de armamento. Estos proyectos de ley (una forma de
pagaré patrocinado por el gobierno emitido a través de una empresa ficticia) eran una forma
en que el Reichsbank financiaba encubiertamente la producción de armas. Los proyectos de
ley actuaron como una nueva forma de moneda, así como una forma de ocultar la
participación del gobierno en la promoción de la producción de armas, en un momento en
que Alemania todavía no era lo suficientemente fuerte como para desafiar públicamente las
restricciones de armas de Versalles.

Proyectos de obras públicas

Los proyectos de obras públicas de gran intensidad de mano de obra para la construcción
de viviendas, escuelas, hospitales, canales, puentes y ferrocarriles, así como el proyecto de
autopistas, ofrecían empleo y sentido de la finalidad a muchos alemanes. Para el régimen,
el establecimiento del Reichsarbeitdienst (RAD) significaba que la mano de obra barata y
reglamentada podía utilizarse para promover la recuperación alemana. En 1935, el servicio
en el RAD se hizo obligatorio para todos los alemanes de entre 19 y 25 años. Los batallones
de trabajo y los campos de trabajo garantizaban el control autoritario sobre los reclutas, que
trabajaban principalmente en la tierra, pero también en proyectos de construcción y estaban
sujetos al adoctrinamiento político del Partido en los campos. William Shirer, que asistía a
la Marcha del Partido de Nuremberg de 1934, describió cómo 50.000 miembros de la RAD,
"un grupo semimilitar altamente entrenado de jóvenes nazis fanáticos....Estar de pie a
principios de la luz del sol de la mañana que brillaba en sus brillantes espadas de repente
hizo que los espectadores alemanes se volvieran locos de alegría cuando, sin previo aviso,
rompieron en un perfecto paso de ganso". El gobierno esperaba que el espíritu de estos
voluntarios de 1934 se adoptara después de que el servicio fuera obligatorio en 1935.

Plan cuatrienal de Göring

En octubre de 1936, bajo la dirección de Göring, se introdujo un "Plan cuatrienal". El plan

anunció una importante expansión de la producción industrial relacionada con la guerra.
Hitler proclamó que "sólo hay un interés, el interés de la nación; sólo una visión, la de llevar
a Alemania al punto de la autosuficiencia política y económica". Declaró su intención de
que, en un plazo de cuatro años, debían cumplirse dos tareas principales: que las fuerzas
armadas alemanas fueran operativas y que la economía "debía estar preparada para la
guerra en un plazo de cuatro años".

Con Göring no se alcanzaron los objetivos previstos del plan, aunque en ámbitos específicos
como la producción de aluminio, explosivos, carbón y petróleo, los aumentos fueron
impresionantes. Richard Overy afirmó que el fracaso en producir una economía de guerra
fuerte capaz de resistir cualquier conflicto a largo plazo ayudó a dar forma a las tácticas
militares de la guerra relámpago de 1939 en adelante, que se basaban en victorias rápidas
con la esperanza de obtener los recursos tan necesarios antes de comprometerse con
campañas posteriores, en lugar de una guerra de desgaste para la que Alemania no estaba
preparada. Noakes y Pridham estiman que en 1939 Alemania todavía dependía de fuentes
externas para aproximadamente un tercio de sus materias primas. Un observador
socialdemócrata exiliado en 1938 argumentó que "bajo el látigo de la dictadura el nivel de
actividad económica se ha incrementado enormemente", pero que surgió un problema
fundamental:

Uno no puede simultáneamente....aumentar los armamentos de las fuerzas terrestres y aéreas ad

infinitum, construir un pie de batalla masivo, fortificar nuevas fronteras extendidas, construir
instalaciones gigantescas para la producción de materiales ersatz[sustitutos], construir edificios
grandiosos megalómanos y derribar grandes partes de las ciudades para construirlas en otro lugar.
Sobre la base del nivel de vida del pueblo alemán hasta ahora, se puede hacer uno u otro o un poco de
todo, pero no todo al mismo tiempo y en dimensiones ilimitadas.

La reactivación de la economía en el campo de la producción bélica tuvo lugar a expensas

de la producción de bienes de consumo. Los salarios reales (poder adquisitivo real) de los
trabajadores alemanes eran menos impresionantes que las estadísticas que el régimen
publicaba sobre la producción alemana de arrabio, acero, maquinaria, productos químicos
y otros productos básicos con fines de rearme. Sin embargo, la escasez de productos de
consumo y los salarios congelados en los niveles de 1933 fueron compensados por el hecho
de que había empleo, en comparación con los días oscuros de los años de depresión.

David Crew resumió la actitud de muchos trabajadores cuando citó la opinión de un

trabajador socialista de la zona altamente industrializada del Ruhr que comentó,

Ellos[el obrero] tenían cuatro, cinco, incluso seis años de desempleo detrás de ellos - habrían
contratado a Satanás mismo".

Políticas culturales y sociales

Despojados de los sindicatos con los que negociar colectivamente los salarios y las
condiciones de trabajo y con los que se les prohibía la huelga, los trabajadores alemanes
recibieron del gobierno la alternativa de organizaciones como el movimiento "Fuerza a
través de la alegría", bajo la supervisión del Frente de Trabajo Alemán (Deutsche
Arbeitsfront/DAF), que los nazis introdujeron después de la prohibición de los sindicatos
independientes en 1933. La armonía en el lugar de trabajo tenía por objeto producir paz
social y aumentar la producción en aras del interés nacional.

En 1949, en la República Federal de Alemania, una encuesta realizada por el Institute für
Demoskopie (Instituto de Opinión Pública) titulada

"Consecuencias del nacionalsocialismo" informó que muchos de los encuestados miraron

hacia atrás al régimen nazi con cierto cariño en relación con las disposiciones sociales y
económicas que ofrecía, afirmando:

El paquete salarial garantizado, el orden, el KdF y el buen funcionamiento de la maquinaria

política. Así, el nacionalsocialismo les hace pensar sólo en el trabajo, la alimentación
adecuada" y la ausencia de desorden en la vida política.

El terror nazi y la destrucción producida por la política exterior de Hitler, aunque

obviamente reconocido, era sólo una parte subsidiaria de las reminiscencias de los
encuestados. La pérdida de la libertad personal bajo el régimen fue compensada por los
beneficios materiales percibidos que se disfrutaron en comparación con los últimos años de
Weimar.

Para Schoenbaum, este tipo de valoración selectiva del estado nacionalsocialista por parte
de quienes lo vivieron (y que no fueron blanco de ataques) fue un ejemplo de "realidad
social interpretada" en contraposición a la crudeza de la "realidad social objetiva", un
proceso en el que se recordaba la era del nacionalsocialismo:

...una sociedad unida como ninguna otra en la historia reciente de Alemania, una sociedad de
oportunidades para jóvenes y viejos, clases y masas, una sociedad que era New Deal y buenos
viejos tiempos al mismo tiempo....un mundo de... paternalismo autoritario...de propósito y
logro nacional....

La economía de guerra nazi

La actuación de la economía nazi durante los años de la guerra estuvo ligada a la cuestión
de hasta qué punto la Alemania de Hitler podía considerarse un "estado policrático" -ya
fuera un "estado del Führer" centralizado, eficaz y monolítico, o si contenía una
desconcertante variedad de autoridades superpuestas-, a lo que Geary se refiere como
"feudos personales", que interfieren con el buen funcionamiento no sólo de la toma de
decisiones políticas, sino también, en este contexto, con la organización de la economía de
la época de guerra.

Ya sea que las políticas nazis surgieran del intencionalismo o del estructuralismo, había un
alto grado de superposición dentro de la estructura del régimen que difuminaba líneas
claras de autoridad en áreas específicas y conducía a que los funcionarios nazis aplicaran
políticas fragmentadas al interpretar lo que creían que era la voluntad del Führer. Los
gauleiteros de los Estados ocupados actuaron sin coordinación central y aplicaron políticas,
tanto políticas como económicas, que no se aprovecharon eficazmente para promover el
esfuerzo bélico.

Intencionalistas
Historiadores que sostienen que Hitler alentó el caos deliberado en el estado
nacionalsocialista para crear centros de poder en competencia que le permitieran ser el
árbitro final.

Estructuralistas
Personas que destacan la naturaleza del desarrollo del NSDAP que pasó rápidamente de
un partido de la oposición al partido de la administración en 1933-1934.

La incapacidad de los nazis para establecer una administración central en tiempos de guerra
desde el principio obstaculizó la movilización exitosa de los recursos de la nación y el
esfuerzo bélico.

Las autoridades competidoras, como señaló Overy, obstaculizaron la eficiencia -por

ejemplo, Fritz Todt como Ministro de Municiones (1940-1942) no tenía control sobre la
producción de aviones "que constituían las dos quintas partes de toda la producción bélica"
- y esto siguió siendo así hasta 1944. El ejército no estaba dispuesto a sacrificar la producción
de "tecnologías de vanguardia" (armas de alta calidad que eran caras en términos de costes
de mano de obra y materiales) por la producción a gran escala de armamento estandarizado
adoptado por los EE.UU. y la URSS.

Si bien en 1939 se habían logrado grandes avances en el rearme, los objetivos del Plan
Cuadrienal no se alcanzaron y la serie de éxitos de la guerra relámpago de 1939-1941
enmascararon el hecho de que Alemania tendría dificultades para mantener una guerra
larga e interminable después de la expansión del conflicto en la Unión Soviética. El "Nuevo
Orden" que Hitler buscó en Europa a través de la conquista militar fue en parte un
movimiento político, pero también un intento de asegurar el futuro económico de Alemania
a través de la explotación despiadada de los recursos de los territorios ocupados. Las fuerzas
de Hitler no llegaron como liberadores del pueblo de la URSS, por ejemplo, sino como
conquistadores cuya intención era subyugar a la población.

La guerra racial en Europa Oriental produjo resistencia y una expansión del conflicto con el
que el Reich fue incapaz de lidiar. La expansión del esfuerzo bélico de Alemania a los
Balcanes, el norte de África y la Unión Soviética, combinada con la decisión de declarar la
guerra a los EE.UU., resultó en el surgimiento de una oposición militar y económica unida
que superaba con creces los recursos de Alemania.

Gordon Wright argumentó que los nazis podrían, en los territorios ocupados de Europa
oriental y occidental, haber optado por colaborar con el pueblo conquistado, pero que, en
cambio, su política "más simple" de aplastar y agarrar alienó a las poblaciones ocupadas y
llevó a que no se beneficiaran de los vastos recursos de un estado soviético militarmente
subestimado. La política de tierra quemada de los soviéticos, que negaba los recursos a los
nazis, y la incapacidad de reponer la pérdida de material militar para satisfacer las crecientes
demandas de un conficto cada vez más amplio, todo funcionó para obstaculizar el esfuerzo
bélico.

Para 1942, Todt había informado a Hitler que el resultado de la expansión de la guerra contra
los EE.UU. hacía imposible la victoria. Su muerte en febrero de 1942 lo reemplazó Albert
Speer. Mientras que a Speer se le atribuyó una mejora significativa en la eficiencia de la
producción de armas (en 1944 se produjo tres veces más armamento que en 1941), en
combinación con un programa masivo de reclutamiento laboral de los estados ocupados
(encabezado por Fritz Sauckel), los bombardeos masivos de los Aliados sobre Alemania en
1944 y el avance del Ejército Rojo significaron que Alemania, que carecía de "los recursos de
la supremacía geopolítica", se enfrentó a la derrota militar.

La juventud y las políticas educativas

Por necesidad, el "Reich de los Mil Años" previsto por Hitler requería generaciones futuras
comprometidas con la visión del mundo del movimiento nazi.

Los jóvenes debían actuar como abanderados de la visión del NSDAP sobre el futuro.

El condicionamiento de los jóvenes en la escuela y a través de actividades y organizaciones

extracurriculares era una prioridad del régimen. En noviembre de 1933 Hitler declaró:

...cuando un adversario dice: "No me pondré a tu lado", yo tranquilamente digo: "Tu hijo ya
nos pertenece". Sus descendientes, sin embargo, ahora están en el nuevo campamento. En
poco tiempo no conocerán nada más que esta nueva comunidad".

En noviembre de 1933 esto fue ciertamente una exageración del grado de adoctrinamiento
de la juventud alemana, pero el estado nazi hizo grandes esfuerzos para hacer realidad esta
afirmación en los años siguientes.

El sistema educativo

Así como la Gleichschaltung se había implementado en la vida política y religiosa, los nazis
buscaban nazificar el sistema escolar. En abril de 1934, Bernhard Rust fue nombrado
Ministro de Ciencia, Educación y Cultura del Reich y se le encomendó la tarea de establecer
el sistema educativo como baluarte del Estado nazi, entonces y para el futuro.

Las escuelas y las universidades fueron limpiadas de profesores que se consideraban

que no simpatizan con los objetivos del nacionalsocialismo o que son considerados,

por su origen judío, incapaz de encargarse de la construcción de las aletas de la juventud

aria. La pertenencia a la Liga Nacional Socialista de Maestros (NSLB o NS Lehrerbund) se
hizo esencial para los maestros que deseaban trabajar en la educación. La intención era
asegurar la conformidad en la presentación del mensaje nazi a los jóvenes, asegurando que
los que trabajaban en las escuelas estuvieran sujetos al control del partido.

Desde la educación primaria hasta la terciaria, el adoctrinamiento de los jóvenes se llevó a

cabo con el fin de producir productos finales imbuidos de la conciencia racial del
movimiento y la lealtad absoluta al régimen. En las escuelas, los cambios curriculares
pusieron énfasis en el deporte, la biología, la historia y la "germánica".

El deporte debía producir, según Hitler, "cuerpos que son

sano hasta la médula" y capaz de contribuir físicamente a la nación, ya sea en el campo de

la reproducción o en el servicio militar. La enseñanza de la historia se utilizó para promover
la grandeza del pasado de Alemania, las luchas del movimiento nacionalsocialista.

en sus esfuerzos por destruir el "legado maligno" de una república degenerada e

incompetente de Weimar, y los peligros del bolchevismo (y sus "patrocinadores judíos"). En
1938, el Instituto Central Alemán de Educación hizo hincapié en ello:

La nación alemana, en su esencia y grandeza, en su fatídica lucha por la identidad interna y

externa, es el sujeto de la enseñanza de la historia.... Tiene la tarea de educar a los jóvenes
para que respeten el gran pasado alemán y tengan fe en la misión y el futuro de su propia
nación.....

Curiosamente, como señalaron Noakes y Pridham, incluso en Weimar, la enseñanza de la

historia de Alemania se había visto muy influenciada por un "sesgo nacionalista", en gran
medida una remisión al hecho de que los propios profesores habían "pasado por un sistema
escolar y universitario dominado por el ethos nacionalista völkisch" de la época anterior a
la de Weimar.

En este sentido, las directrices nacionalsocialistas sobre la enseñanza de la historia

complementado (aunque en mayor medida) los enfoques existentes en materia de
enseñando en muchas instituciones.

La enseñanza de la biología incluía un fuerte énfasis en la raza y la eugenesia (la ciencia de

mejorar una población a través de la reproducción controlada), inculcando la necesidad de
pureza racial en el Reich mediante la adhesión a los "principios" de la "selección natural" y
la eliminación de los "inferiores" cuya existencia amenazaba la línea de sangre aria. Los
Nuevos Fundamentos de la Ciencia Racial de Hermann Gauch (1934) tipificaban la manera
en que la enseñanza pseudobiológica, disfrazada de hecho, se impartía bajo la apariencia de
"ciencia racial". Repleto de comentarios sobre la "falta de humanidad y los sentimientos
bárbaros" de los no nórdicos, los peligros de la mezcla de razas, la falta de higiene de los no
nórdicos y el hecho de que estos no nórdicos no puedan enunciar claramente ("Los diversos
sonidos se encajan entre sí y tienden a parecerse a los sonidos de los animales, tales como
ladridos, ronquidos, resfriados y chillidos"), este texto de uso generalizado continuó
afirmando eso:

Las razas nórdica y no nórdica no tienen una sola característica en común. No estamos
justificados, por lo tanto, al hablar de una "raza humana". El hombre nórdico es el creador de
toda la cultura y civilización. Sólo la salvación y la preservación del hombre nórdico salvará
y preservará la cultura y la civilización....

Del mismo modo, los "germánicos" incluyeron el estudio de la lengua y la literatura con el
objetivo de demostrar la superioridad de los alemanes como raza "productora de cultura"
frente a las razas "destructoras de cultura" como los judíos.

Lo que esto significaba era el rechazo de cualquier obra considerada hostil en espíritu o
mensaje a la ideología nacionalsocialista y la promoción de obras que glorificaban el
nacionalismo, el militarismo, el sacrificio por la ideología nacionalsocialista y la promoción
de obras que glorificaban el nacionalismo, el militarismo, el sacrificio por la causa nazi y la
devoción a Adolf Hitler, el Übervater (Padre Supremo).

El régimen adoptó disposiciones especiales para la educación de los futuros dirigentes.

Adolf-Hitler-Schulen reforzó los valores de ejercicio físico, pureza racial y obediencia al

Führer en cadetes seleccionados. El Nationalpolitische Erziehungsanstalten (Instituto
Nacional de Formación Política) se centraba en la disciplina militar y el deber hacia el líder,
el partido y la nación, mientras que los Ordensburgen (Castillos de la Orden) se reservaban
para la futura élite gobernante, que realizaba un curso de cuatro años de duración en el que
estudiaba ciencias raciales, atletismo, e instrucción e instrucción política y militar y
adoctrinamiento. Muchos estudiantes de esta última categoría fueron seleccionados del ya
selectivo Adolf

Las escuelas hitlerianas y Napolás, que eligieron reclutas potenciales de las Juventudes
Hitlerianas después de haber comprobado su origen racial y su apariencia aria.

Grupos de jóvenes

Fuera de las instituciones educativas formales, el régimen trató de fomentar la conformidad

y aplicar técnicas de adoctrinamiento mediante la creación de grupos de jóvenes. Las
escuelas en sí mismas no se consideraban capaces de crear el objetivo declarado de Hitler
para la juventud alemana, como se enunció a finales de 1938: una juventud alemana
"delgado y esbelto, veloz como el galgo, duro como el cuero, duro como el acero Krupp....un
nuevo tipo de hombre para que nuestra gente no se arruine por los síntomas de
degeneración de nuestro tiempo". Ausente de la descripción estaba cualquier referencia al
intelectualismo o a la excelencia académica. Estas cualidades no fueron priorizadas por un
régimen que el liderazgo sospechaba profundamente de los logros académicos. "No tendré
entrenamiento intelectual. El conocimiento es la ruina para mis jóvenes", afirmó Hitler,
quien equiparó ese intelectualismo con la decadencia cultural que, según él, los intelectuales
habían infligido a Alemania en los años de Weimar.

Los movimientos juveniles con afiliaciones a iglesias o movimientos políticos eran

sumamente populares en Alemania antes de 1933 y la organización juvenil nazi formada a
principios de la década de 1920 era sólo una parte, relativamente pequeña, de este
movimiento juvenil, que contaba con unos 50-55.000 miembros para cuando Hitler se
convirtió en canciller. Ese mismo año (1933), Hitler creó dos organizaciones para educar a
los jóvenes alemanes en el espíritu del nacionalsocialismo: la Hitlerjugend (Juventud
Hitleriana/Hitler) para los niños y la Bund Deutscher Mädel (BDM/Liga de Doncellas
Alemanas) para las niñas. Acompañando a su establecimiento estaba la prohibición de los
movimientos juveniles existentes (aparte de las organizaciones juveniles católicas, cuya
autonomía estaba garantizada por el Concordato que Hitler había firmado con la Iglesia
Católica) y la absorción de muchos de sus miembros en el movimiento nazi.

En 1935, el movimiento juvenil nazi representaba aproximadamente el 60 por ciento de los

jóvenes alemanes y el 1 de diciembre de 1936 se esperaba que todos los jóvenes alemanes se
unieran a él. Se instruyó a los maestros de escuela para que promovieran la afiliación a la
organización. Originalmente, el HJ y el BDM se ocupaban de los grupos de edad de 14 a 18
años, pero se hicieron esfuerzos para ampliar los movimientos de niñas y niños de 10 a 14
años (el Deutsches Jungvolk/DJ y el Jungmädelbund/JM, respectivamente). En marzo de
1939 la afiliación se hizo obligatoria.

Como declaró Knopp, "Nunca antes en la historia alemana los jóvenes habían sido tan
cortejados....seducidos por la sensación de ser algo especial.

La membresía dio acceso a una variedad de actividades: para los niños, las expediciones de
camping y senderismo, el deporte, la música, la asistencia a mítines y el entrenamiento
militar proporcionado a través de secciones especializadas aéreas y navales; para las niñas,
la fortaleza física y las ciencias domésticas en preparación para el matrimonio y la
maternidad. Un informe de la SOPADE de 1934 lamentaba que, al principio del régimen, "la
juventud está a favor del sistema: la novedad, el simulacro, el uniforme, la vida en el
campamento, el hecho de que la escuela y el hogar de los padres queden relegados a un
segundo plano en comparación con la comunidad de los jóvenes, todo eso es maravilloso".

Cada vez más, a medida que disminuía el tiempo libre entre la escuela y la asistencia a las
reuniones y actividades de HJ/BDM, los padres se reducían a un "servicio de cama y
desayuno" y el control paterno sobre la descendencia se debilitaba en muchos casos, ya que
los padres descubrían que sus hijos se volvían....extraños, desdeñosos de....la religión, y
ladraban y gritaban perpetuamente como sargentos y sargentos prusianos del tamaño de
un pequeño sargento-major.

El NSDAP buscaba monopolizar la vida de los jóvenes, destetarlos del control de los padres
al control del partido para maximizar las oportunidades de adoctrinamiento. Los relatos
retrospectivos de los miembros de las organizaciones juveniles varían mucho en la
naturaleza de sus reminiscencias: algunos miran hacia atrás con cariño a la camaradería
experimentada en los movimientos juveniles, mientras que otros son muy críticos. No todos
los jóvenes fueron seducidos o dispuestos a unirse al movimiento, a pesar de las
regulaciones del régimen, pero la gran mayoría de los jóvenes alemanes fueron reclutados
en organizaciones juveniles que en teoría prometieron hacerlo:

 liberarlos de los "males" de la democracia, el marxismo y el supuesto dominio de los

judíos
 restaurar el orgullo y el honor de los alemanes
 revisar el Diktat de 1919.

Sin embargo, en realidad, estaban encarcelados en una enorme organización burocrática que
estúpía el pensamiento creativo, produciendo una generación de lo que, según Sax y Kuntz,
"eran individuos más tontos y tontos, aunque más sanos".

DISCUSIÓN TDC

En materias escolares como geografía y matemáticas, los "mensajes subliminales" se incorporaron a

los materiales de enseñanza: los conceptos básicos se adulteraron mediante la introducción de
mensajes políticos que acompañaron la provisión de las habilidades básicas relacionadas con la
materia. Por ejemplo, problemas de matemáticas como los siguientes no eran infrecuentes:

A) Mantener a una persona con enfermedad mental cuesta aprox. 4 RM por día, un lisiado 5. 50 RM,
un criminal 3.50 RM. Muchos funcionarios públicos calificados reciben solo 4 RM por día, los
empleados de cuello blanco apenas alcanzan las 3,50 RM, los trabajadores no calificados ni siquiera 2
RM por cabeza para sus familias.

(a) Ilustra estas figuras con un diagrama. Según estimaciones conservadoras, hay 300 000 enfermos
mentales, epilépticos, etc. en la atención.

(b) ¿Cuánto cuesta mantener a estas personas en total, a un costo de 4 RM por cabeza?

(c) ¿Cuántos préstamos matrimoniales a 1000 RM cada uno ... podrían otorgarse con este dinero?

B) Un Sturmkampfieger en al despegar lleva 12 docenas de bombas, cada una pesa 10 kilos. El avión
realiza vuelos hacia Varsovia, el centro de la judería internacional. Bombardea la ciudad. En el
despegue con todas las bombas a bordo y un tanque de combustible que contenía 1500 kilos de
combustible, el avión pesaba aproximadamente 8 toneladas. Cuando regresa de la cruzada aún
quedan 230 kilos de combustible. ¿Cuál es el peso del avión cuando está vacío?

1 Thomas Mann afirmó que la educación nazi tenía "única referencia, a menudo con implicaciones de
violencia, a la idea fija de preeminencia nacional y preparación bélica". Discuta cómo se muestra esto
en los ejemplos anteriores.

2 Comparar y contrastar los objetivos educativos (sociales, políticos y económicos) de los sistemas
políticos autoritarios y democráticos.